ZOS HABROCHA Valores de la Torah, El Eemos & El Ovos En la porción de la Torah, Zos Habrocha, aprendemos como Dios nos dio la Torah. Nosotros leemos, “ Con su mano derecha El les presento la Torah ardiente.” Hoy, nos hemos reunido para dedicar una Torah. Cuando la Torah fue dada originalmente al pueblo Judio en el Monte Sinai, los rabinos nos dicen que Israel era como una novia y Dios era como el novio, y la Torah era el contrato matrimonial. El pueblo Judío es conocido como Israel. El nombre Israel, Yisroel, es compuesto de los nombres de todos los padres y de todas las madres. La Yud esta en lugar de Yitzchak y Yaacov, la Reish esta en lugar de Rachel Y Rivkah, la Shin esta por Sora, la Alef esta por Abraham, y la Lamed esta por Leah. Israel significa valores. Los valores del Ovos y el Eemos deben ser nuestros si es que vamos a observar completamente la Torah. Abraham esta en lugar de la caridad, por Gemilas Chasodim. Yitzchak esta por Yeera, por Avodah, por una relación personal con Dios. Desafortunadamente, hoy en América muchos Judíos buenos son muy dadivosos, pero no tienen una relación personal con Dios. Ellos no vienen a orar a la sinagoga porque es aburrido. Si, orar es muy aburrido si tu no crees que hay un Dios a quien tu puedes orar y quien escucha tus oraciones. Nosotros no solo debemos tener caridad en el Judaísmo, pero una relación personal con Dios. Finalmente, ahí esta Yaacov, y Yaacov esta en lugar de la verdad. La Torah es verdad. No es solamente un montón de folclor. No es solamente un montón de costumbres. Es verdad, que al seguir la Torah vivimos mejores vidas, vidas con las cuales nosotros tenemos el animo y fuerza necesaria para vencer nuestros problemas. Dios nunca nos prometió que si seguimos las palabras de la Torah no tendríamos problemas. Todo lo que El prometió fue que si seguimos las palabras de la Torah, El nos dará las fuerzas para vencer nuestros problemas. La Torah añade a nuestras vidas. Mejora nuestras vidas. Hace que la calidad de nuestras vidas sea mucho más mejor. Nosotros somos mucho más capaces de formar relaciones, de vencer nuestros problemas, de enfrentar la vida tal como es, no de la manera que nosotros esperamos que sea. La Torah nos da esperanza. Sara, Rivka, Rachel, Leah también representan valores Judíos. Sara representa los valores del hogar. Ella sabía que su hogar tenía que ser puro y tenia que reflejar en todos sus aspectos los valores Judíos de moralidad y decencia. Ella no podía permitir que hubiera algún Ismael en su hogar. Rivka representa sacrificio. Para tener un hogar Judío, algunas veces tienes que sacrificarte. Ella envió a Yaacov lejos del hogar, y ella no lo vio por 22 anos. De hecho, algunos dicen que ella no lo vio más. Ella tuvo que sacrificarse para preservar el Judaísmo. Finalmente, tu tienes a Leah. Leah fue una mujer que tuvo que combatir el engaño del mundo. Aunque ella era una beneficiaria del mundo, en efecto, ella siempre tuvo que combatir el prejuicio y el terrible engaño y maltrato del mundo. Su padre la hizo ir a Jacob en su noche de bodas pretendiendo ser Rachel. Ella no tenía opción. Ella tuvo que vivir con esta decepción durante toda su vida. Nosotros los Judíos hemos sido sujetados a persecución y engaños, duplicidad, y conspiraciones de los demás, y muchas veces hemos sido forzados a hacer cosas que verdaderamente no quisimos hacer, pero aun así tuvimos que mantener nuestro equilibrio. Nosotros tuvimos que continuar manteniendo nuestra dignidad y nuestra fuerza. Nosotros tuvimos que tratar de vencer el engaño del mundo y vivir vidas de decencia y moralidad. Rachel era especial. Rachel represento también los valores principales, viviendo el valor principal de vivir Judiamente en el mundo no importando lo que digan. Cuando el Templo fue destruido, Abraham Avinu vino delante de Dios y dijo, “Dios, Tu tienes que salvar al pueblo Judío. Dios yo estaba dispuesto a dar mi vida por el pueblo Judío. Yo estaba dispuesto a tirarme en el horno ardiente.” Dios le dijo a Avraham, siéntate. Yitzchak vino después. El dijo, “Dios yo estaba dispuesto a estirar mi cuello en la Akedak por ti, a sacrificar mi vida por ti. Tu tienes que salvar al pueblo Judío.” Dios le dijo, siéntate. Entonces Jacob vino y dijo, “Yo estaba dispuesto a pelear con mi hermano, y dar mi vida por el pueblo Judío. Tu debes salvar al pueblo Judío.” Dios le dijo también que se sentara. Moisés vino y dijo, “Yo estaba dispuesto a morir por el pueblo Judío, también, tienes que borrarme de Tu libro.” Y Dios le dijo que se sentara, también. Entonces Rachel vino y le rogó, “Cuando mi hermana iba a ser avergonzada por que fue forzada por su padre a casarse con Jacob, yo le di a mi hermana las senas secretas que Jacob y yo habíamos acordado, porque nosotros sabíamos que mi padre podía hacernos una mala jugada, pero yo no quería que mi hermana, Leah fuera avergonzada y por ello le di las sanas secretas. Dios tu tienes que salvar al pueblo Judío porque yo estaba dispuesta a vivir por el Judaísmo no solo morir por el. Yo estaba dispuesta a implementarlo en todos sus aspectos de la vida, aun cuando fuera duro y doloroso, aun cuando yo tenía que renunciar al hombre que amaba por mi hermana.” Dios dijo, “Por tu causa Yo salvare al pueblo Judio.” Por ello, nosotros sabemos que Rachel no fue sepultada en Maavas HaMachpela, sino en Bethlehem, que cuando el pueblo Judío fuera al exilio, ella clamaría por ellos y oraría por ellos. “O, mi hijo, mi precioso hijo, Efraim.” El pueblo Judio siempre ha sobrevivido porque hemos mantenido los valores de la Torah, los valores que los padres y madres vivieron y delinearon. Los rabinos nos dicen que cuando Rabino Moisés dedico el Mishkan, el bendijo al pueblo Judío. Los rabinos preguntan, que significa que el bendijo al pueblo Judío? Dios ya había bendecido al pueblo Judío. Los rabinos explican que la palabra, Torah, se compone en la Gematria de 611 – la Tav es 400, la Reish es 200, la Vav es 6 y la Hey es 5, por ello 611. Cuando nos enseñan la Torah, Moisés nos dio solo 611 de los 613 mandamientos. Dos mandamientos Dios nos dio por Si Mismo, los primeros dos mandamientos de los Diez Mandamientos. Dios bendijo al pueblo Judío con la Torah, al permitir que Moisés nos enseñara 611 mandamientos. Nosotros ahora podemos vivir vidas de dignidad y respeto propio. Nosotros podemos mejorar nuestras vidas al vivir de acuerdo a la Torah, pero nosotros tenemos que quererlo. Nosotros tenemos que querer guardar la Torah. Esta es la bendición que Moisés le dio al pueblo Judío, que nosotros queramos guardar la Torah. Dios nos dio dos mandamientos que nos deben alentar a querer guardar la Torah: 1.) “Yo Soy el Señor Tu Dios.” 2.) “No tendrás dioses ajenos delante de Mi.” Nosotros debemos siempre darnos cuenta de esto para que tengamos el deseo interno de cumplir la Torah en todos sus aspectos. Entonces nuestras vidas serán mejoradas y viviremos mejores vidas. El pueblo Judío no necesariamente será rico en cosas materiales, pero ellos serán ricos en cosas espirituales. Todos nosotros sabemos que gran bendición la Torah puede ser para cada uno de nosotros. Esa fue la bendición de Moisés. Es un evento tan feliz el estar en una ocasión donde nosotros estamos dedicando otra Torah para la comunidad. Que todos vivamos sus valores. Que todos nosotros, como Abraham, Yitzchak, Yaacov, Sara, Rachel, Leah, seamos verdaderos Judíos en todos los aspectos de ese término. Que seamos dignos hijos de Israel porque hemos practicado Gemilas Chasodim, porque nosotros tenemos una relación personal con Dios, y porque nosotros sabemos que la Torah es verdad. Que todos queramos mantener un hogar Judío puro, y que todos estemos dispuestos a sacrificarnos por nuestra religión, y que todos estemos dispuestos a lidiar con el engaño del mundo, para que el Mesías venga pronto y en nuestros días. Amen.