CRISTO REY DEL UNIVERSO ÉSTE ES EL REY La figura de Cristo en la cruz contrasta brutalmente con el ambiente que rodea a un rey al uso. No representa el poder sino al anti-poder; no es la figura del que recibe pleitesía y es socialmente reconocido sino la imagen de la descalificación y la mofa... Mi reino no es de este mundo, dijo a Pilatos. Pero añade: Soy rey… y he venido al mundo para ser testigo de la verdad. Es en este mundo donde quiere ejercer su realeza, pero de una forma sorprendente introduciendo el amor y la justicia de Dios en la historia humana. EVANGELIO " Por eso Dios lo engrandeció y le concedió el Nombre que está sobre todo nombre, para que, ante el nombre de Jesús, todos se arrodillen, en los cielos, en la tierra y entre los muertos. Y toda lengua proclame que Cristo Jesús es el Señor, para Gloria de Dios Padre." Fil. 2, 9 -11 Lucas 23, 35-43 Estaba el pueblo mirando; los magistrados hacían muecas diciendo: - A otros salvó; que se salve a sí mismo si él es el Cristo de Dios, el Elegido. También los soldados se burlaban de él y, acercándose, le ofrecían vinagre y le decían: - Si tú eres el Rey de los judíos, ¡sálvate! Había encima de él una inscripción: Este es el Rey de los judíos. Uno de los malhechores colgados le insultaba: - ¿No eres tú el Cristo? Pues ¡sálvate a ti y a nosotros! Pero el otro le respondió diciendo: - ¿Es que no temes a Dios, tú que sufres la misma condena? Y nosotros con razón, porque nos lo hemos merecido con nuestros hechos; en cambio, éste nada malo ha hecho. Y decía: - Jesús, acuérdate de mí cuando vengas con tu Reino. Jesús le dijo: - Yo te aseguro: hoy estarás conmigo en el Paraíso. lugar de la escena de la pasión “como si en ella me hallare”. Imaginar el lugar, ver a los que están allí y lo que hacen, oír lo que hablan... ir aplicando los sentidos. REFLEXIÓN CANTO de respuesta Lucas describe con acentos trágicos la agonía de Jesús en medio de las burlas y bromas de quienes lo rodean. Nadie parece valorar su gesto. Nadie ha captado su amor a los últimos. Nadie ha visto en su rostro la mirada compasiva de Dios al ser humano. Desde una cierta distancia, las «autoridades» religiosas y el «pueblo» se burlan de Jesús haciendo «muecas». Los soldados de Pilato, al verlo sediento, le ofrecen un vino avinagrado muy popular entre ellos, mientras se ríen de él. Hasta tres veces repite Lucas la burla: «Sálvate a ti mismo». ¿Qué «Mesías» puede ser éste si no tiene poder para salvarse a sí mismo? ¿Qué clase de «Rey» puede ser? ¿Cómo va a salvar a su pueblo de la opresión de Roma si no puede escapar de los cuatro soldados que vigilan su agonía? ¿Cómo va a estar Dios de su parte si no interviene para liberarlo? En medio de tanta burla, una invocación: Uno de los delincuentes que reconoce la inocencia de Jesús, confiesa su culpa y lleno de confianza en el perdón de Dios, sólo pide a Jesús que se acuerde él. Cristo nos da la libertad, Cristo nos da la salvación, Cristo nos da la esperanza, Cristo nos da el amor. JESÚS ANUNCIÓ EL REINO DE DIOS El centro de la predicación de Jesús no fue su persona, ni la Ley, ni Dios en sí mismo, sino el Reino de Dios que comprende la salvación de las personas en la tierra y la gloria de Dios en el cielo. Aún más, fue el tema casi obsesivo de su mensaje; con el soñaba y a él vivió consagrado por entero. Que Dios va a reinar es la Buena Noticia de Jesús. Anuncio - Enmendaos que ya ha llegado el Reino de Dios (Mt 3,2) - Jesús recorría Galilea entera, enseñando en aquellas sinagogas, proclamando la buena noticia del Reino y curando todo achaque y enfermedad del pueblo. (4,23). La respuesta de Jesús no se hace esperar: «Hoy estarás conmigo en el paraíso». - Por el camino proclamad que ya llega el reinado de Dios, curad enfermos, resucitad muertos, limpiad leprosos, echad demonios. De balde lo recibisteis, dadlo de balde (10,7). Tiempo para la oración. Vamos a orar con los sentidos. Vamos a sentirnos en el - La buena noticia del reino se proclamará en el mundo entero para que llegue a oídos de todos los pueblos (24.14). - Cuando detuvieron a Juan, Jesús se fue a Galilea a pregonar de parte de Dios la buena noticia. Decía: Se ha cumplido el plazo, ya llega el reinado de Dios. Enmendaos y creed la buena noticia. (Mc 1,14-15) - Si entráis en un pueblo y os reciben bien, comed lo que os pongan, curad a los enfermos que haya, y decid: Ya os llega el reinado de Dios. (Lc10,9-10) La entrada entrada del Reino en el Dios se describe como presente y sucesiva: ¡ay de vosotros, letrados y fariseos hipócritas, que le cerráis a los hombres el Reino de Dios! (Mt 23,13). - Se compara con una cosecha que va madurando, a un árbol que crece, a una masa que fermenta, a una red que va recogiendo peces buenos y malos hasta llenarse. El Reino de Dios se acepta: acepta Os lo aseguro: quien no acepte el Reino de Dios como un niño, no entrará en él (Mc 10,15). - Es el tiempo para negociar con el capital recibido: Llamó a diez empelados suyos y les repartió diez onzas de oro, encargándoles: Negociad mientras vuelvo (Lc 19,13). Pero llega a un punto en que ya se ha tomado la decisión: decisión - Supone un corte con la vida anterior que no admite rectificaciones: Con qué dificultad entran en el Reino de Dios los que tienen dinero (Lc18,24). Muchas parábolas contienen este separación: trigo y cizaña, red, diez muchachas, millones, el banquete... Reflexión compartida CANTO Tu reino es vida, tu reino es verdad; tu reino es justicia, tu reino es paz; tu reino es gracia, tu reino es amor: venga a nosotros tu reino, Señor; venga a nosotros tu reino, Señor (2). REINO DE DIOS HOY Situación de una sociedad donde se reconoce la soberanía de Dios frente a la tiranía y explotación de las personas. El Reino de Dios no es pura interioridad, sino un hecho social con exigencias muy definidas; no se trata de proponer una ideología ideología sino de realizar un modo nuevo de vida. Es una llamada que puede transformar la vida de las personas. El manifiesto del reinado de Dios son las bienaventuranzas Mt 5,3-10.12; Lc 6,20-26). ¿Está presente el Reino de dios en nuestra sociedad ? ¿En donde descubro los signos del Reino? En mi casa en mi trabajo en mis relaciones familiares y sociales ¿se hace presente el Reino? ¿Vivo el compromiso de hacer Reino de Dios en los espacios en que se desarrolla mi vida? Después de un tiempo de reflexión, compartimos nuestra oración de petición, alabanza, acción de gracias, perdón. Con el salmo 72 pedimos para que el Reinado de Dios sea una realidad en nuestro mundo. (a dos coros) Tu reino es vida Dios mío, da tu juicio al rey, tu justicia al hijo de reyes, para que rija a tu pueblo con justicia, a tus humildes con rectitud; para que rija a tu pueblo con justicia, a tus humildes con rectitud. Que su nombre sea eterno, que su fama dure como el sol; que sea bendición para los pueblos; que las naciones los proclamen dichoso. Bendito eternamente su nombre, que su gloria llene la tierra. Terminamos con la oración del Padre Nuestro, pidiendo de forma especial que Venga a nosotros su Reino CANTO FINAL Que los montes traigan la paz, que los collados traigan la justicia; que él defienda a los humildes del pueblo, que socorra a los hijos del pobre; que él defienda a los humildes del pueblo y quebrante al explotador. Anunciaremos tu Reino, Señor, tu Reino, Señor, tu Reino. Reino de paz y justicia, Reino de vida y verdad. Tu Reino, Señor, tu Reino. Que dure tanto como el sol, como la luna, de edad en edad; que baje como lluvia sobre el césped, como rocío que empapa la tierra. Que en sus días florezca la justicia y la paz hasta que falte la luna. Reino de amor y de gracia, Librará al pobre que suplica, al afligido que no tiene protector; se apiadará del humilde e indigente, y salvará la vida de los pobres; salvará de la violencia sus vidas, pues su sangre es preciosa ante sus ojos. Tu Reino, Señor, tu Reino. Reino que habita en nosotros. Tu Reino, Señor, tu Reino. Reino que sufre violencia, Reino que no es de este mundo. Reino que ya ha comenzado, Reino que no tendrá fin. Tu Reino, Señor, tu Reino.