MICHAEL ARBIB • Director del Proyecto Cerebro Humano

MICHAEL ARBIB • Director del Proyecto Cerebro Humano
“Habrá máquinas que ‘piensen’ en temas
especiales”
CONCHA MONTSERRAT, Zaragoza ( 08-12-99)
Michael Arbib, director del Proyecto Cerebro Humano, es uno de los mayores
expertos en la investigación de los mecanismos que subyacen en la coordinación de la
acción y la percepción. Esta cuestión puede abordarse por la vía teórica de los
esquemas de la función cerebral y de la congnición humana -estudios de visión artificial
y robótica- o a través del análisis detallado de las redes neuronales. Arbib, profesor en la
Universidad de Southern California, asistió en Zaragoza al congreso Cajal y la
Conciencia , en homenaje a Santiago Ramón y Cajal, en el que habló de la inteligencia
de las máquinas y de un futuro que hoy puede rozarse ya con los dedos y en el que los
ordenadores superarán al hombre en muchos aspectos. Recuerda este científico que el
hombre utiliza el cerebro para estudiar a las máquinas y a éstas para estudiar el cerebro.
Pregunta. Se ha dicho ya que las máquinas pueden pensar. ¿Lo harán en un futuro
próximo o en un futuro lejano?
Respuesta. Pues sí; pueden llegar a pensar. Si queremos que las máquinas piensen
como el cerebro humano, esto probablemente no ocurrirá. Pero sí tendremos máquinas
que pensarán especialmente para problemas especiales. Por ejemplo, podremos tener
una biblioteca completa e íntegra en el ordenador como base de datos, podremos hablar
con él, hacerle preguntas y él buscaría en su memoria para encontrar una respuesta
correcta. Cuando se hace una interacción de esta forma con la máquina es como si en
realidad estuviese pensando.
Ustedes han hablado de conciencia. El premio Nobel Gerald Edelman aseguró en
estas jornadas que la propiedad fundamental de la conciencia es la capacidad de
integrar gran cantidad de datos en poco tiempo. Hay además dos niveles: la
capacidad de estar despierto y la de razonar. Una máquina acumula datos y
responde, pero ¿podría llegar a estos dos niveles?
De forma sencilla, alguien está despierto cuando responde a la interacción externa. Con
lo cual, cuando se conecta el ordenador, se puede decir que está despierto, y cuando se
desconecta, que esta domido. Eso no es algo muy interesante, cuando hablamos de la
conciencia no sólo estamos interactuando con el mundo. Tenemos la experiencia del
color, de la gente, de la emoción. A medida que el tiempo evolucione, los ordenadores
irán respondiendo a estos aspectos del mundo externo. Y será una cuestión de
terminología si denominamos a esta máquina una máquina perceptora, receptora,
sensible o pensante. Creo que al final tendremos una teoría integradora que aunará estos
dos aspectos tan complejos del pensar de las máquinas y del pensar humano
¿Cómo llegaremos a elaborarla?
Una buena metáfora sería el desarrollo de la arodinámica, que es una teoría general del
vuelo. Pero vemos que los aviones no vuelan igual que los pájaros. A pesar de ello,
decimos que vuelan como si agitasen sus alas como un pájaro. En este sentido, creo que
se puede decir que las máquinas piensan, ya que resuelven cosas, y lo hacen de la
misma manera en que funciona el cerebro humano.
Nuestras neuronas funcionan como los bits de una computadora. Chalmers dijo
que las máquinas podrían pensar como nuestro cerebro. ¿Usted cree que
funcionan de forma similar y que en un futuro podrán ser idénticos?
Vuelvo a la analogía del vuelo: es un asunto de abstracción. El uso de la palabra volar
se refiere a un avión o a un pájaro en el sentido de que sustentan un peso en el aire, pero
no operan de la misma forma. El material es distinto: en el avión es metal y en los
pájaros son plumas. Creo que encontraremos unos principios generales de pensamiento,
pero en la forma en que integremos estos principios en la máquina como se integrarán
en el cerebro humano, aunque serán diferentes en cuanto a sus componentes.
.No sé si a usted le gusta hablar de ciencia-ficción, pero Julio Verne vio y adivinó
artefactos que hoy son realidad. ¿Los replicantes de Blade Runner son hoy una
posibilidad?
.La biología molecular ha hecho enormes progresos. Es cierto que se podrían conseguir
estos replicantes que me comenta. Pero somos 6.000 millones en el planeta y no
necesitamos más personas. Lo que sí podemos hacer es construir máquinas que nos
ayuden. Yo he comentado mi teoría de ese coche que sirviese para autoconducirnos, con
una amplia biblioteca de datos que le ayudasen en esa tarea. Se podría conseguir la
réplica, pero no creo que vayamos a ello, sino más bien a lograr que haya máquinas que
nos ayuden en nuestra tarea.
¿Será igual un hombre que una máquina?
En cierto modo habrá máquinas más inteligentes que nosotros, ya las hay más rápidas y
más fuertes. Si se trata de almacenar toda la información relevante en una biblioteca
inmensa, tendremos máquinas que serán más inteligentes. Si es cuestión de jugar al
ajedrez, tendremos máquinas muy capacitadas, pero no se celebrarán Juegos Olímpicos
con personas que compitan con vehículos motores. Si queremos tener el placer del
ajedrez como intercambio social, deberemos jugar con un ser humano. Eso sí, hay
muchas tareas en las que usaremos las máquinas, altamente especializadas, muy
inteligentes y de gran rapidez.
¿Llegarán a llorar?
Quizá.