Instructivo para centros culturales

Anuncio
Instructivo para el centro
cultural
SERVICIO DE MEDIACIÓN ARTÍSTICA
Obras del Catálogo de Programación Artística de Red Cultura
para Estudiantes del Sistema Escolar Formal
PROGRAMA DE FOMENTO AL ARTE EN LA EDUCACIÓN
Proyecto 2012
Idea original, contenidos y edición
María Inés Silva
LINC Artes y Públicos
Producción
Francisca Maturana
Realización material pedagógico
Ana María Infante y Karina Pimstein
Realización audiovisual
Pablo Herrera
Producción a cargo de Pablo Rojas Durán
Consejo Nacional de la Cultura y las Artes
Coordinación general y supervisión de contenidos
Alejandra Serey Weldt y Alejandra Claro Eyzaguirre
Consejo Nacional de la Cultura y las Artes
Diagramación:
Carolina Ríos Farías
Edición y corrección de estilo:
Susana Rodríguez Valdecantos
CONSEJO NACIONAL DE LA CULTURA Y LAS ARTES
Departamento de Ciudadanía y Cultura
Sección de Educación Artística
Plaza Sotomayor 233, Valparaíso
www.estaciondelasartes.com
Roberto Ampuero
Ministro Presidente del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes
Carlos Lobos Mosqueira
Subdirector Nacional
Jorge Rojas Goldsack
Jefe Departamento de Ciudadanía y Cultura
Contenidos
I. Presentación
II. Etapas de implementación del Servicio de Mediación Artística
III. Actividades pedagógicas a realizar en el centro cultural
Actividades preparatorias
Actividades a realizar con la presencia de artistas y frente a la obra
Actividades a realizar sin la presencia de artistas ni frente a la obra
Material de apoyo: video
IV. La mediación cultural
El concepto de mediación cultural
El rol del mediador
I. Presentación
El Servicio de Mediación Artística de Obras del Catálogo de Programación Artística de Red Cultura para
Estudiantes del Sistema Escolar Formal es un proyecto del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes
(CNCA), que tiene como objetivo principal desarrollar acciones de mediación artística para las obras
de este catálogo que aporten al proceso de enseñanza-aprendizaje desarrollado en los colegios del
país.
De esta manera, se busca contribuir al proceso de formación cultural y participación crítica y consciente de niñas, niños y jóvenes. Al mismo tiempo, se busca apoyar la articulación entre los centros
culturales y los establecimientos educacionales de una comunidad, para lograr una mejor integración
de estos centros al proceso de educación artística y cultural.
Las acciones de mediación artística han sido desarrolladas bajo la forma de una propuesta de material
pedagógico relativa a los proyectos artísticos del catálogo. Este material incluye:
1. Un documento de actividades pedagógicas para realizar:
a) en el aula y
b) en el centro cultural.
2. Un video sobre el proceso de creación artística de las obras seleccionadas.
3. Un glosario de términos de la disciplina artística en la que se enmarca el proyecto artístico seleccionado.
4. Un instructivo para docentes.
5. Un instructivo para el centro cultural.
La implementación de las actividades pedagógicas ha sido organizada en cuatro momentos de ejecución:
1. Actividades a realizar en el aula de manera previa al encuentro con la obra y/o artistas.
2. Actividades a realizar en el aula posteriormente al encuentro con la obra y/o artistas.
3. Actividades a realizar en el centro cultural frente a la obra y con artistas.
4. Actividades a realizar en el centro cultural que no consideran la presencia de la obra ni de artistas,
pero que están vinculadas con el proyecto artístico seleccionado.
Las actividades pedagógicas han sido diseñadas a partir del establecimiento de vínculos entre los
contenidos del proyecto artístico y los contenidos curriculares de diversas asignaturas.
Instructivo para el Centro Cultural
II. Etapas de implementación
del Servicio de Mediación Artística
En términos generales, la implementación del Servicio de Mediación Artística cuenta con las siguientes etapas:
1. El centro cultural de la comunidad programa uno de los proyectos artísticos del catálogo.
2. El centro cultural se contacta con los establecimientos educacionales de la comunidad para informar sobre el contenido del proyecto artístico programado y las fechas de presentación.
3. El centro cultural organiza encuentros y reuniones con las/los docentes de los establecimientos educacionales para presentar y entregar el material pedagógico que se ha desarrollado para ese proyecto.
4. El centro cultural coordina con los/las docentes una agenda de trabajo para la realización de las
actividades propuestas en el material pedagógico y que se desarrollan en el centro cultural:
- asistir a la obra,
- realizar actividades con artistas y
- realizar actividades sin la presencia de artistas.
5. Las/los docentes realizan las actividades propuestas para el aula antes de asistir al centro cultural
para participar del proyecto artístico.
6. Los/las docentes asisten con sus estudiantes al centro cultural para participar del proyecto artístico.
7. Las/los docentes asisten con sus estudiantes al centro cultural para realizar las actividades propuestas sin la presencia de la obra y/o artistas.
8. Los/las docentes realizan las actividades propuestas para realizar en el aula después de asistir al
proyecto artístico.
Para mayor información ver Instructivo para docentes.
Instructivo para el Centro Cultural
III. Actividades pedagógicas a
realizar en el centro cultural
Las actividades a realizar en el centro cultural son organizadas por su equipo de trabajo. Es la institución cultural que programa el proyecto artístico quien coordina con los establecimientos educacionales las distintas actividades a realizar en este espacio.
Las actividades a realizar en el centro cultural han sido formuladas en directa y estrecha relación con
las que se realizan en los establecimientos educacionales. Ellas completan un proceso de educación
artística basado en tres momentos:
1. Desarrollo de actividades anteriores y posteriores a la experiencia sensible.
2. Encuentro sensible con la experiencia artística: obra y artistas.
3. Desarrollo de actividades para el fomento y expresión de la creatividad.
Como se plantea en el apartado II, el material pedagógico propone actividades a realizar en el centro
cultural organizadas en dos momentos de ejecución:
1. Actividades con la presencia de artistas y frente a la obra.
2. Actividades sin la presencia de artistas ni frente a la obra.
1. Actividades preparatorias
Como ya fue señalado, el equipo de trabajo del centro cultural es el responsable de coordinar el Servicio de Mediación Artística de manera global. Con este fin, debe llevar a cabo las siguientes actividades
preparatorias:
a) Una vez que el proyecto artístico ha sido programado, el centro cultural contacta a los establecimientos educacionales y docentes de su comunidad para informarles del proyecto.
b) El equipo de trabajo del centro cultural debe conocer el Instructivo para docentes y haber leído las
actividades pedagógicas propuestas a realizar en el aula y el centro cultural.
c) El equipo de trabajo del centro cultural convoca a los docentes a principios de trimestre/semestre
para presentar el proyecto artístico programado, mostrar el video (ver punto 4 de este apartado) y
entregar el material pedagógico.
d) En esta instancia (u otra distinta) el equipo de trabajo del centro cultural puede realizar talleres de
capacitación dirigidos a los/las docentes: de introducción a las disciplinas artísticas, para trabajo en
el aula de contenidos artísticos, sobre metodología de proyectos en el aula, etc.
Cabe destacar que los docentes necesitan conocer el proyecto artístico programado y el material pedagógico con un mínimo de tres meses de anticipación (idealmente seis meses), con el fin de integrar
las actividades propuestas a su programación curricular.
Instructivo para el Centro Cultural
2. Actividades a realizar con la presencia de artistas y frente a la obra
Las actividades a realizar con la presencia de los/las artistas y frente a la obra tienen como principales
objetivos:
- Favorecer la experiencia sensible frente a un proyecto artístico.
- Promover el encuentro directo e interacción entre las/los artistas y las/los estudiantes.
- Completar el proceso de educación artística que se realiza en la escuela.
- Contribuir al proceso de formación cultural y participación crítica y consciente de niñas, niños y
jóvenes.
Estas actividades han sido diseñadas para que sean orientadas por el docente en el marco del trabajo
con los/las estudiantes. Sin embargo, el equipo de trabajo del centro cultural cumple un rol fundamental para su buena ejecución. En este contexto, el equipo de trabajo del centro cultural debe:
a) Coordinar con las/los docentes la visita de las/los estudiantes.
b) Procurar las instalaciones para la realización de las actividades.
c) Comunicar a las/los artistas de la actividad a realizar con las/los estudiantes.
d) Desarrollar un guión para la visita de los/las estudiantes en el que se presente el centro cultural y
el proyecto artístico programado.
e) Desarrollar una encuesta de satisfacción y evaluación de las actividades, tanto para la/el docente
como para las/los estudiantes.
3. Actividades a realizar sin la presencia de artistas ni frente a la obra
Las actividades a realizar sin la presencia de los/las artistas ni frente a la obra tienen como principales
objetivos:
- Acercar a la comunidad educativa al programa artístico del centro cultural.
- Fomentar la articulación entre los centros culturales y los establecimientos escolares de una comunidad.
- Introducir a las/los docentes y estudiantes en las disciplinas artísticas.
- Favorecer la apropiación del centro cultural por parte de la comunidad educativa.
Estas actividades han sido formuladas bajo tres enfoques:
a) Actividades de introducción a la disciplina artística del proyecto programado, que requieren de
personal especializado. En el caso de que el centro cultural no cuente con este, debe considerar la
contratación de un tallerista. El centro cultural debe procurar las condiciones espaciales y materiales
adecuadas para la realización de las actividades, así como la coordinación con los establecimientos
educacionales.
b) Actividades que implican un contacto entre los/las estudiantes y los/las artistas cuando estos/estas
últimos/as no están presentes. El equipo del centro cultural debe asumir la comunicación entre ellos/
ellas y actuar como mediador.
c) Actividades que implican la exposición de proyectos de los/las estudiantes realizados en el aula.
Estas actividades requieren la coordinación con los/las docentes.
Instructivo para el Centro Cultural
En cada una de estas actividades se sugiere al equipo de trabajo del centro cultural:
a) Desarrollar un guion que acoja y acompañe a las/los estudiantes durante la realización de la actividad.
b) Desarrollar una encuesta de satisfacción y evaluación de la actividad, tanto para el/la docente como
para los/las estudiantes.
4. Material de apoyo: video
Como se plantea en la Presentación, el Servicio de Mediación Artística incluye un video sobre el proceso de creación de los/las artistas que realizan el proyecto artístico seleccionado. Este material audiovisual, de aproximadamente 10 minutos de duración, da cuenta de la historia, visión de mundo,
propuesta artística y proceso de creación de la/el artista y/o la compañía.
El video ha sido desarrollado para ser utilizado en el establecimiento educacional y en el centro cultural. Con respecto a su uso en el aula, el video busca introducir a los estudiantes en el universo de
los/las artistas, así como profundizar la experiencia artística una vez que se haya asistido a la obra.
Sin embargo, puede ocurrir que el/la docente no cuente con las condiciones para presentar el material
audiovisual en el aula. En este sentido, la difusión del video en el centro cultural resulta fundamental.
El video puede ser difundido en distintos contextos cumpliendo diferentes objetivos:
- En proyectos artísticos de artes visuales en los que la/el o las/los artistas no se encuentran presentes
durante la temporada de exposición, el video puede ser transmitido de manera continua, ya que completa la exposición al hacer presente a los/las artistas y su proceso de creación.
- En proyectos artísticos de artes escénicas donde las/los artistas están presentes, el video puede ser
transmitido antes de ver la obra o después de realizar las actividades de interacción con los/las artistas con el fin de profundizar la experiencia.
- En el marco de las actividades que no consideran la presencia de las/los artistas ni de la obra, el
video le permite al centro cultural difundir el proyecto artístico que ha sido programado.
- En el marco de la campaña de difusión del proyecto artístico que ha sido programado, el video puede
estar vinculado con el sitio web del centro cultural o con el mailing. También puede ser entregado a
los medios de comunicación locales para promocionar el proyecto.
- Como estrategia de mediación cultural para distintos públicos durante la temporada de presentación
de la obra, se sugiere generar un espacio en el centro cultural donde se transmita de manera continua
el video. De esta forma, los/las diferentes usuarios/as de la institución tendrán acceso a él.
Instructivo para el Centro Cultural
IV. La mediación cultural
1. El concepto de mediación cultural
La “mediación cultural” se refiere a esa amplia gama de intervenciones y relaciones complejas que se
producen entre las obras y los públicos. Esta noción surge en el campo de las políticas de desarrollo
cultural en la década del 60, y luego, a partir de la de los 80, comienza a instalarse en el ámbito de los
museos como una forma de facilitar “la difusión entre los saberes cultos, producidos o difundidos por
una institución académica o cultural” 1 .
Hoy en día, la mediación cultural designa una situación de comunicación, de medios de interpretación,
encuentros e intercambios entre los objetos de arte (y sus creadores), las instituciones culturales que
los acogen y los diferentes públicos que los reciben 2 . En términos generales, la mediación cultural es
entendida como una estrategia de acción inherente a los principios de democratización y democracia
cultural, y tiene como fin promover el acceso físico, cognitivo y simbólico a las expresiones artísticas
y culturales. Busca, además, fomentar la participación ciudadana en cultura, favorecer la inclusión e
impulsar los procesos de implicación y apropiación cultural. Desde su dimensión política, la mediación cultural puede constituirse como una instancia de pedagogía participativa en la vida social que
persigue el desarrollo humano de una comunidad a través de la cultura.
La mediación cultural es la responsable de inventar progresivamente un diálogo y de hacerlo circular entre estos tres polos, tomando como punto de partida la naturaleza y problemática de lo que
está dado para descubrir, conocer, entender, etc. También considera los modos de vida, experiencias,
sistemas de representaciones, referencias culturales, el imaginario y la cultura de las personas, así
como los principios y reglamentos que guían las acciones de la institución en la cual se presentan los
proyectos.
La mediación debe preocuparse por asegurar un acompañamiento y contribuir al tejido relacional
entre un establecimiento cultural determinado y sus usuarios, dando a las iniciativas continuidad y
proyección en el tiempo. Debe también realizar un trabajo que vaya más allá de una simple traducción/explicación de conocimientos académicos, usos y valores de la élite: su misión es promover la
interpretación de los proyectos artísticos y culturales, aportando las herramientas necesarias para la
construcción de una mirada crítica en el público. En este sentido, la mediación trabaja en la relación
entre pasado y futuro, en la articulación de lo social y espiritual, en la confrontación entre el individuo
y el mundo. “Si una política cultural puede tener sentido hoy, es la de propiciar las condiciones para
favorecer la mediación cultural. Se trata tanto de democratizar el acceso a una cultura compuesta de
objetos consagrados, como de facilitar y suscitar una diversidad de espacios en los que la experiencia
estética se pueda desarrollar” 3 .
1. “Carta deontológica de la Asociación de Mediación Cultural Internacional”, agrupación creada en Francia el año 2007
(inédito).
2. Jean Caune (2002) : Pour une éthique de la médiation. Le sens des pratiques culturelles, Grenoble, Presses
Universitaires de Grenoble.
3. Jean Caune (2002) : Pour une éthique de la médiation. Le sens des pratiques culturelles, Grenoble, Presses
Universitaires de Grenoble, p. 215.
Instructivo para el Centro Cultural
Una vez asumidas las posibilidades que ofrece la noción de mediación cultural, y luego de decidir
llevar la teoría a la acción y diseñar un programa de mediación para un proyecto, institución o política
cultural, conviene plantearse las siguientes preguntas: ¿Estamos frente a un concepto relacionado con
una práctica genérica, que permite analizar de manera transversal el conjunto de dominios culturales?
¿O se referirá, más bien, a esferas que funcionan independientemente unas de otras: mediación de
museos, mediación teatral, mediación coreográfica, mediación del libro, mediación del patrimonio?
En este sentido, hay que señalar que cada programa de mediación cultural debe ser pensado en función de la disciplina artística en particular, del proyecto artístico específico y de las características
de los públicos con los que se va a trabajar. Por ejemplo, el acompañamiento en un museo, galería
o algunos espacios para las artes visuales, se puede traducir en folletos, paneles de presentación,
visitas guiadas, audioguías, conferencias y una serie de otras iniciativas que se constituyen como
estrategias de mediación cultural. Ellas aportan información sobre las técnicas utilizadas, la vida de
la/el artista, el contexto sociocultural e histórico en el cual se produce la obra, etc. Cabe destacar que
la mediación en los museos se caracteriza por la posibilidad de que el/la mediador/a se encuentre en
contacto directo con el/la visitante, en una interacción permanente, justo en el momento en que este/a
último/a se enfrenta a la obra. En ese sentido, el/la mediador/a debe ser capaz de hacerse cargo de las
expectativas de un grupo, a veces muy heterogéneo y, a partir de sus reacciones, adaptar el discurso,
profundizar en ciertos temas, establecer vínculos con otras corrientes artísticas. Se trata de un oficio
particularmente complejo: es necesario contar con competencias artísticas o científicas de alto nivel,
competencias pedagógicas y aptitudes comunicacionales, ya que no sólo se trata de responder a las
demandas de acompañamiento de públicos más preparados, sino también de dirigirse a los públicos
potenciales.
En el campo de las obras performativas, la mediación debe enfrentar otro tipo de desafíos y considerar, como principal variable, el tiempo efímero de la representación. Ese “entre dos”, entendido como
el espacio de la mediación, es considerado “tierra de nadie” en lo performático. Cuando se trata de
pinturas, esculturas, libros y otros objetos materiales, las obras pueden ser preservadas en las instituciones culturales, lo cual facilita el trabajo de mediación. Las artes escénicas, al ser “efímeras”,
relegan la mediación a un tiempo que no es el de la experiencia artística (contrariamente a una gran
parte de la mediación de los museos, la cual se realiza en presencia de las obras). El antes y el después
del espectáculo son los espacios y los tiempos pertinentes para implementar acciones de mediación.
Por otra parte, cuando se trata de algunas formas de teatro y danza contemporáneos, puede ocurrir
que el proceso de validación y elaboración de contenidos se realice simultáneamente a la difusión de
las obras que acaban de ser creadas: “el objeto de la transmisión no existe antes de la operación de
su transmisión” 4 .
4. Marie-Christine Bordeaux (2004): “Comunicación y mediación cultural en la danza contemporánea: perspectivas e
investigación abiertas para las artes de la escena”, ponencia presentada en el coloquio Las organizaciones culturales. ¿Una
comunicación específica?, Avignon, SFSIC.
Instructivo para el Centro Cultural
2. El rol del mediador
Un centro cultural que se plantea como misión promover las artes y la cultura como factor fundamental
para el desarrollo humano en una comunidad, necesita construir una política de públicos acorde a sus
principios, objetivos y programación.
Esta política de públicos debe promover el acceso en sus diferentes dimensiones: físicas, cognitivas
y simbólicas. Una vez que la infraestructura existe y funciona es necesario plantear una serie de preguntas: ¿Cómo hacer que los habitantes de la ciudad reconozcan la nueva institución como un espacio
para ser ocupado y vivido por ellos? ¿Cómo favorecer su apropiación y promover un sentido de pertenencia en torno a ella?
A partir de allí, se puede asumir desafíos y estrategias:
a) Dejar de pensar en la comunidad como un todo homogéneo.
b) Identificar con mayor especificidad a los potenciales públicos.
c) Ir a buscarlos y sensibilizarlos.
d) Ofrecerles herramientas que permitan disminuir esa distancia cognitiva y simbólica que los puede
separar del proyecto.
e) Generar estrategias de acompañamiento al interior del centro cultural, que favorezcan la apropiación del espacio en sus distintas dimensiones.
f) Entender el proyecto del centro cultural como un proceso de largo aliento donde los resultados y el
impacto no son inmediatos, sino que comienzan a percibirse paulatinamente con el correr de los años.
En este contexto, algunas de las funciones que debe cumplir el/la mediador/a cultural son:
a) Asegurar un acompañamiento y contribuir al tejido relacional entre un establecimiento cultural
determinado y sus usuarios, dando a las iniciativas continuidad y proyección en el tiempo.
b) Ir más allá una simple traducción/explicación de conocimientos académicos, usos y valores de la
élite.
c) Promover la interpretación de los proyectos artísticos y culturales, aportando las herramientas necesarias para la construcción de una mirada crítica en el público. En este sentido, la mediación trabaja
en la relación entre pasado y futuro, en la articulación de lo social y espiritual, en la confrontación
entre el individuo y el mundo.
d) Aportar el máximo de claves de lectura, pero dejando al público la posibilidad de construir su propia relación con la obra.
e) Transmitir el programa cultural al público y al no-público.
f) Difundir información.
g) Buscar intermediarios (asociaciones, docentes, organizaciones sociales, sindicatos), es decir, a
personas que conozcan a potenciales públicos.
h) Construir con ellos modos de colaboración.
i) Proponer experiencias de acompañamiento para los proyectos artísticos.
Instructivo para el Centro Cultural
Descargar