Santiago, Agosto del 2007 Señor: Eduardo Bitrán C Ministro de Obras Públicas. Estimado Señor Bitrán: Los Directivos de los Comités y Cooperativas de Agua Potable Rural (APR) que suscriben la presente, en conocimiento del trabajo que se lleva adelante, en torno al anteproyecto de Ley de APR, impulsado por el Ministerio que Ud. dirige, respetuosamente exponen a Ud. y solicitan: El Programa de APR, es la resultante de un esfuerzo de recursos humanos, técnicos y económicos que involucra a instituciones del Estado, consecuencia de la técnica y conocimientos de ingenieros nacionales y especialmente de la comunidad rural, su compromiso y responsabilidad plasmada a lo largo de más de 43 años con singular éxito, validado por las máximas autoridades del país en innumerables oportunidades. Los logros de este Programa, de presencia nacional desde Visviri por el norte hasta Puerto Toro en el Canal del Beagle por el Sur, con más de 1.500 Servicios de APR y más de 1.500.000 usuarios, tiene como pilares esenciales al compromiso y la cultura del agua asimilada por la comunidad usuaria, al rol financiero, técnico y asistencial desempeñado por las instituciones del Estado, al rol de las Unidades Técnicas especialmente cuando ellas respondían como empresas del Estado, en aspectos técnicos y de gestión. En este hacer, la comunidad usuaria y sus dirigentes han trabajado y trabajan para llevar, más que el agua potable - que ya tiene en sí un gran valor - el afán de brindar a nuestros hijos un mejor destino, en una tarea colectiva, sin otra recompensa que la de dar a los vecinos y nuestras familias un mejor mañana, días más dignos y mejores. Es desde esta óptica, que queremos compartir con Ud. aspectos que nos parecen indispensables de rescatar de la historia del APR para plasmarlo en esta iniciativa, la que entendemos busca mejorar las actuales condiciones en que opera el Programa de APR. Entre estos aspectos se cuentan: 1. El presente cuerpo legal regula y norma a Comités y Cooperativas existentes para que transiten a una nueva condición de permisionarios y licenciatarios de Sistemas de Agua Potable Rural. Por consiguiente este anteproyecto es exclusivamente para Comités y Cooperativas de Agua Potable Rural existentes insertos en el Programa de APR que impulsa su Ministerio. Es decir, toda otra entidad distinta a las precedentes, en materia de agua Potable y Saneamiento Rural deben de regirse por la Ley 382 del MOP del año 1988. Esto Sr. Ministro, es un principio para los Comités y Cooperativas que suscriben, es un aspecto esencial para los habitantes del mundo rural y esperamos de parte suya singular atención para velar que se mantenga este carácter. 2. A nuevas y mayores responsabilidades que conlleva la ley a los Servicios, entonces, resulta más que adecuado que la ley contemple recursos, apoyo y herramientas a los Servicios para emprender en estos nuevos caminos que la autoridad propone. Así entonces, es necesario que se lleve a cabo un esfuerzo por parte del Estado para legalizar la propiedad de los terrenos en que se encuentran las instalaciones y oficinas, y entregarlos debidamente saneados a los Comités o Cooperativas correspondientes, de otra manera Sr. Ministro, más que un beneficio, nos entregan un problema. En este mismo sentido es preciso que se haga un esfuerzo por parte de su Ministerio para inscribir los Derechos de Agua, vital elemento que es la esencia del hacer de los Servicios, y entregar dichos derechos a los Comités y Cooperativas. También se hace necesaria la recopilación y entrega a cada Servicio de toda la información que actualmente está en manos de las Unidades Técnicas o del MOP, en materia de planos, documentos técnicos, y toda otra información relevante, además del compromiso escrito de la Superintendencia de Servicios Sanitarios que no se va a exigir a los permisionarios o licenciatarios información histórica distinta a la entregada por el MOP. 3. Para hacer frente a los nuevos desafíos y responsabilidades que este cuerpo legal entrega a los permisionarios y licenciatarios, es preciso contar con la adecuada asistencia técnica y administrativa, pilar sobre el cual descansa, parte importante de los logros que exhibe el Programa, especialmente en lo que dice relación con: profesionalizar equipos, nuevos servicios de recolección aguas servidas, tratamiento y disposición. 4. A objeto de hacer entrega de Servicios de APR en condiciones de operación es preciso impulsar el mejoramiento y ampliación de los Servicios, sobre la base de un levantamiento de necesidades y demandas. 5. Extender el Programa de APR a localidades semiconcentradas. 6. Impulsar el Saneamiento Rural como parte del Programa de APR, que comprenda la recolección, tratamiento y disposición de aguas servidas. 7. Abrir la participación de los Servicios de APR en la definición de las Unidades Técnicas. 8. Recoger las mejores prácticas en materia de APR y favorecer su difusión y replica en los distintos Servicios. 9. Siendo mayores las responsabilidades y el tiempo que tendrán que invertir los Dirigentes en esta nueva forma de Administración que se plantea, es necesario estudiar entonces una dieta para ellos, lo que debería quedar plasmado en este cuerpo legal, de manera tal que el tiempo que utilicen en estas tareas sea en cierto modo recompensado. En estos puntos se recogen nuestras principales inquietudes y preocupaciones, las que esperamos sean recogidas adecuadamente en el anteproyecto de Ley de APR, documento que entendemos esta actualmente en proceso de revisión en el Ministerio. Mas aún, Sr. Ministro aspiramos a desempeñar un rol mucho más activo en este proceso, a contar con los espacios para escribir en conjunto las reglas y normas que van a decidir el agua y su semilla de futuro, para nuestros hijos y los hijos que vengan tras ellos. Sr. Ministro hace 43 años se inició el Programa de APR y se invitó a participar a la comunidad usuaria, fruto de ello el mundo rural ha experimentado un importante salto hacia una mejor calidad de vida. Hoy el Programa tiene la posibilidad de dar otro importante paso y comunidades como las que suscriben esta carta, creemos necesario participar y colaborar para llevar a nuestros vecinos, sus familias y las familias que vengan después de nosotros, progreso y desarrollo, en suma un mejor mañana, un futuro escrito con mano solidaria, participativa, fruto de un hacer de todos y con todos. A la espera de una favorable acogida de su parte le saludan atentamente a Ud.: