ESTUDIO DEL IMPERIALISMO Este libro se publicó en 1902 pero más tarde fue revisado y reeditado hasta 1938 por otros autores y estudiantes de la economía. En él, se trata de hacer una crítica del imperialismo estudiando las causas de aceleración del movimiento expansionista de las naciones desarrolladas entre 1970 y la Primera Guerra Mundial, reorganizando también los dominios coloniales en Asia, África y Oceanía. Jhon Atkinson Hobson, considera el fenómeno del imperialismo como un desajuste temporal y una enfermedad curable del capitalismo de la época. Todas las ideas expuestas por Hobson en este libro hicieron incluso que Jhon Maynard Keynes le rindiesen un homenaje sobre todo por su teoría del exceso de ahorro o vulgarmente llamado subconsumo como comienzo de una nueva época de la historia del pensamiento económico. A través de ella también trata de asociar la expansión colonial de finales del siglo XIX con la dinámica del desarrollo capitalista en las metrópolis prestando también atención a otros fenómenos no de tipo económico ( patriotismo, gusto por la aventura, espíritu militar...) siendo estos fenómenos el combustible de motor imperial. Así, en los siete primeros capítulos se ocupan de la economía del imperialismo (cuantificación, valor comercial, exceso de población, proteccionismo...) mientras que los seis restantes se centran en aspectos políticos, ideológicos y morales de la práctica imperial. Los datos que aparecen en esta obra se centran básicamente en la historia de Gran Bretaña desde 1905. A partir de aquí voy a intentar realizar un breve resumen de los aspectos económicos más destacados plasmando en ellos los pensamientos y las preocupaciones que Hobson tenía de la economía y de la vida en las que transcurrió su vida, empezaremos el desarrollo explicando que entendía él como imperialismo, seguidamente seguiré el desarrollo que tuvo ese término en cuanto al comercio exterior, como salida para el exceso de población, en la economía, las finanzas... y terminaré por una conclusión. − SU CUANTIFICACIÓN. En este apartado, Hobson trata de exponer con precisión el término del imperialismo basándose para ello en hechos y datos poblacionales y territoriales de publicaciones oficiales como por ejemplo del Ministerio de Colonias Británico. ¿ Qué significa para él el término imperialismo?. Desde 1870 una serie de naciones europeas se anexionaron a otras regiones de África y Asia así como a otras partes del globo terráqueo. Todos los territorios que corresponden al imperio británico están sometidos a un control colonial cada vez más estricto. Pero no nos engañemos, aunque en el año 1870 se fija ese comienzo de la política imperialista no es hasta mediados de 1880 donde empieza a ser real el apogeo de las conquistas, por ejemplo el resurgimiento del viejo espíritu colonial en Francia no tuvo lugar hasta principios del decenio de 1880, en Italia esas ambiciones comenzaron a desarrollarse a partir de 1880 mientras que en Gran Bretaña el aumento de territorios datan desde 1884... Por otra parte es importante citar que las relaciones de Gobierno británicas que los territorios anexionados tienen con la Corona se dividen en tres grupos: 1 • Colonias de la Corona, donde esta Corona controla totalmente el proceso legislativo mientras que la administración está en manos de funcionarios públicos que dependen a su vez de Gobierno británico. • Colonias que cuentan con instituciones representativas en las que la Corona sólo tiene derecho al veto en la legislación, pero el Gobierno británico mantiene el control de la vida política. • Colonias que cuentan con instituciones representativas y Gobiernos responsables, en las que la Corona sólo tiene derecho al veto en la legislación, mientras que el Gobierno británico no controla ningún funcionario con excepción del gobernador. Pero de todas las colonias o protectorados que se anexionaron a Gran Bretaña ninguna de ellas están en las dos últimas categorías, aunque si es cierto que algunas de esas posesiones gozan de cierto autogobierno en calidad de protectorado o Estados feudatarios que se dirigen por sus propios príncipes nativos aunque todos ellos están sometidos al poder absoluto del imperio británico. Tampoco se ha intentado educar o preparar a ningún territorio anexionado para que tuviese su propio autogobierno responsable y representativo. ¿ Qué diferencia encuentra Hobson entre lo que es el imperialismo y la colonización?. Según Hobson, la diferencia entre imperialismo y colonización está justificada por los hechos y las cifras pudiéndose formular: • Casi la totalidad de la expansión imperial consistía en la absorción política de tierras tropicales o subtropicales en las que no se establecían los blancos. • Casi todas las tierras conquistadas estaban densamente pobladas por lo que Hobson denominó razas imperiales. • La colonización en las zonas templadas estaban poco pobladas pero en éstas, los colonos blancos si emigraban, eso sí, llevando allí donde fuesen sus formas de gobierno, industria... • La ocupación de los nuevos territorios coloniales estuvo a cargo de una pequeña minoría de blancos funcionarios, mercaderes e industriales que ejercían su poder político y económico sobre las razas inferiores e incapaces de ejercer un autogobierno. −SU VALOR COMERCIAL. ¿Contribuyó el imperialismo a que el comercio exterior fuera la primera fuente de ingresos del país?. Hobson ve que aunque el volumen y el valor económico del comercio exterior y colonial de la Gran Bretaña era muy grande y esencial para el bienestar del país no representaba más que un pequeño porcentaje de la totalidad de la industria nacional, lo que indica que mientras el comercio exterior proporcionaba trabajo a un 20% de la industria británica el 80% restante trabajaba en el mercado interior. Hobson también ve que una pérdida gradual de los mercados exteriores ocasionaron un desplazamiento de mayor capital y una mayor mano de obra hacia las industrias que abastecen al mercado interno, por lo que los bienes que produjese ese capital y mano de obra se venderían y consumirían dentro del país lo que daría lugar a grandes pérdidas ya que el mercado exterior daría más beneficios que el mercado nacional, aún así, dichas pérdidas serían menores en cifras que el valor total del comercio transferido de forma indicada. Es verdad que Gran Bretaña necesita mercados exteriores para comprar con los ingresos que obtiene de ese mercado alimentos y materias primas que no se pueden producir o es desventajoso producir en el interior, por lo que es vital vender en el exterior, pero analizando datos Hobson se dio cuenta que entre 1870 y 1900 el valor del comercio exterior de Gran Bretaña creció menos rápidamente que su población, por tanto, ¿ tiende la política de Gran Bretaña a hacer al imperio británico cada vez más autosuficiente en términos económicos? La respuesta es no, ya que el imperialismo no tuvo influencia notable en el volumen del comercio exterior británico hasta que no se tomaron medidas proteccionistas y discriminatorias durante la Primera Guerra Mundial y después: las importaciones coloniales descendieron un poco y las exportaciones coloniales subieron ligeramente durante la última década en relación con las cifras de comienzo del período, la 2 expansión imperial británica no fue acompañada por un aumento en el porcentaje del comercio intra− imperial según las cifras de las exportaciones e importaciones de la Gran Bretaña en el siglo XIX. Resumiendo podemos decir que la expansión imperial británica no fue acompañada de un aumento en el valor del comercio de Gran Bretaña con sus colonias y dependencias, sin embargo, si se produjo un crecimiento considerable del valor del comercio británico con los países extranjeros. Por otro lado, apoyándose en las investigaciones realizadas por un profesor llamado Flux, Hobson vio que el gran factor del crecimiento del comercio colonial británico resulta ser el crecimiento del comercio con las colonias con las que se ha concebido el autogobierno. Conclusiones: • El comercio exterior de la Gran Bretaña representaba un porcentaje pequeño en relación con su comercio e industrias interiores. • Dentro del comercio exterior de Gran Bretaña las transacciones realizadas con las posesiones británicas representan un porcentaje cada vez menor de las que se efectúan con los países extranjeros. • Dentro del comercio de Gran Bretaña con sus posesiones, las transacciones realizadas con las posesiones tropicales fueron las más pequeñas, las de menor progreso y las más fluctuantes en cantidad y calidad. −COMO SALIDA PARA EL EXCESO DE POBLACIÓN. En este apartado Hobson parte de una creencia muy generalizada entre la población de que la expansión imperial era deseable y necesaria para absorber y utilizar el exceso de la creciente población británica. Gran Bretaña es una de las zonas más congestionadas del mundo por el número de habitantes, por ello su creciente población no puede encontrar en estas islas una ocupación que sea lo suficientemente remunerada lo que genera unos excesos de oferta en el mercado de trabajo promoviendo la emigración como necesidad económica que se instala o bien en lugares despoblados del planeta de los que se han apropiado los grandes países, o bien en lugares en los que se han implantado con carácter permanente la supremacía británica sobre las razas inferiores que allí habitaban. Este era el planteamiento teórico y práctico que Hobson criticó: ¿ estaba Inglaterra tan superpoblada realmente? La realidad es que la Gran Bretaña no está, ha estado ni estará tan densamente poblada como otras regiones industriales ( Alemania, Países Bajos...).Esto es debido a un descenso del índice del crecimiento de la población británica, por lo que si siguen operando las mismas fuerzas que hasta ahora han operado la población se estacionará. Sabemos que la especialización de la industria tiene como consecuencia una aglomeración de la población en ciertos puntos lo que puede ser perjudicial en algunos casos para el bienestar de la nación, por tanto, ¿ debe la Gran Bretaña gastar una parte importante de sus recursos nacionales y correr grandes riesgos para apropiarse de nuevos territorios en los que instalar a una pequeña parte sobrante de la población?. −SUS PARÁSITOS ECONÓMICOS. La única idea que para Hobson es algo beneficiosa para la práctica imperialista es que ésta enriquecía a unos pocos: El nuevo imperialismo es para la nación un mal negocio; es, empero, un buen negocio para determinadas clases sociales y para ciertos grupos industriales y financieros del país. Los gigantescos gastos armamentistas, las costosas guerras, los riesgos y alteraciones para nuestra política internacional, el impedimento para reformas sociales y políticas en la Gran Bretaña, son daños para la totalidad, sin embargo, muy útiles para intereses de negocios actuales en determinadas industrias y ramas industriales. . 3 También se manifiesta en contra de las guerras, a las que denomina imperialismo agresivo, ya que se piensa más en el propio país que en la persona como ser humano lo que entorpece el proceso de ciudanización en el interior: la catastrófica locura que suponen las guerras, los daños morales y materiales que infringen incluso a los vencedores resultan tan claros para el espectador que se sentirá inclinado a pensar que nunca habrá un estado con sensatez. Pero es sabido que las guerras siempre producen beneficios para algunos como por ejemplo existen compañías que se dedican a construir barcos de guerras y transporte, municiones, aviones, suministro de alimentos... que ven un aumento de sus ganancias en estas épocas criticas, obteniendo unos beneficios muy altos ¿ Cuáles son, pues, los resultados inmediatos que produce el imperialismo en el plano económico? Ya se sabe, grandes gastos de fondos públicos en barcos, cañones, equipos militares, gastos que se acrecientan y producen enormes beneficios cuando estalla una guerra o hay peligro de que estallen, nuevos empréstitos públicos e importantes fluctuaciones en las bolsas nacionales e internacionales; mayores cargos en los servicios consulares y diplomáticos; mejora de la inversión en el extranjero; adquisición de mercados para determinadas exportaciones, y protección y ayuda para el comercio británico de éstas manufacturas; trabajo para ingenieros, misioneros, buscadores de minas, ganaderos y otros emigrantes... A través de estos canales, llegan grandes cantidades de millones a muchas empresas que se dirigen por compañías que cuentan con un gran capital cuyos jefes son muy conscientes de la utilidad que tiene la influencia política en cuestiones de negocio. Sin embargo, el factor económico más importante del imperialismo es el notable crecimiento de ingresos procedentes de inversiones realizadas en el extranjero, en la que destacan dos hechos importantes: • los ingresos procedentes de las inversiones extranjeras eran enormemente mayores que los beneficios que producía el comercio ordinario de exportaciones e importaciones. • mientras que el comercio extranjero y colonial crecía lentamente, los valores de las importaciones británicas correspondientes a ingresos procedentes de inversiones en el extranjero, crecían muy rápidamente. Resumiendo, podemos decir que los grandes parásitos del imperialismo son aquellas clases ( en su mayoría capitalistas) que se benefician del imperialismo. • LA PROTECCIÓN El incremento de los gastos militares y navales en la Gran Bretaña puede considerarse como un seguro para la protección de sus mercados coloniales y de las inversiones que se realicen en nuevos mercados, pero el gasto no fue más que un enorme disparate financiero. Gran Bretaña gastó mucho con el objetivo de forzar nuevos mercados, pero los mercados que forzó eran pequeños, precarios y nada lucrativos. El único mercado seguro y tangible fue ponerlos a peor con los países que eran precisamente sus mejores clientes y con los que el comercio realizó los progresos más satisfactorios. El imperialismo rechaza el libre cambio y se apoya en el proteccionismo económico, idea que Hobson no comparte quedando reflejado en sus palabras el imperialismo tiende de modo espontáneo a entregar en exclusiva a la metrópoli los mercados de todos los territorios que adquiere, porque está convencido de que el conjunto de nuestro comercio solo puede crecer 4 mediante los incrementos por separado el libre cambio confía en que nuestro volumen de negocios con el exterior aumentará Por lo que será mejor el libre comercio a mercados nacionales y coloniales, las tarifas arancelarias sobre la importación puede que haga imposible comerciar de forma directa con las colonias, pero no pueden impedir participar en el beneficio del desarrollo económico colonial. el sistema de <<puerta abierta>> es una ventaja para nuestro comercio, pero no es una necesidad • SU CLAVE ECONÓMICA Los partidarios del imperialismo dicen que para conseguir nuevos mercados es necesario anexionarse a otros imperios, siendo esto una medida de política sensata para todos los países industriales y avanzados como la Gran Bretaña.. Así los partidarios del imperialismo siguen mostrándose partidarios del espíritu de aventura, esto es, de invertir su capital sobrante en otros lugares y prácticas más lucrativas: necesitamos más mercados para nuestra creciente producción industrial, necesitamos nuevas salidas para invertir nuestros sobrantes de capital y las energías del excedente de nuestra población. mayor y más importante es la urgencia que tiene el capital de encontrar en el extranjero negocios en los que invertir. Mientras el fabricante y el comerciante se contentan en comerciar con las naciones extranjeras, el inversor tiene una decidida tendencia a procurar la anexión política de los países en los que radican sus inversiones más especulativas. se ha acumulado un gran volumen de ahorro que no se puede invertir lucrativamente en Inglaterra por lo que tiene que encontrar salida en otros lugares.(1) Para todos estos, la expansión imperial era necesaria ya que si renuncian a ella, la dirección del desarrollo del mundo se quedará en manos de otras naciones por lo que se entorpecerá el comercio y se pondrá en peligro los suministros de alimentos, materias primas que son vitales para la supervivencia de su propia población.. Sin embargo, al analizar los hechos, Hobson se dio cuenta que las últimas anexiones de países tropicales que realizó Gran Bretaña fueron a un alto precio, lo que solo fue capaz de proporcionar mercados pobres e inseguros. Por otro lado el volumen del comercio con sus posesiones coloniales se mantiene estacionario y las operaciones también comerciales más beneficiosas y progresivas los realiza con las naciones industriales rivales cuyos territorios y mercados no se pueden forzar. Cuando se producían las épocas de competencia entre países, se dio un rápido proceso de fusión de empresas o trust, lo que sirvió para poner en manos de unos pocos empresarios industriales una enorme cantidad de riqueza ( ingresos superiores a sus gastos) lo que dio lugar a un ahorro automático. La inversión de este ahorro en otras industrias contribuyó a poner a éstas bajo el control de las primeras empresas fusionadas, encontrando así nuevas inversiones lucrativas.. Por otro lado, el rápido desarrollo de una población acostumbrada cada vez más a un elevado confort hace que se absorba nuevo capital para satisfacer sus necesidades. El problema surge cuando el índice real de ahorro se puso en una proporción mayor al consumo nacional, lo que provocó que la capacidad de producción fuese superior al índice real de consumo lo que dio lugar a SUPERPRODUCCIÓN. La única solución es una reducción continua de los precios hasta que los 5 competidores más débiles se ven forzados a cerrar porque el precio de venta de los productos no cubre los costes reales de producción; así, el primer efecto de la citada fusión de las empresas es el cierre de las más débiles quedando las mejor instaladas para atender a todo el mercado lo que provoca una acumulación de capital y un aumento del nivel de beneficios lo que provocará un mayor ahorro y capitalización. Entonces, el nuevo capitalista ha de buscar otras inversiones para sus ahorros ya que su sector está tan saturado de capital que no podía absorber más. Para ello tenían dos opciones, o bien optar por invadir los mercados extranjeros para colocar en ellos sus excedentes a bajos precios si es que no querían cerrar las fábricas, o bien buscar otras inversiones lucrativas para sus ahorros ( capital) fuera del país.. Esta repentina necesidad de mercados extranjeros para las manufacturas y las inversiones norteamericanas fue la causa de que se adoptara el imperialismo como línea política y como práctica por el partido al que pertenecían los parásitos económicos ( grandes jefes de la industria y de las finanzas) para intentar monopolizar el resto de los mercados siendo éste imperialismo otra fuente de inmensas ganancias: por ejemplo, los financieros se benefician haciendo empréstitos, los constructores de buques y compañías navieras percibirían subvenciones Debido a todo esto la mayoría de países extranjeros crearon barreras aduaneras para oponerse a las importaciones de productos manufacturados, pidiendo volver al proteccionismo para hacer frente al peligro.. Si por otro lado, los consumidores elevasen su nivel de consumo, cada vez que aumente la producción de modo que se igualasen tanto la producción como el consumo, no habría ni exceso de mercancías ni de capital, por lo que no habría que recurrir al imperialismo para encontrar nuevos mercados. Sí, existiría el comercio exterior pero el ahorro que habría en nuestro país podrían invertirse dentro si lo quisiéramos. Entonces, ¿por qué el consumo no crece automáticamente al ritmo de la capacidad de producción que tiene la sociedad? o dicho de otro modo, ¿por qué se produce SUBCONSUMO o exceso de ahorro? Si se consumiera lo que podría consumirse, la capacidad productora estaría en su máximo rendimiento; pero la realidad era que parte del consumo quedaba bloqueado o se ahorraba con vistas a su posterior inversión. Este ahorro está justificado en términos económicos y desde el punto de vista social pero siempre y cuando el capital en que dicho ahorro se concreta encuentre pleno empleo, lo que ayuda a producir bienes que, cuando se producen, se consumen. Es el ahorro que excede de estos límites el que crea desajustes, acumulándose en forma de excedentes de capital que no se necesitan para fomentar el consumo y que permanecen inactivos, o tratan con la ayuda del gobierno de emplearse en otras operaciones en países extranjeros. ¿ Por qué hay esa tendencia al exceso de ahorro? para poder contestar esta pregunta debemos analizar la distribución de la riqueza. Si se distribuyese la renta de acuerdo con las necesidades, es evidente que el consumo aumentaría siempre que hubiera un aumento del poder de producción ya que las necesidades humanas aumentarían por encima de cualquier límite y no habría exceso de ahorro. Pero en aquellos lugares en los que la distribución de la riqueza no guarda relación con las necesidades, la situación es muy diferente ya que se asigna un poder adquisitivo mayor a ciertas personas de lo que son sus necesidades o posibilidades de utilizarlo, mientras que a otras les privan de cualquier capacidad de consumo necesaria para satisfacer todo lo que deseen. Resumiendo, podemos decir que Hobson vio que lo que reclama la apertura de nuevos mercados y nuevas áreas de inversión no es el progreso industrial, sino la mala distribución del poder de consumo, que impide la absorción de mercancías y capital dentro del propio país. El exceso de ahorro que constituye la raíz económica del imperialismo está formado por rentas, beneficios de monopolios y otras partidas no ganadas ni con el trabajo manual ni con el trabajo intelectual. Como esas rentas no han costado esfuerzo alguno a sus perceptores, tampoco impulsan a estos a la natural satisfacción del consumo, y forman un excedente de riqueza que tienen que acumularse en forma de exceso de ahorro, el imperialismo es fruto de la mala economía Si se produce un aumento de los ingresos , provoca un aumento de los salarios lo que a su vez hace que 6 aumente el gasto en lugar de provocarse un mayor ahorro , esto a su vez provoca un aumento del consumo por lo que no hay necesidad de luchar por mercados extranjeros o por territorios extranjeros en los que invertir. La solución del exceso de ahorro propuesta por Hobson consistía en una igualdad fundamental de oportunidades económicas y educativas lo que provocaría una aumento del nivel de consumo que correspondiese con el aumento de la capacidad de producción: cuando la distribución de la renta es de tal tipo que permite a todas las clases sociales de la nación convertir sus auténticas necesidades en demanda efectiva de bienes, no puede darse superproducción, ni subempleo de capital o mano de obra, ni hay necesidad alguna de combatir por los mercados extranjeros Por tanto, el remedio que él propone es una reforma social que consiga elevar el nivel saludable de consumo público y privado de la nación de manera que ésta pueda alcanzar la meta más alta posible de producción: es necesario encontrar otras formas de consumo que sean más educativas, estimulen otros gustos y contribuyan a elevar el nivel general de consumo. no hay necesidad de abrir nuevos mercados en el extranjero; los mercados nacionales pueden seguir creciendo indefinidamente (todo lo que se produzca puede consumirse) con tal de que la renta, o capacidad de demandar bienes está distribuida adecuadamente La doctrina de la reforma social presenta dos variables según la forma de conseguirla: • elevando los salarios. • aumentando los impuestos y el gasto público. por lo que los sindicatos y el socialismo son los enemigos naturales del imperialismo ya que pretenden arrebatar a las clases imperialistas el exceso de ingresos que constituye el motor impulsor del imperialismo y esto se debe a que hacen llegar a las clases trabajadoras y al gasto público ingresos elevando el nivel general del consumo nacional y distribuyen la presión por conseguir mercados extranjeros. • SUS FINANZAS Las finanzas son las que regulan el motor imperial, las que dirigen la energía y deciden el trabajo que hay que realizar, pero no son ni el combustible del motor, ni las que generan de modo directo su potencia: Manipulan las fuerzas patrióticas que generan los políticos, los soldados, los filántropos y los comerciantes. El crecimiento del gasto público en el periodo 1904− 1931 ha sido mucho más rápido que el comercio exterior, más de las dos terceras partes del dinero se destinan a los gastos navales y militares y al pago de deudas militares y solo el 30% queda para educación, administración civil, subvenciones en ayuda de los impuestos locales. Pero la cantidad dedicada a la educación en este periodo va en aumento representando un porcentaje cada vez más elevado de los fondos públicos. Los grupos financieros, industrial y profesional (parásitos económicos) como hemos dicho anteriormente son el núcleo económico del imperialismo extrayendo de la nación las sumas con objetivo de mejorar sus inversiones privadas, abrir nuevos campos lucrativos a su capital y hallar mercados ventajosos para sus excedentes de mercancías. Los capitalistas industriales y financieros también han sobornado a otros grupos de interés con el fin de ganar 7 su simpatía y conseguir su apoyo ( iglesia, negociantes de bebidas alcohólicas...) Por todo esto, el aumento del gasto público representa una fuente directa de ganancias para ciertos grupos económicos bien organizados e influyentes y para todos ellos el imperialismo es el principal medio de conseguir ese aumento del gasto público. Pero Hobson nos dice que donde más claramente se percibe el sentido de las finanzas imperialistas no es en el nivel de gasto, sino en los impuestos. La política de autodefensa de los grupos más beneficiados será evitar que el peso de los impuestos caiga sobre ellos, procurando que la carga recaiga sobre las clases sociales más desfavorecidas o de futuras generaciones. Para él, una sana política fiscal adecuada sería aquella que recaudase la totalidad o la mayor parte de los ingresos estatales gravando la parte no ganada de los ingresos, no perturbando la marcha de la industria. Como esta política supondría grabar el tipo de actividades que constituyen la raíz económica del imperialismo ( porque son las partes no ganadas de los ingresos las que se acumulan de modo automático) este sistema fiscal sano atacaría la raíz de la enfermedad. Por otro lado, si las fuerzas capitalistas− imperialistas quisieran echar el peso de los impuestos sobre el pueblo ( como era su propósito), les sería difícil imponer esa política bajo formas de gobierno democráticas. Por otro lado, será imposible mantener un imperialismo mediante impuestos directos que gravasen los ingresos o la propiedad ( por ejemplo, las guerras y el militarismo no podían existir si a cada ciudadano se le dijese lo que cuestan, obligándole a pagar en metálico su parte de los impuestos). Al imperialismo le gustan más los impuestos indirectos para encubrirse de donde el imperialismo saca partido, porque la gente tiene que pagar pero sin saber para qué y cuanto están pagando. El imperialismo de Inglaterra que es un fenómeno económico fundamentalmente, se esfuerza por encubrir el sistema de protección financiera. Aún así, la clave económica del imperialismo está en el deseo de poderosos y bien organizados círculos industriales y financieros de asegurarse y potenciar mercados privados para sus excedentes de bienes y capital sirviéndose para ello de guerras, militarismo y una política exterior enérgica, está ultima suponiendo un aumento del gasto público. Si estos parásitos tuviesen que pagar de sus bolsillos en impuestos sobre la propiedad o sobre la renta renunciarían a esa política sobre todo en lo referente de buscar mercados para sus excedentes de mercancías. Es por esto que desean cargar con los gastos a la población pero en aquellos países que existe una democracia y gobiernos representativos no es fácil conseguirlo sin recurrir a engaños, por lo que la tributación deseada como hemos dicho antes es la indirecta, debiendo gravar los artículos de consumo o uso general que toda la gente necesita normalmente. Por último podemos decir que la creación de la Deuda Pública es una característica habitual e importante del imperialismo porque cumple un doble propósito: • brinda una segunda forma de escapar a los impuestos sobre la renta y la propiedad. • Ofrece una lucrativa manera de invertir ahorros que de otro modo permanecerían ociosos a la espera de una oportunidad de inversión más rentable. Por tanto , el imperialismo con sus guerras y sus desembolsos de armas, es responsable de las crecientes deudas de las naciones del continente europeo y sólo podrá desaparecer o ser impedido o por lo menos limitado por medio de procesos de democratización política o como el mismo decía, mediante la instalación de una auténtica democracia. 8