RESPETA TU ENTORNO NATURAL. Para cuidar del medio ambiente hay que tomar en cuenta las soluciones para todos los ciudadanos que están dispuestos a ayudar a poner su granito de arena empezando con sus propias casas y patios. Es importante estar enterado acerca de lo que podemos hacer como individuos para ayudar a proteger el hábitat de la fauna y los ecosistemas naturales que hacen de nuestra Tierra un lugar tan especial y único. Al centrarse en sus propios hogares y propiedades, creemos que cada ciudadano puede hacer un mayor esfuerzo para mejorar la salud ambiental de todo el Planeta. Elimine polvos fugitivos Control de polvos en procesos y en caminos con la mejor tecnología. Enlaces patrocinadosAl cambiar algunas acciones en torno a sus hogares y patios, cada ciudadano puede hacer su parte para cuidar el medio ambiente. El resultado es conseguir gastar menos electricidad, un menor consumo de agua, menos productos contaminantes y mejor suministro de agua.La mejor solución para nuestro medio ambiente es educar yalentar a todos los residentes, antiguos y nuevos por igual, a no afectar elmedio ambiente que les rodea y hacer su parte para restaurar el equilibrio ecológico del Planeta.Es muy importante buscar una buena fuente de información que ayude a crear o conservar un medio ambiente sano. Al proporcionar enlaces a información que ya está disponible. Podemos ayudar a tomar las decisiones correctas para crear un apoyo al medio ambiente y conservar nuestro entorno natural.Existen muchos programas y técnicas para colaborar con la ecologí a, llevar una vida más verde, frenar el calentamiento global, reforestar, reutilizar, reciclar y utilizar productos orgánicos que no sólo colaboran para no destruir más el medio ambiente, sino que también ayudan a revertir los efectos de las agresiones que a lo largo de los años hemos hecho los seres humanos a nuestro ecosistema. En países desarrollados y en progreso no se realizan programas de reforestación. Ciegamente, el consumismo hace que destruyamos los bosques sin medida y tampoco sembramos nuevos árboles que sean los "pulmones" de la humanidad. De igual forma, un producto único hace que el suelo se destruya y no se produzca una correcta recepción de nutrientes.Podríamos hacer algo más para evitar la propagación de fuegos forestales: trabajar más el bosque en otoño e invierno. Es decir, dar paso a los que cuidan el bosque, los silvicultores, los propietarios forestales y otros órganos de gestores del bosque, como el Centro de la Propiedad Forestal. Hay que incentivar y remunerar más a los propietarios forestales si queremos bosques en mejores condiciones.Actualmente, tenemos unas masas forestales pobladas de especies que no son autóctonas. Así, donde antes había robles y encinas, ahora hay pinos y eucaliptos. Esto tiene un doble efecto negativo, pues los pinos y eucaliptos acidifican y empobrecen el suelo, lo que causa el cambio de su pH. Nuestros bosques estaban muy bien poblados por frondosas masas compuestas por robles, encinas, hayas, castaños, avellanos, etcétera, árboles todos de hoja caduca. Tienen la ventaja de que el sotobosque es muy claro y limpio. Un ejemplo son los bosques quemados con pinos negrales de la Noguera, en los que mayoritariamente han retoñado robles. El roble, a diferencia del pino, no tiene resina y en verano no se quema tan fácilmente. Por otro lado, los robles, como todas las masas frondosas, pueden brotar tras un incendio; en cambio un bosque de pinos quemados es un bosque de esqueletos.Hay que favorecer las especies de hoja caduca, implantando nuevamente una silvicultura adecuada. Así podemos tener unos bosques más limpios, ya que por sí solos ya lo son, y mucho menos pirófitos e inflamables. Pero todo esto vale dinero y seguramente chocará con algunos intereses. Además, se necesitan muchos años. Pero deberíamos empezar ya, si no queremos brozas arboladas sin cuidar que pueden arder.Cada bosque quemado incrementa notablemente la producción de CO2 en la atmósfera influyendo negativamente en el cambio climático. Por otro lado, si en el terreno quemado se producen lluvias torrenciales, se favorece notablemente la erosión. Con ello no quiero decir que nos quedemos sin pinos, pero sí que apostemos por las especies de crecimiento lento como encinas y robles, y otras como la haya, el fresno o el castaño, un tanto olvidadas. Si favorecemos estas especies tendremos un suelo con mucha más materia orgánica en descomposición y por tanto con más humedad y más fértil. Las fajas de castaños son excelentes cortafuegos naturales arbolados. Mención aparte merece el pino piñonero que, a diferencia de otros pinos, es muy apropiado para fijar dunas, y con un tronco alto y recto sin ramas que lo hace más resistente a los incendios, excepto aquellos en los que el fuego corre por las copas de los árboles.Hemos avanzado mucho en prevención y extinción, pero aunque aún nos queda la labor más ardua de todas, debemos luchar para tener bosques mejores, más naturales y cuidados. No sólo la Administración debe poner de su parte, sino que todos los ciudadanos podemos colaborar de algún modo. Relaciones de este. Defender el medio ambiente es parte de nuestro deber, ya que nos convierte en agente dinámico y así fomentamos la cooperación que nos garantizará un mejor futuro y un país más sano. Como familia podemos asumir actitudes tanto individuales como colectivas en defensa del ambiente, buscando soluciones que impidan su contaminación y degradación. El deterioro en que se encuentra el medio ambiente, exige que asumamos responsabilidades sobre la contaminación ambiental y los peligros que representan para el desarrollo de nuestra sociedad, con la finalidad de contribuir a contrarrestarlos.