P.A. Consumo Productos Mar

PROYECTO DE ACUERDO
Considerando:
1. Que según la Encuesta Nacional de Salud (ENS) 2009-2010 el 64,5% de la población nacional
tiene exceso de peso, el 39.3% sobrepeso y el 25.1% obesidad. Que en la población infantil
(menores de 8 años y entre 8 y 12 años) las cifras son aún más preocupantes con 76.4% y 61.9%
de exceso de peso, 40.9% y 37.2% de sobrepeso y 35.5% y 24.7% de obesidad.
2. Que a pesar de ser Chile el sexto país en desembarque pesquero, segundo productor y
exportador de harina de pescado y de salmónidos de cultivo, el consumo de pescado según un
informe de la ODEPA de 2009, en los últimos 10 años los chilenos aumentaron en un 26% su
consumo de los distintos tipos de carne: bovina, porcina y de aves, llegando a 81,3 kilos el 2008,
cifra que prácticamente iguala a la de los países desarrollados con 82,9 kilos por persona. El
estudio señala que se consumen anualmente per capita, en promedio, 33.3 kilos de aves, 25
kilos de cerdo, 22.1 kilos de bovina y 900 grs de carne ovina, equina y caprina.
3. Que por su parte un estudio del INTA del año 2006 indica que en Chile se han instalado
hábitos alimentarios “modernos” como: bebidas gaseosas al almuerzo, pizzas, hamburguesas
preparadas perdiendo hábitos de consumo de legumbres, verduras, frutas frescas y pescados
entre otros.
4. Que ante este grave escenario sanitario generado en gran parte por el tipo de alimentación
que existe mayoritariamente en la población nacional parece de toda lógica buscar enfrentar la
situación de sobrepeso y mala nutrición, mediante el incremento del consumo per capita de
alimentos de origen marino.
5. Que según la FAO el consumo de pescado ha experimentado cambios importantes en los
últimos cuatro decenios, estimando que a nivel mundial el aumento ha sido continuo desde una
media de 9,9 kg. en la década de 1960 hasta los 11,5 kg. en la década de 1970; 12,5 kg. en la
década de 1980; 14,4 kg. en la década de 1990, y alcanzando los 16,4 kg. en 2005.
6. Que a inicios de la década del 90 la diferencia entre países desarrollados y países del tercer
mundo era entre 27 kilos y 8,9 kilos promedio. Al comparar los consumos per cápita anuales
nacionales, aparecen grandes deferencias, los islandeses son los mayores consumidores con 100
kilos per capita, los japoneses con 72 kilos, los coreanos del sur con 52 kilos, los congoleses con
35 kilos, los españoles y rusos con 29 kilos, y alemanes y holandeses con 14 kilos.
7. Que la apuesta por transformar a Chile en Potencia Alimentaria resulta a lo menos
contradictoria al considerar el bajo consumo de productos marinos a nivel nacional, pues la
condición de potencia debiera empezar por el consumo interno y no sólo medirse en las
exportaciones de productos alimenticios.
8. Que Chile sigue estando entre los países de más bajo consumo de pescado en el mundo,
estimándose que no superaría los 7 kilogramos por habitante al año en los últimos 30 años,
frente a los 83 kg. que cada chileno consume al año en otras carnes (bovinos, cerdos, aves).
9. Que el perfil de obesidad en Chile sigue un patrón de país “desarrollado”. Según cifras de la
Junta de Auxilio Escolar y Becas, el 18% de los escolares chilenos son obesos, lo que deja a este
país entre las naciones con más niños obesos en el mundo. Estados Unidos, en cambio, cuya
población tiene severos problemas de peso, tiene menos niños obesos: sólo el 16%.
Oficina Congreso, Fono 32-2504582, Fax 32-2504631, email: [email protected]
Oficina Regional, Heras 305, Penco, Fono: 41-2450310, Fax: 41-2450334
10. Que estos datos son parte de una alarma sanitaria generada a partir de que la Organización
Mundial de la Salud declaró a la obesidad como una epidemia mundial, con más de mil millones
de personas adultas con sobrepeso, de ellas al menos 300 millones clínicamente obesas.
11. Que este problema se potencia cuando se atienden las nefastas consecuencias que el
sobrepeso acarrea a la salud, pues puede reducir la esperanza de vida hasta en 10 años y
representa una carga económica a la sociedad. El 2006 Fonasa reportó gastos por 200 millones
de dólares en prestaciones de tratamientos para diabetes, infartos e hipertensión, estimándose
que entre un 5% y un 7% del gasto de atenciones en salud es derivado de la obesidad.
12. Que es evidente la necesidad de incrementar el consumo de pescado en la población ya que
este alimento constituye la forma más directa para incorporar en nuestra alimentación de
ácidos grasos como el Omega 3, que organismos como la OMS y la FAO recomiendan consumir
en a lo menos 1.2 y 1.5 grs. por día pues protege la salud cardiovascular, disminuye triglicéridos
y colesterol, evita problemas en la coagulación, tiene un efecto anti inflamatorio y es requerido
en la edad adulta y en la tercera edad, cuando existe un mayor riesgo de enfermedades
cardiovasculares y de afecciones neurológicas.
13. Que otra especie hasta hoy no muy considerada en la dieta de los chilenos es la jibia, cuya
carne es rica en proteínas, baja en materia grasa y colesterol, de similar composición a carnes
blancas, que contiene taurina, un aminoácido compuesto que suprime la acumulación de
colesterol, mantiene la presión arterial y previene la diabetes. Aunque no presenta unidad de
pesquería, en los últimos años su desembarque alcanzó las 250 mil toneladas, aunque todavía la
mayor parte va a reducción.
El Senado acuerda:
Solicitar al Sr. Presidente de la República, Sebastián Piñera, pueda instruir especialmente a los
ministros de Salud, Economía y Educación para:
1. Incorporar en sus planes anuales de trabajo campañas y políticos que favorezcan y
promuevan crecientemente el consumo de productos del mar.
2. Que organismos como Senama, Junji, Sernam y el Injuv incluyan políticas directas de
promoción en esta materia.
3. Que la Junaeb incluya de forma permanente y creciente productos del mar -dentro de ellos
también la jibia- en la canasta de productos requeridos y en las raciones alimenticias que se
entrega en los colegios a los estudiantes de menores recursos.
4. Que se incentive y promueva el consumo interno de las capturas pesqueras, especialmente
artesanales, evitando el despilfarro alimentario que significa que parte importante de muchos
de estos recursos terminen convertidos en productos sólo para exportación o para elaborar
harina de pescado para alimentar animales.
5. Establecer una meta país sobre el necesario aumento per cápita de consumo de productos
del mar.
ALEJANDRO NAVARRO BRAIN
SENADOR
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