SENTENCIA JUZGADO DE FAMILIA DE SEVILLA.pdf

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S E N T E N C I A Nº 184/08
En SEVILLA, a diecisiete de marzo de dos mil ocho.
Vistos por el Ilmo. MAGISTRADO de JUZGADO DE PRIMERA INSTANCIA
NUMERO 7 DE SEVILLA, D. FRANCISCO DE ASIS SERRANO CASTRO, los presentes
autos de Familia. Modificación medidas supuesto contencioso n.º …, instados por el
Procurador D. Francisco, en nombre y representación de D.ª María, con asistencia
letrada, contra D. Fernando, declarado en rebeldía.
ANTECEDENTES DE HECHO:
Primero.- Por el/la Procurador/a D. Francisco en representación de D.ª
María presentó escrito de fecha 04/09/2007 por el que formulaba demanda de
Familia. Modificación medidas supuesto contencioso 964/2007 contra D. Fernando
en base a los hechos y fundamentos de derecho alegados en el escrito de demanda,
y terminaba suplicando se dictara Sentencia conforme a los pedimentos del
indicado escrito.
Segundo.- Turnada a este Juzgado, se admitió a trámite la indicada demanda,
teniéndose por personado y parte al mencionado Procurador, dándose traslado por
veinte días a la parte demandada a fin contestase la demanda bajo apercibimiento
de declararlo en rebeldía. Transcurrido dicho plazo sin que D. Fernando se
personase y contestase la demanda, se declaró en situación legal de rebeldía,
señalándose la vista para el día 28/01/2008, la cuál se celebró con el resultado que
obra en las actuaciones. Posteriormente, el 13/03/2008 tuvo lugar la exploración de
menor, Sergio.
FUNDAMENTOS DE DERECHO:
Primero.- La pretensión
de la demandante se dirige a obtener una
resolución de privación del ejercicio de la patria potestad del padre demandado o
subsidiariamente un pronunciamiento de suspensión con carácter indefinido del
régimen de relación y contacto con su hijo Sergio.
Antes de proceder a valorar la prueba practicada, se ha de destacar que, en
todo caso, esas medidas se han de interpretar como excepcionales ( así lo entiende
una jurisprudencia unánime y consolidada ), pues esa privación de ejercicio o
suspensión de la relación con uno de los progenitores, implica ir en contra de la
premisa, que no obstante admite prueba en contrario, de que en el desarrollo de
todo menor es conveniente y adecuado que mantenga una vinculación saludable ,
afectiva, emocional y material tanto con su madre como con su padre. Solo en caso
de grave desatención, manifiesto incumplimiento de los deberes del cuidado que
comporta el correcto ejercicio de la patria potestad, abandono, negligencia o
maltrato, decaería esa presunción iuris tantum en favor del mayor interés del
menor a ver limitada o definitivamente suspendida una relación que pudiera
resultarle perniciosa y lesiva.
SEGUNDO.- A tenor de esa doctrina jurisprudencial que interpreta
lo
dispuesto en el art. 170 del Código Civil en términos de exclusivo interés de los
menores, y a la vista de la prueba admitida y practicada, en el presente caso no se
puede alcanzar la conclusión de que ni la privación de ejercicio de patria potestad,
ni la suspensión indefinida de contacto y visitas del padre con su hijo, pueda
resultarle beneficioso a éste.
Así por un lado, en el informe que emite el Equipo Psicosocial de fecha 25 de
Octubre de 2007, se aprecia que J presenta sentimientos contradictorios que le
provocan un gran conflicto de lealtad. Se afirma que el niño presenta una gran
fragilidad e inquietud emocional al compartir dos núcleos familiares y dos hermanos
pequeños. Por ello desde ese equipo se recomienda que ambos progenitores deben
colaborar para que el menor pueda mantener unas relaciones paterno y materno
filiales en un clima tranquilo y de seguridad afectiva y donde además también se
recomienda que ambos progenitores acudan a un proceso de mediación familiar con
el fin de ser orientados en la forma de minimizar el impacto emocional y que J no
siga estando sometido a presiones interfamiliares.
En ningún caso se concluye que resulte positivo ni la privación del ejercicio
de la patria potestad ni la suspensión de la relación paternofilial.
Mas por último, resulta sintomático y concluyente, el propio reconocimiento
y audiencia del menor, en la que el niño de forma espontánea ( lo que evidencia
que no se encuentra negativamente mediatizado por su madre ), pese a mostrar
esa ambivalencia apuntada por el Equipo Técnico, pues otorgaba el rol de padre
tanto a su padre biológico, "Fernando", como al actual compañero de su madre, lo
cierto es que no mostraba un franco e insuperable rechazo hacia su "papá
Fernando". El propio menor, contrariando incluso las apreciaciones de la psicóloga
que le ha venido tratando, se mostró afectivo hacia su padre y entorno familiar,
especialmente hacia su hermana de pocos meses, a quién quedó claro que el niño
profesa un gran cariño.
Sergio no mostró indeferencia hacia su padre, a quien solamente reprocha
que en
muchas ocasiones no le presta la debida atención, lo que le produce
aburrimiento. Resultaría pues, conveniente, que el padre mejorara notablemente
sus habilidades parentales, ofreciendo a su hijo un marco y ambiente de vinculación
más apropiado y acorde a las exigencias que le reclama el pequeño.
TERCERO.- En definitiva, no procede, en modo alguno, en interés del menor y
atendiendo a su voluntad, que en el presente asunto se considera coincidente con
ese interés, que se suspenda ni restrinja la relación paternofilial, debiendo el Sr. XX
mantener la actitud de mejora que desde el mes de Enero, consta que ha iniciado
para recuperar a su
hijo, y aun cuando esa actitud se deberá también hacer
extensiva a una mayor implicación en su educación y desarrollo, dado que se ha
informado que el padre nunca se ha interesado por conocer sobre la marcha escolar
y problemas de salud de su hijo.
En interés del menor, por tanto, resulta conveniente no que el niño deje de ver
a su padre sino que con carácter inmediato deje de ser tratado por la psicóloga Dª
Luisa quien ha aconsejado que para "el bienestar psicológico y emocional de J, sería
necesario retirar las visitas y patria potestad del padre".
Afirmación que se
entiende como gratuita, contraria a los deseos expresados, se reitera, libre y
espontáneamente por el niño, quien se limitó a expresar que quería que su "papá
Fernando" le echara más cuenta y le llevara al cine para no aburrirse cuando está
con él. Cuando se le preguntó si consideraba oportuno que desde el Juzgado se le
"pegara un tirón de orejas" para que se aplicara en ser un buen padre cuando
estuviera con él, el propio Sergio (tomándose la frase por su literalidad ) expresó
que el Juzgado se limitara a pedírselo. El niño quiere a su padre y su hermanita. Si
desaparecieran de su vida, efectivamente, ello repercutiría en su estabilidad a corto
plazo, desapareciendo los sentimientos contradictorios que el provocan un conflicto
de lealtad, mas esa sería la solución fácil y cómoda que, además por mera
conveniencia de los adultos, le causaría a la larga un irremediable perjuicio,
privándole de un padre y de todo su entorno familiar para, seguidamente, su
espacio ser ocupado por el otro padre que ahora su madre ha decidido que resulta
más idóneo.
Dado el objeto del proceso, cuestión de orden público, y puesto que se ha
detectado una situación de riesgo que afecta a la integridad afectiva y emocional de
un menor, conforme a lo dispuesto en el art. 158 del Código Civil, se adoptarán en
el fallo, y en consonancia a la anterior fundamentación, las medidas que se estimen
adecuadas para su corrección, medidas que tendrán carácter vinculante y
preceptivo para los progenitores al depender de su consecución, cumplimiento y
efectividad, la felicidad y recuperación psicológica de un niño.
CUARTO.- No apreciándose temeridad ni mala fe en ninguna de las partes
litigantes, no procede efectuar especial pronunciamiento en costas.
Vistos los preceptos citados y demás de general y pertinente aplicación.
FALLO
Que desestimando la demanda de modificación de medidas formulada por Dª.
María contra D. Fernando, debo declarar y declaro no haber lugar privar del
ejercicio de la patria potestad ni a suspender el régimen de relación y visitas del
padre con su hijo Sergio, sin perjuicio de adoptar las siguientes medidas tendentes
a paliar la situación de riesgo y daño emocional detectado en el menor:
1) El menor deberá abandonar con carácter inmediato el tratamiento
psicológico al que se encuentra sometido en el Centro XXX, y en concreto con la
psicóloga Dª Luisa.
2) Ambos progenitores deberán someterse a un proceso de mediación
familiar en el Centro que voluntariamente elijan en un plazo no superior a DIEZ
DÍAS desde la notificación de la presente Sentencia, transcurrido el cuál, sería el
Juzgado el que les impondría el centro de mediación y orientación familiar al que
deberán dirigirse. En uno y otro caso, el Juzgado le remitirá a ese Centro, el
correspondiente protocolo de derivación con indicación de que el objetivo será,
conforme a la recomendación del Equipo Psicosocial, que ambos progenitores
consigan minimizar el impacto emocional y conflicto de lealtad que sufre Sergio,
dejando de estar sometido a presiones interfamiliares.
3) Requerir al padre para que siga en la línea iniciada de mejora en la
demostración de habilidades parentales hacia su
hijo, elevando el grado de
compromiso e implicación en todo lo que atañe a su educación y desarrollo.
4) Convocar a ambos progenitores para que antes de final de año,
comparezcan ante el Juzgado (Jueves 18 de Diciembre de 2008 a las 10.00 horas)
a fin de evaluar la evolución en el proceso de normalización de la relación
paternofilial, y el impacto positivo que las medidas adoptadas hayan podido tener
en el pequeño Jorge.
Todo ello sin imponer las costas del procedimiento a ninguna de las partes
litigantes.
Llévese testimonio de la presente a los autos principales.
Así por esta mi Sentencia lo pronuncio, mando y firmo.
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