Arrepentimiento y Conversión Soteriología: Doctrina de la Salvación El Arrepentimiento, Conversión, y Regeneración Por David Cox ¡Error! No se encontraron elementos de tabla de contenido. Introducción Arrepentimiento es una doctrina que es muy abusada en nuestro día. Es algo ofensivo y difícil en un día que ofensas abundan, pero casi nadie tolera ofensa religioso donde alguien le dice que su vida, conducta, y actitud está mal. Igualmente arrepentimiento es de pasar por una dificultad personal y espiritual, muy estrecho a lo que Dios exige y lo que ningún ser humano quiere, en un día cuando toda nuestra vida es como quiero, instantáneo y fácil, sin labor y esfuerzo. Este explica porque cristianismo en nuestro día no tiene el poder y fuerza espiritual de siglos pasados. Solamente podamos ver tales grandes hombres de Dios y desear ser de su estatura. Mientras “arrepentimiento” describe la manija de la puerta de la salvación, la “conversión” es la mera puerta, todo con marco y todo. Conversión describe el evento que arrepentimiento empezó. I. Introducción La verdadera conversión es más que una actitud de solamente alcanzar el cielo haciendo lo mínimo de tu parte, sino es un cambio total donde la persona verdaderamente busca a agradar a Dios por su carácter y conducta, por sus acciones y actitudes. A. Relación entre Arrepentimiento y Conversión Arrepentimiento y conversión son dos lados de la misma moneda. Arrepentimiento es lo que dejaste, y conversión es lo que persigues. B. Los aspectos de conversión Conversión tiene tres aspectos: (1) de la mente – donde ves tu vida vieja como pecado, que te deja el sentir de culpable, sucio, y impotente. (2) de las emociones – donde sientes lastima por lo que has hecho en contra de Dios, y en contra de la persona y carácter del Espíritu Santo quien obra y lucha adentro de ti para hacerte santo, aun que a veces en contra de nosotros. (3) un elemento de la voluntad donde decides del corazón y alma de tener un diferente propósito en tu corazón y vida de dejar el pecado, buscar el perdón, y cumplir con justicia, lo cual es de hacer lo debido delante de Dios. C. Relación entre Fe y Conversión. D. Regeneración en relación de los demás. Regenerarse es un concepto de nacer pero segunda vez, o de nacer de otra manera diferente de que naciste la primera vez. Las cosas viejas ahora son diferentes, nuevas. -1- Arrepentimiento y Conversión II. Definiciones del Arrepentimiento y Conversión. A. Palabras en el Antiguo Testamento i. Nacham [5162 ~x;n" nacham] Definición Strong – de sentirse lastima, de consolarse, arrepentir. De se movido a lastima, tener compasión sobre alguien. De consolarse a sí sobre algo. BDB - De aliviarse por consolación. Usado sobre un caballo cuando respira fuertemente para recuperarse. Usado cuando uno tiene compasión hacia a otros, o con uno mismo, siente pena o lastima por lo que uno mismo ha hecho. De consolarse sobre una situación para que sea más aliviado. Dios [nacham] Núm 23:19 – Dios no es hombre para que mienta… para que se arrepienta. Él dijo, ¿no hará? Habló ¿Y no lo ejecutará? 1Sam 15:29 – Gloria de Israel no mentirá ni se arrepentirá, porque no es hombre para que se arrepienta Gen 6:6-7 – Dios sobre el pecado del hombre -> diluvio. Exo 32:12 – Moisés a Dios de rescatar a Israel para matarles en el desierto. Exo 32:14 – Dios se arrepintió del mal que dijo que había de hacer a su pueblo. Deu 32:36 – Jehová juzgará a su pueblo, y por amor de sus siervos se arrepentirá 1Sam 15:35 – Jehová se arrepentía de haber puesto a Saúl por rey sobre Israel 2Sam 24:16 – Jehová se arrepintió de aquel mal -> detuvo el ángel de destrucción Jer 26:3 – Jehová “me arrepentiré del mal que pienso hacerles… si no me oyereis” (26:4) Analisis sobre [nacham] usado con Dios Primero tenemos que recordar que las Escrituras nunca nos presentan contradicciones sin posibilidad de resolverlas si entendemos bien las cosas. Primero la Biblia afirma que es imposible que Dios “se arrepienta” por que Dios es Dios. No peca, y no falta poder de ejecutar lo que intenta, ni falta omnisciencia y sabiduría de decidir bien en primer plano. Habiendo dicho esto, claramente la Biblia dice que Dios arrepintió de cosas que hizo. Entonces primero tenemos que entender que hay usos de esta palabra en que no se trata de pecado sino un cambio en la disposición de una persona hacia algo. Es una diferencia en como la persona recibe acciones o eventos. También la palabra (según contexto) puede significar “de consolarse a uno mismo”. Es valido en unos pasajes de sustituir esta traducción para “arrepentirse”. Parte de nuestra discusión aquí toca los atributos y esencia de Dios. Dios es inmutable, pero ¿puede Dios cambiar en una forma y mantenerse inmutable? Sí. Inmutable habla de carácter, no de acciones y emociones. Simplemente puesto, unos teólogos ponen Dios en un estado de “inmutable” en que tratan de decir que es imposible para Dios de actuar, de sentir -2- Arrepentimiento y Conversión emociones, o de ser como seres humanos en vivir. Actualmente, Dios no es como seres humanos, sino que los seres humanos son hechos en la imagen de Dios.1 Entonces hay dos conceptos aquí para arrepentimiento. Uno es puro en qué Dios puede hacerlo, que se trata de cambiar su relación y acciones hacia a alguien como cuando Dios arrepintió de haber hecho Saúl rey de Israel. Su cambio de disposición hacia Saúl (1Sam15) era adentro de la personalidad de Dios como persona de actuar. De este punto en adelante Dios no vio o actuó hacia a Saúl como antes. Las promesas de Dios son condicionales, y aquí Saúl fue juzgado de no haber andado en el camino de Dios, y la disposición de Dios hacia Saúl cambió como de día a noche. Los principios morales, la forma de ser de Dios (bendecir y maldecir de base de nuestra conducta y actitud) nunca ha cambiado. Las sentencias de Dios sobre el pecado no va a cambiar excepto con la excepción que Dios mismo propuso desde el principio (la muerte de Jesucristo). Aquí tenemos que ver que Dios actúa en varias maneras. Primero Dios nos enseña lo que es su gusto, su voluntad, para que nosotros podamos buscarlo y cumplir con ello por voluntad propia, y no porque Dios está esforzándonos. ¡Qué lastima que casi nadie busca sin obligación o presión por Dios de cumplir con su voluntad! Pero luego Dios expresa más fuerte su voluntad por la forma de mandamientos y ordenes directos. Aun en esto hay misericordia de parte de Dios. Pero luego llega el tope, y Dios pronuncia una sentencia de condenación en contra de los rebeldes. De allí entramos no en Dios queriendo movernos suavemente a su voluntad, sino el Rey de reyes haciendo un edicto, o un juramento. De allí, no hay remedio. Al final del siglo, los ángeles de Dios ejecutarán sus sentencias. Malaquías 3:6 Porque yo Jehová no cambio; por esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos. Entonces ubicamos pasajes como Malaquías 3:6, Números 23:19; 1Samuel 15:29, etc. en la sentencia en que no hay remedios. Salmo 132:10-12 Por amor de David tu siervo No vuelvas de tu ungido el rostro. 11 En verdad juró Jehová a David, Y no se retractará de ello: De tu descendencia pondré sobre tu trono. 12 Si tus hijos guardaren mi pacto, Y mi testimonio que yo les enseñaré, Sus hijos también se sentarán sobre tu trono para siempre. Entonces vemos estos elementos muy claros, que Dios da promesas y amenaza con castigos siempre con condiciones de obediencia o por resultado de rebeldía. Pero en todo esto, llega a un punto de no volverse, en que la sentencia del Rey sale, y condenado está. Entonces el problema de que Dios se arrepienta, no gira alrededor de que en una forma Dios tiene pecado. Pecado es definido como algo en contra de la voluntad de Dios, y Dios no puede actuar en contra de sí mismo, en contra de su propia voluntad. Lo que se trata es Antropomorfismo – (de las palabras “hombre” y “forma”) es cuando la Biblia habla en una forma para que entendamos conceptos más profundos de Dios, por ejemplo, los ojos del Señor (1Pedro 3:12), el brazo de Jehová (Juan 12:38). No es que quiere decir que Dios tiene ojos o un brazo como un ser humano, sino que describe en una forma muy entendible la vigilancia o poder de Dios. Antropoatismo – (de las palabras “hombre” y “sentir” o “emoción”) es otra figura oratoria donde emociones humanas son atribuidos a Dios. De decir que Dios arrepintió o sintió lastima son ejemplos. Significa que la conducta de los seres humanos envueltos no llegó al agrado de Dios. 1 -3- Arrepentimiento y Conversión que Dios se cambia en su trato y disposición a un ser humano por el pecado y desobediencia de esta persona a Dios. Esto tampoco se trata de un defecto o debilidad en Dios en escoger las opciones correctamente desde el principio. Dios escogió a Saúl en respuesta a la existencia del pueblo de Israel. Escogió lo que el hombre ve como lo mejor candidato humano para la posición (alto, impresionante, guapo), aunque Dios supo que lo mejor rey para Israel era un niño todavía en este momento. No era una equivocación de parte de Dios sino un trato de enseñar espiritualmente algo al pueblo de Israel, y a todos lo demás después. Dios no hizo una decisión no sabia en escoger Saúl, sino que Dios supo como hacer el punto espiritual con los seres humanos. A fin de cuentas tenemos que dejar Dios libre. Si Dios no amenaza el castigo a los rebeldes, entonces ¿Qué tipo de Dios será? ¿Qué tipo de Rey será? De otro lado, si castiga sin avisarnos, o sin dejarnos tiempo de responder correctamente, igualmente será injusto de parte de Dios. O sea, Dios tiene que hablar fuerte, diciendo claramente que si no te haces tal y el otro, esta va a pasarte. Estos castigos y bendiciones que Dios nos presenta siempre gira alrededor de nuestra respuesta a las promesas y amenazas a Dios. Si respondemos, entonces Dios tiene que cumplir según sus promesas o amenazas. Entonces las acciones de Dios a fuerzas tiene que cambiarse hacia a nosotros, o Dios no cumplirá con su palabra. Pueblo [nacham] Exo 13:17 – el pueblo de la guerra enfrente de ellos -> regresar a Egipto. Jue 21:6 – hijos de Israel sobre la situación de Benjamín -> encontraron esposas Analisis sobre [nacham] y hombres humanos ii. Shuwb [7725 bWv shuwb] + lebab [3824 bb'le lebab] Deu 30:1 – el pueblo de ver la bendición y maldición de Dios -> te convirtieres y obedecieres a su voz (30:2). iii. Dios y el arrepentimiento B. Palabras en el Nuevo Testamento i. Metamellomai ii. Metanoia III. Ubicación en relación a la Salvación. A. Importancia del Arrepentimiento y una Conversión Verdadera Podamos decir que un arrepentimiento o conversión verdadero es simplemente uno en que la persona de veras llega a ser salvo. Hay un falso arrepentimiento, igualmente una falsa conversión, que son un producto de una persona quien quiere ir al cielo, pero no quiere pagar el precio personal de dejar su pecado. -4- Arrepentimiento y Conversión B. Arrepentimiento falso Verdadero arrepentimiento - La persona que de veras se arrepienta, es preocupada sobre sus propios pecados, y el significado de estos pecados en su relación con Dios. Esta persona ve que él mismo ha hecho maldad delante de Dios, en contra de la santidad de Dios. Esta persona deja el pecado para no andar en ello jamás. Lamenta que merece el castigo, que ha hecho algo en contra de Dios quien ama. Sus esfuerzos son dirigidos hacia no caer de nuevo. Su vista hacia el pecado es que en sí, es una gran maldad, de ser odiado, aborrecido, y alejado de ello a todo costo. Esta persona ve que el pecado en sí, aun que Dios le castiga o no por ello, es algo malo, que hace peor su vida. Falso arrepentimiento - La persona que tiene un falso arrepentimiento es preocupada sobre las consecuencias y castigos de su pecado, y como evitar estas consecuencias y castigos. No se preocupa tanto en actualmente quitarse los pecados de su vida realmente. Esta persona admite que ha sido agarrado en el mero hecho de pecado, y entendiendo a la omnisciencia de Dios, lo admite, pero no rechaza lo que ha hecho porque lo haría de nuevo cuando se presenta la oportunidad, especialmente si piensa en una forma de hacer sus pecados y evitar las consecuencias. Su lastima y pena es que le agarraron culpable, no que ha hecho lo que es pecado y ofensa en los ojos de Dios. Como un prisionero en un reclusorio, lamenta el hecho que le agarraron, pero lo haría de nuevo, tal vez más astutamente si se presenta la oportunidad. Considera que la ley que está en contra de su pecado es injusta, o que simplemente él es arriba de esta ley. Desprecia la ley. Su esfuerzos son dirigidos hacia no ser agarrado públicamente en pecado de nuevo. Su vista hacia el pecado es que es algo no agradable, especialmente cuando alguien lo descubre en ti y esto públicamente, pero en sí el pecado tiene algo atractivo para él. Sienta violado que este placer le ha sido prohibido. Además, el que tiene el verdadero arrepentimiento parece de tener dos características que va con este arrepentimiento, o mejor dicho que es parte de ello. Primero, se preocupa de sus pecados secretos adentro de sí que nadie sabe menos él y Dios. Salmo 51:3 “Mis pecados están siempre delante de mí.” Salmo 38:4 Porque mis iniquidades se han agravado sobre mi cabeza; Como carga pesada se han agravado sobre mí. Le pesan horriblemente su vida interior que nadie va a fijar o saber, pero a él sí le pesan. Segundo, esta persona está muy conciencia de pecados de omisión, no solamente lo que no debe hacer y lo hizo, sino también le pesa lo que faltó de hacer por que su relación con Dios le obliga de hacer. Lutero dijo, “mi pecado me plague, no me deja descansar, no hay paz; ni modo que como o tomo, duermo o me despierto, siempre estoy en terror de la ira y juicio de Dios.” Este reconocimiento constante de la presencia y maldad de mis pecados puede tomar la forma de lastima sobre un pecado en particular, como Pedro negando al Señor, o Pablo quitando la vida de los santos, pero siempre se extiende a los demás. El verdadero arrepentido establece su odio y rechazo a todos sus pecados, lo que sea. El que verdaderamente se arrepienta del pecado, se arrepienta de todos sus pecados. -5- Arrepentimiento y Conversión Otra característica del verdadero arrepentimiento es la falta total de preocuparse de su propia humillación. O sea, se humilla delante de Dios y los demás, y no hay extremidades en hacerlo. Job 40:4 He aquí que yo soy vil; ¿qué te responderé? Mi mano pongo sobre mi boca. Salmo 69:5 Dios, tú conoces mi insensatez, Y mis pecados no te son ocultos. Isaías 64:6 Si bien todos nosotros somos como suciedad, y todas nuestras justicias como trapo de inmundicia; y caímos todos nosotros como la hoja, y nuestras maldades nos llevaron como viento. Salmo 130:3 JAH, si mirares a los pecados, ¿Quién, oh Señor, podrá mantenerse? Salmo 51:1 Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; Conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones. O sea, la persona quien admite su maldad y defecto en pecar, no lo hace con reservas, pensando y cuidando como se presenta a sí mismo delante de Dios o los demás, tratando de preservar su dignidad y estado o buen testimonio delante del mundo. Humildad que va envuelto en arrepentimiento es algo que no preocupa lo que los demás piensan de sus pecados o confesiones de pecado. Esta persona salva se preocupa extremadamente en arreglar lo malo delante de Dios. Igualmente nunca vas a encontrar esta persona con el verdadero arrepentimiento jactándose sobre su vida anterior o sobre sus pecados y la vida depravada en que ha llegado. Le da mucha pena de hablar de estas cosas, y no quiere aun por pasar por sus labios que regresa a ellos. Esdras 9:6 y dije: Dios mío, confuso y avergonzado estoy para levantar, oh Dios mío, mi rostro a ti, porque nuestras iniquidades se han multiplicado sobre nuestra cabeza, y nuestros delitos han crecido hasta el cielo. Ezequiel 43:10 Tú, hijo de hombre, muestra a la casa de Israel esta casa, y avergüéncense de sus pecados; y midan el diseño de ella. Ezequiel 16:60 Antes yo tendré memoria de mi pacto que concerté contigo en los días de tu juventud, y estableceré contigo un pacto sempiterno. 61 Y te acordarás de tus caminos y te avergonzarás, cuando recibas a tus hermanas, las mayores que tú y las menores que tú, las cuales yo te daré por hijas, mas no por tu pacto, 62 sino por mi pacto que yo confirmaré contigo; y sabrás que yo soy Jehová; 63 para que te acuerdes y te avergüences, y nunca más abras la boca, a causa de tu vergüenza, cuando yo perdone todo lo que hiciste, dice Jehová el Señor. Humildad es en el corazón de cada salvo. La falta de humildad, sea simplemente que no tiene humildad, o sea que se va al extremo de ser orgulloso, jactancioso, soberbio, etcétera, estas cosas indican un corazón que desconoce el arrepentimiento y la salvación. Aun que Dios puede encontrar lugar de perdonar y olvidar de los pecados de un salvo, esta persona salva nunca puede olvidar de sus pecados y andar con orgullo como nunca ha pecado. Le pesan sus pecados aun que están bajo la sangre de Jesús. C. Conversión falsa IV. Necesidad del Arrepentimiento -6- Arrepentimiento y Conversión V. Elementos que produce arrepentimiento A. Lo bueno de Dios, de Su trato para con nosotros. Mucha gente piensa que el castigo de Dios produce arrepentimiento. Esto no es cierto. Noé después de haber visto la destrucción del mundo, se emborrachó. Lot igualmente. Castigo y juicio no causa arrepentimiento entonces. Romanos 2:4 ¿O menosprecias las riquezas de su benignidad, paciencia y longanimidad, ignorando que su benignidad te guía al arrepentimiento? Lo que causa arrepentimiento es la bondad, paciencia, y longanimidad de Dios. Castigo y juicio da la impresión de dureza, y que es imposible de encontrar el perdón. Pero lo bueno del corazón de Dios es lo que causa la persona de ver que no tiene razón de seguir en su pecado y rebelión en contra de Dios. Zacarías 12:10 Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito. Entonces la abundante fuente de donde viene el arrepentimiento es de ver a la aflicción de Dios por tus pecados. Él sufriendo por ti, para que tú no tengas que sufrir. Viendo y comprendiendo, y meditando sobre la crucifixión de Jesús es lo que motiva el cristiano de dejar de pecado. ¿Cómo puedes aumentar al sufrimiento de tu Salvador, quien amas tanto? Para la persona que puede contestar esto con pecado fácilmente, no hay amor en su corazón para Dios, y no hay salvación para él. Importancia de la Fe Fe en Dios a fuerzas tiene que ir mano en mano con la conversión, arrepentimiento, y regeneración. Hasta la Biblia casi los trata todos como la misma cosa. Uno tiene relación intima con los demás. B. La Palabra de Dios provoca arrepentimiento. Jeremías 23:29 ¿No es mi palabra como fuego, dice Jehová, y como martillo que quebranta la piedra? La palabra de Dios, especialmente predicado por un siervo de Dios quien tiene un excelente testimonio de pureza y obediencia en su propia vida es una de las fuerzas más eficaces para producir el arrepentimiento. C. Oración de los fieles de Dios. D. Tiempos de avivamientos de Dios. E. Meditación sobre nuestras propias vidas. Jeremías 8:6 Escuché y oí; no hablan rectamente, no hay hombre que se arrepienta de su mal, diciendo: ¿Qué he hecho? Cada cual se volvió a su propia carrera, como caballo que arremete con ímpetu a la batalla. -7- Arrepentimiento y Conversión F. Reconocimiento de la severidad y maldad de nuestros pecados. VI. Elementos que no produce el verdadero arrepentimiento. A. Presión por evangelistas y pastores. Tal vez una de las cosas que ha causado más daño en nuestra generación es la falta de entendimiento de arrepentimiento de parte de pastores y evangelistas. Muchos son muy carnales, y piensan que ellos pueden presionar externamente a su iglesia de manifestar “arrepentimiento” y en hacer esto, reciben los beneficios del arrepentimiento. Desafortunadamente, no es así. Vale la pena de mencionar varios de ellos. i. El banco de los apenados. Esto toma dos formas. Primero es un físico banco en frente de la iglesia donde las personas (“apenados por sus pecados”) vienen después de un servicio de exhortación, se rodilla para orar y arrepentirse delante de Dios. El problema con esto es que el arrepentimiento verdadero no tiene tanta la vista en nuestros prójimos que delante de Dios. Qué millares han ido a orar y llorar allí, jurando de no pecar más para caer de nuevo en lo mismo. Llega a ser una burla delante de Dios, en la casa de Dios, en el tiempo solemne que debe ser dedicado a Dios. Hay pastores que les gustan esto y buscan esto, y cultivan a sus congregaciones para que siempre hay una invitación a venir adelante, y siempre hay personas rodilladas y orando, mejor si están llorando. Pero no vemos en las Escrituras que Jesús o sus discípulos hicieron invitaciones a venir a un lugar físicamente, sino espiritualmente, “venid a Dios.” La veracidad de cualquier decisión espiritual siempre es entre Dios y esta persona, y será vista muy visiblemente por una vida sin pecado. Tenemos que insistir que esto es lo bíblico, y esto es la única cosa aceptable. No es que no tenemos invitaciones o que no exhortamos con todo corazón que la congregación se entrega a Dios, sino éxito para nosotros no tiene nada de ver con personas levantando manos en una invitación, o personas caminando los pasillos, sino con vidas cambiadas, personas viviendo victoriosamente para Dios. Lo que se ve o lo que debemos tratar de medir es menos pecado, no manifestaciones externas que no tiene que ver con menos pecado. ii. Buenas obras para cubrir las malas. Aquí vemos que entre unos, la idea es que espiritualidad y avivamiento tiene que hacer con obras espectaculares. Una iglesia tuvo un maratón de sus jóvenes leyendo la Biblia sin parar por 4 días (siempre uno entre ellos leyendo). Los demás dormían, hablaban, o paseaban los corredores de la iglesia mientras que quien que lo tocó estaba leyendo. Entraron en libro de Guiness. Pero ¿A quién piensan engañar? ¿A otros ignorantes y espiritualmente bancarrota como ellos? Lo que vale reconocer es siempre que las personas dejan de pecar (santidad), no buenas obras para cubrir sus suciedad como los fariseos. VII. Fruto o evidencias del verdadero arrepentimiento. -8- Arrepentimiento y Conversión Job 34:32 Enséñame tú lo que yo no veo; Si hice mal, no lo haré más. El punto en el arrepentimiento y la conversión es que el verdadero cristiano se dedica su vida enteramente a la santidad delante de Dios. Esto es el fruto o evidencia principal del arrepentimiento verdadero, de la verdadera conversión. Aquí necesitamos entender que confesión bíblica no es un simple reconocimiento de haber hecho algo, sino es una declaración de abandono total. Quien que no abandona a su pecado que confiese, no está haciendo nada delante de Dios. Admisión es tonta si estás informando a Dios porque Dios ya sabe todo, y no necesita tu admisión para saberlo y para convencerte de culpable delante de la corte celestial. Lo que Dios indica en confesión es que tú admitas para abandono total. Esto es lo que la Biblia tiene en mente cuando menciona frutos dignos de arrepentimiento. A. Profunda humillación y sentir pequeño y malo delante de Dios. B. Pena y lastima sobre lo que has hecho. C. Odio y aborrecimiento de uno mismo. D. Vergüenza y confusión. E. Abandono total y extrema de los pecados. F. Alta energía y esfuerzo para ser santo por medio de la ayuda y fuerza del Espíritu Santo. G. Deseo y cumplimiento de entender la voluntad de Dios para no violarla. VIII. Conversión es el cambio que Dios te ha hecho. A. Dios es el autor de la conversión. Hechos 5:31; 11:18; 2 Ti 2:25; Dios controla el arrepentimiento en el hombre. La obra de Dios en dar al hombre arrepentimiento, o una versión más amplia y extensiva, es llamada avivamiento. B. El hombre coopera en la conversión. Isa 55:7; Hechos 17:30; C. La conversión es necesario. Eze 33:11; Mat 18:3; Hechos 17:30 – Dios manda a todos al arrepentimiento. Bibliografía Brooks – Saving Repentance. Clarke – Christian Theology, Ch 7 Repentance -9- Arrepentimiento y Conversión Colquhoun – Evangelical Repentance Dabney – Manual of Theology, Chapter 24 Repentance Dagg – Manual of Theology, Book 4 Chapter 1 Introduction—Duty of Repentance Darby – Sermon: “On Repentance” Dickinson – Truth’s Victory over Error, Chapter 15 Of Repentance Durham, James – Repentance Finney, Charles – Sermon: “How to Change your Heart”. Finney, Charles – Sermon: “How to Overcome Sin”. Finney, Charles – Systematic Theology 1851 Chapter 53 Repentance and Impenitence Graham, Billy – Peace with God Haldane, James – Sermon: “Doctrine and Duty of Self-Examination” Hodge, Alexander – “Westminster Confession of Faith”, Chapter 15 Repentance unto Life Ironside – Except Ye Repent Kennedy, John – Hyper-Evangelism: Another Gospel, though a Mighty Power Kuyper, Abraham – Calling and Repentance -10-