Revistas mexicanas de Comunicación y su aportación a la divulgación científica de la disciplina José Antonio Meyer Rodríguez Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla [email protected] María Belén Fernández Fuentes Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla [email protected] En México la producción de revistas periódicas sobre comunicación, medios masivos, periodismo y publicidad se origina y desarrolla primordialmente en el campo profesional. Sin embargo, poco a poco los esfuerzos académicos de divulgación del conocimiento científico se han multiplicado e incorporado a las estrategias de proyección y sustentabilidad de diversos grupos de investigación. A todas ellas les ha unido un interés genuino por abrir espacios de expresión y divulgación, así como el propósito de destacar la importancia que la disciplina tiene hoy a nivel nacional. En tal forma, durante cuatro décadas han surgido y desaparecido publicaciones impresas y electrónicas que han servido de eslabón e integración entre las comunidades académicas, los estudiantes de licenciatura y posgrado del país y los diversos grupos de profesionales. En la actualidad, puede hablarse de tres tipos de revistas presentes en el entorno mexicano. Las propiamente académicas, que centran sus reflexiones en las disertaciones teóricas y los reportes de investigación, las intermedias, que combinan ensayos teóricos sobre temas de coyuntura con análisis periodísticos de profundidad, y las profesionales, que buscan informar sobre los fenómenos comunicativos y generar opinión al respecto. El creciente número de revistas comprende órganos de muy diverso carácter, contenido y nivel de especialización. Algunas de ellas cuentan con una periodicidad más o menos regular, mientras que otras tienen una edición discontinua. En tal sentido, existen algunas que se destacan sobre el resto por su alcance y reconocimiento internacional, la calidad de los artículos, la experiencia de los autores seleccionados, el tratamiento y profundidad de los temas o la continuidad y el cuidado de la edición. En cierta medida, estas revistas llenan un vacío que anteriormente era cubierto por los journals editados en Estados Unidos y Europa. Para Jones (2006), una característica esencial de las revistas mexicanas es que se centran en fenómenos nacionales, dejando casi siempre de lado los de carácter continental. Dentro de esta perspectiva localista, “se abordan tardíamente temas que política, económica o culturalmente son de interés estructural. Lo más significativo es que se publican escasos artículos de índole teórica o metodológica. Los temas más comunes suelen ser los que abordan cuestiones de tipo ideológico o aspectos parciales de la estructura mediática, así como la dependencia cultural, la cultura popular y, últimamente, las nuevas tecnologías aplicadas a la comunicación”. Ante ello, surge la necesidad de investigar el surgimiento y desarrollo de las revistas y su correspondencia con las necesidades académicas de instituciones y grupos de investigación. De igual forma de caracterizar a las revistas de mayor impacto a fin de establecer sus indicadores más relevantes. Finalmente, se plantea la necesidad de la incorporación de ellas a sistemas de bibliometría internacional que den mayor visibilidad a sus aportaciones y permitan una mayor proyección de sus autores.