El Idealismo Berkeley

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El Idealismo
“En la filosofía moderna surge lo que se denominó el idealismo. En esta
corriente el papel predominante ya no lo tiene el objeto, sino el sujeto. El
objeto no es descubierto meramente por el sujeto, sino que es más bien
constituido o construido por él. Desde la perspectiva idealista, nuestro
conocimiento no llega a las cosas tal como ellas son, sino al aparecer de las
cosas en nuestra conciencia, a lo que se denomina fenómeno. La verdad ya no
podrá consistir en la concordancia entre el pensamiento y la realidad, sino en
la coherencia o consistencia lógica del pensamiento consigo mismo, lo que se
denominará concepto inmanente de verdad.” (Obiols, G. Nuevo curso de
Lógica y Filosofía, Ed. Kapelusz, Bs, As. 1994)
Todo su ser consiste en ser percibidas por nosotros, en ser contenidos de
nuestra conciencia. Tan pronto como dejan de ser percibidas por nosotros
dejan también de existir. No poseen un ser independiente de nuestra
conciencia.
Berkeley: Tratado sobre los principios del conocimiento humano
Ser es ser percibido
“Es evidente para cualquiera que investigue los objetos del conocimiento
humano, que son ideas impresas realmente en nuestros sentidos o percibidas
al considerar las pasiones y las operaciones de la mente, o bien ideas
formadas con la ayuda de la memoria y la imaginación por composición,
división o mera representación de aquellas que se percibieron
originariamente. Por la vista tengo ideas de luz y colores con sus diversos
grados y variaciones. Por el tacto percibo lo duro y lo blando, el calor y el
frío, el movimiento y la resistencia; y éstos a su vez en mayor o menor
cantidad o en mayor o menor grado. El olfato me proporciona olores; el
paladar, sabores y el oído lleva a mi mente sonidos en toda su variedad de
tonos y composición.
Y como muchas de éstas acompañan a otras, como se advierte en la
observación, se les aplica un solo nombre y se las considera una sola cosa. Así,
por ejemplo, cierto color, sabor, olor, figura y consistencia que se han
observado juntas son considerados como una cosa distinta, a la que se designa
con el nombre de “manzana”; otras colecciones de ideas constituyen una
piedra, un árbol, un libro y objetos sensibles similares, los que, en tanto son
agradables o desagradables, excitan las pasiones de amor, odio, alegría, dolor
y así sucesivamente. Pero además de esta infinita variedad de ideas u objetos
de conocimiento, hay algo que las percibe o conoce y que ejerce diversas
operaciones, tales como quererlas, imaginarlas, recordarlas. Este ser activo,
percipiente es lo que llamaré mente, espíritu, alma o yo. Con esas palabras
no denoto ninguna de mis ideas sino una cosa enteramente distinta de ellas,
en la cual existen o, lo que es lo mismo, donde son percibidas ya que la
existencia de una idea consiste en ser percibida.
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Todo el mundo admitirá que ni nuestros pensamientos ni nuestras pasiones ni
nuestras ideas formadas por la imaginación, existen fuera de la mente. Y me
parece no menos evidente que las diversas sensaciones o ideas impresas en la
sensibilidad, por más ligadas o combinadas que estén no pueden existir de
otro modo que en una mente que las percibe. Pienso que podrá extraer de
esto un conocimiento intuitivo el que atienda al significado del término
‘existe’, aplicado a las cosas sensibles. Yo digo que existe la mesa sobre la
que escribo, esto es, que la veo y la siento y que si estuviera fuera de mi
escritorio diría que existió; esto, a su vez, quiere decir que si estuviera en mi
escritorio podría percibirla, o que algún otro sujeto la percibe realmente. Hay
un ‘olor’ significa que se lo ha olido, hay un sonido es decir que ha sido oído,
hay un color o una figura es decir que se los ha visto o tocado. Esto es todo lo
que puedo entender con esas expresiones. Su ser es ser percibido; no es
posible que tengan existencia fuera de las mentes o de los seres que las
perciben o las piensan...” (Berkeley, Tratado sobre los principios del
conocimiento humano, Bs. Aires. Losada, 1945. Tomado de Filosofía Viva,
Frassineti y Fernández, Bs, As, A. Z, editora)
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