MONOGRAFÍA DE POSTGRADO Síndrome de Cauda Equina Post Anestesia Subaracnoidea Cátedra de Anestesiología Facultad de Medicina Universidad de la República Dra. Carolina Antúnez INDICE 1. Introducción 2. Incidencia 3. Revisión Anatómica 4. Etiopatogenia 6. Caso Clínico 7. Discusión 8. Bibliografía Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 2 INTRODUCCION La anestesia regional subaracnoidea ha ido cobrando cada vez mas adeptos a nivel mundial. Este procedimiento ha desplazado en forma creciente al bloqueo epidural, por ser una técnica mas rápida y sencilla con la que se obtiene un bloqueo eficaz y adecuadas condiciones quirúrgicas, a la par que se vio notoriamente disminuida la tasa de morbilidad a expensas de un menor numero de cefaleas postpunción dural con aguja de Tuohy y ausencia de bloqueo raquídeo masivo inadvertido. (12) El objetivo de esta revisión es actualizar la complicación síndrome de cauda equina, como se plantea en el caso clínico. (1) Las complicaciones neurológicas de la anestesia neuroaxial son poco frecuentes, de evolución tórpida, poco reportadas en la literatura médica y en su mayoría son debidas a inexperiencia, a bloqueos difíciles, o a descuido del anestesiólogo. (11) Si bien el enfrentarnos a un paciente con síndrome de cauda equina no es frecuente, tampoco es una excepción en nuestra práctica clínica, por lo que debemos tener presente dicha complicación y adelantarnos en el tratamiento para mejorar su pronóstico. El síndrome de cauda equina (SCE) es una complicación infrecuente de la anestesia subdural que aparece como Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 3 Manifestaciones clínicas del síndrome de cauda equina. Dolor en la región lumbar Dolor en la parte posterior de nalgas Dolor en los MMII Anestesia en silla de montar Paraplejia crónica Alteraciones de la función de los esfínteres anal y vesical Tabla l Extraído Complicaciones neurológicas asociadas con los bloqueos regionales centrales. Capitulo 7.Complicaciones neurológicas por causas anestésicas de origen traumático o químico. ¨p¨ 107-127 resultado de la lesión de las raíces sacras del cono medular. (9) Se lo ha vinculado con el efecto concentrador de las soluciones anestésicas hiperbaras inyectadas en dosis elevadas en un espacio en el cual la cantidad de liquido cefalorraquídeo o LCR es relativamente pequeña, como es el fondo de saco dural. (1) (13) Aparece como resultado de la lesión de las raíces sacras del cono medular, con afectación de la sensibilidad perineal, vesicoesfinteriana, disfunción sexual y debilidad en miembros inferiores, siendo normalmente la manifestación bilateral. (6) El SCE se caracteriza por las siguientes Las manifestaciones clínicas del SCE se describen en la Tabla I. A su vez, el dolor tiene cuatro formas de presentación: dolor localizado, dolor reflejo, dolor radicular y dolor funicular. (7) Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 4 Las posibles causas del mismo, se describen en la Tabla II (7) Causas del síndrome de cauda equina. Mecánicas (traumáticas laceración, estiramiento) Vasculares (isquemia, hemorragia), Neoplásicas (compresión intraneural, extraneural) Compresiones no tumorales (hernia discal, estenosis, hematoma) Daño químico (inyección de sustancias neurotóxicas como anestésicos locales a alta concentración, alcohol, fenol, etc.) Tabla II Extraído Complicaciones neurológicas asociadas con los bloqueos regionales centrales. Capitulo 7.Complicaciones neurológicas por causas anestésicas de origen traumático o químico. ¨p¨ 107-127 Asimismo, la implicancia de la lidocaína al 5% hizo que se cuestionara la seguridad intrínseca de este fármaco. Aunque la mayor parte de los casos de SCE imputables a toxicidad de los AL se atribuyen al uso de la lidocaína espinal, también se ha descrito con otros AL, tales como mepivacaína, procaína y tetracaína. En relación con la bupivacaína, y a pesar de lo extendido de su empleo, raramente se le ha relacionado con el SCE. Como causa traumática, la posibilidad de punción de las raíces nerviosas, en particular de lesión del cono medular está en relación con dos factores: la exactitud para identificar los espacios intervertebrales lumbares, en Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 5 especial los interespacios altos L1-L2, L2-L3, y los casos poco frecuentes donde el cono medular llega hasta L2-L3. La habilidad del anestesiólogo para la selección del espacio lumbar correcto es la clave para evitar esta catastrófica complicación. (11) La anestesia neuroaxial, ya sea epidural, raquídea o combinada, es una técnica muy segura que ha resurgido en las últimas dos décadas. Como todos los procedimientos en medicina, tiene efectos colaterales y complicaciones. Para disminuir la posibilidad de efectos indeseables, es recomendable conocer las diversas técnicas de bloqueo y sus complicaciones, individualizar cada paciente, y apegarse a los lineamientos y recomendaciones de cada técnica emanadas por los expertos para extremar las medidas preventivas de las complicaciones y reducirlas a su minima expresión posible. (11) Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 6 INCIDENCIA Aunque la incidencia de complicaciones neurológicas de los bloqueos centrales es baja, 0,09 a 0,1% de los casos operados para lesiones transitorias y 0,068% para las lesiones neurológicas irreversibles, las consecuencias para el paciente son generalmente dramáticas. (1) Además las complicaciones neurológicas graves relacionadas a la anestesia neuroaxial no se reportan con la frecuencia debida. Incidencia baja: 0,09 a 0,1%...lesiones transitorias 0,068%...lesiones neurológicas irreversibles Si bien las complicaciones neurológicas, se presentan con características de permanentes en el 0,02 al 0,07% de los casos, el cuadro de neuropatía transitoria luego del bloqueo central ocurre en una proporción más elevada 0,01al 0,8%. La anestesia subaracnoidea causa proporcionalmente, mas lesiones neurológicas que la anestesia peridural. (1) Las complicaciones neurológicas graves fueron casi dosveces mas frecuentes con anestesia subaracnoidea que con peridural. (1) Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 7 Un estudio clásico demostró que la incidencia de daño neurológico fue significativamente mayor luego de anestesia subaracnoidea, 6±1 casos por cada 10,000 anestesias, que luego de cualquier otro procedimiento de anestesia regional. Los casos de complicaciones neurológicas mayores se presentaron en los pacientes que recibieron anestesia subaracnoidea. En 17 de los casos las manifestaciones aparecieron en las primeras 24 horas después de una anestesia subaracnoidea, en 5 casos los síntomas se presentaron inmediatamente de recuperados de la anestesia y en los restantes durante el día. (1) El riesgo de disfunciones neurológicas importantes postoperatorias en pacientes con neuropatías sensomotoras previas, esta en el orden del 0,4%. De todas maneras los autores consideran que los anestesiólogos deberán estar alertas cuando se decida implementar un bloqueo neuroaxial en pacientes con neuropatías previas. Según la opinión de casi todos los autores, la presencia de neuropatías crónicas previas al bloqueo ubica a estos pacientes dentro de la población de riesgo para la exacerbación del cuadro neurológico. (1) El 75% de los pacientes con déficit neurológico presentó parestesia o dolor durante la inyección. En el 75% de lesiones postpunción no traumática se utilizó lidocaína al 5% hiperbática. (8) La lidocaína subaracnoidea produjo mayor número de complicaciones que la bupivacaina. Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 8 La mayoría de las complicaciones neurológicas fueron transitorias. (1) Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 9 REVISION ANATOMICA El fondo de saco dural contiene unas 40 raíces (20 raíces anteriores y otras tantas posteriores), que ocupan casi la totalidad del espacio subaracnoideo, sobre todo en el sector donde finaliza el cono medular (L1 y L2).Debido a la escasa cantidad de LCR contenido en la región y a la relación de vecindad que guardan entre si las raíces que conforman la cola de caballo estas son proclives a sufrir lesiones. Por los motivos mencionados, tales raíces constituyen una verdadera barrera para la distribución uniforme de los agentes inyectados en el escaso volumen de LCR contenido en la zona, con el agravante de que en una extensión de unos 18 cm a partir del cono medular, las raíces solo se hallan cubiertas por perineuro. Las raíces posteriores (sensitivas) son las que están mas expuestas al contacto con la aguja de puncion y a la solución anestésica, especialmente las que se hallan en posición mas dorsal (L5-S1).Por lo tanto, en posición supina las fibras sensitivas de las raíces L5 y S1 son las que se ponen en contacto mas intimo y prolongado con las soluciones anestésicas hiperbáricas que se concentran en la región mas declive de la columna, sobre todo en la posición de litotomía. Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 10 La irrigación del cono medular y de las raíces de la cola de caballo proviene de las arterias espinales posteriores. Otros refuerzos de la circulación arterial, provienen de las arterias radiculares. Debido a la pobreza de la circulación de las arterias radiculares a este nivel, la irrigación de la zona del cono medular depende de la porción caudal de la arteria espinal anterior proveniente de la arteria de Adamkiewicz encargada de perfundir el engrosamiento lumbar. Las raíces sacras de la cola de caballo reciben su sangre arterial de las raíces sacras laterales, ramas de las arterias iliacas internas y mas raramente de la arteria obturatriz, por lo cual, las enfermedades importantes de las arterias iliacas pueden incrementar la vulnerabilidad a la isquemia de la porción distal de la medula espinal. Como el sistema venoso encargado de drenar la sangre de la circulación medular es avalvular, existe una comunicación directa en ambas direcciones con el sistema venoso. Además, existe una comunicación entre el sistema anterior y posterior de la medula, que se conoce como corona arterial. (7) Por todas estas características, las raíces de la cola de caballo están más expuestas a sufrir lesiones por distintos mecanismos puestos en juego, por factores externos o por procesos patológicos propios del sujeto. El volumen promedio del saco dural es de 49,9 ± 12,1 ml, con un rango que está entre los 18,8 y 73,4 ml. Ese volumen es menor en los obesos o en las embarazadas Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 11 (aproximadamente 42,9 ± 9,5 ml) que en las personas delgadas (53,5 ± 12,9 ml), explicando la variabilidad del nivel y regresión del bloqueo. (3) Por otro lado, las raíces espinales de la región ocupan aproximadamente el 15% del volumen del espacio. En el estudio y comprensión de las neurolesiones se han demostrado varios factores que pueden influenciar en su aparición: -Raíces sin envoltura dural. -Ocupan aproximadamente el 15% del volumen del espacio lumbosacro, bañadas por el líquido cefalorraquídeo. -Existe gran variabilidad en el tamaño de las raíces nerviosas humanas. -En el espacio lumbosacro las raíces posteriores ocupan el doble de espacio que las raíces anteriores, siendo las más grandes L3, L5, S1 y S2. (2) Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 12 Figura I Ubicación del cono medular Extraido de Saifudding A, Burnett SJ, White J, The variation of position of the conus medullaris in an adult population . A magnetic resonance imaging study. Spine. 1998; 23:1452-1456 Kim JT, Bahnk JH, Sung J. Influence of the age and sex on the position of the conus medullaris annd Tuffiers line in adults. Anesthesiology. 2003; 99:1359-1363 Se revisaron RMN de adultos de ambos sexos: Se vio que el cono medular se encuentra en el tercio inferior de L1 con variaciones entre T12 y L3 sin diferencia de edad ni sexo. En el 19% de los casos el cono medular se extiende más caudal que L1. Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 13 La línea de Tuffier, reper clásico utilizado para detectar un interespacio vertebral, se encontró entre L3-L4 a L5. Existe un margen de seguridad de 2 a 4 cuerpos vertebrales entre el cono medular y la línea de Tuffier, siendo más estrecho en los ancianos. (14) Se estudió la precisión de la línea de Tuffier para detectar un interespacio vertebral. Una población de anestesiólogos debía identificar en cadáveres en posición prono un interespacio seleccionado al azar corroborándose con Tomografía Computada. Existe buena correlación global (rango de error + -1 interespacio). A nivel lumbar en el 18% de los casos se equivocaron con un interespacio más alto. A nivel cervicotoráxico se equivocaron en un 13%.(3) Un estudio que revisó las resonancias nucleares magnéticas (RNM) de 504 pacientes de ambos sexos, con edad media de 46 años (16 a 85), mostró que el cono medular se encontraba en el tercio inferior de L1, con variaciones entre el tercio medio de T12 hasta el tercio superior de L3, sin diferencias entre ambos sexos, ni entre las edades estudiadas. Otros investigadores han encontrado datos semejantes. Por otro lado, la certeza con la cual se identifican los niveles espinales cuando se planea un abordaje neuroaxial es aproximada, y esto no depende solo de la experiencia del anestesiólogo. Broadbent y su grupo demostraron que hasta el 51% de los anestesiólogos estudiados se equivocaron con uno a Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 14 cuatro espacios por arriba del nivel, al identificar por palpación los espacios lumbares, y solo el 29% identificaron los espacios en forma correcta. Estos investigadores observaron que los errores variaban desde un espacio por debajo hasta cuatro espacios por arriba del nivel por reconocer. La precisión para identificar los espacios intervertebrales no se afectó por la posición de sentado o decúbito lateral, pero si por la obesidad. En este estudio se demostró mediante RNM que el cono medular terminó debajo de L1 en el 19% de los casos, siete eran pacientes del sexo femenino, y llama la atención de que seis eran casos obstétricos, lo cual podría explicarse por los diversos cambios anatómicos propios del estado grávido; entre los cuales el sobrepeso y el edema dificultan la palpación correcta de las referencias anatómicas en la columna lumbar. Existen algunos estudios que ponen en controversia la veracidad de la línea de Tuffier como guía para la identificación apropiada de los espacios intervertebrales lumbares, si bien esta referencia anatómica sigue siendo la más utilizada. Kim y su grupo estudiaron 690 RNM lumbares de pacientes mayores de 20 años; la línea de Tuffier se encontró entre L3-4 a L5-S1 y el cono medular entre T12 a L3. La distancia entre el cono medular y la línea de Tuffier fue de 12.6±1.9 (7-18) segmentos (cada cuerpo vertebral fue dividido en 4 segmentos; superior, medio, tercio Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 15 inferior del cuerpo vertebral y el espacio intervertebral), lo cual corresponde aproximadamente a la altura de tres cuerpos vertebrales y sus espacios intervertebrales. Esta distancia entre el cono medular y la línea de Tuffier fue menor en los pacientes de mayor edad, y tanto el cono medular como la línea de Tuffier se encontraron más abajo en las mujeres que en los hombres, y más arriba en los casos con sacralización que en aquellos con lumbarización, o con vértebra transicional. Se concluyó que hay un margen de seguridad de 2 a 4 cuerpos vertebrales y sus espacios intervertebrales entre el cono medular y la línea de Tuffier, debiéndose tener cuidado en los ancianos, donde este margen disminuye. Se debe de tener presente que la línea de Tuffier es solo una referencia aproximada, que el cono medular se puede extender hasta el tercio superior de L3, y que en las mujeres tanto esta línea como el cono medular pueden estar situados por debajo de lo usual. (11) Los propulsores del ultrasonido en anestesia regional han sugerido esta tecnología como útil en los bloqueos neuroaxiales, en especial en la región lumbar, y de esta manera disminuir la morbilidad de la anestesia epidural y raquídea. (16) Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 16 ETIOPATOGENIA MECANISMOS DE LESIÓN NEUROLÓGICA COMO CONSECUENCIA DE LOS BLOQUEOS NEUROAXIALES (Tabla IV) 4.1 El traumatismo nervioso por la aguja y el supuesto efecto neurotóxico de los AL Entre las causas de complicación neurológica de los bloqueos neuroaxiales, no puede descartarse el traumatismo ocasionado por la punta de la aguja de punción, el cual puede formar un hematoma intraneural y provocar el aumento de la presión intraneural e isquemia nerviosa consecutiva. Con la utilización de ultrasonido para localizar la aguja de punción respecto del nervio, se ha demostrado que en algunos pacientes la inyección intraneural de la solución anestésica utilizada para efectuar el bloqueo es indolora. Las complicaciones debidas a trauma directo ocasionado por la aguja del bloqueo son los efectos deletéreos más temidos por los pacientes y los cirujanos. El trauma medular directo es la lesión más grave, y puede manifestarse de inmediato con dolor, parestesias, pérdida metamérica de la sensibilidad, pérdida o disminución de la fuerza y el tono muscular, problemas esfinterianos o bien, no tener manifestaciones clínicas durante el bloqueo y descubrirse en forma relativamente tardíos con dolor, paraplejia o paraparesia, con o sin alteraciones Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 17 esfinterianas. Este último cuadro clínico implica mayor riesgo de secuelas, ya que se puede retrasar el inicio del tratamiento. (11) La colocación del catéter en los espacios peridural o subaracnoideo puede ser una maniobra traumática y por lo tanto debe llevarse a cabo con todas las precauciones técnicas. (7) Los hematomas en el canal espinal secundarios a punciones raquídeas o peridurales, sin lesión directa de la médula espinal, pueden comportarse como lesión directa por su efecto compresivo. (11) El diagnóstico de las lesiones medulares por trauma se sospecha desde el momento mismo del bloqueo neuroaxial, lo que obliga a una meticulosa evaluación neurológica y si los síntomas persisten, es mandatario realizar una RNM, siendo esta el método diagnóstico que confirma el trauma medular severo, y en los casos de lesión durante bloqueo neuroaxial, como se menciona en varias de las publicaciones revisadas. Es preciso establecer el diagnóstico diferencial con lesiones neurológicas menores, o con enfermedades raras. El tratamiento médico de las neurolesiones traumáticas secundarias a la anestesia neuroaxial debe de iniciarse de inmediato, sin esperar a que la lesión sea confirmada con RNM. El trauma medular directo debe de ser tratada de inmediato con dosis altas de esteroides, analgésicos y antiepilépticos. La fisioterapia temprana favorece la buena evolución y es un factor determinante en la Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 18 recuperación del paciente. Todo esto antes de conocer el resultado de la RNM. El uso de naloxona o naltrexona en el trauma medular es controvertido. Si existe hematoma subdural o en la cavidad peridural es mandatario evacuarlo de inmediato. (11) Mecanismos de lesión neurológica. Traumatismo nervioso por la aguja. Neurotoxicidad y el efecto concentrante de los AL. Acción de la epinefrina añadida a los AL. El LCR, los AL, aditivos no conservantes y la densidad de las soluciones anestésicas. Tabla IV Extraído de Jaime Abel Wikinski. Carlos Salgueiro. Anestesia Subaracnoidea a Bajas Dosis. Curso 5 FEEA FAAAAR Modulo V. Capitulo 15. Cuando se planean accesos lumbares altos o torácicos bajos, se recomienda extremar los cuidados para localizar el espacio peridural y el subaracnoideo, ya que en estos segmentos es donde se han reportado la mayoría de neurolesiones. Si existen dudas sobre la posición de la punta de la aguja, repita el procedimiento o busque ayuda. Evitar bloqueos neuroaxiales en los adultos bajo anestesia general. Se ha demostrado la existencia de estructuras fibrosas en el espacio subaracnoideo, de origen congénito o secundarias a procesos inflamatorios inespecíficos y de Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 19 carácter asintomático. La presencia de estas lesiones fibrosas podría explicar la analgesia incompleta observada en algunos casos de anestesia subaracnoidea, así como la aparición de complicaciones neurológicas asociadas con la introducción de catéteres en ese espacio. (7) Estas complicaciones pueden manifestarse como trauma medular, usualmente del cono medular en los intentos de bloqueo lumbar alto, o como radiculopatías. Existen múltiples casos reportados de trauma medular por punción directa con la aguja de raqui o con la aguja de bloqueo peridural. En los casos en los que la parestesia no es seguida por hematoma o absceso peridural el mecanismo de la lesión nerviosa asociada con un bloqueo regional central o periférico no fue patente. No obstante, es probable que el traumatismo por la aguja de punción sea el evento causal en la mayoría de las complicaciones. (1) También se lo ha asociado, al uso de microcatéteres para anestesia subaracnoidea continua y al empleo de lidocaína hiperbárica al 5%, siendo excepcional su presentación en la anestesia subaracnoidea tras inyección única con bupivacaína. Traumatismo de cono medular o cauda equina por la aguja de punción o inyección intraneural. Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 20 Figura II Aguja punta bisel Extraído de Tsui BCH et al. Can direct spinal cord injury occur without parestesia? A report of delayed spinal cord injury after epidural placement in an awake patient. Anesth. Analg 2005; 101:1212-14 En cuanto al Paciente: Ver hasta que nivel llega el cono medular. En cuanto al Técnico: es fundamental la correcta identificación del Interespacio a puncionar así como el diagnóstico precoz del traumatismo nervioso. 4.2 Neurotoxicidad de los AL y el efecto concentrante de las soluciones anestésicas inyectadas en el espacio subaracnoideo. Los AL han sido utilizados por muchas décadas y administrados a millones de pacientes. Sin embargo, su toxicidad potencial es un tema recurrente. (1) Sin embargo, en la actualidad parece definitivamente demostrado que la exposición de los nervios a altas concentraciones de un anestésico local produce distintos grados de alteración de su estructura y función capaces de originar síntomas neurológicos transitorios o permanentes. (7) Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 21 Una de la complicaciones mas desvastadoras es el síndrome de la cola de caballo, cuadro que ha sido vinculado con el efecto concentrador de las soluciones anestésicas hiperbaricas, inyectadas en dosis elevadas en un espacio en el cual la cantidad de LCR es relativamente pequeña como es el fondo de saco dural. (1) El mecanismo subyacente común: seria la teoría de la distribución irregular de Anestésico Local inyectado en el saco dural, exponiendo a las raíces lumbosacras sin envoltura dural a altas dosis del fármaco. (21) Los autores llegaron a la conclusión de que la exposición prolongada de las raíces nerviosas del espacio subaracnoideo a los anestésicos locales puede producir efectos neurotóxicos que son dosis dependientes. La exposición prolongada y continua a los anestésicos locales inyectados en el espacio subaracnoideo. La concentración elevada y altas dosis de bupivacaina incrementan la incidencia de complicaciones neurológicas, situación que no se produce cuando el tejido nervioso es expuesto a soluciones hiperbaricas sin el anestésico local. Los distintos autores consultados opinan que el dolor y la disestesia son el resultado del efecto neurotóxico directo de la solución anestésica. Escuela que propone la utilización de mínimas dosis de anestésicos locales con coadyuvantes. Investigación de anestésicos locales con menor toxicidad. (21) Se ha observado que todos los anestésicos locales producen lesión del cono de crecimiento y degeneración neural. Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 22 La lidocaína al 5% es uno de los agentes anestésicos más señalados como agente potencialmente neurotóxico sobre las raíces que componen la cola de caballo. (1) Muchos profesionales aceptan la teoría de la mala distribución de la lidocaína a altas concentraciones y elevadas dosis, por lo cual se inclinan por utilizar dosis no mayores de 60 mg en soluciones isobaras sin epinefrina, diluyendo la lidocaína comercial hiperbara al 5% con por lo menos 2,5 ml de LCR o soluciones salinas libres de conservantes, evitando, además inyectarla a través de microcatéteres espinales. Se han realizado considerables esfuerzos para entender el mecanismo de neurotoxicidad de la lidocaína que permita reducir su riesgo. En 1991 se reportaron 4 casos de síndrome cauda equina con anestesia subaracnoidea continua: 3 Lidocaína 5% con 7,5% dextrosa catéter 28 G 1 Tetraciclina 0,5% dextrosa 5% catéter 20 G Conclusiones: la mala distribución y dosis elevadas produjeron exposición de las raíces de la cola de caballo a concentraciones tóxicas de Anestésicos Locales. (13) In vitro, la bupivacaína y la ropivacaína han demostrado producir menores porcentajes de lesión del cono de crecimiento neural que la mepivacaína y la lidocaína. Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 23 Los efectos neurotóxicos de la bupivacaína y la ropivacaína son más reversibles comparados con otros anestésicos locales. (5) Efecto concentrador por distribución irregular de soluciones anestésicas hiperbaras inyectadas en dosis elevadas en el espacio subaracnoideo lumbosacro. En la tabla IV se describen los factores que favorecen la distribución irregular de los Anestésicos Locales. Factores que favorecen la distribución irregular de los AL. Diámetro del catéter. Configuración y posición de la punta. Velocidad de inyección. Dosis, concentración y baricidad del AL. Tabla IV Extrados de Robinson RA, Steward SF, Myers Mr., et al In vitro modeling of spinal anesthesia. A digital video imaging processing technique and its implication to catheter characterization. Anesthesiology 1994; 81:1053-60 Existen múltiples hipótesis formuladas como factor etiológico del síndrome de cola de caballo, aunque la más aceptada es la existencia de una distribución no uniforme del anestésico local en el espacio subaracnoideo, que determinaría la presencia de una concentración neurotóxica del mismo sobre las raíces nerviosas. Como responsables de esta anómala distribución se implican los pequeños calibres de agujas o catéteres (mayor resistencia y, por tanto, menor velocidad con elevadas Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 24 concentraciones puntuales), así como su grado de introducción u orientación. Esto se favorece por el empleo de agujas de tipo distinto a la de Quincke, como es el caso del tipo Whitacre. No obstante, otros estudios epidemiológicos lo han cuestionado. (9) La asociación del SCE con el empleo de microcatéteres de calibre 32G para anestesia subaracnoidea con lidocaína hiperbara al 5%, llevó a la FDA norteamericana a la prohibición del empleo de aquellos de calibre inferior a 28 G. En un trabajo realizado por Rigler y col.reportaron 4 casos de síndrome de cauda equina que se produjeron con anestesia subaracnoidea continua. En 3 de ellos, el agente empleado fue lidocaína al 5% con 7,5% de dextrosa administrada a través de un catéter de 28 G; en el cuarto caso se empleó tetracaína al 0,5% con dextrosa al 5% a través de un catéter de 20 G. La evidencia de estas lesiones resultaría de una acción directa del AL sobre las raíces de la cola de caballo. En los cuatro casos, la dosis inicial del AL produjo un bloqueo restringido, y la dosis total requerida para alcanzar la anestesia quirúrgica excedió la habitualmente utilizada en una sola inyección. Estas circunstancias permitieron concluir a los autores del estudio que la combinación de la mala distribución y la dosis relativamente elevada de AL produjeron una exposición de las raíces de la cola de caballo a concentraciones tóxicas de anestésico. (1) Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 25 Como consecuencia, surgieron algunas recomendaciones para la administración de estos fármacos por catéteres subaracnoideos. La administración de soluciones de AL hiperbáricas a través de un catéter colocado en el espacio subaracnoideo dirigido a la región sacra produce una distribución restringida de los AL y una concentración relativamente elevada dentro de dosis clínicas habituales.Algunos factores más favorables para determinar esta situación son el diámetro del catéter, la configuración y posición de la punta, la velocidad de inyección y la cantidad anestésico inyectada, como ya fue mencionado. (1) En relación con la posible neurotoxicidad per se del anestésico local, los estudios experimentales realizados demuestran que la lidocaína es potencialmente más lesiva que la bupivacaína, sobre todo a la concentración clínicamente empleada de esta ultima del 0,5%. Esto se corrobora con el escaso número de complicaciones, asociadas a la bupivacaína, en relación con su amplia y común utilización. Sin embargo, la toxicidad vendría dada por la concentración empleada y no por la potencial lesividad neural intrínseca del fármaco, incluyendo a la bupivacaína. El efecto neurotóxico esta vinculado con la concentración y es especifico para cada agente anestésico. (7) De este modo, valorándose con una dosis total concentraciones y dosis equipotentes entre ambos (el límite aconsejable de concentración de lidocaína sería del 2% máxima de 60-100 MG y del 0,5% con 20 MG totales Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 26 para bupivacaína), si se comparara la lidocaína al 5% con bupivacaína al 1,25% (relación 4:1). (9) Los anestésicos locales producen cambios morfológicos en las neuronas en crecimiento con significativas diferencias entre ellos. El mecanismo lesivo incluye alteración de los mecanismos de despolarización y propagación del potencial de acción, sin observarse lisis neural. Estudios histológicos sugieren que los anestésicos locales producen lesión neurológica directa. El incremento intracelular de iones calcio, y la pérdida irreversible del potencial de membrana han sido señalados como mecanismos causales de la toxicidad (muerte neuronal) inducida por anestésicos locales. (14) Algunas lesiones de nervio periférico provocadas por anestésicos locales pueden regenerarse con el paso del tiempo, y por tanto, el efecto de los anestésicos sobre la regeneración neuronal no debe ser ignorada en la práctica clínica. Se ha cuestionado la utilización en anestesia subaracnoidea de altas dosis de bupivacaína al 0,5% sobre todo en soluciones hiperbaras. El empleo de dextrosa en la soluciones hiperbaras, no parece tener un efecto deletéreo sobre las raíces nerviosas, lo que explicaría la ausencia de mayor riesgo potencial de la bupivacaína hiperbara con glucosa al 8,5% sobre la lidocaína en solución hiperbara de glucosa al 7,5%. No obstante, la dilución en inyección lenta de soluciones hiperbaras se produce con mayor dificultad que en Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 27 soluciones isobaras, lo que favorecería la concentración puntual del anestésico local, sobre todo en punciones en sedestación. El incremento en la osmolaridad que proporciona la glucosa en una solución de bupivacaína al 0,5% tiene escaso efecto sobre las fibras nerviosas, mientras que en una solución al 5% de concentración como la de lidocaína, esta adición puede ser determinante en la eventual neurotoxicidad. (9) La baricidad parece no afectar a la mala distribución de la bupivacaína cuando se ha utilizado en técnicas de anestesia espinal continua. (12) Si analizamos a fondo estas consideraciones, vemos que un mecanismo común subyace detrás de todos estos factores: la neurotoxicidad de la cauda equina se debe a una distribución irregular del agente local inyectado en la zona, ya sea mediante microcatéteres o en bolo. De esta manera, un mecanismo posible de la complicación neurológica tras una anestesia subaracnoidea sería la mala distribución del AL en el saco dural y el contacto con las estructuras nerviosas de dosis variables según sea la localización y el espesor de la raíz comprometida, exponiendo directamente a las raíces lumbosacras de la cola de caballo durante un período de tiempo variable (en el caso de anestesias subaracnoideas continuas) a la acción de los fármacos, en un lugar donde las raíces nerviosas no se hallan protegidas por la envoltura dural y son de diámetro más delgado que las raíces de otras regiones del raquis. (1) Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 28 Estudios realizados en cadáveres, sobre la estructura microscópica de las capas de envoltura de la médula espinal, aportan una base anatómica a la toxicidad provocada con el uso de lidocaína hiperbara a concentración del 5% asociada al uso de microcatéteres. Se postula la existencia de unas envolturas de aracnoides o “fundas aracnoideas” que envuelven las raíces nerviosas de la médula espinal, con formación de compartimientos anatómicos que favorecerían la acumulación y consiguiente elevada concentración de los anestésicos locales, además de justificar la aparición de un inadecuado bloqueo anestésico en estos casos.favorecería la acumulación del anestésico local en solución hiperbara en el área sacra, debido a la lordosis lumbar, quedando así expuestas las raíces sacras con fibras pequeñas y desmielinizadas, en proporción más vulnerables a unas concentraciones relativamente altas de anestésico local. (9) La posición de litotomía constituiría ademas, un factor de estiramiento de las raíces nerviosas, con la consiguiente disminución de la irrigación. Aunque varios autores no han encontrado esta correlación, no se descarta su posibilidad. Asimismo, la toxicidad del anestésico local en la zona de la cola de caballo sería más frecuente, debido a la mayor longitud de las raíces nerviosas y mayor exposición, debido a la ausencia de vainas protectoras en su trayecto hacia el saco dural, con el factor agravante de acumulación del anestésico local en posición de litotomía. Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 29 4.3 La acción de la epinefrina añadida a los AL como posible factor causal de la complicaciones neurológicas tras un bloqueo neuroxial. Por lo general se piensa que la adrenalina produce la prolongación del efecto farmacológico de los AL por vasoconstricción arteriolar. Sin embargo, se estudiaron los efectos de la inyección subaracnoidea de anestésicos locales con o sin adrenalina sobre el flujo sanguíneo en la médula espinal y cerebral. Se comprobó que el agregado de adrenalina a la lidocaína, mepivacaína o tetracaína no produce cambios en el flujo sanguíneo segmentario medular. En un estudio similar, Kozody y colaboradores mostraron que la inyección subaracnoidea de lidocaína sola produce un aumento de la circulación medular por vasodilatación, mientras que la vasodilatación no aparece cuando se asocia adrenalina al anestésico local. En ninguno de los casos observaron una reducción sustancial del flujo sanguíneo medular. (1) Los autores especulan que esta disminución del flujo sanguíneo medular podría ser consecuencia de la reducción funcional en el metabolismo de las células nerviosas de la región afectada por el bloqueo regional ocasionado por los anestésicos locales, aunque no descartan que pueda existir un efecto vasoconstrictor por acción, sobre todo, de la ropivacaína. La isquemia es también una causa común de déficit neurológico que puede existir como compromiso transitorio o definitivo. Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 30 La isquemia de la médula espinal es otro factor a tener en cuenta. La especial vascularización de la médula espinal la hace susceptible a la isquemia, pero precisa además de hipotensiones profundas y mantenidas, determinando un déficit en D4 que no afectaría exclusivamente a la cola de caballo. Se asocio un caso de SCE a isquemia de la médula espinal tras anestesia subaracnoidea con bupivacaína y adrenalina en un paciente con arteriosclerosis avanzada, atribuyéndolo al efecto isquémico de la adrenalina. (9) Los troncos nerviosos periféricos son estructuras muy vascularizadas con un sistema de circulación colateral bien desarrollado capaz de compensar modificaciones regionales en la presión de perfusión de los vasanervorum. El flujo total del nervio es de 47-50 ml/100 g/min., un valor similar al flujo sanguíneo cerebral. La circulación de los nervios está formada por un sistema vascular intrínseco intraneural y un sistema vascular extrínseco, con vasos que recorren longitudinalmente el nervio a lo largo del epineuro, emitiendo comunicantes que se anastomosan con el sistema vascular interno. La circulación del epineuro es un componente crítico de la circulación total del nervio, ya que su eliminación disminuye en un 60% el flujo sanguíneo nervioso. Los anestésicos locales aplicados en la vecindad del nervio pueden modificar el flujo sanguíneo nervioso peri neural. La lidocaína al 1% aplicada en forma tópica al nervio produce un efecto bifásico en la circulación del nervio. Hay un aumento inicial del flujo sanguíneo que dura unos Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 31 4 minutos, y una reducción posterior que persiste durante todo el resto del experimento (unos 10 minutos). Este fenómeno se debería a modificaciones en el diámetro de los vasavasorum. El incremento inicial del flujo se inhibe “topicando” el nervio con una solución de lidocaína que contiene epinefrina. En cambio, la topicación con lidocaína al 2% produce únicamente una reducción del flujo sanguíneo nervioso que puede disminuir hasta un 60%. El lavado de los nervios con una solución salina 10 minutos después de la administración de lidocaína revierte el efecto vasopresor de la lidocaína 1% pero no de la lidocaína al 2% utilizada sola o con epinefrina. Lo mismo sucede cuando los nervios fueron topicados con epinefrina sola. Parece evidente que las soluciones anestésicas concentradas que contienen epinefrina pueden reducir el flujo sanguíneo nervioso en una proporción suficiente como para retardar la recuperación de la actividad neuronal, aunque no son capaces de causar desmielinización y lesiones irreparables del nervio. Este efecto podría explicar, en algunos casos raros, las lesiones neurológicas más persistentes. Paralelamente a la lesión isquémica producida por vasoconstricción, se pueden agregar los aumentos de la presión extraneural, como la generada por compresión periférica del nervio por los manguitos hemostáticos, o intraneural, como la producida por inyección de sustancias dentro del perineuro. La conjunción de todos Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 32 estos factores puede afectar severamente la perfusión de las fibras nerviosas y producir su lesión. (1) Es por lo tanto posible que la inyección intrafascicular produzca una reducción sustancial de la irrigación nerviosa y, como consecuencia, lesiones neuronales. Estas lesiones se pueden prevenir evitando inyectar soluciones anestésicas muy concentradas en la vecindad del nervio, o dentro del espacio interfascicular. Como dijimos, cuando aparece dolor en el trayecto nervioso se debe suspender de inmediato la inyección del anestésico local. (4) 4.4 El LCR, los AL, los aditivos no conservantes, y la densidad de las soluciones anestésicas. El LCR es el diluyente para la administración de fármacos por vía subaracnoidea o espinal. Los AL se administran por vía espinal a concentraciones 100 veces mayores que la concentración efectiva mínima (cm.) requerida para producir el bloqueo de la fibra nerviosa, por ejemplo, la Cm para la lidocaína sería 0,025-0,05%. La consecuente dilución del fármaco en el LCR determinará, en última instancia, la capacidad de bloquear la actividad nerviosa de acuerdo con la concentración final alcanzada. De esta manera, la capacidad de lograr un bloqueo nervioso dependerá, en última instancia, de los siguientes factores (entre otros menos importantes): - de la concentración alcanzada por el fármaco en el LCR, la cual no solo estará determinada por la concentración Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 33 original (dosis/volumen) del medicamento inyectado, sino por la cantidad total inyectada. - de su baricidad. - del volumen regional de LCR en el cual debe diluirse para alcanzar la concentración efectiva de bloqueo. - del nivel del espacio subaracnoideo en el cual es inyectada. - de la velocidad de inyección del AL. - de la densidad del LCR. (1) Las soluciones hiperbaras tenderán a desplazarse a favor de la gravedad mientras que las hipobaras tenderán a alejarse del sitio de inyección contra la fuerza de gravedad. Este es un principio fundamental de la anestesia espinal y todos los autores están de acuerdo sobre su importancia en la distribución de los fármacos inyectados en el espacio subaracnoideo. Con respecto a las soluciones isobaras, es probable que luego de su ingreso al espacio subaracnoideo el agente farmacológico permanezca en la vecindad del sitio de inyección. Ello determina un gradiente de concentración entre el sitio de inyección y los lugares alejados del mismo, por lo cual, con una solución isobara, el tiempo requerido para que el bloqueo sensitivo baje 2 segmentos del nivel máximo alcanzado, se correlaciona en forma inversa con éste. Este mecanismo puede explicar la rapidez en la recuperación del bloqueo utilizando este tipo de soluciones anestésicas. Por otro lado, fue demostrado que cuanto menor sea el volumen de LCR y mayor su densidad, mayor será el nivel máximo de bloqueo Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 34 sensitivo alcanzado por una solución isobara de bupivacaína. En cuanto a la importancia de la temperatura del LCR (37ºC, normalmente) y la rapidez o velocidad con que las soluciones anestésicas inyectadas en ese líquido alcanzan su temperatura se encuentra en relación con la densidad, que varía inversamente con la temperatura. Es indudable que la temperatura del anestésico local se equilibra rápidamente con la temperatura del LCR, por lo cual tanto la densidad de este como la densidad del anestésico local utilizado (o sea su baricidad) deben expresarse a la temperatura corporal (básicamente 37º). La densidad del LCR a 37º varia entre 10000 y 10006 g-L, la densidad del anestésico local excede el nivel superior de la densidad del LCR, es decir 1,00099, su comportamiento respecto a dicho líquido es el mismo del de las soluciones hiperbaras. En cambio, las soluciones son hipobaras cuando la densidad es inferior a la parte más baja del límite de confianza de la densidad del LCR, es decir 1,00019. Las soluciones de lidocaína y de bupivacaína que contienen glucosa y dextrosa respectivamente son claramente hiperbaras. Sin la dextrosa o glucosa todos los anestésicos locales, excepto la lidocaína carbonatada, son hipobaras, de acuerdo con la definición anterior. Esta condición incluye a la lidocaína al 2% en dos diferentes presentaciones comerciales, a la bupivacaína al 0,5 y al 0,25%, a la ropivacaína al 0,5% y a la tetracaína liofilizada disuelta en solución salina libre de conservantes para alcanzar finalmente una concentración de 2 mg/ml, 1 mg/ml y 0,5 mg/ml. La Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 35 densidad de la solución de lidocaína carbonatada es de 1,0010 g/l, marginalmente más elevada que el límite superior de confianza del LCR, por lo cual se comporta como una solución hiperbara. La densidad de la epinefrina al 1/1000 (1mg/ml) se comporta como una solución isobara con una densidad de 1,0005 g/ml.Las soluciones de anestésicos locales hipobaras permanecen hipobáricas con la adición de cualquier opioide o epinefrina. Los opioides y la epinefrina añadidas a un volumen específico de anestésico local representan las mezclas habitualmente empleadas para anestesia regional. Cuando se agrega meperidina a anestésicos locales hipobáricos, la densidad se incrementa pero no lo suficiente para superar el límite de confianza inferior de la densidad del LCR. De esta manera, la solución final permanece hipobárica. Aunque el agregado de morfina libre de conservadores produce un cambio mínimo en la densidad final de la mezcla, la solución se transforma en hiperbara. (1) Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 36 4.5 El tamaño de las raíces lumbosacras, el volumen del LCR en el espacio lumbosacro y otros factores que pueden afectar las características del bloqueo neuroaxial Existe gran variabilidad interindividual tanto en el volumen del LCR como la de los componentes nerviosos de la cauda equina. El volumen de LCR lumbosacro varía entre 42 y 81 ml, explicando el 80% de la variabilidad del nivel del bloqueo alcanzado y de la regresión del nivel del bloqueo motor y sensitivo de las soluciones anestésicas inyectadas en dicho espacio. (1) Volumen de Líquido cefalorraquídeo lumbosacro: Condiciona el efecto y distribución de los anestésicos locales en espacio subaracnoideo. • Solo se ha demostrado correlación inversa significativa con el índice de masa corporal y con el peso del paciente. • Síndrome de Marfán: mayor cantidad de líquido cefalorraquídeo por ensanchamiento de saco dural. (8) La cantidad de LCR en el cual se diluyen los agentes inyectados en el espacio subaracnoideo y el tamaño de las raíces que deben bloquear son factores decisivos del efecto farmacológico final de los AL inyectados por vía neuroaxial. Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 37 Esta variabilidad entre el volumen del LCR respecto al tamaño de cada raíz espinal se extiende desde el espacio intervertebral T11-T12 hasta las últimas foráminas sacras. (1) Por otro lado, las raíces espinales de la región ocupan aproximadamente el 15% del volumen del espacio lumbosacro, en un medio líquido que las baña y que disminuye de volumen a medida que nos acercamos al cono medular. Habría así una variación de casi 3 veces entre los volúmenes máximos y mínimos de LCR en la región lumbosacra, lo cual podría alterar la relación entre el volumen de dicho líquido y el de las raíces lumbosacras. Existe también una gran variabilidad en el tamaño de las raíces nerviosas humanas. Dentro del espacio lumbosacro, el área que ocupan las raíces anteriores corresponde aproximadamente a la mitad del área que ocupan las raíces posteriores. Las raíces anteriores y posteriores más grandes son las L3, L5, S1 y S2. Es sabido que el nervio mixto está recubierto por una vaina fibrosa periférica, el epineuro, y que en el interior del mismo hay otra estructura, el perineuro, que separa los distintos contingentes de fibras nerviosas en ramilletes. En este tejido perineural transcurren los vasos que van a irrigar las fibras nerviosas. Además, las fibras nerviosas mielínicas presentan una doble capa bilipídica que las aísla del espacio intersticial o del LCR. Los únicos lugares en que dichas fibras se ponen en contacto con el espacio intersticial son los nódulos de Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 38 Ranvier (NR). La distancia a la que se encuentran los NR es diferente según el diámetro de la fibra nerviosa. A mayor diámetro, mayor será la distancia entre dos NR consecutivos. (1) Los canales sódicos de las fibras se concentran en los NR, en los axones mielinizados, y a lo largo de todo el axoplasma de las fibras más delgadas amielínicas tipo C. Es por ello que el NR es el sitio de las fibras mielínicas donde se origina el potencial de acción encargado de llevar los diferentes impulsos que conduce cada fibra, razón por la cual se dice que la conducción del impulso nervioso se hace en forma saltadora (salta de un NR a otro). Son precisamente los lugares en los cuales los AL pueden bloquear la conducción nerviosa y disminuir la permeabilidad del canal iónico sin afectar el potencial de reposo, el cual no puede alcanzar un valor umbral para generar el potencial de acción y la propagación del impulso nervioso. Por otro lado, es sabido, que en las fibras mielínicas del sistema sensitivo se requiere bloquear por lo menos 3 NR consecutivos para interrumpir más del 84% de la conductancia al sodio, o sea la generación y el traslado del potencial de acción. Siendo que la distancia internodal varía con el grosor de la fibra, las fibras de menor diámetro tiene una distancia internodal menor, por lo cual serán bloqueadas antes que las fibras de grueso calibre. Es decir que se necesitará menor cantidad (concentración x volumen) de AL para bloquear las sensaciones dolorosas que para bloquear la actividad motora. Y dentro de cada una de las funciones se Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 39 bloquearán más rápida e intensamente las fibras de menor diámetro que las de mayor calibre. Estos dos hechos, pueden explicar la variabilidad de la anestesia subaracnoidea de una persona a otra y algunos de sus efectos indeseables. Como sabemos, en el adulto, la médula espinal termina entre T12 y L2, y a partir de allí los nervios dentro del saco dural -continúan descendiendo dentro de la columna vertebral formando la cola de caballo. Por otro lado, la fidelidad con que la resonancia nuclear magnética mide el volumen del LCR en una forma estática, permite también reconocer las vigorosas oscilaciones y desplazamientos que se producen en dicho líquido en forma sincrónica con los latidos cardíacos. Aunque de menor importancia que los otros factores señalados, este fenómeno puede contribuir también al desplazamiento de las soluciones anestésicas en el espacio subaracnoideo. Desafortunadamente, ni el volumen del LCR lumbosacro, ni su densidad, ni el diámetro o la superficie de sección de las raíces lumbosacras se correlacionan con otras características físicas externas del sujeto salvo su peso. Lo mismo sucede respecto a la presencia de algunos solutos que allí se encuentran (glucosa, proteínas, etc.). Por lo tanto, el simple examen físico del paciente no permite estimar fácilmente el volumen y su concentración para así anticipar el posible efecto de los fármacos inyectados en el espacio peridural y subaracnoideo. (1) Se han descrito inyecciones intramedulares de aire. (11) Los síntomas de daño unilateral se pueden atribuir a Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 40 lesión de la arteria sulcocomisural, o a la arterial espinal anterior. Otros mecanismos que se han involucrado en las lesiones neurológicas son la hipotensión arterial, el espasmo vascular, la arterioesclerosis, y el aumento de la presión en la cavidad peridural. Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 41 CASO CLINICO Hombre de 39 años, coordinado para reparación de fractura de cuello de pie izquierdo. Asma leve. Examen Físico y Paraclínica: sin particularidades. Se decide previo consentimiento informado del paciente la realización de anestesia raquídea. De la técnica anestésica se destaca: Asepsia con alcohol yodado y alcohol blanco. Punción única en sedestación en interespacio L3-L4 con aguja número 27 punta de lápiz, se administra Bupivacaína Hiperbárica al 0,5% 10 MG y 20 microgramos de fentanilo. No presento parestesias ni dolor durante el procedimiento. Se coloca al paciente en decúbito lateral izquierdo durante 5 minutos, volviendo a decúbito dorsal posteriormente. En ese momento el paciente refiere parestesias y bloqueo motor parcial en miembro inferior izquierdo. Al iniciarse la cirugía refiere dolor frente a la incisión por lo que se decide realizar Anestesia General bajo máscara. Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 42 En el postoperatorio inmediato Refiere dolor intenso en el área quirúrgica, requiriendo 10 MG de Morfina intravenosa para obtener analgesia. A las 2 horas alta a sala sin bloqueo motor ni sensitivo A las 12 horas el paciente presenta globo vesical y defecación involuntaria durante un intento misional. A partir de ese momento presenta: Retención de orina Constipación Impotencia sexual Hipoestesia en perine y región sacra Parestesias en región glútea interna derecha Se solicita consulta con Urólogo quien indica colocación de sonda vesical, y consulta con Neurólogo quien solicita: RMN, no presentando elementos patológicos. Estudio Eléctrico de MMII que no mostró alteraciones. A un año de dicho procedimiento presenta: Micción de un 75% debiendo autocateterizarse con sonda vesical dos veces por día. Tendencia a la constipación realizándose enemas dos a tres veces por semana. Persiste la hipoestesia de perine. Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 43 La impotencia sexual utilización de Sildenafil. Monografía de Postgrado se solucionó con Dra. CarolinaAntúnezz la 44 DISCUSIÓN En el caso clínico analizado, el SCE planteado pueda deberse en primer lugar, al efecto concentrador de las soluciones anestésicas hiperbáricas, inyectadas en dosis elevadas en un espacio en el cual la cantidad de LCR es relativamente pequeña como es el fondo de saco dural, exponiendo a las raíces lumbosacras sin envoltura dural a altas dosis del fármaco. Creemos, que la dosis inyectada debería haber sido más pequeña que la administrada de 10 MG, dado que el objetivo era hacer un bloqueo selectivo. En segundo lugar, planteamos la incorrecta identificación del interespacio elegido con el consiguiente traumatismo ocasionado por la punta de la aguja de punción, el cual puede formar un hematoma intraneural y provocar isquemia intraneural, descartado a través de la RNM realizada a nuestro paciente. La posibilidad de punción de la medula espinal, en particular de lesión del cono medular está en relación con dos factores: la exactitud al identificar los espacios intervertebrales lumbares, en especial los interespacios altos L1-L2, L2-L3, y los casos poco frecuentes donde el cono medular llega hasta L2-L3. La habilidad del anestesiólogo para la selección del espacio lumbar correcto es la clave para evitar esta catastrófica complicación. Como otra posible causa, se ha demostrado la existencia de estructuras fibrosas en el espacio subaracnoideo, de Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 45 origen congénito o secundarias a procesos inflamatorios inespecíficos y de carácter asintomático. Estas lesiones fibrosas podrían explicar la analgesia incompleta observada en algunos casos de anestesia subaracnoidea, así como la aparición de complicaciones neurológicas. Mas alejado, se ha descrito la aparición de este síndrome, asociado a la posición forzada del paciente en la mesa operatoria y el papel que desempeña dicha posición durante el acto quirúrgico, esto se lo ha relacionado sobre todo con la posición de litotomía, no siendo el caso de nuestro paciente. A un año del procedimiento el paciente presenta: Micción de un 75% debiendo autocateterizarse con sonda vesical dos veces por día. Tendencia a la constipación realizándose enemas dos a tres veces por semana. Persiste la hipoestesia de perine, La impotencia sexual se solucionó con la utilización de Sildenafil. Monografía de Postgrado Dra. CarolinaAntúnezz 46 BIBLIOGRAFIA 1-Jaime Abel Wikinski. Carlos Salgueiro. Anestesia Subaracnoidea a Bajas Dosis. Curso 5 FEEA FAAAAR Modulo V. Capitulo 15. 2-Hogan Q, Proust R, Kulier A, Taylor ML, Liu S, Mark L, Magnetic resonance imaging of cerebrospinal fluid volume and the influence of body habitus and abdominal pressure. 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