1) SOBRE EL AUTOR Y SU CONTEXTO: -Renacimiento y Barroco: Renacimiento es el nombre dado a un amplio movimiento cultural que se produjo en Europa Occidental en los siglos XV y XVI. Sus principales exponentes se hallan en el campo de las artes, aunque también se produjo una renovación en las ciencias, tanto naturales como humanas. El Renacimiento es fruto de la difusión de las ideas del humanismo, que determinaron una nueva concepción del hombre y del mundo. El Barroco fue un periodo de la historia en la cultura occidental que produjo obras en el campo de la literatura, la escultura, la pintura, la arquitectura, la danza y la música, y que abarca desde el año 1600 hasta el año 1750 aproximadamente. Se suele situar entre el Renacimiento y el Neoclásico, en una época en la cual la Iglesia Católica europea tuvo que reaccionar contra muchos movimientos revolucionarios culturales que produjeron una nueva ciencia y una religión disidente dentro del propio catolicismo dominante: la Reforma protestante. -Los teatros nacionales de Inglaterra, España y Francia. Aristóteles y los académicos frente a la libertad: la tradición inglesa: El Barroco fue una época donde la población descendió drásticamente, ya que las guerras, el hambre, las epidemias y la emigración por motivos económicos o políticos estaban al orden del día. La guerra de los treinta años y las epidemias, que eran consecuencia de la falta de higiene que había en esa época, hicieron perder a España aproximadamente dos millones de habitantes desde el principio del siglo hasta el final de este. La sociedad se dividía en tres estados: -La nobleza, eran privilegiados que vivían de sus tierras. Formaban parte del primer estado -El clero, este grupo se dividía en dos estamentos, alto clero, los cuales eran privilegiados y se encontraba en el primer estado, y el bajo clero, eran pobres, y poco formados, pertenecían al tercer estado. -El tercer estado, era muy heterogéneo y diferencial. William Shakespeare Fue un dramaturgo, poeta y actor inglés. Conocido en ocasiones como el Bardo de Avon (o simplemente El Bardo), Shakespeare es considerado el escritor más importante en lengua inglesa y uno de los más célebres de la literatura universal. Las obras de Shakespeare han sido traducidas a las principales lenguas y sus piezas dramáticas continúan representándose por todo el mundo. Además, muchas citas y aforismos de sus obras han pasado a formar parte del uso cotidiano, tanto en el inglés como en otros idiomas. Con el paso del tiempo, se ha especulado mucho sobre su vida. Se suele considerar no obstante una clasificación de la obra dramática del autor isabelino en: dramas históricos, comedias y tragedias. Además, es importante citar la producción poética del autor e identificar la influencia de ésta sobre su teatro, aportando algún ejemplo extraído de Romeo y Julieta. La riqueza del lenguaje: variedad de registros, entre los que destaca la tensión y el patetismo de los monólogos (aportar ejemplos); la abundancia de frases enigmáticas y de significado equívoco que potencian la expectación y la incertidumbre. Los personajes. Los grandes personajes de Shakespeare tienen un doble sentido: por un lado, encarnan grandes pasiones; es decir, son símbolos: Otelo representa los celos, Hamlet la duda, MacBeth la ambición, etc.; por otra parte, las personajes que crea Shakespeare son redondos, no planos: estas figuras destacan, entre las creaciones de todos los tiempos, por ser criaturas humanas, llenas de contradicciones, de sentimientos humanos, de altibajos... Los espectadores de cualquier época pueden sentirse identificados con ellos porque los miran de igual a igual, reconociendo los propios defectos o virtudes y las misma dudas y anhelos. En cuanto a la comparación con el contexto de la obra, sería pertinente contrastar los personajes de Molière (francés) y de los autos sacramentales de Calderón (español) con los del autor de Strattford-on Avon. 2) SOBRE EL TEMA: Amor. Romeo y Julieta encarnan un amor arrebatador en la misma medida que los otros personajes del autor simbolizan sendas pasiones. Las pasiones humanas cumplen en Shakespeare la misma función que el Fatum o destino para la tragedia griega: se trata de una fuerza irresistible que desde el principio encamina la acción hacia el desenlace trágico. Si para los griegos esta fuerza era un impulso externo, dependiente sólo de los dioses. También es importante comparar la historia de Romeo y Julieta con la de Píramo y Tisbe o la de Calisto y Melibea: el mismo esquema básico se repite en las tres historias: Píramo y Tisbe eran dos jóvenes amantes cuyo amor no aprobaban sus respectivas familias, con lo que se sentaron las bases del trágico desenlace (ambos amantes se suicidan creyendo que el otro ha muerto). Locura y razón. El punto de unión con el apartado anterior es la escasa cordura que muestran los amantes. Pero en Shakespeare todo es contraste y lucha de contrarios: Estos otros personajes representan la razón y la inteligencia. Destino y azar. Ya nos hemos referido al Destino en la tragedia griega y su equivalente en Shakespeare. Es evidente que, aunque el autor inglés sustituye esa fuerza ciega por la de las pasiones, el tema del Destino no desaparece de su teatro: hay numerosas alusiones al hado y al azar, a las estrellas, a los dioses... 3) Sobre la forma. Estructura e ingredientes de la obra. Comedia y tragedia. Tratamiento de las normas aristotélicas. El texto se corresponde con la estructura de una tragedia según el modelo clásico: desenlace trágico, cinco actos y tono en general elevado; sin embargo, aparecen, conforme a las ideas barrocas, numerosos elementos cómicos, se trata de una "tragicomedia". El lenguaje shakespeareano. Desbordamiento de la unidad de estilo; profundidad de pensamiento y sentenciosidad; calidad de los monólogos; lirismo omnipresente; humor. Desbordamiento de la unidad de estilo: una tragedia debía mantener un lenguaje siempre elevado y una comedia emplear un registro coloquial o sencillo, aunque nunca excesivamente vulgar. Profundidad de pensamiento. Sus textos están llenos de pensamientos profundos y reflexiones agudas. Shakespeare es uno de los autores más citados en las colecciones de frases agudas, ingeniosas o inteligentes. Lirismo. Es la expresión poética y exaltada de sentimientos personales, de pasiones; es, por ejemplo, lo que hacen los románticos en sus pinturas y poemas cuando hablan de amor, muerte y angustias, al contrario de los artistas que siguen los academicismos, pues estos impiden en buena medida la expresión particular de las emociones. Ejemplos: ROMEO.- Mi alma padece el implacable rigor de sus desdenes. ROMEO.- ¿Por qué, si pintan ciego al amor, sabe elegir tan extrañas sendas a su albedrío? ¿Dónde vamos a comer hoy? ¡Válgame Dios! Cuéntame lo que ha pasado. Pero no, ya lo sé. Hemos encontrado el amor junto al odio; amor discorde, odio amante! rara confusión de la naturaleza: caos sin forma, materia grave a la vez que ligera, fuerte y débil, humo y plomo, fuego helado, salud que fallece, sueño que vela, esencia incógnita. No puedo acostumbrarme a tal amor. ¿Te ríes? ¡Vive Dios!... Humor: el comic relief o "alivio cómico" (rasgo también característico del drama lopesco y español, y opuesto al drama francés: he aquí el "contexto" al que se refiere el epígrafe), pero también la fuerza e importancia (poética, intelectual) de esta figura en Shakespeare. Podemos mencionar ya a Falstaff.