Formato Revista Los derechos fuera del armario

Los derechos
fuera del armario?
Actualmente en nuestro país la homosexualidad, no
solo ha sido despenalizada, sino que también es legal
que los homosexuales contraigan matrimonio y puedan adoptar un hijo. Todo esto que constantemente
se nos muestra por los medios de comunicación ¿Es
una visión real de la realidad? ¿Está la homosexualidad tan aceptada como lo muestran las series de
televisión? La respuesta es clara, no.
Algunos creen que por el simple hecho de que en
nuestro país se les haya otorgado la opción de casarse a dos personas del mismo sexo, significa que
la situación está normalizada. Incluso algunos creen
que el famoso “lobby gay”, goza de ciertos privilegios y están de moda porque ahora estos aparecen
en los medios. Pero eso no significa que se les den
privilegios, simplemente es que ahora se les da visi-
bilidad cuando antes los muchos hacían como si la
homosexualidad no existiera.
Por un lado se encuentra la lucha contra las etiquetas y encasillamiento de los homosexuales, típicos
clichés como el de que “los gais tienen rasgos femeninos”, o que “las lesbianas son muy masculinas”.
Poco a poco todos ideales erróneos que hay en torno
a las personas homosexuales están cayendo, pero es
una lucha que aún queda por recorrer. Sin embargo
esta no es la primordial preocupación de los homosexuales en el mundo, el problema principal es la homofobia y la discriminación jurídico-legal que vive
este colectivo todavía, lejos de países como España,
número uno en el ranking de tolerancia. En África,
hay actualmente 78 países en donde ser homosexual
es ilegal y en 7 de ellos se castiga con la pena con
1
la muerte, a pesar de que en otros
casos, castigos como latigazos y
la lapidación están presentes. En
Europa muchos son los que creen
que somos tolerantes respecto al
tema, pero solo hay que mirar hacia el este, donde está situada Rusia, para darnos cuenta de que nos
equivocamos.
En Europa queda por
avanzar
En Rusia se ha hecho algo especial, ilegalizar la propaganda homosexual con el fin de proteger a
los niños y las tradiciones. Esto
dicho de otra manera es intentar
ilegalizar la homosexualidad mediante la vía indirecta, es decir,
condenar homosexuales sin que
el gobierno sea el responsable directo de dicho ataque. ¿Pero que
se considera propaganda homosexual?
Los Rusos nos lo enseñan mediante la práctica, no solo se trata
de repartir panfletos, esta prohibido que dos personas del mismo
sexo estén mas juntos de lo debido, esta prohibido vestir de cierta
manera, incluso está prohibido
decir la palabra homosexual. La
gente denuncia y los policías detienen solo por meras sospechas
e intuiciones, lo cual nos hace
pensar que cualquiera tranquilamente puede ser arrestado si tiene
un pequeño descuido al comportarse en vía pública. Pero además,
en el caso Ruso se va mas alla, y
aunque esto sea algo que Putín intenta siempre negar en sus discursos, la realidad es que la policía a
quien defiende en la práctica, no
es a esa minoría indefensa, si no a
aquellos intolerantes que cometen
actos vandálicos y homofobos.
Donde la ley defiende al
homosexual
Está claro que Rusia va dando
pasos hacia atrás en cuanto a derechos civiles se refieres, pero ¿Y
en el resto de Europa?¿Tanto estamos avanzando realmente?
Fue en Europa donde se legalizo por primera vez se legalizo el
matrimonio homosexual, y fue
aquí donde más progresos se han
llevado a cabo. Pero todavía nos
2
encontramos con países que deciden mantener los “uniones civiles” para referirse despectivamente a la unión de dos personas del
mismo sexo. Todavía hay muchos
homosexuales que siguen siendo
minusvalorados ante la ley, y son
discriminados o marginados por
la sociedad.
Muchos homosexuales a día de
hoy sufren despido improcedente
por su orientación sexual, se les
echa de sus trabajos simplemente
porque a “su jefe” no les parece
correcta su orientación sexual,
algo privado. Además, salir del
Hay 78 paises en
donde ser homosexual es ilegal.
armario dentro del entorno laboral no es fácil, ya que los propios
compañeros de trabajo también
pueden discriminar al trabajador,
impidiendo que este pueda llevar a cabo su tarea en un entorno
normal, creándole dolor interno y
externo, creando un ambiente de
trabajo hostil.
Y cuando un homosexual accede al sistema sanitario, en muchos países se encuentra con que
no tiene derecho a donar sangre.
La excusa es la de siempre, que
el VIH esta en cifras alarmantes
dentro del colectivo homosexual,
¿pero no se supone que se hace un
análisis a la sangre de aquel que
va a donar? Se sigue utilizando
la generalización para restringir
derechos sanitarios a los homosexuales, aunque en España este
no sea el caso.
Además, si una persona de otra
orientación sexual a la heterosexual solicita atención psiquiátrica muchas veces esta no es tratada
debidamente ya que en estas instituciones existen todavía médicos
con prejuicios que achacan sus
problemas a la homosexualidad y
por lo tanto se centran más en buscarle un remedio a su orientación
sexual que al problema que tiene
el paciente. Parece que algunos
funcionarios del sector sanitario
han olvidado que la Organización
Mundial de la Salud dicto que la
homosexualidad no era una enfermedad en el año 1990.
El matrimonio gay se
extiende
El matrimonio homosexual, un
derecho ya reconocido en España es un derecho que no solo ha
llegado a equiparar legalmente a
las parejas homosexuales en la
vía legal, sino que con el paso del
tiempo también han servido para
asentar aun mas las bases para una
normalización que muchos consideran que jamás llegara completamente a nuestra sociedad.
Aun así, muchos hoy en día siguen viendo el matrimonio homosexual como una alianza nula,
algunas personas heterosexuales
aun piensan que su matrimonio
tiene más valor que el de una
persona homosexual. Y es que
como dijo el actual ministro Jorge Fernandez Diaz “Existen argumentos racionales que dicen que
ese matrimonio no debe tener la
misma protección por parte de los
poderes públicos que el matrimonio natural. La pervivencia de la
especie, no estaría garantizada”.
Tal vez el señor Fernandez Diaz
se haya olvidado de razonar que
es el sexo el que mantiene la pervivencia de la especie, no el matrimonio, que supone la unión de
un hombre y una mujer.
Da la casualidad de que este
mensaje se transmitió desde
Roma, en plena conferencia llena
de religiosos. ¿Que nos podemos
esperar del papel de la iglesia?
Durante siglos la iglesia ha condenado y criticado la homosexualidad, así como el matrimonio entre estos.
Es cierto que el último Papa
Francisco se ha mostrado más
abierto en este aspecto, pero todavía queda mucho que hacer en
esta institución. Se supone que la
iglesia ha de ayudar y propagar el
mensaje de Dios, y por desgracia
solo ha avivado aun más la chispa de intolerancia hacia este colectivo. Una institución en donde también hay dentro miles de
homosexuales que en su tiempo
se refugiaron en la iglesia por la
incomprensión del mundo, sigue
fomentando la marginación de los
homosexuales.
¿Adopcion igualitaria?
Muchos dan por sentado que
cuando se aprueba la ley de matrimonio igualitario en un país, automáticamente también se aprueba
la ley de adopción homoparental,
ese fue el caso de España. Pero
por desgracia no ocurre así, y es
que si el matrimonio igualitario
todavía tiene una fuerte oposición
social, la adopción también la tiene. En este caso ya no recurren
solo a la religión, sino que utilizan a los niños como escudo para
defender su postura. Para aquellos que están en contra exponen
que un niño necesita a una figura
paterna y otra materna para crecer. ¿Entonces qué pasa con las
madres solteras? ¿También están
educando mal a su hijo? O más
interesante aun, ¿Es mejor un orfanato que dos personas del mismo sexo que les cuiden?
En cualquier caso, si pocos son
los países que dejan casarse a las
3
personas de orientación sexual
homosexual, menos lo son los que
dejan que estos adopten niños.
Y aquellos en donde si es defendido por la ley que estas parejas
adopten, luego en la práctica no
es un derecho tan defendido. Aquí
en España, la mayoría de parejas
homosexuales que desean formar
parte del proceso de adopción lo
tienen más difíciles que las parejas heterosexuales. Se les pide
más documentación, los test psicotécnicos son más exigentes y
generalmente se les posiciona en
el último lugar en la lista de espera para adoptar a un menor.
El boom de Hollywood
Todas estas cosas son las que Hollywood no quieren que veamos.
Los personajes gais series, películas y programas están cada vez
más presentes en los medios. Es
cierto que fomentan la normalización como pueden. Nos muestran
que una pareja gay también puede
ser tierna, que una pareja del mismo sexo puede criar a un hijo, que
no siguen los estereotipos marcados… Nos muestran la parte buena de la realidad, ¿Pero y la mala?
Pocas veces poder ver en los medios la homofobia que sufren diariamente miles de homosexuales,
o los problemas de marginación a
lo que se exponen, ni siquiera se
habla ya de cómo afecta el VIH
a este colectivo. Al igual que a
los cachorros, lo intentan vender
ocultando la parte mala de ser homosexual. Muchos creen que la
homosexualidad es una moda, ese
es el mensaje que les llega a los
sectores más conservadores. Pero
la realidad es bien distinta y a de
ser visualizada por la población.
No hay homosexualidad sin homofobia, evidentemente que los
homosexuales son más que un cliché barato de Sexo en Nueva York
y que saben llevar un matrimonio
y cuidar hijos. Pero también son
personas que sufren diariamente acoso físico y psicología y es
necesario mostrar a la población
que la homosexualidad también
es dolor, y que por ello mismo necesitan apoyo de todos los ciudadanos, tanto en occidente como en
África o en oriente próximo.
Discriminacion dentro
del colectivo
Siempre que se habla de discriminación homosexual entendemos que esta viene por parte de
los heterosexuales, pero también
existe intolerancia ante otros homosexuales dentro del colectivo.
Muchos homosexuales suelen
ningunear a otros por ser de una
manera, suelen dejarse llevar por
los prejuicios que asolan al propio
colectivo para relacionarse con
El 54% de los homosexuales no se
sienten representados ni identificados
en la marcha del Orgullo Gay
4
unos o con otros. La mayoría de
los homosexuales suelen rechazar a otros homosexuales porque
estos les parecen demasiado femeninos o masculinas. Además
algunos suelen dividirse según un
tipo de clasificación, dependiendo
de la edad, del físico, etc. Algunos
establecimientos dirigidos a este
colectivo solo dejan entrar a homosexuales que pertenecen a cierta subcultura. Esto nos lleva a otro
tema aun más alarmante. Al igual
que existe homofobia, también
existe heterofobia, desprecio por
los homosexuales, aunque esta
generalmente solo suele llevarse
a cabo mediante el lenguaje verbal. Sin embargo no tiene sentido
que los homosexuales exijan por
ejemplo que se les permita la entrada a cualquier establecimiento,
siendo tratados de forma igualatoria y luego no se dejen entrar a heterosexuales en establecimientos
que están dirigidos a el colectivo
homosexual.
¿Es lógico que el colectivo homosexual pida tolerancia y luego una
pequeña parte de este no la ponga
en práctica? Evidentemente cada
persona es un mundo.