CARLOS MARX Introducción: Las ideas de Karl Marx (1818-1883) contrastan vivamente con las de Comte y Durkheim pero, como ellos, intentó explicar los cambios sociales que estaban ocurriendo durante la Revolución industrial. Cuando era joven sus actividades políticas le ocasionaron problemas con las autoridades alemanas y, después de una breve estancia en Francia, se exilió definitivamente en Gran Bretaña. Los trabajos de Marx cubren diversas áreas e incluso sus críticos más severos consideran que su obra tiene una enorme relevancia para el desarrollo de la sociología. Gran parte de su obra se centra en cuestiones económicas pero, considerando que siempre trató de conectar los problemas económicos con las instituciones sociales, su obra está llena de interesantes observaciones sociológicas. La perspectiva teórica de Marx se basa en lo que él llamó la concepción materialista de la historia. Según este enfoque (que se opone al de Durkheim las principales causas del cambio social no son las ideas o los valores de los seres humanos. Por el contrario, el cambio social está primordialmente inducido por influencias económicas. El conflicto entre las clases -ricos frente a pobres- constituye el motor del desarrollo histórico. En palabras de Marx: "Toda la historia humana hasta el presente es la historia de la luchas de clases". Aunque escribió sobre distintos períodos históricos, Marx se centró en el cambio en la época moderna. Para él, las transformaciones mas importantes de este período están vinculadas al desarrollo del capitalismo, sistema de producción que contrasta radicalmente con los anteriores órdenes económicos de la historia, ya que conlleva la producción de bienes y servicios para venderlos a una amplia gama de consumidores. Los que poseen el capital fábricas, maquinaria y grandes sumas de dinero- conforman una clase dominante. El resto de la población constituye una clase de trabajadores asalariados, o clase trabajadora, que no posee los medios para su propia supervivencia y que, por tanto, debe buscar los empleos que proporcionan los que tienen el capital. En consecuencia, el capitalismo es un sistema de clases en el que el conflicto entre éstas es constante. Para Marx, el capitalismo será reemplazado en el futuro por una sociedad sin clases, sin grandes divisiones entre ricos y pobres. Con esto no quería decir que fueran a desaparecer todas las desigualdades entre los individuos sino que la sociedad no estará dividida entre una pequeña clase que monopoliza el poder económico y político y una gran masa de personas que apenas se benefician de la riqueza que genera su trabajo. El sistema económico pasará a ser de propiedad comunal y se establecerá una sociedad más igualitaria que la actual. La obra de Marx ha tenido una influencia trascendental en el mundo del siglo XX. Hasta la reciente caída del comunismo soviético, más de un tercio de la población de la tierra vivía en sociedades cuyos gobiernos se consideraban herederos de sus ideas. Además, muchos sociólogos se han visto influidos por su concepción de las clases y de las divisiones que ocasionan. 1 Karl Marx nació en Treveris. Alemania, en 1818. Vivió gran parte de su vida en Londres, la capital del imperio británico y el centro del capitalismo, donde se originó y tomó gran impulso la Revolución Industrial. Asistió a las transformaciones que las nuevas tecnologías industriales produjeron en las sociedades y en la humanidad: doce horas de trabajos, sueldos bajos y viviendas insalubres. En su país sufrió persecuciones a raíz de sus posturas políticas. Por este motivo emigró a París, refugio de los exiliados europeos. 1. Las condiciones económicas en la época de Marx En 1789 la revolución francesa determinó el ascenso de la burguesía liberal al poder, culminando un proceso de lucha entre esta y el sistema feudal. Unos años antes se había iniciado la revolución industrial en Inglaterra, cuyas consecuencias transformaron los modos de producción, facilitando el avance de la burguesía, que había acumulado importantes riquezas durante la época mercantilista anterior. En Francia se produce una transformación política impulsada por la burguesía. Es así que la burguesía propietaria de las industrias inicio una rápida expansión creando nuevas fabricas que ocuparon a la población campesina que había abandonado los campos. Esta situación dio a lugar a la formación de un proletariado urbano, que fue creciendo a medida que se incrementaba la producción y cuyas condiciones de trabajo estaban sujetas a la ley de la oferta y demanda, a la vez que no había leyes sociales y sindicatos organizados suficientemente para proteger los derechos obreros. El resultado de esta situación eran míseros salarios, que en muchos casos no cubrían las necesidades de la simple subsistencia. Mientras mas adelantos técnicos se introducían en la producción menos obreros se necesitaba y mas miseria había. Esta situación llevo a Marx a determinar la existencia de 2 clases básicas y contrapuestas en la sociedad; la burguesía propietaria de los medios de producción y el proletariado que solo poseía su fuerza como herramienta de trabajo. Marx llego a 3 conclusiones fundamentales: La relación entre el trabajo y el valor de cambio de los bienes que se producen y consumen en la sociedad cosa que lo lleva a formular su teoría del valor-trabajo. El concepto de plusvalía que surgen de la relación del salario que se paga al obrero y el valor trabajo por este efectuado La lucha de clases que se produce en el seno de una sociedad determinada por las relaciones de producción. 2. Sus conceptos Básicos Método dialéctico: La base de la dialéctica marxista es la helegiana. El método dialéctico de Hegel consiste en que cada manifestación del Espíritu engendra su propia contradicción, que implica una negación de lo afirmado. La manifestación del espíritu es la tesis, esta tesis tiene una contradicción y entonces se produce una antitesis, ahora bien, tanto la tesis como la antitesis se perfeccionan en una síntesis en la que queda absorbido lo afirmado (t) y lo negado (a) convirtiéndose en una nueva afirmación o tesis que inicia un nuevo procesos anterior, hasta llegar a la idea absoluta que es el máximo en perfección. En su filosofía de la historia Hegel parte de los pueblos orientales que se desenvuelven dialécticamente hasta llegar al Estado Ideal. 2 Carlos Marx criticó el sentido ideal de la dialéctica de Hegel, en la que dice que está totalmente desconectado de la realidad. Marx parte de una concepción materialista. Son las relaciones de producción y de cambio, es decir, las relaciones económicas, las que determinan dialécticamente el curso de la historia, o sea cambio el desarrollo de la idea o espíritu por el del mundo materialista y económico. Marx termina diciendo que no es la conciencia de los seres humanos lo que determina a su ser, sino el ser social lo que determina su conciencia. El método dialéctico lo llevo a sostener que el capitalismo industrial (afirmación o tesis) engendra al proletariado (negación) y ambas contradicciones son superadas en la sociedad sin clases. Además, Marx definió al hombre en relación con su dimensión productiva y económica y encontró en la creación del estado, la propiedad y el capital el origen de toda la enajenación humana. Materialismo histórico: El marxismo sostiene que la historia es consecuencia del desarrollo dialéctico de la infraestructura económico-social, causa de los hechos y motor de la evolución de la humanidad. Las relaciones económicas dan origen a las clases sociales y a la infraestructura que determina la formación de una superestructura, integrada por la ética, la cultura, la religión y el ordenamiento jurídico. Esto es así porque según Marx, la ideología de una época es la de la clase dominante. De esta manera, la burguesía al apoderarse del poder, desde su condición de propietaria de los medios de producción (infraestructura) crea un sentido de la ética, una cultura y un ordenamiento jurídico (superestructura) que forman una conciencia favorable al sistema. En el curso de su desarrollo, las fuerzas productivas de la sociedad entran en contradicción con las relaciones de producción existentes, y esas relaciones se convierten en trabas de las relaciones productivas. Se abre entonces una era de revolución social, que afecta a la estructura ideológica, de forma que los hombres adquieren conciencia del conflicto. Históricamente, las relaciones capitalistas de producción serían la última forma antagónica del proceso histórico. El modo de producción del capitalismo industrial conducirá a la superación de la propiedad privada, no sólo por la rebelión de los oprimidos sino por la propia evolución del capitalismo, en el que la progresiva acumulación del capital determinaría la necesidad de nuevas relaciones de producción basadas en la propiedad colectiva de los medios de producción. Superada la propiedad privada, el hombre vencería la enajenación económica y a continuación, todas las demás. La sociedad sin clases alcanzada mediante la praxis (práctica) revolucionaria, sería la síntesis del proceso histórico. Propiedad privada: El marxismo habla de abolir la propiedad de los medios de producción en cuanto ello esta realizada por el trabajo social, y no puede pertenecer a nadie privadamente, ya que tal situación configura un poder en manos de un sector que determina la explotación de otro. Para el marxismo el capital no es una fuerza personal, sino una fuerza social, que se obtiene por medio del trabajo colectivo. Además sostiene que la propiedad de los medios de producción debe ser abolida porque institucionaliza la explotación del hombre por el hombre. 3 Valor-Trabajo Para el marxismo, el valor está determinado por el trabajo que los bienes contienen, y este se mide por el tiempo necesario para producirlo. Según él, sólo el trabajo es lo que posibilita que un bien tenga valor. Con esto quiere decir que hay bienes con un gran valor y cuya obtención ha costado poco trabajo. En conclusión a mayor tiempo de trabajo corresponde mayor valor e inversamente a menor tiempo menos valor. Por eso, una máquina que tiene una gran productividad, proporcionará artículos más baratos, mientras que si el mismo producto es hecho a mano, costará más caro. Plusvalía Al alcanzar la producción de mercancías un determinado grado de desarrollo, el dinero se convierte en capital. La fórmula de la circulación de mercancías era: M (mercancía)-D (dinero) – M (mercancía), es decir, venta de una mercancía para comprar otra. La fórmula general del capital es, por el contrario, D – M – D, es decir, compra para la venta (con ganancia). El crecimiento del valor primitivo del dinero que se lanza a la circulación es lo que Marx llama plusvalía. Ese "acrecentamiento" del dinero lanzado a la circulación capitalista es un hecho conocido de todo el mundo y es lo que convierte el dinero en capital, en una relación social de producción determinada. La plusvalía no puede provenir de la circulación de mercancías, pues, ésta sólo conoce el intercambio de equivalentes; tampoco puede provenir de un aumento de los precios, pues las pérdidas y las recíprocas de vendedores y compradores se equilibrarían; se trata de un fenómeno social medio, generalizado, y no de un fenómeno individual. Para obtener la plusvalía, "el poseedor de dinero necesitan encontrar en el mercado una mercancía cuyo valor de uso posea la singular propiedad de ser fuente de valor, una mercancía cuyo proceso de consumo sea, a la par, proceso de creación de valor. Y esta mercancía existe: es la fuerza del trabajo del hombre. Su uso es el trabajo, y el trabajo crea el valor. El poseedor de dinero compra la fuerza de trabajo por su valor, como el de cualquier otra mercancía, por el tiempo de trabajo necesario para su producción (es decir, por el costo del mantenimiento del obrero y su familia). Una vez comprado la fuerza de trabajo, el poseedor de dinero tiene el derecho de consumirla, es decir, de obligarla a trabajarla durante un día entero, supongamos que durante doce horas. Pero el obrero crea en seis horas (tiempo de trabajo "necesario") un producto que basta para su mantenimiento, durante las seis horas restante (tiempo de trabajo "suplementario") engendra un "plusproducto" no retribuido por el capitalista, que es la plusvalía. Desde el punto de vista del proceso de producción, en el capital hay que distinguir dos partes: el capital constante, invertido en medios de producción (máquinas, instrumentos de trabajo, materias primas, etc.) - y cuyo valor pasa sin cambios (de una vez o en partes) al producto elaborado -, y el capital variable, que es el que se invierte en pagar la fuerza de trabajo. El valor de este capital no permanece inalterable, sino que aumenta en el proceso del trabajo al crear la plusvalía. Para expresar el grado de explotación de la fuerza de trabajo por el capital, tenemos que comparar la plusvalía no con el capital total, sino con el capital variable. El concepto Marxista del Estado: Marx dice, que las ideas de una época son las de la clase dominante. En consecuencia el Estado burgués tiene la tarea de asegurar, no solo, las relaciones de producción y la propiedad privada de sus instrumentos, sino la de desarrollar la cultura y educación burguesa. ¿Y que es el gobierno? 4 Para Marx "...El gobierno del Estado moderno no es más que una junta que administra los negocios comunes de toda la burguesía..." "...El Estado no tendrá razón de existir cuando se hayan suprimido las clases sociales..." La lucha de clases Todo el mundo sabe que en cualquier sociedad las aspiraciones de los otros, que la vida social está llena de contradicciones, que la historia nos muestra la lucha entre pueblos y sociedades y en su propio seno; sabe también que se produce una sucesión de períodos de revolución y reacción, de paz, y de guerras, de estancamiento y de rápido progreso o decadencia. El marxismo da el hilo conductor que permite descubrir la lógica en este aparente laberinto y caos: la teoría de las luchas de clases. Sólo el estudio del conjunto de aspiraciones de todos los miembros de una sociedad dada, o de un grupo de sociedades, permite fijar con precisión científica el resultado de estas aspiraciones. El origen de esas aspiraciones contradictorias son siempre las diferencias de situación y condiciones de vida de las clases en que se divide toda sociedad. La historia de todas las sociedades que han existido hasta nuestros días - escribe Marx en el Manifiesto Comunista (exceptuando la historia de la comunidad primitiva)- es la historia de las luchas de clases. Hombres libres y esclavos, patricios y plebeyos, señores y siervos, maestros y oficiales, en una palabra: opresores y oprimidos se enfrentaron siempre, mantuvieron una lucha constante, velada unas veces, y otras franca y abierta; lucha que terminó siempre con la transformación revolucionaria de toda la sociedad o del hundimiento de las clases beligerantes... La moderna sociedad burguesa, que ha salido de entre las ruinas de la sociedad feudal, no ha abolido las contradicciones de clases. Unicamente ha sustituido las viejas clases, las viejas condiciones de opresión, las viejas formas de lucha por otras nuevas. Nuestra época, la época de la burguesía, se distingue, sin embargo, por haber simplificado las contradicciones de clase. Toda la sociedad va dividiéndose, cada vez más, en dos grandes campos enemigos, en dos grandes clases, que se enfrentan directamente: la burguesía y el proletariado. Desde la Gran Revolución Francesa, la historia de Europa pone de manifiesto en distintos países con particular evidencia la verdadera causa de los acontecimientos, la lucha de clases. Ya la época de la restauración dio a conocer en Francia algunos historiadores (Thierry, Guizot, Mignet, Thiers) que, al sintetizar los acontecimientos, no pudieron por menos de ver en la lucha de clases la clave para la compresión de toda la historia francesa. Y la época contemporánea, la época que señala el triunfo completo de la burguesía y de las instituciones representativas, del sufragio amplio (cuando no es universal), de la prensa diaria barata y que llega a las masas, etc., la época de las potentes asociaciones obreras y patronales cada vez más vastas, etc., muestra de un modo todavía más patente (aunque a veces en forma unilateral, "pacífica", "constitucional") que la lucha de clases es el motor de los acontecimientos. El siguiente pasaje del Manifiesto Comunista nos muestra lo que Marx exigía de la sociología para el análisis objetivo de la situación de cada clase en la sociedad moderna, en relación con el análisis de las condiciones de desarrollo de cada clase: De todas las clases que hoy se enfrentan con la burguesía, solo el proletariado es una clase verdaderamente revolucionaria. Las demás clases van degenerando y desaparecen con el desarrollo de la gran industria; el proletariado, en cambio, es su producto más peculiar. Las capas medias – el pequeño industrial, el pequeño comerciante, el artesano, el campesino -, todas ellas luchan contra la burguesía para salvar de la ruina su existencia como tales capas medias. No son revolucionarias, sino conservadoras. Más todavía, son reaccionarias, ya que pretenden volver atrás la rueda de la historia. 5 Son revolucionarias únicamente cuando tienen ante sí la perspectiva de su tránsito inminente al proletariado, defendiendo así no sus intereses presentes, sino sus intereses futuros, cuando abandonan sus propios puntos de vista para adoptar los del proletariado. En bastantes obras históricas, Marx nos ofrece ejemplos profundos y brillantes de historiografía materialista, de análisis de la situación de cada clase concreta y a veces de los diversos grupos o capas que se manifiestan dentro de ella, mostrando hasta la evidencia por qué y cómo "toda lucha de clases es una lucha política". El pasaje que acabamos de citar indica lo intrincada que es la red de relaciones sociales y grados transitorios de una clase a otra, del pasado al provenir, que Marx analiza para extraer la resultante de la evolución histórica. El proletariado como clase revolucionaria El capitalismo convierte en proletariado a más de la mitad de los individuos de un país, por eso esta clase social al no querer perecer o morir está obligada a hacer una revolución: toma en sus manos el poder (dictadura del proletariado), y convierte los medios de producción en propiedad del Estado. Así acaba con todas las diferencias entre clases el, y de esta forma se llegará al verdadero comunismo. 4. Las obras cumbres de Carlos Marx El Manifiesto Comunista: Marx se basa en el trabajo preparado por Engels y representaba la primera sistematización de la doctrina del socialismo moderno. Las proposiciones centrales del Manifiesto, constituyen la concepción del materialismo histórico. Marx concluyó en el Manifiesto que la clase capitalista sería derrocada y suprimida por una revolución mundial de la clase obrera que culminaría con el establecimiento de una sociedad sin clases. Esta obra ejerció una gran influencia en la literatura comunista posterior y en el pensamiento revolucionario en general. El capital: Realizada en 1867, fue un análisis histórico y detallado de la economía del sistema capitalista, en que desarrollo la teoría de la plusvalía. Crítica de la economía política: Basado en el concepto del Materialismo histórico. 6 MARX: ACTIVIDAD Nº1 Lea el fragmento extraído de la Introducción realizada por Frederik Engels en 1891 a la obra de Marx Trabajo Asalariado y Capital y luego responda a las preguntas que encontrará a continuación siguiendo la guía. Ahora bien, ¿qué ocurre, después que el obrero vende al capitalista su fuerza de trabajo; es decir, después que la pone a su disposición, a cambio del salario convenido, por jornal o a destajo? El capitalista lleva al obrero a su taller o a su fábrica, donde se encuentran ya preparados todos los elementos necesarios para el trabajo: materias primas y materiales auxiliares (carbón, colorantes, etc.), herramientas y maquinaria. Aquí el obrero comienza a trabajar. Supongamos que su salario es de tres marcos al día. Volvamos a suponer que, en doce horas, el obrero, con su trabajo, añade a las materias primas consumidas un nuevo valor de seis marcos, valor que el capitalista realiza al vender la mercancía terminada. De estos seis marcos, paga al obrero los tres que le corresponden y guarda los tres restantes. Ahora bien, si el obrero, en doce horas, crea un valor de seis marcos, en seis horas creará un valor de tres. Es decir, que con seis horas que trabaje resarcirá al capitalista el equivalente de los tres marcos que éste le entrega como salario. Al cabo de seis horas de trabajo, ambos están en paz y ninguno adeuda un céntimo al otro. -¡alto ahí!- grita ahora el capitalista -. Yo he alquilado al obrero por un día entero, por doce horas. Seis horas no son más que media jornada. De modo que ¡a seguir trabajando, hasta cubrir las otras seis horas y solo entonces estaremos en paz! Y, en efecto, el obrero no tiene más remedio que someterse al contrato que “voluntariamente” firmó, y en el que se obliga a trabajar doce horas enteras por un producto de trabajo que sólo cuesta seis horas. (…) Tal es el régimen económico sobre el que descansa toda la sociedad actual: la clase obrera es la que produce todos los valores, pues el valor no es más que un término para expresar el trabajo, el término con que en nuestra sociedad capitalista se designa la cantidad de trabajo socialmente necesario encerrado en una determinada mercancía. Pero estos valores producidos por los obreros no les pertenecen a ellos. Pertenecen a los propietarios de las materias primas, de las máquinas y herramientas, por lo tanto, de toda la cantidad de productos creados por ella, la clase obrera solo recibe una parte… La división de la sociedad en una reducida clase fabulosamente rica y una enorme clase de asalariados que no poseen nada, hace que esta sociedad se asfixie en su propia abundancia, mientras la gran mayoría de sus individuos apenas están garantizados, o no lo están en absoluto, contra la más extrema penuria. Cada día que pasa, este estado de cosas va haciéndose más absurdo y más innecesario. Debe ser eliminado y puede ser eliminado. (…) Que los obreros están cada vez más resueltos a conquistar, luchando, un nuevo orden social, lo pondrán en evidencia en ambos lados del océano el día de mañana, 1 de mayo, y el domingo, 3 de mayo* ” * Las Trade-Unions (sindicatos) inglesas celebraban la Jornada Internacional del Trabajo el primer domingo después del 1 de mayo, que en 1891 correspondió al día 3. © Engels, Frederik, Introducción a la edición de 1891 de Trabajo Asalariado y Capital de Karl Marx. En: Marx, K. y Engels, F.: Obras escogidas, Tomo 4, Ed. Ciencias del Hombre, Buenos Aires. a. ¿Cómo se realiza la extracción de plusvalía en el sistema capitalista? Ayúdese con el ejemplo que presenta Engels. b. ¿Qué división genera en la sociedad el sistema económico capitalista? ¿Cómo es caracterizado por Engels en este texto? c. ¿Cuál es el modo en que se superaría este sistema económico desde la perspectiva marxista?, ¿se trata, desde esta perspectiva, de mejorar el sistema capitalista o de reemplazarlo por otro? Justifique su afirmación con citas extraídas del texto. d. Explique con sus palabras el título de este apartado: “clases sociales: polos opuestos de una relación en conflicto”. Nuevamente, puede ayudarse recurriendo a ejemplos del texto. 7 MARX: ACTIVIDAD Nº2 Ver fragmentos de los filmes: ” Tiempos modernos” Analizar las condiciones enajenante de la sociedad industrial y sus formas características de producción Piensen cinco manifestaciones de condiciones enajenantes en cualquier ámbito de la vida cotidiana en las sociedades urbanas contemporáneas. Expliquen sus respuestas Tiempos modernos Duración: 87 minutos Estados Unidos, 1936. Director: Charles Chaplin Esta película, dirigida y protagonizada por Charles Chaplin, relata las peripecias de un trabajador que primero enloquece debido al ritmo febril de la línea de montaje de una fábrica en la que trabaja, y luego es encarcelado al ser confundido con un agitador comunista. En medio de estas peripecias, el trabajador conoce a una joven con la que comparte su sueño por una vida mejor.Ésta es una de las películas de Chaplin más críticas de la industrialización y la enajenación que produce la modernidad. El origen del trabajo social: la manufactura “La producción capitalista comienza donde un capitalista individual emplea, simultáneamente, un número relativamente grande de obreros, lanzando al mercado productos en un escala relativamente grande. La producción capitalista tiene, históricamente y lógicamente su punto de partida en la reunión de un número relativamente grande de obreros que trabajan al mismo tiempo, en el mismo sitio, en la fabricación de la misma clase de mercancías y bajo el mando del mismo capitalista. El empleo simultáneo de un número grande de obreros revoluciona también las condiciones en que se realiza y organiza el trabajo, aunque la forma de trabajo no varíe. Por ejemplo, el taller en que trabajan 20 tejedores con sus telares tiene que ser necesariamente más espacioso que el cuarto en que trabaja un tejedor por su cuenta. La manufactura que va desde mediados del siglo XVI al último tercio del siglo XVIII surge de dos modos. Uno consiste en reunir en un solo taller bajo el mando del mismo capitalista a los obreros de diversos oficios independientes por cuyas manos tiene que pasar el producto hasta su terminación. Por ejemplo, un coche es el producto colectivo de los trabajos de toda una serie de artesano independientes: carreros, talabarteros, costureros, vidrieros, pintores. La manufactura de coches reúne en un taller todos estos oficios y los entrelaza. La manufactura también puede nacer por un camino inverso, cuando el mismo capital reúne en el mismo taller a muchos trabajadores que realizan el mismo trabajo o un trabajo, en donde cada trabajador artesano realiza o produce la mercancía en su totalidad, por ejemplo, papel para imprenta. Este artesano sigue haciendo el mismo trabajo que realizaba en su taller. Los orígenes de la manufactura son dobles: por una parte, brota de la combinación de diversos oficios independientes, que se entrelazan en la producción de un mercancía; por otro lado, la manufactura brota de la cooperación de artesanos con iguales o similares oficios, separando las diferentes operaciones de ese producto hasta que se convierte en una función especifica de cada obrero” Karl Marx: El capital, México Fondo de Cultura Económica, 1964 (Adaptación) 8 MARX: ACTIVIDAD Nº3 Práctico La lucha de clases. En sus desarrollos teóricos, Marx observa que la historia de la humanidad es una historia de enfrentamientos entre grupos antagónicos (explotados-explotadores, amos-esclavos, siervos-señores feudales). Denomina a este enfrentamiento lucha de clases. En este sentido, el conflicto social es el motor del cambio que permitirá superar, transitando por diferentes tipos de sociedades, el antagonismos entre explotadores y explotados, hasta llegar a la sociedad que Marx, denomina “comunista”, en la que no existirán las clases sociales, no había explotados ni explotadores. La historia pone de manifiesto una sucesión de tipos diferentes de sociedades, de formas sociales económicas, desde sociedades recolectoras y cazadores hasta sociedades más complejas con tecnología sotisficada. Todas ellas suelen cambiar de modo drástico, radical, revolucionario. Uno de los factores de cambios es la tecnología, los instrumentos, las maquinarias, es decir, las innovaciones tecnológicas. El otro factor básico, y el principal, son las relaciones sociales económicas que se establecen entre las personas, relaciones que no se adaptan a las nuevas condiciones tecnológicas y se convierten en freno para el desarrollo social y económico. Entonces, dice Marx, se inicia un período de crisis y conflictos que pueden determinar cambios revolucionarios. Por ejemplo, el viejo orden feudal entró en crisis a partir de las innovaciones científicas y tecnológicas, con la invención de la máquina a vapor, los nuevos telares, que fueron modificando la fisonomía del feudalismo. Las relaciones serviles, de vasallaje, dejaron poco a poco de ser importantes. Se fueron creando nuevas relaciones comerciales, se desarrollaron los gremios artesanales que, junto con los comerciantes, dieron lugar al surgimiento de una nueva clase social: la burguesía, palabra derivada del término francés que significa “habitante de la ciudad” clase propietaria de los medios de producción. El desarrollo del comercio fue aumentando el poder económico de la burguesía, que poco a poco fue reuniendo el trabajo de los artesanos en establecimientos fabriles, donde junto a los nuevos instrumentos productivos, la maquinaria, se desarrolló la producción industrial, destinada el mercado. Este proceso también creó el obrero, al proletario –que significa persona con prole, es decir, muchos hijos-, quién vende su fuerza de trabajo en el mercado a cambio del salario, que sólo le alcanza para su subsistencia. Su origen está en los siervos de la gleba, cuando en Inglaterra las tierras de cultivo se convirtieron en tierras de pastoreo del ganado, necesario para la producción textil. Como se ha visto en páginas anteriores, estos siervos despojados de su medio de vida emigraron a la ciudad, y se convirtieron en personas liberadas de las relaciones feudales, en obreros industriales, en la mano de obra que la industria necesitaba. Dos revoluciones, la francesa y la industrial, que modificaron las relaciones sociales, dieron origen al surgimiento del trabajo libre, el salario y el mercado, y a dos nuevas clases sociales, la burguesía y la clase obrera, que se encontraban en germen en la sociedad feudal. Reunidos en grupo: Discutan cuáles fueron las condiciones sociales, políticas y económicas que facilitaron en las sociedades europeas el surgimiento de la burguesía del proletariado. Analicen el origen de los términos burguesía y proletariado y cuál fue el sector social que se convirtió en dominante como resultado del proceso de industrialización. 9