y tu derecha me salva. El Señor completará sus favores conmigo: Señor, tu misericordia es eterna, no abandones la obra de tus manos. Todos: Gloria al Padre... e Himno a San José (Liturgia de las Horas) El alba mensajera Del sol de alegre brillo Conoce ese el martillo Que suena en la madera. Humilde magisterio Bajo el que Dios aprende Que diga si lo entiende Quien sepa de misterio Estamos viviendo la Cuaresma. ¿Qué está significando para mí? ¿Le estoy dando un significado personal, diferente, el que yo quisiera que tuviera... La Cuaresma, si se vive con intnsidad, puede ser un espacio privilegiado para la autenticidad, la coherencia, la sinceridad... para la conversión. e SALMO 25 La mano carpintera Madruga su quehacer Y hay gracia antes que entre el sol en el taller. Cabeza de tu casa Del que el señor se fía Por la carpintería La gloria entera pasa. Tu mano se acompasa Con Dios en la labor Y alargas tú la mano Del Señor Y pues que el mundo entero Te mira y se pregunta Di tú como se junta Ser santo y carpintero La gloria y el madero La gracia y el afán Tener propicio a dios Y escaso el pan Porque fue varón justo Lo amo el señor Y dio el ciento por uno su labor (lo rezamos a dos coros) Señor, a ti dirijo mi oración; mi Dios, en ti confío: no dejes que me hunda en la vergüenza. ¡Que no se rían de mí mis enemigos! ¡Que no sea jamás avergonzado ninguno de los que en ti confían! ¡Que sean puestos en vergüenza los que sin motivo se rebelan contra ti! Señor, muéstrame tus caminos, guíame por tus senderos; guíame, encamíname en tu verdad, pues tú eres mi Dios y salvador. Todos: Perdón, Señor. 2. Nos atrae la gloria, el deseo de ser importantes, nos domina la tentación de creernos los mejores, el afán de ocupar un puesto de categoría en la sociedad. Todos: Cristo, perdónanos. 3. Deseamos el poder a toda costa, nos gusta tener a los demás a nuestros pies, estar siempre entre los que mandan, sin preocuparnos de servir a la sociedad. Todos: Perdón, Señor. Mira mis tristezas y trabajos, y perdona mis pecados. Mira cuántos enemigos tengo que sienten por mí un odio mortal. ¡Cuídame, sálvame la vida! ¡No dejes que me hunda en la vergüenza, pues en ti busco protección! Que me protejan mi honradez y mi inocencia, pues en ti he puesto mi confianza. ¡Dios mío, salva a Israel de todas sus angustias! (oración de eco repitiendo lo que más nos haya gustado) (momentos de silencio para experimentar el perdón de Dios, porque Dios perdona siempre, siempre, siempre) e ESCUCHAMOS LA PALABRA SALMO 137 Canto de acción de gracias y súplica confiada La acción de gracias arranca del corazón agradecido por el perdón. El salmista ha experimentado en su propia vida la misericordia de Dios. Apoyado en esta experiencia, puede mirar confiado al futuro, y formular esa última súplica admirable: toda mi vida es obra de Dios, él la ha comenzado, que él la concluya. Los discípulos podrán experimentar el amor del Padre y responder a él como Jesús, gracias al Espíritu recibido. El Marcos 1, 12-15 Después de esto, el Espíritu llevó a Jesús al desierto. Allí vivió durante cuarenta días entre las fieras, y fue puesto a prueba por Satanás; y los ángeles le servían. Después que metieron a Juan en la cárcel, Jesús fue a Galilea a anunciar las buenas noticias de parte de Dios. Decía: “Ha llegado el tiempo, y el reino de Dios está cerca. Volveos a Dios y aceptad con fe sus buenas noticias.” Palabra de Dios.