II FORO DEL BICENTENARIO: LA CONTRIBUCIÓN DE SAN JUAN A LA CONSTRUCCIÓN NACIONAL EN LOS ÚLTIMOS DOSCIENTOS AÑOS D. F. SARMIENTO: UN IMPULSO CREADOR EN EL TIEMPO Dr. María Susana CLAVEL JAMESON. I_ PRESENTACION. Pensar en la patria trae consigo remembranzas, acciones, hombres e ideas en un marco de valores y principios éticos que en estos albores del Siglo XXI, hace falta rescatar. En este marco y pensando en el aporte de la provincia de San Juan a la construcción nacional, mi mente y mis sentimientos como historiadora y ciudadana me conducen a evocar el pensamiento y accionar de un hombre que contribuyó a la formación del Estado Nacional: D. F. Sarmiento. Para comenzar haré propia la alocución de Natalia Botana, quien escribió: “Sarmiento está situado en la encrucijada de un mundo que se apaga y de un porvenir que asoma entre fuertes sacudones. Con él comenzó a cobrar forma institucional en la Argentina una tradición de objetivos ambiciosos y frágiles antecedentes, las peripecias de su vida ilustran la aventura del republicanismo en el siglo XIX, una aventura a caballo entre Europa y América, de lance incierto, que desató transformaciones, reacciones y hondas disputas. Sarmiento participó de esta aventura al conjuro de tres políticas: la política de la libertad, la política del conocimiento y la política del poder.” (BOTANA, N. Los nombres del poder, pag.11) En esta ocasión me referiré a una de ellas, a la política del conocimiento. Comenzaré enunciando algunas de las ideas vertidas por el eximio sanjuanino, haciendo hincapié en el accionar en la Gobernación de San Juan, en la presidencia principalmente en el plano de la Educación. Hare alusión a actividades económicas tales como la agricultura y la minería y me referiré a sus conceptos premonitorios acerca del rol de la mujer mostrando como fueron atravesados por la idea de la educación. 1- Las ideas. D.F.Sarmiento consideraba que la historia presentaba a los ojos de los hombres y de las mujeres la permanente evolución progresiva de la humanidad, caracterizada por una mayor justicia en la vida interna de la sociedad y una mayor solidaridad entre sus grupos, de modo que aquella se iba convirtiendo en una unidad social, política y económica, a todo lo cual contribuían en alto grado la ciencia, la técnica, el trabajo constructivo, la libertad, la Democracia, la educación pública, el arte y la legislación progresista. Respecto a ello afirmaba que el problema histórico estaba determinado, decía, por la lucha entre la Civilización y la Barbarie. En donde Civilización era afirmar el imperio de la Ley y de la autoridad constituida, educar las masas por la escuela primaria, abrir los puertos y los ríos al comercio universal, construir caminos y vías férreas, fomentar el arraigo de nuevos colonos, remover todos los obstáculos morales y materiales a la libre expansión de las fuerzas económicas(Obras III, 211). Uno de los elementos más importantes para asegurar a todos los individuos la Civilización era la educación popular: “La sociedad en masa tiene interés vital en asegurarse que todos los individuos que han de venir con el tiempo a formar la Nación, se hayan preparado suficientemente para desempeñar las funciones sociales a las que serán llamados. El poder, la riqueza y la fuerza de una Nación dependen de la capacidad industrial, moral e intelectual de los individuos que la componen y la educación pública no debe tener otro fin que aumentar esas fuerzas de producción, de acción y de dirección, aumentando cada vez más el número de individuos que la posean. (XI, 34): Había que inculcar en los estudiantes el deseo de profundizar y escuchar lo aprendido. Estas ansias de progreso y superación es lo que ahora se llama Educación Permanente. Por eso el ser humano, dijo, tiene que ser siempre el artífice de su propia formación cultural, asistido por la sociedad, que tiene la obligación de poner a su alcance, para lograr aquella, los medios necesarios. “La educación del pueblo es hoy la preocupación de la humanidad, educarse es simplemente ser hombre libre” (III ,296). Sostuvo que “una nación no puede pretender ante la historia haberse dado instituciones que la eximen de proveer a la primera necesidad de un Estado, que es la de preparar ciudadanos formados para la vida social, en una época en la que el poder material se liga al desarrollo intelectual” (III, 327); y agregó que la educación universal era entonces la empresa de todos los gobiernos. Consideró que el problema educativo era un asunto político y no simplemente pedagógico. Decía: La enseñanza debe perseguir un propósito nacional. Como elementos para su lucha para llevar adelante un programa de acción, empleó la política, la oratoria, la milicia, el gobierno, las funciones políticas, las tareas del educador y la pluma de escritor. Aspiraba, así mismo, a difundir en la masa del pueblo conocimientos generales por medio de la enseñanza secundaria y desarrollar las aptitudes técnicas de todos mediante el funcionamiento de escuelas industriales, de minería, comerciales, de agricultura, y por medio de la difusión de gabinetes, laboratorios y museos. Quería un desarrollo de las bibliotecas populares y una ilimitada difusión del libro. Deseaba fundar institutos especiales que prepararan a miles de jóvenes, hombres y mujeres, para ocuparse de las tareas educativas. Con ese programa, claro y preciso, y con sus ilimitadas energías para convertir sus ideas en realidades, hizo una vasta y completa obra en materia de educación pública. 2- D.F.Sarmiento en San Juan D.F. Sarmiento concebía a San Juan como la nueva capital del cuyo histórico. Soñaba con un desarrollo agro-industrial a partir de la minería y la agricultura juntas, para lo cual la Escuela de Minas y la Quinta Normal serian las formadoras de los recursos humanos. 2-1- Las minas como atractivo para la inmigración. Reflexionando acerca de este devenir histórico, se ha observado que la década del sesenta, en el Siglo XIX signó un hito. La actividad minera cobró un papel de motor de reactivación económica y de elemento de atracción de inmigración y capital. El entusiasmo mayor provino del mismo gobernador D. F. Sarmiento que fue capaz de elaborar un plan de acción para la provincia, sin precedentes en su coyuntura histórica y aun posteriormente. Sarmiento fue elegido Gobernador Propietario el 16 de febrero de 1862. Su objetivo fue sacar a la provincia de la postración en que se encontraba, por lo cual se propondrá presidir una revolución industrial, convirtiendo a San Juan en un centro agrícolo-minero tomando en consideración que el principio activo de desarrollo que fundaría la prosperidad publica, era el fomento de la inmigración de jóvenes con oficio, que no fueran excesivamente pobres y que procedieran de las principales ciudades manufactureras de Europa. En tal sentido apuntaba, el único ramo de la actividad económica, valiosa en la balanza comercial capaz de competir con Europa era la explotación de las minas, la que haría nacer y desenvolver en gran escala una demanda creciente de productos agrícolas. Del buen éxito de la minería hizo depender el desarrollo del comercio, la agricultura, la industria, la llegada del ferrocarril, el poblamiento del desierto, la apertura de nuevas fuentes de trabajo y la reforma de la moneda cambiando el papel por plata pura. El concepto trabajado por Sarmiento se basaba en la experiencia de California, cuyos descubrimientos de oro habían fructificado en la influencia de población y capitales. Así expresó en sus escritos: “Si no fuera por el furor minero de los 19 años anteriores, California hubiera quedado hasta hoy siendo quizás el mismo desierto vasto y sin más valor que una grande estancia para ganado y los inmensos territorios adyacentes hoy poblados por comunidades civilizadas y todos atravesados por el gran ferrocarril que une el Atlántico con el Pacifico, habrían sido salvajes. En donde quedaría el correo trasandino, el telégrafo y las líneas de vapores a la China si no fuese por las necesidades creadas por el desarrollo rápido de la industria minera.” Teniendo en cuenta ese ejemplo consideró que el gobierno debía preocuparse por este poderoso ramo de riqueza para lo cual creía necesario: a) El ordenamiento jurídico de la explotación. b) El auxilio de conocimientos metalúrgicos que le den información sobre el valor, composición química y tratamiento del metal. Al respecto escribía que no había un ingeniero que levantase un plano o practicase una nivelación ni un químico sanjuanino que pudiera reducir la plata que por millones de calor contenían las minas. c) Contratar a F. I. Rickard e inducirlo a explorar el territorio y redactar un completo informe para atraer capitales. d) La inversión de fuentes capitales extranjeros y nacionales. e) Solicitar el auxilio económico de la Nación. f) Provocar y favorecer la influencia de mano de obra extranjera. Las ideas se vieron reflejadas en el accionar. Varias disposiciones reglamentarias fueron dadas. Entre las más importantes destacamos las que a continuación se enuncian. 1- Creación de la Diputación de Minas, siendo de su facultad las denuncias de minas, las peticiones de mensura, la facultad para disfrutar de las minas. 2- Establecimiento del Régimen de Cánon. 3- Régimen de la Propiedad del mineral, cuya importancia medular radicó en que trató de preservar la propiedad del mineral al determinar que solo el dueño o administrador podía extraerlo fuera de los límites de la mina. 4- Expropiación por causa de utilidad pública de los sitios, leña, agua u otros objetos convenientes para fundar establecimientos de metalurgia y de beneficio de minerales. 5- Creación del Colegio de Estudios Preparatorios incluyendo en su plan de estudio Mineralogía y Química. 6- Creación del Departamento Topográfico, Hidrográfico y Estadístico encargado, entre otras cosas, de la Superintendencia del Registro Minero y de levantar el mapa de la Provincia. 7- Establecimiento de Jueces de Paz en el Tontal y La Huerta. 8- Establecimiento de una correo semanal en l Tontal y La Huerta 9- Fundación de Villa Rickard. 10- Constitución de la Sociedad de minas para explorar plata y oro en Calingasta. El objetivo de la compañía de minas fue erigir el establecimiento de fundición como también comprar metales para extraer plata o extraerla por cuenta de los propietarios pagando maquila. El establecimiento se instaló en Hilario (Calingasta) procediendo F.I. Rickard a viajar a Londres a comprar la maquinaria necesaria y estimular el arribo de mano de obra extranjera. Las ventajas que se obtendrían serian significativas: “Para los capitalistas…se ofrece…la ocasión de formar parte de una gran compañía…para los mineros evitar los errores que la falta de conocimientos científicos hace cometer…y tener a su disposición máquinas, hornos, todo lo que la Europa ha inventado…para los comerciantes la creación de una poderosa industria que requiera artículos de consumo y produce capitales que van a crear mayores consumos. Para los hacendados, demandas de productos agrícolas, de arriendo de casa y para el artesano seguridad de trabajo, con el aumento de población y de riqueza.” El 5 de Abril de 1864 D.F. Sarmiento renunció al cargo de Gobernador en virtud de haber sido nombrado por el Gobierno Nacional enviado diplomático ante los gobiernos de Chile, Perú y Estados Unidos. Desde allí sigue manteniendo correspondencia con Rickard quien lo mantiene al tanto de lo que acontece con los trabajos en Hilario y la crisis de la compañía de minas. 2-2- El estímulo a la agricultura: La Quinta Normal. En el diagnóstico que realizó advirtió que había que vencer al desierto, fortalecer y diversificar la agricultura y la industria, tecnificar y especializar al agricultor. El desarrollo de la educación agrícola es planificada a nivel regional. Con la fundación de la Primera Quinta Normal de Chile y Latinoamericana, que la referencia en sus escritos como escuela madre, luego funda la Quinta Normal de Mendoza y finalmente la Quinta Normal de San Juan. Dentro del primer año de su mandato constitucional, el gobernador obtuvo de la Legislatura una Ley, autorizando al Poder Ejecutivo a expropiar hasta ocho mil cuadras para dedicarlas a colonias agrícolas, estas tierras estaban situadas al sur de Caucete hasta el límite con Mendoza y San Luis, pertenecientes al ahora departamento de 25 de Mayo, zonas conocidas actualmente como Tupelí, La Matanza y Bomba de Coria. Estas tierras, dotadas de agua serían ofrecidas a extranjeros que llegarían desde Europa hacia la provincia directamente por el puerto de Rosario, traídos por un empresario de inmigración. Para completar y concretar el desarrollo agrícola en el árido San Juan era imprescindible la enseñanza técnica; así La Quinta Normal fue una de las realizaciones más ambiciosas de D. F. Sarmiento como gobernador, pues nació para ser una institución rectora y experimental de la agricultura. San Juan, en efecto necesitaba conservar sus árboles autóctonos en vías de extensión, introducir otros de maderas útiles para una explotación racional, cuya meta provea la forestación de los campos, y finalmente, ensayar nuevos métodos en la arboricultura. Sus ideas habían tomado forma en Estados Unidos, país de su profunda admiración, así comparaba nuestro terruño con el avanzado país del norte: “Y permitidme que os haga un cumplido, yo que tan pocas veces, en mi deseo de progreso tengo que aplaudir lo que existe. No he visto pueblos de agricultores que más se asemejen en su índole y hábitos a los norteamericanos, que los mendocinos y sanjuaninos. La misma tenacidad para el trabajo, aunque con menos provecho, la misma división de la tierra… La misma distribución de la propiedad, pues los dos tercios de los habitantes son propietarios. Las misma aptitud para el trabajo personal. Y sin embargo, los resultados no eran los mismos, ¿Por qué? Poseemos tierra mas feraz que la de Estados Unidos: tenemos labradores inteligentes; no nos son desconocidas las maquinas en instrumentos aratorios.¿En que está, pues la dificultad? En la falta nuestra- y esto sí que es nuestro,- de artes accesorias a la labranza.” La Quinta Normal fue inaugurada en los primeros días de Septiembre de 1862. El establecimiento contó con la dirección técnica de agrónomo alemán Enrique Roveder, traído por Sarmiento desde Chile. Este firmó un contrato por nueve años. Gracias a este emprendimiento, una extraordinaria cantidad de plantas se introdujeron por primera vez en la provincia: 24 variedades de perales. 4 mil plantas de vides de 6 variedades distintas. 10 variedades de duraznos. 4 variedades de cerezos. 3 variedades de damascos. En cumplimiento del mencionado contrato firmado entre Roveder y el Gobierno en mayo del 1862, se aprueba el reglamento que regiría LA PRIMERA ESCUELA DE AGRICULTURA DE L PAIS. Se impartieron nociones elementales de 12 asignaturas, entre ellas: “Economía Rural”, “Zootécnica”, “Agrología”, y en especial Agronomía. Dictábanse también nociones de Geología, Química, Botánica, Zoología,Meteorología, Mecánica, Agrimensura y Arquitectura Rural. Además se dictaron asignaturas de conocimientos indispensables para el medio. También se impartieron enseñanzas sobre Arboricultura, Cultivo de hortalizas, Floricultura y Botánica. 3- D. F. Sarmiento en la Presidencia de la Nación: Desde su labor de Presidente de la Nación Argentina Sarmiento se preocupó por fomentar el desarrollo de actividades agrícolas y ganaderas, en este sentido abogó aconsejó por la plantación de nuevas especies vegetales útiles y la introducción de diversos ejemplares arbóreos. Estimuló la importación de semillas de eucaliptos, creó la inspección de maquinaria agrícolas, estimuló el desarrollo de la vitivinicultura, alentó la producción de lanas, fomentó la explotación minera: reglamentó la explotación de las canteras de la isla de Martin García, estimuló la sanción de leyes tales como la otorgación de premios en dinero para quienes descubrieran filones de minerales de carbón,. Ordenó la formación de una colección de productos mineros argentinos, instó a los gobernadores a que formaran museos mineralógicos, fundó el Departamento Topográfico y la Oficina de Ingenieros. En 1871 creó el Departamento de Agricultura. Fomento la inmigración de agricultores europeos. Alentó la inmigración,en 1868 arribaron 30.000 inmigrantes, en 1874, 70.000. Procedió a la organización de la primera exposición nacional de la industria y el comercio que se realizó en Córdoba en 1871. En la misma se consiguió la concurrencia de 2600 expositores.Hizo revisar el código de comercio y alentó la finalización de la redacción del código civil. El sanjuanino era un decidido partidario de fundar y sostener escuelas normales para formar maestros capaces e idóneos.Sobre el tipo de la Escuela Normal de Paraná, a imagen y semejanza de ella, fueron creándose, luego, los institutos de esa clase de enseñanza distribuidos en todo el territorio nacional. Se realizaron los trabajos previos para la fundación y organización de una escuela normal de varones de la ciudad de San Miguel de Tucumán. La administración Nacional de Sarmiento fundó, el 17 de noviembre de 1868, los colegios nacionales de las ciudades de Santa Fe, San Luis, San Salvador de Jujuy, Santiago de l Estero, Corrientes y Rosario. Creó cursos nocturnos en los colegios nacionales de las ciudades de Buenos Aires y Salta. Fundó departamentos de agronomía en los colegios nacionales, establecimientos para formar profesores, escuela de ingeniería de minas en las ciudades de San Juan y Catamarca, quintas normales, colegios de agronomía y agricultura en las provincias de Tucumán, Salta y Mendoza.(CAMPOBASSI,J. Sarmiento y su época) Dotó de museos de mineralogía y colecciones de historia natural a los colegios nacionales de las ciudades de Córdoba y San Juan, y de un laboratorio de Metalurgia al de la ciudad de Catamarca. Proveyó de maquinaria especial a las escuelas de agricultura y agronomía. Sarmiento prestó mucha atención a la enseñanza universitaria superior. Mejoró las dos universidades entonces en funcionamiento. Fundó la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad de Buenos Aires, con la cual se iniciaron los estudios de ingeniería. El 4 de septiembre de 1872 propuso al Congreso de la Nación la creación de la Academia de Ciencias Naturales, a instalarse en la Ciudad de Córdoba con un núcleo de profesores contratados en Alemania por el sabio Burmeister. Entre ellos se contaron los botánicos Paul Gunther Lorenz, iniciador de la enseñanza de la asignatura en el país, y Jorge Hyronimus; los geólogos Alfredo Stelzner, Luis Brackebusch, Guillermo Bodenbender y Oscar Doering; los matemáticos Cristiano A. Vogler y Gustavo Halzmuller; el meteorólogo Oscar Doering; el químico D. M. Stever: el físico Carlos S. Sellark. Pidió a los naturalistas que realizaran investigaciones y exploraciones científicas en nuestro territorio y estudiaran sus especies botánicas y minerales. Solicitó a Gould, el Director del Observatorio Astronómico de Córdoba que confeccionara el mapa del cielo austral. Fruto de esta labor fue la Uranometría argentina editada en 1879 con la descripción de la posición y la magnitud de 7500 estrellas. Fomentó la publicación de libros como la Descripción física de la República Argentina de Burmeister. Estableció que el Departamento Topográfico del Estado confeccionara el mapa de la Republica. Adquirió la colección de fósiles de Augusto Bravard. Aparecieron los diarios La Prensa y La Nación. Dedicó parte de sus esfuerzos a la creación, sostenimiento y desarrollo de las bibliotecas especializadas y populares. Contribuyó a la creación de la Biblioteca Benjamín Franklin de la ciudad de San Juan a la que el sanjuanino regaló todos sus libros. La administración nacional de Sarmiento fundó la Biblioteca del Congreso de la Nación. 4- D. F. Sarmiento y su premonición sobre el rol de la mujer: D. F. Sarmiento admira a la mujer. Nada más vasta que recorramos las páginas de “Recuerdos de Provincia” en las cuales describe a su madre. “Siento una opresión de corazón al estampar los hechos de que voy a ocuparme. La madre es para el hombre la personificación de la Providencia, es la tierra viviente a que se adhiere el corazón como las raíces al suelo…Sabia leer y escribir…ella de solo escuchar mientras por la noche escarmenaba su vellón de lana, resolvía todas las dificultades que a sus hijos dejaban paradas, dando las definiciones de nombres y verbos, los tiempos y más tarde los accidentes de la oración, con una sagacidad y exactitud raras…Su alma, su conciencia estaban educadas con una elevación que la más alta ciencia no podría por si solo producir jamás. Yo he podido estudiar esta rara beldad moral viéndola obrar en circunstancias tan difíciles, tan reiteradas y diversas, sin desmentirse nunca, sin flaquear ni contemporizar…y aquí debo rastrear la genealogía de aquellas sublimes ideas morales que fueron la saludable atmosfera que respiró mi alma mientras se desenvolvía en el hogar domestico.” (D. F. Sarmiento. Recuerdos de Provincia, p.19/32). Sarmiento intuye el rol protagónico que los tiempos futuros le depararán a la mujer. Destaca su capacidad, reconoce la necesidad de su educación. Sarmiento escribió: “…era garantía asegurada por la influencia que ejercen sobre la sociedad de que forma…preciosas semillas de cultura y civilización depositadas en su inteligencia. La educación en las mujeres es en San Juan como en Buenos Aires, una tradición acatada, que muchos otros pueblo carecen.Es un hecho demostrado que la mujer es el único maestro competente de su sexo. Ella sola debe conocer los resortes que mueven esa frágil maquina y que la mano del hombre no debe gobernar; hay una completa inteligencia de sensaciones, necesidades e instintos entre la alumna y la maestra que nada pueda suplir. Una mujer inteligente por el solo instinto y la admirable disposición de su naturaleza, sabe doblegarse hasta la condición del niño, de cuyas pasiones participa su carácter. Una mujer para educar y cuidar a los niños, no necesita haber sido madre, trae consigo el sentimiento de la maternidad y el amor desde la cuna, y posee un caudal de conocimientos instintivos como el de las aves para el cuidado de sus polluelos. Esto lo vemos hasta en las más insignificantes e indefensas como en las gigantes del cielo. Casi todos los seres de la Creación cuidan y educan a sus hijos.” (ACOSTA,V. Una madre ejemplar) Sarmiento publica en El Mercurio (1841), quienes eran las heroínas femeninas que admiraba. Dice que “Madame Roland, símbolo de la Revolución francesa, es la apoteosis de la mujer de nuestros días, aquella mujer policía cabeza del partido de la Gironda que fue llevada a la guillotina, aquella que tuvo palabras memorables y que amó la libertad de la manera más firme y convincente”. El otro modelo romántico que propone es una mujer que, con sus escritos, luchó contra Napoleón Bonaparte; Madame Corina Stael. Sarmiento sostiene que un buen escritor y un buen libro son armas políticas contundentes, refiriéndose a su obra. Corina superior al hombre que ha querido preferir y labrándose a sí misma su dicha y su desaventura ¿no será vaticinio de la futura posición que le depara a la mujer en siglos mas guales entre el fuerte y el débil, entre el hombre y la mujer? El pensamiento de Sarmiento al respecto evoluciona a partir de sus experiencias. El modelo que él buscaba lo encontró en los Estados Unidos, las mujeres que conoció en Nueva Inglaterra precisamente: muy independientes, pero con una moral aprendida en el hogar. Niñas que viven solas, trabajan, estudian más de lo que se les enseña. Pero reconoce que está en Concord, desde Luisa M. Alcott escribió “Mujercitas” (1860), libro que muestra llamativamente la independencia de las mujeres. Sarmiento estuvo allí, visitó a esa gente y admiró a esas chicas, estudiantes entre 18 y 20 años, que pagaban o contraían deudas para educarse. Vio que importancia se le daba en Nueva Inglaterra a la educación y como, a través de ella, estas mujeres conseguían un futuro digno.(SÁENZ QUESADA,La mujer en la Historia) .. En consonancia con las ideas profesadas, luchó por favorecer la educación de la mujer. Bajo su estímulo surgió en San Juan el Pensionado de Santa Rosa para señoritas (1839) dedicado a la enseñanza primaria y secundaria que tuvo como rectora a Tránsito de Oro de Rodríguez (hermana de Fray Justo) y como Director de Estudios al mismo Sarmiento. Ya, en el ejercicio de la presidencia de la Republica, hará las gestiones para que una de las escuelas normales tenga por fin la preparación de maestras. El 15 de febrero de 1873 se matricularon 13 niñas en la recientemente creada escuela para maestras en Concepción del Uruguay, provincia de Entre Ríos. De ese modo, pudo comenzar en el país la formación de un importante magisterio primario. Tal hecho significó además, una trascendental reforma social, con la emancipación espiritual y económica de una gran parte de la población femenina, a la que se le hizo adquirir, por esa vía, una digna jerarquía social y moral.(CAMPOBASSI,J. Sarmiento y su época) II_ REFLEXIONES FINALES Hay, sin duda, un Sarmiento muerto. Hombre de su tiempo, que acogió a lo que las circunstancias le impusieron. Descubrió los interrogantes y las exigencias de su entorno, y respondió a unos y otras con las respuestas y las actitudes que las circunstancias le aconsejaron. Si buscamos en Sarmiento el conjunto de las ideas que expuso frente a todos aquellos problemas, las obras en que cuajaron sus preocupaciones, hallaremos a un hombre de su tiempo, sin más resonancia para nosotros que la que desencadena la admiración de una exigencia combativa que no se sustrajo a los compromisos a que lo obligaba sus propia grandeza. Pero hay al lado de ese, un Sarmiento vivo. Ese cuya imagen se ofende cada día y cuya memoria se reivindica cada día, porque no para tocarlo ni para defenderlo pensaríamos tanto en él si no descubriéramos que es algo vivo ,que está unido a nuestra propia existencia. Y ese Sarmiento vivo no es el de sus obras ni el de sus ideas, sino en el impulso creador, capaz de suscitar no solo esas obras e ideas que creó, sino otras muchas, para su tiempo y para otros tiempos, en sus circunstancias y en las que se presentan renovadas cada día. Porque Sarmiento está unido a la idea de cambio y al desdén de la maraña de intereses y prejuicios que suelen ser considerados indiscutibles o sagrados. Y por esa actitud sobrepasa a su propia obra y se asocia a todas las obras de quienes se aprenden en su ejemplo.(BOTANA,N. Los nombres del poder) Partidario de una doctrina progresista y liberal, partiendo de la certidumbre de que el hombre puede imponerse a las dificultades que su medio, circunstancias, época y realidad le presentan, obró en consecuencia. En su paso por San Juan deja las instituciones, la formación de recursos humanos, el ordenamiento jurídico. La Quinta Normal ha desempeñado un papel preponderante en la industria madre de la provincia, pues de ella han egresado los técnicos que han orientado la vitivinicultura, posteriormente se le anexó la Escuela Agronómica y en 1939 tomo el nombre de Escuela Nacional de Fruticultura y Enología que ha permitido cumplir con eficacia sus actuales funciones como instituto superior de enseñanza técnica, agrícola e industrial en la Provincia. La importancia de la estructuración de un país naciente, tuvo mucho que ver con la obra de D. F. Sarmiento, porque partió desde la firme convicción de que la educación y la economía, deberían modelar al pueblo, venciendo al desierto, favoreciendo la diversificación agrícolaindustrial, inculcando la innovación y desarrollo tecnológico, educando para el mundo del trabajo con continuidad, dirección con unidad y perseverancia de acción. El legado de D. F. Sarmiento implica una herencia colosal que pesa sobre las nuevas generaciones encargadas de custodiar celosamente una doctrina de libertad-educación públicadesarrollo económico, como factor de evolución civilizadora de los pueblos. D. F. Sarmiento no solo se preocupó en su planificación estructural de la educación formal, sino de la educación no formal, a través de la importancia atribuida al Club Industrial, traducciones de textos extranjeros para capacitación y perfeccionamiento, intercambio con especialistas extranjeros, Asociaciones Cooperadoras que apoyen a la actividad Educativa Agrícola e Industrial, bibliotecas populares especializadas, etc. La primera Ley nacional de enseñanza agrícola con que ha contado el país, se debe también al espíritu, creación y a la visión profunda de las necesidades argentinas que advirtió D. F. Sarmiento. Entiende que la industria agrícola continuará siempre contenida en su desarrollo por prácticas rutinarias, hasta que no se divulguen los conocimientos que deben servirle de base y se propone formar hombres con la instrucción necesaria que sean capaces de dirigir las explotaciones agrícolas. Queda así elaborado el plan para la enseñanza profesional y práctica de la agricultura por Ley del 24 de Septiembre de 1872.(MUGGIANI,M. La Escuela de Fruticultura y Enología) La escuela Nacional de Minas tuvo su antecedente lejano en la Cátedra de Mineralogía anexa al Colegio Nacional que D. F. Sarmiento organizara en 1869. En 1871 se crea el Departamento de Minería. Se transformó en una escuela especial para ingenieros en Minas. En 1876 se convirtió en Escuela Mixta de Ingenieros Civiles y de Minas. En 1897 se dispuso que la escuela expandiera títulos de Ensayador, Agrimensor y el de Ingeniero de Minas. Transcribimos a continuación los propósitos de la Escuela de Minas: “La Escuela Nacional de Minas tiene por objeto a) formar personal apto para dirigir los trabajos de explotación de minas y de las usinas metalúrgicas, b) ejecutar los análisis, ensayos y todas aquellas operaciones que puedan ayudar al progreso de las industrias determinando en lo posible los tratamientos metalúrgicos y las preparaciones mineras que más convengan a los minerales de la República, c) fomentar una biblioteca, museos y gabinetes consagrados a la minería y a las industrias químicas propias del país”(PEÑALOZA DE VARESSE,C. La Escuela de Minas e Industrial D.F.Sarmiento. pág.16) En 1931 la Escuela Nacional de Minas de San Juan se transformó en la Escuela de Minas e Industrial, en 1939 pasó a depender de la Universidad Nacional de Cuyo. En 1973 la escuela fue incorporada como institución dependiente de la Universidad Nacional de San Juan. Los propósitos de D. F. Sarmiento fueron simiente de futuros proyectos de desarrollo provincial. A través de la educación, sus ideas adquirieron su permanencia en la historicidad. La Quinta Normal y la Escuela de Minas fueron creadas siendo el testimonio material que la memoria histórica y popular mantiene hasta hoy. La tenaz preocupación de Sarmiento por la educación de la mujer contenía una visión premonitoria acerca del rol que desempeñaría en años venideros. En este sentido y, en un pos de rescatar los aportes de San Juan a la construcción de la Nación, recordamos una de las reformas que contuvo la Constitución Provincial de 1927. Esta reforma constó de dos aspectos: por un lado se amplió la base, al concederle a la mujer el derecho de sufragio para las elecciones provinciales. Por otro lado se universalizó el voto municipal, aunque las mujeres contribuyentes tuvieran ese derecho. “ Artículo 34 Son electores con derecho a participar en todos los actos electorales los ciudadanos argentinos nativos o por naturalización, de ambos sexos, mayores de 18 años y domiciliados en la provincia. Articulo 140: Inc. 4° Los miembros de las municipalidades serán elegidos directamente por el voto de los electores de ambos sexos, mayores de 18, que residan en el distrito y que no hayan incurrido en causa legal de interdicción.”(RAMELLA DE JEFFERIES,S. El Radicalismo Bloquista) En Abril de 1928 votó por primera vez la mujer en San Juan y en la Argentina. Apenas sancionada la Constitución, el poder Ejecutivo comisionó a Eva Arroyo y a la Sra. E. Correa Yanzon, en dos municipalidades y nombró a la Doctora Emar Acosta defensor de menores. La misma fue elegida Representante en 1934.Era la primera mujer que ocupaba una banca de diputado. Paz Peña Zapata fue nombrada Juez de Paz de la Rinconada, Dora Castellano de Merlo, primera Concejal por la capital y Eva Araujo de Collado primer Intendente municipal de Calingasta. San Juan al introducir esta innovación se convirtió en pionera de los derechos políticos de la mujer. Estos se ampliaron en el país, recién después de 20 años por la ley 13010 de 1947. Para finalizar quisiera que nos quedásemos, para la reflexión ,con las palabras y el pensamiento del mismo Sarmiento, cuando escribió sobre sí mismo: “…Nacido en la pobreza, criado en la lucha por la existencia, más que mía, de mi patria, endurecido a todas las fatigas, acometiendo todo lo que creía bueno, y coronada la perseverancia con el éxito, he recorrido todo lo que hay de civilizado en la tierra y toda escala de honores humanos, en la modesta proporción de mi país y de mi tiempo, he sido favorecido con la estimación de muchos de los grandes hombres de la Tierra…espero una muerte corporal, pues la que me vendrá en política es la que esperé y no desee mejor, que fue dejar por herencia millares en mejores condiciones intelectuales, tranquilizado nuestro país, aseguradas las instituciones y surcado de vías férreas el territorio, cubiertos de vapores los ríos, para que todos participen del festín de la vida de que yo gocé solo a hurtadillas. Lanzado repentinamente en la vida pública, en medio de una sociedad que me ha visto surgir en un día……………..Yo he excitado siempre grandes y profundas animadversiones y profundas simpatías. He vivido en un mundo de amigos y enemigos, aplaudido y vituperado a un tiempo…….Es mi vida entera un largo combate que ha destruido mi físico sin debilitar mi alma, acerando y fortaleciendo mi carácter” (GALVANI, V. D. F. Sarmiento, pag. 2 7/28). FUENTES DOCUMENTALES ARCHIVO HISTORICO Y ADMINISTRATIVO DE SAN JUAN. Mensaje de Sarmiento a la Legislatura del 22 de Junio de 1862. Sección fondo histórico. ----------------------------------Correspondencia entre D. F. Sarmiento y F. I. Rickard, Serie Misceláneas,carpeta N° 21, Cartas 2481, 2487 y 2501. FUENTES BIBLIOGRÁFICAS ALVAREZ, Florencio. Sarmiento Agricultor. San Juan, CEYLAN, 1938. ARCHIVO DEL GENERAL MITRE. Cartas de Sarmiento del 20 de Septiembre y el 11 de Diciembre de 1861. Bs. As. Biblioteca de la Nación, 1910, tomo XII. 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