Documento 248266

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GOBIERNO DE CHILE
SUBSECRETARIA DE PESCA
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) N°74
Cierre de
Registro Pesquero Artesanal de los
Recursos huiro, huiro negro,
huiro palo, pelillo y chasca en la
II Región
Agosto 2005
INDICE
I. OBJETIVO
II. ANTECEDENTES GENERALES DE LAS PESQUERIAS BENTONICAS
1
1
1. Régimen de acceso
2. Medidas de administración para la explotación de recursos
1
1
III. ANTECEDENTES GENERALES DE LOS RECURSOS
2
1. Identificación
2. Aspectos biológicos
2.1. Lessonia nigrescens Bory, 1826
2.1.1. Descripción de la morfología externa
2.1.2. Distribución geográfica
2.1.3. Distribución batimétrica
2.2. Lessonia trabeculata Villouta y Santelices, 1986
2.2.1. Descripción de la morfología externa
2.2.2. Distribución geográfica
2.2.3. Distribución batimétrica
2.3. Macrocystis integrifolia Bory, 1826
2.3.1. Descripción de la morfología externa
2.3.2. Distribución geográfica
2.3.3. Distribución batimétrica
2.4. Macrocystis pyrifera (Linnaeus) C. Agardh, 1820
2.4.1. Descripción de la morfología externa
2.4.2. Distribución geográfica
2.4.3. Distribución batimétrica
2.5. Gracilaria spp.
2.5.1. Descripción de la morfología externa
2.5.2. Distribución geográfica
2.5.3. Distribución batimétrica
2.6. Gelidium chilense (Montagne) Santelices y Montalva, 1983
2.6.1. Descripción de la morfología externa
2.6.2. Distribución geográfica
2.6.3. Distribución batimétrica
2.7. Gelidium lingulatum Kützing, 1868
2.7.1. Descripción de la morfología externa
2.7.2. Distribución geográfica
2.7.3. Distribución batimétrica
2.8. Gelidium rex Santelices y Abbot, 1985
2.8.1. Descripción de la morfología externa
2.8.2. Distribución geográfica
2.8.3. Distribución batimétrica
3. Aspectos productivos
3.1. Lessonia nigrescens
3.1.1. Artes de pesca utilizados para extraer el recurso
3.1.2. Desembarque
3.1.3. Flota pesquera asociada
3.1.4. Mano de obra asociada a la extracción y procesamiento
3.1.5. Precio playa
3.1.6. Plantas que procesan el recurso
3.1.7. Producción Plantas
3.1.8. Exportaciones
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3.2. Lessonia trabeculata
3.2.1. Artes de pesca utilizados para extraer el recurso
3.2.2. Desembarque
3.2.3. Flota pesquera asociada
3.2.4. Mano de obra asociada a la extracción y procesamiento
3.2.5. Precio playa
3.2.6. Plantas que procesan el recurso
3.2.7. Producción Plantas
3.2.8. Exportaciones
3.3. Macrocystis spp.
3.3.1. Artes de pesca utilizados para extraer el recurso
3.3.2. Desembarque
3.3.3. Flota pesquera asociada
3.3.4. Mano de obra asociada a la extracción y procesamiento
3.3.5. Precio playa
3.3.6. Plantas que procesan el recurso
3.3.7. Producción Plantas
3.3.8. Exportaciones
3.4. Gracilaria spp.
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3.4.1. Artes de pesca utilizados para extraer el recurso
3.4.2. Desembarque
3.4.3. Flota pesquera asociada
3.4.4. Mano de obra asociada a la extracción y procesamiento
3.4.5. Precio playa
3.4.6. Plantas que procesan el recurso
3.4.7. Producción Plantas
3.4.8. Exportaciones
3.5. Gelidium spp.
3.5.1. Artes de pesca utilizados para extraer el recurso
3.5.2. Desembarque
3.5.3. Flota pesquera asociada
3.5.4. Mano de obra asociada a la extracción y procesamiento
3.5.5. Precio playa
3.5.6. Plantas que procesan el recurso
3.5.7. Producción Plantas
3.5.8. Exportaciones
IV. ANTECEDENTES LEGALES
V. ANÁLISIS DE CIERRE DEL REGISTRO PESQUERO ARTESANAL DEL
RECURSO HUIROS
1. Aspectos ecológicos
2. Pesquería en régimen de libre acceso
3. Aumento de la fuerza laboral operando sobre el recurso y sus efectos
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VI. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
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VII. REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INFORME TÉCNICO (R.PESQ.) Nº74
Cierre de Registro Pesquero Artesanal de los
Recursos huiro, huiro negro, huiro palo, pelillo y chasca
en la II Región
I.
OBJETIVO
El presente documento tiene como objetivo presentar el estado de situación de la
pesquería de los recursos: Huiro negro (Lessonia nigrescens)
Huiro palo (Lessonia trabaculata)
Huiro (Macrocystis spp.)
Pelillo (Gracilaria spp.)
Chasca (Gelidium spp.)
de la II Región y analizar la pertinencia de establecer la suspensión transitoria de
nuevas inscripciones en el Registro Nacional de Pescadores Artesanales en las
categorías correspondientes.
II.
ANTECEDENTES GENERALES PESQUERÍAS BENTONICAS
1. Régimen de acceso
El régimen de acceso a la explotación de los recursos hidrobiológicos para la pesca
artesanal es de libertad de pesca. No obstante, para ejercer actividades extractivas, los
pescadores artesanales y sus embarcaciones deben inscribirse en el Registro Pesquero
Artesanal (RPA) que lleva el Servicio Nacional de Pesca (Artículo 50, inciso primero
de la Ley General de Pesca y Acuicultura).
Sin embargo, y con el fin de cautelar la conservación de los recursos hidrobiológicos,
cuando una o más especies hayan alcanzado el estado de plena explotación, la
Subsecretaría de Pesca, mediante resolución, previo informe técnico debidamente
fundamentado del Consejo Zonal de Pesca que corresponda podrá suspender
transitoriamente por categoría de pescador artesanal y pesquería la inscripción en el
RPA en una o más regiones. De esta manera, no se admitirán nuevas inscripciones de
embarcaciones ni de pescadores para esa categoría y pesquería en la región respectiva.
Mediante igual procedimiento se podrá dejar sin efecto la medida de suspensión
establecida (Artículo 50, inciso segundo de esta misma Ley).
2. Medidas de administración para la explotación de los recursos
Actualmente, en nuestro país no existen medidas de administración del recurso algas.
Su administración y manejo se basan en:
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
1
 la recomendación de criterios de explotación exclusivamente en áreas de
manejo y explotación de recursos bentónicos (AMERB) para las cuales una
o más de las especies que componen el recurso constituye un recurso
objetivo (descritos previamente),
 la aplicación de una normativa de tipo general (Artículo 5 de la Ley
General de Pesca y Acuicultura). Hasta la fecha, y en un intento por
resguardar las praderas de algas pardas de la remoción indiscriminada,
funcionarios del SERNAPESCA sancionan el “barreteo” y corte del alga,
requisando las barretas y procediendo a cursar el parte correspondiente,
recurriendo a lo señalado en el Artículo 5º de la Ley General de Pesca y
Acuicultura que indica: “Prohíbense las actividades pesqueras extractivas
con artes, aparejos y otros implementos de pesca que afecten el fondo
marino en el mar territorial dentro de una franja de una milla marina”. Pese
a que tal medida no ha prosperado en los Juzgados de Policía Local, sí ha
sido un incentivo para promover una mayor conciencia en cuanto al
cuidado del alga entre los/as algueros/as tradicionales, y,
 la inscripción en el Registro Pesquero Artesanal, en la categoría
correspondiente, por parte de los usuarios/as. Sin embargo, la fiscalización
de esta normativa es difícilmente aplicable en sectores aislados o de difícil
acceso, como son los sectores en que tradicionalmente se registra actividad
de los/as algueros/as en la II Región.
III.
ANTECEDENTES GENERALES DE LOS RECURSOS
1. Identificación
En la II Región se explotan comercialmente las siguientes especies de algas:
Nombre científico
Lessonia nigrescens Bory, 1826
Lessonia trabeculata Villouta y Santelices, 1986
Macrocystis integrifolia Bory, 1826
Macrocystis pyrifera (Linnaeus) C. Agardh, 1820
Gracilaria spp.
Gelidium spp.
Nombre vernacular
Chascón o Huiro negro
Huiro palo
Huiro o Huiro Canutillo
Huiro o Huiro Canutillo
Pelillo
Chasca
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
2
2.
Aspectos biológicos
2.1.
Lessonia nigrescens Bory, 1826
2.1.1. Descripción de la morfología externa
Las plantas pueden alcanzar una talla de hasta 4 m de largo, de color verde oliváceo,
verde – parduzco o casi negro. Se adhieren al sustrato por un disco adhesivo globoso,
hemisférico, macizo y fuerte que constituye el hábitat de una gran variedad de
invertebrados (Santelices, 1989).
El disco adhesivo mide hasta 50 cm de diámetro, en plantas adultas. En plantas
juveniles y en estados tempranos del desarrollo de esta alga es posible observar
hapterios individuales, cortos y entrelazados. A medida que la planta crece ellos se
funden y originan un disco masivo. Este disco origina estipes, que son cilíndricos en su
porción basal, gradualmente se comprimen en sentido apical y se dividen varias veces
en forma dicotómica originando segmentos lineares, aplanados, que se van haciendo
laminares. Las frondas, de forma linear o linear-lanceolada, miden hasta 20 cm de
largo, 4 cm de ancho, con márgenes lisos o levemente dentados (Santelices, 1989).
Un corte transversal por la fronda muestra un meristoderma con 2-3 corridas de células
en empalizada y con plastidios que llenan la célula. Le sigue una corteza formada por
10 a 16 capas de células poligonales, sin plastidios y un tejido medular de hasta 100
m de grosor, constituido por células globosas e hifas incoloras que corren en varias
direcciones. No existen cavidades de mucílago ni en la corteza ni en la médula
(Santelices, 1989).
2.1.2. Distribución geográfica
La especie tiene una distribución amplia en aguas frías del Hemisferio Sur, en regiones
vecinas a la circulación subantártica, tales como las Islas Malvinas, las Islas Heard y
Kerguelen. A lo largo de Chile se extiende desde Tierra del Fuego hasta Arica. La
literatura consigna también que se extiende además hasta Perú central, pero revisiones
recientes del género Lessonia en Chile han puesto en duda algunos de estos registros
(Santelices, 1989).
2.1.3. Distribución batimétrica
Lessonia nigrescens se distribuye en el intermareal en las costas rocosas expuestas y
semi expuestas, formando cinturones continuos interrumpidos sólo por la presencia de
playas de arena. La extensión de estos cinturones es variable dependiendo de la
extensión del sustrato y el grado de acción del oleaje (Alveal, 1995).
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
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2.2.
Lessonia trabeculata Villouta y Santelices, 1986
2.2.1. Descripción de la morfología externa
Las plantas pueden alcanzar una talla de hasta 2,5 m de altura, son erectas, con forma
de arbusto o de árbol, y se adhieren al sustrato por un disco masivo formado por
hapterios unidos y que alcanza hasta 20 cm de alto. Desde el disco se origina un
número variable de estipes, generalmente 2-30; más raramente hasta 50. Los estipes
son rígidos, fuertes, débilmente aplanados, divididos subdicotómicamente en las
porciones medias. En las porciones más apicales ellos se dividen repetidamente y se
aplanan, originando las láminas (Santelices, 1989).
Las hojas son alargadas y lanceoladas, con márgenes enteros o dentados. Pueden
alcanzar hasta 13 cm de ancho en hojas en división. Un corte transversal por las hojas
muestra un meristoderma formado por 2-3 corridas de células pigmentadas dispuestas
en empalizadas, seguidas por 7 a 15 corridas de células corticales, poligonales, que
aumentan gradualmente de tamaño hacia el interior de la célula, y una médula de hasta
50 μm de grosor, con hifas incoloras. La corteza del estipe y de las hojas muestra
cavidades de distintas formas y tamaño, que son atravesadas por filamentos
(trabeculae) alargados, multicelulares, fusionados o ramificados (Santelices, 1989).
Esta especie muestra bastante variabilidad morfológica. Las plantas juveniles (de
menos de 50 cm) generalmente tienen los hapterios no fusionados, los estipes cortos y
aplanados y muchas frondas anchas y con márgenes claramente dentados. A medida
que la planta envejece se produce una reducción en el número de hapterios de los
discos y en el número de estipes y ramas. La forma del disco cambia debido a la fusión
de hapterios y a su pérdida por pastoreo. Simultáneamente, los estipes y las frondas se
alargan, pero el pastoreo también reduce el número y la longitud de estipes y hojas.
Así, las plantas adultas generalmente muestran sólo unos pocos estipes largos y estos
tienen ramificaciones sólo en el extremo apical (Santelices, 1989).
2.2.2. Distribución geográfica
Esta especie ha sido encontrada desde Puerto Montt hasta el norte de Iquique. Sin
embargo, es posible que se extienda hasta Perú (Hoffman & Santelices, 1997).
2.2.3. Distribución batimétrica
Lessonia trabeculata se distribuye en ambientes submareales rocosos expuestos y semi
expuestos hasta los 30 m de profundidad, formando cinturones continuos
interrumpidos sólo por la presencia de fondos blandos (Vásquez, 2004).
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
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2.3.
Macrocystis integrifolia Bory, 1826
2.3.1. Descripción de la morfología externa
Las plantas se adhieren firmemente por medio de un disco adhesivo rastrero formado
por un rizoma macizo, aplanado y alargado; de sus márgenes emergen numerosos
hapterios ramificados de longitud variable (hasta 4 cm). Del rizoma se levantan los
estipes, erectos y subcilíndricos; cerca de la base suelen dividirse en una a tres veces,
dicotómica o subdicotómicamente. En el resto de su longitud los estipes son
cilíndricos, se ramifican sólo unilateralmente y a intervalos regulares, constituyendo
los pedicelos de las hojas laminares.
Las hojas son largas y angostas, de márgenes levemente dentados y alcanzan hasta 40
x 4 cm. Las hojas se originan por división desigual de la terminal y las más distales son
de superficie lisa; en las otras la superficie tiene rugosidades orientadas
longitudinalmente. En las hojas adultas el pedicelo es corto y soporta un aerocisto
elipsoidal o piriforme que mide hasta 8 cm de largo por 1,5 cm de diámetro. La hoja
terminal carece de aerocisto y en las subterminales ésta se puede encontrar en distinto
grado de formación.
La estructura microscópica de las hojas laminares consiste de médula, corteza y
epidermis. La capa central (médula) contiene hifas incoloras. Por fuera de ella, a
ambos lados (corteza) hay células grandes, poligonales e incoloras en la región más
cercana a la médula y células pequeñas y coloreadas en la región periférica. Más
externamente está la epidermis, constituida por una corrida de células pequeñas
(Santelices, 1989).
2.3.2. Distribución geográfica
En su distribución mundial, la especie está restringida a regiones temperadas del
Pacífico Oriental, tanto en Norte como Sudamérica. En Chile se la conoce entre Arica
y Concepción (Santelices, 1989).
2.3.3. Distribución batimétrica
Macrocystis integrifolia habita el submareal, hasta 30 m de profundidad, en bahías con
cierta protección al oleaje (Santelices, 1989).
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
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2.4.
Macrocystis pyrifera (Linnaeus) C. Agardh, 1820
2.4.1. Descripción de la morfología externa
Los ejemplares de esta especie pueden llegar a medir 20-30 m de longitud y forman
extensos bosques submarinos sobre sustrato duro, aunque en playas tranquilas y
abrigadas puede crecer sobre guijarros.
En su constitución esta especie es esencialmente similar a Macrocystis integrifolia, sin
embargo, su disco es cónico, constituido por hapterios ramificados y que no se
fusionan. Una zona meristemática entre la parte basal de los estipes y el disco produce
nuevos hapterios durante toda la vida de la planta. Los estipes son cilíndricos,
alargados, se dividen dicotómicamente 4 o 5 veces en la parte basal y portan hojas con
aerocistos a lo largo de toda su extensión. La hoja terminal, que a veces ha sido usada
como carácter taxonómico, en realidad varía en su morfología, dependiendo de su
velocidad de crecimiento. Las hojas laterales son lanceoladas, pueden medir hasta 70
cm de largo y 30 cm de ancho.
2.4.2. Distribución geográfica
En su distribución mundial, la especie es bastante discontinua. En el Hemisferio Norte
se extiende, casi continuamente, desde Alaska a Baja California. En el Hemisferio Sur
existe en Sudáfrica, el sur de Australia, la costa atlántica sur de Sudamérica e
incursiona a lo largo de la costa pacífica de Sudamérica. En Chile se extiende desde el
Cabo de Hornos hasta Valparaíso, desaparece de todo el norte de Chile reapareciendo
en Perú central y norte (Santelices, 1989).
2.4.3. Distribución batimétrica
Macrocystis pyrifera al igual que Macrocystis integrifolia habita el submareal, hasta
30 m de profundidad, en bahías con cierta protección al oleaje (Santelices, 1989).
2.5.
Gracilaria spp.
2.5.1. Descripción de la morfología externa
El talo es cilíndrico, filamentoso, de hasta 2 m de largo, formado por uno o varios ejes
alargados, ramificado en forma irregular, de 1-2 mm de diámetro. Las ramas se pueden
originar en forma alternada, opuesta o irregular; su abundancia y longitud también es
altamente variable y en general su apariencia se asemeja al talo. En hábitat con sustrato
sólido estas plantas pueden estar adheridas, en cuyo caso es posible reconocer un disco
adhesivo. Sin embargo, con frecuencia viven flotando o enterradas en la arena, y no
tienen disco de adhesión (Santelices, 1989).
Los ejemplares fértiles muestran cistocarpos, como pequeñas verrugas a lo largo de
porciones del filamento. Las plantas masculinas muestran espermacia dispersos en la
superficie del talo, sin que ellos se produzcan en soros bien definidos (Santelices,
1989).
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
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2.5.2. Distribución geográfica
La especie ha sido registrada en la costa pacífica de Norte y Sudamérica y de China.
Sin embargo, el género Gracilaria está siendo sometido a revisión taxonómica por
varios grupos de investigadores en distintas partes del mundo y los patrones conocidos
de distribución pueden variar. En Chile la especie ha sido descrita desde Chiloé hasta
Coquimbo. No obstante lo anterior, siendo Gracilaria un género comercialmente
importante en Chile, y cultivable, desde hace veinte años se han trasplantado talos
desde un punto a otro del país, oscureciendo aún más el entendimiento taxonómico y
los patrones de distribución de estas especies. Es así como esta especie se encuentra
también presente en la península de Mejillones y en la bahía del mismo nombre
(Santelices, 1989).
2.5.3. Distribución batimétrica
Esta alga se encuentra entre 1 metro y los 6 metros de profundidad en aguas tranquilas.
2.6.
Gelidium chilense (Montagne) Santelices y Montalva, 1983
2.6.1. Descripción de la morfología externa
Esta especie forma parches de vegetación corta, de 4 a 6 cm de alto, como una
alfombra gruesa o como cojines de vegetación que se adhieren firmemente al sustrato.
Son de color rojo intenso o levemente pardo y son comunes en la zona media de
mareas de frentes expuestos al oleaje intenso.
Las plantas están compuestas de varios ejes planos de hasta 6 cm de alto, de apariencia
externa parecida a la hoja de un sable, pero con el ápice redondeado o levemente
extendido. Se adhieren por ejes rastreros cilíndricos que tienen estolones a intervalos
irregulares.
Estos ejes se pueden ramificar a todo lo largo del eje principal, pero generalmente
tienen pocas ramificaciones en el tercio basal. Las ramificaciones pueden ser de hasta
tres órdenes. Las de primer orden son similares en apariencia al eje principal,
dispuestas sin orden y originan ramas secundarias. Las ramas terminales (secundarias o
terciarias) son oval-lanceoladas.
Un corte transversal por la fronda muestra una corteza formada por 2-3 capas de
células globosas, pigmentadas y una médula compuesta de células sin pigmentos,
globosa, de hasta 20 µm de diámetro. Los filamentos rizoidales son extremadamente
abundantes en la corteza interna y en las porciones más externas de la médula. Ellos
disminuyen en densidad hacia el interior de la médula (Santelices, 1989).
2.6.2. Distribución geográfica
Es una especie endémica de la costa temperada del Pacífico de Sudamérica y se le
conoce desde Chile central (35º S) hasta Perú central (14º S) (Santelices, 1989).
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
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2.6.3. Distribución batimétrica
Crecen en la zona intermareal entre 1 2 m sobre el nivel medio de mareas en frentes
expuestos (Hoffmann y Santelices, 1997).
2.7.
Gelidium lingulatum Kützing, 1868
2.7.1. Descripción de la morfología externa
Estas plantas coexisten con Gelidium chilense en zonas intermareales medias y bajas
de frentes expuestos al oleaje. Sin embargo, sus ejes son alargados y la planta aparece
como fascículos cartilaginosos, resistentes a la tracción, de color rojo púrpura y que en
ambientes sombríos y batidos puede alcanzar una cobertura casi continua.
Las plantas se adhieren al sustrato por un eje rastrero con rizoides discoidales cortos.
Los ejes erectos son cilíndricos y están desprovistos de ramificaciones cerca de la base.
Distalmente ellos se aplanan y pueden alcanzar hasta 4 mm de ancho por 200 µm de
grosor. En su extremo apical pueden tener ramificaciones que nacen del margen del
talo, planas, similares al eje, y que se originan de una manera irregularmente alterna.
Un corte transversal por los ejes planos muestra una corteza con 3-4 corridas de células
redondeadas, pigmentadas, de 5-15 µm de diámetro que aumentan gradualmente de
tamaño hacia el interior. La médula está formada por varias corridas de células
poligonales. Los filamentos rizoidales no son muy abundantes y están dispersos en la
corteza interna y la médula (Santelices, 1989).
2.7.2. Distribución geográfica
Esta especie es endémica de la costa temperada del Pacífico de Sudamérica y ha sido
colectada frecuentemente entre Puerto Montt y Valparaíso, Chile (Santelices, 1989).
2.7.3. Distribución batimétrica
Especie común en la franja intermareal; se encuentra junto con G. Chilense, entre 1 – 2
m sobre el nivel cero de mareas (Hoffmann y Santelices, 1997).
2.8.
Gelidium rex Santelices y Abbot, 1985
2.8.1. Descripción de la morfología externa
Esta especie vive sobre sustrato duro en los frentes expuestos al oleaje, a veces
formando un cinturón, otras veces como parches aislados de vegetación, a menudo en
las cercanías de Lessonia nigrescens. Las plantas pueden medir hasta 30 cm de
longitud, son alargadas, poco ramificadas y con proyecciones marginales que parecen
pequeñas espinas (Santelices, 1989).
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
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2.8.2. Distribución geográfica
Esta especie es endémica a la costa temperada del Pacífico de Sudamérica. Se la
conoce desde el sur del Perú (16ºS) hasta el sur de Chile (40ºS) (Santelices, 1989).
2.8.3. Distribución batimétrica
Se encuentra habitualmente en hábitats del intermareal inferior expuestos a fuerte
oleaje.
3. Aspectos productivos
3.1.
Lessonia nigrescens
3.1.1. Artes de pesca utilizados para extraer el recurso
Recolección de alga varada en el intermareal, producto de desprendimientos naturales.
Extracción con arpeo o barretas del cinturón de algas del intermareal rocoso.
3.1.2. Desembarque
El desembarque para la II Región se aprecia en la Tabla 1.
Tabla 1. Desembarque artesanal (ton), II Región, recurso chascón o huiro negro
(1999-2004).
Región
II
Total Nacional
1999
20.031
111.766
2000
15.069
61.954
Años
2001
2002
2003
2004
15.118 22.081 21.666 15.530*
87.508 96.428 108.899 93.311*
Fuente: Anuarios Estadísticos del Sernapesca. *: Cifra preliminar a diciembre de 2004.
3.1.3. Flota pesquera asociada
Durante el año 2004 la flota pesquera asociada a la extracción de esta alga
correspondió a 5 botes a motor, coincidentes con las 5 embarcaciones inscritas en la
pesquería para la región.
3.1.4. Mano de obra asociada a la extracción y procesamiento
La mano de obra que se encuentra asociada a la extracción y posterior procesamiento
de este recurso se detalla en la Tabla 2.
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
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Tabla 2. Nivel de empleo asociado a la pesquería, II Región, 2004.
Planta
Permanente Eventual
30
8
Región
II
Artesanal
TOTAL
563
601
Fuente: Registro Pesquero Artesanal y Elaboración Plantas - II Región.
3.1.5. Precio playa
El precio del recurso chascón o huiro negro en la II Región durante el año 2004 fluctuó
entre 35 y 110 pesos el kilo (Fuente: Precios Playa – Sernapesca Región de
Antofagasta).
3.1.6. Plantas que procesan el recurso
Las industrias autorizadas por la Subsecretaría de Pesca para procesar este recurso se
indican en la Tabla 3.
Tabla 3. Número de plantas presentes en la II Región autorizadas para procesar el
recurso chascón o huiro negro.
Puerto
Tocopilla
Mejillones
Antofagasta
Taltal
Total II Región
2002
4
3
1
8
Año
2003
3
2
0
5
2004
3
2
0
5
Fuente: Elaboración Plantas - II Región.
3.1.7. Producción Plantas
La producción de las industrias autorizadas para procesar este recurso se aprecia en la
Tabla 4.
Tabla 4. Producción general por línea de elaboración en la II Región, años 2002 –
2004 (ton).
Puerto
Tocopilla
Mejillones
Antofagasta
Taltal
Total II Región
Línea Elaboración
Alga seca
Alga seca
Alga seca
Alga seca
Alga seca
2002
474
0
803
0
1.277
2003
500
0
1.821
0
2.321
2004
519
0
3.849
0
4.368
Fuente: Anuario Estadístico de Pesca y Elaboración Plantas – II Región.
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
10
3.1.8. Exportaciones
Las exportaciones certificadas por la II región para este recurso durante los años 20032004, se registraron en la categoría alga seca y alcanzaron las 351.362 ton con un valor
FOB de US$123.704,43.-
3.2.
Lessonia trabeculata
3.2.1. Artes de pesca utilizados para extraer el recurso
Recolección de alga varada en el intermareal, producto de desprendimientos naturales.
Extracción con arpeo en bosques naturales del submareal.
3.2.2. Desembarque
El desembarque para la II Región se aprecia en la Tabla 5.
Tabla 5. Desembarque artesanal (ton), II Región, recurso huiro palo (1999-2004).
Región
II
Total Nacional
1999
0
0
2000
2.447
18.107
Años
2001
2002
2.422
5.052
18.457 25.956
2003
2004
9.851 4.943*
69.272 32.948*
Fuente: Anuarios Estadísticos del Sernapesca. *: Cifra preliminar a diciembre de 2004.
3.2.3. Flota pesquera asociada
Durante el año 2004 la flota pesquera asociada a la extracción de esta alga
correspondió a 8 botes a motor, coincidentes con las 8 embarcaciones inscritas en la
pesquería para la región.
3.2.4. Mano de obra asociada a la extracción y procesamiento
La mano de obra que se encuentra asociada a la extracción y posterior procesamiento
de este recurso se detalla en la Tabla 6.
Tabla 6. Nivel de empleo asociado a la pesquería, II Región, 2004.
Región
II
Planta
Permanente Eventual
38
8
Artesanal
TOTAL
668
714
Fuente: Registro Pesquero Artesanal y Elaboración Plantas - II Región.
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
11
3.2.5. Precio playa
El precio del recurso huiro palo en la II Región durante el año 2004 fluctuó entre 45 y
110 pesos el kilo (Fuente: Precios Playa – Sernapesca Región de Antofagasta).
3.2.6. Plantas que procesan el recurso
Las industrias autorizadas por la Subsecretaría de Pesca para procesar este recurso se
indican en la Tabla 7.
Tabla 7. Número de plantas presentes en la II Región autorizadas para procesar el
recurso huiro palo.
Puerto
Tocopilla
Mejillones
Antofagasta
Taltal
Total II Región
2002
3
2
0
5
Año
2003
3
2
0
5
2004
3
2
0
5
Fuente: Elaboración Plantas - II Región.
3.2.7. Producción Plantas
La producción de las industrias autorizadas para procesar este recurso se aprecia en la
Tabla 8.
Tabla 8. Producción general por línea de elaboración en la II Región, años 2002 –
2004 (ton).
Puerto
Tocopilla
Mejillones
Antofagasta
Taltal
Total II Región
Línea Elaboración
Alga seca
Alga seca
Alga seca
Alga seca
Alga seca
2002
252
0
382
0
634
2003
390
0
648
0
1.038
2004
196
0
0
0
196
Fuente: Anuario Estadístico de Pesca y Elaboración Plantas – II Región.
3.2.8. Exportaciones
Las exportaciones certificadas por la II Región para este recurso durante los años
2003-2004, se registraron en la categoría alga seca y alcanzaron las 149.050 ton con un
valor FOB de US$53.479,31.-
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
12
3.3.
Macrocystis spp.
3.3.1. Artes de pesca utilizados para extraer el recurso
Recolección de alga varada en el intermareal, producto de desprendimientos naturales.
Extracción con arpeo del submareal, desde bosques naturales.
3.3.2. Desembarque
El desembarque para la II Región se aprecia en la Tabla 9.
Tabla 9. Desembarque artesanal (ton), II Región, recurso huiro (1999-2004).
Región
II
Total Nacional
1999
313
11.928
2000
105
6.084
Años
2001
2002
1.728
2.072
9.672
9.774
2003
1.905
11.501
2004
342*
9.792*
Fuente: Anuarios Estadísticos del Sernapesca. *: Cifra preliminar a diciembre de 2004.
3.3.3. Flota pesquera asociada
Durante el año 2004 la flota pesquera asociada a la extracción de esta alga
correspondió a 14 botes a motor, coincidentes con las 14 embarcaciones inscritas en la
pesquería para la región.
3.3.4. Mano de obra asociada a la extracción y procesamiento
La mano de obra que se encuentra asociada a la extracción y posterior procesamiento
de este recurso se detalla en la Tabla 10.
Tabla 10. Nivel de empleo asociado a la pesquería, II Región, 2004.
Región
II
Planta
Permanente Eventual
30
8
Artesanal
TOTAL
916
954
Fuente: Registro Pesquero Artesanal y Elaboración Plantas - II Región.
3.3.5. Precio playa
El precio del recurso huiro en la II Región durante el año 2004 fluctuó entre 40 y 45
pesos el kilo (Fuente: Precios Playa – Sernapesca Región de Antofagasta).
3.3.6. Plantas que procesan el recurso
Las industrias autorizadas por la Subsecretaría de Pesca para procesar este recurso se
indican en la Tabla 11.
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
13
Tabla 11. Número de plantas presentes en la II Región autorizadas para procesar el
recurso huiro.
Puerto
Tocopilla
Mejillones
Antofagasta
Taltal
Total II Región
2002
4
3
1
8
Año
2003
3
2
0
5
2004
3
2
0
5
Fuente: Elaboración Plantas - II Región.
3.3.7. Producción Plantas
La producción de las industrias autorizadas para procesar este recurso se aprecia en la
Tabla 12.
Tabla 12. Producción general por línea de elaboración en la II Región, años 2002 –
2004 (ton).
Puerto
Tocopilla
Mejillones
Antofagasta
Taltal
Total II Región
Línea Elaboración
Alga seca
Alga seca
Alga seca
Alga seca
Alga seca
2002
127
110
0
237
2003
72
117
0
189
2004
72
1
0
73
Fuente: Anuario Estadístico de Pesca y Elaboración Plantas – II Región.
3.3.8. Exportaciones
Las exportaciones certificadas por la II región para este recurso durante los años 20032004, se registraron en la categoría alga seca y alcanzaron las 149,05 ton con un valor
FOB de US$53.479,31.-
3.4.
Gracilaria spp.
3.4.1. Artes de pesca utilizados para extraer el recurso
Extracción de praderas naturales mediante buceo, extracción con arpeo del submareal,
desde praderas naturales y recolección de alga varada en el intermareal, producto de
desprendimientos naturales.
3.4.2. Desembarque
El desembarque para la II Región se aprecia en la Tabla 13.
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
14
Tabla 13. Desembarque artesanal (ton), II Región, recurso pelillo (1999-2004).
Región
II
Total Nacional
1999
2000
1.204
1.208
54.800 103.623
Años
2001
2002
942
255
52.431
54536
2003
2004
1.242
970*
93.809 71.840*
Fuente: Anuarios Estadísticos del Sernapesca. *: Cifra preliminar a diciembre de 2004.
3.4.3. Flota pesquera asociada
Durante el año 2004 la flota pesquera asociada a la extracción de esta alga
correspondió a 2 botes a vela y 19 botes a motor, coincidentes con las 21
embarcaciones inscritas en la pesquería para la región.
3.4.4. Mano de obra asociada a la extracción y procesamiento
La mano de obra que se encuentra asociada a la extracción y posterior procesamiento
de este recurso se detalla en la Tabla 14.
Tabla 14. Nivel de empleo asociado a la pesquería, II Región, 2004.
Planta
Permanente Eventual
-
Región
II
Artesanal
TOTAL
951
951
Fuente: Registro Pesquero Artesanal y Elaboración Plantas - II Región.
3.4.5. Precio playa
El precio del recurso pelillo en la II Región durante el año 2004 fluctuó entre 40 y 70
pesos el kilo (Fuente: Precios Playa – Sernapesca Región de Antofagasta).
3.4.6. Plantas que procesan el recurso
Las industrias autorizadas por la Subsecretaría de Pesca para procesar este recurso se
indican en la Tabla 15.
Tabla 15. Número de plantas presentes en la II Región autorizadas para procesar el
recurso pelillo.
Puerto
Tocopilla
Mejillones
Antofagasta
Taltal
Total II Región
2002
3
2
0
5
Año
2003
3
2
0
5
2004
3
2
0
5
Fuente: Elaboración Plantas - II Región.
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
15
3.4.7. Producción Plantas
Entre los años 2002-2004 no se registró producción de este producto en las industrias
autorizadas para procesar este recurso en la II Región. Por lo tanto, los desembarques
registrados pueden haber salido del país como alga seca (sin proceso) o haber sido
procesados en otra región.
3.4.8. Exportaciones
Para este recurso hasta Mayo del año 2005 el Servicio Nacional de Pesca no certificó
exportaciones para este recurso en la II Región.
3.5.
Gelidium spp.
3.5.1. Artes de pesca utilizados para extraer el recurso
Recolección de orilla.
3.5.2. Desembarque
El desembarque para la II Región se aprecia en la Tabla 16.
Tabla 16. Desembarque artesanal (ton), II Región, recurso chasca (1999-2004).
Región
II
Total Nacional
1999
2000
0
491
0
525
Años
2001
2002
0
20
402
533
2003
2
392
2004
1*
469*
Fuente: Anuarios Estadísticos del Sernapesca. *: Cifra preliminar a diciembre de 2004.
3.5.3. Flota pesquera asociada
Durante el año 2004 la flota pesquera asociada a la extracción de esta alga
correspondió a 4 botes a motor, coincidentes con las 4 embarcaciones inscritas en la
pesquería para la región.
3.5.4. Mano de obra asociada a la extracción y procesamiento
La mano de obra que se encuentra asociada a la extracción y posterior procesamiento
de este recurso se detalla en la Tabla 17.
Tabla 17. Nivel de empleo asociado a la pesquería, II Región, 2004.
Región
II
Planta
Permanente Eventual
0
0
Artesanal
TOTAL
420
420
Fuente: Registro Pesquero Artesanal y Elaboración Plantas - II Región.
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
16
3.5.5. Precio playa
No se han registrado estadísticas oficiales para el precio playa de este recurso en la II
Región (Fuente: Precios Playa – Sernapesca Región de Antofagasta).
3.5.6. Plantas que procesan el recurso
Las industrias autorizadas por la Subsecretaría de Pesca para procesar este recurso se
indican en la Tabla 18.
Tabla 18. Número de plantas presentes en la II Región autorizadas para procesar el
recurso chasca.
Puerto
Tocopilla
Mejillones
Antofagasta
Taltal
Total II Región
2002
3
2
0
5
Año
2003
3
2
0
5
2004
3
2
0
5
Fuente: Elaboración Plantas - II Región.
3.5.7. Producción Plantas
Entre los años 2002-2004 no se registró producción de este producto en las industrias
autorizadas para procesar este recurso en la II Región. Por lo tanto, los desembarques
registrados pueden haber salido del país como alga seca (sin proceso) o haber sido
procesados en otra región.
3.5.8. Exportaciones
Para este recurso hasta Mayo del año 2005 el Servicio Nacional de Pesca no certificó
exportaciones para este recurso en la II Región.
IV.
ANTECEDENTES LEGALES
Tal como se mencionó previamente, no existen medidas administrativas pesqueras
vigentes específicas para el recurso algas en nuestro país. Las excepciones
corresponden a la luga roja Gigartina skottbergi de la XII Región, único recurso algal
que cuenta con una veda biológica entre junio y septiembre (D.Ex. Nº684/2005) y el
caso de las áreas de manejo y explotación de recursos bentónicos para las cuales se
aplican criterios de explotación específicos. Al respecto, cabe destacar que en la II
Región, tan solo un 12,2% de la línea de costa es cubierta por áreas de manejo lo que
ocasiona que las praderas de algas del 87,8% de costa regional restante se encuentre en
régimen de libre acceso lo que a mediano plazo expone seriamente la conservación de
las especies que conforman el recurso algas, además de la alteración de las
comunidades biológicas asociadas. En este sentido, el enfoque geográfico en la
administración del recurso constituye un desafío, tanto a nivel de las facultades e
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
17
instrumentos legales para el ordenamiento de los/as pescadores/as artesanales que
operan sobre este recurso, así como también, para las instancias de asesoría técnica e
investigación aplicada, en el diseño de procedimientos y metodologías para cumplir
con las tareas que permitan el seguimiento, monitoreo y evaluación de las poblaciones
de estos recursos en áreas de libre acceso.
Considerando lo expuesto, es conveniente señalar que con el fin de cautelar la
preservación de los recursos hidrobiológicos cuando una o más especies hayan
alcanzado un estado de plena explotación, la Subsecretaría, mediante resolución,
previo informe técnico debidamente fundamentado del Consejo Zonal de Pesca que
corresponde, podrá suspender transitoriamente por categoría de pescador artesanal y
por pesquería, la inscripción en el registro artesanal en una a más regiones. En este
caso, no se admitirán nuevas inscripciones de embarcaciones ni de personas para esa
categoría y pesquería en la región respectiva. Mediante igual procedimiento “se podrá
dejar sin efecto la medida de suspensión establecida”.
V.
ANALISIS DEL CIERRE DEL REGISTRO
ARTESANAL DEL RECURSO HUIROS
PESQUERO
1. Aspectos ecológicos
En general, los huirales son reconocidos por su función estructuradora de hábitat de
comunidades bentónicas, hábitat exclusivo de algunas especies de invertebrados, áreas
de desove, sustrato de asentamiento de larvas de numerosas especies, sectores de
crianza de juveniles y zonas de refugio contra la predación, corrientes de fondo y el
embate de las olas.
Habitualmente, los discos adhesivos de Lessonia nigrescens presentan numerosas
cavidades internas, que son utilizadas como hábitat por diversas especies de
invertebrados, cuyo número está en relación directa con el peso del disco y la biomasa
de invertebrados. La diversidad de especies de invertebrados aumenta con el aumento
de volumen de las cámaras, sin que se produzca el reemplazo de especies que sería
esperable en una sucesión ecológica clásica. Cancino y Santelices (1984) determinaron
la importancia ecológica de los discos de L. nigrescens, estimando un número de 43
especies de invertebrados asociados a ellos (70% correspondientes a juveniles).
Estos resultados fueron confirmados por Vázquez y Santelices (1984), quienes
además, evaluaron la capacidad de regeneración, la tasa de mortalidad, los cambios
morfológicos y el reclutamiento en áreas experimentales, concluyendo que la remoción
de plantas puede generar cambios en los patrones de ocupación espacial, al aumentar
el número de herbívoros y en el peor de los casos generar áreas desérticas que tardan
mucho tiempo en ser repobladas. Estos autores también sugieren que la remoción
debería realizarse en ausencia de herbívoros y en la época de mayor fertilidad
(Vázquez y Santelices, 1990).
Los principales factores ecológicos que regulan el reclutamiento, supervivencia y
crecimiento de L. nigrescens son: la interferencia de las plantas adultas y la interacción
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
18
con los efectos del ambiente abiótico. En el cinturón de L. nigrescens el reclutamiento
es máximo en aperturas que resultan del desprendimiento de plantas más viejas y que
la interferencia de frondas maternas hace poco accesible a los pastoreadores (Hoffman
& Santelices, 1997).
En cuanto a las comunidades de organismos asociados a los discos de L. trabeculata
estos son similares a las “kelp communities” descritas para otros hábitats submareales
de regiones templadas, con algunas diferencias en la organización comunitaria, por
ejemplo, no se encuentran especies codominantes. El disco es colonizado por
numerosas especies de invertebrados, así como peces, a medida que éste aumenta de
tamaño (Hoffman & Santelices, 1997).
En un estudio de algas pardas realizado entre I y IV Regiones, se corrobora la
importancia de los huiros negro y palo como reservorios de biodiversidad y
estructuradores de ecosistemas. En dicho estudio se encontró que los discos de fijación
de L. nigrescens concentran el 81% del total de taxas observados en el sector
intermareal mientras los discos de fijación de L. trabeculata concentran el 68% de los
taxa registrados en zona submareal (González et al, 2002).
En el mismo estudio se comprobó que, en general, en zonas intermareales que
presentan altos grados de intervención producto de la remoción directa de plantas de L.
nigrescens registraron los menores índices de diversidad y riqueza de especies tanto
dentro de los discos de fijación como en espacios interdiscos lo que genera alta
perturbación local de las comunidades afectadas por este método de extracción. Esta
conclusión había sido comprobada previamente en un estudio realizado por Vásquez y
Santelices (1990), quienes confirmaron que la remoción de L. nigrescens y L.
trabeculata produce la muerte de flora y fauna acompañante.
En general, es posible asignar valor a estos recursos, el que puede ser determinado
considerando sus funciones que se asocian al tipo de hábitat que estructuran, las
propiedades y procesos que cumplen en el sistema biológico y los servicios que
generan y que se refieren a los bienes que representan y son objeto de beneficio a las
poblaciones humanas que utilizan estos recursos. La Tabla 19 describe las funciones y
servicios asociados a las praderas de algas pardas.
Tabla 19. Servicios y funciones asociadas al recurso “huiro”.
SERVICIOS
Extractivo
 Pesca
 Industria química producción de alginatos
 Alimento natural en cultivos de abalones
No extractivo
 Investigación
 Educación







FUNCIONES
Estructurador de hábitat como praderas (refugio
para asentamiento y reclutamiento de mariscos de
explotación comercial).
Soporte global de vida.
Rol importante en la regulación de la dinámica
física costera y en el efecto erosivo las olas en la
costa.
Refugio contra la predación, corrientes de fondo y
oleaje.
Areas de desove
Areas de asentamiento larval.
Areas de crianza de juveniles.
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
19
Por otra parte, cabe considerar que estas macroalgas, en especial el recurso huiros, son
altamente sensibles a los cambios de temperatura superficial del mar, constituyendo
especies que muestran altas mortalidades durante el fenómeno del Niño.
Finalmente, cabe considerar que si bien la distribución geográfica registrada para
Macrocystis pyrifera no abarca la zona norte de Chile, esta especie se incluye como
objeto de cierre del RPA en la primera región dado que antecedentes aportados por
Coyer et al. (2001) indicarían que el género Macrocystis es monoespecífico, por lo que
las dos especies presentes en Chile corresponderían a una sola que manifiesta una
diferente morfología según la latitud. El estudio mencionado consistió en comparar
marcadores biomoleculares para todas las especies del género Macrocystis y sus
resultados no indicaron diferencias para estos entre las diferentes especies evaluadas.
2. Pesquería en régimen de libre acceso
Actualmente, existe un libre acceso a la pesquería de algas, es decir si un pescador
solicita inscribir alguno de los recursos considerados en este informe en el Registro
Pesquero Artesanal de la II Región para operar sobre él, esta inscripción es aceptada
por encontrarse la pesquería abierta.
Las características de la pesquería de algas, específicamente las correspondientes a
recolección de alga varada (que ocurre para todos los recursos considerados en este
documento) y el barreteo, especialmente de Lessonias, en sectores intermareales,
permiten que esta sea una actividad que no requiere ni de implementación (bajos
costos de operación) ni de habilidades específicas. Además, al encontrarse la pesquería
en acceso abierto cualquier pescador o incluso individuo no pescador puede participar
de la recolección o extracción directa. Ambas condiciones constituyen en cualquier
pesquería situaciones propicias para su sobreexplotación. Al respecto, cabe destacar
que esta situación ha sido reconocida para la mayoría de las pesquerías comerciales a
nivel mundial al menos en sus primeras etapas de desarrollo y posteriormente a las
cuales han debido implementarse regulaciones de aparejos, restricciones estacionales u
otras medidas, tendientes a reducir los niveles de captura (Hilborn et al, 2005).
El caso de las algas representa importantes desafíos dado que en su remoción directa
es más importante la estrategia de extracción que los volúmenes extraídos. Sin
embargo, la implementación de una administración que considere estrategias de
extracción requiere necesariamente la limitación, identificación y compromiso de los
usuarios, razón que fundamenta una vez más la necesidad de cerrar el acceso al
recurso.
Por otra parte, es necesario señalar que en el caso de recursos bentónicos de aguas
someras, su explotación por parte tanto de comunidades de pescadores artesanales
como de nuevos usuarios (temporales o sin tradición en el rubro) ha conducido a la
disipación de la renta, privando a comunidades rurales (particularmente de países en
desarrollo) de importantes fuentes de alimento y empleo (Bustamante y Castilla, 1987;
Castilla, 1990; Defeo et al., 1993; Castilla, 1994; Castilla, 1997). Esto se explica
considerando que si bien los ingresos percibidos por la recolección de alga son bajos
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
20
dado el bajo precio/kilogramo del recurso, al aumentar el número de oferentes
(extractores) y disminuir su cohesión de grupo los compradores pueden disminuir los
precios, dado que la cantidad que necesitan puede ser suministrada por agentes para los
cuales esta actividad constituye en gran parte de los casos un complemento o labor
temporal.
3. Aumento de la fuerza laboral operando sobre el recurso y sus
efectos
Al analizar la evolución de la inscripción de los pescadores y las embarcaciones en el
Registro Pesquero Artesanal de la II Región (Figuras 1 y 2) se observa un fuerte
crecimiento del sector de los algueros, desde 156 en 1999 a 690 el año 2004, y de los
botes a motor desde 238 en 1999 a 489 el año 2004.
1.400
1.200
1.000
800
600
400
200
0
1999
2000
Algueros
Figura 1.
2001
2002
2003
Mariscador (Buzo)
2004
Pescador
Evolución de la inscripción de pescadores artesanales II Región, 1999–
2004. Fuente: Sernapesca, Región de Antofagasta.
700
600
500
400
300
200
100
0
1999
Bote motor
Figura 2.
2000
2001
Bote remo
2002
2003
Lancha
2004
TOTAL
Evolución de la inscripción de embarcaciones artesanales II Región, 1999
–2004. Fuente: Sernapesca, Región de Antofagasta.
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
21
Este aumento del número de inscritos para el recurso algas, y especialmente para los
huiros en la II Región, responde en gran medida a pescadores de otras regiones quienes
por encontrarse la pesquería en acceso abierto, renuncian en su propia región
reinscribiéndose en la II y renunciando nuevamente al momento de regresar a operar a
su lugar de origen.
Adicionalmente, hay que agregar que existe un número indeterminado de algueros que
ingresan y operan ilegalmente sin tener una inscripción previa en el registro pesquero
artesanal de la II Región. Estimaciones efectuadas por Vásquez (2004) señalan que
para la III y IV Regiones los extractores ilegales representan aproximadamente el 70%
y 90% respectivamente. Este sobredimensionamiento del esfuerzo es muy probable
que esté ocurriendo también en la II Región, con lo cual se asume la existencia de un
esfuerzo potencial sobre el recurso superior a lo menos en un 50% al total de
extractores legalmente registrados.
En general, el flujo de pescadores artesanales desde otras regiones hacia la II Región
es de larga data. Dicha situación se hace crítica en el sector sur de Taltal en que el
ingreso de pescadores corresponde principalmente a recolectores de algas de la III
Región que ingresan por el día y son transportados en camionetas, no registrando
documentación tributaria que autorice el traslado de recursos y subestimando con ello
el desembarque real de la II Región (Consejo Zonal de Pesca I-II Regiones).
Por otra parte, cabe considerar, que el desarrollo de las áreas de manejo, donde la
extracción está regulada mediante la ejecución de un plan de manejo, ha producido que
el esfuerzo de pesca se concentre en sectores de libre acceso, lo que podría traer como
consecuencia que un mayor número de pescadores de otras regiones se desplacen a la
II Región como una forma de mejorar sus ingresos (Consejo Zonal de Pesca I-II
Regiones, González et al, 2002).
En general, el desplazamiento de pescadores de una región a otra provoca un
desequilibrio en el esfuerzo y pérdidas de oportunidades para los pescadores locales
como sería el caso de los pescadores de la II Región asociados a la pesquería de algas,
especialmente huiros.
Este flujo de pescadores hacia la II Región comenzó a gestar un descontento social
generalizado en pescadores artesanales originarios de la II Región, o cuya residencia
en esta región es de antigua data. Por esta razón, la Federación de sindicatos de
pescadores artesanales y la Federación de buzos mariscadores de la II Región,
solicitaron a las autoridades regionales una reunión ampliada con el fin de incrementar
las acciones de control, para evitar hechos funestos y lograr un mayor respeto de la
normativa vigentes por parte de este grupo, cada día más creciente de pescadores
artesanales. A partir de dicha reunión, surgieron una serie de acciones, que se resumen
en:
 Reuniones del Comité Interinstitucional de Fiscalización (COFI).
 Reuniones con organizaciones de pescadores artesanales.
 Reunión con Presidente de la Corte de Apelaciones.
 Acciones especiales de las distintas instituciones que integran el COFI.
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
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Producto de las acciones desarrolladas por las instituciones fiscalizadoras, se produjo
un aumento en los índices operacionales de éstas, el número de infracciones cursadas
así como las causas que son objeto de seguimiento en los tribunales de la II Región, lo
cual es posible de apreciar en las Tablas 20 y 21.
Tabla 20. Denuncias a tribunales y multas, años 2001 al 2004(1).
2001
2002
2003
2004
38
99
211
219
12
22
98
64
Valor Promedio Multa
(UTM)
1
2
1
3,48(2)
Total
567
196
1,87
Año
Cantidad denuncias Cantidad Condenas
Fuente: Sernapesca, Región de Antofagasta.
(1): Información hasta Septiembre del 2004.
(2): Oscila entre 1 a 19.22 UTM.
Tabla 21. Denuncias por año y mes, años 2001 al 2004.
AÑO
Ene
Feb Mar Abr
May Jun
Jul Ago
Sep
Oct
2001
0
3
8
5
1
8
1
2002
5
12
18
16
5
18
2003
6
4
54
27
16
2004
2
9
23
6
Nov Dic
TOTAL
4
2
4
3
0
39
4
1
6
11
2
1
99
31
7
18
10
11
17
10
211
20
14
61
30
41
13
0
0
219
28 103 54
42
TOTAL 13
Fuente: Sernapesca, Región de Antofagasta.
71
73
53
59
39
22
11
Complementariamente la Federación de Buzos Mariscadores de la II región solicitó
formalmente al Director Regional de Pesca de Antofagasta (cartas Nº021/20.09.2004 y
Nº024/22.10.2004), realizar todas las gestiones pertinentes con el fin de proceder al
cierre de todos los registros de recursos bentónicos del RPA, esto con el objetivo de
evitar el aumento desmesurado del esfuerzo en la II Región.
Por otra parte, si bien no se puede establecer una relación causa-efecto, se debe señalar
que los desembarques de todos los recursos acá considerados muestran un patrón de
comportamiento general consistente en una disminución entre los años 2000 a 2002,
una recuperación el año 2003 y una nueva caída el año 2004 (Figuras 3a, 3b, 3c, 3d y
3e).
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
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Figura 3.
Evolución de los desembarques de los recursos (a) huiro negro, (b) huiro
palo, (c) huiro, (d) pelillo y (e) chasca en la II Región, entre los años 1999
y 2004. Fuente: Sernapesca, Región de Antofagasta.
Huiro
Huiro palo
12.000
2.500
20.000
10.000
2.000
10.000
8.000
toneladas
15.000
toneladas
toneladas
Huiro negro
25.000
6.000
1.500
1.000
4.000
5.000
500
2.000
0
1999
2000
2001
2002
2003
0
2004
0
1999
(a)
2000
2001
2002
2003
1999
2004
2000
2001
2002
2003
2004
(c)
(b)
Peli llo
Chasca
1.400
25
1.200
20
toneladas
toneladas
1.000
800
600
400
15
10
5
200
0
0
1999
2000
2001
2002
2003
2004
1999
2000
2001
(c)
VI.
2002
2003
2004
(d)
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
Considerando lo expuesto en Antecedentes y Análisis en el sentido que:
a) Las praderas de algas, especialmente de huiros, constituyen un recurso
ecológicamente muy importante por ser estructuradores de hábitat y reserva de una
alta diversidad biológica,
b) Actualmente, existe un libre acceso a la pesquería de algas, esto sumado a los bajos
costos de operación constituyen condiciones suficientes para la sobreexplotación
de este recurso pesquero,
c) Se ha producido un aumento significativo tanto del número de algueros, como de
mariscadores y pescadores formales en el RPA de la II Región a partir del año
2000, lo que implica un aumento del esfuerzo pesquero potencial sobre las algas, y
por consiguiente de la presión extractiva sobre éste. Además, lo anterior permite
presumir un aumento, al menos, semejante para el grupo de extractores informales
del recurso, lo que puede significar un crecimiento desmesurado del esfuerzo
pesquero hacia estos recursos bentónicos, con el inminente riesgo de
sobreexplotación de ellos,
d) El esfuerzo pesquero sobre los recursos bentónicos en la II Región se ve
incrementado por la actividad realizada por pescadores artesanales provenientes de
la III Región,
Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
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e) Existe conciencia y voluntad en el sector pesquero artesanal de la II Región, para
adoptar medidas de protección de las praderas de algas,
f) No existen medidas de administración para los recursos tratados en este informe, y
que frente a la actual situación y comportamiento de las pesquerías bentónicas de la
zona norte del país se hace necesario implementar medidas precautorias para su
explotación sustentable,
De acuerdo con lo anteriormente expuesto, se recomienda suspender temporalmente, y
por un periodo de dos años, la inscripción en el Registro Pesquero Artesanal de la II
Región, en la sección pesquería recurso Huiro Negro (Lessonia nigrescens), Huiro Palo
(Lessonia trabeculata), Huiro (Macrocystis spp.), Pelillo (Gracilaria spp.) y Chasca
(Gelidium spp.)
VII. REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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por Universidad de Concepción, Chile. 863 pp.
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Ciencias del Mar en Chile. Rev. Biol. Mar., Valparaíso (Chile) 25(2), 1-18.
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of new management practices. Ecol. Int. Bull. 21, 47-63.
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Unidad de Recursos Bentónicos, Departamento de Pesquerías, R. Pesq. Nº74/2005.
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