TEMA 4. ELECTROSTATICA EN CONDUCTORES Y DIELECTRICOS 4.1.- MEDIOS MATERIALES. Experimentalmente puede comprobarse que determinados medios materiales o sustancias poseen la propiedad de permitir el movimiento de cargas eléctricas a través de ellos, mientras que otros impiden tal movimiento. Los primeros reciben el nombre de conductores y los del segundo tipo se denominan dieléctricos o aislantes. De una forma general los conductores suelen ser sustancias metálicas y sus aleaciones, bases y sales, etc. Por el contrario son dieléctricos los plásticos, ebonita, baquelita, porcelanas, etc. La diferencia radical entre el comportamiento de un conductor y un dieléctrico hay que buscarla en la misma estructura de la materia considerada como una colección de cargas positivas y negativas de los núcleos y electrones que la forman. Desde un punto de vista macroscópico de los fenómenos electrostáticos en la materia, los conductores poseen cargas libres susceptibles de ser puestas en movimiento bajo la acción de cualquier campo eléctrico, por débil que éste sea. Por el contrario, en un dieléctrico, las cargas eléctricas que forman parte de los átomos o moléculas que lo constituyen están ligadas a los mismos. En este Tema se estudiará el comportamiento de los conductores y dieléctricos bajo la acción de un campo eléctrico, observando que valores toman las magnitudes eléctricas cuando se alcanza el equilibrio electrostático. En condiciones normales, en un volumen dado de un medio material existe tanta carga positiva como negativa, la materia es eléctricamente neutra. Pero por circunstancias que se analizarán, puede una parte de la materia estar cargada positiva o negativamente y otra parte cargada con signo opuesto, manteniendo la neutralidad toda la materia. Independientemente de que un medio material se pueda cargar eléctricamente por adición o supresión de un determinado número de electrones. 4.2.- EQUILIBRIO ELECTROSTATICO EN UN CONDUCTOR. Los conductores, en general, están formados por iones positivos que ocupan posiciones fijas y electrones negativos, que estando asociados a los iones, pueden circular libre y desordenadamente por el conductor. Como ya se ha expresado, un buen conductor eléctrico se caracteriza por tener cargas libres (electrones), de forma que al aplicar un campo eléctrico E o sobre dicho conductor, estas cargas libres se desplazarán hacia una parte del conductor provocando un exceso de carga negativa en esa parte y un defecto, o exceso de carga positiva, en la zona de donde provengan (Fig.4.1). 80 El movimiento de cargas libres cesará cuando el campo eléctrico que se forma en el interior del conductor E i como consecuencia del desplazamiento de cargas libres, anule al campo eléctrico externo E o que actúa sobre el conductor. Es decir, para que un conductor se encuentre en equilibrio electrostático es preciso que en el volumen del conductor el campo eléctrico sea nulo E Eo Ei 0 (4.1) Teniendo en cuenta la diferencia de potencial eléctrico (3.10), como el campo en el conductor es nulo entre dos puntos de éste, por ejemplo A y B, se cumple V A V B 0 y por tanto V cte. (4.2) en todo el conductor, es decir, el volumen del conductor es equipotencial y la superficie que lo limita es una superficie equipotencial. Si se aplica la ley de Gauss al conductor en equilibrio electrostático, utilizando una superficie gaussiana tan próxima como se desee a la superficie del conductor, como su E 0 en todos sus puntos del interior, esto indica que no existe flujo y por tanto, en cualquier elemento de volumen del conductor existen tantas cargas negativas como positivas siendo su carga neta nula. Si el conductor está cargado, esta carga no compensada debe estar distribuida sobre su superficie exterior. Si el conductor en equilibrio está cargado, a partir de las consideraciones anteriores se puede obtener el valor del campo eléctrico en un punto infinitamente próximo a su superficie, de una forma simple. Toda la carga está sobre la superficie del conductor y posee una densidad superficial de carga en las proximidades del punto P (Fig.4.2), que puede ser distinta de otros puntos de la superficie. Si se toma una superficie gaussiana (Fig.4.2), no hay flujo a través de la base interior porque E = 0. Tampoco hay flujo a través de la superficie lateral porque V cte . y las líneas de campo son perpendiculares a la superficie del conductor por ser esta equipotencial, o sea, E d S L . Solo hay flujo por la base superior en donde E y dS son paralelos, con lo que el flujo vale E d S ES q o despejando de (4.3) el módulo del campo eléctrico 81 S o (4.3) E (4.4) o dirigido hacia afuera o hacia adentro del conductor según sea la carga positiva o negativa respectivamente. Véase como ejemplo, una esfera conductora en equilibrio electrostático, con una carga positiva neta Q y un radio R (Fig.4.3). Aplicando (4.4) y (3.30) E o Q S o Q 4 R o 2 V K K Q R 2 Q R Cuando se coloca una carga neta sobre un conductor esférico la densidad superficial de carga es uniforme. Sin embargo, si el conductor no es esférico, la densidad superficial de carga es elevada en los puntos en los que el radio de curvatura es pequeño y es baja en aquellos en los que el radio de curvatura es grande. Como el campo eléctrico en el exterior de un conductor cargado es proporcional a la densidad superficial de carga , se ve que el campo eléctrico es intenso cerca de los puntos que tienen un radio de curvatura pequeño, o sea, zonas puntiagudas. Esto es lo que se conoce como efecto de puntas, ya que da lugar a la pérdida de carga del conductor por estas zonas. 4.3.- CONDUCTOR CON CAVIDADES INTERIORES. Considerando un conductor cargado de forma arbitraria que posee una cavidad en su interior sin cargas (Fig.4.4). Como el potencial del conductor es constante en el interior, la superficie del conductor que engloba la cavidad será equipotencial. Por ello, entre dos puntos A y B, de la superficie de la cavidad, se cumplirá B VA VB 0 E dr (4.5) A como entre A y B siempre existirá una trayectoria d r 0 , para que se cumpla (4.5) debe ser E 0 en la cavidad. 82 Así podemos concluir, que en las cavidades de un conductor cargado su campo eléctrico será nulo y su potencial el del conductor, siempre que no existan cargas en la cavidad e independientemente de campos exteriores al conductor. Estas condiciones se conocen con el nombre de efecto pantalla, ya que si se tiene un conductor a potencial constante (por ejemplo conectado a tierra V 0 ) el potencial eléctrico en un punto del interior de la cavidad como consecuencia de las cargas q 1 , q 2 , ... es independiente de la existencia y posición de las cargas q 1 , q 2 ,... en el espacio exterior y viceversa. Se puede comprobar esta afirmación fácilmente, si se considera que el conductor con la cavidad y las cargas q 1 , q 2 , ... y q 1 , q 2 , ... son la superposición de dos estados de equilibrio. El estado 1 sería el conductor conectado a tierra y las cargas exteriores (Fig.4.5). En estas condiciones como se ha visto anteriormente el potencial en P por ser un punto de la cavidad será nulo V1( P ) 0 El estado 2 sería el conductor conectado a tierra y las cargas interiores (Fig.4.6). El potencial eléctrico en el punto P será fruto de las cargas q 1 , q 2 , ... V2(P) V2(P) Al superponer ambos estados V ( P ) V1( P ) V 2 ( P ) V 2 ( P ) (4.6) no depende de las cargas externas. En definitiva, un conductor hueco conectado a potencial constante divide el espacio en dos regiones completamente independientes, desde el punto de vista electrostático. Este resultado tiene aplicaciones interesantes como la de proteger un circuito electrónico o incluso todo un laboratorio, contra los campos eléctricos externos, rodeándole con paredes conductoras a V cte . (Jaula de Faraday) para llevar cabo mediciones eléctricas muy precisas en su interior. Así mismo, los hilos de conexión entre aparatos suelen estar 83 rodeados de una malla metálica denominada blindaje que elimina cualquier perturbación de tipo eléctrico. 4.4.- INFLUENCIA ELECTROSTATICA. Supóngase dos conductores uno A cargado, por ejemplo negativamente y otro B neutro (sin carga neta). Al acercarlos, por influencia del conductor A debido a su campo eléctrico, las cargas positivas del conductor B se acumularán en la superficie mas cercana al conductor A y las negativas se irán al extremo opuesto (Fig.4.7). Una vez alcanzado el equilibrio se cumplen las propiedades antes estudiadas: E 0 ; V cte . en el interior y distribución superficial de cargas, pero manteniendo su carga neta nula. En el conductor A también se producirá una redistribución de la carga por influencia de B. En definitiva, la influencia electrostática supone una modificación de las distribuciones superficiales de carga en los dos conductores. Si ahora se uniese el conductor B a tierra parte de las cargas negativas se escaparían quedando B cargado positivamente, pero su carga no sería igual a la del conductor A. Es lo que se conoce como influencia parcial. Pero si el conductor B rodea totalmente al conductor A, la carga inducida por A en la superficie interna de B será la misma, y claro está, de signos opuestos, ya que si tomamos una superficie gaussiana (Fig.4.8) el flujo a través de dicha superficie es nulo porque el campo en el interior de un conductor en equilibrio es cero. Teniendo en cuenta la ley de Gauss (3.26) para que el flujo sea nulo ( 0 ) deberá cumplirse que q i 0 es decir qA qB 0 qA qB Este fenómeno se conoce como influencia total. Si ahora pusiésemos en contacto los conductores, comenzará a descargarse el conductor A, pasando sus cargas al conductor B (Fig.4.9). Este proceso durará hasta que el potencial eléctrico en ambos sea el mismo, ya que ahora constituyen un solo conductor, y se alcanzará el equilibrio cuando no haya movimiento de cargas. La carga total del conductor (A+B) será la misma que la que tenía A cuando estaba aislado, pero ahora la carga 84 que se habrá quedado en A no tiene porque ser igual a la que haya pasado a B, dependerá de sus tamaños, lo único seguro es que el potencial será el mismo. 4.5.- COMPORTAMIENTO DE LOS DIELECTRICOS ANTE UN CAMPO ELECTRICO. En este apartado se analizará el efecto que un campo eléctrico produce sobre materiales no conductores. Recordando que las moléculas que forman la materia pueden ser de tipo no polar o polar según que su “centro de gravedad” de los núcleos positivos y la nube electrónica coincida o no coincida (Fig.4.10), se pueden tener materiales formados por átomos o moléculas no polares, o sea, sin momentos dipolares eléctricos, materiales con moléculas polares, es decir, con momentos dipolares eléctricos permanentes y en general orientados al azar y combinaciones de ambos. Bajo la influencia de un campo eléctrico E o los materiales formados por moléculas con dipolos eléctricos permanentes tienden a orientarse en la dirección del campo eléctrico, como se vio en la sección 3.5, y los formados por átomos o moléculas no polares debido a la perturbación de la nube electrónica producida por el campo eléctrico adquieren momentos dipolares eléctricos inducidos y orientados en la dirección del campo eléctrico (Fig.4.11). Hay que señalar que en ambos casos la orientación de los momentos dipolares eléctricos esta limitada por la agitación térmica, a mayor temperatura menor orientación. Como consecuencia de estos efectos una porción de material o todo el material colocada en un campo eléctrico E o se polariza. Es decir, sus moléculas o átomos se convierten en dipolos eléctricos orientados en la dirección del campo eléctrico. Un medio material que puede polarizarse bajo la acción de un campo eléctrico se denomina dieléctrico. La polarización da lugar a una carga neta positiva sobre un lado de la porción del dieléctrico y a una carga neta negativa sobre el lado opuesto, que aparecerá por los dipolos eléctricos próximos a la superficie del medio material. De este modo el dieléctrico se convierte en un gran dipolo eléctrico. Se estudiaran los efectos de los dieléctricos desde un punto de vista macroscópico. Debe hacerse constar, que las cargas inducidas en el dieléctrico están "congeladas" en el sentido que están ligadas a átomos o moléculas determinadas y no son libres de moverse. Una vez que cese la acción del campo eléctrico el dieléctrico se despolarizará en más o menos tiempo. Si es de forma casi instantánea se llaman dieléctricos dulces y si tardan se les denomina duros. 85 Hay que señalar también que cualquier dieléctrico sometido a un campo eléctrico suficientemente intenso se hace conductor, es un fenómeno conocido como rotura dieléctrica. Y el campo eléctrico máximo que puede resistir un material sin que se produzca su rotura se denomina rigidez dieléctrica. 4.6.- POLARIZACION. Como se ha indicado un dieléctrico puede polarizarse en mayor o menor medida. El grado en el cual las moléculas de un dieléctrico resultan polarizadas por un campo eléctrico queda cuantificado mediante el vector polarización o polarización P. Se define la polarización de un material como el momento dipolar eléctrico por unidad de volumen dp P (4.7) dV donde dp es el momento dipolar resultante en el volumen dV (aunque se tome elemento de volumen, éste es de mayor tamaño que las moléculas). La unidad en SI de la polarización es C/m 2 . La polarización será generalmente una función de la posición en el material, es decir, dependerá del punto en donde se calcule. Pero si por ejemplo, un material tiene todas las moléculas iguales con el mismo momento dipolar y en la misma dirección p y hay n moléculas por unidad de volumen, entonces P = np polarización uniforme. Con objeto se simplificar el estudio de los dieléctricos nos referiremos en lo sucesivo a dieléctricos homogéneos, isótropos y lineales. Considerando una porción de dieléctrico de espesor dl y área dS colocado perpendicularmente a un campo eléctrico uniforme E o (Fig.4.12). La polarización siendo paralela a E o es perpendicular a dS. El volumen será dS dl y por consiguiente el momento dipolar eléctrico dp P d V P dS d l (4.8) Pero dl es precisamente la separación entre las cargas positivas y negativas que aparecen sobre las superficies. Como el momento dipolar eléctrico viene dado en la sección 3.5 por el producto de la carga por la distancia que separa a las cargas que conforman el dipolo, (4.8) se puede poner como 86 dp q p d l p dS d l (4.9) igualando (4.8) y (4.9) P dS d l p dS d l P p (4.10) Aunque este resultado se ha obtenido para un caso particular, tiene validez general y se puede decir que la carga por unidad de área sobre la superficie de un material polarizado es igual a la componente de la polarización P en la dirección de la normal a la superficie del dieléctrico p P un (4.11) siendo un el vector unitario normal a la superficie del dieléctrico. Cuando en la sección 3.2 se exponía la ley de Coulomb, se estableció que en el seno de un medio que no fuera el vacío, la fuerza entre dos cargas era menor. La polarización de un dieléctrico permite explicar este hecho. Si el dieléctrico considerado en la (Fig.4.12) fuese un conductor, por efecto del campo E o las cargas que aparecerían en ambas caras tomarían un valor q, que produciría un campo E i igual a E o pero de sentido contrario con lo que el campo resultante en el interior sería nulo, como se vio en la sección 4.2. Sin embargo si el material es dieléctrico, como se ha dicho, no presenta la propiedad desplazar sus cargas hasta conseguir la densidad de carga necesaria para producir el campo E i . El campo que se produce E p , de sentido contrario a E o , se le opone pero sin llegar a anularlo, de forma que el campo resultante en el interior del dieléctrico E . es menor que E o , pero no nulo. E Eo Ep o p o (4.12) Las densidades de carga y p están relacionadas mediante una constante de proporcionalidad menor que la unidad puesto que p 1 p 1 87 (4.13) donde es un número mayor que la unidad que recibe nombre de permitividad relativa o constante dieléctrica relativa, característico de cada material. Así sustituyendo (4.13) en (4.12) E o Eo (4.14) se comprueba que el campo eléctrico en el interior del dieléctrico es menor que en el vacío en la proporción 1 , lo que tiene validez general para cualquier dieléctrico. Lógicamente existirá una relación funcional entre la polarización de un dieléctrico y el campo eléctrico en su interior. Teniendo en cuenta (4.10) y (4.14) e introduciéndolo en (4.12) E o P o = Eo P o E P o (4.15) por lo que el módulo de la polarización despejando P de (4.15) es P = o 1 E y expresado vectorialmente P = o 1E (4.16) 4.7.- DESPLAZAMIENTO ELECTRICO. Tal y como se ha visto en la sección 4.6 E o P o o bien oE + P (4.17) expresión que nos relaciona la densidad de carga sobre la superficie de un conductor que crea el campo uniforme E o , con el campo en el interior del dieléctrico E y con su polarización P. En el caso que se estudia E y P son vectores con la misma dirección y sentido por lo que parece conveniente introducir una nueva magnitud vectorial, llamada desplazamiento eléctrico D definida por D oE + P (4.18) Obviamente D se mide en C/m2 y representa la carga por unidad de área sobre la superficie del conductor que genera el campo eléctrico que actúa sobre el dieléctrico. Este 88 resultado tiene validez general y puede extenderse a conductores con cualquier forma, teniendo en cuenta que para cualquier forma D un (4.19) siendo u n el vector unitario normal a la superficie del conductor. Considerando (4.16) y sustituyendo en (4.18) D o E + o 1 E o E E (4.20) en donde es la permitividad del dieléctrico y se observa que el desplazamiento eléctrico tiene la misma dirección y sentido que el campo eléctrico en el interior del dieléctrico. El desplazamiento eléctrico es una magnitud que juega un papel fundamental en los problemas en los que intervienen dieléctricos. Así, mientras el campo eléctrico está relacionado, a través de la Ley de Gauss, con todas las cargas eléctricas (libres y de polarización), el desplazamiento eléctrico lo esta únicamente con las cargas libres. 4.8.- LEY DE GAUSS EN PRESENCIA DE DIELECTRICOS. Considérese el sistema de la (Fig.4.14) constituido por un conjunto de conductores cargados en el seno de un medio dieléctrico perfecto e infinito. La carga libre de cada conductor esta repartida sobre su superficie, con densidad . Por otra parte, en la frontera entre el dieléctrico y los conductores aparece, por polarización, una densidad superficial de carga inducida - p . Sea S en la (Fig.4.14) una superficie cerrada que rodea al sistema de conductores. El flujo de E a través de S es s E dS qi o (4.21) donde q i es la carga total encerrada en S, suma de las cargas libres más las de polarización q i q (q p ) p dS S1 S 2 pero, a partir de (4.13), resulta inmediato que p 89 por tanto qi dS S1 S 2 q (4.22) es decir, la carga total encerrada en S es igual a la carga libre dividida por la permitividad relativa. Sustituyendo (4.22) en (4.21) resulta E dS S q o q (4.23) de donde se deduce que la expresión que se obtiene para la Ley de Gauss es idéntica a la que se dedujo para el vacío, pero sustituyendo la permitividad del vacío por la del medio. Por consiguiente el campo, potencial y fuerza producidos por una carga que se encuentra inmersa en un dieléctrico son iguales que en el vacío reemplazando o por . Si se multiplican ambos miembros de (4.23) por se obtiene S E dS D dS q (4.24) S expresión que indica que el flujo del vector desplazamiento eléctrico a través de una superficie cerrada es igual a la carga libre encerrada por la superficie. De lo visto se deduce que, para resolver problemas en los que intervienen dieléctricos se puede seguir un procedimiento similar al estudiado en el caso de cargas en el vacío, pero trabajando con el desplazamiento eléctrico en lugar de con el campo eléctrico. Así, a partir de la Ley de Gauss se puede calcular D. Una vez conocido D se obtiene E y posteriormente P. Una vez establecido E resulta inmediato el cálculo de diferencias de potencial o de otras magnitudes que dependen de E. 90