UNIVERSIDAD DE CHILE FACULTAD DE CIENCIAS FISICAS Y MATEMATICAS DEPARTAMENTO DE INGENIERIA INDUSTRIAL POLÍTICAS PÚBLICAS PARA NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES CON DISCAPACIDAD: PERSPECTIVA DESDE EL VÍNCULO PÚBLICO - PRIVADO TESIS PARA OPTAR AL GRADO DE MAGÍSTER EN GESTIÓN Y POLITICAS PÚBLICAS MARÍA CRISTINA CÁRDENAS ESPINOSA PROFESOR GUIA: CARLOS ALEJANDRO ANDRADE GUZMÁN MIEMBROS DE LA COMISION: SARA ARANCIBIA CARVAJAL MARIA ANGÉLICA PAVEZ GARCÍA SANTIAGO DE CHILE DICIEMBRE 2010 RESUMEN DE LA TESIS PARA OPTAR AL GRADO DE MAGISTER EN GESTIÓN Y POLÍTICAS PÚBLICAS POR: María Cristina Cárdenas Espinosa FECHA DE EXAMEN: 27 de diciembre de 2010 PROF. GUÍA: Carlos Alejandro Andrade Guzmán En los últimos veinte años, Chile ha ratificado varias convenciones internacionales en las que se han reconocido un amplio catálogo de derechos a los niños, las niñas y los adolescentes, incluidos dentro de ellos, aquellos y aquellas con discapacidad. En este contexto, algunas de las respuestas dadas desde la política pública a las necesidades y al bienestar de este grupo vulnerable han girado en torno a la articulación de actores públicos como privados, los cuales se han coordinado para el diseño y la ejecución de planes, programas y acciones en su favor. En este escenario de articulación de actores en torno a iniciativas de política, algunas de las preguntas que guían esta investigación son: ¿cómo opera la política pública orientada hacia la infancia con discapacidad y cuál es su vinculación con el ámbito privado sin fin de lucro? En este proceso de articulación público – privado, ¿se generan espacios de corresponsabilidad efectiva entre el Estado y la Sociedad Civil en este plano específico de la política pública? Por último busca responder cuáles son las áreas que destacan en el encuentro público - privado en términos de su contribución a la mejora de condiciones para el desarrollo de la política pública de la infancia con discapacidad. Para dar respuesta a estas preguntas, se utilizó una metodología que combina instrumentos cualitativos y cuantitativos. En el primer caso, se analizó el discurso de varios expertos respecto del surgimiento del vínculo público – privado y sus características en materia de infancia con discapacidad. En una segunda instancia se empleó la metodología multicriterio de Proceso de Análisis Jerárquico (AHP) con el objeto de determinar qué ámbitos se deben priorizar en el acercamiento público – privado, desde su implicancia para las políticas públicas de infancia con discapacidad. Los hallazgos de la investigación indican que este acercamiento de actores opera en un escenario compuesto por un fuerte componente institucional apoyado por otros de tipo organizacional y financiero los cuales interactúan entre sí al momento de la intervención, siendo complejo observarlos desde un enfoque independiente. Por su parte, se concluye que si bien existen percepciones diferenciadas respecto a la corresponsabilización, en términos generales ésta toma la forma de delegación de tareas de ejecución de la política pública a la Sociedad Civil con base en la transferencia de recursos en tanto es ésta quien posee gran parte del conocimiento y experiencia en el trabajo con discapacidad infantil. Algunas de las conclusiones del estudio son que, en términos generales, existe una necesidad de formalizar espacios de interlocución que permitan un diálogo fluido entre el Estado y la Sociedad Civil; a nivel específico, en el plano institucional, se requiere una mayor difusión de instrumentos regulatorios como la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad; en el ámbito organizacional se debe priorizar la capacitación del personal que interviene en discapacidad infantil. Finalmente, en la dimensión financiera se evidenció que las subvenciones destacan por sobre otras modalidades de transferencia de recursos permitiendo lograr mayor estabilidad y continuidad en las políticas orientadas a este grupo vulnerable. Algunas de las recomendaciones que surgen de este estudio, son crear espacios formales de interlocución como, por ejemplo, observatorios de los avances de este plano de política; fortalecer la capacitación del recurso humano que interviene en el ámbito de la política pública; y la creación de un ente que canalice la oferta y la entrega de financiamiento resguardando criterios de calidad en la asignación de los recursos para el desarrollo de políticas de infancia con discapacidad. Agradecimientos En primer lugar, quisiera agradecer el apoyo y el tiempo de los expertos entrevistados, tanto del Estado como de la Sociedad Civil, quienes con su experiencia contribuyeron a enriquecer los hallazgos de este estudio de caso: Eladio Recabarren (SENADIS), Jonathan Muñoz (SENADIS), Eduardo Toro (SENADIS), Flora Vivanco (SENAME), Andrés Lerdo de Tejada (Fundación COANIL), Milton González (Fundación Teletón) y Soledad Fernández (Universidad Mayor). También quisiera dar gracias a Carlos Andrade, tutor de este estudio de caso, debido a que pude contar con su apoyo, su comprensión, sus conocimientos y su guía desde el primer momento. También quiero reconocer la labor de Sara Arancibia y de María Angélica Pavez, miembros de la comisión lectora, quienes siempre me brindaron su gentileza, su tiempo y su ayuda. Muchas gracias a los tres por sus valiosos aportes y observaciones. Igualmente cabe destacar el trabajo de Inés y de Francisca. Agradezco también a mi abuelita, a mis padres y a mis hermanas porque siempre me enviaron su cariño, su amor y su comprensión lo cual me dio fuerza para cerrar con éxito esta investigación. Con mucho cariño les dedico este trabajo. Alberto gracias por tu paciencia y tu apoyo que fueron incondicionales en todo momento. Finalmente, quiero agradecer a mis amigos del Magíster en Gestión y Políticas (2010) por transmitirme su alegría, su compañerismo y sus ocurrencias en este camino de 18 meses. Muchachos los voy a extrañar mucho. 1 ÍNDICE DE CONTENIDOS I. PRESENTACIÓN DEL ESTUDIO DE CASO .............................................................. 1 1.1 Antecedentes........................................................................................................ 1 1.2 Objetivos Generales y Específicos........................................................................ 3 1.2.1 Objetivo General .............................................................................................. 3 1.2.2 Objetivos Específicos ....................................................................................... 3 II. PROPUESTA CONCEPTUAL ..................................................................................... 4 2.1 Relevancia de las Políticas Públicas y las Políticas Sociales en el Contexto de la Discapacidad ........................................................................................................ 4 2.1.1 Las Políticas Públicas y las Políticas Sociales.................................................. 4 2.1.2 Focalizando las Políticas Públicas de Infancia y Discapacidad ........................ 7 III. INTERVENCIÓN PÚBLICO – PRIVADA EN DISCAPACIDAD INFANTIL ................ 10 3.1 Estado y Sociedad Civil: Actores y Roles en el Espacio de las Políticas de Infancia con Discapacidad ...................................................................................................... 10 3.1.1 Estado ............................................................................................................ 10 3.1.2 Sociedad Civil ................................................... ¡Error! Marcador no definido. 3.1.3 Características del Vínculo Estado - Sociedad Civil ....................................... 11 3.2 Ámbitos de la Interacción entre el Estado y la Sociedad Civil en el Marco de las Políticas Públicas que atienden a la Infancia con Discapacidad ......................... 12 3.2.1 Dimensión Institucional: Características, Componentes y Subcomponentes .. 13 3.2.1.1 Institucionalidad Formal .................................................................... 14 3.2.1.2 Institucionalidad Informal .................................................................. 19 3.2.3 Dimensión Organizacional: Características, Componentes y Subcomponentes ....................................................................................................................... 21 3.2.3.1 Primer Componente: Capital Humano............................................... 22 3.2.3.2 Subcomponentes de Primer Grado: Personal Remunerado y Personal Voluntario ....................................................................................................... 23 3.2.3.3 Subcomponentes de Segundo Grado: Aptitudes Técnicas y Aptitudes Humanas........................................................................................................ 25 3.2.3.4 Segundo Componente: Mejora de Procesos y Gestión de Recursos ……………………………………………………………………………….26 3.2.3.5 Subcomponentes de Primer Grado: Gestión de Recursos Organizacionales y Tecnologías de la Información ..................................................................... 27 3.2.3.6 Tercer Componente: Factor Identitario.............................................. 28 3.2.3.7 Subcomponentes de Primer Grado: Agenda, Diseño, Evaluación e Implementación de las Políticas Públicas de Infancia con Discapacidad ........ 32 3.2.3.8 Cuarto Componente: Apoyo Técnico ................................................ 34 3.2.3.9 Subcomponentes de Primer Grado: Ayudas Técnicas y Centros de Rehabilitación................................................................................................. 34 3.2.4 Dimensión Financiera: Características y Componentes ................................. 36 3.2.4.1 Primer Componente: Subvenciones .................................................. 37 3.2.4.2 Segundo Componente: Fondos Concursables .................................. 38 3.2.4.3 Tercer Componente: Recursos de Autogestión................................. 38 3.2.4.4 Cuarto Componente: Recursos por modalidad de Co- Financiamiento………………………. .............................................................. 41 IV. ANÁLISIS DE LA CORRESPONSABILIDAD PÚBLICO - PRIVADA ....................... 41 4.1 Investigación de campo ...................................................................................... 41 4.1.1 Primer Momento: Análisis Cualitativo por medio de la Entrevista en Profundidad ....................................................................................................................... 41 4.1.2 Vínculo Público - Privado en el Ámbito de las Políticas Públicas de Discapacidad Infantil ............................................................................................................ 43 4.1.2.1 Surgimiento y Características del Vínculo Público – Privado ............ 43 4.1.2.2 Evidencia de una Relación de Corresponsabilidad entre el Estado y la Sociedad Civil ................................................................................................ 45 4.1.2.3Desafíos que enfrenta la Relación de Corresponsabilidad ....................................................................................................................... 46 4.1.3 Dimensión Institucional .................................................................................. 47 4.1.3.1 Institucionalidad Formal: Marcos Normativos en materia de Infancia con Discapacidad.................................................................................................. 47 4.1.3.2 Desafíos que enfrenta la Institucionalidad Formal en el Ámbito de la Infancia con Discapacidad ........................................................................................... 49 4.1.3.3 Visión desde las Instituciones Informales.......................................... 50 4.1.3.4 Institucionalidad Informal: Prácticas del Estado y de la Sociedad Civil ……………………………………………………………………………….50 4.1.4 Dimensión Organizacional.............................................................................. 51 4.1.4.1 Capital Humano: Características del Personal que Interviene en el Ámbito de la Discapacidad Infantil.............................................................................. 51 4.1.4.2 Retos para el Personal que Interviene en el Campo de la Discapacidad Infantil………………………………………………………………………………….52 4.1.4.2.1 Personal Remunerado versus Personal Voluntario en el Contexto de la Discapacidad Infantil ...................................................................................... 53 4.1.4.3 Mejora de Procesos y Gestión de Recursos: Gestión de Recursos Organizacionales y Tecnologías de la Información......................................... 55 4.1.4.3.1 Desafíos en el Marco de la Gestión de Recursos Organizacionales y Tecnologías de la Información ....................................................................... 56 4.1.4.4 Factor Identitario ............................................................................... 57 4.1.4.4.1 Ciclo de Políticas Públicas ............................................................. 58 4.1.4.4.2 Retos respecto de la Participación Público – Privada en el Ciclo de las Políticas de Infancia con Discapacidad .......................................................... 59 4.1.4.5 Apoyo Técnico .................................................................................. 60 4.1.4.5.1 Tareas Pendientes en Términos de Apoyo Técnico para Niños, Niñas y Adolescentes con Discapacidad ..................................................................... 61 4.1.5 Dimensión Financiera..................................................................................... 62 4.1.5.1 Desafíos en torno al Financiamiento de las Intervenciones en Discapacidad Infantil………………………………………………………………………………….65 1 4.2 Integración de Herramientas Cuantitativas: Proceso Analítico Jerárquico (AHP) 66 4.2.1 Definición de las Dimensiones, los Componentes y los Subcomponentes utilizados en el Análisis Cuantitativo por medio de AHP................................................. 68 4.2.1.1 Dimensiones del Vínculo Público – Privado en materia de Infancia con Discapacidad.................................................................................................. 68 4.2.1.2 Análisis de Componentes y Subcomponentes de Primer y Segundo Grado a nivel de Dimensiones ..................................................................................... 69 4.2.1.2.1Dimensión Institucional: Componentes y Subcomponentes de Primer Grado ……………………………………………………………………………….69 4.2.1.2.2 Dimensión Organizacional: Componentes, Subcomponentes de Primer y Segundo Grado .............................................................................................. 71 4.2.1.2.3 Dimensión Financiera..................................................................... 75 4.2.2 Estructura Jerárquica utilizada para la Aplicación de la Metodología AHP ..... 76 4.2.3 Análisis de los Resultados.............................................................................. 78 4.2.3.1 Dimensiones del Vínculo................................................................... 78 4.2.3.2 Dimensión Institucional ..................................................................... 78 4.2.3.2.1 Instituciones Formales ................................................................... 79 4.2.3.2.2 Instituciones Informales.................................................................. 80 4.2.3.3 Dimensión Organizacional ................................................................ 81 4.2.3.3.1 Capital Humano ............................................................................. 83 4.2.3.3.2 Mejora de Procesos y Gestión de Recursos ................................... 86 4.2.3.3.3 Factor Identitario ............................................................................ 87 4.2.3.3.4 Apoyo Técnico ............................................................................... 88 4.2.3.4 Dimensión Financiera ....................................................................... 89 V. CONCLUSIONES Y PROPUESTAS DE POLÍTICA PÚBLICA EN MATERIA DE DISCAPACIDAD INFANTIL ...................................................................................... 91 5.1 Análisis de las Dimensiones ............................................................................... 92 5.2 Dimensión Institucional ....................................................................................... 92 5.3 Dimensión Organizacional .................................................................................. 93 5.4 Dimensión Financiera ......................................................................................... 95 VI. PROPUESTAS DE POLÍTICA .................................................................................. 97 VII. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS ....................................................................... 100 VIII. ANEXOS ................................................................................................................. 105 1 ÍNDICE DE GRÁFICOS GRÁFICO N°1: FORMAS DE PARTICIPACIÓN DE LA SOCIEDAD CIVIL EN LAS ETAPAS DE POLÍTICAS PÚBLICAS ............................................................................................................. 30 GRÁFICO N°2: APROXIMACIÓN A LOS ROLES PÚBLICO - PRI VADO, EN TORNO A LAS POLÍTICAS CON ENFOQUE DE DERECHOS (ACERCAMIENTO DESDE LAS ETAPAS DE POLÍTICA)................................................................................................................................. 31 GRÁFICO N°3: PRINCIPALES LÍNEAS DE ACCIÓN DECLARADA S POR ORGANIZACIONES DE INFANCIA............................................................................................................................ 33 GRÁFICO N°4: FUENTES DE FINANCIAMIENTO DE LAS ORGAN IZACIONES QUE INTERVIENEN EN MATERIA DE INFANCIA ............................................................................ 37 GRÁFICO N°5: FINANCIAMIENTO DE FUNDACIÓN TELETÓN .. ............................................ 39 GRÁFICO N°6: FUENTES DE AUTOGESTIÓN – FUNDACIÓN TEL ETÓN .............................. 40 GRÁFICO N°7: FINANCIAMIENTO DE FUNDACIÓN COANIL ... .............................................. 40 GRÁFICO N°8: ESTRUCTURA JERÁRQUICA ................ ......................................................... 77 GRÁFICO N° 9: DIMENSIONES QUE POTENCIAN EL PROCESO DE ARTICULACIÓN ESTADO – SOCIEDAD CIVIL EN EL CICLO DE POLÍTICAS PÚBLICAS ORIENTADAS A LA INFANCIA CON DISCAPACIDAD ............................................................................................. 78 GRÁFICO N° 10: INSTITUCIONES QUE FAVORECEN LA ARTIC ULACIÓN Y EL DIÁLOGO ESTADO – SOCIEDAD CIVIL PARA DESARROLLAR POLÍTICAS DE DISCAPACIDAD INFANTIL .................................................................................................................................. 79 GRÁFICO N° 11: INSTITUCIONALIDAD FORMAL QUE FAVOREC E EL ESTABLECIMIENTO DE ACCIONES DE INTEGRACIÓN CON ENFOQUE DE DERECHOS EN MATERIA DE INFANCIA CON DISCAPACIDAD ............................................................................................. 80 GRÁFICO N° 12: INSTITUCIONES INFORMALES QUE FACILIT AN LA INTERACCIÓN PÚBLICO – PRIVADA EN EL MARCO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS DE DISCAPACIDAD INFANTIL .................................................................................................................................. 81 GRÁFICO N° 13: RECURSOS Y COMPETENCIAS CON LAS QUE CUENTAN EL ESTADO Y LA SOCIEDAD CIVIL QUE CONDICIONAN Y FORTALECEN EN MAYOR MEDIDA LA INTERVENCIÓN Y QUE SE PONEN AL SERVICIO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS DE DISCAPACIDAD INFANTIL ....................................................................................................... 82 GRÁFICO N° 14: PERSONAL QUE POTENCIA LA INTERVENCIÓ N PÚBLICO – PRIVADA EN EL ÁMBITO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS ORIENTADAS AL SERVICIO DE LOS NIÑOS, LAS NIÑAS Y LOS ADOLESCENTES CON DISCAPACIDAD .................................................. 83 GRÁFICO N° 15: APTITUDES DEL PERSONAL REMUNERADO QU E APORTAN A LA MATERIALIZACIÓN DE LOS DERECHOS DE LOS NIÑOS, LAS NIÑAS Y LOS ADOLESCENTES CON DISCAPACIDAD EN EL ÁMBITO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS .... 85 GRÁFICO N° 16: APTITUDES DEL PERSONAL VOLUNTARIO QU E APORTAN A LA MATERIALIZACIÓN DE LOS DERECHOS DE LOS NIÑOS, LAS NIÑAS Y LOS ADOLESCENTES CON DISCAPACIDAD EN EL ÁMBITO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS .... 85 GRÁFICO N° 17: FACTORES QUE FORTALECEN LOS PROCESOS Y LA GESTIÓN DEL ESTADO Y DE LA SOCIEDAD ................................................................................................. 86 GRÁFICO N° 18: MOMENTOS DE LA POLÍTICA QUE POTENCIA N LOS ESPACIOS DE ENCUENTRO PÚBLICO - PRIVADO EN POS DEL FORTALECIMIENTO DE LAS INICIATIVAS DE ATENCIÓN A LA INFANCIA CON DISCAPACIDAD ........................................................... 87 GRÁFICO N° 19: SOPORTES TÉCNICOS QUE CONTRIBUYEN MA YORMENTE A LA REHABILITACIÓN DE LOS NIÑOS, LAS NIÑAS Y LOS ADOLESCENTES CON DISCAPACIDAD ....................................................................................................................... 88 GRÁFICO N° 20: INSTRUMENTOS FINANCIEROS QUE CONTRIB UYEN A LA SUSTENTABILIDAD Y A LA CALIDAD DE LA INTERVENCIÓN QUE SE REALIZA ARTICULADAMENTE EN INFANCIA CON DISCAPACIDAD .................................................... 89 ANEXOS ANEXO N° 1: MAPA DE EXPERTOS ENTREVISTADOS ........ ............................................... 105 ANEXO N° 2: PAUTA DE ENTREVISTA SEMI – ESTRUCTURADA ...................................... 106 ANEXO N° 3: PAUTA DE ENTREVISTA ESTRUCTURADA PARA L A APLICACIÓN DE LA METODOLOGÍA MULTICRITERIO – PROCESO ANALÍTICO JERÁRQUICO (AHP) ............. 111 ANEXO N° 4: DICCIONARIO DE CONCEPTOS PARA APLICACIÓ N DE LA METODOLOGÍA MULTICRITERIO .................................................................................................................... 117 ANEXO N° 5: ESCALA DE SAATY PARA APLICACIÓN DE LA M ETODOLOGÍA (AHP) ....... 121 ANEXO N° 6: PRIORIDADES GLOBALES Y LOCALES DEL MODE LO DE ESTRUCTURA JERÁRQUICA (AHP)............................................................................................................... 122 I. PRESENTACIÓN DEL ESTUDIO DE CASO 1.1 Antecedentes Hace 20 años, Chile ratificó jurídica e internacionalmente la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño reconociendo de esta forma un amplio catálogo de derechos fundamentales a los niños, a las niñas y a los adolescentes, los cuales buscan asegurarles su desarrollo y su plena integración en la sociedad. En este contexto, el siguiente paso para el reconocimiento de este catálogo de derechos, sería generar las condiciones que aseguren su efectivo cumplimiento, por vía de su promoción, su defensa y su ejercicio garantizado. En este sentido, las políticas sociales, pueden cumplir un rol en torno a esta generación de condiciones, ya que éstas pueden entenderse como “el conjunto más o menos coherente de principios y acciones gestionadas por el Estado, que determinan la distribución y el control social del bienestar de una población por vía política” (Herrera y Castón, 2003, citado en Serrano 2005, p 2). Bajo este marco, entonces, la política social que desarrolla el Estado, podría estar en condiciones de generar esta distribución de bienestar y de control social que permita la promoción, la defensa y el ejercicio garantizado de los derechos de la infancia. Es decir, el Estado, a través de un conjunto de mecanismos, incluidas las políticas públicas, puede ejercer su rol como responsable de garantizar los derechos económicos, sociales, culturales, civiles y políticos de los niños, las niñas y los adolescentes, en especial de aquellos que son más vulnerables (Instituto Interamericano del Niño, la Niña y los Adolescentes, 2007). Este es el caso de la población infantil que debido a algún grado de discapacidad, física, mental o sensorial no puede participar de forma plena y efectiva en la sociedad en igualdad de condiciones respecto a sus pares. En torno a este grupo específico en Chile, al año 2004, existían alrededor de 164.705 niños, niñas y adolescentes entre 0 y 18 años de edad con alguna discapacidad (3,4% de la población infantil), de los cuales, más de un tercio vivían en situación socioeconómica vulnerable (Fondo Nacional de la Discapacidad – Instituto Nacional de Estadística, 2005). Así, diversos estudios dan cuenta de que entre los principales problemas que enfrenta la infancia con discapacidad se encuentran la discriminación social y el estigma que se instala sobre ellos por su condición específica, lo cual los sitúa en escenarios de marginación y exclusión acentuando desigualdades estructurales y desatando complejos procesos sociales que dificultan sus posibilidades de acceso a la estructura de oportunidades que ofrece el Estado, el mercado y la sociedad (Forselledo, 2002). 1 Por su parte, las respuestas desde la política social a las necesidades de este grupo específico, se sitúan hoy día en un escenario que, para la provisión del bienestar, incorpora a actores tanto públicos como privados, que deben coordinarse para la entrega de servicios y programas (Serrano, 2005). Esto es coincidente con lo que señala Laurnaga (1999) describiendo el escenario uruguayo en torno al papel de los actores en la provisión del bienestar. Expone que el rol del Estado vinculado a la política social, se debate en torno a una reforma político – institucional que implicaría cambios en los modos de articulación Estado – mercado – sociedad hacia una reformulación de esferas de lo público y lo privado y, por tanto, de los roles y funciones atribuidos a cada uno (Laurnaga, 1999). En este sentido, podría inferirse que las iniciativas de atención a la población infantil con discapacidad, no se encuentran ajenas a este debate dado que la política social chilena ha vivido procesos de características similares, en tanto hoy día ésta combina elementos vinculados a la protección social, al bienestar y a la cohesión social, incorporando tanto a actores del sector público y privado para generar condiciones adecuadas para el desarrollo de este grupo vulnerable a través de la creación y aplicación de instrumentos legislativos, administrativos y de políticas públicas (Servicio Nacional de Menores, 2004). Es en este escenario específico de incorporación de actores del sector público y del sector privado, a esta dimensión de la política social que se sitúa el presente estudio, buscando responder a las siguientes preguntas: a nivel general, ¿cómo opera la política pública orientada hacia la infancia con discapacidad y cuál es su vinculación con el ámbito privado sin fin de lucro? En esta vinculación pública – privada, ¿se generan espacios de corresponsabilidad efectiva entre el Estado y la Sociedad Civil en este plano específico de la política pública? A nivel específico, persigue dar respuesta a las preguntas sobre cuáles son los roles actuales que adoptan tanto el Estado como la Sociedad Civil respecto a los programas y a las políticas de discapacidad; cuáles son las fortalezas y debilidades presentes en el acercamiento; y por último, busca responder cuáles son las áreas que destacan en el encuentro público - privado, en términos de su contribución a la mejora de condiciones para el desarrollo de la política pública de infancia con discapacidad. En torno a estas preguntas de investigación, es preciso señalar que para los efectos de este estudio, en adelante se entenderá por corresponsabilidad, a todas las formas de interacción entre el Estado y la Sociedad Civil para trabajar conjuntamente bajo un marco de responsabilización activa en el plano de las políticas públicas de discapacidad infantil. 2 1.2 Objetivos Generales y Específicos 1.2.1 Objetivo General Proponer recomendaciones a la política pública de infancia con discapacidad, tomando como marco de análisis la relación público – privada existente entre las organizaciones de la Sociedad Civil y el Estado para el desarrollo de las políticas y los programas orientados a la atención de este grupo vulnerable. 1.2.2 Objetivos Específicos 1. Analizar la relación público – privada presente en las políticas de infancia con discapacidad, a partir de la visibilización de los aportes del mundo civil y de los actores estatales a este tipo de políticas. 2. Exponer las fortalezas y debilidades en el vínculo público – privado, en el marco de su acción a la población infantil con discapacidad. 3. Determinar los ámbitos a priorizar en el acercamiento público – privado, desde su implicancia para las políticas públicas de infancia con discapacidad. 3 II. PROPUESTA CONCEPTUAL 2.1 Relevancia de las Políticas Públicas y las Políticas Sociales en el Contexto de la Discapacidad 2.1.1 Las Políticas Públicas y las Políticas Sociales Las definiciones de política pública y política social pueden ser muy amplias debido a que no existe un concepto único que las identifique. Birkland (2005) hace una primera aproximación definiendo a la política como una declaración por parte del gobierno acerca de lo que intenta hacer o no, como por ejemplo una ley, una regulación, una decisión, un orden o una combinación de estos. Desde esta misma óptica, la política pública es entonces, en general, todo lo que el gobierno escoge hacer o no hacer actuando en nombre de la ciudadanía (Birkland, 2005). En este sentido, un elemento importante de las políticas públicas es entender cómo varios intereses se organizan y reaccionan a diferentes formas de política. Birkland (2005) menciona que existen tres tipos de políticas: distributivas, regulatorias y redistributivas. Las políticas distributivas y regulatorias se refieren a intervenciones del Estado en el mercado y a la regulación en la provisión de bienes y servicios. Por otra parte, las políticas redistributivas son aquellas que otorgan beneficios a un grupo particular y, por tanto, el Estado y el Parlamento, tienen un papel importante en su formulación e implementación (Birkland 2005). Tomando esto en cuenta, las políticas focalizadas, dentro de las políticas sociales tendrían un carácter redistributivo siendo el Estado quien tiene un papel significativo y decisivo en su definición. De este modo, y en un nivel general, en adelante se entenderá a la política social como “la intervención pública que incide en el bienestar de las personas, ya sea cambiando, manteniendo o facilitando sus condiciones de vida a través del desarrollo de servicios y prestaciones que persiguen objetivos que responden a una determinada problemática social” (Montagut, 2008, pág. 19). En los últimos años, ha existido un crecimiento cuantitativo y cualitativo de las políticas sociales producidas por el Estado Chileno y este proceso le ha llevado a destinar más del 70% de su presupuesto al área social lo cual implica el desarrollo de un sinnúmero de mecanismos de focalización, asignación, evaluación, entre otros, que indican un grado importante de sofisticación de esas políticas (De la Maza, 2004). 4 Desde un plano específico, las políticas, los planes y los programas tienen por objeto el desarrollo de las personas, las familias y la comunidad. Tienen un carácter selectivo y unos propósitos específicos (Serrano, 2005). En este contexto, en adelante este estudio analizará políticas públicas focalizadas. Éstas “corresponden a una modalidad de intervención pública que tiende a destinar sus recursos técnicos y financieros hacia los más vulnerables y vulnerados en sus derechos” (Forselledo, 2002, pág. 15). Se pondrá énfasis en esta política, ya que los niños, niñas y adolescentes con algún grado de discapacidad, tienden a enfrentar situaciones complejas de vulnerabilidad y de exclusión social. Ejemplo de este tipo de política en materia de infancia con discapacidad, es la Política Nacional de Educación Especial 2006 – 2010 (Ministerio de Educación, 2005) la que busca, entre sus objetivos, la inclusión social y la ampliación de las oportunidades de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad. En este sentido, es de importancia señalar, que tomando como base los postulados tanto de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño, como de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, en este estudio de caso se entenderá por infancia con discapacidad a todo niño, niña y adolescente menor a dieciocho años, que presenta algún grado de discapacidad física, mental o sensorial y que, al interactuar con diversas barreras, puede ver impedida su participación plena y efectiva en la sociedad, en igualdad de condiciones que sus pares. En torno a avances institucionales en materia de atención, pese a que éstos pueden tener un dinamismo menor comparado con las políticas y los programas sociales, se promulgó la Ley N° 20.422 que establece normas sobre la igualdad de oportunidades e inclusión social de las personas con discapacidad. Este instrumento propende a la inclusión de este grupo vulnerable, en base a cinco principios rectores: vida independiente, accesibilidad universal, diseño universal, intersectorialidad y participación y diálogo social (Biblioteca del Congreso Nacional, 2010). La presidenta Bachelet en el discurso de promulgación de la Ley N° 20.422, mencionó que hoy en día, las políticas sociales en Chile, responden a criterios mucho más amplios que la sola integración de quienes tienen alguna dificultad o discapacidad, y que la “verdadera integración de estas personas consiste en promover la efectiva equiparación de las posibilidades para que puedan realmente integrarse a la comunidad” (Biblioteca del Congreso Nacional, 2010, págs. 903 - 905). La promulgación de la Ley N° 20.422 no ha sido un h echo aislado. Ésta responde a diversos tratados vinculados al tema de la infancia y la discapacidad. A nivel internacional, Chile ratificó 5 en el año 1990, la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño y en el año 2006 la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad. Previamente ratifica, en el año 2002, la Convención Interamericana para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra las Personas con Discapacidad (Biblioteca del Congreso Nacional, 2010), hitos, entre otros, que expresan la forma con la que el Estado chileno ha dado pasos progresivos en pos de la atención de las necesidades de las personas con discapacidad. La existencia de tratados internacionales y de leyes vigentes vinculadas al tema de la infancia con discapacidad permitió la creación de organizaciones como el Fondo Nacional de la Discapacidad (FONADIS) en el año 1994 (Biblioteca del Congreso Nacional, 2010), figura previa al actual Servicio Nacional de la Discapacidad (SENADIS), y que tiene por finalidad promover la igualdad de oportunidades, la inclusión social, la participación y la accesibilidad de las personas con discapacidad. Adicionalmente, se promovió una profunda reforma del sector preocupado por atender a la infancia vulnerable la cual incluyó cambios en la institucionalidad del Servicio Nacional de Menores (SENAME), en la ley de responsabilidad penal juvenil y otras (De la Maza, 2004). Lo anterior evidencia que existe un compromiso estatal por el resguardo de los derechos de la infancia, incluidos los de aquella que presenta alguna discapacidad, a través del reconocimiento de sus demandas y necesidades. Estos esfuerzos se encuentran dirigidos a generar una oferta pública y privada de largo plazo de servicios que permitan atender a los niños, las niñas y los adolescentes que debido a sus impedimentos “físicos, mentales o sensoriales se encuentran en situación de riesgo social” (De la Maza, 2004, pág. 122). En términos de prestación de servicios sociales en el ámbito de las políticas de infancia con discapacidad, se han dado pasos en la generación de condiciones institucionales que propician la participación de la Sociedad Civil en este campo particular de la política pública, no solo reducida al plano de la prestación de servicios sociales. De la Maza (2004) señala que la participación no se limita “a la ejecución de programas, sino que establece también instancias de interlocución política, que han impactado en los proyectos de reforma legal” (De la Maza, 2004, pág. 123.) Esta relación entre el Estado y la Sociedad Civil, revela la ampliación de los roles y de los actores sociales en el ámbito de la formulación e implementación de las políticas públicas y de las políticas sociales vinculadas a grupos vulnerables específicos. Así, se instalan nuevas lógicas de cooperación y coordinación que permiten entender que el Estado estaría desempeñando un papel en la generación de los instrumentos legales y el financiamiento al sector no lucrativo mientras que la ejecución de los programas se externaliza hacia los mismos (De la Maza, 2004). 6 Por otra parte, el Instituto Interamericano del Niño, la Niña y los Adolescentes (2002), considera que una política pública de infancia en el área social es un conjunto articulado de acciones que incluye diferentes niveles de gobierno y de la Sociedad Civil para trabajar mancomunadamente por la promoción, la defensa y la atención a los derechos de las niñas y los niños (Instituto Interamericano del Niño, la Niña y los Adolescentes, 2002). Lo anterior permite inferir un cambio de perspectiva respecto a las formas de atender a la infancia con discapacidad, la cual no solo concibe la participación de actores públicos o privados por sí solos, sino que da cuenta de la importancia de la articulación de las diferentes esferas en torno a la generación de condiciones adecuadas que faciliten la integración y el ejercicio activo de los derechos de las personas que enfrentan condiciones de discapacidad, incluidos dentro de ellos, a la población infantil. Cisternas (2005), al abordar los cambios que a nivel socio jurídico ha ido teniendo la concepción de “discapacidad”, pone en la memoria que las políticas públicas son mutables en relación al devenir de los distintos sistemas, subsistemas y circuitos a través de los cuales se desarrolla la sociedad (Cisternas, 2005), lo cual abre las puertas para suponer que las políticas orientadas hacia la población con discapacidad, así como incorpora actores y diversos niveles de expresión, central, regional y local, así como también incorporaría un componente de dinamismo que las haría permeables conforme a los cambios que se van manifestando socialmente, y dentro de los cuales, podría suponerse que las políticas públicas tendrían un rol que cumplir de manera de facilitar estos determinados ajustes. Finalmente, desde la literatura especializada, se evidencia que la forma de concebir al niño y a la niña desde las políticas sociales, ha ido cambiando conforme el paso del tiempo, transitando desde una concepción que los entendía como beneficiarios, hacia una con base en la mirada de sujetos de derechos, asignándole a su vez un rol a las organizaciones que los representan en el proceso de formulación e implementación de las políticas que les atañen (Amarante, et al., 2005). 2.1.2 Focalizando las Políticas Públicas de Infancia y Discapacidad Tradicionalmente se pensaba que el objetivo de la política social era la integración social y económica de la población a través de programas de carácter universalista. En este sentido, las políticas universales son inclusivas abarcando un conjunto de grupos que se benefician de la misma, hasta el punto de que cuanto más inclusiva sea la política, ésta es más universal y el beneficio que se espera es global (Brodersohn, 1999). Si bien las políticas universales de infancia pueden tener un carácter constitucional y cubren una variada gama de servicios (Andrade, 2009), en el caso de la niñez con discapacidad se 7 aboga por la utilización focalizada y selectiva del gasto social para complementar las políticas universales (Amarante, et al., 2005, pág. 14). Es decir, la focalización no contradice los preceptos básicos del universalismo y, por tanto, puede complementarlo y facilitarlo si contribuye a introducir un mejor aprovechamiento de los recursos existentes, reduciendo duplicaciones y exclusiones y considerando la heterogeneidad de problemas que pueden afectar a la infancia con discapacidad (Brawerman & Minujin, 1991). En este sentido, una política infantil focalizada es necesaria en la medida en que involucra un conjunto de herramientas que abarcan los diferentes aspectos involucrados en la gestión de los temas de la niñez y de la discapacidad con el objeto de mejorar la respuesta de los Estados frente a los mismos (Instituto Interamericano del Niño, la Niña y los Adolescentes, 2002, pág. 1) Laurnaga (1999) menciona que, de acuerdo a la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño, las estrategias de atención necesarias para el pleno desarrollo de la protección integral de los niños, las niñas y los adolescentes requieren de políticas de atención directa, las que pueden ser divididas en cuatro grupos (Laurnaga, 1999, pág. 22, citando a Gómez da Costa): Políticas Sociales Básicas Se entiende por políticas sociales básicas aquellas cuyos bienes y servicios transferidos son considerados derechos de todos y deber del Estado y, por tanto, deben tener una cobertura universal. Políticas de Asistencia Social No son universales y, por tanto, se dirigen a personas, grupos y comunidades que se encuentran en estado de necesidad, es decir, incapacitados temporal o permanentemente para cubrir por si mismos sus necesidades básicas. Políticas de Protección Especial Se destinan a personas y a grupos que están en riesgo personal o social. Es decir, que están amenazadas en su integridad física, psicológica o moral en razón de negligencia, discriminación, violencia, crueldad u opresión. Políticas de Garantías Las políticas de garantías de derechos están constituidas por un conjunto de mecanismos jurídicos e institucionales destinados a poner en práctica las conquistas del Estado democrático en favor de las personas y grupos amenazados o violados en sus derechos. Situándose en este escenario, se plantea la interrogante de si existe o no un sistema funcional en el ámbito de las políticas de infancia que combine eficaz y eficientemente estos cuatro tipos 8 de políticas, permitiendo el abordaje integral de los problemas específicos que afectan a la niñez con discapacidad, con respuestas diferenciadas, apropiadas y articuladas entre sí (Instituto Interamericano del Niño, la Niña y los Adolescentes, 2002). Así mismo, un sistema de políticas de infancia que combine eficaz y eficientemente estos cuatro grupos de política, en el marco de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño, remite a dos escenarios diferentes para el análisis de la interacción Sociedad Civil – Estado (Laurnaga, 1999, pág. 20).: a) El Ámbito de la Formulación e Implementación de las Políticas Específicas Este escenario se refiere a todas las políticas, planes, acciones y programas orientados a garantizar el interés superior del niño y corresponde al plano de los productos del sistema en términos de políticas públicas (Laurnaga, 1999). b) El Marco Jurídico necesario para la ejecución de Garantías y el ejercicio de los Derechos Ciudadanos del Niño Este es el plano del proceso de aplicación de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño a las legislaciones nacionales. Dentro de este escenario de largo plazo de ejecución de las políticas públicas, la interacción entre la esfera estatal y la esfera privada tiene otra especificidad, y que dice relación con el ámbito de las políticas de intervención directa en las situaciones de vulnerabilidad (Laurnaga, 1999). 9 III. INTERVENCIÓN PÚBLICO – PRIVADA EN DISCAPACIDAD INFANTIL 3.1 Estado y Sociedad Civil: Actores y Roles en el Espacio de las Políticas de Infancia con Discapacidad 3.1.1 Estado Forselledo (2002), en un estudio desarrollado para el Instituto Nacional del Niño, la Niña y los Adolescentes, señala que al referirse al Estado, se hace alusión al poder ejecutivo, al poder legislativo, y al poder judicial, en todos sus niveles: nacional, provincial, departamental, municipal, etc. (Instituto Nacional del Niño, la Niña y los Adolescentes, 2002). 3.1.2 Sociedad Civil Para Bobbio (1989), “Sociedad Civil” se entendería como la esfera de relaciones que no está regulada por el Estado y, que comprende, el conjunto de instrumentos que en un sistema social organizado ejercen el poder coactivo (Bobbio, 1989). Los postulados de De la Maza (2003) refuerzan esta primera mirada explicando que “la perspectiva conceptual que se utiliza sobre la Sociedad Civil parte comprendiéndola como el espacio intermedio entre el Estado y los hogares, espacio en el cual se producen múltiples asociaciones autónomas y voluntarias de individuos, con diferentes objetivos” (De la Maza, 2003, pág. 3). En palabras de Serrano (1998), el concepto refiere a un ámbito ocupado por asociaciones, agrupaciones intermedias, movimientos sociales, territoriales o funcionales en los cuales los ciudadanos juegan papeles diversos en lo que concierne a su aporte a la política pública, la protección social de la población y la integración social (Serrano, 1998). De esta forma se podrían distinguir tres grupos que darían forma al tejido social entendido como Sociedad Civil (Andrade, 2009, pág. 19, citando a Serrano 1998): a) b) c) Organizaciones no Gubernamentales y de voluntariado. Expresiones asociativas y comunitarias. Universidades y otros centros académicos independientes. Esto indicaría que la Sociedad Civil se conformaría entonces por “las Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) que trabajan y luchan en favor de los niños así como por las organizaciones sociales, los empresarios, los sindicatos, el mundo de las organizaciones jurídicas de defensa de derechos, los comunicadores, los formadores de opinión, las iglesias, los liderazgos comunitarios, las familias y hasta de los propios niños, niñas y adolescentes, 10 cuya participación se ha vuelto un aporte insustituible en estos procesos” (Instituto Interamericano del Niño, la Niña y los Adolescentes, 2002, págs. 9-10). De todas estas formas de representación social, este estudio se centrará en fundaciones y corporaciones. Lo anterior ya que, desde un punto de vista económico, estas organizaciones sin fines de lucro concentran más recursos y personal en comparación con otras instituciones de la Sociedad Civil (Irarrázaval et al., 2006), siendo un elemento considerado como relevante desde la literatura para el sostenimiento de las políticas sociales. Adicionalmente, se pondrá el acento en estos tipos de organización, ya que desde el punto de vista histórico, las fundaciones y corporaciones han tenido una amplia presencia en la vinculación en el trabajo por la infancia vulnerable (Andrade, 2009). 3.1.3 Características del Vínculo Estado - Sociedad Civil A partir del proceso de reforma del Estado, la tendencia a transferir funciones no exclusivas hacia otros sectores ha convertido al tejido social conformado por las organizaciones de la Sociedad Civil en un “tercer sector” el cual es relevante para la articulación de acciones sociales (Laurnaga, 1999). Si bien el concepto de una “tercera vía” parte del consenso de entenderlo como un tejido asociativo situado entre el mercado y el Estado, es un ámbito que tiene algo de privado lo cual se refleja en las iniciativas localizadas en los particulares y, algo de público, en la medida en que sus acciones se orientan al bienestar general (Laurnaga, 1999). En términos de su desarrollo histórico, el rol del tercer sector empieza a fortalecerse a partir de la década de los 80 cuando empiezan a aparecer organizaciones de cooperación y autoayuda que abordan la problemática de los sectores populares, en respuesta a la falta de medidas estatales de atención a sus necesidades Adicionalmente, el apoyo de la cooperación internacional permitió desarrollar un nuevo conjunto de organizaciones autónomas conocidas como organizaciones no gubernamentales - ONGs - que cubrieron un amplio espectro de los temas relacionados con el desarrollo social (De la Maza, 2003). Durante la década de los 90, y en el contexto de la recuperación democrática, se crearon nuevos vínculos entre el Estado y la Sociedad Civil a través de la operación conjunta de políticas sociales bajo un marco de modernización del Estado caracterizado por la “focalización de recursos en grupos prioritarios, externalización de funciones de implementación de políticas, asignación competitiva de fondos públicos y co-financiación complementaria de dichos fondos por parte de sus beneficiarios” (De la Maza, 2007, pág.11). En consecuencia, las agencias de política pública resultantes de estas orientaciones que se concentraron en el área social reemplazaron parcialmente a las instituciones históricas de mediación y coordinación política hacia la sociedad (De la Maza, 2007). 11 En los últimos años, la relación entre el Estado y la Sociedad Civil se ha redefinido, lo que ha conllevado, entre otras expresiones, a que segmentos autónomos y diversificados hayan logrado institucionalizar parcialmente algunas demandas y agendas a través de innovaciones institucionales y programáticas en la política social (De la Maza, 2007). Empero de esta evolución en el proceso de articulación pública – privada, existe evidencia de iniciativas fragmentadas que delegan a la Sociedad Civil el rol de prestación de servicios sociales que la gestión pública no puede proveer, conformándose una relación de tipo instrumental entre el Estado y la Sociedad Civil. Por esta razón, estas organizaciones civiles se encuentran en una posición ambigua entre su promoción por parte del Estado y su rol instrumentalizado como proveedor de servicios sociales (PNUD et al., 2006). 3.2 Ámbitos de la Interacción entre el Estado y la Sociedad Civil en el Marco de las Políticas Públicas que atienden a la Infancia con Discapacidad Las políticas sociales forman el núcleo central de las articulaciones que se producen entre el Estado y las organizaciones de la Sociedad Civil, dada la importancia que tienen dentro de las acciones del Estado (García & De Piero, 2001). Franco (1996) explica que la relación Estado – Sociedad Civil en el ámbito del diseño e implementación de la política social, se basa en criterios de institucionalidad, lógica de toma de decisiones, financiamiento (fuentes y asignación de recursos), objetivo buscado, criterio de prioridad y expansión del sistema, población objetivo y enfoque (Franco, 1996). Si bien estas dimensiones se reconocen como relevantes desde la literatura, en tanto son expresiones de ámbitos específicos dentro de los cuales se genera el vínculo público – privado, para efectos de este estudio, en el marco de las políticas orientadas hacia la infancia con discapacidad, se considerarán tres ámbitos específicos de expresión1: En primer lugar, una Dimensión de tipo Institucional. Andrade (2009) explica que este ámbito está “sustentado fundamentalmente por las escuelas doctrinarias – o ausencia de ellas – en materia de infancia, y los instrumentos legislativos y normativos que de ellas emanan” (Andrade, 2009, pág. 26). Por otra parte, una segunda dimensión de corte Organizacional, que puede definirse como “el conjunto de capacidades diferenciadas con que cuenta la Sociedad Civil respecto del Estado y que pone al servicio de la infancia” (Andrade & Arancibia, 2010, pág. 133). 1 Si bien se reconoce que estos no son los únicos espacios en los que se genera la interacción entre el Estado y la Sociedad Civil, se intentará capturar por medio de estas tres dimensiones, al conjunto de elementos relevantes que inciden en materia de interacción en este plano de la política pública. 12 Finalmente, un ámbito Financiero, que corresponde “al conjunto de instrumentos por cuyo intermedio se materializan las transferencias que realiza el Estado para sostener las políticas focalizadas de infancia ejecutadas por la Sociedad Civil” (Andrade & Arancibia, 2010, pág. 133). Por su parte, desde la literatura se extraen diversos componentes que darían cuerpo a cada una de estas dimensiones. Se describen en los siguientes apartados. 3.2.1 Dimensión Institucional: Características, Componentes y Subcomponentes North (1993) explica que las instituciones son las restricciones que los seres humanos han creado y que moldean sus interacciones. Por tanto, son creadas para servir los intereses de los que tienen poder de negociación para diseñar nuevas reglas (North, 1993). Adicionalmente, el autor explica que las instituciones están conformadas por dos componentes: en primer lugar, por restricciones de tipo formal, y en segundo, por restricciones de tipo informal. Las instituciones formales pueden entenderse como aquellos cuerpos legales que regulan una actividad a través de reglas políticas (y judiciales), económicas, y contratos. En este sentido, las reglas políticas establecen la estructura jerárquica de la forma de gobierno; las reglas económicas establecen los derechos de propiedad sobre el uso de un activo o de un recurso y, finalmente, los contratos establecen las estipulaciones específicas de un acuerdo particular de intercambio (North, 1993). A su vez, las instituciones informales comprenden los acuerdos y los códigos de conducta a través de los cuales son representadas las normas sociales. Por tanto, son reglas que no se han diseñado de forma consciente y que todos los miembros de una comunidad se interesan en mantener debido a que imponen restricciones para estructurar sus relaciones. Así, las actitudes, las percepciones, las creencias y los valores refuerzan a las instituciones formales y las ponen a funcionar (North, 1993). Al respecto, Blum (2004) explica que las instituciones informales son sumamente valiosas debido a que permiten una convivencia ordenada en la comunidad y, por tanto, tienen gran utilidad y valor social (Blum, 2004). Para entender cómo se configura este mapa institucional en el ámbito de las políticas orientadas hacia la infancia con discapacidad, es necesario analizar los cambios en los paradigmas que han orientado la intervención conjunta del Estado y de la Sociedad Civil. La literatura en materia de infancia, muestra que las primeras iniciativas centradas en su atención, se basaban en lógicas insertas en un paradigma de corte asistencialista movilizado 13 desde la carencia que podían sufrir algunos niños y algunas niñas. Así, las primeras instituciones a cargo del cuidado y atención de la infancia, desarrollaban su accionar desde prácticas que podrían acercarse a dinámicas de corte más informal que formal, ya que se encontraban a cargo de una cadena de iniciativas benefactoras de carácter público, religioso y laico que operaba en ausencia de directrices formales desde el Estado (Anríquez, 1994, Carmona, 2006). Posteriormente, el primer intento del sector público por asumir un rol más activo y coordinador frente a la acción de los privados se tradujo en las primeras leyes, reglamentos y normas orientadas hacia la atención de la infancia. De esta manera, las restricciones formales se configuraron en torno a un fuerte componente jurídico en la medida en que el Estado comenzaba a asumir los problemas de la niñez por vía del tratamiento legal (Baeza, 2001). Esto podría evidenciarse a través de la promulgación de varias leyes que crearon entidades como el Servicio Nacional de Menores (SENAME) y el FONADIS (Fondo Nacional de la Discapacidad). Actualmente, las leyes, los planes y los programas que atienden a la infancia vulnerable surgen de restricciones formales que tienen por objeto la creación de un sistema de protección integral a partir del reconocimiento explícito de los niños, las niñas y los adolescentes como sujetos de derecho (Carmona, 2006). Sin embargo, existe literatura que señala que en el campo de la discapacidad infantil, los sistemas de apoyo comunitario y las redes informales constituyen la mejor forma de intervención orientada a sus necesidades (Miangolarra, 2003). Esto permite inferir que existiría un espacio de complementariedad respecto a los tipos de instituciones, en tanto una de corte formal, cumpliría un rol activo en la entrega de directrices sobre atención, y la segunda, con dinámicas de corte más informal, conformaría dispositivos de atención validados y reconocidos como exitosos en tanto estrategias de aproximación hacia los niños, las niñas y los adolescentes con algún grado de discapacidad. A continuación se exponen los principales cuerpos normativos que contribuyen a la conformación del componente de instituciones formales. 3.2.1.1 Institucionalidad Formal 3.2.1.1.1 Primer Subcomponente: Convención Internacional sobre los Derechos del Niño En el transcurso de 20 años, la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño (CDN)2 se ha convertido en el instrumento principal de reconocimiento de los derechos que tienen los niños, las niñas y los adolescentes a sobrevivir y a desarrollarse, a vivir libres de violencia, 2 En adelante llamada indistintamente como “CDN” o “La Convención” 14 discriminación y abuso y a que se tomen todas las medidas que consideren plenamente sus intereses. En tal sentido, la Convención está dotada de un mecanismo de supervisión: se trata de un proyecto de gran alcance referido al cuidado y a la protección de la infancia en términos prácticos y morales. Así, este tratado establece, en primer lugar, normas comunes, pero también reconoce que, para garantizar la apropiación y pertinencia, cada Estado parte debe hallar su propia forma de ponerlo en práctica (Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia UNICEF, 2009). Los cuatro principios básicos de la Convención se refieren a la universalidad (no discriminación), la dedicación al interés superior del niño, el derecho a la vida, la superación y el desarrollo y el respeto por los puntos de vista del niño (Naciones Unidas, 1989, artículos 2, 3, 6 y 12). Así mismo, la CDN especifica que el Estado es responsable de procurar atención y protección especial a los niños y a las niñas que padecen impedimentos físicos y/o mentales (Convención Internacional sobre los Derechos del Niño, 1989, artículo 23). Por otra parte, este acuerdo constituye un componente central y legitimador que asigna responsabilidades a la familia, a la Sociedad Civil y a la cooperación internacional relacionadas con la protección integral de la población infantil. Es decir, se evidencia la asignación de un rol de corresponsable a la Sociedad Civil en el fomento de la protección global de la niñez y en la implementación y la vigilancia de los principios de la Convención (Pilotti, 2001). 3.2.1.1.2 Segundo Subcomponente: La Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad En el año 1993, se elaboró un documento que contenía las Normas Uniformes sobre la Igualdad de Oportunidades para las Personas con Discapacidad y que fue adoptado por las Naciones Unidas para la defensa de los derechos de las personas con discapacidad. Sin embargo, estas normas no fueron un instrumento jurídicamente vinculante y, por tanto, se buscó elaborar una Convención que permita una efectiva protección de este grupo vulnerable y la equiparación real de oportunidades (Rosales, 2007). De esta forma, en el año 2006, Naciones Unidas aprobó la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPC)3. El propósito de dicho tratado es promover, proteger y garantizar a las personas impedidas física, sensorial o mentalmente, el disfrute pleno sus derechos. Adicionalmente, cubre una serie de ámbitos fundamentales como son, entre otros: la 3 En adelante, también llamada “CDPC”. 15 accesibilidad, la libertad de movimiento, la salud, la educación, el empleo, la habilitación, la participación en la vida política, la igualdad y la no discriminación evidenciando un cambio que supera la concepción tradicional del bienestar social asistencialista, instalando una concepción centrada en el ejercicio de derechos de las personas con algún tipo de discapacidad o impedimento (Naciones Unidas, 2006, artículos 1 y 3). En este acuerdo también se explicita que los Estados deberán asumir un rol interno activo en el cumplimiento y seguimiento de sus artículos designando uno o más organismos gubernamentales encargados de las cuestiones relativas a la aplicación de los mismos. A diferencia de otros tratados de protección a los derechos humanos, la CDPC se distingue ya que, por primera vez, organizaciones no gubernamentales participaron activamente en su formulación. Por tanto, la Sociedad Civil se encuentra llamada a trabajar conjuntamente con el Estado para que los acuerdos de la CDPC se cumplan, debiendo ser, en este sentido, partícipe en todos los niveles del proceso de seguimiento del avance de las medidas implementadas a favor de su cumplimiento (Rosales, 2007). En los últimos años, este instrumento se ha convertido en el marco orientador de las medidas en materia de derechos de las personas con discapacidad, guiando las adecuaciones normativas que buscan hacer efectivo su pleno ejercicio. Es así que la legislación nacional, adecuándose a este cambio en los estatutos internacionales promulga la Ley N° 20.422 (Biblioteca del Congreso Nacional, 2010), instrumento que busca recoger los principios orientadores que emanan de esta convención. 3.2.1.1.3 Tercer Subcomponente: Ley N° 20.422 Promulgada en 1994, la Ley N° 19.284 antecesora de la Ley N° 20.422, estableció normas que buscaban la integración social de las personas con discapacidad y el resguardo de los recursos públicos destinados a su atención. Lo anterior, a través de la creación del Fondo Nacional de la Discapacidad (FONADIS), organismo estatal que se crea para, entre otras funciones, administrar los recursos estatales en favor de las personas con esa condición. Adicionalmente, esta Ley crea el Registro Nacional de la Discapacidad, por medio del cual se reúnen y mantienen los antecedentes de las personas que hayan sido declaradas con alguna discapacidad (Biblioteca del Congreso Nacional, Ley N° 19.284). Si bien esta ley no estuvo orientada hacia los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad, los benefició directamente ya que determinó el marco legal que propiciaba su integración en la sociedad y su protección (Save the Children, 2003). En primer término, el artículo N°3 de esta Ley defi ne, por primera vez, lo que para efectos legales se entenderá por persona con discapacidad. A saber: 16 “…toda aquélla que, como consecuencia de una o más deficiencias físicas, psíquicas o sensoriales, congénitas o adquiridas, previsiblemente de carácter permanente y con independencia de la causa que las hubiera originado, vea obstaculizada, en a lo menos un tercio, su capacidad educativa, laboral o de integración social” (Biblioteca del Congreso Nacional, Ley N° 19.284, 1994, artículo 3) . Seguidamente, el artículo N° 4 señala que: “El Esta do ejecutará programas destinados a las personas con discapacidad, de acuerdo a las características particulares de sus carencias. Para ello, cada programa se diseñará considerando las discapacidades específicas que pretende suplir y determinará los requisitos que deberán cumplir las personas que a ellos postulen, considerando dentro de los criterios de priorización el grado de la discapacidad y el nivel socioeconómico del postulante” (Biblioteca del Congreso Nacional, Ley N° 19.284, 1994, artículo 4) . Si bien se reafirma en esta normativa el papel del Estado como garante de los derechos de estas personas, no se hace mención sobre la participación de ellas - o de las organizaciones que las representan - en el diseño de los programas de atención. A nivel de enfoque orientador de las acciones, a principios del año 2010, se promulga la Ley N° 20.422 sobre Igualdad de Oportunidades e Inclusión Social de las Personas con Discapacidad la cual, en tanto instrumento legal, facilita en términos legislativos la instalación de un paradigma con enfoque de derechos, que se ajusta a lo postulado por la Convención internacional sobre los Derechos de las personas con Discapacidad, estableciendo una nueva definición de la persona con discapacidad, que ahora la entiende como una que teniendo algún déficit, enfrenta impedimentos para participar plena y efectivamente en la sociedad, en igualdad de condiciones que los demás, debido a la existencia de barreras en el entorno que truncan o dificultan esta interacción (Congreso Nacional de Chile, Ley N° 20.422, 2010). En diálogo con el enfoque de derechos, la Ley N° 20 .422 establece para su aplicación diversos principios rectores. Se señalan a continuación: Vida Independiente De acuerdo a este principio, “la persona con discapacidad se encuentra en condiciones de tomar decisiones, de ejercer actos de manera autónoma y de participar activamente en la comunidad” (Biblioteca del Congreso Nacional, 2010, pág. 7). Esto dialoga con lo expuesto en los artículos N° 14 y N° 15 de la Convención Intern acional sobre los Derechos del Niño en los cuales se explicita el derecho de los niños y las niñas a la libertad de pensamiento, conciencia y religión y, adicionalmente, se garantiza su libertad de asociación (Convención Internacional sobre los Derechos del Niños, artículos N° 14 y N° 15). 17 Accesibilidad Universal El principio de accesibilidad universal trata sobre las exigencias que deben cumplir los entornos, procesos, herramientas, etc., para ser comprensibles, utilizables y practicables por todas las personas con discapacidad (Biblioteca del Congreso Nacional de Chile, Ley N° 20.422, 2010, artículo 3). Al respecto, De Asis et al. (2007) mencionan que la accesibilidad universal en materia de derechos se presenta como una condición ineludible para el ejercicio de éstos, en igualdad de oportunidades, por todos los individuos de la sociedad con el fin último de lograr paridad también en términos de dignidad humana (De Asis et al., 2007). Lo anterior dialoga con el trabajo realizado por Bracho (2008) el cual explica que el concepto de accesibilidad, aplicado a entorno y barreras físicas, se puede ampliar a la totalidad de las esferas de la vida cotidiana a través de “la proyección del diseño para todos que favorece el logro de una vida independiente en la que la persona ejerce el poder de decisión sobre su propia existencia y participa activamente en la comunidad” (Bracho, 2008, pág. 100). Bajo este marco, se podría entender la importancia de la accesibilidad universal para la infancia con discapacidad debido a que la eliminación de barreras contribuiría positivamente a su integración social. Diseño Universal Este principio hace referencia a la creación de entornos, procesos, bienes, servicios, objetos, etc., del tal forma que puedan ser utilizados por todas las personas, en la mayor extensión posible (Biblioteca del Congreso Nacional de Chile, Ley N° 20.422, 2010, artículo 3). Sobre este concepto Alonso (2007) explica que “diseño universal” significa simplemente diseñar todos los productos, edificios y espacios exteriores para ser utilizables por todas las personas en la forma más amplia posible (Alonso, 2007). Intersectorialidad El concepto de intersectorialidad se refiere a la existencia de capacidades y puentes potenciales de comunicación entre actores que permiten una articulación para generar redes y macro-redes para el fortalecimiento y autonomía de grupos vulnerables o minoritarios (Rozas & Leiva, 2005). En términos de la Ley N° 20.422, se entiende a la i ntersectorialidad como la acción del Estado que no se limita a planes y programas específicos, sino que comprende las políticas y las líneas de acción de carácter general, miradas globalmente y con un enfoque coordinador (Biblioteca del Congreso Nacional de Chile, Ley N° 20.422, 2010 , artículo 3). Participación y diálogo social A partir de esta Ley, la participación y el diálogo social son procesos en virtud de los cuales las personas con discapacidad, las organizaciones que las representan y las que agrupan a sus familiares, participan en la elaboración, ejecución, seguimiento y evaluación de las políticas públicas que son inherentes a este grupo vulnerable (Biblioteca del Congreso Nacional de Chile, Ley N° 20.422, 2010, artículo 3). 18 En materia de vínculo público – privado en infancia con discapacidad, este principio es consistente con la generación de espacios de encuentro ciudadanizantes reconocidos como relevantes para el enriquecimiento de las políticas públicas. Laurnaga (1999), entiende que la participación y el diálogo social cumplen un rol esencial, debido a que la soberanía popular no alcanza a representarse ni a ejercerse por sí sola por medio de los mecanismos propios delegados a las instituciones del sistema político – democrático y, por tanto, es necesario que los grupos que velan por la infancia ejerzan su propia representación, en particular en aquellas acciones vinculadas a la reivindicación de sus derechos ciudadanos, civiles, sociales y económicos (Laurnaga, 1999). 3.2.1.2 Institucionalidad Informal 3.2.1.2.1 Primer Subcomponente: Prácticas Informales del Estado Diversa literatura que ha abordado el estudio de las instituciones informales tiende a exponer que no se pueden identificar claramente las reglas, los jugadores, el árbitro y las sanciones que caracterizan a lo que podría entenderse como la existencia de normas informales al interior del Estado. Al respecto, Leiras (2004) citando a Helmke & Levitsky (2003) propone entender a las prácticas informales del Estado como dinámicas “extra-oficiales” debido a que éstas se pueden entender como reglas socialmente compartidas, usualmente no escritas, y que son creadas, comunicadas, e impuestas fuera de los canales oficialmente sancionados (Helmke & Levitsky, 2003, Leiras, 2004). De trabajos como el de Blum (2004) se puede rescatar que las prácticas del Estado, con base en las instituciones informales, son fluidas, flexibles y adaptables y, por tanto, generan vínculos basados en la confianza, producto del conocimiento personal, y de las expectativas de una relación continuada. Así, estos nexos están regidos por convenios privados, explícitos o implícitos, que no pueden ser formalizados (Blum, 2004). Aunque muchas veces la informalidad a nivel del Estado se asocia con prácticas de corrupción y falta de transparencia, las instituciones informales constituyen un elemento clave para explicar el desarrollo en los países debido a que, en cada lugar del mundo, existen pautas de interacción entre las personas y los grupos que responden a condicionantes históricos, geográficos y socioeconómicos. A pesar de que estas pautas de interacción se escapan de las formalidad establecida en la Constitución y otras leyes, no necesariamente afectan negativamente su eficacia y muchas veces pueden complementarse e incluso reforzarse (Oriol Prats, 2003). 19 Tomando como base este marco, este estudio de caso entenderá por prácticas informales del Estado a las pautas de interacción entre los representantes del mundo civil y los funcionarios públicos y que no estando plasmadas en instrumentos formales, podrían en base a ciertas condiciones, facilitar el desarrollo de las políticas públicas de discapacidad infantil. 3.2.1.2.2 Segundo Subcomponente: Prácticas Informales de la Sociedad Civil Con respecto a la relación entre las instituciones informales y la Sociedad Civil, Leiras (2004) citando a Brinks (2003) explica que existe un patrón de comportamiento que responde a una institución informal cuando los agentes relevantes del control social quieren asegurar el cumplimiento de las reglas de comportamiento de otros agentes (en este caso, el Estado) empleando procedimientos que no se crearon de manera formal (Brinks, 2003, Leiras, 2004). De la Maza (2005) explica que, a partir de 1925, la relación entre el Estado y las organizaciones civiles se hace más estrecha, “estableciéndose una suerte de correa de transmisión mediante la cual los grupos sociales se movilizaban y presionaban por sus demandas al sistema político, el cual -a través de los partidos y el parlamento- abría y regulaba espacios al interior del Estado. Todo este proceso se vio interrumpido con el golpe militar de 1973 y la represión posterior” (De la Maza, 2005, pág. 9) Durante el período de la dictadura, las instituciones informales se vieron disminuidas por el cierre de los espacios de participación y de articulación con las identidades sociales lo cual resquebrajó las relaciones preexistentes entre la Sociedad Civil y el Estado. Con el retorno a la democracia se ha podido evidenciar una creciente instrumentalización de las relaciones sociales (De la Maza, 2005), que dando cuenta de un mayor acercamiento entre el Estado y la Sociedad Civil para el desarrollo de políticas públicas, también podría revelar la recuperación de espacios para el uso de mecanismos de articulación informales que se pueden poner al servicio de la producción de las políticas e iniciativas de atención a las necesidades de los grupos vulnerables. En este contexto, en este estudio de caso se entenderá por prácticas informales de la Sociedad Civil a los mecanismos de articulación no formales, como dinámicas de conducta, disposición al acercamiento y al diálogo, y todas aquellas prácticas propias de esta esfera privada y que, diferenciándola de las dinámicas informales del Estado, expresan en sí mismas ventajas competitivas para el desarrollo y fortalecimiento de relaciones sociales entre miembros de las organizaciones de la Sociedad Civil, y otros actores sociales como la empresa privada y la cooperación internacional, y que pueden actuar como dinamizadores de procesos sociales y activos relevantes para el desarrollo de políticas públicas de discapacidad infantil. 20 3.2.3 Dimensión Organizacional: Subcomponentes Características, Componentes y En el apartado anterior, el trabajo de North (1993) permitió extraer una primera idea acerca de las instituciones como las “reglas de juego”. A partir de esta conceptualización, se puede entender a las organizaciones como los “jugadores del juego” ya que están conformadas por individuos que tienen el propósito de alcanzar ciertos objetivos (North, 1993). La dimensión organizacional también se puede entender como un sistema de actividades y/o fuerzas conscientemente coordinadas y de cooperación las cuales buscan alcanzar metas específicas (Etzioni, 1964) Si ubicamos a las organizaciones en el ámbito social, estas metas específicas se refieren a la búsqueda del bienestar colectivo y, por esta razón, se encuentran rodeadas por múltiples actores y discrepancias de interés transformándose, a su vez, en puntos críticos de confrontación y cooperación, los cuales son aspectos inevitables de la implementación de la política social (Roberts, 2001). Esta relación dialéctica entre confrontación y cooperación se conoce como “interfaz” (Roberts, 2001 citando a Long, 1992). En el trabajo de Andrade (2009), se alude a la noción de “interfaz” de De la Maza (2004) para explicar la dimensión organizacional del vínculo público - privado en el ámbito de las políticas públicas de infancia. Conceptualmente “interfaz” referiría a que el acercamiento y vínculo que se genera entre las iniciativas de acción estatal con las de la Sociedad Civil, se daría como un encuentro entre racionalidades diferentes cuya combinatoria produciría diferentes resultados, dependiendo de los recursos de poder con los que cuenten los actores que se vinculan entre sí (De la Maza, 2004, citado en Andrade (2009). En este contexto, y en un escenario de políticas públicas desarrolladas con lógica de interacción pública – privada, se entendería que tanto las organizaciones del Estado como aquellas de la Sociedad Civil serían relevantes, debido a que el fortalecimiento de sus capacidades, pluraliza las oportunidades y enriquece las interacciones debido a la diversidad de acciones y temáticas que convocan a la organización social (Villareal, 2004). De lo anterior se puede inferir que, las organizaciones tanto públicas como privadas, tienen un rol fundamental en el proceso de articulación público – privado en el ámbito de las políticas de infancia con discapacidad ya que, dependiendo de los recursos con los que cuenten, podrían contribuir en mayor o menor medida, a fortalecer y enriquecer todas aquellas acciones destinadas a la atención de este grupo específico. Es en este sentido, y tomando estos aportes desde la literatura, en este trabajo en adelante se entenderá por dimensión organizacional del vínculo público – privado al conjunto de recursos 21 con que cuenta tanto el Estado, como la Sociedad Civil, y que pone al servicio de las políticas públicas de discapacidad infantil. Partiendo de esta conceptualización de la dimensión organizacional, se pueden describir cuatro componentes que la constituirían, que si bien no expresan los únicos presentes en ella, se ha podido desprender desde la literatura como aquellos que cumplirían papeles fundamentales en el marco de la interacción pública – privada en infancia con discapacidad: capital humano, mejora de procesos y gestión de recursos, factor identitario y apoyo técnico. 3.2.3.1 Primer Componente: Capital Humano El trabajo de Becker (1967), da cuenta del concepto de capital humano como el conocimiento y las habilidades propias de las personas, su salud y la calidad de los hábitos de su trabajo. De esta forma la capacidad humana abarca únicamente el ámbito de aporte a la producción (Becker, 1967). En ese mismo orden de ideas, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico – OCDE – (1996) define al capital humano como “el conocimiento que los individuos adquieren durante su vida y que usan para producir bienes, servicios o ideas en actividades realizadas dentro o fuera del mercado” (Giménez, 2003 citando a OCDE, 1996, pág. 22). Otros autores como Sen (1996) y Laroche (1999) explican que el concepto de capital humano va más allá de su aporte a la producción y, por tanto, comprende la suma de habilidades y destrezas que los individuos adquieren y desarrollan a lo largo de su vida (Sen, 1996, Laroche, 1999). Tomando estos aportes conceptuales, en este estudio de caso se entenderá como capital humano, al conjunto de habilidades, destrezas y conocimientos propios de los profesionales tanto públicos como privados que intervienen en las políticas de infancia con discapacidad. Por otra parte, trabajos como el de Tejos (2009) explican que, para reducir la complejidad de los sistemas en los que existe una marcada racionalidad económica, social y política, se pueden utilizar medios de cooperación, integración y participación que sean voluntarios (Tejos, 2009). De esta forma, se puede entender que al hablar de capital humano existirían dos tipos que contribuirían a la construcción del diálogo público - privado en materia de políticas de discapacidad infantil: uno de tipo remunerado y otro de carácter voluntario o filantrópico. 22 3.2.3.2 Subcomponentes de Primer Grado: Personal Remunerado y Personal Voluntario 3.2.3.2.1 Primer Subcomponente: Personal Remunerado La producción de bienes y/o servicios implica recompensas extrínsecas las cuales pueden tomar formas diversas siendo la más reconocida en el mercado, el dinero (Noguera, 2002). De este modo, se entiende que estas contraprestaciones en especie monetaria son las que percibe un empleado por parte del empleador a causa de un contrato de trabajo (Código del Trabajo Chile, 2000, Artículo 41). Max Weber indica que, en el Estado Moderno, se hace posible una noción de carrera que se rige por una concepción abstracta del deber. En este sentido, el funcionario obtiene su puesto por medio del nombramiento hecho por una autoridad superior y ese puesto implica determinados derechos y deberes entre los cuales se encuentra una remuneración fija y regular (Álvarez – Uría & Varela, 2004). En el caso del Estado Chileno, el personal remunerado que trabaja en el ámbito de las políticas públicas de discapacidad infantil se encuentra al interior entidades tales como el SENADIS, el SENAME, o Ministerio de Planificación (MIDEPLAN), entre otras. De acuerdo a cifras presentadas en el Balance de Gestión de FONADIS, al año 2009, existían 120 personas trabajando en la entidad de las cuales el 60,83% corresponde a personal profesional y técnico. Adicionalmente, dentro del presupuesto de FONADIS las remuneraciones equivalen al 18,7% del presupuesto ejecutado (FONADIS, 2009). Por otra parte, un estudio del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo - PNUD (2006) revela que las organizaciones de la Sociedad Civil4 chilena constituyen una importante fuerza económica en términos de generación de empleo, ya que se encuentran prestando servicios de forma remunerada 160.259 personas, cifra equivalente al 2,6% de la población económicamente activa. En términos comparativos, la Sociedad Civil chilena emplea a más de tres veces el personal del sector minero (1,3%) o a dos tercios del empleo de la construcción (8,1%). Adicionalmente, el estudio revela que, en las organizaciones orientadas hacia servicios como educación, salud, entre otros, la mayor parte de sus empleados son remunerados mientras que, aquellas organizaciones que tienen un rol expresivo como por ejemplo, las orientadas hacia la defensa de derechos, la composición del personal cambia predominando el voluntariado. Esto se puede explicar debido a que, en la prestación de servicios, existe un nivel de formalidad mayor lo cual favorece la contratación de personal (PNUD et al., 2006). 4 El Estudio Comparativo del Sector sin Fines de Lucro hace referencia a Organizaciones sin Fines de Lucro (OSF), que en este trabajo forman parte de las Organizaciones de la Sociedad Civil. 23 Sin embargo, trabajos como el de Cancino (2006) explican que en general, las organizaciones de la Sociedad Civil, tienen una práctica de funcionamiento “proyecto a proyecto” y, por tanto, su personal es contratado para cada tarea específica, lo cual produce cierta debilidad institucional al no contar con una planta estable (Cancino, 2006). Con base en las ideas precedentes, en este estudio se entenderá por personal remunerado a la fuerza laboral del Estado y de la Sociedad Civil, que teniendo una relación de dependencia sujeta a un salario, interviene en el campo de las políticas de infancia con discapacidad. 3.2.3.2.2 Segundo Subcomponente: Personal Voluntario Los voluntarios son agentes exclusivos de la Sociedad Civil ya que no se encuentran presentes en las empresas y en los organismos públicos y, por tanto, se configuran como uno de los rasgos más característicos de este tipo de organizaciones. Esto se debe a que la contribución de los voluntarios escapa a toda lógica de mercado ya que su aporte se mide en horas de trabajo, sin cuantificación económica pues el voluntario no recibe remuneración alguna (Falcón & Fuentes, 2006). En Chile, las organizaciones de la Sociedad Civil emplean a 143.624 voluntarios lo cual le permite contar con un contingente importante de personas que trabajan sin percibir remuneración. De esta forma, el empleo total de estas organizaciones está compuesto en un 47% por trabajadores voluntarios (PNUD et al., 2006). Se destaca que el empleo voluntario se concentra en aquellas organizaciones que tienen un rol expresivo. Esto se debe a que este sector opera principalmente a base de voluntariado ya que muchas de sus organizaciones no cuentan con una estructura administrativa de personal sino que trabajan con el apoyo del compromiso personal de sus colaboradores (PNUD et al., 2006). Ejemplo de lo anterior es la Fundación Tetelón la cual cuenta con una planta activa de voluntarios y voluntarias quienes trabajan generando espacios de inclusión para las personas con discapacidad en distintos ámbitos. Son cerca de 7.000 voluntarios los que han promovido un acercamiento de la entidad con diversas redes de trabajo en torno a la promoción de los derechos y al trato justo de quienes tienen alguna discapacidad, especialmente de los niños, las niñas y los adolescentes (Cuenta Pública – Teletón, 2008). Tomando en consideración lo expuesto previamente, en este estudio de caso se entenderá por voluntario al personal que, de forma filantrópica, interviene en el campo de las políticas de discapacidad infantil. 24 3.2.3.3 Subcomponentes de Segundo Grado: Aptitudes Técnicas y Aptitudes Humanas 3.2.3.3.1 Primer Subcomponente: Aptitudes Técnicas Katz (1986) explica que las aptitudes técnicas comprenden la capacidad de aplicar conocimiento o experiencia especializados a la resolución de problemas en el ámbito laboral. Ésta se obtiene a través de educación formal extensa y de las prácticas en el trabajo (Katz, 1986). Weber menciona que en el Estado, el personal administrativo no accede a los puestos por herencia sino que es seleccionado mediante exámenes y concursos públicos destinados a mostrar que los candidatos seleccionados poseen determinadas competencias y cualidades objetivas (Álvarez – Uría & Varela, 2004). Este concepto podría entenderse como las habilidades técnicas mencionadas por Katz. En el ámbito del personal voluntario, las aptitudes técnicas se entienden como su capacidad para hacer más sólido su ámbito de acción y su forma de participar. A la vista de lo anterior y considerando el grado de especialización que las sociedades actuales demandan a sus técnicos e incluso auxiliares, sería poco lógico entender a la acción voluntaria desde el simple compromiso (Fernández, 2003). Por tanto, en este estudio de caso se entenderá por aptitudes técnicas a la capacidad del personal remunerado y/o voluntario de aplicar conocimiento o experiencia especializada al momento de intervenir en el ámbito de la discapacidad infantil. 3.2.3.3.2 Segundo Subcomponente: Aptitudes Humanas Katz (1986) define a las aptitudes humanas (sensibilidad) como la capacidad que tienen las personas para relacionarse con otras y trabajar en grupos con el objeto de alcanzar objetivos comunes, autoconocimiento (conciencia de sus propias actitudes, posiciones y conceptos), empatía y habilidades de comunicación (Katz, 1986). Paulus, Horvitz y Shi (2006) señalan que las aptitudes humanas (que pueden entenderse como habilidades blandas), se relacionan con el trabajo en equipo y la resolución de conflictos. En el ámbito del personal remunerado y del voluntariado, las dimensiones asociadas a los fenómenos sociales son múltiples y complejas, debido a que coexisten elementos sociológicos, psicológicos y motivacionales lo cual genera conflictos (Bustos, 2006). En este sentido, se puede inferir que las habilidades blandas, cumplirían un rol en torno al enriquecimiento de los procesos que se generan en pos del desarrollo de políticas públicas de discapacidad infantil, en 25 donde la existencia de estas habilidades, en mayor o menor medida, podría explicar en algún sentido los niveles de respuesta y solución a los conflictos que puedan generarse en torno al desarrollo de políticas e iniciativas. Por tanto, en este trabajo se entenderá en adelante por aptitudes humanas a aquella capacidad – o sensibilidad – que va más allá de la acreditación técnica, y que se pone al servicio del desarrollo de políticas, pudiendo estar presente tanto en el personal remunerado como en el voluntario que se involucra en el trabajo con los niños, las niñas y los adolescentes con alguna discapacidad. 3.2.3.4 Segundo Componente: Mejora de Procesos y Gestión de Recursos Trabajos como el de Añez & Petit (2006), definen a los procesos y a la gestión de recursos como el conjunto de habilidades y destrezas que tiene la organización para coordinar y combinar sus recursos y capacidades, tanto internos como externos. Adicionalmente, comprende integrar conocimientos tecnológicos diferentes en una solución técnica funcional y, por otra, integrar ese sistema articulado de tecnologías con los diferentes procesos organizacionales tales como diseño, producción, mantenimiento, administración y estrategia, entre otros (Añez & Petit, 2006). En los últimos años, el Estado chileno ha introducido varios instrumentos de apoyo al mejoramiento de la gestión de los servicios públicos. Entre ellos se encuentran las definiciones estratégicas, los indicadores de desempeño, las evaluaciones de programas, los fondos concursables para el financiamiento de programas públicos, los programas de mejoramiento de la gestión y el balance de gestión integral. Adicionalmente, se han incorporado nuevos sistemas de información y reportes (Dirección de Presupuestos, 2009). Por otra parte, las organizaciones de la Sociedad Civil, hoy en día, requieren pasar por un proceso de reconversión debido a que, por un lado, representantes de ellas y de la cooperación internacional enfatizan en la necesidad de aumentar su eficiencia, eficacia y profesionalización, para cumplir con las nuevas exigencias de la cooperación nacional e internacional en un marco cada vez más competitivo (Ponce et al., 2005). Es así que, en materia de vínculo público – privado en el marco de las políticas de infancia y, con bases en estos aportes conceptuales, en este estudio se entenderá en adelante por este componente al conjunto de procesos y protocolos de administración y gestión de los recursos que se ponen al servicio de las políticas públicas de discapacidad infantil. Entiende tanto los procesos de gestión pública como privada, desde su impacto en la intervención con los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad. 26 3.2.3.5 Subcomponentes de Primer Grado: Gestión Organizacionales y Tecnologías de la Información 3.2.3.5.1 Primer Subcomponente: Organizacionales Gestión de de Recursos Recursos Vargas (2006) define a la gestión de recursos organizacionales como aquel proceso que permite diseminar las metas colectivas de una organización, regular el flujo de sus recursos e identificar las funciones y los papeles de sus miembros tomando en cuenta criterios de flexibilidad y de cambio constante. En el caso del sector público, esto se traduce en las reformas de organización y de gestión estatal, orientadas hacia una mayor flexibilización de estructuras y de procesos involucrando una mayor participación social y reduciendo niveles de incertidumbre y de complejidad existentes en el entorno (Vargas, 2006). Por otra parte, Ferrer et al., (2005) explican que la gestión de recursos organizacionales de las entidades sociales dependen fundamentalmente de los requerimientos técnicos que realizan las contrapartes y, por tanto, deben tener un carácter adaptativo y contingencial en torno a la demanda de servicios (Ferrer et al., 2005). Por consiguiente, este subcomponente se entenderá como la mejora en la administración de recursos – financieros y humanos – del Estado y de la Sociedad Civil, tomando en cuenta criterios de reforma, flexibilidad y gestión para el fortalecimiento del vínculo público – privado en el ámbito de las políticas públicas de discapacidad infantil. 3.2.3.5.2 Segundo Subcomponente: Tecnologías de Información y Comunicación Castells (2004) explica que la convergencia de la evolución social y las tecnologías de la información, han creado una nueva base material para la realización y la organización de la estructura social, compuesta por redes y procesos dominantes (Castells, 2004). Cobo (2009) define a las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) como “los dispositivos tecnológicos (hardware y software) que permiten editar, producir, almacenar, intercambiar y transmitir datos entre diferentes sistemas de información que cuentan con protocolos comunes. Estas aplicaciones, que integran medios de informática, telecomunicaciones y redes, posibilitan tanto la comunicación y la colaboración interpersonal (persona a persona) como la multidireccional (uno a muchos o muchos a muchos). “Estas herramientas desempeñan un papel sustantivo en la generación, intercambio, difusión, gestión y acceso al conocimiento” (Cobo, 2009, pág. 312). 27 A este concepto se asocian nociones de gerencia pública y modernización del Estado los cuales impactan fuertemente en los procesos de gestión de información y de comunicación, a través de las tecnologías de internet en el sector gubernamental. En este marco, las cuestiones referidas a los recursos de información y conocimientos que poseen las instituciones del Estado, se transforman en temas fundamentales de la relación entre ciudadanos y gobierno. De esta forma, la demanda y oferta de información sobre políticas públicas se torna creciente, en particular en lo referente a políticas sociales, por su multidimensionalidad y transversalidad (Yáñez & Villatoro, 2003). También se ha enfatizado la importancia de utilizar las TIC para promover el desarrollo económico, social y cultural, aumentar la participación ciudadana e incrementar la eficiencia y la transparencia de las acciones desarrolladas por el sector público. Para el caso de las organizaciones de la Sociedad Civil, las TIC permiten avanzar en el fortalecimiento de las capacidades de prestación de servicios digitales a los beneficiarios y/o usuarios a los cuales representan (Yáñez & Villatoro, 2003). Así, este subcomponente hace referencia a cómo el Estado y la Sociedad Civil pueden crear aplicaciones informáticas y comunicacionales, en el marco de una política focalizada de infancia con discapacidad, con el objeto de generar, intercambiar, difundir y acceder a información que permita fortalecer la acción de la política pública. 3.2.3.6 Tercer Componente: Factor Identitario Laurnaga (1999) menciona que tanto el Estado como la Sociedad Civil son ámbitos heterogéneos, y por lo tanto, no es posible formular una lectura homogénea sobre sus identidades. Así, “ni el Estado tiene la misma racionalidad instrumental a veces atribuida desde las ONGs y desde la Sociedad Civil, ni ésta es un cuerpo homogéneo de instituciones, estrategias educativas, compromisos éticos o ideologías” (Laurnaga, 1999, pág. 23). En palabras de Cohen & Arato (2001), la Sociedad Civil se define como el dominio de las luchas, de los espacios públicos y de los procesos políticos, comprendiendo el campo social en que se ubica la creación de normas, identidades, instituciones y relaciones sociales de dominio y resistencia (Cohen & Arato, 2001). Andrade (2009) señala que, el acercamiento de estos actores, con identidades particulares y diferenciadas en el ámbito de las políticas de infancia vulnerable, permite generar “instancias de debate y ampliar los procesos de implicación en el ciclo productivo de la política pública” (Andrade, 2009, pág. 40). Observar a la Sociedad Civil, implica reconocer entonces que ésta posee una identidad particular, y que trabaja en torno a ciertos valores que no son asumidos por el Estado (Andrade, 28 2009, citando a González Meyer, 1999). Esta idea complementa lo que Bifarello (1996) menciona sobre el rol de la Sociedad Civil, en tanto ésta trabajaría cubriendo las zonas deficitarias de la política estatal y que, al mismo tiempo, se encuentran abandonadas por el mercado (Bifarello, 1996). En este sentido, Cancino (1996) plantea que uno de los desafíos que enfrenta la Sociedad Civil es precisamente definir su identidad, puesto que es necesario romper mitos e imágenes con el objeto de promover un conocimiento más preciso sobre el rol y el accionar que estos organismos desempeñan, dado que existe desconocimiento sobre ellos, particularmente entre los actores públicos y privados (Cancino, 1996). El trabajo de De la Maza (2003) complementa esta idea incluyendo el rol de las políticas públicas como un factor relevante “para definir y reconocer actores legítimos en el espacio público y para orientar sus roles y funciones, incidiendo de esta manera en el desarrollo general de la Sociedad Civil” (De la Maza, 2003). Andrade (2009) refiriéndose a los resultados del estudio Más Voces por el Fortalecimiento de la Democracia: Los Desafíos de la Sociedad Civil (2004), explica que el fortalecimiento de esta esfera permite la manifestación de la diversidad en un marco de pluralidad de ideas, así como la expresión de las mayorías y las minorías, sean éstas numéricas o sociales (Más Voces por el Fortalecimiento de la Democracia: Los Desafíos de la Sociedad Civil, 2004, Andrade, 2009). Tomando en cuenta estos aportes, se puede entender al componente identitario como las diferencias ideológicas y valóricas que identifican al Estado y a la Sociedad Civil y que permiten la transformación de los espacios de poder, los cambios en la forma de acción colectiva y la creación de un espacio social en la cual ambos actores pueden aparecer y dialogar en el marco de las políticas públicas de discapacidad infantil. Por otra parte, la relación de interacción entre el Estado y la Sociedad Civil se expresa en los distintos estadios de las políticas públicas, y en particular, de las políticas sociales (Andrade, 2009). En este sentido, el grado de participación de la esfera privada en la generación, planeación, implementación y evaluación de las políticas orientadas hacia la infancia con discapacidad podría esquematizarse, a priori, con base en el modelo que plantea Ferrer, Monje y Urzúa (2005) sobre las formas de participación de las ONGs en el desarrollo de las políticas públicas (Ferrer et al., 2005). 29 GRÁFICO N°1: FORMAS DE PARTICIPACIÓN DE LA SOCIEDAD CIVIL EN LAS ETAPAS DE POLÍTICAS PÚBLICAS Fuente: Elaboración propia a partir del los documentos de Ferrer et al. (2005). El trabajo de Ferrer, Monje y Urzúa (2005) con base a Meny y Thoenig (1992) menciona que las políticas públicas son tradicionalmente definidas en torno al programa de una autoridad pública estatal. Señalan los autores que, en este diseño, pueden estar o no incluidas las organizaciones de la Sociedad Civil5. Lo anterior, en palabras de Andrade (2009), supondría “un espacio determinado para las organizaciones del tercer sector dentro del ciclo productivo de las políticas y programas orientados a la infancia, en donde éstas tendrían roles desde un sentido metodológico, orientado mayormente a la implementación y ejecución de los cursos de acción, definidos como prioritarios por el Estado” (Andrade, 2009, p 22). No obstante, en el contexto actual, es relevante destacar que, tanto la literatura especializada, como lo señalado por organismos internacionales en materia de infancia, como el Instituto Interamericano del Niño, la Niña y los Adolescentes, destacan la participación que debe tener la Sociedad Civil en materia de políticas de atención. En este sentido, y considerando que en materia de discapacidad infantil, tanto la Convención sobre los Derechos del Niño, como la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, son instrumentos institucionales orientadores con enfoque de derechos, se daría un espacio para aproximar 5 Los autores aluden al concepto de organizaciones no gubernamentales (ONGs). 30 nuevos roles para ambas esferas, en torno a un marco de articulación en pos de la promoción, protección y restitución de ellos. Al respecto, se pueden tomar los acercamientos conceptuales elaborados por González (2009), de cuyo trabajo se pueden desarrollar algunas aproximaciones en torno a los roles que debiesen ejercer cada una de las esferas, sobre las políticas con enfoque de derechos (González 2009). Se presentan estas aproximaciones en el gráfico N° 2: GRÁFICO N°2: APROXIMACIÓN A LOS ROLES PÚBLICO - PRI VADO, EN TORNO A LAS POLÍTICAS CON ENFOQUE DE DERECHOS (ACERCAMIENTO DESDE LAS ETAPAS DE POLÍTICA). Fuente: Elaboración propia con base en el documento de González (2009). Desde este marco y considerando los potenciales aportes del vínculo público – privado a las políticas de discapacidad infantil con enfoque de derechos, se podría suponer la existencia de un espacio para la priorización de nuevas estrategias y mecanismos que permitan un mayor protagonismo de las organizaciones sin fin de lucro (Thompson, 1995). Esto reconociendo y fortaleciendo el componente identitario presente en cada una de las esferas que se vinculan en pos de estas políticas y que contribuyen desde sus particularidades diferenciadas al desarrollo de las iniciativas de atención orientadas a este grupo vulnerable. A continuación se presentan los elementos constitutivos (o subcomponentes de primer grado) del ámbito identitario de la dimensión organizacional. 31 3.2.3.7 Subcomponentes de Primer Grado: Agenda, Diseño, Evaluación e Implementación de las Políticas Públicas de Infancia con Discapacidad 3.2.3.7.1 Primer Subcomponente: Agenda Pública El componente identitario influye decisivamente en la importancia que le asignan los agentes a temas relevantes para la Sociedad Civil, lo cual permite materializarlos a través de la agenda pública nacional (Cancino, 1996). En este sentido, se entiende que en el ámbito de las políticas públicas orientadas hacia la infancia con discapacidad, el reconocimiento de esta identidad de la Sociedad Civil representa una imagen que permite posicionar los debates propios del sector en el espacio de la agenda. 3.2.3.7.2 Segundo Subcomponente: Diseño Un trabajo realizado por Serrano (1998) sobre los elementos territoriales y participativos de la política social, permite contrastar lo expuesto previamente por Ferrer, Monje y Urzúa (2005), Andrade (2009) y González (2009) sobre la articulación público – privada en las fases de la política pública. Se analizaron alrededor de 151 programas sociales y se determinó que el 50% del total de los programas presentaban algún elemento participativo refiriéndose exclusivamente a los espacios en el diseño de los programas (Ferrer et al., 2005, Andrade, 2009 y González, 2009). Otro punto que aparece como relevante es el referido a las prioridades temáticas y sectoriales sobre políticas sociales de parte del gobierno. Al respecto, la generación de espacios de diálogo e interlocución efectiva para intercambiar opiniones tomando en consideración las observaciones de las ONG sobre los diseños gubernamentales, debiera ser considerada como un mecanismo de consulta que potenciara el propio trabajo gubernamental, ya que las ONG cuentan con un conocimiento de terreno y de cercanía a los beneficiarios que debe ser valorizado (Cancino, 2006). De esta manera, el rol asignado por el gobierno a las ONG como ejecutores se ampliaría al de "consultores" en políticas sociales nacionales, regionales y comunales. Lo anterior, permite suponer que la relevancia que se le pueda dar a la participación de la esfera privada en el diseño de políticas de discapacidad infantil, se constituye en un activo en tanto ésta poseería una cercanía y un conocimiento de la realidad de los territorios que, poniéndose al servicio del diseño, podría contribuir a aumentar la pertinencia en la elaboración de las iniciativas que se orientan a este grupo vulnerable. 32 3.2.3.7.3 Tercer Subcomponente: Implementación El estudio realizado por Serrano (1998) también reveló que la modalidad más frecuente de participación de las Organizaciones de la Sociedad Civil es la ejecución, entendida básicamente como un aporte monetario o no monetario para el desarrollo del proyecto específico que se lleva a cabo (Serrano, 1998). Con el propósito de caracterizar el vínculo de corresponsabilidad en materia de infancia vulnerable, Andrade (2009) expone las principales líneas de acción declaradas por organizaciones orientadas a la atención de niños, niñas y adolescentes (Andrade, 2009 con base en los datos del trabajo “Más Voces por el Fortalecimiento de la Democracia: Los desafíos de la Sociedad Civil”, 2004): GRÁFICO N°3: PRINCIPALES LÍNEAS DE ACCIÓN DECLARADA S POR ORGANIZACIONES DE INFANCIA 19% 61% 8% 3% 1% 8% Desarrollo de Medios Diseño y Ejecución de Políticas Sociales Asistencia y Prestación de Servicios Formación y Capacitación Investigación y Estudios Fiscal: Gestión Pública Fuente: Elaboración propia con base en el trabajo de Andrade, 2009 Lo expuesto dialoga con los resultados de Serrano (1998), en tanto se evidencia que la participación mayoritaria de las organizaciones de la Sociedad Civil en el ciclo de vida de la política pública de infancia, se da en la fase de implementación de los programas orientados a su atención (Ferrer et al., 2005, Andrade, 2009). En consecuencia, se puede aproximar que el vínculo se produce mayormente en la ejecución de las políticas de atención, lo que de acuerdo a García & De Piero (2001), daría cuenta de un 33 proceso que, antes que constituirse autónomamente, se deriva de la ejecución de las políticas sociales (García & De Piero, 2001). 3.2.3.7.4 Cuarto Subcomponente: Evaluación En palabras de Nirenberg (2000), la evaluación de las políticas sociales “es una actividad programada de reflexión sobre la acción, basada en procedimientos sistemáticos de recolección, análisis e interpretación de información, con la finalidad de emitir juicios valorativos fundamentados y comunicables, sobre actividades, resultados e impactos de esos proyectos o programas y formular recomendaciones para tomar decisiones que permitan ajustar la acción presente y mejorar la acción futura” (Nirenberg et al., 2000, pág. 32). La evaluación de una política pública comienza por el análisis del acercamiento entre el Estado y la Sociedad Civil observando si el primero logró los objetivos que se había propuesto de acuerdo al proceso de toma de decisiones, las prioridades, la asignación de recursos financieros, las alianzas y los acuerdos que afectan a los ciudadanos. Adicionalmente, es necesario identificar si la Sociedad Civil reconoce que sus expectativas, demandas y problemas han sido resueltos o están en vías de resolverse (Podestá, 2001). 3.2.3.8 Cuarto Componente: Apoyo Técnico El apoyo técnico se entiende como la disposición de ayudas suficientes para compensar deficiencias en las funciones y las estructuras corporales de las personas con discapacidad con el objeto de que puedan acceder a una vida digna y participativa en la sociedad. En este sentido, los apoyos técnicos pueden ser productos, instrumentos, equipamientos o sistema técnicos accesibles (García, 2007). Tomando en cuenta lo expuesto, en este estudio se entenderá como apoyo técnico al conjunto de soportes utilizados en las políticas públicas de infancia con discapacidad y que buscan evitar, compensar, mitigar o neutralizar las condiciones de desigualdad que por su condición, ya sea permanente o temporal, enfrenta la población infantil objetivo, y que apunta a mejorar su autonomía personal y su calidad de vida. 3.2.3.9 Subcomponentes de Primer Grado: Ayudas Técnicas y Centros de Rehabilitación 3.2.3.9.1 Primer Subcomponente: Ayudas Técnicas Cayo (2005) define las ayudas técnicas como “aquellos instrumentos dispositivos o herramientas que permiten, a las personas que presentan una discapacidad temporal o permanente, realizar actividades que sin dicha ayuda no podrían ser realizadas o requerirían de 34 un mayor esfuerzo para su realización” (Cayo, 2005, pág. 34). Adicionalmente, desde un punto de vista económico, las ayudas técnicas pueden definirse como un bien de primera necesidad (Cayo, 2005, pág. 35). En 1994, el FONADIS creó el Programa de Ayudas Técnicas con el objeto de mejorar las posibilidades de inclusión social de las personas con discapacidad y de reducir las barreras de comunicación y movilidad que dificultan su inclusión social. A través de elementos como sillas de ruedas, bastones, andadores, colchones antiescaras, audífonos, elementos de baja visión, órtesis, prótesis, entre otros, se busca tratar o compensar una o más limitaciones funcionales, motrices, sensoriales o cognitivas de las personas con discapacidad. En este sentido, los organismos involucrados en este programa son en su mayoría organizaciones de la Sociedad Civil las cuales se encargan de gestionar las solicitudes de ayuda técnica (FONADIS, 2008). De acuerdo a la cuenta pública 2008, a través de este programa, se atendieron 24.449 niños y jóvenes que presentaban alguna discapacidad de origen motor o neuro-músculo-esquelética. Esa cifra equivale a cerca del 85% de la población demandante de atenciones médico asistenciales de rehabilitación física que tiene entre 0 y 20 años de edad (FONADIS, 2008). 3.2.3.9.2 Segundo Subcomponente: Centros de Rehabilitación Aunque no existe una definición formal de centros rehabilitación se puede decir que estos son centros no hospitalarios que brindan servicios de rehabilitación e integración social a personas con discapacidad, así como servicios de prevención a personas en riesgo de presentar algún tipo de discapacidad (Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia, 2010). En este sentido, en este estudio se entenderá como centros de rehabilitación a las unidades de atención del Estado o de la Sociedad Civil destinadas a la recuperación, rehabilitación y/o habilitación médico - funcional de la infancia con discapacidad física, mental o sensorial. Los Centros Comunitarios de Rehabilitación (CCR) son un producto estratégico del SENADIS y funcionan a lo largo del país con la colaboración de otras entidades de gobierno y de las personas de la comunidad, lo cual ha permitido la rehabilitación de las personas con discapacidad y el fortalecimiento de las iniciativas público – privadas formuladas desde el Estado para la intervención en materia de discapacidad (Balance de Gestión Integral – FONADIS, 2009). Por otra parte, organizaciones privadas como la Fundación Teletón cuentan con Institutos de Rehabilitación Infantil (IRI) que se han especializado en atender a los niños, las niñas y los adolescentes que presentan discapacidades motoras, neurológicas, musculares y óseas (Teletón, 2010). 35 3.2.4 Dimensión Financiera: Características y Componentes Anríquez (2004) explica que los recursos con los que cuenta tanto el Estado como la Sociedad Civil son importantes para sostener el logro de objetivos en materia de infancia vulnerable (Anríquez, 2004, Andrade, 2009). En diálogo con lo anterior, trabajos como el de Andrade & Arancibia (2010) exponen que la dimensión financiera se relaciona con “la necesidad de revisar cómo el sistema de financiamiento condiciona la forma en que se encuentran el Estado y la Sociedad Civil para abordar las políticas de infancia” (Andrade & Arancibia, 2010). Respecto de la intervención que realiza el Estado en el ámbito social, los recursos financieros habilitan acciones a la vez que condicionan su racionalidad (Moscovich, 2003). En la Ley N° 19.284 se estipulaba que el presupuesto de FONADIS estaba compuesto por los aportes de la Ley de Presupuestos, los recursos de la cooperación internacional y los fondos provenientes de los juegos de azar que la ley autoriza. En la nueva Ley N° 20.422 se estipula que el financiamiento del actual SENADIS incluye todos los ítems descritos anteriormente y, adicionalmente, incorpora los recursos que pueda captar esta entidad como resultado de trabajos de estudio, investigación o asistencia técnica que contrate con organismos públicos o privados (Biblioteca del Congreso Nacional, 2010). Por otra parte, Cancino (2006) menciona que, el financiamiento de las organizaciones de la Sociedad Civil, proviene de una combinación de recursos gubernamentales nacionales, cooperación internacional, venta de servicios y, en menor medida, de donaciones de empresarios locales. Normalmente sus equipos de trabajo son pequeños, con especialización profesional, y combinan sus tareas sociales con labores de consultoría en el ámbito que les es propio (Cancino, 2006). Sin embargo, estos recursos muchas veces no son estables a lo largo del tiempo y, por tanto, García & De Piero (2001) mencionan que frente a los problemas de financiamiento, las organizaciones de la Sociedad Civil sólo pueden recurrir al Estado, y de hecho es allí donde encuentran las soluciones a este problema (García & De Piero, 2001). Así, el tercer sector ha optado por tener una vinculación privilegiada con el Estado a través de su participación como ejecutora de los distintos programas y proyectos diseñados desde el gobierno accediendo a subvenciones y compitiendo por la obtención de éstas (Cancino, 2006). En el estudio “Más Voces por el Fortalecimiento de la Democracia: Aporte de las ONGs al Fortalecimiento de la Democracia en Chile” (2004) se presentan las principales fuentes de financiamiento que sostienen las intervenciones de la Sociedad Civil en materia de infancia con discapacidad. Éstas se presentan de forma gráfica a continuación. (Estudio “Más Voces por el Fortalecimiento de la Democracia: Aporte de las ONGs al Fortalecimiento de la Democracia en Chile”, 2004) 36 GRÁFICO N°4: FUENTES DE FINANCIAMIENTO DE LAS ORGAN IZACIONES QUE INTERVIENEN EN MATERIA DE INFANCIA 17% 8% 50% 25% Gobierno Cooperación Internacional Fondos Privados Nacionales Fondos Autogestionados Fuente: Elaboración propia, con base en la muestra del estudio " Más Voces por el Fortalecimiento de la Democracia: Aporte de las ONGs al Fortalecimiento de la Democracia en Chile " (2004). En el gráfico se puede observar que el 50% de los fondos que mantienen las intervenciones en materia de infancia corresponden a transferencias realizadas desde el Estado. El 25% proviene de fondos de cooperación internacional, el 17% de fondos privados nacionales y el restante 8% procede de recursos autogestionados. A continuación se realiza un análisis de las formas de financiamiento, las que a su vez, constituyen los componentes de la dimensión financiera. 3.2.4.1 Primer Componente: Subvenciones La Ley N° 20.032 establece un sistema de atención a la niñez y a la adolescencia a través de la red de colaboradores del SENAME. Este sistema es sostenido económicamente, por vía de un régimen de subvenciones. Los colaboradores acreditados que pueden recibir estos fondos son las personas jurídicas sin fines de lucro y las instituciones públicas que son convocadas a desarrollar actividades relacionadas con líneas de acción tales como Oficinas de Protección de Derechos del Niño, la Niña y el Adolescente (OPDs), centros residenciales, programas y diagnóstico. También son invitadas a competir por las subvenciones las personas naturales, pero deben limitarse a la línea de acción de diagnóstico (Artículos 3 y 4 de la Ley N° 20.032, 2005). 37 Por otra parte, la Ley N° 20.032 dispone en su artí culo segundo la profundización de la alianza entre las organizaciones de la Sociedad Civil y gubernamentales en el diseño, ejecución, y evaluación de las políticas públicas dirigidas a la infancia y adolescencia (Artículo 2 de la Ley N° 20.032, 2005). Un informe presentado por el Ministerio de Justicia (2009), entidad rectora del SENAME, expone que del total de niños y adolescentes atendidos por el sistema de atención a la niñez, el 97% está incorporado en programas ejecutados por organismos colaboradores acreditados y tan sólo el 3% es atendido directamente por el SENAME. El dato anterior deja de manifiesta la relevancia que tienen las organizaciones de la Sociedad Civil en la implementación de la política pública de infancia (Ministerio de Justicia, 2009). 3.2.4.2 Segundo Componente: Fondos Concursables Con el objeto de realizar intervenciones en el ámbito de la discapacidad, las organizaciones de la Sociedad Civil son invitadas cada año por SENADIS a participar en el diseño de proyectos concursables cuyo objetivo es el desarrollo de actividades ligadas a la inclusión de las personas con discapacidad. Estas propuestas se pueden financiar total o parcialmente y comprenden líneas de financiamiento tales como prevención y rehabilitación, espacio físico, cultura, deporte y recreación, acceso a información, entre otros. Adicionalmente, estos fondos permiten salvaguardar y promover el ejercicio de los derechos de las personas con discapacidad a través de la intensificación y ampliación de servicios y programas generales de habilitación y rehabilitación favoreciendo el desarrollo de iniciativas inclusivas orientadas a la participación ciudadana, la accesibilidad y la equiparación de oportunidades de este grupo vulnerable (SENADIS, 2010). A través de este proceso de articulación público – privada, se han financiado alrededor de 170 proyectos concursables, que dan cuenta de una cantidad de personas beneficiadas que alcanza a las 3.625 a lo largo de todo el país, cubriendo distintas edades, en las que se incluyen niños, niñas y adolescentes, en las distintas expresiones de la discapacidad, tanto sensorial, mental y física (Balance de Gestión Integral – FONADIS, 2009). 3.2.4.3 Tercer Componente: Recursos de Autogestión Autogestión es “el conjunto de prácticas sociales que se caracteriza por la naturaleza democrática de las tomas de decisión, que favorece la autonomía de un colectivo. Es un ejercicio de poder compartido, que califica las relaciones sociales de cooperación entre personas y/o grupos, independientemente del tipo de estructuras organizativas o actividades, dado que expresan intencionalmente relaciones sociales más horizontales” (Peixoto, 2004). 38 De acuerdo a los datos referidos sobre las fuentes de financiamiento de las organizaciones que intervienen en el ámbito de infancia con discapacidad, el gráfico N° 4 indica que, el 8% del presupuesto de estas entidades corresponde a autogestión. Por su parte, si bien los datos del financiamiento a las organizaciones civiles entregan una lectura a nivel general, en un plano específico se pueden observar algunas diferencias en la distribución de los fondos que sostienen la acción de algunas organizaciones que intervienen en este plano de política6. Así, tomando el caso de la Teletón, se aprecia que en el año 2008, si bien esta entidad recibió transferencias del Estado (57,9%), el componente de autogestión representó el 42,1% de los fondos que permitieron su participación en el ámbito de las políticas públicas de discapacidad infantil (Cuenta Pública – Teletón, 2008). (Ver Gráfico N° 5). GRÁFICO N°5: FINANCIAMIENTO DE FUNDACIÓN TELETÓN 42,1% 57,9% Transferencias desde el Estado Autogestión Fuente: Elaboración propia con base en la Cuenta Pública – Teletón, 2008 En el gráfico N° 6 se puede apreciar que, las princ ipales fuentes de recursos autogestionados7, provinieron de auspiciadores (41,0%), donaciones de personas (27,4%), canales a distancia (17,6%), otros (9,8%) y tareas (4,3%). 6 En este análisis de la dimensión financiera se tomó en consideración a la Fundación Teletón y a la Fundación Coanil debido a que, dos representantes de estas entidades, colaboraron con el análisis cualitativo que se expone en la sección cuatro. 7 Si bien estos datos no se encuentran desglosados por grupo etario, permiten dar cuenta de forma general de los tipos de financiamiento que sostienen a esta entidad privada. 39 GRÁFICO N°6: FUENTES DE AUTOGESTIÓN – FUNDACIÓN TEL ETÓN 4,3% 9,8% 17,6% 27,4% 41,0% Canales a distancia Auspiciadores Otros Otras donaciones de personas Tareas Fuente: Elaboración propia con base en la Cuenta Pública – Teletón, 2008 Para el caso de Fundación Coanil, en el gráfico N° 7 se puede observar que su financiamiento al año 2008 proviene principalmente del Estado (92,8%). No obstante, la autogestión, representa el 7,2% de su presupuesto lo cual refleja que la movilización de recursos por esta vía representa un porcentaje importante del total de su financiamiento. GRÁFICO N°7: FINANCIAMIENTO DE FUNDACIÓN COANIL 2,8% 92,8% 1,7% 2,7% Subvenciones y aportes fiscales Donaciones Cuotas Socios Otros ingresos operacionales - programas Fuente: Elaboración propia, con base en los Estados Financieros de la Fundación de Ayuda al Niños Limitado COANIL al 31 de diciembre de 2008. 40 3.2.4.4 Cuarto Componente: Recursos por modalidad de Co-Financiamiento De la revisión de literatura especializada, aún cuando no se encuentran definiciones formales del término “co-financiamiento”, diversos textos abordan aproximaciones al concepto tratándolo como un mecanismo de inversión complementario a los recursos propios y a las transferencias, cuyo objetivo es orientar la inversión pública. De esta forma, una parte de las transferencias estatales se canaliza a través de una modalidad de co-financiamiento por medio de la cual el gobierno chileno pone un porcentaje determinado de sus propios fondos en cada proyecto o programa desarrollado por las organizaciones de la Sociedad Civil. La Cuenta Pública de Teletón refuerza esta idea cuando explica que el 57,9% de los recursos que financian su intervención en políticas públicas de discapacidad corresponden a recursos provenientes de las cajas auxiliares y sucursales del Fondo Nacional de Salud de Chile (FONASA) (Cuenta Pública – Teletón, 2008). Tomando este punto de referencia, en el marco de este estudio se entenderá por cofinanciamiento a la transferencia corriente que se realiza desde el presupuesto del FONASA hacia los prestadores médicos que atienden a los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad y que opera en función de cuántos de ellos y ellas son atendidos en pos de sus especificidades de prestación. IV. ANÁLISIS DE LA CORRESPONSABILIDAD PÚBLICO - PRIVADA 4.1 Investigación de campo La aproximación metodológica para dar respuesta a las preguntas de investigación de este estudio, ha combinado tanto elementos cualitativos como cuantitativos, realizándose en dos momentos diferentes. A continuación se presentan los hallazgos que fueron posibles por medio del levantamiento de datos cualitativos, y posteriormente, se presentan los resultados obtenidos del análisis con instrumental de Proceso Analítico Jerárquico (AHP). 4.1.1 Primer Momento: Análisis Cualitativo por medio de la Entrevista en Profundidad En esta sección se exponen los resultados de las entrevistas aplicadas a siete informantes expertos con el objeto de caracterizar la interacción público - privada en las políticas públicas de discapacidad infantil. 41 Los entrevistados8 pertenecen a diferentes ámbitos de acción como son el Estado, la Sociedad Civil y la Academia. Para su selección se utilizó el muestreo por criterio, el cual sin ser probabilístico, permite seleccionar una muestra de informantes sobre la base de criterios vinculados a su experticia en la temática de análisis. En este caso, los criterios de elegibilidad fueron el nivel de conocimiento sobre temas de discapacidad e infancia, así como su experiencia o acercamiento al proceso de articulación público – privado en la política pública de análisis. Por su parte, el instrumento de aplicación fue la entrevista de corte semi estructurado9, la cual fue construida en base a preguntas que responden a las dimensiones y tópicos que se presentan como relevantes desde la literatura especializada en materia de vínculo público – privado y en materia de infancia con discapacidad. Las dimensiones de análisis fueron la percepción del vínculo público – privado, la dimensión institucional del vínculo, la dimensión financiera de la interacción y, finalmente, la referida a los aspectos organizacionales que se ponen al servicio de este tipo de políticas. A continuación se exponen las preguntas que guiaron la primera parte del trabajo de campo: En torno al Vínculo Público – Privado ¿Cómo caracterizaría este acercamiento? ¿De qué forma definiría la relación que se da entre actores en torno a las políticas de infancia con discapacidad? Respecto a las dimensiones identificadas desde la revisión bibliográfica: Dimensión Institucional ¿En qué medida el marco institucional con enfoque de derechos ha incidido en el proceso de articulación pública - privada? Dimensión Organizacional ¿Cómo influyen los aspectos organizacionales en el desarrollo de las políticas públicas de infancia con discapacidad? Dimensión Financiera ¿De qué manera los recursos financieros, tanto públicos como privados, inciden en las condiciones de desarrollo y de sostenibilidad de las políticas? 8 Se entrevistó a 8 expertos en esta primera etapa del trabajo de campo. Para ver el mapa de actores consultar Anexo N° 1 9 Ver anexo N° 2 42 Alcances Respecto a la Metodología Con respecto a la metodología utilizada en este estudio de caso (Entrevista en profundidad y Proceso Analítico Jerárquico - AHP), es importante señalar que existen algunas limitaciones referidas a la naturaleza de estas herramientas. En primer lugar, los hallazgos no se pueden generalizar o extender a diferencia de lo que ocurre con los resultados obtenidos de los análisis cuantitativos de corte inferencial. Por tanto, si bien esta observación rescata la percepción de expertos calificados, y facilita la reconstrucción de procesos vinculados a la temática de análisis, así como la determinación de las prioridades de los aspectos a mejorar en materia de vínculo, los resultados no constituyen Toman en sí mismos, información necesariamente representativa del universo de posibles informantes. En segundo lugar, debido a razones de tiempo y de recursos, el análisis se llevó a cabo en la Región Metropolitana y, por tanto, este estudio se encuentra acotado y no puede dar cuenta de lo que ocurre en otras regiones del país. 4.1.2 Vínculo Público - Privado en el Ámbito de las Políticas Públicas de Discapacidad Infantil 4.1.2.1 Surgimiento y Características del Vínculo Público – Privado Al analizar lo declarado por los entrevistados no se observa consenso en torno a la percepción respecto del origen del acercamiento. Así, no existe una opinión única referida a quién propicia el acercamiento público – privado debido a que no se define quien es el que propicia este acercamiento. En una primera instancia, desde la academia se tiene la percepción de que es la Sociedad Civil, a través de una movilización autónoma, quien atrae el interés del Estado en temas relacionados con la atención de las personas en situación de discapacidad. “Yo creo que, en nuestro país, la Sociedad Civil es muy señera en lograr generar el interés del Estado, el interés de los legisladores, etc., y, son en gran medida, los gestores de ese proceso”. (Representante de la Academia). 43 Contrario a lo anterior, un representante del Estado expone que este vínculo se origina bajo el marco de las leyes y de las convenciones internacionales que son instrumentos que ven a la Sociedad Civil como un conjunto de organizaciones a las que se les debe otorgar un financiamiento, bajo la forma de programas, proyectos y ayudas técnicas, como contrapartida de ciertas prestaciones orientadas al servicio de las personas con discapacidad. “Tiene que nacer desde el Estado a partir de un marco jurídico y en ese marco jurídico nosotros trabajamos y transferimos recursos a través de subvenciones asociadas a lineamientos técnicos”. (Representante del Estado). Por otra parte, un representante de la Sociedad Civil explica que el vínculo tiene mayormente un carácter cooperativo en el cual existe un trabajo mutuo, coordinación, reconocimiento de actores y de transferencia de conocimiento debido a que la Sociedad Civil es un actor competente y dinámico. Es decir, hay organizaciones que se reconocen en algunos casos como instituciones colaboradoras del Estado y dentro del vínculo aparecen como un actor activo. Respecto de los factores que podrían fortalecen este acercamiento, un representante del Estado menciona lo siguiente: “El SENADIS tiene la obligación de coordinar las políticas públicas y de desarrollar todas las labores de gestión intersectorial. Yo diría que hay dos maneras a lo menos de como de entenderlo. Primero, cuáles son las expectativas a las que apunta el marco legal – formal de responsabilidad pública y, segundo, la capacidad del sector público de desarrollar una gestión con la Sociedad Civil con el sector privado (convenios, agendas de corto, mediano y largo plazo, acuerdos en el marco de lo que señala la Convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad, los marcos conceptuales como la Clasificación Internacional del Funcionamiento de la Salud y la Discapacidad, en fin. Hay una tarea, una responsabilidad principal del Estado de acercarse a la Sociedad Civil y desarrollar una gestión participativa de la política pública”. (Representante del Estado). De lo anterior se podría rescatar que, los marcos institucionales y el desarrollo de las capacidades de gestión público - privadas, contribuirían a desarrollar una política pública participativa en el ámbito de la infancia con discapacidad. 44 4.1.2.2 Evidencia de una Relación de Corresponsabilidad entre el Estado y la Sociedad Civil Al indagar sobre si existe una relación de corresponsabilidad entre el Estado y la Sociedad Civil en el ámbito de las políticas públicas de discapacidad infantil existe divergencia entre el juicio de los expertos entrevistados. Tomando en cuenta un enfoque de derechos, un representante del Estado menciona que no existiría una relación corresponsable entre la esfera pública y la esfera privada y, que el accionar del Estado se explicaría tomando en cuenta un modelo de delegación del cumplimiento de los derechos y las garantías de la infancia con discapacidad a entidades privadas. “Más que hablar de una relación de corresponsabilidad simbiótica, se da una relación bastante paradójica y corresponde a lo que autores como Castell llaman “Estado Red”, en la cual el Estado va delegando ciertas garantías o ciertos derechos que se garantizaba a la población en entidades privadas…”. (Representante del Estado). Desde una perspectiva diferente, un informante de la Sociedad Civil refuerza la idea de que no existiría una relación de corresponsabilidad entre el Estado y el tercer sector pero aclara que, a su juicio, se podría hablar roles públicos y privados diferenciados en términos su accionar en materia de discapacidad infantil. “Mi percepción es que no existe una relación de corresponsabilidad. Creo que en términos de discapacidad ha habido más roles de la Sociedad Civil que de los gubernamentales, en términos del accionar pero una vez que parte la iniciativa, se empieza a generar una suerte de relación pero que todavía no es simétrica”. (Representante de la Sociedad Civil). Por el contrario, un experto del Estado explica que lo que existiría en el ámbito de las políticas públicas de discapacidad infantil son prácticas de corresponsabilidad y que estás pueden entenderse a partir de la ejecución de las acciones orientadas al servicio de este grupo vulnerable. Dentro de este escenario, la Sociedad Civil es quien entrega el conocimiento y, por otra parte, es el Estado quien otorga los recursos con los cuales trabajan estas organizaciones. “Hay prácticas de corresponsabilidad por ejemplo cuando las organizaciones de la Sociedad Civil ejecutan convenios de colaboración con SENAME (…) y se transforman en instituciones que ejecutan política pública (…). La Sociedad Civil es la que sabe cómo hacer las cosas. Es la que está en terreno, conoce las lógicas, ha hecho las investigaciones, la que tiene el acercamiento afectivo con las personas, 45 tiene modelos operativos trabajando, tiene profesionales de largo plazo trabajando 4.1.2.3 Desafíos que enfrenta la Relación de Corresponsabilidad A partir de las entrevistas realizadas a los expertos se pudieron determinar varios desafíos que enfrentan tanto el Estado como la Sociedad Civil respecto de los roles que interpretan bajo el marco de articulación público – privada, para el desarrollo de políticas de infancia con discapacidad. Un elemento revelado por un representante del Estado, dice relación con la importancia de la comunicación público – privada para fortalecer la articulación entre ambos actores debido a que, si existe una comunicación fluida y apertura, la Sociedad Civil puede plantear sus necesidades y el Estado puede acogerlas para elaborar nuevas políticas, instrumentos, normativas y protocolos orientados al servicio de la infancia con discapacidad. De esta forma, el sector público puede conocer cuáles son los marcos conceptuales que proponen las organizaciones de la Sociedad Civil, sus objetivos y su agenda con el objeto de contribuir a materializar y darle mayor valor público a las políticas de discapacidad en infancia. Esto permitiría generar procesos participativos e incorporar a estas organizaciones en los diagnósticos, la ejecución y el monitoreo de las mismas. “Mira yo creo que lo primero es hacer un proceso de mayor conocimiento de parte del Estado sobre los organismos de la Sociedad Civil. No solamente saber cuáles son sus ofertas porque el Estado ha tenido una lógica funcionalista buscando que es lo que puede resolver pero pocas veces se da tiempo de conocer cuáles son los marcos conceptuales de estas organizaciones, sus objetivos, cuál es su agenda de forma más amplia y ver cuánto de eso puede ayudar a materializar y darle mayor valor público a las políticas públicas”. (Representante del Estado). Respecto de la producción de la política, existe consenso por parte de los informantes sobre la importancia del rol del sector público en el aseguramiento de espacios de diálogo para fomentar una participación pluralista, diversa, representativa y activa de quienes son beneficiarios y de las organizaciones que los representan reconociendo el valor de identificar al grupo objetivo a quien se dirige la política. “(…) nosotros estamos haciendo para levantamiento de los lineamientos técnicos 46 diálogos, observatorios, jornadas. Nos hemos preocupado de levantar información 4.1.3 Dimensión Institucional 4.1.3.1 Institucionalidad Formal: Marcos Normativos en materia de Infancia con Discapacidad Al indagar respecto a los aportes de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño y la Ley N° 20.422 al proceso de articulación público – priv ado, los expertos coinciden en que estas declaraciones de principios reconocen a los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad como sujetos de la política social y que, estas normativas, entregan principios rectores como son la vida independiente, la autonomía, la no discriminación y la igualdad de oportunidades que deberían traducirse en todas las políticas e intervenciones que se realizan. “Lo primero es reconocer al individuo como sujeto de la política social y no como un objeto; es una cuestión súper básica, son sujetos con derechos, por lo tanto, uno no se les está haciendo un favor sino que se está materializando un derecho reconocido. Yo creo que estos marcos entregan principios rectores como la vida independiente, la autonomía, la no discriminación, que son muy importantes especialmente la no discriminación ya que el sólo hecho de plantearte un principio que busca la igualdad de oportunidades, aceptar al otro como un sujeto válido y evitar toda forma de violencia, de agresión, de marginación y exclusión de sus derechos y de la vida social es decir todo aquello que apunta a resolver eso es tremendamente positivo”. (Representante del Estado). “Para nosotros como organización, la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad es una declaración de principios ya que reconoce que los derechos de las personas con discapacidad son iguales a los de cualquier otra persona y que estos deben cumplirse”. (Representante de la Sociedad Civil). 47 Sobre la Convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPC) y la Convención Internacional de los Derechos del Niño (CDN), a juicio de un experto del Estado los tomadores de decisión muchas veces carecen de claridad en torno a cómo materializar y reconocer los derechos de las personas con discapacidad y, por tanto, se realizan prácticas asistencialistas, proteccionistas y poco articuladas con la política pública. “(…) Tu te encuentras de repente con tomadores de decisión u operadores públicos que no tienen clara la materia de las Convenciones y que agreden y discriminan. Incluso generan prácticas en el ámbito social que han debido ir mejorando pasando desde prácticas clientelistas y caritativas hacia una mayor tecnificación de su trabajo y el desarrollo de programas más articulados con la política pública”. (Representante del Estado). Por otra parte, desde el punto de vista de la exigibilidad de derechos, ambas convenciones explicitan la responsabilidad del Estado sobre la protección de este grupo vulnerable y el cuidado de sus derechos. “Yo creo que el gran valor de las convenciones internacionales, es que volvieron a poner el tema como una responsabilidad de Estado y los países se han comprometido nuevamente”. (Representante de la Academia). Lo anterior dialoga con lo expuesto previamente por Rosales (2007) sobre el rol que deben asumir los Estados en el cumplimiento y seguimiento de los principios básicos promulgados en cada una de ellas (Rosales, 2007). Respecto de la Ley N° 20.422, existe consenso por p arte de los expertos al señalar que, el marco teórico y normativo de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPC), estableció las bases para la creación de esta nueva legislación sobre discapacidad. “La Convención es la que sienta las bases para la generación de la nueva ley; y la convención se articula inmediatamente con la Clasificación Internacional del Funcionamiento de la Discapacidad y de la Salud; entonces ese es el primer efecto, la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad sienta las bases o da el patrón, el paradigma teórico y normativo para la realización de la nueva Ley” (Representante del Estado) Entre los principales aportes de la Ley N° 20.422 e stá la creación del Servicio Nacional de la Discapacidad (SENADIS), entidad que está facultada para coordinar con otros actores las 48 acciones, las estrategias y los procesos de diseño e implementación de las políticas orientadas al servicio de la infancia con discapacidad utilizando espacios de diálogo transitando de esta forma hacia una lógica mixta de trabajo. “Yo creo que los principal aportes son tres. Primero pone el acento en la inclusión y la igualdad de oportunidades, por lo tanto, pone el acento en la responsabilidad de los órganos del Estado. Segundo, entrega a cada órgano del Estado una hoja de ruta, una agenda de temas (marco de acción, estrategias específicas a desarrollar) que uno las puede operacionalizar por metas. Y bueno claramente como tercer punto la creación de SENADIS. El hecho de poder tener un órgano que coordine la política pública en discapacidad y que vele por los derechos de las personas con discapacidad”. (Representante del Estado). 4.1.3.2 Desafíos que enfrenta la Institucionalidad Formal en el Ámbito de la Infancia con Discapacidad Al preguntar a los expertos sobre de los desafíos que enfrenta el ámbito institucional, se evidenció un consenso sobre dos aspectos: el primero tiene relación con la difusión del contenido de las convenciones y de la Ley N° 20.422 y, el segundo, se refiere a la operacionalización de la nueva legislación sobre discapacidad. “A la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad le falta difusión, visibilización y que todos los actores de esta sociedad se hagan parte de esto porque no basta con que nosotros nos adhiramos y llevemos la bandera de lucha sino que los otros actores de la sociedad también deben estar conectados”. (Representante de la Sociedad Civil). “Yo creo que el Estado tiene un rol importante con respecto a la nueva ley ya que tiene que difundirla a nivel de las entidades que trabajan con niños, niñas y adolescentes con discapacidad así como a nivel de sus familias. Creo que falta difusión y una bajada más concreta. Como un usuario de esta ley yo la veo bastante lejana pese a que la conozco imagínate la situación de las familias que no pueden acceder a ella”. (Representante de la Sociedad Civil). A su vez, un representante del Estado desconoce si será factible la implementación de la Ley N° 20.422 debido a que mientras no exista un presup uesto asociado a su materialización se podría comparar con una letra muerta. 49 “La nueva ley (…) me parece que es bastante buena; particularmente si se la compara con la anterior. Otra cosa es la factibilidad de su implementación en la sociedad ya que es un tema que pasa mucho por los recursos que estén asociados a ello”. (Representante la Sociedad Civil). 4.1.3.3 de Visión desde las Instituciones Informales 4.1.3.4 Institucionalidad Informal: Prácticas del Estado y de la Sociedad Civil Sobre las instituciones informales, los expertos de la Sociedad Civil y del Estado explican que estas son necesarias para el proceso de articulación público – privado dado el gran número de actores involucrados en el ámbito de la discapacidad infantil. Esto implica un trabajo en equipo y de tipo intersectorial. “Las organizaciones de la Sociedad Civil son un ente que representa a un gran número de personas lo cual facilita la existencia de relaciones informales porque de alguna manera uno se relaciona en este ámbito informal a través de redes o estoy trabajando en este ámbito”. (Representante de la Academia) “No se me ocurre que pudiéramos hablar de política pública y de inclusión sin estar hablando antes de trabajo en equipo y ahora te digo trabajo en red. Porque, obviamente, cuando hablamos de inclusión, la integralidad que tiene ese concepto involucra a todas las áreas y funcionamientos de la sociedad. Eso implica que son muchos los sectores que tienen que involucrarse, y por lo tanto, trabajamos intersectorialmente: trabajo, educación, salud, etc.”. (Representante del Estado). Por otra parte, un representante de la Sociedad Civil explica que existen distintos canales de comunicación público – privado y que estos son habitualmente personales, razón por la cual no se encuentran protocolizados. Esto se evidencia, por ejemplo, en la falta de formalización de una instancia permanente que permita fortalecer la relación entre el Estado y la Sociedad Civil, el intercambio de ideas, el análisis, etc. Entonces, la importancia atribuida a estos procesos de diálogo y de los acercamientos informales radica en que generan procesos de negociación con el objeto de lograr cambios sociales aplicables al ámbito de la infancia con discapacidad. “Existen, distintos canales, pero habitualmente son personales. No son canales que se han establecido. Por ejemplo, no hay formalización de instancias permanentes de relación, de intercambio, de análisis”. (Representante de la Sociedad Civil) 50 “Los cambios sociales son fruto de procesos de negociación y de movilizaciones que logran la construcción de órganos y de un diálogo social que tiene por objeto asegurar los objetivos tanto del Estado como de la Sociedad Civil. Hoy en día todo el que quiera poner una idea sobre la mesa tiene que dialogar con otros”. (Representante del Estado). 4.1.4 Dimensión Organizacional 4.1.4.1 Capital Humano: Características del Personal que Interviene en el Ámbito de la Discapacidad Infantil Al recoger la opinión de los expertos respecto del capital humano que trabaja en la implementación de las políticas públicas de discapacidad infantil, estos coinciden en dos factores que son relevantes. El primero se relaciona con la experiencia, la disponibilidad y la formación del personal profesional y técnico que atiende los requerimientos de los niños, las niñas y los adolescentes sujetos de la intervención de políticas y, el segundo, tiene que ver con el desarrollo del capital humano del Estado dentro del proceso de articulación público – privado. “En el mundo de la discapacidad nosotros tenemos un problema con los médicos especialistas. Entonces los médicos fisiatras, los especialistas en medicina física y rehabilitación para nosotros se transforman en un factor limitante porque hay solamente un programa de formación de médicos especialistas en Chile”. (Representante de la Sociedad Civil). Por tanto, se puede observar la importancia de disponer de un capital humano especializado y multidisciplinario debido a que ellos son quienes realizan la intervención de forma directa en el campo de la infancia con discapacidad. Esta limitada disponibilidad de capital humano también se extiende a otras áreas como por ejemplo aquella relacionada con la formación técnica. “Hay algunas profesiones también que son limitantes. Tenemos el caso de las órtesis y las prótesis (…). La formación de técnicos en órtesis y prótesis que en Chile por lo menos en este minuto no hay escuelas formales (…) nosotros estamos trabajando con El Salvador en la Escuela Latinoamericana de Órtesis y Prótesis de la Universidad Don Bosco con un programa a distancia que está patrocinado por la Organización Panamericana de la Salud para formación de estos profesionales”. (Representante de la Sociedad Civil). 51 Por otra parte, para el caso de los funcionarios del Estado, se entiende que las redes de trabajo desarrollan una sinergia de discursos, prácticas y visiones a través de las cuales el funcionario público va generando un conocimiento desde la práctica, los conceptos, los derechos, las leyes, etc. Sin embargo, los recursos para capacitación, especialización y pasantías son escasos y, por lo tanto, se compromete la calidad del servicio que se brinda respecto de la temática de discapacidad. Adicionalmente, se reconoce un liderazgo de la Sociedad Civil en este tema ya que ésta es que posee una gran comprensión de lo que son las necesidades de la infancia con discapacidad física, mental o sensorial. “Los presupuestos para capacitación de los funcionarios del Estado, para especialización en el extranjero, las pasantías, las ventanas reales para hacer docencia son escasos. Por lo tanto hay muchos funcionarios que se agotan y pasan a ser burócratas. (…). A nivel de la Sociedad Civil yo veo una tremenda comprensión de lo que son las necesidades de las personas con discapacidad, veo un liderazgo”. (Representante del Estado). 4.1.4.2 Retos para el Personal que Interviene en el Campo de la Discapacidad Infantil Uno de los desafíos que debe enfrentar la formación de capital humano es la inexistencia de una malla curricular que facilite el conocimiento de las personas que trabajan con los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad. Esta podría ser una responsabilidad compartida lo cual permitiría propiciar acuerdos público – privados en esta materia fortaleciendo la relación entre ambos actores. “Sin duda yo creo que el Estado puede financiar o entregar una malla curricular para facilitar el conocimiento sobre todo de las personas que trabajan en forma directa con el usuario que atendemos. Yo creo que ahí va la especialización. Yo creo que el personal ya está capacitado. Ya se formaron. Pero el grupo que trabaja de forma directa no tiene estudios universitarios. Son más bien los que ha tenido formación técnica. Lo otro es la experiencia de la vida que claramente sería un gran aporte a la formación de profesionales capacitados para atender la discapacidad, la vulneración de derechos y entender el trabajo con familias”. (Representante de la Sociedad Civil). 52 En palabras de otro experto de la Sociedad Civil, una de las opciones para disponer de capital humano especializado sería fortalecer a los organismos técnicos del Estado para que ellos sean quienes entreguen la capacitación requerida a las organizaciones privadas, así como a los funcionarios públicos que lo requieran. “Yo creo que otra línea que podría fortalecerse es a través del Estado, de sus organismos técnicos de capacitación. El Estado puede transferir dinero para la capacitación por ejemplo a través del Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (SENSE)”. (Representante de la Sociedad Civil). 4.1.4.2.1 Personal Remunerado versus Personal Voluntario en el Contexto de la Discapacidad Infantil Sobre el personal remunerado, un experto de la esfera privada observa que existe mayor responsabilidad encargada al capital humano que percibe un pago y que atiende a la infancia con discapacidad debido a que su intervención debería estar sustentada en una mirada profesional, que brinde todos los soportes técnicos y que responda a los requerimientos de este grupo vulnerable. “Las personas que trabajan son gente muy sensibilizada, muy bien formada, con educación continua, que se están acreditando. Nosotros trabajamos todos los protocolos clínicos. Todo lo que sea técnico está bien. Pero es un grupo muy pequeño, muy reducido dentro de lo que es el ámbito de la discapacidad en el país”. (Representante de la Sociedad Civil). Cuando se les pregunta a los expertos acerca del rol del voluntariado en el proceso de políticas, se constata gran diversidad de respuestas que señalan al voluntariado como una forma de participación activa de la Sociedad Civil pero que debe ser regulada en sus plazos, sus agendas y sus aportes. Esto debido a que el trabajo con infancia con discapacidad, supone el desarrollo de un vínculo emocional que apunta a la creación de oportunidades y no al reconocimiento de un déficit. “Ahí tienes un ejemplo de la vocación y de la energía que el voluntariado vuelca en el aire y ahí tenemos una participación activa de la Sociedad Civil. Bueno nosotros tenemos un voluntariado muy activo. Yo sé que hay otras organizaciones que también lo tienen y yo diría que juegan un rol muy importante que es absolutamente complementario y sincronizado con nuestro objetivo de inclusión”. (Representante de 53 la Sociedad Civil). “Es necesario establecer que se entiende por voluntariado y sus plazos (…). Los de corto plazo son aves de paso que muchas veces no aportan suficiente y muchas veces pueden ser obstáculos digamos porque traen su agenda propia no tienen tiempo de inducción suficiente, no logran modificar sus mitos y prejuicios. Son voluntarios que en su cabeza está optando por ayudar a los mongolitos y si no tienen la suficiente inducción y no se logra identificar esa sensibilidad puede ser negativo. El énfasis no tiene que estar en el déficit sino en las oportunidades que se deben crear”. (Representante del Estado). Un representante del Estado reconoce la importancia del voluntariado en el fortalecimiento de la articulación público – privada con base en la experiencia de los Centros Comunitarios de Rehabilitación (CCR)10. “(…) también hay que fortalecer la capacitación de los monitores comunitarios ya que ellos asumen un rol muy relevante en la ejecución y, por tanto, se puede capacitarlos para una mejor ejecución. Pero también deberían tener herramientas para el diagnóstico y evaluación de los programas. Por ejemplo, en los Centros Comunitarios de Rehabilitación, las plazas son rehabilitadoras, la junta de vecinos son rehabilitadoras, la casa tiene componentes de rehabilitación y estimulación que permite digamos a la gente sentirse en un proceso de inclusión sistemático, permanente”. (Representante del Estado). Acerca de los desafíos que enfrenta el personal no remunerado, uno de los expertos del Estado reconoce la necesidad de generar un estándar de voluntariado que permita la incorporación de profesionales de otras áreas para que asuman un rol relevante en la ejecución de las políticas. “Lo que hay que generar es un estándar de voluntariado en Chile que permita que expertos, médicos jubilados, asistentes sociales, psicólogos, profesionales puedan aportar socialmente de manera voluntaria”. (Representante del Estado). 10 Los centros comunitarios de rehabilitación están constituidos por alianzas entre padres y familiares de personas con discapacidad, municipalidades y el FONADIS y su objetivo es integrar socialmente a este grupo vulnerable y sensibilizar a la comunidad sobre sus necesidades (Instituto Nacional de Rehabilitación Pedro Aguirre Cerda, 2010). 54 Otra inquietud se relaciona con el reconocimiento y la validación del trabajo voluntario: “(…) las organizaciones de la Sociedad Civil trabajan mucho con voluntarios pero ¿cómo validar ese ejercicio?, ¿cómo validar ante la ley? Porque existe una ley que está totalmente detenida en el Congreso sobre la participación ciudadana que ahí habla de reconocer el trabajo voluntario. Este país es un país de voluntarios. Existe el voluntariado pero no es reconocido, no existe una ley que los ampare; y si no fuera una ley debería ser una especie de decálogo o algo así. Pero de alguna forma debería entenderse por trabajo voluntario a aquellos que trabajan en las tareas del Estado”. (Representante de la Sociedad Civil). Muy en diálogo con lo anterior, los expertos rescataron la importancia de las aptitudes técnicas y humanas que poseen tanto el personal remunerado como el personal voluntario y que se manifiestan al momento de realizar la intervención. Si bien se reconoce la importancia de la competencia y la capacidad profesional en el campo de la discapacidad infantil, las habilidades humanas son fundamentales porque permiten vincularse y lograr empatía con este grupo vulnerable. “Entonces yo creo que necesariamente (…) las competencias blandas son sí o sí una condición del tema de la discapacidad porque estamos hablando de un grupo vulnerable (…) que hay que tratar que sus derechos realmente se ejerzan. Y, para eso, yo creo que hay que tener la capacidad de asombro, la capacidad de sensibilizar, la capacidad de ponernos en ese lugar (…) y hacerlo distinto” (Representante de la Academia) 4.1.4.3 Mejora de Procesos y Gestión de Recursos: Gestión de Recursos Organizacionales y Tecnologías de la Información Cuando se pregunta a los representantes de la Sociedad Civil explican que, en algunas organizaciones, existe una administración orientada al mejoramiento continuo y a la calidad con el objeto de responder a las necesidades centradas en la atención de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad y, por tanto, están acordes a una planificación estratégica. “Desde esta perspectiva, la Sociedad Civil, sí o sí, se tiene que dar, obviamente, una administración orientada al mejoramiento continuo, a la calidad y todo lo que implica, para, de verdad, poder responder a las necesidades centradas en el sujeto y en una planificación estratégica. Y, eso cabe igual, para la Sociedad Civil como para quién 55 Sin embargo, no todos los organismos pueden acceder a este mejoramiento continuo debido a diferencias de tamaño y recursos. “En el caso de discapacidad tú te encuentras con organizaciones muy profesionalizadas, no es cierto, y con organizaciones muy rudimentarias, una asociación de personas, y que son muy dependientes de la vigencia del líder no es cierto de la forma o se forman alrededor de la persona y esa persona después ya no está y la pequeña institución tiende a desaparecer”. (Representante de la Sociedad Civil). Cuando se pregunta a los representantes del Estado sobre los procesos de mejora continua, existe consenso sobre la necesidad de optimizarlos debido a que, actualmente, estos no se encuentran diseñados para evaluar la satisfacción de los beneficiarios o usuarios de las políticas, sino que son indicadores y procesos relacionados con la ejecución del gasto público. Reconocen la falta de recursos humanos para poder implementarlos dentro de estas instituciones. “Nosotros tenemos los Programas de Mejoramiento de la Gestión (PMG) pero estos no se preocupan del negocio. Se preocupan de los sistemas de soporte. Entonces tu llenas a la institucionalidad pública de indicadores y de procesos que no necesariamente apuntan a la satisfacción del cliente. Ósea el cliente pasa a ser Dirección de Presupuestos o el ministerio respectivo. (…). También existe todo un instrumental que tiene una enorme importancia ya que existe una gerencia que se ve sobrepasada por los sistemas. Colapsar al sector público es fácil”. (Representante de la Sociedad Civil). 4.1.4.3.1 Desafíos en el Marco de la Gestión de Organizacionales y Tecnologías de la Información Recursos Respecto de las tecnologías de la información, en general, los expertos del Estado coinciden en que existen brechas en la capacitación del personal asociadas al uso de las tecnologías de la información las cuales son un soporte para los procesos de mejoramiento continuo. Si se implementan correctamente, podrían generar y procesar información de forma eficiente para 56 difundirla y socializarla entre todos los actores que intervienen en el campo de la discapacidad infantil con lo cual se podría amplificar el impacto de la política pública. “Existen brechas digitales que se asocian a brechas generacionales que no se han logrado adecuar a las tecnologías de la información, comunicación online, al uso de plataformas o de software específico. Por ejemplo, hoy día para todo lo que es la transparencia pública se usan plataformas informáticas que supuestamente buscan facilitar la vida al funcionario público pero en rigor lo que están haciendo es reducir la calidad del vínculo y aumentar la información a procesar. Ahora si esa información a procesar mejora la política pública, excelente. Pero si es saturación de información (…) nunca se procesa porque no hay departamento de estudios, no hay presupuesto para análisis, no hay dinero para difundir la información y socializarla es una pérdida de tiempo”. (Representante de la Sociedad Civil). Sobre los desafíos que enfrentan estos dos componentes se plantea el desarrollo de sistemas de acreditación con el objeto de fortalecer la relación público – privada de tal manera que sea el Estado quien fije las bases sobre las cuales las organizaciones de la Sociedad Civil puedan trabajar en términos de calidad y de gestión y que, a su vez, éstas reciban apoyo económico premiando de esta forma las buenas prácticas. “Bueno yo creo que sería interesante que el Estado ayudara, no es cierto, en el desarrollo de estas buenas prácticas. Yo creo que los sistemas de acreditación son una oportunidad, ahí tienes una relación interesante entre el Estado y la Sociedad Civil de tal manera que el Estado fije los pisos sobre los cuales tenga que trabajar en términos de calidad y de gestión. Y que eso vaya desarrollando esta organización y le vaya dando más herramientas. Muchas veces estas organizaciones, sobre todos si son pequeñas, tienen poco acceso a crédito, tienen poco acceso a capacitación (…)”. (Representante de la Sociedad Civil). 4.1.4.4 Factor Identitario En este plano, se observan asimetrías respecto de la identidad y de los valores que caracterizan tanto al Estado como a la Sociedad Civil. Un primer grupo afirma que no deberían existir diferencias identitarias entre ambos actores ya que cuando se establecen puentes para el diálogo, reconociendo las posibles diferencias, se apuntaría finalmente a la convergencia de éstas en torno a un objetivo común. 57 “Yo creo que no deberían haber diferencias conceptuales (…) en términos de desarrollo social o sea la inclusión de los grupos vulnerables de la sociedad forma parte de la preocupación permanente del Estado. Probablemente a lo mejor hay diferencia en cómo hacerlo o en cómo implementarlo o en cómo priorizar y bueno ahí forma parte de la riqueza del tema pero yo creo que es fundamental el trabajo en redes porque obviamente puede haber distintas visiones (…). Pero ese debiera ser el objetivo y debieran converger (…) en ese sentido la Sociedad Civil con el Estado.” (Representante de la Sociedad Civil). Por otra parte, se extrae de los discursos de los expertos que las diferencias identitarias se sostendrían en el hecho de que el Estado por su propia forma es una esfera más homogénea, en tanto que la Sociedad Civil, en sí es diversa y pluralista. “Es decir, el Estado tiene una responsabilidad de garantizar derechos a la gente y esa es una cuestión básica de identidad. Por otro lado, la Sociedad Civil tiene derecho a disentir, a tener una mirada distinta, su esencia es otra, (…) es diversa, es plural (…) no es una cosa armónica, hay muchas voces que quieren hacerse escuchar”. (Representante del Estado). Al preguntar a uno de expertos de la Sociedad Civil en referencia a los ámbitos que pueden fortalecerse en el tema identitario revela que, la existencia de espacios de interlocución, permite a los actores hablar de sus particularidades, sus competencias, sus niveles de trabajo, sus problemas y sus dificultades y, producto de este diálogo, se generan aportes valiosos que nutren y contribuyen a mejorar las políticas públicas en el ámbito de la discapacidad infantil. “(…) cuando existen mesas técnicas donde hay una participación social, están involucrados todos los actores, los que corresponden. Es muy importante reflexionar sobre las discusiones y generar documentos sobre esto. Esto aporta y nutre mucho para las futuras políticas, para las mejoras, entonces es importante tener esas mesas técnicas para generar esos espacios de conversación (…). Es importante ser una gran red que sea representativa para el Estado y que él muestre su nivel de trabajo, su competencia”. (Representante de la Sociedad Civil). 4.1.4.4.1 Ciclo de Políticas Públicas A la luz de lo que plantean los expertos de diferentes ámbitos consultados, se observa acuerdo respecto a que el Estado es quien define la política pública orientada al servicio de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad y que, por tanto, se encuentra en todas las fases del 58 ciclo de la política pública entendido como agenda, diseño, implementación y, finalmente, evaluación. Si bien se han abierto espacios de diálogo con la Sociedad Civil a través de mesas de trabajo informales y comisiones consultivas, el Estado posee un rol hegemónico. “La mayoría de las políticas públicas en Chile emanan desde el Ejecutivo. Algunas pueden emanar del poder legislativo (pero son menos). (…). En años previos, a Bachelet se le acusó de armar muchas comisiones porque era consultiva, donde se escuchaba a todo el mundo. Entonces se integraban visiones, se compartía visiones. Ella hizo consejos transversales en términos políticos, en términos profesionales. Y además, se invitó a muchas organizaciones, de forma consultiva. Pero en el fondo, el Estado toma lo que le parece de lo que la Sociedad Civil y lo que no le parece, no”. (Representante de la Sociedad Civil). “Yo creo está que el Estado en todo el ciclo de la política. Probablemente en todo se involucra. En primer lugar al diseñar políticas es muy importante que haya participación ciudadana sino te transformas en una política de escritorio (…). En segundo lugar en la socialización, el Estado juega un rol relevante. En la implementación probablemente debiera dar las condiciones generales para que el tema se desarrolle y para que la Sociedad Civil actúe”. (Representante del Estado). Por otra parte, un informante del Estado señala que, a pesar de la hegemonía del sector público en el ciclo de las políticas de infancia con discapacidad, es importante que la Sociedad Civil se involucre con el propósito de desarrollar mejores servicios y acciones en beneficio de este grupo vulnerable. “El Estado no necesariamente tiene que ser el efector de las políticas públicas y de las acciones sino que ahí puede estimular a la Sociedad Civil para que exista emprendimiento; para que existe el desarrollo de servicios que al final beneficien al propio interesado”. (Representante del Estado). 4.1.4.4.2 Retos respecto de la Participación Público – Privada en el Ciclo de las Políticas de Infancia con Discapacidad Relativo a potenciar una mayor participación de la Sociedad Civil en el ciclo de las políticas públicas de discapacidad infantil, los expertos que representan a este sector, manifiestan su 59 deseo de seguir contribuyendo con su opinión en la evaluación tanto de sus actividades como de aquellas realizadas por el Estado que actúa como ente regulador. “Debemos estar presente, ser un actor vivo, ese es un aprendizaje. (…) ser un denunciante porque no queremos ser las personas que nunca se conforman sino más bien lograr los objetivos. Porque yo creo que tampoco se debe entender que seamos un constante perturbador de esta instancia sino más bien revisar, monitorear. Es decir, crear una relación permanente con el Estado”. (Representante de la Sociedad Civil). Por otra parte, un representante del Estado explica que, en términos de la inclusión de la Sociedad Civil en el ciclo de las políticas públicas de discapacidad infantil, es necesario que este sector se encuentre presente en todas las etapas y que el Estado debería dar las directrices relacionadas con esta participación. “En primer lugar, yo creo que (…) al diseñar políticas es muy importante que haya una participación ciudadana sino se transforma en una política de escritorio (…). En segundo lugar, en la socialización, el Estado juega un rol relevante. En la implementación probablemente debiera dar las condiciones generales para que el tema se desarrolle y para que la Sociedad Civil actúe”. (Representante de la Sociedad Civil). 4.1.4.5 Apoyo Técnico Sobre los apoyos técnicos vinculados con la habilitación y rehabilitación de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad, los expertos identifican dos factores que son relevantes en este tema: las ayudas técnicas y los centros de rehabilitación. Referente a las ayudas técnicas, un representante de la Academia explica que éstas son fundamentales debido a que pueden cambiar la vida de un niño, una niña o un adolescente con discapacidad ya que son adaptaciones que permiten habilitar o rehabilitar a este grupo vulnerable mejorando su calidad de vida. “Yo creo que las ayudas técnicas son fundamentales, lo mismo que la tecnología. Una simple ayuda técnica que puede ser de la famosa rampa de acceso o un lápiz engrosado, va a cambiarle la vida a la persona en términos del ejercicio, de la actividad, de cómo en definitiva logra hacer la función. Yo creo que las ayudas técnicas y las adaptaciones son fundamentales para que la persona en el fondo funcione dentro de los parámetros que ella cree son posibles y logre hacer sus 60 actividades de la vida cotidiana en todas las áreas que le corresponde sobre la base Sin embargo, un experto del Estado, explica que las ayudas técnicas en muchos casos son insuficientes debido a que los recursos son escasos, la demanda supera a la oferta disponible y a que existe un desconocimiento en el tema de costos. “Mi percepción sobre las ayudas técnicas es que son insuficientes. Hay recursos escasos y desconocimiento generalizado. Así como hay mucha heterogeneidad de las deficiencias que cubren las ayudas técnicas, aún mayor es el desconocimiento en el tema de los costos y las características de los mismos”. (Representante del Estado). 4.1.4.5.1 Tareas Pendientes en Términos de Apoyo Técnico para Niños, Niñas y Adolescentes con Discapacidad Acerca de los desafíos que enfrentan las ayudas técnicas, un experto de la Sociedad Civil propone que el Estado fomente condiciones para que sea el mercado el que cubra la demanda por estas adaptaciones mejorando la transparencia, la información y la diversidad en el proceso de adquisición de las mismas. “En las ayudas técnicas también se puede fomentar el hecho de que el Estado pueda generar las condiciones para que sea el mercado el que participe en su provisión y, probablemente, eso nos da mucha mayor eficiencia. Pero lo importante es la transparencia, diversidad y oportunidad de la información, es vital”. (Representante de la Sociedad Civil). Por otra parte, en los centros de rehabilitación se fabrican y se proporcionan las ayudas técnicas de órtesis y prótesis, se realizan terapias ocupacionales y se entregan ayudas mecánicas y, de ahí, se puede inferir su importancia para los procesos de habilitación y/o rehabilitación de la infancia con discapacidad. “Los Institutos Teletón todos proporcionan las ayudas técnicas de órtesis y prótesis y tenemos talleres en todos los institutos. Nosotros entregamos (…) gratuitamente (…) todas las atenciones que reciben los pacientes en Teletón (…). (…) En terapia ocupacional entregamos todo lo que son los firulajes, lo que son las órtesis de extremidades superiores. Además le entregamos ayudas mecánicas como las sillas de ruedas (…). Todo niño que requiera una silla de ruedas se le entrega gratuitamente para su uso”. (Representante de la Sociedad Civil). 61 Un representante de la Academia menciona que las ayudas técnicas pueden elaborarse en el país sin necesidad de importarlas en algunos casos debido a que existe un grupo de profesionales – terapeutas ocupacionales – que se encuentran capacitados para realizarlo. “Las ayudas técnicas pueden ser hechas perfectamente en nuestro país, no tienen que ser ni universales ni para todos iguales ni para todas importadas; en eso soy enfática, yo creo el terapeuta profesional, es el profesional que tiene la formación en el área; porque, obviamente tiene la formación en anatomía, en antropometría, en biomecánica, y en el contexto que le permita hacerlo. Las ayudas técnicas son instrumentos, y son, en general algunos de fácil elaboración”. (Representante de la Academia). 4.1.5 Dimensión Financiera Al recoger la opinión de los expertos respecto de las fuentes de financiamiento de las organizaciones que intervienen en materia de discapacidad infantil, un informante de la Sociedad Civil expone que, el financiamiento, permite lograr estabilidad para desarrollar las acciones orientadas al servicio de este grupo vulnerable. Esta continuidad finalmente apunta a lograr un impacto en las intervenciones realizadas en este ámbito. “El financiamiento es la única manera de lograr estabilidad y continuidad en los trabajos, porque claramente una organización pequeña puede ser sustentable en el tiempo pero finalmente necesita un apoyo constante para lograr impacto, lograr avanzar en sus intervenciones, dar continuidad (…) yo creo que para el Estado también es importante (…) el que haga transferencias económicas a esta Sociedad Civil y a expertos. (…) Yo creo que es muy buena esta relación Sociedad Civil – Estado, creo que así se trabaja y cambia la imagen del Estado también”. (Representante de la Sociedad Civil). Sobre el mismo tema, un experto del Estado explica que el sector público dispone de fondos para la intervención en el ámbito de la infancia con discapacidad. Sin embargo, esta oferta no se construye con ayuda de la Sociedad Civil y, por tanto, muchas de estas organizaciones no pueden acceder a este financiamiento. 62 “Yo creo que hay mucha oferta de fondos para la Sociedad Civil pero poca construcción de esa oferta con estas organizaciones. Entonces yo creo que ahí hay un tema que se debe trabajar más para definir los focos, las estrategias, los contenidos. Asumiendo que el Estado ha hecho el diagnóstico y ha identificado donde se encuentran sus necesidades. (…). Yo creo que la gran debilidad es que los más pobres casi nunca logran acceder a estos fondos porque en general existe también mucha profesionalización de fundaciones, corporaciones, sociedades de profesionales, instituciones, que finalmente sobreviven de alguna manera de estos fondos pero el Estado no ha tenido una suficiente evaluación de esas transferencias y por lo tanto no sabe si los sectores más necesitados acceden porque justamente estos no tienen la capacidad de interlocutar ante estos fondos”. (Representante del Estado). Al consultar a un experto del Estado sobre las subvenciones, explica que la Ley N° 20.032 11 no tiene un enfoque de inclusión y, por tanto, este tipo de transferencia de recursos no tomaría en consideración la perspectiva de garantía de derechos. De esta forma, se podría estar discriminando a ciertos segmentos de la población con discapacidad infantil ya que no se está valorando la diversidad. “En mi experiencia la subvención a secas no resulta. La subvención es discriminatoria (…) no me ayuda a integrar y el enfoque es de inclusión. La diversidad no es vista como un valor, es un puro discurso. Pero la legislación actual y la forma de subvencionar no responden a un enfoque de derechos e inclusión. Entonces, ¿cómo financiar? Financiar con mayor flexibilidad, financiar yo creo en base a resultados de proceso y resultados de impacto” (Representante del Estado) Un representante de la Sociedad Civil explica que, la Ley N° 20.032 que establece el régimen de subvenciones, no cubre los costos de la intervención y que, por tanto, las organizaciones de este sector están obligadas a conseguir recursos de otras fuentes. Sin embargo, cada vez es más complicado acceder a ese financiamiento complementario. Adicionalmente, recalca el experto, el mayor porcentaje de la subvención se destina al pago de sueldos del personal que realiza la intervención. “El SENAME subvenciona la mayoría de programas con los que trabajamos (…). Sin embargo, la Ley N° 20.032 no cubre todos los costos de la intervención que 11 La Ley N° 20.032 establece un sistema de atención a laun niñez y adolescencia través la red de colaboradores realizamos y nuestra organización coloca alto porcentajea de losdemismos. Yo diría del SENAME, y su régimen de subvención. que es una relación Sociedad Civil (60%) y SENAME (40%). Lamentablemente, hoy por hoy, es más difícil conseguir ese otro porcentaje lo cual debilita la calidad de la63 atención especialmente para cubrir el costo de el recurso más importante que es el La modalidad co-financiamiento es otra fuente de recursos que permite atender las necesidades de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad. Un experto de la Academia explica que esta forma de transferir recursos, permite utilizar los beneficios de las prestaciones, ya sean estas de FONASA o de las Instituciones de Salud Provisional (ISAPRES) y, por tanto, estos medios se utilizan en la acción de salud que la infancia con discapacidad necesita. “El co-financiamiento, a mi me parece correcto, en el sentido que si yo tengo una previsión, me parece bien de que la institución acceda a esa prestación; porque el FONASA o ISAPRE está con el recurso y, por lo tanto, el recurso debe ser invertido en la acción de salud que necesita ese niño. (…) En las instituciones que tienen esta condición de co-financiamiento, pienso yo que desde una perspectiva de la gestión, es lo correcto”. (Representante de la Academia). Respecto de la autogestión, un experto del Estado explica que la esfera pública no ha podido avanzar sobre la lógica de las donaciones como una forma de obtener recursos debido a trabas legales asociadas a una nueva legislación. Por tanto, se podría entender que no se han podido canalizar adecuadamente estos aportes para financiar las iniciativas orientadas al servicio de la infancia con discapacidad. “(…) al Estado le ha costado mucho avanzar hacia una lógica de interlocutar con donaciones. De hecho actualmente es tan precaria la institucionalidad en esa materia que tú no puedes como sector público no ejecutarla. Entonces tienes que buscar también un ejecutor. Ahí la Ley de Donaciones va a ayudar a recibir recursos del sector privado y ciertos apoyos para canalizar las donaciones”. (Representante del Estado). Finalmente sobre los fondos concursables, un informante de la Academia expone que esta forma de transferencia es fundamental para el trabajo de las organizaciones de la Sociedad Civil porque la infancia con discapacidad necesita de servicios que son caros y, por tanto, la intervención en este ámbito es compleja. Por otra parte, menciona que esta modalidad de transferencia de recursos no contribuye a financiar las remuneraciones del capital humano lo cual genera inestabilidad de este personal. “(…) Ahora a mí los fondos concursables me parecen a mí, fundamentales. Y la Sociedad Civil sin fondos concursables no funciona. Y no tiene de dónde cogerse, de donde tomarse para hacerlo. (..) cuando está trabajando con una población que no64 tiene recursos propios, que tiene un funcionamiento disfuncional, porque por algo 4.1.5.1 Desafíos en torno al Financiamiento de las Intervenciones en Discapacidad Infantil Respecto de las subvenciones, un experto de la Sociedad Civil revela que la subvención debería ser continua y entregada por niño atendido. Esto con el objeto de cubrir los costos asociados a la intervención en el ámbito de la discapacidad infantil con lo cual se podría mejorar la calidad de los servicios brindados aumentando la eficiencia de estas organizaciones. “(…) yo creo que lo mejor es contar con una subvención permanente y constante por chico que cubra sus necesidades reales y que también ésta sea capaz de permitirnos mejorar la intervención y los sueldos. De esta forma se mejora la especialización del personal y la calidad y la eficiencia de la intervención”. (Representante de la Sociedad Civil). Otro informante de la Sociedad Civil propone que lo mejor sería aumentar el financiamiento proveniente del Estado con el objeto de brindar mayor estabilidad a los programas que atienden actualmente a los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad. “Probablemente lo ideal sería que el financiamiento del Estado fuese un poquito mayor. Podría llegar a un porcentaje de tal manera que le dé más estabilidad al programa. También significa un mayor compromiso del Estado en el desarrollo del área. (…). Esto nos preocupa porque nosotros estamos en un nicho que son niños, jóvenes y jóvenes adultos pero que también nos interesa que va a pasar con ellos después. Mi sueño que es haya una continuidad. Eso es muy relevante”. (Representante de la Sociedad Civil). 65 Por otra parte, un representante del Estado menciona que las intervenciones en el ámbito de la infancia con discapacidad deben financiarse con flexibilidad tomando en consideración los resultados de estos procesos. También señala que se podrían combinar formas de financiamiento con el objeto de mejorar la calidad de la gestión de las organizaciones de la Sociedad Civil utilizando eficientemente los recursos que en el campo de lo social son escasos. “Entonces, ¿cómo financiar? Financiar con mayor flexibilidad, financiar yo creo en base a resultados de proceso y resultados de impacto generando alguna manera de cómo También se podría hacer mix para incentivar o mejorar la capacidad de gestión de los colaboradores porque de repente ellos esperan que el Estado provea y el dinero siempre va a ser poco para la política social”. (Representante del Estado). 4.2 Integración de Herramientas Cuantitativas: Proceso Analítico Jerárquico (AHP) La integración de herramientas cuantitativas a la luz de los resultados arrojados por el análisis cualitativo corresponde a un segundo momento de este estudio de caso, en el cual se aplicó la metodología de multicriterio Proceso Analítico Jeráquico (AHP)12 Los fundamentos del AHP son la capacidad de incorporar aspectos tanto cuantitativos como cualitativos debido a que, en la mayoría de las decisiones, hay elementos cualitativos que tienen un peso importante ya que conforman una sólida base teórica que respaldan y validan resultados (UNESCO, 2010). En esta segunda etapa, se buscó determinar con base en una priorización consistente desde las ciencias exactas, aquellos elementos que permitiesen, a juicio de los expertos consultados, mejorar el acercamiento público – privado desde su implicancia para las políticas de discapacidad infantil. Estos elementos incorporados en la estructura del modelo AHP, fueron identificados al integrar el análisis de bibliografía especializada, con los datos cualitativos levantados durante la primera etapa del trabajo de campo. Para la aplicación de AHP, se realizó una selección de cuatro informantes expertos en políticas de discapacidad infantil, los cuales formaron parte del grupo original de informantes durante la primera etapa del levantamiento de los datos cualitativos. Por tanto, de los ocho expertos entrevistados originalmente, se seleccionaron solo cuatro para la aplicación de la metodología 12 Analytic Hierarchy Process (AHP) por sus siglas en inglés. Esta metodología fue desarrollada por el Doctor Thomas L. Saaty a fines de los 70 y es utilizada a través del modelamiento de problemas complejos en una estructura que ordena los elementos sobre los cuales se toma una decisión. 66 AHP: dos representantes del Estado y dos informantes de la Sociedad Civil, los cuales complementaron sus discursos vertidos en el análisis cualitativo con ideas relevantes que acompañaron la asignación de prioridades hecha a los elementos de la estructura de AHP. Los expertos que se eligieron y, que representan al sector público, fueron Eladio Recabarren, Jefe del Departamento de Gestión de Productos Estratégicos del Servicio Nacional de la Discapacidad (SENADIS) y Flora Vivanco, del área de Gestión Programática del Departamento de Protección de Derechos del Servicio Nacional de Menores (SENAME). Por su parte, los representantes de la Sociedad Civil seleccionados fueron Andrés Lerdo de Tejada, Director del Área de Protección y Familia de la Fundación COANIL y Milton González, Director Médico Nacional de Teletón. A cada uno de estos informantes se le aplicó una encuesta de corte estructurado13 la cual tuvo por objeto determinar cuáles son los elementos que permitirían, a su juicio, mejorar el acercamiento público – privado desde su implicancia para las políticas de infancia con discapacidad. Cabe destacar que previo a la asignación de prioridades, la estructura jerárquica del modelo fue validada como representativa por los cuatro expertos. Para facilitar la aplicación de AHP, se elaboraron diccionarios14 que señalaban qué era lo que se iba a entender por cada uno de los elementos de la estructura, de manera tal que la asignación de prioridades se realizase conforme a definiciones objetivas y conocidas por cada uno de los expertos. Es importante señalar que el diccionario fue construido en función de la información recolectada desde el análisis bibliográfico, en consonancia con lo que fue identificado desde el análisis cualitativo de la primera etapa del trabajo de campo. Adicionalmente, se hizo entrega a los informantes de la escala de Saaty15, la cual permite realizar comparaciones a pares basándose tanto en factores cuantitativos (aspectos tangibles) como cualitativos (aspectos no tangibles). Este instrumento comprende valores entre 1 y 9 y permite al experto expresar sus preferencias entre dos elementos verbalmente y representarlas asignando valores numéricos. La escala verbal utilizada permite a los expertos incorporar subjetividad, experiencia y conocimiento (Martínez, 2007). Posteriormente, la aplicación de medias geométricas permitió el análisis integrado de los juicios y la obtención de las prioridades para cada elemento incluido en la estructura del modelo. 13 14 15 Ver Anexo N° 3 Ver Anexo N° 4 Ver Anexo N° 5 67 Con estos antecedentes, la pregunta guía que acompañó la etapa de aplicación de la metodología AHP fue la siguiente: ¿Cuáles son los ámbitos a priorizar para mejorar el acercamiento público – privado desde su implicancia para las políticas públicas de discapacidad infantil? Se presentan los hallazgos en el siguiente apartado. 4.2.1 Definición de las Dimensiones, los Componentes y los Subcomponentes utilizados en el Análisis Cuantitativo por medio de AHP 4.2.1.1 Dimensiones del Vínculo Público – Privado en materia de Infancia con Discapacidad A la luz de la información cualitativa entregada por los expertos, se buscó reconocer qué elementos institucionales, organizacionales o financieros, potencian el proceso de articulación Estado – Sociedad Civil en el ciclo de políticas públicas orientadas al servicio de la infancia con discapacidad. A continuación se exponen las definiciones de cada dimensión para el análisis cuantitativo con AHP. Fuente: Elaboración propia a partir de la revisión bibliográfica y el análisis de los discursos de expertos. 68 4.2.1.2 Análisis de Componentes y Subcomponentes de Primer y Segundo Grado a nivel de Dimensiones 4.2.1.2.1 Dimensión Institucional: Componentes y Subcomponentes de Primer Grado Al consultar a los expertos respecto de cuáles son los elementos institucionales y normativos que favorecen la articulación y el diálogo Estado – Sociedad Civil para desarrollar políticas públicas de discapacidad infantil, el debate giró en torno a dos componentes: instituciones formales e informales. A continuación se presentan las definiciones correspondientes a cada una de ellas y que fueron las utilizadas para el análisis de priorización de elementos del vínculo. Fuente: Elaboración propia a partir de la revisión bibliográfica y el análisis de los discursos de expertos. Subcomponentes de Primer Grado 1) Instituciones Formales En cuanto a la institucionalidad formal, se buscó identificar cuáles son los marcos regulatorios (convenciones, leyes y políticas) que orientan en mayor medida las acciones de atención a la población infantil con discapacidad bajo criterios de integración y reconocimiento de derechos. Para el análisis se consideraron tres componentes: Convención Internacional sobre los Derechos del Niño, Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y la Ley N° 20.422 sobre Igualdad de O portunidades e Inclusión Social de Personas con Discapacidad. 69 Fuente: Elaboración propia a partir de la revisión bibliográfica y el análisis de los discursos de expertos. 2) Instituciones Informales Los juicios de los representantes del Estado y de la Sociedad Civil buscan establecer cuáles de las instituciones informales que regulan el comportamiento, facilitan en mayor medida la interacción público – privada en el marco de las políticas públicas de discapacidad infantil. De esta forma, el análisis se basó en torno a dos elementos: prácticas desde el Estado y prácticas desde la Sociedad Civil. 70 Fuente: Elaboración propia a partir de la revisión bibliográfica y el análisis de los discursos de expertos. 4.2.1.2.2 Dimensión Organizacional: Componentes, Subcomponentes de Primer y Segundo Grado Respecto de la dimensión organizacional, el debate con los expertos giró alrededor de los recursos y competencias con las que cuentan tanto el Estado y la Sociedad Civil y que condicionan y fortalecen la intervención cuando se ponen al servicio de las políticas públicas de discapacidad infantil. En este contexto, el análisis giró en torno a cuatro componentes: capital humano, mejora de procesos y gestión de recursos, factor identitario y apoyo técnico. 71 Fuente: Elaboración propia a partir de la revisión bibliográfica y el análisis de los discursos de expertos. Subcomponentes de Primer Grado 1) Capital Humano Dentro del componente capital humano, el análisis giró en torno a qué tipo de personal, si remunerado o voluntario, es el que potencia la intervención público – privada en las políticas de infancia con discapacidad. A continuación se exponen las definiciones asociadas a estos elementos. 72 Fuente: Elaboración propia a partir de la revisión bibliográfica y el análisis de los discursos de expertos. Capital Humano: Subcomponentes del Segundo Grado 1.1) Aptitudes Técnicas y Aptitudes Humanas Dentro del subcomponente capital humano, las aptitudes humanas y las aptitudes técnicas fueron reconocidas como importantes para el desarrollo de políticas. Por esta razón, y en torno a mejorar el vínculo, se buscó establecer cuáles aptitudes aportan en mayor medida al ejercicio activo de los derechos de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad en el ámbito de las políticas públicas. Fuente: Elaboración propia a partir de la revisión bibliográfica y el análisis de los discursos de expertos. 73 2) Mejora de Procesos y Gestión de Recursos La conversación con los expertos respecto al componente mejora de procesos y gestión de recursos giró en torno al reconocimiento de los factores que fortalecen mayormente los procesos y la gestión del Estado y de la Sociedad Civil en este plano de política. Así, los subcomponentes que se tomaron para el análisis fueron la gestión de recursos organizacionales y las tecnologías de la información. Fuente: Elaboración propia a partir de la revisión bibliográfica y el análisis de los discursos de expertos. 3) Factor Identitario Al consultar a los expertos sobre en qué momento de la política debiesen potenciarse los espacios de encuentro público – privado en pos del fortalecimiento de las iniciativas de atención, el análisis giró en torno a los cuatro momentos de la política pública: Fuente: Elaboración propia a partir de la revisión bibliográfica y el análisis de los discursos de expertos. 74 4) Apoyo Técnico Cuando se consultó a los expertos sobre el componente de apoyo técnico que contribuye en mayor medida a la rehabilitación de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad bajo el marco de articulación público – privada, la conversación giró en torno a dos elementos: Fuente: Elaboración propia a partir de la revisión bibliográfica y el análisis de los discursos de expertos. 4.2.1.2.3 Dimensión Financiera Finalmente, al profundizar sobre los aspectos financieros presentes en la política, la conversación con los representantes tanto del Estado como de la Sociedad Civil, buscó establecer qué componente de los instrumentos económicos que sostienen las iniciativas, debía ser potenciado para contribuir a la sustentabilidad y a la calidad de la intervención en la infancia con discapacidad. Tomando en cuenta lo expuesto previamente, se analizaron cuatro componentes: 75 Fuente: Elaboración propia a partir de la revisión bibliográfica y el análisis de los discursos de expertos. 4.2.2 Estructura Jerárquica utilizada para la Aplicación de la Metodología AHP Cada una de las dimensiones, componentes y subcomponentes se distribuyó en un modelo de estructura jerárquica que fue validado por los expertos entrevistados en la segunda fase del trabajo de campo. Se presenta a continuación: 76 GRÁFICO N° 8: ESTRUCTURA JERÁRQUICA Fuente: Elaboración propia a partir de la revisión bibliográfica y el análisis de los discursos de expertos. 4.2.3 Análisis de los Resultados 4.2.3.1 Dimensiones del Vínculo Al consultar a los expertos sobre cuál de las tres dimensiones: institucional, organizacional o financiera, permite potenciar en mayor medida el proceso de articulación Estado – Sociedad Civil, se presentó un consenso generalizado en torno a que las tres dimensiones, interactúan entre sí y, que al momento de la intervención, es muy difícil separarlas. Sin embargo, la dimensión institucional (37%) predomina con una diferencia pequeña por sobre las dimensiones organizacional (34%) y financiera (29%) debido a que de acuerdo a los expertos, ésta contribuye y potencia el vinculo a través de las normas e instrumentos que dan el marco regulatorio en materia de infancia con discapacidad. GRÁFICO N° 9: DIMENSIONES QUE POTENCIAN EL PROCESO DE ARTICULACIÓN ESTADO – SOCIEDAD CIVIL EN EL CICLO DE POLÍTICAS PÚBLICAS ORIENTADAS A LA INFANCIA CON DISCAPACIDAD Fuente: Elaboración propia. “Las dimensiones son interdependientes y sería un error no considerarlas en ese sentido y no actuar en forma sistémica sobre las tres dimensiones (...). Si avanzas sólo sobre lo institucional y no tienes organización, no tienes gestión y no tienes apoyo financiero eso queda en el papel y hay muchas leyes que quedan en el papel y no se practican. (…) Si tienes organizaciones que actúen pero les falta un marco legal que permita su desarrollo y trabajo pierden eficiencia y pierden efectividad y pierden el apoyo financiero garantizado por el marco institucional y, por supuesto, si 4.2.3.2 Institucional tienes sólo Dimensión dinero y no sabes qué hacer y no hay un marco se te va a ir (…)” (Representante de la Sociedad Civil). A la luz del diálogo con los expertos sobre las instituciones que favorecen más la articulación pública – privada para el desarrollo de políticas, los representantes tanto del sector público como del sector privado atribuyen mayor importancia a las instituciones informales (52%) por sobre las formales (48%). De acuerdo a lo expuesto por uno de los informantes, esto se debe a que los acercamientos al diálogo, las redes y otras normas informales permiten realizar cambios sociales resultado de una práctica continuada y, por esta razón, se fortalece el trabajo conjunto entre el Estado y la Sociedad Civil. GRÁFICO N° 10: INSTITUCIONES QUE FAVORECEN LA ARTIC ULACIÓN Y EL DIÁLOGO ESTADO – SOCIEDAD CIVIL PARA DESARROLLAR POLÍTICAS DE DISCAPACIDAD INFANTIL Fuente: Elaboración propia. Otro experto revela que, a su juicio, ambas instituciones son importantes válidas y necesarias para lograr este acercamiento en temas de discapacidad infantil debido a que son interdependientes entre sí. 4.2.3.2.1 Instituciones Formales Respecto de las instituciones formales, los expertos priorizaron a la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad – CDPC – (46%) por sobre la Ley N° 20.422 (28%) y la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño – CDN – (26%). Esto debido a que, el primer tratado, tiene trascendencia en el ámbito de la discapacidad al establecer un marco de las acciones a desarrollarse con enfoque de derechos de las personas con discapacidad física, mental y/o sensorial. 79 GRÁFICO N° 11: INSTITUCIONALIDAD FORMAL QUE FAVOREC E EL ESTABLECIMIENTO DE ACCIONES DE INTEGRACIÓN CON ENFOQUE DE DERECHOS EN MATERIA DE INFANCIA CON DISCAPACIDAD Fuente: Elaboración propia. Un experto de la Sociedad Civil menciona que las convenciones se complementan entre sí debido a que la CDPC establece que los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad son sujetos de derechos y, por otra parte, la CDN permite proteger estos derechos. Adicionalmente, ambos acuerdos internacionales también tendrían relación con la Ley N° 20.422. “Yo creo que todas estas normas son importantes ya que no puede prescindir una de la otra. Lo miro como dos líneas de trabajo: por un lado está todo lo que es la protección del niño desde la CDN y por otro lado está la CDPC, entendiendo que existe un grupo importante de niños (…) con discapacidad que deben ser reconocidos como sujetos de derechos (…). (…) Las Convenciones y la Ley están muy enlazadas y se complementan” (Representante de la Sociedad Civil). 4.2.3.2.2 Instituciones Informales Sobre las instituciones informales, se consultó a los expertos sobre qué subcomponente facilitaría en mayor medida el acercamiento y la interacción público – privada en el marco de las políticas públicas de discapacidad infantil. Las respuestas evidencian un consenso general relacionado con la priorización de las prácticas de la Sociedad Civil (74%) por sobre las del Estado (26%), debido a que se reconoce una trayectoria de trabajo y de acercamientos de larga data desde lo privado hacia lo público. Si bien ambas prácticas son relevantes para el fortalecimiento del vínculo, la Sociedad Civil ha sido quien ha puesto en relevancia el tema de 80 la discapacidad y ha tenido mayor disposición hacia el diálogo, el trabajo en equipo, la organización, las redes u otras formas de asociación. GRÁFICO N° 12: INSTITUCIONES INFORMALES QUE FACILIT AN LA INTERACCIÓN PÚBLICO – PRIVADA EN EL MARCO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS DE DISCAPACIDAD INFANTIL Fuente: Elaboración propia. “La Sociedad Civil ha trabajado y ha tomado la bandera del tema mucho más que el Estado y en eso el Estado está bastante más retrasado”. (Representante del Estado). 4.2.3.3 Dimensión Organizacional Al indagar sobre qué recursos y competencias con las que cuentan tanto el Estado como la Sociedad Civil condicionan y fortalecen en mayor medida la intervención en el ámbito de la infancia con discapacidad, las respuestas tienden a coincidir en que el componente de capital humano (29%) es el más importante al momento de desarrollar planes, programas y acciones orientadas al servicio de los niños, las niñas y los adolescentes impedidos física, metal y/o sensorialmente. No obstante, los informantes también coinciden en que los componentes de mejoramiento de procesos y gestión de recursos (25%), apoyo técnico (24%) y factor identitario (21%) son igualmente relevantes para fortalecer las intervenciones en el ámbito de la infancia con discapacidad. 81 GRÁFICO N° 13: RECURSOS Y COMPETENCIAS CON LAS QUE CUENTAN EL ESTADO Y LA SOCIEDAD CIVIL QUE CONDICIONAN Y FORTALECEN EN MAYOR MEDIDA LA INTERVENCIÓN Y QUE SE PONEN AL SERVICIO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS DE DISCAPACIDAD INFANTIL Fuente: Elaboración propia. Uno de los informantes del Estado reconoce la importancia del capital humano debido a que es necesaria una capacidad determinada para trabajar con situaciones de vulnerabilidad en las que confluyen muchas variables y, al mismo tiempo, deben desarrollar empatía con los sujetos de la intervención. Por otra parte, un experto del Estado explica que el mejoramiento de los procesos y la gestión de recursos son importantes debido a que estos permiten aumentar la calidad de los servicios orientados hacia la infancia con discapacidad y, por otro lado, desarrollar sistemas de monitoreo y retroalimentación que posibilitan analizar el impacto de los planes, programas y acciones dirigidas hacia ese grupo. Finalmente, un representante de la Sociedad Civil, dio mayor importancia al factor identitario debido a que este permite determinar una misión, visión y planes de acción, con lo cual se pueden gestionar recursos, mejorar procesos y contratar el personal humano necesario para las intervenciones en el campo de la discapacidad infantil. 82 4.2.3.3.1 Capital Humano Los informantes calificados priorizaron el trabajo realizado por el personal remunerado (76%) por sobre el aporte del personal voluntario (24%) como el factor que potencia la intervención público – privada en el ámbito de las políticas públicas orientadas al servicio de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad. GRÁFICO N° 14: PERSONAL QUE POTENCIA LA INTERVENCIÓ N PÚBLICO – PRIVADA EN EL ÁMBITO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS ORIENTADAS AL SERVICIO DE LOS NIÑOS, LAS NIÑAS Y LOS ADOLESCENTES CON DISCAPACIDAD Fuente: Elaboración propia. Los representantes del Estado le atribuyeron un peso mayor al personal remunerado mientras que, los expertos de la Sociedad Civil, otorgaron ponderaciones similares tanto para los trabajadores que reciben una remuneración como para aquellos que no lo hacen. Este resultado se podría explicar porque en el sector público no existe el trabajo voluntario y, por tanto, es complejo entender la lógica de su funcionamiento. Por otra parte, el personal que no recibe remuneración es el que generalmente acompaña a las organizaciones de la Sociedad Civil. 83 “Pero también yo creo que hay un grupo de voluntarios que no son solamente las familias, y que son el voluntario que se compromete con la temática de los grupos vulnerables y que tiene que ver con gente que se interesa por el área. Yo creo que puede aportar una mirada comprometida con el tema pero no afectada por el tema y, por lo tanto, puede tener la capacidad de ponerse afuera y entregar su experiencia a veces profesional, a veces de simple ciudadano, pero que le da la mirada alternativa al tema, sin un compromiso ni afectivo, ni contractual, ni laboral”. (Representante de la Sociedad Civil). Por otra parte, los expertos también priorizaron el desarrollo de las aptitudes técnicas y las aptitudes humanas, tanto en el personal remunerado como en el voluntario, cuando se realizan las intervenciones en el ámbito de la infancia con discapacidad. “O sea, sin las competencias humanas, no creo que nada pueda funcionar. Porque obviamente un profesional o un voluntario que no tiene sensibilidad, que no tiene capacidad de vincularse, que no es capaz de tener empatía por ponerse en el lugar del otro (…) en ningún caso va a poder lograr el cambio social que se requiere para lograr un proceso inclusivo real”. (Representante de la Academia). 1) Aptitudes Técnicas y Aptitudes Humanas Al consultar a los expertos sobre las aptitudes que aportan más a la materialización de los derechos de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad en el ámbito de las políticas públicas, los juicios de los informantes son consistentes con lo expuesto en la sección del análisis cualitativo en la cual se explica que, para el caso del personal remunerado, se priorizan las aptitudes técnicas por sobre las humanas y, por otra parte, cuando se habla de personal voluntario se da preferencia a las aptitudes humanas por sobre las técnicas. A continuación se muestran los gráficos N° 13 y N° 14 los cuales exponen estos resultados 84 GRÁFICO N° 15: APTITUDES DEL PERSONAL REMUNERADO QU E APORTAN A LA MATERIALIZACIÓN DE LOS DERECHOS DE LOS NIÑOS, LAS NIÑAS Y LOS ADOLESCENTES CON DISCAPACIDAD EN EL ÁMBITO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS Fuente: Elaboración propia. GRÁFICO N° 16: APTITUDES DEL PERSONAL VOLUNTARIO QU E APORTAN A LA MATERIALIZACIÓN DE LOS DERECHOS DE LOS NIÑOS, LAS NIÑAS Y LOS ADOLESCENTES CON DISCAPACIDAD EN EL ÁMBITO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS Fuente: Elaboración propia. 85 Un representante de la Sociedad Civil menciona que, el personal remunerado, debe brindar a la infancia con discapacidad una atención profesional debido a que su habilitación y rehabilitación son procesos complejos. Por otra parte, el voluntariado tiene la posibilidad de crear vínculos afectivos (padres, amigos, comunidad, etc.) con este grupo vulnerable y, por esta razón, se valoran más las aptitudes humanas. 4.2.3.3.2 Mejora de Procesos y Gestión de Recursos A la luz del juicio de los informantes calificados, la gestión de los recursos organizacionales (73%) tiene mayor prioridad, en comparación con las tecnologías de la información (27%) para mejorar los procesos y la gestión pública – privada, en términos de eficiencia y eficacia de los planes, programas y acciones dirigidas a los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad. GRÁFICO N° 17: FACTORES QUE FORTALECEN LOS PROCESOS Y LA GESTIÓN DEL ESTADO Y DE LA SOCIEDAD Fuente: Elaboración propia. De acuerdo a un representante del Estado, la tecnología es la plataforma sobre la cual se superponen los procesos de gestión de recursos del sector público y de otras organizaciones. Por esta razón, si no se tienen metas, indicadores, acciones orientadas hacia un mejoramiento continuo, las tecnologías de la información resultan inútiles. 86 “Un mundo globalizado te obliga a una energía permanente en términos de mantener las buenas prácticas en todas las cosas, desde la atención médica, la gestión de procesos, la reorganización de la producción, etc.” (Representante de la Sociedad Civil). “Yo creo que se ha ido logrando una mayor gerencia en las instituciones públicas. (…). También existe todo un instrumental que tiene una enorme importancia ya que existe una gerencia que no se ve sobrepasada por los sistemas sino que los utiliza. Colapsar al sector público es fácil” (Representante del Estado) . 4.2.3.3.3 Factor Identitario Al preguntar a los representantes del Estado y de la Sociedad Civil sobre en qué momento de la política debiesen potenciarse los espacios de encuentro público – privado en pos del fortalecimiento de las iniciativas de atención, existió consenso en torno a que los momentos prioritarios a potenciar en términos de vínculo, son los referidos a la etapa de evaluación (33%) y de implementación (29%). Lo anterior, en tanto de acuerdo a los expertos, son los momentos en que más se rescatan aprendizajes que permiten fortalecer las iniciativas de atención. GRÁFICO N° 18: MOMENTOS DE LA POLÍTICA QUE POTENCIA N LOS ESPACIOS DE ENCUENTRO PÚBLICO - PRIVADO EN POS DEL FORTALECIMIENTO DE LAS INICIATIVAS DE ATENCIÓN A LA INFANCIA CON DISCAPACIDAD Fuente: Elaboración propia. 87 Uno de los representantes del Estado expone que, a su juicio, la evaluación es muy importante porque retroalimenta a la fase de implementación y, por esta razón, le asignó un peso relevante por sobre las otras etapas del ciclo de las políticas públicas. Respecto de la agenda y del diseño, un experto de la Sociedad Civil menciona que, poner las ideas en la mesa de diálogo, es muy importante. Pero si éstas no logran implementarse o evaluarse es como un sistema que presenta debilidades. “Yo creo que estamos formados para todas las etapas. Unas mejor que otras. Estamos en el diseño, estamos en la ejecución, estamos en la evaluación. Lo hacemos y somos bastante profesionales y reconocidos en eso con los pocos recursos y gente que tenemos (…)” (Representante de la Sociedad Civil) 4.2.3.3.4 Apoyo Técnico Acerca de los soportes técnicos que contribuyen mayormente a la rehabilitación de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad bajo el marco de articulación público – privada en las políticas públicas, las respuestas priorizaron a los centros de rehabilitación (62%) por sobre las ayudas técnicas (38%) debido a que, si bien las ayudas técnicas contribuyen en la habilitación de la infancia impedida física, mental o sensorialmente, es en los centros donde se realiza una verdadera rehabilitación integral de este grupo vulnerable. GRÁFICO N° 19: SOPORTES TÉCNICOS QUE CONTRIBUYEN MA YORMENTE A LA REHABILITACIÓN DE LOS NIÑOS, LAS NIÑAS Y LOS ADOLESCENTES CON DISCAPACIDAD Fuente: Elaboración propia. 88 4.2.3.4 Dimensión Financiera Al rescatar el juicio de los expertos sobre los instrumentos financieros que contribuyen mayormente a la sustentabilidad y a la calidad de la intervención, se observa un acuerdo entre los expertos acerca de que las subvenciones (53%) serían el modelo de transferencia de recursos que asegura el cumplimiento de ambos criterios en los planes, programas y acciones desarrollados para la atención de los niños, las niñas y los adolescentes que presentan alguna discapacidad. GRÁFICO N° 20: INSTRUMENTOS FINANCIEROS QUE CONTRIB UYEN A LA SUSTENTABILIDAD Y A LA CALIDAD DE LA INTERVENCIÓN QUE SE REALIZA ARTICULADAMENTE EN INFANCIA CON DISCAPACIDAD Fuente: Elaboración propia. A la luz de la priorización realizada por los expertos, una de la causas que explica el resultado es que las subvenciones son una transferencia continua en el tiempo a diferencia de el cofinanciamiento, la autogestión y los fondos concursables y, por tanto, permiten asegurar la sustentabilidad de las políticas públicas en el mediano y largo plazo, lo cual impacta en la calidad del servicio entregado a la infancia con discapacidad. Un experto de la Sociedad Civil explica que las subvenciones son necesarias en ciertas áreas de tipo asistencial debido a que apoyan a la persona en términos de su atención. En el caso de los fondos concursables señala que estos pueden estar presentes en otras áreas como la academia, la sistematización de la información y el desarrollo de la investigación que no tienen una mirada asistencialista. Adicionalmente, señala que la autogestión en términos de venta de servicios de rehabilitación es difícil mantenerla salvo que sea el Estado quien adquiera este servicio. 89 Finalmente, el co-financiamiento requiere la coordinación de muchos actores y, a su vez, genera competencia en la cual algunas veces existen competidores que no se encuentran calificados para brindar el servicio de rehabilitación y/o habilitación de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad. “Cuando estás trabajando en sistemas co-financiamiento estás buscando equilibrios de financiamiento. El mercado que tiene la capacidad de compra de servicios de rehabilitación es muy limitado salvo que el Estado le diga mire aquí tiene un subsidio para que los adquiera (…). De ahí viene un subsidio a la demanda y no a la oferta. Si tienes un subsidio a la demanda generas una diversidad de actores que van a competir por un buen servicio para lograr vender su producto y por esta razón deben ser coordinados (…). También hay competidores que no se encuentran calificados para entregar el servicio de rehabilitación a los chicos con discapacidad (…)”. (Representante de la Sociedad Civil). 90 V. CONCLUSIONES Y PROPUESTAS DE POLÍTICA PÚBLICA EN MATERIA DE DISCAPACIDAD INFANTIL A la luz de los datos levantados, se puede concluir que la intervención dirigida hacia la infancia con discapacidad se encuentra entre las primeras actuaciones de la acción pública en materia de política social. Por tanto, el proceso de articulación entre actores públicos y actores del mundo civil, surge a partir de una lógica de trabajo para operar políticas sociales, bajo criterios de institucionalidad, focalizando de esta forma los recursos que desde el Estado son dirigidos a grupos prioritarios como sería el caso de la infancia con discapacidad. Muy en diálogo con lo anterior, se rescata que este vínculo entre la esfera pública y la esfera privada se caracteriza por ser de tipo cooperativo en el cual existe trabajo mutuo, coordinación, reconocimiento de actores, entre otros atributos. Sobre si existe una relación de corresponsabilidad en materia de discapacidad infantil, se puede concluir que esta relación se ha configurado en torno a una transferencia de funciones no exclusivas desde el Estado hacia el tejido social conformado por las organizaciones de la Sociedad Civil. Esto se apoya en lo expuesto en la evidencia teórica sobre una delegación de funciones a las organizaciones del tercer sector las cuales estarían a cargo de la prestación de servicios sociales que la gestión pública no estaría en capacidad de proveer. Adicionalmente, los informantes calificados reconocen en su discurso una relación de corresponsabilidad entre Estado y Sociedad Civil definiendo a este nexo como prácticas o roles que interpretarían ambos actores. A su vez, el análisis cualitativo reveló que este proceso de articulación público – privado se fortalece o se debilita de acuerdo con la capacidad que tienen ambos actores de desarrollar una acción conjunta, lo cual supone una responsabilidad del Estado de acercarse a la Sociedad Civil en pos de la generación de una política pública participativa que favorezca a la niñez con discapacidad. Lo anterior, en tanto es esta esfera la que canaliza la generación de instrumentos de institucionalidad formal que podrían mejorar el tipo de vínculo que se genera en torno a la infancia con discapacidad. También se concluye que los espacios de diálogo, la comunicación y la apertura son fundamentales para que las organizaciones del tercer sector puedan plantear sus necesidades con el propósito de que el Estado las reconozca y las valide dando mayor valor público a las políticas públicas de discapacidad infantil. 91 5.1 Análisis de las Dimensiones Acerca de los aspectos que potencian el proceso de articulación Estado – Sociedad Civil, se concluye que en este plano de la política pública, los elementos institucionales, organizacionales y financieros interactúan entre sí al momento de la intervención siendo complejo establecer diferenciaciones y observarlos de manera independiente. A continuación se presentan las principales conclusiones respecto al análisis de las dimensiones del vínculo. 5.2 Dimensión Institucional A nivel institucional se puede concluir que tanto las instituciones formales e informales son ámbitos a mejorar debido a que desempeñan un rol importante en el proceso de articulación público – privado en el ámbito de las políticas públicas de discapacidad infantil. En primer lugar, la institucionalidad formal permitiría el nacimiento del vínculo entre el Estado y la Sociedad Civil en materia de discapacidad infantil debido a que, tanto convenciones como leyes, entregarían las directrices técnicas para la ejecución de los planes, programas y acciones a favor de este grupo vulnerable y, a su vez, a partir de estas restricciones formales se adjudicarían los recursos para llevar a cabo estas intervenciones. Si bien estos marcos regulatorios buscan difundir un enfoque de derechos y de igualdad de oportunidades, estos se encuentran lejanos y poco visibles para todos los actores que interactúan en el ámbito de la infancia con discapacidad ya sea el caso de entes privados, públicos y/o de los mismos beneficiarios. De esta forma, se puede concluir que el Estado tiene una tarea adicional relacionada con la transmisión y la divulgación de lo expresado en las convenciones y leyes sobre infancia y discapacidad con el objeto de contribuir a los procesos de toma de decisiones dejando de lado prácticas asistencialistas, proteccionistas y desarticuladas. En segundo término, del análisis cualitativo se concluye que, las instituciones informales, favorecen mayormente el desarrollo de los acercamientos y del diálogo público – privado debido a que estas restricciones permiten el establecimiento de canales de comunicación tales como las redes de trabajo o las relaciones personales. Estos espacios de interlocución generan vínculos basados en la confianza que fortalecen la relación entre el Estado y el tercer sector en materia de discapacidad infantil con lo cual se beneficia el desarrollo de políticas orientadas a este grupo. Esto dialoga con lo expuesto en la literatura acerca de que las instituciones informales son sumamente valiosas ya que permiten una convivencia ordenada en la comunidad y, por tanto, tienen gran utilidad y valor social. 92 Finalmente, se puede concluir que existe un espacio de complementariedad entre las instituciones formales y aquellas de tipo informal, debido a que las primeras cumplirían un rol activo en la entrega de directrices sobre atención, y las segundas, contribuirían con dinámicas que permiten fortalecer el vínculo de corresponsabilidad público – privado. 5.3 Dimensión Organizacional A la luz del análisis cualitativo y cuantitativo se concluye que, el capital humano, es el recurso que fortalece en mayor medida la intervención público – privada en el ámbito de las políticas públicas de infancia y discapacidad. Esto debido a que un verdadero proceso de inclusión de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad requiere de profesionales especializados en la provisión de servicios de habilitación y/o rehabilitación y del desarrollo de empatías y vínculos con este grupo vulnerable que es beneficiario de la intervención. Entonces, sería el personal remunerado el que contribuye mayormente a la operación de las políticas públicas de discapacidad infantil. Dentro de este contexto, se destaca el rol de las aptitudes técnicas por sobre las humanas en materia de trabajo remunerado pero se reconoce la necesidad de que estos profesionales desarrollen una capacidad para trabajar en situaciones de vulnerabilidad especialmente aplicado al caso de los servidores públicos quienes muchas veces no tienen acceso a capacitación y/o especialización en esta materia. A su vez, se observa que hay una disponibilidad limitada de capital humano especializado y multidisciplinario tanto a nivel del Estado como de la Sociedad Civil debido a que los programas universitarios existentes no favorecen la formación de especialistas en medicina física y de rehabilitación. También se evidencia una inexistencia de técnicos en órtesis y prótesis en el país debido a que, al momento, no se cuenta con escuelas que permitan su formación. Acerca del personal voluntario, se revela que su participación contribuiría al fortalecimiento de la participación de la Sociedad Civil en las acciones públicas orientadas al servicio de la infancia con discapacidad. Esto dialoga con lo expuesto por la literatura sobre que los voluntarios son agentes exclusivos de la Sociedad Civil ya que no se encuentran presentes en las empresas y en los organismos públicos y, por tanto, se configuran como uno de los rasgos más característicos de este tipo de organizaciones. Esta participación del tercer sector se materializa, por ejemplo, en programas como los Centros Comunitarios de Rehabilitación en los cuales las alianzas entre representantes públicos, padres, familiares y amigos de las personas con discapacidad permiten integrar socialmente a este grupo vulnerable y, adicionalmente, transmiten un mensaje de sensibilización a la comunidad. 93 Por otra parte, se concluye que, si bien el aporte de los voluntarios permite el acercamiento público – privado, es necesario que éste se encuentre normado a través de algún mecanismo o institución debido a que el trabajo con infancia vulnerable involucra la formación de lazos afectivos que si se encuentran desarticulados de una agenda de trabajo o de un lenguaje sensible puede tener un efecto negativo para los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad. Adicionalmente, se evidencia la necesidad de que el trabajo de los voluntarios sea reconocido y/o acreditado para que se estimule su participación y compromiso en el ámbito de las políticas públicas de discapacidad infantil. Respecto del componente de mejora de procesos y gestión de recursos, de la integración de herramientas cualitativas y cuantitativas se desprende que a nivel de Estado existe una necesidad de optimizar los procesos de mejora continua debido a que no se encuentran orientados al desarrollo de indicadores que revelen las verdaderas necesidades de la infancia con discapacidad siendo que esta información es relevante para el diseño de las intervenciones realizadas en este ámbito. Por otro lado, en las organizaciones de la Sociedad Civil se evidencia que una administración orientada al mejoramiento de los procesos contribuye a mejorar la calidad de las intervenciones realizadas en el ámbito de la infancia y de la discapacidad. Lo anterior dialoga con lo expuesto en la evidencia conceptual acerca de que las organizaciones del tercer sector requieren mejorar sus procesos para aumentar su eficacia, eficiencia y profesionalización lo cual les permitirá cumplir con nuevas exigencias dado un marco cada vez más competitivo. No obstante, es importante que este cambio de gestión se apoye en el uso de tecnologías de la información con el objeto de generar información útil y temprana acerca de las intervenciones realizadas tanto por la esfera pública como la privada. En este contexto, surge la reflexión acerca de cómo las pequeñas organizaciones del tercer sector podrían mejorar sus acciones en materia de infancia con discapacidad dadas sus limitaciones de recursos tanto económicos como humanos. Del trabajo de campo se observa que no existe un consenso acerca de la identidad y de los valores que caracterizan tanto al Estado como a la Sociedad Civil debido a que, si bien ambos actores poseen miradas distintas y roles diferenciados, al momento de la intervención estas divergencias se hacen difusas con lo cual se generan espacios de interlocución y reconocimiento para potenciar el impacto de los roles de ambas esferas en un marco de articulación en pos de las políticas de infancia con discapacidad. Respecto del ciclo de producción de políticas diferenciadas, a partir del análisis cualitativo se observa un rol hegemónico del Estado en el diseño de la política pública de infancia y discapacidad mientras que, la implementación, recaería sobre las organizaciones del tercer 94 sector que son quienes tienen el conocimiento y la experiencia debido a que estas realizan el trabajo en terreno. Desde la perspectiva de las herramientas cuantitativas se puede concluir que, la apertura y promoción de espacios de encuentro público - privado en la etapa de evaluación, permite fortalecer las iniciativas orientadas a la atención de la infancia con discapacidad debido a que esta fase permite retroalimentar a otras etapas como el diseño y/o la implementación ya que señala los impactos de las acciones llevadas a cabo. Por otra parte, bajo un marco de articulación público – privada, se revela que los centros de rehabilitación contribuyen a la habilitación y/o rehabilitación de la infancia con discapacidad debido a que dentro de ellos se reparten las ayudas técnicas necesarias para mejorar la calidad de vida de este grupo vulnerable. No obstante, la demanda por estos servicios excede a la oferta entregada por el Estado debido a que los recursos públicos son escasos. Por esta razón, la Sociedad Civil emerge para cubrir este déficit en la medida de sus posibilidades humanas, técnicas y financieras. Lo anterior, permite levantar la reflexión de si el Estado debería establecer condiciones para que el mercado sea quien cubra efectivamente esta demanda o si éste debiese subsidiar la producción de ayudas técnicas y mecánicas dado que existen en el país profesionales formados para ese propósito. No se ha dicho en las conclusiones que no existen profesionales formados en algunas disciplinas de producción de ayudas técnicas. 5.4 Dimensión Financiera Los hallazgos, producto de la integración de herramientas cualitativas y cuantitativas, permiten concluir que el componente “subvenciones” sustentaría las iniciativas de intervención público privadas en materia de infancia con discapacidad debido a que es un ingreso garantizado y asegurado para las organizaciones del tercer sector que trabajan con este grupo vulnerable. Sin embargo, del discurso de los expertos se desprende que esta modalidad de transferencia de recursos sería discriminatoria debido a que tiene una mirada asistencialista y proteccionista por lo cual no contribuiría a promover un enfoque de inclusión y de integración de los niños, las niñas y los adolescentes que padecen alguna forma de discapacidad. Adicionalmente, otra debilidad que posee este mecanismo de financiamiento se relaciona con el hecho de que no considera los costos asociados a la contratación de capital humano especializado. Este recurso consume gran parte de los montos asignados lo cual reduciría la calidad de las acciones llevadas a cabo en el marco de las políticas públicas de discapacidad infantil. 95 Por otra parte, se concluye que el co-financiamiento permite utilizar los recursos de las prestaciones como FONASA y/o ISAPRE para llevar a cabo las acciones de salud que la infancia con discapacidad necesita. Sin embargo, esta modalidad de transferencia de recursos tiene un enfoque de subsidio a la demanda que obliga a las organizaciones de la Sociedad Civil a competir por brindar los servicios de salud en un mercado en el que existen asimetrías relacionadas con el tamaño, la capacidad y la profesionalización con lo cual las pequeñas instituciones de la Sociedad Civil que trabajan en el ámbito de la discapacidad infantil no podrían acceder a este tipo de financiamiento. Sobre la autogestión, se evidencia que conseguir recursos desde el sector privado se dificulta debido a que la inexistente institucionalidad en materia de donaciones dificultaría la canalización de aportes desde el sector privado con lo cual se debilita la intervención en materia de infancia con discapacidad bajo el marco de articulación público – privado. Finalmente, se evidencia que los fondos concursables presentan la misma debilidad que las subvenciones en términos de financiamiento del capital humano que trabaja en el campo de las políticas públicas de infancia y discapacidad. Adicionalmente, existiría un enfoque de “rentabilidades complejas” debido a que las acciones al servicio de este grupo vulnerable consumen gran cantidad de recursos con poco o casi nulo retorno. Los anteriores elementos permiten plantear la pregunta de si, para sustentar y garantizar la calidad de las intervenciones en materia de infancia con discapacidad se podría recurrir a una lógica mixta de financiamiento tomando en cuenta las fortalezas y/o debilidades de las diferentes alternativas o, si el Estado, debería comprometer más recursos como contraparte corresponsable apoyando de esta forma la labor que llevan a cabo las organizaciones de la Sociedad Civil con lo cual se podría fortalecer el proceso de articulación público – privado en el ámbito de las políticas públicas de discapacidad infantil. 96 VI. PROPUESTAS DE POLÍTICA En esta sección se presentan varias propuestas de política, a nivel de cada dimensión, que apuntan a mejorar el acercamiento público – privado desde su implicancia en las políticas públicas de discapacidad infantil. En el marco de las conclusiones de la dimensión institucional se evidenció que, a partir de las convenciones y las leyes, nace el vínculo público – privado ya que estas entregan las directrices técnicas y los recursos para llevar a cabo la intervención en materia de infancia con discapacidad. No obstante, uno de los problemas que enfrentan estos mecanismos de regulación es que son poco visibles para todos los actores que diseñan y ejecutan las acciones a favor de este grupo vulnerable. Por tanto, es necesario que la discapacidad infantil se convierta en un tema prioritario para el Estado chileno con el objeto de que ingrese a la agenda pública. De esta forma se crearían los mecanismos de exigibilidad para garantizar los derechos de este grupo vulnerable así como se canalizarán lo recursos para que estos acuerdos y la Ley vigente se puedan difundir a nivel de la población objetivo y de su entorno. Por otra parte, dada la importancia de los espacios informales de interlocución público – privados para favorecer el desarrollo de las políticas públicas de discapacidad infantil, es necesaria la creación instancias normadas como observatorios y mesas de negociación con el objeto de reconocer en la Sociedad Civil un actor válido y, de esta forma, establecer relaciones que perduren en el tiempo. Dada la importancia del capital humano para el fortalecimiento de la intervención público – privada en el ámbito de las políticas públicas de discapacidad infantil, es necesario promover su desarrollo y profesionalización a través de programas de especialización y/o multidisciplinarios producto de alianzas entre el Estado y la Sociedad Civil. Esto con el objeto de que el personal remunerado que atiende a esta población vulnerable pueda capacitarse y contribuir con su experiencia de vida mejorando la calidad de las acciones en este campo de las políticas públicas. Otra forma de lograrlo sería a través de un subsidio que permita convertir a las organizaciones de la Sociedad Civil en entidades que puedan formar a su personal, tanto remunerado como voluntario, de acuerdo a unos mínimos de acreditación que pueden establecerse en diálogo con el sector público. Adicionalmente, esto serviría como un reconocimiento para estos empleados lo cual les motivaría a seguir trabajando en materia de discapacidad infantil. 97 Una tercera alternativa podría ser el fortalecimiento del SENCE con lo cual se podría capacitar en materia de infancia con discapacidad tanto al personal del Estado como aquel proveniente de las organizaciones del tercer sector. Por otro lado, esta mejora en la calidad del factor humano que interviene en materia de infancia con discapacidad podría potenciarse si el Estado otorgara créditos a las organizaciones de la Sociedad Civil para que Éstas puedan certificarse en temas de calidad, mejora de procesos y gestión de recursos. Este financiamiento también les permitiría acceder a bases, software y plataformas tecnológicas para mejorar la calidad y la fluidez de la información disponible sobre la situación actual de la infancia con discapacidad. A su vez, el SENADIS y las entidades a cargo del tema de la discapacidad, podrían diseñar indicadores cuyo objetivo sea evaluar la satisfacción del grupo objetivo de sus políticas así como el desempeño de sus funcionarios en las intervenciones que realizan en este ámbito de la política pública. Referente al reconocimiento identitario de la Sociedad Civil y del Estado a la luz de los procesos de articulación público – privados es necesario empoderar a las organizaciones de la Sociedad Civil para que su identidad y sus valores sean reconocidos por la esfera pública y por otros actores y, de esta forma, puedan participar en la toma de decisiones en cualquier fase del ciclo de producción de las políticas públicas sin que su esencia diferenciada se pierda en este proceso. Para lograrlo, el Estado debe constituir una agenda mixta de trabajo y crear un ente de carácter público – privado que fomente los espacios de diálogo e interacción y que se especialice en atender las necesidades de la infancia con discapacidad. Con esto apuntaría a disminuir posibles tensiones y costos sociales resultado de la no participación de la Sociedad Civil en el ámbito de las políticas públicas de la niñez con discapacidad. Sobre la importancia de los centros de rehabilitación y de las ayudas técnicas como subcomponentes que permiten mejorar la calidad de vida de la infancia con discapacidad se requiere de convenios entre el Estado, la Sociedad Civil y las universidades y los centros de investigación para el desarrollo de tecnologías que faciliten la producción de ayudas técnicas a bajo costo en el país. De esta forma, los centros de rehabilitación podrían mejorar la calidad de los servicios de rehabilitación y/o habilitación orientados al servicio de la infancia con discapacidad creando un nuevo vínculo de corresponsabilidad entre los actores. Respecto del financiamiento que sustenta las iniciativas de intervención público - privadas en materia de infancia con discapacidad este debe ser flexible de tal forma que pueda cubrir costos importantes como, por ejemplo, el relativo a la contratación de personal especializado para atender a este grupo vulnerable. 98 Adicionalmente, se podría crear un organismo con recursos públicos que tenga una constitución mixta y que certifique la capacidad que tendrían las entidades del tercer sector para realizar intervenciones en el ámbito de la infancia y de la discapacidad lo cual permitiría establecer criterios diferenciados para la transferencia de recursos permitiendo participar a organizaciones tanto grandes como pequeñas. Este ente podría regular la oferta de fondos públicos y privados (de ser el caso) así como evaluar si estos recursos fueron utilizados de manera eficiente y si han tenido impacto en la atención de esta población vulnerable. Esto permitiría premiar a las buenas prácticas. Por otra parte, la mencionada entidad podría realizar otras acciones con el objeto de fortalecer procesos de participación y diálogo entre la esfera pública y la esfera privada. De esta forma se brindaría continuidad, calidad y estabilidad a los planes, los programas y las acciones orientadas al servicio de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad. Finalmente, una vez que en este estudio de caso se determinaron los ámbitos para mejorar el acercamiento público – privado desde su implicancia para las políticas públicas de discapacidad infantil, se propone como parte de una futura investigación, la elaboración de un modelo que permita priorizar acciones, planes y/o programas de intervención para los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad utilizando la metodología multicriterio (AHP). 99 VII. − − − − − − − − − − − − − − − − − REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS Alonso, F. (2007). Algo más que Suprimir Barreras: Conceptos y Argumentos para una Accesibilidad Universal. Revista de Traductología N° 2. Universidad de Barcelona. Barcelona. España. Álvarez-Uría, F. Varela, J. (2004). Sociología, Capitalismo y Democracia. Revista Electrónica de Investigación Educativa. Vol. 7. Número 001. Universidad Autónoma de Baja California. Ensenada, México. Amarante, V. et al. (2005). Inversión en la Infancia en Uruguay. 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De Estudios e Integración Programática Eduardo Toro Coordinador Estudio Nacional de la Discapacidad SENADIS SENADIS Estado SENAME Flora Vivanco Área de Gestión Programática Departamento de Protección de Derechos/Sename Sociedad Civil Fundación COANIL Andrés Lerdo de Tejada Director Área Protección y Familia Milton González Director Médico Nacional de la Teletón Soledad Fernández Directora de la Escuela de Terapeuta Ocupacional de la Universidad Mayor Sociedad Civil Academia Fundación Teletón Universidad Mayor 105 ANEXO N° 2: PAUTA DE ENTREVISTA SEMI – ESTRUCTURADA 1. CARACTERIZACIÓN DEL VÍNCULO ESTADO - SOCIEDAD CIVIL EN EL MARCO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS ORIENTADAS HACIA NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES CON DISCAPACIDAD 1.1 ¿Cómo se caracteriza el vínculo público – privado? ¿Cuáles son sus principales características? 1.2 ¿Qué entiende por corresponsabilidad público – privada en este marco? ¿Cómo se hace visible la relación de corresponsabilidad en este acercamiento? 1.3 ¿Cuáles son los aportes de la Sociedad Civil a las políticas públicas de infancia con discapacidad? 1.4 ¿Cuáles son los aportes del Estado al fortalecimiento del vínculo público - privado? 2. DIMENSIÓN INSTITUCIONAL EN EL MARCO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS ORIENTADAS HACIA NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES CON DISCAPACIDAD Visión desde las Instituciones Formales Convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad 2.1 ¿Cuál cree Usted que es el mayor aporte de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad a la articulación público - privada? Convención Internacional sobre los Derechos del Niño 2.2 ¿Cuál cree Usted que es el mayor aporte de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño a la articulación público - privada? Ley N° 20.422 2.3 A su juicio, ¿Cómo debiera aportar la Ley N° 20 .422 al proceso de articulación público privado? 2.4 ¿Cuál cree Usted que son los principales aportes institucionales (legitimización, responsabilización, etc.) de la Sociedad Civil al proceso de articulación? 2.5 ¿Qué elementos debiese incorporarse a la Ley N° 20.422 para favorecer esta articulación público – privada? 106 Visión desde las Instituciones Informales Prácticas Informales de la Sociedad Civil 2.6 ¿Cuál cree Usted que es el mayor aporte de las prácticas de la Sociedad Civil (relaciones personales, redes sociales, etc.) al proceso de articulación público - privado? 2.7 ¿Cómo considera que debiese ejercer la Sociedad Civil su rol como interlocutor para mejorar este acercamiento? Prácticas Informales del Estado 2.8 ¿Cuál cree Usted que es el mayor aporte de las prácticas del Estado (pactos, acuerdos, relaciones políticas) al proceso de articulación público – privado? 2.9 ¿Cómo considera que debiese ejercer el Estado su rol como interlocutor para mejorar este acercamiento? 3. DIMENSIÓN ORGANIZACIONAL EN EL MARCO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS ORIENTADAS HACIA NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES CON DISCAPACIDAD Capital Humano 3.1 ¿Cuáles son las fortalezas/debilidades (salarios, acceso a educación) que presenta la Sociedad Civil en términos de formación del capital humano que interviene en el ámbito de la discapacidad? Personal Remunerado Aptitudes Técnicas 3.2 ¿Cuál es el principal aporte de la Sociedad Civil a la formación de capital humano acreditado? 3.3 ¿Cuál es el principal aporte del Estado a la formación de capital humano acreditado? 3.4 ¿Cuáles son los ámbitos a mejorar en términos de capital humano acreditado en el ámbito de la discapacidad desde la perspectiva de la Sociedad Civil? ¿Desde el Estado? Aptitudes Blandas 3.5 ¿Cuál es el principal aporte de la Sociedad Civil a la formación de habilidades blandas (sensibilización, formas de expresión, trabajo en equipo)? 3.6 ¿Cuál es el principal aporte del Estado a la formación de habilidades blandas (sensibilización, formas de expresión, trabajo en equipo)? 3.7 ¿Cuáles son los ámbitos a mejorar en términos de formación de habilidades blandas en el ámbito de la discapacidad desde la perspectiva de la Sociedad Civil? ¿Desde el Estado? 107 Personal Voluntario 3.8 ¿Cuáles son las fortalezas/debilidades que presenta la Sociedad Civil en términos de formación de voluntarios que intervienen en el ámbito de la discapacidad? 3.9 ¿Cuál es el principal aporte de la Sociedad Civil a la formación de voluntarios en materia de discapacidad infantil? 3.10 ¿Cuál es el principal aporte del Estado a la formación de voluntarios en materia de discapacidad infantil? Aptitudes Técnicas 3.11 ¿Cuál es el principal aporte de la Sociedad Civil a la formación de voluntarios acreditados? 3.12 ¿Cuál es el principal aporte del Estado a la formación de voluntarios acreditados? Aptitudes Blandas 3.13 ¿Cuál es el principal aporte de la Sociedad Civil a la formación de habilidades blandas (sensibilización, formas de expresión, trabajo en equipo)? 3.14 ¿Cuál es el principal aporte del Estado a la formación de habilidades blandas (sensibilización, formas de expresión, trabajo en equipo)? 3.15 ¿Cuáles son los ámbitos a mejorar en términos de capital humano acreditado en el ámbito de la discapacidad desde la perspectiva de la Sociedad Civil? ¿Desde el Estado? 3.16 ¿Cuáles son los ámbitos a mejorar en términos de formación de habilidades blandas en el ámbito de la discapacidad desde la perspectiva de la Sociedad Civil? ¿Desde el Estado? Mejora de Procesos y Gestión de Recursos Gestión de Recursos Organizacionales y Tecnologías de la Información 3.17 ¿Cuáles son las fortalezas/debilidades en términos de gestión de recursos organizacionales (modificar estructuras, formas de trabajo, tecnologías de la información) que presentan tanto la Sociedad Civil y el Estado y que ponen al servicio de las políticas públicas? 3.18 ¿De qué forma podría mejorarse la capacidad técnica desde la perspectiva del Estado y la Sociedad Civil para reforzar el vínculo público – privado? Factor Identitario 3.19 A su juicio, ¿Cuáles son las características diferenciadas (ideológicas, valóricas e identitarias) que presenta la Sociedad Civil y que ponen al servicio de las políticas públicas? 3.20 De existir diferencias (positivas y/o negativas) ¿Cómo influyen en el marco de las políticas públicas? 3.21 Si considera que esta diferencia contribuye, ¿cómo podría potenciarse? 108 Agenda 3.22 ¿En qué momento del ciclo de las políticas públicas se involucran tanto el Estado como la Sociedad Civil (agenda, diseño, implementación, evaluación)? 3.23 ¿Qué rol juegan Estado y Sociedad Civil en el posicionamiento de temas prioritarios sobre discapacidad infantil en agenda? 3.24 ¿Cómo contribuye (positiva y/o negativamente) el encuentro público – privado al posicionamiento de temas prioritarios sobre discapacidad infantil en agenda? Diseño 3.25 ¿Qué rol juegan Estado y Sociedad Civil en el diseño de la política pública? 3.26 ¿Cómo contribuye (positiva y/o negativamente) el encuentro público – privado al diseño de la política pública? Implementación 3.27 ¿Qué rol juegan Estado y Sociedad Civil en la implementación de la política pública? 3.28 ¿Cómo contribuye (positiva y/o negativamente) el encuentro público – privado a la implementación de la política pública? Evaluación 3.29 ¿Qué rol juegan Estado y Sociedad Civil en la evaluación de la política pública? 3.30 ¿Cómo contribuye (positiva y/o negativamente) el encuentro público – privado a la evaluación de la política pública? Apoyo Técnico Ayudas Técnicas 3.31 ¿Cómo se vinculan tanto el Estado como la Sociedad Civil términos de ayudas técnicas (donaciones, equipos, alimentos) para apoyar iniciativas público - privadas? 3.32 ¿Cuáles son las fortalezas/debilidades que presenta éste ámbito en el proceso de articulación público - privado? 3.33 ¿Considera que existen espacios para mejorar estas formas de ayuda técnica? ¿Cuáles? ¿De qué forma? Centros de Rehabilitación 3.34 ¿Cómo se vinculan tanto el Estado como la Sociedad Civil términos de provisión de servicios de habilitación y/o rehabilitación para apoyar iniciativas público - privadas? 3.35 ¿Cuáles son las fortalezas/debilidades que presenta éste ámbito en el proceso de articulación público - privado? 3.36 ¿Considera que existen espacios para mejorar los servicios de habilitación y/o rehabilitación de los centros de rehabilitación? ¿Cuáles? ¿De qué forma? 109 4. 4.1 DIMENSIÓN FINANCIERA EN EL MARCO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS ORIENTADAS HACIA NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES CON DISCAPACIDAD ¿Cómo se vinculan tanto el Estado como la Sociedad Civil términos de fuentes de financiamiento para apoyar iniciativas público - privadas? Subvenciones 4.2 ¿Cuál es la importancia en el acercamiento público privado de fuentes de financiamiento como las subvenciones? Fondos Concursables 4.3 ¿Cuál es la importancia en el acercamiento público privado de fuentes de financiamiento como los fondos concursables? Autogestión 4.4 ¿Cuál es la importancia en el acercamiento público privado de fuentes de financiamiento como la autogestión? Co-Financiamiento 4.5 ¿Cuál es la importancia en el acercamiento público privado de fuentes de financiamiento como la autogestión? 4.6 ¿Considera que existen espacios para mejorar estas formas financiamiento? ¿Cuáles? ¿De qué forma? (por ejemplo, fondos de inversión, otras) 110 ANEXO N° 3: PAUTA DE ENTREVISTA ESTRUCTURADA PARA L A APLICACIÓN DE LA METODOLOGÍA MULTICRITERIO – PROCESO ANALÍTICO JERÁRQUICO (AHP) Objetivo: Mejorar el acercamiento público – privado desde su implicancia para las políticas públicas de discapacidad infantil DIMENSIONES DE LA CORRESPONSABILIDAD PÚBLICO – PRIVADA: INSTITUCIONAL, ORGANIZACIONAL Y FINANCIERA Criterio de Homogeneidad Recursos que potencian el proceso de articulación Estado – Sociedad Civil en el ciclo de políticas públicas orientadas al servicio de la infancia con discapacidad. Preguntas para el Análisis de Proceso Jerárquico 1) ¿Cuál de estas dimensiones: institucional u organizacional es más importante para potenciar la articulación público - privada en el ámbito de las políticas públicas orientadas al servicio de la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es la dimensión señalada por sobre la otra? 2) ¿Cuál de estas dimensiones: institucional o financiera es más importante para potenciar la articulación público – privada en el ámbito de las políticas públicas orientadas al servicio de la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es la dimensión señalada por sobre la otra? 3) ¿Cuál de estas dimensiones: organizacional o financiera es más importante para potenciar la articulación público – privada en el ámbito de las políticas públicas orientadas al servicio de la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es la dimensión señalada por sobre la otra? DIMENSIÓN INSTITUCIONAL Componentes: Instituciones Formales e Instituciones Informales Criterio de Homogeneidad Normas que favorecen la articulación y el diálogo Estado – Sociedad Civil para desarrollar políticas públicas de discapacidad infantil. Preguntas para el Análisis de Proceso Jerárquico 1) ¿Cuál de estos componentes: instituciones formales o instituciones informales es más importante para potenciar el vínculo de corresponsabilidad y el diálogo entre Estado y Sociedad Civil para el desarrollo de políticas públicas de discapacidad infantil? ¿Cuánto más importante es el componente señalado por sobre el otro? 111 Instituciones Formales: Subcomponentes de Primer Grado Criterio de Homogeneidad Marcos regulatorios (convenciones, leyes y políticas) que orientan las acciones de atención a la población infantil con discapacidad bajo criterios de integración y reconocimiento de derechos. Preguntas para el Análisis de Proceso Jerárquico 1) ¿Cuál de estos subcomponentes: Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad o Convención Internacional sobre los Derechos del Niño es más importante para orientar las acciones de atención a la población infantil con discapacidad bajo criterios de integración y reconocimiento de derechos? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? 2) ¿Cuál de estos subcomponentes: Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad o Ley 20.422 es más importante es más importante para orientar las acciones de atención a la población infantil con discapacidad bajo criterios de integración y reconocimiento de derechos? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? 3) ¿Cuál de estos subcomponentes: Convención Internacional sobre los Derechos del Niño o Ley 20.422 es más importante para es más importante para orientar las acciones de atención a la población infantil con discapacidad bajo criterios de integración y reconocimiento de derechos? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? Instituciones Informales: Subcomponentes de Primer Grado Criterio de Homogeneidad Normas implícitas que regulan el comportamiento y facilitan a interacción público – privada en el marco de las políticas públicas de discapacidad infantil Preguntas para el Análisis de Proceso Jerárquico 1) ¿Cuál de estos subcomponentes: practicas del Estado o prácticas de la Sociedad Civil es más importante para regular el comportamiento y facilitar la interacción público – privada en el marco de las políticas públicas de discapacidad infantil? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? 112 DIMENSIÓN ORGANIZACIONAL Componentes: Capital Humano, Capacidad Técnica, Identidad y Ayudas Técnicas Criterio de Homogeneidad Recursos y competencias con las que cuenta el Estado y la Sociedad Civil que condicionan y fortalecen la intervención y que se ponen al servicio de las políticas públicas de discapacidad infantil. Preguntas para el Análisis de Proceso Jerárquico 1) ¿Cuál de estos componentes: capital humano o capacidad técnica es más importante para condicionar y fortalecer la intervención desde el Estado y la Sociedad Civil en el ámbito de la atención a la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el componente señalado por sobre el otro? 2) ¿Cuál de estos componentes: capital humano o identidad es más importante para condicionar y fortalecer la intervención desde el Estado y la Sociedad Civil en el ámbito de la atención a la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el componente señalado por sobre el otro? 3) ¿Cuál de estos componentes: capital humano o ayudas técnicas es más importante para condicionar y fortalecer la intervención desde el Estado y la Sociedad Civil en el ámbito de la atención a la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el componente señalado por sobre el otro? 4) ¿Cuál de estos componentes: capacidad técnica o identidad es más importante para condicionar y fortalecer la intervención desde el Estado y la Sociedad Civil en el ámbito de la atención a la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el componente señalado por sobre el otro? 5) ¿Cuál de estos componentes: capacidad técnica o ayudas técnicas es más importante para condicionar y fortalecer la intervención desde el Estado y la Sociedad Civil en el ámbito de la atención a la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el componente señalado por sobre el otro? 6) ¿Cuál de estos componentes: identidad o ayudas técnicas es más importante para condicionar y fortalecer la intervención desde el Estado y la Sociedad Civil en el ámbito de la atención a la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el componente señalado por sobre el otro? Capital Humano: Subcomponentes de Primer Grado Criterio de Homogeneidad Personal que potencia la intervención público – privada en el ámbito de las políticas públicas orientadas a los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad. 113 Preguntas para el Análisis de Proceso Jerárquico 1) ¿Cuál de estos subcomponentes: personal remunerado o personal voluntario es más importante para potenciar la intervención público – privada en el ámbito de las políticas públicas orientadas a los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? Personal Remunerado: Subcomponentes de Segundo Grado Criterio de Homogeneidad Aptitudes que aportan a la materialización de los derechos de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad en el ámbito de las políticas públicas. Preguntas para el Análisis de Proceso Jerárquico 1) ¿Cuál de estos subcomponentes: aptitudes técnicas o aptitudes humanas aporta más a la materialización los derechos de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad en el ámbito de las políticas públicas? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? Personal Voluntario: Subcomponentes de Segundo Grado Criterio de Homogeneidad Aptitudes que aportan a la materialización de los derechos de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad en el ámbito de las políticas públicas. Preguntas para el Análisis de Proceso Jerárquico 1) ¿Cuál de estos subcomponentes: aptitudes técnicas o aptitudes humanas aporta más a la materialización los derechos de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad en el ámbito de las políticas públicas? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? Mejora de Procesos y Gestión de Recursos: Subcomponentes de Primer Grado Criterio de Homogeneidad Fortalecimiento de los procesos y de la gestión del Estado y de la Sociedad Civil en el ámbito de las políticas públicas orientadas a los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad. Preguntas para el Análisis de Proceso Jerárquico 1) ¿Cuál de estos subcomponentes: gestión de recursos organizacionales o tecnologías de la información es más importante para fortalecer los procesos y la gestión del Estado y de la Sociedad Civil en el ámbito de las políticas públicas orientadas a los niños, las 114 niñas y los adolescentes con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? Factor Identitario: Subcomponentes de Primer Grado Criterio de Homogeneidad Potenciamiento de los espacios de encuentro público - privados en el ciclo de las políticas públicas al servicio de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad Preguntas para el Análisis de Proceso Jerárquico 1) ¿Cuál de estos subcomponentes: agenda o diseño potencia más los espacios de encuentro público - privados en el ciclo de las políticas públicas al servicio de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? 2) ¿Cuál de estos subcomponentes: agenda o implementación potencia más los espacios de encuentro público - privados en el ciclo de las políticas públicas al servicio de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? 3) ¿Cuál de estos subcomponentes: agenda o evaluación potencia más los espacios de encuentro público - privados en el ciclo de las políticas públicas al servicio de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? 4) ¿Cuál de estos subcomponentes: diseño o implementación potencia más los espacios de encuentro público - privados en el ciclo de las políticas públicas al servicio de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? 5) ¿Cuál de estos subcomponentes: diseño o evaluación potencia más los espacios de encuentro público - privados en el ciclo de las políticas públicas al servicio de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? 6) ¿Cuál de estos subcomponentes: implementación o evaluación potencia más los espacios de encuentro público - privados en el ciclo de las políticas públicas al servicio de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? Apoyos Técnicos: Subcomponentes de Primer Grado Criterio de Homogeneidad Soportes técnicos que afianzan la rehabilitación de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad bajo el marco articulación público – privada en las políticas públicas. 115 Preguntas para el Análisis de Proceso Jerárquico 1) ¿Cuál de estos subcomponentes: ayudas técnicas o centros de rehabilitación afianzan más el cuidado y la recuperación de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad bajo el marco articulación público – privada en las políticas públicas? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? DIMENSIÓN FINANCIERA Componentes: Fondos Concursables, Subvenciones, Autogestión y Transferencias Criterio de Homogeneidad Instrumentos financieros que condicionan la sustentabilidad y la calidad de la intervención desde el Estado y la Sociedad Civil en el ámbito de la atención a la infancia con discapacidad Preguntas para el Análisis de Proceso Jerárquico 1) ¿Cuál de estos subcomponentes: fondos concursables o subvenciones condiciona mayormente la sustentabilidad y la calidad de la intervención desde el Estado y la Sociedad Civil en el ámbito de la atención a la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? 2) ¿Cuál de estos subcomponentes: fondos concursables o autogestión condiciona mayormente la sustentabilidad y la calidad de la intervención desde el Estado y la Sociedad Civil en el ámbito de la atención a la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? 3) ¿Cuál de estos subcomponentes: fondos concursables o transferencias condiciona mayormente la sustentabilidad y la calidad de la intervención desde el Estado y la Sociedad Civil en el ámbito de la atención a la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? 4) ¿Cuál de estos subcomponentes: subvenciones o autogestión condiciona mayormente la sustentabilidad y la calidad de la intervención desde el Estado y la Sociedad Civil en el ámbito de la atención a la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? 5) ¿Cuál de estos subcomponentes: subvenciones o transferencias condiciona mayormente la sustentabilidad y la calidad de la intervención desde el Estado y la Sociedad Civil en el ámbito de la atención a la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? 6) ¿Cuál de estos subcomponentes: autogestión o transferencias condiciona mayormente la sustentabilidad y la calidad de la intervención desde el Estado y la Sociedad Civil en el ámbito de la atención a la infancia con discapacidad? ¿Cuánto más importante es el subcomponente señalado por sobre el otro? 116 ANEXO N° 4: DICCIONARIO DE CONCEPTOS PARA APLICACIÓ N DE LA METODOLOGÍA MULTICRITERIO Objetivo: Mejorar el acercamiento público – privado desde su implicancia para las políticas públicas de discapacidad infantil. I. 1. a) Dimensiones • Institucional: Esta dimensión corresponde al marco regulatorio dentro del cual se produce el acercamiento entre el Estado y la Sociedad Civil para desarrollar políticas públicas de discapacidad infantil. • Organizacional: Esta dimensión se entiende como el conjunto de recursos con que cuenta tanto el Estado, como la Sociedad Civil, y que pone al servicio de las políticas públicas de discapacidad infantil. • Financiera: Esta dimensión corresponde al conjunto de instrumentos a través de los cuales se sostienen las políticas públicas de discapacidad infantil, y que pueden provenir tanto de fondos públicos, como de fondos privados. Dimensión Institucional: Componentes • Instituciones Formales: Este componente reúne a los instrumentos formales como convenciones, leyes y políticas públicas que orientan las acciones de atención a la población infantil con discapacidad. • Instituciones Informales: Este componente hace referencia a aquellas normas implícitas que regulan el comportamiento, como por ejemplo, los códigos de conducta, la disposición y la voluntad hacia el diálogo, entre otras que pueden facilitar – o no – la interacción público – privada en el marco de las políticas públicas de discapacidad infantil. Instituciones Formales: Subcomponentes de Primer Grado • Convención Internacional sobre los Derechos del Niño: La Convención Internacional sobre los Derechos del Niños hace referencia al marco regulatorio y que orienta el acercamiento público - privado en materia de infancia. • Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad: La Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad constituye el marco orientador de las acciones destinadas a la atención de este grupo vulnerable. Este subcomponente explicita el marco normativo que promueve la promoción, protección y garantía de los derechos de las personas impedidas física, metal o sensorialmente y bajo el cual se lleva a cabo el diálogo público – privado en materia de discapacidad infantil. • Ley 20.422: La Ley 20.422 establece el marco regulatorio vigente en materia de integración y equiparación de las oportunidades de las personas con discapacidad. 117 b) Instituciones Informales: Subcomponentes de Primer Grado • Prácticas del Estado: Éste agrupa a todas las dinámicas compartidas por funcionarios de servicios públicos y que, no estando necesariamente plasmadas en instrumentos formales, pueden facilitar el desarrollo de políticas públicas de discapacidad infantil. Ejemplo: la apertura a mejorar la calidad de los diálogos, la disposición a presentar proyectos de re - diseño de políticas y prácticas de políticas de infancia con discapacidad, la voluntad a sumarse a ceremonias de apertura y cierre de intervenciones de discapacidad infantil, entre otras. • Prácticas de la Sociedad Civil: Éste agrupa a todas las dinámicas compartidas por funcionarios de organizaciones de la Sociedad Civil y que, no estando necesariamente plasmadas en instrumentos formales, pueden facilitar el desarrollo de políticas públicas de discapacidad infantil. Ejemplo: redes con las que se cuenta para sostener un programa de intervención en infancia con discapacidad, iniciativas público - privadas en las políticas de infancia con discapacidad, la disposición a convocar a mesas permanentes de trabajo con otros actores de la Sociedad Civil o de la academia para levantar propuestas de mejora de las políticas de infancia con discapacidad, entre otras. 2. Dimensión Organizacional: Componentes • Capital Humano: Este componente se entenderá como el conjunto de habilidades, destrezas y conocimientos propios de los profesionales tanto públicos, como privados que intervienen en las políticas de discapacidad. a) • Procesos y Recursos de Gestión: Este componente hace referencia al conjunto de procesos y protocolos de administración y gestión de los recursos que se ponen al servicio de las políticas públicas de discapacidad infantil. Entiende tanto los procesos de gestión pública como privada, desde su impacto en la intervención con niños, niñas y adolescentes con discapacidad. • Identidad: Este componente se refiere a las diferencias ideológicas que definen el ser y el hacer, tanto del Estado como de la Sociedad Civil, y que se ponen al servicio de la intervención en infancia con discapacidad. • Apoyos Técnicos: Este componente se entiende como el conjunto de soportes técnicos (centros abiertos o residenciales de atención), así como aquellos productos, instrumentos, equipos o sistemas técnicos utilizados en las políticas de infancia con discapacidad. Capital Humano: Subcomponentes de Primer Grado • Personal Remunerado: Este subcomponente hace referencia al personal del Estado y de la Sociedad Civil, que teniendo una relación de dependencia remunerada, interviene en el campo de las políticas de discapacidad infantil. • Personal Voluntario: Este subcomponente hace referencia al personal que, de forma voluntaria, interviene en el campo de la discapacidad infantil. 118 i. Personal Remunerado: Subcomponentes de Segundo Grado • Aptitudes Técnicas: Este subcomponente se entenderá como la capacidad de aplicar conocimiento o experiencia especializados en el proceso de creación, implementación y evaluación de las políticas públicas de discapacidad infantil. • Aptitudes Humanas: Este subcomponente se entenderá como la habilidad y las aptitudes para trabajar con los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad en el marco de las políticas públicas de discapacidad. ii. Personal Remunerado: Subcomponentes de Segundo Grado • Aptitudes Técnicas: Este subcomponente se entenderá como la capacidad de aplicar conocimiento o experiencia especializados en el proceso de creación, implementación y evaluación de las políticas públicas de discapacidad infantil. • Aptitudes Humanas: Este subcomponente se entenderá como la habilidad y las aptitudes para trabajar con los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad en el marco de las políticas públicas de discapacidad. b) Procesos y Recursos de Gestión: Subcomponentes de Primer Grado c) • Gestión de Recursos Organizacionales: Este componente se entenderá como la administración de recursos y el establecimiento de funciones y papeles de los miembros del Estado y de la Sociedad Civil en el ámbito de las políticas públicas de discapacidad infantil. • Tecnologías de la Información: Este subcomponente hace referencia al uso y desarrollo de plataformas informáticas que, estando en poder tanto del Estado como desde la Sociedad Civil, se ponen al servicio de la política focalizada de infancia con discapacidad, con el objeto de generar, intercambiar, difundir y acceder a información que permita fortalecer la acción de la política pública. Identidad: Subcomponentes de Primer Grado • Agenda Pública: Este subcomponente se refiere a los espacios de diálogo que existen para colocar en la agenda pública, temas visibilizados tanto por el Estado, como por la Sociedad Civil, y que competen a la infancia con discapacidad. • Diseño: Este subcomponente se refiere a los espacios de diálogo en los que, tanto Estado y Sociedad Civil, diseñan conjuntamente las políticas públicas que apuntan a la atención de la población infantil con discapacidad. • Implementación: Este subcomponente hace referencia a los espacios de encuentro público - privado que se generan al momento de implementar las políticas públicas de discapacidad infantil. • Evaluación: Este subcomponente hace referencia a los espacios de encuentro público privado en los cuales se realiza la evaluación de las políticas públicas en el ámbito de la discapacidad infantil. 119 d) Apoyos Técnicos: Subcomponentes de Primer Grado • Ayudas Técnicas: Este componente hace referencia a los instrumentos, equipos y otros dispositivos provistos por el Estado o la Sociedad Civil como parte de las políticas públicas que atienden a la infancia con discapacidad. • Centros de Rehabilitación: Este componente hace referencia a las unidades de atención del Estado o de la Sociedad Civil destinadas a la recuperación y rehabilitación médico - funcional de la infancia con discapacidad física, mental o sensorial. 3. Dimensión Financiera: Componentes • Subvenciones: Este componente hace referencia a la modalidad de pago a través de la Ley de Subvenciones 20.032, mediante la cual la transferencia que se realiza a las Organizaciones de la Sociedad Civil está en función de la cantidad de los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad atendidos. Se accede a la subvención cuando una organización postula vía concurso. Estos recursos se entregan a las entidades colaboradoras del Servicio Nacional de Menores (SENAME). • Fondos Concursables: Este componente hace referencia a la transferencia que se realiza desde el Estado hacia la Sociedad Civil en el marco de proyectos específicos los cuales tienen por objeto la atención de la infancia con discapacidad. • Autogestión: Este componente hace referencia al conjunto de prácticas que realiza la Sociedad Civil para gestionar recursos que pone al servicio de las políticas públicas de infancia con discapacidad. Entre ellos se encuentran: acciones de responsabilidad social empresarial, movilización de recursos desde la cooperación internacional, aporte de socios privados, actividades comunitarias para la obtención de fondos, entre otros. • Modalidad Co-Financiamiento: Este componente se refiere a la transferencia corriente que se realiza desde el presupuesto del Fondo Nacional de la Salud de Chile (FONASA) hacia los prestadores médicos que atienden a los niños, las niñas y los adolescentes con discapacidad y está en función de cuántos de ellos son atendidos. 120 ANEXO N° 5: ESCALA DE SAATY PARA APLICACIÓN DE LA METODOLOGÍA (AHP) Intensidad de Importancia Definición Explicación 1 Igual Dos actividades contribuyen en igual medida al objetivo. 3 Moderada La experiencia y el juicio favorecen levemente a una actividad sobre la otra. 5 Fuerte La experiencia y el juicio favorecen fuertemente una actividad sobre la otra. 7 Muy Fuerte o Demostrada Una actividad es mucho más favorecida que la otra; su predominancia se demostró en la práctica. Extrema Las pruebas que favorecen a una actividad más que a otra son del nivel de aceptación más alto posible. 9 2; 4; 6; 8 Recíprocos de lo anterior Racionales 1.1 – 1.9 A veces es necesario interponer Para transar entre valores numéricamente un juicio de transacción, anteriores puesto que no hay una palabra apropiada para describirlo. Si la actividad i se le ha asignado uno de los números distintos de cero Una comparación que surge de la elección mencionados cuando se del elemento más pequeño como unidad, compara con la actividad j, para estimar el mayor como múltiplo de esa entonces j tiene el valor unidad. recíproco cuando se compara con I Coeficientes que surgen Si se forzara la consistencia obteniendo n de la escala valores numéricos para abarcar la matriz Para vinculadas actividades Cuando los elementos son cercanos y casi no se distinguen; moderado es 1.3 y extremo es 1.9. 121 ANEXO N° 6: PRIORIDADES GLOBALES Y LOCALES DEL MODE LO DE ESTRUCTURA JERÁRQUICA (AHP) DIMENSIONES DE LA CORRESPONSABILIDAD Dimensiones del Modelo Prioridad Global Prioridad Local Institucional 0,36 0,36 Financiera 0,34 0,34 Organizacional 0,29 0,29 DIMENSIÓN INSTITUCIONAL: COMPONENTES Dimensiones del Modelo Componentes Prioridad Global Prioridad Local Instituciones Formales 0,17 0,48 Instituciones Informales 0,19 0,52 Institucional Dimensión Institucional: Subcomponentes Componentes de la Dimensión Institucional Instituciones Formales Componentes Prioridad Global Prioridad Local Convención Internacional sobre los Derechos del Niños 0,04 0,26 Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad 0,08 0,46 Ley N° 20.422 0,05 0,28 122 Dimensión Institucional: Subcomponentes Componentes de la Dimensión Institucional Instituciones Informales Componentes Prioridad Global Prioridad Local Practicas Informales del Estado 0,05 0,26 Prácticas Informales de la Sociedad Civil 0,14 0,74 DIMENSIÓN ORGANIZACIONAL: COMPONENTES Dimensiones del Modelo Componentes Prioridad Global Prioridad Local Capital Humano 0,10 0,29 Mejora de Procesos y Gestión de Recursos 0,09 0,25 Factor Identitario 0,07 0,21 Apoyo Técnico 0,08 0,24 Organizacional Dimensión Organizacional: Subcomponentes Componentes de la Dimensión Institucional Componentes Prioridad Global Prioridad Local Personal Remunerado 0,08 0,76 Personal Voluntario 0,02 0,24 Capital Humano 123 Dimensión Organizacional: Subcomponentes Componentes de la Dimensión Institucional Mejora de Procesos y Gestión de Recursos Componentes Prioridad Global Prioridad Local Gestión de Recursos Organizacionales 0,06 0,73 Tecnologías de la Información 0,02 0,27 Agenda 0,01 0,19 Diseño 0,01 0,18 Implementación 0,02 0,29 Evaluación 0,02 0,33 Ayudas Técnicas 0,03 0,38 Centros de Rehabilitación 0,05 0,62 Factor Identitario Apoyo Técnico 124 DIMENSIÓN FINANCIERA: COMPONENTES Dimensiones del Modelo Componentes Prioridad Global Prioridad Local Subvenciones 0,05 0,15 Fondos Concursables 0,16 0,53 Autogestión 0,04 0,15 Co-Financiamiento 0,05 0,17 Financiera 125