Eurobask: Euskadi y la Estrategia Europa 2020

Anuncio
1
Eurobask: Euskadi y la Estrategia Europa 2020
Batek nazioarteko prentsa irakurtzen baldin badu, konfiantzafalta nabarituko du, denean Europar Batasunaren geroaz. Eta, egia
esan, arrazoi asko dauzkagu, kezkaturik egoteko.
Zeren badakigu finantza-erakundeak erortzen direnean, Estatuek
erantzuten dutela, eta zenbait Estatu erortzen direnean, erakunde
komunitarioak erantzuten ari direla, salbazio-fondo parrastada
handiekin.
Baina, nork erantzuten du Europar Batsunarengatik? Eta, are
inportanteagoa,
jarraitu
dezakegu
gure
hiritarren
etorkizuna
bahitzen, gero eta gehiago zorpetuz?
Zeren etengabe entzuten ari garen, milioika eta milioika euro
horiek guztiak, gure zergetatik ateratzen dira, urtero ordaintzen
ditugun zergetatik. Eta, difizitek esan nahi dute ezen, produzitzen
duguna ez ezik, produzituko duguna ere, gastatzen ari direla.
2
Si uno lee la prensa internacional, notará una falta generalizada
de confianza en el futuro de Unión Europea. Y, en realidad, tenemos
muchas razones para estar preocupados.
Porque sabemos que cuando caen las instituciones financieras
responden los Estados, y qué cuando ciertos Estados se caen están
respondiendo las instituciones comunitarias, con una lluvia de
fondos de salvamento.
¿Pero quién responde por la Unión Europea? Y, más importante
aún, ¿podemos seguir empeñando el futuro de nuestros ciudadanos
contrayendo más deuda y más deuda?
Porque todos esos billones de euros de los que oímos hablar
salen de los impuestos que nosotros pagamos todos los años. Y los
déficits quieren decir que no sólo se están gastando lo que
producimos, sino lo que produciremos.
Como dije, creo que la situación no es fácil. Y para Euskadi es
especialmente preocupante. Nuestra prosperidad esta unida
3
directamente a la prosperidad de toda Europa, y por tanto a la
viabilidad del proyecto común. Dependemos de las exportaciones, y
nuestro principal mercado es el resto del continente: Alemania,
Bélgica o Italia.
Hoy nuestras manufacturas cruzan fronteras sin ninguna traba
burocrática, sin aranceles proteccionistas. Y gracias a la estabilidad
cambiaria que nos brinda la moneda común, podemos comerciar
más ágil y confiadamente a escala continental, aunque esto
signifique un compromiso a veces difícil de cumplir, porque nos
obliga a buscar más competitividad.
4
Y eso sin mencionar otras ventajas tan o más importantes.
Cruzamos fronteras sin restricciones, nuestros jóvenes estudian en
Alemania, Italia o Bélgica, sin necesidad de visados, ni trámites
migratorios.
Lo que quiero recordar es que todo esto que vemos fue
considerado una utopía irrealizable hace sólo medio siglo. Fue un
sueño de unos pocos, unos pocos con mucha entereza. Porque en
ese tiempo sí que había razones para mostrarse escéptico.
5
Acabábamos de salir de una guerra fratricida, de escenas de
exterminio xenófobo, de dictaduras totalitarias. Europa estaba
desgarrada. Sin embargo, unos pocos se atrevieron a realizar lo
imposible, y lo lograron.
Si ellos, en esas circunstancias, pudieron, nuestra generación no
tiene excusa para fracasar. Tenemos que espabilar. Porque Europa
es importante para los vascos, como lo es para los gallegos, para los
bávaros o para los lombardos.
Por alguna razón más que por otra, pero todos somos testigos
del cambio. Todos estamos metidos en esto, y más aún quienes
formamos parte de la esfera pública, sin importar la escala de
gobernanza, si es nacional o regional.
Al Parlamento Vasco le interesa mucho el futuro del Unión. Y por
ello hemos participado intensamente en los proyectos de la CALRE,
la Conferencia de Asambleas Legislativas Regionales Europeas. A
través de dicha entidad hemos reclamado el papel que merecen las
6
legislaturas regionales, en el proceso de construcción comunitaria.
Reclamamos una visión de gobernanza que comience desde abajo,
desde el ciudadano, y se integre hacia arriba, a través de las
distintas realidades sociales en las que interactuamos.
Los
parlamentos
regionales,
por
nuestra
proximidad
al
ciudadanos, debemos ser catalizadores indispensables de este
proceso. Y cualquier proyecto de mejora debe tener en cuenta
nuestra diversidad, y ver más allá de los Estados-nación como
actores políticos.
La Estrategia 2020, propuesta por la Comisión Europea, nos
habla de desarrollo inteligente, sostenible e integrador. Y está bien
que así sea. Pero esos son sólo términos, palabras para referirse a
aspiraciones compartida y aceptadas por todos.
Lo difícil será buscar los medios, y para ello debemos dejarnos
de pirotecnias ideológicas o burocráticas.
7
Es importante aportar unas dosis masivas de sentido común, y
espacios de reflexión acerca del cómo lograrlo. Por ello necesitamos
foros como este, y personas como vosotros, dispuestas a entablar
dialogo.
Euskadi, como os dije, debe integrarse activamente en ese
proceso, porque para nosotros Europa no es un empeño utópico, es
una necesidad real.
2020 Estrategia, Europar Batzordeak proposatua, garapen
inteligente, iraunkor eta integratzaileaz mintzatzen zaigu. Eta gauza
ona da hori horrela izatea. Horiek, ordea, termino hutsak dira,
hitzak, guztiok partekatu, eta onartutako helburuak aipatzeko.
Zailena bitartekoak bilatzea izango da, eta horretarako, alde
batera utzi behar ditugu piroteknia ideologiko edo burokratikoak.
Garrantzizkoa da, zentzutasun-dosi handiez hornitzea geure
buruak, eta hausnarketarako eremuak sortzea, hori nola lortu
8
asmatzeko. Horregatik behar ditugu honelako foroak, eta zuen
antzeko pertsonak, elkarrekin hitz egiteko prest.
Euskadik, esan bezala, buru-belarri sartu beharra dauka prozesu
horretan, zeren guretzat Europa ez da lehia utopikoa, egiazko
beharra baizik.
Eskerrik asko.
Descargar