ÉTICA Y FUNCIÓN PÚBLICA - Alfonso Zambrano Pasquel

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ÉTICA Y FUNCIÓN PÚBLICA
Juan Falconi Puig
ANTECEDENTES.El
vocablo
ética
viene
del
griego
“éthos”
que
significa costumbre y se lo entiende como sinónimo
de moral, que viene del latín “more” que también
significa costumbre.
En la antigüedad se entendió
el vocablo en sentido adjetivo y no sustantivo ya
que
se
usó
la
comportamiento
acepción
humano
y
ética
surgió
para
calificar
entonces
la
el
ética
como doctrina de las costumbres, con base en ciertos
principios establecidos por el hombre mismo.
Con la
evolución del vocablo se confirió a éste un sentido
más específico del aludido comportamiento moral y
así se fue identificando lo ético con lo bueno, lo
honesto, lo justo y, en general, lo recto dentro de
un orden determinado.
Actualmente
se
relacionada
con
mantiene
los
actos
la
función
humanos
en
adjetiva
función
de
órdenes de conducta fundamentales para la vida y
desarrollo del hombre; el derecho y la moral, a su
vez consideradas como disciplinas éticas.
Autores
clásicos
como
por
ejemplo
Giorgio
del
Vecchio traduce el principio ético en un doble orden
de valoraciones: los actos humanos en relación a su
actor, sujeto a un orden de necesidad positiva o
negativa que es el deber y las acciones humanas en
comparación
con
los
actos
de
otros
sujetos
para
llevar a una consideración objetiva del obrar. Así
la relación de compatibilidad entre acto y acto se
considera en forma objetiva más que subjetiva del
obrar.
No
olvidemos
que
los
principios
preliminares
del
ordenamiento de la conducta humana se derivan del
hechizo,
del
tabú
y
fundamentos
que
podrían
denominarse “mágicos” que no establecían un papel
racional entre el medio y el fin de la voluntad y el
comportamiento humano.
Con la organización social
sedentaria y el elemento religioso, más tarde entra
en
juego
el
conciencia
aspecto
colectiva
político,
que
mantiene
determinada
por
la
una
instancia
divina y trascendente que se va estructurando en
razón
de
los
familiares,
la
fines
sociales.
cooperación
Los
social
e
sentimientos
inclusive
la
división del trabajo van configurando el concepto
del deber que adquiere connotación
El
daño
genera
la
reacción
de
moral.
venganza
que
las
comunidades aceptan como sanción que va dando vida a
la idea de justicia bajo una estructura lógica que
cobra
fuerza
y
se
unifica
religiosos y políticos.
vida
social
ordenada
sobre
fundamentos
En el Oriente antiguo la
estaba
dada
con
base
en
la
relación entre el cielo, el soberano y el pueblo que
era la totalidad.
El cielo inspiraba al soberano y
ofrecía el bienestar al pueblo y las faltas morales
del
soberano
acarreaban
desastres
y
penurias
que
eran la manifestación de desacato al cielo y esta
fue la base de la doctrina moral de Confucio.
Para
los
egipcios
conducta
estaba
el
dado
criterio
regulador
de
su
por
creencia
de
la
la
prolongación de la vida después de la muerte, cuando
el
alma
era
justificada
por
los
dioses
según
el
comportamiento en la vida terrena. Evidencias son
las
inscripciones
tumbas,
cual
de
contenido
consejo
y
espiritual
máxima
para
en
las
guiar
el
fue
la
comportamiento humano.
La
ética
del
manifestación
pueblo
de
sus
hebreo
antiguo
consideraciones
religiosas
y
ejemplo son los Diez Mandamientos que, con el paso
del tiempo se convirtieron en la base de la doctrina
cristiana
con
su
inmensa
aceptación
histórico-
social. En estas tablas están presentes los aspectos
éticos de honrar a los padres, no matar, no robar,
no
levantar
falso
testimonio
o
codiciar
bienes
ajenos. En síntesis, las Tablas de la ley de Dios
contienen la pauta para la vida del hombre en sus
aspectos fundamentales: su honor y sus bienes.
En la India, Buda representa la conciliación de la
religión
Brahamánica
humano.
El
y
hombre
la
vida
sólo
autónoma
podía
ser
del
ser
virtuoso
únicamente a través de una vida ajena a los aspectos
materiales y consagrados a la meditación: El asceta
que no
suple las miserias humanas producto de las
pasiones
del
espíritu
que
nunca
alcanzan
total
satisfacción y en su plan de vida no entran el lujo,
el orgullo, la vanidad o el placer superficial.
Los
sofistas
intentaron
resolver
los
problemas
éticos manteniendo que todo depende exclusivamente
de la voluntad y criterio del individuo proclamando
la
inutilidad
de
la
obligatoriedad
moral
y
es
Sócrates quien considera la ética como el aspecto
central
de
la
actividad
del
hombre,
que
debe
llevarlo a su perfección, dando a sus reflexiones
filosóficas un contenido moral.
Para Sócrates es
moral
acuerdo
todo
lo
que
está
de
con
el
conocimiento del bien. El hombre es bueno por su
saber,
por
su
conocimiento
verdadero
que
necesariamente llega al bien. Pero fue Aristóteles
el filósofo que trató a la ética como disciplina,
hasta
el
esencia
de
determinado
la
virtud.
modo
Ya
de
con
ser
la
de
una
cosa,
influencia
de
Platón la virtud es trasladada al hombre como una
cualidad propia, que se manifiesta como el justo
medio en su obrar.
Los Escolásticos restringieron la ética al ámbito
moral,
y
siguiendo
a
Sócrates
a
ese
comprendía lo relativo al derecho.
Tomás
de
Aquino
la
justicia
campo
moral
Así, para Santo
tiene
el
carácter
principal de la moral. Para Santo Tomás todos los
bienes son parciales y finitos y no llevan a la
perfección del hombre, que consiste en entender la
verdad suprema que es también la bondad, fin último
de la verdad a la que puede aspirar el hombre.
El sentimiento de aprobación o desaprobación de las
acciones humanas estructuran la noción de moralidad
y el juicio moral que toda persona hace sobre sus
propios actos, se fundamenta en el juicio moral que
antes se había formulado sobre los actos de otros.
Para John Stuart Mill prevalece la vida moral sobre
la vida psicofísica y el mayor valor del altruismo
frente al egoísmo.
Y el monje Tomasio, allá por
1705, es quien se refiere a lo moral como relativo
al
fuero
interno
y
al
derecho,
como
relativo
al
fuero externo.
Kant,
en
cambio,
considerada
sobre
encima
la
de
rechaza
la
base
la
del
investigación
doctrina
obrar
sobre
ética
humano
el
por
elemento
ordenador
de
esos
contenidos
(la
felicidad
como
supremo bien) y excluye la contingencia empírica con
el
fundamento
del
comportamiento
ético.
La
ley
moral es conocida por el hombre mediante la razón y
su obligatoriedad es impuesta por el deber.
Eso es
lo que lleva al hombre al sometimiento a la ley
moral.
Kant establece tres postulados básicos: la
libertad, la inmortalidad del alma y la existencia
de Dios.
La moral se convierte en una estructura ideal sobre
el hábito y sobre la costumbre, pero aquella, la
moral,
está
sujeta
a
una
valoración
como
cuando
determinada actuación se la califica de buena. Sin
embargo, la ética tiene grandes enemigos porque lo
que hoy importa es el tiempo
el dinero.
DE LOS FUNCONARIOS PUBLICOS.El sistema político democrático tiene como pilar la
legitimidad que se nutre cuando el Gobierno trata de
solucionar los grandes
la pobreza,
y
problemas nacionales, como
trabaja con honestidad y objetividad
en el ejercicio de la función pública,
siempre
como
funcionarios
meta
deben
el
bien
común.
necesariamente
ética de la función pública.
teniendo
Para
esto
los
actuar
con
una
La
falta
de
ética
en
la
función
pública
se
manifiesta en la corrupción de los funcionarios y
combatirla tiene que ser permanente, para lo que no
es suficiente la CCCC, sino arraigando los valores
morales que deben primar en el manejo de la cosa
pública. Para esto, el estudio de la cívica y de la
ética en los niveles medios y superiores hará que
lleguen a la función pública ciudadanos conscientes
de
ser
aunque
instrumentos
no
tengan
eficaces
estímulos
para
y
la
estén
sociedad,
sujetos
a
represalias, cuando quieren imponer reglas éticas en
la función pública.
Tenemos abundantes
obligan
Publica
a
la
y
funcionarios
ciudadanos
leyes y órganos de control
fiscalización
reglan
la
públicos
para
de
la
Administración
responsabilidad
y
los
informarse,
que
derechos
mediante
la
de
los
de
los
Ley
Transparencia y Acceso a la Información Pública.
de
Y
si bien el funcionario público sabe cuales son sus
derechos, obligaciones y prohibiciones, tanto en el
campo
ético
como
jurídico,
el
problema
principal
estriba en que los órganos de control a veces no
controlan y las leyes no se cumplen.
La lealtad para con las instituciones y las normas
vigentes
deben
primar
en
el
desempeño
del
cargo
público y privado. Usar correcta y honestamente los
recursos públicos y no abusar del Poder Público con
fines corruptos como el
nepotismo o para conseguir
ventajas
permitir
personales,
intereses
entre
lo
no
público
el
y
lo
conflicto
de
particular
o
privado, excusándose e inhibiéndose, cuando sea del
caso, es cumplir por parte del servidor público la
ética, mereciendo la recompensa de la sociedad, no
de los particulares.
La
corrupción
amenaza
sistemáticamente
nuestro
sistema democrático cuando ciertos Gobiernos pierden
legitimidad
rápidamente
consolidar
la
ciudadanos
ya no creen.
y
democracia,
por
ellos
en
la
no
que
podemos
nuestros
MORAL Y POLITICA.El estudio de la relación entre la política y la
moral es antiguo y
se plantea en los siguientes
términos: todo lo que es legítimo
en política ¿es
moral? Se halla el gobernante obligado a cumplir su
palabra y ofertas, que es una obligación moral para
con los electores. Entre nosotros se considera buen
político aquel que justifica porque no cumple su
palabra, partiendo del supuesto que el fin justifica
los medios.
Max Weber habló de la relación entre la política y
la
moral,
distinguiendo
entre
la
ética
de
la
convicción y la ética de la responsabilidad: quien
actúa
en
la
primera,
respeta
los
principios
de
conducta vigentes desde antes, independientemente de
sus
consecuencias.
Quien
actúa
en
la
segunda,
considera cumplir su deber obteniendo resultados que
para
el
político
corrupto
confunde
el
interés
particular con el público y el beneficio personal
con el general. Constant resume esta situación en
los
términos
menudo
siguientes:
denunciados,
"Los
acusados
Ministros
a
veces,
serán
a
raramente
condenados y nunca castigados".
James
Madison,
en
Federalista,dice que
el
gobierno
gobernaran
no
a
el
51
de
El
si los hombres fuesen ángeles,
sería
los
Capítulo
necesario.
hombres,
Si
sobrarían
los
ángeles
tanto
los
controles internos como externos sobre el gobierno.
Al organizar un gobierno que ha de ser administrado
por hombres para los hombres, la gran dificultad
estriba en esto: Primeramente hay que capacitar al
gobierno para mandar sobre los gobernados y luego
obligarlo a que se regule a sí mismo. El hecho de
depender del pueblo es, sin duda alguna, el freno
primordial e indispensable sobre el gobierno, pero
la experiencia ha demostrado a la humanidad que se
necesitan precauciones auxiliares.
Hume, por su parte, señala que: "Al idear cualquier
sistema de gobierno habría que suponer que todo ser
humano
es
un
bribón
que
carece
de
todo
otro
propósito que no sea su interés privado. John Stuart
Mill
advirtió
en
su
famosa
obra
Consideraciones
sobre el Gobierno Representativo que: "El verdadero
principio del gobierno constitucional es que hay que
dar por sentado que el poder político se empleará
abusivamente para promover los fines particulares de
quien lo detenta", y Alfred Marshall efectuó una
contraposición muy ingeniosa: "¿Piensa usted en un
gobierno
realmente
sabio,
justo
y
fuerte
o
el
gobierno tal como es en la actualidad?".
Pero en una elección tras otra los electores son
fácilmente engañados por
obstante
que
está
aquellos que elige, no
demostrado
que
sólo
buscan
su
propio beneficio. Según Arthur, estos disponen de
información y manejan grandes recursos públicos, con
los que, por ejemplo, pueden actuar en el Mercado
alterando los precios, y la responsabilidades por
sus
actos
con
frecuencia
son
determinadas
años
después, si acaso se llegan a determinar.
Uno
de
pública
los
es
efectos
la
más
denominada
graves
Ley
de
de
la
corrupción
Gresham
de
la
Interacción Social, según la cual la mala conducta
expulsa
a
la
buena
y
todas
las
personas
son
inducidas por la presencia de unos pocos a adoptar
un
comportamiento
sostienen que
interesado.
Brennan
y
Buchanan
las instituciones deben ser diseñadas
de forma que "...el altruismo o la solidaridad y la
buena educación sean apreciados en todo su valor,
pero no se las puede dar por supuestas". Es decir,
no se puede dar por supuesto que el ejercicio de los
poderes discrecionales de los políticos se ejerzan
en
interés
de
restricciones
efecto
los
demás,
a
institucionales
(Rechazo
del
Modelo
menos
que
del
que
existan
aseguren
déspota
ese
bueno
o
benevolente).
Robert
Klitgaard,
pública,
en
sus
estudioso
libros
de
la
corrupción
la
Corrupción
Controlando
(1990) y Ajustándonos a la Realidad (1994),
propuestas
válidas
incrementa
allí
públicos,
más
funcionarios
y
dice:
donde
reglas
y
la
existe
corrupción
más
se
monopolios
discrecionales
menor
hace
para
transparencia.
los
Klitgaard
construye la teoría de incentivos para disminuir la
corrupción, que parte de la crítica a la falacia
común: se asume con frecuencia que los gobiernos son
corruptos porque la gente es inmoral, y concluye que
la solución es educar a los ciudadanos, lo que se
conseguirá sólo a través de generaciones.
En los últimos años se ha hablado mucho de codificar
las
normas
éticas.
Y
sobre
eso
habla
el
Informe
sobre Normas en la Vida Pública del Comité Nolan, de
1995
en
Ecuador.
Gran
Bretaña,
Dentro
del
que
debería
Programa
difundirse
en
Latinoamericano
de
Investigación Conjunta sobre Política Criminal hay
un
temario
sobre
la
corrupción
de
funcionarios
públicos, iniciado en 1995. Y en ese año se llevaron
a cabo
simposios sobre la materia en París (13 y 14
de mayo) y Buenos Aires (29 de abril), ambos con
importantes conclusiones. Existe también el Informe
de la Comisión Nacional de Ética Pública de Chile
(1996), documentos de Naciones Unidas con medidas
sobre la corrupción en la Administración Pública, y
la Convención Interamericana contra la Corrupción de
la Organización de Estados Americanos, suscrita en
Caracas en marzo de 1996.
ETICA Y CORRUPCION EN LA FUNCIÓN PÚBLICA.Toda política para combatir la corrupción, que en
nuestro
país
debería
adelantar
la
CCCC,
debe
considerar, al menos, lo siguiente:
a)
Políticas
maquinaria
preventivas
para
administrativa,
simplificar
que
complica
la
la
actividad pública y también la privada, poniendo
dificultades para “vender” facilidades.
b)
Políticas
encaminadas
a
terminar
con
la
impunidad.
c) Políticas educativas:
la
honradez,
desde
los
el
servicio
primeros
promover la decencia,
público
niveles
de
y
similares
educación.
No
puede dejar de mencionarse el papel fundamental
que juega en este proceso la opinión pública,
especialmente a través de los periodistas y los
medios de comunicación serios, esto es los que
no
son
parte
activa
de
la
corrupción,
que
practican la ética periodística.
Nuestro país ha visto, principalmente desde 1998,
una serie de denuncias y escándalos relacionados con
el
manejo
público,
humana,
arbitrario
que
ni
no
en
se
la
de
fondos
públicos
justifican
pérdida
en
de
la
y
del
naturaleza
valores,
pues
el
problema tiene raíces profundas. El control de los
órganos de control no funcionó y como consecuencia
de ello los fondos públicos se
dilapidan sin la
rendición de cuentas, prevista en la Constitución.
El sigilo bancario se aplica de manera selectiva y
para los bancos que no cumplen con informar al juez
no hay sanción específica, aparte de una queja al
órgano
de
control.
El
abuso
de
la
personalidad
societaria o jurídica, como la sociedad anónima o
limitada, pone a buen recaudo el patrimonio, ora se
trate del mal habido en la función pública, ora sea
el
de
lo
cónyuges
que
terminan
y
liquidan
la
sociedad conyugal. La persecución de los delitos es
inútil sin una fiscalía seria y jueces probos, que
aporten a la credibilidad de la Función Judicial.
Sobre
estos
temas
el
constitucionalista
español
Francisco Tomas y Valiente, decía: "que el más grave
efecto de la corrupción, entendida como simbiosis
perversa
entre
ilícitos
beneficios
privados
y
ejercicio del poder público, consiste en que si es
tolerada de modo duradero produce descomposición del
sistema, porque desencadena un proceso de entropía
que puede acabar, no con la existencia del Estado
pero si con la del Estado democrático, etapa final
que se alcanza cuando ni los políticos elegidos ni
los ciudadanos electores creen ya en la democracia "
El Profesor Ciencia Política y de la Administración
de la Universidad de Alicante (España), José Manuel
Canales Aliende, en sus reflexiones sobre la ética
pública, en el VII Congreso Internacional del CLAD
sobre la Reforma del Estado y de la Administración
Pública, Lisboa, Portugal, entre el 8-11 Oct. 2002,
dice
que
este
no
es
un
tema
novedoso,
sino
permanente, que hoy aparece reforzada como una lucha
contra la corrupción; y que en algunos países como
en
Estados
Watergate
Unidos,
en
con
1978,
motivo
empieza
del
a
escándalo
tener
un
de
lugar
prioritario.
Los únicos recursos que finalmente cuentan son los
recursos
humanos.
respetar
a
Entonces
nuestros
debemos
jueces,
comenzar
empezando
por
por
los
políticos, y ciertos medios de comunicación que los
desacreditan ante la ciudadanía cuando no atienden
favorablemente
sus
intereses,
independiente
de
la
legalidad de los mismos, olvidando que la mayoría de
los
funcionarios
y
los
consecuencia del sistema.
expiatorios favoritos y
jueces
son
apenas
Estos tienen unos chivos
no hay ley o funcionario
que les ponga freno.
Según Luís F. AGUILAR (1996), "La nueva delimitación
del ámbito del Estado respecto del mundo privado y
social
recorta
y
adelgaza
a
la
Administración
Pública como conjunto de organizaciones, programas,
procesos y personal. Por otro lado, la nueva forma
de cumplir las funciones públicas, que comienza a
incorporar
organizaciones
gubernamentales
ejercicio
y
el
(lucrativas
privadas
o
instrumental
no),
y
no
transforma
el
administrativos.
La
primera tendencia de redimensionamiento del Estado
impacta en la dimensión de la cantidad: un Estado
reducido conlleva un aparato reducido. La segunda
tendencia, relativa al nuevo patrón de rectoría o
gobierno, impacta en la dimensión de la calidad".
Otros autores, como CUNILLGRAU (1999) sostiene que:
"sin
reforma
política
en
sentido
amplio
no
hay
reforma administrativa posible de traducirse en un
cambio real y sostenido a favor de la sociedad". La
ética pública se caracteriza por el servicio público
bueno y oportuno. Entonces es de la ética de la
función pública el profesionalismo, la eficiencia,
la
calidad
de
la
atención
y
el
servicio
al
ciudadano, la imparcialidad, la transparencia y la
sensibilidad para entender que el ciudadano es quien
lo remunera y la razón de ser de la existencia del
funcionario público.
En el ya referido Informe Nolan, así denominado por
el
Presidente
británico
que
entonces
primer
de
la
elaboró
Comisión
en
ministro,
1994,
un
del
a
Parlamento
petición
documento
o
del
informe
sobre "Normas de conducta para la vida Pública", que
afectaba a la ética y
a la clase política, se
estableció siete principios de la Vida Pública, a
saber:
1)
Desinterés:
deberían
tomar
Los
que
ocupan
decisiones
sólo
cargos
con
públicos
arreglo
al
interés público;
2) Integridad: Los que ocupan cargos públicos no
deberían tener ninguna relación financiera u otra,
con terceros u organizaciones que puedan influirles
en el desempeño de sus responsabilidades oficiales;
3)
Objetividad:
En
la
gestión
de
los
asuntos
públicos, incluidos los nombramientos públicos, la
contratación pública, o la propuesta de individuos
para recompensas y beneficios, los que ocupan cargos
públicos deberían elegir por el mérito;
4) Responsabilidad: Los que ocupan cargos públicos
son responsables de sus decisiones y acciones ante
el público, y deben someterse al control que sea
apropiado para su cargo;
5)
Transparencia:
Los
que
ocupan
cargos
públicos
deberían obrar de la forma más abierta posible, en
todas
las
acciones
decisiones
que
que
realizan.
toman
y
Deberían
en
todas
las
justificar
sus
decisiones y limitar la información sólo en el caso
de que esto sea lo más necesario para el interés
público;
6)
Honestidad:
Los
que
ocupan
cargos
públicos,
tienen la obligación de declarar todos los intereses
privados
relacionados
públicas
y
cualquier
conflicto
de
con
tomar
sus
responsabilidades
medidas
que
surja,
para
de
tal
solucionar
forma
que
protejan el interés público.
7)
Liderazgo:
Los
que
ocupan
cargos
públicos
deberían fomentar y apoyar estos principios con su
liderazgo y su ejemplo.
Estados Unidos tiene la "Oficina del Gobierno de
Ética" dependiente del Presidente, y una "Oficina de
Consultas
Especializadas"
empleados
públicos
corrupción
públicas;
que
y
para
proteger
denuncien
nosotros,
no
el
a
fraude
obstante
los
y
que
tenemos en la Ley Orgánica del Ministerio Público
normas que protegen al denunciante, no es raro que
sea
éste
y
sancionado;
no
el
denunciado,
independiente,
el
claro
que
termina
está,
de
la
denuncia maliciosa que nuestros jueces son tímidos,
por decirlo de alguna manera, en declarar, cuado el
denunciante
es
persona
de
cierto
perfil,
particularmente de los que “fungen” de periodistas.
El Comité P.U.M.A. de la O.C.D.E., ha señalado en
mayo
de
1998,
los
siguientes
principios
o
recomendaciones de ética en el servicio público:
a)
las
normas
de
ética
para
el
servicio
público
deberán ser muy claras.
b)
las
normas
de
ética
deberán
plasmarse
en
el
ordenamiento jurídico en una disposición concreta.
c)
una
conducta
ética
debe
ser
exigida
a
los
derecho
al
empleados públicos.
d)
los
empleados
públicos
tienen
conocimiento de sus derechos y obligaciones, cuando
se
les
exige
explicaciones
por
sus
actuaciones
indebidas.
e)
debe
existir
un
compromiso
y
un
liderazgo
político, que refuerce y apoye la conducta ética de
los empleados públicos.
f)
el
proceso
de
toma
de
decisiones
transparente y permitir la investigación.
debe
ser
g) las líneas generales o maestras de la relación
entre
sector
público
y
sector
privado
deben
ser
claras.
h) los directivos públicos deben de tener y fomentar
una conducta ética.
i) las políticas de gestión, los procedimientos y
las prácticas administrativas deben incentivar una
conducta ética.
j)
la
regulación
y
la
gestión
de
los
recursos
humanos deben motivar una conducta ética.
k)
deben
establecerse
mecanismos
adecuados
de
responsabilidad para el servicio público.
l)
deben
fijarse
disciplinarias
procedimientos
adecuadas,
a
fin
y
de
sanciones
castigar
las
conductas irregulares.
En el caso español, la Administración Pública es una
organización
compuesta
de
personas
que
gestionan
intereses generales, conforme al artículo 103 de la
Constitución. “La idea de servicio debe presidir la
actuación
de
cualquiera
que
realiza
una
función
pública” (RODRÍGUEZ-ARANA, 1993).
No
se
puede,
pues,
separar
la
relación
entre
el
contenido de la ética pública y la teoría política.
Por
ello
la
lucha
contra
la
corrupción
y
la
injusticia son, entre los fines de la ética pública,
los más importantes.
DE LOS ESTUDIANTES.Por nuestras Facultades de Derecho pasan estudiantes
que egresan como Abogados, pensando que la profesión
es
lucrativa
y
que
lo
importante
es
conocer
las
artimañas o defender cualquier tema, independiente
de lo repudiable que pudiera ser la causa y olvidan,
cuando los han estudiado, los postulados clásicos de
Ángel
Osorio
o
el
Decálogo
de
Couture.
Que
el
abogado se debe al cliente, no cabe duda, pero sólo
en cuanto a colaboradores de la administración de
justicia.
La meta no puede ser, entonces, ganar el
pleito por cualquier medio y menos que se consagre
una
injusticia
sociedad.
que
afecte
en
definitiva
a
la
Por eso decía Ángel Osorio: Mejor abogado
es aquel que más sentencias de no ha lugar dicte,
antes de asumir un caso.
Estudiando
espíritu
con
y
profundidad
adquiriendo
moral,
mas,
se
va
solvencia
atendiendo
intelectual
lamentablemente,
el
y
nuestros
universitarios, después profesionales, burócratas o
servidores públicos, en buena parte no tienen acceso
ni siquiera a lo fácil de examinar, a lo preparado y
digerible,
pues
tener
recursos
los
computadoras
que
sus
les
limitaciones
para
empiezan
adquirir
permita
desde sus propios domicilios.
por
libros,
acceder
al
no
menos
Internet
A muchos de estos no
les sirve la inteligencia ni el afán de trabajar
sino
las
facilidades
y
oportunidades
materiales,
cuya
falta,
no
les
permiten
llegar
a
ser
buenos
profesionales, menos distinguidos.
Los problemas éticos para los profesionales empiezan
por el abandono de la lectura, del estudio y de la
reflexión,
haciendo
prevalecer
resultados
prácticos
e
sobre
inmediatos,
ellos
los
olvidando
al
final del día que la alta cultura es, como dice
Carlos Vaz Ferreira, como el curso superior de los
ríos, cuyas márgenes pueden ser quizás, infecundas,
pero que alimenta el curso inferior, cuya corriente
fertiliza naciones enteras.
idea
de
mostrar
demostrarlo
no
su
es
El que estudia con la
saber,
el
que
de
exhibirlo
estudia
para
y
de
saber
ni
necesariamente entender, diferencia fundamental que
en
la
práctica
permitir
que
a
el
veces
olvidamos.
promedio
estudiantes,
No
intelectual
profesionales,
de
podemos
nuestros
catedráticos,
administradores de justicia o de la cosa pública en
general,
esté
sometido
incapacidad
o
del
procuramos
ni
ver
cuenta;
para
y
a
estado
ni
esto
la
de
hablar
el
medida
ánimo
en
de
el
nuestra
que
no
por
nuestra
propia
principal
remedio
es
no
abandonar el estudio y la reflexión, independiente
de obtener el título o el empleo.
Las
profesiones
porque
destacan
de
lo
aquellas
llamadas
intelectual,
son
liberales,
objeto
de
hostilidad frecuente, precisamente por ese abandono
que nos lleva, a veces, a dejar de aprender después
de la universidad, principal fuente de cultura en
nuestro ambiente.
El mismo Vaz Ferreira se preguntaba si resultaría
importante
encierren
queriendo
discutir
una
si
especie
decir
existen
de
profesiones
inmoralidad
profesiones
tales
que
intrínseca,
que,
siendo
necesarias socialmente y aunque algunos las ejerzan,
no puedan, sin embargo, ser ejercidas con arreglo a
una moralidad absoluta, concluyendo no saber si la
sociedad podría organizarse de tal manera que la
profesión
de
abogado
fuera
en
todos
los
casos
prácticos compatible con la moralidad absoluta.
DE LOS ABOGADOS.En un foro de Abogados, principalmente, hablar de la
ética implica de su función social y los elementos
que le son confiados, de todas las clases que se
pueden resumir en la libertad, el patrimonio y la
honra.
Pocos profesiones como la del Abogado han
sido vilipendiadas porque algunos no cumplen con las
normas éticas ni el respeto así mismos y al título
que ostentan y de ahí que, muchas personas ven al
Abogado y lo consideran como un sujeto del que es
preciso
cuidarse
y
desconfiar
y
si
bien
estas
consideraciones producto de desmerecer la verdadera
misión del Abogado no deben afectar su estima, no es
menos cierto que para defendernos de los riesgos y
de
las
tentaciones
traicionar,
aún
que
pueden
llevarnos
inconcientemente,
los
a
nobles
principios del duro oficio de abogar, debemos tener
éstos muy claros para que los actos y procedimientos
ejecutados ante los tribunales o fuera de ellos,
estén sujetos no solo a la legalidad sino también a
la moralidad.
En nuestro medio, el problema estriba
en gran parte por no dar énfasis a la deontología
jurídica, a la valoración del derecho y la ética de
la abogacía; bien entendido que para ser juez hay
que ser antes abogado que haya ejercido la profesión
por un tiempo determinado.
Tenemos, pues, presente que el objetivo ético de las
personas que intervienen en el juicio ha de ser la
recta
y
través
oportuna
del
administración
descubrimiento
derecho real.
de
la
de
justicia
verdad
como
a
del
Este es el finis operis y debe ser el
finis operando porque lo demás, la remuneración, la
práctica
y
la
experiencia,
pasan
a
ser
fines
voluntariamente
nos
hemos
segundarios.
Los
abogados,
marginad
de
empero,
las
transformaciones
más
importantes,
coadyuvando al descrédito de nuestra profesión, en
la que la gente común no cree, como no cree en la
aplicación general de la Constitución Política de la
República
ni
en
las
leyes.
De
ahí,
consecuencia
lógica, desconfían de los tribunales que actualmente
no tienen pautas o moldes de estudio y sapiencia.
La realización de la justicia está necesariamente
subordinada al descubrimiento de la verdad y de ahí
que
no
sea
ético
patrocinar
una
causa
cuya
injusticia y falta de fundamentos, son conocidas de
antemano. La verdad es que de hecho en el Estado
actual
de
las
cosas,
hay
en
el
ejercicio
de
la
abogacía y lo mismo se podría decir de la política,
dificultades morales serias y algunas de solución
muy difícil, respecto de las cuales conviene estar
prevenidos.
Calamandrei decía que los abogados debemos llamar la
atención del cliente sobre la cuestión moral antes
que sobre la cuestión de derecho y hemos dicho con
Vaz Ferreira, que la solución es difícil, no caben
los facilismos que se adoptan en forma general para
resolver
problemas
morales;
facilismos
porque
no
ahondan ni van más allá de meras declaraciones. No
basta ser sincero e imparcial, como por ejemplo, que
el Fiscal no acuse sino cuando crea que deba acusar
y no pida más pena que lo que realmente proceda, o
el
abogado
no
defienda
los
litigios
injustos,
inclusive renunciando cuando se quiera obligarlo a
ello.
Pues,
éticos-morales,
para
resolver
necesario
es
mejor
tener
los
problemas
presente
todas
las dificultades que la práctica hoy presenta y así,
en
nuestro
caso,
al
menos,
está
a
la
vista
las
omisiones clamorosas que han ocasionado cuantiosos
perjuicios al Estado y pueblo ecuatorianos: El no
interponer
consulta;
recursos
el
dar
a
oportunamente,
ciertos
no
fallos
obstante
la
judiciales
un
alcance distinto al verdadero, el aplicar la ley
selectivamente
dejando
fuera
del
juicio
a
los
protagonistas más destacados de la infracción como
cuando se trata de los delitos financieros. Y esto
mientras
el
permanecer
responsable
mucho
tiempo
de
hurto
detenido
famélico
sin
ni
pueda
siquiera
fórmula de juicio.
Los
abogados
defendemos
en
asuntos
generalmente
complejos dentro de los que es frecuente que ninguna
de las partes tenga totalmente la razón, pero si
embargo,
en
reconocer
cuales
la
en
una
son
los
práctica,
demanda
seríamos
o
elementos
incapaces
petición,
o
al
de
inicio,
argumentos
que
no
favorecen a nuestros representados.
El
resultado
aspiraría
a
considerado
en
una
por
un
supuesto
demanda
lo
de
moral,
menos
este
tipo
ciertamente
ingenuo,
aparte
que
sería
de
la
teoría inveterada que dice que la verdadera misión
del abogado es defender o acusar sin consideración
de los argumentos contrarios puesto que la sociedad
está
ya
contraria
estructurada
tiene
de
también
manera
su
tal
que
defensor
la
y
parte
él
se
encargará de esgrimir sus propias defensas.
consiguiente –se dice-
Por
que el abogado no debe tener
escrúpulos y el exagerar, ocultar o confundir está
dentro de sus habilidades.
Sobre estos supuestos, agrega Vaz Ferreira, si esto
fuera legítimo y la teoría verdadera estaría ante
una de esas profesiones que el llama de inmoralidad
intrínseca, esto es profesiones tales que si bien la
sociedad
organizada
las
contempla
y
utiliza
no
podrían, sin embargo, desarrollarse en el marco de
una
moralidad
ideal
porque
necesitan
para
su
ejercicio una cierta dosis de inmoralidad.
Una cierta dosis… “y, en la práctica, lo que así
empiece
no
profesión,
puede
saberse
ciertamente,
donde
que
en
termine”.
su
Difícil
evolución
ha
llevado por ejemplo a desechar pruebas otrora con el
valor de las costumbres y hábitos morales como la
testimonial para que se diga hoy, al contrario de
antes, que los papeles priman sobre los testigos,
que los documentos vencen testigos y que este medio
de
prueba
está
absolutamente
desacreditado
y
por
supuesto con toda la razón. Claro el que apoya una
afirmación
con
base
en
hechos
falsos
tiene
para
ofrecer una prueba testimonial “adaptable” al punto
que hoy por hoy hay jueces que empiezan a considerar
que el testigo es un auxiliar de las partes y no del
juzgador.
El profesional y entre ellos el funcionario público
y el abogado deben particularmente cuidar de dos
aspectos
fundamentales
que
dicen
relación
a
su
propio espíritu para que no se tornen en peligrosos:
Ni
considerar
la
profesión
en
términos
muy
oportunistas; ni tampoco muy pesimistas y por ese
camino podemos llegar a observar la debilidad moral
manifestada principalmente por la separación entre
la moralidad práctica y la moralidad de palabra.
se
trata
de
escoger
la
alternativa
menos
mala
No
o
falta de no adecuarse a la que sea completamente
buena, en la que se desenvuelven cómodamente algunos
profesionales
que
pueden
inmoralidad permanente.
bordear
un
estado
de
Nos ayudará a no llegar a
eso separando la teoría de la práctica para que la
primera no resulte dañada por estos hechos difíciles
y
complejos
que
no
compliquen
la
vida
a
jueces,
administradores públicos y abogados; y no es válida
aquella reflexión que concluye en que, como no se
pude ser absolutamente moral en todos los tiempos y
todos los casos, mejor no considerar este aspecto
bajo la perspectiva moral, admitiendo entonces que
la
política
profesiones
intrínseca
y
que
la
abogacía
tienen
algo
son
de
esa
efectivamente
inmoralidad
de que hablaba Vaz Ferreira, al menos en
el sentido de no ser posible llegar en muchos casos
a
soluciones
legales
perfectas
o
absolutamente
puras, que sea el estado de espíritu sincero, el
saber
de
antemano
que
se
trata
de
decisiones
difíciles para buscar la mejor conducta, la mayor
justicia.
legal,
No es, pues, la solución, forzar el texto
los
códigos,
ni
inventar
teorías
para
explicar la contradicción, cuando debe ser tratada
como simple contradicción. Al respecto, Ángel Osorio
enseñaba: …”la astucia es el vicio, no el espíritu
de
la
profesión.
profesional.
La
El
fraude
falsedad
es
es
la
prostitución
la
apostasía
profesional”...
Desde el momento en que un abogado acepta un encargo
se debe al cliente y debe mantener hacia él una
actitud de lealtad, mantener el secreto profesional
que persisten hasta después de terminado el caso
pero esa lealtad debe estar precedida por abstenerse
de aceptar un encargo cuando no se crea en la razón
de él o no se es competente, convencimiento a que a
veces se debe llegar mediante una investigación. Y
esto no es otra cosa que la ética más allá de los
principios y a veces de la ley.
Los deberes éticos de los abogados se confunden con
frecuencia
con
los
deberes
éticos
del
magistrado
pues toca a ambos determinar rectamente el objeto y
el fundamento de la controversia tomando en cuenta
que el objetivo común debe ser el descubrimiento y
la
comprobación
de
la
verdad
porque
mientras
el
abogado dedica su existencia a asistir a los que no
están en condiciones de defenderse por sí mismos, el
magistrado
debe
declarar
el
derecho
en
el
caso
concreto.
Nadie salvo talvez el sacerdote, conoce mejor que el
abogado la vida humana en sus aspectos más variados,
más
dramáticos,
más
dolorosos
y
también
los
más
maravillosos cuando llega a la verdad de los hechos
y de cuando en cuando, a la verdad de las almas
cuando recibe de ellas sus más íntimos secretos.
Hoy
se
siente
más
que
nunca
la
necesidad
de
un
reencuentro con la ética en todas las áreas: Desde
la
docente
hasta
judicatura,
política.
investigar
la
de
la
profesional,
la
función
la
pública
de
y
la
de
la
Día a día vivimos y sentimos las crisis e
sus
causas,
analizar
sus
detonantes
y
buscar la salida es la misión que hoy tenemos. Nos
habremos
justificado
entonces,
nuestras
actividades
y
mantenemos
la
inacción
a
dando
nuestra
y
el
sentido
vida.
silencio
a
Si
cobarde,
abogados, funcionarios públicos y políticos seremos
aún más vilipendiados.
Las
diferencias
económicas,
el
desarrollo
tecnológico y el avance de los tiempos no pueden ser
ajenos
a
la
transformaciones
siglos,
en
ética
que
la
sin
en
que
la
importe
antigüedad
modernidad
años,
que
las
tardaban
en
la
contemporaneidad
semanas
o
días
y
hoy
segundos,
porque el pensamiento filosófico, ético y religioso
en el mundo de la ciencia es comprendido y aplicado
en cada época.
Y esto, considerando que hoy las
actividades están denominadas por las relaciones de
tiempo y dinero, las distancias desaparecidas por
las comunicaciones en vivo y directo, y las naciones
y el mundo gobernados por una red de organismos con
decisiones
personas
que
que
esfuerzo
abarcan
son
es,
a
miles
totalmente
pues,
de
ajenas
mantener
millones
de
ellas.
El
a
los
principios,
adaptarlos y aplicarlos a las nuevas situaciones.
DEL PERIODISTA.El periodista, el comunicador, está también en la
función pública y en más de una oportunidad juega un
rol
destacado,
relación
a
Gobierno.
la
principalmente
imagen
y
la
en
lo
que
credibilidad
dice
de
un
De ahí que, por la trascendencia que a
veces tiene en la comunidad, por lo que a ésta y a
los particulares puede dañar o afectar, inclusive
maliciosa
y
reflexiones
deliberadamente,
sobre
tan
caben
unas
importante
pocas
actividad
profesional.
Permítaseme entonces citar a María Teresa Herrán,
periodista
y
abogada,
con
postgrado
en
ciencia
política, también docente e investigadora y Xavier
Darío
Restrepo,
reportero
de
televisión
y
prensa
escrita, miembro fundador de la Comisión de Ética
del Círculo de Periodistas de Bogotá, quienes en su
obra
“Ética
para
periodistas”
(Grupo
Editorial
Norma, Colombia) actualizada y aumentada en febrero
de 2005, de abundante literatura sobre la ética para
periodistas,
las
normas
y
el
derecho
en
la
comunicación, la verdad y la objetividad, el culto y
el sensacionalismo, Etc., dicen en los siguientes
párrafos:
“Que
toda
persona
tiene
derecho
a
la
protección de su honor, de su vida privada,
su intimidad, su imagen, confidencialidad y
reputación,
lo
consagran
todas
las
Constituciones Latinoamericanas y del mundo,
mas,
lamentablemente,
sometimiento
aceptación
libre
de
a
intereses
prebendas
ejercicio
“estrellato”,
la
venalidad,
el
económicos,
la
que
comprometen
profesional,
no
son
el
“calumnias
el
afán
de
de
la
oposición” sino realidades desafortunadas y
tangibles que afectan la credibilidad, tanto
de justos como de pecadores y contribuyen al
desprestigio general de la profesión.” (Pág.
13).
“En América Latina también se han producido
los
dos
aspectos
de
la
concentración.
Empresas de comunicación van adquiriendo poco
a
poco
periódicos
y
cadenas
regionales,
además de invertir en editoriales, empresas
de distribución, etc.
Pero a la vez, los
grandes grupos financieros se han consolidado
en radio y televisión, de tal manera que la
información está condicionada por cuanto no
puede
afectar
los
intereses
económicos
de
esos grupos.” (Pág. 61).
“¿Es posible hablar de comportamiento ético
de una empresa?
Como
se
vio
en
el
primer
capítulo,
a
diferencia de las responsabilidad legal, que
puede afectar a las personas jurídicas como
tales,
sólo
las
personas
naturales
son
susceptibles de comportamiento ético, el cual
se
subjetiviza
en
los
seres
humanos.
En
cabeza de ellos y no de las entidades a las
que pertenecen radican las responsabilidades
éticas
de
la
profesión.
Sin
embargo
y
obviamente, el comportamiento inmoral o ético
de los integrantes de una empresa repercute
en forma decisiva en el buen prestigio de
ésta.”
(Pág. 68).
Cualquier parecido con la vida real ecuatoriana
y
su
actividad
coincidencia.
DEL JUEZ.-
mediática,
no
es
pura
Y en el proceso judicial, debemos tener presente que
es llevado por hombres: el juez, los abogados y que
de estos dependen sus resultados y esos hombres,
antes de estar animados a dar soluciones con base en
la ley, actúan acorde con su formación moral. No
obstante esto, se trata de asegurar la integridad
del juez rodeándolo de requisitos relativos con su
designación.
necesidades
Empero,
cuando
materiales
o
se
de
ven
sujetos
fuerzas
superiores pierden la imparcialidad.
a
políticas
Y no podemos
esperar que un juez que no haya solucionado sus más
apremiantes necesidades tenga la serenidad para no
ceder
a
las
tentaciones,
doblando
la
vara
de
la
justicia no por la misericordia sino por la dádiva.
Falta,
entonces,
otro
de
los
requisitos
para
asegurar la imparcialidad del juez, cual es el de la
remuneración,
aspectos
en
los
que
Ecuador
está
generalmente rezagado.
Los hombres que por razón de sus cargos tienen la
facultad de imponer sanciones con base en las leyes
deben
tener
el
espíritu
sano
y
atento
para
no
incurrir en esa conducta que León Tolstoy destacaba
como la indiferencia con que ciertos hombres manejan
el destino de otros cayendo en un estado de espíritu
distraído,
casi
inconsciente
y
agregaba,
a
veces
negligente, obediente a los mandatos del poder o del
dinero.
Quienes aspiran a ser abogados y después
jueces deben leer la obra de Tolstoy “Resurrección”.
El rol del juez es el de dictar sentencia y para
ello se le conceden atribuciones y obligaciones que
concreten su verdadera misión. Pero tiene un margen
de actuación discrecional donde el criterio judicial
no tiene otros límites que el marco ético del juez y
ocurre que, a veces, esa discrecionalidad que otorga
la
ley
al
juez
no
absolutamente recto.
ubicarse
causa
en
daño
el
a
es
aplicada
de
un
modo
Entonces el juez mismo puede
terreno
una
de
del
derecho
civil
las
partes,
ya
cuando
sea
por
ignorancia o negligencia; o en el ámbito del derecho
penal, cuando falta a sus deberes esenciales y se
aparta de la realidad procesal (prevaricato) en cuyo
caso el juez comete un delito.
Pero
a
la
particularmente
está
ética
el
del
magistrado
comportamiento
procesal
interesa
que
no
reglado y para el que no existe una sanción
jurídica sino, a lo mucho, una sanción disciplinaria
o meramente moral. En esto encuadra, por ejemplo, la
dilación injustificada de los procesos aparte de que
el juez deba tener no sólo una apreciación cabal de
los hechos, sino las ideas claras respecto de los
conceptos representados en la idea positiva.
Siguiendo
nuestro
con
sistema
otro
ejemplo,
procesal
cabe
civil
da
destacar
al
juez
que
la
discreción de valorar la prueba atendiendo a las
reglas de la sana crítica pero ahí, no cabe la menor
duda de que, más de un juez que no conoce cuales son
esas
reglas
del
conocimiento,
la
lógica
y
la
experiencia que deben llevar al juez a aplicar su
percepción para llegar a una apreciación correcta y
ética
hecho.
sobre
Y
la
la
valoración
prueba,
antes
que
de
de
ser
la
prueba
haya
valorarla
debe
producirse y no puede ser el juez un mero espectador
sujeto a la voluntad y
a veces hasta el capricho de
las partes, que obstaculizando la justicia se niegan
a producir o presentar pruebas.
Entonces, la teoría
de la prueba dinámica ampliamente desarrollada por
Jorge Walter Peyrano, acogida por los principales
tratadistas modernos, así como por la jurisprudencia
argentina,
Echandía
española
aunque
con
y
colombiana,
otra
que
denominación
ya
Devis
años
atrás
trataba, se tornan en obligación de ética procesal
ineludible, porque el juez debe ordenar la prueba a
quien
la
tiene
o
a
quien
le
resulte
más
cómodo
presentarla, superando la concepción clásica de la
carga de la prueba limitada solamente a quien alega.
La ética procesal y la correcta administración de
justicia no pueden estar supeditadas al abuso o al
fraude procesal porque sea justamente la contraparte
quien tenga la prueba del hecho que se alega, lo que
ocurre principalmente en el área de la salud y la
medicina;
o
con
las
grabaciones
que
en
nuestro
ámbito, ciertos medios de comunicación se niegan a
entregar. El legislador ecuatoriano en los cuerpos
legales modernos, como el Código de Procedimiento
Penal
del
año
2000,
aplica
en
parte
esta
teoría
cuando en el Art. 387 manda a que se pueda suplir la
prueba de la injuria cuando el medio se niega a
entregar
la
trascripción,
cuando
el
grabación
judicial
juez
o
original,
extrajudicial.
ecuatoriano,
que
con
una
Claro
que
generalmente
desconoce la teoría de la prueba dinámica no aplica
esta
disposición
procesal,
más
allá
de
la
falta
ética bordea el prevaricato porque el Juez debe dar
primacía a la verdad jurídica objetiva e impedir su
ocultamiento a pretexto del ritualismo procesal, por
eso nuestra Constitución establece en su Art. 192
que
no
se
sacrificará
la
omisión
de
formalidades.
justicia
Y
que
más
por
la
sola
omisión
que
ocultar la prueba la parte que la tiene en su poder.
Esto no lo puede permitir el juez, menos solapar.
Alberto
César
Leston,
en
su
ponencia
en
las
I
Jornadas de Ética de la Abogacía en octubre de 1967,
en Rosario-Argentina, se remitió a un decálogo del
magistrado en el que, en síntesis consigna, respecto
del juez, lo siguiente:
1) La incomprensión de los colegas y no pocas veces
la
calumnia.
2) La soledad
3) La Pobreza
4) La angustia de saberse responsable de dar a cada
uno lo suyo.
5)
La
velada
adulación
de
los
que
ganan
y
el
desaprecio de los que pierden
6) La presión de los fuertes y poderosos.
7) La ignorancia y el desprecio popular.
8) La paciente concentración y estudio.
9) La obligación de imparcialidad y rectitud; y,
10) Una vida austera, un sacerdocio moral.
El juez, en Ecuador, trabaja sujeto a las presiones
del
Gobierno,
del
Congreso,
de
unos
líderes
políticos o de algún medio de comunicación. En todos
estos casos quedan, en primer término, sometidos al
juicio
inexorable
de
sus
colegas
y
su
gremio
y,
claro, recordando un poco lo que ocurrió en nuestro
país, apenas en diciembre pasado, es difícil exigir
una conducta estrictamente ética a un juez que fue
nombrado ilegal e inconstitucionalmente. De manera
que la diferencia entre el abogado que llega a ser
juez por sus propios méritos, del que llega a la
misma posición por vinculaciones políticas marca las
providencias del juez.
Ángel Osorio dice que no puede haber derecho contra
la
moral
y
no
admite
la
tramitación
“justa”
de
jueces que dicen algo así como tener que fallar lo
injusto y contra su conciencia, porque la ley lo
manda;
actitud
ciertamente
cuestión
solamente
más
grave
que
el
non
liquet.
No
es
de
la
valoración
de
la
prueba bajo consideraciones ético-jurídicas sino de
su
presentación
e
incorporación
al
proceso
para
llegar, aun contra la voluntad de una de las partes,
a
la
verdad
procesal
que
debe
correspondencia con la real;
tener
absoluta
si aquí entra en juego
la discrecionalidad, debe ser siempre para llegar a
la verdad. Estas soluciones no son nuevas porque por
décadas se vienen aceptando y aplicando; los jueces
deben
mantener
superación
anhelos
el
espíritu
intelectual
de
que
seguridad
batallando
nos
y
lleve
ética
a
por
la
realizar
jurídicas,
lamentablemente en nuestro medio, a veces distantes
y lejanas.
El retardo en la administración de justicia hace que
la mayoría de los justiciables den todo por perdido
cuando les toca ir a los jueces que no despachan, lo
que implica una verdadera denegación de justicia,
más si el juez cumple con los deberes éticos y es un
magistrado probo, no un mero espectador de lo que
ocurre en el proceso, será entonces merecedor al
famoso reconocimiento a los jueces escrito por un
abogado del nivel de Piero Calamandrei. Pero creo yo
que la dignidad no es el reconocimiento que se nos
haga por la sociedad en un momento dado, sino la
conciencia de merecerlo.
No
es
la
teorías
oportunidad
jurídicas
propicia
sustantivas
para
o
desarrollar
procesales
sino
primordialmente en lo que a la ética corresponde.
Los sujetos de la relación procesal tienen límites
claros dados por la ética del proceso para evitar
excesos y en estos entran también, obviamente, las
facultades
discrecionales
del
juez,
generalmente
salpicadas por más de una contrariedad.
LA NECESIDAD DE UN CODIGO DE ETICA JUDICIAL.El Magistrado Dr. Jorge A. Subero Isa, Presidente de
la Suprema Corte de Justicia de Venezuela, en la II
Cumbre
Iberoamericana
de
Presidentes
de
Cortes
Tribunales Supremos de Justicia de Caracas, en
marzo
de
1999,
hizo
importantes
y
de
consideraciones
sobre la ética del funcionario judicial y sostiene
que presenciamos, al decir de muchos, no una época
de
cambios,
sino
un
cambio
de
época;
donde
el
concierto de las naciones se va convirtiendo en una
"aldea planetaria", que nos hace corresponsables a
todos del destino colectivo del género humano y de
nuestra
especie
con
interactúan entre sí.
los
demás
seres
vivos
que
Asistiendo a la conformación
de un nuevo orden mundial, con características de
unificación universal que muchos se han adelantado a
denominar
globalización
o
“mundialización”,
como
fenómeno
integrador
internacionales,
política
y
no
sino
cultural
sólo
de
también
de
todos
las
de
los
economías
la
dinámica
pueblos
de
la
Tierra.
Presenta el siguiente planteamiento ético para el
sector
judicial:
Se
trata
de
encontrar
un
nuevo
paradigma que garantice la construcción de la vida
de las personas y los pueblos en todo el planeta. Y
parece ser que se va vislumbrando cada día con mayor
claridad que ese paradigma social viene articulado
por la integración de tres dimensiones que serían
las responsables de dar cuenta de la "construcción
de la vida", a saber, el triple desafío basado en la
conjunción de los Derechos Humanos, la Democracia y
el Desarrollo.
Los Derechos Humanos, entendidos en su acepción más
amplia,
que
económicos,
incluye
sociales,
los
derechos
culturales
e
políticos,
incluso
los
llamados "derechos emergentes", como los de género,
étnicos o ambientales. La Democracia, entendida no
en
su
versión
participativa
Desarrollo,
de
restringida,
toda
entendido
sino
la
sociedad
en
su
en
su
civil.
versión
versión
Y
integral
el
y
solidaria, que sea capaz de responder eficazmente a
las necesidades prioritarias de la humanidad, sin
destruir la casa natural que nos alberga a todos,
nuestro medio ambiente.
Considera que este nuevo paradigma social, basado en
el
triple
desafío
democracia
y
el
de
los
derechos
desarrollo,
para
humanos,
la
posibilitar
la
construcción de la vida entre todos los pueblos,
está
demandando
del
sector
justicia
un
profundo
replanteamiento axiológico.
Existe un consenso de que la transformación de la
justicia
es
una
prioridad
y
una
necesidad
impostergable como medio para consolidar el estado
de
derecho
podamos
a
que
mostrar
eficiente,
más
aspiran
una
nuestros
justicia
accesible,
pueblos.
Que
eficaz,
más
transparente,
con
más
más
menos niveles de impunidad y de vulneración de los
derechos
humanos
y
con
una
conciencia
más
desarrollada de su propia problemática y del rol que
debe jugar en la sociedad, como factor de seguridad
jurídica y de armonía social.
Las reformas, la renovación y la modernización de
nuestros
sistemas
judiciales
hacen
surgir
como
prioridad urgente la necesidad de elaborar un Código
de
Ética
judicial,
que
un
regule
Código
de
las
acciones
Ética
Judicial
del
sector
para
toda
Ibero América a partir del concepto mismo de “qué es
la ética”. Referirse a ella en estos tiempos donde
impera lo no ético, podría resultar una necedad.
Lo que constituye conducta reñida con los principios
de moralidad por parte de cualquier ser humano, lo
es también y con mayor razón, si ese ser humano
desempeña funciones de juez o funcionario judicial.
Pero un ser humano cualquiera no deja de serlo si se
aparta de estos principios; podrá ser sancionado de
forma más o menos grave, pero sigue siendo parte de
la sociedad. El juez o funcionario que se aparta de
estos
principios
deberá
ser
sancionado,
pero
la
gravedad de su falta puede ameritar que deje de ser
juez. Como árbitro designado por la sociedad para
juzgar la conducta humana debe ser vista como un ser
humano sin tacha "ello exige no sólo ser bueno sino
también parecerlo".
De
ahí
la
importancia
de
establecer
normas
de
conducta que honren la integridad e independencia de
su función y estimulen el respeto y la confianza en
la judicatura.
El objetivo por tanto de todo Código
de Ética es procurar mantener un óptimo nivel de
excelencia
y
funcionarios,
rectitud
empleados
en
y
la
conducta
jueces
de
de
la
los
rama
judicial, reuniendo en un solo cuerpo las normas de
principios éticos que deben regir el desempeño de
sus funciones.
Rodolfo
Luís
Bigo
sostiene
que
la
ética
de
la
magistratura vale como moral especial que trata de
criterios o normas de conducta que, si bien están
encaminadas
a
la
perfección
del
hombre,
guardan
relación con la específica función del ser justo.
CRITERIOS PARA UN CODIGO DE ETICA.Partiendo
Código
de
de
lo
Ética
Iberoamérica,
criterios
del
en
la
otras
señalado
de
o
y
con
aun
lograr
Judicial
de
contiene
propuestas
antes,
internas
pro
adopción
estructura
con
legislaciones
y
Funcionario
propone
cuya
coincidentes
hemos
anterior
nuestros
de
algunos
elementos
similares,
con
el
como
nuestras
principios
éticos básicos, sobre los cuales puede fundamentarse
el Código de Ética sugerido, que resumidos son:
1. Probidad: El funcionario judicial debe siempre
actuar apegado a la rectitud, honradez e integridad
de pensamiento y acción.
2.
Independencia
e
imparcialidad:
El
funcionario
judicial debe conducirse con la mayor independencia,
no aceptando mandatos ni instrucciones de nadie. Por
supuesto, que es una exigencia obvia, pero conviene
subrayarla.
3.
Beneficio
personal.
personal:
No
recibir
beneficio
4.
Transparencia:
El
funcionario
judicial
debe
documentar todos los actos de su gestión y promover
la publicidad de los mismos.
5. Eficiencia: Es indispensable que el funcionario
judicial
procure
eficiente.
Tiene
una
buena
preparación
investigar
y
y
sea
estudiar
permanentemente el derecho.
6. Obsequios: No debe recibir regalos, obsequios o
donaciones.
7.
Prudencia:
Es
necesario
que
el
funcionario
judicial debe actúe sin precipitaciones y con juicio
sereno.
8. Sentido político: El funcionario no puede asumir
prejuiciosamente una actitud hostil hacia los otros
poderes.
9.
Conciencia
Democrática:
El
funcionario
debe
pensar en la función como un servicio que se presta
a la sociedad, que se hace en su nombre… como un
servidor de la sociedad.
10.
Conciencia
institucional:
El
funcionario
debe
tener y asumir una actitud abierta de comunicación
con los demás funcionarios.
11.
Inserción
funcionario
comunes
social:
judicial
con
Es
proyecte
instituciones
necesario
que
puentes
o
espacios
que
afrontan
sociales
el
realidades particulares.
12.
debe
Conciencia
hacer
frente
una
Constitución,
al
Derecho:
correcta
leyes
El
funcionario
aplicación
vigentes
y
de
la
tratados
internacionales.
13. Superar las perspectivas juricistas: Es decir,
aquella pretensión de que el derecho se explica sólo
desde el derecho.
14. Sujeción a las normas establecidas: incurre en
falta disciplinaria si deja de cumplir sus deberes y
las normas de trabajo establecidas.
15. Protección de los bienes públicos: No usar las
instalaciones y servicios públicos para su beneficio
privado,
amigos
o
personas
ajenas
a
la
función
judicial.
16.
Responsabilidad
judicial:
El
funcionario
judicial debe responder por lo que hace y por lo que
no hace.
17. Vida Privada: El funcionario judicial en su vida
privada debe reflejar lo que practica en su vida
laboral, por lo que debe llevar una vida apegada a
los principios morales.
18.
Discreción:
El
funcionario
judicial
debe
mantener discreción respecto de los asuntos que le
son sometidos hasta tanto éstos culminen con una
decisión, sometida entonces a la publicidad de los
procesos.
19.
Cargos
incompatibles:
El
funcionario
no
debe
aceptar cargos o encomiendas que sean incompatibles
con sus responsabilidades.
20. Declaración de Bienes: Como una forma de vigilar
la conducta patrimonial del funcionario judicial se
precisa de una declaración jurada de la composición
activa y pasiva de su patrimonio.
21. Idoneidad: La idoneidad del funcionario judicial
se pone de manifiesto cuando desempeña sus funciones
con
interés,
probidad,
ecuanimidad,
imparcialidad
dedicación,
y
eficiencia,
diligencia
en
las
funciones a su cargo.
22.
Privilegios:
Evitar
los
privilegios
y
discriminaciones por motivos de filiación política,
religión, raza, sexo, parentesco y otros.
Algunas veces la justicia vive en el alma del hombre
como virtud operativa -dijo Goldsmicht- y agregó que
la justicia es como un jinete que no puede cabalgar
hasta que no se le
acerque un fogoso corcel que por
casualidad galopa hacia la misma meta a la que el
jinete aspira llegar.
Ecuador
llevan
tiene
a
los
que
liberarse
jueces
a
de
las
personas
que
prevaricar.
Queremos
una
Función Judicial que sea orgullo del Foro y honre
ser
uno
de
los
tres
pilares
en
que
se
basa
la
estructura democrática del Estado.
Juan Falconi Puig
Exposición en el Seminario Internacional de Derecho
Administrativo
Federación
de
y
Público,
Judiciales
del
organizado
Ecuador,
por
el
la
Consejo
Nacional de la Judicatura, la Asociación de Jueces
para la Democracia y la Asociación Iberoamericana de
Profesionales en Derecho Público y Administrativo,
Jesús González Pérez, con la coordinación de la Dra.
Patricia Vintimilla Navarrete, en Quito, Ecuador, el
21 de Octubre de 2005.
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