Modelo de plan de estudios para facilitar el an lisis de peligros y la evaluaci n de riesgos Por David W. Wilbanks

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Desarrollo de Habilidades
Revisado por pares
Prevención
a través del Diseño
Modelo de plan de estudios para facilitar el análisis
de peligros y la evaluación de riesgos
Por David W. Wilbanks
L
a adquisición de cualquier habilidad es algo
complejo y la práctica permanente puede
hacerla más que perfecta. En septiembre de 2011,
la ASSE anunció la aprobación de la norma ANSI/ASSE
Z590.3, Prevención a través del diseño: Pautas para abordar los peligros y riesgos ocupacionales en los procesos
de diseño y rediseño. La norma requiere un análisis de
peligros y evaluación de riesgos siempre
que “se planifiquen, diseñen, adquieran
EN RESUMEN
o instalen nuevas infraestructuras, tec•Los análisis de peligros y
nologías de equipos y procesos” (ANSI/
evaluaciones de riesgos son la
ASSE, 2011, pág. 4), cuando se realicen alpiedra angular de la norma ANSI/
teraciones, después de investigaciones de
ASSE Z590.3, Prevención a través del
incidentes, e incluso cuando se desarrollen
Diseño.
tareas de demolición o desmantelamiento.
•Los profesionales de OSH deben
El análisis de peligros y la evaluación
ayudar al personal a desarrollar
de riesgos requiere que la organización
las habilidades para facilitar estos
se formule algunas preguntas clave, tales
análisis y evaluaciones.
como ¿cuáles son las funciones, carac•El mundo académico reúne las
terísticas o requisitos? ¿qué puede ir mal?
condiciones adecuadas para desar¿cuáles son los efectos? ¿con qué frecuencia
rollar enfoques innovadores para el
ocurre? ¿cómo se puede prevenir y detecuso final por parte de la industria.
tar? (ANSI/ASSE Z590.3, Anexo H).
Este artículo analiza los modelos
En la sección 8, la norma cita tres técnicas
para evaluar los resultados de la
básicas específicas para abordar las mayores
formación, y propone un modelo
necesidades de evaluación: el análisis de
conceptual para el desarrollo de hapeligros y la evaluación de riesgos prelimibilidades para el análisis de peligros
nar; los métodos de análisis de las listas de
y la evaluación de riesgos.
verificación y “qué sucede si”; y los análisis
modales de fallos y efectos.
La aplicación de la norma presenta a las organización oportunidades significativas para identificar
y eliminar los problemas antes de que se generen, pero
también implica importantes desafíos de implementación. El más importante podría ser el requisito de que
la alta gerencia: designe al personal dentro de la orgaDavid W. Wilbanks, M.P.H., CSP, CRSP, es gerente de seguridad corporativo
para operaciones descendentes en Gerdau Long Steel North America, con sede
en Tampa, Florida. Tiene más de 25 años de experiencia en OSH, desempeñándose como consultor y ocupando puestos importantes en la industria. Wilbanks
posee un B.S. en Seguridad y Salud Industrial de la Universidad estatal de Murray
y un M.P.H. de la Universidad Tulane. Está cursando un Ph.D. en Ciencias de la
Seguridad de la Universidad Indiana de Pensilvania. Wilbanks es miembro profesional del Capítulo del Sur de Florida de la ASSE.
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nización que tenga el conocimiento y [énfasis añadido]
las habilidades necesarias para anticipar, identificar y
analizar peligros y evaluar los riesgos derivados de ellos,
y determinar la capacitación apropiada para adquirir los
conocimientos y habilidades correspondientes (ANSI/
ASSE Z590.3, 2011, pág.15).
Más allá del compromiso de la organización y de la
disposición de los recursos, una implementación exitosa
y su mantenimiento depende principalmente de la disponibilidad de conocimiento experto que sea eficaz en la
facilitación de estos análisis y evaluaciones. El éxito no solo
está supeditado al personal que sabe y que comprende las
técnicas de análisis y evaluación apropiadas, sino que a
quienes dominan estas técnicas junto a otras habilidades
interpersonales de modo que pueden emplearlas bien.
Este artículo presume que el plan de estudios adoptado
en el ámbito académico para enseñar el análisis de peligros y la evaluación de riesgos se convertirá, en definitiva,
en una limitación significativa o en un incentivo poderoso
para los miembros del sector que intentan implementar
la PTD. Cerca de 200 instituciones ofrecen algún tipo de
curso de OSH de formación superior en los Estados Unidos (ASSE, 2014); esto constituye una gran oportunidad
de preparación para aquellos que ingresarán pronto al
sector. Los programas de educación en ingeniería, ciencias y negocios deben considerar también que el análisis
de peligros y la evaluación de riesgos nunca son de dominio exclusivo del profesional de OSH. Y se espera que
la industria pueda beneficiarse de los ejemplos que aquí
se proporcionan para sus esfuerzos de capacitación relacionados.
¿Un desafío pendiente?
El Instituto de Evaluación de Riesgos de la ASSE
(2013) describe la capacidad de “comprender y aplicar
los conceptos básicos de las diferentes técnicas de
evaluación de riesgos comunes” (pág. 1) como una competencia principal para los profesionales de la seguridad
que ejercen su profesión. Establece que el conocimiento
no es suficiente, sino que la aplicación es la clave. Lyon y
Hollcroft (2012) plantean también que algunas de las deficiencias presentes en la evaluación de riesgos comunes
incluyen la prevalencia de los miembros del equipo que
no tienen los conocimientos, experiencia ni objetivos
adecuados. Finalmente, el Centro de Seguridad de Pro-
cesos Químicos (2008) señala que “los líderes
Figura 1
que son eficaces en la evaluación de peligros
poseen habilidades interpersonales sólidas
Niveles de adquisición de habilidades en adultos
y un profundo entendimiento del ámbito y
los objetivos del estudio”. Además, “en la
mayoría de los casos, el éxito del estudio depende directamente de la habilidad del líder”
(pág. 43).
El famoso director musical Leonard
Bernstein fue ridiculizado a comienzos de
su carrera por su estilo enérgico y extravagante. “No hay nada que Lenny no pueda
hacer extraordinariamente bien”, comentaba
un conocido; “si es que no se ha esforzado
mucho” (Henahan, 1990). Se puede decir lo
mismo del facilitador del análisis/evaluación:
tanto el técnico como el intérprete demuestran que la creación de la música tiene
Nota. Adaptado de “The Five-Stage Model of Adult Skill Acquisition” (Modelo de las cinco etapas de la
que ver menos con el control directo y más
adquisición de habilidades en adultos) de S.E. Dreyfus, 2004, Bulletin of Science, Technology and Society,
con sacar indirectamente lo mejor de los par24(3), Tabla 1, p. 181.
ticipantes del proyecto.
Por otro lado, Jain y Anjuman (2013) apuntan a la criticidad de las habilidades interpersonales, que otros, y hay personas que nunca lo logran.
La adquisición de
como la resolución de conflictos, la diplomacia, la coSe necesita y será muy bienvenida la motivación de cualquier habilidad
municación y la colaboración, por sobre las habilidades Manuele (2013). Los profesionales de OSH deben co- es algo complejo
técnicas por sí solas, valorando su importancia para el menzar en algún lugar, y los conceptos análisis de peli- y la práctica
éxito en un 85% que se compara con el 15% de las ha- gros y evaluación de riesgos son bastante simples. Sin permanente puede
bilidades técnicas. En suma, sacar lo mejor de aquellos embargo, se debe tener cuidado de no ocultar involunhacerla más que
involucrados en la realización del análisis de peligros y la tariamente el trabajo necesario para alcanzar la comperfecta.
evaluación de riesgos es tanto un arte como una tarea del petencia de facilitación (que es requerida) o no dar la
técnico, cuya diferencia es un ejercicio inútil, ineficaz y suficiente importancia a la condición de experto (que se
superficial o una rica amalgama de aprendizajes que a la debiese desear). El conocimiento base y su aplicación son
larga protegen y preservan los sistemas complejos de los dos cosas diferentes (Yates, 2010).
peligros no reconocidos con anterioridad.
La interrogante que se plantea no es si el análisis de
Manuele (2013) afirma que “aprender a hacer análisis peligros y la evaluación de riesgos se pueden enseñar con
de peligros y evaluaciones de riesgos es bastante fácil” una rapidez relativa a un público amplio (a través de la
y que la “habilidad mejora con la aplicación”. Drey- transacción de conocimientos), o si la práctica es imporfus (2004) describe un modelo de cinco etapas para la tante, sino, más bien, cómo los participantes pueden
adquisición de habilidades en adultos (Figura 1) que tratar mejor este aprendizaje para minimizar las consegeneralmente concuerda con esto, tal vez con una salve- cuencias de las evaluaciones que se realizaron de forma
dad. Incluye la adquisición de una habilidad y podría incorrecta por no contar con las habilidades necesarias.
tenerse la certeza de que la práctica permanente puede ¿Cómo el personal está mejor preparado para comprenperfeccionarla. La demostración experta e intuitiva de der y aplicar la terminología y las técnicas de la
una habilidad nunca está garantizada, ni tampoco la evaluación de riesgos, evaluar y analizar riesgos, secompetencia.
leccionar técnicas de control de peligros, monitorear
La tarea de atarse los zapatos es ilustrativa. ¿Es algo los controles implementados para la eficacia y aplicar
sencillo? Para nada. Atarse los zapatos requiere habili- la gestión de los cambios? Estas preguntas hablan alto
dades motoras complejas y una secuencia correcta de pro- sobre la importancia del plan de estudios, es decir, “un
cedimientos. Considerando que el término sencillo jamás plan, un programa con objetivos o algún tipo de opinión
puede conectarse con esta tarea, solo se puede concluir experta sobre lo que debe tener lugar durante el estudio”
de forma apropiada a partir de la distancia que otorga (Ellis, 2004, pág. 4) para preparar mejor a aquellos que
el tiempo, la experiencia y la confianza que se basan en llevarán a cabo los análisis de peligros y evaluaciones de
repetidos éxitos. Se espera que los aprendices cometan riesgos, o que participarán en su realización.
varios errores en el camino y probablemente nadie logre
hacer la tarea de ejemplo perfectamente al primer intento; Importancia de los resultados
la frustración es normal, por lo que se intentarán métodos
La norma ANSI/ASSE Z490.1-2009, Criterios para las
abreviados que tienen resultados y contratiempos infruc- prácticas aceptadas en capacitaciones sobre seguridad,
tuosos.
salud y medioambiente, proporciona un plan de acción
Salvucci (2013) utiliza el término integración como para responder las preguntas que surjan, aunque existen
un referente técnico que dirige la atención a un proceso otros aprendizajes que también han demostrado su efecmás amplio, que incluye el acceso y la reutilización de tividad y que debiesen observarse. Por ejemplo, en el
conocimiento no relacionado en todo el domino de la ex- mundo académico ahora se valora menos lo que las
periencia del aprendiz. La reutilización o repetición es im- instituciones enseñan a sus estudiantes y se da más valor
portante, pero no suficiente. También existen pruebas que al hecho de que puedan realmente aplicar lo aprendido
demuestran que algunos individuos están mejor prepara- (Walvoord, 2010). Leathwood y Phillips (2000) describe
dos para utilizar claves y adquirir habilidades complejas un cambio hacia un currículo basado en las capacidades.
debido a una mayor capacidad para clasificar correcta y ráEl enfoque orientado a los resultados es el que prepidamente la información emergente y las características domina, y las capacidades de los estudiantes son claves.
del entorno (Wiggins, Brouwers, Davies, et al., 2014). En Shuman, Besterfield-Sacre y McGourty (2005) observan
términos simples, algunos lo hacen de forma más natural que la adopción de los criterios EC 2000 del Consejo de
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Tabla 1
Comparación de resultados
según los modelos de
educación y capacitación
Nota. Adaptado de “The Four Levels: An Overview” (Los cuatro niveles: un
resumen), de D.L. Kirkpatrick, 1998, Evaluating Training Programs (Cómo
evaluar los programas de capacitación), pp. 19-24; y de “The Four Phase Learning
Cycle” (El ciclo de aprendizaje de cuatro fases) de D. Meier, 2000, The Accelerated
Learning Handbook (Manual del aprendizaje acelerado), p. 53, Nueva York, NY:
McGraw-Hill; y de comunicaciones personales de F.E. Bird, G.L. Germain y M.D.
Clark, 2003, Practical Loss Control Leadership (Liderazgo en el control práctico de
pérdidas), pp. 244-245, Duluth, GA: Det Norkse Veritas.
El mantra de la
educación ahora es
resultados, resultados, resultados, y la
pedagogía parece
haber cambiado
para siempre.
El concepto de
alineación ofrece
un marco más
completo para
evaluar los resultados de la formación
y se complementa
con la planificación
del plan de estudio
cuando se combina
con los atributos
generales de los
modelos citados.
Acreditación para la Ingeniería y la Tecnología (ABET,
por sus siglas en inglés) aliviaron décadas de intentos desesperados de normas en favor de tres páginas y 11 resultados para los estudiantes de sus programas acreditados.
El mantra de la educación ahora es resultados, resultados, resultados, y la pedagogía parece haber cambiado
para siempre.
Existen dos casos de las instituciones acreditadas por
ABET que pueden ejemplificar este cambio. El programa
del Departamento de Ciencias de la Seguridad de la Universidad Indiana de Pensilvania (IUP, por sus siglas en
inglés) exige a sus estudiantes de pregrado completar la
realización del curso Seguridad de procesos y sistemas.
Uno de los objetivos de este curso es que los estudiantes
demuestren competencia en el manejo de los diferentes
métodos de análisis para los sistemas de seguridad, incluidos aquellos especificados en la norma relativa a la
PTD. Algunas facultades de la IUP piden a sus estu-
diantes que trabajen en grupos de tres personas durante
todo el semestre, aplicando las diferentes técnicas a un
sistema seleccionado por ellos mismos (M. Zreigat,
correspondencia personal, septiembre de 2014).
Los estudiantes del programa de pregrado de seguridad y salud de la Universidad estatal de Murray deben
completar el curso Fundamentos del control de riesgos. También hace hincapié en el uso de conocimientos y aplicación de competencias, por lo cual pide a los
estudiantes que demuestren su “capacidad de emplear
las técnicas, habilidades y herramientas científicas y técnicas necesarias para el ejercicio profesional” (J. Wells,
correspondencia personal, septiembre de 2014). Popov,
Blunt, McGlothlin, et al. (2013) describen los esfuerzos
de la Universidad Purdue y Virginia Tech por integrar la
PTD en sus planes de estudio a modo general. Esto incluye exigir a los estudiantes el desarrollo de actividades
prácticas de análisis de riesgos en situaciones del mundo
real. La confianza en la validez de este énfasis en los resultados y su consecución por parte de estas respetadas
instituciones, sugiere que tanto la industria como el
mundo académico (que no se limita específicamente al
del OSH) deben considerar ampliamente incorporar alguna aproximación de estos esfuerzos en el currículo de
la facilitación.
Constructo para la incorporación de los resultados en un
modelo de trabajo
Una revisión de los modelos más conocidos de la formación basada en resultados incluyó:
•Los cuatro niveles de evaluación de la formación de
Kirkpatrick;
•Los cuatro niveles de aprendizaje de Meier;
•El modelo de instrucción adecuada para tareas de Bird,
Germain y Clark.
En la Tabla 1, encontrará una descripción de cada
modelo, los cuales se resumen en el análisis que se presenta a continuación.
Los cuatro niveles de evaluación de la formación de Kirkpatrick
El modelo de los cuatro niveles de evaluación de la
formación de Kirkpatrick (1998) destaca la reacción,
la conducta de aprendizaje y los resultados. “¿Qué se
aprendió? ¿qué habilidades se desarrollaron
o mejoraron? ¿qué actitudes cambiaron?”
Figura 2
(pág. 39). Kirkpatrick opina que si la transferencia de conocimiento es todo lo que se
desea, solo se deben evaluar los elementos de
reacción y aprendizaje. Esto se puede lograr
con constructos tales como análisis del curso
y evaluación sumativa.
Sin embargo, si el objetivo es saber si el
alumno puede hacer una cosa determinada,
se deben incorporar algunos medios para
observar la conducta deseada al proceso de
evaluación. Por otra parte, si el objetivo es
cambiar los resultados, se necesita un
cuarto esfuerzo para evaluar los resultados
de la formación. El enfoque de Kirkpatrick
en la evaluación —la revisión reflexiva de la
capacitación una vez realizada— plantea una
evaluación retrospectiva de los resultados
para asegurarse de que una persona puede
hacer cierta cosa de cierto modo y para cierNota. Adaptado de “The Role of Assessment in the Revised Taxonomy” (El
tos resultados.
Modelo de alineación de
tres componentes
rol de la evaluación en la taxonomía revisada) de P.W. Airasian y H. Miranda,
Theory Into Practice (De la teoría a la práctica), 41(4), pp. 249-254, 2002, Facultad de Educación, Universidad Estatal de Ohio.
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Los cuatro niveles de aprendizaje de Meier
El concepto de aprendizaje basado en actividades de Meier (2000) evita las clases y
toma de apuntes para favorecer la implicación total de
los cinco sentidos del humano de la manera más realista
posible. El moverse, hacer, hablar, escuchar, observar,
representar, resolver problemas y reflexionar en torno a
la materia impartida, reduce el tiempo de capacitación requerido y aumenta la retención a largo plazo y la eficacia.
Papastergiou (2009) respalda este enfoque, comparando
el aprendizaje en los niños con las clases tradicionales y
su aprendizaje cuando utilizan un juego de computadora
como única técnica. No es sorprendente que la aplicación
del juego fuese el enfoque más efectivo. La prioridad que
se da a la actividad agrega un elemento importante al
currículo para lograr los resultados de capacitación deseados en cuanto a la facilitación del análisis de peligros
y evaluación de riesgos.
La instrucción adecuada para las tareas de Bird, Germain
y Clark
Bird, Germain y Clark (2003) creen que la formación
eficaz no es casualidad. Se necesitan métodos sistemáticos que, en caso de aplicarse, eliminen el aprendizaje
de ensayo y error que frecuentemente lleva a lesiones y
enfermedades ocupacionales, así como también daños
a la propiedad y pérdidas en la productividad y calidad.
Su modelo de la instrucción adecuada para las tareas de
cuatro pasos transmite la importancia de motivar a los
alumnos y de asegurar que sepan cómo hacer sus tareas.
Bird, Germain y Clark (2003) creen que la formación
eficaz no es casualidad. Se necesitan métodos sistemáticos que, en caso de aplicarse, eliminen el aprendizaje de
ensayo y error que frecuentemente lleva a lesiones y enfermedades ocupacionales, así como también daños a la
propiedad y pérdidas en la productividad y calidad. Su
modelo de la instrucción adecuada para tareas de cuatro
pasos transmite la importancia de motivar a los alumnos
y de asegurarse de que sepan cómo hacer sus tareas.
Las tres técnicas parecen ser consistentes y apoyarse
mutuamente; es decir, las características específicas se
asocian repetidas veces con el aprendizaje eficaz y los resultados de la formación, y cada una se puede comunicar
y comprender con claridad. La popularidad de estos
modelos proviene de su simplicidad. Los tres modelos,
aunque no se diferencian mucho cuando se les compara
de cerca, son inminentemente prácticos y ofrecen un marco necesario para el plan de estudios de la facilitación en
análisis de peligros y evaluación de riesgos.
Diamond (2008) sostiene que las habilidades cruciales
que necesitan los estudiantes no suelen adquirirse del
todo debido a que el curso que se imparte no está en línea
con el currículo. Airasian y Miranda (2002) concuerdan y
ofrecen una nueva taxonomía que resulta ser de utilidad.
Establecen que la alineación entre los tres componentes, los objetivos (resultados esperados), la instrucción y
la evaluación (de los resultados), es vital para asegurar
la validez de los resultados de la evaluación. Una mayor
alineación equivale a una mayor validez (Figura 2).
La idea de la alineación de los tres componentes parece sencilla; sin embargo, de acuerdo a lo que observan
Airasian y Miranda (2002), uno puede definir el conocimiento en al menos cuatro formas (p. ej., factual, conceptual, procedimental y metacognitivo), y analizar los
resultados de aprendizaje, en al menos seis (p. ej., recordar, comprender, aplicar, analizar, evaluar, crear). El concepto de alineación ofrece un marco más completo para
evaluar los resultados de la formación y se complementa
con la planificación del plan de estudio cuando se combina con los atributos generales de los modelos citados.
Los beneficios potenciales incluyen guiar el proceso
actual de capacitación o enseñanza; proporcionar una
estructura para una evaluación y poscapacitación com-
pleta; enfatizar la actividad del alumno a lo largo del proceso para que comprenda, retenga y domine la habilidad
esencial; integrar todos los conceptos destacados en los
respectivos modelos de cuatro niveles; y alinear los objetivos, la instrucción y la alineación.
Puesta en funcionamiento
En el siguiente cuadro se presenta el programa de un
curso ficticio con el objeetivo de trasladar esta discusión
de la teoría a la práctica. La Tabla 2 (pág. 50) ofrece una
calendarización para el curso hipotético con referencia a
varios aspectos del currículo planificado. El esquema del
curso se comparte sabiendo que está lejos de ser el diseño
ideal de un curso. No se presenta para mostrar cómo se
ve un plan de estudios perfecto, sino que para demostrar
la utilidad de una taxonomía de los resultados a través de
un currículo de ejemplo. No obstante, se espera que estos
elementos puedan servir de modelo para perfeccionar los
cursos de mayor o menor extensión y complejidad. El curso de ejemplo es equivalente a horas crédito correspondienes a tres semestres, pero se puede abreviar dependiendo
Descripción y objetivos del curso ficticio
Curso: Prevención a través del diseño: Facilitación de las técnicas para
el análisis de peligros y la evaluación de riesgos
Descripción del curso: Se hará un énfasis en el desarrollo de las
habilidades de facilitación y la aplicación práctica de las tres técnicas
cualitativas y semicuantitativas. Los estudiantes lograrán facilitar las
técnicas comunes (p. ej., listas de verificación “qué sucede si”, análisis
de peligros y evaluaciones de riesgos preliminares, y análisis modales
de fallos y efectos). Se hará hincapié en la norma ANSI/ASSE Z590.32012 como marco básico para el uso de las técnicas del análisis de
peligros y la evaluación de riesgos a lo largo del ciclo de vida de un
sistema: diseño, diseño preliminar, diseño detallado, construcción o
compra, asignación, mantenimiento de la producción y desmantelamiento.
Objetivos del curso
1) Desarrollar las habilidades de facilitación de modo que cada estudiante pueda planificar, facilitar/liderar y llevar a cabo la realización de
un análisis de peligros y evaluación de riesgos de forma experta y con
éxito.
2) Comprender las aplicaciones de importancia para el uso de los
análisis de peligros y evaluaciones de riesgos en las prácticas diarias de
la seguridad y la salud.
3) Conocer y aplicar el vocabulario básico común que se utiliza en la
práctica de los análisis de peligros y evaluaciones de riesgos.
4) Evaluar y clasificar los peligros utilizando criterios probabilísticos y
de impacto/gravedad.
5) Evaluar las fortalezas y limitaciones de las técnicas comunes, específicamente aquellas definidas en la norma ANSI/ASSE Z590.3-2012.
6) Crear planes para la reducción de riesgos que reflejen los controles
jerárquicos apropiados en un entorno de equipo y que se basen en las
evaluaciones de riesgos ya realizadas.
Referencias y textos
•ANSI/ASSE (2012). Prevention Through Design: Guidelines for
Addressing Occupational Hazards and Risks in Design and Redesign
Processes (Prevención a través del diseño: Pautas para abordar los
peligros y riesgos ocupacionales en los procesos de diseño y rediseño)
(ANSI/ASSE Z590.3-2012). Des Plaines, IL: ASSE.
•ANSI/ASSE (2011). Risk Assessment Techniques (Técnicas de
evaluación de riesgos) (ANSI/ASSE Z690.3-2011). Des Plaines, IL:
ASSE.
•Kaner, S. (2007). Facilitator’s guide to participatory decision-making
(Guía del facilitador para la toma de decisiones participativa) (2ª ed.).
San Francisco, CA: Jossey-Bass.
www.asse.org
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ProfessionalSafety 49
Tabla 2
Programa hipotético del curso: Técnicas y facilitación para el análisis de
peligros y la evaluación de riesgos
El material de apoyo sugerido
para el curso, Guía del Facilitador
para la toma de decisiones participativa (Kaner, 2007), pretende
ofrecer un marco de referencia
para inculcar las habilidades interpersonales que pueden determinar hasta un 85% de eficacia de
la tarea del facilitador (Jain y Anjuman, 2013). Hay muchos otros
textos disponibles que también se
pueden ocupar.
Conclusión
La Figura 3 presenta un
modelo de plan de estudios para
la facilitación de análisis de peligros y evaluaciones de riesgos. Las tres técnicas que
se
establecen específicamente
en la norma ANSI/ASSE Z590.3
se destacan en el centro. Fuera
del centro están los niveles de la
adquisición de habilidades en
adultos (Dreyfus, 2004), de inexperto a experto. La línea vertical
que separa el modelo pretende
representar la calidad, definida
hace un tiempo como la “conformidad con los requisitos” (SkyMark, párrafo 4). Esta definición
nos recuerda que es probable
que los niveles inferiores de la
adquisición de habilidades produzcan resultados de menor calidad, mientras que los resultados
de calidad superior deberían
corresponderse con los niveles superiores.
La línea de la calidad conecta
Nota. C =clase (class); HW = tarea (homework); SFW = taller de facilitación para el estudiante (student
el objetivo de la facilitación del
facilitation workshop).
análisis de peligros/evaluación de
riesgos con los mejores medios
El concepto de de las necesidades del usuario (p. ej., educación formal o
propuestos para su logro: un aprendizaje basado en realineación ofrece un industrias de riesgo bajo a moderado).
sultados donde los objetivos, la instrucción y la
También se pretende que un curso así se ajuste a evaluación están alineados correctamente. Si el modelo
marco más completo
se aplica en su totalidad, se espera que el personal sea
para evaluar los los criterios del ABET, incluso cuando no se busque su
acreditación
o
esta
no
sea
aplicable.
Hill
(2013)
argumencapaz de facilitar estas tareas de forma experta. Por el
resultados de la
ta con eficacia que la validez de la acreditación del ABET contrario, si no se siguen sus enseñanzas, se arriesga el
formación y se
es reconocida por todos los programas académicos de “precio del no cumplimiento” (SkyMark, párrafo 4).
complementa con la OSH que buscan garantizar un aprendizaje de calidad.
El objetivo aparente de la PTD es eliminar este precio
planificación del plan Los criterios del ABET (2013) insisten concretamente en del no cumplimiento del registro de incidentes. La hipóde estudio cuando que los resultados de los alumnos estén bien alineados tesis albergada es que los facilitadores experimentados
se combina con los con las habilidades inherentes a la facilitación eficaz de
puedan minimizar de forma sistemática las entradas en
atributos genera- los análisis de peligros y evaluaciones de riesgos, lo cual
el registro, tanto en frecuencia como en gravedad. Los
facilitadores inexpertos no podrán eliminar estas entrales de los modelos incluye:
das del todo, pero quizás contribuyan a su aumento. La
citados.
b) Diseñar y realizar experimentos, así como analiindustria y el mundo académico pueden y deben hacer
zar e interpretar datos.
inveresiones ahora para poder garantizar que los análic) Formular o diseñar un sistema, proceso o prosis de peligros y evaluaciones de riesgos se faciliten de
grama para cumplir con las necesidades deseadas.
forma experta, con la confianza de que ambos serán los
d) Trabajar en equipos multidisciplinarios. . . .
primeros en disfrutar de los dividendos percibidos. PS
f) Comprender la responsabilidad ética de la profesión.
g) Comunicarse de forma eficaz. . . .
k) Emplear las técnicas, habilidades y herramientas
científicas y técnicas modernas que son necesarias para
el ejercicio profesional (pág. 2).
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