EL FUTURO DE CHILE LA VISIÓN DE UN EMPRENDEDOR EN 1915 El futuro de Chile CENTRO D E EST U D IOS B I C ENT EN A R IO CH IL E 1 s 1 _o - 1 g 1 o - 2 o 1 o La visión de un emprendedor en 1915 CIP - Centro de Estudios Bicentenario Roger W. Babson Babson,Roger W. El futuro de Chile /Roger W. Babson; traducción MiriamRabinovich; Juan Pablo Couyoumdjian y CristiánLarroulet,editores. 1.-Babson,Roger W.-2.-Chile- Condiciones Económicas - Siglo 20. 3.­ Chile- Civilización- Siglo 20. l.-Couyoumdjian,Juan Pablo,ed. II.-Larroulet, Cristián,ed. III.-t. CDD 22 330.983 2007 Editores Juan Pablo Couyoumdjian y Cristián Larroulet RCA2 © Centro de Estudios Bicentenario,2007 © CristiánLarroulet- Juan Pablo Couyoumdjian CorreoNº 30 Casilla 189,Vitacura- Santiago- Chile http://www.bicentenariochile.cl [email protected] Derechos reservados ISBN: 978-956-8147-47-l InscripciónRegistro de Propiedad IntelectualNº 163.391 Primera edición,junio de 2007 Fotografia de portada: James Bryce,South America; Obseroations and Impressions L ( ondon,Macmillan and Co.,1912). Diseño de portada: Elena Manríquez Impreso en A ndros Impresores Hecho en Chile / Printed in Chile Ninguna parte de esta publicación,incluido el diseño de la tapa,puede ser reproducida, almacenada o transmitida en manera alguna por ningún medio sin permiso previo del editor. g 11 111 111 ic Universidad del CENTRODE ESTUDIOS BICENTENARIO Desarrolla SANTIAGO 2007 E n 1915y en el contexto de un viaje aSudaméricaRoger W. Babson, empresario y filántropo estadounidense, visitó nuestro país. Los pormenores de este viaje quedaron registrados en su· libro The Future oj South A�erica, 1 el cual fue publicado ese mismo año. En este volumen presentamos capítulos selec­ cionados de esta recolección, deteniéndonos especialmente en las impresiones de su visita a Chile, que es virtualmente desconocida en nuestro país. Dada la selección realizada hemos decidido titular este libro Elfuturo de Chil,e: La visión de un emprendedor en 1915. 2 La mirada que Babson ofrece del. Chile de principios del siglo XX está marcada por su vocación en el mundo de los ne­ gocios y del emprendimiento, y ahí radica su principal mérito e interés. Esta visión es especialmente atrayente por cuanto si bien mucho se ha escrito sobre el Chile del centenario, aquí se ofrece una perspectiva algo diferente, o que por lo menos puede complementar mucho de lo que sabemos de esta época, invitando por ello a una nueva reflexión sobre la situación y 2 Roger W. Babson, TheFuture oJSouthAmerica, (Boston: Little, Brown and Co., 1915). El texto que presentamos ha sido reproducido en versión idéntica a la original de acuerdo a la edición reimpresa del libro TheFuture ofSouth America, publicada por Kessinger Publishing, LLC, el año 2006. Los capítulos que siguen corresponden a los capítulos 1, y a la fusión de los capítulos 12 y 13 de la versión completa de este trabajo. La traducción ha sido realizada por Miriam Rabinovich. 11 Roger W. Babson las oportunidades de nuestro país en ese momento de nuestra historia. Ad portas de que el país celebre el bicentenario de su independencia y considerando que el emprendimiento es un factor fundamental para satisfacer las aspiraciones nacionales para alcanzar el desarrollo, consideramos iluminador lo que un emprendedor por excelencia señaló sobre nuestro país y sus oportunidades. Roger Babson: Emprendedor y Hombre Público Roger Babson, fundador del Babson College en el estado de Massachusetts en Estados Unidos, fue un empresario muy exitoso. En la publicación con motivo de los setenta y cinco años del Babson College se refieren diversos antecedentes sobre el espíritu emprendedor de su fundador. 3 Babson hizo su fortuna en el mercado de valores, estableciendo una em­ presa de información estadística que comenzó a funcionar originalmente en su propia casa. La idea del negocio era la de ofrecer información consolidada sobre el mercado finan­ ciero, estableciendo una suerte de cámara de compensación para información relacionada al mercado de valores, la cual sería vendida a bancos de inversión e inversionistas interesa­ dos en estas materias. Así nació en 1904 Babson's Statistical Organization, Inc., que más tarde cambió su nombre a Business Statistics Organization siendo esta última la predecesora de los Babson's Reports. A pesar de que en sus inicios esta iniciativa no estuvo exenta de dificultades, el negocio parece habers.e consolidado rápidamente; de acuerdo a la información rese3 12 John Mulkern, Continuity and Change: Babson College 1919-1994 (W.E. Andrews Co, Inc, 1995). Disponible en línea en http://www3.babson. edu/Archives/research_publications/college_history.cfm. Los anteceden­ tes biográficos de Babson que reseñamos en esta sección están basados en gran medida en este trabajo. Presentación de los Editores ñada por Mulkem, al cabo de una década la compañía ya tenía ingresos por varios millones de dólares. Así Roger Babson se convirtió en un actor importante en el mundo de los negocios y en un hombre de fortuna. Una vez lograda su independencia financiera Babson pudo aventurarse en núevas actividades. En estricto rigor Babson eligió este camino a la alternativa de retirarse anticipadamente y dedicarse a vivir de sus rentas. En particular un profundo sentido de responsabilidad social le llevó a interesarse en temas educacionales y en la filantropía, Pareciera, en todo caso, que su ingreso al mundo de la educación surgió inicialmente como una actividad netamente emprendedora de negocios de su parte. Cuando un trabajador a quien conoció en alguna opor­ tunidad le confidenció su deseo de alguna vez poder entrar al mercado financiero como vendedor de bonos lamentándose' sin embargo, de su falta de conocimientos y experiencia en este sentido, Babson identificó una oportunidad de negocios y se abocó al diseño de un curso de estas materias por correspon­ dencia. Este negocio, la primera experiencia de un curso por correspondencia sobre la venta de bonos en Estados Unidos' fue un éxito, y fue el primer paso para nuevos emprendimientos de Babson en el mundo de la educación. Babson advertía que en los Estados Unidos de principios del siglo XX había una necesidad de escuelas o universidades privadas especializadas en la enseñanza en las áreas de admi­ nistración y negocios. Los liberal arts colleges tradicionales estaban formando jóvenes con pocas destrezas en el mundo de los negocios. Más aún, en muchos casos estas instituciones parecían más bien clubes selectos donde los jóvenes pasaban el tiempo tranquilamente sin obtener una preparación que realmente les fuera de utilidad en el futuro. Como explica Mulkem, detrás de estas reflexiones de Roger Babson sobre los 13 Presentación de los Editores Roger W. Babson que de un sistema educacional estaban las preguntas generación de jóvenes que i nician inquietan a generación tras versitarios; ¿Qué quiero estudiar al sus estudios técnicos o uni de trabajo me gustaría tener una salir del colegio? ¿Qué tipo vez graduado? objetivos proveyera de D e aquí surgió un plan para una escuela que enes interesados en seguir una educación práctica y ética a jóv sis en formar no carrera en el mundo de los negocios. El énfa ios , sino que también mejores sólo me jores hombres de negoc ponde por una hombres, merece ser destacado. Este punto res ero también re­ parte al espíritu reli gioso de Roger Babson, p undo de forma flejaba su interés de dejar una marca en el m r de lo que era de que éste terminara siendo un lugar mejo ue sus alumnos cuando él empezó a trabajar. Babson esperaba q a favor de un también pudieran formar parte de una cruzada americanas. El capitalismo más benevolente en las empresas un capitalismo compromiso de Babson era en este sentido con s pero a la vez con sus tradicionales características competitiva más humano. educacional El convencimiento de Babson de que un sistema y que además podría producir hombres de negocios exitosos ien común se vio plasmado en estuvieren dedicados a servir al b te establecido en 1919, y que es el Babson Institute, originalmen ge, institución que hasta el día el predecesor de l Babson Colle de se promueve de h oy se caracteriza por una educación don edor de sus alumnos. D urante e incentiva el espíritu emprend o grama de MBA de esta insti­ un largo número de años el pr do en esta tución ha sido considerado como el mejor del mun característica. Es importante explicar e n todo caso que los intereses edu­ cacionales de Babson no se enfocaron únicamente en Babson 14 College, aunque esta fue su iniciativa más exitosa en este sen­ tido. De igual mo do es necesario mencionar que a lo largo de su vida Babson emprendió también muchas otras actividade s tanto en el mundo del emprendimiento y los negocios como en el ámbito público. Su autobiografía, Actions and R.eactions, 4 ilustra muchas de estas actividades que sería largo enumerar aquí. D icho esto, vale la pena explicar que el ánimo que ins­ piraba estas actividades era uno de profundo sentido moral, si guiendo las id e as que habían iluminado e l pro grama de l Babson Institute, y de una profunda religiosidad; es de esta forma que uno se explica el que Roger Babson haya servido en e l Consejo de las Congregation al-Christian Churches , y que fuera candidato a la Presidencia de los Estados Unidos en 1940 por el Partido Prohibicionista. Babson en Sudamérica En el con texto de sus actividades como empre sario , espe ­ cíficamente en su rol de cabeza de los Babson 's Reports, a Roger Babson le tocó viajar al exterior de forma de conseguir suscriptores para estos informes; dentro de estos viajes se in­ cluyen visitas a Europa y a Sudamérica. En su autobiografía, sin embargo, Babson comenta que sólo fue en e l año 1915 cuando llevó a cabo un "verdadero viaje a Sudamérica", el cual realizó acompañado de su familia.5 En es te viaje Babson visitó div ersos países de América Latina, comenzando por Cuba y P uerto Rico siguiendo luego 4 5 Roger W. Babson, Actions and Reactions. Second Revised Ed., (New York: Harper & Brothers Publishers, 1950). Disponible en línea en http:/ /www3. babson.edu/Archives/ research_publications/ roger_babson.cfm. Babson (1950), p. 138. 15 Presentación de los Editores Ro ge r W. Babson , Haití, el Caribe, Panamá, do Santo D omingo n ita s vi r su el a i ac h as do ador, Perú, Bolivia y Chile, p � Venezuela, Colombia, E cu do ahora hacia �l allanes para, viaj an g Ma e d o h ec tr s E por el asil. aguay, Uruguay y Br o a Argentina, Par b rum ir gu se e, t r no su­ th America Babson se refiere Si bien en su The Future of Sou este volumen distintas etapas de su viaj e, en cesivamente a las región y en su visión u mirada global a la s en os am ntr e nc co nos sobre Chile. desde P:rú e por vía marítima Roger Babson ingresó a Chil rsas ciudad�s del pais Y ad de conocer dive id n rtu o p o la o v tu y esidente de la as, incluyendo el Pr reunirse con distintas person iento del país demás del conocim época Ramón Barros Luco. A y de estos encue_ntro�, sus observaciones de r e en bt o o ud p que de la histona a un conocimiento , en su libro Babson demuestr nuestr� pais de s ale i r e m co os j u � y geografía así como de los fl ta ere que se tomo es gi su al cu lo o tod , do n u m l de o est r el con 6 visita muy en serio. mos Babson ofrece sin ambi­ E n la narrativa que presenta sca ne gocios. E l autor bu a de un hombre de ad r mi a _ l es ad ed gü dos erciales entre E sta las relaciones com ex a min ar por qué das en m a!�r an si do desarrol la Unidos y Sud américa no h iere que esta es una . rela�10n medida. Más aún, Babson sug u des potenciales. S erables oportunida donde existen innum ia en nuestro ectos de la vida diar relato acerca de diversos asp acerca de las serie de comentarios país está enmarcado en una de visualiza en diversos sectores, posibilidades de negocios que 6 7 unos e rro res al re�erirs e a a bso n c o mete alg No o bstante e sto s estudio s B ión de 183� fipba un a a que la Co nstituc nuestra historia. Su referenci se nndo . z año s es un ej e�plo en e�te perío do preside ncial de die a e n el Journal d a blic u p o libr a r ese ña de este Es interesante notar que un (Vol. 79, P· 542), correspondie_nte al año 1916 oftheRoyalStatisticalSociety, s. mo del trabaJO que comenta de staca justame nte esta visión 16 la actividad económica nacional. E n este sentido muchas veces su narración se asemej a a u n análisis de las op ortunidades existentes en nuestro país y a una serie de recomendaciones a emprendedores norteamericanos para acercarse al mercado chileno . Pero de la mism a forma Babson reconoce también cierto� riesgos e nvueltos en hacer neg ocios con nuestro país, _ advirtiendo de cie r ta forma a pot encia les empresa rios de Estados Unidos acerca de algunas debilidades que exi;ten en estos ámbitos en Chile. Au nq ue B a bson ac redi ta a est e y ot ros vi aj e s a S ud y Centroamérica a lo largo de esta década su decisión de no recomendar la compra de bonos de países de la región en los años previos a la gran crisis del año 1929 (lo cual, dados los eventos sucesivos, habría de tener importantes efectos sobre sus • negoc10s ) , 8 en e l texto que examinamos Babson presenta una visión optimista de Chile y de la región. En el caso de nuestro país claramente lo presenta como un país de oportunidades para e mprender. Esa mirada contrasta con la sensación de insatisfacción con la cu al Chile re cibió el centenario de s u ind�pendencia. �oger Babson nos ofrece entonces otra opor­ tumdad de exammar las fortalezas y debilidades de la economía chilena a principi os del siglo XX. Babson y el Chile del centenario ¿Existe una disociación entre la visión de Roger Babson de Chile como un país de oportunidades y la percepción reinante e n el ambiente nac ional durante las prime ras décadas del siglo XX en el sentido de que el país presentaba problemas de fondo que revestían el carácter de crisis? Para examinar esta cuestión 8 Babso n (1950), p. 138. 17 Presentación de los Editores Roger W. Babson del ente en un examen enerse cuidadosam t de e tant or imp parece ndab an en las cuales se fu sis y de las causas cri sta e e d e r áct car n. ertidu mbre y desazó estas sensaciones de inc ario ue hacia el centen l a impresión de q do bi sa en bi es o Com da crisis, que en el fondo do en una profun mi a s u stab e l e Chi ctura misma de cia de problemas en la estru reflej aba l a existen os tipos cional, se fundaba en divers la economía y la sociedad na , ej andro Venegas ue Mac-lver y Al riq n E . es on ci ra de i de c ons taristas en este sen­ s cono cidos co men má os l e t en m e bl a b pro inoral la ura de una crisis de tipo 9 ti do, se enfocaron en la fig infelicidad. n generalizada de ció a s sen a un en ía c cual se tradu ición de Mac.;Jver a conocida propos l , o l mp e j e or p , Obsérvese mos felices; se nota e parece que no so "M ue q de do ti en s l en e ciertas de personas ni de es de cierta clase un malestar que no y de la generalidad de los sino de todo el país re giones del país, ado en estrechez, antig ua se h a troc que lo habitan. La holgura itud, la confianza en a de la vida en lax ch u l a l ara p ía g er la en . El presente no es satis­ as en decepciones tiv cta e xp e as l , or m e t cen la ce entre sombras que produ factorio y el porvenir apare ta de lo que den o­ ara Mac-lver la fal P ). -33 (32 ". d da intr anquili orque, de alguna a" vendría dada p c bli pú d da ali or "m a b mina sus el ethos del país; en el salitre afectaron d as z ue riq as l , a m for ca que , pero no como lluvia benéfi propias palabras, "el oro vino dor que arrancó o torrente devasta fecundiza la tierra, sino com 9 pública" (1900), sobre la qisis moral de la Re edro Montt" Enrique Mac-Iver, "Discurso nP do r ño e s al exc elentísimo y Alejandro Venegas, "Carta uri (ed.), El Chile del Centenario, los ensa­ zm (1909); reimpresos en C. Ga a Unive rsidad tituto de Historia, Pontifici Ins : ago nti (Sa is cris e un a serie de yistas de la n e nti co uri l volume n de Gazm E 1). 200 , le i Ch e d ca i ntido; las Catól evante s en este se utores que también son rel bajo. De tra e ensayos de otros a st nden a e indic amos correspo Cange, dés referencias de páginas que Val o i Jul jo el seudónimo de Dr. Venegas, también escrito ba ceridad, Chile íntimo en 1910 (Santiago: Sin véase asimismo el famoso 0). 191 , a ari rsit Imprenta Unive 18 d�I �ma la energía y la esperanza y arrastró con las virtudes publicas que nos engrandecieran ". (39) . D e acuerdo a Venegas, por otra Parte' el "ongen de nuestra . . crisis moral" vendría dado pnncipalmente por la depreciación . de la moneda ocas10 nada por la inconvertibilidad monetari a' . . que 1 e bnndaba a los sectores agricultores una "ganancia que . llegaba sin que se la buscase"' lo que denvo, en que "desde que e1 hacendado vio que sus cosechas, buenas o malas bastaban , . . . gracias a la situación favorecida en que le colocaba e1 re, gimen de papel moneda, para proporcionarle los medios de llevar en . . Santiago una vida ostentosa y hol azana an�o no una de :: vicios y prodigalidades en París' n! se Pr� upo del adelanto . . de sus tierras · · · ,, (157) · Esta situación habría dado lugar no sólo . . a presiones permanentes por parte de os de mteres , para mantener la inconvertibilidad mone:� a, sino _que tambié n a la consolidación de una situación de grave desigualdad social en el país.10 , . En su famosa Nuestra in¡; . .dad economzcaFranciscoAntom·o ':lrmon Enem . a argument,o. que 1 os problemas económicos chilenos se deb,ian a causas estrue tural es co mo la raz a y el territorio. Para . Encina, "nuestra raza en parte por here��ia, en parte por el grado relativamente :trase:o a de_ s_u evoluc10� y e� parte por la detestable e inadec uada ucacio� que recibe, vigorosa en la guerra y medí�amente apta en las faenas agrícolas, carece de tod� las condiciones que exige la vida industrial" AB" e de aquellas c�marcas �ue :: . �· � : �:� ��� : ucadas econormcamente ' cualqmera : 1::: que sea su puj anza en otras esferas de la actividad, a arrastrar una �:::�! 10 . Sobre este último punto ve, ase especialm ente Venegas, Sinceridad, pp. 204241 y 250. 19 Presentación de los Editores Roger W. Babson existencia lánguida y precaria".11 En este sentido, de acuerdo a Encina, la estructura económica chilena estaba poderosamente asociada a empresarios extranjeros y asociada al desarrollo de la economía internacional, lo que tendría negativos efectos económicos y morales en el país.12 Siguiendo a]. S. Mili nos parece que argumentaciones sobre la base de consideraciones raciales deben ser clasificadas de "vulgares", 13 por lo que podemos descontar los comentarios de Encina referidos. a estos temas, pero sus referencias sobre la ineficacia del sistema educacional chileno sí merecen ser tomadas muy en serio. En particular, nótese la observación de Encina en el sentido de que debido a las falencias del sistema educacional, la población chilena tendría un "desprecio ... por el trabajo manual, por las industrias fabriles y por el comercio", a la vez que un "escaso desenvolvimiento y ... mala educación de las aptitudes que dan el éxito en la actividad fabril y comercial"14. De acuerdo a Encina, entonces, el sistema educacional habría constituido un freno importante al progreso del país. Los comentarios que remarcan el despilfarro de las clases adineradas y la desigualdad relativa que habría surgido en el país 11 Francisco Antonio Encina, Nuestra inferiaridad económica: sus causas sus consecuencias(Santiago: Imprenta Universitaria, 1912); pp. 17, 33. 12 Considérese, por ejemplo, los siguientes'comentarios de Encina, "En Chile los propósitos del mercader extranjero han sido siempre meramente mercantiles(... ) pero, creando en nosotros el hábito de consumir mer­ caderías extranjeras, nos ha subordinado a las necesidades de industrias extrañas(... ) Aun sin perseguir fines políticos, ataca, pues, el sentimiento de la nacionalidad (p. 145); ver también pp. 94-95. 13 "Of ali vulgar modes of escaping from the consideration of the effect of social and moral influences on the human mind, the most vulgar is that of attributing the diversities of conduct and character to inherent natural differences";J. S. Mili, Principles ofPoliticalEconomy with some oftheir Applications to SocialPhilosophy. Disponible en-línea en WI\T\V.econlib.org. 14 Encina (1912), 137. Véase, también, pp. 100-103 y su "La educación económica y el liceo(1911-1912)", en Gazmuri, El Chile del Centenario. 20 ya desde el siglo XIX tienen un evidente componente político relacionado con los estertores de la república parlamentaria. Pero nótese que esta situación también refleja una incapacidad de la clase política de hacerse cargo de este ambiente. Como ha argumentado Harold Blakemore, a pesar de algunos avances en términos de la "cuestión social", los líderes políticos del Chile de comienzos del siglo XX fueron incapaces de reformar las instituciones nacionales de forma de responder a los cambios que se presentaban en el país. 15 Roger Babson aprecia estos problemas con bastante claridad en su visita a Chile. Sus referencias al sistema político nacional no son en general muy positivas. Más aún, resulta de especial interés notar que Babson le otorga una relevancia especial al hecho de que Chile, y en general toda América Latina, requie­ re de una clase media fuerte e industriosa de forma de lograr ser una nación próspera y estable. Este punto es consistente con el requerimiento de que el sistema económico debe ser legitimado políticamente si se quiere garantizar un proceso de desarrollo sostenido. A su vez, y como ya mencionamos, Babson ve a Sudamérica, y en particular a Chile, como un país de oportunidades. El punto que debemos considerar entonces se refiere a la relación entre esta observación y el argumento en el sentido de que entre los chilenos existiría una falta de espíritu emprendedor, como se deduce, por ejemplo, a partir del trabajo de Francisco Antonio Encina. De acuerdo a la visión que nos ofrece Roger Babson, en el Chile de principios del siglo XX existían importantes requerimientos 15 Harold Blakemore, "From the War of the Pacific to 1930", en L. Bethell (Ed.), Chile Since Independence(Cambridge: Cambridge University Press, 1993), p. 67. 21 Presentación de los Editores Roger W. Babso n úmero que examinamos aparecen un sinn de capital. En el relato ión en nuestr o país, ortunidades de invers de referencias a op cimiento o cual tipo de estable tanto en términos de instalar tal de forma u otro recurso natural comercial, o de desarrollar uno sión es, económica esta conclu productiva. A la luz de la teoría ile un país e, p orque siendo Ch por lo demás, bastante evident el retomo , con un baj o stock de capital, relativamente pobre ionistas extranj eros n será elevado. Invers esperado a la inversió l más bajo en sus países podrían, que enfrentan un costo del capita economí a chilena ortantes ap ortes en la entonces, realiz ar imp como de know-how. tanto en términos de capitales vel de desarrollo del p,µs) Esta escasez de capital (dado el ni según los cuales en vista de los criterios se p odrí a ver agravada arte de eran asignados p or p los escasos recursos disponibles a crisis eratura que habla de un quienes los tenían. Siguiendo la lit an extemalidades ir entonces q ue existirí mor al, se podrí a aduc ida de l gasto en bienes de lujo . La pérd negativas derivadas de l trab ajo, reflejos de una crisis los valores de la austeridad y e a este m odo de ver a también, de acuerdo de tipo moral, tendrí micas. las cosas, consecuencias econó ue la asigna­ forma se podrí a argumentar q uctivas es productivas e improd ción de recursos entre actividad . Por una parte, el ma que examinamos es endógena al proble l mercado de capitales chileno hecho de que es probable que e arrollado, cierta­ o XX hay a sido p oco des de comienzos del sigl iamiento de nuevas a capacidad de financ mente influy e sob re l iento' ' en tanto, del nivel del emprendim inversiones y, p or lo ap itales sirve como 16 todo, el mercado de c el país. D espués de Pero 16 de igual lo s dato s r eseñados o que de acuerdo a Es interesante n otar en todo cas dísticas históricas". Esta lena 1810-1995: p orJ. Braun et al., "Economía Chi 0; Tabla 6.5), el 200 C, PU mía o n co to de E Documento de Trabajo 187, Institu e del producto habría era com o por centaj grado de intermediación financi 22 mecanismo de intermediación entre ahorrantes e inversionistas En la medida q ue la falta de frugalidad y de moralidad redund� en una falta de ahorro, estos efectos se p odrían ver agravados· , hace referenci. a a la debilidad de Roger Babson por lo demas, ' nuestro pa1,s en estos temas. A s_u v�z s� podrí a argüir que el entorno económico, polí. . ttco e mstttuc1o nal también podría inflmr sobre e1 patron de . . · . a_51gn ac10, n de recursos en desmedro del emprendrm1ento de . tlpo producttvo. Una vari able q ue debe ser analiz ada de form a . . . mmediata en este plano se refiere a la inflación· E n las pnmeras dos d' ecadas de este siglo la inflac ión promedio anual en . nuestro paí s fue de 5'701 ,o, y de 6. ' 401 ,o, respecttvamente l7. Resulta . . significa ttvo notar, en todo caso, que estos últimos romedios escon�en q�e en 1907, 1908, 1913, 1915 y 1919 ri�estro paí s exp enmento tasas de inflación de dos dígi tos. La depreciació n de nuestra moneda es un tema que Babson y a había recogido como una de las debilidades de hacer negocios en nuestro país1s. Pe_:o en el contexto q ue analizamos un proceso de inflac·10, n · mas o menos persistente involucra consecuencias adic ion ales . (aparte de su efecto sobre el desarrollo del mercado financ1ero a 1a 1uz de nuestros comentarios de más arriba) · Coroo es sab'1do · al di ors1�nlli: la estructura de precios relativos de la economí; . la 1:Ji ac1on nene efectos importantes sobre la asignac ión de recursos. Esto redunda en una may or incertidumb re en los proy ectos de inversión, e levando de esta 1.,corroa 1os costos de sido más alto a lo larg o del siglo XIX que en las decadas p osteriores a la segunda guerra m undial. �: J. Braun et al. (2000), Tabla 4.1. Es:� es un tema que también ha s ido destacado or Frank W. Fetter en s u � . clas1co Monetary Jnjlation in Ch ·1,e (Pnn ceton: Pnn ceto� l!niversi tyPress, � 'l,e 1931), p. 121-126. E. Haindl' hz Y su Desarrollo Economzco en el Siglo XX . ien h a destacado la (Sanaag o : Universidad Gabrie la Mistral' 2006) tamb" relevancia de estos temas. 23 Elfuturo de Chile Roger W. Babson - to. mparables a las de Egip on fama de ser co c das rva s e on bien c , . dos ' de un fuerte color . as ti. e en los O.JOS tras1UCl mi o m as tas Es � _ n sacados de jibi s- dicen que fuero o tífic en ci l os ámbar, que s de los muertos. para reemPlazar los o:.ii o undo. Si , co la forma más curiosa del m el pais � estados oeste a través de los endiera hacia el xt e se tts use <l Massach , aproxi·ma amente . el Oce, ano Pacífico, tendna acia es h tral en c . es m"l ne rotar esta de largo . Imagi 1 tr as i c o y ch an e 125 millas .de era tal que se sitú extremo, de man un e br o s e rra ti u na fr anja de . , norte y sur en vez de este y oeste, y tendrá . . on ci e c en dir . es la .e.1_orma de Chile . Se extien, ande y p eculiar gr n ua c de . de a i de Sudamérica, c osta occ1dental la . en ente alm n de longitudi igual que nuestra c. osta . c1p na temp1ad Y al z o la en e ent · m pnn al Ch11e se extremo sur de no Pacífico. -s·1 e1 céa O 1 e a e d o r b garia oeste M'exi·co, su límite norte lle extremo sur de 1 e e r b so cara . o o col assachu setts, per uperfi c1e de M s la e s vec 38 ne a Canadá. Tie nor. considerablemente me su población es . dinalmente por la cordillera de la . . . Chile esta, dividido lon tu de en el este , y des l era de 1os Andes � rdil o c a y 1 este Costa en el o ona climática, n términos de z E b as. aro v e r . en · ued p Santiago se , aun opical y desierta tr es 29 o e l aral P el as ta h te r no te la par . , centr-a.11 hasta el paralelo 38 . rales La regi. on e d b s :�:!�::a ;i:;e fé;tiles llan�ras y:o !�: �:�::: :!: , . , es. La secc1on su q osos comere1-a.11 es mas grand , de b osques frond rta . nente, esta cubie ti on c e l d o m r e el ext arrollo, y la _ o existe poco des ertes lluvias, per fu ta e n rim e xp ye . , es escasa. La parte central es el Chile real. p oblacion la vez se puede tener a to, que en Chile n ta o r l p o o , bvi o Es a . o de lima La parte norte es cáli·da y seca. La zon . tip me q cual � � �Pico de Colorado, con días soleados y ma cli el minera tiene . goza de un espléndido clima tema gran a a on La z s noches fría · Chile es ª piado durante todo el año, muy similar al del sur de California, pero con una estació n lluviosa entre junio y septiembre. La zona sur es bastante parecida a algunas partes de Canadá, con mucha lluvia, un corto y hermoso verano, y un largo y oscuro invierno. Los inviernos de la Patagonia, sin embargo, no son tan fríos como podría pensarse, debido a la gran extensión de agua que rodea una pequeña superficie de tierra. En un mismo día se pueden cortar rosas en los valles que rodean Santiago y caminar con raquetas para la nieve en los Andes al este de la ciudad. Esta variedad climática debería algún día hacer de Chile un destino popular entre los turistas, quienes ya lo llam an "la Suiza de Sudamérica". Estos climas diferentes además de berían ser de gran valor para los propósitos agrarios e industriales de Chile en los años venideros. No sólo se podrá extraer y cultivar las materias primas necesarias para la manufactura de casi cualquier producto, si no que su clima es apto para el funci onamiento de fábricas e i ndustrias. Las mi nas de salitre en la par te norte de Chile son consideradas e n la ac tualidad co mo el mayor recurso de este país, de bido a que alre dedor del 70 por ciento de sus exportaciones c orrespond en al salitre. D esgraciadamente, en Chile este mineral no se usa en la industria manufacturera. La industria sólo se remite a su extracción y embarque. Los grandes recursos minerales de Chile como el co bre, hierro y carbó n es tán aú n sin desarrollar, a pesar de que se está trabajando en la mayor mina de cobre del mundo en la pro­ vincia de Chuquicamata. Los chilenos están particularmente interesados en los depósitos de hierro, convencidos de que pronto se construirán altos horn os y plantas laminadoras de acero. También hay expectativas resp ecto a sus yacimientos de otros minerales y sus ma deras. Los chilenos no están tan interesados en la exportació n de estas materias primas hacia otras tierras co mo en su utilización en Chile. 43 A9