De la Complejidad social a su compleja Metodología.

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De la Complejidad social a su compleja Metodología.
Carlos Lozares
Resumen
Este artículo tiene como objetivo el de fundamentar la articulación de los métodos
de investigación social en la naturaleza compleja de los fenómenos sociales. Se
indaga, para ello, la dualidad inherente y dinámica de la naturaleza de los
fenómenos sociales, compatible con su unidad ontológica, como base de su
complejidad y, correspondientemente, de una metodología adecuada para su
tratamiento por la vinculación entre métodos de recogida de información y/o de
análisis e interpretación. Se trata, primero, de mostrar que la atribución del
concepto de complejidad a los hechos sociales tiene sentido y, segundo, que de tal
supuesto se extraen orientaciones para diseñar modelos metodológicos pertinentes
de combinación de métodos de distintos horizontes.
Palabras claves: complejidad social, metodología, métodos cuantitativos y
cualitativos, caos, interacciones dinámicas, emergencia social.
This papers aims to articulate social research methods based on the complex nature
of social phenomena. It explores the duality inherent and dynamic nature of social
1
phenomena. This duality, compatible with their ontological unity, are the basis for
the social complexity and, correspondingly, for a methodology appropriate linking
methods of analysis and interpretation. It is the question, the first, to show that the
attribution of the concept of complexity to the social facts makes sense and,
secondly, that of such suppose are extracted guidelines for designing pertinent and
methodological models of combination of methods of different horizons.
Keywords: social complexity, methodology, quantitative and qualitative methods,
chaos, dynamic interactions, social emergency.
1. Introducción y objetivos
Los métodos cuantitativos y cualitativos han mantenido tradicionalmente, al menos
en sociología, relaciones de desconocimiento mutuo o de confrontación. Estas
posiciones han reflejado, más extensa y profundamente, metodologías dispares en
el diseño de la investigación, los métodos de recogida de información y análisis, los
lenguajes con que se expresan y operan los datos, el tipo y grado de implicación e
intervención del sujeto investigador, la naturaleza misma de los contenidos
investigados, los criterios de validación. La hegemonía o predominancia de los
métodos cuantitativos ha sido paralela a la del positivismo y el neopositivismo
hasta los 50 y 60 del siglo pasado, Campbell y Stanley (1966), pasando luego a su
severa crítica Howe (1988), Reichardt y Rallis (1994), Tashakkori y Teddlie (1998) y
2
a un cierto auge de los métodos cualitativos, en los mediados 60, con la llegada de
la fenomenología social, Hammersley (1992), Le Compte y Goetz (1982). El
pragmatismo, Dewey (1910), Peirce (1934), Davidson (1984) “la verdad es lo que
funciona”, pone las bases de alguna aproximación entre métodos, la del paralelismo
simultáneo o su secuenciación, convergencias, mixturas, modelos conjugados, etc.
Tashakkori y Teddlie (1988), ofrecen una clasificación muy ilustrativa y completa
que
va
desde
su
ruptura
metodológica
a
las
formas
de
mixtura
y
complementariedad.
En las dos últimas décadas se ha amortiguado la controversia entre métodos
hacia formas de convergencia o complementariedad: los métodos cualitativos como
exploración inicial o ilustración final de los cuantitativos como centrales; los
cuantitativos como contextualización genérica y previa de los cualitativos como
focales. Otras propuestas conducen a una mayor complementariedad o
triangulación u otras de mayor convergencia: diseños multi-estratégicos y los
métodos-mixtos que tienden a basarse en modelos metodológicos articulados.
Este escrito no se detiene, por suficientemente conocidas, en estas
orientaciones metodológicas sino que ofrece otra perspectiva basada en la
complejidad social para dar cobertura a una vinculación integrada de los métodos
basada en la naturaleza del objeto estudio. La teoría de la complejidad contiene no
sólo un gran potencial para la interdisciplinaridad, Mainzer (1997), pero también,
desde nuestra perspectiva, para la vinculación de metodologías en sociología.
3
Algunos autores ven y evocan el paradigma de la complejidad como el „sitio‟
teórico y metodológico ideal para la convergencia de metodologías que provienen
de horizontes distintos, Lee (1997). Phepls y Hase (2000: 2) afirman que “one of the
more compelling theories that provides support for thinking about mixing
methodologies in research is that of complexity theory”. Greene (1994) ha esbozado
conexiones entre la complejidad de los fenómenos sociales y la necesidad de
diferentes tipos de métodos en vistas a alcanzar una mayor y completa
comprensión de los mismos. Hoshmand y Martín (1995) afirman que el pluralismo
de la metodología compleja incrementa las preguntas de investigación y alerta
sobre clausura prematura del proceso de investigación; permite también al
investigador responder con flexibilidad a las tareas de investigación. Según House
(1994) una mayor integración de métodos y metodologías de investigación exige el
supuesto subyacente de que el mundo real es complejo y que su investigación
requiere métodos múltiples.
Este artículo tiene como objetivo el de fundamentar en la naturaleza compleja
de los fenómenos sociales la articulación de los métodos de investigación en
sociología. Se indaga en la dualidad inherente y dinámica de la naturaleza de los
fenómenos sociales, compatible con su unidad ontológica, como base de su
complejidad y, correspondientemente, de una metodología adecuada para su
tratamiento por la vinculación entre métodos sean de recogida de información y/o
de análisis e interpretación. Se trata pues de mostrar, primero, que la asignación de
la expresión de complejidad a los hechos sociales tiene sentido y, segundo, que de
4
tal supuesto se extraen orientaciones de modelos metodológicos pertinentes de
combinación de métodos de distintos horizontes.
2. Los sistemas complejos.
La ciencia de los sistemas complejos estudia cómo las partes de un sistema
producen, interactuando entre sí y con el entorno, comportamientos colectivos y
globales, pe. las neuronas del cerebro para configurar el pensamiento, los vientos,
temperatura y humedad para el tiempo atmosférico, los grupos e instituciones a
partir de los individuos y de sus interacciones.1 La teoría de la complejidad trata de
responder, formal y/o interpretativamente, a la cuestión de cómo y por qué los
procesos que emergen de interacciones entre las partes de un sistema producen
resultados como totalidades consistentes, sea en física, biología, mercados o pautas
de comportamiento o grupos o estructuras sociales, Phelps y Hase (2002), Lissack,
(1999).
La complejidad puede concebirse como una composición de entidades
vinculadas aunque no necesariamente de manera estable. Pero un sistema complejo
es bastante más que un sistema de interacción. La interconectividad, que hace que
1
Horgan (1995) reporta del físico Seth Lloyd al menos 31 definiciones de la complejidad. En dicha
muestra incluye criterios de definición de todo tipo descriptivo, generativo, computacional,
constitutivo, taxonómico, organizativo, jerárquico, operativo, nómico, nocional, semiótico,
semántico, algorítmico, informacional, combinatorio, lógico, funcional, estructural, entrópico,
topológico, armónico, sintáctico, perceptual y diagnóstico. El carácter, a veces un tanto redundante y
reiterativo de muchas definiciones de la complejidad, permite sin embargo acumular mejor el núcleo
básico de su identidad y además percatarse de sus matices diferenciales. Goldenfel (1999) desarrolla
también varias definiciones sobre sistemas complejos.
5
los componentes de un sistema interactúen produce un resultado que no equivale
necesariamente a la suma de los efectos de cada interacción, Kurt (1997); en este
sentido es emergente, esto es, irreductible a sus componentes. Joslyn et al. (2000)
describen el sistema complejo como un sistema con componentes (agentes,
procesos, etc.) que interactúan y agregan su actividad de manera no lineal (no
derivable de la suma de las actividades de los componentes individuales)
exhibiendo características jerárquicas de auto-organización bajo presión selectiva.
No lineal equivale a dinámico, esto es, al cambio de su propia variación.
Los sistemas complejos evolucionan y se desarrollan en el tiempo en
diferentes fases y resultados, sensibles a las condiciones iniciales y/o pequeñas
perturbaciones, Weng y alt. (1999). Para Sommerer y Mignonneau (2001) un sistema
complejo es un conjunto de partículas autónomas que interactúan dinámicamente y
evolucionan
de
modo
automantenido
con
comportamientos
críticos
de
características universales y produciendo propiedades colectivas emergentes no
reducibles o equivalentes a los efectos de las suma de sus partes. A esta definición
se puede añadir que los sistemas complejos son abiertos a otros sistemas y/o
contextos cambiantes, dinámicos con variabilidad no lineal, resistentes a su
descomposición y con resultados emergentes e incluso insospechados.2
2
Un sistema complejo no es necesariamente un sistema complicado, término tomado a veces como
equivalente. Pavard y Dugdale (2002) ejemplifican esta distinción: un coche o un jumbo son sistemas
complicados, pero no son complejos; una buena tortilla no es un sistema complicado pero sí
complejo; el trabajo cooperativo en una torre de control de un aeropuerto es un sistema complicado
y complejo.
6
3. La complejidad social y orientaciones metodológicas genéricas.
Los avances de las ciencias de la complejidad en los ámbitos de las ciencias de la
naturaleza han tenido un efecto contagioso y benéfico en sociología. Sin embargo,
para muchos sociólogos conceptos como sistemas dinámicos de agentes, caos o
catástrofes, emergencia social, atractores, redes complejas, procesos evolucionarios,
propagación de representaciones, modelos computacionales, estado de fase y de
transición, equilibrios inestables, etc. sólo sean aceptables analógicamente. Además
el pensamiento soft de la postmodernidad ha recubierto o identificado la
complejidad social con una connotación subjetivista y/o relativista propia a todo
constructivismo. Sin embargo, la complejidad social contiene un núcleo bien
objetivable que lo preserva de toda veleidad subjetivista y relativista.
La complejidad social
Comenzando en negativo, Wimsatt (1972) muestra una serie de propiedades de los
sistemas no complejos; es decir, que en la medida que no se den se puede hablar de
complejidad social.

La descomposición, sustitución y reordenación de las partes (agentes,
recursos,..) de un sistema social sin que se altere el resultado.

La equiparación en una misma o equivalente escala de medición u
observación de los resultados de los procesos de interacción social entre las
partes con los resultados de la agregación o sustracción de los efectos de
7
dichas partes; es un signo de no emergencia en los resultados. Es también un
indicador de la simplicidad y linealidad de los procesos sociales no
complejos.
Siguiendo, ahora en positivo, veamos las propiedades de la complejidad
social

Un fenómeno o sistema social complejo está compuesto de diversos agentes
sociales, de naturaleza individual o colectiva3 que interaccionan con sus
diversos recursos. En la dinámica de las interacciones, que pueden ser
múltiples y diversas, intervienen de manera inherente los procesos
cognitivos de los agentes (representaciones de las situaciones y contextos en
curso, estrategias, proyectos o motivaciones intencionales) en vistas a
maximizar y apropiarse de los resultados de la interacción. Estas
interacciones no son lineales ni en serie; pueden ser en paralelo, de
retroalimentación, en bucles, compuestas, etc.

Las interacciones son de naturaleza dinámica, o lo que es equivalente, no son
lineales: sus efectos no son proporcionales o aditivos a los cambios o
intensidad de las interacciones entre los agentes que producen tales efectos.
La consecuencia es que la evolución de los fenómenos es muy sensible a las
condiciones iniciales.

Los agentes e interacciones pueden pertenecer a diferentes niveles sociales
desde lo micro a lo macro pasando por lo mesosocial. Los diferentes niveles
3
Las entidades, agentes, etc. se constituyen en tanto que sociales como resultado de la propia
dinámica de las interacciones y de la apropiación de los resultados consiguientes.
8
que se generan a partir de interacciones son resultados emergentes. Las
interacciones pueden llevarse a cabo entre los agentes/actores de un mismo
nivel o de distintos niveles ya que un sistema social complejo es situacional
en su entorno y abierto, interactiva y contextualmente, a otros niveles.

Un sistema social complejo es evolucionario en un proceso adaptativo y
auto-organizado. Su evolución se desarrolla en fases de transición y estado,
abocando a diferentes situaciones de equilibrio: (i) estable hacia atractores;
(ii) variable periódicamente en intermitencias cíclicas o inestable; (iii)
inestable e impredecible (aleatorio o no, indeterminado o determinista) en
tanto que sistema caótico.

Los resultados del proceso evolucionario sea de naturaleza funcional,
cognitiva y social, son emergentes de las interacciones dinámicas. El
resultado se incorpora a la realidad social como parte de su estructura de
orden o disipativa o disolvente de la misma, contribuyendo a la perpetuación
o a una nueva redistribución de la diferenciación, discriminación o igualdad
sociales.
Esta identificación de la complejidad social por propiedades, reinterpreta
socialmente algunos de los rasgos esenciales de la complejidad „natural‟, pero
contiene también características específicas propias de los fenómenos sociales como
(i) la interacción como unidad básica y elemental de todo fenómeno social; (ii) la
identidad social de los agentes y sus recursos que proviene de la misma interacción
y apropiación de los resultados; dicha distribución de resultados, materiales,
9
simbólicos, cognitivos, entre agentes puede ser de equidad estable o de desigualdad
inestable; (iii) la presencia e intervención en la dinámica interactiva de
representaciones, estrategias e intenciones o genéricamente de componentes
cognitivos que están en la base de la intersubjetividad de los procesos; (iv) la
necesidad de una contextualización y situacionalidad de los fenómenos sociales
opuesta a una aproximación observacional y analítica en cámara blanca; (v) los
resultados emergentes y evolucionarios se constituyen en sociales en cuanto
generan redistribución (o reforzamiento) de diferenciación social y de poder.(vi) En
todo proceso de investigación social es imposible soslayar la nueva complejidad
que procede de la necesaria vinculación o interacción que existe entre el sujeto que
investiga y el sujeto objeto de investigación. Y ello en todos los pasos de los
procesos sociales que conducen a los fenómenos o hechos sociales.
Todas estas peculiaridades se han de incorporar en una metodología social
ad hoc.
La teoría de la complejidad social puede asumir y dar una perspectiva
integrada a los dilemas metodológicos inveteradamente controvertidos en
sociología como son: (i) la dualidad, de difícil reconciliación, entre la subjetividad o
cognición como proceso interno, por un lado, y, por otro, la objetividad de lo
externalizado; (ii) la que se da entre la acción, interacción y cambios dinámicos
versus la estabilidad, orden y fijación de las estructura como resultado; (iii) y la
diferenciación clásica entre contenidos microsociales y macrosociales.
10
Orientaciones y reflexiones metodológicas genéricas.
La metodología realmente existente en sociología no ha entrado aún de manera
importante en la complejidad social. Smith (1997) afirma que muchas teorías
sociológicas han tratado la interacción y sus consecuencias de manera simplista. Lo
que ha llevado a soluciones como (i) dividir los sistemas sociales de estudio en
partes y tratarlas separadamente ignorando la necesaria interacción entre ellas o
entre los sistemas; (ii) usar las matemáticas de manera absolutista sin ser
necesariamente requeridas; (iii) y a suponer como aproximaciones lineales con
regresiones, las que no lo son.
Veamos una serie de orientaciones metodológicas genéricas que se añaden a
las que provienen de la definición adoptada. Si se hace referencia a estos indicios
para un diagnóstico de la complejidad, es porque pueden ser muy informativos
metodológicamente hablando a la hora de discernir si, ya de entrada, un sistema
social tiene visos de ser complejo. (i) El sistema o fenómeno social complejo posee
diversidad y variedad de agentes, comportamientos interactivos y dimensiones. Es
la diferenciación y conectividad en el sentido de Heylighen (1996) quien sugiere que
la complejidad social aumenta cuando la variedad (diferencia o distinción) y la
dependencia (en realidad, conexión) de las partes se incrementan. Ídem si se dan
diversas dimensiones de contenido en ellas: socio-espacial y temporal, cognitivas,
de desigualdad, …. (ii) La irreductibilidad es una clave decisiva de la complejidad
social, Nelson (1976), Anderson (1972), Wimsatt (1972) así como la capacidad
sorpresiva, Edmonds (1999). (iii) La ruptura de la simetría. Heylighen (1996)
11
argumenta que ninguna parte de una entidad compleja contiene o puede
proporcionar la suficiente información para que pueda predecir las propiedades de
las otras partes, lo que tiene que ver con la dificultad de modelación asociada a los
sistemas complejos. (iv) La referencia a marcos y contextos. Para Edmonds (1999) la
complejidad social depende del marco desde el que se contempla o modela el objeto
de estudio: la complejidad es también una cuestión de escala, situación, contexto y
unidad de análisis. (v) Las situaciones sociales que están a medio camino entre
orden y el desorden, estabilidad y desequilibrio, certidumbre e incertidumbre,
Edmonds (1999) o al borde del caos. Los sistemas complejos pasan además por fases
de estado y transición. (vi) El tiempo es una variable decisiva en los sistemas
complejos puesto que son dinámicos y evolucionarios. Por ello es decisivo examinar
la temporalidad propia a los sistemas complejos y la periodicidad de su estabilidad,
desarrollo, cambio y fases de transición. (vii) Los fenómenos sociales son
situacionales y se „localizan en determinados niveles sociales y contextos. Tomar
como referencias iniciales los tiempos, espacios, situaciones, contextos y niveles
sociales del objeto de estudio es una buena y primera premisa para comenzar un
estudio de complejidad social. (viii) Los sistemas sociales pueden ser simples o
complejos pero al completo o en alguna de sus partes. Si es simple la pregunta es si
lo es en todas sus partes o hay alguna parte compleja: el comportamiento orbital del
planeta tierra es simple pero nadie niega la complejidad de muchos de sus
subsistemas. Si es complejo puede no serlo en alguna de sus partes. La pregunta es,
Back (1997), ¿la información basada en la complejidad sobre la descripción de los
12
elementos y los comportamientos estáticos y dinámicos, dan pie a la complejidad
colectiva del sistema global? (ix) El estudio de los sistemas complejos ha de
comenzar por la descripción del relato de su proceso. La cuestión central que se
plantea consiste en aclarar por qué un sistema es complejo y cómo se genera, cuál es
su dinámica y en qué sentido y grado lo afirmamos cuando se dice que lo es. (x)
Correlativamente con ello está la cuestión del diseño de una metodología adecuada
para la complejidad social, y consecuentemente, si tal diseño es cuantificable
métricamente de manera no lineal, si es exploratorio y/o cualitativo o más
simplemente analógico. Si es cuantificable o se cuantifica, se deberá recurrir a los
métodos cuantitativos propios de los sistemas dinámicos, a la simulación o a la
teoría de la información. Si no se cuantifica se deberá montar un diseño conceptual
y de relaciones entre conceptos para dar cuenta o interpretar la realidad social de tal
forma que expresen de manera no ambigua las definiciones y lógica de la
complejidad social y que, además, recoja la información necesaria para describir el
sistema.
En los sucesivos apartados iremos recorriendo aspectos esenciales de la
complejidad social con sus correspondientes consecuencias metodológicas, Bechtel
y Richardson, (1993), Cilliers (1998, 2000), Richardson y Allen (1998).
4. De la complejidad de lo social a su metodología compleja.
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En los apartados precedentes se ha identificado y caracterizado la complejidad
genérica y la específica social. Puede dar la impresión de que la aplicación del
concepto de complejidad a lo social se ha impuesto de manera apriorística y/o bajo
la forma de un paralelismo analógico con la física. Por tanto, de lo que se trata ahora
es de encontrar el hiato y adecuación entre complejidad y realidad social a partir de
una teoría sociológica ad hoc que clarifique de dónde provienen y cuáles son las
características pronosticadas y atribuidas como complejas a los fenómenos o hechos
sociales y, como objetivo más específico, qué consecuencias metodológicas y/o
sobre los métodos de investigación se extraen cuando se afirma la complejidad de la
realidad social.
En el apartado 4.1. se introduce la idea de los Vínculos Tensionales (VT) en
tanto que piedras maestras o angulares que constituyen lo social y son el germen de
la complejidad social. Estos VT expresan la dualidad inscrita en todo fenómeno o
sistema social. La expresión de tensional se refiere al tipo de equilibrio que
atribuimos entre ambos polos duales, no necesariamente estable y/o lineal. Que se
hable de contenidos sociales básicos es debido a que dicha dualidad se considera
como la unidad mínima irreductible de lo social. Los VT no expresan conceptos
como paquetes compactos y homogéneos de realidad social sino como vínculos
tensos entre componentes o entidades.
En el apartado 4.2. se introduce lo que denominamos Principios Procesuales
de la Complejidad (PPC) que dinamizan los VT y que están en la base del germen,
proceso y desarrollo del entramado social y también de la complejidad social. Casi
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todos estos principios pertenecen a la clásica teoría de la complejidad, pero algunos
son de nuevo cuño, precisamente para acentuar la diferenciación de la complejidad
de la naturaleza de la social.
Vínculos y Principios, en su combinación y aplicación, conforman una cierta
ontología de lo social que identifica la Complejidad Social, al mismo tiempo que la
diferencia con respecto a otras disciplinas. El supuesto de base que se hace es que
un tal cuerpo conceptual (4.1. y 4.2.) da pie a una concepción de la complejidad
social que permite la superación de una metodología cuartelada y clausurada en sus
divisiones u orientada a mixturas metodológicas no fundamentadas u a otras
formas de combinación.
Así pues, la especificidad de la complejidad social que comienza en 4.1. se
completa en 4.2., aunque los VT y PPC se generan y replican mutuamente. Si los
PPC de 4.2. muestran más aparente algunos de los conceptos desarrollados sobre la
complejidad clásica, son los VT de 4.1., los que caracterizan, de manera específica, la
construcción de la compleja realidad social. Se parte pues de que lo constitutivo y
constituyente de lo social está ligado a su dinámica de desarrollo y emergencia a
partir de la acción recíproca entre los VT y PPC.
4.1. Las dualidades fundamentales o Vínculos Tensionales (VT) como
constitutivos de la realidad social compleja.
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Los VT como dualidades dinámicas constitutivas de los fenómenos o
sistemas sociales.
Lo que denominamos Vínculos Tensionales (VT) son las unidades mínimas e
irreductibles que cimentan lo social pero no son equivalentes, como se ha afirmado,
a rocas macizas, compactas y homogéneas.
Los VT son fenómenos o sistemas sociales duales compuestos por entidades
polares en mutua relación dinámica. Su naturaleza social es emergente de la propia
dualidad y de su dinámica interna. La dinámica entre los polos de la dualidad
genera diversos estados que son los fenómenos sociales, no necesariamente de
equilibrio estable. Dicha dinámica está también en el origen de su propia evolución.
Dado que la realidad social se construye desde sus componentes más
elementales examinamos sucesivamente, en la perspectiva de la complejidad social,
los tres VT constitutivos de fenómenos sociales básicos y del origen de la
complejidad social.
El primer Vínculo Tensional (VT): [(IR)(CInCEx)]S
El primer Vínculo Tensional (VT) se condensa en la expresión [(IR)(CInCEx)]S
que contiene, de un lado, la dinámica propia a toda Interacción social entre agentes
(I), vinculada tensamente a su Resultado (R) y, de otro, la expresión cognitiva de
16
toda Interacción y Resultado social como Conocimiento Interno (CIn) vinculado a
su polo dual, esto es, la expresión externa de dicho conocimiento (CEx).
Este primer VT se sintetiza con la expresión, [(IR)(CInCEx)]S donde

I, Interacción

R, Resultado, producto, hecho o realización

, signo del vínculo entre los polos duales I y R

(IR), el conjunto dual que expresar el Vínculo entre la Interacción y el Resultado y que
configura una primera dualidad imprescindiblemente conjugada

CIn el Conocimiento o Cognición Interna o internalizado por los sujetos

CEx el Conocimiento Externo o externalizado

S, se refiere a la pertinencia social del conjunto.
El conjunto [(IR)(CInCEx)]S se considerada, en esta perspectiva,
componente dual y unidad elemental e irreductible de lo social que, a su vez, da
sentido social a cada uno de sus componentes: agentes, recursos, acciones e
interacciones, representaciones, conocimiento, estructura, resultados, etc. Se acepta
el supuesto de que, en pertinencia sociológica, no se puede romper, ontológica,
epistemológica y metodológicamente dicha unidad pues expresa la necesaria
conjunción entre (IR)S y el (CInCEx)S.
Este sistema básico o VT, está configurado por dos polos también en relación
inherente, esto es: el (IR)S, por un lado y el (CInCEx)S, por otro. Tanto (IR)S
(Fig.1) como (CInCEx)S (Fig. 2) son (sub)vínculos tensoriales duales que poseen
entidad o pertinencia social propia, pero sólo en cuanto son parte o derivados del
17
VT total; esto es, si se les atribuye a ambos una connotación social es porque dicha
pertinencia está hipostasiada a partir de la conjunción que tienen en
[(IR)(CInCEx)]S.
El sub-vínculo (IR)S
El sub-vínculo (IR)S (Fig 1) conjuga la dualidad entre Interacción social (IS) y
Resultado social (S) de dicha interacción. Parece obvio, como se verá más tarde, que
no necesariamente una idéntica metodología o método de recogida de información
y/o de análisis tendrá la misma eficacia informativa y analítica en cada uno de los
dos polos, aparte de la necesidad de captar también su vinculación.
Fase de Transición
Interacción (Social)
IS
Subvínculo Tensorial
Entidad dual
(IR)S
Componente dinámica
Fase de Estado
Resultado (Social)
RS
Componente producto
Figura 1
El sub-vínculo (CInCEx)S
Idénticamente el subvínculo (CInCEx)S (Fig. 2) conjuga la dualidad entre
Conocimiento Interno, CIn, y Externo, CEx. Ambos son irrenunciablemente
inseparables. De nuevo una idéntica metodología de recogida de información y/o
de análisis no será necesariamente pertinente para cada uno de los polos, aparte de
la necesidad de captar también su vinculación.
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Componente
subjetiva y
simbólica
Cognición Interna (Social)
CInS
Subvínculo
tensorial de
la Cognición
(CInCEx)S
Componente
objetivada
Cognición Externa (Social)
CExS
Figura 2
El primer Vínculo Tensional [(IR)(CInCEx)]S
El Vínculo Tensional [(IR)(CInCEx)]S, es la conjunción de los dos SubVT duales
precedente que configuran un sistema, el más irreductible con entidad social, a su
vez dual, interactivo, cognitivo y social. Tampoco es evidente que una metodología
homogénea sea la pertinente para tratar el conjunto de las polaridades que se
presentan y componen esta realidad compleja.
El segundo Vínculo Tensional (VT): el Entorno-Proceso Situacional,
(EP)S.
El segundo Vínculo Tensional (VT) lo denominamos, Entorno-Proceso Situacional,
(EP)S. Es unidad de referencia y análisis de los fenómenos sociales, aunque no sea
el unidad más irreductible de lo social que, como hemos afirmado lo es el VT
[(IH)(CInCEx)]S. El VT, (EP)S, abarca un espacio social y una temporalidad
social adecuada a los sucesivos resultados de un proceso.
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El Entorno-Proceso Situacional, (EP)S, es la composición dual de dos
entidades inseparables. La primera, ES, es el espacio social o Entorno situacional
sincrónico en el que se desarrolla la interacción; la segunda, PS, es el desarrollo del
proceso en la temporalidad diacrónica del ES y de las sucesivas [(IH)(CInCEx)]S
hasta su clausura en una unidad temporal adecuada: ambas son inseparables y
tensionalmente vinculadas.4
El
seguimiento
o
continuación,
no
necesariamente
lineal
de
los
[(IH)(CInCEx)]S va constituyendo el Proceso Social a partir de diferentes ES.
Cada partida de una jugada de cartas [(IH)(CInCEx)]S, encuentra en el
desarrollo temporal o Proceso una fuente de sentido que completa y sobre todo
constituye su identidad. La inseparabilidad mutua, en generación y conjunción
entramada, del Entorno Situacional y del Proceso Situacional es lo que genera el
Entorno-Proceso Situacional, (EP)S. Como producto es el resultado emergente de
conjuntos conjugados en interacciones de diverso tipo de [(IH)(CInCEx)]S.
Ambos Vínculos Tensionales, el [(IH)(CInCEx)]S, o pertinencia social
más elemental, y el Entorno-Proceso Situacional, (EP)S, no son realidades sociales
exclusivamente micro sino que se pueden encontrar en todos los niveles, por
supuesto en el microsocial, pero también meso y macrosocial. Los Entorno-Proceso
4
En un juego de cartas, cada partida de distribución de cartas y el resultado de una jugada
constituye lo que hemos llamado el sistema [(IH)(CInCEx)]S como unidad social más
irreductible. El conjunto de jugadas y la situación en que se desarrollan es lo denominamos EntornoProceso Situacional, (EP)S. Una única jugada no es necesariamente la unidad más informativa
aunque sea la unidad más irreductible de lo social. El ES, es el conjunto de lo que se da en una
situación: agentes que miran, hablan, sirven la bebida o juegan, el espacio social, los objetos, el
ambiente, las cartas, el mismo juego, etc.
20
Situacional, (EP)S pueden ser de los más lineales como una cadena de producción,
a lo más „enmarañadas‟, paralelas, en serie, retroalimentadas, en bucles, etc. (Fig.
3). También su formato o configuración incide en la complejidad del proceso.
[(IH)(CInCEx)]S22 [(IH)(CInCEx)]S23
[(IH)(CInCEx)]Sce 
[(IH)(CInCEx)]Scs
[(IH)(CInCEx)]S11 
[(IH)(CInCEx)]S12 [(IH)(CInCEx)]S13 ..…

[(IH)(CInCEx)]S32  [(IH)(CInCEx)]S33
La representación de un (EP)S,
Figura 3
[(IH)(CInCEx)]Sjk : cualquier sistema interactivo y cognitivo del (EP)S.
j :
el primer subíndice, se refiere a la cadena, en que se inscribe el sistema
k :
el segundo, la fase dentro de la cadena.
ce :
subíndice de la „cola de entrada‟ o resultado de un (EP)S precedente al actual en curso
cs:
subíndice de la „cola de salida‟; es el resultado del (EP)S actual
El tercer Vínculo Tensional (VT): los niveles sociales.
Este Vinculo Tensional (VT) está constituido por la relación entre Niveles sociales.
En cada nivel se dan interacciones entre tipos específicos de actores, poseen un
cierto grado de autonomía y capacidad autoorganizativa, están abiertos a otros
niveles y poseen un grado de clausura siendo además evolucionarios. La diferencia
entre Niveles está en función de la envergadura de sus propios agentes y artefactos,
21
recursos manejados, extensión espacio-social y socio-temporal, formas y energías de
las interacciones desarrolladas, población concernida, distancia social entre agentes.
El nivel microsocial se refiere a la interacción entre individuos como agentes;
el mesosocial a grupos amicales primarios, formas elementales de vida asociativa,
relaciones familiares, relaciones profesionales o de estudio cercanas e inmediatas
pe. de taller, de clase, equipos de trabajo; y el macrosocial lo forman agentes (y sus
relaciones) como empresas, organizaciones, instituciones, partidos, países, clases o
categorías sociales, etc.
Los niveles mirados como contextos designan la misma realidad pero
contemplada desde las influencias mutuas o con los [(IH)(CInCEx)]S y (EP)S u
otros niveles que subtienden (Fig. 4). Contemplados como estructuras o contextos,
no se han de considerar como la tramoya de un escenario donde actúan agentes o
actores sociales sino que están constituidos por dinámicas internas entre diversos
agentes, por sus recursos y apropiaciones y por los procesos de [(IH)(CInCEx)]S
y (EP)S; precisamente los niveles o estructuras se configuran a partir de dichas
interacciones y sus resultados.
Por otro lado las interacciones no son patrimonio de los niveles micro. Los
niveles son realidades emergentes de la dinámica de los niveles inferiores,
[(IH)(CInCEx)]S y (EP)S; incluso los niveles inferiores son parte de los recursos
de otros niveles. Lo que equivale a afirmar que son interdependientes de tal forma
que si le foco de estudio se sitúa en uno de ellos se ha de mirar metodológicamente
a los otros. La interdependencia o interacción entre niveles y sus agentes es
22
consustancial a los fenómenos sociales y posible causa de equilibrios más o menos
estables en la dirección de la complejidad social. Precisamente en esta interacción
entre niveles se basa este VT. Aunque los niveles posean estructura nos se trate de
un orden pétreo.
Los Niveles/ Contextos y sus interacciones
Nivel o Contexto Macro
[(IH)(CInCEx)]S
(EP)Si
Nivel o Contexto Meso
[(IH)(CInCEx)]S
(EP)Si
Nivel o Contexto Micro
(EP)Si
[(IH)(CInCEx)]S
Figura 4
4.2. Los Principios Procesuales de la Complejidad social (PPC)
Los VT del apartado 4.1. precedente, representan la base de la arquitectura social
interpretada como compleja. Sin embargo, no obstante su función básica y pivotante
en la construcción de lo social, no han de entenderse como bloques compactos
graníticos, sino compuestos duales y tensos en fases de transición o de equilibrios
internos cambiantes.
23
En este apartado veremos los que hemos llamado PPC para dar cuenta de la
lógica, o mejor, de los mecanismos que operan sobre los VT. Estos PPC poseen,
salvo el primero y más parcialmente el sexto, connotaciones directas de la teoría
general de la complejidad pero leídos en clave sociológica. Unos son de carácter
más epistemológico y ontológico, otros más metodológico. El conjunto de VT y de
los PPC constituyen lo básico que a mi entender, identifican como complejos los
fenómenos o sistemas sociales.
Primero PP: la dualidad conjugada de metodologías o métodos.
Este Principio de la dualidad conjugada de metodologías tiene que ver con los
métodos, lenguajes, escalas socio-espaciales y socio-temporales aplicados a los VT.
El principio es aplicable a los tres vínculos tensoriales descritos que están en la base
de la constitución de lo social e implica consecuencias metodológicas importantes
en el análisis social.
El principio afirma que un fenómeno (o sistema social), basado en la concepción de
los VT, no se puede captar y analizar necesariamente en su unidad y totalidad,
aplicando idénticos métodos (o metodología) o las mismas escala socio-temporales
y socio-espaciales a cada uno de los polos duales que configuran los VT.
24
Para cada polo pueden darse sus métodos específicos y su propia escala de
intervalos socio-temporales y de amplitud socio-espacial. La misma metodología y
escala aplicada a ambos pudiera conducir a que uno de los polos se capte o analice
difuso y el otro preciso, pero pudiera ser que los dos y su relación fueran precisos.
Esta variación de métodos y escalas en cada uno de los polos del VT puede
proporciona un acercamiento más informativo y válido al fenómeno o sistema
social.
Este principio presupone lo establecido en 4.1., esto es, que los fenómenos
sociales están constituidos, independientemente de su contenido sectorial,
(educativo, laboral,…), por los tres VT, con sus polos duales, y que ambos polos
tienen una relación vinculante que define la entidad social de un único fenómeno
social y no exclusivamente por uno u otro de los polos duales. La entidad social
atribuida a las personas, artefactos y cognición proviene de la tensión dinámica de
los VT que intervienen, lo constituyen o lo han constituido.
Con este principio no se afirma que el conocimiento de lo social sea
inalcanzable o inabordable, ni que, si se alcanza, sea impreciso y/o de
incertidumbre en uno de los polos y lo contrario en el otro. Ni tan siquiera se afirma
que no se pueda alcanzar el mismo grado de precisión en los intervalos sociotemporales y amplitud socio-espacial del VT con el mismo método. Este principio
tampoco es una traslación del de Heisenberg aplicado a los fenómenos sociales.5 Lo
El principio de Heisenberg va más lejos y es más específico: dos estados de una partícula como pe.
su impulso y su localización no pueden calcularse con el mismo grado de precisión, lo que tiene
5
25
que se afirma es otro contenido: los dos polos, estados o fases, que define todo
fenómeno social y cuya vinculación constituye el VT, no son necesaria y
pertinentemente captados y analizables por la misma metodología, escalas sociotemporales y socio-espaciales. No necesariamente, quiere decir que pueden darse
situaciones en que sea pertinente el uso de la misma metodología.
Este principio no se puede entender como exclusivamente epistemológico,
aunque nos hayamos referido a la captación y/o conocimiento de la realidad social;
tiene que ver con su misma naturaleza dual; esto es, sobre la manera de generarse,
relacionarse temporal y medirse los polos de dicha realidad.
Reflexiones metodológicas
El Sub-vínculo (IR)S
Como se ha señalado el Sub-vínculo tensional (IR)S contiene los dos polos duales
de la Interacción social (IS) o componente dinámico de la realidad social y el
Resultado social (RS). Como reza el principio para la exploración, identificación y
análisis de cada uno de los polos no necesariamente se aplican metodologías y/o
escalas idénticas. Pero, como a su vez, el fenómeno social de la (IR)S es único o
está unificado en su pertinencia social, además de obtener la identificación y
análisis de cada polo por los métodos ad hoc, también se habrá de expresar la
como consecuencia que una partícula no puede estudiarse sin atender al principio de incertidumbre
que rige el vínculo entre sus dos características. La incertidumbre en la predicción es inevitable .
26
reconstrucción de la totalidad que supone este subvínculo a partir de de la relación
que identifica la dualidad como una totalidad. (Fig. 5).
Fase de Transición
Subvínculo Tensorial
Entidad dual
Interacción (Social)
IS
I
Componente dinámica
(IR)S
R
Fase de Estado
Resultado (Social)
RS
Componente producto
S
Metodologías y
métodos etnográficos, intensivos y/u
observacionales, de ‘captación instantánea’, descripciones
detalladas, validación ecológica, observación situacional
incluso participante. La distinción entre cuantitavo y
cualitavo no es pertinente.
Metodologías y
métodos estables,
procedimentos
protocolados
Figura 5
El Sub-vínculo (CInCEx)S
La ruptura del Sub-vículo tensorial (CInCEx)S y el tratamiento independiente del
conocimiento interno o internalizado (CIn) y el conocimiento externalizado, (CEx)
provoca la descomposición de una realidad que aunque dual es unitaria. (Fig.6).
Componente
subjetiva y
simbólica
Cognición Interna (Social)
CInS
CIn
Subvínculo
tensorial de
la Cognición
Componente
objetivada
(CInCEx)S
CEx
Metodologías, métodos y técnicas que
capten,
comprendan
e
interpreten
fenómenos sociales como conocimento
interno
es
decir,
reprsentaciones,
construcciones
simbólicas,
procesos
intencionales, opiniones, discursos, deseos,
motivaciones:
entrevistas,
grupos
de
discusión, observación particpante, análisis
de testos, del dicurso, conversacional, etc.
S
Cognición Externa(Social)
CExS
Metodologías, métodos y técnicas que capten
y analicen la realidad externa y objetivada
como hechos en dados: encuestas,
observación distante y serializada,
experimentos o cuasiexperimentos, análisis
de contenido,
Figura 6
27
Pero también sigue aplicándose el principio a cada uno de los polos en el sentido
que no necesariamente se han de aplicar los mismos métodos y escalas a cada uno
de sus polos, el (CEIn) y el (CEx).
El primer Vínculo Tensorial [(IR)(CInCEx)]S
La inexistencia o ruptura de este Vínculo tensorial [(IR)(CInCEx)]S y su
tratamiento independiente de sus partes como Sub-vínculos no sólo rompería la
unidad de un fenómeno o sistema social unitario pero dual y haría invisible la
relación que los vincula, (Fig. 7).
Figura 7
28
El Vínculo tensorial [(IR)(CInCEx)]S contiene los dos polos duales, el de la
(IR)S y el (CInCEx)]S. En ambos no necesariamente se han de aplicar
metodologías idénticas. Al ser este VT un fenómeno social unificado además de
analizar cada polo dual por los métodos adecuados, se han de conjugar para
reconstruir su totalidad como unidad más elemental e irreductible de lo social a
partir de la relación entre ambas dualidades. De lo contrario no se captaría en
fenómeno en sí. (Fig. 7).
Este principio se aplicaría con la misma lógica a los otros dos VT, el Proceso
Situacional, (EP)S, en su dualidad de Entrono social y Proceso social y al VT de los
Niveles (y sus relaciones) micro, meso y macrosocial.
Segundo PP: las Interacciones Dinámicas.
Los sociólogos han estado siempre concernidos por la dinámica y los cambios de las
sociedades, lo que es básico en la teoría de la complejidad.
El principio de la Interacción Dinámica afirma que la articulación o vinculación
entre los polos duales de los VT sigue la lógica de los sistemas sociales dinámicos.
Este principio afirma que la relación entre los polos del los VT no son
necesariamente lineales en su proceso y desarrollo, es decir, no exclusivamente
29
monótonas o de efectos proporcionales, sino que pueden discurrir en la lógica del
cambio dentro del cambio o, dicho de otra manera, que los cambios incorporan las
condiciones de su propia variabilidad. La no-linealidad se refiere a que los efectos
de un cambio incremental en uno de los polos del VT no es proporcional a los que,
a través de la relación, suceden en el otro polo del VT, lo que da a los resultados una
gran sensibilidad a las condiciones iniciales y previas.
En los sistemas dinámicos se pueden considerar dos aspectos. El primero,
consiste en la trayectoria de su comportamiento o su variación en el tiempo. El
segundo, es estructural y se refiere a sus pautas de relaciones subyacentes. Las
pautas observadas tienen que ver tanto con el comportamiento del sistema en el
tiempo como con su tratamiento asintótico.
Reflexiones metodológicas
La aplicación de este segundo principio se refiere de nuevo a cada uno de los tres
VT, a los niveles, micro, meso y macrosociales; el sistema (EP)S y al sistema
[(IR)(CInCEx)]S.
El principio aplicado a este sistema interactivo adquiere una importancia
mayor pues está en la base de la dinámica de lo social, dada la fuente y fuerza de
creatividad y emergencia de la implicación mutua entre lo interactivo y cognitivo.
El principio afirma que un vínculo (IR)S incrementalmente débil y monótono
puede producir un desproporcionado, innovador o rupturista (CInCEx)S y a la
30
inversa por no recordar la caída de la manzana en la faz de Newton.
6,7
Aunque
ambos polos (IR)S y (CInCEx)S se generan y regeneran mutuamente su relación
no necesariamente es pues de proporcionalidad.
Este principio se aplica también, en el mismo sentido, a los otros dos VT, el
Entorno-Proceso Situacional (EP)S y lo micro, meso y macrosociales.
Un investigador ha de ser fino, creativo y atento en su sensibilidad cognitiva
para conocer y captar las condiciones iniciales de los fenómenos sociales. Las
aproximaciones historiográficas, genealógicas, las observaciones minuciosas de los
fenómenos sociales, las narrativas, los estudios de temporalidades y de series tanto
de las condiciones iniciales como de su desarrollo y su final son posibilidades
metodológicas para descubrir indicaciones de la ausencia de linealidad, Stroup
(1997). Es fundamental la recogida de una información detallada y cuasi instantánea
de los procesos y resultados y los análisis de trayectorias a la hora de examinar la
no existencia de proporcionalidad entre las interacciones y sus resultados. La idea
de la relación causa-efecto en el sentido lineal pudiera quedar un tanto inadecuada.
Dentro de una métrica cuantificada todo lo precedente es tratable dentro de los
sistemas de ecuaciones dinámicas y dentro de la simulación por los sistemas
multiagentes y dinámicos.
6
Un rumor mínimo lanzado en una situación micro puede producir en lógica dinámica efectos
inesperados en el primer VT, [(IR)(CInCEx)]S que expresa la intersección y mediación entre
interacción y resultados y de lo objetivado con lo cognitivo.
7
El sistema [(IR)(CInCEx)]S ha jugado un rol importante en la sociología pues ha estado en el
centro de las grandes controversias y de divisiones teóricas y metodológicas como por ejemplo entre
una sociología de la acción y otra de la cognición.
31
Tercer PP: Estabilidad v. Inestabilidad de las fases de transición y estado.
Este principio se refiere a las fases de transición y estado y sobre todo al estado de
los resultados de la evolución de los sistemas sociales complejos. Dichos estados
fases pueden ser de equilibrios estables, equilibrios intermitentes, cíclicos o de
equilibrios inestables. Es decir, un sistema social no aboca, necesariamente, en su
estado final o en cualquiera de los estados intermedios, a un estado de equilibrio
estable.8
El principio establece que el desarrollo de un sistema social los VT pueden generar
estados (resultados) finales o fases intermedias de equilibrios: (a) estables o
atractores fijos que permanecen estables, constantes o no cambiantes; (b) variables
periódicamente en un equilibro de intermitencias cíclicas o inestables que varían en
el tiempo moviéndose de un sitio a otro en situación transitoria; (c) inestables e
impredecibles (aleatorio o no, indeterminado o determinista) o forma de
comportamiento aperiódico. Este último corresponde al estado caótico.
Movimiento
Estados del sistema en situación de rutina
Periódico
Atractor, límite fijo, equilibrio estable
No periódico
Ciclo límite, equilibrio inestable
Caos, equilibrio inestable
8
De hecho este principio es consecuencia del precedente, esto es de la naturaleza dinámica de las
interacciones; si ha sido situada diferenciado es para resaltarlo por su importancia.
32
Estos estados no se han de entender rígidos, inalterables o perennes. Son situaciones
críticas con posibilidades de alternativas no predecibles dada la dependencia de los
parámetros internos y externos al sistema y de las condiciones iniciales, Briggs y
Peat (1989).
Los atractores
Un atractor se define como un estado estable o posición preferente al que aboca un
proceso no lineal, Dimitrov (1999). En sociología el estado estable de una
organización cristalizada es un atractor: pe. que todos los trabajadores comiencen a
trabajar a las 8h00, que los trenes de cercanías de una gran ciudad confluyan casi
todos a la misma hora, la concentración de la gente en determinados espacios y
horas, la propensión a la innovación en determinadas comunidades científicas. En
física una bola que gira en un tazón que parece interminable y se va desplazando
hacia su fondo, Waldrop (1992). Esta estructura de punto límite puede tener valores
o situaciones sociales variables que se repiten en el tiempo en el entorno del punto
fijo o atractor: la gente come alrededor de 2 de la tarde, unos lo hacen algo antes y
otros después. Un atractor es resultado un emergente estable y por tanto un
indicador de la estabilidad de un fenómeno social pe. en estructuras.
La estructura de ciclo límite.
El ciclo límite es un estado que repite su situación (social) en intervalos pero no de
una manera regular y para cada intervalo contiguo sino en periodos irregulares.
33
Ejemplos sociales de este tipo pudiera ser las fluctuaciones de la cohesión de
grupos, tamaño de la familia, edad matrimonial, soporte a los partidos políticos,
solidaridad, consensos de valores, mercado de ventas. La catástrofe es el
comportamiento de su sistema social que se divide, bifurca o ramifica,
repentinamente en comportamientos diferentes o en mezclas de partes por una
variación pequeña de algunos parámetros, Dimitrov (1999); la bifurcación
consecutiva de un desarrollo en cadena pueden llevar al caos (Roos y Oliver, 2000;
Smits, 2000)
La estructura del caos
El caos es fenómeno determinista y, en algún sentido, ordenado.9 El caos es un
comportamiento aperiódico que se repite irregularmente con apariencia de un
régimen aleatorio. Puede ser además transitivo y la transformación en un intervalo
temporal puede solaparse con lo que pueden encontrase situaciones intermedias. La
situación de caos es sensible a las condiciones iniciales. Puede encontrarse en los
cambios de precios, los stocks de mercados, los desórdenes que provienen de
hábitos irregulares.
Reflexiones metodológicas
9
En física el llamado caos cuántico estudia sistemas no-deterministas
34
La captación en sociología los estados descritos no es evidencia directa y además no
hay en sociología de seguimientos minuciosos temporales para captar y analizar la
evolución de los de acontecimientos. Aplicado pe. a la relación vinculante entre
(IR)S y (CInCEx)S un cambio en la imagen de una pantalla e interiorizada por
según que tipo de agentes y situaciones, pe. brokers de compañías inversoras en
capital riesgo, los resultados pueden abocar a situaciones como las descritas en los
tipos de interacción de los cambios en el mercado.
Una manera de visualizar el movimiento caótico es el llamado diagrama de
fase. Mirando a la Fig 8, sin entrar en detalles, es posible distinguir diferentes áreas
en un experimento entre gatos y ratones en presencia. Si la razón de crecimiento, en
un experimento, de presencia de ratones sobre gatos está por encima de 2,5 la
población de ratones fluctúa impredeciblemente dentro de dos regiones amplias
correspondientes al equilibrio alternante; si pasa a 2,85 entra en la línea del caos.
Figura 8
El 'Edge of Chaos' (Waldrop, 1992) es una zona-punto de equilibrio crítico en
el que un pequeño cambio puede empujar el sistema a un comportamiento caótico o
a un uno de punto fijo. El sistema puede desarrollar en él su mayor potencial
35
emergente y/o de creatividad y autoorganizarse en un sistema de más alta
complejidad o desintegrase (Dimitrov, 1999a; Roos y Oliver, 2000). Es el punto en el
que el sistema puede fácilmente bifurcarse en varios y diferentes atractores, Pavard
y Dugdale 2002; Smits, 2000).
La pregunta metodológica es la de saber si una organización social está en
diferentes estados y cuales. Seel (2002) ha recopilando una lista orientativa: (i) un
sistema con excesiva estabilidad necesitará más grados de aleatoriedad para el
cambio; (ii) la cercanía al límite del caos se facilita si los agentes están muy
conectados y son diversos; (iii) ídem si hay gran transferencia de información; (iv)
la ansiedad contenida e inhibida en una organización no la hace proclive al cambio
y tampoco el excesivo control del poder.
Las estructuras fractales pueden reflejar los estados pasados de un sistema:
unas partes se anidan en otras idénticas, se llama autosimilaridad. En una
organización
social
los
valores
y
creencias
puede
expresarse
con
la
auotosimilaridad en diferentes niveles y organizaciones sociales (Kelly y Allison,
1998: 15-16): divisiones de trabajo, equipos de proyectos y cooperación, etc..( Smits
2000)
Cuarto PP: la Irreductibilidad de los procesos y resultados emergentes.
La emergencia es el proceso y resultado de producción de un estado (social) nuevo
situado en un nivel top up a partir de las interacciones que se dan entre agentes
36
situados en un nivel de menor envergadura social. Tiene pues que ver con la
generación de los niveles de la realidad social. La teoría de la complejidad
interpreta y considera pues la Emergencia como una cuestión de escala a partir de
procesos interactivos.
El principio de Irreductibilidad establece, que dada la naturaleza dinámica de las
interacciones los resultados emergentes de los procesos, y muy en particular en los
VT de los diferentes niveles, no son reducibles a (y por tanto no pueden explicarse a
partir de) la agregación o acumulación aditiva de las interacciones entre
componentes o propiedades de los niveles inferiores. Las características de un VT en
un nivel no dan cuenta de por sí de las propiedades de un sistema en un nivel
superior.
El principio se refiera a los niveles sociales en relación a sus partes y afirma que la
emergencia de un todo o nivel no puede entenderse como un análisis separado,
yuxtapuesto o aditivo agregado de las de las partes y sus interacciones. Se entiende
pues que los VT de un nivel son condición necesaria, pero no suficiente, en la
configuración y explicación de un resultado emergente en otro nivel. Así pues el
concepto de irreductibilidad de la emergencia se refiere al proceso por el cual las
pautas o estructuras globales surgen de procesos interactivos locales pero que, estas
estructuras o pautas no pueden ser comprendidas por el (o referidas
exclusivamente al) comportamiento o propiedades de sus partes.
37
Reflexiones metodológicas.
Los teóricos modernos de la complejidad social se focalizan sobre cómo la
estructura global surge, no tanto de interacciones locales o parciales, sino de cómo
la combinación de las mismas producen fenómenos nuevos pe. de coordinación
central, de producción de efectos no contemplados en las partes que interaccionan;
esto es, comportamientos colectivos que guarda autonomía con relación a dichas
partes (ver Mihata,1997; Cohen y Stewart, 1994; Casti 1986; Ross y Oliver 2000).
Habitualmente el comportamiento emergente no es anticipado y no puede ser
directamente deducido del comportamientos de más bajo nivel. (Flake 1998)
Un cuestión importante consiste en saber y decidir cuáles de las partes
interactuantes de un sistema social son las apropiadas y pertinentes como unidades
de análisis. En el razonamiento de Coleman sobre los sistemas de la vida social, se
encuentran las personas humanas como boques irreductibles y únicos de la
construcción del todo social y/o de sus niveles y, a su vez, que dicho todo social y
sus niveles son reducibles a la acción de dichas unidades lo que contradice el
principio de la irreductibilidad .
Otra cuestión es la examinar las discontinuidades o cortes de nivel que se da
en una organización social emergente con respecto a las partes que la constituyen.
Los niveles no son más que condensaciones o atractores en diferentes estados de
equilibrio. Una vez se reconocen su existencia la tarea consiste entonces, primero,
38
en identificarlos y, segundo, en dar cuenta o explicar las pautas, estructuras y
formas de operar, observadas en cada uno de los niveles. Bajo una estrategia y
modelo top-down, el analista deduce según el comportamiento del top (nivel en
cuestión) las partes que lo componen y las interacciones del nivel inferior que han
dado lugar a la emergencia del top, lo que revierte en una mayor información del
nivel down; bajo una estrategia o modelo botton-up, el analista tratará de ver cómo
a partir de la interacción de las partes se infiere el sistema del nivel superior. Pero se
ha de pensar que la simple acumulación y agregación de partes y sus interacciones
sólo en determinados casos da cuenta de las características y comportamiento del
nivel superior. Una masa humana silenciosa es explicable a partir de la adición de
comportamientos de los individuos. Pero el comportamiento de un grupo humano
no se explica por la adición de los sentimientos e interacciones de unos individuos
con otros porque hay roles diversos de y entre los agentes, intermediarios, centrales
e interacciones cambiantes y múltiples con efectos que se encadenan de manera no
lineal, que llevan a comportamientos que exceden una simple agregación.
La emergencia presenta diversos rasgos que posibilitan su diagnóstico y
luego su análisis: (i) La novedad o lo inesperado en las pautas u organizaciones de
las fases o estados sociales pe. de los nuevos sistemas familiares. (ii) La ausencia y
dificultad de captar la predicción de la emergencia social debido a su
irreductibilidad. No se habla aquí de la predicción del caos sino de las propiedades
de los niveles altos a partir de las propiedades encontradas en los niveles bajos. (iii)
La simulación social como una metodología adecuada. Los avances en la simulación
39
social permiten avances significativos en la comprensión de la emergencia ya que se
pueden generar comportamientos globales modelando interacciones entre agentes
como sistemas dinámicos (Mihata, 1997). Es un proceso de abajo arriba, opuesto a la
aproximación analítica clásica que se hace con hipótesis sobre la estructura global (o
invariante) del sistema.
Quinto PP: la Adaptabilidad y Autoorganización evolucionaria de los
sistemas sociales.
Los sistemas sociales complejos son sistemas abiertos, lo que no quiere decir que
toda la energía para (y la lógica de) los cambios provenga (o se interprete a partir)
de la influencia de los sistemas o contextos externos.
El principio asegura la existencia de dos dinámicas complementarias en la
evolución de un sistema social en su relación con otros sistemas sociales dentro de
su proceso evolutivo. La primera lógica o dinámica es la autoorganización o
autopoiesis que es interna al sistema. Se produce a partir de las dinámicas
interactivas propias de cada nivel o sistema. El resultado es Emergente y puede
abocar a cada uno de los estados descritos. La segunda lógica o dinámica es la
adaptación como reacción de un sistema social a la influencia de los externos, sea
como reactante o coayudante. El objetivo es el de su adaptación al entorno.
40
La evolución del sistema puede ser, como ya se ha tratado, increíblemente sensible
a los pequeños cambios o resistente a los grandes. Los sistemas sociales complejos
son abiertos en su relación con otros sistemas o contextos sociales: importan y
exportan recursos sociales, información, cognición a través de manera homeostática
con y desde otros sistemas. Las perturbaciones externas al sistema complejo
producen cambios en dicho sistema pero como reacción del mismo a tales
perturbaciones. Se da un cierto dualismo endo-exo o intra-inter aunque ligados
mutuamente: el proceso interno de emergencia produce transformaciones que
pueden hacer saltar el sistema de un nivel a otro; los efectos de otros sistemas
pueden producir cambios adaptativos que afecten al sistema o no producirlos al ser
absorbidos por el sistema
La autopoiesis es un término acuñado por Maturana y Varela y se entiende
como la capacidad de un sistema complejo de coevolucionar por sí; un sistema
autopoiético se autoproduce como las células vivientes. Es una característica de
todos los sistemas de vida y también del social (Kelly y Allison, 1998).
Reflexiones metodológicas
Si el análisis y la recogida de información se focalizan dentro del sistema como
proceso de auto-organización el analista se ha de centrar en la interacción entre los
agentes internos y en cómo el sistema maneja y arregla de manera espontánea sus
componentes y sus interacciones en una estructura global que maximice el ajuste y
41
resultado (Kauffman, 1995). Si el foco va dirigido a la relación del sistema con su
entorno, es decir la adaptación (Holland, 1996), el análisis ha de dirigirse a conocer
y examinar la naturaleza y mecanismos de dichos flujos interactivos externo-interno
y la reacción del sistema en vistas a su auto-organización vía la adaptación.
(Lee,1997 (Doolittle, 2000).
La auto-organización sucede en las corporaciones en todos los niveles, tanto
en los equipos y comunidades de prácticas (divisiones, equipos de proyectos) como
en el nivel organizacional (Kelly y Allison, 1998). Pero desde el punto de vista de las
organizaciones sociales humanas la incidencia de la dimensión cognitiva
(representación de la situación, habilidad, capacidad de al razón, proyecto,
estrategias,..) es fundamental y es que los agentes sociales reconocen, razonan sobre
y reaccionan con respecto a los rasgos emergentes de las instituciones y los agentes
que las provocan. Se puede denominar emergencia de segundo orden. Ello da una
capacidad de específica de autoorganización.
Resumen.
Este artículo no ha consistido en una investigación sobre un fenómeno o hecho
social concreto basada en su naturaleza compleja. Sólo ha pretendido asentar las
bases, recurriendo a la teoría de la complejidad social, de un modelo metodológico
que articule diferentes métodos de investigación adecuados al objeto de estudio.
42
Para ello se ha presentado, primero, una concepción dual y dinámica, como
propia de todo fenómeno (o sistema) social. Desde la perspectiva adoptada esta
dualidad polar, tensional o dinámica, o Vínculos Tensionales, de los fenómenos
sociales es la base de su
naturaleza compleja. Los fenómenos sociales, y sus
conceptos correspondientes, no son rocas berroqueñas que petrificada eternamente
sino que contienen en sí la lógica de su propia dinámica, en el sentido de los
sistemas dinámicos, y en consecuencia su capacidad de automanteniento y
adaptación. Sin esta perspectiva no parece evidente que se pueda hablar de
complejidad social. Por otro lado se ha intentado mostrar que los fenómenos o
sistemas sociales presentan una especificidad en su complejidad con respecto a la
propia de la naturaleza física o biológica. En este sentido la entidad cognitiva
propia a los agentes sociales es un plus de complejidad, tenido también en cuenta,
en la identidad compleja que aquí se atribuye a los fenómenos sociales. En segundo
lugar se han presentado los principios de la complejidad aplicado a los fenómenos
sociales. Además en todos los apartados aparecen reflexiones y orientaciones
metodológicas así como métodos articulados, homólogos y adecuados, que al
mismo tiempo respetan la unidad ontológica de los fenómenos sociales y su
aplicación a la diversidad que los constituyen.
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43
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