UNIDAD DIDÁCTICA 6 EL ARTE CLÁSICO: ROMA • Aunque los orígenes míticos de la ciudad se sitúen en el año 753 a.C., el arte de Roma se desarrolló a partir del siglo III a.C. Desde entonces, y hasta la caída del Imperio de Occidente, en el siglo y d.C., las formas artísticas romanas se impusieron en su ámbito de conquista y dominio. De esta manera, la Antigüedad tardía prolongó los logros de la cultura y el arte romanos durante muchos siglos más, bajo la supervisión de la Iglesia. • • Abordamos en esta unidad el estudio de los logros artísticos de este largo periodo. Partiendo de la influencia griega, fueron los etruscos los que comenzaron la historia del arte romano, llegándose a confundir en ocasiones la autoría de las obras de ambas culturas. • A partir de la derrota cartaginesa en las guerras púnicas y de los comienzos de la expansión de la República (siglos IIIlI a.C.) las legiones romanas ampliaron el ámbito de influencia y de poder, fuera de Italia. Después de la conquista, la romanización extendió las características uniformes de un arte oficial, que se adaptaba a las peculiaridades culturales de las regiones conquistadas, enriqueciéndolo. Tal fue el caso, en su ejemplo más significativo, de la Hispania romana. • Transcurrido el periodo de máximo esplendor, en época alto imperial, las crisis sucesivas de los siglos III al IV determinaron el lento declive de la civilización de Roma, coincidiendo en el tiempo con el arte paleocristiano. Tras la caída del Imperio de Occidente, fueron Bizancio y la Iglesia católica las encargadas de preservar su legado. La visión del clasicismo en Roma. Los precedentes Arte sincrético, inspirado en: • Arte griego, sobre todo del periodo helenístico (convivencia) • Arte etrusco, población más avanzada culturalmente de la Península Itálica Originalidad: readaptar y fundir estas influencias con elementos propios dando lugar a un arte eminentemente práctico que expresa el poder de Roma 1. EL ARTE ETRUSCO Los orígenes del pueblo etrusco son inciertos, aunque parecen estar relacionados con Asia Menor. Instalados en el valle del río Po, fueron rechazados hacia el Sur, asentándose entonces en la región de la Toscana y Umbría, en una zona conocida como Etruria. En ella se desarrollaron ciudades como Tarquinia, Arezzo y Volterra, extendiendo su influencia hasta el Latium o Lazio, donde se encontraban pueblos como los latinos y los sabinos. De esta manera, la influencia etrusca sobre los inicios del arte y de la cultura de Roma va a ser importante. ARQUITECTURA ETRUSCA En arquitectura, los etruscos transmitieron la utilización del arco y la bóveda, normalmente aplicados a la construcción de obras públicas, como la Cloaca Máxima de Roma o la Puerta del Arco, en la ciudad de Volterra. Resulta significativa la aplicación del concepto de ciudad amurallada, con calles cortadas perpendicularmente y dispuestas en cuadrícula. Cloaca máxima y red de alcantarillado. Ca. 600 a. C. ARQUITECTURA ETRUSCA También aportaron un modelo constructivo de templo, más cuadrado que rectangular, edificado sobre un pódium, precedido por un pórtico muy profundo, se componía de columnas y con una triple cella en el interior. El estilo utilizado, según el arquitecto Vitruvio (siglo I a.C.), era el toscano, que adaptaba el modelo dórico, de la arquitectura griega, pero con fuste liso y base. Estos templos se construían generalmente en las afueras de las ciudades y aunque no se conservan más que restos arqueológicos, podemos citar el dedicado a Júpiter, en la colina capitolina, con triple cella. ARQUITECTURA ETRUSCA Otro tipo de arquitectura, ampliamente desarrollada, fue la funeraria. Así, más allá de túmulos y tumbas labradas en piedra, podemos encontrar auténticos hipogeos, como los de Cerveteri o Tarquinia -en Laciodiseñados con el mismo patrón urbanístico de la ciudad, para albergar miles de tumbas. ESCULTURA ETRUSCA El tema más abundante de la escultura etrusca, caracterizada esencialmente por su realismo, es el que se representa en los sarcófagos. En ellos se dispone la figura del difunto reclinado en actitud de reposo, frecuentemente acompañado de su esposa. En la mano llevan un rollo y un huevo o una moneda. La ejecución de estas obras, generalmente realizadas en terracota, refleja la influencia del arte griego en su fase arcaica. El ejemplo más significativo es el Sarcófago de los esposos de Caere (hoy Cerveteri), que se encuentra en el museo del Louvre. ESCULTURA ETRUSCA También son frecuentes las estatuas exentas de dioses con que se decoraban las fachadas de los templos. Así, el llamado Hermes de Veyes realizado por Vulca, nombre del único escultor conocido de este período. ESCULTURA ETRUSCA Aparte de la terracota y de los temas funerarios, los escultores etruscos abordaron también la realización de temas que representaban animales fantásticos, como los caballos alados de Tarquinia, que formaban parte del templo del Ara de la Reina. Ya en bronce, y en esa misma tendencia, destacamos la Loba Capitolina, recientemente datada en la Edad Media, aunque reproduce un original etrusco. Los niños Rómulo y Remo fueron añadidos en época posterior (en el Renacimiento). O la Quimera de Arezzo, fundida hacia el siglo IV a.C., sobre la que se discute una posible procedencia griega de la Magna Grecia, al sur de Italia. Este ser fantástico tiene cuerpo y cabeza de león, con una cabra en la espina dorsal y una cola de serpiente. En ella se resume la maestría en la técnica de la fundición y en la capacidad de representar anatomía y movimiento. Sarcófago de los esposos • En realidad es una urna cineraria • Finales del siglo VI a. C. ¿Qué tienen en común estas obras? ¿En qué se diferencian? EL ARTE ROMANO Temporalización: • 753-510 a. C. Monarquía. Asimilación de las influencias etruscas • 510-30 a. C. República. Concreción de las primeras formas arquitectónicas y del retrato, que pronto se entrelazan con la influencia helenística • 30 a.C.-235 d. C. Alto Imperio. Arte como representación del régimen. Conjugación clasicista con un barroquismo que tiende al refinamiento y la emotividad • 235-476 d. C. Bajo Imperio. La emoción deja paso a la formalización. Tras Constantino se produce una cristianización de las formas tradicionales del clasicismo. La arquitectura romana: • La arquitectura: características generales • La ciudad romana • Principales tipologías constructivas Características generales • Herederos de la tradición arquitectónica del mundo griego, la utilización de nuevos materiales y técnicas de construcción romanos supieron unir funcionalidad y belleza así como solidez y duración. • Además de su utilización práctica, los edificios cumplían también una función propagandística, poniendo de manifiesto la eficiencia y poder del Estado romano. • La conservación de los tratados del arquitecto, escritor e ingeniero del siglo I a. C. Vitruvio (Marco Vitruvio Polión, autor del tratado De Architectura, el más antiguo sobre arquitectura que se conserva y único de la Antigüedad clásica) hizo posible que esa teoría arquitectónica se transmitiera a la posteridad y pudiera ser recuperada a partir del Renacimiento. FIRMITAS, UTILITAS, VENUSTAS Materiales A lo largo de la historia de Roma se utilizaron diversos tipos de materiales. • La madera solía usarse en los primeros procesos de la construcción, tales como armazones, cimentación de puentes y muros o cubiertas adinteladas. • También se utilizaba la arcilla en ladrillos cocidos de diferentes dimensiones, así como la piedra, entre la que abundaba el travertino, caliza y porosa. • El uso del mármol no comenzó a generalizarse hasta la época imperial, dado el coste de su extracción y transporte, quedando reservado para los edificios más importantes. • Pero la principal aportación romana fue el hormigón (opus coementitium), que hizo posible la construcción de estructuras más resistentes y duraderas. El hormigón romano se componía de cal, arena, piedra, agua y puzolana, o polvo volcánico del Vesubio, que actuaba como aglutinante y daba como resultado un producto más duradero y flexible. Elementos arquitectónicos De sus antecesores etruscos los romanos conocían el arco y la bóveda, aunque la utilización de los mismos, para grandes edificios, no se producirla hasta la época imperial. Así, gracias a los nuevos materiales y técnicas de construcción, se pudieron utilizar cubiertas más amplias y conseguir más altura. Ello se logró, entre otras cosas, gracias a la utilización de bóvedas de diferentes tipos, entre las que destacaban la de cañón, resultado de la prolongación longitudinal de un arco de medio punto, y la de arista, en la que se cruzaban dos bóvedas de cañón, así como el empleo de la cúpula, que se conseguía cuando el arco de medio punto giraba o rotaba sobre la clave. Estos elementos se utilizarían con profusión, en edificios destinados a usos públicos, como termas o basílicas. En el caso de la cúpula el logro técnicoestético más importante fue el Panteón de Agripa (Roma). Elementos arquitectónicos El arco utilizado era el de medio punto o semicircular. Montado a partir de un armazón de madera, sobre el que se iban disponiendo las piezas o dovelas, no cumplía una función estética, sino constructiva. Así, se podían ampliar vanos, cubrir espacios o conseguir mayor altura. En este caso se recurría a la superposición de arco y dintel, que consistía en encajar, entre dos columnas, y bajo un dintel, un arco. Es el sistema que encontramos, por ejemplo, en el Teatro Marcelo, el Acueducto de Segovia o el Coliseo, en el que se consiguen superar los cincuenta metros de altura. Elementos arquitectónicos Los órdenes siguieron siendo los griegos, aunque con la introducción del orden toscano. La principal aportación fue el llamado orden compuesto, consistente en mezclar elementos de los estilos jónico y corintio, consiguiendo un capitel mucho más decorado y una base más rica en molduras. 2.2. El urbanismo La ciudad fue una pieza clave en la construcción del tejido social y político de la civilización romana. El modelo más antiguo, que ya había sido utilizado en época etrusca, se basaba en los castra o campamentos militares, con forma rectangular y rodeados de una muralla. Sin embargo, a partir de la época republicana se impuso el plano hipodámico, heredado del helenismo. Siguiendo la idea de Hipodamo de Mileto — mencionado en la unidad anterior, que lo aplicó a su propia ciudad, o a lugares como Pérgamo o Alejandría, la urbe se estructuraba en tomo a dos vías principales: el cardo, que discurría de norte a sur, y el decúmano, que lo hacía de este a oeste. Al final de cada una de ellas, se abría una puerta principal. Esta nueva planificación, con sus calles rectilíneas y sus manzanas cuadradas, hizo posible la ubicación de los principales edificios de una forma más racional. Así, en la confluencia del cardo y del decumano se habilitó un espacio para el foro. Heredero del ágora griega, se diseñó como un espacio rectangular porticado donde se concentraban los principales edificios de gobierno, de culto, económicos y judiciales. 2.2. El urbanismo En otras vías secundarias se construyeron edificios dedicados a viviendas, ocio y actividades comerciales. Tampoco se descuidaron las infraestructuras, como la red de agua, mediante acueductos, o la de alcantarillado, con sus cloacas. Fuera ya del recinto principal, de una forma más desordenada, se levantaron barrios de viviendas, villas residenciales, columbarios y, posteriormente, cementerios. Este modelo teórico del plano hipodámico no siempre se desarrollaba satisfactoriamente, como ocurrió en el caso de Roma. Conocida como la urbs, la ciudad proyectaba todo lo contrario de lo que debía haber sido: aglomeraciones de población, falta de higiene, inseguridad y toda suerte de incomodidades. De hecho no contó nunca con grandes avenidas rectilíneas y en época republicana el trazado era irregular, con edificios dispares en forma y tamaño, con desniveles en su edificación. Los edificios públicos monumentales construidos desde entonces mejoraron su aspecto exterior en determinadas zonas, pero no solucionaron los problemas básicos. El incendio del año 64 d.C., en época del emperador Nerón dio paso a una nueva planificación urbanística y al desarrollo de edificios posteriores que proyectaron la imagen de una nueva Roma. En este sentido resultan especialmente representativos los llamados foros imperiales de la ciudad de Roma, que fueron construidos entre la colina del Capitolio y del Quirinal, y que servían de reconocimiento y propaganda para los emperadores que los erigían. El primero de ellos fue mandado construir por Julio César, y los siguientes por Augusto, Vespasiano, Nerva o Trajano. La intención era convertirlos en un espacio de glorificación imperial, y por ello no se reparaban gastos al situar en él templos, columnas conmemorativas, arcos de triunfo y mercados. Reconstrucción foro época imperial Reconstrucción foro época imperial En lo que se refiere a la vivienda, las casas más lujosas eran conocidas como domus. Pertenecían a una sola familia y tenían una sola planta, ordenada en tomo a un patio central llamado atrio. En él había un estanque o impluvium, que recogía el agua de lluvia. Alrededor de él se disponían las diferentes estancias, tales como dormitorios o cubicula, comedor o triclinium, despacho o tablinum, etc., y en la parte posterior se ubicaba un jardín o peristilo, y un huerto. Cuando la domus se encontraba fuera de la ciudad se denominaba villa, asociada a usos agrícolas y ganaderos. TIPOLOGÍAS ARQUITECTÓNICAS Las construcciones romanas debían atender a multitud de funciones y necesidades, ya fuera en el ámbito urbano o en el de las infraestructuras de su abastecimiento, Igualmente, los arquitectos e ingenieros construyeron diversos tipos de edificios destinados, en el ámbito público, al funcionamiento administrativo y comercial, al ocio y espectáculos o al culto a los dioses. Con mínimas diferencias locales el mismo modelo constructivo se aplicó a todos los lugares del Imperio. Principales tipologías constructivas 1. Basílica Lugar de administración de justicia y transacciones económicas Planta rectangular, tres o cinco naves, con un ábside La nave central era más alta, para permitir la iluminación interior Basílica de Majencio, Roma ¿os recuerda a algo? ¿a alguna tipología posterior? Basílica Julia, Roma Restos, planta y alzado, reconstrucción virtual • La curia era un recinto donde se reunía el Senado, en Roma, o el consejo de los decuriones en las provincias. Generalmente era de planta alargada con bancos a los lados. • Los mercados se hallaban en el foro. Los edificios se dividían en locales o tabernae, donde se vendía todo tipo de mercancías. El mercado de Trajano, en Roma, llegó a contar con más de ciento cincuenta tiendas, dispuestas en diferentes niveles. Edificios destinados al ocio • El ocio era muy importante para los romanos. Después del mediodía comenzaba el tiempo de ocio, que era aprovechado para disfrutar, entre otras posibilidades, de las termas o de los juegos. Generalmente estas actividades eran costeadas por los magistrados con ocasión de festividades religiosas o de algún acontecimiento militar o civil. • Teatro y anfiteatro • Circo • Termas Teatro El teatro era heredero de la tradición griega. Sin embargo, respecto a sus modelos, son apreciables algunas diferencias. En primer lugar, eran edificios exentos y en ellos se desarrolla mucho más la scena o escenario, que se decora con gran profusión de arcos y estatuas. Además, el coro circular desaparece, dando lugar a un espacio semicircular, y las gradas o cávea, ampliado y dispuesto en semicírculo, se dividía en prima, media y summa, según la cercanía a la representación. De esta forma se aumenta el aforo, llegándose así a los veinte mil espectadores que podía acoger el Teatro Marcelo, en Roma, o los cinco mil del teatro de Mérida. Por último, el acceso a estas gradas se hacía desde el exterior, por un sistema de vomitorios o pasillos que permitía llegar directamente a la localidad y desalojar el recinto rápidamente. Teatro Marcello, Roma Anfiteatro •El anfiteatro es un edificio destinado a las luchas de fieras y de gladiadores. De planta ovalada y con mayor aforo que un teatro, tenía su mismo sistema de acceso y salida, que era el de los vomitorios. También alcanzaba mayor altura, gracias al sistema de superposición de arco y dintel. La zona central o arena solía tener unas estancias subterráneas recubiertas por un entarimado, las llamadas carceres, donde se custodiaban los gladiadores y las fieras que luego accedían ante los espectadores por medio de diferentes trucos escénicos. Su exterior se compartimentaba en pisos con arcadas. El ejemplo más conocido de este modelo es el Coliseo, también denominado en su origen Anfiteatro Flavio en honor de la dinastía Flavia de los emperadores que lo erigieron-, construido en Roma por los emperadores Tito y Domiciano, siglo I d.C. Levantado sobre unos cimientos de hormigón y ladrillo, estaba revestido de travertino (piedra ornamental de origen calizo), reservándose el mármol para las zonas nobles. Podía albergar a unos sesenta mil espectadores, que aliviaban su sed gracias a un sistema de conducción de agua corriente, y podían protegerse del sol gracias a un toldo de seda. Su exterior se encuentra dividido en cuatro pisos con arcadas y superposición de órdenes. Fachada decorativa con tres órdenes de arcos: toscano, jónico y corintio, en una sucesión vertical que se hará modélica •Otros ejemplos importantes de anfiteatros son los de Pompeya, Verona o Nimes. GLADIATOR, fragmento https://www.youtube.com/watch?v=uPw3jzryYjU Circo Era el edificio destinado a las carreras de carros. De forma alargada, tenía un cuerpo central llamado espina (spina), alrededor del cual había que completar una serie de vueltas. Eran los recintos con mayor aforo, aunque los materiales utilizados no eran de gran calidad, generalmente ladrillo y hormigón, por lo que, en la mayoría de los casos, tan solo se ha conservado la planta. Así ocurre con el Circo Máximo, en Roma, o el de Domiciano, espacio ocupado en la actualidad por la Piazza Navona, en la misma ciudad. El más famoso fue el circo Máximo de Roma, según algunos historiadores tenía una capacidad de 200.000 espectadores Termas Las termas eran los lugares de ocio más frecuentados por los romanos, porque en todas las ciudades existían baños públicos. Su mantenimiento era sufragado por el emperador o por los magistrados de la ciudad y hasta los ciudadanos más humildes podían acceder a ellos. Las termas se calentaban mediante un sistema llamado hipocausto, que permitía que el vapor de agua pudiera circular por debajo del suelo. Y aunque las termas más importantes contaban con biblioteca, palestra y natatio o piscina al aire libre, todas las demás contaban, al menos, con las siguientes estancias: un apodyterium o vestuario, con huecos para dejar la ropa; el caldarium o sauna, donde había baños de agua caliente; el tepidarium o habitación de temperatura intermedia y el frigidarium o baños de agua fría. En Roma se encontraban las termas más imponentes, como las de Caracalla y Diocleciano, del siglo III d.C. Termas de Diocleciano, Roma Termas de Caracalla, Roma Templos •Sincretismo religioso: asunción de cultos de los pueblos precedentes y de los pueblos conquistados •Existencia de una religión pública (culto al emperador, culto a los dioses) y una religión privada (culto a los lares, manes y penates, dioses protectores del hogar y antepasados) •Aunque el templo romano suele seguir el ejemplo griego, la principal diferencia está en que, por influencia etrusca, se levanta sobre un podio y solo puede accederse a él mediante una escalera principal en su parte anterior. Rodeado por cometo de columnas, se puede concluir que responde al modelo próstilo y pseudoperíptero. Los ejemplos mejor conservados son los de la Fortuna Viril, en Roma, o el de la Maison Carrée, o casa cuadrada, que se encuentra en Nimes (Francia). Templos Templo de la Fortuna Viril, en Roma Templos Maison Carré, Nîmes (Francia) Templo de Antonino y Faustina, hoy iglesia de San Lorenzo en Miranda, Roma Templo de Venus Genetrix Templos circulares, siguiendo el modelo de los tholos griegos, destinados a Vesta, en los que se custodiaba el fuego sagrado de la ciudad. Templo de Vesta en Roma. Finales siglo II a. C. El templo, circular, se eleva sobre un podio , la cella rodeada por veinte columnas corintias embebidas. El techo era cónico y tenía una abertura para permitir la salida del humo. Dentro de la cella no se encontraba la estatua de culto, sino solo el fuego sagrado. Ara Pacis , Roma mandado construir por el emperador Augusto, a finales del siglo I a.C., para conmemorar la paz en el Imperio. El Panteón, Roma • Lo mandó construir Agripa (general y yerno de Augusto), consagrado en 27 a. C. a todos los dioses • Destruido por importantes incendios y reconstruido de forma completamente nueva en época del emperador Adriano entre 118-125 d. C). Quizás diseñada por Apolodoro de Damasco, por su originalidad • Planta circular, con pórtico de acceso octástilo de orden corintio • Gran complejidad técnica. Muro cilíndrico. Cubierta: cúpula, con triángulos internos de descarga, materiales van aligerándose, óculo central Cuando el cristianismo fue declarado religión oficial del Imperio (Teodosio, año 380) fue consagrado a la Virgen En el siglo XVI, fue revestido con mármoles polícromos Arquitectura funeraria No hay una única tipología: turriforme, columbaria, piramidal… Mausoleo de Cecilia Metella, s. I a. C. Mausoleo de Adriano, hoy Castel Sant’Angelo, s. II d. C Tumba del liberto Eurysaces, Roma, siglo I a. C. Mausoleo del magistrado Cayo Cestio, siglo I a. C. MONUMENTOS CONMEMORATIVOS Los principales monumentos conmemorativos eran los arcos de triunfo y las columnas. Los primeros resultan de la unión de arco y dintel. Con uno o tres vanos y una parte superior o ático, recoge por medio de la epigrafía y de la escultura el recuerdo de gestas militares. Tal es el caso de los principales ejemplos conservados: los de Tito, Septimio Severo y Constantino, todos ellos en Roma. En otras ocasiones, simplemente, servían para marcar límites administrativos, como en el caso del arco de Medinaceli, en Soria. Las columnas conmemorativas desplegaban una cinta helicoidal que narraba, a modo de banda, en relieve, el desarrollo de una campaña militar; en la parte superior se situaba una estatua del emperador. Las mejor conservadas, en la actualidad, son las de Trajano, del siglo I d.C., y Marco Aurelio, del siglo II d.C. Los monumentos conmemorativos: arcos del triunfo y columnas Arcos del triunfo Conmemorar un hecho importante o glorificar a un emperador victorioso Arco de Tito, Roma, siglo I d. C. Botín obtenido por las legiones romanas en el Templo de Jerusalén Arco de Septimio Severo, conmemora victoria sobre los partos, Siglo III d. C., Roma Arco de Constantino, conmemora la Batalla de Puente Milvio, siglo IV d. C., Roma Columnas • Registros superpuestos siguiendo eje helicoidal Columna de Trajano • Bajorrelieve • Isocefalia • Horror vacui • Estuvo completamente policromada • En orden cronológico, batallas dacias Columna de Marco Aurelio, siglo II d. C. • Narra las victorias contra los germanos • Alto y medio relieve Las residencias imperiales Surgen tras la consolidación del Imperio Complejidad de funciones: residencia, recreo, representativa, religiosa, etc. Domus Aurea de Nerón, construida tras el incendio de 64 d. C. Palacio de Adriano en Tívoli Entre 120-138 d. C. Palacio de Adriano en Tívoli Palacio de Diocleciano en Spalato (actual Yugoslavia), siglo IV