SISTEMATIZACIÓN DEL PROCESO DE CONFIGURACIÓN DE LA POLÍTICA CURRICULAR EN LA UNIVERSIDAD DEL VALLE 1986-2005 RESULTADOS DE LA INVESTIGACIÓN Resumen ejecutivo 3 4 Universidad del Valle Programa Editorial Sistematización del proceso de configuración de la política curricular en la Universidad del Valle 1986-2005. Elaborado por: Stella Valencia, Mario Albeiro Acevedo, Amparo Granada, Guillermo Vega, William Jiménez. Título: Rector de la Universidad del Valle: Iván Enrique Ramos Calderón Vicerrectora Académica: Martha Cecilia Gómez de García Director del Programa Editorial: Víctor Hugo Dueñas Rivera Diseño de carátula y diagramación: Jhonny Velasco Díaz © Universidad del Valle Impreso en Feriva Universidad del Valle Ciudad Universitaria, Meléndez A.A. 025360 Cali, Colombia Teléfono: (+57) 2 321 2227 – Telefax: (+57) 2 330 8877 E–mail: [email protected] Cali, Colombia Abril de 2008 5 Vicerrectoría Académica Comité de Currículo Sistematización del proceso de configuración de la política curricular en la Universidad del Valle 1986-2005 1 El desarrollo de esta investigación sobre la política curricular en la Uni versidad del Valle permitió tener un conocimiento privilegiado sobre múltiples experiencias a través de las cuales se hace, día a día, nuestra vida institucional. Al referirnos a ella, es necesario decir ante todo que en una institución como la nuestra, en la que los afanes propios de los procesos académicos y administrativos hace difícil contar con espacios para la reflexión, el inicio de esta investigación constituye por sí mismo su primer logro. Ella ha sido, sin duda, una oportunidad excepcional y un elemento innovador para reflexionar sobre cómo se ha venido configu rando la política curricular a partir de los lineamientos de la dirección universitaria, pero también a partir de las iniciativas de las unidades aca démicas, los programas de formación y los diversos grupos de trabajo de profesores y de estudiantes. Es destacable que en un momento histórico como el actual y en un contexto poco favorable a la reflexión sistemática sobre el proyecto formativo de la Universidad, cobren sentido y relevan cia para nuestro devenir institucional temas, objetos y problemas como los abordados en esta investigación. Mucho más cuando es poco común que a las decisiones relacionadas con el desarrollo institucional les an tecedan y tengan como soporte procesos de naturaleza académica. Que la formación se torne un asunto de preocupación central, tal como aconteció a lo largo de la investigación, adquiere una importancia definitiva para alimentar la 1. A lo largo del desarrollo de la investigación participaron las siguientes personas: Amparo Granada y Maria Clara Tovar, Directora y Subdirectora de la Dirección de Autoevaluación y Calidad Académica - DACA; Patricia Calonje, Mario Acevedo, Américo Calero, Martha Lucía Pe ñaloza y Guillermo Vega, profesores del Instituto de Educación y Pedagogía; William Jiménez, Asistente de Investigación y la profesora Stella Valencia, Directora del Instituto de Educación y Pedagogía y coordinadora del grupo de investigación. En la fase inicial del Proyecto particip aron también los profesores Álvaro Guzmán y Adolfo Álvarez. Participaron también en calidad de asesores para asuntos puntuales, los profesores Alba Nubia Rodríguez de la Facultad de Humanidades y Elio Fabio Gutiérrez profesor Jubilado de la Universidad del Cauca. 6 reflexión por medio de la cual hemos venido reconociendo institucionalmente la necesi dad de explorar la incidencia de las últimas reformas curriculares en los planes de estu dio, en las modalidades de enseñanza, en los procesos formativos y su evaluación y en las relaciones de la Universidad con su entorno socio-cultural. La idea de formación también es definitiva a la hora de indagar sobre las prácticas a través de las cuales se ha concreta do la política curricular en la Universidad del Valle y, a partir de esa indagación, contribuir a la construcción de criterios que permitan re orientarla. Una de las principales síntesis de esta inves tigación es precisamente que la política curricular no está contenida solamente en el Acuerdo 009 de 2000, como se planteó en el Plan Estratégico de Desarrollo 2005-2015. De hecho, la actual política curricular de la Uni versidad se ha venido configurando a lo largo de, por lo menos, los últimos 20 años, con es- fuerzos realizados antes y después del Plan de Desarrollo 1986-2005, el Acuerdo 003 de 1989 y toda la normatividad sobre investigación y extensión en la Universidad. En el Acuerdo 003 de 1989, por ejemplo, la formación ya surgía como una preocupación central en rel ación con la política curricular. Ese énfasis en la formación parece haber sido desplazado después, en el Acuerdo 001 de 1993, por asuntos relacionados con la estructura curricular y, más adelante, en el Acuerdo 009 de 2000, por el énfasis en los planes de estudio. Desde el punto de vista de su desarrollo histórico, tal como sugiere nuestra revisión documental, parecería conveniente, pues, volver la mirada a los orígenes, a los fundamentos conceptuales de las primeras normas, al sentido formativo de la Universidad que ellas expresaban. Es decir, a tener como principal preocupación la formación, esta vez considerando a todos y cada uno de los distintos actores de la Univer sidad (estudiantes, profesores, directivos, em pleados, trabajadores). 7 Al considerar globalmente los datos dis ponibles observamos cómo cada una de las estrategias metodológicas adoptadas en la investigación (revisión documental, grupos focales, Seminario permanente) aporta el ementos de análisis originales que, al mismo tiempo, contrastan entre sí y se complemen tan. Así, por ejemplo, mientras los profesores, directivos y estudiantes que participaron en los grupos focales, con frecuencia afirman desconocer las normas que introdujeron las tres reformas curriculares de los últimos 25 años, quienes presentaron sus experiencias y proyectos en el Seminario permanente muestran claramente los logros obtenidos en la formación de profesores y estudiantes a raíz de iniciativas pedagógicas individuales, colectivas e institucionales en las distintas unidades académicas. Situaciones como estas sugieren que para considerar el proyecto for mativo de la Universidad conviene distinguir dos niveles de análisis. Uno, el de las discu siones académicas de los profesores universitarios sobre la educación, la pedagogía, el currículo, la universidad, etc. Dos, el de las preocupaciones y acciones cotidianas de esos mismos profesores sobre cómo enseñar, cómo aprenden los estudiantes y cómo optimizar su trabajo docente. Como académicos, ninguno de nosotros cuestionaría la urgencia de restituir toda la impor tancia que las discusiones del primer nivel tienen y de ahondar en la reflexión sobre estas cuestiones; no obstante, en el desarrollo de la investigación hemos constatado que es en el nivel de las prácticas y las síntesis cotidianas de los profesores donde se despliega con mayor riqueza y sencillez tanto la potencia de nuestro trabajo en la Universidad como sus 8 pedagógicas, aunque muchas veces el conocimiento pedagógico de base parece operar de manera implícita. más sensibles limitaciones. Es por eso que, en el marco de la investigación, observamos cómo los mismos actores que en un contexto como el de los grupos focales cuestionan, exigen o manifiestan un desconocimiento de la política, en otro contexto como el del Semi nario proponen acciones, intercambian experiencias y proyectan sus logros. Por ejemplo, al explorar las formulaciones que sustentan teóricamente los proyectos y experiencias presentadas contrasta con las afirmaciones de varios profesores que, al ser interrogados, declaraban no ser especialistas y, por tanto, tener dificultades para conceptualizar los ele mentos pedagógicos implicados en su proyecto o experiencia. Sin embargo, más allá de sus declaraciones, constatamos la existencia de una clara preocupación por las cuestiones Para comprender la política curricular de la Universidad es necesario tanto el estudio de las normas como de las prácticas. Por eso la investigación surge como una oportunidad inédita, pero inicial, de síntesis, que muestra cómo la práctica recrea las normas sobre los procesos de formación de diversas maneras y pone en evidencia la, de hecho, existente preo cupación de los docentes por los aspectos pedagógicos. Insistimos en que se trata de una oportunidad inicial porque, como también lo revela el desarrollo de la investigación, aún es sensible la necesidad de acopiar mayores evi dencias y profundizar en el conocimiento de nuestras prácticas universitarias. Encontra mos que, tratándose del desarrollo curricular de la Universidad, surgen permanentemente esfuerzos tanto de «arriba hacia abajo» como de «abajo hacia arriba», pero es necesario visibilizar tales esfuerzos para que nos reconozcamos y potenciemos nuestro trabajo. Hay mucha riqueza en ese trabajo, pero hay que aprovechar la cantera de posibilidades que of rece. Algunas acciones pueden contribuir en el corto y mediano plazo a articular de manera orgánica la normatividad institucional y las prácticas cotidianas de los diferentes actores. El Seminario permanente sobre formación universitaria, por ejemplo, surge como un espacio excepcional que debería preservarse para continuar la reflexión de la Universidad sobre su política curricular, privilegiando el intercambio en torno a experiencias pedagógicas e investigativas que den cuenta de cómo, en la práctica, la política es apropiada, reinterpretada y desarrollada de acuerdo con las condiciones particulares de cada unidad académica. Así mismo, dado que profesores, directivos y miembros de comités de programas académi cos señalan la falta de formación pedagógica para el desarrollo de su acción formativa, la 9 investigación señala con fuerza un cierto consenso frente a un nuevo matiz en la idea de la formación. Hoy por hoy no parece posible como, en general, lo hacen las normas que dan origen a las reformas curriculares de 1989, 1993 y 2000 - continuar pensando exclusiva mente en los estudiantes como únicos destinatarios de las acciones formativas que lleva a cabo la Universidad. Una de las ideas más re currentes que derivan de las reflexiones sobre la formación consiste en la necesidad de entenderla y concretarla de manera que también ataña a los profesores. Una de las acciones posibles a ser consideradas e implementadas correspondería, consecuentemente, a la cre ación de una política institucional y a un plan permanente de formación docente, dirigido a los actuales y a los futuros profesores de la Universidad. 10 Este estudio sobre la política curricular en la Universidad, no obstante, despliega sus mayores posibilidades al centrar su atención sobre el núcleo de lo que vendría a constituir su proyecto formativo. De aquí el interés sobre la formación como noción sustantiva de la misión de la Universidad, mediada por la investigación, la proyección social y la ex tensión. Ello coincide con nuestra hipótesis inicial sobre el peso específico otorgado a la formación integral y la flexibilidad curricular frente a otras dimensiones de la política curricular. Sin embargo, este planteamiento fue transformándose hasta dar lugar a una nueva hipótesis a partir de la cual propusimos que en la Universidad del Valle, la formación integral es la naturaleza de la formación universitaria, la investigación y la extensión son sus fundamentos, y la flexibilidad académica, pedagógica, curricular y administrativa, es la estrategia que la hace posible. Desde esta perspectiva, dicho planteamiento emerge como principio orientador y garante de la reproducción del proyecto formativo de la Universidad del Valle a lo largo de las últi mas décadas. El desarrollo teórico y empírico de la investigación permitió constatar que, en efecto, las otras dimensiones de la política curricular gravitan alrededor de la formación integral, unas como parte de su naturaleza (investigación y extensión), otras aportando al logro de los propósitos centrales ( formación básica: general y específica; formación disciplinaria asociada a cada profesión; formación en otras disciplinas y saberes, favoreciendo la interdisciplinariedad; formación profesional: teórica, práctica y técnica; formación complementaria: electividad profesional y actividad extracurricular, y otras como condicionantes de la misma (flexibilidad). Ahora bien, este principio constituye una configuración, una expresión institucional de lo sustantivo del proyecto formativo en tanto totalidad concreta. Configuración que trataremos de interpretar recurriendo a tres principios básicos del paradigma de la complejidad de Edgar Morín 2 : El dialógico, el de recursividad organizacional y el hologramático, por la po sibilidad que nos brinda el pensamiento complejo de expresar la unidad, la diversidad y las tensiones inherentes a un proyecto de esta naturale za, y de conjugar lo formal con lo metafórico. Principios, según Morin, complementarios y antagónicos, que nos permiten además, abordar el proyecto formativo como objeto y la Política Curricular como un elemento importante del contexto institucional en el cual surge, se fortalece y con solida, veamos: El principio, dialógico se refiere a la posibilidad de entablar un diálogo permanente entre dos lógicas, la una representada en aquellos elementos del sistema que son estables, que permanecen hasta conformar una me moria, una tradición; siendo por tanto susceptibles de ser programados. Y la otra, representada por aquellos elementos del sistema que son inesta bles por naturaleza, provienen de la contingencia, de la incertidumbre, de lo inesperado; para cuya emergencia lo que se requiere es una estrategia. En el caso del proyecto formativo de Univalle, si recurrimos al sistema como analogía, la formación integral como la naturaleza de la formación en Univalle, la investigación y la extensión como su fundamento, y la flexibilidad como estrategia, en tanto principio orientador de la Política Curricular, sería lo estable, lo que permitiría la reproducción del proyec to; mientras que la flexibilidad: académica, pedagógica, curricular y ad ministrativa, como estrategia y acción concreta, como estilo e impronta del trabajo universitario, sería lo que permitiría la existencia de la for mación integral como fenómeno en las distintas unidades académicas de las facultades e institutos; pero también su lectura e interpretación desde la complejidad y diversidad de saberes, enfoques y prácticas, que es posible y legítimo abordarla. 2. MORIN, Edgar. El paradigma de la complejidad. En: Introducción al pensamiento complejo. Editorial Gedisa. Pgs. 105-107, Barcelona, 1994. 11 Fenómenos e incluso acontecimientos difíciles de prever en muchos casos, a lo sumo posibles de intuir en otros, pero que en todos los casos, presupone estar atentos y pre parados para su emergencia; lo que en otras palabras sig nifica, contar con una estrategia de flexibilidad para que esa potencialidad se despliegue, concrete y haga visible en la orientación, en las relaciones, en los métodos y en las formas de organización que se establecen para alcanzar la misión y propósitos institucionales. Flexibilidad que im plica un ambiente propicio y unas condiciones institucionales que promuevan y hagan posible la pluralidad episte mológica, la complementariedad crítica, favoreciendo con ello la democracia y la convivencia en la universidad. El principio de recursividad organizacional, en la metá fora del remolino sugerida por Morín, cada momento de éste es producido y al mismo tiempo es producto de -con cepción similar a la de Gadamer sobre la formación 3 -; un proceso en el cual los elementos del sistema son a su vez causa y efecto, dando origen a un ciclo no lineal, sino, au toconstitutivo, autoorganizador, autogenerador 4 . En el caso del proyecto formativo de univalle, la analogía sería: Univalle en ejercicio de su autonomía relativa y apoyada en su poder deontológico 5 , actualiza y recrea su política curricular desde procesos de reflexión e indagación sobre su proyecto formativo, lo que a su vez permite fortalecerlo y consolidarlo; es decir, que desde la recontextualización, redefinición y resignificación de la Política Curricular, que tiene lugar a través de las prácticas 6 , se reproduce y produce de nuevo el proyecto formativo. De ahí, que desde este principio de recursividad, desde esta metáfora del remolino, sea vital la reflexión, reconstrucción y sistem atización permanente sobre la formación y las prácticas pedagógicas en la universidad. En lo que concierne al principio hologramático, se trata de una síntesis entre las partes y el todo, desde un enfoque que trasciende el reduccionismo de uno u otro extremo, lo analítico o lo holístico; en el intento de aproximarse a una mirada más comprensiva que integra a ambos comple mentándose, expresándose el uno en el otro, negándose y afirmándose al mismo tiempo, así, vemos que “el todo refleja las partes y éstas el todo”. En el contexto de esta in vestigación, la política curricular para los años venideros ha de procurar la emergencia de un nuevo proyecto for mativo; nuevo porque si bien el que intentamos delinear y 12 3. Cfr. Capítulo sobre formación, Informe final. 4. MORIN, Edgar. Op. cit. pág 107. 5. Poder deontológico que emana del saber y de la posibilidad de conjugar en el ejercicio cotidiano sus notas o atributos: autonomía, cientificidad, universalidad y corporatividad, a la manera como lo expresó muchas veces Al fonso Borrero en su legado sobre el simposio Permanente sobre la Universidad. 6. Prácticas que desde una perspectiva amplia no se refieren solo a las pedagógicas, también podría ser las de producción intelectual, u otras formas de hacer política y gestión en la universidad. Política Curricular que ha devenido en un Proyecto formativo, que se expresa en la norma tividad, en las voces de los estudiantes, profe sores y directivos consultados y en las prácticas pedagógicas de los profesores (experiencias significativas y proyectos específicos examinados); y el cual en esta investigación hemos intuido trazos importantes y significativos del pensa miento educativo y pedagógico de Univalle. Trazos, unos más perceptibles que otros, y que esperamos mediante una estrategia de flexibilidad se hagan más visibles en lo académico, en lo pedagógico, en lo curricular y en lo administra tivo; esto es, que cada parte de la organización, y del quehacer de Univalle, a la manera de un ho lograma, exprese ese pensamiento y esa cultura pedagógica que ha venido y que continuará con struyéndose en el marco de su proyecto forma tivo. Se trata de procurar un devenir acorde con los signos de nuestro tiempo, pero que recupere y realce el sentido y la impronta que ha venido forjando la universidad del Valle en torno a la formación universitaria a partir de 1986; configuración que a su vez recogió, en una gran síntesis, el legado de los primeros cuarenta años de su existencia, como ha quedado demostrado en la presente investigación. formular con estos trazos, emerge de la historia y la memoria institucional, también va a ser producto de la actualización, recreación y transfor mación de la experiencia sobre formación universitaria, de su relación con la investigación y la extensión; de las prácticas pedagógicas, pero fundamentalmente, del pensamiento ped agógico y educativo de Univalle, el cual, como un todo, ha venido acompañando e iluminando la política curricular entre 1986 y 2005 y se espera continúe haciéndolo en el próximo decenio, con mayor intensidad y visibilidad. En este contexto, promover una política curric ular que consolide el proyecto formativo de la Universidad representa para la Dirección Uni versitaria un triple desafío: primero, garanti zar la unidad de la orientación de la formación y de su expresión en el marco de la diversidad de saberes y enfoques pedagógico que carac teriza a la Universidad. Segundo, preservar el principio de que la formación, para que en sentido estricto lo sea, ha de ser integral y requiere flexibilidad en todos los órdenes: cur- 13 ricular, pero también académica, pedagógica, y administrativa. Tercero, en la búsqueda del significado y alcance de un «currículo por competencias», privilegiar el proyecto formativo de Univalle y no al contrario. La política curricular de los próximos años habrá de consolidar un proyecto formativo que respete la historia y la memoria institucional a través de las cuales se ha configurado un pensamiento pedagógico y educativo propio, pero que tam bién sea capaz de actualizarse a partir de su permanente reflexión sobre la formación y las prácticas pedagógicas universitarias, de sus desarrollos investigativos y de su proyección social. Desde esta perspectiva, actualizarse significa genuinamente analizar la manera como dicha política se pone en acción a través de prácticas formativas concretas y cómo es 14 posible renovarse a partir del conocimiento acumulado de dichas prácticas. El interés en las prácticas pedagógicas, por tanto, supone un giro de perspectiva que conduce a ver la propia Universidad como un campo empírico o, dicho de otro modo, a hacer de la Universi dad un laboratorio natural de estudio, inves tigación e intervención. Esta mirada concuerda con un enfoque que concibe la política como acción humana de carácter orientador, posible de reconocer por lo menos en dos dimensiones: por un lado, como enunciados de normas que prescriben y regulan el quehacer universitario; por otro, como práctica social que expresa los modos como tales normas son contextualizadas, resignificadas y apropiadas por parte de los distintos actores de la vida universitaria. SINTESIS DE UNA MUESTRA IMPORTANTE DE LOS PRINCIPIOS ORIENTADORES DE LA POLÍTICA CURRICULAR. La Universidad, laboratorio natural de investigación La investigación sobre Política Curricular ha sido una oportunidad importante para hacer de la universidad un laboratorio natural de investigación, para promover la reflexión sistemática y la intervención sobre el proyecto formativo de la Universidad, para ir más allá del Currículo7 centrando la preocupación en la formación. Se trata de una experiencia de trabajo empírico que cobra mayor relevan cia si se tiene en cuenta que es poco común que el desarrollo institucional esté precedido y sustentado en procesos investigativos que muestran la necesidad de explorar el sentido de la formación y su expresión en las prácticas a través de las cuales se ha concretado la Política Curricular en la Universidad del Valle: en los planes de estudio, en las modalidades de enseñanza, en los procesos formativos y su evaluación y en las relaciones de la Universi dad con su entorno socio-cultural. Es un hecho que la actual Política Curricular de la Universidad se ha venido configurando a lo largo de, por lo menos, los últimos 20 años, con esfuerzos realizados antes y después del Plan de Desarrollo 1986-2005, el Acuerdo 003 de 1989 y toda la normatividad sobre investig ación y extensión promulgada en este período en la Universidad. La revisión y análisis docu mental nos ha permitido reafirmar la hipóte sis formulada a comienzos de la investigación acerca de cómo desde mediados de la década del 80, se venía gestando y configurando la Política Curricular de Univalle la cual desde sus inicios tuvo como eje central de preocupación la formación. Orientación que se complementó y profundizó a través del establecimien to de estructuras curriculares y de gestión (1993) y se fortaleció más adelante mediante la definición de criterios para la estructuración de los Planes de Estudio (2000). 7. Currículo entendido como la organización de con tenidos para el desarrollo de la actividad docente. 15 Es urgente conformar un programa de investigación sobre la formación en Univalle, a partir de las líneas de trabajo docente, de la reflexión e investigación sobre temas objetos y problemas del campo de la Educación y la Pedagogía que hemos identificado durante el desarrollo de esta investig ación sobre política curricular, en las distintas Fac ultades e Institutos e incluso en el nivel central de la Universidad. Un programa de investigación con sus respectivas líneas que le daría vida a la Mae stría en Educación con énfasis en Pedagogía de la Educación Superior, y muy seguramente en un horizonte de largo plazo a un área del Doctorado en Educación en este mismo campo. El saber pedagógico, reflexión sobre las prácticas No obstante, el desconocimiento que parecen tener los distintos actores consultados sobre las normas que introdujeron las tres reformas curriculares de los últimos 20 años, la investigación también ha mostrado claramente los logros obtenidos en la formación de profesores y estudiantes a raíz de iniciativas pedagógicas individuales, colectivas e institucionales adelantadas en las distintas uni dades académicas y en el nivel central a través de proyectos específicos. Experiencias que fue posible examinar a través de los foros y seminarios realizados en los dos últimos años, los cuales han permitido identificar algunas pistas importantes acerca del saber pedagógico en la Universidad; un 16 saber producto de la reflexión sobre las prác ticas que da cuenta de las discusiones académicas de los profesores de Univalle sobre la educación, la pedagogía, el currículo, la for mación, la política y la gestión universitaria. La investigación nos ha mostrado cómo la práctica recrea la normativa sobre los procesos de formación de diversas maneras y pone en evidencia la preocupación de los docentes por los aspectos pedagógicos. La diversidad, riqueza y potencia de estos resultados si bien nos ha permitido observar la política curricular en acción a través de las prácticas; también nos está mostrando la necesidad de reflexionar y profundizar sobre éstas, de realizar investigaciones que nos permitan producir saber pedagógico en la Universidad del Valle, a partir del reconocimiento, reconstruc ción e interpretación teórica de lo que hacen los profesores en los departamentos, escuelas y áreas de los diferentes Facultades e Institu tos. De igual forma, la investigación nos ha permitido identificar la necesidad de profundizar sobre el tipo de relaciones pedagógicas, las modalidades de docencia y los dispositivos pedagógicos que hacen posible la formación de los sujetos (estudiantes), en particular, las maneras como se ha llevado a la práctica, los principios que orientan la formación integral en la Universidad, esto es, la investigación formativa, el monitoreo y seguimiento a las electivas complementarias, la relación teoría – práctica, las relaciones de los estudiantes con asignaturas de otras Fac ultades, el acercamiento y la difusión de la in vestigación a los estudiantes de pregrado, las estrategias empleadas por los programas académicos para la organización de las prácticas profesionales, la sinergia que debe existir en tre los profesores de una asignatura o el perfil profesional entre otros, asuntos que han sido puestos en evidencia por los diferentes acto res, en especial, por los profesores y los estudiantes, haciendo alusión a la importancia de revisar los mecanismos con que cuenta la Uni versidad para crear las condiciones de posibilidad que puedan garantizar una formación integral. 17 18 La formación pedagógica y curricular de los docentes, una preocupación institucional Parece haber un consenso también en que cada vez es más difícil entender cómo la Universidad puede cumplir con su misión forma tiva en relación con os l estudiantes sin que se ocupe también de la formación de sus profe sores. Es evidente la preocupación tanto de los profesores, directivos y miembros de comités de programas académicos consultados por la falta de formación pedagógica para el desarrollo de su acción formativa y para asumir el compromiso con los asuntos curriculares. De igual manera, se constata un pronunciamiento que ha logrado un consenso sobre la necesidad de contar con acciones sistemáticas no solamente en relación con la formación pedagógica, sino también sobre la inserción en la vida universitaria; en la valoración de la reflexión pedagógica, la investigación y pro ducción intelectual en relación con los temas, objetos y problemas universidad, al punto de señalar la legitimidad de estas preocupaciones en las Facultades e Institutos académicos distintos al de Educación y Pedagogía; como también su exigencia en los Concursos para convocatorias docentes y su valoración y reconocimiento al momento de establecer premios y distinciones al quehacer docente. Una de las acciones posibles a ser consideradas e implementadas correspondería, consecuentemente, a la creación de una política institucional y a un plan permanente de formación docente, dirigido a los actuales y a los futuros profesores de la Universidad. La institucionalización del seminario permanente sobre formación, clave para la vida universitaria Una vez conocidos, socializados y valorados los resultados de esta investigación, se espera que la Dirección Universitaria siga promoviendo y apoyando el Seminario permanente sobre formación universitaria, que esperamos reiniciar en agosto de 2008 con el paoyo de la Vicerrectoría Académica, del Comité de Currículo, del Instituto de Educación y Pedagogía y muy seguramente,de otras unidades académicas interesadas en continuar participando en esta experiencia. Se espera también que el Seminario permanente sobre formación universitaria rinda los frutos previstos desde el comienzo de la investigación, es decir, no solo en tanto estrategia de abordaje metodológico de la investigación, sino, fundamentalmente, en las proyecciones relacionadas con la Políti ca de formación de profesores universitarios (Especialización, Maestría y Doctorado) del Instituto de Educación y Pedagogía; y de sus líneas de investigación sobre vida universita ria, capacidad institucional y prácticas pedagógicas, tal como lo ha esbozado el Grupo de investigación en Educación, Pedagogía y Política para la Educación Superior del IEP, y canalizado a través del Grupo de trabajo Edu cación Superior y Pedagogía, Esyped, de la Vicerrectoría Académica. Tal vez el desafío actual consista en generar condiciones institucionales producto de lineamientos y acciones como los mencionados en los párrafos anteriores que faciliten la apropiación de la política curricular que se ha venido configurando a través de las últimas tres reformas, reglamen taciones y normativas conexas; condiciones institucionales que permitan dar cuenta de manera sistemática de la recontextualización de que es objeto dicha política en cada unidad académica, en virtud de la naturaleza y especificidad de sus saberes y prácticas. El conocimiento del significado que le atribuyen los distintos actores de la Universidad a la Políti ca Curricular revela la diversidad de interpre taciones, su potencialidad y las posibilidades para recrear y ajustar permanentemente la política curricular de la Universidad a partir de su redefinición y expresión en cada una de sus unidades académicas. Los planteamientos anteriores hacen parte la propuesta que hemos formulado para actuali zar y recrear la política curricular en torno a un conjunto de Lineamientos de política, es trategias y acciones, claves para el devenir institucional en un horizonte de mediano y largo plazo. Es decir, se trataría de optar por una nueva síntesis en torno a la formación, a la investigación y a la proyección social, al proyecto formativo de la Universidad del Val le, a su sentido y orientación, a sus atributos y cualidades, para favorecer y hacer posible su despliegue a través de una política curricular que tiene tanto de normatividad como de 19 praxis. institucional La formación de directivos, empleados y trabajadores, un asunto de interés El proceso de formación debería hacerse extensivo a los directivos, empleados y trabajadores, de tal manera que se fortalezcan los procesos de gestión y administración que sirven de soporte a la vida académica y minimicen los obstáculos y dificultades que pueden estar limitando y dis torsionando la misión y los fines del proyecto universitario. Es necesario diseñar planes de mejoramiento y cualificación para el personal que favorezcan el profesionalismo y la adquis ición de competencias para el desempeño de los distintos cargos de la Universidad; que permi tan asumir con idoneidad profesional y ética los múltiples y complejos compromisos inherentes a la vida universitaria, a las funciones básicas de la Universidad: Formación, investigación y proyección social, su planificación, gestión y evaluación en los distintos ámbitos y niveles. Estamos pensando en la necesidad de formular una política de capacitación para el personal administrativo y de servicios que logre concretarse en programas y proyectos de desarrollo hu mano e institucional consecuentes con los principios y propósitos de la Universidad, con su proyecto educativo institucional, con su ethos cultural, que contribuyan a afianzar la identi dad, el sentido de pertenencia y el compromiso con la institución. zar y potenciar los recursos institucionales Movilizacion del talento humano, condición para utili- 20 Con acciones y estrategias como las que hemos identificado hasta ahora, creemos que es posible contribuir a eliminar esa brecha que hay en la universidad entre formación y utilización del conocimiento, contrarrestar ese efecto perverso de disponer de un incalculable valor agregado en materia de formación profesional y postgraduada de docentes, em pleados y trabajadores de la universidad que no se despliega, no circula, ni se utiliza en función del quehacer universitario, de sus prob lemas y prioridades. Situación que se ha reve - lado con mucha fuerza en esta investigación en la que se observan carencias y vacíos que pueden resolverse con los recursos institucio nales existentes; solo que requieren de buenos sistemas de información, documentación y comunicación, pero fundamentalmente de acti tudes que favorezcan la valoración y el recon ocimiento de las capacidades, posibilidades y potencialidades de esta comunidad univer sitaria. Es necesario tener capacidad de convocatoria pero también disposición y apertura para aceptar dicha invitación a formar parte de, a compenetrarnos con la universidad, para transformarnos, contribuyendo así a su transformación. Actitudes de esta naturaleza pu eden favorecer la idea de la universidad como un Laboratorio natural de investigación, de estudio e intervención, tal como se ha experimentado en diferentes momentos de su histo ria por parte de algunos estamentos, especial- mente de sus profesores. Es necesario además, mantener información actualizada sobre las múltiples experiencias curriculares y extracurriculares que tienen lugar en la universidad, divulgarlas oportunamente a fin de que sean utilizadas y potenciadas conforme a fines específicos de las distintas unidades académicas y programas académicos de pregrado y posgrado. De igual manera, es necesario sistematizar la infor mación sobre los grupos estudiantiles, indagar sobre el tipo de asuntos que vienen siendo objeto de reflexión y estudio por parte de ellos; indagar sobre su pertinencia y relación con el quehacer institucional, su articulación con el Plan de desarrollo de la Universidad y sus asuntos estratégicos, con los Planes de acción de la Universidad, de sus facultades e Institutos, entre otros. 21 dirección universitaria Caracterización de los actores, una preocupación de la Es urgente que Dirección universitaria prom ueva la realización de estudios que den cuenta de manera sistemática y permanente, no sólo de quiénes, cuántos y cómo somos sino también que permita conocer el conjunto de la oferta académica disponible y se facilite el acceso a los estudiantes, por ejemplo, a cursos electivos profesionales y complementarios; pero también a empleados que los requieran en virtud de necesidades institucionales propias de su labor. Es prioritario también, disponer permanentemente de estudios cuantitativos y cualitativos sobre la población estudiantil que permitan identificar tendencias, caracterizar el tipo de estudiante que accede a la univer sidad; que arrojen pistas sobre su capital cul tural, sobre su situación socioeconómica, etc. etc., de tal forma que esta información sea suministrada, conjuntamente con las listas de admitidos y matriculados, a las Facultades e Institutos y por su intermedio a los directores de programas con el propósito de intervenir de manera temprana en asuntos que favorez can el proceso formativo, contribuyendo así a reducir los riesgos de deserción y bajo rendimiento de los estudiantes. En este mismo orden de prioridades se ubican los egresados, los estudios en relación con este estamento y el contacto permanente con los empleadores y con el entorno en el que se desempeñan profesional es clave para retroalimentar y recrear el proyecto formativo de la Universidad. Los anteriores lineamientos son apenas una muestra de algunos de los principios orientadores de la política curricular formulados por el equipo de investigación. En los cuadros a continuación se presentan a manera de síntesis, los demás principios, las directrices, las estrategias y acciones que conjuntamente con el proyecto formativo delineado, confor man la propuesta que estamos haciendo des de esta investigación para actualizar y recrear la Política Curricular de Univalle, y para for talecer y consolidar el proyecto formativo de nuestra universidad. 22 23 1. La formación integral como propósito, la investigación y la extensión sus fundamentos y la flexibilidad académica, pedagógica, curricular y administrativa su estrategia Principios - Discusión e intervención sobre la relación teoría–práctica en el diseño curricular, en el trabajo pedagógico y en las prácticas profesionales, docentes y pasantías. - Reconocimiento y valoración de la diversidad y multiplicidad de espacios y actividades formativas que puede ofrecer la universidad a los estudiantes tanto en el ámbito interno como externo. - Propiciar la interdisciplinariedad y la complementariedad en la formación básica y profesional. - Formación en competencias básicas: lingüística y comunicativa que favorezcan la apropiación y el uso del Español como lengua materna y del Inglés como segunda lengua; la convivencia, el tratamiento y la resolución de conflictos, la reconstrucción del tejido social desde el arte, el juego y la lúdica; argumentativas y propositivas que favorezcan el respeto a los derechos humanos; el cuidado y la defensa de lo público. Estrategias - Replantear la formación profesional: formación teórica, práctica y técnica de los estudiantes. - Estimular el pensamiento crítico, el ejercicio de la autonomía con libertad y responsabilidad en distintos contextos y con diferentes actores. - Reforzar la formación de la consciencia histórica, el compromiso ético y la sensibilidad artística y estética. - Restituir el sentido de la formación básica general: la personalidad y el carácter y la formación básica específica: introducción a las disciplinas y profesiones. Directrices 5.2 LINEAMIENTOS DE POLÍTICA, ESTRATEGIAS Y ACCIONES - Revisar y actualizar los sistemas de homologación y equivalencias de créditos en todos los programas académicos de pregrado para darle cabida a la diversidad de actividades formativas ofrecidas por la universidad. - Examinar las formas de relación con el conocimiento, las modalidades pedagógicas, los métodos de trabajo y proponer formas que favorezcan la relación teoríapráctica en todos los programas académicos. - Diseñar ambientes de aprendizaje que despierten el placer por el conocimiento y la formación permanente en los estudiantes - Continuar apoyando el desarrollo de los proyectos Universidad y culturas; Constitución Política y formación ciudadana; Lectura y escritura; el programa de Deporte Formativo; el programa de Consejería. Mejoramiento de Competencias Básicas, evaluación de cursos, desempeño docente y estudiantil, ECAES y evaluación de PARES Académicos, Deserción y promoción , Plan de Mejoramiento de la Docencia Universitaria, ESYPED y las demás experiencias significativas examinadas en la investigación. Acciones 24 - Propiciar una mayor participación de los estudiantes en el desarrollo de los cursos, favorece su capacidad analítica, su creatividad y sentido de responsabilidad. - Mejorar la calidad de la educación en todas las sedes de Univalle Cali y Regionales. 3. La calidad de la educación y su evaluación, una prioridad institucional. - Divulgar profusamente la información relacionada con los grupos de investigación y sus proyectos - Promover discusiones entre programas de formación y unidades académicas sobre aspectos de la formación. - Propiciar la articulación entre la investigación y la formación en pregrado. Directrices 2. La participación estudiantil en las decisiones sobre su propia formación, condición para una verdadera formación integral. Principios - Reflexión permanente sobre los resultados de las evaluaciones de los cursos, del desempeño docente y estudiantil, de los ECAES y de las visitas de los PARES ACADÉMICOS - Renovación de las prácticas académicas, empezando por una reconsideración de los roles del docente y del estudiante. - Divulgación de las líneas y proyectos de investigación de los profesores y ofrecimiento de alternativas de aprendizaje para los estudiantes en este contexto. - Inserción social de los programas académicos y contribución al desarrollo local y regional. Estrategias - Poner en marcha el proyecto de Formación en Competencias Básicas en las Sedes Regionales. Conformar un equipo docente interfacultades para su desarrollo. - Apoyar los planes de mejoramiento de los programas académicos mediante una respuesta efectiva a las recomendaciones y prioridades señaladas y exigidas por los Pares Académicos. - Analizar resultados de las evaluaciones con profesores y estudiantes por Facultades e Institutos Académicos y diseñar estrategias de intervención y mejoramiento. - Orientar y acompañar a los estudiantes desde el inicio de su carrera procurando una actuación autónoma, responsable y comprometida con su formación. - Ajustar los programas académicos a las nuevas exigencias de la política Curricular. - Programar jornadas de investigación para los estudiantes. - Crear Semilleros de investigación en las distintas Facultades e Institutos y apoyar los existentes. Acciones 25 - Hacer un inventario de problemas y necesidades de Univalle y proponerlos como espacios de prácticas, trabajos de grado y pasantías de estudiantes, con el respectivo acompañamiento de los profesores desde sus líneas de trabajo docente e investigativo. - Circulación, utilización y potenciación del acumulado de saber teórico y empírico de la universidad. - Promover la investigación sobre la Universidad como una vía para producir pensamiento y conocimiento sobre sí misma. - Aprovechar la capacidad institucional para resolver los problemas de la Universidad y proponer alternativas. - Producir y difundir materiales impresos y electrónicos sobre aspectos teóricos, metodológicos y operativos de la reforma - Difusión, discusión y negociación entre las instancias que tienen que ver con la actualización de la política curricular. - Generar condiciones institucionales que favorezcan el debate y la apropiación de la política curricular en cada unidad académica, conforme a la naturaleza y especificidad de sus saberes y prácticas. 6. La Universidad, laboratorio natural de investigación-creaciónformación-intervención en todos los campos del saber. - Recuperar la directriz de que Las secretarias académicas deberán liberar espacios comunes para que profesores y estudiantes participen en: conferencias, conciertos, recitales, torneos deportivos, etc. programadas por la Vicerrectoría de Bienestar Universitario y las distintas unidades académicocurriculares de la Universidad. - Reglamentación de aspectos de la Reforma que nunca se llevaron a cabo, como la de crear unos criterios cuantitativos y cualitativos y mecanismos tanto centrales, como por parte de las unidades para producir y evaluar la política curricular y hacerla efectiva. - Recoger en la política de actualización curricular aspectos de las reformas anteriores que fueron ignorados en el Acuerdo 009 de 2000 y que aún tienen vigencia en la formación universitaria. - Ajustar los programas académicos a las nuevas exigencias de la Política Curricular de modo que contribuyan a fortalecer y consolidar el proyecto formativo que ha venido construyendo la Universidad. 5 El monitoreo permanente de la aplicación de las normas como fuente de información para la actualización de la política curricular. - Equilibrio entre las directrices tanto del estado como de los organismos internacionales con el patrimonio acumulado por la Universidad en el proceso de actualización de la Política Curricular. - Volver sobre los principios expresados en el Plan de Desarrollo 1986 – 2000 y en las anteriores reformas a fin de recuperarlos en el proceso de actualización de la Política Curricular. Acciones 4. La experiencia acumulada por la Universidad como fuente de conocimiento para el desarrollo y transformación de su política curricular. Estrategias Directrices Principios 26 - Formular un programa de investigación interdisciplinaria sobre formación universitaria con al menos un proyecto institucional. - Reconocer la diversidad del pensamiento pedagógico y educativo en Univalle; propiciar su despliegue para recrear y ajustar permanentemente la política académica y curricular. 7. La investigación sobre la formación universitaria, un programa prioritario para la institución. 8. La reflexión e investigación sobre las prácticas pedagógicas, clave para producir saber pedagógico en la Universidad. - Promover el Seminario como espacio de encuentro de profesores de todas las unidades académicas y de las diferentes sedes regionales. - Diseñar un Plan de Formación y actualización para los docentes. 9. El seminario permanente sobre formación, espacio clave para la reflexión, discusión y reorientación de la vida universitaria. 10. La formación pedagógica y curricular de los docentes, una preocupación institucional. - Caracterizar las prácticas pedagógicas de la Universidad e indagar sobre los modelos pedagógicos que subyacen a ellas. Directrices Principios - Mejoramiento de las competencias pedagógicas de los docentes: desempeño profesional, pedagógico y ético. - Institucionalización del Seminario Permanente sobre formación universitaria con los soportes requeridos para asegurar su periodicidad, la producción intelectual y las publicaciones asociadas a este tipo de experiencias. - Reconstrucción, sistematización y transformación de las práctic as pedagógicas de los profesores. - Ofrecimiento de la Maestría en Educación con énfasis en Pedagogía de la Educación Superior para profesores de Univalle de diferentes unidades académicas. Estrategias - Poner a funcionar el CREE con la dotación física y tecnológica correspondiente que garantice el ofrecimiento de al menos dos programas de cualificación al semestre. - Conformar el equipo responsable para reiniciar el Seminario en el 2° semestre de 2008. - Hacer un inventario de proyectos y experiencias en todas las unidades académicas e identificar potenciales contribuciones a las líneas de investigación de la Maestría en Pedagogía de la Educación Superior. - Identificar líneas de investigación posibles a partir de los resultados arrojados por la investigación sobre Política Curricular en la estrategia Seminario Permanente. Acciones 27 Directrices - Diseñar Planes de formación y actualización para directores de programas académicos, los miembros de Comités Académicos y Curriculares, el personal administrativo y de servicios, en asuntos que conciernen a la vida universitaria y en particular al contenido y la responsabilidad de estos cargos. - Identificar potencialidades y necesidades en los miembros de la comunidad universitaria. Principios 11. La formación de directivos, empleados y trabajadores, un asunto de interés institucional. 12.. La movilización del talento humano como condición para utilizar y potenciar los recursos institucionales. - Diálogo permanente entre la Dirección Universitaria y todas las instancias que tienen que ver con la formación como garantía de éxito en la aplicación y actualización de la política curricular. - Discusión y profundización de los criterios de calidad, pertinencia y relevancia; lo mismo que los de eficiencia y eficacia, sus alcances y límites en la vida universitaria. - Revisión y ajuste de modelos, esquemas y procesos administrativos de apoyo a la academia. Estrategias - Realizar estudios para caracterizar los distintos actores de Univalle y diseñar propuestas de intervención que favorezcan el desarrollo humano e institucional. - Solicitar a la Oficina de Planeación revisar estos resultados y diseñar propuestas que favorezcan la gestión académica y curricular en la Universidad - Modernizar y adecuar las estructuras, los procesos académicoadministrativos y de gestión a las exigencias de la política curricular y del proyecto formativo. Acciones Sistematización de los procesos de configuración Politica Curricular en la Universidad del Valle de la 1986-2005 * * * 28