GCIA. DE PLANIFICACIÓN Y PROYECTOS ESPECIALES Dto. de Control de Gestión Ambiental Impacto de los agroquímicos en la salud de la población y el ambiente MINISTERIO DE SALUD DE LA NACION (MSAL) / SAyDS COMISIÓN NACIONAL DE INVESTIGACIÓN DE AGROQUÍMICOS (CNIA) Auditoría de Gestión Informe aprobado por Resolución AGN 090/16 ACLARACIONES PREVIAS OBSERVACIONES OBJETO DE AUDITORÍA Estudios e investigaciones, acciones de prevención, asistencia y tratamiento en casos de intoxicación o que afecten la salud de la población y el ambiente con productos agroquímicos, realizados por la Comisión Nacional de Investigación de Agroquímicos (CNIA). Los agroquímicos utilizados para controlar las plagas acarrean riesgos para la salud humana y el ambiente; tanto el producto como su envase vacío pueden contaminar suelos, aguas superficiales y subterráneas e intoxicar a seres vivos si no se los controla correctamente. La disponibilidad de los agroquímicos está restringida desde el punto de vista legal. Se debe controlar desde el registro de los productos antes de que salgan al mercado hasta la obligatoriedad de, al comprarlos, presentar receta firmada por un ingeniero agrónomo matriculado. Las estadísticas del mercado argentino de productos fitosanitarios muestran una tendencia creciente en el uso: de 151,3 millones de kilogramos o litros de productos comercializados en 2002, a 225 millones de kilogramos o litros en 2008. -La CNIA no ha convocado al Ministerio de Educación, desconociendo así la importancia de la educación y difusión en la prevención de impactos en la salud y el ambiente. PERÍODO AUDITADO 2009-2014. NORMATIVA ANALIZADA/ MARCO NORMATIVO APLICABLE Constitución Nacional Arts. 41, 42, 43, 75, inc. 22; 121, 124. Leyes 15.460 - 19.587 - 20.418 - 24.051 24.557 - 25.675 - 25.831 - 26.011. Decretos 21/09- 825/10. Resoluciones SAGPyA 350/99- 1230/04 SENASA 500/03- 511/11 SENASA 511/11 Informes de auditoría relacionados Informe SENASA, aprobado por Res. AGN 247/12. Programa Nacional de Prevención y Control de las Intoxicaciones por Plaguicidas (PRECOTOX) Creado por el Ministerio de Salud (MSAL) para implementar el Programa de control del impacto del creciente uso de plaguicidas en las actividades agrícolas en la salud pública (Res. MSAL 279/19). EXSAYDS - UNIDA Objetivo general: Promover y coordinar estudios ambientales de investigación aplicada y estudios y análisis de políticas ambientales, para construir y fortalecer la conciencia ambiental en la comunidad en general. Impacto de los plaguicidas. Fuentes de datos -Sistema Nacional de Vigilancia de Salud (SNVS). -Estadísticas de los Centros de Información, Asesoramiento y Asistencia Toxicológica. -Investigaciones epidemiológicas aisladas del mayor rigor científico. -Información de Salud del Trabajador: registro de la siniestralidad laboral, que incluye la exposición a plaguicidas, de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo. -No hay evidencia de que se hayan realizado sesiones federales con COFESA, COFEMA, CFA y CFF (incumple Reglamento Interno de la CNIA, art. 4°). En las visitas de campo se ha observado un bajo o nulo nivel de articulación entre la CNIA y los organismos provinciales. -No se tuvo evidencia de Convenios entre la CNIA y las distintas jurisdicciones para implementar y replicar los programas educativos; ni de actividades de participación ciudadana en la gestión de la CNIA. Se puso en marcha un dispositivo de tramitación de denuncias, pero no se convocó a las reuniones a grupos interesados. No se realizaron sesiones informativas (incumple Reglamento Interno de la CNIA, art. 4°). -No hay evidencia documental de previsiones presupuestarias específicas para la actividad de la CNIA. Tampoco se han afectado recursos humanos y materiales específicos para su labor. Las actividades del Programa Nacional de Prevención y Control de Intoxicaciones por Plaguicidas (PRECOTOX) se financian con el presupuesto de la Dirección Nacional de Determinantes para la Salud; las actividades de Estudios Multicéntricos, con recursos de Salud Investiga; las actividades del GT4, con recursos de la SAyDS. En todos los casos, los recursos son insuficientes. -Escasas actividades de las líneas de trabajo en los últimos cinco años, salvo el GT4, que se ha reunido en forma permanente. Por ello, son escasos los avances en las líneas de trabajo trazadas en el plan de trabajo de 2009. -La CNIA publicó el mapa del uso del glifosato en Argentina en base a las áreas cultivada de trigo, maíz, soja y girasol, pero no se lo actualiza desde 2009. No se ha obtenido el estudio realizado por el Ministerio de Agricultura sobre la cantidad de envases generados por el uso de glifosato. -No se ha avanzado en una propuesta de normativa nacional de regulación de los agroquímicos. Por un lado, para el informe preliminar del GT2 no era prioritario dictar AUTORIDADES AGN Presidente Dr. Ricardo Echegaray Grupos de Trabajo (GT) La CNIA estableció líneas de trabajo prioritarias y se crearon seis GT en temas específicos: Auditores Generales Cdora. Vilma N. Castillo Dr. Francisco J. Fernández Dr. Juan I. Forlón Dr. Gabriel Mihura Estrada Dr. Alejandro M. Nieva Lic. Jesús Rodríguez GT1: Investigación y desarrollo del conocimiento GT2: Legislación y normativa GT3: Comunicación y prensa GT4: Gestión integral de agroquímicos GT5: Acciones en terreno GT6: Capacitación para la prevención AGN Av. Rivadavia 1745 (C1033AAH) CABA – Argentina Tel.: (54 11) 4124-3700 Fax: (54 11) 4124-3775 [email protected] www.agn.gov.ar Siglario CFA: Consejo Federal Agropecuario. CFF: Comisión Federal Fitosanitaria. CIAATS: Centro de Información, Asesoramiento y Asistencia toxicológica CNIA: Comisión Nacional de investigación sobre Agroquímicos. COFESA: Consejo Federal de Salud. COFEMA: Consejo Federal de Medio Ambiente. una norma nacional pues en casi todas las provincias (salvo en dos) hay una norma de agroquímicos; por otro lado, el Ministerio de Salud en una publicación de 2014 recomienda que se dicte una norma nacional. -La CNIA no realizó una campaña de concientización y sensibilización de la población sobre el uso de agroquímicos, la prevención de riesgos y las buenas prácticas de uso. -No se ha logrado consensuar un proyecto de normativa para una gestión integral de los residuos de agroquímicos que incluya el transporte, el depósito y la disposición final, con énfasis en el tratamiento de envases de agroquímicos. Hay un programa de trazabilidad de agroquímicos, pero no de los envases de agroquímicos una vez que están vacíos. -Hay proyectos de investigación multicéntricos, pero no estudios de subregistro de intoxicaciones agudas por agroquímicos ni de contaminación por agroquímicos de aguas superficiales o subterráneas. -No se tuvo evidencia de las capacitaciones a docentes de escuelas rurales ni de campañas públicas ni de prevención. Tampoco se avanzó en la incorporación del Ministerio de Educación en las actividades del GT 6. Respecto del Programa Nacional de Prevención y Control de las Intoxicaciones por Plaguicidas (PRECOTOX) -El objetivo de fortalecimiento institucional no ha avanzado: si bien el PRECOTOX realizó acciones de fortalecimiento y asistencia a algunos Centros de Información, Asesoramiento y Asistencia Toxicológica (CIAAT), no ha fortalecido y mejorado la red en su conjunto. -La accesibilidad informática no es homogénea: en muchos CIAAT, un software obsoleto impide volcar datos en la base sistematizada del Ministerio de Salud. -No se han creado las Unidades y Sitios Centinela, por carencia de profesionales formados en medicina toxicológica. Las jurisdicciones que cuentan con toxicólogos son las que mejor reportan los datos al PRECOTOX. -Falta una norma de nivel nacional que establezca los valores en que los principios activos de agroquímicos remanentes en los envases ya vacíos no dañan la salud humana, animal ni del medio ambiente. CONCLUSIONES El aumento exponencial del uso de los agroquímicos en nuestro país y la información sobre los riesgos asociados ubican el problema del impacto en la salud y el ambiente como una prioridad de la política sanitaria y ambiental. Con esta premisa fue creada la Comisión Nacional de Investigaciones en Agroquímicos (CNIA) en 2009. Muy activa entre 2009 y 2010, la CNIA presenta escasos resultados en los últimos cinco años; no se ha formalizado su organización institucional y no cuenta con afectación presupuestaria específica. Si bien los organismos nacionales que la conforman tienen programas específicos ligados al tema, hay acciones delineadas en el propio programa de trabajo de la CNIA que requieren su coordinación y fueron interrumpidas1. La CNIA es una buena herramienta para implementar estrategias transversales que afronten la problemática de los agroquímicos articulando acciones entre los organismos nacionales involucrados y las jurisdicciones locales y municipales y las organizaciones sociales. Pero se requiere fortalecerla, jerarquizarla y darle un enfoque participativo, para que finalmente puedan concretarse las muchas tareas pendientes: - Fortalecer la fiscalización del uso de agroquímicos en las jurisdicciones locales. - Elaborar un proyecto de ley de buenas prácticas que regule en forma integral el uso de agroquímicos. - Fortalecer el control de las ART y el sistema de control de higiene y seguridad laboral. - Avanzar en la implementación de proyectos piloto de manejo integral de envases y en un proyecto de ley que resuelva el problema. - Mejorar la vigilancia epidemiológica y prevención de intoxicaciones: el sistema presenta debilidades, subregistro y vacíos de información. -Fortalecer los Centros de Atención y Tratamiento de Intoxicaciones para cubrir todo el país y atender también la intoxicación crónica. -Realizar más investigaciones e intervincularlas. -Jerarquizar y fortalecer la educación ambiental y la prevención. Más allá de su diagnóstico en normativa, fiscalización, vigilancia epidemiológica y uso de agroquímicos, los Grupos de Trabajo de la CNIA obtuvieron bajos resultados en propuestas de normativa: no se lograron consensos ni en una ley de agroquímicos que regule el uso ni en una ley de envases y de planes nacionales de gestión. 1 Situación expuesta en el informe SENASA aprobado por Res. AGN 247/12. La CNIA tampoco avanzó claramente en el área de difusión y concientización; no implementó una estrategia comunicacional y educativa adecuada para los distintos sectores afectados por la problemática. Ni el Ministerio de Salud ni la SAyDS han dado relevancia, en el período auditado, al impacto de los agroquímicos en la salud y el ambiente. La información existente no evidencia la magnitud real de ese impacto. Al no haber información suficiente, se dificulta el abordaje de políticas sanitarias nacionales acordes a la gravedad del problema pues en los sistemas de vigilancia hay importantes subregistros, subdiagnósticos y subnotificaciones. También ha sido relegada la política de prevención, investigación, asistencia, tratamiento y mitigación del problema, que requiere mejorar el sistema de vigilancia epidemiológica, realizar un mapa de riesgos, reforzar los centros de asistencia toxicológica, diseñar programas de atención y de investigación; reforzar el sistema de prevención de riesgos del trabajo aumentando el control de la SRT y el sistema de prevención de accidentes del hogar; evaluar los daños en los recursos naturales y avanzar en una norma de manejo de envases que permita mitigar sus efectos e impulsar la difusión y concientización. Las autoridades nacionales deben promover consultas o audiencias públicas previas a la autorización de actividades de efectos eventualmente negativos y significativos sobre el ambiente (Ley 25.675, General del Ambiente) y tener en cuenta los estudios epidemiológicos comunitarios y los datos que producen los investigadores y científicos de universidades con respecto al impacto que generan. Se recomienda a la CNIA la lectura de “Los plaguicidas en la República Argentina”, documento publicado en 2014 por el MSAL.