COORDINADORES: ROBINSON SALAZAR-PÉREZ NCHAMAH MILLER Se moderniza la práctica del Trabajo Social https://www.youtube.com/watch?v=FJDUzNo2Ohk&app=desktop Teoría e historia antropológica: Lévi-Strauss: la estructura como modelo http://teoriaehistoriaantropologica.blogspot.com.es/2012/04/levi-strauss-la-estructura-comomodelo.html Hemisferio Izquierdo actualiza contenidos sobre la democracia http://www.hemisferioizquierdo.uy/ 1 Revista Memoria de México Número 258. Año 2016-2 http://revistamemoria.mx/ Revista Herramienta actualizada http://herramienta.com.ar/ Voces de Bolivia. https://visionzinternacionalbolivia.blogspot.mx/ Praxis Sociológica es una revista electrónica del Área de Sociología de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de Toledo, de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), con una publicación monográfica anual. http://www.praxissociologica.es/ Polis, Revista Latinoamericana 43 | 2016 Noviolencia, resistencias transformaciones culturales https://polis.revues.org/11493 Reflexiones marginales NÚMERO ESPECIAL BILINGÜE DE DELEUZE EDITORES INVITADOS: ANA CAROLINA PATTO MANFREDINI HÉLIO REBELLO CARDOSO JR. http://reflexionesmarginales.com/3.0/category/numero-especial-1/numero-especial-1dossier/ Jorgina, una transexual wayuu de 76 años desterrada por su gente- VideoEn un pueblo de machos como la Guajira la decisión de Jorge de convertirse a Jorgina hace más de 70 años le significó morir en vida. VIDEO http://www.las2orillas.co/jorgina-una-transexual-wayuu-de-76-anos-desterrada-por-supueblo/ Revistas Buzos http://buzos.com.mx/images/pdf/buzos724.pdf Revista Anfibia http://www.revistaanfibia.com/ensayos/ Revista Palabras al margen http://palabrasalmargen.com/ Revista Analectica actualiza contenidos http://www.analectica.org/ Artículos de Analectica http://www.analectica.org/category/articulos/ 2 Revista Ideas de Izquierda http://www.laizquierdadiario.com/ideasdeizquierda/category/politica/ http://www.laizquierdadiario.com/ideasdeizquierda/category/economia/ http://www.laizquierdadiario.com/ideasdeizquierda/category/internacional/ http://www.laizquierdadiario.com/ideasdeizquierda/category/debates/ http://www.laizquierdadiario.com/ideasdeizquierda/category/cultura/ http://www.laizquierdadiario.com/ideasdeizquierda/category/numeros-anteriores/ NÚM. 8 (2016): ENERO-JUNIO/ Revista Las Torres de Luccas. Especializada en filosofía política http://www.lastorresdelucca.org/index.php/ojs/index Revista Contrahegemonía actualiza contenidos http://contrahegemoniaweb.com.ar/ LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE CÓRDOBA (ARGENTINA), ACABA DE INAUGURAR SU NUEVO PORTAL DE REVISTAS https://revistas.unc.edu.ar/ Libros Políticas de la amistad, J. Derrida. Seguido de el oído de Heidegger http://bit.ly/29o4eit SOTOLONGO CODINA, PEDRO LUIS Y DELGADO DÍAZ, CARLOS JESÚS, (COMP) (2006) LA REVOLUCIÓN CONTEMPORÁNEA DEL SABER Y LA COMPLEJIDAD SOCIAL: HACIA UNAS CIENCIAS SOCIALES DE NUEVO TIPO. Biblioteca Virtual de CLACSO. Acceso al texto completo: http://www.paginaspersonales.unam.mx/files/266/sotolongo.pdf Vídeo: Los efectos del alcoholismo en un exmandatario norteamericano Un video que circula en redes sociales muestra al ex presidente estadounidense George W. Bush moviéndose rítimicamente durante el funeral de los cinco policías asesinados en Dallas. El ex mandatario sujeta las manos de su esposa Laura y de la primera dama Michelle Obama, mientras se mueve al ritmo del Himno de Batalla de la República, durante la ceremonia celebrada este martes. (Video RT) http://aristeguinoticias.com/1207/multimedia/bailando-en-el-funeralvideo/?utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaign=Feed%3A+AristeguiNot icias+%28Aristegui+Noticias%29 La desaparición de la URSS 25 años después: Algunas reflexiones http://lhblog.nuevaradio.org/b2-img/rodriguez_urss_25.pdf 3 Libros de Rebelión http://es.youscribe.com/catalogue/tous/actualidad-y-debate-de-sociedad/ensayos/nuestraamerica-complejidad-y-unidad-dialectica-de-la-humanidad-y-la-2744618 Una parte no conocida de la historia de la nacionalización de los hidrocarburos :Para recuperar la memoria histórica http://www.rebelion.org/docs/214324.pdf Las aporías del progresismo x Miguel Mazzeo ¿No será excesivo considerar como de “izquierda” y/o “populares” a aquellas políticas que no pretenden trascender el horizonte de un capitalismo reformado? Texto completo en: http://www.lahaine.org/las-aporias-del-progresismo http://www.herramienta.com.ar/revista-herramienta-n-58/las-aporias-del-progresismo "Felices de ver tanta comida junta": así se vivió la apertura de la frontera entre Venezuela y Colombia Natalio CosoyEnviado especial de BBC Mundo a Cúcuta (@nataliocosoy) Actualizado Viento Sur. http://vientosur.info/ Revista Sin Permiso actualiza contenidos http://www.sinpermiso.info/ “Tony Blair es un criminal de guerra”. Tariq Ali, entrevistado sobre el informe Chilcot y la Guerra de Irak Tariq Alí 10/07/2016 El silencio tras el Brexit Michael Hudson 10/07/2016 En el aniversario del referéndum griego James K. Galbraith 10/07/2016 Capitalismo del desastre: la doctrina de choque que los tories se mueren por lanzar Howard Hotson 10/07/2016 El error europeo de Podemos Yanis Varoufakis 10/07/2016 Noam Chomsky, John Halle y una confederación de lampreas: una nota sobre el voto del mal menor Jeffrey St. Clair 07/07/2016 La reunión de la OTAN en Varsovia: la cumbre de la tensión Àngel Ferrero 10/07/2016 Análisis estadístico de fidelidad del voto a UP 4 Vitorino García 04/07/2016 Política laica: ¿tiene sentido hablar de un “Islam moderado” Omair Ahmad 10/07/2016 «La tortura es lo que queda dentro». Informe sobre la tortura Ramón Sola 04/07/2016 Margaret Thatcher no provocó el Brexit, pero el Brexit volverá a traer el thatcherismo Andy Beckett 05/07/2016 Una experiencia de barrio. Sant Antoni de Barcelona Miguel Salas et alii 10/07/2016 Premios Nobel al servicio de Monsanto y Syngenta Silvia Ribeiro 05/07/2016 26J: nada cambia, todo sigue por hacer Antón Sánchez 10/07/2016 Semillas de la discordia: entre derechos y patentes Vanina Lombardi 06/07/2016 El desencanto cultural que puede acabar con Podemos Carlos Prieto 06/07/2016 Comunicado sobre el asesinato de la compañera Lesbia Yaneth Urquía Urquía COPINH 10/07/2016 De aquellos polvos de la Agenda 2010, estos lodos de 2016: el miedo de la clase obrera alemana Oskar Lafontaine 10/07/2016 “Si Podemos y Ciudadanos no se hubieran enfrentado, PP y PSOE estarían triturados”. Entrevista Jaime Miquel 10/07/2016 Más allá del cooperativismo, más allá de la economía social Emmanuel Rodriguez David Gámez 08/07/2016 La otra humillación (y 2) Gregorio Morán 10/07/2016 Las muertes misteriosas de Thunder Bay The Guardian 04/07/2016 Los glaciares del Pirineo aragonés han perdido el 75% de su superficie en los últimos 35 años Pirineodigital 05/07/2016 Unidos Podemos, las confluencias y el 26J Ramón Luque 10/07/2016 5 Ulf Christiansson: Entrevista y testamento de una vieja esperanza Según la revista Sweden Rock, Ulf Christiansson sigue siendo todavía el mejor vocalista de rock de Suecia - que no es poco teniendo en cuenta que Suecia es junto a Finlandia, el país con mayor concentración de grupos de heavy metal del planeta Tierra. Pero lo cierto es que con 26 años, Ulf tomó la decisión de escribir exclusivamente en torno a Jesús, el tema más impopular del rock. Esta es la entrevista que nos ha concedido a Entrelíneas, 40 años después.... Puedes leer el resto desde el siguiente enlace: http://www.entrelineas.org/leer.asp?a=ulfchristiansson&utm_source=suscripcion&utm_medium=email&utm_c ampaign=ulf-christiansson Saludos, José Pablo Fernández Entrelineas Alertas rojas: señales de implosión en la economía global Posted: 07 Jul 2016 08:44 PM PDT Ahora las señales de alarma se multiplican, desde desajustes financieros graves hasta perturbaciones geopolíticas cargadas de guerras y desestabilizaciones, desde crisis institucionales hasta declinaciones económicas. Los comentaristas occidentales se maravillaban en los años 1990 ante el espectáculo de la implosión de la URSS, es probable que dentro de no mucho tiempo empiecen a horrorizarse ante desastres mucho mayores centrados en Occidente. http://feedproxy.google.com/~r/piensachile/~3/7HfYtTbWaKs/?utm_source=feedburner&utm _medium=email MEMORIAS DE GUERRA. OPERATIVO INDEPENDENCIA Publicado en Revista Puentes, año 4, Nº12, sept. de 2004 con el título “Los primeros años de la represión” Mayo de 2004. Datos actualizados a junio de 2008) http://webiigg.sociales.uba.ar/conflictosocial/publicaciones/Memorias_de_guerra_Operativo_ Independencia.pdf REVISTA HISTORIA PARA TODOS – AÑO 2 – NÚMERO 3 – JULIO 2016 – ISSN 2451 – 6333 https://revistahistoriaparatodos.wordpress.com/2016/07/06/revista-historia-paratodos-ano-2-numero-3-julio-2016-issn-2451-6333 Cuadernos de filosofía Latinoamericana VOL. 37, NÚM. 114 (2016) FILÓSOFOS Y FILOSOFÍAS http://revistas.usta.edu.co/index.php/cfla/issue/view/349 Convocatoria para publicar en Márgenes. Historia, justicia y sociedad | H-México 6 El Comité Editorial de la revista Márgenes. Historia, justicia y sociedad tiene el honor de invitar a los investigadores procedentes de la historia, las ciencias sociales y las humanidades para participar en los números 1 y 2 de nuestra revista, correspondientes a enero a junio y julio diciembre de… http://www.h-mexico.unam.mx/node/17879 Entrevista Pierre Bourdieu:Habitus,dominación y violencia simbólica. http://porelpanyporlasrosas.weebly.com/artiacuteculosdocumentales/entrevistapierre-bourdieuhabitusdominacion-y-violencia-simbolica Devenires No 34 http://devenires.umich.mx/devenires-34/ Interesante actualización de Marxismo crítico. https://marxismocritico.com/ Teoría y praxis No 3, Revista http://www.debates.teoriaypraxis.org/index.php/es/2-uncategorised/53revista-teoria-y-praxis-n-3-pagina-de-descarga Revista Question http://perio.unlp.edu.ar/question/ Vol. 1, Núm. 50 (2016): Otoño (abril-junio) de 2016 Tabla de contenidos Editorial Lo próximo PDF Ensayos Una lectura “contrailustrada” de la modernidad: sujeto, carencia y desamparo en el pensamiento de Weber PDF 3-12 Marcelo Carlos Altomare De hombres y mujeres. La subjetivación publicitaria y los espacios “a ganar”, ¿un problema de igualdad? PDF 13-20 Lucas Enrique Bazzara ¿Qué es un Macho? Más preguntas que certezas en el abordaje del género Juan Bautista Branz, José Antonio Garriga Zucal PDF 21-33 Migración femenina en España: Una aproximación a la “otra” desde la representación PDF 34-50 social Paola Andrea Contreras Hernández 7 La construcción mediatizada de la incertidumbre económica PDF Martín José Cortés 51-74 De la vida, la muerte y otras trivialidades PDF Gelly Genoud, Analia Lorena Meo, Francesca Capelli 75-89 Progresividad o regresividad en materia de derechos económicos sociales y culturales. Claves para pensar Nuestramérica (2015 – 2019) PDF 90-97 Jerónimo Guerrero Iraola, Carlos José Giordano Sol y Luna, revisitando una revista nacionalista de derecha PDF Nicolás Iannini 98-113 La construcción discursiva de las artes visuales de los noventa PDF Syd Krochmalny 114-134 Dualidades luteranas. Breve ensayo sobre la libertad, la servidumbre y la obediencia PDF 135-149 en Martín Lutero Ignacio Luis Moretti, Lorena Schefer Comunicación: entender que ayer no es hoy Paula Inés Porta PDF 150-159 Trabajo y salud: aproximaciones a un estudio de caso referido a los peones forestales PDF 160-172 en la provincia de Entre Ríos, Argentina María Celeste Rosso El trabajo managerial. Las particularidades locales de un modelo hegemónico Diego Szlechter, Leopoldo Blugerman, Ezequiel Cozza PDF 173-193 Informes (Im)posibilidades, adscripciones y disputas en las trayectorias de los y las jóvenes en PDF 194-207 contextos rurales de Ñorquin Co y Cushamen Aymará Daniela Barés Dimensión discriminación: xenofobia y clasismo en la ciudad de Buenos Aires. Notas PDF 208-227 sobre una encuesta acerca de la disposición democrática Nicholas Dieter Berdaguer Rauschenberg, Oriana Seccia La erradicación en el cine. Las villas de la Ciudad de Buenos Aires durante la última dictadura militar PDF 228-244 Leandro Daich Varela Uso efectivo de las redes sociales como herramientas comunicacionales para la promoción de destinos turísticos PDF 245-278 Miguel Felipe Espinoza Méndez, Suhail Aurora Zabala Ayala, Inrgrith Roselys Marcano Rojas La alteridad como lo nuevo radical y el proyecto de autonomía: huellas de Castoriadis PDF 279-296 en discursos sobre naturaleza y género Maria del Socorro Foio La estrategia comunicacional en el sector mega-minero. Un estudio del caso La Alumbrera en Argentina Julieta Godfrid 8 PDF 297-314 Marketing y posicionamiento: un análisis desde la gubernamentalidad neoliberal. La gestión pública del turismo en la Argentina del siglo XXI PDF 315-330 Fernando Francisco Mas Caracterización de la agenda mediática en la Agencia Cubana de Noticias durante los PDF 331-351 años 2014 y 2015 Viviana Muñiz Zúñiga, Yamile Haber Guerra, Gretchen Gómez González Los diputados de la ciudad de Buenos Aires: análisis de perfiles y trayectorias durante PDF 352-369 el periodo 2007-2015 Noelia Belén Noya Iglesias El lugar de las radios comunitarias ante los desafíos de la implementación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual PDF 370-386 Marina Alejandra Ollari La Salada: imaginarios y representaciones de la informalidad y las desigualdades territoriales en la prensa escrita PDF 387-404 Ester Schiavo, Paula Vera, Camilla Dos Santos Nogueira Iniciación a la investigación Reflexiones sobre políticas culturales y dinámicas de circulación durante la democracia neoliberal argentina PDF 405-413 María Paula Pino Villar Los intelectuales de derecha en América Latina: los usos sociales del conocimiento y PDF 414-427 su vinculación con la política María Florencia Prego Gauchito Gil, entre la adoración y la justicia divina. Un acercamiento al mito religioso PDF 428-440 popular desde la comunicación Mauro Daniel Salvador Entrevistas La etnografía como estrategia de trabajo. Experiencias y reflexiones sobre su utilización dentro del camp de las ciencias sociales Fernanda García Germanier, Leonardo González Ya salió El Socialista Centroamericano No 223.www.elsoca.org 31 audiolibros de Julio Cortázar. http://www.elciudadano.cl/2015/10/06/218883/buenisimo-te-dejamos-31audiolibros-gratuitos-de-julio-cortazar/ Diario de octubre actualiza contenidos. https://diario-octubre.com/ La implosión de la Venezuela rentista1 Edgardo Lander http://www.rebelion.org/docs/214427.pdf 9 Movimiento estratégico de Maduro en la dirección del gobierno venezolano ¿será suficiente? Venezuela: ¿quién es Vladimir Padrino, el militar que Maduro nombró de "superministro"? Daniel Pardo http://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-36780599 Todo y de todo se asoma por Venezuela. http://www.aporrea.org/ Alertas rojas: señales de implosión en la economía global. El capitalismo global a la deriva x Jorge Beinstein - La Haine Los que se maravillaban en los '90 ante la implosión de la URSS, es probable que dentro de poco empiecen a horrorizarse ante desastres mucho mayores en Occidente Texto completo en: http://www.lahaine.org/alertas-rojas-senales-de-implosion http://beinstein.lahaine.org/b2-img/Beinstein_sealesglobales_julio2016.pdf El negocio de los Outsourcing http://www.contralinea.com.mx/archivo-revista/index.php/2016/07/13/el-outsourcing-sucionegocio-del-gobierno/ El outlet Margaret Hilda Thatcher... Theresa May: ¿Una nueva “dama de hierro” para el Reino Unido? Durante su ministerio, ella ha reformado a la institución de la policía, endurecido las políticas anti drogas y reforzado las medidas de vigilancia. También se ha opuesto a la adopción homoparental y ha puesto duras restricciones a los inmigrantes. http://www.elciudadano.cl/2016/07/12/305262/theresa-may-una-nueva-dama-de-hierropara-el-reino-unido-12-07-2016/ 10 “Hillary Clinton parece una enfermera sádica” y otros 4 insultos al mundo de Boris Johnson, el nuevo canciller de Reino Unido RedacciónBBC Mundo http://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-36795692 POLÍTICOS Y FUNCIONARIOS PASARÁN POR EL POLÍGRAFO PARA ACABAR CON LA CORRUPCIÓN…EN RUSIA https://elrobotpescador.com/2016/07/12/politicos-y-funcionarios-pasaran-por-el-poligrafopara-acabar-con-la-corrupcion-en-rusia/ ¿Cómo ha decidido una ciudad filipina combatir el acoso sexual callejero? https://lnkd.in/e36JXkE LO PERSONAL ES POLÍTICO Y LO POLÍTICO SUELE SER PERSONAL: DIARIO DE ECUADOR http://www.unitedexplanations.org/2016/07/08/lo-personal-es-politico-y-lo-politico-sueleser-personal-diario-de-ecuador/ La economía mexicana en franca recesión http://www.contralinea.com.mx/archivo-revista/index.php/2016/07/12/la-economiamexicana-en-franca-recesion/ ¿Cuáles son los países de América Latina con las mejores universidades? RedacciónBBC Mundo http://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-36791078 Por qué los jóvenes tienen miedo de convertirse en adultos Un estudio sociológico indica que la inmadurez y el miedo de crecer son inherentes a los jóvenes estadounidenses. https://actualidad.rt.com/sociedad/212649-jovenes-miedo-eeuu-convertirse-adultos György Lukács, 'Derrotismo y dialéctica'. Una defensa de 'Historia y conciencia de clase' x Alejandro Nahuel Alzu Lukács se refiere a sus críticos, que terminan proponiendo una concepción mecanicista de la historia que no deja lugar para la acción del proletariado La publicación de la primera edición en castellano de este texto lukácsiano ofrece una herramienta valiosa para los estudios marxistas. El texto central es la respuesta de György Lukács a las críticas de las reseñas de Historia y Conciencia de Clase –de aquí en más HCC– escritas en 1924 por László Rudas y Abraham Deborin. El texto en cuestión fue hallado a mediados de los años ’90 en los archivos moscovitas de la Comintern y publicado originalmente en 1996 en húngaro y alemán. Se estima que fue escrito alrededor de 19251926 y el título del mismo: “Chvostismus und Dialektik”, como señalan los cuidadores de la 11 edición, recoge el primer término del ruso jvost –“cola”, “zaga”– empleado por Lenin para denunciar el desconocimiento de la posibilidad objetiva del instante revolucionario de parte de los “economistas” que irían a la zaga del movimiento obrero, tanto en cuestiones de política organizativa como de conciencia de clase. Texto completo en: http://www.lahaine.org/gyoergy-lukacs-derrotismo-y-dialectica PDF/ http://www.herramienta.com.ar/revista-herramienta-n-58/gyoergy-lukacs-derrotismo-ydialectica-una-defensa-de-historia-y-conciencia Comprender el poder hoy: autores clave responden a cuestiones clave (02) Rafael Palacios “Rafapal” https://elrobotpescador.com/2016/07/06/comprender-el-poder-hoy-autores-claveresponden-a-cuestiones-clave-02-rafael-palacios-rafapal/ UNA INQUIETANTE PROPUESTA DEL GOBIERNO RUSO QUE HABLA SOBRE NUESTRO FUTURO https://elrobotpescador.com/2016/07/07/una-inquietante-propuesta-del-gobierno-ruso-quehabla-sobre-nuestro-futuro/ Los riesgos para la economía internacional según el Banco Central de Rusia Los representantes de los Bancos Centrales de ocho países, entre ellos Rusia y China, comentan cómo los acontecimientos económicos y políticos imprevistos han influido en su política financiera http://es.rbth.com/economia/2016/07/08/los-riesgos-para-la-economia-internacional-segunel-banco-central-de-rusia_609965 Rusia y Uruguay estudian la renovación de la central hidroeléctrica de Salto Grande http://mundo.sputniknews.com/entrevistas/20160701/1061456824/rusia-uruguaysaltogrande-energia.html La izquierda debería atreverse a advertir que el futuro global es oscuro Rómulo Pardo Silva https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214361 Chile: Unánime rechazo a la reforma educativa http://www.surysur.net/chile-unanime-rechazo-a-la-reforma-educativa/ "De la guerra fría a la caliente": Gorbachov critica las decisiones de la OTAN en Varsovia https://actualidad.rt.com/actualidad/212679-gorbachov-varsovia-criticar-otan-varsovia Una versión distinta sobre Corea del Norte. https://actualidad.rt.com/actualidad/210244-detienen-embajador-corea-norte-espanatrafico-armas 12 El único occidental que trabaja en Pionyang: "Los norcoreanos son como los latinos" Es imposible imaginarse otra nación del mundo tan hermética como Core del Norte. Sin embargo, en Pionyang trabaja un español que defiende su Gobierno y adora el país. https://actualidad.rt.com/actualidad/210233-corea-norte-espanol-unico-extranjero-trabajar México envejece y carece de infraestructura http://www.contralinea.com.mx/archivo-revista/index.php/2016/07/07/mexico-envejece-yno-hay-infraestructura-para-los-adultos-mayores/ Trump se proclama como ‘el candidato de la ley y el orden’ http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2016/07/11/trump-se-proclama-como-2018elcandidato-de-la-ley-y-el-orden2019 Chilenos, árabes y brasileiros se apoderan de la línea aérea mas exitosa. http://www.cronista.com/negocios/Qatar-Airways-comprara-el-10-de-Latam-por-us-600millones--20160712-0053.html Venezuela: traspaso de presidencia no está sujeta a "consenso" ni "votación" La canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez, defendió hoy que el traspaso de la presidencia rotatoria del Mercosur a su país no debe estar sujeto a "ningún tipo de consenso" ni "condicionamiento http://www.elpais.com.uy/informacion/venezuela-traspaso-presidencia-no-sujetavotacion.html No salir a la calle, no trabajar ni estudiar: el fenómeno 'hikikomori' que cobra fuerza en el mundo No salir de casa, no tener amigos salvo algunos contactos virtuales. Esta es la realidad de cientos de miles de personas que han optado por abandonar la vida social. https://actualidad.rt.com/sociedad/212708-hikikomoris-trastorno-aislamientosocial?utm_source=Email-Message&utm_medium=Email&utm_campaign=Email_weekly ¿Habrá Mercosur? Paraguay y Brasil siguen bombardeando http://www.surysur.net/habra-mercosur-paraguay-y-brasil-siguen-bombardeando/ Uruguay desoye socios del Mercosur y quiere entregar presidencia a Maduro El gobierno ratificó su intención de concretar el traspaso de la presidencia pro tempore a Venezuela, pero "teniendo en cuenta las diferencias existentes",… http://www.elpais.com.uy/informacion/uruguay-superar-diferencias-presidenciamercosur.html Estimados Colegas y amigos les enviamos el Boletín de Barómetro. Atentamente Barómetro Internacional 13 Estamos siendo víctimas de permanentes de ataques y bloqueos bien por los hackers o por Google sino recibe en su bandeja de correo el Boletin de Barometro los días Lunes y Jueves por favor hacernos saber por los siguientes correos: [email protected] /[email protected] y si no desea recibir por favor hacernos saber aquí Gracias En este boletín encontrará: Por: Eduardo Contreras Chile: No a la Impunidad La noticia del procesamiento y detención de Luis Emilio Cheyre, ex comandante en jefe del ejército chileno por los crímenes de la llamada “Caravana de la Muerte” de 1973, episodio de la ciudad de La Serena, Chile, no sólo ha dado la vuelta al mundo sino que ha conmovido fuertemente el escenario político nacional y puesto a la orden del día el gran tema de las relaciones cívico militares, el papel de las fuerzas armadas, su vinculación con el poder económico y su triste historial represivo. En particular por su protagonismo en el golpe de Estado de 1973 contra el presidente Salvador Allende y el genocidio perpetrado contra los sectores populares durante todos los años de la tiranía. Valiente decisión del juez Mario Carroza que no aceptó presiones. …. Sigue leyendo copia y pega el enlace…. http://www.barometrointernacional.com.ve/2016/07/11/chile-no-la-impunidad/ Por Bruno Lima Rocha y Júlia Klein Con los militantes aún vinculados a gobierno depuesto- Parte 3 Una crítica de Izquierda Este artículo se presenta como tercera parte de una serie de críticas a los partidos de centro - izquierda y movimientos de izquierda sociales que son base deapoyo del partido de gobierno derrocado (Partido de los Trabajadores / PT) y sus aliados. No tomamos como objetivo de esta crítica el “lulismo” (término creado para designar el periodo de gobierno del ex-presidente Lula) en sí, como fenómeno electoral de pacto conservador conmayorías concretas, pero si los grupos organizados que dentro de este “paraguas” de la gobernabilidad coexistían pacíficamente dentro del "gobierno en disputa." Reconozco la delicadeza del tema. En este trabajo, presento conceptos operacionales, del manual de la política, y propongo debate franco. …. Sigue leyendo copia y pega el enlace…. http://www.barometrointernacional.com.ve/2016/07/11/los-militantes-aun-vinculados-gobiernodepuesto-3/ Por: Alberto Beto González -Venezuela Del sujeto histórico al consumo masivo Cuando Karl Mark introdujo el concepto del Sujeto Histórico en sus interpretaciones sociales, lo hizo sobre la base de la necesidad que tiene todo proceso emancipador, de redención o de justa causa social, de contar con la participación activa de quienes se benefician de tales acciones, ya sea de manera directa o indirecta, eso si, partiendo del hecho que para el logro de las mismas se requiere de un verdadero esfuerzo colectivo y que este a su vez eche por tierra el egoísmo humano convertido en individualidad, y que por ende, de no ser así pondría en riesgo cualquier esfuerzo común en busca de la felicidad, elemento éste motivador de los seres humanos. Sin embargo cuando Mark escribió el Capital lo hizo evidentemente en tiempos donde la modernidad solo se remitía al desarrollo de las grandes corporaciones europeas al cual se le denominó…. Sigue leyendo copia y pega el enlace…. http://www.barometrointernacional.com.ve/2016/07/11/del-sujeto-historico-al-consumo-masivo/ Por: Antonio Guillermo García Danglades La “Masacre de Curuguaty” y el golpe de Estado en Paraguay – PARTE II La importancia geoestratégica que representa Paraguay para la dominación de Estados Unidos en la región va mucho más allá del control de las tierras paraguayas. En 2005, el Senado paraguayo había aprobado la entrada de un contingente militar de 400 marines a su territorio y le otorgó total inmunidad. Estados Unidos respondió, duplicando el financiamiento al Paraguay en la “lucha contra el terrorismo”, y bajo el programa del Comando Sur (US Southern Command) denominado “Nuevos 14 Horizontes”, impartió operaciones de entrenamiento y ejercicios, supuestamente en el área de la medicina, pero que de acuerdo a diversos activistas de derechos humanos, estaban más bien dirigidas a identificar “lideres rurales peligrosos”. Si bien la preocupación de algunos representantes del congreso condujo a la recisión de la inmunidad para los marines norteamericanos que se vieron forzados a dejar el país, la cooperación militar se mantuvo fortalecida con el equipamiento y entrenamiento de tropas paraguayas… Sigue leyendo copia y pega el enlace…. http://www.barometrointernacional.com.ve/2016/07/11/la-masacre-curuguaty-golpe-estadoparaguay-parte-ii/ Por: Carolina Vásquez Araya Retroceso sin retorno- Pienso en la Humanidad, así con mayúsculas, como un ideal fallido. Debieron suceder muchos asesinatos, innumerables abusos y millones de violaciones de niñas, niños, adolescentes y mujeres adultas para que los medios de prensa comenzaran a ceder sus privilegiados espacios a una de las mayores amenazas contra la vida y la integridad de más de la mitad de la población del continente. No era noticia. De hecho, la violencia intrafamiliar y las violaciones sexuales se consideraron, hasta hace pocos años, “un asunto privado” en el cual nadie tenía por qué intervenir. Sin embargo y aun cuando se reconoce el gran valor de la apertura de esta línea noti ciosa y de investigación, se observa un enfoque estereotipado en la forma -y patriarcal en el fondo- cuya perspectiva retrógrada se consolida. … Sigue leyendo copia y pega el enlace…. http://www.barometrointernacional.com.ve/2016/07/11/retroceso-sin-retorno/ Este infográfico muestra cómo las marcas usan los colores para detonar emociones en nosotros: La relación entre colores, emociones y logos de las grandes marcas (INFOGRAFÍA) Aprovechando la psicología del color las marcas buscan inducir en ti, su potencial consumidor, el deseo de sus productos o servicios. http://pijamasurf.com/2016/07/la-relacion-entre-colores-emociones-y-logos-de-las-grandesmarcas-infografia/ ANALISTA ADVIERTE QUE EEUU ESTÁ AL BORDE DE UNA INSURRECCIÓN https://elrobotpescador.com/2016/07/11/analista-advierte-que-eeuu-esta-al-borde-de-unainsurreccion/ TLC, para explotarte mejor Cortesía de Ruben Montedonico Rodriguez [email protected] La decisión del Reino Unido de salir de la Unión Europea generó turbulencias en los mercados y algunas tribulaciones en el Mercosur, que ve alejarse un tratado de libre comercio (TLC) que lo relacione con aquel grupo de países. En la gira de Mauricio Macri –escaso de ideas y tacto político- ruega patéticamente una pronta decisión que una a las partes, como demandan los empresarios regionales. Más allá de la decisión británica, lo cierto es que los problemas de la economía son una consecuencia prolongada de ajustes en Estados Unidos, la propia Eurozona y Japón, que derivan en la retracción del consumo y produce caídas en la adquisición de materias primas de países productores (periféricos del capitalismo central), agudizando el extendido decaimiento del comercio internacional: la fragilidad de los precios de los commodities que determinan los mercados "disgustan" a los exportadores con menores ganancias que en el pasado. 15 Asimismo, en lo financiero no se registran tasas de interés tan reducidas en los países centrales por mucho tiempo -como ahora-, aunque se prevé el regreso de los valores especulativos. Los niveles de corrección de la Fed –sin correlatos en Europa occidental y Japón– devolvieron solidez al dólar como divisa y dado que Estados Unidos exporta un 11% en relación con su PIB, con base en ello compra barato con su moneda, no sólo insumos, sino plantas productivas de otros países, para lo cual presiona por la concreción que ensanche esa práctica mediante tratados tipo TPP y TTIP (Transpacífico, uno, y Transatlántico para el Comercio y la Inversión, con la UE, el segundo) y para servicios (TISA). Le Monde Diplomatiquerefiriéndose al TTIP lo define así: “Una OTAN de la economía”. Frente a la pregunta de qué intereses tiene la UE y la Eurozona, José Luís Fiori –coordinador del Programa de Post-Grado en Economía Política Internacional de la Universidad Federal de Río de Janeiro– interpreta: “(La) falta de un poder central capaz de definir e imponer objetivos y prioridades estratégicas comunes se ve exacerbada por la sumisión militar de los europeos a la OTAN y a Estados Unidos, que fue quien impuso la expansión apresurada en dirección al Este, a partir de 1991, para ocupar estados que habían pertenecido al Pacto de Varsovia (…) Atrapado dentro de esta camisa de fuerza, la Unión Europea es hoy un ente político débil, con una moneda falsamente fuerte y muy poca capacidad de iniciativa autónoma dentro del sistema mundial”. Da razón a lo anterior el Informe Chilcot sobre la invasión a Irak en 2003, al sostener que el premier Tony Blair llevó a Gran Bretaña a la guerra por la decisiva influencia de Estados Unidos y su presidente, George W. Bush. Para el caso del TTIP el propósito no pasa por reducir los bajos niveles arancelarios sino por la modificación de la regulación en las relaciones comerciales entre espacios económicos, favoreciendo a grandes empresas trasnacionales, las verdaderas beneficiadas. La Comisión Europea se encerró en más de 100 encuentros con cabilderos y multinacionales para negociar contenidos del tratado. Resultó evidente que los países delegaron su soberanía en ella y ésta la traspasó a corporaciones multinacionales –en particular financieras–, con lo cual la Comisión pondrá su firma de conformidad al calce de acuerdos cuyas cláusulas le llegarán redactadas. Debe entenderse que lo que se aprueba en todas las reuniones secretas sobre reglas de tratados impide legislar de acuerdo con las necesidades ciudadanas. Una mirada hacia el empleo, en cambio, nos alerta que las aplicaciones tecnológicas de los avances científicos eliminan más empleos que los que crean y, en ese sentido, se da como referencia las cadenas mayores de producción automovilística estadunidense, que en 1990 – con la ocupación de más de un millón de personas– ingresaron 36 mil millones de dólares de la época, mientras en 2015, con 137 mil trabajadores, Apple, Facebook y Google tuvieron ventas por más de un billón de dólares. Si revisamos el sector agroalimentario, los números nos ofrecen cifras dramáticas: en el caso del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (Tlcan o Nafta) en una década Estados Unidos perdió cerca de un millón de empleos directos. Los tratados orientados por y desde Estados Unidos marginan a las grandes potencias emergentes, aunque con ello se debilite la estructura de la Organización Mundial de Comercio (OMC): de lo que se trata es de aislar eventuales mercados alternativos. Allí donde se intente, los agrupamientos centrales del capitalismo persiguen toda forma del “estado de bienestar” que algún día practicaron los europeos, para lo cual no dudan en exigir la eliminación de puestos de trabajo, precarizar empleos y privatizar servicios públicos. En palabras de Boaventura de Sousa Santos “es volver a la política de clase pura y dura, o sea, al siglo XIX”, un regreso de 200 años al liberalismo de los ingleses en tiempos de David Ricardo. La actualidad nos está manifestando que el capitalismo monopólico-financiero globalizado hace más compleja la batalla que deberá dar el movimiento obrero. El empresariado trasnacional se ha fortalecido de tal forma que fragmenta y condiciona mundialmente al trabajo, apoyando la reducción salarial, obteniendo mayores ganancias mediante la extracción de más plusvalía. Para esos logros incidieron en su favor los cambios intercapitalistas, que derivaron en la recomposición del conjunto hegemónico. A partir de la última postguerra y hasta nuestros días –sorteando diversas crisis– Estados Unidos ejerce preeminencia mundial, 16 haciendo depender lo financiero de sus aspiraciones y apetencias. Asimismo, ampara a las trasnacionales radicadas en su territorio aplicando las normas que más les convienen, manteniendo la delantera en sectores tecnológicos de punta y ejerciendo un papel conductor en agencias internacionales, que “hacen trajes a la medida” para recetar a terceros países. En América Latina las experiencias del neoliberalismo se han asociado con dictaduras militares y el Consenso de Washington. Chile, en su momento, fue puesto como ejemplo. Hoy en la región nos encontramos con que en los hechos quienes la componen tienen historias conocidas y relevantes de disparidades económicas y sociales en lo interno y entre sí. Hasta hace poco, Brasil, junto con Argentina y Venezuela mantenían –con distinta intensidad– el protagonismo con respecto a la integración. Sin embargo, en 2016 para nadie es un misterio que la situación cambió y que el protagonismo pasó de la tibieza integracionista –demasiados discursos y pocas acciones– a partir de la constitución de una mayoría opositora en el legislativo venezolano; el acceso de Mauricio Macri a la presidencia argentina; la extensión del intento de impeachmentcontra Dilma Rousseff a la desarticulación de sus alianzas políticas y el ataque contra Lula da Silva; el golpeteo persistente al casco popular de Bolivia; la aquiescencia de las autoridades paraguayas –influidas por la derecha brasileña–; la deriva sinuosa de Uruguay –que antepone el sólo ser “un pequeño país” librado a su suerte entre dos gigantes–, y toda suerte de tentaciones que ofrecen los miembros sudamericanos de la Alianza del Pacífico, encabezados por un gobierno dicho progresista: Chile. De acuerdo con lo visto, debe entenderse que la concentración propuesta engendra necesariamente capitalismo de monopolio, que al fusionarse con fuerzas económicamente dominantes (Estados Unidos o la UE) dan a éstas normas que las vuelven policías encargadas de maximizar la viabilidad del plan dominador. Ruben Montedónico, integrante de la REDIU. El territorio argentino en venta Alejandro Teitelbaum https://lahistoriadeldia.wordpress.com/2016/07/13/el-territorio-argentino-en-venta/ Alainet.org Lectura recomendada: –Ley 26.737 Régimen de Protección al Dominio Nacional sobre la Propiedad, Posesión o Tenencia de las Tierras Rurales. http://www.mininterior.gov.ar/fronteras/pdf/ley-26737.pdf –La ley de tierras aprobada en 2011 no impedía globalmente dichas ventas http://argentina.indymedia.org/news/2011/09/794040.php El territorio argentino en venta El actual Gobierno argentino dictó hace poco un decreto “flexibilizando” la ley de tierras de 2011 a fin de facilitar aún más la compra de tierras por capitalistas extranjeros. Según la Federación Agraria Argentina unos 300 mil kilómetros cuadrados (el 10% del territorio nacional) están en manos de extranjeros (equivalente a la superficie de toda la Provincia de Buenos Aires). Hay por lo menos dos aeropuertos extranjeros construidos en la Patagonia, sin que puedan ser detectados por los radares argentinos, ya que éstos o son obsoletos o no existen en la región. Un aeropuerto construido por Lewis, que está a nombre de un argentino de apellido Van Ditmar , cuya pista es tan larga como la de Aeroparque de Buenos Aires, desde donde se 17 puede entrar y sacar del territorio cualquier tipo de material. Lewis posee 14000 hectáreas en Chubut, que incluyen el Lago Escondido. El terrateniente más grande es en grupo familiar italiano y multinacional Benetton, que posee 900 mil hectáreas. Desde hace 15 años, cada vez son más numerosos los extranjeros que compran vastas extensiones de tierras, desplazando a las familias tradicionales de la oligarquía argentina. “Tenemos tierra en exceso”, declaró en los años ’90 el Presidente Carlos Menem, invitando a corporaciones extranjeras y a particulares a invertir. Desde 2002, la devaluación del peso, otrora vinculado al dólar, implicó un cambio favorable, acelerando un proceso de venta desenfrenado y sin control. “En las provincias de Santiago del Estero y el Chaco, la hectárea cuesta lo mismo que una hamburguesa”, decían los periodistas Andrés Klipphan y Daniel Enz, autores de “Tierras, S.A.”, una investigación realizada durante tres años por todo el país. “Se puede comprar lo que quiera, en cualquier lugar, si se tiene el capital suficiente, incluso en los parques nacionales”, asegura Gonzalo Sánchez, autor de “La Patagonia vendida”, que entrevistó a la mayoría de los extranjeros que han comprado tierras en el sur, que representa la tercera parte del territorio nacional y contiene sus principales riquezas: energía hidroeléctrica, 80% del petróleo y gas natural y una de las grandes reservas de agua dulce del planeta. Esta región se ha convertido en el paraíso de millonarios extranjeros que, según los autores de “Tierras, S.A.”, “se han beneficiado de la actitud flexible de los diferentes gobiernos nacionales y provinciales para adquirir millones de hectáreas y recursos no renovables, sin restricciones y a precios módicos”. El vicepresidente de AOL Time Warner y fundador de la cadena CNN, Ted Turner, posee 45 mil hectáreas en la región. El belga Huber Grosse compró 11 mil hectáreas en la provincia de Río Negro, donde los turistas ricos van a jugar polo y golf. “La Patagonia me recuerda al Texas de los años’50”, asegura Ward Lay, magnate de las papas fritas y amigo de George W. Bush, que se compró miles de hectáreas en esa provincia y viñedos en Mendoza. El cantante Florent Pagny vive parte del año entre sus dos estancias de la provincia de Chubut. Estos nuevos terratenientes tienen frecuentes altercados con las comunidades indígenas, que los acusan de apropiarse de las tierras de sus ancestros. Los habitantes de la Patagonia se quejan también de no tener acceso libre a algunos lagos y senderos en las montañas donde se encuentran las propiedades privadas. Los actores Robert Duvall, Richard Gere y Matt Damon son propietarios de varias estancias en las provincias norteñas de Tucumán, Salta y Jujuy. Grandes grupos vinícolas franceses, españoles e italianos se han instalado en Mendoza, al pie de la cordillera de los Andes, que ofrece tierras y un clima excepcional para el cultivo de la vid. Ahí, la hectárea vale diez veces menos que en California. Grandes grupos mineros, en su mayoría canadienses, explotan minas de oro y plata en las provincias de San Juan, La Rioja y Santa Cruz. Entre los inversionistas figura Bill Gates. Los nuevos ricos argentinos, principalmente estrellas del espectáculo y del deporte, pero también políticos, constituyen a su vez una nueva burguesía terrateniente. El jugador de básquetbol Emanuel Ginobili, estrella de los Spurs de San Antonio en la NBA, invirtió más de dos millones de dólares en proyectos turísticos de gran lujo en las costas del río Negro y en la ribera del lago Correntoso, en la Patagonia. El futbolista Gabriel Batistuta, ex delantero de la Fiorentina, se ha convertido en uno de los grandes terratenientes de la fértil provincia de Santa Fe. 18 Lista (publicada en 2008 por Marcelo Mangiante) de la cantidad de territorio argentino vendido a extranjeros: Mendoza: 250.000 hectáreas (equivalente a 12 veces la superficie de la Capital Federal), compradas por empresarios de Malasia, con gente adentro, además de miles vendidas y ofrecidas a capitales chinos y españoles. Vendidas: 500.000 hectáreas. En venta: 800.000 hectáreas. San Luis: 40.000 hectáreas compradas por empresarios italianos. En venta: 850.000 hs. San Juan: 2.000.000 de hectáreas en venta, más del 20% de la provincia incluyendo la frontera con Chile. Catamarca: Se venden campos del tamaño de la Isla Gran Malvina a U$S 8.- la hectárea (el precio de un ‘Big Mac’ en EEUU) Vendidas: 100.000 hectáreas a un grupo holandés. En venta: 1.600.000 hectáreas. Misiones: 172.000 hectáreas de la selva Paranaense (única en el mundo), taladas por la empresa Alto Paraná, propiedad del grupo Arauco de Chile. Formosa, Chaco y Corrientes: 1.400.000 hectáreas en manos de capitales australianos. Santa Fe: tierras compradas por EEUU. Entre Ríos: Vendidas 100.000 hectáreas. En venta 150.000 hectáreas. Santiago del Estero, Tucumán y La Rioja: Vendidas: 120.000 hectáreas. En venta: 1.300.000 hectáreas. Salta: 2.400.000 hectáreas en venta, entre ellas se encuentra la finca Jasimana en el corazón de los valles calchaquíes, equivalente a 65 veces la superficie de la Capital Federal. En total, en venta y vendidas 13.000.000 de hectáreas. En Patagonia se vendieron tierras que incluyen lagos, ríos, fronteras, animales, aún en zonas fronterizas de seguridad. Tierra del Fuego, 100.000 hectáreas de bosque (el más austral del mundo), compradas por una corporación de EEUU que intenta talarlas. Cada planta tarda decenas de años en crecer debido a las condiciones climáticas. Chubut: 20.000 hectáreas compradas y cercadas por alemanes, que incluían la reserva de Mapuches más grande del país, que fue desplazada y despojada de las mejores pasturas para alimentar ganado. Santa Cruz: las estancias (80.000 hectáreas), Monte León, Don Aike, El Rincón, y Sol de Mayo (cordillera), comprada por el terrateniente Douglas Tompkins de EEUU, quién pretende apoderarse de las reservas de agua potable más puras del planeta, formadas por la cuenca de los hielos continentales patagónicos, que desembocan en su mayoría en el río más caudaloso de Patagonia, el Rio Santa Cruz. Artículo tomado de: http://www.alainet.org/ 19 Barack Obama resucita la doctrina Monroe x Vicky Peláez El régimen de EEUU está usando la variante "suave" de la neo-doctrina Monroe, aprovechando la nueva coyuntura política que se vive en América Latina http://www.lahaine.org/mundo.php/barack-obama-resucita-la-doctrina América para los americanos (James Monroe, 1823) Desde hace más de cinco años, el Gobierno norteamericano ha estado tratando de convencer a la opinión pública latinoamericana y caribeña de que la "era de la doctrina de Monroe terminó" y que EEUU y Latinoamérica ahora son "socios" con iguales derechos, como lo anunció el secretario de Estado, John Kerry, en 2013 y, posteriormente, lo confirmó Barack Obama en 2015, en el Fórum de la Sociedad Civil, declarando que EEUU ya no puede "intervenir con impunidad" en el continente. Sin embargo, aquellos "días del pasado" han sido restaurados por el mismo autor de esta frase, el señor Obama, quien hizo resucitar la vieja doctrina de Monroe (1823), le sacudió el polvo y la adoptó para deshacerse de todos los gobiernos progresistas en el continente sin necesidad de una intervención militar. En condiciones del actual nivel de globalización que confirmó el rol de los países latinoamericanos como simples extractores y exportadores de recursos naturales en el Sistema Económico Mundial, la manipulación del mercado internacional por Wall Street y por el Sistema Financiero Mundial es suficiente para poner de rodillas a cualquier país latinoamericano y poner fin al populismo y progresismo. Como dijo el recientemente elegido presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, quien asumirá sus funciones el próximo 28 de julio, "lo que necesita la gente no son ideas y promesas, sino billetes" (dinero). Precisamente, esta idea de "falta de billetes para el pueblo latinoamericano", la lanzó el departamento de Estado norteamericano bajo la dirección de Hillary Clinton (2009-2013), aprovechándose de la crisis económica mundial que hizo bajar drásticamente el precio de la materia prima y haciendo "chillar" a las economías latinoamericanas. Aquella consigna fue acogida inmediatamente por los medios de comunicación globalizados, tanto norteamericanos como internacionales, en especial los latinoamericanos a su servicio, que intensificaron la 20 guerra mediática contra los gobiernos progresistas en la región, acusándolos de corrupción y de incapacidad para ofrecer el prometido bienestar a su pueblo. En este contexto, el Gobierno de Barack Obama está usando la variante "suave" de la neodoctrina Monroe, aprovechando la nueva coyuntura política que se vive en América Latina debido, según The New York Times, a la "pérdida de popularidad de los gobiernos de izquierda". Este periódico constata que "el cambio en el panorama político abrió la puerta para que una nueva generación de líderes definan un discurso distinto para América Latina. Esto ofrece una buena oportunidad a EEUU para reiniciar su relación con varios vecinos que, históricamente, han considerado a Washington como la intervención imperial". Lo que no quiere reconocer The New York Times, como el resto de los medios de comunicación globalizados, es que "el cambio del panorama político en América Latina" fue propiciado precisamente por el Gobierno norteamericano por medio de la "agresión interna y externa", como lo denunció Evo Morales. Esta operación ha sido dirigida y financiada por Washington para desprestigiar, debilitar, desestabilizar y tratar de sacar del poder a los presidentes de los países progresistas legítimamente elegidos por su pueblo, refiriéndose a Cristina Fernández de Argentina, Dilma Rousseff de Brasil, Nicolás Maduro de Venezuela, Rafael Correa de Ecuador, Daniel Ortega de Nicaragua y sin olvidar al boliviano Evo Morales. Los intentos de estos golpes de Estado "blandos", como los definió el papa Francisco, fueron ensayados sin lograr el éxito esperado en Bolivia en el 2008, Ecuador en el 2010, Venezuela en 2002, 2014-2015. El principal patrón para el golpe fue llevado a cabo en Honduras, donde el presidente Manuel Zelaya, por promover un referéndum a favor de los más necesitados, fue arrestado por los militares y llevado a Costa Rica. Inmediatamente después de esta intervención, el Parlamento hondureño aprobó una resolución de la renuncia de Zelaya nombrando con la venia de Washington al presidente del Congreso, Roberto Micheletti, un nuevo jefe del Gobierno. Posteriormente, organizaron las nuevas elecciones presidenciales y eligieron en 2010 a un hombre de Washington, Porfirio Lobo como el nuevo presidente. Así de simple, Hillary Clinton, quien organizó aquel golpe "blando" de Estado a través de su hombre de confianza, Lanny Davis, de la Trident DMG, mandó un mensaje a Latinoamérica indicando que Washington siempre defenderá los intereses de sus transnacionales y lo que tanto les gusta repetir a los políticos estadounidenses, actuarán siempre para proteger su seguridad nacional inventando los peligros que en realidad nunca han existido. Los nuevos tipos de golpe para sustituir a los presidentes progresistas o populistas recibieron el nombre de "cambios constitucionales". Tres años después, en 2012, el presidente de Paraguay, Fernando Lugo, que era un exsacerdote católico y seguidor de la Teología de la Liberación, sufrió "un golpe constitucional" violando los golpistas impunemente el orden constitucional también a instancias del departamento de Estado norteamericano. El periodista norteamericano Wayne Madsen escribió en 'Intrepid Report' que el "neofascista Mauricio Macri", protegido de EEUU, venció a Daniel Scioli en las elecciones cuya "votación se vio empañada por reportes de fraude electoral en Buenos Aires. Enseguida adoptó una drástica política neoliberal de ajuste estructural, implantación de tarifazos y reducción de los programas sociales. Ya es de conocimiento público también la interferencia de EEUU en las elecciones en la Asamblea Nacional de Venezuela, donde la oposición de extrema derecha ganó la mayoría con el apoyo abierto de la empresa del clan Clinton, Greenberg Carville Shrum, sin olvidar las donaciones de las fundaciones dirigidas por Álvaro Uribe, José María Aznar y las de los disidentes venezolanos en Miami. 21 Durante el referéndum en Bolivia, celebrado en febrero pasado y que perdió Evo Morales, numerosas Organizaciones No Gubernamentales, el Instituto Open Society de George Soros y la agencia para el Desarrollo internacional (USAid), usaron la tecnología virtual para desinformar a la opinión pública boliviana. En Ecuador, el presidente Rafael Correa declaró hace poco que "las campañas de desinformación son parte del nuevo Plan Cóndor. Sabemos quiénes eran comprados por la CIA y ahora son políticos que van a las marchas. Hay financiamiento para grupos opositores, hay estrategias articuladas, redes sociales y supuestos analistas e investigadores para generar escándalo". En total, la Fundación Nacional para la Democracia (NED) gastó, en 2015, para fomentar la oposición en Ecuador 1.052.818 dólares y, en especial, financió, según el secretario de Comunicación, Patricio Barriga, plataformas digitales "con el único propósito de desprestigiar mediáticamente al actual Gobierno". La Fundación Freedom House y la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) también están participando activamente en la desestabilización de la revolución Ciudadana ecuatoriana. La oposición brasileña recibió un fuerte apoyo financiero y moral de la Fundación Albright Stonebridge Group, de la exsecretaria de Estado, Madeleine Albright (1997-2001), para destituir a la presidenta legítimamente elegida Dilma Rousseff. Madeleine Albright se convirtió en una persona tristemente famosa cuando declaró que la muerte de 500.000 niños iraquíes durante la guerra de EEUU contra Irak fue un "precio que valía la pena de pagar". Hilary Clinton siempre ha sido su seguidora y admiradora. Los líderes opositores brasileños estaban permanentemente consultando a Washington como proseguir con la destitución de la presidenta. No le importó a la Casa Blanca la participación de la mayoría de los golpistas en las redes de corrupción y el lavado de dinero. Lo que valía era terminar con el populismo de Lula da Silva y Dilma Rousseff para asegurar el acceso de las transnacionales norteamericanas a los recién descubiertos 100.000 millones de barriles de petróleo. La neo-doctrina Monroe, incorporada por Barack Obama para América Latina, tiene también su parte militar dura, que fue definida por el exjefe del Comando Sur, general John F. Kelly (2012-enero 2016), en los siguientes términos: "EEUU tiene nuevas amenazas en Latinoamérica, como el narcotráfico, terrorismo, la migración, la ayuda humanitaria y la protección de los recursos naturales. Todo esto justifica la intervención del Pentágono en cualquier lugar". Para este general, Honduras, El Salvador y Guatemala se aproximan a la categoría de estados fallidos y, como no son capaces de gobernarse por sí mismos, necesitan ayuda de EEUU. Para los líderes norteamericanos, esta 'ayuda' no puede ser otra que la instalación de bases militares. Se calcula que, actualmente, el Pentágono tiene más de 70 bases militares conocidas en América Latina y no menos de 20 bases clandestinas, especialmente en Amazonía. Brasil y Venezuela están prácticamente rodeados por estas instalaciones militares estadounidenses. Actualmente, el nuevo presidente de Argentina, Mauricio Macri, está negociando la instalación de dos bases militares norteamericanas en zonas estratégicas de gran importancia de Argentina. Una se edificará en la provincia sureña de Tierra del Fuego para apoyar "tareas científicas" en la Antártida, según anunció el presidente de Argentina. Pero es de conocimiento público que las bases militares en el extranjero no tienen nada que ver con las tareas científicas, sino con el control geoestratégico y geoeconómico de la zona de su interés. La otra base se instalará en la Triple Frontera (Argentina, Paraguay y Brasil), donde está ubicado uno de los acuíferos más grandes del mundo, Acuífero Guaraní. Tanto los presidentes Néstor Kirchner como Cristina Fernández jamás permitieron la instalación de las bases norteamericanas en su territorio. Ahora están corriendo tiempos nuevos en América Latina, 22 donde las élites están logrando dominar a las "masas ignorantes", en expresión de James Traub, del Consejo de Relaciones Exteriores (CFR), quien alguna vez llamó a las élites a "sublevarse contra las masas ignorantes", simplemente aplicando la neo-doctrina de Monroe. Después de intentar desmontar los gobiernos progresistas, los globalizadores tratarán de desintegrar al MERCOSUR, la UNASUR, la CELAC, la CARICOM y el ALBA. Para cumplir con sus metas, los 'iluminados' globalizadores siempre encontrarán políticos prestos a ser sus servidores, como fue alguna vez Alan García, de Perú, quien lanzó en 2010 la idea norteamericana como si fuera la suya de que "no hay que crecer para adentro, como soñaron en el Pacto Andino y el Mercosur. Hay que hacer el bloque para crecer hacia afuera", afirmó al revelar que "quisiera que la historia me recuerde como promotor de la Alianza del Pacífico (AP)". Es cierto que el expresidente de Perú fue uno de los promotores de la AP por encargo de EEUU, pero no su creador, pues AP fue la obra de Washington para facilitar la creación de la TPP (Acuerdo Transpacífico de la Cooperación Económica), cerrando el pase al avance comercial de China tanto en América Latina como en Asia y Oceanía. Así funciona la neo-doctrina de Monroe, que combina la fuerza "blanda" y la brutal para proteger y expandir los intereses norteamericanos en América Latina, haciendo retornar poco a poco a sus "hijos" extraviados y desinformados por completo a su "patio trasero". Sputnik.com Texto completo en: http://www.lahaine.org/barack-obama-resucita-la-doctrina Colombia. “TERMINARAN EN UNA CARCEL O UNA TUMBA”, DICE SANTOS Un frente rebelde resiste en Colombia http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-303666-2016-07-08.html El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, le advirtió a un sector de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que amenaza con no acogerse a los acuerdos de paz que se negocia en La Habana, que serán combatidos. El frente primero Armando Ríos de la guerrilla colombiana entrega en zonas del oriente del país panfletos en los que advierte que no se desmovilizará porque considera que no hay solución a los problemas económicos y sociales del país. Desde la localidad de El Retorno, en el departamento del Guaviare, el presidente Santos le dijo al sector de la guerrilla colombiana que están ante la última oportunidad de acogerse al acuerdo, y advirtió que si no lo hacen, “les aseguro que terminarán en una cárcel o en una tumba”, reprodujo radio Caracol. El mandatario indicó que Colombia tiene Fuerzas Armadas más fuertes y contundentes que se concentrarán en combatir a aquellos grupos que se queden por fuera del proceso de paz. Santos visitó El Retorno para cumplir una de las tantas charlas públicas que viene realizando con sus colaboradores sobre “pedagogía para la paz”. El ultimátum lanzado por Santos contrasta con el optimismo y el apoyo de los colombianos al proceso de paz. Según el último sondeo de la firma Gallup, un 53 por ciento de los colombianos cree que se logrará un acuerdo en la negociación que sostienen en Cuba el Gobierno y las FARC, un aumento de ocho puntos porcentuales frente a la encuesta de diciembre. El apoyo a la decisión del Gobierno de negociar con la guerrilla más antigua del continente subió 10 puntos porcentuales a un 72 por ciento. Un 69 por ciento se declaró a favor de insistir en el diálogo en vez de la opción militar, un alza de 11 puntos porcentuales. La 23 mayoría de los colombianos se niega a que los líderes de las FARC participen en política sin pagar con la cárcel. Los comandantes rebeldes insisten en que no están dispuestos a pasar un sólo día en prisión. Ellos no representan a las Farc”: Pastor Alape sobre guerrilleros disidentes http://www.elespectador.com/noticias/paz/ellos-no-representan-farc-pastor-alape-sobreguerriller-articulo-642128 El negociador de paz de la guerrilla aseguró que enviará una comisión al Frente Primero, que se niega a entregar las armas, para averiguar qué está sucediendo. Por: Redacción Paz “Ellos no representan a las Farc”: Pastor Alape sobre guerrilleros disidentes Luego de que el Frente Primero de las Farc anunciara este miércoles que se aparta del proceso de paz entre el Gobierno y esa guerrilla, y que no está dispuesto a entregar las armas y desmovilizarse, alias Pastor Alape, negociador del grupo subversivo, aseguró a la agencia Reuters que enviará una comisión para recolectar información de lo que está sucediendo y poder tomar una decision al respecto. (Leer aquí: Frente de las Farc dice que no entregará las armas) Sin embargo, aseguró que el líder de esa estructura, Néstor Gregorio Fernández, alias Iván Mordisco, es un hombre que estaría en “proceso de descomposición” y que buscarán hablar con él. “Lo que entendemos es que es un grupo de personas que dice yo no le jalo a esto y queremos que gente que está cerca vaya hasta allá y aclare qué es lo que está pasando, ellos son del frente primero de las Farc pero no representan al frente primero y mucho menos a las Farc”, afirmó Alape. (Leer aquí: Radiografía del frente de las Farc que se declara rebelde a la paz) Ese mismo día, el presidente Juan Manuel Santos les advirtió a los guerrilleros que no se quieran desmovilizar que este proceso de paz es “su última oportunidad…porque de otra forma terminarán en una tumba o en una cárcel". (Leer: "Es su última oportunidad": Santos a guerrilleros que no quieren desmovilizarse) A la par de que se conocía la posición de este frente disidente (ubicado en el Guaviare), el equipo de paz del Gobierno informó yaer que dirigentes de las Farc viajarán a Colombia para participar en visitas técnicas de preparación de las zonas de concentración de la guerrilla previstas en el acuerdo sobre el fin del conflicto. Según Humberto de la Calle, jefe negociador del Gobierno, no se trata de una concesión a las Farc sino un "escenario necesario para preparar la implementación de los acuerdos de cese al fuego y dejación y para que los hombres y mujeres de las Farc conozcan los términos de lo que se acordó y solidifiquen una decisión colectiva de asegurar el cumplimiento de los acuerdos". Un grupo de miembros de las Farc también viajará desde Colombia a La Habana para entrenarse como integrantes del mecanismo de verificación del proceso de paz. Los guerrilleros recibirán en la isla preparación en las tareas que deberán cumplir como observadores del fin del conflicto colombiano, junto a representantes del Gobierno, la ONU y varios países de la región. Además, el próximo 10 de julio comenzará en el municipio colombiano de Briceño, en el estado de Antioquia, "un esfuerzo conjunto de sustitución voluntaria de cultivos de uso ilícito". 24 Tras pactar las condiciones del fin del conflicto, las delegaciones de Gobierno y guerrilla han seguido trabajando en La Habana para resolver temas pendientes antes de la firma del acuerdo definitivo de paz, cuya fecha aún no se ha anunciado. Entre esos temas pendientes se incluyen los flecos de los otros cuatro puntos acordados desde que comenzaron las negociaciones (desarrollo rural, participación política, narcotráfico y víctimas) además del punto sobre implementación y refrendación del acuerdo de paz. *Con información de EFE 'Timochenko' ordena a las Farc suspender la extorsión El líder guerrillero argumentó que el propósito de los cobros ilegales era cubrir la alimentación y dotación de los subversivos. http://www.elespectador.com/noticias/paz/timochenko-ordena-farc-suspender-extorsionarticulo-641501 El jefe máximo de las Farc, "Timochenko", anunció que ordenó suspender el reclutamiento de guerrilleros y el cobro de "impuestos" o extorsión en sus zonas de influencia por la cercanía de un acuerdo de paz. "Hace más de tres meses suspendimos el reclutamiento de hombres y mujeres para las filas de las Farc", dijo el líder rebelde en una entrevista con la Agencia Prensa Rural. "Y acabo de dar la orden a todas las estructuras de las Farc de que suspendan todos los impuestos a toda la actividad económica legal que hay en las regiones, impuestos que le tenemos a los ganaderos, a las distintas fuentes de financiación, al gran comercio", aseguró "Timochenko", detallando que ese dinero era para cubrir la alimentación y dotación de los guerrilleros. Las Farc y el gobierno de Juan Manuel Santos negocian desde noviembre de 2012 en Cuba para poner fin a más de medio siglo de conflicto armado. En el marco de esos diálogos, el pasado 23 de junio las partes sellaron las condiciones del cese al fuego bilateral y la entrega de armas de los rebeldes, que se concretarán una vez firmada la paz. Por avances como esos, que hacen vislumbrar la pronta firma de un acuerdo definitivo, el líder guerrillero dijo que había tomado las decisiones de acabar con el reclutamiento de nuevos rebeldes y el cobro de extorsiones. "Consideramos que es el momento y de todas maneras no lo hacíamos no por falta de voluntad sino porque nosotros tenemos que comer y no es la comida para una dos o tres personas, son cientos, miles de guerrilleros", explicó. "Creemos que ya falta poco, que con lo que tenemos ahí (de recursos) logramos llegar al final del acuerdo", aseguró también "Timochenko", quien pidió a sus hombres irse estudiando los acuerdos que han alcanzado hasta ahora con el gobierno de cara a una próxima conferencia guerrillera en la que los discutirán y aprobarán internamente. Las Farc, surgidas en 1964 de una sublevación campesina, son la guerrilla más grande de Colombia con unos 7.000 combatientes, según cifras oficiales. 25 Colombia vive un conflicto armado que ha enfrentado durante más de 50 años a guerrillas, paramilitares y agentes del Estado, dejando un saldo de alrededor de 260.000 muertos, 45.000 desaparecidos y 6,9 millones de desplazados. OBISPOS Y SACERDOTES VINCULADOS CON CRÍMENES DEL PARAMILITARISMO EN COLOMBIA http://www.rebelion.org/docs/214314.pdf Entrevista a Enrique Santiago, asesor jurídico de las FARC en los Acuerdos de Paz “Hay militares en Colombia que intentan desestabilizar la paz” https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214355 Gorka Castillo Público Este abogado español, militante del PCE y una de las piezas claves del departamento de derechos humanos de Izquierda Unida, representa la cuota internacional que las FARC debían de poner sobre la mesa de la comisión jurídica que negocia la paz en Colombia. Antiguo secretario general de CEAR, Enrique Santiago (Madrid, 1964) conoce con precisión las dificultades de megaprocesos similares tras formar parte del equipo que redactó la querella contra Augusto Pinochet en 1998 y que, al menos, sirvió para meter el miedo en el cuerpo del dictador chileno. Ahora, en las negociaciones entre las FARC y el gobierno de Juan Manuel Santos de La Habana, su papel ha resultado clave para acercar la paz, algo que para los colombianos siempre ha sido una especie de sueño. Su aportación técnica al nuevo marco jurídico que reparará las heridas de la guerra, incluidas las competencias penales de los tribunales transicionales, han revolucionado la forma de encarar la solución de conflictos armados enquistados como es el de Colombia. -¿Puede asegurar que ha terminado el conflicto armado más antiguo de América Latina? -Puede decirse que ha concluido el enfrentamiento militar. Creo que es irreversible pero aún hay riesgos de que el conflicto social continúe si las partes involucradas, especialmente las instituciones colombianas, no son 26 capaces de implementar los acuerdos ya alcanzados en la mesa de conversaciones de La Habana. -¿Qué obligaciones impone esta primera fase? -En primer lugar, el cese de hostilidades bilateral y definitivo. Además, se ha firmado un acuerdo para un proceso de pacificación que, en el caso de las FARC, contempla la entrega física de las armas pero que al Estado colombiano le obliga a modificar su doctrina militar en beneficio de la política y a desmantelar el paramilitarismo que aún existe. -¿Quién ha cedido para que este acuerdo se haya producido? -Ambas partes. Por el lado de la insurgencia el esfuerzo ha sido muy elevado. En primer lugar, porque ha aceptado un marco institucional y legal que ha combatido durante 50 años y ahora lo reconoce como el escenario en el que realizar la reincorporación de sus militantes a la vida civil sin obligar al Estado a abrir un proceso constituyente. Eso no significa que las FARC hayan renunciado a esta premisa, pero sí que acepta las normas que establece la Constitución actual. El Estado colombiano, por su parte, ha cedido en la inclusión de un nuevo ámbito de justicia para la paz que establece que los máximos responsables del conflicto no son sólo los oficiales de la junta mayor del ejército sino que puede extenderse a presidentes, ministros, dirigentes políticos y miembros de empresas multinacionales que financiaron el paramilitarismo. -A la espera de que empiecen a aparecer nombres simbólicos, ¿hay riesgos de que embarranque este proceso? -No lo creo, sinceramente. El mayor problema, como indica un preciso informe de la Corte Penal Internacional (CPI) sobre Colombia, es desatar la inmensa bolsa de impunidad que históricamente ha protegido a los agentes del estado y a los grupos paramilitares pero no a la guerrilla. Un ejemplo de esto es la actitud de la fiscalía general cuando creó una unidad especial destinada a contextualizar los crímenes de las FARC, y que procesó más de 50.000 conductas delictivas, pero no los asesinatos cometidos por las fuerzas del estado y el paramilitarismo. -Este proceso también tiene sus detractores. Un sector político importante del país ha anunciado su oposición a los acuerdos de La Habana. -Así es, aunque intuyo que esa resistencia, que hoy capitanean el expresidente Álvaro Uribey el procurador general de la Nación Alejandro Ordóñez, irá cambiando a medida que la realidad se imponga. Cuando llegue el momento de la verdad, es decir, cuando el pueblo colombiano tenga que refrendar los 27 acuerdos definitivos en las urnas, el Centro Democrático de Uribe no podrá mantener su oposición porque sería como pedir a las FARC que no se desarmen. Lo importante ahora es que la gran mayoría de los mandos de las Fuerzas Armadas colombianas apoyan el proceso de paz. -¿También hay divergencias entre los militares? -Algún sector no sólo es contrario al acuerdo sino que, y lo digo claramente, conspira para desestabilizarlo junto a grupos paramilitares. Y es aquí donde el papel de EEUU, que ha actuado como acompañante en las negociaciones de La Habana, va adquirir un protagonismo relevante aportando todo el potencial de información e inteligencia que tienen para evitar que el proceso de paz no descarrile. -¿Es el mayor peligro al que se enfrentan? -Hay otro aún mayor. Se trata de que las inversiones reclamadas para acabar con la desigualdad estructural que afecta, sobre todo, a las zonas rurales de Colombia y que desencadenaron el conflicto hace más de medio siglo se realicen. Si ese dinero no llega, si no se reinvierte buena parte del presupuesto que el Estado destinaba a la guerra, y que llegó a ser el 7% del PIB, cundirá la insatisfacción y habrá problemas. -¿Podría producirse una escisión en las FARC, como le sucedió al IRA en Irlanda? -No lo creo. Mi impresión es que se trata de una organización muy cohesionada. Por La Habana ha pasado la práctica totalidad de su secretariado, la comandancia máxima de la guerrilla, y todo lo acordado con el gobierno estaba ya consensuado entre ellos. Esto no significa que no puede haber miembros de las FARC que al final decidan optar por salidas individuales pero la realidad es que si se producen, algo que no lo creo ni deseo, será un número anecdótico si lo comparamos con la estructura militar conjunta de este grupo armado. -Por delante está la entrega del armamento y su verificación, una tarea difícil y polémica teniendo en cuenta la dimensión de las FARC. ¿Cuál es la garantía de que se realizará con transparencia? -El mecanismo de verificación ha sido aprobado de forma bilateral. Las FARC entregarán su armamento a las Naciones Unidas, cuyo equipo estará compuesto por representantes de la CELAC, y no a las instituciones del Estado colombiano, que se limitarán a estudiar los informes que reciban. Pero 28 antes de iniciar este proceso se deberán cerrar algunos temas pendientes muy importantes para el proceso de paz. -¿Cuáles? -Los programas de reincorporación de la guerrilla a la vida civil, la definición de los territorios donde se asentarán los guerrilleros, los programas de desarrollo económico y social de las comunidades rurales afectadas por el conflicto y la norma de amnistía e indulto para todas las personas que han sido penalizadas por cultivos ilícitos, no por el tráfico, de coca. Y, por supuesto, aún falta por acordar un calendario estricto para el cumplimiento de los acuerdos. Si no se avanza en estos puntos será difícil alcanzar la solución definitiva. -¿Cómo repercutirá este acuerdo en la estabilización de la región? -La base de la ley de amnistía incluye a las personas que tuvieron que huir de Colombia bajo la acusación de colaborar con la insurgencia. También contempla programas específicos de retorno acompañado, es decir, del regreso de los exiliados bajo condiciones que garanticen su reintegración y reincorporación a la sociedad. Es el modelo que viene desarrollando ACNUR en otros lugares del mundo y que se aplicó con éxito en los países del cono sur latinoamericano, los que sufrieron la represión y persecución de las dictaduras militares. Sorprende descubrir que el principal asesor de las FARC en La Habana es Álvaro Leyva, jurista y miembro del Partido Conservador. Y ministro de minas y energía con Belisario Betancur. -Su perfil es antagónico al ideario de las FARC. ¿Quién es Álvaro Leyva? -Es un hombre de profundas convicciones conservadoras y un demócrata integral. Hablamos de una persona que desde hace más de 40 años se implicó a fondo para conseguir la paz con el enorme sacrificio que eso supone en un país como Colombia. Es admirable, un ser polifacético convencido de que la paz sólo se construye acabando con las desigualdades sociales y cuya aportación al acuerdo alcanzado es la mayor contribución jamás realizada por un político colombiano. Creo que todos hemos contraído una inmensa deuda con él. -¿Qué papel ha desempeñado España en este proceso? -Nulo. Y es triste si lo comparamos con su papel de acompañamiento jugado en los tres anteriores procesos. En realidad, se autoinvalidó debido al 29 seguidismo que desde la época de José María Aznar hizo a los gobiernos colombianos. España rompió su neutralidad a raíz del fracaso de las negociaciones de paz del Caguán en 2002 y se posicionó a favor del ejecutivo de Álvaro Uribe cuyas sombras son muy alargadas. En La Habana no ha habido presencia española y podía haber apoyado el proceso como lo han hecho Alemania, la UE y EEUU pero no ha sido el caso. Cabe la posibilidad de que ahora forme parte del grupo de verificación internacional. Fuente original: http://www.publico.es/internacional/hay-militarescolombia-desestabilizar-paz.html Naciones Unidas destaca 'arquitectura financiera para el posconflicto' http://www.elespectador.com/noticias/paz/naciones-unidas-destaca-arquitectura-financierael-posc-articulo-641759 "Esperamos movilizar por lo menos en una primera fase 100 millones de dólares", señaló Arnaud Peral, director del programa de Naciones Unidas para el Desarrollo. Por: Redacción Economía y Negocios Arnaud Peral director de País del programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Un escenario que reunió a las empresas proveedoras de servicios públicos fue el más propicio para hablar de paz y posconflicto a escasos días de rubricar una negociación de varios años. Naciones Unidas estima que en el país se ha creado toda una arquitectura financiera para la posguerra. Arnaud Peral director del programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) considera que la negociación de paz entre el gobierno del presidente Santos y las Farc "es uno de los procesos mejor desarrollados y diseñados que hemos visto alrededor del mundo". En reciente evento organizado por Andesco en Cartagena (gremio que agrupa a empresas de servicios públicos) se destacó la importancia de articular los planes de desarrollo y posconflicto con la Agenda 2030. "Hay una articulación muy fuerte entre lo que se ha discutido en la Habana en el proceso de paz y la misma Agenda 2030", dijo Peral. "Queremos poner mucho énfasis en la implementación de los servicios públicos, en particular de agua, alcantarillado y todas las Tic (Tecnologías de la información y la comunicación), porque son temas que están muy presentes en esta agenda global; hay metas específicas para estos sectores de provisión de servicios públicos", dice el representante de las Naciones Unidas. ¿Cuáles son las metas a cumplir dentro de la Agenda? Son 17 objetivos y más de 230 indicadores. Se plantea llegar a 2030 con cobertura universal en acceso al agua, alcantarillado y electricidad. En el caso de esas metas sabemos que existe todavía algunas brechas importantes a pesar de los avances importantes en Colombia, pero todavía hay brechas en el sector rural. Sabemos que se plantean avances significativos en el plan nacional y desarrollo actual. Hay un gran compromiso del gobierno actual de las empresas, pero tenemos que generar esos pactos para avanzar más rápidamente. 30 Cuando se está firmando el proceso de paz, ¿ve que hay más posibilidad de que el Estado haga más presencias en sitios donde nunca estuvo? Creo que el acuerdo de paz va a permitir dar acceso (a servicios públicos) en dos sentidos: de un lado a tener mayor presencia del Estado de llegar a eso territorios con temas de salud, educación y alcantarillado. Yo creo que se abre la posibilidad de hacer más presencia en provisión de servicios y bienes públicos que es al final lo que quiere la gente; tener más oportunidades de acceder a esos servicios. También se va a generar confianza para que empresas internacionales inviertan en esos territorios. ¿Desde la ONU se ve que el proceso de paz en Colombia tiene una meta final, que caminamos hacia allá? Confiamos (en) que se está avanzando de la manera correcta. Siempre estuvimos a favor de una solución negociada para el fin del conflicto. Después de un proceso que se ha adelantado de manera muy juiciosa, vemos que estamos llegando a la recta final y solamente faltando pocas semanas para la firma definitiva, yo creo que es uno de los procesos mejor desarrollados y diseñados que hemos visto alrededor del mundo, entonces confiamos de que luego su implementación va a tener la misma calidad. ¿Cómo va a hacer la presencia de Naciones Unidas en esta etapa? Naciones Unidas va a estar implicada de diferentes maneras. Como se sabe va a ver una misión política para la verificación del cese bilateral y dejación de armas, pero las agencias del sistema ONU van seguir haciendo su trabajo, ayudando a generar los pactos, ayudando en el caso que se requiera en la implementación de ciertos aspectos de políticas públicas que van a favorecer la confianza en el posconflicto. Estamos ayudando al ministerio del posconflicto en programas como Manos a la Paz, Manos a la Obra, programas de acción comunal y de acceso a la justicia. Yo creo que se está planificando bien a nivel nacional entre la comunidad internacional y el Gobierno. Con una participación muy amplia de la sociedad civil, de los actores del territorio se van a poder implementar programas que va a realmente cambiar la vida de las personas. ¿El aporte económico de la ONU para ayudar en el posconflicto de cuánto va a ser? Se ha creado toda una arquitectura financiera para el posconflicto a través de diferentes fondos que ha establecido el gobierno con entidades territoriales . Hay un fondo con el Banco Interamericano (de Desarrollo) para temas de sostenibilidad, está el fondo de la Unió Europea que va a tener un capitalización importante. Esta el fondo de Naciones Unidas que hemos creado y esperamos a movilizar por lo menos en una primera fase 100 millones de dólares; hay muchas manifestaciones de países que han mostrado interés en capitalizar este fondo. Países como Suecia, Inglaterra y Canadá han mostrado interés y capitalizado el Fondo de Naciones Unidas y esperamos que después de la firma se puedan aumentar las contribuciones. ¿Qué otro tipo de aporte hacen distinto a lo financiero? Están aportando desde el punto de vista político de respaldo y unanimidad alrededor de este proceso y de los acuerdos de paz de toda la comunidad internacional. La presencia de nuestro secretario general (Ban Ki-moon) en la Habana, es una señal importante. ¿Naciones Unidas ve nubarrones que puedan afectar la marcha del proceso? 31 En este momento tenemos que enfocarnos en el optimismo. Hacer mucha pedagogía, explicar de qué se trata y ayudar a acelerar el paso hacia la implementación de los acuerdos que al final es una agenda de reconciliación nacional. Es una agenda de desarrollo; una agenda de profundización y mejoría de los mecanismo de la democracia participativa colombiana. Hay que explicarlo y mostrar resultados concretos por el momento, obviamente va a ver dificultades, en ciertos aspectos y seguramente nos vamos a enfrentar con varios desafíos, pero hay que enfocarnos en el optimismo y en la ejecución. Una frase para calificar este momento que vive Colombia con el proceso de paz Es un momento histórico que la comunidad internacional, que el pueblo colombiano y que las víctimas estaban esperando desde hace 50 años, y aquí estamos para pasar a este momento histórico. El Índice de Agua ubica a la CdMx en el lugar 43 de 50 urbes que buscan ser vistas como “sustentables” http://www.sinembargo.mx/09-07-2016/3063303 En trabajo ¿Cuál es el país más 'trabajador' del mundo? Más explotados será! http://mundo.sputniknews.com/mundo/20160709/1061749259/pais-mas-trabajadormundo.html LA “CASTA DORADA” GOBIERNA DESDE 1942 EL EDOMEX; ¿PODRÁ EL PRI DE PEÑA RETENER EL BASTIÓN EN 2017? POR LINALOE R. FLORES http://www.sinembargo.mx/09-07-2016/3063810 Fábrica de pobreza y asistencia social en México Parte 1. http://www.sinembargo.mx/04-07-2016/3054983 Parte 2. http://www.sinembargo.mx/05-07-2016/3062354 Parte 3. http://www.sinembargo.mx/06-07-2016/3055019 Partee 4. http://www.sinembargo.mx/07-07-2016/3060541 El PRI fincó su monopolio en el Edomex alentando la pobreza y el asistencialismo: especialistas Me gusta797 Twittear mail reddit meneame googleplus Por Daniela Barragán julio 7, 2016 - 12:05 am • 1 Comentario “El Estado de los contrastes”, así define un investigador al Estado de México. En la tierra del actual Presidente de la República son comunes las colonias que tienen una zona para ricos y otra para los muy pobres, sólo divididos por unas cuantas calles pero con una realidad que es, por completo, diferente; que tiene grandes territorios industriales, de los principales del país, y por otro lado pueblos donde comunidades indígenas apenas sobreviven a la pobreza. 32 El Estado de México es la entidad del país donde el número de pobres crece con mayor rapidez. Foto: Cuartoscuro CUARTA PARTE | Ver aquí PRIMERA PARTE | Ver aquí SEGUNDA PARTE | Ver aquí TERCERA PARTE Ciudad de México, 7 de julio (SinEmbargo).– A pesar de la riqueza que el Estado de México tiene, al ser una región en la que comulgan grandes zonas industriales, múltiples actividades económicas y el mayor número de habitantes del país, las personas en condiciones de pobreza aumentan año con año, de acuerdo con las cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval). Los últimos resultados presentados por este organismo, hasta el cierre de 2014, revelan que el Estado de México fue la entidad del país que generó más pobres. Hoy está dentro de las 10 entidades con el mayor número de habitantes en pobreza y pobreza extrema a nivel nacional. Actualmente hay un total de 8 millones 269 mil 852 pobres, y de las ocho carencias medibles por el Coneval la población mexiquense presenta seis: rezago educativo, seguridad social, servicios de salud, calidad y espacios de vivienda, servicios básicos en la vivienda y la alimentación. En lo que respecta a los ingresos, más de un millón de personas pasaron a estar por debajo de la línea de bienestar mínimo. Sólo el 17.4 por ciento de la población no es pobre y no es vulnerable a serlo. Tanto la población con ingreso inferior a la línea de bienestar como la población con ingreso inferior a la línea de bienestar mínimo han aumentado 22.96 por ciento y 79.46 por ciento, respectivamente, en seis años; es decir, el incremento de las personas en situación de pobreza extrema es la que se ha recrudecido en ese periodo. Por otro lado, la entidad es la que más aporta al Producto Interno Bruto (PIB) Nacional, después de la Ciudad de México, con 9.3 por ciento del total. El Estado de México es la entidad más poblada del país; en 2016 se contabilizaron 17 millones 026 mil 314 habitantes. En él, habitan 724 personas por kilómetro cuadrado, cuando a nivel nacional el número es de 61 personas por kilómetro cuadrado. Es una entidad formada en gran parte por migrantes, el 38.8 por ciento de sus pobladores nació en otro estado. Eso es el Estado de México: un territorio de contrastes, dice Enrique Moreno Sánchez, académico de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) y miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SIN), en entrevista con SinEmbargo. El especialista explica que en la entidad existen varios elementos que provocan la persistencia en los altos índices de pobreza y el poco bienestar con el que los mexiquenses viven: Está, por un lado, la falta de identidad de quienes habitan más cerca de la Ciudad de México y, por el otro, el poco conocimiento que se tiene de comunidades de origen indígena que aún habitan ahí. La Ley de Derechos y Cultura Indígena del Estado de México reconoce la existencia de cinco pueblos originarios: Matlatzinca, Mazahua, Nahua, Otomí y Tlahuica. A raíz de movimientos migratorios, en la región también habitan 25 mil mixtecos, 14 mil mazatecos, 12 mil zapotecos, 9 mil totonacos y 6 mil mixes, la mayoría provenientes de estados como Guerrero, Hidalgo, Oaxaca y Veracruz. 33 Pero Moreno Sánchez menciona una causa más: el poder que ahí ha cimentado, durante más de 80 años, el Partido Revolucionario Institucional (PRI). “Lo que el PRI ha hecho en el Estado de México es tomar decisiones en función de intereses políticos y eso no puede estar por encima de las necesidades de la mayoría de las personas; no puedes gobernar a partir de cierto interés político, ni sólo para medir cuánto vas a ofrecer con la gente para saber cuánto obtendrás […] No se puede vivir bajo el sistema del asistencialismo toda la vida”, comenta el académico. POBREZA Y CARENCIAS A LA ALZA Los cinco municipios más pobres del Estado de México tienen hasta al 84.1 por ciento de su población en pobreza. Son Zumpahuacán, San José del Rincón, Sultepec, Ixtapan del Oro y Luvianos. En contraste, los cinco municipios “más ricos” de la entidad tienen sólo al 22 por ciento de sus pobladores en condiciones de pobreza. Esos ayutamientos son Coacalco de Berriozábal, Cuautitlán, Cuautitlán Izcalli, Metepec y Atizapán de Zaragoza, que si bien son los lugares donde menos se padece ese indicador, son sitios en que en los últimos años se han acumulado otros problemas graves: la violencia y la inseguridad. “El Estado de México es de contrastes. Tenemos altos índices de pobreza y marginación, pero también zonas que son consideradas caras. Hay municipios que tienen un índice de calidad de vida estable, bueno, y otros no, como Nezahualcóyotl o Ecatepec, donde la pobreza y la marginación aún es elevada. Hay otros municipios como San José del Rincón o Ixtapan del Oro donde los índices de pobreza y marginación son elevados. En la periferia de la gran ciudad [la Ciudad de México] hay esta problemática […] Hay avances, pero no son los deseados. Han aumentado los servicios para reducir esta marginación, pero también el número de gente pobre se ha incrementado”, agrega el investigador. Más ejemplos de esta situación son Ecatepec de Morelos, que tiene casi el 40 por ciento de su población en condiciones de pobreza, y Nezahualcóyotl, con el mismo rango; les siguen Toluca, capital del estado, que tiene el 41 por ciento, y Chimalhuacán, con un 62 por ciento de sus habitantes en condiciones de pobreza. A POBREZA COMO HERRAMIENTA POLÍTICA El Gobernador Eruviel Ávila durante un evento con comunidades indígenas. Foto: Cuartoscuro El Gobernador Eruviel Ávila durante un evento realizado con comunidades indígenas. Foto: Cuartoscuro Según cifras del Coneval, el 41.5 por ciento de la población mexiquense tenía en sus viviendas algún nivel de hacinamiento; el 41.2 por ciento de la población ocupada percibía un ingreso de hasta 2 salarios mínimos y el 16.2 por ciento de la población mayor de 15 años no tenía la primaria completa. En 2005, en el último año del Gobierno de Enrique Peña Nieto en esa entidad, sólo dos de cada 10 jóvenes recién egresados de la educación superior lograban emplearse. El Índice de Desarrollo Humano Municipal en México (PNUD), concluyó que “El nivel de desarrollo humano del Estado de México se calcula mediante los logros de la entidad, en salud (0.826), educación (0.696) e ingreso (0.710), alcanzados en relación con los parámetros 34 observados a nivel internacional. El resultado global para el desarrollo es un IDH de 0.742 en 2010, que es comparable con el nivel de desarrollo de países como República Islámica de Irán y Dominica. “Si se compara el desempeño de los municipios con mayor y menor desarrollo, es posible reconocer que en el Estado de México coexisten condiciones de desarrollo similares a las de Qatar y Ghana”. Del total de la población mexiquense, 12 millones 495 mil 225 están en edad de trabajar, pero sólo 7 millones 008 mil 772, tienen un trabajo, según cifras de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS). La principal actividad de ocupación es el comercio y en la industria manufacturera. El grueso de la Población Económicamente Activa, gana de 1 a 5 salarios mínimos y la tasa de informalidad se mantiene en el rango de 55 a 60 por ciento desde 2005. El ingreso promedio de la población ocupada es de 6 mil 008 pesos para los hombres y de 4 mil 633 pesos para mujeres. Moreno Sánchez, sostuvo que en el Estado de México, una región con grandes atrasos, se le ha dado mucha importancia a la parte política pero no a los problemas de la sociedad. “No se puede vivir dando despensas, gorras, camisetas, ayudas mensuales. Es necesario que cambie el diseño institucional, ya que un partido puede tener buenas ideas, pero hay mucha distancia en la traducción de los beneficios que la sociedad espera, que es la superación de la pobreza, la marginación y mejores índices de desarrollo humano”. Agregó que el Estado de México no puede perder el control en decisiones tan importantes como la seguridad, la procuración y la impartición de justicia, “se le está yendo de las manos”. “Mientras no haya decisiones que involucren el control, al desafío de organizar un nuevo orden de gobierno que permita una estrategia política a largo plazo, no temporal, seguiremos con los problemas que hoy se tienen”, puntualizó. Siete de cada 10 personas considera insegura la ciudad donde vive, indica sondeo del Inegi http://www.jornada.unam.mx/2016/07/07/politica/017n1pol Cambia 61.4% de encuestados sus hábitos para llevar joyas, dinero o tarjetas de crédito, apunta Roberto González Amador Siete de cada 10 personas mayores de 18 años considera que la vida en su ciudad es insegura. La proporción se eleva a 95 por ciento en Villahermosa, Tabasco, y rangos similares se registran en Coatzacoalcos, Veracruz, y Acapulco, Guerrero, revelaron los resultados de una encuesta elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Prácticamente dos de cada tres personas manifestaron haber modificado sus hábitos respecto a llevar cosas de valor, como joyas, dinero o tarjetas de crédito por temor a sufrir algún delito. El sitio percibido como más inseguro, donde es más probable ser víctima de un crimen, es el cajero automático de banco localizado en la vía pública (hay algunos dentro de centros comerciales). Así lo considera prácticamente ocho de cada 10 (78.6 por ciento de la población) encuestados por el Inegi. El segundo lugar lo ocupa el transporte público, el tercero sucursales bancarias y el cuarto las calles por donde usualmente transitan las personas. 35 Los datos corresponden a la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU), levantada trimestralmente por el instituto. El ejercicio muestra que la percepción sobre inseguridad no ha mejorado en comparación con los levantamientos previos, incluso ha empeorado. En junio pasado, 70 por ciento de los encuestados a escala nacional mayores de 18 años consideró que vivir en su ciudad es inseguro. La cifra no muestra mejoría respecto del trimestre inmediato anterior, donde la opinión en ese sentido era compartida por 69.9 por ciento de los participantes en la muestra, de acuerdo con los datos del Inegi. En diciembre de 2015, el porcentaje fue de 67.7; en septiembre de ese año, 68 por ciento, y en junio de 2015, 69 por ciento, según los datos divulgados ayer por el instituto. Las ciudades que fueron consideradas por sus habitantes como las más inseguras fueron, en junio pasado, Villahermosa, Tabasco, con una proporción de 95 por ciento de residentes que comparte esa opinión. La siguió Coatzacoalcos, Veracruz, con 94 por ciento, y Acapulco, Guerrero, con 93.5 por ciento. En la región oriente de la Ciudad de México, que incluye las delegaciones Iztapalapa, Milpa Alta, Tláhuac y Xochimilco, tienen esa percepción de inseguridad 91.2 por ciento de los habitantes. En cambio, las ciudades con la menor percepción de inseguridad entre sus habitantes son: Mérida, Yucatán, con 30 por ciento de habitantes que se decanta por esa opinión; Tepic, Nayarit, con 30.4 por ciento; Campeche capital, con 36 por ciento; Saltillo, Coahuila, con 43.8, y Durango capital, con 46.4 por ciento, , reportó el organismo. Factores de desconfianza La sensación de inseguridad por temor al delito y las expectativas que tiene la población sobre la seguridad pública se generan por la influencia de diversos factores, como ser testigo de conductas delictivas o antisociales que ocurren en el entorno donde se desenvuelve la población, según el instituto. Añadió que el temor a ser víctima de un delito puede hacer cambiar rutinas y hábitos, así como la percepción que se tiene sobre el desempeño de la policía. En este sentido, 45.2 por ciento de la población tuvo de manera directa, durante el segundo trimestre del año, algún conflicto o enfrentamiento con familiares, vecinos, compañeros de trabajo o escuela, en algún establecimiento o con autoridades de gobierno. Mientras tanto, casi dos de cada tres personas en el país (61.4 por ciento de la población) manifestó que en el segundo trimestre del año modificó sus hábitos respecto a llevar cosas de valor, como joyas, dinero o tarjetas de crédito por temor a sufrir algún delito; mientras que 55.6 por ciento reconoció haber modificado hábitos sobre permitir que sus hijos menores salgan de su vivienda; 49.3 por ciento transformó costumbres en cuanto a caminar por los alrededores de su vivienda pasadas las ocho de la noche, y 31.4 por ciento alteró rutinas relacionadas con visitar parientes o amigos. Los porcentajes de la población de 18 años y más que identificó a las diversas corporaciones policiales y que percibió su desempeño como muy o algo efectivo en sus labores para prevenir y combatir la delincuencia, fueron: Gendarmería Nacional (62.2 por ciento), Policía Federal (58.2), policía estatal (46.2) y policía Preventiva Municipal (42.8 por ciento). 36 Francisco Toledo: “El Gobierno de México no sabe en qué país vive ” Incluye vídeo http://internacional.elpais.com/internacional/2016/07/06/mexico/1467826079_432956.html El pintor oaxaqueño critica al gobierno y a los maestros y dice que una intervención policial añadiría más descontentos a las protestas JACOBO GARCÍA El pintor vivo más cotizado de México llega a la entrevista con tres cuadernos bajo el brazo de chicas rubias en ropa interior. Aparece con el pelo alborotado, la camisa arrugada y el rostro preocupado. Sin embargo, de los tres pliegues, sólo el último es novedad. La situación en Oaxaca, su tierra, es convulsa “y así es difícil vivir, trabajar y llevar una vida normal” dice Francisco Toledo (Juchitán, Oaxaca, 1940) bajo las buganvillas de la que fuera su antigua casa, hoy un museo donado a la ciudad. En Oaxaca hay un gran descontento social y no sólo de los maestros “Hay una gran tensión a raíz de los muertos, la represión policial, el intento de desalojo y la falta de diálogo…estamos viviendo algo que ya sufrimos en 2006 y es preocupante” lamenta. ¿Está a favor de una intervención policial para despejar las carreteras? VÍDEO ALBA MORA ROCA Los maestros disidentes del sindicato (CNTE) agrupados en la Sección 22- que aúna los docentes de Chiapas, Oaxaca y Guerrero- se han levantado contra la reforma educativa impulsada por Enrique Peña Nieto. A las protestas y plantones en plazas públicas han añadido bloqueos de carreteras que asfixian los estados de Oaxaca y Chiapas. Por el momento hay una tibia mesa de negociación puesta en marcha pero el gobierno amenaza con actuar si siguen los bloqueos. ¿Está a favor de una intervención policial para despejar las carreteras? “Sería un gran error porque hay un gran descontento social y no sólo de los maestros. Una actuación violenta de la policía uniría toda la inconformidad de la gente que además se extiende por varios Estados” contesta. Estamos viviendo lo mismo que ya sufrimos en 2006 Según Toledo, “la intervención policial de 2006 sólo sirvió para calmar la situación brevemente" pero luego reaparecieron los problemas” recuerda. El artista zapoteco atribuye gran parte de la culpa de este nuevo conflicto a la cerrazón del Gobierno y las autoridades mexicanas “que no saben en qué país viven y que cree que el DF es todo México”. En apenas unas frases el maestro Toledo, como todos lo conocen, repite dos veces una misma fecha: 2006, un año que se clava como una sombra dolorosa en el inconsciente de los oaxaqueños. Aquel año se vivió la crisis política y social más grave del Estado de Oaxaca y para muchos analistas es el origen de la revuelta que se vive hoy. 37 Todo comenzó en junio con una frustrada intervención policial en contra de los maestros acampados en el zócalo de Oaxaca. A partir de ahí, comenzó una revuelta popular contra el gobernador Ulises Ruíz que sumió durante más de cinco meses la entidad en una anarquía delirante. De junio a noviembre de 2006 el gobernador y el Congreso local sesionaron en la clandestinidad, la policía desapareció de las calles y había barricadas en cada esquina controladas por el movimiento insurgente. Las emisoras de radio y televisión fueron ocupadas y la seguridad estaba a cargo de la APPO que detenía, juzgaba y condenaba a los delincuentes en la misma farola de la plaza. La capital oaxaqueña entró en un total desgobierno que se extendió por otros puntos del Estado, hasta que todo terminó con una intervención policial por tierra y aire, pocos días antes de la llegada de Felipe Calderón al poder. Diez años después la tensión tiene forma de mensaje de WhatsApp y circula frenéticamente de celular en celular: “compañeros, hoy intervendrá la Federal” dice un mensaje anónimo. “Alerta, no salgan hoy de casa porque habrá enfrentamientos en la calles” dice otro. “La gente está temerosa y nerviosa. Y lo que nos falta aún…” responde enigmáticamente el pintor. Por el momento el gobierno dice que no negociará ni una coma de la ley que obligará a examinarse a los maestros y ha pedido permiso al Senado para emplear al ejército si fracasa la mesa de negociación puesta en marcha. Los maestros llevan en pie de lucha tres años, pero la muerte a tiros de 8 civiles segun el Gobierno - 11 segun los maestros- tras una intervención policial, ha tensado más la situación. ¿Tienen razón los maestros en sus demandas? Es complicado. A ellos los han pintado como los malos de la película, pero hoy son una fuerza política que ha llegado hasta donde el Estado les ha permitido. Durante años, como si fueran parte del folclore, acampaban en el zócalo de Oaxaca para protestar. Y cada año se iba solucionando el problema sin que la sociedad civil supiera en qué consisten esos acuerdos” explica. “El propio Estado creó sindicatos como el de la SNTE -dirigida por la polémica Elba Esther Gordillo, hoy encarcelada- a la que le dieron de todo a cambio de fuerza política y votos, pero igual sucede con sindicatos petroleros o mineros que están coptados por el Estado” resume. Toledo no es una opinión más. A unos días de cumplir 76 años, no sólo es el máximo exponente de la escuela oaxaqueña de arte, de la que han salido pintores como Rufino Tamayo o Luis Zárate, sino que es símbolo vivo de la defensa de las tradiciones y la cultura indígena tanto en la calle como en el estudio. En la obra de Toledo su tierra zapoteca es el centro de su creación. De ella emanan las criaturas primitivas y fantásticas que salen de su paleta. Paralelamente ha puesto en pie una activa red de centros culturales y medioambientales en Oaxaca desde los que difunde el arte entre los jóvenes y da apoyo a las causas que considera justas. Una de las más conocidas fue su movilización, tamal en mano, en contra de la instalación de un McDonal’s en el Zócalo hasta que logró que la cadena estadounidense tirara la toalla. 38 En el caso de los maestros, Toledo reconoce que es muy difícil tener una opinión clara. Sin embargo, hay dos cosas que le irritan sobremanera del mundo que vive; “el desprecio a la enseñanza en lenguas indígenas y la comida chatarra que invade las comunidades”. Actualmente Toledo "apadrina" a 16 hijos de campesinos que estudian en la Normal de Tlacochahuaya pero su última aportación a la causa ha sido editar cuadernos escolares en lengua indígena elaborados con papel reciclado e ilustrados con animales autóctonos, grabados del cuerpo humano o plantas dibujadas por los primeros dominicos españoles que recorrieron la sierra en el S.XVII. ”Estos cuadernos construyen y forman y no esa porquería", dice lanzando las libretas de blancas modelos californianas que traía bajo el brazo y que utilizan la mayoría de niños indígenas de Oaxaca. Si algo le cabrea más que el conflicto magisterial en sí mismo es descubrir que está sólo en su cruzada. "No hay nada en zapoteco: la unica manera de la que la lengua siga viva es teniendo radios, perfiódicos, publciaciones, revistas; hay que hacerlo y el Estado no se ocupa de eso" se lamenta. Entrevista a Alberto Acosta /La década desperdiciada del progresismo https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214237 Vitor Taveira Rebelión - ¿Cuáles son los principales avances y limitaciones del llamado “ciclo progresista” en América Latina? ¿Se puede decir que este ciclo se ha agotado? Es complejo dar una respuesta amplía y generalizable para todos los países. Cada proceso tiene especificidades. Pero, cabría delinear algunos elementos gruesos. Empecemos anotando que los “progresismos” en realidad no han sido gobiernos de izquierda, pues no han afectado las estructuras de producción ni la propiedad de medios de producción, ni siquiera fomentaron una verdadera reforma agraria. Tampoco han asegurado las libertades de expresión, de organización y movilización popular, de vida sexual, y hasta han mantenido una perspectiva utilitarista con la Naturaleza. Son gobiernos que intentaron impulsar políticas post-neoliberales, aunque sin llegar a cuestionar en la práctica al capitalismo. La recuperación del papel del Estado en la economía sirvió simplemente para la modernización capitalista de sus economías, al tiempo que se disciplinan sus sociedades para conseguir los avances modernizadores propuestos. Su preocupación por una mejor atención a las demandas sociales es inocultable, pero sus resultados no son satisfactorios. 39 Estas gestiones se apuntalaron en crecientes ingresos gracias a elevados precios de las materias primas y, en algunos casos, en una mejor repartición de la renta minera o petrolera a favor de los Estados. El problema es que, para sostener las políticas sociales, optaron por ampliar los extractivismos: petrolero, minero, agrario… En definitiva, luego de tantos años de “progresismo”, no hay señales de transformaciones ni en las estructuras productivas (a veces nombradas tecnocráticamente como “transformación de la matriz productiva”) ni en las relaciones sociales de producción. Se mantuvo, e incluso profundizó, la modalidad de acumulación primario exportadora, fortaleciendo las lógicas rentistas, las prácticas clientelares y se consolidaron gobiernos autoritarios, es decir caudillezcos. Estos gobiernos incluso empiezan a volverse peligrosos por su tendencia, cada vez más marcada, a irrespetar los propios procesos democráticos que los vieron nacer. - ¿Considera que ante la disminución de la renta, sobre todo por la caída de los precios de los commodities, que sostenían parte importante de las políticas sociales, los gobiernos progresistas se quedaron sin respuestas contundentes ante la nueva realidad? ¿Por qué? Considerando que los “progresismos” no cambiaron las estructuras productivas, no cuestionaron al capitalismo, y solo plantearon meras reformas sostenidas con rentas extractivistas, entonces no es de extrañar que, al caer los precios de los commodities, ya no tengan recursos para sostener su manejo económico expansivo y “benefactor”. En realidad, ya hace mucho tiempo estos gobiernos perdieron la iniciativa de cambio. Sus respuestas innovadoras duraron muy poco. Por ejemplo, Ecuador avanzó hasta en transformaciones civilizatorias en su proceso constituyente de los años 2007 y 2008: tenemos la definición de la Naturaleza como sujeto de derecho o la misma propuesta del Buen Vivir o sumak kawsay, en tanto alternativa al desarrollo y hasta al propio capitalismo; conceptos que luego, con la práctica gubernamental, fueron vaciados de su contenido revolucionario y se volvieron dispositivos a favor del poder hegemónico burgués que se esconde detrás de la fachada “progresista”. En realidad estos gobernantes no estaban para impulsar utopías como las orientadas por el Buen Vivir. Esto explica la adhesión a un extractivismo exacerbado, sostenido bajo un discurso seudo revolucionario que dice necesitar esos recursos para sostener las políticas sociales, cuando estas políticas deberían financiarse, por ejemplo, con mayores cargas tributarias y redistributivas sobre los grupos más acomodados. Así las cosas, el desarrollismo, la eficacia tecnocrática, la provisión de infraestructura y el incremento del consumo solo son emulaciones de modelos anclados en viejos patrones de raigambre colonial. El Estado se recuperó en desmedro del fortalecimiento de la sociedad, inclusive a través del 40 debilitamiento de los propios movimientos sociales que elevaron al poder a los gobiernos “progresistas”. Y a la postre podemos decir que estamos frente a por lo menos una década o más desperdiciada desde una perspectiva histórica. - ¿Qué factores internos y externos contribuyen para este “giro a la derecha” que se observa en diversos países del subcontinente? Repito lo dicho. Cada caso concreto merece su propio estudio. Lo que sí debe quedar claro, incluso para la memoria histórica, es que el actual “giro a la derecha” empezó de la mano de los propios “progresismo” con el abandono de sus propuestas iniciales. Es más, la “derecha” ya vive en las entrañas del “progresismo” de los últimos años. Lo que ahora sucede es que ese “giro” se vuelve cada vez más explícito con nuevos y viejos actores. Por eso tenemos que aceptar que el “giro a la derecha” empezó cuando los “progresismos”, hace tiempo, dejaron de representar a la verdadera izquierda. Por tanto, asumir, sin una severa y profunda autocrítica, que dicho giro es el producto de viejos grupos oligárquicos y sus emporios mediáticos, del Imperio o la CIA, es casi tautológico: la oposición a procesos que puedan conllevar cambios en las estructuras de poder, inclusive de mano de los tibios “progresismos”, es su función. Es más, haber forzado los exctractivismos, los gobiernos “progresistas” terminaron por consolidar viejas y nuevas alianzas con las grandes empresas transnacionales y sus recaderos criollos. Aquí cabría destacar, por otro lado, los efectos desmovilizadores que han provocado el clientelismo de las políticas sociales y el consumismo que alentó el manejo económico expansivo sin transformaciones estructurales, que han facilitado el establecimiento de una suerte de conservadurismo en sociedades que aceptan liderazgos autoritarios a cambio de (pocos) logros sociales y económicos y de la idea de que se marcha hacia la modernidad a través del desarrollismo... Como saldo, entonces, tenemos que en gran medida los “progresismos” son responsables directos de su fracaso, sobre todo -digámoslo sin rodeos- porque no intentaron enfrentar al capitalismo, sin que esto signifique que este reto puede ser resuelto en el corto plazo. De alguna manera también cargan con algo de responsabilidad aquellos aplaudidores oficiosos de los “progresismos”, sobre todo europeos, incapaces de formular críticas oportunas cuando empezaron a presentarse profundas desviaciones de las propuestas originales. Inclusive callaron ante los reiterados atropellos a los Derechos Humanos y Derechos de la Naturaleza, argumentando –torpemente, por cierto- que no se debía hacer el juego a la derecha. Ese respaldo acrítico y su silencio cómplice no puede ser olvidado. 41 - ¿Se puede considerar realmente que hay una "nueva derecha" como algunos dicen? ¿Qué tiene de nueva? Con el tiempo sabremos cuáles son aquellos elementos nuevos, si es que los hay. Lo que nos consta es que la derecha siempre ha sido muy hábil, y más en la actualidad. Luego de un primer desconcierto, grupos conservadores y hasta oligárquicos se insertaron en los “progresismos” o convivieron con ellos, haciendo estupendos negocios. Ese el caso de Brasil, Argentina, Ecuador, Bolivia, para mencionar unos cuantos casos. Incluso hoy vivimos nuevas formas de imperialismo, como la que se experimenta de la mano de la expansión china en América Latina, frente a la cual el propio “progresismo” se ha vuelto cómplice. Por otro lado, otros grupos de derecha aprendieron sobre la marcha. Luego del golpe de Estado contra Chávez en 2003 y de haberse marginado de la institucionalidad electoral creada por los “progresismos” -sobre todo en Venezuela- estos grupos incursionan dentro de dichas instituciones inclusive con éxito, al aprovechar las artimañas electorales que en su momento los propios “progresistas” armaron para enquistarse en el poder. - ¿Podrá la derecha que llega al poder hacer los ajustes que plantea y mantener las políticas sociales y la ampliación democrática de los últimos años como suele prometer? ¿O los avances de los últimos años están en riesgo? Antes que nada tengamos claro que, sean los “progresismos” o la derecha explícita, tarde o temprano todos tendrán que hacer ajustes en función de los intereses de la acumulación capitalista. Ahora, en el caso de las derechas explícitas, si estas pretenden instrumentar un manejo económico abiertamente neoliberal, con enormes impactos sociales, entonces su estabilidad puede verse seriamente afectada; en este momento se puede analizar lo que sucede en la Argentina del neoliberal presidente Macri. De todas formas la situación será aún más compleja en medio de la crisis de los precios de las materias primas y de la consiguiente disminución de recursos fiscales para sostener las políticas sociales. Actualmente dudamos que las sociedades estén mejor preparadas ahora que antes de los gobiernos “progresistas” para defender algunos logros sociales conseguidos. Bien sabemos que gracias a la gestión autoritaria de los “progresismos” los movimientos sociales han sido duramente golpeados o aún desmantelados. Hasta diera la impresión, en cierta medida, que en términos políticos el propio “progresismo” implícitamente está dejando la mesa servida 42 para un nuevo y masivo ajuste neoliberal, en especial al debilitar aquellas fuerzas que lideraban la lucha popular. - La corrupción ha sido un argumento frecuente utilizado por la derecha política y la prensa que afecta a la opinión pública y desacredita a gobiernos progresistas. ¿Cómo analiza el tema de la corrupción en estos gobiernos de izquierda? Aceptémoslo, ya no son gobiernos de izquierda. Quizá lo fueron en su momento, pero cuando actuaron sin cuestionar las estructuras capitalistas orgánicamente corruptas y corruptoras- que actualmente rigen en nuestras sociedades, terminaron siendo absorbidos por la podredumbre del juego de intereses del capital. La izquierda en esos gobiernos murió hace tiempo, y solo queda una careta tras la cual se esconde muchas veces un nido de ratas. La gran prensa –alineada con la derecha explícita- pretende presentar a los “progresismos” como izquierda y lo está logrando, gracias a la misma indefinición y tibieza de gobiernos que ponen direccionales a la izquierda, pero curvan a la derecha… Si bien reconocemos que la corrupción no es un invento de los “progresismos”, lo lamentable es que los gobiernos “progresistas”, que ganaron las elecciones levantando la bandera de la anticorrupción, hayan caído en las redes de la misma. ¿Pero qué podíamos esperar de quienes solo querían “domar al capital” sin recordar que este esconde fuerzas inmanejables para los individuos? Por eso parece hasta incomprensible como el gobierno del PT se alió con aquellos grupos políticos corruptos que ahora impugnan a la presidenta Rousseff, cuyo partido también está directamente envuelto en el entramado corrupto del Mensalao y con el turbio manejo del Petrolao. Debe quedar claro, por lo demás, que si no hay acciones concretas orientadas a superar el horizonte capitalista necesariamente se aceptan sus reglas del juego, en donde la corrupción y la impunidad conforman un dúo inseparable. Para superar al capitalismo la experiencia histórica nos ha enseñado, hasta la saciedad, que no bastan las buenas intenciones. - En el actual momento político, ¿cómo usted cree que la izquierda pueda actuar para contraponer este avance de la derecha? Las izquierdas tienen ante sí una tarea muy compleja. En muchos casos enfrentan desde hace rato a los caudillos progresistas sea en las urnas o en las calles, al mismo tiempo que combaten a las derechas fuera o dentro de los gobiernos progresistas, procurando recuperar un espacio propio en condiciones muy adversas. A eso sumemos que, gracias incluso a los grandes medios, la imagen de la izquierda nuevamente se va deteriorando: la izquierda 43 se muestra como inviable en base a ejemplos de la vieja Unión Soviética o de la actual Venezuela. No queda la menor duda, las izquierdas están abocadas a empezar una vez más aprendiendo de las lecciones de estos años de “progresismos”, recuperando la visión utópica de futuro que pasa por enfrentar el capitalismo. Y, así mismo, la izquierda debe replantearse el papel que le da al liderazgo. ¿Acaso hay una persona capaz de dirigir el proceso revolucionario con su ilustre intelecto? Por más de izquierda que sea esa persona, la respuesta debería ser contundente: ningún individuo puede enfrentar al sistema, por más “iluminado” que se crea... es una tarea que recae en la organización popular, no pensada desde la cúpula estatal. Entonces, la tarea es revertir el dominio capitalista actual y crear un poder desde los intereses de toda la sociedad, así como repensar el Estado desde lo comunitario, democratizando la democracia. Esto demanda una democracia directa en todos los ámbitos posible de la sociedad; la intervención directa de la propia sociedad organizada, sobre todo desde los ámbitos comunitarios y, todo esto, plantea la necesidad de crear espacios de autogestión desde los propios territorios. En síntesis, como proponemos desde Monstecristi Vive, la solución no está en el Estado -mucho menos en el mercado-, aunque este, sin ser una herramienta de dominación, si podría contribuir a la construcción de una sociedad no jerarquizada y autoritaria, siempre que esté controlado desde lo comunitario. Desde esa perspectiva, el planteamiento de un nuevo Estado debe incorporar otros elementos clave: el Buen Vivir o sumak kawsay; los Derechos de la Naturaleza, que incluye su desmercantilización, tanto como la de los bienes comunes; la descolonización y la despatriarcalización. Desde la lógica de los derechos colectivos se abre la puerta a ciudadanías colectivas y comunitarias. Por igual, desde la lógica de los Derechos de la Naturaleza se necesita otro tipo de ciudadanía, que se construye también en lo ambiental. Ese nuevo tipo de ciudadanía es plural. En suma, asegurar la vida de los seres humanos y de la Naturaleza es el clamor generalizado que demanda una democracia real y participativa, así como una economía que liquide el abuso del capital financiero y extractivista. Ese es el primer paso para una transición hacia una economía comunitaria y sustentable sustentada en la solidaridad, la cooperación y la reciprocidad, sobre bases de equidad en la distribución del ingreso y de redistribución de la riqueza. Desde esa perspectiva la atención económica prioritaria debe centrarse en el ser humano como parte de la Naturaleza; es decir en la reproducción de la vida antes que en la reproducción del capital. 44 Esto demanda un gran esfuerzo y mucha creatividad. Si aceptamos que la igualdad de los ingresos y la riqueza incrementa la libertad, la igualdad del poder político hace aún mayor esa libertad. A la inversa, donde no hay libertad, la igualdad carece de sentido. La igualdad está ligada a la libertad y la justicia. Sin igualdad perecen todas las garantías y todos los derechos. Y la libertad será siempre la libertad de quien piensa diferente, como planteaba Rosa Luxemburg. - Por último, ¿cómo analiza la situación de Ecuador en este contexto? Ecuador grafica mucho de lo arriba expuesto. De las propuestas iniciales del año 2006 a la práctica gubernamental hay un gran trecho. Inclusive las acciones progresivas de los primeros años están en franco retroceso. Ejemplos sobran: el gobierno empezó desmontando los esquemas de flexibilización laboral, hoy los vuelve a introducir; se opuso a firmar un TLC, hoy está a punto de firmar uno con la Unión Europea; alienta las privatizaciones, a las que se cerró la puerta en sus primeros años de gestión. Se llega hasta a niveles realmente perversos. Ha utilizado como pretexto el terremoto de Pedernales del 16 de abril de este año para financiar los enormes déficits públicos recurriendo a impuestos indirectos -regresivos- como el IVA y tributos a cigarrillos, bebidas azucaradas y alcohólicas, y hasta entregando grandes campos petroleros en explotación -campos maduros- a empresas transnacionales, lo que el propio Correa en 2005 consideraba una “traición a la patria”; en este recuento no puede faltar la promoción activa del extractivismo por parte del correísmo: explotación de petróleo en el centro sur de la Amazonía, la apertura de la mega minería o el fomento de los agro negocios a través de grandes plantaciones. Lo que si debe quedar claro es que, en casi todos estos países, pero concretamente en Ecuador la pobreza se redujo en tanto hubo dinero excedentario de las exportaciones petroleras, mientras los sectores empresariales más grandes sacaban la gran tajada de una economía en expansión. Tan es así, que en un documento interno del gobierno ecuatoriano se reconoció que, “en síntesis, nunca antes los grupos económicos poderosos estuvieron mejor, nunca antes los más excluidos de la Patria estuvieron menos peor.” Por tanto, si en Ecuador se establece la derecha explícita, sobre todo la derecha del siglo XX -la derecha del siglo XXI en realidad ya la lidera el propio Correa, pero manteniendo la imagen y el discurso de izquierda- en el ámbito económico ya es bastante lo que se ha avanzado desde la perspectiva del librecambio con esta suerte de neoliberalismo transgénico: el Estado fortalecido ha servido para cristalizar muchos de los objetivos neoliberales, que no se avanzaron antes gracias a la resistencia popular. Es más, en tanto que dichos sectores -sobre todo movimientos sociales- han sido debilitados 45 por el progresismo caudillista, no habrá actores con la fortaleza de antaño para enfrentar una derecha que se avizora incluso revanchista. Es más, un gobierno de la derecha tradicional, que podría incluso haber aprendido a no ser tan dogmática, dispone de todo un instrumental jurídico represivo desarrollado por el correísmo, con el que se ha reprimido y criminalizado la protesta popular. Ahí está pues la gran tarea de las izquierdas: reaccionar frente a esta embestida de las múltiples “derechas” que hoy viven en nuestra región y, de esa lucha, atreverse por fin a cuestionar a la propia civilización del capital, civilización que no debe ser “domada”, sino superada en base a un proceso de transiciones múltiples que exige mucha responsabilidad y siempre más democracia. Vitor Taveira es comunicador social brasileiro, periodista y máster en Estudios Latinoamericanos. FELIPE PIGNA | HISTORIADOR/ “Argentina no pudo ser EEUU por su burguesía” Felipe Pigna (Mercedes, Buenos Aires, 1959) es el historiador más conocido de Argentina CARLOS E. CUÉ http://internacional.elpais.com/internacional/2016/07/07/argentina/1467920169_804575.ht ml Pregunta. ¿Cómo han sido estos primeros 200 años de independencia? Respuesta. Han sido 200 años complejos, algunos de los sueños de Tucumán se fueron realizando, sobre todo los de Belgrano, el primer hombre que habló de industria, igualdad de la mujer, educación popular. Ellos aprovecharon la caída de la monarquía española. Había mucha presión británica para que no declarasen la independencia, lo frenaron hasta la caída de Napoléon, en 1815. P. No pensaban en Argentina aún. R. Eran las provincias unidas de Sudamérica. Cuando se firma la independencia había salida a los dos océanos, todo Bolivia, Uruguay, parte del sur de Brasil. Tucumán también es el inicio de la guerra civil argentina porque no se ponen de acuerdo sobre la forma de gobierno. Belgrano propone una monarquía con un inca como Rey, Juan Bautista Tupac Amaru, hermano de Tupac Amaru, el gran líder de la mayor rebelión antiespañola. Pero no triunfó. P. ¿Como era Argentina entonces? ¿Se podía hablar de pueblo? R. No, ni mucho menos. Era un territorio enorme, disperso, con grandes problemas de comunicación, extrema pobreza. P. ¿Era una sociedad feudal? R. No, era estancieril. Es muy diferente. En el feudalismo hay semiesclavitud, es un mundo cerrado. La estancia es una institución capitalista, hay reglas de trabajo, pago en metálico, un producto exportable: cuero, lana, tasajo, una grasa para comida de los esclavos en Brasil, Cuba 46 y EEUU. Buenos Aires ya entonces era una zona muy rica pero a la vez con mucha pobreza. Por eso llega la revolución, la burguesía la apoya para sacarse de encima a España que cobraba impuestos enormes. P. ¿Cuándo llega la época dorada? R. La guerra civil argentina fue larguísima. Solo en 1862 llega la unidad. Empieza el sueño moderno de un gran Estado impulsado por la educación, que promovió Sarmiento. Logró una ley moderna a nivel mundial en 1884: educación gratuita obligatoria a cargo del Estado. Había que unificar a esa mezcla que traía la inmigración. Italianos, españoles, rusos, polacos, alemanes. Era una torre de Babel. La educación común era la unificación. En 1869 teníamos un 71% de analfabetos. Sarmiento sueña un país de gente culta, dice que las clases americanas son atrasadas, un concepto muy de la época. Hubo grandes masacres de indios justificadas en base a la civilización. P. ¿Argentina competía de igual a igual con EEUU? R. En ese momento estábamos cabeza a cabeza con EEUU, eran los dos gigantes de América. En 1901, en la Conferencia Panamericana, Roque Sáenz Peña, delegado argentino, logra frenar un proyecto de EEUU de moneda única y derribar barreras aduaneras. Ese poder tenía Argentina. P. ¿Por qué Argentina se quedó atrás? R. EEUU despegó a partir de 1900 porque EEUU se dio cuenta muy tempranamente de que el campo debía ser el motor de la industria. Fue modélico en eso. Tomaron una decisión que era la antítesis de Argentina: distribuir la tierra que se iba ganando al indio de forma equitativa en terrenos de no más de 30 hectáreas. Eso hizo que los farmers tuvieran que tecnificar el campo, promovió la inventiva y la industria. Hubo una integración social muy horizontal. En Argentina se entregó la tierra a grandes latifundistas que no la poblaron y se dedicaron a especular con los campos. Argentina no fue EEUU porque su burguesía, su clase dirigente, elige el modelo agroexportador. Solo apuesta por la industria a partir de 1930. Pero tuvo épocas de esplendor, a partir de 1935 se vive gran crecimiento industrial. Y ya era una potencia intelectual, no por nada García Lorca estuvo más de un año en Buenos Aires. P. ¿Y cuándo se torció? R. Es un error atribuirle al peronismo, como hacen los liberales, la caída de Argentina. Al contrario, había un país muy injusto y el peronismo intenta poner un poco en caja. Desde ese momento hay un boicot de las clases altas al modelo industrial peronista. Perón amplía salarios, por primera vez hay una inflación por demanda. P. ¿Y cuándo empieza la decadencia? R. Con la dictadura militar de los 70 y un poco antes, con el rodrigazo, un plan de ajuste salvaje, que acaba con el modelo de distribución peronista. Era un gobierno peronista agotado, muerto Perón, en plena crisis del petróleo. Y con la dictadura, además del desastre de los desaparecidos, que llega porque había mucha resistencia –hubo 200 paros en los dos primeros años de dictadura-. El peronismo había logrado una distribución del 51% para los trabajadores y el 49% para el empresariado. Hasta los 70, Argentina tenía índices de pobreza extrema bajísimos para Latinoamérica, índices de educación de niveles europeos e incluso superiores. Mejores que España, por ejemplo. Tenía una muy buena escuela pública a la que iba el 90% de 47 la población, todas las clases sociales. Era una sociedad igualitaria que se truncó en los 70 y apareció una pobreza estructural que se mantiene hasta hoy con algunos momentitos en los 2000 de recuperación. Argentina no se recuperó de los 70 porque el kirchnerismo cometió errores como no atacar la pobreza estructural, no generar condiciones de trabajo genuinas. A los que mejor les fue en los años del kirchnerismo fue a los que no lo votaron, algo similar a lo que pasó en Brasil. P. ¿Si vivieran los congresistas de Tucumán ahora cómo verían esta Argentina? R. Como historiador no puedo poner en su boca qué dirían. Sí sabemos que era gente muy preocupada por la industria, por las libertades públicas, por la justicia. Argentina llega a sus 200 años complicada, en un franco retroceso con un Gobierno de derecha más preocupado con la venganza que con la justicia y con una impresionante falta de sensibilidad social. Soy optimista porque tengo mucha fe en la gente de este país, se amaña frente a las circunstancias adversas. Todo se cayó en 2001 y salimos. En el último pueblo de este país vas a encontrar una escuela de teatro, de títeres, por la importancia que el argentino le da a la cultura. Es un país casi imposible de gobernar, parecido a Italia. Alberdi decía “el argentino es un celoso cumplimiento de la ley… por el otro”. Es cierto que pudimos haber sido una enorme potencia, éramos la quinta potencia, pero la gente se moría de hambre. Brasil ahora es la novena, andá al norte de Brasil a ver cómo están. Andá a ver cómo viven ahora mismo en Detroit. Este país siempre puede recuperarse porque tiene productos que siempre va a necesitar la humanidad como alimentos. Pero cada crisis tiene unos costes enormes. Y queda la herida. Mejor no volver a practicar. LUIS ALBERTO ROMERO | HISTORIADOR/ “La pobreza es una novedad en Argentina” Luis Alberto Romero (Buenos Aires, 1944) es uno de los historiadores más respetados de Argentina http://internacional.elpais.com/internacional/2016/07/07/argentina/1467918807_491934.ht ml CARLOS E. CUÉ Luis Alberto Romero es una referencia a la hora de estudiar la historia argentina.Ampliar foto Luis Alberto Romero es una referencia a la hora de estudiar la historia argentina. RICARDO CEPPI Pregunta. ¿Cómo recorrió Argentina estos 200 años? Respuesta. Hay que pensar en la enorme apuesta al vacío que hicieron los hombres que decretaron la independencia, no sabían ni qué territorio iban a tener. Todo surge a partir del hundimiento del imperio español, e inmediatamente después la guerra civil. Y luego el proyecto de Fernando VII de reconquistar esto empezando por Venezuela. Todos cayeron salvo esta zona del Río de La Plata. España intentó devolver las cosas a antes de Napoleón. 1816 era un momento muy incierto. San Martín no quería hacer la guerra sin tener el respaldo de un estado, para no parecer un pirata. En Tucumán había mucha gente de bajo perfil. Desde la independencia durante 70 años hubo guerras constantes. Hasta 1880 no hubo paz. P. Y ahí comienza el esplendor. R. Ahí Argentina descubre las enormes posibilidades del mercado mundial sobre la base de un Estado consolidado y la educación pública. En 1816 no existía Argentina y no existió durante mucho tiempo. Eran las provincias unidas del sur, un cheque abierto para ver quién se sumaba. El nosotros estaba por definirse. Por eso la educación fue clave. La gran fábrica de argentinos 48 es la escuela. Todos los nacionalismos son inventos, hubo que hacerlo sobre todo para incorporar a los inmigrantes. Si vemos cómo está ahora Europa hay que decir que a los argentinos nos gusta hablar mal de nosotros pero ese fue un ejemplo muy exitoso de asimilación e integración. En épocas más recientes vivimos migraciones de paraguayos, peruanos, bolivianos y nadie plantea que ese sea un gran problema. Argentina triunfó en eso. En la primera etapa hasta 1888 hay nacionalismo liberal, como Mazzini en Italia. Son argentinos todos los que quieren vivir en Argentina. Es una idea roussoniana. Si acepta las reglas es argentino. El giro es a principios del siglo XX cuando empieza a tener éxito la idea alemana de nación como pueblo culturalmente homogéneo. El ser argentino. Y todo se complica cuando intervienen en esta discusión el ejército, la iglesia, el radicalismo y el peronismo. Cada uno tira para su lado. El ejército por la tierra, la iglesia por la nación católica, que en los años 30 fue importante y una rama de ese nacionalcatolicismo lleva al peronismo. El radicalismo despreciaba al resto. P. ¿Cuándo se complica? R. Desde el punto de vista económico la curva argentina tiene una primera flexión después de la primera guerra mundial, ya no es tan fácil todo, y después a partir de 1930 con la crisis económica. Pero la crisis fuerte es la de 1970. Ahí es donde Argentina empieza a venirse abajo. Pero desde el punto de vista ideológico la quiebra viene antes, cuando la élite empieza a entusiasmarse con la idea de la grandeza argentina, que lleva al nacionalismo duro. Hasta la escuela pública cambia y se vuelve más adoctrinadora. Antes la idea era una Argentina cosmopolita, liberal, abierta al mundo, como EEUU. Mucha gente se pregunta si uno de los problemas de argentina no está en una democratización demasiado rápida. De la idea de la igualdad unida a la de achatemos para ser todos iguales y barramos con cualquier élite talentosa. Antes en Argentina la igualdad estaba asociada a la movilidad ascendente. Pero después el peronismo instaló otras ideas. El primer peronismo, en 1945, repartió igualdad sin producir grandes trastornos. Pero era un régimen político autoritario con apoyo de masas. Uno de los frutos de la democratización rápida es que lleva a movimientos totalitarios con gran base de apoyo, como pasó en Europa con Hitler o Mussolini. En EEUU o Reino Unido las instituciones eran más fuertes y aguantaron. P. ¿Por qué Argentina tuvo tantas dictaduras? R. Los militares intervinieron porque eran llamados por la facción perdedora en la política. Todo tiene que ver con la cultura nacionalista y la política facciosa que apela a los militares. No existe la dictadura sin alguien que la apoye en la sociedad. Todo tiene que ver con la dificultad de tener instituciones solidas que permitan que se haga política y no guerra civil. P. ¿Qué pensarían los congresistas de 1816 si vieran la Argentina actual? R. Es inimaginable. Habrían dicho probablemente que Fernando VII no estaba tan mal, jaja. Si hubieran vivido durante la última dictadura militar lo habrían pensado. Con la inmigración masiva la Argentina se hace de nuevo. Creo que los líderes de 1880, los que pensaron la nueva Argentina, habrían visto esto como una tremenda decadencia. Creo que todavía en 1960 la habrían reconocido como su Argentina, antes del golpe de Onganía. Pero después no. Hasta el 66 los obreros soñaban con el socialismo, los actuales solo piensan en cortar en la calle para poder subsistir. El quiebre es en los 70. La pobreza es una novedad en Argentina. En enero del 66 una desocupación mayor del 6% parecía gravísima. No existía esta percepción de ahora de que son dos mundos distintos, los pobres viven en otro y no tienen posibilidad de salir. Antes había un camino de mejora. Tengo un amigo profesor de historia en la universidad de Buenos 49 Aires cuyo padre era analfabeto. Era el sueño argentino, el de los inmigrantes. Eso se ha roto. Nadie cree que tenga un mérito especial trabajar. P. ¿Cómo llega Argentina a 2016? R. Depende de la perspectiva política de cada uno. Hay una gran división. Lo que diferencia a Argentina es el enorme peso de las corporaciones, especialmente los sindicatos y los empresarios que viven del Estado. Yo formo parte del grupo que cree que tenemos una oportunidad, chiquita, que requiere mucho talento político y mucha suerte. Pero creo que se puede cambiar, por ejemplo la corrupción instalada en el Estado. No es fácil. No es seguro que este Gobierno no termine en lo mismo. Pero se puede hacer. Si el Estado pudiera lograr que las escuelas en barrios pobres dejaran de dedicarse a alimentar a los chicos y volvieran a lo que fueron cambiaría mucho. P. ¿Hay una nostalgia de lo que pudo ser? R. Eso es de gente mayor. Los jóvenes no tienen esa percepción. El tema de la dictadura que para nosotros es clave para ellos es algo ajeno. Lo de la vieja grandeza no funciona mucho. No creo que sea verdad que la Argentina debiera jugar en ligas mayores, yo me conformo con ser un país mediano razonable. Pero estamos muy lejos de eso. No fue el 9 sino el 19 de Julio. Una visión alternativa de la declaración de la independencia de la Argentina (Por Atilio A. Boron) El proceso emancipatorio que se desataría con fuerza en el Río de la Plata luego de la derrota de las dos invasiones inglesas a Buenos Aires, en 1806 y 1807, enfrentó desde su nacimiento a dos formaciones sociopolíticas muy claramente definidas. Por un lado, un bloque oligárquicocolonial que a través de sucesivas mutaciones llega hasta la actualidad y que hoy se encarna en el macrismo como su expresión sociopolítica; enfrentándolo había un sector de inspiración jacobina que concebía a la emancipación como un paso hacia la construcción de un nuevo tipo de sociedad, liberada de las lacras del viejo orden colonial. Figuras sobresalientes en este grupo eran Mariano Moreno, Juan José Castelli y Bernardo de Monteagudo, todos graduados de la Universidad de Chuquisaca, la segunda universidad creada en suelo americano después de la de Santo Domingo y situada en lo que hoy es la ciudad de Sucre. De esta suerte de Harvard hispanoamericana de la época colonial salieron algunos de los cuadros intelectuales más importantes de los procesos independentistas de Sudamérica. Además de los arriba mencionados deberíamos agregar los nombres de José Ignacio Gorriti, José Mariano Serrano, Manuel Rodríguez de Quiroga, uno de los líderes de la gesta independentista del Ecuador; Mariano Alejo Álvarez, precursor de ese mismo proceso en el Perú y Jaime de Zudáñez, que desempeñó igual papel en el Alto Perú. No es un dato menor recordar que esa magna universidad fue el foco que precipitó la Revolución de Chuquisaca el 25 de Mayo de 1809, exactamente un año antes que la revolución de Mayo en Buenos Aires. A este notable grupo se le unió, en el Río de la Plata, la figura gigantesca de Manuel Belgrano, un auténtico “hombre del Renacimiento.” Belgrano fue un refinado intelectual, un lúcido economista que todavía hoy sorprende con sus premonitorios análisis y audaces propuestas reformistas, periodista de fina pluma, político y estratega militar, todo eso aparte de su profesión de abogado. Un hombre, como Bolívar, que nació en una familia adinerada y que puso toda su fortuna al servicio de la revolución y la independencia. Y como el caraqueño, murió también él sumido en la pobreza. Para estos radicales rioplatenses como para Bolívar y Miranda en el norte de Sudamérica, la derrota del imperio español no podía ni debía limitarse a la abolición del régimen político 50 colonial y su sustitución por otro independiente sino que debía también acabar con las opresivas y arcaicas estructuras e instituciones económico-sociales impuestas por el conquistador ibérico. La propuesta de esta ala radical del proceso independentista no se limitaba, como en el caso del bloque conservador, a sustituir unas autoridades por otras sino que apuntaban a la construcción de una nueva sociedad. Tal como lo anotara el historiador Felipe Pigna, Moreno lo expresó con todas las letras en su “Prólogo” a El Contrato Social de Jean-Jacques Rousseau: “Si los pueblos no se ilustran … si cada uno no conoce lo que puede, lo que vale o lo que debe, nuevas ilusiones sucederán a las antiguas, y luego de vacilar algún tiempo entre mil incertidumbres será tal vez nuestra suerte mudar de tiranos, sin destruir jamás la tiranía.” Un siglo después sería Lenin quien manifestaría su preocupación por la suerte de aquellos, en este caso el proletariado, que luchan contra el esclavista sin pretender acabar con la esclavitud. Al igual que Bolívar, San Martín y Artigas, aquel grupo de geniales jacobinos sudamericanos que anhelaba construir un nuevo orden pos-colonial fue aplastado por la reacción oligárquico-colonial. Pero dejaron sembradas unas semillas que fecundarían vigorosamente tiempo después y cuyos frutos serían recogidos y multiplicados por Martí, Mariátegui, Fidel, el Che y Chávez, entre tantos otros. En este sentido, la realización del Congreso de Tucumán que declararía solemnemente la independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata sería apenas una primera floración de aquellas semillas. En ese momento, 1816, el escenario internacional había cambiado para mal. Los vientos huracanados de la Revolución Francesa y las cruzadas napoleónicas habían amainado. La derrota de Napoleón en Waterloo precipitó, con el Congreso de Viena, la restauración de las monarquías y la reconstrucción de las viejas fronteras europeas que habían sido borradas del mapa por el arrollador empuje de los ejércitos de Napoleón, firmando con premura el certificado de defunción del ciclo revolucionario abierto por la Revolución Francesa. Sin embargo, la dialéctica de la historia demostró con elocuencia que aquel ciclo distaba mucho de haber sido clausurado. Gramsci observó con sagacidad que su culminación efectiva tuvo lugar en Octubre de 1917 en Rusia, cuando los bolcheviques tomaron el cielo por asalto y clausuraron, entonces sí que definitivamente, el ciclo abierto por la revuelta parisina de julio del 14 de Julio de 1789 para abrir otro, con un contenido de clase y un horizonte político radicalmente distinto: la era de las revoluciones socialistas. En el caso concreto del imperio español en América los acuerdos gestados entre Metternich y Teyllerand en el marco del Congreso de Viena decepcionaron a la monarquía ibérica porque no contemplaban el apoyo europeo para recuperar sus levantiscos territorios allende el Atlántico. Pese al desaire de sus socios europeos, cuyos principales actores y sobre todo el Reino Unido veían como beneficioso para sus intereses la desintegración del otrora imponente imperio español en América, el re-entronizado Fernando VII lanzó una violenta y masiva ofensiva militar destinada a reconquistar sus posesiones americanas. Era, como lo confirmó la historia, una empresa destinada al fracaso. Las noticias que llegaban a América luego de la derrota de Napoleón movilizaron a los patriotas en el Río de la Plata. Quien primero reaccionó fue José Gervasio de Artigas, que ni lerdo ni perezoso convocó al Congreso de los Pueblos Libres en la ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay, mismo que culminó el 29 de Junio de ese año con la presencia de delegados de la Banda Oriental (hoy República Oriental del Uruguay), Corrientes, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y Misiones. Artigas reaccionó de este modo en respuesta a la actitud del muy oligárquico Directorio instalado en Buenos Aires luego de la Asamblea del Año XIII. Desconfiaba el caudillo oriental del proyecto que aquél tenía para el antiguo Virreinato del Río de la Plata. La clara admiración del Directorio y sus principales figuras, Pueyrredón y Rivadavia entre otros, por las monarquías europeas, y muy especialmente por la británica, y su exacerbado unitarismo contrariaba los ideales republicanos, democráticos y federales de la Liga Oriental. Fue por eso que con la excepción de Córdoba las demás provincias de la Liga no enviaron representantes al Congreso de Tucumán, 51 algo que la historiografía oficial de la Argentina mucho se cuida en revelar. Los líderes de aquellas provincias ya daban por sentada la Independencia de las Provincias Unidas y, además, desconfiaban de los planes urdidos por la oligarquía porteña. El más audaz había sido pergeñado y llevado a la práctica por Carlos María de Alvear, a la sazón Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata. En tal carácter le había enviado al embajador británico en Río de Janeiro, Lord Strangford, una carta en la que, entre otras cosas, decía que “Estas provincias desean pertenecer a Gran Bretaña, recibir sus leyes, obedecer su gobierno y vivir bajo su influjo poderoso. Ellas se abandonan sin condición alguna a la generosidad y buena fe del pueblo inglés y yo estoy resuelto a sostener tan justa solicitud para librarlas de los males que las afligen. … Inglaterra no puede abandonar a su suerte a los habitantes del Río de la Plata en el acto mismo que se arrojan en sus brazos generosos...” Como puede comprobarse, el servilismo del actual Ministro de Hacienda de Mauricio Macri, Alfonso de Prat Gay, quien le pidió perdón a los inversionistas españoles por los “maltratos” que le infligiera el gobierno de Cristina Fernández tiene raíces profundas que como decíamos al principio de esta nota se remontan a dos siglos atrás. San Martín estaba al tanto de estas ignominiosas maniobras dirigidas a ahogar la revolución y la independencia en su cuna. Mientras preparaba al Ejército Libertador en Cuyo seguía tan de cerca como pudiera las deliberaciones que tenían lugar en Tucumán. Era consciente que todo el proceso emancipatorio americano pendía de un hilo. En México y los países del Istmo la rebelión popular estaba a punto de ser aplastada a sangre y fuego. Bolívar había sido derrotado, Miranda agonizaba en su mazmorra en Cádiz y Nueva Granada (Colombia) y Venezuela fueron arrasadas por los realistas. El virreinato de Perú seguía siendo un baluarte de la reacción ibérica al cual Chile estaba encadenado. El futuro de la independencia quedaba en las manos de las Provincias Unidas y de sus dos grandes dispositivos militares: el Ejército de los Andes, comandado por San Martín, presto a cruzar la cordillera, liberar a Chile y desde allí atacar al Perú. Y las guerrillas de Martín Miguel de Güemes en el Norte, para contener a las huestes realistas que desde Perú se descolgaban para sofocar el último bastión de la rebelión: el Río de la Plata. Por eso cuando el 9 de Julio de 1816 los delegados al Congreso aprobaron una declaración en la que se comunicaba “solemnemente a la faz de la tierra, que es voluntad unánime e indubitable de estas provincias romper los vínculos que las ligaban a los Reyes de España, recuperar los derechos de que fueran despojadas e investirse del alto carácter de nación independiente del Rey Fernando VII, sus sucesores y metrópoli” un sabor amargo se apoderó de algunos diputados. Uno de ellos, Pedro Medrano, anticipando la furiosa reacción que tendría San Martín al enterarse de la insoportable ambigûedad de una declaración como la del 9 de Julio, que dejaba abierta las puertas a la entronización de una dominación colonial, logró que en la sesión del Congreso que tuvo lugar el 19 de Julio se aprobara el siguiente texto que debía ser agregado a continuación de ‘sus sucesores y metrópoli’. Decía, ya sin ambages, ‘de toda dominación extranjera’. Por eso, la fecha genuina de la declaración de la independencia es el 19 de Julio, y no la que consagrara la muy conservadora historiografía oficial de la Argentina. Es el 19, no el 9, el momento en que las Provincias Unidas se internan en el camino sin retorno de la independencia nacional, declarándose ya sin eclecticismo ni oportunismo algunos independientes no sólo de la corona española sino de cualquier otra dominación extranjera. Dos siglos después esa aspiración sigue en pie, y la lucha iniciada por aquellos gigantescos patriotas sudamericanos dos siglos atrás continúa con toda su fuerza para lograr que, por fin, podamos sacudirnos el yugo del sucesor del viejo imperio español: el imperialismo norteamericano. 52 Un final muy largo Entrevista al economista Jorge Beinstein/ "El capitalismo se encuentra en su hora final" https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214274 Arnaldo Pérez Guerra Rebelión Destacado economista marxista, especializado en prospectiva y economía global, Jorge Beinstein es Doctor en Ciencias Económicas de la Universidad de Franche Comté-Besançon, Francia, y actualmente profesor emérito de la Universidad Nacional de La Plata, Argentina, donde dirige el Centro Internacional de Información Estratégica y Prospectiva (CIIEP). Ha sido académico en importantes universidades de Europa y América Latina, donde también ha dirigido relevantes proyectos de investigación. Entre sus últimos libros destacan: Comunismo o Nada, La ilusión del metacontrol imperial del caos: La mutación del sistema militar de los Estados Unidos, Capitalismo del siglo XXI, y Crónica de la decadencia: Economía global 1999-2009. Sus trabajos se pueden leer en la web beinstein.lahaine.org. -¿Cuál es su opinión sobre Chile? Vivimos la doctrina del shock impuesta por la dictadura, el neoliberalismo salvaje, el extractivismo y endeudamiento, la despolitización… -Creo que Chile nunca ha podido superar la tragedia del 11 de Septiembre. La dictadura remodeló a la sociedad chilena. No es el único caso, también en Argentina la dictadura cívico-militar instaurada en 1976 produjo degradaciones culturales y estructurales que han perdurado hasta hoy. Después de Pinochet ustedes han pasado a una suerte de democracia limitada comprimida por el modelo neoliberal que pudo instalarse y reproducirse como parte de una división internacional (colonial) del trabajo, de una economía global hegemonizada por los Estados Unidos pero que actualmente se está deteriorando rápidamente. Caen los precios de las materias primas sin perspectivas de repunte significativo y durable, eso afecta de manera decisiva al modelo neoliberal chileno. La burguesía chilena creía que la masacre pinochetista y sus prolongaciones económicas y culturales ‘democráticas’ extirparían por completo la memoria histórica popular, bloquearían para siempre el surgimiento de alternativas antisistema. Es la eterna ilusión de los contrarrevolucionarios siempre desmentida por la realidad. América Latina vive actualmente una época oscura, de arremetidas derechistas, pero también de putrefacción capitalista, entonces lo que parecía imposible, las aspiraciones revolucionarias, puede 53 reaparecer. Las latencias, las memorias subterráneas que se reproducen de manera invisible pueden converger con nuevas formas de crítica teórica y de lucha práctica hasta conformar una avalancha social. Dicha posibilidad no debe ser descartada sino más bien alentada. La evolución de la crisis global y regional abre esa perspectiva”. Zarpazos de la lumpenburguesía -¿Qué ocurre en Argentina tras la llegada de Macri al gobierno y cómo caracterizaría sus decisiones? -Ha significado un violento giro hacia la derecha más extrema del arco político argentino. A los pocos días de asumir se produjeron transferencias de ingresos hacia las elites económicas que por su magnitud y velocidad no tienen precedentes en la historia económica argentina. Esto ha causado una fuerte contracción del mercado interno y en consecuencia la llegada de la recesión. El FMI pronosticó a comienzos de año una caída real del Producto Interno Bruto para 2016 del orden del 1%, aunque viendo lo que ya ha ocurrido en el primer cuatrimestre podemos hablar de un descenso superior al 3%, más allá de lo que anuncie en el futuro el gobierno a partir de cifras manipuladas. Desde la llegada de Macri, se ha producido un apagón estadístico. No se suministran más las cifras oficiales de desocupación, inflación y otros indicadores. No descarto la posibilidad de una suerte de híper-recesión si el gobierno no llega a controlar la dinámica depresiva que ha generado. Entre los especialistas se discutía en los primeros meses acerca de cual era realmente el modelo económico macrista. Las decisiones económicas han sido tan salvajes, las contradicciones tan evidentes, el desastre tan grande que no cabe pensar que estamos ante un plan estratégico coherente apuntando a una reconversión capitalista de largo plazo, aunque sea oligárquica, sino ante un saqueo donde cada grupo dominante saca su tajada sin importarle lo que vaya a ocurrir en el futuro. Marchamos hacia una crisis de gobernabilidad impulsada por fuerzas entrópicas que se han desatado al derrumbarse el kirchnerismo. Las clases dominantes argentinas operan como una suerte de lumpenburguesía, de burguesía depredadora altamente destructiva. El fenómeno forma parte de un proceso global del mismo signo”. -Háblenos de la “lumpenburguesía global dominante”… -Tendríamos que arrancar desde los 70 cuando a partir de la estanflación la recuperación posterior se produjo con tasas de crecimiento económico global declinantes. Esa tendencia de largo plazo fue acompañada por una expansión de los negocios financieros que terminaron por financierizar al sistema mundial de tal manera que hacia 2008 la masa financiera mundial 54 representaba unas veinte veces el Producto Bruto Global (PBG), solo los productos financieros derivados equivalían a unas 11 veces el PBG. El fenómeno forma parte de un proceso más amplio de ascenso del parasitismo como componente hegemónica del sistema capitalista mundial que por supuesto incluye también a la hipertrofia militar, a la narco-economía, al consumo suntuario de las élites globales y su plataforma productivocomunicacional, etcétera. Se trata de un fenómeno originado hace casi medio siglo pero que en el siglo XXI se manifiesta como una mutación integral del sistema, como la transformación de su núcleo central dominante en una casta parasitaria. En ese sentido es posible establecer paralelismos con otras decadencias civilizatorias como por ejemplo la del Imperio Romano, etapa superior y final de la llamada civilización greco-romana. La lumpenburguesía -hoy dominante a escala global con centro en el Imperio estadounidense-, es decir, una burguesía degenerada, parasitaria, marca un salto cualitativo en la trayectoria universal del capitalismo, así como la aristocracia militar-consumista de la decadencia imperial fue el resultado de la mutación terminal de Roma. -Usted señala una crisis de la financierización de la economía mundial y que el Imperialismo despliega como último recurso la “Guerra de Cuarta Generación”: destruir las sociedades periféricas para convertirlas en zonas de saqueos. ¿Podría caracterizar esto y ampliar su visión? -La crisis de 2008 marcó el fin de la expansión acelerada de la trama financiera global, la misma fue una suerte de droga que permitió endeudarse a estados, empresas y consumidores de los capitalismos centrales, pero el ciclo del endeudamiento impune llegó al límite, la explosión de la mega burbuja inmobiliaria fue el punto de inflexión del sistema. Entonces los estados imperialistas realizaron enormes transferencias de fondos hacia los grupos financieros tratando, con éxito, de evitar su derrumbe. Pero no fue más que un parche y no la superación de la crisis. En 2001, por ejemplo, los negocios con productos financieros derivados, la columna vertebral de la red especulativa global, acumulaban unos 95 billones (millones de millones) de dólares equivalentes a unas 2,8 veces el PBG. En 2005, llegaban a unos 280 billones (unas 6 veces el PBG), y a mediados de 2008, poco antes de la crisis alcanzaban cerca de 680 billones (11 veces el PBG). Se trataba de un crecimiento exponencial, pero a partir de ese momento esa masa especulativa dejo de expandirse, se volvió inestable y desde 2014 se fue desinflando velozmente. Entre fines de diciembre de 2013 y fines de diciembre de 2015 la contracción fue del orden del 30%. En 24 meses se esfumaron unos 220 billones de dólares... ¡Equivalentes a casi tres veces el PBG! 55 Hasta la crisis de 2008 la expansión financiera operó como una suerte de impulsor inflacionario de la economía mundial. Desde 2014 la contracción financiera opera como un motor deflacionario que empuja hacia abajo a la economía. Dicho de otra manera, en una primera etapa se desarrolló un círculo aparentemente virtuoso (en realidad perverso) donde las deudas crecientes y las ganancias especulativas inflaban el consumo de los países ricos, sus gastos estatales (especialmente los gastos militares), sus innovaciones tecnológicas, sus actividades productivas, lo que a su vez engordaba a la especulación financiera. Pero el funcionamiento de dicho mecanismo produjo finalmente un círculo vicioso depresivo donde la sobrecarga financiera comprime a la economía lo que a su vez deteriora y desinfla a la especulación. Nos encontramos ante la declinación turbulenta de un ciclo parasitario, la más grave crisis de toda la historia del capitalismo. Si observamos lo sucedido con otras civilizaciones, vuelvo al caso romano, comprobaremos que cuando la pérdida de dinámica llega a un cierto punto la elite dominante trata de utilizar al máximo su último recurso: la fuerza militar. En nuestra civilización burguesa el Imperio -Estados Unidos y sus aliados vasallos occidentales-, intenta saquear al resto del planeta para así postergar su caída. El objetivo es apoderarse y agotar los recursos naturales de la periferia, marginar completamente a sus habitantes o súper explotarlos según los casos. Se trata de un megaproyecto estratégico tendiente a reducir drásticamente sus costos periféricos (mano de obra, insumos mineros y agrícolas, etcétera). Libia, Irak, Ucrania, Afganistán, Siria… nos muestran al Imperio destruyendo sociedades pero sin poder remplazar lo destruido por un nuevo orden colonial, lo que se instala es el caos porque lo que emerge no es una nueva división internacional del trabajo sino la decadencia global. La crisis del Imperio acentúa su locura belicista la que a su vez agrava la crisis”. Progresismos y capas medias -Los “progresismos” latinoamericanos parecen desgastados. ¿Cuál es su opinión sobre lo que ocurre en Honduras, Paraguay, Bolivia, Ecuador, Venezuela, la caída del kirchnerismo, las negociaciones de paz en Colombia y la “normalización” de relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos? -Los progresismos latinoamericanos, desde sus versiones más conservadoras como la del Frente Amplio de Uruguay hasta las más radicalizadas como la de Venezuela intentaron reformar los sistemas capitalistas existentes, en algunos casos para humanizarlos, mejorarlos socialmente y en otros para superarlos gradualmente, no se produjeron revoluciones sino reformas más o menos audaces. Esas experiencias pudieron aprovechar la efímera mejora del comercio internacional de materias primas para combinarla casi siempre con ampliaciones de los mercados internos, sobre todo expandiendo el consumo 56 popular. También aprovecharon el retroceso geopolítico del Imperio para construir políticas relativamente autónomas. Pero eso se fue agotando al profundizarse la crisis global a partir de 2008 y sobre todo desde 2014 cuando cayeron los precios de las materias primas a lo que se agregó una ofensiva muy fuerte de los Estados Unidos reconquistando su patio trasero latinoamericano. La misma comenzó desde la llegada de Obama a la Casa Blanca desplegando un complejo y flexible abanico de intervenciones, desde los ‘golpes blandos’ como en Brasil, Honduras, Paraguay y Argentina hasta acciones desestabilizadoras como en Venezuela pasando por el intento de abrazo-de-oso a Cuba y siguiendo por el plan de desarme de la guerrilla colombiana. En este último caso los Estados Unidos intentan lograr la rendición negociada de la insurgencia a través de una sofisticada trama envolvente de presiones directas e indirectas, anzuelos seductores y golpes bajos. Se trata de un juego típico de la llamada Guerra de Cuarta Generación destinada a someter a la insurgencia a una dinámica aparentemente de asimilación al sistema, realmente de destrucción, empezando por sus fundamentos ideológicos revolucionarios hasta llegar a su extinción estructural. En su ofensiva contra el progresismo los Estados Unidos cuentan con la colaboración de las burguesías latinoamericanas completamente transnacionalizadas. Lumpenburguesías periféricas arrastrando a importantes segmentos de las capas medias. -¿Se derechizan las capas medias latinoamericanas? ¿Neofascismo? ¿Contrarrevolución? ¿Qué ha contribuido a que el fenómeno ocurra? -Lo que muestran países como Brasil, Argentina, Bolivia o Venezuela en su primera etapa próspera es que la prosperidad y la gobernabilidad del sistema no solo reanimaron la voracidad de las elites locales sino que además ‘aburguesó’ a las capas medias ascendentes, ayudó a su integración ideológica con la cima, depredadora, lumpenburguesa, del capitalismo local buscando al mismo tiempo diferenciarse de la clases bajas también ascendentes. Los medios de comunicación concentrados cumplieron un rol decisivo en ese proceso inyectando odio social en un espacio fértil para eso, asociando justicia social con despilfarro, democratización del poder político con corrupción, etcétera. Este brote de irracionalidad pequeñoburguesa forma parte de un fenómeno más amplio, global, de fascistización, que se extiende por Europa e incluye fenómenos como el del llamado ‘Estado Islámico’ en Oriente Medio. Los neofascismos centrales y periféricos aparecen como respuestas reaccionarias a la crisis produciendo a veces contrarrevoluciones no porque hayan existido tentativas revolucionarias reales sino precisamente por la ausencia de revoluciones antisistema capaces de superar la degradación capitalista. 57 De todos modos la instalación de regímenes reaccionarios no significa el comienzo de una nueva gobernabilidad de tipo elitista y colonial sino la instalación de mecanismos de saqueo que profundizan las crisis. Es lo que se constata en casos como los de Argentina, Brasil o Paraguay y en lo que podría llegar a ser una victoria neofascista en Venezuela. BRICS y petróleo -¿Estados Unidos va por el BRICS? -Evidentemente sí, y acaba de obtener su primer éxito en Brasil. Pero su mega-estrategia global apunta contra China y Rusia. Ambas potencias han constituido una alianza estratégica de largo alcance que va desplazando a los Estados Unidos de Asia, estableciendo puentes importantes con Africa y América Latina. La intervención de la OTAN en Libia y otras en el resto de Africa así como la ofensiva imperialista en Latinoamérica pretenden entre otras cosas frenar la creciente influencia de China y Rusia. El problema del Imperio es que no tiene qué ofrecer a cambio del mercado chino a países como Brasil o Argentina, solo ofrece promesas de ‘inversiones’ mientras realiza o trata de realizar saqueos. -Estados Unidos intenta apoderarse de las reservas de petróleo y gas mundiales: Afganistán, Irak, Siria, Libia, Ucrania, Yemen... ¿Venezuela? -Uno de los temas decisivos de la disputa geopolítica euroasiática es el de la guerra energética donde las reservas de gas y petróleo ocupan un lugar central, el control de esas reservas pero también el del transporte: gasoductos y oleoductos, canales, estrechos y otras posiciones estratégicas. Por ejemplo en Asia, y sobre todo en la zona del Golfo Pérsico y de la Cuenca del Mar Caspio, está algo más del 65% de las reservas petroleras globales. Esa pelea se extiende hacia Africa en Nigeria y Angola y hacia América Latina, donde Venezuela ocupa un lugar decisivo con el 20% de las reservas mundiales de petróleo. Aunque el precio del petróleo está bajo también es verdad que la producción global de petróleo convencional está planchada desde hace casi una década. La irrupción del petróleo de esquisto de Estados Unidos amplió el volumen extraído pero se trata de recursos limitados que en pocos años más -a comienzos de la próxima década- llegará a su máximo nivel y empezará a declinar. Obviamente el dominio de las principales fuentes energéticas permitiría a los Estados Unidos ponerle un pie en el pescuezo de China y otro en el de Europa y jugar al gato y el ratón con el competidor ruso haciendo subir y bajar los precios según su voluntad. Pero Estados Unidos no está ganando esa guerra: no pudo doblegar a Irán, gran exportador energético, no 58 pudo desestabilizar a Rusia, otro gran productor, haciendo saltar por el aire la convergencia ruso-china, y hasta ahora no ha sometido a Venezuela. -¿Qué piensa que ocurrirá con China y Rusia en las próximas décadas? -Tanto China como Rusia pudieron emerger como grandes potencias aprovechando el último gran auge de la economía capitalista global. Rusia como potencia energética-militar y China como potencia industrial. En ambos casos las exportaciones hacia los países ricos fueron los motores de la prosperidad. Pero esa etapa global ha concluido. Los mercados desarrollados se comprimen y los Estados Unidos -liderando a la OTAN- acosa a esas naciones emergentes tratando de capturar grandes reservas de materias primas y quebrar el poderío militar en el caso ruso, y en el caso chino intentando esclavizar a la más grande clase obrera industrial del planeta: 250 millones de trabajadores, y subordinar a ese temible competidor financiero e industrial pero también tecnológico y con cada vez mayor capacidad militar. Liquidar la alianza estratégica ruso-china es el objetivo mayor de Occidente. Pero por otra parte los capitalismos ruso y chino no están fuera de la crisis global, forman parte de ella, son afectados por sus turbulencias, sus contracciones comerciales. Tratan de desacoplarse parcialmente de la decadencia mundial atrincherándose en el espacio euroasiático. El proyecto de la Nueva Ruta de la Seda, una gigantesca red de transporte marítimo y terrestre uniendo a los países de la región, constituye una de sus más grandes esperanzas. Lo que muestra la realidad es que no pueden escapar del desorden global, después de todo esas dos naciones protagonizaron en el siglo XX las dos más grandes tentativas de superación del capitalismo. La inviabilidad histórica del nacionalismo burgués en la era del capitalismo globalizado, aunque se trate de grandes países, abre allí la posibilidad de reintentar nuevamente tomar el cielo por asalto”. ¿El fin del capitalismo? https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214255 Luis González Reyes Rebelión ¿Qué es el capitalismo? El capitalismo es un sistema económico que persigue la reproducción del capital. Esta reproducción se realiza mediante la inversión de dinero (D) en mercancías, maquinaria, materias primas, energía y fuerza de trabajo que generan bienes y servicios (M), con el objeto de conseguir con su venta más dinero (D'). Por lo tanto es obvio que, para que exista reproducción del 59 capital, tiene que haber materia, energía y trabajadoras/es por una lado [1] y consumidoras/es por el otro. Otra posible circulación sería D-D', en la que el dinero se invertiría en operaciones financieras para conseguir un beneficio mayor. En realidad, la circulación D-D' se apoya sobre la D-M-D'. La economía financiera lo que hace es detraer parte de la plusvalía de la economía productiva y multiplicarla aparentemente (crea más dinero, pero no más capital). La cantidad que D' excede a D es la plusvalía. La primera forma de obtenerla es consiguiendo que los/as empleados/as trabajen produciendo más ingresos que los gastos. El capitalismo consigue esto por cuatro vías: alargar la jornada laboral, reducir los salarios, aumentar la cantidad de personas que trabajan e incrementar la productividad. Como las tres primeras tienen límites claros (los cuerpos humanos), el elemento central a largo plazo es el aumento de la productividad. El incremento de la productividad se consigue con una mejor organización de los/as trabajadores/as (lo que podemos hacer en colectivo es mucho más que lo que conseguimos de forma individual y, por lo tanto, genera más plusvalor). También cuenta la intensidad/eficiencia del proceso de trabajo. Finalmente, es fundamental el uso de máquinas, que requieren consumos crecientes de materia y energía. Nuevamente, los cuerpos humanos ponen límites a las dos primeras formas de incremento de la productividad, por lo que históricamente ha sido imprescindible un incremento del uso de máquinas. Hay otras formas de conseguir plusvalía que no es el trabajo asalariado. Se puede robar el trabajo ajeno mediante lo que se ha denominado “acumulación por desposesión”. En este caso, el capitalismo no crearía el valor de forma interna, sino que se lo arrancaría a quienes lo han creado fuera del sistema. Por ejemplo, el patentado de conocimientos colectivos y la apertura a los mercados capitalistas de economías que funcionaban bajo otras lógicas serían formas de acumulación por desposesión. Esto implica una extensión del capitalismo a más territorios y ámbitos de la vida. El trabajo humano produce valor porque modifica la materia usando energía y conocimiento. Esto también lo hace la naturaleza produciendo por tanto valor. Así, la plusvalía también se consigue mediante la apropiación del trabajo de la naturaleza. Por ejemplo, el trabajo de fotosíntesis es enajenado por el propietario de la plantación de caña, o el de concentración de minerales es usurpado a través de la minería. Para que todo esto sea posible es necesario que los seres humanos puedan trabajar en la reproducción del capital. Es decir, que las sociedades sean 60 capaces de sostener la vida. Esto supone una ingente cantidad de trabajos de cuidados (higiene, alimentación, sostén emocional, crianza) que en muchos casos no generan plusvalía, pero sin los cuales es imposible que esta se produzca. El grueso de estas labores las realizan las mujeres en nuestro sistema patriarcal. Además, este sostenimiento de la vida requiere de unos ecosistemas que puedan realizar sus funciones (depuración del agua, sostenimiento del equilibrio climático, fertilización del suelo). Estos trabajos, además, son imposibles de retribuir por el capital [2]. De este modo, se pueden resaltar cinco condicionantes para el funcionamiento del capitalismo: i) materia y energía por un lado y consumidores/as por otro; ii) aumento de la productividad, lo que requiere un incremento del uso de máquinas, que a su vez necesita un mayor consumo de materia y energía; iii) extensión continuada del capitalismo; iv) explotar el trabajo realizado por la biosfera; y v) tener garantizada la reproducción de la vida. ¿Se está deteniendo la reproducción del capital? Como se aprecia en la figura, se está produciendo un descenso en la tasa de ganancias mundial, lo que señala dificultades crecientes para sostener la reproducción del capital. Evolución de la tasa de beneficios mundial. Roberts, M. (2015): “Revisiting a world rate of profit”. https://thenextrecession.files.wordpress.com/2015/11/revisiting-a-worldrate-of-profit-june-2015.pdf 61 Hasta los años 80, la ralentización de los incrementos de productividad había sido la causa principal del descenso en la tasa de beneficios. Esto se produjo por un periodo de exitosas luchas sociales en todo el mundo y, coyunturalmente, por el alza del precio del petróleo. Después, durante la fase neoliberal, el capitalismo logra sostener la tasa de beneficio aumentando la explotación en el trabajo asalariado (reducción de sueldos, aumento de la jornada, impuestos regresivos, desmantelamiento de servicios públicos, incorporación de más personas al mundo asalariado) y de la naturaleza (lo que incluye su mayor mercantilización). También fue determinante la fagocitación de más territorios en el sistema-mundo (entre los que destacaron Rusia y China), la inclusión de más facetas de la vida en la lógica del mercado capitalista, y la extensión de los ámbitos de actuación a nuevos espacios [3] y más funciones ecosistémicas. Además, el sostenimiento de los beneficios requirió de una expansión gigantesca del crédito (de la deuda) para conseguir que el consumo siguiese aumentando. Esto permitió también crear la ilusión de que todo iba cada vez menor gracias al encadenamiento de burbujas especulativas. Pero, en realidad, esta especulación financiera no creó capital. A pesar de todo, la productividad continuó descendiendo. En parte, porque la actividad empresarial se desvió a la compra de activos financieros y el pago de dividendos, en lugar de en maquinaria, pues esto era cada vez menos rentable. Pero también porque, desde 2005, se ha alcanzado el pico del petróleo convencional y esto ha conllevado un dificultad creciente de conseguir materia y energía abundante y barata. ¿Es posible una reactivación de la creación de valor? La crisis del 2007/2008, que abre la Gran Recesión y que tiene como trasfondo central la creciente incapacidad de reproducir el capital, se ha encarado con cuatro estrategias fundamentales que están chocando con límites insoslayables. El intento neoliberal de extender el capitalismo a más ámbitos de la vida y a más territorios está llegando a su máximo, pues no quedan espacios suficientemente significativos que meter dentro de la lógica del capital. El “capitalismo de los pobres” [4] o tratados como el TPP, el TTIP, el CETA o el TISA se pueden leer como un desesperado intento de introducir dentro de la rueda de reproducción del capital los últimos reductos que quedan fuera. Aún si llegasen a tener éxito, no significarían un alivio real, pues el volumen del 62 problema excede con mucho a las posibilidades de negocio que estas vías podrían abrir [5]. Además, para que exista un mercado globalizado hace falta petróleo abundante, barato y ligero, tres características que, está dejando de tener el crudo[6]. Un mercado global es central para permitir una mayor reproducción del capital, pues permite tener una economía de escala, y aumentar la especialización, la explotación laboral, el consumo y la capacidad de financiación. Una medida característica de la Gran Recesión está siendo la creación ingente de dinero (deuda) mediante políticas como la quantitative easing. Lo que se persigue es sostener los niveles de consumo de las clases altas y de los grandes capitales. Pero esta medida está llegando a su límite. Primero porque, después de la creación de una cantidad nunca vista de dinero (deuda), no solo no se ha conseguido la reactivación, sino que las medidas están terminándose, pues no está nada claro que tenga sentido bajar los tipos de interés por debajo de 0%, que es básicamente donde están. Segundo, porque la deuda ha adquirido un volumen tan grande que es imposible que puedan generarse nichos de negocio suficientes para restituir una parte significativa [7]. De manera profunda, esto no es posible porque estamos en un “mundo saturado”, donde la biosfera ha sido ya ampliamente colonizada. Por lo tanto, lo que hay por delante es el sonoro estallido de nuevas burbujas. Una tercera estrategia está siendo el aumento de los grados de explotación de las personas mediante una rebaja mayor en las condiciones laborales. Esto está produciendo la laminación de la clase consumista. Es decir, se aumentaría la productividad a costa de reducir el consumo, lo que impide recuperar la tasa de beneficios. El cuarto grupo de medidas consiste en recrudecer la explotación de la naturaleza. Sin embargo, esto es cada vez más complicado pues, por ejemplo, los petróleos que quedan son los que están en el ártico, embebidos en rocas duras, en aguas ultraprofundas y/o de peor calidad. El capitalismo ya se ha apropiado de gran parte del trabajo realizado por la naturaleza. Finalmente, una vía que no está explorando el capitalismo global más que parcialmente en China e India es la creación de un nuevo “Estado del Bienestar” que sostenga a otra clase consumista. Y no lo está haciendo porque esto es imposible. La construcción del “Estado del Bienestar” se produjo en un contexto de fuertes luchas sociales y, sobre todo, de un incremento fuerte de la productividad gracias a la explotación masiva de petróleo (pero no solo). Así, pudo haber altas tasas de benéfico y que parte de él recayera en las clases medias de los Estados centrales. Esto ahora es imposible. 63 Por si todo esto fuera poco, los mecanismos de reproducción de la vida están seriamente comprometidos. Estamos viviendo una crisis de los cuidados como consecuencia de la incorporación masiva de las mujeres al mundo asalariado en sociedades patriarcales (entre otros factores). También se está produciendo una pérdida de funciones ecosistémicas básicas. ¿Cuáles son los posibles escenarios futuros? Por lo tanto, si el capitalismo se caracteriza por la reproducción del capital y esta puede detenerse en un futuro cercano, los sistemas socioeconómicos que tengamos por delante podrían ser otros. En ellos, no habrá casi creación de riqueza y la base de la acumulación será el despojo. En todo caso, también serían factibles (aunque difíciles) nuevos capitalismos regionales. En este escenario poscatpitalista, las estrategias de sostenimiento social de tipo “goteo” no son posibles. Estas abogan por un crecimiento y concentración de la riqueza y que, por efecto goteo, esto acabe redundando en toda la sociedad. Tampoco lo son las que buscan aumentar el tamaño de la tarta y remodelar algo el reparto de los trozos para conseguir una mejora social. Solo hay dos opciones factibles en un contexto de fuerte reducción de la tarta. Una es que unas pocas personas consigan la fuerza suficiente para arrebatar a grandes masas los bienes de supervivencia básicos. Sería una opción que requiere un genocidio. La segunda es conseguir una redistribución real y profunda de la riqueza desposeyendo de ella a las clases altas. Notas [1] No existe nada parecido a la economía desmaterializada. Todos los datos empíricos muestran como el crecimiento económico requiere un incremento del consumo material y energético. [2] El trabajo humano no pagado de sostenimiento de la vida puede rondar el 70-80% del PIB mundial. El de la biosfera podría ascender al 70-250% del PIB mundial. [3] Como la estratosfera, las aguas ultraprofundas, los genes o la nanotecnología. [4] En este paquete entrarían, por ejemplo, los microcréditos. [5] Entre otras cosas, porque muchas (como los servicios públicos) ya están en gran parte dentro de la lógica del mercado capitalista. 64 [6] El transporte depende en un 95% del petróleo y es una fuente prácticamente imposible de sustituir en este sector. [7] Desde 2007, la acumulación de deuda en el mundo ha crecido al 5,3% (mucho más que el PIB). Para recuperar una tasa de crecimiento del 3%, en 2010, 1,6 billones de dólares debían encontrar nichos de mercado. En cambio, en 1950 esta cifra era de 150.000 millones y en 1973 de 420.000 millones. Dialéctica y marxismo: Antonio Labriola y el método genético http://www.laizquierdadiario.com/Dialectica-y-marxismo-Antonio-Labriola-y-el-metodogenetico El marxista italiano Antonio Labriola realizó aportes teóricos muy importantes para la comprensión de la dialéctica y el marxismo. En estas líneas, algunos apuntes sobre sus ideas. Dialéctica y marxismo: Antonio Labriola y el método genético Juan Dal Maso [email protected] Luego de la introducción realizada en el primer artículo de esta serie, deberíamos avanzar en explicar en términos generales qué es la dialéctica. Podríamos decir que es un modo de pensar que en lugar de considerar la realidad y los conceptos como fijos e inmutables, los considera sujetos a un proceso de cambio. Si este proceso de cambio quisiéramos resumirlo en formas totalmente abstractas podríamos indicar las famosas "leyes" de la dialéctica, que serían como formas puramente lógicas del movimiento (la expresión es de Marx): la unidad de los contrarios (que propone una relación intrínseca entre elementos a primera vista contradictorios), la transformación de la cantidad en calidad (que explica que la acumulación de cambios cuantitativos genera un cambio cualitativo) la negación de la negación (que explica el proceso de determinaciones de un objeto a través de un peculiar modo de superación de las contradicciones, donde lo superado se considera un momento necesario y no un "error"). Fin de la historia. Pero no es tan sencillo. Sucede que definir la dialéctica como un conjunto de criterios externos a sus contenidos es algo que la propia dialéctica cuestionaría. El marxista checo Karel Kosik decía que la dialéctica trata de la "cosa misma", pero se aproxima a ella dando un rodeo. Un rodeo similar hay que hacer para hablar de la dialéctica, empezando por comprender sus orígenes históricos. De todas maneras, para poder hacer este recorrido es necesario tener algunas definiciones provisionales. La dialéctica no nace con el marxismo, ni con Hegel. Hay distintas variantes de pensamiento dialéctico en toda la historia de la filosofía anterior a Hegel y Marx. Hay variantes de pensamiento dialéctico en el pensamiento occidental y oriental. Como el tema es tan amplio que resultaría imposible de tratar en un artículo o serie de artículos, nos limitaremos a considerar una primera definición general de la dialéctica marxista para luego, en próximas entregas, ir destacando algunos aspectos específicos, teóricos e históricos. En segundo lugar entonces, intentaremos resumir una idea de lo que es la dialéctica marxista a partir de los aportes de Antonio Labriola. Antonio Labriola (1843-1904) fue el primer marxista italiano. Heredero de la tradición filosófica del intelectual hegeliano Bertrando Spaventa, hizo un recorrido filosófico similar al que unas 65 décadas antes habían realizado Marx y Engels en Alemania. Se acercó de Hegel a Feuerbach y por esa vía al socialismo y el marxismo. Intercambió cartas con Engels y fue el autor de destacados ensayos sobre la concepción materialista de la historia. Labriola dio una pelea ideológica muy fuerte contra aquellas variantes del socialismo italiano que proponían entender el marxismo como una variante del evolucionismo positivista, es decir que buscaban explicar la sociedad en base a un “darwinismo” mal entendido, sin comprender la crítica del marxismo a las relaciones sociales capitalistas ni su método de comprensión de la historia. Labriola destacaba en este contexto la importancia de la independencia del materialismo histórico respecto de las distintas teorías burguesas, así como la idea del marxismo como una filosofía de la praxis "inmanente a las cosas sobre las que se filosofa." y definía el comunismo de Marx y Engels como un "comunismo crítico" contra las interpretaciones cientificistas, a las que hacíamos referencia. Sus ensayos sobre la concepción materialista de la historia terminaron de ganar a Trotsky para el marxismo durante una de sus temporadas en la cárcel zarista y fueron también punto de referencia para las reflexiones de Antonio Gramsci en otras cárceles, las del fascismo. Fue el propio Labriola quien propuso comprender la dialéctica marxista como un "método genético". Es decir un método que busca explicar su objeto de estudio, en este caso la sociedad capitalista, a partir de las condiciones históricas concretas que le dieron origen, tanto como de la “dilucidación de su proceso”, es decir la explicación del proceso histórico objetivo en atención a los intereses materiales derivados de la compleijzación de la vida en sociedad, más allá de las formas en que el género humano (incluidos los historiadores) se lo representaron. Este método genético tenía para Labriola dos momentos. Un primer momento de “análisis y reducción” es decir de descomposición de los distintos aspectos de la realidad histórica, en el que se podían tomar como objeto de análisis planos específicos como la economía, las formas de representación ideológica o religiosa predominantes en un período histórico, las instituciones políticas, etc., para comprender cada uno en su singularidad; y un segundo momento de “mediación y composición” es decir de reconstrucción de las relaciones entre los distintos elementos antes seccionados por el análisis para comprender la realidad histórica en su carácter unitario. Precisamente la idea de “mediación” es una de las claves del pensamiento dialéctico. La mediación expresa en el análisis concreto aquellos movimientos que las formas puramente lógicas abstractas popularizadas como “leyes de la dialéctica” presentan como leyes generales. Desde el punto de vista de la teoría, la “mediación” consiste en establecer relaciones de interdependencia de distintos aspectos de la realidad, así como reconocer las formas específicas del proceso de desarrollo de los objetos investigados. Por este motivo, el marxismo se caracteriza por la construcción de dialécticas concretas que explican relaciones sociales a través de conceptos específicos, que por un lado superan el carácter abstracto de las “leyes” mencionadas más arriba, aunque por otro, si le quitáramos sus determinaciones específicas, terminarían coincidiendo con estas. Podemos tomar como ejemplos la idea de la lucha de clases como motor de la historia, la contradicción entre el desarrollo de las fuerzas productivas y las relaciones de producción como origen de una época de revolución social, la teoría del desarrollo desigual y combinado como explicación del desarrollo histórico de los países rezagados, por nombrar aquellas más generales. Todas estas teorías tienen una base dialéctica, es decir suponen una lógica de desarrollo basada en contradicciones, en saltos cualitativos y en la conformación de nuevas estructuras que contienen aquellos elementos que sobrevivieron al cambio revolucionario. 66 El proceso social, político e intelectual a través del cual Marx construyó su propia interpretación de la dialéctica es extremadamente complejo por varios motivos, pero sobre todo porque su relación con la filosofía de Hegel (que presentaba su filosofía como el punto más alto de toda dialéctica y toda filosofía) es también una relación dialéctica, de ruptura y reapropiación. De crítica y reformulación de sus aportes, no sólo desde el punto de vista de un método abstracto de análisis sino también desde el rescate de ciertas intuiciones de Hegel que le sirvieron a Marx para reelaborar la propia tradición materialista. Y lo que Marx “usa” de Hegel varía según los distintos momentos de su propia elaboración teórica. Será tema de un próximo artículo. El papel político de la mentira moderna Juan Andrés Muñoz Arnau http://www.elespanol.com/opinion/20160624/135106490_12.html En el año 1945 Alexandre Koyré (1892-1962), francés de origen ruso, publicó una pequeña obra titulada El papel político de la mentira moderna. Filósofo e historiador de la ciencia, admirado por Lacan o Foucault, mereció este elogio de Raymond Aron en sus Memorias: “[…] había combatido en la Primera Guerra (aunque jamás hablaba de ello). Admirable historiador de la filosofía y de la ciencia, abarcaba un inmenso terreno, desde la mística alemana hasta el pensamiento ruso del siglo XIX y los estudios sobre Galileo, con justicia clásicos en todos los países. […] jamás se dejó tentar por el comunismo, ni siquiera cuando la Gran Depresión parecía confirmar las previsiones de Marx. Brillaba entre los espíritus excepcionales no tanto por el talento, sino por la modestia, por la búsqueda escrupulosa y paciente de la verdad, por el rigor moral”. Koyré afirmaba en aquel libro que los regímenes totalitarios “se fundan sobre la primacía de la mentira”. Esto, que es del todo cierto, puede aplicarse también a partidos que, en el contexto de una democracia pluralista, aspiran a establecer un régimen político de aquella naturaleza cuya orientación última queda velada por una propaganda política que utiliza como arma la mentira. La mentira totalitaria se basa, en definitiva, en un desprecio de la moral, donde el fin siempre justifica los medios Se me dirá que en dosis más o menos fuertes la mentira está presente también en las formulaciones teóricas y en la praxis de los partidos que, para entendernos, podemos llamar democráticos. Pero en este último caso se trata de mentiras -tan reprobables como las otrasque tienen un carácter “circunstancial”, por llamarlo de alguna manera, pero no forman parte de una “mentira orgánica”, producto de un pensamiento globalmente engañoso. Esa mentira totalitaria se basa en definitiva en un desprecio de la moral. Este desprecio es patente en Lenin que, en su Discurso a las Juventudes Comunistas afirmaba: “nuestra moral está enteramente subordinada a los intereses de la lucha de clases del proletariado”; o “es moral lo que sirve para destruir la antigua sociedad explotadora y para agrupar a todos los trabajadores alrededor del proletariado, creador de la nueva sociedad comunista”; o “la base de la moral comunista está en la lucha por consolidar y llevar a su término el comunismo”. El fin siempre justifica los medios. Esa moralidad ajena a cualquier exigencia de base antropológica requiere la utilización cotidiana de la mentira 67 Esta moralidad circunstancial, utilitaria, ajena a cualquier exigencia de base antropológica, requiere la utilización cotidiana de la mentira para su existencia: la mentira resulta ser necesaria para la implantación de la moral leninista y el correspondiente régimen político. En este sistema de pensamiento, las verdades parciales que utilizan sus dirigentes -la existencia de corrupción, desigualdades o injusticias concretas, por poner solo unos ejemplos-, están al servicio de una mentira total y las verdades parciales sirven para dar apariencia de una veracidad que sirve para ocultar la ideología real. Decía Koyré: “la mentirá será [se entiende para esos sujetos] más que una virtud. Será la condición de su existencia, su modo de ser cotidiano, fundamental, primordial”. Y añade que lo propio de esta mentalidad totalitaria es “ocultar lo que se es y, para poder hacerlo, simular lo que no se es[…]”. Los medios deben tener en cuenta que no es cierto que todas las ideas contribuyan a la existencia de la democracia Esa mentira totalitaria es más dañina cuando vive en el contexto de un democracia, como sucede en España. La irresponsabilidad de algunos medios de comunicación -que malentienden lo que significa la libertad de expresión-, les hace erigirse en voceros de esa ideología totalitaria porque con ello crecen en índice de audiencia o aumentan el número de lectores de sus periódicos. No es verdad que todas las ideas contribuyan a la existencia de la democracia y el Estado de Derecho. La libertad de expresión, en efecto, no puede impedir la circulación de esas ideas, pero los medios de comunicación, que tienen una dimensión institucional, no pueden ser neutrales ante la mentira que sustenta las ideologías que persiguen acabar con la democracia y el Estado de Derecho. Se produce, en las actuales circunstancias, un extraño maridaje, un entramado negocial, entre la ideología totalitaria y los medios de comunicación capitalistas que cambian audiencia por propaganda. El dinero corrompe el sentido de responsabilidad social que debería animar a los medios al convertir el espacio de la opinión pública en un espectáculo de demagogia ajena a cualquier exigencia del bien común. Las ideologías ocultas que mantienen algunos partidos van contra la idea de Estado social y democrático de Derecho Las ideologías ocultas que mantienen esos partidos o coaliciones van contra la idea de Estado social y democrático de Derecho; desconocen los derechos fundamentales y atentan contra la dignidad humana al violentar la inteligencia con la mentira. A esto se añade un ejercicio autoritario del poder -antidemocracia-, por mucho que las decisiones políticas se presenten como un producto asambleario. Esto no es una afirmación gratuita. Basta observar algunos comportamientos concretos de quienes en España se mueven en este ámbito ideológico oculto para corroborar lo que digo: las informaciones muestran que han desconocido la debida protección de la juventud y la infancia; se han mofado de las creencias religiosas de la mayoría de la población; han mostrado un profundo desprecio por las exigencias del Derecho y han sacrificado el bien común en favor de los objetivos políticos que les animan. *** Juan Andrés Muñoz Arnau es profesor de Derecho Constitucional en la Universidad de La Rioja. 68 Si Rusia y China mantienen firmeza, EEUU puede ser arrojado de todas las regiones donde provoca Podrá EEUU con la estrategia China-Rusia? los pueblos hablan.org https://www.facebook.com/enrique.munozgamarra/posts/1709359115982436 Bien sabemos que los cambios mundiales han sido enormes, incluso, ahora son extremadamente visibles ante los propios ojos del mundo, sobre todo, aquellos referidos al resquebrajamiento de la hegemonía mundial estadounidense. Cambios que, por supuesto, exigen una nueva estructura de poder (multipolar imperialista) que el grupo de poder fascista de Washington simplemente no la acepta. Enajenado en sus antiguos idilios retrasa cualquier acuerdo, en este caso, con Rusia respecto a Siria y Sudeste de Ucrania. Sin embargo la dura confrontación que vive el planeta (pugnas y colusiones interimperialistas) no está referida solo a estas dos regiones, sino, al conjunto del planeta, por lo que cada contendiente (China, Estados Unidos y Rusia) tiene su propia visión estratégica. Algunos de ellos son: los Balcanes con Macedonia de reciente pretendida desestabilización. También el Cáucaso donde la arena movediza está en Georgia y Azerbaiyán (Actualmente, se encuentra en guerra contra la República de Armenia por el territorio de Nagorno Karabaj). En Asia central, casi toda la región. Sin olvidar lo que hay en el mar meridional de China, donde Filipinas, en caso de conflicto armado, puede constituirse de forma inmediata en una cabecera de playa a favor del viejo ejército estadounidense. El presidente filipino, Benigno Aquino III, es un acérrimo antichino. Además, por supuesto, el sudeste asiático donde los vientos de guerra están dirigidos contra la RPDC (la última provocación está referida a la guerra bacteriológicaÁntrax) que en las actuales circunstancias cuenta con un equipamiento nuclear muy importante con el que somete a raya a Estados Unidos y Corea del sur. En América Latina los peligros de devastación pesan muy fuertemente, en particular, contra Venezuela. Entonces esta es la razón de la actual desesperación estadounidense por imponer acuerdos que extralimiten lo que es incapaz de lograr con las provocaciones actuales de su viejo ejército que Rusia simplemente no las acepta. En principio Estados Unidos no está en condiciones de sostener por más tiempo dos o tres guerras al mismo tiempo, su bancarrota económica lo impide, máxime si se tiene cuenta su enorme gasto militar (más de mil bases militares, además, numerosos contingentes de paramilitarismo desplegado en casi todas las regiones del planeta que no viven, por supuesto, del aire, necesitan presupuestos enormes). No exagero si digo que este asunto es peor que Vietnam. Estados Unidos está empantanado hundiéndose en esta vorágine de gastos militares. Aunque China sigue subvencionándola con la compra de los bonos, aunque ya ahora en menor escala, que, entre otras, explican su status defensivo en el arquetipo de la confrontación geopolítica actual. Consecuentemente este país (Estados Unidos) no puede darse el lujo de abrir nuevos frentes de guerra e ir más allá de estas regiones (Sudeste de Ucrania y Siria) bajo cargo de la implosión del edificio del sistema imperialista occidental. Si, como hemos sostenido en anteriores notas, Rusia mantiene firmeza y China pasa a la ofensiva militar, Estados Unidos puede 69 ser arrojado de todas las regiones donde provoca. Entonces esto obligaría a reforzar su estrategia en los entornos de América Latina. Hay que tener en cuenta siempre las cuatro características fundamentales de la actual coyuntura histórica: estructura multipolar, equiparación de fuerzas, carrera armamentística y guerra informativa. Son las bases de cualquier análisis internacional. Aquí nos interesa la guerra informativa. Esto en Siria ahora está presente como una guerra psicológica. Es de grandes proporciones. En realidad una grotesca adulteración de la realidad objetiva, no solo de Oriente Medio, sino, del mundo entero. Y es parte de su oposición a los cambios en los niveles de los poderes imperialistas que está operándose en este mismo momento en el mundo. Los centros de contra información y anti subversión del ejército estadounidense están indudablemente muy atareados. El demiurgo Nazi-estadounidense “Miente, miente que algo queda”, es lo central para este grupo. En realidad, una comedia fachosa del que resulta un mundo fantasioso donde lo negro es blanco y la mentira es verdad. Ofuscaciones de baja monta disparadas contra casi ocho mil millones de personas que viven en el planeta. Veamos esto: Ante todo, la grotesca adulteración de la realidad que los centros de contra información del viejo ejército estadounidense imponen con el 90-95 % de las noticias que se emiten a escala mundial: Primero, Estados Unidos está regocijado hasta el extremo al imponer que el Estado Islámico (EI) es “un grupo de ¿románticos?” que se ¿autofinancian? y que nada tienen que ver con su ejército. El Pentágono esta rebosante de alegría por haber impuesto esta farsa. Pero, ¿Alguien, en su sano juicio, puede creer esto? No. Son grupos criminales, mercenarios y paramilitares reclutados en las principales ciudades de Europa, África, Asia Central, los Balcanes y América Latina. Por cierto, hablamos aquí de las fuerzas sin rango militar que componen este Estado Islámico (EI), máxime si se tiene en cuenta la gran población desocupada, sobre todo, lumpen proletariado, emergida como consecuencia de la gran crisis que se vive desde 2008 y que esperan desesperadamente cada mes sus míseros sueldos, $ 1200 dólares que envía el Pentágono por aviones y helicópteros que sobrevuelan los lugares donde han sido destacados estos carnes de cañón, cuyos líderes tienen vinculaciones directas con el ejército estadounidense (su engranaje). Segundo, la manipulación informativa también está referida a mostrar a Estados Unidos como un país que busca la “democracia” y no un país que quiere destruir el planeta devastando ciudades, incluso con terremoto (sobre esto está pendiente la investigación) y cometiendo genocidios contra la humanidad. Tercero, de igual modo presentan a Siria como un país antidemocrático que protesta (ojo no debe protestar) cuando los misiles estadounidense o de la coalición Internacional impactan en su territorio destruyendo sus infraestructuras y asesinando a sus indefensas poblaciones. La demonización del presidente sirio, Bashar Al Assad, es demoledora. Cuarto, difunden la farsa que Siria está al borde del colapso y derrotado, para facilitar la ocupación nazi estadounidense. Quinto, publicitan utilizando a sus demagogos, que grupos de poder regionales, sobre todo de Oriente Medio, absolutamente irrelevantes en el poder mundial y apéndices suyos (vasallos), como que en algunos momentos estos se vuelven antiestadounidenses, como el de Turquía siendo el primer portavoz militar de la OTAN, 70 Egipto, segundo receptor de ayuda militar estadounidense, Arabia Saudita, primer receptor de protección militar estadounidense y sionismo israelita, primer receptor de ayuda militar estadounidense. Pero veamos lo concreto de lo anterior: Empiezo observando la grosera manipulación en la ocupación de la ciudad Al Ramadi de Irak por el Estado islámico, es decir, ejército estadounidense (Ojo siempre cuando hablamos del criminal Estado Islámico hablamos del viejo ejército estadounidense). ¿Recuerdan cómo se produjo la ocupación de la ciudad de Mosul en Irak? Pues debemos saber que la ocupación de la ciudad Al Ramadi (Irak) se produjo casi en similares condiciones. La ocupación de la ciudad Mosul. Ante todo recordemos lo que sucedió el 10 de junio de 2014. Ese día fue ocupada esta ciudad. En lo central, hay que destacar en esto que 800 fanáticos “hicieron huir” a dos divisiones del ejército iraquí compuesta por 30.000 soldados que defendía la ciudad de Mosul poblada por 1,5 millones de personas. Un hecho más que suficiente para demostrar lo bien que estuvo planificado la operación militar para entregar esta ciudad (Mosul) a estas bandas criminales. Es decir, la interrelación habida entre esta banda paramilitar (Estado Islámico, en realidad el viejo ejército estadounidense) y el ejército del corrupto, Nuri al-Maliki, por aquellos días aún presidente de este país, era una cuestión a plena luz del día. Es decir, sumamente escandalosa. Además, es de sobra conocido que el cielo iraquí es cielo de los cazas F18 estadounidenses desde 2003. La ocupación de la ciudad Al Ramadi. Esta ciudad es la capital de la provincia de Al Anbar, situada a unos 100 kilómetros al oeste de Bagdad, por el criminal “Estado Islámico”, ocurrida el 17 de mayo de 2015 después que el ejército que lo defendía la abandonará y prácticamente la entregará a estas bandas famélicas. El ejercito que lo protegía se llamaba “División de oro”, una unidad de fuerzas especiales del ejército iraquí entrenado por Estados Unidos. Veamos esto: “Salim al-Jabouri, el presidente del Parlamento de Irak y más prominente político sunita en el régimen de Bagdad, dijo a CNN que las tropas iraquíes abandonaron Ramadi como resultado de "una decisión clara para dar la orden de retirarse - y después de eso Ramadi cayó”. Al-Jabouri, dijo que el primer ministro Abadi, instalada el año pasado con el apoyo de Washington, no había sido informado de la orden de retirada de la ciudad. El colapso de las fuerzas de seguridad en Ramadi ocurrió, agregó, después de la llamada División de oro - una unidad de fuerzas especiales entrenado por Estados Unidos - de repente salió de la ciudad” (1). También Cubadebate hizo algunas averiguaciones sobre esto: “Informe revela vínculos directos entre EEUU y el Estado Islámico. El Estado Islámico y sus victorias en Mosul y Ramadi serían obra de EE.UU., según revela un informe secreto de la organización militar estadounidense Agencia de Inteligencia de Defensa (Defense Intelligence Agency, DIA). El informe de la agencia, obtenido por la organización Judicial Watch, grupo de vigilancia del gobierno no partidista y políticamente conservador, revela el origen del Estado Islámico y las razones por las que cayeron en manos terroristas las ciudades de Mosul y Ramadi. (2). Entre tanto han seguido utilizando el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) para desacreditar a Siria: 71 El 26 de mayo de 2015 se denunció al “Observatorio Sirio para los Derechos Humanos” como un centro anti-sirio y de manipulación informativa. De plano este “observatorio” estaba descalificado como fuente de cualquier información sobre Siria. Sin embargo han seguido utilizando a este centro como fuente de manipulación contra Siria, pues el asunto, de la guerra psicológica continuaba febrilmente. En efecto el 30 de mayo de 2015 Sputnik hizo público el siguiente comunicado (con esto no estoy en contra de Sputnik, como algunos puedan suponer, las prensas occidentales son los que están febrilmente en esto y a ellos me refiero cuando hablo de “febrilmente”. Rusia Today y Sputnik son mis mayores fuentes de información. Ojo con esto): “Más de 40 civiles murieron y varias decenas de personas resultaron heridas a raíz de un ataque con bombas de barril en la ciudad de Alepo, en el norte de Siria, comunicó este sábado el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH). Según la entidad, las bombas fueron lanzadas por las fuerzas gubernamentales. Los explosivos cayeron en una zona al este y noreste de Alepo. Fue atacada también la ciudad de Al Bab, controlada por el grupo yihadista Estado Islámico (EI). (3). Y, entre estos hechos, ocurren los siguientes posicionamientos: Primero, la exigencia para que Rusia encabece una nueva coalición internacional en Siria. Sobre esto hay dos hechos: A.- El 27 de mayo de 2015 el embajador sirio en Moscú, Riad Haddad insto a crear una coalición apoyada por Rusia para luchar contra el Estado Islámico. En concreto dijo: "El Gobierno sirio llama a crear una coalición apoyada, ante todo, por Rusia y los países amigos para luchar realmente contra el terrorismo internacional", ha dicho en una entrevista a RIA Novosti” (4). B.- El 30 de mayo de 2015 también el ministro de relaciones exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, en una entrevista con la televisión rusa Rossiya 24, dijo que era imposible combatir al Estado Islámico sin la asistencia de Damasco. Además reitero que la denominada coalición liderada por Estados Unidos contra el Estado Islámico debería coordinar sus bombardeos con el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU). La coalición internacional logrará neutralizar al Estado Islámico (EI) solo si coopera con las autoridades sirias, reiteró el ministro. Según el ministro: “Según el ministro, EEUU usa doble rasero al rechazar la cooperación con las autoridades sirias y al no reconocer su legitimidad” (5). Segundo, China sigue en la defensiva estratégica: China ha hecho público el 26 de mayo de 2015 un libro blanco donde habla de una estrategia militar de defensa activa. Allí se menciona que el ataque será solo defensivo, todo ello en un contexto de crecientes tensiones con sus vecinos y Estados Unidos en el mar de China Meridional” Agrega, entre otros, "No atacaremos a no ser que seamos atacados, pero con toda seguridad contratacaremos si somos atacados", asegura el documento. Veamos esto: “Las fuerzas armadas de China implementan la directriz militar estratégica militar de defensa activa en la nueva coyuntura, según un libro blanco hecho público hoy martes por la Oficina de Información del Consejo de Estado (gabinete chino). China seguirá inquebrantablemente el camino del desarrollo pacífico y llevará a término una política exterior independiente de paz y una política de defensa nacional que es defensiva por naturaleza, según el libro blanco titulado "Estrategia Militar de China"(6). 72 Por otra parte fueron preocupantes las declaraciones del vicepresidente de la Comisión Militar Central de China, Fan Changlong, expresadas el 11 de junio de 2015 en el Pentágono (EEUU) frente al secretario norteamericano de Defensa, Ashton Carter y que al parecer ratifican la posición defensiva de China en la presente coyuntura. Veamos esto: “Anotó que las dos partes han logrado muchos éxitos importantes en los últimos años en la construcción de un nuevo modelo de relaciones entre grandes potencias gracias a los esfuerzos personales de los dos jefes de Estado. La relación entre los dos ejércitos ha mantenido, en general, un impulso de desarrollo estable, como se demostró con la firma de dos mecanismos de confianza mutua, con los nuevos avances en materia de intercambio de visitas de alto nivel, con la celebración de consultas y diálogos institucionalizados y con la realización de ejercicios y entrenamientos militares conjuntos, señaló el general”. “Fan propuso que los dos ejércitos establezcan un nuevo tipo de relación militar caracterizada por "la confianza mutua, la cooperación, el no conflicto y la sostenilidad". Expresó su esperanza de que ambas partes trabajen conjuntamente para aumentar contactos, impulsar la confianza mutua estratégica, fortalecer la cooperación pragmática y abordar de manera efectiva las crisis y los riesgos” (7). Mientras esto ocurre los BRICS tienen enormes esperanzas en China. Cierto el viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Riabkov, dijo lo siguiente: “los BRICS —Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica- serán capaces de "contrarrestar presiones arbitrarias, politizadas e ilegales" gracias a la creación del Banco de Desarrollo y el Fondo Contingente de Reservas. Una vez que se haga operativo el banco, se intensificará el desarrollo de proyectos de infraestructura y de inversión, agregó Riabkov” (8). Y tercero, en la XIV Cumbre Internacional de Seguridad de Asia que viene desde el año 2002 y llamado como ‘Diálogo de Shangri-La”, efectuada el 29 de mayo de 2015 en Singapur no hubo seriedad en el análisis de las bandas paramilitares que el viejo ejército estadounidense implementa en el mundo. Allí Estados Unidos se mostró víctima de su propio ejército que es el Estado islámico y nadie fue capaz de decirle que es su ejército y no un simple movimiento cualquiera. En esto fueron elocuentes las palabras del presidente del Comité de Servicios Armados del Senado de Estados Unidos, John McCain, cuando dijo: “"Estamos perdiendo porque no estamos ganando. No significa que no estemos haciendo nada, lo que sucede es que nada de lo que estamos haciendo diplomática, económica, o militarmente revierte el impulso del EI", expresó. Por lo tanto pidió a todos los países trabajar juntos en la lucha contra el terrorismo” "El Estado Islámico recluta a jóvenes de todo el mundo, con rapidez y más ampliamente que ningún otro movimiento terrorista antes. Las perspectivas de los jóvenes para dejar su país y entrenarse y combatir con el EI y luego regresar a sus casas y llevar a cabo ataques terroristas podría ser la más inmediata amenaza que todos enfrentamos" (9). Y, bajo estos hechos, continua el mundo en vilo permanente desde finales de 2010 cuando el viejo ejército estadounidense inició sus operativos en el norte de África. Es un despliegue que avanza entre periodos de terror fascista, incluso, con traslado de tropas y armamentos prácticamente hasta las fronteras de Rusia y búsqueda de acuerdos que algunos llaman “cumbres de paz” que no satisface a ninguna de las 73 partes y es como una especie de círculo vicioso que atormenta a la humanidad entera: Aquí una apretada periodización de estos hechos, como acostumbro, en realidad, un pequeño resumen de la confrontación ruso-estadounidense desde febrero a junio de 2015. Como observaran es un cuadro zigzagueante entre fuertes enfrentamiento y, búsquedas de acuerdos, pero, principalmente de duros enfrentamientos que se dan incluso en los llamados periodos de búsqueda de acuerdos, ocasionados por el viejo ejército estadounidense. Primero, de febrero a abril de 2015. Un periodo de relativa tranquilidad aunque siempre con provocaciones del régimen fascista de ucrania (Kiev). Esto se inició tras la firma del acuerdo de cese el fuego el pasado 12 de febrero de 2015 en Minsk (Bielorrusia) por el Grupo Tripartito para el Donbass (Sudeste de Ucrania). Y, en Irán, tras el 02 de abril de 2015 por el tema nuclear, como dice la prensa internacional, después de ocho días de maratonianas conversaciones en la ciudad suiza de Lausana. Segundo, todo el mes de mayo de 2015. Este periodo indica combates directos: muy fuertes en el Donbass y fuerte guerra informativa contra Irán. En este mismo cuadro Siria estuvo en medio de un completo arreciamiento paramilitar combinado con bombardeos criminales de la fuerza aérea estadounidense encabezando la llamada “Coalición internacional” formada por más de cuarenta países, además de una intensa guerra psicológica. En realidad muy grave para la integridad territorial de este país. Incluso a finales de mayo de 2015 Estados Unidos casi había completado, a través de sus prensas y el terror de sus fantoches, las bases para una intervención militar. Esto se resumía en la farsa de que con la captura de la ciudad Palmira el 50 % de territorio sirio, supuestamente, ya habría estado en poder del viejo ejército estadounidense vía sus escuadrones de la muerte paramilitares (Estado Islámico). Y, tercero, todo el mes de junio de 2015. Es de conocimiento público la firma de acuerdo Iraní sobre armamento nuclear antes del 30 de junio de 2015. Pero en lo esencial este corto periodo, expresa el retorno a las cumbres: Veamos: A.- Del 29 al 31 de mayo de 2015 se efectuó la XIII Cumbre de Seguridad de Asia conocida como Diálogo de Shangri-La (seguridad regional), con asistencia de altos oficiales militares y funcionarios políticos de unos 30 países organizado en Singapur. B.- El 5 de junio de 2015 se reunieron los ministros del Interior de los Estados miembros de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) en Dushambé, capital de Tayikistán. C.- Entre el 7 y 8 de junio de 2015 se celebró en Baviera (Alemania) la cumbre del G7 2015. Bien sabemos que el G8 se convirtió así cuando Rusia se unió al grupo en 1998 y en G7 cuando Alemania, Canadá, EE.UU., Francia, Italia, Japón y Reino Unido decidieron no acudir a la cumbre de Sochi (Rusia) prevista para junio de 2014 y, en su lugar, se reunieron en Bruselas. D.- Mientras escribo este breve apunte el grupo Bilderberg estaba conspirando contra el mundo desde el 10 y hasta el 14 de junio de 2015 en Austria. Por otra parte no hay que olvidar que hay varias cumbres en espera, el más importante, la que debe darse antes del 30 de junio de 2015, entre Irán y el Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania), por el asunto nuclear de este país. También es muy importante la 7ª cumbre de los jefes de los BRICS en la 74 ciudad rusa de Ufá capital de la república de Bashkortostan, prevista para el 9 y el 10 de julio de 2015. Y, con esto, estamos a la espera de hechos gravitantes para la humanidad entera. Probablemente a partir de julio de 2015 la confrontación estará agudizada. En principio nadie está en un estado de capitulación. Con esto me refiero a Rusia, Irán, incluso, China. La equiparación de fuerzas es baluarte en esta situación. Estados Unidos deberá retroceder. Necesariamente. Salvo Rusia y China no presenten la batalla (ni siquiera política) y, consecuentemente, Rusia pase a la defensiva y China refuerce su colusión con Estados Unidos, entonces, este país (Estados Unidos) se habrá impuesto en todas las líneas de la geoestratégia mundial y cuyas consecuencias la tendrán que pagar muy caro Rusia y China, esto es, incluso, cuando Rusia se quede con Crimea y, cuando China, de hecho, perderá toda su objetividad ascendente con el asunto de la Rutas de la Seda, también en Europa y sobre todo en Oriente Medio en el que Estados Unidos habrá recuperado la confianza de sus aliados, por supuesto, será un retroceso de largo plazo muy difícil de superar para ambos países (Rusia y China). Y esto ocurre, no lo olvidemos, cuando el espectro de la gran crisis económica mundial iniciada en 2008 empieza a agitarse fuertemente contra Estados Unidos, Europa e incluso, contra China, por lo que esta sería la razón fundamental, no otra, de la Cumbre del grupo criminal de Bilderberg, también del colapsado G-7. Cierto, retomando la cumbre de Irán y el Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania), por el asunto nuclear de este país, esta cumbre es muy importante. Es una cumbre absolutamente decisiva para el Medio Oriente y toda la geoestratégica mundial. Su sola firma indicará el retroceso de Estados Unidos en toda su línea geoestratégica. Ya hemos estado observando esto en estos últimos días con las reticencias del presidente, Barack Obama y su congreso. Y con esto estamos a la expectativa de lo que se viene. NOTAS. 1.- “Con la Guerra Aérea de Estados Unidos en el mes décimo, ISIS avances en Irak y Siria”. Autor: Bill Van Auken. Nota publicada el 02 de junio de 2015, en: Gllobal Reserach y World Socialist Web Site. 2.- “Informe revela vínculos directos entre EEUU y el Estado Islámico”. Nota publicada el 04 de junio de 2015, en: cubadebate. Con información de Rusia Today”. 3.- “Más de 40 civiles mueren en Siria a causa de un ataque con bombas de barril, según ONG”. Nota publicada el 30 de mayo de 2015, en: Sputnik. 4.- “Damasco llama a crear una coalición apoyada por Rusia para luchar contra el EI”. Nota publicada el 27 de mayo de 2015, en: Sputnik. 5.- “Lavrov ve imposible combatir al Estado Islámico sin la asistencia de Damasco”. Nota publicada el 30 de mayo de 2015, en: Sputnik. 6.- “China implementa estrategia militar de defensa activa, según libro blanco”. Nota publicada el 26 de mayo de 2015, en: Spanish. xinhuanet. Com. 7.- “.China insta a EEUU a reducir actividades militares en Mar Meridional de China”. Nota publicada el 12 de junio de 2015, en: Spanish. xinhuanet. Com. 8.- “BRICS no pretende ser una alianza militar, afirma viceministro ruso de Exteriores”. Nota publicada el 27 de mayo de 2015, en: Sputnik). 9.- “Diálogo Shangri-La: Acuerdan países fortalecer colaboración contra terrorismo en Asia” Nota publicada el 31 de mayo de 2015, en: Spanish. xinhuanet. Com. 75 Bien sabemos que los cambios mundiales han sido enormes, incluso, ahora son extremadamente visibles ante los propios ojos del mundo, sobre todo, aquellos referidos al resquebrajamiento de la hegemonía mundial estadounidense. Cambios que, por supuesto, exigen una nueva estructura de poder (multipolar imperialista) que el grupo de poder fascista de Washington simplemente no la acepta. Enajenado en sus antiguos idilios retrasa cualquier acuerdo, en este caso, con Rusia respecto a Siria y Sudeste de Ucrania. Sin embargo la dura confrontación que vive el planeta (pugnas y colusiones interimperialistas) no está referida solo a estas dos regiones, sino, al conjunto del planeta, por lo que cada contendiente (China, Estados Unidos y Rusia) tiene su propia visión estratégica. Algunos de ellos son: los Balcanes con Macedonia de reciente pretendida desestabilización. También el Cáucaso donde la arena movediza está en Georgia y Azerbaiyán (Actualmente, se encuentra en guerra contra la República de Armenia por el territorio de Nagorno Karabaj). En Asia central, casi toda la región. Sin olvidar lo que hay en el mar meridional de China, donde Filipinas, en caso de conflicto armado, puede constituirse de forma inmediata en una cabecera de playa a favor del viejo ejército estadounidense. El presidente filipino, Benigno Aquino III, es un acérrimo antichino. Además, por supuesto, el sudeste asiático donde los vientos de guerra están dirigidos contra la RPDC (la última provocación está referida a la guerra bacteriológicaÁntrax) que en las actuales circunstancias cuenta con un equipamiento nuclear muy importante con el que somete a raya a Estados Unidos y Corea del sur. En América Latina los peligros de devastación pesan muy fuertemente, en particular, contra Venezuela. Entonces esta es la razón de la actual desesperación estadounidense por imponer acuerdos que extralimiten lo que es incapaz de lograr con las provocaciones actuales de su viejo ejército que Rusia simplemente no las acepta. En principio Estados Unidos no está en condiciones de sostener por más tiempo dos o tres guerras al mismo tiempo, su bancarrota económica lo impide, máxime si se tiene cuenta su enorme gasto militar (más de mil bases militares, además, numerosos contingentes de paramilitarismo desplegado en casi todas las regiones del planeta que no viven, por supuesto, del aire, necesitan presupuestos enormes). No exagero si digo que este asunto es peor que Vietnam. Estados Unidos está empantanado hundiéndose en esta vorágine de gastos militares. Aunque China sigue subvencionándola con la compra de los bonos, aunque ya ahora en menor escala, que, entre otras, explican su status defensivo en el arquetipo de la confrontación geopolítica actual. Consecuentemente este país (Estados Unidos) no puede darse el lujo de abrir nuevos frentes de guerra e ir más allá de estas regiones (Sudeste de Ucrania y Siria) bajo cargo de la implosión del edificio del sistema imperialista occidental. Si, como hemos sostenido en anteriores notas, Rusia mantiene firmeza y China pasa a la ofensiva militar, Estados Unidos puede ser arrojado de todas las regiones donde provoca. Entonces esto obligaría a reforzar su estrategia en los entornos de América Latina. Hay que tener en cuenta siempre las cuatro características fundamentales de la actual coyuntura histórica: estructura multipolar, equiparación de fuerzas, carrera armamentística y guerra informativa. Son las bases de cualquier análisis internacional. Aquí nos interesa la guerra informativa. Esto en Siria ahora está presente como una guerra psicológica. Es de grandes proporciones. En realidad una grotesca adulteración de la realidad objetiva, no solo de Oriente Medio, sino, del mundo entero. Y es parte 76 de su oposición a los cambios en los niveles de los poderes imperialistas que está operándose en este mismo momento en el mundo. Los centros de contra información y anti subversión del ejército estadounidense están indudablemente muy atareados. El demiurgo Nazi-estadounidense “Miente, miente que algo queda”, es lo central para este grupo. En realidad, una comedia fachosa del que resulta un mundo fantasioso donde lo negro es blanco y la mentira es verdad. Ofuscaciones de baja monta disparadas contra casi ocho mil millones de personas que viven en el planeta. Veamos esto: Ante todo, la grotesca adulteración de la realidad que los centros de contra información del viejo ejército estadounidense imponen con el 90-95 % de las noticias que se emiten a escala mundial: Primero, Estados Unidos está regocijado hasta el extremo al imponer que el Estado Islámico (EI) es “un grupo de ¿románticos?” que se ¿autofinancian? y que nada tienen que ver con su ejército. El Pentágono esta rebosante de alegría por haber impuesto esta farsa. Pero, ¿Alguien, en su sano juicio, puede creer esto? No. Son grupos criminales, mercenarios y paramilitares reclutados en las principales ciudades de Europa, África, Asia Central, los Balcanes y América Latina. Por cierto, hablamos aquí de las fuerzas sin rango militar que componen este Estado Islámico (EI), máxime si se tiene en cuenta la gran población desocupada, sobre todo, lumpen proletariado, emergida como consecuencia de la gran crisis que se vive desde 2008 y que esperan desesperadamente cada mes sus míseros sueldos, $ 1200 dólares que envía el Pentágono por aviones y helicópteros que sobrevuelan los lugares donde han sido destacados estos carnes de cañón, cuyos líderes tienen vinculaciones directas con el ejército estadounidense (su engranaje). Segundo, la manipulación informativa también está referida a mostrar a Estados Unidos como un país que busca la “democracia” y no un país que quiere destruir el planeta devastando ciudades, incluso con terremoto (sobre esto está pendiente la investigación) y cometiendo genocidios contra la humanidad. Tercero, de igual modo presentan a Siria como un país antidemocrático que protesta (ojo no debe protestar) cuando los misiles estadounidense o de la coalición Internacional impactan en su territorio destruyendo sus infraestructuras y asesinando a sus indefensas poblaciones. La demonización del presidente sirio, Bashar Al Assad, es demoledora. Cuarto, difunden la farsa que Siria está al borde del colapso y derrotado, pa ra facilitar la ocupación nazi estadounidense. Quinto, publicitan utilizando a sus demagogos, que grupos de poder regionales, sobre todo de Oriente Medio, absolutamente irrelevantes en el poder mundial y apéndices suyos (vasallos), como que en algunos momentos estos se vuelven antiestadounidenses, como el de Turquía siendo el primer portavoz militar de la OTAN, Egipto, segundo receptor de ayuda militar estadounidense, Arabia Saudita, primer receptor de protección militar estadounidense y sionismo israelita, primer receptor de ayuda militar estadounidense. Pero veamos lo concreto de lo anterior: Empiezo observando la grosera manipulación en la ocupación de la ciudad Al Ramadi de Irak por el Estado islámico, es decir, ejército estadounidense (Ojo siempre cuando hablamos del criminal Estado Islámico hablamos del viejo ejército estadounidense). ¿Recuerdan cómo se produjo la ocupación de la ciudad de Mosul en Irak? Pues 77 debemos saber que la ocupación de la ciudad Al Ramadi (Irak) se produjo casi en similares condiciones. La ocupación de la ciudad Mosul. Ante todo recordemos lo que sucedió el 10 de junio de 2014. Ese día fue ocupada esta ciudad. En lo central, hay que destacar en esto que 800 fanáticos “hicieron huir” a dos divisiones del ejército iraquí compuesta por 30.000 soldados que defendía la ciudad de Mosul poblada por 1,5 millones de personas. Un hecho más que suficiente para demostrar lo bien que estuvo planificado la operación militar para entregar esta ciudad (Mosul) a estas bandas criminales. Es decir, la interrelación habida entre esta banda paramilitar (Estado Islámico, en realidad el viejo ejército estadounidense) y el ejército del corrupto, Nuri al-Maliki, por aquellos días aún presidente de este país, era una cuestión a plena luz del día. Es decir, sumamente escandalosa. Además, es de sobra conocido que el cielo iraquí es cielo de los cazas F18 estadounidenses desde 2003. La ocupación de la ciudad Al Ramadi. Esta ciudad es la capital de la provincia de Al Anbar, situada a unos 100 kilómetros al oeste de Bagdad, por el criminal “Estado Islámico”, ocurrida el 17 de mayo de 2015 después que el ejército que lo defendía la abandonará y prácticamente la entregará a estas bandas famélicas. El ejercito que lo protegía se llamaba “División de oro”, una unidad de fuerzas especiales del ejército iraquí entrenado por Estados Unidos. Veamos esto: “Salim al-Jabouri, el presidente del Parlamento de Irak y más prominente político sunita en el régimen de Bagdad, dijo a CNN que las tropas iraquíes abandonaron Ramadi como resultado de "una decisión clara para dar la orden de retirarse - y después de eso Ramadi cayó”. Al-Jabouri, dijo que el primer ministro Abadi, instalada el año pasado con el apoyo de Washington, no había sido informado de la orden de retirada de la ciudad. El colapso de las fuerzas de seguridad en Ramadi ocurrió, agregó, después de la llamada División de oro - una unidad de fuerzas especiales entrenado por Estados Unidos - de repente salió de la ciudad” (1). También Cubadebate hizo algunas averiguaciones sobre esto: “Informe revela vínculos directos entre EEUU y el Estado Islámico. El Estado Islámico y sus victorias en Mosul y Ramadi serían obra de EE.UU., según revela un informe secreto de la organización militar estadounidense Agencia de Inteligencia de Defensa (Defense Intelligence Agency, DIA). El informe de la agencia, obtenido por la organización Judicial Watch, grupo de vigilancia del gobierno no partidista y políticamente conservador, revela el origen del Estado Islámico y las razones por las que cayeron en manos terroristas las ciudades de Mosul y Ramadi. (2). Entre tanto han seguido utilizando el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) para desacreditar a Siria: El 26 de mayo de 2015 se denunció al “Observatorio Sirio para los Derechos Humanos” como un centro anti-sirio y de manipulación informativa. De plano este “observatorio” estaba descalificado como fuente de cualquier información sobre Siria. Sin embargo han seguido utilizando a este centro como fuente de manipulación contra Siria, pues el asunto, de la guerra psicológica continuaba febrilmente. En efecto el 30 de mayo de 2015 Sputnik hizo público el siguiente comunicado (con esto no estoy en contra de Sputnik, como algunos puedan suponer, las prensas occidentales son los que están febrilmente en esto y a ellos me refiero cuando hablo de “febrilmente”. Rusia Today y Sputnik son mis mayores fuentes de información. Ojo con esto): “Más de 40 civiles 78 murieron y varias decenas de personas resultaron heridas a raíz de un ataque con bombas de barril en la ciudad de Alepo, en el norte de Siria, comunicó este sábado el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH). Según la entidad, las bombas fueron lanzadas por las fuerzas gubernamentales. Los explosivos cayeron en una zona al este y noreste de Alepo. Fue atacada también la ciudad de Al Bab, controlada por el grupo yihadista Estado Islámico (EI). (3). Y, entre estos hechos, ocurren los siguientes posicionamientos: Primero, la exigencia para que Rusia encabece una nueva coalición internacional en Siria. Sobre esto hay dos hechos: A.- El 27 de mayo de 2015 el embajador sirio en Moscú, Riad Haddad insto a crear una coalición apoyada por Rusia para luchar contra el Estado Islámico. En concreto dijo: "El Gobierno sirio llama a crear una coalición apoyada, ante todo, por Rusia y los países amigos para luchar realmente contra el terrorismo internacional", ha dicho en una entrevista a RIA Novosti” (4). B.- El 30 de mayo de 2015 también el ministro de relaciones exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, en una entrevista con la televisión rusa Rossiya 24, dijo que era imposible combatir al Estado Islámico sin la asistencia de Damasco. Además reitero que la denominada coalición liderada por Estados Unidos contra el Estado Islámico debería coordinar sus bombardeos con el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU). La coalición internacional logrará neutralizar al Estado Islámico (EI) solo si coopera con las autoridades sirias, reiteró el ministro. Según el ministro: “Según el ministro, EEUU usa doble rasero al rechazar la cooperación con las autoridades sirias y al no reconocer su legitimidad” (5). Segundo, China sigue en la defensiva estratégica: China ha hecho público el 26 de mayo de 2015 un libro blanco donde habla de una estrategia militar de defensa activa. Allí se menciona que el ataque será solo defensivo, todo ello en un contexto de crecientes tensiones con sus vecinos y Estados Unidos en el mar de China Meridional” Agrega, entre otros, "No atacaremos a no ser que seamos atacados, pero con toda seguridad contratacaremos si somos atacados", asegura el documento. Veamos esto: “Las fuerzas armadas de China implementan la directriz militar estratégica militar de defensa activa en la nueva coyuntura, según un libro blanco hecho público hoy martes por la Oficina de Información del Consejo de Estado (gabinete chino). China seguirá inquebrantablemente el camino del desarrollo pacífico y llevará a término una política exterior independiente de paz y una política de defensa nacional que es defensiva por naturaleza, según el libro blanco titulado "Estrategia Militar de China"(6). Por otra parte fueron preocupantes las declaraciones del vicepresidente de la Comisión Militar Central de China, Fan Changlong, expresadas el 11 de junio de 2015 en el Pentágono (EEUU) frente al secretario norteamericano de Defensa, Ashton Carter y que al parecer ratifican la posición defensiva de China en la presente coyuntura. Veamos esto: “Anotó que las dos partes han logrado muchos éxitos importantes en los últimos años en la construcción de un nuevo modelo de relaciones entre grandes potencias gracias a los esfuerzos personales de los dos jefes de Estado. La relación entre los dos ejércitos ha mantenido, en general, un impulso de desarrollo estable, como se demostró con la firma de dos mecanismos de confianza mutua, con los nuevos avances en materia de 79 intercambio de visitas de alto nivel, con la celebración de consultas y diálogos institucionalizados y con la realización de ejercicios y entrenamientos militares conjuntos, señaló el general”. “Fan propuso que los dos ejércitos establezcan un nuevo tipo de relación militar caracterizada por "la confianza mutua, la cooperación, el no conflicto y la sostenilidad". Expresó su esperanza de que ambas partes trabajen conjuntamente para aumentar contactos, impulsar la confianza mutua estratégica, fortalecer la cooperación pragmática y abordar de manera efectiva las crisis y los riesgos” (7). Mientras esto ocurre los BRICS tienen enormes esperanzas en China. Cierto el viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Riabkov, dijo lo siguiente: “los BRICS —Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica- serán capaces de "contrarrestar presiones arbitrarias, politizadas e ilegales" gracias a la creación del Banco de Desarrollo y el Fondo Contingente de Reservas. Una vez que se haga operativo el banco, se intensificará el desarrollo de proyectos de infraestructura y de inversión, agregó Riabkov” (8). Y tercero, en la XIV Cumbre Internacional de Seguridad de Asia que viene desde el año 2002 y llamado como ‘Diálogo de Shangri-La”, efectuada el 29 de mayo de 2015 en Singapur no hubo seriedad en el análisis de las bandas paramilitares que el viejo ejército estadounidense implementa en el mundo. Allí Estados Unidos se mostró víctima de su propio ejército que es el Estado islámico y nadie fue capaz de decirle que es su ejército y no un simple movimiento cualquiera. En esto fueron elocuentes las palabras del presidente del Comité de Servicios Armados del Senado de Estados Unidos, John McCain, cuando dijo: “"Estamos perdiendo porque no estamos ganando. No significa que no estemos haciendo nada, lo que sucede es que nada de lo que estamos haciendo diplomática, económica, o militarmente revierte el impulso del EI", expresó. Por lo tanto pidió a todos los países trabajar juntos en la lucha contra el terrorismo” "El Estado Islámico recluta a jóvenes de todo el mundo, con rapidez y más ampliamente que ningún otro movimiento terrorista antes. Las perspectivas de los jóvenes para dejar su país y entrenarse y combatir con el EI y luego regresar a sus casas y llevar a cabo ataques terroristas podría ser la más inmediata amenaza que todos enfrentamos" (9). Y, bajo estos hechos, continua el mundo en vilo permanente desde finales de 2010 cuando el viejo ejército estadounidense inició sus operativos en el norte de África. Es un despliegue que avanza entre periodos de terror fascista, incluso, con traslado de tropas y armamentos prácticamente hasta las fronteras de Rusia y búsqueda de acuerdos que algunos llaman “cumbres de paz” que no satisface a ninguna de las partes y es como una especie de círculo vicioso que atormenta a la humanidad entera: Aquí una apretada periodización de estos hechos, como acostumbro, en realidad, un pequeño resumen de la confrontación ruso-estadounidense desde febrero a junio de 2015. Como observaran es un cuadro zigzagueante entre fuertes enfrentamiento y, búsquedas de acuerdos, pero, principalmente de duros enfrentamientos que se dan incluso en los llamados periodos de búsqueda de acuerdos, ocasionados por el viejo ejército estadounidense. Primero, de febrero a abril de 2015. Un periodo de relativa tranquilidad aunque siempre con provocaciones del régimen fascista de ucrania (Kiev). Esto se inició tras la 80 firma del acuerdo de cese el fuego el pasado 12 de febrero de 2015 en Minsk (Bielorrusia) por el Grupo Tripartito para el Donbass (Sudeste de Ucrania). Y, en Irán, tras el 02 de abril de 2015 por el tema nuclear, como dice la prensa internacional, después de ocho días de maratonianas conversaciones en la ciudad suiza de Lausana. Segundo, todo el mes de mayo de 2015. Este periodo indica combates directos: muy fuertes en el Donbass y fuerte guerra informativa contra Irán. En este mismo cuadro Siria estuvo en medio de un completo arreciamiento paramilitar combinado con bombardeos criminales de la fuerza aérea estadounidense encabezando la llamada “Coalición internacional” formada por más de cuarenta países, además de una intensa guerra psicológica. En realidad muy grave para la integridad territorial de este país. Incluso a finales de mayo de 2015 Estados Unidos casi había completado, a través de sus prensas y el terror de sus fantoches, las bases para una intervención militar. Esto se resumía en la farsa de que con la captura de la ciudad Palmira el 50 % de territorio sirio, supuestamente, ya habría estado en poder del viejo ejército estadounidense vía sus escuadrones de la muerte paramilitares (Estado Islámico). Y, tercero, todo el mes de junio de 2015. Es de conocimiento público la firma de acuerdo Iraní sobre armamento nuclear antes del 30 de junio de 2015. Pero en lo esencial este corto periodo, expresa el retorno a las cumbres: Veamos: A.- Del 29 al 31 de mayo de 2015 se efectuó la XIII Cumbre de Seguridad de Asia conocida como Diálogo de Shangri-La (seguridad regional), con asistencia de altos oficiales militares y funcionarios políticos de unos 30 países organizado en Singapur. B.- El 5 de junio de 2015 se reunieron los ministros del Interior de los Estados miembros de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) en Dushambé, capital de Tayikistán. C.- Entre el 7 y 8 de junio de 2015 se celebró en Baviera (Alemania) la cumbre del G7 2015. Bien sabemos que el G8 se convirtió así cuando Rusia se unió al grupo en 1998 y en G7 cuando Alemania, Canadá, EE.UU., Francia, Italia, Japón y Reino Unido decidieron no acudir a la cumbre de Sochi (Rusia) prevista para junio de 2014 y, en su lugar, se reunieron en Bruselas. D.- Mientras escribo este breve apunte el grupo Bilderberg estaba conspirando contra el mundo desde el 10 y hasta el 14 de junio de 2015 en Austria. Por otra parte no hay que olvidar que hay varias cumbres en espera, el más importante, la que debe darse antes del 30 de junio de 2015, entre Irán y el Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania), por el asunto nuclear de este país. También es muy importante la 7ª cumbre de los jefes de los BRICS en la ciudad rusa de Ufá capital de la república de Bashkortostan, prevista para el 9 y el 10 de julio de 2015. Y, con esto, estamos a la espera de hechos gravitantes para la humanidad entera. Probablemente a partir de julio de 2015 la confrontación estará agudizada. En principio nadie está en un estado de capitulación. Con esto me refiero a Rusia, Irán, incluso, China. La equiparación de fuerzas es baluarte en esta situación. Estados Unidos deberá retroceder. Necesariamente. Salvo Rusia y China no presenten la batalla (ni siquiera política) y, consecuentemente, Rusia pase a la defensiva y China refuerce su colusión con Estados Unidos, entonces, este país (Estados Unidos) se habrá impuesto en todas las líneas de la geoestratégia mundial y cuyas consecuencias la 81 tendrán que pagar muy caro Rusia y China, esto es, incluso, cuando Rusia se quede con Crimea y, cuando China, de hecho, perderá toda su objetividad ascendente con el asunto de la Rutas de la Seda, también en Europa y sobre todo en Oriente Medio en el que Estados Unidos habrá recuperado la confianza de sus aliados, por supuesto, será un retroceso de largo plazo muy difícil de superar para ambos países (Rusia y China). Y esto ocurre, no lo olvidemos, cuando el espectro de la gran crisis económica mundial iniciada en 2008 empieza a agitarse fuertemente contra Estados Unidos, Europa e incluso, contra China, por lo que esta sería la razón fundamental, no otra, de la Cumbre del grupo criminal de Bilderberg, también del colapsado G-7. Cierto, retomando la cumbre de Irán y el Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania), por el asunto nuclear de este país, esta cumbre es muy importante. Es una cumbre absolutamente decisiva para el Medio Oriente y toda la geoestratégica mundial. Su sola firma indicará el retroceso de Estados Unidos en toda su línea geoestratégica. Ya hemos estado observando esto en estos últimos días con las reticencias del presidente, Barack Obama y su congreso. Y con esto estamos a la expectativa de lo que se viene. NOTAS. 1.- “Con la Guerra Aérea de Estados Unidos en el mes décimo, ISIS avances en Irak y Siria”. Autor: Bill Van Auken. Nota publicada el 02 de junio de 2015, en: Gllobal Reserach y World Socialist Web Site. 2.- “Informe revela vínculos directos entre EEUU y el Estado Islámico”. Nota publicada el 04 de junio de 2015, en: cubadebate. Con información de Rusia Today”. 3.- “Más de 40 civiles mueren en Siria a causa de un ataque con bombas de barril, según ONG”. Nota publicada el 30 de mayo de 2015, en: Sputnik. 4.- “Damasco llama a crear una coalición apoyada por Rusia para luchar contra el EI”. Nota publicada el 27 de mayo de 2015, en: Sputnik. 5.- “Lavrov ve imposible combatir al Estado Islámico sin la asistencia de Damasco”. Nota publicada el 30 de mayo de 2015, en: Sputnik. 6.- “China implementa estrategia militar de defensa activa, según libro blanco”. Nota publicada el 26 de mayo de 2015, en: Spanish. xinhuanet. Com. 7.- “.China insta a EEUU a reducir actividades militares en Mar Meridional de China”. Nota publicada el 12 de junio de 2015, en: Spanish. xinhuanet. Com. 8.- “BRICS no pretende ser una alianza militar, afirma viceministro ruso de Exteriores”. Nota publicada el 27 de mayo de 2015, en: Sputnik). 9.- “Diálogo Shangri-La: Acuerdan países fortalecer colaboración contra terrorismo en Asia” Nota publicada el 31 de mayo de 2015, en: Spanish. xinhuanet. Com. (*) ENRIQUE MUÑOZ GAMARRA: Sociólogo peruano, especialista en geopolítica y análisis internacional. Autor del libro: “Coyuntura Histórica. Estructura Multipolar y Ascenso del Fascismo en Estados Unidos”. Su Página web es: www.enriquemunozgamarra.org Zona Sociólogo peruano, especialista en geopolítica y análisis internacional. Autor del libro: “Coyuntura Histórica. Estructura Multipolar y Ascenso del Fascismo en Estados Unidos”. Su Página web es: www.enriquemunozgamarra.org 82 El Nuevo Paradigma de la Educación para el siglo Inés Aguerrondo http://campus-oei.org/administracion/aguerrondo.htm “Lejos de la resignación distinguida y la utopía encantatoria, sigue siendo posible otro camino. Hoy hay lugar para la redefinición de un verdadero reformismo, radical en sus análisis y ambicioso en sus objetivos que, al mismo tiempo, vuelva a dar un sentido positivo a una parte necesaria de utopía en la política. Nada obliga a contentarse con un discurso gerencial que equivale a negar transformaciones profundas, o con un discurso de rechazo nostálgico o soñador. Sí, las tensiones actuales resultan de la dinámica fundamental de las sociedades modernas y la economía de mercado. Pero esas tensiones deben ser dominadas. Y pueden serlo. Si se quiere recuperar su papel, la política debe consagrarse a formalizar este diagnóstico y las perspectivas que conduce.” Jean - Paul Fitoussi y Pierre Rosanvallon, La nueva era de las desigualdades, Editorial Manantial, Buenos Aires, 1997 En la nueva sociedad del conocimiento, la educación hace diferencia. De las reformas a la transformación: un nuevo paradigma De los saberes a las competencias. Una nueva competencia: el saber tecnológico. Los sistemas educativos no generan empleo, hacen empleable a la gente. Mejor educación con menores costos. Estado o mercado para el servicio educativo. Un Estado profesional y responsable por los resultados. De las declaraciones a los hechos: las dificultades de las reformas de segunda generación. La transformación debe ser integral y consensuada. En la nueva sociedad del conocimiento, la educación hace la diferencia. La nueva ciudadanía En las últimas décadas de este siglo asistimos a una serie de procesos que configuran lo que indudablemente puede reconocerse como un cambio de era. La era industrial nacida a la luz de la Revolución Francesa, de la revolución científica y de la revolución industrial, está dando paso a otra era ¿posmoderna? ¿posindustrial?. Hoy el problema es cómo se construye una opción superadora, cómo se construye la nueva democracia. ¿Qué nueva forma debe adoptar hoy “el gobierno del pueblo para el pueblo”? ¿Qué condiciones humanas deben desarrollar quienes serán los ciudadanos de esta nueva sociedad? Surge así una nueva ciudadanía. Y serán nuestras escuelas, nuestro sistema de educación pública, el que tendrá que hacerse cargo de esta tarea. La sociedad del conocimiento Un rasgo indudable de esta nueva era es la importancia sin precedentes que adquiere el saber científico tecnológico. Son claras las tendencias que indican 83 que ingresamos en la “era del conocimiento”. Como dicen los Toffler: “Todos los sistemas económicos descansan sobre una ‘base de conocimientos’. Todas las empresas dependen de la existencia previa de este recurso, de construcción social. A diferencia del capital, el trabajo y la tierra, aquél suele ser desdeñado por economistas y ejecutivos cuando determinan las aportaciones precisas para la producción. Y, sin embargo, este recurso es el más importante de todos.” (Toffler, 1995) Es el más importante porque es el más humano. Porque sólo conoce (aprende) el ser humano, pero también porque “el conocimiento tiene virtudes intrínsecamente democráticas. A diferencia de las fuentes de poder tradicionales (la fuerza, el dinero, la tierra) el conocimiento es infinitamente ampliable. Su utilización no lo desgasta sino que, al contrario, puede producir más conocimiento. Un mismo conocimiento, puede ser utilizado por muchas personas y su producción exige creatividad, libertad de circulación, intercambios, críticas constructivas, diálogo. Todas ellas condiciones propias de una sociedad democrática” (Tedesco, 1995) Una “sociedad del conocimiento” se perfila, entonces, como una forma social superadora de las actuales, a condición de que el conocimiento - que es la base - sea un bien que está disponible para todos. Esta es la nueva sociedad. Mucho conocimiento al alcance de todos, distribuido de tal manera que garantice igualdad de oportunidades. ¿Cómo se logra? A través de un sistema escolar que sea el encargado de garantizarlo, al cual toda la sociedad le dé no solamente el mandato de hacerlo, sino también los recursos para lograrlas. La ética de la solidaridad Pero no se trata del conocimiento como valor último, ya que este tipo de prácticas está desnudando rápidamente sus falencias en temáticas tan actuales como la clonación. Conocimiento dentro de una sociedad ética, con altos valores que construyan lo ‘público’ como un espacio donde se resguarde realmente el bien común y la dignidad de todo ser humano. Una sociedad ética y solidaria, ya que solidaridad es lo mismo que responsabilidad, y ésta se traduce en compromiso ético ante la historia. Una sociedad ética es una sociedad regida por la solidaridad. La solidaridad expresa la condición ética de la vida humana. La regla de oro que constituye la norma moral básica, no es más que el desarrollo enunciativo de la solidaridad: “Haz por los demás, lo que quisieras que hicieran por ti”. A lo largo del desarrollo de la humanidad, el instrumento pacífico más potente para lograr esto ha sido la educación. La educación rompe el círculo vicioso de la pobreza, ya que es el determinante fundamental del empleo y desde allí, del acceso a todos los bienes materiales y culturales que la sociedad ofrece. La nueva educación 84 Las dos condiciones básicas que parecen importantes frente al futuro: conocimiento y valores, se distribuyen desde el sistema educativo, desde las escuelas. Es así que “la profundidad del proceso de cambio social que tiene lugar actualmente nos obliga a reformular las preguntas básicas sobre los fines de la educación, sobre quiénes asumen la responsabilidad de formar a las nuevas generaciones y sobre qué legado cultural, qué valores, qué concepción del hombre y de la sociedad deseamos transmitir” (Tedesco, 1995). Esto es lo que hace hoy a la escuela democrática. Una escuela que ponga al alcance de todos los habitantes del país, sin distinción de riqueza, raza o religión, el conocimiento y los valores necesarios para participar en una sociedad competitiva y solidaria. La educación hace hoy la diferencia porque su doble función apoya los dos requerimientos importantes de la futura sociedad: el conocimiento resguarda la competitividad; la equidad resguarda la integración. Más educación significa por ello mayor competitividad y mayor integración social. 2. De las reformas a la transformación: un nuevo paradigma De las reformas a la transformación Como consecuencia de las transformaciones económicas, de los cambios en los modos de producción, de los procesos de globalización de la economía y de la cultura, una respuesta común que aparece en todas las latitudes son las reformas de la educación. Pero los frutos no han sido los esperados. Su común denominador está siendo su dificultad para abrirse paso, cuando no su fracaso ¿A qué se debe esto? Las fuertes transformaciones de la sociedad global están dejando en claro que este fin de siglo está suponiendo un cambio total de reglas de juego, un cambio de paradigma. En el caso de la educación quizás el fracaso se deba a que las respuestas tienden a sostener una mirada retrospectiva más que a inventar una propuesta prospectiva. Y esto es grave ya que a pesar de que estas respuestas prospectivas existen en otras áreas, en la educación parece que se prefiriera una respuesta que se acerca a más de lo mismo. Nos limitamos a expandir y replicar el modelo clásico de la escuela del siglo pasado (más bien del siglo ante-pasado, del siglo XVIII, que a esta altura, ya casi es del siglo ante-ante-pasado!), modernizándolo con materiales didácticos y, sobre todo, incluyendo la mayor cantidad de computadoras posible. Esta solución es por demás ingenua y denota muy poca capacidad de mirada prospectiva. Se requiere un nuevo paradigma educativo que pueda acompañar los nuevos paradigmas que surgen en las demás áreas de la sociedad. Otro paradigma que, superando las restricciones del actual, sea capaz tanto de saldar las 85 deudas del pasado cuanto de dar respuestas más adecuadas a las necesidades del futuro. Necesidad de un cambio de paradigma Creo que esto es lo que está pasando en el campo de la educación. Las imágenes se nos aparecen claras porque expresan una típica mirada desde el pasado. Pero esta mirada no responde a las necesidades actuales -y menos a las futuras- de la educación. Frente a un mundo en el que el problema son los cambios de paradigma en todos los aspectos de la sociedad, las reformas educativas se esfuerzan por respetar el modelo clásico escolar introduciéndole nuevos elementos que, al no formar parte del modelo original, no tienen suficiente fuerza como para transformarlo. Lo que se ha hecho habitualmente, y se está haciendo, es tratar de llevar a su máximo rendimiento el modelo de educación conocido en occidente a partir de los comienzos de la era moderna, sin tratar de encontrar una propuesta superadora. Por esto las estrategias que se llevan a cabo no están siendo suficientes para dar respuestas diferentes para una sociedad que se perfila como diferente, ya que apuestan a mejorar este sistema educativo, nacido de las necesidades de la revolución francesa y de la revolución industrial, hoy superadas. Es necesario situarse fuera de esta óptica, para plantearse un nuevo sistema educativo. Es necesario un cambio de paradigma. 3. De los saberes a las competencias Las bases de un nuevo paradigma El nuevo paradigma implica cambiar básicamente la ecuación conocimientoà docenteà alumno pasando de los saberes a las competencias. Esto solo será posible si tomamos conciencia, rediscutimos y redefinimos los ejes básicos que subyacen al actual modelo de educación (Aguerrondo, 1993). Los elementos que definen la estructura básica del sistema educativo son de diferente orden, pero pueden distinguirse a partir de diferentes niveles de análisis un conjunto de principios vertebradores y estructurantes (formas soportantes) que rigen la organización de sus distintas instancias. (Matus, 1976) Los varios ejes subyacentes funcionan como organizadores de la estructura básica de la educación, y determinan aspectos específicos de su organización. Estos principios vertebradores se agrupan en tres grandes niveles de análisis. Un primer nivel político-ideológico, un segundo nivel técnico-pedagógico, y un tercer nivelorganizacional. Cada uno de ellos implica al otro. Es decir, el nivel político-ideológico, que es el que da el ‘sentido’ al sistema educativo, determina el campo de posibilidades del nivel técnico-pedagógico. A su vez, el técnico-pedagógico, que se refiere a las decisiones estrictamente ‘educativas’, determina qué forma debe tener la organización concreta de la educación. 86 Las definiciones que se asumen en estos tres niveles de análisis en una formación social determinada, definen un ‘paradigma’ educativo. Actualmente está en crisis el paradigma clásico de la educación o sea los acuerdos sociales básicos aceptados en la sociedad en relación con las definiciones implicadas en estos tres niveles. Aunque existen elementos que permiten atisbar algunas redefiniciones, éstos no han crecido todavía lo suficiente ni están lo suficientemente sistematizados y organizados, como para plasmarse en decisiones que afecten medularmente a los sistemas educativos. Las decisiones se toman, todavía, desde las miradas retrospectivas del futuro. Frente a la crisis del paradigma clásico no se vislumbran respuestas alternativas. Son propuestas de ‘reforma’ y no de transformación estructural. Quizás porque resulta demasiado extraña a nuestro léxico, al campo de la educación no ha llegado todavía la idea de ‘reingeniería’, es decir de volver a pensar una organización en todas sus dimensiones para que pueda cumplir mejor su función. En nuestro caso cumplir mejor la función sería dar educación de mejor calidad, a más cantidad de gente, con menores costos. ¿Una utopía? Sencillamente, un cambio de paradigma. Una mirada prospectiva. El nivel político-ideológico El sistema educativo existe dentro de una sociedad concreta que, por supuesto, también es un ‘sistema complejo’. La educación como tal es uno de los múltiples subsistemas del todo social, fuertemente conectados. Este primer nivel de análisis hace referencia a cuáles son las definiciones exógenas al propio sistema educativo que expresan los requerimientos que le hacen los otros diferentes subsistemas de la sociedad a la educación. Normalmente se expresan como ‘fines y objetivos de la educación”. Partimos del reconocimiento de que el aporte fundamental de los sistemas educativos (en tanto aparatos escolares) al todo social, es la distribución amplia de las competencias socialmente válidas para participar en la sociedad, incluyendo en la idea de competencia no sólo su dimensión cognitiva sino también los procedimientos mentales, valores, actitudes, normas, y elementos conductuales que revierten sobre la realidad. Supone una demanda general o básica referida a que el sistema educativo debe distribuir los conocimientos y los valores y actitudes adecuados para sostener una sociedad determinada, y las competencias individuales para que cada individuo pueda encontrar un lugar propio dentro del contexto social. Esto, que es la demanda general, se especifica a partir de tres áreas concretas: el área de la cultura, la político-institucional y la de la producción. El sistema cultural demanda lo que en términos generales podemos llamar la formación de la identidad nacional, o sea la transmisión de los valores que aseguren la continuidad de la sociedad. El sistema político-institucional 87 demanda actitudes y formación de conductas básicas para funcionar dentro del modelo institucional y de distribución y ejercicio del poder que la sociedad ha definido como el adecuado. El sistema productivo requiere dos componentes principales: la formación de las capacidades y las actitudes y conductas acordes con lo que requiera el aparato productivo de la sociedad y el aporte de ciencia y tecnología para el crecimiento. El proceso actual hacia el desarrollo de una sociedad global cuestiona fuertemente desde dónde deben gestarse las definiciones políticoideológicas que informan un sistema educativo en particular, aspecto absolutamente importante y pertinente, pero que sobrepasa el foco específico de este artículo. En todo caso, hay algunos temas que aparecen sistemáticamente en las reflexiones más conocidas sobre estas temáticas. Desde el punto de vista de la demanda cultural, las discusiones actuales parecen orientar hacia el hecho de que la nueva sociedad requiere un replanteo de la formación de la identidad del individuo y de las naciones, lo cual tiene consecuencias muy directas, por ejemplo, sobre los contenidos de la enseñanza, o sobre los rituales frente a los símbolos patrios, por no agregar también, sobre la misma idea de ‘patria’. En paralelo, se subraya la importancia de formar ciudadanos con capacidad para enfrentar la incertidumbre. “La sociedad del futuro, sometida a un ritmo acelerado y constante de cambio, debería dotarse de instituciones capaces de manejar la incertidumbre sin apelar a la supresión del debate. La experimentación, admitida hasta hoy solamente como pauta de la investigación científica, debería comenzar a ser admitida en la reflexión teórica y en la práctica política” (Tedesco, 1995) Los procesos que se desarrollan en el tránsito hacia esta sociedad global abren fuertes demandas también desde la política. En algunos contextos, estas demandas suponen formación para la participación, conocimiento para poder optar, actitudes solidarias y tolerantes, pero en otros contextos se incrementan justamente las contrarias de intolerancia, rigidez o discriminación. Estas opciones tienen consecuencias directas por ejemplo sobre el tipo de oferta educativa que se da (igual para todos, mejor para algunos), las decisiones sobre quiénes pueden concurrir a ellas preferencialmente (por ejemplo, exclusión de las mujeres o atención especial a los sectores más carenciados), los modos de ‘hacer las cosas’ dentro de las escuelas, por ejemplo aceptar y/o promover la divergencia de opiniones entre profesores y alumnos para generar el aprendizaje de conductas de disidencia democrática. Parece estar más claro, o tener más acuerdo, el perfil que supone la nueva demanda desde el sector productivo. Una serie de autores se han pronunciado sobre este tema(1) a la vez que existe una serie de trabajos de investigación y consulta a los sectores directamente implicados(2) que 88 muestran una amplia coincidencia. Las demandas del subsistema productivo de la sociedad parecen estar centradas en la necesidad de desarrollar competencias para la resolución de problemas, la capacidad de protagonismo, de ser creativo, de trabajar en equipo. Ha variado el concepto de ‘inteligente’, que hoy incluye las tradicionales capacidades cognitivas, pero también otras como emociones, creatividad, intuiciones, imaginación. El nivel técnico-pedagógico Este segundo nivel de definiciones se centra en lo propiamente educativo, dentro del aparato escolar. Para organizarlo existe una serie de opciones técnicas o pedagógicas a partir de las cuales se toman las decisiones concretas que permiten alcanzar las deseadas definiciones políticoideológicas. Estas opciones estructuran y subyacen al aparato escolar concreto que conforma el sistema educativo. Modelan una forma específica de cómo se organiza y cómo es el sistema educativo. Expresan el compromiso concreto del aparato escolar para responder o no a las demandas de los demás sectores de la sociedad, expresadas en el nivel anterior. Podríamos decir que un sistema educativo se organiza en torno a tres grandes definiciones: qué se entiende por conocimiento, qué se entiende por aprendizaje, y qué se entiende por contenido de la educación. Un cambio de paradigma educativo consiste básicamente en que, a partir de nuevas opciones político-ideológicas, una sociedad sea capaz de redefinir qué entiende por cada uno de estos ejes subyacentes o principios básicos que estructuran el sistema educativo. Pero no alcanza solo con discutirlos, con que sean un tema en la agenda social. Tienen que ser redefinidos de tal modo que esto se exprese en la práctica, o sea en la organización y la gestión de todas las instancias educativas. Los sistemas educativos actuales, nacidos como consecuencia de la industrialización, se encuentran organizados sobre la base de las definiciones de ciencia (conocimiento), de aprendizaje y de contenidos vigentes en el momento en que se generaron. Para cumplir con este objetivo se desarrollaron instituciones (las escuelas y los sistemas escolares) cuyos ejes organizadores son definiciones pedagógicas que postulan cómo garantizar que una serie de conocimientos válidos seanaprendidos por toda la población. La definición de estos supuestos es importante porque determina la forma concreta de organización de la propuesta de enseñanza, o sea los elementos materiales específicos que deben existir para que se lleve adelante el proceso de aprendizaje, y por lo tanto los insumos materiales y los recursos humanos para ello. a. el conocimiento 89 En el paradigma de organización del sistema escolar que hemos heredado, se entiende por ‘conocimiento’ la actividad humana que tiene como objetivo la descripción y explicación de los fenómenos de la realidad, con el fin de generar teoría que permita predecir su comportamiento. El conocimiento se orienta hacia la producción de teoría, y por lo tanto el objetivo de la escuela será la adquisición de “saberes” que se definen fundamentalmente desde su dimensión teórica. Un sistema educativo orientado hacia las necesidades del siglo XXI debe incorporar una definición de ciencia (conocimiento) que la entienda con el enfoque de Investigación y Desarrollo, o sea como la actividad humana que explica los diferentes campos de la realidad y genera teoría, tratando de producir cambios en ellos. En este enfoque, el fin fundamental de la ciencia es operar sobre la realidad para transformarla. Este no es un cambio menor, porque supone pasar de una actitud pasiva y contemplativa, a una activa y de intervención sobre la realidad. Es la redefinición que subyace y da razón a la idea de que la escuela no se debe centrar ya sólo en los ‘saberes’, sino que debe poder dar cuenta de la formación de las ‘competencias’ para el hacer. b. el aprendizaje El paradigma de educación que hemos heredado, define el ‘aprendizaje’ como la resultante de un proceso de estímulo-respuesta, en el que tiene un papel preponderante el esfuerzo individual, el estímulo de los textos y la acción de transmisión del docente sobre el alumno. Es decir, la relación docente-alumno debe ser directa, personal, y permanente. Un sistema educativo orientado hacia las necesidades del siglo XXI debe entender el aprendizaje como el resultado de la construcción activa del sujeto sobre el objeto de aprendizaje. Supone un aprendiz activo, que desarrolla hipótesis propias acerca de cómo funciona el mundo, que deben ser puestas a prueba permanentemente. Supone la generación de operaciones mentales y procedimientos prácticos que permitan seguir aprendiendo solo, durante el tiempo de vida que está dentro del sistema educativo y también una vez que egresó del sistema educativo formal. Supone también que el maestro y el alumno exploran y aprenden juntos, pero que esta exploración y aprendizaje mutuo puede revestir diferentes formas, desde las más presenciales hasta las más remotas. c. los contenidos Finalmente, en el paradigma clásico de organización del sistema escolar se supone que lo que se debe enseñar, los ‘contenidos’, son ciertos elementos conceptuales de las disciplinas, que llegan a ser muchas veces sólo los datos descriptivos singulares (fechas, datos, nombres). Un sistema educativo orientado hacia las necesidades del siglo XXI debe incorporar una definición de contenido de la enseñanza “mucho más amplia de lo que es habitual en las discusiones pedagógicas. En realidad, 90 los contenidos designan el conjunto de saberes o formas culturales cuya asimilación y apropiación por los alumnos y alumnas se considera esencial para su desarrollo y socialización.” (Coll y otros, 1994). O sea que la escuela debe enseñar, por supuesto, todos los elementos conceptuales que el avance de la ciencia y las necesidades de resolver problemas determine pero, y con igual nivel de compromiso, es tarea del sistema escolar enseñar los procedimientos mentales que permitan actualizar los conceptos y aplicarlos a la realidad, y las actitudes y valores que entran en juego cuando dicha aplicación tiene lugar. Las opciones que se toman en torno a qué definición de conocimiento, de aprendizaje y de contenido es válida para una sociedad, determinan desde los planes de estudio hasta la forma organizativa y las prácticas cotidianas concretas del sistema educativo: qué se enseña y en qué contexto organizacional se enseña. Por esto una transformación educativa, para ser estructural, debe proponer cambios fuertes en estos tres aspectos y no atender única, o básicamente, a uno de ellos sin ocuparse de manera sustantiva de los demás. El nivel organizacional Se asume que los contenidos científicos, los procedimientos, los valores, las actitudes, las normas, se aprenden en la escuela a través de la rutina diaria de la clase o del funcionamiento institucional. Esta transmisión no es ingenua sino que está relacionada con la manera en que se definen las opciones técnico-pedagógicas. La definición de conocimiento, de aprendizaje y de contenido que adopta un sistema educativo concreto, justifica sus modelos de organización y sus prácticas rutinarias así como la cultura institucional, tanto a nivel de aula, de la institución escolar, de la supervisión, o de la conducción nacional. Es decir que la forma externa concreta de un sistema educativo - el funcionamiento del aula, la organización de la escuela, los modelos de supervisión - deberán ser diferentes si se varían las definiciones técnico-pedagógicas. Consecuencias organizativas de la opción tradicional o clásica de definición de ciencia (conocimiento, saber) son, por ejemplo, la organización del aprendizaje centrado básicamente en textos y manuales o, más adelante en la historia, la decisión de resolver la relación educación-trabajo a través de la existencia de un tipo de escuelas (las técnicas), yuxtaponiendo a la oferta educativa clásica un complemento de práctica (el taller) cuya organización responde no a lógicas pedagógicas sino a lógicas empresariales (Gallart, 1988) . Consecuencias organizativas de la opción tradicional o clásica de la definición de aprendizaje es, por ejemplo, la propuesta organizativa que predetermina la cantidad de alumnos por docente, suponiendo que un determinante absoluto de la calidad del proceso de enseñanza es el pequeño número de 91 alumnos por grupo escolar. Implica también la disposición de los alumnos en pupitres individuales, en los cuales deben realizar su tarea de manera solitaria y aislada. No se puede conversar, no se puede trabajar con el compañero, es decir el alumno trabaja para sí mismo sin jugar un rol grupal. Consecuencias organizativas de la opción tradicional o clásica de definición de contenido ha llevado a enfatizar el papel de la memoria en detrimento del razonamiento, a suponer que sólo se aprende dentro de la escuela, y a entender por “conocimiento válido” sólo lo que se define como contenidos escolares. El nuevo paradigma educativo La transformación educativa requiere un nuevo contrato social acerca de la educación. Para esto, es necesario redefinir los ejes anteriores para pasar de las reformas educativas a procesos de transformación. ¿Qué es entonces la transformación educativa? Para decirlo de manera simple, el nuevo paradigma educativo significa EDUCACIÓN PARA TODOS, CON CALIDAD, CON EQUIDAD Y MÁS COSTO EFICIENTE. Universalidad de la educación EDUCACION PARA TODOS fue la idea fuerza del paradigma anterior (todavía vigente) y se desarrolló con singular importancia en la historia latinoamericana. Gracias a esta idea, y a las leyes que la instrumentaron, hemos avanzado mucho en este aspecto del paradigma. Nos queda, por supuesto la deuda de la repetición y la deserción que son producto del viejo paradigma. Ese, que fue bueno para algunos chicos (los de clase media, urbana, con una base cultural determinada) no lo fue para muchos otros (los que no tenían estas condiciones). En aras de creer que lo más democrático era igual educación para todos, dimos a todos lo mismo, sin atender a las necesidades de cada uno. Nos queda también la deuda de la calidad. Pero, ¿qué significa en el nuevo paradigma EDUCACION PARA TODOS? Este es uno de los pocos aspectos del viejo paradigma que se ha redefinido mundialmente. Hoy, ‘educación para todos’ quiere decir, básicamente, MAS educación para todos o, quizás, la cantidad de educación que la sociedad necesita que todos tengan. Y esta cantidad es hoy indudablemente bastante mayor que hace un siglo o un siglo y medio. Ya desde hace tiempo la gran mayoría de los países del mundo ha ampliado a diez o doce años la cuota obligatoria de educación para toda su población, por supuesto reconociendo que a lo largo de estos diez años los alumnos pasan por distintas edades evolutivas que deben ser reconocidas por el sistema educativo. Calidad de la educación Más educación para todos, CON CALIDAD, dice el nuevo paradigma de la educación para el Siglo XXI. Desde la puesta en marcha de nuestros sistemas 92 educativos, con el paradigma del Siglo XIX, nuestra educación sin dudas ha perdido calidad. Pocas personas hoy dudarían en decir que esto es cierto; pero también muy pocas podrían hoy decir con claridad en qué asientan sus afirmaciones porque lo primero que surge es la pregunta ¿qué es calidad de la educación?, bastante difícil de contestar unívocamente porque la gran (¿)ventaja(?) de este término es que es sumamente subjetivo y cambia con las épocas históricas y los contextos sociales. Hoy calidad en educación se puede definir por lo que se llaman los 7 lenguajes de la modernidad. Calidad de la educación es que TODOS los chicos, al llegar a la terminación de su educación obligatoria hayan logrado: Altas competencias en lectura y escritura. Saber comunicar usando palabras, números, imágenes...navegar diestramente por las superautopistas de información a través de redes electrónicas, porque saber leer y escribir ya no es un simple problema de alfabetización; es un auténtico problema de supervivencia. El reto es que todos los chicos aprendan a leer y escribir bien en 1º, 2º y 3º grado. Altas competencias en cálculo matemático y resolución de problemas. Aprender a resolver problemas. Para hacerlo se necesitan estrategias y métodos adecuados, que se basan en lógicas distintas según la naturaleza del problema. Cada área de problemas debe ser resuelto con un método específico. Y éstos se aprenden y deben ser enseñados en cada uno de los campos del saber: matemática, geografía, lengua, relaciones humanas. Esto también es un compromiso de la escuela elemental. Altas competencias en expresión escrita. Saber describir. analizar, comparar, es decir saber exponer con precisión el pensamiento por escrito. No es posible participar activamente en la vida de la sociedad-mundo si no se es capaz de manejar signos, símbolos, datos, códigos, manuales, directorios, bibliotecas, archivos. Para ser productivos en el trabajo hay que saber operar equipos computarizados y para hacerlo se necesita precisión en el lenguaje escrito. Capacidad para analizar el entorno social y comportarse éticamente. Ser democrático. Saber intervenir y participar en el ejercicio de la ciudadanía. Ser ciudadano significa ser una persona crítica, capaz de convertir los problemas en oportunidades; ser capaz de organizarse para defender intereses y solucionar problemas sin violencia a través de la deliberación y la concertación, respetando las reglas y las leyes establecidas. Capacidad para la recepción crítica de los medios de comunicación social. Los medios de comunicación no son un simple pasatiempo. Producen y reproducen nuevos saberes, éticas y estilos de vida. Ignorarlos es vivir de espaldas al espíritu del tiempo. Todos tienen que ser receptores activos de los medios de comunicación (cine, televisión, radio, revistas..) para poder analizarlos y para expresarse en sus lenguajes. 93 Capacidad para planear, trabajar y decidir en grupo. Saber asociarse, saber trabajar y producir en equipo, saber concertar, son saberes estratégicos para la productividad y fundamentales para la democracia. La capacidad de planear, trabajar y decidir en grupo se forma cotidianamente a través de un modelo de autoestudio y autoaprendizaje cooperativo, con el apoyo de guías técnicamente elaboradas, que le permiten al niño y al joven ir produciendo conocimiento. Capacidad para ubicar, acceder y usar mejor la información acumulada. En el futuro próximo será imposible ingresar al mercado de trabajo sin saber ubicar datos, personas, experiencias... y menos aun sin saber cómo usar esa información para resolver problemas. Hace falta saber consultar en las bibliotecas, hemerotecas y videotecas, centros de información y documentación, museos, revistas científicas, bases de datos, redes electrónicas. Se requiere también saber describir experiencias, sistematizar conocimientos, publicar y difundir trabajos. Todos tienen que aprender a manejar información. De los saberes a las competencias Los siete ‘lenguajes de la modernidad’ definen los nuevos ‘contenidos’ de la educación. Lo que hay que aprender; lo que hay que enseñar. El problema es que ya no alcanza solo con modificar los programas de estudio. Para competir en la sociedad del conocimiento no basta con saber las reglas de ortografía, el teorema de Pitágoras o las fechas fundamentales de la historia. Ni siquiera basta con escribir bien, manejar las operaciones matemáticas y conocer los procesos históricos. La sociedad del Siglo XXI requiere de algo más complejo que los meros ‘saberes’ o conocimientos. Requiere COMPETENCIAS. El viejo paradigma centraba sus esfuerzos en que los chicos ‘supieran’. Una buena escuela era aquella capaz de garantizar conocimientos a todos sus alumnos. Hoy pedimos a la escuela no solo saberes, sino ‘competencias’. ¿Qué son las competencias? Una competencia es un ‘saber hacer’, con ‘saber’ y con ‘conciencia”. El término ‘competencia’ hace referencia a un conjunto de propiedades de cada uno de nosotros que se están modificando permanentemente y que tienen que someterse a la prueba de la resolución de problemas concretos, ya sea en la vida diaria o en situaciones de trabajo que encierran cierta incertidumbre y cierta complejidad técnica. La gran diferencia es que la competencia no proviene solamente de la aprobación de un curriculum (plan de estudios), sino de la aplicación de conocimientos en circunstancias prácticas. Los conocimientos necesarios para poder resolver problemas no se pueden transmitir mecánicamente; son una mezcla de conocimientos tecnológicos previos y de la experiencia que se consigue con la práctica, muchas veces conseguida en los lugares de trabajo. 94 Las competencias están en el medio entre los ‘saberes’ y las ‘habilidades’. Entonces, las competencias, como conjunto de propiedades inestables de las personas, que deben someterse a prueba permanentemente, se oponen a las calificaciones que se medían por un diploma y por la antigüedad en la tarea. Lo importante hoy es SER COMPETENTE, que quiere decir saber hacer cosas, resolver situaciones. Pero como las situaciones son cada vez más complejas, ser competente requiere por un lado de muchos saberes, teóricos y prácticos, y por otro de mucha imaginación y creatividad. Por esto no alcanza con reformas que cambien los programas de estudio que, como todos sabemos, es absolutamente imperativo, y se está haciendo; también hay que cambiar los enfoques de las disciplinas que se enseñan, incluir nuevos campos disciplinarios (como tecnología, inglés o computación), y cambiar las metodologías de enseñanza. Pasar de los saberes a las competencias como meta de la enseñanza es realmente importante no solamente porque en una democracia todos tienen derecho al conocimiento válido, sino también porque la buena formación de todos los ciudadanos es hoy el mejor pasaporte hacia una sociedad productiva e integrada socialmente. Equidad en educación Más educación para todos, CON EQUIDAD, dice el nuevo paradigma de la educación para el Siglo XXI. Desde la puesta en marcha de nuestros sistemas educativos, nuestra educación sin dudas ha generado equidad, pero también, simultáneamente, ha sido la causa de desigualdades. Para decirlo simplemente, dar ‘igual educación a todos’, como era el ideal igualitario del siglo pasado, significó mantener (y a veces agrandar) las diferencias con que los chicos entraban a la escuela. Una propuesta de enseñanza pensada para la clase media (lo que supone que los chicos tienen libros, diarios, revistas, en la casa; que la mamá puede ayudar con los deberes; que en la casa hay un lugar cómodo para estudiar; que los chicos no tienen obligaciones fuera de las del colegio que les tomen su tiempo libre) no funcionó cuando le tocó el turno de incorporarse masivamente a la escuela a los sectores populares. Por esto hay más repetidores y más desertores entre los chicos pobres que entre los de clase media. No porque ‘no les dé la cabeza’ - como se dice muchas veces - sino porque la manera en que se les enseña supone condiciones de vida y capital cultural típico de clase media y no de otros sectores. Es claro que si para aprobar un grado hay que ir a la escuela todos los días desde marzo a noviembre, pero porque deben trabajar en tareas del campo, hay chicos que no pueden cumplir este requisito, la ‘culpa’ del fracaso escolar o del mal rendimiento no es del chico o de su familia sino de cómo se organizan las cosas para hacer posible el aprendizaje. 95 A partir de la década del 30, nos dimos cuenta de que había muchos chicos que repetían los primeros grados y que, finalmente, terminaban yéndose. Por esto, se empezaron a pensar formas de encararlo, pero las respuestas clásicas frente a estos problemas fueron siempre pensadas desde el viejo paradigma. Es decir, siempre se pensó en el fracaso como en un problema de ‘carencias’, y por lo tanto, se buscó cómo llenarlas. Frente a las carencias socioeconómicas, se inventó el comedor escolar, el reparto de útiles, la asistencia médica. Frente a los ‘problemas de aprendizaje’ se inventaron los gabinetes psicopedagógicos escolares, las maestras niveladoras, los grados recuperadores. Siempre más de algo, para cubrir las carencias, lo que por supuesto, aumentaba los costos (que no teníamos en cuenta). ¿Cuál es la respuesta desde el nuevo paradigma? El secreto es reconocer que existen públicos diferentes. Esto, que es hoy universalmente reconocido por cualquier conocedor de marketing que desee incrementar la eficacia de su negocio, es todavía difícil de aceptar en el campo de las políticas públicas y mucho más si se trata de políticas sociales. Públicos diferentes quiere decir precisamente eso: los chicos de los sectores populares no son mejores ni peores que los de clase media. Son diferentes. Fracasan frente al paradigma de enseñanza clásica porque no se les ofrece un ‘producto’ diferente, una forma de aprender diferente, a la medida de sus necesidades. Esto es lo que propone el nuevo paradigma: diversas respuestas EQUIVALENTES (esto es MUY importante), que tengan en cuenta las características propias de cada sector. Diversas respuestas que supongan también entre las muchas cosas diferentes, las que son una carencia. Pero no en función de una oferta homogénea, para la cual todos los ‘carenciados’ son iguales, sino atendiendo a las necesidades específicas de manera específica. En todo esto es imprescindible no perder de vista una cosa: no sirven respuestas de primera y respuestas de segunda, deben ser EQUIVALENTES. Porque armar dos (o varios) circuitos de calidad diferente implica preparar ciudadanos de calidades diferentes. Esto no es bueno ni desde el punto de vista democrático, ni desde el punto de vista económico. Una sociedad competitiva es aquélla en la cual TODOS sus ciudadanos son empleables, y en este tipo de sociedad esto solo se logra con todos sus recursos humanos capacitados (o sea educados) en las ‘competencias’ de la modernidad. 4. Una nueva competencia: el saber tecnológico Hacia el humanismo tecnológico El saber tecnológico es el centro de la nueva cultura de la sociedad del conocimiento. No se trata de tecnologías duras solamente, que pareciera que se oponen a la mirada clásica del humanismo. Se trata de una manera de pensar. Por esto, no se trata de despreciar o dejar de lado la cultura 96 humanista, cuna de nuestra civilización, se trata de redefinirla teniendo en cuenta las necesidades de la nueva sociedad. El pensamiento tecnológico supone modos específicos de operar de la mente. Tishman presenta un resumen interesante de sus características (Tishman, 1994). Para este autor existen siete disposiciones del pensamiento tecnológico, cada una con sus propósitos y movimientos clave. 1. La disposición a ser amplio y aventurero Propósito: ir más allá de lo obvio y hacia una concepción más rica de un tópico o hacia una serie más amplia de opiniones. Movimientos clave: sea audaz!; vaya más allá de lo obvio; busque otros puntos de vista; tenga en cuenta lo opuesto, lo contrario; cuestione los supuestos; explore territorios nuevos, vaya más allá de los límites. 2. La disposición a tener capacidad de asombro, a la búsqueda de problemas y a la investigación. Propósito: encontrar y definir enigmas, misterios e inseguridades; estimular la capacidad de inquisición. Movimientos clave: sea curioso!; identifique problemas, preguntas y enigmas; busque lo que está escondido, lo que falta; pregúntese sobre los temas profundos, haga preguntas difíciles; identifique senderos intrigantes de investigación. 3. La disposición a construir explicaciones y comprensiones. Propósito: construir comprensiones profundas de tópicos, ideas, objetos y eventos a través del uso activo del conocimiento. Movimientos clave (3 áreas): Area 1 - Describir y clasificar: descríbalo claramente!; mire los detalles; identifique los diferentes aspectos o dimensiones; clarifique lo que es raro o poco claro. Area 2 – Explicar y demostrar: explíquelo claramente!; identifique los aspectos centrales; compárelo con otras cosas; identifique las causas; de un ejemplo. Area 3 – Conectar e integrar: haga conexiones!; encuentre conexiones con otras cosas que ya sabe; transfiera lo que ha aprendido a otros contextos; encuentre aplicaciones nuevas e inunsuales a su conocimiento; pregunte qué puede hacer para llevar más allá su conocimiento. 4. La disposición a hacer planes y a ser estratégico. Propósito: establecer estándares y metas y perseguirlas estratégicamene. Movimientos clave: sea organizado!; identifique metas; establezca estándares; pronostique, prevea, anticipe obstáculos; use estrategias de pensamiento. 5. La disposición a ser intelectualmente cuidadoso. Propósito: hacer que el pensamiento se organice y enfoque en lo que es importante. 97 Movimientos clave: sea preciso!; preste atención a los detalles importantes; haga listas, haga diagramas, use organizadores gráficos; sea meticuloso; prevea errores costosos. 6. La disposición a buscar y evaluar razones. Propósito: explorar y evaluar las redes de razones que subyacen las creencias, las teorías y las acciones. Movimientos clave: pregunte por qué!; busque justificaciones, razones a favor y en contra; demande y provea pruebas; identifique las razones que cuentan más y las que cuentan menos; busque las consecuencias y las implicancias. 7. La disposición a ser metacognitivo. Propósito: ser conciente del propio pensamiento, desarrollar y aplicar estándares a su pensamiento, ser responsable del la gestión y de la evaluación del propio pensamiento. Movimientos clave: 2 áreas. Area 1 – Describir el propio pensamiento: sea conciente de sí mismo!; describa su pensamiento en dibujos y en palabras; note las regularidades y tendencias en su pensamiento y en su proceso de aprendizaje. Area 2 – Evaluar el pensamiento: sea autoevaluativo!; critique su propio pensamiento, identifique fortalezas y áreas de mejoramiento; aplique estándares a su pensamiento; desarrolle criterios para pensar correctamente. El saber tecnológico dentro del sistema educativo no se agota con la necesaria introducción de las nuevas tecnologías de la información (NTI). No se trata de la vieja escuela con computadoras, ni del modelo clásico con un área que se llame educación tecnológica. Este estilo de pensamiento supone modos específicos de operar de la mente, y también modos de aprender. Es la base que redefine la manera de entender el aprendizaje en el paradigma clásico y también la base que hace posible el desarrollo de competencias. Requiere, también, el desarrollo de adecuadas propuestas de enseñanza y de organización de la tarea de aprendizaje dentro y fuera de la escuela. 5. Los sistemas educativos no generan empleo, hacen empleable a la gente. Los nuevos empleos y la educación El Siglo XX es el siglo de la ciencia y de la tecnología. Más ciencia y tecnología en nuestra vida cotidiana (en los aparatos domésticos, en los medicamentos, en las comunicaciones, en los entretenimientos) no ha significado, sin embargo, más ciencia y tecnología en la institución que prepara a las generaciones jóvenes para insertarse en la sociedad, o sea en la escuela. Esto no fue grave mientras nuestro aparato productivo tampoco basaba su productividad en la inclusión de ciencia y tecnología. Pero lo está generando ahora. ¿Por qué? Porque avanzar en el crecimiento y resituarse frente al mercado mundial significa, entre otras cosas, formar parte de un mercado 98 laboral internacional. En este mercado mundial de trabajo, la competitividad de los habitantes de un país depende no solo de la prosperidad de las compañías, sino de las tareas o funciones que lleven a cabo - o sea del valor que se pueda agregar - dentro de la economía mundial. Las naciones afrontan una competencia mundial cada vez más directa e inmediata y su competitividad se reconsidera hoy desde el punto de vista de la competitividad de la fuerza de trabajo. Según Richard Reich (Reich,1993) se perfilan para el Siglo XXI tres amplias categorías de trabajo, que corresponden a las tres diferentes posiciones en que estarán las personas. Las llama servicios rutinarios de producción, servicios personales y servicios simbólico-analíticos. Los servicios rutinarios de producción son una etapa en una secuencia. Aunque eran la base de la línea de producción clásica, no han dejado de existir. Un buen ejemplo son los ‘data entry’ (ingresadores de datos) en la industria de la informática. Los servicios personales son los que se proporcionan de persona a persona, como los vendedores, o los peluqueros. Como los anteriores, deben ser competentes en su tarea pero, además, tienen que ser afables, corteses y serviciales. Losservicios simbólicoanalíticos, incluyen las actividades expertas y suponen la capacidad de identificar y resolver problemas. Son los que realmente agregan valor y suponen alta calidad, originalidad, destreza y oportunidad. El trabajo en equipo es, por lo general, un aspecto crítico. Los analistas simbólicos hacen de intermediarios, identifican y resuelven problemas valiéndose de símbolos. Para ello utilizan instrumentos de análisis variados como algoritmos matemáticos, argumentos legales, tácticas financieras, principios científicos, observaciones psicológicas acerca de cómo persuadir o entretener, métodos inductivos o deductivos, o cualquier otro tipo de técnica para resolver problemas. Lo más importante es que cuanto mayor sea la proporción de analistas simbólicos que exista en la fuerza de trabajo, más valor agregado existe. Esto depende de la cantidad y calidad de los puestos de trabajo que se generen, pero mucho más de cuáles son las competencias generales que tiene la población. En otras palabras, por más que crezca la oferta de trabajo que requiera competencias de analista simbólico, si no existen en la población, no será posible llenarlos. Para el crecimiento de la competitividad hay una condición básica: se debe garantizar que exista, además del capital financiero y de la tecnología, el capital humano adecuado para avanzar en el proceso de crecimiento. Esta es una de las funciones centrales del nuevo sistema educativo. Por esto todos los países están haciendo fuertes esfuerzos para transformarlos: las clásicas escuelas que conocimos no alcanzan para formar masivamente las competencias adecuadas para enfrentar los requerimientos del Siglo XXI. 99 Finalmente, hay que tener en cuenta que las transformaciones socioeconómicas ocurridas en las últimas décadas obligan a redefinr la relación entre educación y trabajo. “Las ‘nuevas’ empresas requieren ‘nuevos’ trabajadores...Hay fáciles acuerdos acerca de qué caracteriza a esos nuevos trabajadores: una sólida formación básica el dominio de algunas aptitudes. Ya no su conocimiento o su información, ya que ésta se devalúa rápidamente y ya no tiene sentido económico transmitirla” (Ferraro, 1995). Así como la educación no tiene como misión generar empleo sino hacer empleable a la gente, tampoco la educación tiene ya como misión formar para un puesto de trabajo específico. La vieja definición de las escuelas vocacionales o técnicas tiene que ser reemplazada por otra más amplia en la que el compromiso sea igual al del resto del sistema educativo: en paralelo con las competencias generales que todos tienen que tener, dar las competencias correspondientes a un campo amplio del mundo del trabajo. 6. Mejor educación con menores costos. Un sistema más costo-eficiente Educación para todos, pero MAS COSTO-EFICIENTE. El nuevo conocimiento y la nueva forma de aprender permiten modificar los parámetros organizativos sin perder calidad. Necesitamos abaratar costos, sin bajar calidad. Una educación de calidad para todos es la condición de sustentabilidad de una sociedad competitiva para el Siglo XXI. Planteado así el problema, la situación es descorazonante porque cuando se quiere expandir y generalizar la educación y se miran los marcos presupuestarios de los países de la región latinoamericana encontramos que hay poca flexibilidad para llevar adelante estos propósitos. Dar educación, del modo en que hoy se hace, es sumamente costoso. Nuestros sistemas escolares arrastran también en sus patrones de organización la consecuencia de haber nacido en un momento histórico dado, en sociedades con características concretas. Como surgieron con el desarrollo de la sociedad industrial, en la Europa anglosajona, las características de su organización fueron construidas a partir de las realidades de ese entorno. Eran sociedades en un proceso de acelerada concentración de población. Se verificaba en esos momentos un proceso de urbanización, paralelo al de industrialización, que significaba una particular concentración de la población. Por eso la organización clásica de los sistemas educativos supone poblaciones concentradas, con alta densidad demográfica. De hecho, en América Latina, ha funcionado más o menos bien (hasta donde pudo) en las zonas urbanizadas, con alta densidad de población, pero no ha sido lo mismo en las zonas de alta dispersión de población. Eran territorios no demasiado extendidos, lo cual supone posibilidades de traslado determinadas, complejidades determinadas para la comunicación, 100 etc. Esta condición tampoco se cumple en todos los casos en América Latina donde los territorios son muy extensos y las comunicaciones bastante complejas y difíciles. Eran (y siguen siendo) economías dinámicas cuyo crecimiento permitió sostener e incrementar las inversiones educativas en infraestructura, personal, equipamiento y gastos operativos a medida que los requerimientos de la población lo fueron reclamando. Tercera condición diferente de la realidad latinoamericana donde la economía se caracterizó por profundos desequilibrios estructurales. Esto ha dado como consecuencia un modelo de organización de las escuelas y del sistema educativo muy difícil de sostener en sociedades como las características en América Latina, en la que los techos presupuestarios de sus economías hacen imposible financiar educación de alta calidad para toda la población sobre la base del modelo occidental clásico de organización de la educación. Si esto es así, nuestra región tiene una real desventaja comparativa frente a la ‘sociedad del conocimiento’ que hasta ahora no ha sido demasiado evidente porque ya hemos dicho que en educación son poco frecuentes las miradas realmente prospectivas. Un cambio del paradigma tradicional debe tener como condición la reingeniería de la escuela y del sistema educativo para lograr mejor educación para más gente con menores costos. Esto quiere decir que hoy, generar un cambio de paradigma educativo, para América Latina no es solo una cuestión de interés teórico o académico, sino que es una cuestión en la que está implicada nuestra misma supervivencia. Redefiniendo la organización Otro modo de organizar la educación debería partir de plantear una nueva organización del nudo del tema, o sea una nueva organización del triángulo alumno-docente-conocimiento del que se desprenda la necesidad correspondiente de reordenar los aspectos organizativos del resto de las instancias que arman el sistema educativo. Por ejemplo, redefinir el conocimiento insertando un enfoque de R&D supone la necesidad de pensar en otra manera de utilizar los espacios físicos de adentro y de afuera de las escuelas. Pero también supone la necesidad de que el alumno no trabaje más preponderantemente de manera individual sino que el trabajo interactivo sea una de las condiciones más frecuentes de organización de las actividades de enseñanza. Redefinir el modelo de aprendizaje supone también una serie de consecuencias en términos organizativos. Por ejemplo, la necesidad de ´aprendizaje interactivo´ que surge de la redefinición del concepto de aprendizaje implica el incremento de la actividad del alumno por un lado y la necesidad del trabajo en grupo, lo que tiene consecuencias para la organización y para los costos. Por un lado, un alumno protagonista de su 101 aprendizaje absorbe muchas de las tareas que hoy hace el docente (nutrirse de información, tener un papel activo en la organización de sus tareas, poder autoevaluarse y autocorregirse, etc.). Por otro lado, el trabajo de los alumnos en grupo abre posibilidades múltiples de utilización de los espacios y los tiempos escolares y permite al docente realizar en los mismos tiempos y espacios muchas otras actividades. Por ejemplo, se puede trabajar con alumnos/grupos diferentes las mismas consignas, en grupos de diferente dificultad, lo que libera al docente para ocuparse de los alumnos con mayores dificultades; o puede trabajar con diferentes consignas que supongan repaso de diferentes asignaturas en el mismo momento según las necesidades de los alumnos. Ambas posibilidades son estrategias eficaces y probadas contra el fracaso escolar. Esto evidencia que cambiando el enfoque de la tecnología central de la enseñanza, sin incrementar las inversiones, puede conseguirse una mayor efectividad de la tarea docente, lo que, al reducir el fracaso, reducirá los costos considerablemente. Llevando estos razonamientos un poco más lejos, sería posible un ejercicio teórico en el que se empezara a replantear desde las bases la actual lógica de organización de la educación. Un nuevo pensamiento en este sentido requiere poder asumir que los tabúes de hoy pueden ser violados, y las recetas del ajuste modificadas. Por ejemplo, se impone rever el monto del salario docente; pero también, entre otras cosas, reconsiderar el tamaño del grupo escolar tipo. (Aguerrondo, 1997) 7. Estado o mercado para el servicio educativo Dos visiones subyacen hoy a los cambios educativos, enmarcadas en dos discursos que se escuchan con frecuencia. Uno es el que proviene de una visión “librecambista”, otro es el que tiene, todavía, resabios sesentistas. La primera responde a una concepción bien restringida del liberalismo, que afirma que el Estado destina suficientes recursos a la educación, pero que los administra mal. Promueve, por consiguiente, la privatización total de los servicios detrás de diferentes fórmulas, entre las que sugiere el financiamiento de la demanda. Estas ideas conciben un Estado prescindente, desvinculado de sus funciones básicas: garantizar la igualdad de posibilidades para todos a través de la educación. Falsean la realidad al suponer que existe un “mercado” (ni siquiera digamos ‘perfecto’), que hay ofertas equivalentes que compiten en él, y que la información circula de manera transparente de modo de que realmente todas las personas por igual pueden moverse en ese ‘mercado’ y acceder a la oferta que deseen, después de una prolija elección. En educación, así como en otros servicios sociales, la realidad no funciona así, sobre todo para las familias de escasos recursos o para amplios sectores medios que, al momento de elegir la escuela para sus hijos, no tienen 102 parámetros ni información para evaluar las escuelas, ni pueden mudarse de barrio o de localidad para acceder a una mejor oferta. No hay duda de que esos miles de familias dependen de la calidad del servicio educativo que les debe garantizar el Estado, a través de escuelas públicas o privadas. Como dice Ratinoff: “La transferencia de ‘metáforas’ explicativas desde otros campos del conocimiento tiene la ventaja de poner al descubierto la importancia de algunas variables estratégicas, pero tiene también la desventaja de introducir simplificaciones que distorsionan las prioridades y las soluciones. La metáfora del mercado ilumina el papel insustituible que tienen las motivaciones y el uso de los recursos; sin embargo, esperar que la competencia de los productores de bienes educativos reduzca los costos, incentive la innovación y abra el acceso de quienes están marginados, parece ser más bien una hipérbole retórica que contradice los propios aportes hechos por este enfoque analítico. En efecto, ni los bienes educativos son comparables, ni la información contribuye a hacer transparente el vínculo entre las calidades y los precios, ni quienes en teoría tienen el mayor potencial de beneficiarse de la adquisición de una cultura escolar habilitante poseen las motivaciones y los medios para participar en el ‘mercado’ de las calificaciones. Todo indica que la economía política de la educación es considerablemente más compleja”.(Ratinoff, 1996). Esta posición no es nueva. Ya Benedetto Croce, filósofo liberal, llamaba ‘liberismo’ a la posición economicista que no asumía todas las consecuencias del pensamiento liberal, esto es la democratizacián creciente de todos los bienes y servicios que produce una sociedad y la compensación, por parte del Estado, de las desigualdades más flagrantes sin lo cual no hay mercado real que se sustente. Por otro lado está la visión de quienes, en nombre de un supuesto progresismo, banalizan las acciones que se puedan hacer en cualquier ámbito de la educación, porque todas ellas son avances de las ideologías ‘neoconservadoras’ sustentadas por el gran capital internacional. No se reconoce como tal el valor de actualizar los contenidos de la enseñanza, de capacitar a los docentes, de invertir en infraestructura, de mejorar las condiciones de la administración, de construir sistemas de información o de evaluación de resultados. Todo lo que se haga se desvaloriza en aras de un progresismo abstracto que niega entonces su razón de ser y resulta, finalmente, perfectamente funcional a los planes privatistas de la otra visión. Ambas visiones encierran una idea particular y reduccionista del Estado. Para los privatistas, el ‘Estado mínimo”; para los supuestos progresistas, el “Estado con recursos infinitos” donde hablar de eficiencia y evaluación en educación es mercantilizar la escuela. 103 Lo que importa es que estos dos discursos, que existen adentro y afuera de los países, perturban las acciones que se desarrollan desde el Estado, cuyo objetivo es mejorar cada vez más la utilización de los recursos promoviendo reformas y transformaciones educativas tanto en los aspectos sustantivos de contenidos y organización de la escuela, pero también en lo administrativo y laboral, temas aún pendientes en la mayoría de los países. Hoy hay un discurso dominante en este ámbito lleno de confusiones. El supuesto fracaso del sistema de bienestar y de las políticas sociales en relación con la pobreza ha conducido a la aparición de un movimiento a favor de la ‘reprivatización del Estado’. Peter Drucker resume claramente las razones de esta reprivatización ya que “el gobierno, especialmente el central o federal, es demasiado grande, burocrático, rígido, demasiado alejado de los ciudadanos, muy poco sensible a las demandas de los consumidores y a los derechos del bienestar, excesivamente costoso, monolítico e inadaptable” (Drucker, 1969). Por esto, todas las funciones gubernamentales que no afecten al ámbito de la defensa deben ser reprivatizadas o devueltas al mercado. Así, deberían ser delegadas a, o contratadas por, organizaciones autónomas privadas o cuasi públicas. Drucker llega a la conclusión de que el Estado es incapaz en sí mismo de suministrar de un modo efectivo bienes y servicios y, por lo tanto, debería liberársele de esta carga a fin de concentrar su actividad en una función de dirección. Se pretende introducir en el servicio educativo una lógica de mercado, creando el ‘mercado’ a través de vouchers dirigidos a los padres. Nuevamente reconocemos en este tipo de propuestas la mirada retrospectiva. Incapaces de pensar para adelante, se otorga valor sustantivo a uno de los factores de apoyo de la educación como es el modo en que ésta se financia. Una propuesta educativa superada (como lo es la de las escuelas que todavía funcionan dentro del viejo paradigma) será ineficaz independientemente de cuál sea la manera de financiarla. A pesar de ello, no negamos que puede ser válida la necesidad de repensar los modelos de financiamiento de la educación pública, pero nunca dando a este factor secundario la potencialidad de ser el gran transformador de la educación. 8. Un Estado profesional y responsable Los gobiernos, al igual que los demás sistemas sociales, se encuentran relacionados con las transformaciones del entorno. En paralelo con la necesidad de una transformación de la educación, hoy estamos presenciando un cambio estructural en las instituciones políticas y en las administraciones públicas. Estos cambios se dan en múltiples dimensiones a la vez, entre ellas el diseño institucional, los sistemas organizacionales y las tecnologías de gestión (Schweinheim,1998). La complejidad de los procesos de dirección y gestión involucrados en una transformación como se propone, son imposibles de llevar adelante sin dicha 104 modernización. Frente a las propuestas de minimización o desaparición del Estado es urgente reorganizarlo. Esto implica en primer término profesionalizarlo es decir, incluir en él las competencias necesarias para llevar adelante su cometido. Un Estado pequeño pero fuerte, que pueda regular y controlar para hacer frente a los necesarios procesos de descentralización que colaboren con la construcción de una democracia más participativa. Un Estado eficaz, profesionalizado, que pueda dar cuenta de sus acciones y se pueda hacer responsable de los resultados del accionar del sistema educativo. Las competencias implicadas en este proceso son de orden político y de orden técnico. En el orden técnico, se requiere el desarrollo de sistemas modernos de planeamiento y toma de decisiones; sistemas de evaluación y monitoreo de la calidad; sistemas de información educativa; sistemas de control, que se están desarrollando paulatinamente en el ámbito de la región. Más difícil se presenta la construcción de otros sistemas, absolutamente necesarios para la transformación educativa porque son las herramientas imprescindibles para avanzar en los cambios. Me refiero al desarrollo de fuertes sistemas de apoyo gerencial para la toma de decisiones, como son los sistemas de administración financiera, los de administración de recursos humanos y los sistemas de información operativa. Manejar estas dimensiones de la gestión es la gran diferencia entre gerenciar una reforma educativa y conducir una transformación ya que ésta supone medidas de alto riesgo político, pero también de alta complejidad técnica. 9. De las declaraciones a los hechos: las dificultades de las reformas de segunda generación Las reformas de segunda generación El discurso del cambio educativo, en cualquiera de sus vertientes, tiene larga historia. Desde los Planes de Desarrollo de la educación de los años ’60 hasta la actualidad se han sucedido incontables versiones, todas coincidentes en la necesidad del cambio. Frente a esta realidad, vale preguntarse por qué estos cambios no se producen. Durante el 15 y el 16 de diciembre de 1997, el Banco Mundial organizó en Washington un Seminario llamado: ‘Argentine week. Second generation reforms’ que reunió a unas treinta personas entre funcionarios del Banco y del gobierno argentino. El documento de base, llamado “¿Qué son las reformas de segunda generación?” fue presentado por Moisés Naim, ex Secretario de Hacienda de su país, Venezuela, y hoy parte del Carnegie Endowment, un equipo de pensadores (think tank) financiado por la Fundación Carnegie. ¿Cuáles son sus tesis principales? 1. El cambio institucional (de las instituciones) es el eslabón perdido de las reformas económicas. 105 Durante las décadas del 80/90 lo macroeconómico tapó dos temas centrales que hay que volver a retomar: el problema del subdesarrollo y la importancia del sector público. Las decisiones iniciales para salir del ‘subdesarrollo’ fueron sólo de reformas macroeconómicas, y se centraron sobre todo en modificar las reglas de juego que determinaban el comportamiento macroeconómico. Aunque hay excepciones, como la Argentina, se produjeron sólo con la intervención del Poder Ejecutivo de los países, en relativo aislamiento frente al resto del sistema político y fueron administrativamente sencillas de poner en práctica. Las nuevas medidas de política económica entrañaban el desmantelamiento de muchos organismos públicos existentes, sin que tuvieran que ser reemplazados de inmediato por nuevos organismos. 2. Ahora falta lo más difícil: pasar del shock macroeconómico a la quimioterapia institucional. Será imposible consolidar las reformas iniciadas si no se mejora sustancialmente el funcionamiento de las instituciones públicas. Entramos en una etapa más lenta, más imprevisible y en general más difícil, de creación y rehabilitación de la instituciones sociales. El programa de reformas pendientes por los gobiernos de toda la región tiene como denominador común la necesidad de llevar a cabo una serie de sofisticadas tareas de administración pública en condiciones donde a una creciente impaciencia popular ante la lentitud o ausencia de resultados tangibles se une una desvastación de los entes públicos más críticos para la generación de dichos resultados. Los gobiernos tendrán que concentrarse en el desarrollo de la infraestructura organizativa del Estado para modernizar el financiamiento, la producción y la distribución de los servicios públicos en muchas áreas: educación, sanidad, transporte, justicia y seguridad ciudadana, por nombrar solo las más evidentes. 3. Las exigencias en cuanto a capacidad gubernamental, habilidad política y talento administrativo para estas reformas de segunda fase son mucho mayores que las exigidas para la primera. Por la menor experiencia y mayor complejidad de estos cambios, hay mucho menos acuerdo entre los especialistas sobre qué es lo que se debe hacer. En los países que han entrado en esta segunda fase, aumentaron las voces y los intereses que pugnan por moldear los nuevos cambios porque, a diferencia de lo que ocurre en la primera fase, el costo de los cambios institucionales recae de manera más concentrada en grupos específicos que, a partir de las reformas, pueden perder para siempre ventajas y privilegios. 4. Tanto los gobiernos como los organismos de financiamiento internacional deberán destinar recursos para realizar las reformas de seguda generación 106 rescatando a las instituciones. Estos recursos deberán ser equivalentes a los que se invierten en las reformas macroeconómicas. · Los héroes de la siguiente ola de reformas ya no serán unos pocos tecnócratas versados en las complejidades de la macroeconomía; debrán ser, más bien, un gran número de gerentes públicos de nivel medio capaces de desarrollar las estructuras organizativas, los procesos administrativos y la logística indispensable para que el sector público funcione. Esto explica por qué cuesta tanto pasar de las declaraciones a los hechos. Producir los cambios que necesitamos toca centros neurálgicos de la organización básica de la sociedad, y por lo tanto tiene fuertes costos políticos. Claro que no producirlos tiene, a largo plazo, muchos más costos tanto sociales como políticos. Tomemos sólo dos ejemplos. 1. Hay que cambiar los modelos de organización de las escuelas, tendiendo a modelos de ‘círculos de calidad’: gente que pueda pensar (docentes y alumnos) y aportar las soluciones para sus problemas. Esto quiere decir, modelos flexibles de escuelas que puedan funcionar con horarios distintos, en espacios distintos, con programas distintos. Por supuesto que esto implica entonces procedimientos administrativos distintos y, lo que es todavía más complejo, una distribución del poder distinta. Si el docente con el alumno ahora decide, ¿dónde queda la autoridad del director? ¿y la del supervisor? Si lo que importa son los resultados del aprendizaje, que se miden a través de un sistema nacional ¿se justifica que haya supervisores? Pero si los hay ¿tienen que seguir haciendo lo mismo? Cambiar los modelos de organización de las escuelas, paso absolutamente imprescindible para lograr un nuevo paradigma, contiene decisiones de alto poder explosivo. 2. Hay que redefinir la tarea de los docentes, sus roles, etc. Esto, que puede aceptarse fácilmente en una discusión teórica, en el momento de tomar decisiones quiere decir, entre otras cosas, redefinir los puestos de trabajo. O sea, que algunos sigan, redefinidos; que otros nuevos se creen; pero también que algunos dejen de ser. Por eso, a la hora de pensar en los necesarios cambios educativos, por ejemplo en la (no) decisión de enseñar o no dactilografía o latín, ha pesado más qué va a pasar con los profesores que cuánto se daña o se beneficia a los alumnos, o a la sociedad. 10. La transformación debe ser integral y consensuada La generacíón del consenso Llevar a la práctica cambios tan profundos es un problema complejo que implica mucho más que hacer reformas de segunda generación. Se necesita prever la estrategia que se llevará a cabo. Dos rasgos centrales parecen importantes: construir la viabilidad y respetar las características de integralidad del proceso 107 a. Premisas para construir viabilidad Como los cambios sociales no siempre encuentran su justificación en la bondad o la justicia, las reformas sociales, y mucho más si son estructurales, necesariamente producen resistencias porque desorganizan las formas instituidas. Para que sean realidad, su viabilidad debe ser construida. Por esto, tan importante como plantear con claridad las líneas básicas del cambio, es armar una estrategia adecuada para conducir y gestionar la transformación. Las premisas para construir la viabilidad de los cambios suponen construir el consenso como la única base firme para el cambio, incorporando prácticas de negociación para avanzar en logros progresivos; entender el cambio como un proceso que, partiendo de lo posible en un momento dado, debe ser permanente, para ir profundizándose constantemente; incorporar suficiente capacidad técnica como para contar con las respuestas adecuadas en el momento adecuado; y ser capaz de anticiparse a las resistencias, localizando los grupos desde donde partirán. 1. Simultaneidad entre el corto y el largo plazo. Toda acción de gobierno se enfrenta con la tensión entre el corto y el largo plazo. Esto es particularmente problemático en el campo de la educación en el cual se requiere un tiempo considerable para poder presentar resultados. Los 'tiempos de la educación' no son los 'tiempos políticos' y esto afecta sustancialmente las posibilidades de un proceso de transformación. Adoptar la estrategia de la simultaneidad implica construir la posibilidad del largo plazo a partir de señales claras dadas en el corto plazo. 2. Una estrategia masiva, gradual y permanente. Muchas reformas educativas han ensayado modos diversos de implantación de los cambios. Frecuentemente se han iniciado con experiencias limitadas, "piloto", para luego ampliar progresivamente el ámbito de la aplicación. Una breve mirada a estas estrategias ha demostrado que es difícil que una experiencia piloto se generalice. Más bien parecería que llevan implícitas condiciones tan especiales desde su nacimiento que esta misma modalidad determina la imposibilidad de su generalización. Conviene optar por una estrategia masiva, gradual y permanente. generando las condiciones para que todos se involucren y para que, una vez iniciado el proceso, éste no se detenga. Esto implica reconocer capacidades diferentes en los actores comprometidos; ritmos distintos; niveles de aceptación y de resistencia disímiles. Para que la transformación pueda ser masiva, gradual y permanente, es necesario atender a diferentes necesidades institucionales y regionales. Por ello, la estrategia debe suponer un ritmo en la expansión que puede ser graduado por las autoridades locales o institucionales. 3. Construcción de la credibilidad. La construcción de la viabilidad de la propuesta incluye también un trabajo sistemático para construir la 108 credibilidad en las acciones de gobierno en educación, muy deteriorada como resultado de décadas de un Estado cada vez menos eficiente, con poca capacidad de decisión y escaso espacio para actuar. b. Integralidad del proceso de cambio. La particular constelación de factores que incluye el servicio educativo, y su entrelazamiento, son la base de la extraordinaria complejidad del problema. Frente a esta situación, es una discusión abierta las opciones alternativas de adoptar una estrategia de transformación factor por factor o encarar un cambio simultáneo. Muchos son los argumentos en pro del cambio integral. La opinión generalizada señala la necesidad de producir cambios simultáneamente en tres elementos básicos: * hay que cambiar los contenidos de la enseñanza, o sea qué tienen que saber los alumnos (o qué necesita la sociedad que ellos sepan); * hay que cambiar y mejorar la calidad de los docentes; * hay que mejorar la cantidad y la calidad de los materiales de enseñanza, el equipamiento y la infraestructura. O sea contenidos, docentes, materiales. En ese orden y no en otro. Llamo la antención acerca de que, en todas las opiniones, ‘mejorar’ implica, también y de manera imprescindible, gastar más. La integralidad del proceso de cambio debe tener una meta básica: cambiar la ‘tecnologia central’ de producción de la educacion. El ‘cómo se hace’. Esto es lo más difícil porque es lo más intangible. Pero, con Saint Exupéry diremos que ‘lo importante es invisible a los ojos’, sobre todo a los ojos acostumbrados a mirar con los anteojos (mejor, con las anteojeras) de los viejos modos de hacer educación. ¿Qué nueva ‘tecnología central para la producción’ de educación? Una que suponga: Una redefinicion de lo que le pedimos a la escuela (curriculum). Mejorar los ‘contenidos’ supone, por supuesto, enseñar otras cosas. ¿Cuáles? Aquéllas que sean útiles hoy para entender el mundo que nos rodea. Esto va desde saber qué es el rayo láser, para qué se usa cómo se genera; o qué causó la caída del muro de Berlín y qué procesos culturales, económicos y políticos está generando tanto en Europa como en el resto del mundo, incluida América Latina; hasta saber seguir aprendiendo, poder enfrentar situaciones nuevas; o sentirse cómodo y poder trabajar en equipo. Pero además de esto, implica poder sostener de manera permanente equipos de académicos y pedagogos que actualicen los contenidos; poder traer consultores internacionales para temas específicos; hacer crecer el sistema nacional de evaluación de la calidad para poder ayudar a los gobiernos locales, a las escuelas o a los grupos de chicos que no logren el estándar nacional, generar estándares nacionales, etc. Ni qué decir que otros temas, que pueden parecer secundarios a la hora de pensar en un presupuesto 109 educativo, como alentar y sostener experiencias de mejoramiento de la enseñanza, pagar viajes de estudio, alentar la participación en certámenes internacionales, etc. Generar los mecanismos y disponer del financiamiento para mejorar los contenidos permanentemente es un imperativo de un nuevo paradigma educativo. Un docente que no sea más el capitán del equipo, sino que sea un ‘director técnico’. Es decir, no está dentro del campo de juego como un jugador más (aunque lo esté con un rol diferenciado) sino que está afuera aconsejando, entrenando, orientando. Alguien que sabe reconocer las capacidades potenciales de cada uno y le ayuda a desarrollarlas, que puede proponer y acordar actividades diferenciadas para cada jugador para balancear su formación e incrementar sus competencias. Desde siempre, y hasta donde puede verse también en el futuro, el docente es el alma del proceso de enseñanza. De él depende en gran medida la calidad del proceso educativo ya que su tarea profesional es decisiva. Pero en este tema estamos con problemas. En la gran mayoría de los países de América Latina, el crecimiento de los sistemas escolares para la universalización tuvo una consecuencia no querida pero real: por un lado se depreciaron los salarios de los docentes, y por el otro se abrieron las compuertas de un sistema de trabajo demasiado permisivo que, de todos modos, incrementó el gasto del sector. Hoy está claro que no hay transformación educativa a largo plazo sin docentes con mejor sueldo, pero con condiciones de trabajo mucho más rigurosas que, por sobre todo, incrementen la responsabilidad por los resultados del aprendizaje. También está el tema de la formación y capacitación de los docentes. Es cierto que los docentes de hoy no están preparados para enseñar los contenidos del Siglo XXI entre otras razones porque no fueron formados para ello. Se requiere un esfuerzo fuerte de capacitación masiva (que cuesta su buen dinero) y cambiar la carrera docente. Esto es costoso y largo. Actualizar todos los docentes en servicio no es tarea de un año o dos, y requiere de una política sostenida a lo largo de por lo menos dos lustros por conducciones educativas de diferentes signos políticos. Pero, por otro lado, esto no es más que lo que se está haciendo en muchos otros sectores de la sociedad, que también están encarando procesos de transformación estructural. Un alumno que no sea más un escucha y un escriba sino que sea protagonista de su proceso de aprendizaje. Es quien hace, y a través de eso, quien aprende. Desarrolla competencias, para pensar y para hacer. Tiene un compromiso con sus propios resultados. Una infraestructura de edificios, comodidades, materiales, mucho más diferenciada y completa. Así como no creemos que una fábrica pueda 110 producir sin insumos, tampoco podemos pensar que un docente y los alumnos pueden trabajar sin materiales. No hay manera de dar buena educación sin pensar las escuelas y las aulas como ‘centros de recursos de aprendizaje’. Esto incluye computadoras sí, pero aunque son un elemento imprescindible hoy, no son el elemento más importante. Conseguir mejores espacios para enseñar y aprender y laboratorios, computadoras, bibliotecas, pero también y básicamente, procedimientos administrativos y características de organización modernos y eficientes es lo más duro de lograr, porque supone pelear no sólo con el viejo paradigma de organización de la educación sino también con el de la burocracia pública. Para concretar estos compromisos se debe cambiar también: la escala de los servicios: No podemos continuar con la receta ciega de que ‘no se pueden cerrar escuelas’. Lo que no se puede es dejar chicos sin educación que no es lo mismo. Pero si la población se corre, hay que cerrar en un lado y abrir en otro, cosa que nunca hacemos. Abrimos donde hay nueva población, pero no cerramos donde merma. Resultado: incremento de costos Se debe revisar la relación docentes/directivos: en la Argentina en la escuela primaria tenemos un directivo cada 7 docentes; en media y terciaria, uno cada cinco. Esto incrementa los gastos de conducción. Aceptemos que fue una solución para dar mayores sueldos, pero que es una situación que debe superarse. Ninguna organización soporta los costos de un gerente cada cinco o siete empleados. El tamaño de los grupos de alumnos: aunque la gente y los docentes crean lo contrario, la verdad es que hay muchísima investigación sobre este tema que asegura que no hay relación entre calidad de aprendizaje y tamaño del grupo escolar. Todo depende de la propuesta didáctica y de la calidad de la formación del docente. LO que es cierto es que si seguimos manejando la educación con recetas (paradigmas) del siglo pasado, no podremos aumentar la cantidad de alumnos en cada clase. Si nos largamos a trabajar con metodologías más modernas, esto es perfectamente posible sin afectar la calidad del aprendizaje ni la del trabajo docente. Finalmente debemos agregar que uno de los problemas principales que acarrea la incapacidad de mirada prospectiva es que la comunidad no visualiza cómo puede darse educación desde otros parámetros de organización. Y esto es gravísimo, porque las decisiones que hay que tomar no son solo si se enseña esto o lo otro, sino que se refieren a cuántos meses al año tiene que trabajar un docente, cómo deben ser sus licencias, cuándo debe jubilarse, con qué criterio debe ascender (¿antigüedad o capacidad?), o sea enfrentar el reto de cambiar las regulaciones laborales del docente. Todo esto está implicado en las decisiones necesarias para poner en marcha un nuevo paradigma. 111 Transparentar las reformas que se necesitan en la organización de la educación para discutirlas a fondo es la etapa que falta para asegurarnos que podemos marchar hacia un nuevo paradigma. Esta discusión tiene que terminar en una serie de acuerdos por encima de los partidos políticos, que permita que la educación y su transformación, sea una política de Estado que trascienda las gestiones de gobierno. Lo importante es que el tema se transforme en un ‘issue’ de toda la sociedad. Tiene sentido que toda la sociedad se ocupe de la educación, pero desde una mirada de largo plazo, de cambio de paradigma. Porque apostar a cambiar la educación es una apuesta fuerte y no es un problema que atañe sólo a los docentes. Es un problema de supervivencia del modelo de nueva sociedad que se está gestando. Buenos Aires, 12 de junio de 1999 BIBLIOGRAFIA AGUERRONDO, Inés: “La calidad de la educación, ejes para su definición y evaluación”, La educación. Revista Interamericana de Desarrollo Educativo, Nº116, III, 1993, OEA, Wash. DC AGUERRONDO, Inés: “¿Es posible impartir educación de calidad con menores costos?”, en Perspectivas, Revista trimestral de Educación Comparada, Vol XXVII, nº2, junio 1997. ALBERT Michel, Capitalismo contra capitalismo, Ed. Paidós, Buenos Aires, 1992; COLL César; POZO, Juan Ignacio; SARABIA, Bernabé y VALLS, Enrique: Los contenidos en la Reforma. Enseñanza y aprendizaje de conceptos, procedimientos y actitudes, Ed.Santillana/AulaXXI, Buenos Aires, 1994 DRUCKER, Peter: The Age of Dicontinuity,Heinemann, Londres, 1969. EDUCATIONAL STATE COMMISSION DE LOS ESTADOS UNIDOS: Informe SCANS, Washington, 1988 FEIJOÓ, María del Carmen: ‘Inglés más computación’, en E. Villanueva (coord), Empleo y globalización. 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EEUU desembarca en la tierra del fin del mundo http://www.rebelion.org/noticia.php?id=214107 Walter Goobar Público.es En ese mítico extremo de Suramérica que inspiró a Julio Verne a escribir en 1905 la novela El faro del fin del mundo, Estados Unidos quiere emplazar ahora una base militar camuflada como base logística para apoyar las tareas científicas en la Antártida. Las excusas que han permitido a Washington desplegar más de un centenar de bases militares en Latinoamérica, que se extienden desde Guatemala y el Caribe hasta la Patagonia, son siempre altruistas: ayuda humanitaria, apoyo ante catástrofes, combate al narcotráfico o apoyo al desarrollo y la investigación científica, pero la realidad indica que tanto la base que EEUU pretende emplazar en Tierra del Fuego, la zona más austral de la Argentina; como otra ubicada en la zona limítrofe entre Argentina, Brasil y Paraguay — conocida como la Triple Frontera—, están destinadas a asegurar a Estados Unidos un recurso estratégico cada vez más escaso: el agua potable. Las bases —que el Pentágono eufemísticamente denomina "centros de apoyo para movimientos militares"—, están en proceso de negociación entre Washington y el gobierno de Mauricio Macri. Acuífero Guaraní "Estados Unidos mantienen la 4ª Flota navegando en el Atlántico Sur, cerca de las reservas de petróleo que están debajo del “pré-sal”, el conjunto de formaciones rocosas ubicadas en la zona marítima de buena parte del litoral de Suramérica, con un gran potencial de generación y acumulación de petróleo" Para el politólogo y diplomático brasileño, Alberto Moniz Bandeira, uno de los máximos especialistas en las tormentosas relaciones de Washington con sus vecinos del Sur, no son los piratas ni los náufragos que cautivaron la imaginación de Verne lo que lleva a Washington a apostar tropas del Comando Sur del Pentágono, allí donde se confunden los océanos Atlántico y Pacífico y en la zona de la Triple Frontera, que conforma el límite entre Argentina, Brasil y Paraguay. Moniz Bandeira, autor de La formación del Imperio Americano, afirmó al 113 matutino Página12 que "Estados Unidos mantienen la 4ª Flota navegando en el Atlántico Sur, cerca de las reservas de petróleo que están debajo del “pré-sal”, el conjunto de formaciones rocosas ubicadas en la zona marítima de buena parte del litoral de Suramérica, con un gran potencial de generación y acumulación de petróleo", al tiempo que subraya que la victoria de Mauricio Macri en Argentina y el desplazamiento del poder de Dilma Rousseff en Brasil aumentó el apetito de inversiones de Estados Unidos en la región. Éste es posiblemente uno de los factores que llevan a Estados Unidos a entablar negociaciones para la implantación de una base militar en la Patagonia, en la zona cercana a la Antártida, donde está emplazado el famoso faro del fin del mundo de Julio Verne. Desde el Gobierno argentino aseguraron: “Queremos que la ciudad de Ushuaia se convierta en una base logística para apoyar las tareas científicas en la Antártida”. El discurso de los funcionarios de Cambiemos es el mismo que ha permitido que Washington genere una red de bases que rondan el centenar. El mayor manantial de agua dulce del mundo La otra base estaría emplazada en la Triple Frontera, donde está parte del Acuífero Guaraní, el mayor manantial subterráneo de agua dulce del mundo, con un total de 1.200.000 km². Es un manantial transfronterizo, que abarca a Brasil (840.000 Km²), Paraguay (72.500 km²), Uruguay (58.500 km²) y Argentina (225.000 km²). En la jerga del Pentágono, las bases tienen una tipología común. Se llaman “quasi-bases”, módulos que puedan servir en caso de emergencia. En Paraguay empezaron con la construcción una gran pista de aeropuerto en Mariscal Estigarribia. Esa “quasi-base” fue empezada en 1980, con la construcción de módulos para alojamiento de 16.000 soldados, y después ampliada con la pista del aeropuerto, radares y hangares. Luego frenaron en gran medida debido a presiones de Brasil y no estacionaron ningún contingente militar, aunque ya tenían la garantía de inmunidad a los soldados por parte del Senado de Paraguay desde 2005. Hay un diseño geopolítico y estratégico de Washington en la instalación de una base en la ciudad de Ushuaia, capital de Tierra del Fuego, y otra en la Triple Frontera: su objetivo es recuperar y aumentar la presencia militar en América del Sur, que parece haberse reducido desde que perdieron la base de Manta, en Ecuador, y desde que la Corte en Colombia consideró inconstitucional la instalación de siete bases. Bases reconocidas como tales existen en El Salvador (Comalpa), Cuba (Guantánamo), Aruba, Curaçao y Puerto Rico. Al mismo tiempo los Estados Unidos mantienen en América Latina bases informales y legalmente ambiguas. El Pentágono las llama quasi-bases para evitar tanto el escrutinio del Congreso como la reacción de los países que las albergan. Las quasi-bases están en Perú, Honduras, Costa Rica, Panamá, Ecuador y Colombia, entre otros países, a lo largo del litoral del Pacífico. Elsa Bruzzone, especialista en temas de geopolítica, estrategia y defensa nacional y miembro del Centro de Militares para la Democracia Argentina (CEMIDA), asegura: “Lo que buscan es cerrar el cerco a todos los recursos naturales que tenemos en nuestra América. Las bases militares, cubiertas y encubiertas, que ha instalado en Centroamérica y el Caribe, sumadas a las que tienen en Colombia, Perú, Chile, Paraguay, junto a la base militar de la OTAN en Malvinas, más el destacamento británico en las Georgias cierran el cerco a todos nuestros recursos naturales y reafirman su presencia en la Antártida que es la mayor reserva de agua dulce congelada en el mundo". En ese sector se disputan soberanía Argentina, Chile y Gran Bretaña. En la Península Antártica se encuentran los mayores yacimientos de hidrocarburos de la región, y hay minerales altamente estratégicos que son indispensables para la industria militar y la aeroespacial. El politólogo argentino, Atilio Borón enfatiza que la imperiosa necesidad de Estados Unidos es asegurarse el agua y no el petróleo: "El petróleo va a desaparecer y la humanidad va seguir su curso. Pero si no hay agua se acaba la especie humana. Y acá está casi la mitad del agua dulce del planeta Tierra. Las estimaciones van del 42 al 45% según como se midan los acuíferos subterráneos. Con el 7% de población mundial se tiene casi el 50% del agua dulce del mundo y ellos tienen un problema grave de desertificación". "En Estados Unidos ya piensan cómo se van a llevar el agua de esta región y ya hay propuestas. Sobre todo porque piensan primero llevarse el agua de la zona de Mesoamerica y el sur de México. De América Latina les importa el agua, el petróleo, los minerales estratégicos, la biodiversidad", dice Borón. En las páginas de la revista Contexto, Borón afirma que una de las grandes mentiras que circulan es que América Latina no es una prioridad para Estados Unidos: "Muy por el contrario, América Latina es la región que más les importa. La doctrina para América Latina (la Doctrina Monroe) es de 1823, la doctrina que hacen para Europa es de 1918, casi un siglo después. Cuando llega la reorganización global del Ejército norteamericano el primer comando que arman es el Sur, después piensan en el Europeo y el de Asia, pero primero el de América 114 Latina. Cuando firman los famosos tratados para la contención del comunismo, el primero que firman es el TIAR (Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca) en 1947, recién en 1949 crean la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte)". Según Borón, lo primero que le interesaba a ellos era asegurar esta parte del mundo. Esto tiene que ver con las concepciones geopolíticas que plantean la tesis que Estados Unidos tiene una posibilidad de defensa en la medida que controle lo que ellos llaman “la gran isla americana”, que según esta concepción va desde Alaska a Tierra del Fuego. Desde esa mirada se cree que si esa “isla americana” cae en la parte sur en manos enemigas, tarde o temprano la seguridad de la superpotencia va a estar en riesgo. Putin ajusta las clavijas en Rusia Las leyes aprobadas cercenan drásticamente los derechos humanos y aumentan el poder de vigilancia del Estado sobre la sociedad civil. Las compañías de Internet y telefonía deben almacenar al menos seis meses de datos de usuarios. http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-303788-2016-07-09.html Por Agustín Fontenla Página/12 En Rusia Desde Moscú Vladímir Putin aprobó el polémico “paquete Yarovaya” de legislación antiterrorista, que toma nombre de una de las legisladoras más conservadoras de Rusia. Se trata de una serie de leyes que cercena drásticamente los derechos humanos y aumenta el poder de vigilancia del Estado sobre la sociedad civil. Aún no se conocen los efectos directos y la letra chica de algunos artículos debe ser decidida por el gobierno, pero lo más destacado es que las compañías de internet y telefonía rusas deberán almacenar información sobre las llamadas, mensajes de texto, imágenes, audios y videos de sus clientes. Además, se incrementan las penas por “terrorismo online”, un delito que castiga con penas de hasta siete años a aquellas personas que justifiquen o inciten el extremismo en internet. Una categoría no muy clara, que puede darle un amplio margen de acción al gobierno respecto de sus oponentes políticos. El ex empleado de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) estadounidense, Edward Snowden, que develó el enorme aparato de espionaje de Estados Unidos y que todavía permanece asilado en Rusia, apodó la medida “Gran Hermano” y afirmó que “no solo viola los derechos humanos sino también el sentido común”. Después de que la Duma Estatal (cámara de diputados) y el Consejo de la Federación(senado), aprobaran el “paquete Yarovaya”, el informático revelador alertó al Kremlin que la ley “nunca debería ser firmada” (por Putin). El presidente del Consejo para el Desarrollo de la Sociedad Civil y los Derechos Humanos del país, por su parte, solicitó al mandatario su anulación por la “inconstitucionalidad, inconsistencia e incertidumbre legal de algunos de sus artículos”. Ni uno ni otro pedido modificaron el pensamiento del líder ruso. Los principales operadores de telefonía móvil clamaron que la ley arruinaría su negocio. Según lo aprobado, estos deben almacenar la información durante al menos seis meses. En una carta dirigida a la presidenta del Consejo de la Federación Rusa, Valentina Matvienko, adujeron que es “técnica y económicamente impracticable”. Según sus cálculos, cumplir con la ley les costaría más de 30 mil millones de dólares, y les obligaría a aumentar tarifas y –de paso– brindar un servicio deficiente. 115 Incluso, estas compañías deberán proveer al Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB) los códigos de encriptación para acceder a los mensajes de servicios populares de conversación, del tipo Whats- App, Telegram y otros. En el caso de las compañías de internet, la medida les obliga a guardar el contenido sobre llamadas hechas y recibidas, mensajes de texto, audio, imágenes y videos de sus clientes por seis meses, en tanto que el registro simple de estas actividades, será almacenado por un año. El gigante ruso Yandex, similar a Google, afirmó que el nuevo marco legal significa “una excesiva limitación de los derechos de las compañías y los usuarios”. Posteriormente a la firma del “paquete Yarovaya”, el vocero del presidente ruso, Dmitri Peskov, salió a calmar las aguas. Afirmó que el presidente Putin está familiarizado con los pedidos de rechazo y anulación que han hecho distintas personas e instituciones. Sin embargo, aseguró que la la nueva legislación no será dañina. “La ley ha sido pasada con una lista de recomendaciones al gobierno diseñadas para minimizar el potencial riesgo financiero”, señaló. “Estamos predispuestos a trabajar en conjunto (con los operadores) y si la ley produce algún resultado indeseado, el gobierno introducirá medidas apropiadas mediante decreto presidencial”. En los despachos de la Duma quedó archivada una de las cláusulas más controvertidas del paquete, que promovía revocar la ciudadanía rusa a personas de doble ciudadanía acusadas por terrorismo o de trabajar para servicios de inteligencia foráneos, así como también bloquear temporalmente la posibilidad de realizar viajes a los condenados por acciones terroristas. El “paquete Yarovaya” se puede colocar en un marco más amplio de medidas que incluye la creación de la Guardia Nacional en abril pasado. Un órgano de seguridad enorme (se estima que está conformado por unos 400 mil hombres) comandado por el exjefe de la seguridad personal presidencial, Viktor Zolotov. El Kremlin afirmó tras su creación que la Guardia Nacional lucharía contra el terrorismo, aunque también podría tener a su cargo la seguridad durante actos masivos no autorizados, o sea protestas. “Este es un intento de las autoridades para protegerse ellos mismos de las protestas”, denunció la líder del partido liberal Yabloko, Emilia Slabunova . Una y otra medidas aparecen como una sombra que planea lentamente sobre las próximas elecciones legislativas de septiembre, que serán los primeros comicios de importancia desde que Vladímir Putin accedió a su tercer mandato como presidente en el 2012. El líder ruso, que ha emprendido un giro en su política exterior para recomponer su relación con las potencias de Occidente, espera que la economía encuentre nuevamente la senda del crecimiento, que le permita llegar con apoyos y fuerza suficiente a las elecciones presidenciales de 2018, tan solo unos meses antes de que suene el silbato de inicio para el Mundial de Fútbol que se jugará en la Federación. NICARAGUA.- A 37 años de la revolución nicaragüense: de la dictadura de Somoza al bonapartismo corporativo de Ortega www.elsoca.org @elsocca Por José Rene Tamariz El 17 de julio del año 1979 el último dictador de la dinastía de la familia Somoza, Anastasio Somoza Debayle, huye de Nicaragua hacia Miami debido al inminente 116 triunfo de la insurrección popular y la contundente derrota de la guardia nacional (GN), cuerpo militar represivo y sanguinario, creado por el imperialismo yanqui en el año 1927. La destrucción del ejército y los demás cuerpos represivos significó, prácticamente la destrucción del Estado burgués en Nicaragua. El 19 de julio de ese mismo año, entraban triunfante a Managua las tropas guerrilleras y masas revolucionarias y la dictadura de los Somozas, hija del imperio estadounidense, había sido destruida por una poderosa y violenta insurrección, acaudillada hábilmente por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), organización guerrillera formada en el año 1961. Nicaragua y las intervenciones imperialistas La historia de Nicaragua del siglo pasado, en gran parte, está determinada por las diferentes formas de intervenciones del imperialismo estadounidense en los asuntos internos del país. La posición geopolítica de la Nación; los permanentes conflictos intestinos entre liberales y conservadores, élites oligárquicas-burguesas entreguistas de la soberanía nacional y la extrema debilidad del proletariado nicaragüense, posibilitaron las ocupaciones del imperio yanqui. Las características de las clases dominantes de esa época son el producto de las debilidades estructurales del desarrollo del capitalismo nicaragüense. Los intentos y medidas del régimen del general y cafetalero liberal, José Santos Zelaya (1893-1909), por promover cierto desarrollo nacional y modernizar Nicaragua, obtuvo la virulenta oposición de los conservadores, porque esas medidas favorecían el fortalecimiento de la facción liberal en detrimento de la fracción conservadora. A finales del año 1909, renuncia el general Zelaya, producto del alzamiento militar de los conservadores en la zona atlántica y las presiones imperialistas. Entonces,“La era Zelaya llegó a su fin como resultado de una revuelta del Partido Conservador, en alianza con un grupo de liberales desafectos, y apoyados por el gobierno de los Estados Unidos. El intento de Zelaya de impulsar la construcción del canal sin participación estadounidense, la negociación de importantes préstamos con consorcios europeos, sumados a su intromisión en los asuntos internos de Honduras, motivó al secretario de estado Philander Knox a apoyar a los enemigos políticos del dictador liberal para lograr su derrocamiento…”. (Knut, 2004: 32). El derrocamiento del régimen de Zelaya, marca el inicio de las sucesivas intervenciones militares y de todo tipo de intromisión del imperialismo yanqui en Nicaragua. De esta forma, la nación se transforma de un país semicolonial a neocolonial, mejor conocido en la historia nacional como “protectorado” (1910-1932). Cuenta Pío Bolaños, quien fue secretario personal del general Zelaya y cónsul en Nueva York, que en octubre de 1910 llegó a Managua, el agente del imperialismo yanqui, Thomas Dawson, a suscribir convenios de sujeción de los gobernantes de turno a los dictados de los Estados Unidos de América. Nuevamente en noviembre del año 1911 llegó a Nicaragua, el agente 117 financiero imperialista Ernest Wands, para profundizar la entrega de Nicaragua al imperio estadounidense. De esa forma “Prácticamente, hoy día, los banqueros Brown Bros y J. & W. Seligman & Co., de Nueva York, son los dueños de las rentas y propiedades de la República de Nicaragua…”. (Bolaños, 1984: 17). Entonces, a partir del año 1910, se inicia la formación del protectorado del gobierno de los Estados Unidos sobre Nicaragua, el cual asume el control total del país: financiero, fiscal, económico, político y gubernamental. Para mantener el control del nuevo colonialismo en Nicaragua, el imperialismo yanqui, realiza sucesivas intervenciones militares, además de las anteriores señaladas, en los años 1912-1925 y 1926-32. Contra esta última intervención imperialista es la que lucha el general Cesar Augusto Sandino. Al retirarse las tropas estadounidenses en el año 1925, se inicia una revuelta militar de los liberales en contra del gobierno de Adolfo Díaz, gobierno que le fue transferido a este por el golpista, general conservador, Emiliano Chamorro, que había derrocado al gobierno libero-conservador de Sacasa-Solórzano. El general Augusto Cesar Sandino, militar liberal, luchaba al lado del ejército liberal para restituir a ese gobierno, electo mediante elecciones. Producto de esta sublevación militar, regresan nuevamente las tropas imperialistas a poner el orden en su protectorado. Imponen la rendición al ejército liberal mediante el pacto Stimson-Moncada en 1927, mejor conocido como pacto del espino negro. A esta rendición se opone el General Sandino. No entrega las armas y comienza la lucha guerrillera en las montañas del norte de Nicaragua en contra de las tropas ocupantes. Surgimiento de la dictadura de la familia Somoza La dictadura de Anastasio Somoza García (1936-1956), surge como el producto de la combinación de varios factores. En primer lugar, el desarme de los ejércitos de las fracciones burguesas, liberales y conservadores, producto del pacto del espino negro, la conformación de la guardia nacional y el posterior nombramiento de Anastasio Somoza García, como jefe director de las fuerzas armadas, contribuyen a darle mucho poder a este testaferro del imperialismo yanqui. En segundo lugar, el fusilamiento del General Sandino y de sus seguidores, que habían negociado un acuerdo de paz con el Presidente Sacasa, a manos de la guardia nacional, facilitan que Somoza se erija como única fuerza militar decisiva en el escenario nacional. En tercer lugar, el hábil manejo por parte de Somoza de las divisiones entre liberales y conservadores, así como el débil gobierno de Sacasa, sumado al deterioro de la situación económica de esa época, su suman como elementos que, al final, conducen a Somoza a dar el golpe de estado contra Sacasa y, posteriormente, erigirse como candidato presidencial único en las elecciones del año 1936. De ese modo surge la dictadura de la familia Somoza que se perpetúa a lo largo de 43 años. EL viejo Somoza García, padre de la dictadura dinástica, es ejecutado por Rigoberto López Pérez en el año 1956. Siendo su hijo mayor, Luis Somoza 118 Debayle, presidente del Congreso, es electo Presidente interino y, posteriormente, mediante unas elecciones fraudulentas en el año 1957, se hizo Presidente de Nicaragua por el periodo 1957-1963. Una vez terminado su mandato, Luis Somoza que se presentaba como un “modernizador” y “reformista”, hizo elegir a un títere, René Schick, como candidato a la Presidencia de la República la cual ganó, mediante fraude electoral. Para las próximas elecciones, el tercer dictador de la familia dinástica, Anastasio Somoza Debayle, se hizo nombrar candidato a la Presidencia, la cual, nuevamente, mediante fraude electoral, ganó en el año 1967, manteniéndose, mediante la represión sanguinaria y elecciones fraudulentas sucesivas con la complicidad del partido conservador, en el poder hasta su derrocamiento violento en 1979. El triunfo de la revolución El 19 de julio del año 1979 triunfa la revolución nicaragüense. La victoria de la insurrección y revolución nicaragüense fue el producto de la combinación de factores nacionales e internacionales que, la dirección sandinista, logró comprender y aprovechar para colocarse a la cabeza y dirigir ese poderoso y glorioso ascenso del movimiento de masas. Para finales de los años 70, la dictadura de la familia Somoza se encontraba en franca crisis económica, pero, principalmente, en una terrible crisis política. La dictadura se encontraba agotada y las masas la odiaban. Las familias consideraban a la dictadura una amenaza para la sobrevivencia de sus familias, ya que la guardia somocista y sus demás organismos de represión asesinaban a diestra y siniestra a todos los jóvenes, por considerarlos potenciales guerrilleros, independientemente de que fueran o no sandinistas. Aquí el factor social y político se convirtió en un elemento objetivo. Por otro lado, los hijos de las familias de clases medias y ricas, se incorporaban masivamente a las filas de diferentes tendencias del sandinismo porque se habían radicalizado, en parte, por las contradicciones económicas que esas familias tenían con los sectores burgueses surgido del somocismo. Este factor explica las grandes movilizaciones cotidianas, tomas de iglesias, huelgas estudiantiles en secundaria, enfrentamientos armados e insurrecciones espontaneas que se produjeron a lo largo de los años 1976, 1977, 1978 y 1979. Sobre este poderoso movimiento espontáneo de masas, la dirigencia del FSLN logró cabalgar y dirigir para encuadrarlo bajo su conducción. He aquí, precisamente, donde se encuentra la habilidad política y comprensión correcta de los fenómenos sociales y políticos, por parte de la dirigencia del FSLN, principalmente de la tendencia insurrecional, que se producían en Nicaragua. A su vez, estos factores nacionales coincidieron a nivel internacional con cierta debilidad del imperialismo yanqui, producto de su contundente e histórica derrota en Vietnam en el año 1975, lo cual condujo al imperio yanqui a variar su política de apoyo incondicional a la dictadura de la familia Somoza. 119 A su vez, la socialdemocracia internacional y otros gobiernos latinoamericanos, comenzaron a dar apoyo político, económico y militar al FSLN, pero obviamente, con la intención de influir y decidir sobre el curso y final de los acontecimientos y la inminente caída de la dictadura somocista. Es importante destacar, en este apartado, para hacer honor a la verdad que la organización del FSLN fue un enemigo irreconciliable de la dictadura de los Somoza, de la cual siempre buscó su destrucción, por la vía armada. No obstante, se debe señalar claramente los límites de la conducción del FSLN, en sus distintas variantes. El sandinismo combinaba a nivel político-ideológico el nacionalismo del general Cesar Augusto Sandino con algunas nociones del socialismo burocrático y deformado del stalinismo y el castrismo. Esta amalgama contradictoria, confusa y equivocada, combinada con el carácter y composición social de las clases medias y altas de la dirigencia de las distintas corrientes del sandinismo, aunque tuviera una base plebeya, la condujo finalmente a lo que conocemos del sandinismo actual, tanto del FSLN en el poder actualmente, convertido en una burguesía emergente, como del MRS que se encuentra en la oposición, pero totalmente a la derecha y en alianza con las fuerzas más reaccionarias del país. La conversión de una organización revolucionaria en un partido burgués y una nueva burguesía, no es nueva en la historia. Sin embargo, la transformación del FSLN como ejemplo histórico más moderno es importante y educativo para preparar a las nuevas generaciones de revolucionarios en lo que no se debe hacer. Sin duda alguna, forzando a la genética humana en una explicación social y política, podríamos decir que la transformación del FSLN en partido burgués y nueva burguesía, se encontraba en los “genes” del FSLN, pero que en su etapa ascendente eran “genes recesivos” que se ocultaban y enmascaraban y, en su fase decadente, esos “genes” se manifestaron y transformaron en “genes dominantes”. La revolución nicaragüense y su influencia en Centroamérica Dado que los países centroamericanos, constituyen en los hechos, una unidad geográfica, económica y cultural, ese triunfo revolucionario en Nicaragua abre una situación revolucionaria a nivel de toda la región centroamericana, combinados con los factores económicos de relativa crisis internacional. El triunfo revolucionario en Nicaragua estimula y fortalece al movimiento popular y sus organizaciones a nivel regional. El Salvador en el 1979 también se encontraba en una profunda situación de crisis política con fuertes oleadas de huelgas, movilizaciones, acciones guerrilleras y todo tipo de acciones. Prácticamente, ese país estaba al borde de la guerra civil a inicios del año 1980. Es por ello, que cientos de combatientes nicaragüenses con sus armas cruzan las fronteras y se dirigen a apoyar militarmente la revolución en El Salvador, para extender la revolución. Obviamente este es un proceso espontaneo y que se produce por fuera de la línea oficial del FSLN. Es por esta razón que la dirigencia sandinista reprime ese proceso espontaneo y luego lo canaliza de forma 120 burocrática. A su vez, Guatemala, también se encontraba en una situación de fuertes enfrentamientos militares entre el ejército y las organizaciones guerrilleras, movilizaciones y huelgas. Sin embargo, en este país las fuerzas represivas del ejército logran tener una política de tierra arrasada y un combate más efectivo en contra de la guerrilla a la cual logran golpear. Sin embargo, es evidente que, en Centroamérica, entre los años 79 y 81 el orden establecido por el imperialismo yanqui, mediante dictaduras militares, se encontraba en proceso de derrumbamiento y colapso. Si todo ese orden, al final, no se viene totalmente abajo se debe a la conducción del castrismo y el sandinismo que, producto de una política nacionalista, no tienen una política de extensión de la revolución región centroamericana. Castro aconseja a la dirección del FSLN no seguir el ejemplo de Cuba de expropiación total de la burguesía y, a su vez, la dirección sandinista no apoya totalmente, con hombres y armas, a las organizaciones de El Salvador y Guatemala, evitando con ello el triunfo revolucionario en esos países y, por ende, que termine imponiéndose la contrarrevolución y el imperialismo. Al final, esta política se vuelve en contra de la revolución nicaragüense que, en términos de 10 años, termina siendo derrotada por la política imperialista. Las conquistas de la revolución nicaragüense En el año 1979 y 1982 se emiten una serie de decretos y medidas altamente progresivos por parte de la Junta de Gobierno de Reconstrucción Nacional (JGRN), integrada por mayoría sandinista, Daniel Ortega, Sergio Ramírez y Moisés Hassan y dos representantes burgueses, Violeta de Chamorro y Alfonso Robelo. Se disuelve formalmente, aunque ya estaba destruida por la insurrección triunfante, la guardia nacional; se confisca todos los bienes de la familia Somoza que constituían el 20% de las tierras, explotaciones agrícolas, fábricas y otros negocios; se nacionaliza el sistema financiero; se nacionaliza el comercio exterior; se abole la pena de muerte; se reducen drásticamente los alquileres de casas, asestando un duro golpe a los dueños de casas; se declara la gratuidad de la educación universitaria; se realiza la alfabetización masiva de la población a lo largo y ancho del territorio nacional y muchos otros de gran importancia. En el terreno de la salud, Nicaragua era el ejemplo a seguir en el tercer mundo sino también de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Leamos lo que se decía en aquella época: “Nicaragua es un caso especial. Los adelantos en la atención de salud realizado por el actual gobierno han mejorado significativamente las vidas de muchos nicaragüenses. En 1982, la Organización Mundial de la Salud designó a Nicaragua como el “país modelo” del Tercer Mundo en atención de la salud. En agosto de 1979, un sistema nacional de salud único unió a las 23 instituciones separadas existentes bajo el gobierno prerrevolucionario, y el sistema en su conjunto ha llegado a ser más eficiente y extensivo. El presupuesto de salud del país subió un 50% en el primer año después de la revolución…”. (Freiberger, 1989: 227). Obviamente, actualmente ninguna de esas conquistas existe, sino que más bien lo que existe es un 121 profundo retroceso en todos los terrenos, a pesar de una relativa mejoría en relación a años anteriores. Por otro lado, la sindicalización de los trabajadores entre julio del año 1979 a diciembre del año 1982 fue espectacular, pasando el número de sindicatos de 138 a 1200. ¡Un incremento de casi el 900 por ciento!! Pero, no solo se trataba del aumento numérico, sino que dentro de muchas fábricas se establecía un poder dual, ya sean que los dueños fueron privados o bien los gerentes fueran representantes del gobierno sandinistas. Los trabajadores en las fábricas sancionaban y despedían a los jefes, sometiéndolos a los dictados y resoluciones de las asambleas de los trabajadores que, a mano alzadas, imponían sus posiciones. En las fábricas y empresas existían de forma generalizada comisariatos que vendían a precios bien baratos los productos básicos a todos los trabajadores. Así sucesivamente, también sucedía en los barrios, haciendas y otros lugares. Es importante destacar que, dentro de este proceso revolucionario altamente móvil e inestable, la izquierda revolucionaria se desarrolló e impulsaba la revolución hacia adelante, exigiendo la expropiación de todos los grandes capitalistas, la ruptura de las alianzas gubernamentales del FSLN con burguesía y el apoyo de los procesos revolucionarios en los demás países centroamericanos como una forma de fortalecer y extender la revolución nicaragüense. La contrarrevolución y su desarrollo Desde el año 1981, fecha en que asume la presidencia de los Estados Unidos, Ronald Reagan, comienza un ataque de este hacia la revolución nicaragüense. Este gobierno suspende préstamos tanto de ellos como de instituciones multilaterales, se desarrollan campamentos contrarrevolucionarios en la Florida; se autorizan operaciones militares encubiertas contra el gobierno sandinista; en el año 1983 se realiza ataque contra puerto Corinto y para los años posteriores, inician sus operaciones militares la guerrilla contrarrevolucionaria en contra de la revolución nicaragüense. En esos años, el gobierno sandinista instaura el servicio militar obligatorio conocido patriótico (SMP). Producto de la guerra, la mayor parte del presupuesto de la República se destina a gastos de guerra; los EE.UU imponen el bloqueo económico a Nicaragua; se produce el desabastecimiento generalizado; se produce una gigantesca hiperinflación del 14 mil por ciento, la más grande del mundo; los ataques contrarrevolucionarios destruyen la infraestructura en diversos poblados; miles de jóvenes combatientes mueren los frentes de guerra y se producen otros males producto de la guerra contrarrevolucionaria. En síntesis, los efectos de la guerra someten a la población a una gran penuria, escasez, pobreza, miseria, hambre y muerte. Es un panorama dantesco el que produce la guerra contrarrevolucionaria. El surgimiento de la contrarrevolución como la contraparte de la revolución era un fenómeno inevitable, sin embargo, el desarrollo de la contrarrevolución como 122 un fenómeno de masas era evitable con políticas sociales, económicas y estructurales hacia sectores sociales claves, como eran el campesinado y las minorías nacionales de la costa atlántica. Debido a la naturaleza social y política de la dirigencia del FSLN, se cometen graves errores contra estos sectores como el reasentamiento forzado de los misquitos, la violación de sus costumbres, de su lengua y sus tierras, así como la no entrega de la tierra al campesinado pobre. Entonces, el crecimiento de la contrarrevolución con estas fuerzas sociales muy importantes, minorías nacionales y campesinado, trasforma las operaciones y actividades contrarrevolucionarias de las huestes somocistas en una guerrilla de masas que, posteriormente, conllevan a capitulaciones en las negociaciones y a la derrota de la revolución en las elecciones del año 1990. La derrota de la revolución nicaragüense La derrota electoral del FSLN a manos de la derechista y pro-imperialista Unión Nacional Opositora (UNO) en el año 1990 es el resultado y producto de una combinación de factores. La guerra civil contrarrevolucionaria de los últimos años de la década de los 80 diezmó no solo la capacidad económica para sostener el país, sino también la energía y los recursos humanos, los combatientes, para enfrentar exitosamente a la contrarrevolución. Las familias y la población ya no aguantaban más los estragos de la guerra, estaban cansadas de la guerra. Las masas hambrientas, empobrecidas y con uno o varios hijos muertos en los combates, encontró, por la vía de las elecciones del año 1990, la forma de detener la guerra y votó masivamente en contra del FSLN. Este proceso subterráneo y soterrado, el FSLN no logró entenderlo y se confundían con las encuestas que le daban el triunfo y con las grandes movilizaciones que lograban en las ciudades y poblados, a pesar de la guerra. Fue un fenómeno político y social altamente contradictorio. Lo que pasa en las calles no se corresponde con lo que está pasando en la conciencia de las amplias masas que no se movilizan. La derrota de la revolución condujo a graves retroceso a todos los niveles. Miles de nicaragüenses, producto del crecimiento de la pobreza, emigraron a Costa Rica, los Estados Unidos y otros países. Se desmontaron todas las conquistas sociales, políticas, sindicales y demás que aún quedaban, a pesar de las políticas de reacción de la dirigencia sandinista. De aquella dorada época no queda nada, solo viejos personajes políticos y empresarios, muchos de ellos transformados en nuevos ricos y políticos burgueses, otros convertidos en tránsfugas políticos, viejos empresarios y millonarios, como los Pellas, que de ser expropiado en 1988 de su insigne empresa el Ingenio San Antonio, ahora es consultado y tomado en cuenta, junto con empresarios del COSEP, en la mayoría de las tomas de decisiones por el gobierno de Ortega. Continua intacto el sistema capitalista, a pesar de los duros ataques que sufrió en el proceso revolucionario. Este sistema ha demostrado su capacidad de sobrevivencia y su capacidad de fagocitar a los que, en algún tiempo, fueron revolucionarios. 123 El Bonapartismo corporativo de Ortega y el FSLN Actualmente, después de 37 de la poderosa insurrección y revolución nicaragüense, se encuentra en el poder el FSLN. En los discursos oficiales todavía se habla de la revolución. Sin embargo, esas son palabras nada más. El FSLN es un partido y su régimen es uno de los pocos en América Latina que cumple al pie de la letra los dictados y las políticas oficiales de los organismos financieros internacionales como el FMI, el BM y otros. El FSLN y un sector de sus miembros, representan hoy una nueva burguesía con intereses económicos en diversas actividades empresariales, agropecuaria, energía, finanzas y otras. Muchos acusan al régimen de Ortega, incluido el MRS, como una dictadura. Otros como el politólogo José Dávila como un régimen de “híbridocracia”. Sin embargo, nosotros caracterizamos al régimen de Ortega como bonapartista, pero de tipo corporativistas. Bonapartista porque es un “régimen personal” que pretende elevarse por encima de la sociedad, pero que al final defiende y protege los intereses de las clases dominantes. El término corporativo se le asigna, porque en la Constitución Política en uno de sus artículos incorpora a los empresarios como órgano de consulta y toma de decisiones para su régimen político. Lo anterior, no significa para nada que no tengan contradicciones con el sector corporativo de su régimen, los capitalistas y sus cámaras empresariales. Las lecciones de la revolución nicaragüense A nuestro juicio, existe una enseñanza fundamental para construir una teoría de la revolución centroamericana a partir de la revolución nicaragüense. No es posible sostener una revolución victoriosa en uno de los países centroamericanos en los estrechos marcos nacionales. La existencia y sobrevivencia de esta revolución solo sería viable si se extiende al resto de los países centroamericanos y se convierte en una revolución a escala regional. Dado los lazos económicos, vasos comunicantes y la interdependencia entre los países centroamericanos la revolución en Centroamérica será centroamericana o no será posible sostenerla, incluso si la revolución triunfa siendo dirigida por un partido revolucionario socialista. Es cierto que la dirección sandinista con sus desaciertos y sus políticas colaboracionistas y la contrarrevolución imperialista condujeron a la derrota de la revolución, sin embargo, las posibilidades de resistir la ofensiva contrarrevolucionaria se hubieran compensado con el apoyo de los demás países, así como poder haber resistido al bloqueo económico y demás efectos negativos provocados por la guerra contrarrevolucionaria. Neurociencia aplicada a la educación del siglo XXI http://educrea.cl/neurociencia-aplicada-a-la-educacion-del-siglo-xxi/ Contexto 124 Este sigo XXI, época marcada por grandes contrastes donde el florecimiento de la ciencia y la tecnología coexiste con el incremento de conflictos emocionales la tarea de formar y educar a las nuevas generaciones requiere cada vez más de planteamientos pedagógicos que se sitúen en le punto de encrucijada de la mundialización de los conocimientos y la particularidad de los procesos de aprendizaje. Modificar el modelo sobre cómo se desarrolla la vida de las escuelas respecto de la construcción del saber, y a partir de la comprensión de cómo aprende, cómo guarda información nuestro cerebro, y cuáles son los procesos biológicos que facilitan el aprendizaje, es una tarea que demanda urgente implementación en los tiempos actuales. Los grandes avances de la neurociencia ayudan a develar los mecanismos cerebrales que hacen posible el aprender, des-aprender, re-aprender, el recordar y el grabar información en el cerebro, lo que tiende a mejorar todo lo que abarca el Enseñaje (Enseñanza-Aprendizaje), a modo personal, un proceso muy necesario de implementar en los distintos ámbitos educativos actuales. Teniendo presente que la educación ha experimentado un cambio negativo porque se ha perdido la importancia del aprendizaje reemplazándolo por hojas, textos, exámenes, etc., siendo un sistema rígido que ocasiona problemas en los niños, la neurociencia aplicada al ámbito educativo puede generar resultados altamente positivos. Actualmente, el estudio de las conductas a partir de la comprensión del funcionamiento cerebral por medio de técnicas de neuroimagen, que exploran la actividad cerebral en tiempo real y en vivo (las más populares son Tomografía por Emisión de Positrones -PET en inglés- y la Resonancia Magnética Funcional -fMRI en inglés-), han permitido encontrar algunas respuestas, y sin duda están colaborando con una mejor implementación en el campo educativo. Situaciones presentes en el acto cotidiano escolar encuentran su origen en la actividad cerebro-mental humana. Por ello el conocimiento que el docente tenga sobre sus características, potencialidades y sobre las implicaciones en el aprendizaje le permitirán ampliar las fuentes para la toma de decisiones en los procesos pedagógicos. El cerebro humano es un sistema estructural y funcional diseñado para recibir información, integrarla de modo flexible y creativo y elaborar conductas destinadas a la adaptación. Para ello, está configurado en forma de módulos funcionales altamente dinámicos, constituidos por células interconectadas que realizan una sofisticada mensajería química y física dentro del cerebro y con el resto del organismo. Aprender es un proceso innato del ser humano, siempre estamos en constante aprendizaje. Este proceso adquiere mayor relevancia cuando se traduce en el plano educativo. La capacidad de educabilidad que nos caracteriza como seres humanos reside en la capacidad compleja del cerebro que tenemos. Sin embargo durante el proceso de aprendizaje los individuos enfrentan algunas dificultades. ¿Por qué considerar el estudio de las funciones cerebrales en los procesos educativos? La respuesta parece obvia, si se considera que la labor pedagógica es inminentemente humana y esto significa que se debe considerar su integralidad, pero aún así, podemos esbozar como argumento que en un acto educativo, existen diversos procesos comunicativos, y además, que toda percepción implica una elaboración, una interpretación, una representación, una construcción del individuo. 125 Esto nos indica que la actividad mental y la cultural interactúan. Florez (1995) indica que no se puede separar ninguna de estas dimensiones (la mental y neuronal), ni reducir una en detrimento de la otra; se trata de una unidad dual (cerebro- mente) en constante interacción. Asimismo, el aprendizaje cambia la estructura física del cerebro, es decir, que se fortalece con el ejercicio mental. Aún más, estudiar organiza y reorganiza la mente, por tanto, el ejercicio mental cambia nuestro modo de percibir y comprender la realidad. Aún hay un largo el camino por recorrer para poder llegar a las transformaciones “de fondo”, que los paradigmas educativos vigentes necesitan realizar para ser “verdaderamente útiles” a los niños y jóvenes; importante es replantearse cuáles son las herramientas, metodología y valores que les posibilitarán adquirir las necesarias competencias para adaptarse ante los desafíos que este siglo XXI les seguirá exigiendo cuando se hayan convertido en ciudadanos adultos (del futuro). Dotarlos de herramientas integrales, óptimas y efectivas es nuestra responsabilidad y debiera ser un compromiso compartido por tod@s. Neurociencia y Educación Para Judy Willis, neurocientúífica e investigadora de la relación neurociencia-educación hay dos puntos focales relevantes para un óóptimo aprendizaje: –En primera instancia, el estado de ánimo del “alumno” ó la predisposición que éste tenga hacia la captación de una información novedosa. Si el alumno está ,destilen calidad contento, la información recepcionada será aprendida con mayor facilidad .en situaciáón contraria de nada valdrán las explicaciones del profesor –En segundo lugar está la metodología empleada muy importante en la enseññanza porque depende en gran parte de la manera cóñmo el estudiante se predisponga para aprender. Asimismo, se sabe que son las emociones las que conducen la memoria, esto significa que si las emociones son placenteras, el rechazo a información novedosa será menor, y por ende, el aprendizaje más efectivo. Para la neurociencia al cerebro se le agiliza el aprendizaje cuando se incorpora mediante esquemas, mapas, gráficos y cualquier otra herramienta que permita la formalidad y el orden. La información mostrada de forma organizada y estructurada incorpora una actitud positiva para captar la atención del alumno. Dicha información se maximiza cuando ésta se relaciona con aprendizajes previos, es decir, vivencias personales que los alumnos tienen y que permiten entender mejor lo aprendido. Aprendizaje Relacional La neurociencia continúa desenredando los mecanismos del cerebro y actualmente se ha podido concluir que la educación memorística ha sido correcta, pese a haber sido satanizada por mucho tiempo. Según el neurocientífico Ignacio Morgado, el memorismo resulta la mejor forma de aprender muchos conceptos que se determinan por hábitos o formas de hacer las cosas. Una suma siempre será la misma, por eso se repite hasta memorizarla. Sin embargo, existen otras formas de aprendizaje, como el relacional, que consiste en aprender hechos, episodios y circunstancias en la vida que, más que repetir, requiere 126 relacionar cosas. Cuanto más cosas comparamos, cuanto más relacionamos, más y mejor aprendemos. Memorizar no está mal, porque es como trabaja el cerebro, pero el aprendizaje actual no se sirve de una única fuente, hoy en día los alumnos tienen la posibilidad de contrastar la información nueva con otras fuentes que le permitan ampliar el conocimiento y corroborarlo. Por eso el aprendizaje necesita de una estrategia cognitiva que lo guíe. El repetir la información hasta memorizarla sirve como guía de aprendizaje, pero si lo que se quiere es aprender hechos y conocimientos, episodios que han ocurrido, el memorismo no será insuficiente. Entonces es más efectivo aprender por contraste, utilizando las diversas fuentes de información. El proceso de Aprendizaje El aprender es un proceso por el cual se adquiere una determinada información y se almacena para poder usarla cuando haga falta. El aprendizaje se produce comoconsecuencia de una serie de procesos químicos y eléctricos. Luego de ser captados por medio de los sentidos todos los estímulos que recibe un individuo se dirigen al cerebro, pero parte de éstos no llegan a él.¿Por qué ocurre esto? Según la investigadora Judy Willis el cerebro tiene ciertos “guardianes”, que funcionan como obstáculos previos e impiden alcanzar el aprendizaje total y completo, es decir, existen una serie de filtros que protegen al cerebro de la ¨sobrecarga¨ de información a la que está expuesto diariamente, permitiendo el ingreso, laasimilación, sólo de la información que al cerebro le interesa. Estos filtros favorecen la discriminación y la atención del cerebro a lo que realmente “le importa” absorber como aprendizaje. Los filtros están presentes en el sistema de aprendizaje RAD: el sistema reticular de activación (RAS), el filtro positivo de la Amígdalay la intervención de Dopamina. Cada uno de ellos se determina por las emociones, si son positivas, el acceso de la novedad al cerebro se realizará con mayor rapidez. El neurocientífico Ignacio Morgado, agrega a lo expuesto, que las emociones son de relevante importancia para el aprendizaje, porque determinan finalmente la decisión del ser humano al elegir entre varias opciones. El uso de la razón se mantiene limitado al análisis de las probabilidades, pero es en la decisión final que las emociones determinan la elección según las sensaciones que nos producen. Asimismo, si el cerebro detecta estrés puede combatir y bloquear la información.Se ha demostrado que el nivel elevado de estrés provoca que los Lóbulos Prefrontales (LPF – áreas más evolucionadas de nuestro cerebro) implicados en la funciones cognitivas y en las ejecutivas, se bloquen. Las neuronas se “deprimen”, se “achican” lo que deviene en un mal funcionamiento. En otras palabras, si el niño está en una clase en la que se ve expuesto a un impacto fuerte de estrés, sus Unidad Cerebro-Mente (UCM) no responderá al 100 %. Esto significa que, cuando mejor sea el ambiente para aprender, mejor será el aprendizaje. Por eso es importante la didáctica en el proceso educativo. Está claro que no sólo el memorismo resulta beneficioso, sino que también existen ciertas maneras según sea el caso de lo que se requiere aprender. Cada vez los niñños son más hábiles y más veloces en su pensamiento, por eso es necesario mejorar las herramientas para capturar su atención. 127 Conclusiones Neurocientíficamente hablando, aprender mediante la experiencia puede resultar lo mejor, mediante las sensaciones de un específico hecho, sobre un evento en especial. Así, cada vez que se repita la situación estaremos mejor preparados para afrontarla, porque dejará de ser nueva para nosotros y reaccionaremos más rápido y mejor. Integrar experiencias valiosas en las que participen adultos, puede estimular la producción de dopamina en los niños y adolescentes y, de esta manera, ayudarlos a encontrar placer en sus acciones. El maestro que conoce los principios neurobiológicos que rigen el funcionamiento cerebral, su maduración cognitiva y emocional, tiene en sus manos un recurso espléndido para diseñar su praxis docente, identificando ritmos y modalidades madurativas en sus ¨alumnos¨ y eligiendo recursos de enseñanza sobre bases científicas que le garantizan óptimos resultados. Conocer el sustrato neurobiológico de las dificultades de aprendizaje, las bases del desarrollo cognitivo-afectivo y la influencia que ejerce el contexto en su enriquecimiento y potenciación, provee al docente de herramientas para ¨detectar¨ los talentos de cada alumno y la oportunidad de potenciarlos demanera armónica. Fuente: • www.neurocapitalhumano.com.ar Francia/ Del BDS a la CGT: crónica de una criminalización a través de una política del miedo Saïd Bouamama https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214373 Investig'Action Traducido del francés por Beatriz Morales Bastos La campaña política y mediática de criminalización de la CGT [siglas en francés de Confederación General del Trabajo] y el intento de prohibir una manifestación sindical son unas características importantes de este periodo. El principal sindicato obrero de Francia ha sido acusado explícitamente por un prefecto e implícitamente por un ministro de complicidad cuanto menos pasiva con los llamados «incontrolados». La lógica que hay detrás de ello no es nueva. Tanto en el pasado como en el presente se utilizó ampliamente contra los militantes y organizaciones que apoyan la lucha del pueblo palestino o contra los militantes y organizaciones surgidos de la inmigración. En ambos casos se trata de producir política y mediáticamente un «enemigo público» que autoriza unas medidas de excepción duraderas con el pretexto de proteger a la sociedad y sus «valores republicanos». Del enemigo civilizacional… 128 Los sistemas de dominación necesitan de forma consustancial suscitar miedo y escenificar un peligro. Al no poder presentarse como lo que son están obligados a legitimarse por medio de esta amenaza construida y de la que afirman preservarnos. Como tienen que ocultar su violencia estructural y sistémica, necesitan la figura de la amenaza para justificar la represión contra la resistencia a esta primera violencia. Cuanto más en dificultades está la legitimidad de un poder de Estado más se necesita producir uno o varios enemigos públicos. En este sentido la multiplicación de los discursos de designación de enemigos es revelador de una crisis de legitimidad. A escala internacional la ausencia de legitimidad de las nuevas guerras coloniales por el petróleo, el gas y los minerales estratégicos es lo que ha llevado a producir un «enemigo civilizacional» con la figura del «musulmán». De El choque de las civilizaciones de Samuel Huntington al «eje del mal» de Georges Bush este proceso de producción de un enemigo civilizacional ha pasado del ámbito teórico al ámbito de la propaganda. Samuel Huntington teoriza desde las primeras líneas del prefacio de El choque de las civilizaciones: «Los conflictos entre grupos surgidos de diferentes civilizaciones están a punto de convertirse en el elemento básico de la política global». (1) Georges Bush traduce esta tesis al lenguaje de la propaganda: «Estados como esos [Irán e Iraq] y sus aliados terroristas constituyen en eje del mal, que se arma para amenazar al mundo». (2) El filósofo Marc Crépon puso en evidencia el objetivo principal de la demostración «científica» de Huntington: «Saber de qué debemos tener miedo». (3) Una vez designado el enemigo se puede desplegar la cadena de relevos cuyo objetivo es transformar esta tesis en «aroma ideológico inmediato», por retomar la expresión de Antonio Gramsci. Por supuesto, los medios de comunicación son el relevo de difusión. Veamos algunos ejemplos: 1) Le Nouvel Observateur titula uno de sus números fuera de serie «La guerra de los Dioses» (4), con tres subtítulos «¿Es inevitable el conflicto de valores? ¿Son universales los derechos humanos? El choque de las ocho civilizaciones principales». Incluso el nombre de civilizaciones se toma de Huntington. 2) El semanario Le Point le hace eco con un número titulado «Los cristianos frente al Islam, investigación sobre un choque mundial». (5) La repetición de la palabra «choque» y el adjetivo calificativo «mundial» tienen relación directa con al teoría de Huntington. 129 3) Por su parte, el semanario Valeurs actuelles saca unas conclusiones belicosas: «Francia en guerra, contra la barbarie en nombre del Islam, contra la barbarie antisemita, contra la ceguera de las elites». (6) La referencia al «eje del mal» de Bush es evidente. Así, están presentes las tres etapas de la teoría del choque de las civilizaciones: el anuncio del peligro, la designación del enemigo y la llamada a la acción viril y guerrera. Por supuesto, la designación del enemigo se puede modular en función de las preocupaciones tácticas. Si globalmente el Islam es el enemigo, los «países moderados» aportan unos matices. La distinción binaria entre «moderados» y «radicales» abarca enteramente los intereses económicos y geoestratégicos estadounidenses. Así, Arabia Saudí y las monarquías se consideran moderadas, mientras que se sitúa a Siria e Irán en el eje del mal. La prensa europea en general y la francesa en particular han tomado el relevo de la teoría del choque de las civilizaciones y de la producción del enemigo que la acompaña. Al reproducir los esquemas, las lógicas, los leitmotiv de los grandes medios de comunicación estadounidenses ha contribuido a producir un «choque de las representaciones»: Después de los atentados del 11 de septiembre de 2001 las cadenas estadounidenses, a través de sus redes dominantes de cobertura y de difusión, se impusieron como referentes de los demás grandes medios occidentales según el esquema inapropiado, inadaptado y fabricado ideológicamente del «choque de las civilizaciones»: el mal absoluto venía de Oriente Próximo y Medio, y, por consiguiente, había que protegerse volviendo a los etnotipos del orientalismo más manido. Transpuesto al plano de la fabricación de imágenes, este imperativo ideológico ha contribuido en gran medida a la fabricación de un «choque de las representaciones». (7) 1. …al enemigo sindical Aunque se designa a los Estados, el enemigo civilizacional no se limita a ellos y así se incluye en el «eje del mal» a organizaciones políticas como Hizbola y Hamas. Más ampliamente todavía, todas aquellas personas que se oponen a las políticas exteriores occidentales son sospechosas de complicidad, activa o pasiva, objetiva o subjetiva, consciente o no, etc., con los «terroristas», los «islamistas», etc. La geometría variable del eje del mal permite así adaptarlo a todas las prioridades tácticas. Veamos algunos ejemplos recientes. En una tribuna publicada en su cuenta de Facebook el delegado interministerial de la lucha contra el racismo y el 130 antisemitismo (DILCRA) Gilles Clavreul acusa a mi organización (Front Uni des Immigrations et des Quartiers Populaires- FUIQP [Frente Unido de las Inmigraciones y de los Barrios Populares]) y también al Parti des Indigènes de la République (PIR) [Partido de los Indígenas de la República] y al Collectif Contre l’Islamophobie en France (CCIF) [Colectivo contra la Islamofobia en Francia] de ser «antidemocráticos, racistas y antisemitas»: «con el pretexto de un antirracismo pervertido, el objetivo de esta ofensiva es únicamente legitimar el islamismo, defender a unos predicadores fundamentalistas y hacer caer a la juventud de los barrios en una radicalidad sin salida». (8) Criticar la política del gobierno para con los gitanos, la política de intervención militar en África y Oriente Medio, la islamofobia, etc., basta para convertirle a uno en un «antidemocrático, racista y antisemita». Otro ejemplo que es un objetivo similar: los militantes de la campaña Boicot, Desinversión y Sanciones [a Israel] (BDS). Esta vez es [el primer ministro francés] Manuel Valls quien se lanza a la palestra: «Tomaremos todas las medidas necesarias para condenar estas campañas », anuncia a la Asamblea Nacional el 6 de diciembre 2015. Respondía en apoyo a la intervención del diputado sionista del partido Unión de Demócratas e Independientes Meyer Habib que acusa al BDS de crear un clima de odio en Francia. «¿Hemos olvidado que el objetivo de Coulibaly [en los atentados de París] en enero fue un Hyper Cacher [supermercado kosher] ? Se estigmatiza antes de matar». (9) Unos militantes que se oponen a las prácticas coloniales de un Estado se convierten así en cómplices directos del terrorismo. El 27 de abril de 2016 le toca a la ministra de Educación Najat VallaudBelkacem declarar a la Asamblea Nacional en una crítica de la iniciativa de una «campamento de verano decolonial»reservado a las «personas que sufren a título personal el racismo del Estado en el contexto francés» que «estas iniciativas […] refuerzan una visión racizada y racista de la sociedad». (10) La voluntad de reunir a personas que viven la misma injusticia se convierte en boca de la ministra en una visión racista del mundo. De la misma manera los movimientos feministas que organizan reuniones no mixtas pronto serán calificados de «sexistas». Desde la llegada de este gobierno a la dirección del país son incontables las declaraciones de ministros o delegados ministeriales que anuncian el peligro «comunitarista» y designan a un enemigo al que hay que reprimir urgentemente. El relevo mediático garantiza la difusión masiva de cada una de estas declaraciones, lo que permite acreditar la veracidad del peligro. Una vez que se ha preparado a la opinión pública, ya solo queda un pretexto para 131 desencadenar un cuestionamiento del derecho de manifestación. Le toca entonces a un prefecto o al ministro del Interior entrar en escena invocando el riesgo de violencia. Así, la manifestación prevista en París el 19 de julio de 2014 en apoyo del pueblo palestino se prohibió «ante el grave riesgo de problemas de orden público que provocaría su celebración en un contexto de aumento de la tensión». (11) Es necesario recordar estas declaraciones y hechos para calibrar el escenario desplegado con el fin de tratar de prohibir una manifestación sindical el pasado 23 de junio alegando que las manifestaciones anteriores«dieron lugar a importantes desbordamientos y graves violencias». (12) Por consiguiente, el pretexto desencadenante es similar. Se presenta después del mismo escenario en tres fases: anuncio de un peligro, designación de un objetivo enemigo y relevo mediático. La utilización del miedo como herramienta política no es una práctica nueva. Ya a principios del pasado siglo el periodista estadounidenses Henry Louis Mencken declaraba que «el objetivo de la política es mantener a la población inquieta y, por consiguiente, que pida seguridad amenazándola con una serie ininterrumpida de monstruos». (13) Desde la «amenaza judía» y el «peligro rojo» de los nazis al «peligro amarillo» de quienes justificaban las intervenciones imperialistas en China a principios del siglo XX, pasando por las «armas de destrucción masiva» de Sadam Husein y por el peligro de una «invasión migratoria», la política del miedo es una realidad innegable. En el entorno de las manifestaciones contra la Ley [de reforma laboral] El Khomri no ha faltado la comunicación gubernamental generadora de ansiedad. El peligro aquí es de naturaleza económica. Abandonar la ley llevaría a cuestionar la recuperación de la economía francesa ideada por Hollande y que repiten en todos los medios de comunicación. Curiosamente, este peligro es exactamente el mismo que el que el FMI pone de relieve en boca de su presidenta Christine Lagarde, la cual anima a Francia a ir más lejos con las reformas. L a evaluación del FMI para el año 2015 indica que «la economía francesa se está recuperando, pero siguen siendo necesarios unos esfuerzos importantes para reforzar la creación de empleo y situar las finanzas públicas en una vía más sostenible». Los esfuerzos suplementarios necesarios se citan explícitamente: «reformar las normas del subsidio del paro», «alargar el periodo mínimo de cotización que actualmente es de cuatro meses», «reforzar el apoyo a la búsqueda de empleo», «facilitar la regulación para las 132 empresas recién creadas y los autoempresarios», «reducir el déficit presupuestario para garantizar que la deuda, que sigue en alza, pasar a una trayectoria firme a la baja». (14) Con semejantes objetivos el derecho al trabajo se convierte en un obstáculo que hay que eliminar totalmente para abrir camino a unos acuerdos empresa por empresa. Mantener una regulación, aunque sea mínima, sería un peligro para una economía frágil. Quienes niegan esta evidencia ultraliberal son unos inconscientes, unos irresponsables o unos egoístas que defienden sus propios intereses. Así [el presidente de la patronal francesa, MEDEF] Pierre Gattaz considera que «el emblema CGT es igual a paro». (15) 2. La designación del enemigo cegetista El libro La construction de l’ennemi [La construcción del enemigo] precisa en su descripción de la fabricación de un enemigo en tiempos de guerra: «La figura del enemigo prepara, acompaña y apoya el esfuerzo de guerra. Unas retóricas y unas escenografías la construyen. Unos saberes con pretensiones científicas o religiosas la legitiman. Unos medios de comunicación la transmiten».(16) Hay que constatar que la misma lógica se puede apreciar en los discursos políticos y mediáticos referentes a la CGT en el actual movimiento social. Es cierto que para este gobierno estamos en guerra desde el 11 de enero. Así, el 30 de mayo el presidente del MEDEF pide en el diario Le Monde que no se ceda «al chantaje, a las violencias, a la intimidación, al terror» y que se resista a unas «minorías que se comportan un poco como gamberros, como terroristas». (17) El 15 de junio el primer ministro denuncia la actitud «ambigua» de servicio de orden de la CGT respecto a unos «incontrolados que sin duda quieren matar». (18) El 19 de junio le toca al ministro del Interior Bernard Cazeneuve acusar: «El martes 14 de junio unos militantes de la CGT atraparon violentamente a parte de las fuerzas del orden en el punto de dispersión que, sin embargo, se había acordado con los organizadores». (19) El 21 de junio es el sindicato de policía Alliance quien exige «el aplazamiento de esta manifestación y de todas las concentraciones estáticas porque nuestros colegas están en todos los frentes y están agotados, extenuados y cansados. Viven tanto peor estas manifestaciones cuanto que son repetitivas y muy violentas». (20) 133 La designación del enemigo CGT ha ido precedida de una cobertura mediática casi consensuada cuyo objetivo era apoyar la ley de reforma laboral como necesaria e inevitable para luchar contra el paro. Se repitió una y otra vez el argumento clave recurrente en cualquier medio: el paro se debe en gran parte a la «rigidez» y a la «carga» del código laboral. Desde el 9 de septiembre de 2015 Arnaud Leparmentier pide en Le Monde «aprobar [la ley] por la fuerza». Describe su «esperanza» de la siguiente manera: «Como ocurre a menudo, esperamos. Con el informe Combrexelle, la Francia socialista lucha contra el Código Laboral. ¡Por fin un movimiento para luchar contra esta preferencia nacional que es el paro! […] Francia lucha contra él, queremos esperar, como han hecho todas las socialdemocracias sosegadas de la vieja Europa, aprobándolo por la fuerza, valientemente». (21) El argumento del MEDEF se retoma sin crítica alguna. En efecto, su presidente, Pierre Gattaz, considera que «las expectativas suscitadas por la Ley El Khomri son grandes, a medida de los bloqueos que viven los empresarios y de la crisis del mercado de empleo». (22) El segundo acto de la obra mediática consiste en explicar las oposiciones a la ley. Por supuesto, estas no se abordan como una defensa de los intereses de los asalariados. Son obra de un corporativismo sindical, obra de una incomprensión y, por último, obra de una minoría que ni siquiera estaría concernida, como los «jóvenes» y los «funcionarios». El tercer acto consiste en centrar la cobertura en las catastróficas consecuencias para los usuarios, es decir, la opción de abordar los sujetos desde el ángulo de las consecuencias del movimiento eludiendo casi completamente el de las causas. En este aspecto el lenguaje de los periodistas hace gala de una gran diversidad: desmadre, pesadilla, caos, etc. Siempre desde el ángulo de las consecuencias, el foco se centra en los «incontrolados» y las «violencias», lo que permite silenciar la magnitud de las movilizaciones. Solo queda sacar las conclusiones en un último acto con la imagen de Nathalie Saint-Cricq en el telediario de las 20:00 h de France 2 acusando doctamente a la CGT de «apostar por la implosión social y asumir finalmente la responsabilidad de que haya un accidente, un herido o un muerto». (23) Demos la última palabra al semanario Le Point que el 26 de mayo lanza una encuesta por internet con una pregunta significativa: «¿Es la CGT un sindicato anticuado y peligroso para Francia?».(24) Por supuesto, la respuesta es acorde: 47.473 sí frente a 4.851 no. 134 Tanto para la casi totalidad de la prensa como para el gobierno hay un peligro indudable, un enemigo designado y la necesidad de una respuesta firme y viril. La necesidad de enemigos revela una crisis de autoridad que da pie una tentación totalitaria que no hay que subestimar. Según el balance del ministerio del Interior, desde que se inició el movimiento de protesta se ha detenido a 1.300 manifestantes, 819 de los cuales permanecen en detención preventiva y «51 han sido condenadas tras una comparecencia inmediata, a menudo a fuertes penas». (25) Estas cifras están a la altura de la deslegitimación de la política económica llevada a cabo por el gobierno, animado por el MEDEF, la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional. Anteriormente y de forma paralela se construyeron otros «enemigos», en particular contra los movimientos de apoyo al pueblo palestino y contra las asociaciones que denuncian la violencia policial. Si no se entienden los vínculos que unen las diferentes categorías criminalizadas, se debilita la capacidad de resistencia común. No nos engañemos, la noción de enemigo es extensiva. Notas: (1) Samuel Huntington, Le Choc des civilisations, Odile Jacob, París, 1997, p. 9. [Traducción al castellano, El choque de civilizaciones y la reconfiguración del orden mundial, Barcelona, Paidós Ibérica, 1997; traducción de José Pedro Tosaus Abadía]. (2) Georges Bush, discurso del 29 de enero de 2002, https://georgewbushwhitehouse.archives.gov/news/releases/2002/01/20020129-11.html , consultado el 1 de julio a las 14:00 h y traducido [al francés] por el autor. (3) Marc Crépon, L’imposture du Choc des civilisations, Pleins feux, París, 2002, p. 66. (4) Le Nouvel Observateur, La guerre des Dieux, fuera de serie, n° 46, enero de 2002. (5) Le point, Les chrétiens face à l’Islam. Enquête sur un choc mondial, n° 2217, 5 de marzo de 2015. (6) Valeurs actuelles, n° 4077, del 15 al 21 de enero de 2015. (7) Richard Labévière, Choc des civilisations, choc des représentations et ruses de la raison médiatique, Hermès la Revue, n° 55, 2009/3, p. 172. 135 (8) Fouad Bahri, Gilles Clavreul tacle les associations antiracistes décoloniales, https://www.zamanfrance.fr/article/gilles-clavreul-tacleassociations-antiracistes-decoloniales-19890.html,consultado el 1 de julio a las 16:00 h. (9) Manuel Valls, repuesta a las preguntas al gobierno en la Asamblea Nacional, 16 de diciembre de 2015, http://www.lcp.fr/la-politique-envideo/mouvement-bds-manuel-valls-condamne-toutes-les-campagnes-deboycott-legard-des, consultado el 1 de julio a las 17:30 h. (10) Najat Valaud Belkacem, repuesta a las preguntas al gobierno en la Asamblea Nacional, 27 de abril de 2016, http://www.lcp.fr/la-politique-envideo/camp-dete-decolonial-vallaud-belkacem-condamne-absolument-desinitiatives, consultado el 1 de julio a las 19:00 h. (11) Un tribunal prohíbe en París la manifestación de apoyo a Gaza, Le Monde, 18 de julio de 2014, http://www.lemonde.fr/politique/article/2014/07/18/cazeneuve-prone-linterdiction-de-la-manifestation-propalestinienne-a-parissamedi_4459324_823448.html, consultado el 1 de julio a las 08:00 h. (12) Catherine Gasté, Loi Travail: la préfecture interdit la manifestation… durant quelques heures, http://www.leparisien.fr/economie/loi-travail-laprefecture-interdit-la-manifestation-de-jeudi-22-06-2016-5904335.php, consultado el 1 de julio a las 10:00 h. (13) Henry Louis Mencken, Mencken Chresthomathy: His own Selection of his Choicest Writing, Vintage, New-York, 1982, p. 29. (traducción al francés del autor). (14) Christine Lagarde, Pour le FMI, la loi El Khomri n’est pas suffisante, Valeurs actuelles, 26 de mayo de 2016, http://www.valeursactuelles.com/economie/pour-le-fmi-la-loi-elkhomri-nest-pas-suffisante-62032, consultado el 2 de julio a las 11:15 h. (15) Pierre Gattaz, Le sigle CGT égale à chômage, Entrevista en Le Monde, 30 de mayo de 2016, http://www.lemonde.fr/economiefrancaise/article/2016/05/30/la-charge-de-pierre-gattaz-contre-la-cgt-ils-secomportent-comme-des-voyous_4928844_1656968.html, consultado el 2 de julio a las 13:00 h. (16) Reinhard Johler, Freddy Raphaël y Patrick Schmoll (dir), La construction de l'ennemi, Néothèque, Estrasburgo, 2009, contraportada. 136 (17) Pierre Gattaz, Le sigle CGT égale à chômage, Entrevista en Le Monde, 30 de mayo de 2016, op. cit. (18) Manuel Valls, La CGT «ambigüe», les casseurs veulent «tuer des policiers», http://www.valeursactuelles.com/societe/valls-la-cgt-ambigue-lescasseurs-veulent-tuer-des-policiers-62677, consultado el 2 de julio a las 15:00 h. (19) Bernard Cazeneuve, comunicado de prensa, 19 de junio de 2016, http://www.leparisien.fr/economie/cazeneuve-des-militants-cgt-ontpris-violemment-a-partie-la-police-19-06-2016-5897699.php, consultado el 2 de julio a las 15:30 h. (20) Entrevista a Frédéric Lagache en Le Monde, 21 de junio de 2016, http://www.lemonde.fr/police-justice/article/2016/06/21/loi-travail-lesyndicat-alliance-demande-un-report-de-la-manifestation-dejeudi_4954711_1653578.html, consultado el 2 de julio a las 15:00 h. (21) Arnaud Leparmentier, «Chiffons rouges» sociaux, Le Monde, 9 de septiembre de 2015, http://www.lemonde.fr/idees/article/2015/09/09/chiffonsrouges-sociaux_4749623_3232.html, consultado el 2 de julio a las 17:45 h. (22) Pierre Gattaz, http://www.medef-gironde.fr/soyons-ambitieux-sur-la-loiel-khomri-pour-enfin-faire-baisser-le-chomage.html, consultado el 2 de julio a las 18:15 h. (23) Nathalie Saint-Cricq, telediario de las 20:00 h de France 2, 23 de mayo de 2016, http://television.telerama.fr/television/pour-france-2-laradicalisation-de-la-cgt-est-vouee-a-l-echec,143019.php, consultado el 2 de julio a las 19:00 h. (24) Encuesta por internet del semanario Le Point, http://www.lepoint.fr/sondages-oui-non/la-cgt-est-elle-un-syndicatdepasse-et-dangereux-pour-la-france-26-05-2016-2042145_1923.php, consultado el 1 de julio a las 19:45 h. (25) Declaraciones de Bernard Cazeneuve en Rennes, http://www.20minutes.fr/rennes/1845859-20160515-loi-travailcazeneuve-annonce-1300-interpellations-depuis-debut-manifestations, consultado el 2 de julio a las 20:30 h. Fuente: http://www.investigaction.net/de-bds-a-la-cgt-chronique-dunecriminalisation-par-une-politique-de-la-peur/ 137 EN PARAGUAY, EL STRONISMO ESTA VIGENTE EN TODOS LOS ESTAMENTOS Curuguaty fue la excusa para el golpe contra Lugo en 2012 http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-303928-2016-07-11.html La herencia de Stroessner es “la matriz enquistada en la sociedad paraguaya”, dice Delia Ramírez, miembro del movimiento 138, comunicóloga y una de las dirigentes de la campaña por la absolución de los campesinos de Curuguaty. Por Adrián Pérez En la mañana del 15 de junio de 2012, una lluvia de balas cayó sobre un grupo de paraguayos en un predio ubicado en Campos Morombi, en el departamento de Canindeyú. Once campesinos que reclamaban una porción de tierra para vivir fueron asesinados. Seis policías que habían sido trasladados para desalojar a los ocupantes también perdieron la vida. El juicio por la masacre de Curuguaty, que desembocó en un golpe parlamentario contra el presidente Fernando Lugo, llega a su tramo final. Para hoy está previsto que se dé a conocer la sentencia contra los únicos acusados: doce trabajadores rurales. Los fiscales Liliana Alcaraz, Nelson Ruiz y Leonardi Guerrero pidieron penas de entre cinco y cuarenta años de prisión. Por pedido de la empresa Campos Morombí, el juez penal de garantías de la ciudad de Curuguaty, José Benítez, ordenó el 14 de junio de 2012 que se allanara un predio de dos mil hectáreas, conocido como Marina Kue. La empresa, sin embargo, nunca pudo demostrar titularidad sobre esas tierras, que habían sido propiedad de la Industrial Paraguaya Sociedad Anónima, una empresa latifundista de principios de siglo pasado que donó a mediados de los 60 a la dictadura de Alfredo Stroessner. El dictador puso el predio a nombre de la marina paraguaya porque tenía un proyecto propio de reforma agraria. Campesinos organizados comenzaron en 2004 a hacer gestiones para acceder al predio. En 2005, el presidente Nicanor Duarte Frutos firmó un decreto para que las dos mil hectáreas fueran utilizadas para la reforma agraria. Delia Ramírez, magister en Ciencias Sociales de la Universidad de General Sarmiento e integrante del movimiento 138, colectivo de resistencia cultural Paraguay-Argentina, habla de la masacre de Curuguaty. La organización tomó el nombre del artículo de la Constitución guaraní que autoriza a los paraguayos “a resistir a los usurpadores” del poder público, “por todos los medios a su alcance”. “Cuando ocurrió el juicio a (Fernando) Lugo, nosotros estábamos absolutamente desorganizados, algunos ni nos conocíamos. Y ahora tenemos una organización que está convocando a ver la sentencia del lunes en FM La Tribu”, afirma Ramírez, hija de migrantes paraguayos que llegaron en los 70 a Buenos Aires para radicarse finalmente en Misiones. Señala que el motor que la empujó a encontrarse con sus compañeros en el espacio público para empezar a organizarse fue el golpe parlamentario del 22 de junio de 2012 contra el 138 presidente Lugo. El movimiento giró, en un principio, en torno de una organización antigolpista parecida a algunas de las organizaciones que surgieron en Brasil a partir del impeachment impulsado contra la presidenta Dilma Rousseff. Con estrategias creativas y desde la migración, la comunicóloga y sus compañeros buscaron mostrar que estaban observando, participando y que eran sensibles a la problemática de los campesinos de Curuguaty. Si bien para los denunciantes el proceso de Curuguaty nunca fue considerado legal y legítimo, en el último tramo del debate comenzó a entenderse –desde la estrategia de la defensa– que no era posible anular el juicio: entonces se pidió la absolución de los doce acusados. Con ese objetivo, y para visibilizar el caso, se lanzó “¡Es tiempo de libertad! Curuguaty #AbsoluciónYa”, campaña emprendida este año, en el cuarto aniversario de la masacre. Comenzaron a circular imágenes por las redes, se realizaron spot radiales y una producción audiovisual de la que participaron, por la representación argentina, el premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel; Nora Cortiñas, Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora; el juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos Raúl Zaffaroni; el periodista Atilio Borón; y el músico Juan Falú. Por Paraguay fueron convocados los periodistas Leo Rubín y Mercedes “Menchi” Barriocanal, una mujer muy conocida en el país vecino. Su apoyo a la campaña resultó fundamental. “Si bien es una persona que tiene mucha sensibilidad, nunca se había comprometido con algo tan fuerte. Hay mucha gente que tiene miedo de pegarse con esta causa en Paraguay”, sostiene Ramírez. –¿A qué se debe ese temor? –pregunta Página/12. –A la cultura stronista que está muy vigente; la cultura del perseguir al que es diferente, del anticomunismo acérrimo; de ponerle la etiqueta de terrorista a todo aquel que no es funcional al juego de la derecha o de un gobierno. Esa lógica que después del golpe se evidenció con toda furia, con toda expresión. Por eso decimos que somos un movimiento de resistencia cultural, porque sostenemos que no va a servir de nada que suba el mejor presidente del mundo si la sociedad sigue pronunciándose y tratando a los otros de esta manera. –¿Qué elementos ayudaron a moldear esa continuidad en la cultura paraguaya? –Después de la caída de (Alfredo) Stroessner, con los gobiernos colorados hubo una impunidad: no hubo juicio y castigo; no hubo un proceso de reparación, de verdad y justicia; de revisión; de construcción de la memoria y de las memorias populares. Por eso decimos que para nosotros, en Paraguay, la democracia comienza en 2008. –¿Qué cambia a partir de ese momento? 139 –Recién ahí es posible revisar cuestiones que tienen que ver, más que nada, con la institucionalidad, con la posibilidad de conquista de derechos de determinados sectores sociales que toda la vida estuvieron vedados. No voy a decir que se rompió ese sistema de privilegios que continuó después de la caída de la dictadura, pero estaba siendo observado, cuestionado. En realidad, el Partido Colorado, en el momento que pierde, es por una crisis de legitimidad y una crisis al interior del partido. Conflictos que terminaron favoreciendo el ascenso de Fernando Lugo en 2008, y que no se pudo sostener. En el caso Curuguaty, como en el gobierno de Nicanor (Duarte Frutos) y de (Horacio) Cartes es fundamental entender que las clases dominantes están compuestas por una oligarquía ganadera-exportadora, y que son ellas las que deciden los destinos del país. En Paraguay ni siquiera se puede hacer un censo para saber quién tiene qué cosa. –Esa oligarquía anida en sectores que tuvieron un rol fundamental en la caída del presidente Lugo y que hicieron buenas migas con la dictadura stronista. –Hay una cantidad de títulos fraudulentos que tienen los mismos empresarios que se han favorecido por los regalos de Stroessner. Si sumamos los títulos de quienes dicen ser propietarios de la tierra, Paraguay tendría un 30 por ciento más de su superficie. Lo que ha ocurrido es lo que llamamos la acumulación escandalosa: no ha habido un proceso de reparación, ni de distribución ni de revisión de la condición de esas tierras. Los empresarios no quieren la regularización de esos títulos. En el momento en el que se quisieron tocar esos intereses, el resultado fue el golpe parlamentario. Algunas cifras sobre uso y acceso a la tierra. Ramírez afirma que si durante el gobierno de Fernando Lugo se daba un evento transgénico, con el gobierno de Horacio Cartes son más de diez. Según estadísticas de la Federación Nacional Campesina guaraní, 300 mil campesinos no cuentan con terrenos para cultivar en Paraguay. Menos del 3 por ciento de los paraguayos es dueño del 85 por ciento de la tierra. Curuguaty puso también otro tema en agenda: la conflictividad social derivada de la lucha por la tierra. Para la Coordinadora de Derechos Humanos de Paraguay (Codehupy), desde la caída de Stroessner hasta la actualidad, al menos 117 referentes campesinos fueron asesinados o desaparecidos. Ninguno de esos crímenes fue esclarecido por la Justicia. Jalil Rachid, funcionario que se desempeñó como fiscal de la causa Curuguaty desde sus inicios hasta que fue nombrado viceministro de Seguridad en el gobierno de Horacio Cartes, es hijo de Bader Rachid Lichi, abogado, empresario y ex senador colorado, amigo personal de Blas Riquelme, supuesto propietario que pidió el desalojo de las tierras, operativo policial que desembocó en las diecisiete muertes. En un texto difundido al conocerse el desembarco del ex fiscal en el gabinete de Cartes, el Frente Guasú, partido que llevara a Lugo a la presidencia, señaló: “Hoy este mismo personaje es nombrado como viceministro de Seguridad, y los 140 policías que tienen que dar su testimonio en la causa, como pruebas del Ministerio Público, serán subordinados directos del Señor Jalil Rachid, desde su nuevo cargo como autoridad de seguridad del Poder Ejecutivo”. Ramírez asegura que hay relaciones muy íntimas entre el actual gobierno y los responsables de investigar la masacre de Curuguaty. “Rachid estuvo cuatro años a cargo de la causa y luego Cartes lo lleva como funcionario. Es un signo claro de reconocimiento. ‘Gracias, cumpliste. Ahora te vas a otro lugar donde vas a estar más tranquilo’,” sostiene la militante del movimiento 138. Con la salida de Rachid del Ministerio Público, Liliana Alcaraz se hizo cargo de la Fiscalía y pidió penas de hasta 40 años para Rubén Villalba, dirigente territorial del Partido Comunista. Se lo acusó de usar su ideología para manipular a los campesinos; de arrearlos; de practicar el comunismo, algo que está en su mente, en su ADN. Para las mujeres pidió ocho años de prisión. Por estar con sus bebés en brazos, fueron acusadas de encubrimiento. “El simple hecho de ser mujer y de tener un hijo te convierte en una encubridora, una criminal. Es una lógica machista propia de una fiscala mujer. Eso también es stronismo”, dispara Ramírez. –¿Por qué? –La figura del gobierno de Stroessner es sumamente patriarcal, donde el gran hombre aseguraba todos los beneficios de la población. Además de ir a todas las recepciones de quinto año del país, Stroessner pedía listados de persecución a homosexuales. Eran operativos muy macabros. Son una serie de lógicas perversas, de persecución y de no consideración y reconocimiento al otro, que es diferente. Eso es el stronismo. Es la matriz que quedó enquistada en la sociedad paraguaya, que es profundamente homofóbica. Las mujeres de la Conamuri (Coordinadora Nacional de Organizaciones de Mujeres Trabajadoras Rurales e Indígenas), los estudiantes, los campesinos organizados, los movimientos homosexuales de gays, lesbianas y travestis, muchas organizaciones tratan de desarmar esa lógica que lo que produce es sufrimiento. –¿Cuáles son las expectativas de su organización respecto del desenlace del juicio? –Nosotros, como militantes, siempre vamos a ser optimistas. Siempre vamos a esperar, desear y soñar la libertad de nuestros compañeros y nuestras compañeras. Y aunque así no se produzca, vamos a seguir comprometidos hasta que el último esté en libertad. La realidad es que en el juicio a Fernando Lugo no se respetó ninguna de las garantías del derecho. ¿Qué pueden esperar los campesinos o cualquiera de nosotros si esa es la forma en la que se maneja la justicia paraguaya? Es la justicia del mbareté (“hombre fuerte”, en guaraní), del más fuerte, del que se impone por la fuerza, por la violencia. Es una valoración positiva, del sentido común, vinculada a los hombres. Pero a veces es una figura que estigmatiza, porque el que no tiene fuerza, no tiene lugar, no tiene espacio, ni derechos. A partir del martes, nuestro discurso 141 va a cambiar. Hace cuatro años que venimos con la misma causa. Estamos ante un escenario que nos llena de incertidumbre, pero a la vez nos entusiasma bastante. –Además de dar difusión al caso Curuguaty, ¿qué otros objetivos persigue el movimiento 138? –Nuestra lucha es contra el stronismo, que está dentro y fuera del Paraguay. Un obrero de la construcción que viene a Buenos Aires, trabaja, llega a su casa y golpea a su mujer, mantiene esa matriz autoritaria, de opresión, que aprendió en su casa. El objetivo de la organización es trabajar por la erradicación del stronismo en los diferentes niveles. El stronismo está vigente en el espacio judicial cuando un juez falla en un desalojo absolutamente irregular a favor de un sojero stronista. En el ámbito político, cuando el nieto de Stroessner se reivindica en el Parlamento como heredero de los ideales de su abuelo. A principio de su gobierno, Cartes lo proponía como representante de Paraguay en la ONU. En lo económico, desde Stroessner y hasta la fecha, lo único que se ha hecho fue concentrar. Stroessner regaló un montón de tierra a sus amigos y esa matriz de desigualdad, que tiene como elemento fundamental la tierra, fue profundizada. La violación de los derechos humanos del stronismo y poststronismo se entiende por los conflictos vinculados con la tierra. ¿Qué pensadores definirán nuestro futuro? http://nuso.org/articulo/que-pensadores-definiran-nuestro-futuro/ El antiguo orden no acaba de morir y no lo hará fácilmente. ¿Con qué pensadores debemos contar para mirar al futuro? Por J. Bradford DeLong Julio 2016 Hace varios años, se me ocurrió plantear que todos los politólogos contemporáneos están parados sobre los hombros de gigantes como Nicolás Maquiavelo, John Locke, Adam Smith, Alexis de Tocqueville, Max Weber y Émile Durkheim. Algo que todos ellos tienen en común es que su principal foco era la composición social, política y económica del mundo europeo occidental entre 1450 y 1900. Lo que equivale a decir que ofrecen un kit de herramientas intelectuales para analizar, digamos, el mundo occidental de 1840, pero no necesariamente el mundo occidental de 2016. ¿Qué se enseñará en los cursos de teoría social de 2070, por ejemplo? ¿Qué canon –ya escrito o por escribirse– desearán haber utilizado al inicio de sus carreras profesionales, a fines de la década de 2010, quienes las estén terminando en los años 2070? Después de darle vueltas a este interrogante en los últimos años, reduje mi elección a los escritos de tres personas: Tocqueville, que escribió en los años 1830 y 1840, John Maynard Keynes, que escribió en los años 1920 y 1930, y Karl Polanyi, que escribió en los años 1930 y 1940. Las preocupaciones centrales de Keynes para su época hoy suenan sinceras. Le preocupaba la fragilidad de nuestra prosperidad colectiva y las graves tensiones entre el nacionalismo y las actitudes cosmopolitas desarraigadas que apuntalan una sociedad global pacífica y floreciente. Se centraba en cómo organizar nuestras actividades y usar nuestra prosperidad para crear un mundo apto para la buena vida. Quería exponer la bancarrota de panaceas ideológicas en ascenso: el laissez-faire, el orden espontáneo, la cooperación colectiva, la planificación central. 142 Y pensaba profundamente en los problemas tecnocráticos de la gestión económica –y en los desastres sociales, morales y políticos que resultarían si no se intentaba resolverlos. Después de la Segunda Guerra Mundial, los problemas que preocupaban a Keynes pasaron a segundo plano, en tanto una prosperidad renovada en Occidente llevó a muchos a creer que se habían solucionado de manera permanente. Inclusive durante la estanflación (crecimiento lento y precios en aumento) en los años 1970, se decía que el problema era una extralimitación socialdemócrata, no algún defecto fundamental en la economía política de Occidente. Ese argumento allanó el camino para que la primera ministra británica Margaret Thatcher y el presidente norteamericano Ronald Reagan redujeran el papel económico del Estado y dieran rienda suelta a las fuerzas de mercado. La corrección de Thatcher-Reagan fue un éxito incuestionado entre las clases adineradas que prosperaron a partir de ahí. Creó un consenso ideológico que dominaría la esfera pública de 1980 a 2010. La prosperidad de posguerra también eclipsó los problemas centrales que Polanyi trataba de resolver en los años 1930 y 1940. Polanyi aceptaba que una sociedad de mercado podía en verdad generar mucha prosperidad material, pero le preocupaba que sólo pudiera hacerlo si convertía a las personas en marionetas y juguetes de fuerzas de mercado irracionales. También le preocupaba que la gente no se adaptara bien a este nuevo rol. El objetivo, para Polanyi, era alcanzar la prosperidad que genera una economía de mercado, sin sufrir los riesgos de pobreza, destrucción creativa y erosión comunitaria que conlleva la operación de las fuerzas de mercado. Polanyi esencialmente advertía que si el orden burgués moderno fracasaba en esta tarea, los movimientos políticos autoritarios y totalitarios resultarían beneficiados. Durante el período de posguerra, el argumento de tiempos de vacas gordas, según el cual la prosperidad impulsada por el mercado justifica cualquier sufrimiento social colateral, fue dado como un hecho. También llegó a definir la opinión consensuada entre la clase adinerada y sus partidarios ideológicos. Esto nos lleva a Tocqueville, que escribió hace casi dos siglos, pero cuyas preocupaciones centrales nunca desaparecieron. Tocqueville se centraba en las consecuencias de la destrucción de la casta como un principio de orden social y político. Todas las grandes castas – desde los nobles de la espada y los nobles de la toga, supuestamente fráncicos, hasta los comerciantes protoburgueses y los villanos galo-romanos– conferían a sus miembros pequeñas libertades y una dosis de autonomía personal a cambio de obligaciones para con el Estado. (Y, por supuesto, cuanto más baja la condición social, mayores las obligaciones). Tocqueville veía que este mundo ordenado de manera estricta estaba siendo reemplazado por la democracia y una igualdad social formal, en la que todos serían igualmente libres, pero también estarían a merced de la sociedad por igual. En este nuevo contexto, ningún privilegio o libertad servía de protección si uno no encontraba una contraparte en el mercado o se enfrentaba a la tiranía de la mayoría, o simplemente buscaba alguna suerte de dirección en su intento por decidir quién se suponía que era. En el mundo de Tocqueville, la destrucción de la casta era sólo parcial. El escribía para hombres blancos que conocían su nacionalidad, que sabían lo que significaba pertenecer a una casta y que conocían los privilegios de esa pertenencia. En nuestro tiempo, la destrucción de la casta y el privilegio de las castas están dando otro paso hacia adelante. El período del dominio político de los machos blancos en las democracias occidentales está llegando a su fin. Y lo hace en un momento en el que el populismo económico está sustituyendo a la gestión tecnocrática, y en el que muchas veces los machos blancos se vuelcan al nativismo en respuesta a la destrucción de sus empleos y estilos de vida a manos de las fuerzas impersonales de la globalización. Como podemos ver siglo tras siglo, el antiguo orden no se rendirá sin presentar pelea. Ningún antiguo orden lo hace. Pero el privilegio de casta de los machos blancos está predestinado al fracaso. El desafío al que nos enfrentamos ahora es cómo materializar mejor las nuevas 143 oportunidades a nuestro alcance para el mejoramiento humano, en beneficio de todos. No se me ocurren muchas guías más útiles para ese desafío que Keynes, Polanyi y Tocqueville. Debilidades de izquierda y ascensos neoconservadoresExplicaciones para el declive del progresismo http://nuso.org/articulo/debilidades-de-izquierda-y-ascensos-neoconservadores-nuevo/ La llegada al poder de los neoconservadores se explica, en buena medida, por problemas propios de los progresismos y las izquierdas. Por Esteban De Gori Julio 2016 El triunfo de Macri en las elecciones presidenciales argentinas del año 2015 produjo una onda expansiva sobre la región. Sin embargo, la política muestra que el de la irreversibilidad es solo un mito. El «sí se puede», coreado por los adherentes deCambiemos como por los propios candidatos, se convirtió en un impulso para erosionar las miradas continuistas y para desinstalar políticas públicas anteriores. Y, pese a su voluntad, Macri se transformó en un referente regional para espacios neoconservadores lanzados a confrontar con los gobiernos progresistas. «Más Macri, menos Maduro», indicaban algunas pancartas de manifestantes brasileños meses atrás. La propia Lilian Tintori –esposa del dirigente opositor venezolano Leopoldo López– participó en el festejo electoral de Macri. La regionalización de la victoria macrista permitió la resignificación de otros sucesos, como la derrota del chavismo en las elecciones legislativas, la de Evo Morales en su referéndum y el acceso de Temer a través de un impeachment contra Dilma Rousseff. Pero lo que parece una «bola de nieve» no responde ni a un camino necesario ni a un «viento de cola» del neoconservadurismo regional, sino a dilemas o contrariedades generales que han atravesado a todos los gobiernos y, principalmente, a aquellos que buscaron ampliar los horizontes de bienestar. Tampoco debemos restar importancia a la acción política de los espacios neoconservadores que han logrado interpretar más eficazmente las transformaciones sociales, económicas y subjetivas de los últimos años que los propios progresismos desde el poder. Recordando a Wright Mills, es dable afirmar que tuvieron una imaginación sociológica más potente al «calibrar» mejor al individuo en el conjunto de transformaciones que la posmodernidad y la globalización habían introducido. Aprovecharon el impacto fiscal sobre los gobiernos progresistas que trajo la reducción de los precios de los commodities y del petróleo, ciertas políticas públicas que erosionaron el apoyo ciudadano y, fundamentalmente, lo que denominaría una desestabilización del precario equilibrio entre el Estado y la globalización, así como entre el orden estatal y el individuo, que los mismos progresismos habían logrado antes de la crisis internacional. En definitiva, los neoconservadores parecen haber construido una lectura más aguda sobre las transformaciones operadas en la subjetividad tras el ciclo posneoliberal. Comprendieron – sobre todo, en su pugna por acceder al poder–el impacto de las transformaciones globales y posmodernas en las ciudades latinoamericanas, así como las crisis que estas provocaron en los gobiernos. En términos generales, es posible indicar que los gobiernos progresistas hicieron, tomando el concepto de Daniel Bensaïd, una «apuesta melancólica» por la modernidad, por el Estado-nación, por sus memorias y sus relatos. Intentaron resolver la disminuida capacidad de sus Estados para establecer medidas económicas con cierta autonomía –frente a las corporaciones y al capital financiero global– y acrecentar políticas públicas que integren a individuos que en sus GPS imaginarios reconocían la derrota del comunismo y de los Estados de Bienestar. La reactualización del soberanismo (nacional, popular y estatal) en el espacio progresista sudamericano se intentó expresar en políticas concretas: la apropiación de la renta por parte de los Estados para establecer una mayor distribución y el pago de las obligaciones con el Fondo Monetario Internacional, la ampliación del consumo como una suerte de «pasaporte» a 144 la expansión de derechos sociales y civiles y la instalación de un vocabulario que ponía en el escenario la idea de pueblo, las memorias bienestaristas o revolucionarias. Las viejas derrotas políticas fueron transformadas en victorias discursivas para fundamentar un nuevo rumbo político. Pero tal vez la máxima expresión de esta reactualización soberanista fue el intento de «romper» las rutinas y legitimidades de la estructura económica latinoamericana, fundamentada en una alianza policlasista. Las clases medias, los sectores populares y una parte del empresariado construyeron y sostienen esa estructura y se socializan en ella. El imaginario industrialista y neodesarrollista habitó las agendas económicas del progresismo latinoamericano, aún cuando la economía acabara en un proceso de reprimarización y transnacionalización. Por tanto, las grandes promesas de reparación debieron ser administradas entre la tensión que suscitaba el neodesarrollismo y el peso de las rutinas históricas, siempre avalado por el mercado mundial. Nunca existió –y esta fue una interesante lectura interna del progresismo– un «margen» real de libertad o de posibilidad para salir de esta tensión en este contexto global. Los gobiernos intentaron plantear una hoja de ruta moderna en un territorio posmoderno y establecieron así una disputa hacia el interior de los Estados, así como con otros gobiernos e instituciones internacionales. El gran logro de estas ingenierías gubernamentales –dirigidas por Néstor Kirchner, «Lula» da Silva, Hugo Chávez, Evo Morales, Pepe Mujica y Rafael Correa–fue una suerte de equilibrio precario con la globalización. Incluso, este equilibrio tuvo cierta legitimación y apoyo en una «rentabilidad» para todos los actores sociales (empresarios, trabajadores formales e informales), y contribuyó a una suerte de pax romana y a un continuismo ganador. Pero esto no se mantendría por mucho tiempo. El pacto saltaría por los aires no bien se hicieran presentes la crisis financiera de 2008 y la reducción del precio de loscommodities y del petróleo. Sin embargo, no existió un solo pacto. Al provisorio equilibrio entre Estado y globalización, le siguió otro entre el orden estatal y el individuo. Las izquierdas y los progresismos llevaron adelante una «operación durkheimiana». Intuyeron que de la crisis neoliberal podía salirse reestructurando dicho vínculo, tonificando el lazo entre el individuo y el Estado a partir de una propuesta gubernamental y económica en la que uno y el otro acrecentasen sus capacidades. Que el Estado ganase en «soberanismo» frente al «mundo» y a su sociedad, y que el individuo ganase en capacidades de consumo y de acceso a lo público. Pero la estatalidad latinoamericana no resistió el embate. La crisis de 2008 le recordó su histórica posición en el mercado internacional y lanzó a esos ciudadanos a exigir la realización de su propia posmodernidad e individuación. El consumo –disparado por los propios gobiernos progresistas– se volvió un derecho civil, una forma de presentarse en la ciudad (gusto, estatus y distinción) y de mostrar sus distancias y semejanzas con otras clases. A su vez, el consumo reactualizó la potente cultura política liberal de nuestra región. El «individuo» consumió la política progresista –como modelo societal que le ofrecía la clase política y como practica erosiva– con la misma virulencia que lo hicieron las presiones corporativas. La crisis descolocó al Estado y a los individuos. Los puso en un nuevo lugar y los gobiernos progresistas no supieron qué hacer ante este suceso. La respuesta moral los atravesó. Los nuevos reclamos y la sustracción de adhesión política fue interpretada, en diversas ocasiones, de manera reactiva. «Egoístas», «desconsiderados», «llegaron a clase media y se volvieron conservadores»; estas fueron algunas de las expresiones empleadas, en las que no faltó la declaración de «traidores». Caídas las garantías iniciales, el individuo se rebeló (reveló) en su propia condición posmoderna. Sin barreras. Y como «emprendedor de sí mismo» –como advierte Wendy Brown–, arremetió contra el Estado, contra la política y contra lo público. Mientras dominaban la explicación moral y la búsqueda de los culpables internos, los espacios neoconservadores «tocaban timbre». Iban en búsqueda del individuo y de su potente eticidad: cálculo económico y más vida. 145 Tres pasos hacia una antropología histórica del neoliberalismo real Autor(es): Wacquant, Loïc http://www.herramienta.com.ar/revista-herramienta-n-49/tres-pasos-hacia-una-antropologiahistorica-del-neoliberalismo-real Wacquant, Loïc . Profesor en la Universidad de California, Berkeley, e investigador en el Centro europeo de sociología y ciencias politicas de París. Premio MacArthur Fellow, es autor de numerosos trabajos sobre desigualdad urbana, dominación etno-racial, el estado penal, y la teoría social, traducido a mas de una docena de idiomas. Algunos de sus libros en español son: Entre las cuerdas. Cuadernos etnográficos de un aprendiz de boxeador (Siglo 21, 2004), Repensar los Estados unidos (Anthropos, 2005), Una Invitación a la sociología reflexiva (con Pierre Bourdieu, Siglo XXI, 2005), El misterio del Ministerio. Pierre Bourdieu y la Política Democrática (Gedisa, 2005), Los Condenados de la ciudad. Gueto, periferias, Estado (Siglo XXI, 2007), Las dos caras de un gueto (Siglo XXI, 2009), un Castigar los Pobres. El Gobierno neoliberal de la Inseguridad social (Gedisa, 2010) y Las Cárceles de la miseria (Manantial, nueva edición ampliada de 2011). Informamos a los lectores que el sitio web: http://loicwacquant.net/ tendrá proximamente una versión en español. (english version) La antropología del neoliberalismo se ha polarizado entre un modelo económico hegemónico anclado por variantes del dominio del mercado y un enfoque insurgente, alimentado por derivaciones del concepto foucaultiano de gubernamentalidad. Ambas concepciones oscurecen qué es lo “neo” del neoliberalismo: el rediseño y redespliegue del estado como el actor central que impone las leyes y construye las subjetividades, las relaciones sociales, y las representaciones colectivas adecuadas para hacer realidad los mercados. Basado en dos décadas de investigaciones de campo en la estructura, en la experiencia, y en el tratamiento político de la marginalidad urbana en la sociedad avanzada, propongo una vía media entre estos dos enfoques, que interpreta al neoliberalismo como una articulación del estado, el mercado y la ciudadanía que emplea al primero para imponer el sello del segundo sobre la tercera. El concepto de campo burocrático de Bourdieu nos ofrece una herramienta poderosa para diseccionar la renovación del estado como un aparato de estratificación y clasificación conduciendo la revolución neoliberal desde arriba y sirve para proponer tres tesis: 1) el neoliberalismo no es un régimen económico sino un proyecto político de creación de un estado que ponga al “workfare” disciplinario, el “prisonfare”[1] neutralizador y la “responsabilidad individual” al servicio de la mercantilización; 2) el neoliberalismo implica una inclinación derechista de las agencias burocráticas que definen y distribuyen los bienes públicos y genera un estado-centauro que practica el liberalismo en la cumbre de la estructura de clases y el paternalismo punitivo en base; 3) el crecimiento y la glorificación del ala penal del estado es un componente integral del Leviatán neoliberal, de modo que en la antropología política del dominio neoliberal se deberá introducir a la policía, los tribunales y las cárceles. 146 Hace unos veinte años emprendí una serie de investigaciones de campo en la estructura, en la experiencia, y en el tratamiento político de la pobreza urbana en la sociedad avanzada, centrada en la suerte del gueto negro americano luego del reflujo del movimiento por los derechos civiles y en la transferencia de las periferias de la clase obrera de la metrópolis europeas occidentales, como se ilustra con la decadencia de las banlieues del “cinturón rojo” de Francia, bajo la presión de la desindustrialización. Llevé a cabo un estudio etnográfico en medio de una verdadera desolación del histórico lado sur de Chicago y en los difamados proyectos habitacionales de La Courneuve, con el telón de fondo del paisaje dualizador de la periferia parisiense. Y desplegué las herramientas de la comparación analítica para desentrañar el surgimiento de un nuevo régimen de “marginalidad avanzada”, impulsado por la fragmentación del trabajo asalariado, el retroceso del estado social, y la propagación de la estigmatización territorial. No tenía entonces la menor idea de que esta investigación sobre la situación verdaderamente crucial de los Los Condenados de la Ciudad del nuevo siglo (Wacquant, 2008a) me llevaría desde las calles del hipergueto al interior profundo de las entrañas del gargantuesco sistema carcelario de Norteamérica y de ahí a la controvertida cuestión del neoliberalismo y la creación del estado a una escala global (Wacquant, 2009a). En este texto vuelvo sobre mis pasos resumidamente en este recorrido intelectual desde la micro-etnografía de los empleos precarios postindustriales hacia la macro-sociología del Leviatán neoliberal a principios del siglo XXI para proponer las tesis de una antropología histórica del neoliberalismo realmente existente. Para elucidar las determinaciones y modalidades de la relegación en las metrópolis americanas a fines del siglo XX, tuve que hallar la solución para dos importantes obstáculos epistemológicos: el mito académicamente coaligado de la “underclass”, esa nueva subcategoría de los negros pobres que supuestamente asolarían el centro la ciudad, y la antigua retórica de la “desorganización” heredada de la escuela ecológica de la sociología urbana (ver Wacquant, 1996 y 1997 para críticas detalladas de estos dos conceptos). Para eludirlos, llevé a cabo un trabajo de campo sobre las estrategias de vida de jóvenes afroamericanos en Woodlawn, un sector de los vestigios del “Bronzeville” de Chicago (Drake and Cayton [1945], 1993). Mediante una serie de circunstancias narradas en otros lugares, ingresé a un gimnasio de box local, aprendí el arte del boxeo profesional, y utilicé el club como trampolín para aventurarme en el vecindario (Wacquant, [2000] 2004) y reconstruí mi comprensión del gueto desde la base y desde adentro.[2] Estudiando las historias de vida de mis compañeros del cuadrilátero, pronto descubrí que casi todos ellos habían pasado por la cárcel, de modo que, para explicar sus trayectorias, tuve que comprender el “gran salto penal hacia atrás” que transformó a los Estados Unidos, que era un modelo del penalismo progresivo durante la década de 1960, en el campeón mundial de la encarcelación y exportador mundial de las políticas de control agresivo de la delincuencia hacia la década de 1990 (Wacquant, 2009b). Describiendo el auge carcelario de Norteamérica luego de 1973, se evidenció que el acelerado retroceso del bienestar social, que llevaría a la tristemente célebre “reforma del bienestar” de 1996, y la explosiva expansión de la justicia penal, donde dos cambios hacia la regulación punitiva de la pobreza racializada convergentes y complementarios; el workfaredisciplinario y el prisonfare punitivo vigilan a las mismas poblaciones desposeídas y desahuciadas, desestabilizadas por la disolución del pacto fordista-keynesiano y concentradas en los barrios menospreciados de la 147 ciudad polarizadora; y que poniendo a las fracciones marginadas de la clase obrera postindustrial bajo un tutelaje severo guiado por el conductismo moral ofrece un escenario teatral principal en el que las elites gobernantes pueden proyectar la autoridad del estado y apuntalar el déficit de legitimidad que sufren cada vez que abandonan las encomendadas misiones de protección social y económica. Esto se confirmó en los noventa, cuando a lo largo de Europa Occidental un gobierno de izquierda tras otro elevó a la lucha contra el delito callejero al rango prioritario nacional en las mismas zonas urbanas donde la inseguridad social y la contaminación espacial se iban profundizando al ritmo de la normalización de la desocupación y el empleo precario. Siguiendo las trayectorias internacionales de la vigilancia de “tolerancia cero” y las diversas consignas y panaceas penales “made in USA” (la llamada teoría de las ventanas rotas, sentencias mínimas obligatorias, campos de reclutamiento militar para delincuentes juveniles, negociaciones extrajudiciales, para que el acusado acepte cierto grado de culpabilidad a cambio de no ser juzgado por un delito más grave, etc.) revelaron un modelo característico de propagación sucesiva y una interconexión funcional por la que las políticas de desregulación económica, workfare vigilado, y una justicia penal punitiva, tienden a caminar y florecer juntas (Wacquant, 2011). En suma, la penalización de la pobreza surgió como un elemento central para implementar localmente y propagar a través de las fronteras al proyecto neoliberal; el “puño de hierro” del estado penal asociándose con la “mano invisible” del mercado, mientras se erosiona la red de seguridad social. Lo que comenzó como una investigación en las duras condiciones cotidianas del sector del empleo urbano precario a nivel básico en el área céntrica y degradada de Chicago y las afueras de Paris terminó de este modo con el enigma teórico del carácter y de los elementos constituyentes del neoliberalismo a escala planetaria. Dominio del mercado versus gubernamentalidad Esta peregrinación intelectual, entonces, ¿cómo nos sugiere que manejemos la categoría escurridiza, confusa y polémica del neoliberalismo, a la que algunos de sus más sagaces analistas llaman un “concepto tramposo”, buscando ansiosamente una especificidad y legitimidad analíticas?[3] Mientras que Hilgers (2011) define la antropología del neoliberalismo como configurada tríadicamente por los enfoques culturales, de gubernamentalidad y sistémicos (ver también Hoffman et al. [2006] y Richland [2009] para descripciones alternativas), yo la considero como polarizada entre una concepción económica hegemónica anclada por variantes (neoclásicas y neo-marxistas) del dominio del mercado, por un lado, y un enfoque insurgente alimentado por derivaciones libres del concepto foucaultiano de gubernamentalidad, por el otro. Estas dos concepciones han generado programas de investigación ricos y productivos, pero sufren de defectos paralelos: el primero es excesivamente estrecho, despojado de instituciones, y raya en lo apologético cuando acepta al discurso del neoliberalismo tal como aparenta ser; el segundo es abiertamente amplio y promiscuo, superpoblado por instituciones que proliferan, todas aparentemente infectadas por el virus neoliberal, y tiende hacia el solipsismo crítico. Para el primero, el neoliberalismo es la imposición lisa y llana de la economía neoclásica como el modo supremo de pensar y el mercado como el artilugio óptimo aunque inflexible para organizar todos los intercambios (por ej., Jessop 2002, Saad-Filho y Johnston 2005); para el último, es una racionalidad política maleable y mutable que se asocia con muchas clases de regímenes y se 148 insinúa en todas las esferas de la vida, sin que haya ningún fundamento firme exterior sobre el cual oponerse a ella (por ej., Barry y Osborne 1996, Brown 2005). Curiosamente, estas dos concepciones coinciden en oscurecer qué es lo “neo” en el neoliberalismo, es decir, la recreación y redespliegue del estadocomo la institución central que crea las subjetividades, las relaciones sociales y las representaciones colectivas adecuadas para hacer real y relevante la ficción de los mercados. El dominio de la concepción económica (no economicista) del neoliberalismo está bien probada (por ejemplo Campbell and Pedersen, 2001; Edelman/Haugerud, 2005; Gamble, 2006; Cerny, 2008). Para la vasta mayoría, de los defensores como de los críticos, el término designa al renaciente “imperio del capital”, para evocar el título de Ellen Meiksins Wood (2005), una reconstrucción materialista histórica de la sucesión de proyectos de origen territorial, comerciales y capitalistas del dominio imperial, siendo lo característico de este último que busca imponer los imperativos del mercado no sólo en todos los territorios, sino también en todas las actividades humanas. Esta visión soberana iguala al neoliberalismo con la idea del “mercado autorregulado”, y define al estado como encerrado en una relación enfrentada y equilibrada con él. Lógica e históricamente, la llegada del “fundamentalismo de mercado” implica la reducción de gastos, la retirada o la impugnación del estado, descrito como un impedimento para la eficiencia o como un mero instrumento que sirve para estimular la recuperada supremacía del capital. De este modo, de acuerdo a Colin Crouch (1997), la simultánea disminución de la clase obrera manual, el ascenso del capital financiero, la propagación de nuevas tecnologías de comunicación, y la liberalización de los movimientos económicos a través de las fronteras nacionales han abierto las puertas a una “forma de capitalismo cortoplacista y de mercado puro, libre de restricciones”. Las emergentes “condiciones del consenso neoliberal” incluyen el “abandono universal de las políticas keynesianas” y provocan “el vaciamiento del estado y la privatización cada vez mayor de sus funciones”. En forma similar, para David Harvey (2005: 3-4), “el neoliberalismo es en primer lugar una teoría de las prácticas económico-políticas que afirma que el bienestar humano puede lograrse mejor liberando las libertades y habilidades empresariales individuales en una estructura institucional caracterizadas por poderosos derechos a la propiedad privada, los mercados libres y el comercio libre. El papel del estado es crear y preservar una estructura institucional apropiada para dichas prácticas”. El giro hacia el neoliberalismo implica la combinación trinitaria de la “desregulación, la privatización y la retirada del estado de muchas áreas de prestaciones”. En la práctica, los estados sólo se desvían de las pautas doctrinarias del “gobierno pequeño” para alentar un clima favorable a los negocios para los esfuerzos capitalistas, para custodiar las instituciones financieras, y para reprimir la resistencia popular a la ofensiva neoliberal hacia la “acumulación por el despojo”. Gran parte de la antropología del neoliberalismo consiste en trasladar este esquema a distintos países a lo largo del mundo o en llevarlo a la escala continental para controlar los aparatos culturales del (y las reacciones sociales contra el) dominio del mercado (por ejemplo, Comaroff/Comaroff, 2001; Greenhouse, 2009). América Latina es un lugar favorito, seguido por los países del antiguo bloque soviético y de África. En su generalizador relato de “África en el orden mundial neoliberal”, James Ferguson (2006: 11) caracteriza como de costumbre al neoliberalismo como la retracción del estado en forma simultánea con la 149 ampliación del mercado: “Coincidiendo con la filosofía económica del ‘neoliberalismo’, se predicaba que la eliminación de las ‘distorsiones’ estatales de los mercados crearían las condiciones para el crecimiento económico, mientras que la rápida privatización provocaría una afluencia de nuevas inversiones de capital privado”. Aquí la idea es sinónimo de las medidas económicas de “ajuste estructural” “que supuestamente harán retroceder a los estados opresivos y despóticos y liberarán a una nueva y vital ‘sociedad civil’ que será más democrática y económicamente más eficiente” (Ferguson, 2006: 38-39). Se trata de un término encubierto que se refiere a los cambios sociales acarreados, a la resistencia popular y a las adaptaciones cotidianas a la austeridad y a los programas privatizadores conocidos también como “el consenso de Washington” (Williamson, 1993). Contra esta visión “nítida” del neoliberalismo como un todo coherente, si no monolítico, los estudiosos de la gubernamentalidad ofrecen una visión “desordenada” del neoliberalismo como un conglomerado fluido y flexible de ideas calculadoras, estrategias, y tecnologías, con el objeto de influenciar a las poblaciones y las personas.[4] Bajo esta óptica, el neoliberalismo no es una ideología económica ni una propuesta política sino una “normatividad generalizada”, una “racionalidad global” que “tiende a estructurar y organizar, no sólo las acciones de los que gobiernan, sino también la conducta de los mismos gobernados” y hasta su auto-imagen de acuerdo a los principios de la competencia, la eficiencia y la utilidad (Dardot/Laval, 2007: 13). Los académicos de la gubernamentalidad insisten en que los mecanismos de dominio no están localizados en el estado sino que circulan a lo largo de la sociedad, así como a través de las fronteras nacionales. En consecuencia, trabajan transversalmente para rastrear la propagación y la concatenación de las técnicas neoliberales para “conducir conductas” a través de los múltiples sitios de autorrealización, incluyendo el cuerpo, la familia, la sexualidad, el consumo, la educación, las profesiones, el espacio urbano, etc. (Larner 2000). También les gusta mucho destacar la contingencia, la especificidad, la multiplicidad, la complejidad y las combinaciones interactivas (calificadas de maravillosas por el latiguillo (que parece deleuziano) de “assemblages”): no hay un Neoliberalismo con N mayúscula sino una cantidad indefinida de neoliberalismos con n minúscula nacidos de la hibridación en curso de prácticas e ideas neoliberales con las condiciones y formas locales. Este enfoque es llevado a un extremo por Aihwa Ong en su influyente serie de ensayos sobre Neoliberalism as Exception en el este asiático, en el que ella sugiere “estudiar el neoliberalismo no como una ‘cultura’ o una ‘estructura’ sino como técnicas móviles y calculadoras de gobierno que pueden ser descontextualizadas de sus fuentes originales y re-contextualizadas en constelaciones de relaciones mutuamente constitutivas y contingentes” (Ong 2007: 13). La tendencia analítica a extenderse más allá del estado y pasar por encima de los dominios institucionales es fructífera, como lo es la idea de que la neoliberalización es un proceso productivo, más que sustractivo, que se extiende desde la economía. Pero localizar este proceso en la migración de tecnologías “maleables” de conducta que son “realineadas” y “transformables” constantemente mientras se desplazan es algo problemático. Primeramente, no está claro qué hace una tecnología de conducción neoliberal: ciertamente, esas técnicas burocráticas como la inspección, los parámetros de desempeño, y puntos de referencia (favoritos de la antropología neo-foucaultiana del neoliberalismo) pueden ser usadas para fortalecer o fomentar otras lógicas. En forma similar, no hay nada sobre las 150 normas de transparencia, responsabilidad y eficiencia que las haga necesariamente propulsoras de la mercantilización: en China, por ejemplo, han sido desarrolladas para perseguir fines no lucrativos y para reinscribir ideales socialistas (Kipnis, 2009). El problema con el enfoque de la gubernamentalidad es que su caracterización operativa del neoliberalismo como “dominio calculador” (Ong, 2007: 4) es tan poco específica como para que sea coetánea de cualquier régimen mínimamente competente o con las fuerzas de la racionalización e individualización características de la modernidad occidental in globo.[5] Por último, a medida que las tecnologías de conducción “migran” y “mutan”, se halla que el neoliberalismo está en todos lados y al mismo tiempo en ninguno. Se convierte en un todo proceso sin ningún contenido; se halla en una forma fluida sin sustancia, patrón ni dirección. Finalmente, entonces, la escuela de la gubernamentalidad nos ofrece una concepción del neoliberalismo tan endeble como la que ofrece la ortodoxia económica, a la que aspira a superar. El neoliberalismo como la forja de un estado que impone al mercado Mi sugerencia es trazar una via media entre estos dos polos, que reconoce que, desde su incubación intelectual por el Colloque Lippman en Paris 1938 y el “colectivo de pensamiento” transnacional anclado por la Société du Mont-Pélerin luego de 1947 (Denord. 2007), a sus distintas encarnaciones históricas durante las décadas finales del siglo XX, hasta su paradójica reafirmación luego de la crisis financiera del otoño de 2008, “el neoliberalismo ha sido siempre un proyecto de final abierto, plural y adaptable” (Peck, 2008: 3), pero que sin embargo tiene un núcleo institucional que lo distingue y hace reconocible.[6]Este núcleo consiste en una articulación del estado, el mercado y la ciudadanía que controla al primero para imponer el sello del segundo sobre la tercera. De modo que debemos introducir estas tres instituciones en nuestro ámbito analítico. No estoy de acuerdo con las concepciones del neoliberalismo centradas en el mercado porque priorizo los medios (políticos) sobre los fines (económicos); pero me diferencio de la estructura de la gubernamentalidad porque priorizo la elaboración estatal por encima de las tecnologías y las lógicas no estatales, y me concentro en la forma en que el estado rediseña con efectividad los límites y el sentido de la ciudadanía a través de sus políticas. De acuerdo a ello, recomiendo que efectuemos un triple desplazamiento para anclar la antropología del neoliberalismo, comprendido no como una doctrina económica invasiva o técnicas de dominio que se propagan sino como una constelación política concreta: de una “endeble” concepción económica centrada en el mercado a una “sustancial” concepción sociológica centrada en el estado que especifica la maquinaria institucional implicada cuando se establece la dominación del mercado y su impacto operativo sobre los miembros reales de la sociedad. Afirmo que el escasamente conocido concepto de campo burocrático de Bourdieu ([1993] 1994) ofrece una herramienta flexible y poderosa para comprender la recreación del estado como una máquina de estratificación y clasificación que está conduciendo a la revolución neoliberal desde arriba. Este cambio puede ser explicado en tres tesis. Tesis 1: El neoliberalismo no es un proyecto económico sino político; no implica el desmantelamiento del estado sino su reconstrucción.Esto es por tres razones básicas. Primero, en todos lados los mercados son y siempre han sido creaciones políticas: son 151 sistemas de intercambio basados en los precios que siguen las reglas que deben ser establecidas y arbitradas por autoridades políticas enérgicas y apoyadas por amplias maquinarias legales y administrativas, que en la era moderna equivalen a las instituciones estatales (Polanyi, [1957] 1971; Fligstein, 1996; Macmillan, 2003). Segundo, como lo demostró la historia social y fue elaborado por la teoría social desde Emile Durkheim y Marcel Mauss a Karl Polanyi y Marshall Sahlins, las relaciones sociales y las concepciones culturales necesariamente sustentan los intercambios económicos y las personas normalmente negocian bajo las leyes del mercado: de este modo el estado debe intervenir para superar la oposición y reprimir las estrategias evasivas. Tercero, la historiografía de la Geistkreis[7] transnacional que la generó revela explícitamente que desde sus orígenes en la crisis de la década de 1930, el neoliberalismo no ha procurado restaurar el liberalismo de fines del siglo XIX sino superar la equivocada concepción del estado de este último (Denord, 2007; Mirowski/Plehwe: 2009). El neoliberalismo se origina en una doble oposición: por un lado, contra las soluciones colectivistas (primero socialistas y más tarde keynesianas) de los problemas económicos y por el otro, contra la visión minimalista y negativa del “estado vigilante” del liberalismo clásico. Desea reformar y redireccionar al estado de modo de alentar activamente y fortalecer al mercado como una creación política en curso.[8] En otro lugar he caracterizado esta recreación como la articulación de cuatro lógicas institucionales (Wacquant, 2010a): (I) La mercantilización como la ampliación del mercado o de mecanismos similares, basada en la concepción de esos mecanismos son medios universalmente óptimos para asignar eficientemente los recursos y recompensas. (II) La política social disciplinaria, con el cambio desde el bienestar protector, concedido categóricamente como una cuestión de derecho, hacia el workfare correctivo, bajo el cual la asistencia social está condicionada a la sumisión al empleo flexible e implica mandatos específicos de conductas (entrenamiento, pruebas, búsqueda de empleo, y trabajar hasta por salarios de subpobreza, pero también limitación de la fertilidad, acatamiento a la ley, etc.). (III) La política penal expansiva y pornográfica con el objetivo de limitar los desórdenes generados por la difundida inseguridad social en las zonas urbanas impactadas por el trabajo flexible y representar la soberanía del estado en la estrecha ventana de la vida cotidiana que ahora afirma controlar. (IV) La “responsabilidad individual” como un discurso motivador y como un pegamento cultural que une estos distintos componentes de la actividad estatal. Esta concepción va más allá de la perspectiva del dominio del mercado, no sólo porque concede un papel dinámico al estado en todos los cuatro frentes: económico, social, penal y cultural. Para considerar sólo al primero, el estado re-regula activamente, antes que “desregular”, la economía a favor de las empresas (Vogel, 1996) y toma medidas amplias “correctivas” y “constructivas” para apoyar y expandir los mercados (Levy, 2006). Esta concepción también ofrece contenidos institucionales duros a la noción blanda de la “racionalidad política” invocada por los foucaltianos especificando los medios que emplea el estado para ampliar y sostener la mercantilización frente a la oposición. 152 Tesis 2: El neoliberalismo implica un giro derechista del campo burocrático y genera un estado-centauro: Si el estado no está siendo “removido” o “vaciado” sino verdaderamente reconstruido y redesplegado, ¿cómo podemos comprender esta remodelación? Aquí es donde el concepto de campo burocrático de Bourdieu ([1993] 1994), interpretado como el conjunto de organizaciones que monopolizan eficazmente la definición y la distribución de bienes públicos, demuestra ser crucial.[9] Una gran virtud de este concepto, minuciosamente concebido mediante un análisis histórico de la transición multisecular desde el modo dinástico de reproducción del gobierno al burocrático, anclado en la creciente potencia del capital cultural institucionalizado (ver Bourdieu, 2012), es que nos recuerda que “el estado” no es un actor monolítico, coherente (ya sea operando en forma autónoma o como el diligente sirviente de las clases dominantes), o una simple palanca susceptible de ser controlada por intereses o movimientos especiales provenientes de la sociedad civil. Más bien, es un espacio de fuerzas y luchassobre el mismo perímetro, prerrogativas y prioridades de la autoridad pública, y en particular sobre qué “problemas sociales” merecen su atención y cómo deben ser tratados. Bourdieu, ([1993] 1998) además sugiere que el estado contemporáneo está atravesado por dos batallas internas que son homólogas con los choques que se desatan en forma turbulenta a través del espacio social: la batalla vertical (entre dominantes y dominados) que es el enfrentamiento entre la “alta nobleza estatal” de los responsables políticos seducidos por los conceptos neoliberales, que desean fomentar la mercantilización, y la “baja nobleza estatal” de los ejecutantes que defienden las misiones protectoras de la burocracia pública; y la batalla horizontal (entre las dos clases de capital, el económico y el cultural, compitiendo por la supremacía interna) involucra a la “mano derecha” del estado (el ala económica que pretende imponer las restricciones fiscales y la disciplina del mercado), y la “mano izquierda” del estado (el ala social que protege y apoya a las categorías despojadas de capital económico y cultural). En Castigar a los pobres, adapto este concepto para introducir en una sola estructura analítica los cambios punitivos en las políticas de bienestar y penal que han convergido para establecer la “doble regulación” de la marginalidad avanzada mediante el workfare y el prisonfare punitivo. Y agrego el brazo de la justicia penal - la policía, los tribunales, la cárcel y sus prolongaciones: la libertad condicional, las bases de datos judiciales, las obligaciones civiles y burocráticas unidas a las sanciones penales, etc.- como un componente esencial de la mano derecha del estado, junto a los ministerios de Hacienda y de Economía (Wacquant, 2009a: 3-20, 304-313). Usando este esquema, se puede diagramar al neoliberalismo como el vuelco sistemático de las prioridades y acciones estatales desde la mano izquierda hacia la mano derecha, o sea, desde el polo protector (femenino) hacia el polo disciplinario (masculino) del campo burocrático. Esto se lleva a cabo a través de dos vías complementarias: (i) la transferencia de recursos, programas y poblaciones desde el ala social hacia el ala penal del estado (como cuando los pacientes de enfermedades mentales son “des-institucionalizados” con el cierre de hospitales y “re-institucionalizados” en cárceles luego de transitar por la carencia de vivienda); (ii) la colonización del bienestar, la atención médica, la educación, la construcción de viviendas para quienes tienen bajos ingresos, los servicios infantiles, etc., por las técnicas y metáforas panópticas y disciplinarias de la mano derecha (como cuando en los hospitales 153 públicos se prioriza la preocupación por el presupuesto por sobre los preocupaciones médicas y en las escuelas se pone la reducción de la inasistencia escolar y la violencia en las clases por delante de la pedagogía y la contratación de guardias de seguridad por encima de los psicólogos). Como resultado de esta inclinación hacia la derecha, el Leviatán neoliberal no se parece al estado minimalista del liberalismo del siglo XIX ni al estado efímero que se quejan los críticos del neoliberalismo , ya sean provenientes de la economía o de la gubernamentalidad, , sino un estado-Centauro que despliega rostros opuestos en los dos extremos de la estructura de clase: es edificante y “emancipador” en la cumbre, donde actúa para proveer los recursos y ampliar las opciones vitales de los dueños de capital económico y cultural, pero es punitorio y restrictivo en la base, cuando se trata de administrar las poblaciones desestabilizadas por la profundización de la desigualdad y la propagación de la inseguridad del trabajo y la inseguridad étnica. El neoliberalismo realmente existente exalta el “laissez faire et laissez passer” para el dominante, pero se presenta paternalista e intrusivo para el subalterno, y especialmente para los trabajadores urbanos precarios, a quienes restringe sus parámetros vitales mediante el engranaje combinado del workfarevigilador y la supervisión judicial. Tesis 3: El crecimiento y la glorificación del ala penal del estado son un componente integral del Leviatán neoliberal:Atrapados en la visión ideológica que lo describe como guiando el fin del “gran gobierno”, los analistas sociales del neoliberalismo han pasado por alto la imponente rehabilitación y la enorme expansión del aparato penal del estado que ha acompañado a la ola del dominio del mercado. Desmintiendo las profecías, hechas entre 1945 y 1975 por los penalistas de la corriente dominante así como los teóricos radicales del castigo, de que era una organización desacreditada destinada a marchitarse (Tonry, 2004), la cárcel ha hecho un espectacular regreso a la vanguardia a través del primer y el segundo mundos a lo largo de las tres últimas décadas. Con muy escasas excepciones (Canadá, Alemania, Austria y partes de Escandinavia en Occidente), la encarcelación ha emergido en todas las sociedades postindustriales occidentales, ha crecido rápidamente en las naciones post-autoritarias en Latinoamérica, y estallado en los estado-naciones surgidos del colapso del bloque soviético mientras se transformaban de economías dirigidas a economías de mercado. La población carcelaria no sólo ha aumentado rápidamente en las tres regiones (Walsmley 2011) junto a la precarización del trabajo y el retroceso del estado benefactor; está en todos lados compuesta en forma desproporcionada por los pobres urbanos, los parias étnicos y nacionales, los sin techo y los enfermos mentales indigentes, y diversos desechos del mercado laboral (Wacquant, 2009a: 69-75). El implacable aumento en la población carcelaria es además sólo una manifestación superficial y burda de la expansión y exaltación del estado penal en la era del mercado triunfante. Otros indicadores incluyen el despliegue agresivo de la policía en y alrededor de los vecindarios de los relegados; la ampliación de la red judicial a través de las sanciones alternativas, los planes de control post-carcelarios, y el desarrollo exponencial de los bancos de datos judiciales digitalizados; la proliferación de los centros de retención administrativa para acorralar y expulsar a inmigrantes irregulares; la hiperactividad de las legislaturas sobre el frente penal (han multiplicado y endurecido las sanciones penales a una velocidad jamás vista), y el auge de un sector de los medios de comunicación que comercian con 154 imágenes catastróficas del peligro criminal; la promoción de la lucha contra los delitos en las calles encabezando la agenda gubernamental (al mismo tiempo que se despenalizaban los delitos empresarios) y la prominencia de la “inseguridad” en las campañas electorales; y el sometimiento de la política penal a parámetros emotivos y simbólicos, con un ostensible menosprecio de la experiencia penológica. El fortalecimiento y la ampliación del sector penal del campo burocrático no es una respuesta al delito, el cual ha declinado en los países occidentales en las dos últimas décadas y generalmente fluctúa sin relación con los niveles y las tendencias del castigo (Young/Brown, 1993). Tampoco es el embrión del advenimiento de “la sociedad excluyente”, el ascenso de una “cultura del control”, o el deterioro de la confianza en el gobierno y la adhesión a la “sociedad del riesgo”,[10] y aún menos el engendro de especuladores, como en la demonología militante del “complejo industrial-carcelario” (Wacquant, 2010b). Es unladrillo en el edificio del Leviatán neoliberal. Por esto es que se correlaciona íntimamente, no con las vagas “ansiedades ontológicas” de la “modernidad tardía”, sino con cambios específicos que imponen el mercado en la política económica y social que ha desatado la desigualdad de clases, profundizado la marginalidad urbana, y atizado el resentimiento étnico al mismo tiempo que erosiona la legitimidad de los políticos. Al examinar las tendencias en una docena de sociedades avanzadas distribuidas entre cuatro tipos de economía política, Cavadino y Dignan (2006: 450) informan de “una tendencia general haciacambios en los niveles de castigo de estos países, para adecuarse al mismo modelo. A medida que una sociedad se desplaza en dirección al neoliberalismo, sus castigos se vuelven más severos”. Reelaborando los mismos datos desde un ángulo diferente, Lacey (2009: 111) revela, a pesar de su deseo de refutar la tesis de la convergencia penal, que el mejor indicador de la tasa de encarcelación de estos países es el “grado de coordinación” de la economía, o sea, un índice opuesto a la neoliberalización. El análisis estadístico de Lappi-Seppälä(2011) de treinta países europeos confirma que la moderación penal tiene sus raíces en una “cultura política consensual y solidaria, en altos niveles de confianza social y legitimidad política, y en un fuerte estado de bienestar”, o sea en rasgos sociopolíticos contradictorios a los del neoliberalismo. Más aún, el patrón temporal y geográfico de difusión de la penalidad punitiva y pornográfica en todo el mundo sigue las huellas de la propagación de las políticas de desregulación económica y disciplinamiento del bienestar (Wacquant, 2009b y 2011). No es por fruto del azar que los Estados Unidos se volvieron superpunitivos luego de mediados de la década de 1970, justo cuando se precarizó el trabajo, se abandonó el apoyo al bienestar, implosionó el gueto negro, y se endureció la pobreza en las metrópolis dualizadoras. No fue de pura casualidad que a principios de los ochenta, Chile se convirtió en el principal encarcelador en Latinoamérica y el Reino unido en la locomotora penal de la Unión Europea a fines de los noventa, cuando ambos estados viraban su política de clientelar-solidaria a neoliberal. Pues existe una profunda relación estructural y funcional entre el dominio del mercado y el castigo luego del cierre de la era keynesianofordista.[11] El estado penal se ha presentado en los países que han elegido el camino neoliberal, porque promete ayudar a resolver los dos dilemas que crea la mercantilización para el mantenimiento del orden social y político: primero, reprime los crecientes trastornos y rupturas causados por la normalización de la inseguridad social en la base de la estructura social y urbana; y en segundo lugar, restaura la autoridad de la elite gobernante, 155 reafirmando la “ley y el orden” justamente cuando esta autoridad está siendo socavada por los acelerados flujos del dinero, el capital, las comunicaciones y las personas a través de las fronteras nacionales, y las restricciones a la acción estatal por parte de las instituciones supranacionales y el capital financiero. El concepto del campo burocrático nos ayuda a comprender estas misiones gemelas del castigo, en la medida en que nos lleva directamente a prestar igual atención a los momentos materiales y simbólicos de la política pública, o sea, el papel instrumental del disciplinamiento de clase y la misión comunicativa de proyectar soberanía que supone la justicia penal.[12] Esto también nos invita a trasladarnos de una concepción represiva de la penalidad a una productiva, que pone el acento en su cualidad performativa (Wacquant, 2008b), de modo que podemos apreciar que los aumentos de los presupuestos, del personal y de las prioridades que se han dado a las instituciones policiales y judiciales en todas las sociedades transformadas por el neoliberalismo como programa económico no son una herejía, una anomalía, o un fenómeno transitorio, sino componentes integrales del estado neoliberal. Para presentar una antropología histórica del neoliberalismo tal como éste evoluciona realmente en los países en donde ha enraizado, opuesta a la descripción de sí mismo (el modelo del dominio de mercado) o al relato de cómo se disipa cuando no logra cristalizar en un régimen coherente (el modelo de la gubernamentalidad), debemos reconocer que pertenece al registro de la formación estatal. En forma muy similar a cómo vio el “largo siglo XVI” al nacimiento del Leviatan moderno en Europa Occidental (Ertman, 1997), incluyendo la invención de la ayuda a los pobres y la cárcel penal, como parte de la accidentada transición del feudalismo al capitalismo mercantilista, el comienzo de nuestro siglo ha sido testigo de la remodelación de un nuevo tipo de estado que pretende amparar los mercados e incluir la libertad, pero en realidad reserva al liberalismo y sus beneficios para los de arriba, mientras aplica el paternalismo punitivo sobre los de abajo. En lugar de ver a la policía, los tribunales, y la cárcel como apéndices técnicos para combatir el delito, debemos reconocer que constituyen las capacidades políticas centrales mediante las que el Leviatán gobierna el espacio físico, recorta el espacio social, dramatiza las divisiones simbólicas, y representa la soberanía. Y así debemos colocarlos en el centro de una antropología política renovada, con leyes que puedan comprender cómo identifica y administra el estado los territorios y categorías problemáticos en su empresa de crear mercados y de moldear ciudadanos que se ajusten a ellos, les guste o no. Reconocimientos: Este trabajo creció a partir la discusión que siguió a mi intervención en la conferencia sobre “Marginalité, pénalité et division ethnique dans la ville à l’ère du néolibéralisme triomphant: journée d’études autour de Loïc Wacquant,”, Université Libre de Bruxelles, Bruselas, 15 de octubre de 2010. Estoy muy agradecido a Mathieu Hilgers, el Laboratoire d’anthropologie des mondes contemporains, el Institut de Sociologie y el Groupe d’études sur le racisme, les migrations et l’exclusion, por un vívido día de discusiones; a Aaron Benavidez por su sobresaliente investigación y asistencia bibliográfica; y a Megan Comfort, François Denord, Zach Levenson, y Dilan Riley por su perspicaces sugerencias editoriales y analíticas. 156 Bibliografía Barry, Andrew / Osborne, Thomas / Rose, Nikolas (eds.), Foucault and Political Reason: Liberalism, Neo-Liberalism, and Rationalities of Government. University of Chicago Press: Chicago, 1996. Bourdieu, Pierre, “Rethinking the State: On the Genesis and Structure of the Bureaucratic Field”. En: Sociological Theory 12/1 (marzo de 1994), págs. 1-19. Bourdieu, Pierre “The Abdication of the State”. En: –, The Weight of the World: Social Suffering in Contemporary Society. Polity Press: Cambridge, 1998, págs. 181-188. Bourdieu, Pierre, Sur l’État. 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Agradecemos la autorización de dicha revista y del autor para su publicación en Herramienta. Traducción del inglés de Francisco T. Sobrino. [1] Workfare: designa programas de asistencia pública a los pobres que hacen de la recepción de la ayuda un beneficio personal condicionado a la aceptación de trabajos con bajos salarios o al compromiso en una actividad dirigida al empleo, tal como un entrenamiento laboral o búsqueda de empleos. Prisonfare es un término que introduje por analogía con “workfare” para designar programas de penalización de la pobreza mediante la elección preferencial de ésta como objetivo principal, y el despliegue activo de la policía, los tribunales penales, y las cárceles (y sus prolongaciones: la libertad bajo palabra, las bases de datos penales y diversos sistemas de vigilancia) en (y alrededor de) los vecindarios marginalizados, donde se coaliga el proletariado postindustrial. [2] Ver Wacquant (2009c) para una disección retrospectiva de las vinculaciones analíticas y los engranajes biográficos entre “El cuerpo, el gueto, y el estado penal”. [3] “Desde la década de 1980, una perpleja mezcla de extralimitación y sub-especificación ha acompañado al inquieto dominio del concepto de neoliberalismo en la economía política 160 heterodoxa. Al mismo tiempo, el concepto se convertido en un foco terminológico para los debates sobre la trayectoria de las transformaciones regulatorias posteriores a la década de 1980 y una expresión de los profundos desacuerdos y confusiones que caracterizan esos debates. En consecuencia, el “neoliberalismo” se ha convertido en algo así como un concepto tramposo, indiscriminadamente penetrante, aunque inconsistentemente definido, empíricamente impreciso y frecuentemente impugnado” (Brenner/Peck/Theodore, 2010: 283-284). [4] Esta opinión se deduce de los escritos de Foucault y el curso de 1978-1979 en el Collége de France sobre The Birth of Biopolitics [Naissance de la biopolitique] (Foucault, 2004), que han inspirado un programa de investigación general sobre “gubernamentalidad” como el arte de formar a las poblaciones (sometimiento) y el yo (subjetivación). Los términos “gobernanza postsocial” y “liberal tardío” son usados a menudo como sinónimos de neoliberal (ver Dean [1999] para una supervisión y Rose / O’Malley / Valverde, 2006 para una defensa paradójica de un enfoque teórico que no se reconoce como tal). No hay lugar aquí para tratar los problemas en las propias formulaciones de Foucault sobre la gubernamentalidad y el neoliberalismo, y/o de su asociación, y mucho menos de sus derivaciones y su relevancia para los cambios históricos que se desarrollaron después de su muerte. [5] Si el neoliberalismo es un conjunto variado de “tecnologías calculadoras” originadas en la economía que migraron a otras esferas de la vida social, entonces su fecha de nacimiento datan de 1494 con la invención de la contabilidad por partida doble (Carruthers/Espeland, 1991), y el gran teórico del neoliberalismo no es Ludwig von Mises, Friedrich von Hayek o Milton Friedman sino Max Weber ([1918-20], 1978: 85-113, 212-226) para quien el dominio de la racionalidad instrumental ha separado a Occidente del resto, y aún más puesto que Weber le adjudica gran énfasis al concepto relacionado deLebensführung, “régimen de vida”, en su sociología comparada de la religión. [6] Esta es una exigencia lógica: para que las diversificadas especies locales de neoliberalismos surjan a través de la “mutación”, debe haber un género común del que derivan todos. Se deduce entonces que toda concepción de múltiples “neoliberalismos con n minúscula” necesariamente presupone, aunque sea implícitamente, un “Neoliberalismo con N mayúscula”, y a todo ejemplo periférico y parcial del fenómeno se lo puede caracterizar como tal sólo por referencia, abierta o encubierta, a un centro original más completo. [7] El Geistkreis o “Círculo espiritual” era un seminario vienés informal de ciencia e ideas, fundado por Friedrich Hayek y Herbert Furth a principios de la década de 1920 (N. del T.). [8] Esto lo subrayan Denord (2007) y Jamie Peck (2009: 3), quien rescata un temprano texto muy poco conocido de Milton Friedman (publicado en 1951 solamente en sueco) en el que el economista de Chicago explica: “el error básico fundamental del liberalismo del siglo XIX [fue que] apenas si le dio otra tarea al estado que la de mantener la paz, y prever que se mantengan los contratos. Era una ideología ingenua. Afirmaba que el estado sólo podía hacer daño [y que] el laissez-faire debía ser la regla”. Contra esta opinión, la “doctrina [del] neoliberalismo” afirma que “hay funciones verdaderamente positivas asignadas al estado,” entre ellas asegurar los derechos de propiedad, impedir el monopolio, asegurar la estabilidad monetaria y (lo más notable), “aliviar la pobreza y el sufrimiento agudos”. Peck (2009: 9) 161 tiene razón en señalar que “el neoliberalismo, en sus distintos disfraces, siempre ha tratado de controlar y reutilizar el estado, a favor de la reforma de un ‘orden del mercado’ a favor de las corporaciones y de libre comercio,” pero no llega a hallar el factor endógeno de los medios institucionales recurrentes por los que el estado efectúa esta reforma. [9] El campo burocrático es uno de los tres conceptos que forja Bourdieu para repensar el gobierno; no debe ser confundido con el campo político (que atraviesa) y el campo del poder (en cuyo interior se localiza). Ver Wacquant (2005: 13-18) para una explicación de sus relaciones y Wacquant (2010a) para una reelaboración del campo burocrático adaptado a la especificación del carácter del estado neoliberal. En la astuta caracterización de Mudge (2008: 705), el neoliberalismo tiene tres caras, la intelectual (una doctrina), la burocrática (las políticas estatales de liberalización, desregulación, privatización, despolitización y monetarismo), y la política (las luchas por la autoridad estatal), que “comparten un núcleo común y distintivo: la elevación del mercado por encima de todos los demás modos de organización”. Pero otorga un peso analítico insostenible al campo político, en lugar de desplegar el campo burocrático como el principal lugar en el que se libra la batalla sobre las misiones y los medios de la acción pública. [10] Como lo sugieren, respectivamente, Jock Young (2000), David Garland (2001), y John Pratt (2007) y Jonathan Simon (2007), para alertar sobre las principales macro teorías enfrentadas sobre el cambio penal reciente. [11] Aquí es donde disiento con Bernard Harcourt (2010), quien atribuye esta relación a la invención del siglo XVIII de los mitos gemelos del “mercado libre” y la “policía diligente”: el estado penal creciente es la creación distintiva del neo-liberalismo, y no una herencia o resurgimiento del liberalismo clásico. Surge luego del período fordista-keynesiano porque este último ha alterado decisivamente los parámetros institucionales y las expectativas colectivas de la actividad estatal (para más discusiones, ver Wacquant 2009a: 227-228). [12] Deducimos que para conceptualizar apropiadamente al estado penal, no solo debemos repatriar la justicia penal al centro de la antropología política. Debemos poner un punto final a la mutua hostilidad (o deliberada ignorancia) entre las dos líneas de la criminología, la marxista y la durkheiminiana, que han elaborado las lógicas materiales y simbólicas del castigo en forma aislada, y hasta opuestas, entre sí. Sobre la corrupción y el socialismo: una mirada crítica y esperanzada. Por Carlos Luque Zayas Bazán https://lapupilainsomne.wordpress.com/2016/07/12/sobre-la-corrupcion-y-el-socialismo-unamirada-critica-y-esperanzada-por-carlos-luque-zayas-bazan/ Un comentarista, autodenominado Maño, opina en La Pupila Insomne que “el grado de corrupción en la isla (de Cuba) es un “niño de pecho” comparada con la corrupción realmente existente en otros mucho países”. Ese comentario, y sobre todo el valiente artículo de Esteban Morales sobre el tema de la corrupción en Cuba, a propósito del cual comenta el forista Maño, motivó estas notas, que sólo pretenden estimular el pensamiento, el análisis y el debate ante la complejidad y las muchas variables que gravitan alrededor de este flagelo mundial y que tanto daño le hace a la ingente tarea de construir el socialismo y al prestigio mismo de ese ideal. 162 Se puede suscribir la afirmación de Maño, sobre todo la corrupción en Cuba con la endémica existente en países donde los poderes representan, legislan y favorecen al mundo empresarial privado, mientras se declaran sin rubor democráticos. El tipo de corrupción característico de muchos países capitalistas – clasificado por Transparencia Internacional, precisamente, con la taxonomía de Gran Corrupción, es, según la define ese organismo, la “corrupción conformada por actos cometidos en el alto nivel de gobierno que distorsionan las políticas o el funcionamiento central del estado para propiciar que sus líderes de beneficien a expensas del bien público” (1) – y esta, efectivamente, no es una realidad frecuente ni predominante en Cuba. Si para tener una referencia persistimos en atenernos a la taxonomía de Transparencia Internacional, que aplican, por demás muy dudosamente, el siguiente nivel inmediatamente inferior en grado a la Gran Corrupción, es un nivel que denomina la “petty”, la pequeña corrupción, o corruptela, aquella que sería la “cometida por funcionarios medios o bajos en sus interacciones con el ciudadano común cuando estos acceden a los bienes básicos o a los servicios de hospitales, escuelas, departamentos de policía, u otros organismos” (2) Finalmente, la corrupción política, tal como es conceptuada en ese organismo, tampoco es la característica en Cuba, pues se define como la manipulación de políticas, o del funcionamiento de instituciones, o de las reglas de procedimiento en la asignación de recursos o financiamientos, cometidos por responsables políticos en el ejercicio de un abuso de poder para mantener estatus y riqueza personal. Sin embargo, en opinión de este comentarista, toda corrupción tiene un componente político, y es un daño gravísimo no sólo económico, sino lo que quizás es más gravoso en sociedades como Cuba, es una lesión espiritual, cultural e ideológica, a la vez que un debilitamiento en la lucha contra las dominaciones. Pero hay una gran, aunque aparente, paradoja sólo aparente: la corrupción es consustancial al capitalismo, la corrupción en las sociedades capitalistas son funcionales al sistema, es una propiedad que las define, por cuanto la desigualdad fundada en la explotación del trabajo por el capital es el pecado capital original y la más grave corrupción de todas. Por cierto, Transparencia Internacional no incluye el carácter capitalista de un sistema como la corrupción por antonomasia, lo que hace en ellas endémicos sus primeros y terceros conceptos de corrupción aquí citados. Los resultados del índice de corrupción que se muestran por esa entidad para el 2015 son más que dudosos pero no es el caso ahora analizarlos aquí. El interesado lo puede consultar en: http://www.transparency.org/cpi2015). La existencia de la enorme brecha entre la minoría rica y la gran mayoría sometida a las deudas eternas de los créditos bancarios, la privatización de la salud, la educación; el desempleo o el subempleo parcial y precario, la amenaza constante del despido laboral, la pérdida o hipoteca de sus condiciones mínimas de vida, la desprotección social, las pensiones miserables sometidas al casino financiero, el empobrecimiento de la vida espiritual rehén de la desinformación y la subcultura televisiva y publicitaria, el flagelo de las drogas que destruye enormes capacidades entre sus juventudes, el saqueo de los recursos nacionales cuyas ganancias fluyen en mayor proporción hacia sus explotadores transnacionales, la fundamental mentira que son sus aparentes democracias donde al poder político sólo se accede mediante el poder del dinero, y luego en el gobierno, después de ser legitimadas por las elecciones, se legisla y gobierna para las élites, todo ello es una corrupción en sí misma que define y explica, a la vez que es fundamento sobre el que se sostiene la hegemonía capitalista. 163 Hay que reconocer, por demás, que la corrupción se persigue en algunos países porque no todos los funcionarios se corrompen por igual y en las sociedades capitalistas también florecen las cualidades humanas virtuosas. Por ejemplo, el aparato fiscal en Chile funciona con relativa independencia en la persecución de los múltiples casos de corrupción política y colusión entre parlamentarios, políticos, partidos y grupos empresariales que se han producido en los últimos años, aunque después el aparato penal -creado y manipulado por los mismos parlamentarios – es sumamente benigno, y en muchos casos las sanciones no se corresponden con el grado que merecería el dolo. Pero en esas sociedades cuando se combate la corrupción, muchas veces devienen en ajustes de cuentas entre los que se reparten el pastel económico y el poder de un estado, que cumple así una función clientelar de la clase empresarial. La persecución de los que violan las reglas del sistema al interior de las naciones, tiene su correlación global en la repartición del mundo en áreas de influencia, oportunidad de rapiña y lucha por los recursos ajenos, que es el objetivo del gran capital transnacional en las guerras intercapitalistas. Aparentemente este tipo de corrupción capitalista puede definirse sólo como política, pero esa calificación es limitada, porque puede afirmarse que la corrupción política es la gran corrupción económica por otros medios, está directamente relacionada con ella, la propicia y forma parte de una misma entidad con vasos comunicantes entre los actores corruptos. Pero en una sociedad que se propone el ideal de la convivencia socialista, y la propiedad social sobre la riqueza nacional y los medios de producción, la corrupción tiene otro origen, y otro significado, y por tanto amerita otro análisis del que puede hacerse de la corrupción capitalista. Y exige, por lo tanto, encontrarle otras soluciones, adecuadas a su índole. En primer lugar la corrupción en Cuba no tiene un entramado sistémico en la colusión que se teje entre la legislación, la ejecución política, la aplicación de la justicia, la alta dirección política y el mundo empresarial. No hay ni puede haber puerta giratoria en Cuba, tal como es habitual este tipo de corrupción en el mundo capitalista, porque ningún parlamentario y miembro del gobierno accede a sus funciones a partir de sus recursos privados, ni para favorecer los suyos o de terceros, ni existe el lobby a favor de las empresas, ni después de cumplir sus funciones los gobernantes son retribuidos en el mundo empresarial como pago de sus servicios. Aunque eso es obvio para muchos que se informan, o han visitado Cuba sin la vista epidérmica del turista, o no se dejan engañar por la leyenda negra de la propaganda anticubana, hay que subrayarlo, porque los lectores extranjeros que no conocen bien esa realidad, cuando oyen hablar de corrupción en Cuba, se imaginan, como le dicen o preguntan a este autor, o lo expresan en las redes sociales, que es la misma que ellos conocen: es decir, fundamentalmente la corrupción de la gran política coludida con el empresariado. Se explica la distinta condición de la corrupción cuando ocurre en Cuba porque los miembros del parlamento a ningún nivel, ni del estado, ni del gobierno, ni del partido, legislan o gobiernan representando y favoreciendo a una gran propiedad privada que no existe, a un mundo empresarial que lograra posicionarse o verse representado en los estamentos del gobierno. Se explica, además, porque las políticas inclusivas en favor de las mayorías, que son aspiraciones frustradas constantemente en tantos pueblos y motivo de sus luchas, son regla en Cuba. Por el contrario, la gran corrupción, cuando ha ocurrido y se ha detectado en el desempeño de funcionarios burocráticos del alto nivel económico o político, se ha juzgado y ejemplarmente castigado, incluso aunque sus figuras hayan sido personas de trayectorias 164 meritorias anteriores. No puede afirmarse con razón que ese tipo de corrupción goce de impunidad. ¿Cuál es la corrupción prevaleciente y más frecuente en Cuba, si no es la de la gran política, y si no es la de los más altos niveles de los funcionarios del gobierno y la economía? ¿Cuál es su motivación, su origen, sus causas, y cómo podría prevenirse, aumentando las probabilidades de éxito? En Cuba no existe la gran propiedad privada capitalista. La gran corrupción, como ha sido definida más arriba, y la corrupción política, son infrecuentes; la primera, perseguida y castigada, no goza de impunidad estatal, y prácticamente nula la segunda. El tipo de corrupción más frecuente en Cuba es la que atenta contra la propiedad social gestionada por los niveles administrativos de base del aparato estatal, y raramente, aunque ha ocurrido, por los niveles administrativos superiores. Es propiciada por la indisciplina, la negligencia, o el dolo administrativo. Ocurre en empresas u organismos estatales y consiste fundamentalmente en el desvío de recursos deficitarios para su venta ilícita en el mercado informal subterráneo, o para consumo directo y suntuario de los corruptos más inmorales abusando de la confianza y el poder. También como intercambio o pago de favores de los administradores o funcionarios económicos o contables que se corrompen o cometen cohecho. En ocasiones surgen del cohecho en las sociedades de economía mixta, por sus relaciones con las administraciones de la parte extranjera. La corrupción en Cuba es un atentado a la propiedad social, porque afecta los intereses comunes a la sociedad y no daña a propietarios privados. Se propicia por el descontrol y la indisciplina administrativa. Su raíz más profunda está, sin embargo, de un lado, en la demanda existente por el desabastecimiento eventual de productos básicos y otros no tan imprescindibles, y a veces, por la demanda de lujos de los individuos más inescrupulosos, y, del otro lado, por la oferta de los que tienen acceso al control de los recursos y se corrompen sustrayéndolo, o desviándolos de sus fines legales, o por aquellas personas, en ocasiones obreros, que se procuran el acceso, el robo o el desvío, por la falta de control, o la complicidad entre directivos y subordinados. Puede decirse que el trabajador, obrero simple, funcionario menor, o administrativo, se roba a así mismo, o se otorga a sí mismo, lo que pertenece a toda la sociedad. Es la gran diferencia con respecto a la corrupción de todo tipo en las sociedades capitalistas, y la ínsita y consustancial a ese sistema económico y político, en que el robo de mayor envergadura no es precisamente el que se hacen los poseedores entre sí, sino el que se comete contra el erario público o el dinero de los contribuyentes. Según el último informe de la Contraloría General de la República, correspondiente a los resultados del año 2015 “los recursos más afectados en la mayoría de los sectores son los medios informáticos, el combustible, los materiales de construcción, las piezas y neumáticos.”, es decir, los más deficitarios, caros y demandados. Asimismo “el mayor número de implicados se concentra en el comercio, la gastronomía, y el sector agroalimentario”. En un resumen del año 2012, la Contralora general de la República afirmaba que “hay dos elementos esenciales que siempre coinciden, independientemente de las maneras en que se manifiesten: uno es la falta de control, el incumplimiento de lo que está dispuesto, indisciplinas, violaciones, irresponsabilidad; y el otro es la pérdida de valores, ética y vergüenza de las personas.” (3) Esta segunda razón se refiere al que quizás sea el reto más difícil, no sólo de la ética socialista, sino de la humanidad toda: el predominio de los valores y las virtudes superiores ciudadanas en la conducta pública y privada del ser humano. 165 (Una disculpa por la pequeña digresión. Robespierre, el gran revolucionario francés, en el discurso pronunciado el 18 Pluvioso, año II (5 de feberero de 1794), conocido como SOBRE LOS PRINCIPIOS DE MORAL POLITICA, declaraba “En nuestro país queremos sustituir el egoísmo por la moral, el honor por la honradez, las costumbres por los principios, las conveniencias por los deberes, la tiranía de la moda por el dominio de la razón, el desprecio de la desgracia por el desprecio del vicio, la insolencia por el orgullo, la vanidad por la grandeza de ánimo, el amor al dinero por el amor a la gloria, la buena sociedad por las buenas gentes, la intriga por el mérito, la presunción por la inteligencia, la apariencia por la verdad, el tedio del placer voluptuoso por el encanto de la felicidad, la pequeñez de los “grandes” por la grandeza del hombre; y un pueblo “amable”, frívolo y miserable por un pueblo magnánimo, poderoso y feliz; es decir, todos los vicios y todas las ridiculeces de la Monarquía por todas las virtudes y todos los milagros de la República.” Esas aspiraciones, en esencia, son las del socialismo. Las especialidades antropológicas, sociológicas, de la ciencia política, las económicas y psicológicas que estudian este tema desde sus respectivos métodos y enfoques, no han podido aun dar una respuesta medianamente esclarecedora de cómo lograr el mejoramiento de la conducta ética humana, pero es de esperar que cuando la desigualdad no sea el rasgo predominante en las modernas sociedades, cuando la precariedad no sea la condición de vida de tantos millones de seres humanos, y cuando las élites de las naciones ricas no saqueen a mansalva los recursos de los países que empobrecen con la desmedida ambición del capitalismo por el aumento de sus tasas de ganancias, las probabilidades del mejoramiento humano aumenten considerablemente. No se ha podido establecer, sin embargo, para que mientras tanto esa sea la tendencia predominante, si son esenciales primero las condiciones materiales de vida como caldo propicio de las virtudes espirituales, o si es la existencia de una masa crítica mínima y suficiente de hombres probos y ciudadanos virtuosos, la condición de base para que esas premisas puedan establecerse y generalizarse. Seguramente es una interrelación compleja de uno y otro, y múltiples factores, pero se hace evidente que un planeta donde la mayoría de sus pobladores viven en constante lucha por la sobrevivencia, no es el mejor caldo de cultivo para que las virtudes florezcan en esa masa crítica suficiente y se convierta en tendencia predominante. La teoría al respecto siempre pensó que las relaciones que establecen los hombres en la sociedad, que el sistema en que vivan, a la postre daría lugar al surgimiento de hombres de conducta éticamente superior, pero se está lejos de poder falsear con seguridad esa variable. Mientras tanto, será necesario insistir en encontrar un equilibrio entre la coerción que haga respetar la ley por el temor al justo castigo, el control donde el juez no sea parte, combinado con la confianza humana comprobada. El pensamiento de Martí es justo al decir: “¿quién no ha querido pertenecer a la fila de los nobles”? Y la básica confianza en el mejoramiento humano es la más noble cualidad de un revolucionario, aunque ella sea vea decepcionada muchas veces no se puede cejar en ese empeño.) En las empresas y entidades cubanas se realizan durante el año múltiples controles administrativos y contables, al punto que muchas veces las administraciones se quejan de su frecuencia, a veces verdaderamente excesiva. Los resultados que muestran las contralorías de la República y las fiscalías económicas, demuestran que los equipos de controladores y fiscales no se coluden con las administraciones, pero los controles externos a la empresa son reactivos, o como se dice en Cuba, le hacen la autopsia al cadáver en vez de impedir la enfermedad, no son proactivos, detectan la corrupción cuando ya ha sucedido, y de lo que se trata es de prevenirlos e impedir que florezcan las causas que lo propician. 166 Es innegable entonces que parte de la solución, mientras no vayan desapareciendo las dificultades económicas que crean la demanda en el mercado negro, y la oferta de los recursos que se desvían, tendría que estar en la efectividad del control interno preventivo. En las empresas cubanas existen departamentos de control interno administrativo, y de control de la calidad, pero la experiencia, acotada naturalmente a su limitado entorno de la vida laboral de este autor, es que los primeros padecen de un funcionamiento casi puramente formal en algunas entidades, de lo contrario, no se explican las causas del descontrol en ellas como el caldo de cultivo de la corrupción. Muchas veces los controles externos son esperados, y las empresas se preparan para ellos. No se puede negar que muchas deficiencias reveladas por las contralorías se detectan y se resuelven, pero indudablemente no los neurálgicos y aquellas que propician la corrupción en las empresas o entidades donde ello ocurre. Es plausible suponer que mientras no exista, al interior de las empresas, una contraparte de la administración que sea inmune a la cooptación y la complicidad en el delito, – a no confiar sólo en las virtudes de la espontánea honestidad, tan precaria todavía a la humana condición como para considerarla generalizada o espontáneas – y cuyo interés esté precisamente en evitar las pérdidas en que la empresa incurriera cuando se desvían recursos, no se estará cerca de una solución de raíz. Pero para que lo anterior sea posible y tenga probabilidades de funcionar, ese interés más fuerte y opuesto al interés de ser cooptado y absorbido por una administración potencialmente en condiciones de corromperse en ausencia de contraparte, esta última tiene que superar un difícil escollo, según indica la experiencia: tiene que formar parte de la entidad, no puede ser ajeno a ella, y a la vez, gozar de una independencia e inmunidad relativa con protección legal operativa con respecto a posibles excesos de la administración. Ese escollo sólo puede superarse si la entidad contraparte está formada y colegiada y auto regulada por un grupo de trabajadores seleccionados por el colectivo, y con un liderazgo merecido en la ejecución proba y eficaz de sus funciones. A la vez, los resultados económicos de la probidad administrativa que resultara del éxito del control, tendrán que reflejarse positivamente en las condiciones de trabajo, en los salarios, y los estímulos a los trabajadores, o al menos, en el equilibrio de los resultados que se hayan logrado. Tanto ese organismo de control interno y la administración deben ser removidos por el voto de las asambleas de trabajadores cuando el caso lo amerite, es decir, cuando ocurran casos de corrupción y también deben pagar sanciones pecuniarias y morales cuando se compruebe negligencia o incumplimiento de los deberes que hayan propiciado el acto corrupto. Se supone que esa función corresponde a los sindicatos y a los núcleos del partido en las entidades, pero es obvio que en esos organismos, en los que durante el año 2015 se produjo el desvío de recursos por 132 millones en moneda nacional, ni la función sindical ni la partidaria, en ese aspecto, funcionaron. El examen profundo de esa arista de la cuestión es imprescindible para atacar exitosamente una de las raíces de la corrupción. En el fondo de las causas de la corrupción, importantes analistas han señalado la dificultad que tienen los intentos socialistas para hacer sentir verdadero dueño a los trabajadores de sus propios recursos productivos. Nada hay de difícil en eso para la pequeña, o cualquier dimensión de la propiedad privada. Pero la propiedad social socialista ha tenido dificultades de honduras teóricas y hasta filosóficas para lograr que efectivamente el obrero se sienta y sepa dueño de los recursos sin que ello sea una propiedad privada sustentada en la explotación. El destacado jurista cubano Julio Fernández Bulté, ya fallecido, al referirse en una de sus obras a las causas de la implosión del campo socialista, señalaba que nunca se pudo hacer efectiva la 167 condición de propietarios sociales de los medios de producción a los trabajadores de esas naciones, pese a que sus recursos no pertenecían en puridad jurídica a privados. Eso influye en el cuidado de la propiedad social, y en el hecho de que cuando el trabajador atenta contra lo que no le pertenece sino a sí mismo pero también a la sociedad, no tenga la percepción de que se roba y produce un daño social. Es también un éxito de la cultura capitalista individualista y un fracaso en la formación social de virtudes ciudadanas superiores. Es también una contradicción entre lo que se entiende tradicionalmente como propiedad en el sentido de que se espera de ella un beneficio directo, y el hecho de la que la riqueza común tiene que ser justamente redistribuida entre todos los propietarios sociales. Es una consecuencia de no poder todavía exigir de cada cuál según sus capacidades, y dar a cada cuál según su trabajo en el ámbito social todo, si cada empresa se hace dueña de sus trabajadores, exige que las ganancias, como propiedad social les pertenezcan, y a la vez, la necesidad de la planificación nacional de la satisfacción de las necesidades sociales. ¿Cómo lograrlo? He allí el dilema mayor, porque todo ello hay que resolverlo en medio de las injustas relaciones internacionales de explotación del capital global ante el trabajo, y en el caso de Cuba, frente al antagonismo esencial del capitalismo ante lo que ha significado su ejemplo de que con muy escasos recursos se hayan podido mantener con diferentes niveles de satisfacción, pero sin renunciar a ello tras largas décadas, derechos tan fundamentales al ser humano como la salud, la educación, y la protección social de los más desfavorecidos, todo ello junto a la soberanía bajo ataque constante. La experiencia histórica socialista ha ensayado variantes todas más o menos fallidas, e incluso la autogestión obrera, poner en manos de los trabajadores la propiedad de las empresas, la elección de sus directivos y, como pedía el Che, hasta decidir lo que va al consumo y lo que va a la inversión a nivel de las entidades. También el fracaso de esas variantes se ha debido en buena medida al imperio global del mercado capitalista y a la necesidad insoslayable de conjugar la autogestión con la planificación territorial y nacional, y eso en medio de múltiples dificultades por la interdependencia mundial de las economías y las sucesivas crisis económicas del sistema. No se puede decir con justicia que el fracaso de esos intentos se deba sólo y principalmente a causas internas. Sin embargo, y en medio de esas condiciones, es que tiene que resolverse la cuestión de la efectiva propiedad social sobre los medios de producción como uno de los resortes que hagan desaparecer el fenómeno de la corrupción. Las posibilidades de los medios coercitivos son limitadas y casi siempre reactivas. Por otra parte, el hecho de que el colectivo de trabajadores sea dueño directo de sus empresas por medio del otorgamiento de derechos ampliados para su conducción, tampoco es una garantía absoluta de la desaparición de las causas de la corrupción. A su interior se darían en menor escala, pero de igual esencia, las necesidades del control administrativo efectivo, y la misma necesidad de independencia de sus órganos de control con respecto a las administraciones. Pero es presumible que al ser dañados directamente por las consecuencias de los desvíos, o robos, o la mala administración de los recursos, podrían reaccionar con más interés y eficacia. No se ve otro camino más directo para la efectiva concreción de la propiedad social de los medios de producción en el intento de la construcción de las sociedades socialistas y la paulatina creación de una moral comunista. Las dificultades a resolver son gigantescas pero se hace evidente que mientras no exista ese hombre nuevo de altas virtudes de honestidad ciudadana, el control, la coerción, la sanción tiene que equilibrarse con la creación de la pertenencia social allí donde se quiera distanciar la sociedad del estímulo al egoísmo individualista, que es la madre moral de la corrupción. Es una vez más, la tremenda y desigual lucha entre el capitalismo y la noble utopía socialista Finalmente, puede suponerse, con plausible poco margen de error, que en una sociedad económica y espiritualmente próspera, que haya logrado una hipotética educación socialista 168 de la mayoría de sus ciudadanos, sin carencias básicas, y con relativa sana igualdad y posibilidades de ascenso social según el mérito y el esfuerzo empeñado, aún no desaparecería del todo la corrupción, aunque sea razonable imaginar que disminuirían sus probabilidades de ocurrencia. Pero lo que sí es indudable, es que en países subdesarrollados, a los que se imponen enormes dificultades para su ascenso económico, no sólo el intercambio mundial desigual y el saqueo de sus recursos, sino las agresiones continuas a su economía, y que tiene delante el paradigma cultural del consumismo y la riqueza relativa de los gobiernos de las naciones explotadoras como el modo válido de autorrealización personal, a la vez que, como Cuba, recorre una dura senda de más de medio siglo pretendiendo un modo de vivir inédito que no tiene un origen espontáneo, como el egoísmo, el individualismo, y el instinto de sobrevivencia naturales, sino que debe lograrse en el difícil cincelado de las virtudes humanas superiores en medio de carencias, todo ello combinado aumenta y maximizan las probabilidades para crear un caldo de cultivo más propicio a la aparición de la corrupción que se basa tanto en la búsqueda de recursos para paliar los sufrimientos de la escasez, como el estímulo para los que ven en propiciarlo un modo ilícito de vida fácil y sin sacrificios. Con esta reflexión no se justifica la corrupción, pero es de justicia elemental considerar estas variables en su análisis. Las probabilidades para el florecimiento de las virtudes humanas están relacionadas proporcionalmente, o al menos maximizadas, con la sana prosperidad, material y espiritual, como dejara apuntado Martí en sabia observación, aunque tampoco ello es garantía de que las virtud surja por generación espontánea. Puede ser inmensamente incalculable el tiempo que tenga que recorrer la humanidad hasta el momento en que la corrupción sea un raro fenómeno, pero al menos hasta hoy no hay razón ninguna para imaginar que ello pueda ocurrir en los sistemas de vida basados en el interés individual y mucho menos en las condiciones de escandalosa desigualdad del mundo que llamamos moderno. Es una de las razones por seguir luchando por el socialismo. Sólo el socialismo mayoritaria y conscientemente aceptado por un pueblo, puede ser el camino que un día nos conduzca a la esperanza de lograr una sociedad donde la corrupción sea una rara patología social y una excepción que confirme la regla. http://www.transparency.org/what-is-corruption/#define Ídem. http://cgr.jovenclub.cu/documentos/menucapacitacion/EntrevistaCGporJR1ra.pdf Entrevista al sociólogo Jorge Moreira sobre el golpe de estado en Brasil (I) "La corrupción es la realidad inexorable de todos los países capitalistas" https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214429 Catherine Bryan catoverde-cmbryan.blogspot.com/ Traducida del portugués para Rebelión por la propia autora. Jorge de Brito Vital Moreira es profesor, escritor, sociólogo, filósofo y músico. Sus áreas de trabajo son el marxismo, la filosofía, la música y la crítica cultural (literatura, cine y música) de inspiración filosófica marxista (Manuel 169 Sacristán, Fredric Jameson, Terry Eagleton, David Harvey, Darcy Ribeiro y Glauber Rocha). -Catherine Bryan. ¿Qué le parece si vamos directamente a la primera pregunta? ¿Cuál es su opinión acerca de la eliminación de Dilma Rousseff como presidenta de Brasil? -Jorge Moreira. Dilma Rousseff fue reelegida presidenta de Brasil por la voluntad y deseo de 54 millones de brasileños. Por lo tanto, el alejamiento de Dilma de la presidencia por una banda de políticos ladrones y por organizaciones políticas mafiosas, es, sin duda, una nueva forma de golpe de estado contra el pueblo brasileño. -C. B. ¿Un nuevo tipo de golpe de estado? -J.M. Sí. Para aquellos que todavía no están informados del golpe militar de 1964 impuesto al Brasil por el gobierno de Estados Unidos y sus súbditos brasileños, les debo aclarar: el entonces presidente de Brasil, João Goulart, constitucionalmente elegido por la mayoría de la población brasileña, fue depuesto y sometido al exilio político por un golpe de estado que estableció una dictadura militar en beneficio de los intereses económicos y políticos del imperio americano y de la élite brasileña antinacionalista. Esta dictadura, planificada y programada por los EE.UU., duró más de 20 años (1964 a 1986) e implementó en Brasil, la tortura, la desaparición y el asesinato de trabajadores del campo y la ciudad, maestros, estudiantes, líderes sindicales y políticos de la oposición, así como el cierre del Congreso brasileño, colocando sin efecto la constitución de Brasil. -C. B. ¿Cuál es la diferencia entre el golpe militar de 1964 y este golpe de 2016? -J. M. En el plano estructural (bajo las apariencias de la superficie), no hay diferencias significativas entre los dos golpes. En ambos casos, se trataba y se trata, por un lado, de dar continuidad al proyecto del imperialismo de los EE.UU., para saquear las riquezas de Brasil para el beneficio de las empresas multinacionales estadounidenses; y por otro lado, se trataba y se trata de imponer un modelo de dominación política para seguir defendiendo los intereses de la minoría privilegiada (en la actualidad, una oligarquía nacional e internacional de menos del 1% de la población) que domina y controla la mayor parte de la riqueza del planeta. 170 -C.B. Pero, ¿qué papel ha jugado la corrupción del Partido dos Trabalhadores (PT) y del ex presidente Luis Inácio da Silva (Lula) en el golpe de estado? -J.M. La real corrupción del PT y de Lula es sólo uno de los factores del proceso que resultó en el golpe. La corrupción del PT es una especie de pretexto para el golpe articulado por los políticos corruptos del Partido do Movimento Democrático Brasileiro, PMDB (Michel Temer, Eduardo da Cunha, Renan Calheiros, el ex presidente José Sarney, etc.), del Partido da Social Democracia Brasileira, PSDB (Aécio Neves, José Serra, Geraldo Alckmin, el ex presidente Fernando Henrique Cardoso, etc.), por la Federación de las Industrias del Estado de São Paulo (FIESP), por la Red Globo de Televisión (de propiedad de la familia de Roberto Marinho), por la prensa corporativa de Brasil como las revistas Veja, Isto é, además del diario Folha de São Paulo . C.B. ¿Cuáles otros grupos participaron en el golpe de estado actual? El golpe también fue articulado por la mafia de los juristas asociada con el golpe y por el fundamentalismo protestante (los evangélicos) con el fin de cancelar, como ya he mencionado, la decisión de 54 millones de brasileños que votaron por la presidenta, Dilma Rousseff. -C.B. Sí, he sido informada de que el Departamento de Justicia de Brasil está siendo cuestionado por sectores vinculados a los trabajadores del país por ser un instrumento para el beneficio de este golpe. ¿Qué opina de esta declaración? -J.M. Creo que el cuestionamiento de los trabajadores del campo y de la ciudad (y de organizaciones vinculadas al trabajo) sobre el carácter corrupto y partidario de la "justicia brasileña” es algo esencial, necesario y fundamental. Las preguntas son: ¿Por qué las acusaciones y las pruebas contra el Aécio Neves (candidato del PSDB, que perdió las elecciones contra Dilma Rousseff) y contra el senador del PSDB, Antonio Anastasia, no son tomadas en cuenta por la Procuradoria Federal de la República (PFR) o por el Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil? ¿Por qué los fiscales y los jueces de la "Operación Jato" son incapaces de detener y poner en la cárcel a Eduardo Cunha y Aécio Neves, los símbolos de la corrupción en Brasil? ¿Por qué solamente los políticos del PT son castigados por el "sistema judicial brasileño"? ¿Cómo podemos creer en la “justicia brasileña”? Recientemente, Emanuel Cancella publicó un importante artículo sobre este tema en el periódico brasileño Tribuna da Imprensa ... (1) 171 -C.B. ¿Tiene usted respuesta a esa pregunta que acaba de plantear: ¿Por qué solamente los políticos del PT son castigados por el "sistema judicial brasileño"? -J.M. Por supuesto. Para mí, la respuesta es muy clara: 1) es debido a que el PT (a pesar de la corrupción y de la política reformista a favor del neoliberalismo), estaba a favor de mantener la propiedad estatal y nacional de la Petrobras y del Pré-Sal; 2) es debido a que el PT defendía la participación e integración de Brasil en el gobierno de los países que conforman los BRICS (la asociación económica, comercial e financiera entre Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica); 3) y es debido a que el gobierno del PT defendía la política de las organizaciones regionales anti-USA y anti-OEA, como el MERCOSUR, y las organizaciones articuladas por el presidente venezolano fallecido Hugo Chávez como la red de televisión regional (TELESUR), la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), el Banco del Sur y otros. Por lo tanto, debo repetir: el golpe ha sido implementado para el beneficio y el poder económico de la clase política nacional e internacional dominante (una minoría de menos del 1% de la población mundial). Creo que este es el momento apropiado para informar/recordar al público de esta entrevista que una de las noticias más censuradas entre 2014-2015 fue la siguiente: El 1% más rico del mundo tiene 50% de la riqueza mundial. Es decir, el 1% más rico de la población mundial ya tiene tanta riqueza como el resto combinado del 99%, según las proyecciones para el año 2016 de un estudio publicado por Oxford Committee for Famine Relief , Oxfam (Comité de Oxford de Ayuda contra el Hambre) una organización sin fines de lucro que tiene como objetivo eliminar la pobreza en el mundo (2). Así, afirmo que la lucha de clases en Brasil por la apropiación de la riqueza social en beneficio de esta minoría internacional y nacional es la noción marxista fundamental para revelar las verdaderas motivaciones para el golpe actual en Brasil. La lucha de clases sociales (o la guerra entre clases) es la piedra de toque para, por una parte, explicar la lucha del gobierno de Estados Unidos (Barack Obama) para desestabilizar el Brasil con el fin de tomar posesión de Petrobras y del Pré-Sal; por otra parte, para explicar el plan de Estados Unidos para destruir los BRICS y el MERCOSUR, TELESUR, etc. Para ampliar este punto, me gustaría argumentar que el concepto de lucha de clases (o guerra de clases) 172 tiene la capacidad de explicar, por ejemplo, la razón de la complicidad y sumisión del gobierno de derecha del presidente Mauricio Macri, de la Argentina, para defender los objetivos antinacionalistas y antidemocráticos de la administración de Barack Obama contra el pueblo de Argentina y de América Latina; para explicar, por ejemplo, la subordinación y la complicidad del gobierno servil del presidente Juan Manuel Santos de Colombia (y la subordinación de la Organización de Estados Americanos, OEA), para beneficiar los intereses geopolíticos de los EE.UU., o sea, para destruir el proceso de estabilización económica, social y política del gobierno popular del presidente Nicolás Maduro en Venezuela. Como podemos observar, un objetivo fundamental de la geopolítica de los Estados Unidos es apropiarse del petróleo de Venezuela para entregar a las multinacionales tales como Chevron y otras del sector petrolero. El caso venezolano es aun más complejo que otros países, ya que el gobierno de Estados Unidos no podría tomar el poder político en Venezuela a través de un golpe de estado "blando" como se hizo contra el pueblo de Paraguay, o en contra de la población brasileña. En Venezuela, tendría que ser más parecido al golpe de estado llevado a cabo por los EE.UU. con la ayuda de los militares hondureños contra el gobierno del presidente Manuel Zelaya y contra el pueblo de Honduras. Sin embargo, creo que sería aun más difícil para el Departamento de Estado que sus ONGs sean capaces de corromper a los militares venezolanos para apoyar un golpe militar contra el pueblo de Venezuela. -C.B. Volviendo a Brasil, usted ha mencionado que la corrupción del PT fue solo uno de los factores y un pretexto para el golpe de estado ejecutado por el PMDB, el PSDB, los grandes medios corporativos de información, y otros. Pero ¿cuáles son otros factores que cree usted que jugaron un papel decisivo en este proceso golpista? -J.M. En el plano interno, el alejamiento de la presidenta Dilma está conectado, por un lado, al hecho de que el grupo de los políticos, de las organizaciones brasileñas y de hombres de negocios corruptos, quería cancelar la "Operación Lava Jato" debido a que continuar con la operación podría resultar en el encarcelamiento de ciertos miembros de esos grupos. Por otro lado, los políticos corruptos del PMDB, del PSDB, la mafia de juristas asociada y los evangélicos no consiguieron evidencia para demostrar que Dilma estuvo involucrada en el caso de corrupción del PT. En cambio, los políticos que alejaron a Dilma de la presidencia y que ahora están “gobernando” el Brasil ilegalmente, tienen expedientes judiciales que demuestran cómo todos ellos estaban y están involucrados en corrupción 173 activa y/o pasiva. Podemos mencionar, por ejemplo, las relaciones ilegales entre esos políticos y el conglomerado del estado de Bahía conocido como la OAS (la organización corrupta fundada por el ex gobernador Antônio Carlos Magalhães, el famoso “Toninho Perversidad" del partido Aliança Renovadora Nacional, ARENA); entre ellos y el conglomerado Norbert Odebrecht, incluyendo las empresas constructoras Camargo Correa y Andrade Gutierrez (3). Como lo demuestran los testimonios documentados contra estos políticos corruptos de la derecha, el golpe de estado se llevó a cabo con agenda secreta para evitar, como ya mencioné, que la "Operación Lava Jato" revelara sus crímenes y que la justicia pudiera castigarlos por los delitos de corrupción que cometieron. -C.B. Bueno, ahora que usted ha mencionado factores internos, ¿cuáles son los factores externos del golpe de estado actual? -J.M. Externamente (y ya lo he mencionado anteriormente), el actual golpe de estado de 2016 en Brasil fue, como el golpe militar en Brasil de 1964, planificado y coordinado por el gobierno de Estados Unidos, con la participación de la derecha brasileña, con el objetivo fundamental, en los dos casos, de apropiarse de la riqueza material y energética de Brasil. Entre los indicadores de la asociación espuria actual están los datos sobre la conexión entre el vicepresidente Michel Temer (PMDB) y el abogado Sergio Moro (PSDB) con la Central Intelligence Agency (CIA), la tenebrosa organización estadounidense famosa por su participación sistemática en los delitos políticos tales como la organización de sabotaje y la promoción de los golpes de estado contra Brasil y los países de América Latina y del “Tercer Mundo” (4). Pero eso no es nuevo en la historia política de Brasil. En el pasado muy reciente, el ex presidente de Brasil, Fernando Henrique Cardoso, del PSDB, recibió dinero de la CIA, a través de la Organización Ford, para fundar y financiar el famoso Centro Brasileño de Análisis y Planificación (CEBRAP). Los datos de las relaciones entre Fernando Henrique Cardoso y la CIA se pueden encontrar en dos excelentes libros: el de Frances Stonor Saunders, y el de Brigitte Leoni Hersant (5). También podríamos hacer referencia al plan interno brasileño y mencionar algunas de las pruebas de la corrupción que existen en contra de Fernando Henrique Cardoso durante el período en que él era el presidente de Brasil. Por ejemplo, el periodista Fernando Rodrigues publicó una brillante investigación sobre la compra de votos que llevó a la reelección de Fernando Henrique Cardoso. Después de la denuncia de este periodista, varios diputados (que vendieron sus votos) dimitieron de sus mandatos (6). Por lo tanto, externamente, la novedad de este golpe de estado se encuentra en su asociación con las actuales estrategias geopolíticas de los Estados Unidos: 174 contar con la complicidad y la traición de la derecha política brasileña para destruir el MERCOSUR y todas las instituciones autónomas e independientes que habrían sido inspiradas y organizadas por el liderazgo del difunto presidente Hugo Chávez y por el movimiento popular de izquierda de América Latina. En resumen, podemos también observar que entre los objetivos económicos y geopolíticos de los EE.UU. de este golpe de estado en Brasil, se encuentra el desarrollo de una política estratégica para destruir la asociación de los países del BRICS. Entonces, en un sentido amplio, el plan de Estados Unidos es derrotar a los gobiernos de izquierda en América Latina a través de golpes (“blandos o duros”) como ya se ha visto en los golpes contra Honduras y contra Paraguay en este siglo XXI. También podríamos mencionar que los dos golpes de estado anteriores, implementados por los EE.UU en contra del gobierno del ex presidente Hugo Chávez, no tuvieron éxito. Actualmente, los EE.UU. estaría planeando (con la activación del Comando Sur y con la ayuda del gobierno de Juan Manuel Santos de Colombia) invadir a Venezuela para destruir el gobierno nacionalista y popular del presidente Nicolás Maduro. Esta nueva forma de guerra de los EE.UU. contra los gobiernos de izquierda (o gobiernos "enemigos") se puede nombrar, de acuerdo al periodista Pepe Escobar (y otros intelectuales internacionalistas lúcidos), de "guerra híbrida". (7) -C.B. En este punto, me gustaría preguntar ¿cómo se posiciona usted políticamente, considerando no solo la distancia sino su doble nacionalidad (brasileña y estadounidense), en relación a los partidos políticos brasileños: ¿Está usted afiliado al PT y se identifica con los gobiernos de Lula y/o de Dilma? -J.M Antes de responder a su pregunta, debería colocar ciertas coordenadas espaciales y temporales, informándole que como brasileño, que estudió y vivió en México, y después, estudió y está viviendo en los Estados Unidos, nunca di mi voto a los candidatos de los partidos políticos brasileños como el PMDB, PSDB o el PT. En pocas palabras, nunca voté, en el pasado o en el presente, por Fernando Henrique Cardoso, del PSDB, ni por Lula del PT, ni por Dilma Rousseff. También le informo que, como ciudadano estadounidense, nunca voté por candidatos del Partido Republicano o del Partido Demócrata, ya que la mayoría de sus representantes (los que son elegidos a la presidencia de Estados Unidos, al Senado, o a la Cámara de Representantes), tiene sus campañas políticas subvencionadas por el dinero de Wall Street, por el dinero de los grandes bancos estadounidenses, por el dinero de las grandes empresas y organizaciones tales como The American Israel Public Affairs Committee, 175 el AIPAC (el Comité de Asuntos públicos Estados Unidos-Israel) y otras. Así, desde el punto de vista objetivo, casi todos los funcionarios del gobierno de Estados Unidos están a servicio de los intereses del gran capital que financian sus elecciones. Debo resumir este punto declarando que estoy en contra de cualquier tipo de corrupción. Pienso que toda autoridad política corrupta de Brasil, de los EE.UU. o de cualquier otro país capitalista, debería ser punida criminalmente por un sistema legal verdaderamente democrático e igualitario. Sin embargo, también soy forzado a reconocer que la corrupción es la realidad inexorable de todas las sociedades capitalistas; la corrupción es una realidad sistemática entre todas las clases dominantes, entre todos los partidos políticos de todos los países del sistema capitalista del planeta tierra. En la España capitalista de hoy, por ejemplo, el rey Juan Carlos de Borbón, su familia real, sus instituciones franquistas, su iglesia católica, sus partidos políticos tradicionales, (como el PP, el PSOE y otros) han sido denunciados sistemáticamente por estar involucrados en escándalos de corrupción masiva. Pero la monarquía española, borbónica, franquista (con sus instituciones y sus medios corporativos capitalistas) y sus partidos políticos de derecha siguen viviendo en la misma impunidad de siempre. Los Estados Unidos de América (EE.UU.) es uno de los extraordinarios ejemplos del sistema de corrupción y corruptor que modela el mundo contemporáneo. Los Estados Unidos es actualmente uno de los países donde hay uno de los mayores niveles de corrupción en todo el mundo. Y sin embargo, la media corporativa, las instituciones tradicionales y las autoridades gubernamentales de EE.UU. no permiten que la mayoría del pueblo estadounidense tome consciencia de lo que está pasando, por lo que seguirá promocionando la mitología que “los EE.UU. es la mayor democracia del mundo”, “los EE.UU. es el país que más respeta los derechos humanos de los individuos”... Todo esto es mitología política como vemos, recientemente en el artículo del periodista David DeGraw titulado, “The Wall Street’s Pentagon Papers: Biggest Financial Scam In World History”, donde demuestra que el banco central de Estados Unidos (la Reserva Federal, FED) realizó un “backdoor bailout” (rescate secreto) con el dinero de los impuestos de los contribuyentes estadounidenses. Es decir, la Reserva Federal (FED) ha distribuido en secreto $12.3 TRILLION tax dollars, del dinero de los contribuyentes estadounidenses a un pequeño grupo de banqueros. (8) Este gigantesco fraude ya fue denunciado anteriormente por el senador Bernie Sanders, (el actual candidato a la presidencia de los Estados Unidos). En 176 diciembre de 2012, Sanders denunció la Reserva Federal y su presidente (Chairman), Ben Bernanke, al Senado de Estados Unidos, además de informarnos de lo ocurrido (de este gigantesco proceso de corrupción financiera) en su artículo “A Real Jaw-Dropper at the Federal Reserve” en el Huffington Post (9). En Brasil, la corrupción ha existido desde los tiempos de la colonización portuguesa y también ha sido ampliamente practicada en el siglo XX-XXI por los partidos políticos tradicionales, tales como la antigua Unión Democrática Nacional (UDN), y ARENA (el partido de la dictadura militar de 1964), por el PSDB, por el PMDB y muchas otras organizaciones, políticas, económicas, militares y religiosas del país. En Brasil, la corrupción no es una característica única y exclusiva del Partido dos Trabajadores (PT). ¿Cómo olvidar, por ejemplo, que el ex presidente Fernando Collor de Mello fue elegido a la presidencia por una campaña política contra la corrupción (contra los "marajás" contra las "mordomias" en Brasil) y luego, finalmente, fue sometido a juicio político e impeached (impedido) por ser uno de los políticos más corruptos de nuestro país? No tengo ninguna duda que el PT, Lula, y sus representantes políticos han practicado y promovido la corrupción y que se han beneficiado de la corrupción que han promovido. Sin embargo, estoy del lado de todos los analistas que han argumentado que hasta ahora, los líderes del golpe no han podido demostrar ni probar nada que sea legalmente sustancial contra la presidenta, Dilma Rousseff; y que todo lo que los estafadores afirman en contra de Dilma ha sido solo propaganda para justificar y legitimar el golpe de estado a través del proceso anti-constitucional de destitución de la presidenta. Notas (organizadas por Catherine Bryan) 1) Véase el artículo de Emanuel Cancella, JANOT, O QUE O PAÍS QUER É JUSTIÇA PARA TODOS! publicado en el diario brasileño Tribuna da Imprensa, en el enlace:http://www.tribunadaimprensasindical.com/2016/06/janot-o-que-opais-quer-e-justica-para.html 2) Oxafam revela los siguientes datos: “A día de hoy, 62 personas acumulan la misma riqueza que la mitad de la población más pobre de nuestro planeta. Ver el enlace:https://www.oxfam.org/es/informes/riqueza-tenerlo-todo-y-querermas 177 3) Véase, por ejemplo, el papel de los contratistas en el caso de corrupción en el artículo “As quarto irmãs: Odebrecht, OAS, Camargo Corrêa e Andrade Gutierrez.” en el enlace: http://antigo.brasildefato.com.br/node/ 29039. 4) Recientemente, Wikileaks reveló que el vicepresidente golpista Michel Temer es informante de la CIA y el diario Folha de Sao Paulo (aunque de mala gana) tuvo que publicar esta importante noticia. Ver el enlace, http://www1.folha.uol.com.br/poder/2016/05/1771016-wikileaks-diz-quemichel-temer-atuou-como-informante-dos-eua.shtml. Y el reciente artículo, “Sérgio Moro, um juiz a serviço da TV Globo e do PSDB” muestra que el principal interesado en la "Operación Lava Jato" es el PSDB y las multinacionales del petróleo. Ambos son clientes de la esposa de Sergio Moro. Ver el enlace:http://cartamaior.com.br/?/Editoria/Politica/Sergio-Moroum-juiz-a-servico-da-TV-Globo-e-do-PSDB/4/33770. 5) El conocido periodista Sebastião Nery escribió un artículo para el periódico Tribuna da Imprensa denunciando las relaciones escabrosas entre Fernando Henrique Cardoso y la CIA. Nery resume: “ Esta história, assim aparentemente inocente, era a ponta de um iceberg. Está contada na página 154 do livro Fernando Henrique Cardoso, o Brasil do possível , da jornalista francesa Brigitte Hersant Leoni” (Editora Nova Fronteira, Rio, 1997, tradução de Dora Rocha). Ver el artículo completo en el enlace:http://acertodecontas.blog.br/atualidades/dinheiro-da-cia-para-fhc/ 6) Véase el reciente testimonio del periodista Fernando Rodrigues sobre la corrupción del gobierno de Fernando Henrique Cardoso en el enlace, https://www.youtube.com/watch?v=BkGGWSHlO8g 7) Véase el artículo de Pepe Escobar, “ Brasil e Rússia sob ataque de Guerra Híbrida" en el enlace, http://blogdoalok.blogspot.com/2016/03/pepe-escobarbrasil-e-russia-sob-ataque.html 8) Véase la traducción del artículo del periodista David DeGraw en el enlace, http://thoth3126.com.br/a-maior-fraude-financeira-da-historiamundial/ 9) El artículo del senador Bernie Sanders, “A Real Jaw-Dropper at the Federal Reserve”, se puede ver en el enlace: http://www.huffingtonpost.com/repbernie-sanders/a-real-jaw-dropper -at-the_b_791091.html Catherine Bryan es profesora de literatura y cultura latinoamericana. 178 Retroceso regional desde el Mercosur/ La integración amenazada https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214438 Basem Tajeldine y Laila Tajeldine Rebelión La victoria electoral del Comandante Hugo Chávez en 1998, de Luis Ignacio Lula Da Silva en 2002, de Nestor Kirchner en 2003, de Evo Morales en 2005 y de Rafael Correa en 2007 abrieron los caminos hacia la creación de nuevos espacios de integración regional, esta vez, basado la cooperación y la solidaridad mutua, bajo criterios NO puramente mercantiles y de respeto a las asimétricas económicas. La visión de aquellos gobernantes visionarios era de allanar los caminos con miras a la unión de nuestros países. El eje conformado entre los gobiernos revolucionarios y progresistas (Venezuela, Brasil y Argentina, Bolivia y Ecuador) logró enterrar durante la Cumbre de las Américas celebrada en 2005 en Mar de Plata, Argentina, al más ambiciosos y lesivo proyecto estadounidense que pretendía socavar las soberanías de todos los países de la región y someterlos a los intereses de sus transnacionales: El Área de Libre Comercio para las Américas, mejor conocido como el ALCA. La prioridad de los gobiernos progresistas y revolucionarios liderizados por Venezuela, Brasil y Argentina pasó a ser la integración regional y el intercambio Sur-Sur. Estos constituyeron un bloque opuesto de forma frontal al ALCA y los Tratados de Libre Comercio (TLC) bilaterales (o por separado) que desarrollaron Estados Unidos y Europa con países como Perú, Chile, Colombia y México. En el caso del Mercado Común del Sur (MERCOSUR) que había nacido en 1991 y adoptado políticas económicas influenciadas por las tesis neoliberales, lo cual le trajo serios problemas, con la llegada al poder de los gobiernos progresistas y revolucionarios, este organismo subregional logró colocar "los caballos de la política y al ser humano por delante de las carretas económicas"[1].Sin embargo, la respuesta del hegemon que vio perder a su histórico "patio trasero" no tardó en llegar. Para hacer frente a las nuevas realidades de la región, Estados Unidos promovió junto a sus países satélites-vasallos un conjunto de políticas destinadas a socavar al bloque suramericano. Por lo que se constituyó la Alianza del Pacífico con Estados Unidos para hacer frente al MERCOSUR. En el campo diplomático y las relaciones multilaterales, estos países presionaron por darle mayor peso a la Organización de Estados Americanos (OEA) con el propósito de hacer frente a la Unión de Naciones Suramericanas 179 (UNASUR) fundada en 2008 y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) creada en 2010, al tiempo que era reactivado el Comando Sur de EE.UU. y la 4ta Flota estadounidense en 2008 encargada de "velar por la seguridad del hemisferio y los intereses nacionales de Estados Unidos" y poner en marcha un nuevo Plan Condor 2.0, esta vez, por medio de acciones encubiertas y métodos de guerra no -convencional, orquestados a través de ONG's (la USAID y la NED) que incrementaron el financiamiento a los medios privados opositores, partidos y movimientos políticos con el propósito de desestabilizar aquellos gobiernos. La derrota electoral del Kirchnerismo en Argentina en diciembre de 2015, la consumación del golpe de Estado "institucional" en Paraguay 2012 y Brasil 2016, y el revés político del 6D ocurrido en Venezuela crearon un panorama político complejo de retrocesos en toda América Latina. Los días de gloria suramericana, en que la región se levantaba al unísono, en bloque, con posiciones propias y desafiantes al imperialismo están quedado atrás. No existen dudas que Ecuador, Bolivia, Venezuela, Nicaragua, El Salvador y Cuba resisten estoicamente a los éxitos de la arremetida imperialistas y de sus parásitas burguesía locales, pero los reveses políticos ocurridos en los países cuyas economías ejercían un peso específico de importancia en mecanismos como el MERCOSUR (Brasil y Argentina) significaron un duro golpe para la continuidad de los procesos integracionistas. Hoy nadie duda de que la región atraviesa por un proceso de restauración neoliberal que amenaza a todos sus pueblos. Restauración neoliberal en el continente y la agresión a Venezuela Recientemente, el actual ministro de economía de Argentina, Alfonso PratGay, develó los verdaderas propósitos que mueven la política exterior de los gobiernos de Mauricio Macri y al de su vecino usurpador Michel Temer. Frente a varios medios, Prat-Gay declaró en relación de los cambios políticos en Brasil que su país era muy "respetuoso del proceso institucional y, desde el punto de vista económico, quizás Brasil entienda que su integración al mundo no puede ser de manera individual, por lo tanto será una buena oportunidad para refundar el Mercosur" [2]. Los mismos gobiernos que plantean el restablecimiento del modelo neoliberal y su realineamiento a Estados Unidos, en esta oportunidad pretenden demoler los procesos de integración regional que tanto esfuerzo costaron a nuestros pueblos y su vanguardia. Años atrás, con el fortalecimiento del MERCOSUR, gracias a la prótesis colada por los gobiernos progresistas de Brasil y Argentina y la entrada de Venezuela al organismo, se pudo avanzar hacia la fundación de UNASUR, 180 con su Consejo Suramericano de Defensa, el Banco del Sur, entre otros organismos. Al calor de aquellos procesos de integración nacieron otros organismos, unos más temprano como la Alianza Bolivariana el ALBA y Petrocaribe en 2004 y la CELAC en 2010, espacios que derrotaron la Doctrina Monroe impuesta por Estados Unidos en toda la región. Desde la independencia de nuestros países, nunca el imperio estadounidense había estado tan aislado de todo el continente. La UNASUR y la CELAC espacios multilaterales en los que no participa Estados Unidos- fueron organismos creados para contrarrestar la influencia negativa de Estados Unidos en la región y generar la necesaria independencia política. América Latina había comenzado a desarrollar relaciones soberanas con otras potencias emergentes en el mundo, especialmente con China, país que prometió la inversión de 250 mil millones de dólares para los próximos años en el continente. Además, la región pasó a tener vos propia en los espacios internacionales para denunciar las pretensiones imperiales y combatir el modelo neoliberal que se pretendía imponer desde el norte a través de sus agentes políticos y las burguesías parásitas. Al respecto, el reconocido intelectual brasileño, Emir Sader, comentaba en su más reciente y certero artículo titulado "El desmontaje de la integración regional" que "el intercambio regional, la intensificación del comercio con China y la extensión y profundización del mercado interno de consumo popular fueron claves en esa resistencia a la recesión, que en otras condiciones nos habría llevado a la peor recesión de nuestra historia". Y que "el cambio de gobierno en Argentina y ahora en Brasil es la oportunidad tan aguardada por los EEUU para la ruptura de su aislamiento en América Latina" [3]. ¿Qué significa “refundar el Mercosur”? La derecha siempre ha querido, sin terminar con el Mercosur, abrir espacios para acuerdos bilaterales de libre comercio con la Unión Europea y Estados Unidos y su acercamiento con la Alianza del Pacífico. Es decir, se pretende imponer el TLC de golpe a todos el bloque regional, lo que en otras palabras sería, en efectos prácticos, el replanteamiento del ALCA para toda América Latina. Es ese el objetivo central de esa “refundación” a la que se refería el argentino Alfonso Prat-Gay, que resultaría en el comienzo del desmonte de los procesos de integración regional, debilitando al MERCOSUR, UNASUR y la CELAC, tal como reconoce Emir Sader en su citado escrito. La estrategia actual de los gobiernos neoliberales es arreciar el cerco contra Venezuela, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, El Salvador y Cuba. Para ello, han intentado utilizar a la OEA para justificar una intervención militar 181 estadounidense contra Venezuela bajo el falso pretexto de "crisis humanitaria". Ahora Paraguay, Argentina, Brasil y Uruguay pretenden evitar que Venezuela asuma la presidencia protempore del MERCOSUR, tal como corresponde según los estatutos del organismo de rotación alfabética. Para ello, esgrimen la falsedad de que en Venezuela se ha "roto con el hilo constitucional" y por tanto, aplicaría la declaración de Ushuaia que justificaría suspender al país de ese organismo. La restauración neoliberal no dispone del apoyo de las grandes mayoría de los pueblos de la región. Los movimientos y partidos de izquierda deberán asumir un papel más combativo para el rescate de los procesos de integración regional y el intercambio Sur Sur, para dejar de ser el “patio trasero” del Imperio. ¿Podrán las derechas bastardas de la región volver a reinstaurar el mismo modelo neoliberal que había fracasado estrepitosamente 20 años atrás? Después de tantos logros y conquistas sociales alcanzados por nuestros pueblos; después de haberse recuperado la dignidad y la soberanía de la región será muy difícil que se imponga el neoliberales en paz y sin resistencia. El jugo no ha terminado. Fuentes [1] Palabras del Comandante Hugo Chávez en el marco de la incorporación de Venezuela al MERCOSUR como país observador en 2006. [2] Declaraciones del ministro PratGay: http://www.telam.com.ar/notas/201605/147132-prat-gay-blanqueocapitales-moratoria-ordenamiento-economia.html [3] Emir Sader. http://www.alainet.org/es/articulo/177453 Observaciones sobre ciencia, poder político-militar y cuentas insaciables de resultados (y II) Eduard Rodríguez Farré y Salvador López Arnal Papeles de relaciones ecosociales y del cambio global https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214430 182 3. Si de pensar y no olvidar se trata La dependencia que los grupos de investigación tienen de la financiación pública y privada es tema conocido. Desgraciadamente esta última, que suele buscar resultados inmediatos en términos mercantiles y gananciales, está adquiriendo un protagonismo creciente que puede entrañar –y entraña ya de hecho- graves peligros que no nos son desconocidos. A ellos debemos enfrentarnos, frente a ellos debemos permanecer alertados y resistentes; sin duda, por supuesto que sí. Un ámbito más –muy importante y a veces olvidado- del necesario combate y de la imprescindible participación crítica de la ciudadanía, de las propias comunidades científicas y de sociedades que aspiran a otro orden de cosas. Ilustremos este punto. La vacuna, la VSV-EBOV, que llega un año y medio después del anuncio oficial de la epidemia del Ebola, ha sido desarrollada por la Agencia de Salud Pública de Canadá. La licencia, en cambio, está en manos de la farmacéutica estadounidense Merck. Este es un ejemplo, no el único desde luego, de investigación e innovación pública y producción y beneficio crematístico privado al que antes nos hemos referido. De acuerdo. Pero hay otros escenarios muy alejados que a veces se olvidan desde algunas perspectivas críticas. Un ejemplo. A mediados de 2006, la OMS lanzó un SOS internacional: se necesitaba la producción masiva, al coste más reducido, de la vacuna contra la meningitis A y C, con destino a los 23 países del llamado “cinturón de la meningitis” africano. Sólo una multinacional -“Sanofi Pasteur”- fabricaba la vacuna pero, dada la baja rentabilidad económica de su comercialización, había reducido drásticamente sus volúmenes de producción. África estaba al borde de la emergencia sanitaria. El color del dinero lo impregna todo, incluso la vida (es decir, la muerte en este caso) de millones de seres humanos. La OMS pidió entonces a laboratorios públicos y privados de todo el mundo que dieran un paso al frente y encontrasen la manera de fabricar millones de vacunas a bajo coste. Ninguna multinacional respondió; las cuentas no cuadraban. Sí lo hicieron, en cambio, dos laboratorios públicos de sendas naciones del Tercer Mundo. El Instituto Finlay de Cuba y el Instituto BioManguinhos de Brasil se asociaron para la creación de la vacuna vax-MENAC, específica para los tipos de meningitis que afectan a la región africana. En Cuba se produce el principio biológico y en Brasil se desarrolla el resto del proceso de producción, incluyendo la liofilización y el envasado. El precio final de cada dosis se redujo más de veinte veces. De los casi 20$ USA de la vacuna comercializada por la multinacional se pasó a un precio inferior a los 95 centavos. Desde entonces, la alianza Brasil-Cuba ha permitido fabricar vacunas para África, que son adquiridas y distribuidas por entidades como la propia OMS, UNICEF, Médicos Sin Fronteras y la Cruz Roja Internacional. 183 Por esta misma senda, otra ilustración No hay en nosotros, por supuesto, ninguna idealización cegada de la Unión Europea marcadamente neoliberal, que poco a poco, con resistencias que no deben ser olvidadas, se está intentando imponer a la ciudadanía. Pero de esta crítica consideración no puede colegirse sin más que todas las instituciones de esta Unión se manifiesten siempre serviles a las órdenes de los grandes mandatarios europeos y a los objetivos, crematísticamente insaciables, de las grandes corporaciones de la UE. No es así. Sirva el ejemplo de algunas actuaciones del Defensor, defensora en estos momentos, del Pueblo Europeo [1]: Un ciudadano irlandés pidió a la Agencia Europa de Medicamentos (EMA por sus siglas en inglés) acceder a una serie de documentos que contenían detalles de todas las potencias reacciones adversas graves relacionadas con un medicamento contra el acné. Su hijo se había quitado la vida después de tomar ese medicamento. La EMA rechazó la solicitud con el argumento de que las normas de la UE relativas al acceso a los documentos no se podía aplicar a los informes sobre posibles reacciones adversas graves a los medicamentos. Recurrió al Defensor del Pueblo. Tras su investigación, la Defensora concluyó que las normas de la UE sobre el acceso a los documentos sí podían aplicarse a todos los documentos en poder de la EMA. La Defensora recomendó, no puede imponer u ordenar, a la Agencia que revisara su negativa a permitir el acceso a los informes sobre reacciones adveras y, además, instó a EMA, en el marco de la política de información, a dar explicaciones adicionales para que la ciudadanía pudiera comprender con mayor facilidad los datos y su importancia. La EMA aceptó, tuvo que aceptar finalmente, la recomendación del Defensor del Pueblo y anunció la publicación de los informes. Adoptó, se comprometió a adoptar, una política de información más activa, dirigida a mejorar la transparencia en asuntos relativos al acceso a los documentos en su poder. No hay duda de que las prácticas pueden estar alejadas de los acuerdos y compromisos. También en este caso. No estamos ante en los compases iniciales de una rupturista revolución social, por supuesto que no. Pero las reformas alcanzadas en ocasiones tras movilizaciones ciudadanas pueden ayudar y algunas instituciones, incluso las de una UE muy amiga de la idea de un capitalismo como única alternativa económica e incluso civilizatoria, pueden conquistar algunas posiciones en una lucha prolongada y, desde luego, desigual. Se dirá, se podrá pensar tal vez: idealismo pueril bienintencionado, pensamiento desiderativo, olvido o incomprensión del decisivo papel de las gélidas aguas del cálculo egoísta, desconocimiento de la militarización de la ciencia, humanismo trasnochado, alejamiento o embellecimiento de las prácticas reales de las investigaciones, ignorancia de la competitividad 184 desalmada de las comunidades científicas realmente existentes, buenismo epistemológico, deseos afables frente a la suciedad de la ingrata y dura realidad. Nada de eso, no vivimos en el Edén. Conocemos el lado oscuro de la fuerza, las inhumanas e injustas prácticas económico-sociales de los poderes políticos y de las multinacionales. No nos es desconocido en absoluto el corazón impío de estas tinieblas. Existen, además, ejemplos que nos ubican en coordenadas no menos admisibles donde la tecnociencia contemporánea ha jugado un papel nada marginal y en el puesto de mando... Aunque con algún matiz por supuesto. 4. Si de denunciar y criticar se trata Además de ilustraciones atómicas hay ejemplos, más recientes, que nos sitúan en ámbitos científicos aparentemente más pacíficos e inocuos. Pero la realidad no se identifica siempre con la apariencia, tampoco en este caso. The Minerva Research Iniciative es un programa diseñado por el ex Secretario de Defensa norteamericano Robert M. Gates en 2008. Su prioridad es lograr “una comprensión más profunda de las dinámicas sociales, culturales y políticas que dan forma a las regiones de interés estratégico alrededor del mundo”. Existen antecedentes; los jasones [2] por ejemplo. El programa fue dotado de un fondo inicial de 50 millones de dólares que se ha ido incrementando. Académicos estadounidenses, “expertos” que trabajan como analistas en temas relacionados con las políticas de seguridad, se financian con él. Los amplios recursos disponibles se concentran en las grandes universidades usamericanas. Defensa busca definir y desarrollar conocimiento básico sobre las fuentes de conflictos presentes y futuros con atención especial a la comprensión de las trayectorias históricas de territorios clave. Se apuesta por una “ciencia social de vanguardia” y por estudios interdisciplinarios de destacados científicos en estos campos. Dos ejemplos de los temas seleccionados [3] en la lista de los catorce ganadores elegidos entre las más de 300 candidaturas que se presentaron para el período 2013-16: “La fortaleza de las normas sociales a través de las culturas: implicaciones para el conflicto y la cooperación intercultural.” (Michele Gelfand, Departamento de Psicología, Universidad de Maryland), “La Geografía Humana de la Resiliencia y del cambio; los derechos de la tierra y la estabilidad política en las sociedades indígenas de América Central” (Jerome Dobson, Kansas, presidente de la American Geographical Society). Este segundo aspira a dilucidar el impacto de estos factores en “las capacidades del Ministerio y las implicaciones generales para la defensa nacional de los EEUU”. Dobson no identifica los países en los que 185 incursionará ni los pueblos indígenas que serán “objetos de estudio”. Pretende definir, digitalizar cartográficamente y evaluar, los regímenes del uso de la tierra de las municipalidades indígenas. Con sus datos y resultados, los militares tendrán “nuevas capacidades para realizar la investigación geográfica humana, comparables con (pero más avanzadas que) aquellas que se emplearon extensivamente durante las dos guerras mundiales”. Minerva organiza conferencias con paneles de universitarios y de miembros del Departamento encargados de elaborar estrategias. También con responsables de operaciones militares. En ellas se habla de las investigaciones en marcha y de los impactos del programa en las ciencias sociales. En 2013, la reunión (que suele ser anual) tuvo lugar en la Universidad de California. Contó con la presencia de su Comité Directivo, del subsecretario para Estrategia de Defensa, Daniel Chiu, y del coordinador del Consejo Nacional de Inteligencia, Christopher Kojm. Entre los asuntos tratados destacaron: “Tecnología, poder y seguridad en China”, “Movilización para el cambio. ¿Quién se hace terrorista?”, “Cambio climático, acceso a los recursos y seguridad”. No falta en la lista de proyectos los de la antropóloga Montgomery McFate, la iniciadora del programa de científicos empotrados en las brigadas de combate de las guerras de Irak y Afganistán. La doctora McFate dirige el programa “Conocimiento cultural y Seguridad Nacional” y en Antropología militar intenta responder al siguiente interrogante: qué podemos aprender de la experiencia de vida y del legado intelectual de los científicos sociales que contribuyen directamente a las operaciones militares [4]. No se trata sólo de ciencias físicas, químicas y afines y del uso bélico de los sofisticados desarrollos técnicos que posibilitan. Cabe hablar, es necesario hablar, de las ciencias sociales y de su contribución al diseño y realización de las operaciones militares. No hay duda. Las terribles dimensiones son ésas. Pero también existen hay otras perspectivas que exigen más matices. 5. Si de señalar escenarios más humanos y justos se trata A finales de julio de 2012, Annie Thébaud-Mony [ATM] no aceptó la Legión de Honor que la entonces ministra del gobierno Cécile Duflot quería concederle. En una carta abierta dirigida a la entonces responsable de Igualdad, Territorios y Vivienda de la República francesa, esta investigadora de unos 70 años de edad explicaba que con su rechazo quería denunciar “la indiferencia” de la que es objeto la salud laboral y la “impunidad” de los “crímenes industriales”. Era indecente aceptar la condecoración después de llevar décadas y décadas trabajando sobre muertes obreras, tiempo en el que ella había dado “la señal de alarma sobre la situación en la que trabajan los 186 obreros, los peligros que corren para su salud, los peligros industriales a los que son expuestos”, sin que se hubiera producido ninguna mejora real, efectiva, en sus condiciones laborales. Las recomendaciones que ha ido realizando a lo largo de su dilatada carrera científica nunca han sido tenidas en cuenta por poderes públicos de muy diferente signo político. En una entrevista con Terra eco [5], ATM añadió algunas razones complementarias para explicar su actitud. Hace más de quince años que el amianto ha sido prohibido en Francia; en España se prohibió años después, en 2002 [6]. Se pensaba que a esta excelente, aunque muy tardía decisión, se sumaría la prohibición de otros productos industriales cancerígenos. Pero no ha sido así. Los “industriales” saben perfectamente que “ciertos productos que obligan a sus empleados a utilizar son peligrosos y que las condiciones de trabajo son patógenas”. Es una exposición dañina y deliberada de la vida ajena. “Las modificaciones del derecho del trabajo protegen más a los industriales y a los empleadores que a los asalariados”, denuncia ATM. En Francia y, desgraciadamente, en casi todos los países del mundo. El cuadro de enfermedades profesionales del régimen general de la Seguridad Social francesa enumera la mayor parte de los problemas músculoesqueléticos (PME por sus siglas). En 2009, un gobierno presidido por Sarkozy revisó este cuadro y endureció los criterios de reconocimiento de los PME y, con ello, la indemnización de los asalariados. Deben trabajar entonces los ciudadanos-obreros hasta quedar impedidos, pregunta la científica y humanista francesa. En lo concerniente a la exposición de los trabajadores asalariados a los productos cancerígenos, “ninguna medida se ha llevado a cabo a pesar de las alertas”. En Montluçon, en el departamento francés de Allier, Adisseo, una empresa que produce la vitamina A de síntesis para la alimentación animal, utiliza desde los noventa un cancerígeno potente, el cloracetal C5. Desde hace unos diez años la molécula ha aparecido en la cadena de producción de la empresa. Algunos trabajadores han desarrollado cáncer de riñón y ello “a pesar de que existen productos alternativos que permiten fabricar la vitamina A sin usar el cloracetal C5”. Pero Adisseo no quiere ni siquiera oír hablar de ello. ¿Por qué? Porque los cambios en la línea de producción tendrían costes, disminuiría la acumulación de capital, descendería la rentabilidad empresarial, les haría, proclaman horrorizados, menos competitivos. De este modo, sin introducir modificación alguna, ubicando siempre los cálculos costesbeneficios en un lugar destacado del puesto de mando y dirección, las trabajadoras se ven expuestos al peligro de sustancias tóxicas. “Esto es un crimen industrial”, afirma, sin eufemismos encubridores, la comprometida científica francesa. 187 Los asalariados del país de Jean Jaurès no trabajan en condiciones adecuadas. En los sectores de la química, la petroquímica, el automóvil, la metalurgia y, por supuesto, en la industria nuclear, la situación laboral es frecuentemente nociva. No tanto en la fase de producción, aunque también en ocasiones, donde “las medidas de confinamiento son sobre todo eficaces y muchos procesos son automatizados”, sino en la fase de mantenimiento y en la limpieza y gestión de residuos. Es en estos procesos cuando los trabajadores entran directamente en contacto con productos cancerígenos. La directiva REACH (Registro, Evaluación y Autorización de Sustancias Químicas) de la UE, donde se calcula que cada año fallecen por cáncer de origen laboral más de 30 mil trabajadores, está vacía de sentido. La observación crítica de ATM, a la que probablemente se sumaría complacido el científico y activista Jorge Riechmann, apunta a que la Reach ha introducido un principio positivo, ya que los industriales tienen que efectuar pruebas de no toxicidad del producto que van a utilizar… pero hay un retraso abismal. “Sólo algunas decenas de productos son examinados y ninguno ha sido prohibido en esta etapa”. Existe una verdadera “epidemia de cáncer” entre los trabajadores en su opinión. No es una exageración, vivimos un fuerte agravamiento de las desigualdades tóxicas. En 1980, un trabajador industrial “tenía cuatro veces más riesgo de morir de un cáncer antes de los 65 años que un mando superior”. En 2000, veinte años después, la proporción es diez veces superior, más del doble. Estos cánceres están relacionados con la exposición en el puesto de trabajo y durante un largo período de tiempo a múltiples sustancias cancerígenas y no, por el contrario, a las especificidades biológicas de cada trabajador, el nudo que la industria y sus científicos y políticos asalariados y serviciales suelen señalar. La paradoja social y científica que ATM denuncia puede formularse así: los riesgos se incrementan al mismo tiempo que aumenta nuestro conocimiento de ellos. Adquiere también una importancia decisiva el hecho de que los trabajadores no tengan posibilidades reales de elección. En numerosos sectores, “el modo de funcionamiento dominante es la subcontrata del trabajo”, con la correspondiente subcontrata de los riesgos. La servidumbre salarial causa estragos. Los “emprendedores” industriales, al igual que los financieros o los ejecutivos de fondos de inversión, se burlan de los poderes públicos. A pesar de las numerosas informaciones científicas contrastadas, “ponen constantemente en duda los peligros que sus empleados corren”. La ciencia, los conocimientos científicos, no son en este caso amigos serviles. Por si faltara algún detalle más falsario, cínico y cruel en el paisaje, tienden a presentar estos peligros profesionales como inevitables y normales. Es lo que hay, dicen, se dice, se 188 afirma, se repite… pero no es de ninguna de las maneras lo que debería y podría existir. Es una gran estafa política y sociocultural su supuesta y falsa inexorabilidad. Además, denuncia ATM, cuando hay un accidente de trabajo se indemniza mal y sin examinar la causa del peligro industrial responsable de lo sucedido. No hay ciencia sino existe consciencia La comprometida científica francesa pone finalmente énfasis en la señalada creciente subcontratación de asalariados (práctica más que extendida en la citada industria nuclear, también en la nipona o en la española) y en “las instituciones representativas del personal que sistemáticamente son silenciadas en las empresas de subcontrata”. El arma prioritaria, la condición necesaria (aunque no suficiente) para la mejora real, para la dignificación de las condiciones laborales, es la información -veraz y contrastada- a los trabajadores y trabajadoras de los peligros que corren en el desempeño de sus tareas. Cuanto más clara, concisa y documentada, mejor que mejor; contra mejor buena ciencia, mayor humanismo crítico se abre ante nuestros ojos y prácticas. La acción y las protestas alocadas, sin solidez, aunque comprensibles en numerosas ocasiones dada la más que justa indignación que las mueve, no conducen a ninguna parte, a ningún lugar en el que podamos asirnos con confianza. “Indignación y lucha documentada”, rebeldía, protesta y ciencia crítica, éste es el lema central en opinión de Annie Thébaud-Mony. También es el nuestro Notas 1) Por la misma senda. En 2014, la Defensora del Pueblo, la iniciativa AllTrials y multitud de organizaciones se opusieron frontalmente a la EMA cuando la agencia propuso que los datos de los ensayos clínicos se pudieran consultar únicamente en un formato de solo lectura, en una pantalla, sin poder descargarlos, grabarlos y estudiarlos. Tras la polémica, la EMA dio marcha atrás, aunque permitirá que la industria elimine de sus ensayos información que considere confidencial por motivos comerciales (además, los ensayos clínicos anteriores a 2015 no se harán públicos de manera proactiva sino previa petición). Pero muchas organizaciones médicas ya han puesto en duda la necesidad de algunas de estas censuras. 2) Los jasones eran grandes científicos del mundo académico norteamericano (Eugene Wigner, Charles Townes, Hans Bethe, Luis Álvarez, Murray GellMann, Steven Weinberg, Val Fitch, Leon Lederman, y Henry Kendall) que, durante la guerra fría, asesoraron directamente al Departamento de Defensa del gobierno (véase Ann Finkbeiner, Los jasones. La historia secreta de los científicos de la guerra fría. Paidos, Barcelona, 2007, traducción de Albino 189 Santos Mosquera).. El Pentágono, probablemente, es la principal fuente de investigación mundial en los temas más diversos que tengan interés para sus objetivos (desde la física nuclear hasta la antropología cultural pasando por la toxicología). 3) http://minerva.dtic.mil 4) A partir de Gilberto López y Rivas , “Los académicos al servicio del imperio: The Minerva Research Iniciative”. www.jornada.unam.mx/2014/04/11/index.php?section=opinion&a rticle=025a2pol 5) http://www.terraeco.net/Les-industriels-mettent,45726.html (traducción castellana de Carmen García Flores en http://www.rebelion.org/noticia.php?id=155395). 6) Véase el excelente e imprescindible estudio: Francisco Báez Baquet, Amianto: un genocidio impune , Málaga, Ediciones del Genal, 2013. Fuente: Papeles ecosociales y del cambio global , n.º 133, primavera de 2016. Chile / DDHH: “No tenemos otro camino que crear un movimiento amplio por los DDHH y Sociales” Andrés Figueroa Cornejo [email protected] Hablan Roberto D’Orival y Verónica de Negri “Cuando ardió la ciudad, cuando el tanque arrasó y su pueblo cayó traicionado otra vez, la vi mucho a través de los meses actuar, trabajar, ayudar, desgarrarse los pies” Patricio Manns Andrés Figueroa Cornejo El invierno de Santiago de Chile, desde la perspectiva de las resistencias populares, se combina dinámicamente entre el Pueblo Mapuche, el movimiento estudiantil, la lucha por la salud pública, la vivienda social digna, las huelgas desagregadas del pueblo trabajador y las batallas del ambientalismo consecuente. Sin embargo, las iniciativas por los derechos humanos, en sus diversas manifestaciones, no duermen. Roberto D’Orival Briceño es el coordinador del Colectivo 119 de DDHH (por las 119 personas detenidas y desaparecidas hace 41 años por la tiranía (1) y en pleno accionar de la Operación Cóndor o asociación criminal de las policías políticas de varios Estados de América Latina). La pasada tarde-noche del 6 de julio, el Colectivo 119 realizó una actividad en la comuna de Recoleta de Santiago de Chile. Roberto D’Orival (hermano del detenido desaparecido Jorge D’Orival Briceño en el marco del ‘caso de los 119’) señala que como organización“Desde siempre hemos establecido un paralelo entre la lucha que dieron las y los caídos, las luchas que nosotros/as hemos dado, y las luchas 190 actuales que están ofreciendo los diversos territorios, sectores, grupos, colectivos en contra del capitalismo a lo largo de este lugar llamado Chile. Reconocemos a las y los que luchan hoy a nuestros/as muertos. Ese es, quizás, el motor menos científico y más emotivo de porqué queremos imperiosamente ligarnos a las reflexiones y las luchas del presente.” “PARA NOSOTROS/AS LA CONTRADICCIÓN ES EL CAPITAL VERSUS LA VIDA EN TODA SU RIQUEZA” -¿Cuáles son los quehaceres principales del Colectivo 119 aquí y ahora? “El 2016 queremos abocarnos a tocar dos grandes temas. El primero tiene que ver con los derechos de la Madre Naturaleza, de la cual nosotros/as somos bendecidos y favorecidos. Ella nos ha permitido la generación de la cultura. ¡Y mira el pago que se le ha dado por el capitalismo y por el Estado chileno sometido por el capital! Por eso hoy convocamos a un excelente foro-participativo con tres expositoras y lideresas de las luchas medioambientales como son Francisca Fernández Droguett por la batalla del agua, Nathalie Joignant que es parte de una coordinación en lucha por el No Alto Maipo, y Lucía Sepúlveda quien participa protagónicamente en un colectivo contra el engendro imperialista del TPP (o Alianza del Pacífico). Estas problemáticas nos indican claramente que no sacamos nada con enfrentar ámbitos de política institucional, sacar constituciones, elegir alcaldes y diputados, si tenemos territorios, mar y afluentes acuíferos devastados. O sea, el cambio cultural respecto de nuestra relación con el medioambiente es incluso anterior al cambio político. Aquí estamos hablando de la sobrevida de la especie. Para nosotros/as la contradicción es el capital versus la vida en toda su riqueza. Ahora mismo, los habitantes de la cuenca de Santiago de Chile estamos consumiendo minerales pesados en el agua sólo porque unos pocos tenían un superávit de esos elementos dañinos y les convino venderlos a los ‘huevones’ de los chilenos para ser combinados con el agua potable. Asimismo, estamos respirando pésimo. Los propios índices que las instituciones del Estado entregan son catastróficos. Estamos matándonos, secando nuestros pulmones, nuestros riñones y corazones.” -¿Cómo calificas las realidades que acabas de mencionar? “Este cuadro constituye un verdadero conflicto de baja intensidad en contra de la población, con el fin de controlar al ser humano y a las organizaciones en resistencia mediante un sinnúmero de agresiones. Como si fuera poco, vivimos en metrópolis que se van conurbanando, asimilando y que cada día nos alejan más de ese derecho que es el Buen Vivir.” EL PATRIARCADO Y LA VIOLENCIA EN CONTRA DE LAS MUJERES -¿Cuál es la segunda línea de trabajo que están ejecutando? “Asimismo, queremos relevar este año a una de las instituciones chilenas rectoras desde siempre y que se expresan con brutalidad hoy y antes a través del abandono del Estado: el patriarcado y la violencia en contra de las mujeres. Por ello presentaremos una obra de teatro/debate que se llama “Cuerpo quebrado” que dirige Natalia Cuéllar. La obra se basa en los testimonios de tres mujeres detenidas desaparecidas: Michelle Peña, del Partido Socialista (2); Cecilia Labrín, militante del MIR (3); y Reinalda del Carmen Pereira, del Partido Comunista (4). Son tres mujeres embarazadas, como muchas militantes y no militantes de este país que cayeron durante la dictadura cívico-militar, y que siguen cayendo en el presente en medio de la resistencia Mapuche. No sólo son violados sus derechos políticos, sino que sus cuerpos son territorio de captura y de la violencia política y sexual, que es donde enfatizan (o condensan) las fuerzas militares del Estado y la policía política, el crimen y la tortura patriarcal.” -La violencia patriarcal está mucho más extendida en las sociedades… 191 “Por eso desde allí deseamos trasladarnos al ámbito de la cotidianidad en un Chile donde no pasa una semana en que no se produzca un caso de alguna mujer agredida o torturada por su pareja, por el medio social, porque es negra, porque es mapuche, porque es pobre, porque es analfabeta, porque no tiene consciencia de su ser ni de sus derechos. Hoy la lucha por los DDHH no pasa sólo por los desaparecidos/as, los/as muertos, los/as torturados de la dictadura. El mundo de los DDHH no quiere asumir un debate, al menos en Chile, que tiene que ver con los derechos de la mujer y con las justicieras demandas de los feminismos.” “¿SERÁ QUE NUESTRAS PRÁCTICAS EXPRESAN LA COLONIZACIÓN DE LA IDEOLOGÍA DOMINANTE?” -¿Qué otras debilidades adviertes en la lucha por los DDHH en el país? “Dentro de las carencias de la lucha de las distintas organizaciones por los DDHH, no es posible que no estemos gritando ¿Dónde está José Huenante (5)?, ¿dónde está José Vergara (6)? El primero desaparecido durante el gobierno de Lagos Escobar, y el segundo bajo este gobierno de Bachelet. ¿Cómo es posible que hoy los defensores/as de los DDHH en dictadura seamos incapaces de decir basta a la militarización y represión, al acoso y el genocidio en contra del Pueblo Mapuche?, ¿cómo es posible que no acompañemos la lucha del movimiento estudiantil cuando los DDHH contemplan la educación?, ¿será que nuestras prácticas expresan la colonización de la ideología dominante?, ¿hasta cuándo reproduciremos estas especies de barreras y parcelas infranqueables entre cada uno de los dolores del otro/a? Para destruir estas fronteras impuestas y autoimpuestas por el conjunto de movimientos sociales y populares no tenemos otro camino que construir una suerte de movimiento amplio por los derechos humanos y sociales que tenga la capacidad de revertir el actual proceso de devastación y muerte.” A 30 AÑOS DEL ASESINATO DE RODRIGO ROJAS, HABLA SU MADRE, VERÓNICA DE NEGRI El mismo 6 de julio de 2016 al mediodía, en la Plaza de la Constitución, a metros del palacio de La Moneda envallada como un cuartel, distintas agrupaciones, personas, artistas y comunicadores sociales conmemoraron los 30 años del espantoso asesinato del joven fotógrafoRodrigo Rojas, quemado vivo por militares el 2 de julio de 1986, en medio de una jornada de protesta contra la tiranía y reprimida por un operativo conjunto. En el acto evocativo, un grupo de fotógrafos y camarógrafos independientes revelaron como un puzle de la memoria, una gran fotografía cuadriculada que retrata a Rodrigo Rojas. Verónica de Negri (7), madre de Rodrigo Rojas, afirmó que “Para mí es conmovedor este acto. No hay año en que las y los fotógrafos y los movimientos sociales no estén pidiendo justicia. Y los que hace 30 años no habían nacido, también están. ¿Qué nos dice eso? Que las y los jóvenes quieren justicia, y si el gobierno es incapaz de escucharlos, está perdido.” -¿Qué piensas del sistema de partidos políticos dominante? “Que dominante sigue la derecha porque son los dueños del dinero.” -Los gobiernos civiles pos-dictadura hablan de tu hijo como un caso emblemático… “Yo me niego a que Rodrigo sea un caso “emblemático”. Todas las víctimas valen exactamente lo mismo. La estrategia de los casos “emblemáticos” fue la forma más cruel y premeditada para dividirnos.” “¿EL DINERO SILENCIA A LA GENTE?” 192 -Hoy estamos en medio de una campaña institucional de dejar en libertad a los pocos genocidas de la dictadura que están presos (8)… “Simplemente es una política de cobardes y vendidos/as. ¿Cómo se puede permitir que los violadores de DDHH, criminales de lesa humanidad, salgan libres y pasen a convertirse en víctimas de quienes fuimos víctimas? ¿Y qué la Presidenta Bachelet no habrá la boca al respecto? ¿El dinero silencia a la gente? Porque a mí el dinero no me sirve. Yo quiero justicia para mi hijo. A mi familia, como a miles de familias, el golpe de Estado de 1973 nos quitó la vida.” “TODOS/AS LOS GOLPISTAS TIENEN RESPONSABILIDAD EN LA MUERTE DE MI HIJO, COMO EN LO QUE A MÍ ME HICIERON” -¿No crees que ya sería hora de que las distintas agrupaciones de DDHH se unieran como una sola fuerza? “Eso es lo que estoy pidiendo durante años. Sin embargo, esta actividad, por ejemplo, ha logrado reunir a varias organizaciones ligadas a los DDHH. Porque finalmente sólo en la medida en que nos unamos, lograremos conseguir lo que buscamos. Y no se trata sólo de justicia, sino de la construcción de un país. Recuerdo que en el exilio nos reunimos en torno al Chile Democrático donde trabajábamos todos juntos para desplomar a la dictadura. Otro tanto pasó dentro de Chile, hasta que, claro, vinieron las negociaciones con Estados Unidos y el español Felipe González con la Democracia Cristiana chilena y sectores del Partido Socialista de Chile para la llamada “salida pactada” del régimen militar, que incluyó el plebiscito de 1988. Incluso recuerdo que entonces se estaba candidateando para primer Presidente civil del país el democristiano (DCCh) Gabriel Valdés, pero los norteamericanos y Felipe González impusieron a Patricio Aylwin (DCCh), que era más “vendido” que Valdés. Todos/as saben que Patricio Aylwin, como Presidente de la Democracia Cristiana durante la Unidad Popular de Salvador Allende, fue uno de los artífices del golpe de Estado de 1973. De hecho, aunque haya muerto, yo lo continúo responsabilizando por el asesinato de mi hijo Rodrigo. Todos/as los golpistas tienen responsabilidad en la muerte de mi hijo, como en lo que a mí me hicieron. Porque yo no me olvido de las violaciones sexuales y torturas que sufrí en manos de los agentes de la dictadura.” Notas 1. http://www.memoriaviva.com/Desaparecidos/119.htm 2. http://www.memoriaviva.com/Desaparecidos/D-P/pen-her.htm 3. http://www.memoriaviva.com/Desaparecidos/D-L/labrin_lazo__reinas.htm 4. http://www.memoriaviva.com/Desaparecidos/DP/reinalda_del_carmen_pereira_plaz.htm 5. http://www.ceiboproducciones.cl/?product=la-vida-breve-de-jose-huenante-historiadel-primer-detenido-desaparecido-en-democracia 6. http://www.radiovillafrancia.cl/reportaje-el-caso-de-jose-vergara-detenido-porcarabineros-y-hasta-ahora-un-desaparecido-en-democracia 7. http://www.rebelion.org/noticia.php?id=202286 8. http://kaosenlared.net/chile-agrupaciones-de-ddhh-en-contra-de-libertad-degenocidas-de-la-dictadura-carta-a-presidencia/ 193 Entrevista a Pedro Brieger, periodista argentino y director del portal de noticias Nodal.am/ La restauración conservadora en América Latina https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214441 Tarik Bouafia Investig Action Mientras América Latina vive fuertes convulsiones y hace frente a nuevos desafíos, Investig’Action ha tenido el honor de entrevistar a Pedro Brieger, eminente periodista argentino y director del portal de noticias Nodal.am, analista internacional y gran conocedor del continente latinoamericaino. Resistencias populares en Brasil, hegemonía de la derecha en Perú, agresiones contra Venezuela… todos los temas candentes han sido abordados con el fin de permitir a nuestros lectores hacerse una idea un poco más clara sobre el presente y el futuro del continente Latinoamericano. -¿Qué análisis hace de las manifestaciones de los profesores mexicanos y de la terrible situación que han sufrido? -México tiene una estructura estatal represiva que no se ha desmontado sino que se ha incrementado justamente por el tema complicado del narcotráfico, del vínculo con Estados Unidos… Hay en ese país movimientos sociales muy poderosos. Pero hay ver que pasó exactamente en Oaxaca como para poder determinar a que se debió esta represión. -¿Ve una relación con lo que pasó con los estudiantes de Ayotzinapa en 2014? -Es muy probable que haya una relación entre esos dos aontecimientos, si. Oaxaca ha sido también un punto importante de protesta estudiantil y de docentes. México es un país con muy poca tolerancia hacia los movimientos sociales, eso se verificó con el movimiento zapatista en su momento que era un moviento social muy particular que surgió en Chiapas. Pero México tiene altos niveles de pobreza y para mi el tema de los movimientos sociales tiene mucho que ver con zonas de alto nivel de pobreza. -Sobre Brasil, estamos a más de un mes de la suspensión de Dilma Rousseff. ¿Cuál es su análisis sobre este golpe en Brasil y cómo ve el futuro próximo del país a nivel económico y político? 194 -Por lo general, yo no lo defino como golpe de Estado. En efecto, la definición «Golpe de Estado» remite a militares destituyendo a presidentes, cerrando el parlamento, prohibiendo partidos politicos, sindicatos, movilizaciones… Creo que una de las características de la derecha latinoamericana en estos últimos tiempos es acusar a los gobernantes progresistas de violar la constitución o en el caso brasileño de ir en contra de la legalidad. Asi que esa derecha apela a la legalidad, a la institucionalidad y tratan de mantener una gran cuota de legalidad combinado con los métodos «tradicionales». Por ejemplo, en Honduras, en 2009, se destituye a Manuel Zelaya, se lo saca del país pero se mantiene la legalidad al poner a quien corresponde efectivamente a la sucesión: Roberto Micheletti, que era el presidente de la Asamblea Nacional. En el caso de Fernando Lugo en 2012 en Paraguay, hay claramente un golpe de Estado parlamentario. No le dan la posibilidad de defenderse, en 24 horas lo destituyen… pero también mantienen la legalidad. En esos dos casos, la derecha afirma que fueron los gobernantes quienes violaron la legalidad. El caso de Brasil es más complejo. Se vota primero en la Cámara de Diputados, luego en el Senado, y la presidenta Dilma Rousseff sigue en ejercicio. Hay que recordar que ella sigue siendo la presidenta de Brasil, no se la destituyó, se la suspendió provisionalmente hasta que vote definitivamente el Senado. Asi que también se trata de mantener un manto de legalidad…acusándola de haber violado la legalidad. Esto es un desafío intelectual también para entender cómo act a la derecha latinoamericana hoy en día, acusando a los gobiernos progresistas de violar la legalidad. Dilma Rousseff habla de golpe de Estado y es lógico que lo haga porque eso tiene un sentido político. Pero me parece que la complejidad de la situación combinada en Honduras, en Paraguay o en Brasil muestra que la derecha latinoamericana está apelando a otros recursos y no a los tradicionales métodos de golpes de Estado. -¿Cuál es el papel que ha podido desempeñar Estados Unidos en ese golpe parlamentario? -Es difícil saberlo. Habría que tener acceso a documentos que prueben el rol de Estados Unidos en lo que ha pasado en Brasil. Esta claro que Estados Unidos tenía un gran proyecto para América Latina para el siglo XXI, que era el Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA), y que fracasó en 2005 en Mar del Plata porque no se pudo implementar. Pero eso no significa que Estados Unidos se ha quedado quieto. Esta claro que frente a la ofensiva de los gobiernos progresistas en el sentido más amplio de la palabra, ha tratado de debilitar cualquier iniciativa de esos gobiernos progresistas como el Mercosur, el UNASUR, la Celac. Yo no sé si Estados Unidos está detrás de lo que está sucediendo en Brasil. Pero eso no implica que Estados Unidos no haya ayudado a sectores 195 opositores en Brasil, en Venezuela, en Ecuador o en la Argentina… Ahora bien, creo que en el caso brasileño, el aspecto de la corrupción estructural va mucho más allá de los Estados Unidos. Por eso creo que hay que tener acceso a los documentos para poder determinar el rol de los Estados Unidos. Pero está claro que Estados Unidos sigue mirando a la región como su gran área de influencia y no va a quedarse quieto sin destabilizar a los gobiernos progresistas. -Desde que asumió Temer como presidente interino, se ha dejado de hablar de Brasil. Sin embargo, siguen las protestas contra el golpe parlamentario… -En el portal que dirijo, Nodal, precisamente todos los dias mostramos las marchas que hay en contra del gobierno del presidente interino Michel Temer. Efectivamente, todos los dias hay movilizaciones. Pero al mismo tiempo, es verdad que las grandes agencias de noticias no hablan de eso, para dar una imagen de normalidad en Brasil, lo que no es así. -El 5 de junio pasado, Pablo Kuczinsky, un ex-banquero ganó la elección presidencial en Perú. Pero lo que ha llamado particularmente la atención, es el resultado de Keiko Fujimori que perdió con muy poca diferencia. ¿Cómo se puede explicar ese arraigamiento del fujimorismo en la sociedad peruana, mientras que Alberto Fujimori, que gobernó de 1990 a 2000, fue condenado por corrupción y violación de los derechos humanos? -Creo que hay dos elementos. En primer lugar, la descomposición de la Alianza Popular Revolucionaria America (APRA), un partido histórico, como consecuencia de la represión hacia las fuerzas de izquierda que después del Sendero Luminoso tuvieron serias dificultades para articularse en el escenario politico. Y en segundo lugar, debido a que el gobierno de Alberto Fujimori llevó adelante algunas medidas positivas para las clases populares, más allá de las prácticas neoliberales y la gran apertura de los mercados. De todas formas, también hay que tomar en cuenta que Veronika Mendoza con el Frente Amplio (izquierda) salió en tercera posición. Tiene la segunda bancada mas importante en el parlamento detrás del fujimorismo, que tiene mayoria absoluta. Pero bueno, lo que es cierto es que la represión del fujimorismo desarticuló en gran medida a los sectores opositores. -¿Cuál es su punto de vista sobre las recientes declaraciones del secretario general de la Organización de los Estados Americano (OEA), Luis Almagro y más generalmente de la campaña internacional puesta en marcha contra Venezuela? 196 -Creo que la disputa a nivel continental, o como bien dice el economista español Alfredo Serrano Mancilla, en este «continente en disputa», se refleja muy bien en Venezuela con los organismos regionales. Porque quien tenía una muy fuerte impronta era la UNASUR. Pero el cambio de gobierno en Argentina y la suspensión de Dilma Rousseff le dio mucho más fuerza a los sectores conservadores que prefieren que cualquier intervención en América Latina se de a través de la OEA, tras la cual está Estados Unidos. Y creo que ese empuje se ve claramente reflejado con la postura del secretario general de la OEA, Luis Almagro, quien presentó un documento abiertamente a favor de la oposición en Venezuela, tomando prácticamente todos los puntos que plantea la oposición venezolana con respecto a la consulta popular o al referéndum revocatorio que se puede aplicar. Y creo que esa disputa es muy visible porque intervinieron a través de la OEA. Es por un lado un triunfo para la oposicion venezolana meter a la OEA en el pais, pero también es un triunfo para el gobierno de Venezuela evitar que la OEA siga avanzando y que se haga por el intermedio de la UNASUR. -En efecto, hoy en dia, hay claramente dos bloques que se enfrentan en el continente. Por un lado, el bloque conservador con Brasil, Argentina, Perú , Colombia… abiertamente a favor de los tratados de libre-comercio y de las politicas neoliberales. Y por otro lado el bloque progresista, con Venezuela, Bolivia, Ecuador, Cuba… que apuestan por una mayor integración regional. ¿Será esa disputa la que hoy caracteriza a América Latina? -Si y por eso es correcto lo de un continente en disputa. Esta claro que desde que Chávez ganó las elecciones en 1998, se desarrolló una corriente progresista muy fuerte en Argentina, Brasil, Uruguay, Ecuador, Bolivia, Venezuela… Los sectores conservadores se encontraron debilitados por ese avance progresista. Sin embargo, las situaciones que vivimos en estos últimos tiempos marcan un cambio. El triunfo electoral de Macri en Argentina es el primer triunfo electoral de la derecha latinoamericana por sobre un gobierno progresista. Esto es un cambio. Esto por supesto que le da fuerza a la corriente liberal-conservadora, más aún si tomamos en cuenta la situacion en Brasil, el triunfo de la oposición en las elecciones legislativas en Venezuela, el fracaso del referéndum en Bolivia. Esto le da mayor posibilidades a la derecha latinoamericana de avanzar con su propio proyecto de tratado de libre comercio, de reforzar a la OEA, de reforzar a la Alianza del Pacifico, Alianza que nació para debilitar al Mercosur y a la UNASUR. -Pero ¿como explica esa contraofensiva tan rapida y brutal de la derecha latinoamericana en tan poco tiempo contra gobiernos que, más allá de los errores que cometieron, tuvieron un apoyo popular importante? 197 -Hay muchos factores. Desgastes, influencia de los medios de comunicación muy poderosos, aparato político-jurídico que no fueron transformados de raíz, aparatos juridicos que están en profunda relación con medios de communicación. No hay que olvidar que las naciones latinoamericanas fueron creadas por clases sociales a sus imágenes y semejanzas con aparato juridicospoliticos y mediáticos a su servicio. Lo que encontraron en esos últimos años fue una corriente progresista que trató de revertir esta situación de manera más o menos radical según los casos. No es fácil cambiar estructuras sociales, politicas, económicas de décadas… más aún cuando hubo golpes de Estado, cuando hubo represión. -Fue en ese sentido que algunos analistas reprocharon a Dilma, Lula y al PT de no haber cambiado la estructura política de Brasil que sigue siendo afectada por la corrupción… -Yo escribí un articulo hace unos años, precisamente señalando que había una corriente en Ecuador o Bolivia que había decidido refundar los paises en base a la movilización popular, y que había otros como en el caso de Brasil que habian decidido pactar y negociar. Bueno, esto marca claramente una diferencia. -Y la derecha recuperó el tema de la corrupción a su favor… -Por supuesto. El tema de la corrupción es un tema muy serio. El Partido de los Trabajadores (PT) es un ejemplo muy claro de movimiento social que surgió con el lema de la lucha contra la corrupción, que se presentaba como un partido diferente y sin embargo terminó cayendo en la misma corrupción que el resto de los partidos politicos. Por eso hoy, se lo ve al PT como parte delestablishment justamente por no haber cambiado la estructura politicaeconómica y también por haber caído en casos de corrupción. -Vamos a terminar con el tema de Argentina. ¿Cómo interpretas ese cambio de rumbo en la politica exterior de Argentina? -Lo que está haciendo el presidente Macri está en sintonía con lo que dijo siempre. Apoyó la oposición en Venezuela, siempre estuvo a favor de las políticas neoliberales y está tomando una postura coherente con lo que venía diciendo desde siempre. Creo que lo importante a nivel latinoamericano es que es la primera vez que la derecha en estos últimos quince años logra un triunfo sobre un gobierno progresista en el sentido más amplio de la palabra. Y por supuesto que Macri ha tejido los vínculos con la derecha latinoamericana, con la derecha europea y además está claro que busca destruir todo aquello que se construyó con el kirchnerismo, del mismo modo que la derecha brasileña claramente quiere destruir todo aquello que construyó 198 el PT. Por eso cuando votaba el 17 de abril en la Cámara de Diputados, decía Fora Dilma, Fora Lula, Fora PT. El objetivo de la derecha latinoamericana frente a los procesos progresistas es destruir toda aquella política de inclusión que se llevó adelante. Toman el tema de la corrupción como un tema importante pero en realidad el objetivo es destruir todo lo que ha sido construido. La corrupción no nació en América Latina con los sectores progresistas, la pobreza tampoco, todo lo contrario. Los sectores progresistas lo que trataron de hacer es incluir a millones que estaban fuera del sistema. Tarik Bouafia, Periodista y coresponsal en Argentina para Investig’Action. Fuente original: http://www.investigaction.net/es/la-restauracionconservadora-en-america-latina/ Política y crítica de las armas Raúl Prada Alcoreza http://www.bolpress.com/art.php?Cod=2016071302 Vamos a tocar un tema escasamente debatido, mucho menos analizado críticamente, pues también se ha vuelto como un fetiche asumido, desde la exaltación de la “violencia revolucionaria”, como si la violencia en la revolución le diera a ésta radicalidad. Es como si la furia diera radicalidad al discurso denunciativo o interpelador. Esto es como dejarse llevar por el sensacionalismo de los significantes y de las formas simbólicas, sin atender a la única cuestión que da radicalidad al enunciado, al discurso y a la posición política; ésta es la raíz del problema, la raíz de la cuestión. Lo que importa es la crítica al poder; la crítica, interpelación y acción contra las dominaciones; la crítica de la “ideología”, la crítica, la desconstrucción y el desmantelamiento del sistema-mundo capitalista; las consecuencias prácticas de esta crítica. En este sentido, la cuestión de las armas fue un tema fundamental en los debates de las corrientes revolucionarias. En estas posiciones había desde las tendencias pacifistas hasta los fundamentalismos violentos. Resumiendo el mapa de estos debates, podemos decir, que la cuestión de las armas giraba, en un principio, por lo menos, en tres tópicos: el de la defensa de las organizaciones, del proletariado, del pueblo; el de la conquista del poder; el de la defensa de la revolucióntriunfante. En una segunda etapa, los tópicos aumentaron; entre estos, se abrió al debate la irradiación de la revolución por medio de la expansión de las armas, usando al “ejército revolucionario”. Hubo una variante, la guerrillera, que se planteó estairradiación como foco, que se instalaba en el territorio de un país; esperando que el focose convierta en guerra de guerrillas a mayor escala. También debemos citar, en esta lista, incorporando un tópico, de la misma manera, poco discutido; éste es el del uso de la violencia del “Estado revolucionario”, contra la propia sociedad; tanto para efectuar las “transformaciones”, así como mantener el orden, de la misma manera, para desterrar a la “oposición conspiradora”. Este último punto es de suma importancia, tomando en cuenta, la experiencia social política de los “Estados revolucionarios” del socialismo real. Raúl Prada Alcoreza La pregunta es: ¿La revolución triunfante debe usar la violencia para transformar la sociedad? Vamos a dar sobreentendida la necesidad de organizar la defensa, recurriendo a las armas; así como, dependiendo de lascondiciones de posibilidad histórica-política y circunstancias coyunturales, hacer uso crítico de las armas para efectuar el desenlace revolucionario; lo mismo, suponemos que es menester defender la revolución triunfante. Empero, ¿la revolución se exporta de un país a otro, sobre todo, usando la “violencia revolucionaria”, recurriendo a la expansión de la guerra, transfiriendo la “revolución” con el uso de las armas? 199 Por otra parte, ¿cuándo se usa la violencia en la propia sociedad para “transformarla”, sigue siendo unarevolución? ¿No es este fenómeno la reiteración recurrente del uso de la violencia del Estado burgués, que ejerce la violencia para mantener el orden o, si se quiere, para lograr el desarrollo? Cuando no se discuten estos temas y tópicos problemáticos es que se asume, mecánicamente, acríticamente, que por tratarse de un “gobierno revolucionario” o un “Estado revolucionario”, por el hecho que así se los concibe o se los llame, se autodenominen, todo lo que hagan, este gobierno y esta Estado, es por generalización “revolucionario”. Tomando en cuenta el balance de la historia política de las revoluciones en la modernidad, que tocamos en otros ensayos[1], podemos decir que el recurso a la violenciaes la patente muestra del fracaso de la revolución misma triunfante. El recurrir a la violencia contra la sociedad misma es la consecuencia de haber clausurado laderivación radical de la revolución misma, lademocracia radical, el autogobierno y el dar la palabra al pueblo. Las transformaciones estructurales e institucionales, que implican la revolución, es decir, laliberación y la emancipación múltiple, plural y, diremos, metafóricamente, absolutas, solo pueden ser producto de la praxis de la sociedad misma. Nunca de la “violencia revolucionaria”, que no es otra cosa, en estas circunstancias y condiciones, la de la imposición estatal, la de la usurpación de la democracia, del autogobierno y la palabra del pueblo. La “violencia revolucionaria”, en estas condiciones, no es más que una frase rimbombante, que encubre, la misma violencia reaccionaria y represora del Estado, como instrumento de dominación. Con esta ponderación y apreciación de la violencia estatal, no se excluye, ni se niega, la necesidad de ladefensa, tampoco de la organización del contra-poderen forma de crítica de las armas, incluyendo, en determinadas circunstancias, coyunturas, contextos, ladestrucción del poder. Esto abarca la defensa del país, de la Patria Grande, de la solidaridad fraternal con pueblos sublevados, que luchan por la liberación y emancipación. Empero, cuando la propia armada, el propio “ejército revolucionario” se usa como amenaza, como máquina de guerra, cayendo, de este modo, enjuegos geopolíticos, es decir, de dominación mundial, no se hace otra cosa que hacer lo mismo que las armadas y ejércitos imperiales, de las máquinas de poder, delsistema-mundo capitalista. En otras palabras, son otrasmáquinas de guerra de la geopolítica mundial, que se disputan la dominación del mundo. Esto nada tiene que ver con la revolución, con la emancipación, con laliberación; lo que connota que no tiene nada que ver con el comunismo, con el socialismo. Que se lleve el nombre de “ejército revolucionario”, no convierte semejanteestrategia geopolítica en acción revolucionaria, en, para contrastar, geografía emancipadora[2]. Ningún ejército, ninguna armada, por más nombres rimbombantes que se ponga, por más “revolucionario” que se crea, puede sustituir a las voluntades singularesde los pueblos. En la era de las simulaciones delsistema-mundo capitalista, del sistema-mundo político,del sistema-mundo cultural, estas comedias y usurpaciones se han dado. Se trata de mecanismos delegitimación de acciones y estrategias que no son otra cosa que la continuidad de las formas de dominación, con distintos discursos, personajes, guiones, nombres y símbolos. En consecuencia, la contra-violencia revolucionaria, del contra-poder popular, que es el recurso a la crítica de las armas, es la herramienta necesaria, en defensa de la marcha, del camino, hacia el autogobierno del pueblo; es obligado uso, debido a la ofensiva militar delpoder, en su forma estatal conservadora, liberal o neoliberal, en su forma imperialista, en su forma imperial. Nunca de la restauración estatal, con otros nombres. Cuando esto ocurre, se marca ya el ingreso a laregresión, a la decadencia, sobre todo, a la usurpaciónde la potestad del pueblo, por parte de una nueva élite depoder; aparezca en forma de una nueva burocracia absoluta o en formas gubernamentales barrocas. La violencia estatal puede camuflarse en discursos que demandan la “defensa de la revolución”, cuando, en realidad, se trata de la defensa de la nueva élite del poder, de la burocracia absoluta, de la impostura grotesca correspondiente a la usurpación de la potestad popular. La defensa de la revolución es decisión colectiva de 200 la democracia, del autogobierno; es elconsenso popular, que hace converger las voluntades singulares, uniendo las fuerzas sociales para la defensa. Ahora bien, el recurso a la crítica de las armas, a la organización militar popular, no corresponde a ninguna improvisación. El hecho militar de la contra-violencia revolucionaria, del contra-poder popular, requiere de latecnología, de las estrategias, mas ingeniosas, inventivas y audaces que se puedan elaborar. El enfrentamiento militar es un acontecimiento que exige la disponibilidad total de las fuerzas populares, se juega, por así decirlo, suser mismo. Vencer a las máquinas de guerra estatales, imperialistas e imperiales, requiere de la capacidad organizativa de contra-máquinas de guerra, que vayan más allá de lo que pueden las máquinas de guerra. La ventaja, por lo menos, teórica, de las contra-máquinas de guerra es que no son solamente corporaciones y complejos tecnológicos, no son solamente sistemas-mecánicos, que por más eficientes que fueran, no pueden contra la potencia social liberada, que libera, a su vez, la ciencia y tecnologías restringidas, subsumidas a la dominación, al poder y a la acumulación del capital. La destrucción de la vida tiene desventajas grandes respecto a la potencia creativa de la vida. Estas capacidades organizativas, estratégicas, tecnológicas, solo pueden realizarse cuando se libera la potencia social, cuando se da la palabra al pueblo, cuando se ejerce el autogobierno. La coyuntura actual mundial, en la crisis estructural y orgánica del sistema-mundo capitalista, en la etapa de ladecadencia del sistema-mundo político y del sistema-mundo cultural, es decir, de la civilización moderna, es indispensable tener claridad sobre estos temas y tópicos; hacer inteligible la complejidad del sistema-mundo, las amenazas y alcances de las amenazas del sistema-mundo capitalista, de sus máquinas de guerra, de sus máquinas de poder, incluyendo a sus máquinas extractivistas y máquinas de comunicación de masas. En la medida que está amenazada la vida en el planeta, la sobrevivencia humana, los pueblos del mundo están convocados existencialmente a actuar, a detener la locomotora desbocada de todas las máquinas de destrucción de la vida. Que lo hagan o no, depende de su capacidad de liberarse de la “ideología”, de los fetichismos diversos, de las capturas institucionales, que hacen de mallas del poder mundial del sistema-mundo capitalista. --- NOTAS [1] Ver Paradojas de la revolución y Crítica de la ideología: http://dinamicasmoleculares.webnode.es/news/paradojas-de-la-revolucion/. http://dinamicasmoleculares.webnode.es/news/critica-de-la-ideologia/. [2] Ver Guerras periféricas; también Genealogía de la guerra: http://dinamicasmoleculares.webnode.es/news/guerras-perifericas/. http://dinamicasmoleculares.webnode.es/news/genealogia-de-la-guerra/. la democracia más allá del mito liberal http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!Editorial-la-democracia-más-allá-del-mitoliberal/nnsaa/577178240cf249bc2451f2ee A mediados del siglo pasado, en plena vigencia del relato de la Suiza de América, Mario Benedetti impugnó con “El país de la cola de paja” a la mitología democrática nacional. Visualizó sus dobleces, corrupciones y complicidades, y la llamó ”cascarodemocracia” sostenida por “la solidaridad de los cola de paja”. La generación de izquierdas revolucionarias que surgió en nuestro país algunos años después, sostuvo que capitalismo y (verdadera) democracia eran dos pares irreconciliables, y la democracia era algo a conquistar ya sea contra la pseudodemocracia, o por vía de conquistas progresivas desde las instituciones de la democracia. Lo que pasó luego lo sabemos: las (heroicas) luchas contra la dictadura se articularon como luchas por la democracia, y luego las luchas por la democracia se sintetizaron como luchas por la reinstalación de las instituciones de la democracia liberal. La democracia como conquista se instaló como nuevo sentido dominante en el pensamiento de la izquierda, y progresivamente dicho sentido fue hegemonizado de acuerdo al pensamiento liberal. 201 Desde entonces, el credo del buen demócrata (expresado en la prédica sanguinettista) sustituyó a las cartas de fe democrática de la dictadura, continuando simbólicamente aquel papel policial: demarcar un adentro y un afuera de lo político. Así, en su proceso de ascenso al gobierno, la izquierda progresista fue incorporando el credo democrático liberal hasta asumirlo como propio. La caída del muro de Berlín y la sucesión de derrotas históricas de las izquierdas del siglo XX hicieron lo suyo. El imperialismo norteamericano desplegó su estrategia intervencionista en torno al discurso de “defensa de la democracia”. Y la racionalidad tecnocrática neoliberal redujo a la democracia a una serie de procedimientos administrativos donde el poder está siempre en otra parte, configurando una era que Slavoj Zizek llamó “pospolítica”. Desde entonces, “democracia” ha quedado ideológicamente definida en nuestro país como lo opuesto de “dictadura”, y pragmáticamente reducida a votar cada cinco años en elecciones (la “fiesta de la democracia”) cada vez más concebidas y realizadas como campañas de mercadeo. Así las cosas, reflexionar críticamente en torno a “la democracia uruguaya más allá del mito liberal” puede parecer un anacronismo. Tanto más en plena era progresista de indudable avance en materia de derechos sociales. Sin embargo, en momentos en que en todo el continente las empresas de comunicación de masas tienen cada vez mayor influencia fáctica en decisiones (y cambios) de gobiernos, y en nuestro país se perpetúa un oligopolio mediático. Cuando la impunidad muestra sus ribetes más cínicos en las cómodas prisiones domiciliarias del puñado de militares torturadores procesados, contrastando con el hacinamiento infernal de los presos “comunes”. Cuando se nos presenta a la inclusión financiera como un avance democrático y a la macroeconomía como una externidad inalcanzable para la política. En momentos en que los avances en legislación consagratoria de nuevos derechos se combinan con el avance de la sociedad de control hipervigilante, la política del miedo y la criminalización de la pobreza. En momentos en que la economía (la desigualdad, las clases, la propiedad) aparece como el gran ausente en la reflexión democrática. En momentos como los actuales, entonces, vale la pena volver a impugnar, como Benedetti hace medio siglo, a nuestra “cascarodemocracia”. Mostrar sus sótanos inconfesables, sus impensados y sus impensables. Es que preguntarse por la democracia tiene sentido siempre que se interrogue por los otros de la democracia. Siempre que se convoque a los expulsados y a los convidados de piedra del “gobierno del pueblo”. Siempre que se enuncie (politice) a los impensados y a los impensables del discurso democrático, y se busque con ello la re-politizacion democratizante de la democracia. Se trata de relanzar el problema de la democracia como un problema de izquierda anticapitalista. Sin omitir el registro estratégico del problema: ¿cómo orientar una acción política de izquierda transformadora (en, ante, desde, por fuera de) los escenarios y reglas de juego de la democracia liberal realmente existente? Sobre estos temas convocamos a reflexionar al hemisferio de las izquierdas. La democracia en el pensamiento de las izquierdas en Uruguay: diálogo con Aldo Marchesi* http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!La-democracia-en-el-pensamiento-de-las-izquierdas-enUruguay-diálogo-con-Aldo-Marchesi/nnsaa/577202660cf2f8d6d10dec38 Hemisferio Izquierdo (HI)- ¿Qué lugar ha ocupado la cuestión de la democracia en las izquierdas uruguayas pre-dictadura? Aldo Marchesi (AM)- Durante los años sesenta existieron dos posicionamientos que pueden ser leídos como relativamente contradictorios en las izquierdas uruguayas. Por un lado sectores que gradualmente comenzaron a desarrollar una crítica a la democracia liberal y que 202 se expresaron a través de un discurso revolucionario y por otro, sectores que intentaron rescatar ciertos valores de la democracia liberal frente al creciente autoritarismo civil estatal desarrollado desde mediados de los sesentas. Antes de explicar con mayor profundidad ambos posicionamientos resulta necesario mencionar algunos aspectos contextuales de la región para entender los significados que la democracia liberal adquirió en el contexto de la guerra fría. Desde fines de los cuarentas se desarrolló un liberalismo de la guerra fría que admitía límites al funcionamiento democrático vinculados al riesgo de la amenaza comunista. El riesgo de la amenaza comunista legitimaba la suspensión de aspectos esenciales del funcionamiento democrático. La amenaza comunista podía ser equiparada a lo que hoy es el terrorismo en la visión de organismos internacionales como la OEA. Experiencias políticas tan diversas como la de Guatemala en 1954, y las de República Dominicana y Brasil en 1964 fueron leídas de esa manera por Estados Unidos y sus aliados que promovieron reacciones autoritarias para derrocar gobiernos elegidos democráticamente. La democracia liberal de la guerra fría defendida por Estados Unidos era una democracia restringida a sus amigos en el contexto de la propia guerra fría. Por otro lado a mediados de los sesentas, luego del fracaso de los intentos reformistas promovidos en el contexto de la Alianza para el progreso, comenzó a desarrollarse entre ciertas elites tecnocráticas la idea que el único camino para salir de la crisis que enfrentaban las economías latinoamericanas era el desarrollo de regímenes militares con una pretensión modernizadora. Brasil en 1964 se mostró como un ejemplo de dicho camino. Frente a todo esto Cuba se mostró como una alternativa democrática a la democracia liberal de la guerra fría. El viraje de un discurso democrático liberal a un pensamiento leninista implicó una redefinición de democracia. En la visión de los cubanos lo que se estaba logrando era una democracia más verdadera, con la efectiva participación de los sectores populares a través de diversos mecanismos de democracia directa, pero donde ciertos derechos liberales resultaban suspendidos. En resumen, en la Latinoamérica de los sesentas aunque la palabra democracia era reclamada por todos los actores políticos como parte de su identidad, la realidad de los regímenes políticos existentes parecía muy alejada a cualquier modelo democrático. El Uruguay de fines de los cincuentas y principios de los sesentas que fue halagado por Ernesto Guevara en 1961, era una excepción que gradualmente estaba dejando de serlo. Desde la mitad de los cincuentas el país comenzó a enfrentar un estancamiento y luego una crisis económica estructural que duró dos décadas. La progresiva incapacidad de los partidos para resolver la crisis fue interpretada como una crisis política de legitimación de los partidos políticos tradicionales, que incluso para algunos ensayistas expresaba una crisis moral de la sociedad uruguaya, marcada por años de clientelismo y paternalismo estatal. Desde el Estado las respuestas al crecimiento de la movilización sindical frente a la crisis fueron el incremento de la represión y el control policial. Entre 1960 y 1963 ciertos sectores del gobierno del Partido Nacional así como de la oposición colorada, emprendieron una campaña anticomunista especialmente enfocada en la amenaza que la revolución cubana representaba. Dicha campaña procuró sin éxito la proscripción del Partido Comunista, la reglamentación de la actividad sindical y la ruptura de relaciones con la Unión Soviética y Cuba. Entre 1962 y 1963 apareció una oleada de ataques de grupos de extrema derecha (algunos de ellos violentos) que desarrollaron atentados contra militantes políticos, sociales, exiliados y 203 judíos. En 1963 se propusieron medidas prontas de seguridad para detener la huelga de los trabajadores estatales de la electricidad (UTE). Durante 1965 las presiones ejercidas por sectores conservadores se expresaron en abril y octubre en los decretos de medidas prontas de seguridad que habilitaron el encarcelamiento de cientos de activistas sindicales y en algunos casos el desarrollo de prácticas de tortura sistemática nuevas en el contexto uruguayo. El golpe de los militares brasileros en marzo de 1964 agregó un componente regional al incremento autoritario alentado desde sectores conservadores uruguayos. Ese es el contexto regional y local que habilitó una gradual radicalización de ciertos sectores de la izquierda uruguaya que se fueron inclinando hacia una visión que cuestionaba qué tan democrática era la democracia uruguaya. El encuentro de diversos militantes en el llamado "Coordinador" (la organización que antecedió a la creación del MLN-T) donde participaban socialistas, anarquistas, ex comunistas y otros grupos menores, es un ejemplo del malestar con la democracia liberal que se expresaba en importantes sectores de la izquierda. La experiencia de movilización social de los cañeros de Bella Unión será usada por estos militantes como un ejemplo que evidenciaba que los derechos liberales y sociales de la democracia uruguaya no llegaban a todos, que había otro Uruguay que estaba muy lejano del país modelo defendido por las elites políticas. Por otro lado, la lectura de las sucesivas medidas prontas de seguridad, las medidas de persecución contra la izquierda y los sindicatos y los rumores de golpe de estado a partir de lo ocurrido en Brasil los llevó a predecir un futuro negativo para la democracia uruguaya. En su visión frente al avance de la movilización social e incluso electoral las respuestas de las elites tradicionales en alianza con Estados Unidos culminarían en un régimen autoritario. Dicha lectura del proceso político local irá distanciando a estos sectores de los valores democráticos liberales que serán vistos como una farsa para mantener un orden de cosas que poco tenía que ver con el gobierno del pueblo. Simultáneamente a este proceso también otros sectores de la izquierda y el movimiento social comenzaron a preocuparse con la amenaza autoritaria que asomaba desde Brasil. El Congreso del Pueblo de 1965 advertía que: "el pueblo enfrenta una sistemática represión tendiente a reprimir los derechos individuales, sociales y sindicales". Además de soluciones para la crisis económica el congreso se planteó como objetivo detener cualquier amenaza de golpe antipopular. Estas reacciones políticas y sociales frente al creciente autoritarismo estatal continuaron frente al incremento autoritario del pachequismo. Fue en la crítica a las medidas prontas de seguridad, las torturas, los excesos policiales, las proscripciones y prohibiciones en las que diversos políticos de centro izquierda e izquierda, varios de los cuales venían de los partidos tradicionales, se terminaron encontrando para concretar la creación del Frente Amplio. Fue en ese contexto fuertemente polarizado y confuso de comienzos de los setentas donde el liderazgo de Seregni y la mayoría de los sectores políticos del FA apostaron a una revalorización democrática liberal como camino de solución a la crisis y reconciliación entre los uruguayos. Además de ser una respuesta al autoritarismo civil, el FA se creó en un momento donde la novedad del gobierno de la Unidad Popular en Chile proponía conciliar lo mejor de los dos mundos de la guerra fría: Democracia Liberal y socialismo. Estas dos caras de las izquierdas: la que impulsaba caminos revolucionarios y la que intentaban revalorizar los derechos liberales, se encontraron en el Frente Amplio. Aunque conscientes de su contradicción trabajaron conjuntamente en un contexto de profunda incertidumbre política donde las estrategias de todos los actores tuvieron cierto nivel de ambigüedad. Los tupamaros apostaron a una estrategia revolucionaria pero por momentos se adecuaron a la estrategia del FA. De hecho el MLN-T apoyó la creación del FA, tuvo contactos cercanos con varios de sus fundadores, hizo una tregua electoral, proveyó información para denuncias parlamentarias y 204 judiciales, etc. Por otro lado se podría decir que aquellos que apostaban al mantenimiento de una institucionalidad democrática como el Partido Comunista o el General Seregni, apostaron a la salida militar en febrero de 1973 como un camino para resolver la crisis política de un presidente sobre el que habían denuncias de fraude en las elecciones y que en el año 1972 había desarrollado una política represiva de inusitado alcance en la historia de Uruguay. HI- ¿Qué cambios al respecto pueden observarse en las izquierdas post-dictadura? AM- Las consecuencias de la represión dictatorial tuvieron un impacto importante en la manera que los militantes de izquierda analizaron aspectos vinculados con la violencia estatal. Vania Markarian ha mostrado como la lucha por la defensa de los derechos humanos llevó a que los militantes uruguayos fueran adquiriendo gradualmente una nueva visión acerca del valor de ciertos derechos liberales clásicos en detrimento del lenguaje revolucionario de los sesentas. Esto trajo aparejado una revalorización de la democracia liberal por parte de varios de aquellos que inspirados en la experiencia cubana habían abandonado la dimensión liberal de la democracia. Asimismo comenzaron a surgir otros asuntos vinculados con la tensión entre democracia y autoritarismo. En el contexto de la primavera democrática de los ochentas, donde la democracia y los derechos humanos fueron palabras asociadas a las demandas de los movimientos sociales y donde el autoritarismo dictatorial era el antónimo contra el cual se construían las nuevas ideas políticas, comenzaron a emerger críticas a diversas facetas autoritarias de la propia izquierda. El vanguardismo de los militantes frente a los movimientos sociales, el machismo, las estructuras gerontes de la izquierda fueron asuntos que se empezaron a hablar dentro de las organizaciones políticas de la izquierda y en los movimientos sociales durante ese período. Esta revalorización democrática no implicó abandonar la reflexión acerca de la posibilidad de articular diversas formas de democracia liberal con el socialismo. Los ochentas fueron un momento muy fermental en las posibilidades de radicalizar las nociones vinculadas a la democracia liberal. En este sentido se puede decir que la izquierda a la salida de la dictadura comenzó a proponer una nueva visión de la democracia que tendrá implicancias en el presente. La idea de la democracia participativa que reivindica el involucramiento de actores sociales y locales en los procesos de decisión surgió al calor de los movimientos sociales de esa década. Lo mismo se puede decir acerca de las críticas a la supuesta igualdad legal del liberalismo que ocultaba las diferentes formas de discriminación existente (género, edad, raza) en la política cotidiana. Sin embargo, a principios de los noventas esa voluntad de asumir críticamente la democracia liberal y buscar ampliarla con otras dimensiones emancipadoras pareció ceder a una mera aceptación acrítica. La democracia liberal pasó a ser la única forma de democracia: la democracia sin adjetivos, sin historia, una esencia indiscutible. Dos asuntos tuvieron que ver con esta claudicación. La caída del muro de Berlín terminó de confirmar que las democracias que tenían otros adjetivos no solo tenían muy poco de liberales, sino también de populares ya que las mayorías en Europa oriental no se identificaban con dichos regímenes que habían devenido en estructuras autoritarias y/o totalitarias. Por otra parte la derrota plebiscitaria en torno a la ley de caducidad, además de cerrar la posibilidad de verdad y justica, terminó consolidando una narrativa sobre los sesentas donde una democracia idílica había entrado en crisis por la responsabilidad de la izquierda y el movimiento social. La izquierda no tuvo la suficiente energía para dar la lucha sobre aquel pasado y eso tuvo consecuencias sobre las maneras de concebir la democracia del presente. 205 * Doctor en Historia (New York University), Profesor de la Universidad de la República, director del Centro de Estudios Interdisciplinarios Uruguayos (CEIU). Autor de numerosos trabajos sobre la historia reciente de Uruguay y el Cono Sur. Democracia bajo la lupa violeta: una crítica feminista Maru Casanova* http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!Democracia-bajo-la-lupa-violeta-una-críticafeminista/nnsaa/57731b9f0cf2f8d6d10f008a Cuando nos referimos al término democracia lo primero que pensamos es en su acepción más clásica: la que define como principios rectores la igualdad y posibilidad de ejercicio de derechos, tanto civiles, políticos como sociales. Si partimos de esta concepción y observamos el marco normativo vigente podríamos afirmar que nos encontramos frente a un sistema democrático, en Uruguay las mujeres podemos votar, tener propiedades, ser elegibles, ir a la universidad y desempeñar cargos, entre otras muchas cosas. Implicó un largo camino de lucha el que hoy podamos notar una diferencia entre nosotras y aquellas que no eran consideradas ciudadanas. Sin embargo no podemos reducir nuestro análisis a la igualdad en términos formales. Cuando una profundiza cuales son las posibilidades reales de ejercicio de cada uno de los derechos reseñados se encuentra que la posibilidad no es tal. La mirada feminista diluye necesariamente las fronteras de lo privado y lo público trayendo la histórica (y nunca vieja) consigna de lo personal es político. Así, en el análisis de qué implicancias tiene el ser mujer para el ejercicio de derechos, el trabajo no remunerado ocupa un elemento central. Si bien es un trabajo necesario para el funcionamiento de la sociedad, se encuentra invisibilizado bajo su asignación a las mujeres como cuestión natural. Este panorama no excluye a Uruguay, donde independientemente de la situación laboral, las uruguayas dedican muchas más horas a las tareas de cuidado y el hogar con respecto a sus pares masculinos(1). No es difícil inferir cómo este rol pueda afectar el que las mujeres se encuentren en posiciones de desventaja con respecto a los hombres. En primer lugar por el hecho en sí mismo: debemos dedicarle más horas de nuestra vida a una tarea que se nos fue asignada por el sexo con el que nacimos. Esto es menos tiempo que le podemos dedicar a otras tareas tales como trabajar, militar, estudiar, etc. Luego, por la construcción social y cultural que implica este rol del ser mujer. Al participar políticamente, las mujeres se enfrentan a lo que se conoce como la triple jornada (trabajo remunerado, trabajo no remunerado y militancia), lo que supone un límite para ocupar lugares en los espacios de toma de decisión, ya sea a nivel de partido o de gobierno. Por ejemplo, en estudios sobre trayectorias políticas se desprende que las mujeres en edad reproductiva optan muchas veces por disminuir su actividad política para conciliarlas con el trabajo no remunerado, a diferencia de los hombres que no ven afectadas sus carreras(2). ¿Podemos entonces hablar de que una mujer se encuentra en igualdad de condiciones que un hombre para participar políticamente cuando tiene muchas menos horas para dedicarle? ¿Podemos asegurar que están dadas las condiciones para que las mujeres participen en pie de igualdad en la toma de decisiones? 206 Trasladémonos al plano de las candidaturas para ser parlamentarias: las mujeres que logran ser candidatas no solo vencieron los obstáculos de la triple jornada y la invisibilidad a la interna de los partidos, sino que también desafiaron numerosas pautas culturales que establecen que el ámbito de lo público no es para ellas. Una vez adentro, tienen que hacerle frente a formas masculinas de hacer política y esforzarse más que sus pares varones en su actuación legislativa, ya que sienten una constante necesidad de justificar que pueden desempeñarse como legisladoras al igual que ellos. En el Uruguay de hoy estas mujeres solo representan el 20% del parlamento. Son demasiadas si consideramos que pensarse como política desafía los modelos actuales de liderazgo y una historia narrada sin heroínas. Pero supongamos que contamos con igual número de mujeres y varones en el parlamento, ¿alcanza con esto para que las feministas podamos hablar de democracia? Sin lugar a dudas esto implicaría un avance representativo en términos simbólicos, pero que lo haga en términos sustantivos es cuestión de debate: la participación de más mujeres en ámbitos de decisión no significa necesariamente que más personas representen los intereses y demandas de las mujeres. Sobre este punto basta con recordar todas las parlamentarias que votaron en contra a la ley de interrupción voluntaria del embarazo. Esta discusión es honda y llena de aristas, desde el preguntarse si es posible este tipo de representación hasta si hay algo llamado “los intereses de las mujeres”, cuestionando los enfoques esencialistas. Lo que es posible afirmar es que la representación simbólica es importante por lo que significa en términos de mensaje: hay mujeres que hacen política y tienen el derecho a hacerlo. Esto a su vez construye otros modelos de ser mujer que tiene que ver con el ejercicio de poder y de ocupar el espacio público. En este sentido la democracia en Uruguay se encuentra en un debe. Los porcentajes de mujeres ocupando cargos de decisión son bajos y reflejan las múltiples dificultades que deben atravesar si desean participar e incidir en la toma de decisiones. Por otra parte el discutir sobre democracia desde un enfoque feminista no se reduce a las dificultades para la igualdad de oportunidades. Las feministas buscamos la erradicación del sistema patriarcal, entendiendo al mismo como un sistema de dominación que nos margina y oprime. Es para nosotras por lo tanto, una falacia hablar de democracia cuando existen relaciones de dominación. Esta es la base de la crítica a la teoría clásica sobre democracia, entendida como una teoría de la democracia liberal: con igualdad de derechos y oportunidades entre hombres y mujeres, pobres y ricos, heterosexuales y homosexuales(3) la democracia sería posible. La crítica a la democracia liberal no proviene solo de las feministas y también las hay feministas liberales. El análisis marxista sobre la democracia burguesa señala lo mismo: no se puede pensar en democracia cuando existen relaciones de dominación. En el caso de las relaciones inequitativas de poder entre hombres y mujeres: ¿Cómo podemos las mujeres ejercer nuestros derechos cuando no contamos con autonomía de ningún tipo? ¿Cómo se puede hablar de democracia cuando las mujeres aún somos tuteladas? ¿Cuándo las instituciones del Estado implementan política que responde a una visión patriarcal? Como mujeres nuestra autonomía se ve soslayada a expensas de situaciones de control y tutelaje por parte del sistema que opera en distintos niveles y a través de diversas formas. Pensemos en las situaciones de violencia basada en género a las que estamos expuestas, que parten de una visión en las que somos propiedad (de nuestra pareja o de un desconocido que nos aborda por la calle), en las que somos inferiores al otro (frente al profesional de la salud en consulta y que ejerce violencia obstétrica), por poner algunos ejemplos. De nuestras parejas 207 escuchamos “así no podes salir” y de nuestros médicos “no estás preparada para la ligadura de trompas”. Recordemos las declaraciones que se expresaron en el parlamento a la hora de votar una ley de interrupción voluntaria del embarazo. Uno de los argumentos más escuchados refería a la preocupación de legisladores por la baja tasa de nacimientos y el envejecimiento poblacional de Uruguay. En este marco, legalizar el aborto supondría menos nacimientos y por lo tanto empeoraría este panorama. Bajo el grito de “se precisan niños para amanecer” nuestros úteros son objeto de política poblacional. Somos excluidas de tomar decisiones con respecto a nuestras vidas y nuestros cuerpos, ya sea porque se alude a que no somos capaces de hacerlo, porque somos vistas como objeto o porque somos consideradas inferiores a otros. Se hace imposible hablar de democracia cuando ni siquiera se nos considera a las mujeres como sujetas de derecho. En otro plano, democracia también es participación en términos colectivos. El contar con organizaciones sociales que demanden de acuerdo a sus intereses y que luchen por las transformaciones necesarias es uno de los pilares básicos de la democracia participativa. En este sentido, el movimiento feminista uruguayo se encuentra desde hace unos años en dificultades. La creciente institucionalización de organizaciones y feministas supone un riesgo a la autonomía del movimiento. El intento de reducción del Estado en la gestión de política pública supuso un involucramiento de organizaciones sociales (entre ellas feministas o de mujeres) para su gestión. Asimismo, con la asunción del Frente Amplio al gobierno numerosas feministas ingresaron al Estado. Esto ha generado un debilitamiento en el accionar del movimiento. En primer lugar por contar con menos compañeras con acumulado y capacidades al frente del mismo. En segundo, por la pérdida de autonomía para la reivindicación de demandas. ¿Qué capacidad de demanda hacia el Estado tiene una organización que implementa políticas públicas? ¿No depende su sustento de aquel mismo aparato al cual cuestiona? Lo mismo sucede con las feministas en cargos políticos en el gobierno. Parece difícil marchar exigiendo los cambios y ser responsable a la vez. Existen intentos actuales de lucha feminista que parecen fortalecer un movimiento autónomo. El Primer Encuentro de Feminismos uruguayo autoconvocado en el año 2014 y la posterior formación de la Coordinadora de Feminismos del Uruguay son reflejo de una pujante necesidad desde una pluralidad de organizaciones y feministas independientes de buscar un lugar desde donde hacer política feminista. Volver a ocupar las calles un 8 de marzo, bajo la consigna “Día de Lucha” y movilizarnos multitudinariamente por el “Ni una Menos” son algunas de las acciones que se han llevado a cabo y que buscan ocupar el espacio público con banderas autónomas de reivindicación. Por último, si tratamos el tema de democracia y feminismo no se puede dejar de mencionar la problemática existente entre el respeto a la multiculturalidad y la defensa de los derechos de las mujeres. Queda claro que la democracia implica el respeto por la pluralidad de pensamientos, culturas, religiones y manifestaciones, pero el límite entre esto y la vulneración del ejercicio de los derechos de las mujeres es un tema en debate. Hay puntos en donde no puede existir duda: la mutilación genital femenina es una práctica cultural pero que resulta inconcebible y que debe ser erradicada. Sin embargo existen otras prácticas culturales o religiosas donde la cuestión de si avasalla los derechos de las mujeres o si su rechazo reside en una mirada colonizadora entra en tensión. 208 La utilización de los velos en la religión musulmana es un ejemplo de ello. Son muchas las feministas que afirman que el velo es un símbolo de opresión de las mujeres y que no deberían usarlo. Otras cuestionamos estas miradas de tutelaje de las feministas occidentales afirmando que también puede ser una decisión. En este sentido es necesario recordar las nuevas estrategias impulsadas por algunos Estado-nación: implementar en nombre de los derechos de las mujeres o de la comunidad LGBTI políticas xenofóbicas(4). La prohibición del uso del velo en varios países de Europa (sobre todo Francia) y las propuestas de medidas islamofóbicas como primera respuesta a la tragedia de Orlando son algunos ejemplos. No es necesario ir tan lejos: en Uruguay se hicieron múltiples referencias en medios de comunicación sobre refugiados sirios que golpeaban a sus parejas uruguayas, señalando lo “barbárico” de su cultura. Resulta increíble pensar que con los índices de violencia basada en género y más concretamente con los casos de feminicidios que ocurren en Uruguay podamos atribuir responsabilidades de estas situaciones a una cultura determinada, que de casualidad pertenece a pueblos con inmigrantes en el país. Las feministas tenemos aquí uno de los desafíos más importantes de los próximos tiempos: el no permitir que utilicen nuestras reivindicaciones para justificar las bases de dominación de unos pueblos sobre otros y de unas personas sobre otras. Recordando que el sistema de dominación opera en diversos ejes sociales y que si solo cuestionamos uno de ellos, nos encontramos luchando contra el sistema que afecta a las mujeres blancas, heterosexuales, no pobres de occidente. Para alcanzar la democracia en tanto poder del pueblo, indefectiblemente es necesario combatir cualquier grupo que pretende ejercer el poder sobre otro. En la transición democrática el sentir común del movimiento feminista y de otros movimientos sociales se encontraba representado en la lucha antidictatorial. Hoy el panorama no está tan claro. Si bien algunas identificamos en la figura de un sistema que es capitalista, heteropatriarcal, racista y xenófobo el enemigo a combatir, otras personas y organizaciones mantienen el pensamiento fragmentario de las luchas. El feminismo uruguayo no escapa a este debate, pero ya sea porque no existen las garantías de igualdad en el marco de una democracia liberal o en el plan de desafiar todo el sistema, todos los feminismos cuestionan la afirmación de que vivimos en democracia. Tal como plantea Carole Pateman “para las feministas la democracia no ha existido jamás”(5) y el intento por hacerlo es lo que nos mantiene en lucha. *Maru Casanova es politóloga, feminista e integrante de las organizaciones Mujer y Salud en Uruguay (MYSU) y Colectiva Amatista. (1) Ver Encuestas sobre uso de tiempo del Instituto Nacional de Estadística (INE). (2) Pérez, Verónica (2011): Entre lo público y lo privado. Género y ambición política en el Cono Sur. Tesis deMaestría en Ciencia Política. UDELAR. (3) Utilizo términos dicotómicos para reflejar que no se cuestionan las categorías en sí. (4) Los términos utilizados para describir estas acciones son “purplewashing” y “pinkwashing” respectivamente. (5) Pateman, Carole (1990: 7): Feminismo y democracia. En “Debate feminista”, Vol 1. 209 La riqueza y el poder. ¿Dónde está la oligarquía?* Martín Buxedas** http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!La-riqueza-y-el-poder-¿Dónde-está-laoligarquía/nnsaa/5771ce460cf2bcae6e413173 “Oligarquía a la americana”, es el título de un artículo que sintetiza la visión de Paul Krugman, premio Nobel de Economía, sobre la relación entre quienes concentran la riqueza y el poder político en los Estados Unidos[1]. ¿Existe una “oligarquía a la uruguaya”? Los partidos marxistas y los documentos fundacionales del Frente Amplio (FA) de Uruguay no dejaban lugar a dudas: un pequeño núcleo de familias minuciosamente identificadas, asociadas a inversores extranjeros, controlaba el Estado. Ese control se ejercía por medio de su participación directa en los elencos de gobierno, el financiamiento de las campañas electorales y eficaces influencias desplegadas por las cámaras empresariales. La oligarquía, finalmente, era la responsable de la crisis económica que, indiscutiblemente, atravesaba el país y de los problemas sociales del Uruguay[2]. Con el tiempo, la izquierda, incluyendo al Frente Amplio, dejó de mencionar la concentración de la riqueza y a la oligarquía. Paralelamente, el tema no fue abordado por los investigadores en ciencias sociales, cada vez más abundantes[3]. El silencio ha sido tan grande que seguramente una o más generaciones de adultos ni siquiera sintió hablar del tema que unas décadas atrás convocaba a la izquierda. Hasta podría pensarse que no hay concentración de la riqueza y del poder o, como sostienen algunos estudios, que la izquierda dejó de lado sus antiguas banderas como parte de una estrategia de ablandamiento orientada a conseguir el apoyo de un mayor número de ciudadanos y acercarse así al gobierno por la vía electoral. Y cuánto más una vez que llegó a ese objetivo. Una excepción a la ausencia de estudios sobre la concentración de la riqueza es la obra de Bértola, Stolovich y Rodríguez (1989) en la que se identifican los principales grupos económicos que operaban en el Uruguay hacia 1985[4]. En 2010 un valioso estudio elaborado por un equipo interdisciplinario de investigadores de la Universidad de la República (UDELAR) incluye una revisión de los aspectos conceptuales relacionados con la concentración de la riqueza e identifica los requisitos estadísticos para estudiar la concentración de la riqueza, pero no aporta información original ni alcanzó el objetivo de promover la discusión del tema (V. Amarante y otros, 2010)[5]. En ausencia de referencias recientes, este artículo se limita a contrastar la situación actual con la de 1960 en dos aspectos: el eje latifundio-banca y la participación de los inversores extranjeros en la propiedad de la riqueza. ¿SE ESFUMÓ LA OLIGARQUÍA? Aunque la concentración de la tierra aumentó, no hay vínculos entre los propietarios de la tierra y la banca, y una parte importante de la gran propiedad agraria cambió de dueño. No hay banqueros privados nacionales. En 1960 operaban nueve bancos extranjeros y 68 nacionales; dentro de estos últimos, la mayor parte de los privados estaban controlados por familias con grandes propiedades agropecuarias. Las sucesivas crisis terminaron con todos los 210 bancos privados nacionales, no sin dejar tras de sí un enorme costo al erario público y muy pocos propietarios empobrecidos. Actualmente la actividad bancaria se ha concentrado en dos instituciones estatales y nueve extranjeras. La participación de los propietarios nacionales es baja o simplemente nula en los otros segmentos del sector financiero, como los seguros, las casas financieras y las instituciones que operan en el exterior. Nuevos propietarios y más concentración. En ausencia de información sobre la participación de los mayores propietarios en la propiedad de la tierra es necesario recurrir a estimaciones basadas en otras fuentes. El indicador más importante del proceso de concentración de la tierra es la compra por parte de inversores extranjeros de unos dos millones de hectáreas: un 12% de la superficie total. Se ha estimado que 27 inversores extranjeros concentraban 1,6 millones de hectáreas según un estudio divulgado en 2014[6], unas décadas atrás Trías se alarmaba porque había identificado que los capitales extranjeros explotaban 90.000 hectáreas[7]. Los inversores extranjeros se interesaron por negocios agropecuarios a gran escala, por lo que su primera opción de compra fueron los establecimientos de mayor dimensión, que hasta ese momento eran propiedad de terratenientes nacionales[8]. Para analizar la concentración lo más frecuente es el uso de los censos agropecuarios, una fuente que, como se mencionó, no releva la propiedad. Según los censos agropecuarios el número de explotaciones agropecuarias censadas se ha mantenido estable entre 1961 y 2011. En ese lapso unos 1.200 establecimientos de más de 2.500 hectáreas explotaron el 33% de la superficie[9]. Las inversiones extranjeras se concentraron en las dos ramas cuyo dinamismo impulsaron: la forestal y la agrícola. En cuanto a la actividad forestal, diez empresas forestales extranjeras disponen de un millón de hectáreas, y dos de ellas controlan la mitad de esa superficie. Los inversores extranjeros también fueron los protagonistas del extraordinario crecimiento del cultivo de soja y otros granos. Al mismo tiempo que la actividad se concentraba, la mayor parte de los plantadores nacionales se retiraron de la actividad. La evidencia de ese proceso está bien documentada. Las chacras de más de mil hectáreas cultivadas con soja y otros granos disponían del 20% de la superficie en 2001 y del 66% en 2015. En 2012 cada una de las 15 mayores empresas agrícolas explotaban 25.000 hectáreas en promedio, la mayor parte en régimen de arrendamiento. Simultáneamente, el número de productores se redujo de 7.500 en 2005 a 2.900 en 2015[10]. La tendencia a la concentración de la tierra observada a partir del año 2000 no fue compensada por las importantes medidas que adoptaron los gobiernos del Frente Amplio, entre ellas la distribución de tierras. Entre 2005 y 2014 se incorporaron al régimen de colonización 100.000 hectáreas pero la empresa Union Agricole Group (UAG), un fondo privado de inversiones, controla en 2016, apenas seis años después de su creación, 181.000 hectáreas de las cuales 130.000 son de su propiedad. Un indicio más de los cambios en la propiedad de la tierra es la reducción del número de explotaciones de menor tamaño comenzada en la década del sesenta. Las 86.000 explotaciones con actividad agropecuaria censadas en 1961 se habían reducido a 57.000 en 2000 y a 45.000 en 2011. 211 Otro aspecto a tener en cuenta es la pérdida de importancia del PBI agropecuario en las últimas décadas; es un indicador de la menor participación de las rentas de la tierra y los beneficios sectoriales en el total de ingresos. La participación del sector agropecuario en el PBI descendió de 13% en el trienio 1956-1958 a 8,6% en 2011-2013, al final del boom agropecuario[11]. EL AUGE DE INVERSIÓN EXTRANJERA IMPULSA LA CONCENTRACIÓN DE LA RIQUEZA[12] A partir de mediados de la década anterior un creciente flujo de inversión externa directa (IED) se aplicó a controlar empresas nacionales existentes o a ampliar la capacidad de producción. Por esa vía adquirieron mayor protagonismo los inversores extranjeros, un agente con características propias y vínculos internacionales distintos a los empresarios nacionales. El nuevo siglo trajo novedades importantes en materia de inversión extranjera. Antes del año 2000 la inversión externa dominante era la destinada a obtener ganancias financieras por medio de instrumentos como la compra de valores públicos o las colocaciones en bancos de los que el inversor podía deshacerse rápidamente, tal como lo hicieron en 1982 y 2002, contribuyendo de ese modo a generar, o por lo menos a agudizar, las dos mayores crisis de la economía en cincuenta años. En el nuevo siglo aumentó la inversión externa destinada a controlar empresas que producen bienes o servicios en Uruguay. Entre 2005 y 2013 la inversión externa directa (IED) se multiplicó por ocho, alcanzando al 30% de la inversión privada total, y fue la responsable de gran parte del aumento de la inversión en la economía uruguaya. La extraordinaria afluencia de fondos del exterior condujo a que “el Uruguay presente una de las relaciones entre la inversión externa directa acumulada y el PBI más altas de la región. En el 2014 el stock de IED en Uruguay se estimaba en 22.000 millones de dólares, equivalente al 40% del PIB, proporción superior a la de Argentina (18%), Brasil (34%), Colombia (35%) y Perú (38%)”. Un rasgo importante de la IED es que el 40% de las inversiones se destinaron a controlar empresas propiedad de uruguayos (tierras, fábricas, supermercados y otros)[13]. Corresponde mencionar, de paso, que la adquisición de empresas existentes no debería ser considerada una inversión por cuanto no aumenta o mantiene la capacidad de producción del país que las recibe. La inversión externa se orientó a sectores dinámicos de la economía. En 2013 participaban con el 63% de las exportaciones totales y, dentro de ellas, con más del 75% de las de celulosa y papel, arroz, vehículos y autopartes y cebada malteada, y entre 50% y 75% de soja, carne bovina, madera, trigo, cuero y productos farmacéuticos. En varias cadenas de base agropecuaria los inversores extranjeros integran negocios en la fase comercial e industrial más concentrada, y aun en la agropecuaria, como se observa en las de base forestal y granos. Un indicador de la concentración de la propiedad de la riqueza en Uruguay es la observada en los ingresos originados en ella. Se ha estimado que la parte de la renta captada por el 1% de la población de mayores ingresos en Uruguay (14%) es mayor que en otros 17 países con información, y menor que en cuatro: Estados Unidos, Colombia, Ecuador y Sudáfrica[14]. 212 EL ESTADO Las principales empresas del sector financiero y no financiero se mantuvieron bajo el dominio estatal pero su importancia en la economía no varió sustancialmente en las últimas décadas. El repliegue del Estado uruguayo de las actividades productivas de las tres décadas anteriores a 2005 se concretó por medio de cierres de empresas (pesca, frigorífico, transporte urbano), reducción de actividad (AFE) y tercerizaciones (puerto y otros) y la pérdida de mercado cuando compiten con el sector privado. La reducción de la actividad de las empresas públicas y una política ocupacional más ajustada explican la disminución de sus empleados de 64.400 en 1973 a 24.200 en 2005. A partir de 2005 el gobierno adoptó una política de fortalecimiento de las empresas estatales del sector financiero y de los otros sectores, sin expandir significativamente los mercados en que ellas operan y muy lejos de las nacionalizaciones prometidas por el FA en 1971. En 2015 las empresas estatales representan algo menos del 2% de la ocupación total de mano de obra y probablemente algo menos del 10% del valor agregado neto de la economía. *** En definitiva, el corazón económico de la oligarquía, tal como se lo describía hace cincuenta años, no está presente en el Uruguay actual. Paralelamente se procesó otro cambio trascendente: la concentración de la riqueza impulsada por los inversores extranjeros, protagonistas importantes del boom de la economía en la década que culminó en 2013. La interrogante pendiente de respuesta es: ¿será que “los molinos ya no están pero el viento sigue soplando”? Por ahora al mutis en el partido de gobierno se agrega el de los académicos, quienes no han considerado de interés generar conocimientos sobre las características actuales de la distribución de la riqueza y su relación con el poder. * Fue Profesor de Economía Agraria y Director de la OPYPA (2005-2010) del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. Funcionario de FAO y OIT y consultor en temas agrarios de varias instituciones. ** Publicado originalmente en la Revista Digital Vadenuevo nº 93. Reproducido con autorización del autor. Referencias [1] Joseph Stiglitz, premio Nobel de Economía, sostiene que el principal instrumento de las empresas y personas ricas en Estados Unidos para influir en el poder político es el financiamiento de las cada vez más costosas campañas electorales. [2] La principal referencia sobre el tema es la obra de Vivian Trías, Reforma Agraria en el Uruguay, publicada originalmente en 1961 y reimpresa dentro de la compilación, V. Trías (s.f.), La crisis agraria y el socialismo en Uruguay, Cámara de Representantes, Ed. Banda Oriental. 213 [3] Siguiendo el diagnóstico de la izquierda de la década del sesenta del siglo XX, un documento de 1971 del Frente Amplio señala: “La profunda crisis estructural que el país padece desde hace décadas, su dependencia del extranjero y el predominio de una oligarquía en directa connivencia con el imperialismo, han ido creando, por un lado, hondas tensiones sociales y por otro, un clima de preocupación colectiva sobre el destino mismo de la nacionalidad oriental”. [4] Luis Stolovich, Juan Manuel Rodríguez y Luis Bértola (1987): El poder económico en el Uruguay actual, CUI, Montevideo. [5] V. Amarante y otros (2010) La concentración de la riqueza en Uruguay. Elementos para el debate. Universidad de la República. [6] Oyhantçabal, G, Narbondo, I y Areosa, P. (2014): ¿Acaparamiento de tierras en Uruguay? En: 2º Congreso de Ciencias Sociales Agrarias. Salto, Uruguay, agosto de 2014. [7] Los censos agropecuarios no recogen información sobre la propiedad de la tierra y por lo tanto no permiten conocer el conjunto de explotaciones pertenecientes a un mismo grupo familiar o empresa. Las grandes empresas que se desarrollaron a partir de 2000 son propietarias de varios establecimiento, tal es el caso del fondo de inversiones UAG, que controla 105 establecimientos distribuidos en 17 departamentos del país. Para conocer la concentración de la propiedad sería necesario reunir el conjunto de las empresas controladas por un mismo grupo familiar o empresa, tal como lo hizo Trías para 250 familias. [8] Estimación propia basada en información sobre el valor de las inversiones extranjeras en tierras del Banco Central del Uruguay, las transacciones de compraventa de tierras (DIEAMGAP) y otras fuentes. [9] Las empresas más grandes tienen una participación más alta en la mayor parte de los sectores que la sugerida por esa información. El caso del sector bancario ya fue mencionado, en el industrial, las 50 empresas mayores eran responsables del 45% del PBI. M. Buxedas (1989): Concentración global en la industria: nuevas evidencias y significados, en M. Buxedas y R. Jacob, Industria uruguaya: dos perspectivas, FCU, Montevideo. [10] DIEA-MGAP, Anuario Estadístico Agropecuario, varios números. [11] Aunque la importancia del sector agropecuario disminuyó durante el boom agropecuario 2004 – 2013 el precio de la hectárea de tierra se multiplicó por ocho y el valor comercial del stock de tierras alcanzó a unos 58.000 millones de dólares (unas 19 veces mayor que la inversión en las dos plantas de celulosa). También el valor de la renta de la tierra (el arrendamiento o la renta implícita en el retorno de los propietarios-productores) aumentó. Según una estimación, la renta de la tierra en 2000 alcanzó a 284 millones de dólares y a 1.831 millones en 2013, año en que equivalía al 38% del PBI agropecuario. Gabriel Oyhantçabal y Martín Sanguinetti (2014), El agro en Uruguay: transformaciones recientes, impactos y distribución. [12] La fuente de información de este apartado es Uruguay XXI (2014): Comportamiento Exportador de las Empresas Extranjeras en Uruguay, y Uruguay XXI (2015): Inversión externa directa en Uruguay. [13] En 2014, entre las compras de inversores extranjeros a firmas nacionales se destacan las siguientes; Pagnifique por parte de un grupo chileno; Matadero Carrasco, adquirida por una 214 compañía brasilera; Fármaco Uruguay S.A. y Laboratorio Santa Elena por firmas peruana y francesa respectivamente; y Los Nietitos por una firma chilena. [14] Burdín, G., De Rosa, M., Vigorito, A. (2015) “Sectores de altos ingresos en Uruguay: participación relativa y patrones de movilidad en el período 2009-2012”. Serie Documentos de Trabajo, DT 03/2015. Instituto de Economía, Facultad de Ciencias Económicas y Administración, Universidad de la República, Uruguay. Citado en Buxedas, M. ¿Cuán desiguales son los ingresos en Uruguay?, vadenuevo nº 92. Democracia y justicia social: tenaces desafíos para la izquierda Fernando Lizárraga* http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!Democracia-y-justicia-social-tenaces-desafíos-para-laizquierda/nnsaa/5772fdc10cf249bc245369a4 Es bien sabido que Abraham Lincoln, presidente de Estados Unidos durante la Guerra Civil entre el Norte y el Sur (1861-1865), fue quien con más vehemencia apuntaló los pilares constitutivos del proyecto de la burguesía norteamericana. En su Discurso de Gettysburg, en 1863, Lincoln sostuvo que el ideal de los fundadores de la república se basaba en la promoción de la libertad, en la defensa de la vida, y en la creencia de que todas las personas son creadas iguales. Pero además, en este brevísimo y extraordinario mensaje, definió a la democracia en una frase que ha quedado para la historia: “gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo”. Quizás sea menos conocido el hecho de que Karl Marx, junto a otros líderes de la Primera Internacional, escribió y firmó una enfática declaración de apoyo a Lincoln luego de que éste proclamara la emancipación de los esclavos en todo el territorio de los Estados Unidos, a principios de aquel mismo año, y que utilizó parte de la fórmula democrática para describir al gobierno de los comuneros de París: “gobierno del pueblo y para el pueblo”, sintetizó el creador del materialismo histórico en un pasaje de La Guerra Civil en Francia. El apoyo de Marx al presidente republicano de Estados Unidos era una demostración de su certeza de que no sólo la emancipación de los esclavos sino también la subsecuente liberación de las fuerzas productivas del Norte industrial redundarían en favor de los intereses del proletariado y, en consecuencia, allanarían la senda hacia el socialismo. De hecho, poco después de terminada la guerra civil, hubo un extraordinario crecimiento del movimiento obrero en Estados Unidos, permitido, entre otras cosas, por las propias instituciones de la república liberal norteamericana. Como ha recordado acertadamente Robin Blackburn, Lincoln consideraba que los trabajadores eran más importantes que el capital, y en el contexto favorable de la posguerra –que, cabe decirlo, duró poco– las organizaciones sindicales y políticas norteamericanas fueron pioneras en romper las barreras de color y de género; esto es, de ampliar las bases de la democracia. A esta altura de los acontecimientos, ya ubicados bien adentro del siglo XXI, parece una trivialidad tener que sostener que el socialismo presente y futuro ha(brá) de ser democrático, o no habrá de ser en absoluto. Del mismo modo, cabe afirmar, como cuestión de principio, que el socialismo (presente) debe impugnar al capitalismo como injusto y debe darse, por lo menos como boceto, algún diseño institucional para después de la revolución –o comoquiera que sea el proceso o momento del cambio hacia el post-capitalismo. Y este diseño no puede ser una mera ingeniería institucional, sino que debe fundarse en valores claramente identificados y especificados. La democracia y la justicia social no pueden estar ausentes en este boceto; es decir: es indispensable pensar al socialismo del porvenir como una sociedad que realiza, entre otros, valores tales como la libertad, alguna forma de igualdad, la auto-realización, la 215 fraternidad, etcétera. Como dijera magníficamente Ernesto Che Guevara: “El socialismo económico sin la moral comunista no me interesa. […] Si el comunismo descuida los hechos de conciencia puede ser un método de repartición, pero deja de ser una moral revolucionaria”. Esto significa que no alcanza con las instituciones correctas si las actitudes de las personas no son congruentes con tales instituciones. Existe en nuestros días un dato difícilmente discutible. Las repúblicas democráticas burguesas han demostrado ser mucho más persistentes de lo que se imaginó alguna vez, y han cumplido cabalmente su rol en asegurar la hegemonía de la clase capitalista. En este marco, con esta constatación en mente, es preciso pensar y repensar el lugar de la democracia, la justicia, la libertad, entre otros valores, al interior de la tradición socialista y de las organizaciones anticapitalistas. Hay un año que, para esta reflexión, resulta muy significativo: 1867. Todos sabemos que fue entonces cuando se publicó el primer volumen de El Capital. Pero además fue el año en que, también en Inglaterra, se sancionó la Ley de Reforma que otorgaba el sufragio universal masculino (el cual se extendería a las mujeres recién en 1928). Así, mientras Marx revelaba la anatomía y el metabolismo del capital, la clase obrera inglesa conseguía una conquista particularmente importante, luego de años de luchas a través del movimiento cartista, que Engels y Marx celebraron como primer movimiento auténticamente clasista en tiempos de la gran industria y como antecedente del partido de la clase obrera. “El sufragio universal en Inglaterra será una medida por lejos mucho más socialista que cualquier otra cosa que se haya denominado así en el continente” y “su resultado inevitable, aquí, es la supremacía política de la clase trabajadora”, escribía Marx en una nota para el New York Daily Tribune. Y lo hacía en 1852, mientras en Francia se experimentaban las derrotas de la vía insurreccional iniciada en 1848. Al mismo tiempo, un contemporáneo de Marx, el liberal –y finalmente devenido socialista– John Stuart Mill, elogiaba al gobierno representativo como uno de los hallazgos más notables de la historia. El entusiasmo de Marx y Engels con el cartismo y su lucha por el sufragio universal no tardó en verse ensombrecido, cuando ya en las primeras elecciones posteriores a su implementación, pudo observarse que un gran número de trabajadores habían votado al partido conservador y no a los candidatos de la Liga Reformista. Un corolario inmediato de este fenómeno fue que los fundadores del materialismo histórico –siempre dispuestos a la auto-crítica (una verdadera rareza en nuestros días) – advirtieron la necesidad de un partido de la clase trabajadora, totalmente independiente de los partidos burgueses. Es decir, Marx y Engels vieron tempranamente que las repúblicas democráticas y las monarquías parlamentarias –esto es, los sistemas representativos– brindaban posibilidades para la auto-organización de la clase trabajadora al mismo tiempo que aseguraban firmemente los intereses de las clases dominantes. Por eso, ni Marx ni Engels abandonaron –como quisieron hacernos creer los jefes de la Segunda Internacional– la opción de la vía insurreccional. No hay inconsistencia entre la adhesión de Marx y Engels al sufragio universal en Inglaterra y su elogio de la lucha insurreccional de la comuna, en la siempre convulsionada Francia. El capitalismo, como dice Gerald Cohen, “no es un agente” capaz de adaptarse casi automáticamente ante aquello que parece o puede efectivamente amenazar su existencia. Al interior del sistema sí hay agentes –clases–, que actúan más o menos estratégicamente. Así, la clase política inglesa vio sin demora que debía canalizar la oposición creciente de los cartistas y ceder ante algunas de sus demandas. El sufragio universal significó una ampliación de la competencia electoral, pero en los términos y las condiciones fijadas por la propia burguesía y sus dispositivos estatales. Y precisamente porque nunca hubo, salvo contadísimas excepciones, un fair play en la competencia electoral, las cartas siempre estuvieron marcadas a favor de los partidos del orden. “En el Estado” –escribía el joven Marx en Sobre la Cuestión Judía– “el hombre es considerado como un ser genérico [un ciudadano]; es el miembro 216 imaginario de una imaginaria soberanía”. Esta ciudadanía meramente formal, esta pertenencia al cielo político –a una “imaginaria soberanía”, a una comunidad ficticia–, no anulaba sino que presuponía (y aún presupone) las enormes desigualdades existentes en la sociedad civil. La condición de mayoría de la clase trabajadora no alcanzaba para asegurarle el poder político. Tampoco, cabe decirlo, se verificaba una relación lineal entre el crecimiento cuantitativo de la clase y el crecimiento de su conciencia de clase, lo cual llevó a que muchos abrazaran el desafortunado concepto de falsa conciencia, como si los trabajadores fueran meras víctimas de engaños sistemáticos orquestados por los astutos burgueses. La democracia burguesa, con todo su formalismo, supone competencia electoral y, en este campo, la cancha tiende a estar siempre inclinada. O para decirlo en un lenguaje un poco más prolijo: en ausencia de mínimas garantías de igualdad o equidad social, se obturan irremediablemente las plenas libertades políticas. En este punto podemos observar la inextricable relación entre la justicia social y la democracia, ya que no puede haber una democracia mínimamente aceptable en presencia de enormes desigualdades sociales. Deben darse varias condiciones para una democracia pueda ser reputada como genuina, pero la igualdad económico-social es una condición necesaria. Una buena forma de hacerse una idea sobre esto es recordar aquella famosa frase de Jean-Jacques Rousseau –un burgués partidario de la democracia directa–, quien en El Contrato Social sostenía que, la igualdad no debía entenderse como igual poder e igual riqueza para todos, pero sí, por lo menos, como la situación en la que el poder se ejerce según las leyes y que, en cuanto a la riqueza, “ningún ciudadano [es] lo bastante opulento para poder comprar a otro, y ninguno lo bastante pobre para ser constreñido a venderse”. He aquí una clásica fórmula republicana que entiende a la libertad como no dominación; y para que no haya dominación –en tanto poder arbitrario de unos sobre otros– se precisan leyes y, fundamentalmente, que las desigualdades económicas no obliguen a nadie a venderse. Una vez más: lo que Rousseau tenía en mente es algo que otro pensador burgués, John Rawls, ha denominado “justa igualdad de las libertades políticas”. Para empezar a hablar sin prejuicios sobre este asunto, hay que tener presentes al menos dos consideraciones que Marx hiciera acerca de la democracia y la república burguesa. En primer lugar, que el derecho burgués, especialmente en lo que concierne a la distribución del ingreso y los bienes de consumo, no ha de superarse sino hasta bien entrado el comunismo; esto es, hasta que existan condiciones subjetivas y objetivas que permitan no sólo la superación del derecho burgués sino la extinción del Estado como cuerpo sobreimpuesto a la sociedad civil. En segundo lugar, que para Marx la existencia del Estado político y la ciudadanía –con toda su formalidad, su condición imaginaria, etcétera– ya suponía un importante avance histórico que, a su vez, habría de ser trascendido. Decía Marx en Sobre la Cuestión Judía: “No cabe duda de que la emancipación política representa un gran progreso, y aunque no sea la forma última de la emancipación humana en general, sí es la última de la emancipación humana dentro del orden humano actual”. Los derechos conquistados por la burguesía y el pueblo durante las revoluciones contra el orden feudal, si bien terminaban reducidos a la futilidad en la legislación, mantenían –como los ideales de igualdad y libertad– un gran potencial disruptivo y emancipador. Volvamos por un momento en el pensamiento de John Rawls, el filósofo igualitarista-liberal que ha restituido la discusión sobre la justicia social en la agenda contemporánea. No vamos a exponer aquí los pormenores de su teoría sobre la equidad. Sólo diremos que incluso para un pensador tan profundamente liberal como él, las desigualdades del mundo contemporáneo son del tal gravedad que afectan de manera fatal a las libertades políticas. En su obra más famosa, Teoría de la Justicia, este profesor de Harvard sostiene que para que existan justas libertades políticas es preciso que los ciudadanos alcancen efectivamente ciertas condiciones materiales mínimas. Aunque no logra distanciarse totalmente de la muy burguesa escisión 217 entre el cielo político igualitario y el mundo terrenal no-igualitario, Rawls advierte que por debajo de cierto umbral es imposible hablar seriamente de ciudadanía. Por eso, afirma que “históricamente, uno de los defectos principales del gobierno constitucional ha sido que no ha sabido proteger el justo valor de la libertad política” y que “las diferencias en la distribución de propiedad y riqueza que exceden lo que es compatible con la igualdad política han sido generalmente toleradas por el sistema legal”. Peor aún, con el tiempo, la ecuación inicial se invierte y, de este modo, quienes detentan posiciones de mayor poder político adquieren también mayor poder económico. En consecuencia, añade Rawls, “las desigualdades en el sistema socioeconómico pueden minar cualquier igualdad política que hubiese existido en condiciones históricas más favorables”. En resumidas cuentas, concluye Rawls, cuando no existe financiamiento público de las organizaciones políticas, los partidos dominantes salen a recaudar fondos de los sectores económicos más aventajados “y, cuando esto ocurre, los miembros menos favorecidos de la sociedad, que no pueden ejercer su justo ámbito de influencias a causa de su falta de medios, caen en la apatía y el resentimiento”. Lo notable de Rawls y otros igualitaristas-liberales, en comparación con el común de los liberales y conservadores que abundan en nuestras latitudes, es que no se hacen los distraídos frente a la íntima relación que existe entre las condiciones materiales y la ciudadanía. Por eso mismo, en su libro Liberalismo Político, Rawls sostiene que una plena ciudadanía y un consenso constitucional estable requieren, como mínimo, los siguientes elementos: el financiamiento público de las elecciones, que asegure disponibilidad de información en materia de políticas públicas; una cierta equitativa igualdad de oportunidades, especialmente en educación y capacitación; una distribución digna de la riqueza para que todos los ciudadanos tengan asegurados los medios necesarios para aprovechar inteligente y efectivamente sus libertades básicas; que la sociedad sea empleador de último recurso a través del gobierno local o central, u otras políticas sociales y económicas; y cuidado básico de la salud asegurado para todos. Los pensadores igualitaristas-liberales como Rawls son herederos del ala radical de la burguesía que encabezó las revoluciones modernas. Basta pensar solamente en Thomas Paine, uno de los promotores de la revolución norteamericana, quien ya en 1791 proponía una especie de ingreso básico universal para asegurar la plena ciudadanía. O en el mismísimo Robespierre quien, pese a sus idas y vueltas retóricas, no vacilaba en sostener la necesidad de que el derecho a la existencia digna estuviera públicamente garantizado. Como señala Antoni Domènech, para los jacobinos “la libertad política o republicana era eso, y nada menos que eso: no tener que pedir cotidianamente permiso a nadie para poder subsistir”. Los líderes y pensadores burgueses más honestos han admitido que no puede haber ciudadanía –entendida no sólo como ejercicio electoral sino como autonomía para conducirse en la vida cotidiana– en presencia de profundas desigualdades sociales. Va de suyo que, mientras perdure el capitalismo, la igualdad de condiciones será una simple quimera. Es casi una obviedad afirmar, en una revista como Hemisferio Izquierdo, que la relación de explotación capitalista lesiona irremediablemente cualquier intento de igualar totalmente las condiciones de vida. Mientras haya capitalismo, no podrán realizarse en plenitud los ideales revolucionarios de libertad, igualdad y fraternidad. Escribe Alex Callinicos en su ensayo “Igualdad y capitalismo”: “la aspiración a la igualdad fue uno de los ideales constitutivos de la modernidad capitalista desde el momento en que triunfaron las grandes revoluciones burguesas”, desafiando las jerarquías de la sociedad anterior y desencadenando, de este modo, “una dinámica que continúa hasta el presente, conforme nuevos grupos – trabajadores, esclavos, mujeres, súbditos coloniales, negros, lesbianas y gays, entre muchos otros– han reafirmado sus demandas de igualdad. Sin embargo, aunque el capitalismo es el 218 suelo sobre el que el ideal de la igualdad cobró forma por primera vez, este ideal solamente puede realizarse más allá de sus fronteras”. Con todo, la certeza de que los grandes ideales modernos sólo pueden concretarse más allá del capitalismo, no implica sentarse a esperar a que el sistema caiga como fruta madura al influjo de las inexorables leyes de la historia. La libertad, la igualdad y la fraternidad deben ser, a un mismo tiempo, metas revolucionarias, herramientas de lucha, y rasgos constitutivos de las propias organizaciones socialistas (ya sean partidos, movimientos, sindicatos, etc.). Gerald Cohen, un marxista analítico que devino igualitario radical al calor de las polémicas contemporáneas sobre la justicia social y la igualdad, ha sostenido –con acierto a nuestro juicio– que buena parte de la tradición socialista más ortodoxa se quedó conforme con sus formidables triunfos explicativos y confió en que, tarde o temprano, por un camino u otro, el capitalismo colapsaría y sería reemplazado por un mundo social –el comunismo– que necesariamente sería superior. Esta ortodoxia tiene por lo menos dos problemas: por un lado, la tesis de inevitabilidad del socialismo ya no goza de buena salud y, por otro, omite argumentar sobre la deseabilidad del comunismo. ¿En qué sentido lo que venga después del capitalismo habrá de ser mejor? ¿Por qué debería ser mejor? ¿Sólo porque viene después? Es posible, por caso, imaginar una sociedad sin propiedad privada de los medios de producción pero gobernada por una élite burocrática que rige los destinos de todos y cada uno con mano de hierro; o un sistema que establece una tiranía sobre las necesidades y sobre las opciones personales; o un esquema de planificación centralizada sin control por parte de los productores directos, etc. También es posible imaginar la barbarie. El punto es que, sin emancipación humana, tal como la entendía Marx, no puede haber socialismo. Cuando el autor de El Capital elogiaba a Lincoln, pensaba concretamente que la senda abierta por el presidente norteamericano y la victoria de la Unión inauguraba “una nueva era para la emancipación del trabajo”. Como señala Blackburn, “para Marx, el trabajador asalariado sólo era libre parcialmente ya que debía vender su fuerza de trabajo a otro para poder sobrevivir él y su familia”, pero “dado que no era un esclavo, el trabajador libre podía organizarse y agitar, por ejemplo, por una jornada limitada de trabajo y una educación libre”. Así, apunta Blackburn, bajo el liderazgo de Joseph Weydemeyer –amigo de Marx que luchó durante la Guerra de Secesión en las filas del Norte– un grupo de trabajadores fundó la American Labor Federation, una organización obrera “abierta a todos, ‘sin importar la ocupación, el idioma, el color o el sexo’”. Estas organizaciones obreras fueron, en los hechos y no sólo de palabra, fieles a la concepción marxiana según la cual, como ha señalado el filósofo hispano-mexicano Adolfo Sánchez Vázquez, la “emancipación humana” implica re-unir lo particular con lo universal; equivale a la verdadera democracia”. Al respecto, Sánchez Vázquez enfatiza que en sus escritos juveniles Marx consideraba a las libertades burguesas como meras formalidades, pero más adelante, con la irrupción del proletariado en la escena política, pudo darse cuenta de que tales libertades “–por su origen y naturaleza– responden también […] a los intereses reales del pueblo”, más allá de la obvias limitaciones inherentes al Estado burgués. Por eso, con esta mirada juvenil “un tanto ahistórica”, Marx se negaba a sí mismo “la posibilidad de advertir en sus propios derechos y libertades los valores democráticos (en cuanto que tienen cierto contenido real, popular) arrancados a la burguesía”. Por ello, años más tarde, en sus escritos sobre la Comuna de París y sobre el cartismo –como ya hemos visto– habría de recuperar la noción de representatividad a través del sufragio universal, pero ahora enriquecida por elementos tales como la responsabilidad y revocabilidad, sobre la base de un mundo material donde ha sido abolida la propiedad privada. 219 En suma: el socialismo contemporáneo no puede seguir pensándose como dueño de todas las verdades; ni permanecer ajeno a las discusiones teóricas de los pensadores igualitaristas, liberales, republicanos, comunitaristas, entre otros; ni quedar aislado de los desarrollos institucionales de las repúblicas democráticas burguesas. Como ha dicho con singular agudeza Ariel Petruccelli en su artículo “Dilemas y desafíos del socialismo en nuestro tiempo”: “no parece descabellado prever que en nuestros países y en los países capitalistas centrales la democracia ha llegado para quedarse, y que las izquierdas deberán aprender a combatir dentro y contra ellas. […] La auténtica democracia sigue siendo una aspiración, lo cual – insistimos– no debería impedirnos ver los méritos de las democracias liberales. […]. Así como la monarquía fue compatible con distintos modos de producción (hubo monarquías esclavistas, feudales y capitalistas), bien podría ser que la democracia liberal –garantías individuales, libertad de prensa, representación popular, multipartidismo– sea compatible también con el socialismo, y no meramente la encarnación superestructural del mercado o la frutilla del postre capitalista”. Lejos de ser una mirada desalentadora, la afirmación de que hay que luchar dentro y contra las democracias burguesas, implica a la vez una aguda indicación para la agenda teórica –¡hay que estar atentos y polemizar con lo mejor del pensamiento burgués!– y para la estrategia política. Marx no fue menos marxista por celebrar el triunfo y lamentar la muerte de un presidente tan profundamente burgués como Abraham Lincoln. * Investigador del Conicet y profesor de Teoría Política en la Universidad Nacional del Comahue, Argentina. Autor de El Marxismo y la justicia social: la idea de igualdad en Ernesto Che Guevara (2011) y Marxistas y liberales: la justicia, la igualdad y la fraternidad en la teoría política contemporánea (2016). El culto a Evo llega a sus padres http://internacional.elpais.com/internacional/2016/07/14/america/1468450971_178867.html Una estatua en honor a la familia del presidente de Bolivia se une a los muchos homenajes oficiales que recibe en todo el país El culto a la personalidad de Evo Morales alcanzó a los padres del presidente boliviano, sencillos campesinos que son recordados con una estatua erigida hace poco en la ciudad de Punata, en los valles centrales del país. La escultura de Dionisio y María, progenitores de Morales, se encuentra en un edificio municipal de cuatro millones de dólares que se llama, como decenas de otras infraestructuras públicas, “Evo Morales”. Fueron pagados por el programa Evo Cumple, que es ejecutado por los alcaldes, pero que financia el gobierno nacional. En varias oportunidades este programa, que comenzó con fondos donados por Venezuela, ha sido acusado de tener como principal objetivo el enaltecimiento de la imagen del presidente. El culto a la personalidad de Morales, el primer mandatario indígena y el primer gobernante de Bolivia durante más de 10 años continuos, ha crecido paulatinamente desde su llegada al poder hasta considerarse normal. Un hecho anterior a este de la estatua fue el del Himno Evo Morales, que compusieron las Fuerzas Armadas en honor de su comandante en jefe, que incluye un verso que, dirigiéndose a él, le dice: “Tú tienes la luz”. Además existe un pequeño pueblo que se llama Puerto Evo y en 2013 hubo un serio conflicto en Oruro, una ciudad de medio millón de habitantes, entre los partidarios y los contrarios a que el aeropuerto fuera bautizado con el nombre del presidente. 220 La escultura de Dionisio y María, progenitores de Morales, se encuentra en un edificio municipal El Gobierno señala permanentemente que estos homenajes no son solicitados por Morales, sino que son gestos de cariño de la población y los cargos inferiores de la burocracia estatal. Al mismo tiempo, no desarrolla ninguna política para aplacar los deseos de los partidarios de Morales de congraciarse con él. Al contrario, en este momento el Gobierno está construyendo un museo de casi 4.000 metros cuadrados y un coste de seis millones de dólares en Orinoca, el pueblo de 638 habitantes en el que Dionisio Morales, pastor de llamas, y María Ayma, agricultora, se enamoraron y concibieron a Evo. Se llamará Museo de la Revolución Democrática y Cultural y estará dedicado a la “resistencia indígena”, una historia de vejaciones y luchas que concluye con la llegada de este niño al poder, como ocurre en la película Insurgentesdel realizador Jorge Sanjinés, la que hace tres años fue filmada y estrenada con apoyo oficial. Insurgentes es el más monumental de los varios filmes hechos en homenaje a Morales, que también cuenta con biografías laudatorias y con títulos honoris causade decenas de universidades nacionales y extranjeras. Cuando Evo irrumpió como líder alternativo en medio de la corrupta sociedad neoliberal de los años noventa, actuaba con la tradicional sencillez de un dirigente sindical. Recién electo como presidente en 2005, en una gira promocional por el mundo se presentó ante el Rey Juan Carlos I con un jersey, lo que le granjeó simpatía y algunas críticas. Con el tiempo, sin embargo, este hombre se fue acostumbrando a la celebridad y llegó a extremos como pedir a uno de sus asistentes que le atara las agujetas, algo por lo que ulteriormente pidió disculpas. Su actitud lo distanció de los sectores urbanos, que hicieron que el “no” a la autorización constitucional a su cuarta reelección ganara en el referendo del pasado 21 de febrero. A Evo Morales le han dedicado el nombre de un pueblo, un monumento, un programa social y el himno de las FFAA A pesar de esta derrota, los partidarios de Morales buscan organizar una nueva consulta, pues si el “jefazo” (así lo llaman sus allegados) dejara el poder, acabaría su propia preminencia política. Parte de esta estrategia es mostrar a Evo como ser excepcional, un hombre de esos que, como dijo hace poco Gabriela Montaño, presidenta de la Cámara de Diputados, “nacen cada 150 años”. Entramos en el barrio más peligroso del país más violento, Honduras La Rivera Hernández, en la segunda ciudad de Honduras, vive en guerra constante. Con cinco pandillas enfrentadas y un ritmo de tres cadáveres de media al día, la rutina es un ejercicio de supervivencia http://www.elconfidencial.com/mundo/2016-06-28/paseo-por-el-barrio-mas-peligroso-delpais-mas-violento-honduras_1224379/ ALBERTO G. PALOMO. SAN PEDRO SULA (HONDURAS) El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández Alvarado, convoca una rueda de prensa inaudita. Hace tiempo que no se recordaba un San pedro Sula sin homicidios en 72 horas. En esta ciudad industrial, la segunda de Honduras, resulta atípico amanecer sin sangre en las noticias. Hoy el día luce soleado, como de costumbre en esta tierra tropical. La loma del Merendón, límite occidental, vigila a los 437.000 habitantes de la que acabó 2015 como la segunda ciudad más violenta del mundo, con una tasa de 111 muertes por cada 100.000 221 personas. En la Rivera Hernández, su barrio más bravo, las calles se muestran desiertas. "Los chicos están tranquilos", suspira Daniel Pacheco. Este líder religioso de 36 años es de los pocos que no tiene problemas en caminar por todos sus rincones. Nos guía entre sus calles de tierra y polvo. En este barrio se refugian cerca de 100.000 vecinos bajo el custodio de 12 patrullas de policía que suelen necesitar refuerzos. Cinco maras (pandillas) se disputan el territorio: las dos principales, Mara Salvatrucha (MS)y Barrio 18, y otras pequeñas como Vatos Locos, Tercereños o Los Holanchanos. No es nuevo en la nación: cuartel del narcotráfico y nido de bandas, todo Honduras es un polvorín en la ya difícil situación centroamericana. Vaso comunicante de un Caribe con corrientes de droga colombianas y del embudo guatemalteco hacia México, este terreno de 112.500 kilómetros cuadrados se encuentra en una encrucijada de violencia. Jóvenes que se matan entre ellos, cárteles que buscan su sendero al mercado norteamericano y civiles condenados al encierro. Pero volvamos a la Rivera Hernández. Una estación de policía nos recibe en la entrada, al lado de lo que se han empeñado en llamar El Parque. Celebran que por las noches haya gente que se atreva a caminar por él. Apostados en varios furgones, con chalecos y escopetas, todos se muestran precavidos: "Ahí dentro es muy peligroso", advierten, como si hablaran de un jaula con bestias. El oficial Corrales, de 27 años y con uno de experiencia en el cargo, recita un proverbio local: "El único delincuente que no delinque es el delincuente muerto". Sonríe. Lleva tres días de reposo en comparación con su ajetreo diario. Presume de su papel: "Elegí esto porque es la mejor manera de servir a mi país", concede, "y estamos logrando acabar con la inseguridad. Hace dos meses que los niños juegan por la noche. Antes era impensable: esto era una ciudad muerta". En una de las casas próximas, la de la familia Fernández, dan un testimonio diferente. El hijo, de 29 años y con tres niños a su vez, cuenta la odisea de llegar al cole. Como en todo el terreno hondureño o salvadoreño, cada calle está controlada por una Mara, y el cruce de alguna de ellas procediendo de otras resulta fatal. "Las balas se oyen como zumbidos. Suena feo, pero se puede decir que nos estamos acostumbrando a ello", narra, enseñando agujeros en la uralita que cubre el patio. Su madre, María, asiente a sus 51 años. "Los niños tiene dificultad de ir a la escuela. Hay que elegir las privadas del barrio, y no hay plata", añade con tristeza. Varios miembros dela mara Barrio 18 posan frente a la virgen de la Guadalupe en una casa del barrio Rivera Hernández (Javier Arcenillas)Varios miembros dela mara Barrio 18 posan frente a la virgen de la Guadalupe en una casa del barrio Rivera Hernández (Javier Arcenillas) Nos adentramos a continuación en una de las zonas controladas por Barrio 18. Cristian, Rango y Fresa, de 22, 16 y 24 años, aguardan en un porche. El líder les ha dejado compartir tabaco y refrescos con nosotros. En camiseta de tirantes y zapatillas de marca se asoman a la explanada que marca la frontera con sus rivales. El viento empieza a cargar de humedad el césped desigual que crece en los descampados. Una gotas se filtran por las costuras de la mesa y convierten el polvo en barro. Hablan poco. Bagatelas. Cada cierto tiempo "les mueven" a otras ciudades. ¿La familia? Olvidada. "La de sangre no existe; nuestra familia ya es la pandilla", esgrimen en medio de una espera densa. Con las armas en reposo. No tienen una estructura estable y luchan sin grandes contingentes. En las denominadas 'clicas' o grupúsculos repartidos por las zonas rurales y urbanas de Honduras, El Salvador y Guatemala. Su origen se remonta a finales del siglo pasado. Tras una historia de guerras civiles, golpes de estado e inestabilidad política, muchos de sus parientes emigraron a Estados Unidos. Allí se juntaron entre ellos y formaron guetos donde la supremacía se batía en pandillas de latinos sin arraigo cultural ni social. Cuando el gobierno decidió deportarles se encontraron en un país desconocido. Sin tejido social y con una pobreza extrema que hoy en día alcanza el 20%. Hicieron lo que habían aprendido en Los Angeles y otras urbes del gigante norteamericano: pelearse entre ellos y coaccionar a los residentes para mantenerse. Es lo que se conoce como 'renteo': cada habitante paga un "impuesto de guerra" a cambio de su seguridad. 222 "Hasta la comida más popular se llama 'baleada", explica Claudio Hernández, pastor de una iglesia evangélica de 39 años. Ahora ejerce de mecánico, pero antes cató las mieles del crimen robando coches. Intentó huir de 'mojado' (emigrantes que viajan ilegalmente a Estados Unidos). Da clases de ebanistería o trabajos manuales. "Muchos 'cipotes' (niños) quieren aprender mecánica, pintura, restauración... lo que les falta son oportunidades", asegura frente a la antigua residencia de un antiguo líder al que asesinaron a quemarropa y que se sujeta entre metralla y dibujo de homenaje. La comunidad se vuelca en una competición de fútbol entre solteros y casados. Cualquier actividad es válida para olvidar el poso de muerte y violencia que les amenaza las 24 horas. En una pared se exhiben murales por la paz. Lo llaman "el pasaje de la bendición". Se ve a unos niños correteando. "Es algo positivo. A mí me encanta. La gente empieza a percibirlo como distinto, y es bueno. Antes esto estaba caliente", comenta Pacheco. Mientras, Marlon Fernando Mercado, de 15 años, vende fruta en un carro. "No me metieron en ninguna banda", responde, "pero uno no puede salir de aquí". Un componente de los Vatos Locos posa con el gesto de la pandilla y una pistola en la calle que dominan de Rivera Hernández (Javier Arcenillas).Un componente de los Vatos Locos posa con el gesto de la pandilla y una pistola en la calle que dominan de Rivera Hernández (Javier Arcenillas). A pocos metros, ya de noche, Daniel Pacheco nos introduce en otra de las pandillas. Son los Vatos Locos. No llegan a 20 miembros. De ahí que su lema sea 'Pocos, pero locos". Han aceptado una cena de tortillas de maíz y cocacola gracias al 'patrón', Estasio de Armendía, antiguo componente de la banda. A sus 50 años y retirado, sigue dando órdenes a los chicos. "Uno lo que quiere es que los muchachos cambien. Y se puede. Es feo ver a un hijo muerto", reflexiona. Con su mirada contesta a las preguntas que le hacen los 'vatos' que no están posteando (vigilando). Casi nadie da información. Solo uno de ellos, de 26 años, se atreve a contar que ha pasado tres años y medio en la cárcel y que intentó salir de Honduras "harto de ser pobre". Los otros deambulan de un lado a otro o fuman hierba. Solo se juntan cuando uno de ellos saca una pistola para mostrarla bajo el parvo brillo de una farola. Posan colocando las manos con el símbolo de la banda. "No tenemos ni miedo ni nada". Es de noche y la salida del barrio cada vez se vuelve más peligrosa. Atravesar el kilómetro y medio hasta el cuartel del principio se transforma en una fuga arriesgada. San Pedro Sula duerme sin sobresaltos. Parece que los buenos augurios del presidente siguen funcionando. Pero sale el sol. Y con él, una llamada de la policía. El oficial Corrales da las coordenadas. Paralelo al campo de fútbol, el cuerpo de un taxista de 45 años luce tronchado en el asiento con dos disparos en pecho y cabeza. Su empresa acababa de resistirse a pagar la 'renta' a las pandillas y él ha sido el primer represaliado. Sus tres hijos -de 3, 15 y 20 años- y el resto de una familia descompuesta lloran desconsolados a su vera. El contador de homicidios en el país inicia de nuevo su tétrico marcador habiendo finalizado con 885 asesinatos. No ha habido más discursos gubernamentales. "Aquí le matan a uno como animal, como si fuera una gallina", solloza la madre del taxista. “El marxismo o la teoría científica no pueden existir sin criticar permanentemente”/ Conferencia de Etienne Balibar Etienne Balibar https://www.topia.com.ar/articulos/marxismo-o-teoria-cientifica-no-pueden-existir-criticarpermanentemente Etienne Balibar, filósofo francés, discípulo de Canguilhem y Althusser, visitó Argentina entre el 21 y el 24 de abril de 2015. Es profesor emérito de Filosofía Política y Moral en la Universidad París X Nanterre, docente de la Universidad de California en Irvine y uno de los más prestigiosos filósofos políticos contemporáneos. 223 Entre sus ensayos traducidos al castellano podemos mencionar: Para leer El Capital (1969, en coautoría con Louis Althusser), La filosofía de Marx (1984), Nosotros, ¿ciudadanos de Europa?: Las fronteras, el Estado, el pueblo (2003), Derecho de ciudad: Cultura y política en democracia (2004), Spinoza y la política (2011), Ciudadano Sujeto, Vol. 1 y 2 (2010-2012) y La propuesta de la igualibertad (2015, en preparación). La visita de Balibar coincidió con el 50º aniversario de la publicación de Para leer El Capital (1965), escrito en colaboración con Louis Althusser. En la oportunidad, recibió el Doctorado Honoris Causa por la Universidad Nacional de San Martín. En el marco del ciclo “¿Qué hacer con Marx?”, dictó la conferencia “Teoría y crítica después del estructuralismo” y participó de un taller coorganizado con la Escuela de Humanidades y el IDAES de la Universidad. Además, invitado por el Programa de Estudios Políticos de la Facultad de Ciencias Sociales, dictó una conferencia en esa casa de estudios. Allí aprovechamos para solicitarle una entrevista para Topía, pero debido a la brevedad de su estadía, nos sugirió grabarla y publicarla con su autorización. Mario Hernandez “El marxismo o la teoría científica no pueden existir sin criticar permanentemente” Amigos, colegas, compañeros y compañeras tengo que hacer dos aclaraciones preliminares, primero agradecer inmensamente la invitación a Buenos Aires y la recepción que me hacen, adonde vuelvo luego de algunos años y, debo decir con emoción, que es un honor y un placer estar aquí esta noche. Lo más importante, no tengo en mi propio lenguaje ni la décima parte del humor y del estilo que tiene mi amigo Emilio de Ipola y, por lo tanto, tampoco lo tengo en español, así que después de una ponencia brillante, humorística e inteligente de Emilio, van a escuchar algo mucho más aburrido. Habría que preguntarse a título de qué estoy aquí hoy, en cierto sentido ustedes tienen por delante a dos personas diversas, hay un joven de 23 años coautor de “Para leer El Capital”, sobreviviente por milagro de aquella época, y debo decir que para mí, la otra persona que está aquí, es un viejo profesor meritorio de varias universidades. Primero, es una sorpresa increíble tener que reconocer que después de la escritura de este libro han pasado 50 años, dos generaciones, y hemos pasado, como bien sabemos, de una época histórica a otra casi completamente diferente. Naturalmente, al joven de quien estaba hablando, yo no lo conozco muy bien, sinceramente, tratando de contestar a preguntas sobre “Para leer El Capital”, el texto que había escrito, no bajo la dictadura de mi maestro, sino en cierta comunión de intenciones y de ideas de las que voy a hablar en unos momentos, ahora casi no lo entiendo. Eso también da una posibilidad de ser un poco más objetivo, es decir, releer todo esto y tratar en modo más o menos incierto o vacilante, de ocupar diversos lugares intelectuales y acaso morales acerca del objeto, no de la reliquia del mismo. Según me decía Natalia al entrar en la sala, aquí todos son althusserianos y si seguimos a Emilio ustedes probablemente no tendrían 224 que existir, porque los althusserianos no existen. Pero, probablemente yo sería el único no althusseriano, de todas formas eso no me priva de la necesidad de enseñar a Althusser. Quisiera tratar de hacer dos cosas, primero quisiera no destruir al mito, deconstruir al objeto del que estaba hablando que ustedes conocen mejor que yo, sino más sencillamente introducir algunos elementos históricos y factuales para mejor comprender el modo de producción de este libro y, como consecuencia, ciertos de sus aspectos extraños, que no se ven inmediatamente. Todos ustedes tienen en sus manos un libro que se llama “Para leer El Capital”, con los dos nombres de sus autores, Louis Althusser y Étienne Balibar, su discípulo. ¿Alguien me lo podría prestar? Este es el objeto material, pero es engañoso y no es puramente una cuestión de narcisismo o coquetería, hay verdaderamente hoy en día después de 50 años, algunos de los enigmas que se ocultan debajo de él. También voy a tratar de decir algunas cosas acerca del contenido y de su valor actual. Primero, ¿qué fue “Para leer El Capital” originalmente? Fue la transcripción de las ponencias presentadas en un seminario organizado en la Escuela Normal Superior que es el corazón más prestigioso, más elitista, del sistema académico francés, en el Departamento de Filosofía, por un grupo de estudiantes dirigidos por su maestro, Louis Althusser, un joven profesor de filosofía. En Francia había una jerarquía muy fuerte en estos establecimientos e institutos académicos en aquellos años, antes del ´68, y de hecho, Althusser no era un profesor de alto nivel, era un ayudante, pero en este lugar elitista y prestigioso. Los que participaron en el seminario, lo hacían en diversos modos, es muy importante recordar que se trataba de un trabajo colectivo y voy a indicar algunas consecuencias de eso. Hubo alumnos de Althusser que jugaron un papel muy importante en la fase de preparación del seminario. Si queremos tomar el proceso de preparación en su conjunto, habría que empezar cuatro años antes del Seminario sobre El Capital, es decir, en 1961, cuando yo, totalmente desconocido en todo el mundo, porque jamás había escrito una línea, fui en cierto modo el espíritu inspirador junto a Jacques-Alain Miller, un poco más tarde el famoso lacaniano y su amigo, Jean-Claude Milner, vinimos a encontrar a nuestro profesor de filosofía, de poco más de 40 años, que nos enseñaba a Platón, Spinoza, Rousseau y otros. Obviamente, tenía un interés especial por la filosofía política clásica. Se sabía que era miembro del Partido Comunista y el mismo año él había publicado un primer artículo, luego inserto en el volumen “Por Marx”, traducido por Marta Harnecker bajo el título “La revolución teórica de Marx” que se llamaba “Sobre el joven Marx”, no voy a contar lo que todos ustedes ya conocen acerca de la importancia que tuvo. Ese artículo había provocado un efecto notable, inclusive cierto escándalo en el espacio intelectual francés porque, por un lado, atacaba cierta controversia del comunismo oficial y desde lo interno del partido y, por otro lado, atacaba al marxismo humanista especialmente a su versión más hegeliana la que precisamente un año antes, el filósofo francés más prestigioso de toda la época, el propio Jean Paul Sartre, había desarrollado en un libro inacabado, casi imposible de leer, porque lo había publicado como lo había escrito, o sea, sin puntuación, sin subtítulos, una frase única de 700 páginas, que se llamaba “La crítica de la razón dialéctica”. Nosotros tratamos de leerlo con enormes dificultades, pero en la Introducción había una fórmula que tuvo una resonancia enorme; todos ustedes la conocen: “El marxismo es el horizonte insuperable de su época”. Luego Sartre decía que había que añadir algunas cosas, porque según él al marxismo le faltaba alguna doctrina del sujeto y de la experiencia humana, una antropología filosófica. Para nosotros esa declaración fue absolutamente indiscutible, las 225 razones que tomamos en cuenta, aún una vez más simplificando, no por razones puramente especulativas o teóricas, sino más bien por razones políticas e históricas. Entramos en una nueva estación revolucionaria Añadamos otra fecha. Sartre publica este libro con esta frase y un año antes triunfa la Revolución Cubana en La Habana que rápidamente se transformó en una revolución socialista. La Revolución Cubana, con otros aspectos de la situación en el momento, tuvo una fuertísima repercusión en la juventud francesa porque estábamos en medio de la guerra de Argelia, por lo tanto, el problema de la lucha antiimperialista y de sus perspectivas, no solamente nacionales sino socialistas, se imponía a nosotros con una fuerza enorme, naturalmente había todo tipo de divergencias y conflictos al interior del movimiento estudiantil de apoyo a la independencia argelina en el que todos nosotros nos inscribimos con entusiasmo. Para resumir, diría que una parte importante de esa generación, no solo jóvenes intelectuales burgueses formando parte de esa elite de la que estaba hablando, se imaginaron, se soñaron como revolucionarios y algunos de ellos lo fueron en diversos modos, pero sí fuimos convencidos de que estábamos entrando en algo que yo llamaría una nueva estación revolucionaria. Quería tomar la palabra que todos ustedes tan bien conocen, la fórmula que uno de nosotros, no directamente althusseriano, pero alumno y amigo de Althusser, Régis Debray, después de haber viajado a Cuba para encontrarse con el Che Guevara, la fórmula que él adoptó, tal vez bajo la influencia de alguno de sus amigos cubanos, no sé si fue sugerida por alguno de ellos de alto nivel, de “la revolución en la revolución” y esa es la idea que nosotros teníamos exactamente. Entramos en una nueva estación revolucionaria y se va a caracterizar por una revolución, es decir, un cambio en las formas, los métodos, no los objetivos pero sí los modos de organización, de hacer y combinar la teoría y la táctica. Eso produjo un efecto no secundario que hay que mencionar, y estoy hablando de los jóvenes, no estoy hablando de Althusser porque él es otro caso que no tenía la misma historia ni era de la misma generación. Los acontecimientos trágicos, antiguos o recientes de la historia del socialismo real, no es que no los consideramos o los ignoramos completamente, pero sí los consideramos como una contradicción secundaria, un aspecto secundario de la contradicción. Tal vez el caso más significativo, pensando en mi experiencia, pienso en conversaciones que tuvimos cuando entré primero a la organización juvenil comunista en 1960 y luego en el partido en 1961, había un acontecimiento reciente que cumple un papel muy importante en las controversias acerca de la naturaleza del comunismo como movimiento histórico y es la revolución húngara del ´56. Recuerdo muy bien discusiones, no con Althusser, otro punto ciego del cual nunca hablamos, sino con otros comunistas que nos convencieron que había habido que elegir entre el socialismo con todos sus errores y desviaciones ante el imperialismo en pleno período de agresividad, el mismo año del golpe de Suez. Le dijimos a Althusser que sus clases sobre Platón eran muy interesantes pero que más nos interesaba Marx Dejando todo esto de lado nos dijimos que estábamos entrando en una nueva estación de la revolución. Pero para estar a la altura de la situación había que conocer el marxismo y en la misma escuela en la que estábamos había un comunista marxista que empezaba a hacerse conocido, Louis Althusser; lo citamos y le dijimos que sus clases sobre Platón eran muy 226 interesantes pero que había algo que nos interesaba más que era Marx, entonces le pedimos que nos hiciera trabajar sobre él. Es importante tener en claro que nosotros lo buscamos, él nos dijo esencialmente dos cosas a lo largo de los 3 o 4 años que siguieron, “primero, ustedes me preguntan acerca del marxismo y el marxismo no existe, existe solo en fragmentos, algunos de ellos como El Capital son fragmentos enormes, pero la idea de marxismo como sistema como ha sido impuesto por el materialismo histórico y dialéctico de Stalin y de otros, no existe”. Tengo que aclarar que él no conocía ciertas corrientes críticas, o no las quería conocer por diversas razones, lo cual hubiera hecho más interesantes las discusiones o hacer estudios comparativos. El segundo aspecto del efecto encantador de Althusser fue decirnos que no podía inventarnos el marxismo, que teníamos que inventarlo juntos, con trabajo colectivo, y así se creó algo que seguramente tiene otros ejemplos equivalentes, es decir, un grupo de compañeros intelectuales compuesto de jóvenes ávidos de lecturas sin experiencia y otro un poco más viejo pero que no se comportaba como maestro. Althusser pertenecía a otra generación y tenía intenciones no diría secretas pero tampoco explícitas y una cierta parte de eso ahora se hace más visible y se puede entender, porque hay documentos que han sido publicados durante este último tiempo que son reveladores. Algunos de ustedes probablemente recuerden que en su escrito autobiográfico, texto muy complejo lleno de relaciones interesantes y de enormes errores voluntarios o involuntarios, algunos debidos al aspecto autodestructor de lo que escribe acerca de su propia experiencia. En ese libro hay un momento en que Althusser vuelve al inicio del trabajo del que estaba hablando, el que pertenece al período que él más tarde definiera como teoricista que incluye naturalmente a “Para leer El Capital” como su elemento central, y dice que para los miembros del movimiento comunista francés, así como para los del movimiento comunista internacional, la teoría de Marx era considerada científica, para el Partido Comunista Francés (PCF) era algo casi sagrado. Entonces, en sus “Memorias”, presenta su empresa como una tentativa de superación interna, de transformación subversiva y escribe que era necesario adoptar el lenguaje, la postura y el punto de vista del discurso científico para atacar a la doctrina del partido desde el interior, adoptando el lenguaje que el partido no podía rechazar. Cuando leí este pasaje en las “Memorias”, y como la editorial me consideraba un buen discípulo de Althusser, me pidieron que escribiera un prefacio para la nueva edición de “La revolución teórica de Marx” y al final del mismo me enojé un poco y dije que no podía aceptar esa presentación manipuladora y desprovista de lo que hicimos en 1965, puedo equivocarme, naturalmente, o haber sido víctima de una manipulación inconscientemente, pero esa presentación desprovista de toda la historia, es una especie de versión melancólica y retrospectiva. El hecho es que en aquel momento los que creían en la verdad y la importancia teórica, desde un punto de vista científico y en la verdad de la teoría de Marx fuimos nosotros, no el PCF, tampoco los burócratas del partido, que no se preocupaban de la teoría en ese sentido. Algunos meses después se publicó un documento interesante que pueden encontrar en internet en francés con fecha del 25 de febrero de 1965, de 40 páginas que tiene la extraña forma y ficticia en cierto sentido de algo como una relación para el Comité Central del partido dirigida a un importante dirigente, el responsable de los intelectuales. Saben ustedes que en los partidos comunistas soviéticos había un responsable cada dos intelectuales. Después de una conversación que ellos tuvieron, Althusser le manda una carta 227 que habla de la relación del partido y los intelectuales en general, del nuevo tipo de intelectuales que existe en la sociedad científica y técnica, y explica que el partido se equivoca completamente si imagina poder influenciar a los intelectuales explicándoles que hay que someterse y considerarse fuerza de apoyo de la clase obrera, la vieja idea de que los intelectuales tienen que insertarse en el movimiento obrero porque ellos tienen sus razones para ser comunistas. Pero para transformar la teoría del partido y su lenguaje, explica Althusser, hace falta un esfuerzo enorme en el campo de la filosofía marxista, el materialismo dialéctico del lenguaje de la época, y para eso el partido francés, escribe tal vez un poco vanidoso, está muy mal preparado porque los intelectuales y filósofos que tiene son nulos, no tienen ningún valor. En un momento le explica a la dirección del partido que está preparando una nueva generación de nuevos jóvenes filósofos marxistas que van a ser mucho mejores que los que tienen ustedes. Fuimos manipulados Después de este acontecimiento, sí hubo una especie de manipulación en cierto sentido, fuimos manipulados, no con intenciones absurdas. La impresión que tengo es que Althusser tenía, y se podría explicar en términos maquiavelianos, que él usó más tarde, según pienso hoy, dos ideas en mente: primero, pensaba que el movimiento comunista internacional, lo que él llamaba con mayúsculas la fusión de la teoría y del movimiento obrero, era una cosa única en la historia, algo radicalmente nuevo y único en la historia, una práctica política que necesariamente contenía e integraba en su propia práctica un momento de teoría y de ciencia en sentido fuerte. En consecuencia, había algo como un punto de honor, para un partido comunista o marxista, estar a la altura de su propia pretensión teórica, algo que naturalmente los partidos comunistas de la época no lograban. Existía también la idea de cambiar el tipo de relación entre la teoría y la dirección política; eso tocaba al corazón del sistema del comunismo oficial como había sido teorizado por Stalin y que daba la regla. Recordemos que Althusser escribió frases llenas de admiración a los dirigentes comunistas y marxistas que en la historia combinaron la capacidad teórica con la capacidad de dirección política, y los nombres que nos vienen a la mente son Lenin y Mao Tse Tung. Otra idea más implícita que me tienta llamar con un término más propio de la historia de la Iglesia y del catolicismo, la idea de la protesta indirecta. Hay que establecer una especie de distancia entre la dirección política y la práctica teórica o el trabajo teórico, para que la organización política no pudiera seguir utilizando a la teoría como servidora de la dirección política, que era exactamente lo que hacían los partidos comunistas y que de hecho siguen haciendo muchas organizaciones políticas. Decidimos una línea, un día es clase contra clase, otro día es frente popular u otra táctica, y eso aumenta el prestigio de la función intelectual. La palabra intelectual orgánico en Gramsci tiene ciertas ambivalencias en este aspecto y nosotros los dirigentes políticos les pedimos a los intelectuales hacer un discurso teórico para explicar por qué nuestra línea política es justa y es la única posible, aún si es distinta a la que tuvimos en otro período. Esto es lo que Althusser quería destruir. Althusser nos dijo que para renovar al marxismo había que hacer un gran “rodeo” por la teoría, y fue a través de muchas cosas, del estructuralismo, de la lectura de Lacan, muy importante para todos nosotros ya que teníamos la idea de que entre marxismo y psicoanálisis, aunque se 228 diferencian, era imprescindible la complementariedad. Hicimos ese rodeo y luego hicimos el seminario. Quisiera insistir en que el libro “Para leer El Capital” fue publicado el mismo año, con dos meses de diferencia, que la colección de los escritos del propio Althusser, “La revolución teórica de Marx” (“Por Marx”), el resultado de esto, que yo considero negativo, fue que ambos libros se consideraron inmediatamente como piedras angulares y fundamentales de una nueva escuela marxista y un nuevo discurso marxista. La gente empezó a leer “Para leer El Capital” en los términos que se encontraban en “Por Marx” y a leer “Por Marx” con ayuda de “Para leer El Capital”. Pero por las razones que indicaba hace un momento, “Por Marx” es un libro únicamente de Althusser, que aunque cambió sus ideas, el libro nunca dejó de ser el producto de su inteligencia. La comparación que yo hago en la historia del marxismo y que también demuestra, según pienso, la relevancia y la importancia del libro en este aspecto, es con la famosa obra de juventud de Lukacs, “Historia y conciencia de clase”. Son libros del mismo tamaño, organizados como una colección de textos, con un gran ensayo central, sobre la dialéctica que es la conciencia de clase y el proletariado en el caso de Luckas. También hay aspectos estéticos y políticos. La comparación es aún más interesante porque los dos tipos son de diversas épocas. Uno es del período inicial del comunismo, el otro, Althusser, aunque no lo sabía, del comienzo del período legal. Las posiciones son muy opuestas, pero a nivel de estructura y estilo la comparación tiene sentido. Mientras, “Para leer El Capital” es una obra, digamos, más híbrida y heterogénea; eso no lo entendimos en la época, pero para mí ahora está claro. En este punto hay que decir, primero, que fuimos nosotros, en cierto sentido, los responsables del llamado “teoricismo”, naturalmente Althusser lo sabía y nos empujó y aconsejó leer a los epistemólogos franceses famosos y otros, Lacan, etc., en ese sentido tiene la responsabilidad inicial, pero nosotros como buenos estudiantes fuimos completamente entusiastas. La autocrítica de Althusser es en verdad una crítica a lo que sus alumnos habían escrito y que no completamente concordaba con su visión. El segundo aspecto, que no es una confesión al estilo católico, un arrepentimiento, pero sí veo al grupo con un sentimiento de terrible vergüenza porque la primera edición de “Para leer El Capital”, la edición completa, está hecha de ensayos de cinco autores. Empieza con la introducción general de Althusser, que naturalmente fue escrita después de la redacción de las ponencias, contiene un ensayo de Jacques Ranciere que se llama “El concepto de crítica en Marx”, sigue un ensayo más breve sin mayor interés porque su mayor contribución al trabajo althusseriano de aquella época fue sobre la producción literaria, sobre teoría de la literatura; luego viene la contribución del mismo Althusser como miembro del seminario, luego viene mi propia contribución y finalmente una contribución de otro miembro de nuestro grupo que no fue ponencia del seminario. Se editaron dos volúmenes en 1965, tres años después, en 1968, tras muchos acontecimientos, el desarrollo del movimiento maoísta, en el que muchos jóvenes althusserianos tuvieron un papel decisivo, el propio Althusser jugando una especie de doble juego muy complicado entre el Partido Comunista de un lado y los maoístas del otro, con la consecuencia de que finalmente terminó cautivo en medio de los tiros de ambos campos, el 229 partido acusándolo de ser maestro de los maoístas y los maoístas acusándolo de ser un revisionista que no quería tomar sus responsabilidades con consecuencias dramáticas para su estado psíquico y mental. En 1968, antes de la movilización estudiantil, Althusser nos dice que el libro había tenido un éxito enorme, pero que para ser aún más útil para militantes de base, había que reducirlo a un tamaño más pequeño y para hacer eso había dos soluciones, o bien elegimos algunos textos y eliminamos los otros, o hacemos una redacción resumida de todos las contribuciones. Nosotros le preguntamos qué prefería hacer él, a lo que nos respondió que prefería la primera solución, inmediatamente le preguntamos qué íbamos a mantener y qué íbamos a eliminar, a lo que respondió que íbamos a mantener el texto de Balibar porque es un texto muy claro que la mayoría de los lectores consideran muy útil en términos de aplicación a las ciencias sociales, la economía, la antropología, y vamos a dejar de lado los demás porque son mucho más complicados, filosóficos y difíciles de comprender para los militantes. Yo como un cretino absoluto no vi la trampa en esa solución, esa versión reducida fue utilizada como base de las traducciones en todo el mundo, así se creó el libro de Althusser y Balibar, en el cual la cara invisible era la declinación de los otros y en particular de Jacques Ranciere. Dejo de lado explicar el conflicto que se produjo algunos años después entre Ranciere y Althusser, más bien consecuencia de la evolución de aquél y segundo, aunque naturalmente él no lo reconoce, pero para mí ahora está claro que estaba muy implicado en el movimiento maoísta de esos años y que Althusser, por el contrario, había abandonado al menos visiblemente toda inclinación en esa dirección y trabajaba críticamente. Voy a dejar el aspecto teórico de lado, solo voy a decir algo. Al hacer estas modificaciones tuve que releer mi propio texto, el de Ranciere y el prefacio que Althusser escribió. El caso no es que uno haya sido más estructuralista que otro, todos lo éramos, como lo sabe muy bien Emilio; este libro cambió mucho mi comprensión de todo ese proceso, para simplificar, la orientación de Ranciere es crítica en un sentido casi kantiano, hace referencias permanentes a Kant, su problema es como el problema de Kant con la dialéctica trascendental, explicar la posibilidad e incluso la necesidad de una ilusión trascendental, la ilusión del sujeto ideológico como consecuencia inevitable del juego de las categorías centrales del pensamiento, que son las categorías de la economía política, una cosa que Marx decía cuando hablaba de las formas del pensamiento objetivas que producen un efecto de ilusión subjetiva, así Ranciere se mantiene a nivel filosófico de una tentativa de tipo crítico. Mientras que yo tomo el punto de vista exactamente opuesto y escribo un texto esencialmente positivista, esa fue la razón por la que, yo no los quiero insultar, pero los llamados militantes, y sobre todo economistas, antropólogos, historiadores marxistas influidos por la revolución teórica anunciada por Althusser encontraron en mi texto un instrumento útil; porque yo decía que la crítica ya estaba acabada, que habíamos entrado en el campo de la ciencia y en él podíamos definir conceptos que no tienen ninguna relación con las ideologías o las ilusiones ideológicas del pasado, sino que explican objetos reales de la historia presente. El problema que como buen militante comunista me interesaba era el problema de la revolución y yo lo reformulé en términos de transición, una cosa que en ese momento jugaba un papel muy importante esencialmente en los países subdesarrollados donde se desarrollaban las luchas antiimperialistas. 230 Todo el mundo estaba interesado en cómo analizar los fenómenos y procesos de transición, pero la transición como yo la describía, en términos positivistas, se presentaba como una combinación contradictoria de dos tipos de estructuras, las capitalistas y las socialistas o tal vez comunistas. Lo extraño en este sentido es que unas existen en la realidad mientras que las otras, naturalmente, son intelectuales. Lo interesante también es que yo tenía una cuestión en común a nivel formal que era el poner las estructuras intermedias impuras, excepto que para Althusser el concepto central era cómo entender la posibilidad de un discurso como la economía política que el propio Marx consideraba semi científico y semi ideológico, una especie de contradicción interna; mientras yo me ocupaba de una “contradicción real” en la historia. En la nueva edición, la que ustedes tienen, tanto en mi texto como en el de Althusser, fueron eliminadas las fórmulas que tenían un sabor demasiado estructuralista. Althusser y yo, pero también otros althusserianos habíamos decidido no solo que el estructuralismo no era útil para refundar el marxismo, sino que además era una ideología peligrosa. De tal manera la genealogía profunda que Emilio discute y explica muy bien en su libro, acerca de la combinación paradójica naturalmente, pero también muy productiva intelectualmente, entre estructuralismo y marxismo, en el sentido intelectual, esa combinación está más o menos acordada y escondida en el texto final. Si ustedes toman los textos de Althusser más el mío, ¿qué tienen en sus manos? Tienen un equivalente, no digo en todos los aspectos del contenido, del libro de Stalin “Materialismo dialéctico y materialismo histórico”; el propio Althusser lo dijo. El texto de Althusser “Materialismo dialéctico” y el texto de Balibar “Materialismo histórico”, uno es la fundación del otro, el segundo es la ilustración de las capacidades científicas del primero. Habría que reflexionar sobre la larga influencia del esquema estaliniano en el pensamiento de Althusser. Tiene razón Emilio cuando lo llama esotérico, más político el lector de Maquiavelo e inventor de esa palabra extraña “materialismo aleatorio”, con carga negativa, no es solamente el materialismo que tiene el azar como su contenido, se puede entender también como un materialismo muy improbable. Lo cierto es que tiene muy poco de materialismo estaliniano y probablemente no tiene nada de marxista, de hecho no tiene nada que ver con él, es una invención filosófica. Quisiera matizar esta presentación muy negativa y muy autocrítica en cierto sentido, porque en los dos textos que Althusser introduce en el Prefacio hay dos cosas que no se deducen de esto. La primera es la idea de la lectura sintomal, que es una primera tentativa de rectificación de las orientaciones opuestas que tuvimos en el texto. Es una idea dialéctica en cierto sentido, hay una interpretación, la interpelación restringida de la idea de lectura sintomal que está de acuerdo con el famoso tema del corte epistemológico, la lectura sintomal fue lo que hizo Marx para criticar la economía política y el método que usó para producir el corte epistemológico. Althusser propuso otra interpelación, la idea del corte epistemológico continuado. Pero no llevó la idea del corte epistemológico hasta las consecuencias que, en cierto sentido, el concepto de lectura sintomal contiene. Si leen el texto van a ver que es la mejor interpretación, es decir, se trata de un proceso infinito, no acabado; lo que quiere decir que el marxismo o la teoría científica no pueden existir sin criticar permanentemente, no solo a una ideología pre existente, sino más bien a la ideología que su propia actividad teórica recrea y reproduce en su relación con los movimientos políticos. Hay que aplicar la lectura sintomal a sí mismo, hay que añadir otro nivel de transferencia y de control. El otro elemento imprescindible, es un elemento que hay que reconstruir tomando algo de “Por Marx” y algo de “Para leer El Capital”, en el párrafo final del Prefacio aparece la formula 231 sencilla que dice que habría que estudiar el efecto de sociedad; fórmula muy extraña porque da la impresión de ser una cosa nueva que el texto no contiene, de hecho lo contiene, el efecto de sociedad no es otra cosa que la sobredeterminación y ésta no es otra cosa que la unidad de contrarios, lo cual es muy difícil de pensar y conceptualizar entre estructuras y coyunturas en la práctica política. El corazón de todo esto, para mí, la parte más bella de “Para leer El Capital” porque es el cristal filosófico, es el capítulo de Althusser que se llama “Esbozo de un concepto de tiempo histórico”, es interesante porque es vecino de un capítulo atroz que se llama “El marxismo no es un historicismo”, el ataque a Lukacs y a Gramsci, que es una ilustración casi perfecta del método estalinista llamado leninista de criticar a las desviaciones de izquierda de Lukacs y a las de derecha de Gramsci, explicando que tienen el mismo contenido, que es la misma incapacidad de comprender la dialéctica. Es horrendo, pero la contrapartida positiva e inacabada es el esbozo de un concepto que yo llamaría no vulgar, no lineal, no evolucionista, no teológico de la historicidad como no contemporaneidad estructural del presente. Es aquí que Althusser puede ser comparado con otras grandes figuras del marxismo del siglo XX que estaba mencionando antes. Esto no es para explicar que uno es mejor o superior, es para decir que estamos aquí en el corazón del problema filosófico y que Althusser verdaderamente lo tocó en esta época. Muchas gracias. Desgrabación: Ana Laura Xiques Revisión y edición: Mario Hernandez Hay un vínculo directo entre el Plan Colombia, EE. UU. y 5.500 jóvenes colombianos asesinados/ Entrevista a Renán Vega Cantor, , Bogotá, Colombia Mario Hernández https://www.topia.com.ar/articulos/hay-un-vinculo-directo-plan-colombia-ee-uu-y-5500jovenes-colombianos-asesinados Renán Vega Cantor es historiador. Profesor titular de la Universidad Pedagógica Nacional de Bogotá, Colombia. Doctor de la Universidad de París VIII. Diplomado de la Universidad de París I, en Historia de América Latina. Autor y compilador de los libros Marx y el siglo XXI (2 volúmenes), Editorial Pensamiento Crítico, Bogotá, 1998-1999; El Caos Planetario, Ediciones Herramienta, 1999; Gente muy Rebelde (4 volúmenes), Editorial Pensamiento Crítico, Bogotá, 2002; Neoliberalismo: mito y realidad. Entre sus últimos trabajos podemos mencionar: Los economistas neoliberales, nuevos criminales de guerra: El genocidio económico y social del capitalismo contemporáneo (2010). La República Bolivariana de Venezuela le entregó en 2008 el Premio Libertador por su obra Un mundo incierto, un mundo para aprender y enseñar. Dirige la revista CEPA (Centro Estratégico de Pensamiento Alternativo). M.H.: Un momento muy especial para la vida política colombiana, el pasado jueves 4 de febrero se encontraron en Washington los Presidentes Obama y Santos, encuentro en el que también estuvo presente el ex Presidente Pastrana, en la conmemoración de los 15 años del “Plan Colombia”, realizada en la Casa Blanca. ¿Cuál es tu visión respecto del “Plan Colombia”? Tanto Santos como Obama lo dieron como un plan que tuvo resultados positivos. El ex Presidente Andrés Pastrana también, pero fue crítico de los acuerdos de paz a los que luego haremos referencia. Comencemos con el Plan Colombia. 232 R.V.C.: Cuando se analiza un hecho del presente uno tiene que pensar si se habla de resultados favorables o desfavorables, para quién o para quienes. Por supuesto que para Estados Unidos los resultados del Plan Colombia han sido absolutamente favorables y para las clases dominantes de Colombia y el que nosotros llamamos bloque de poder contrainsurgente también. Pero para el grueso de la población no solo colombiana, sino andino latinoamericana los resultados del Plan son terriblemente negativos. Me atrevería a decir que el Plan Colombia se podría catalogar como plan de muerte, porque en estos 15 años lo que se ha dado es una recolonización de Colombia, se ha convertido en el territorio donde las clases dominantes han feriado todo y se ha iniciado un proceso de convertir a nuestro país en la base más incondicional de los Estados Unidos. Desde ese punto de vista uno se pregunta qué se puede celebrar. ¿Se puede acaso celebrar la muerte? Y no hablo en términos metafóricos, sino en términos reales fundados en hechos que se han dado recientemente. Tal vez en Argentina, como en otros lugares del mundo, se ha escuchado hablar de un término absolutamente banal pero que oculta muchas cosas, que es el de “falsos positivos”. Ese término significa asesinatos de Estado, que se han cometido durante estos 15 años, en una práctica sistemática que se generalizó durante el Plan Colombia, no nacieron con él pero sí durante su vigencia se convirtieron en una práctica organizada y continua que ha tenido como resultado alrededor de 5.500 asesinatos. Durante los gobiernos de Álvaro Uribe Vélez, entre 2002 y 2010, pero principalmente entre el 2002 y el 2008, cuando estalló el escándalo, se recurrió a la práctica de asesinar a jóvenes colombianos que mediantes distintos artificios eran engañados y se los llevaba a distintas zonas a donde ellos vivían, se les vestía con traje camuflado, se los asesinaba y se los presentaba como guerrilleros dados de baja. Esa práctica tiene como resultado la cifra de 5.500 muertos, una cifra que las ONG consideran la más alta de asesinatos políticos en todo el mundo en lo que va del siglo XXI. Son crímenes de Estado que están relacionados con el Plan Colombia. Estamos hablando de que en el gobierno de Uribe Vélez, cuando fue Ministro de Defensa del actual Presidente de la República de Colombia, Juan Manuel Santos, se dieron directivas oficiales, en las que se comienza a poner precio sobre las cabezas de los miembros de la insurgencia, de acuerdo a su importancia dentro de la organización. Por ejemplo, para los mandos superiores, como el Secretariado de las FARC ofrecían 5.000a 10.000 millones de pesos, y de ahí para abajo se empezaba a ofrecer hasta los combatientes rasos. Aparte se daban otro tipo de incentivos, como mandos militares, altos o medios que estuvieran involucrados en el asesinato de insurgentes tenían algunas remuneraciones adicionales como vacaciones, premios económicos o se les ascendía. Eso fue convirtiéndose en un incentivo para matar colombianos. Se trataba además propagandísticamente de decir que el Ejército colombiano estaba matando guerrilleros a diestra y siniestra, cuando en realidadse trataba de jóvenes colombianos humildes que eran engañados y asesinados. Esos son los “falsos positivos”, es interesante de donde surge ese nombre. En el Ejército colombiano se acostumbra que cuando un oficial da una orden y el subalterno le contesta “positivo”, quiere decir que la orden se acató. En este caso quiere decir que la orden de asesinar colombianos se cumplió. Pero en cuanto la prensa del mundo en vez de sacar un titular que diga “Cinco mil colombianos asesinados por el Ejército”, dicen “Cinco mil falsos positivos asesinados” se atenúa el crimen, y eso es lo que ha sucedido. Esto está relacionado 233 con el Plan Colombia porque hay ONG de EE. UU.y Europa que han hecho investigaciones de la responsabilidad de unidades militares colombianas de altos mandos, en la realización de los llamados “falsos positivos” y la relación con los Estados Unidos, es decir que se ha investigado cuál es la formación de esos militares y dónde tomaron sus cursos. En la mayoría de los lugares donde se llevaron a cabo esos falsos positivos, los comandantes de las unidades militares, fundamentalmente con cargos superiores, en un 80/90% habían recibido instrucción de Estados Unidos en la Escuela de Las Américas, por ejemplo. Hay un vínculo directo entre el Plan Colombia, la participación de USA y los asesinatos. Pero este es tan solo un elemento del Plan Colombia que de por sí ya es escandaloso. Otro elemento es que durante el Plan Colombia se acentúa el uso del glifosato como químico para destruir las matas de hoja de coca, pero eso ha llevado a la destrucción de economías campesinas, indígenas, la enfermedad y muerte de muchos colombianos en zonas campesinas. Un país tan dependiente, tan sometido como Afganistán se negó en un momento determinado a usar este tipo de químicos para fumigar los cultivos de amapola, en cambio, en Colombia esa práctica se ha seguido llevando a cabo hasta el día de hoy, aunque hace unos meses se dijo que se iba a suspender. Un tercer elemento en el que se demuestra que este es un plan de muerte, tiene que ver con el asesinato, en un país en el que no existe la pena de muerte, de altos miembros de la insurgencia con la participación directa de tropas de los Estados Unidos. El crimen de guerra del 1° de marzo del 2008 en Sucumbíos, Ecuador, donde fueron asesinadas 26 personas, entre ellos el segundo comandante de las FARC, Raúl Reyes, 4 estudiantes mexicanos y ciudadanos ecuatorianos. Hace unos dos años un periódico de EE. UU.dio a conocer que ese operativo había corrido por cuenta directa de las fuerzas de USA. Entonces, cuando se celebran los 15 años de este Plan, están celebrando la muerte, persecución, el exilio y represión de miles de colombianos. Me parece que es cinismo, más cuando estamos hablando de un Presidente que supuestamente está interesado en lograr la paz. Podemos decir que se trata de la paz de los sepulcros la que está celebrando. Por supuesto, si miramos el Plan Colombia desde una óptica diferente, ha sido nefasto no solo para Colombia sino para los países de la región. Ha significado la militarización creciente de toda la región, la construcción de nuevas bases militares, injerencia de los Estados Unidos, construcción y manejo de radares en zonas estratégicas como el Mar Caribe y la Amazonía; bases militares norteamericanas en territorio colombiano desde donde se puede agredir, controlar y vigilar a todos los territorios de la nación. Esos son algunos de los resultados del Plan Colombia. Hay otro elemento que resulta paradójico. El debate por este Plan comenzó en el Senado de los Estados Unidos entre 1999 y el 2001 en un momento en el que había dialogo entre las FARC y el gobierno de Pastrana. En ese momento se dijo que el Plan no era contrainsurgente, sino que era para combatir el narcotráfico. Cuando se rompieron las conversaciones y luego de los atentados de septiembre de 2001, abiertamente se dijo que era un plan contrainsurgente encubierto como un plan antinarcóticos. En términos de narcóticos el plan es un absoluto fracaso. Colombia no ha dejado de ser proveedor mundial de cocaína, a pesar de que México cumple un papel significativo. No se ha reducido notablemente el número de tierras sembradas, inclusive si se hubiera reducido, la productividad por hectárea es mayor que la que existía hace 15 o 20 años. Por lo tanto, la cantidad de cocaína que sale de Colombia al mercado mundial, incluso ha aumentado. Desde 234 ese punto de vista el Plan ha sido un fracaso, pero obviamente el objetivo del Plan no era ése, siempre fue concebido como plan contrainsurgente. El Estado colombiano tuvo que aportar U$S 120.000 millones para el Plan Colombia M.H.: He recabado algunos datos de distintas publicaciones que indican que de los U$S 9.000 millones que Estados Unidos entregó como parte del Plan Colombia, el 71% fue destinado a las fuerzas armadas y de policía. Antes te comentaba sobre una entrevista que realiza la revista La Semana a Andrés Pastrana, donde reconoce que las FARC ya no son la guerrilla arrolladora de hace unos años, que han sido fuertemente golpeadas por el fortalecimiento de las Fuerzas Armadas debido al Plan Colombia. Según el Pentágono, el Plan Colombia redujo el tamaño de las FAR en 2/3 en 15 años, alejando la guerrilla de los alrededores de las ciudades y carreteras principales. Sin embargo, el ex Presidente Andrés Pastrana, firmante originario del Plan Colombia, refiriéndose a las negociaciones de paz en La Habana, considera que son un triunfo para las FARC. “Lo triste es que una vez en la mesa, la guerrilla logró arrodillar al gobierno por la vía insólita de las concesiones del fuerte al débil. Lo que la guerrilla logró en la mesa es el lavado de su cartel”,dijo Pastrana, y agregó una frase muy fuerte, que me gustaría que pudieras aclararnos: “La guerrilla cambió el Diario del Che por El Padrino”. R.V.C.: Primero tengo que decir que el personaje del cual usted me habla es un personaje absolutamente despreciable, por el nivel de postración frente a los Estados Unidos porque cuando hablamos de este proceso de recolonización, en el cual intervienen las facciones de las clases dominantes y el Estado colombiano, se personifica en individuos. Estamos hablando de un proyecto de clase en el cual hay individuos sobresalientes. Y en ese proceso de entrega, de conversión de Colombia en una nueva colonia de los EE. UU., Pastrana ha cumplido un papel absolutamente nefasto. Cuando se inicia el Plan Colombia hace 15 años, el gobierno de Pastrana estaba sentado en una mesa de negociación con las FARC y en medio de esto, comienza una ingeniería para fortalecer las Fuerzas Armadas, lo cual significa que nunca estuvo interesado en una solución dialogada del conflicto armado. Mientras hablaba de paz con las FARC, estaba reorganizando el Ejército y las Fuerzas Armadas que habían sufrido durísimos golpes militares durante los ´90. Y lo que se puede ver en la perspectiva que dan los años, es que el Estado colombiano y las Fuerzas Armadas se vieron obligadas a sentarse en una mesa a negociar para ganar tiempo para rearmarse, pero no estaban interesados realmente en que se avanzara en el proceso de paz. Mientras se dialogaba, el Estado colombiano firmaba acuerdos con los Estados Unidos, entre esos el Plan Colombia, pero también hubo otros menos conocidos, inclusive acuerdos secretos de intervención directa de los EE. UU. en términos militares. ¿Qué autoridad moral tiene un individuo como éste de dar lecciones si él es un personaje que encarna esa claudicación de las clases dominantes en Colombia, que en lugar de impulsar reformas sustanciales en la 235 estructura social y económica del país, prefiere recurrir a la vía militar pensando que iban a ganar la guerra? Lo que hemos visto durante estos 15 años es que el Estado no pudo ganar la guerra por la vía militar, aunque haya debilitado a las FARC, no las ha podido destruir y por eso tuvieron que volver a sentarse a dialogar. Porque el Estado apostó a la destrucción total de la insurgencia. Hay un costo del Plan Colombia, pero está minimizado, la inversión directa de los Estados Unidos fue una cifra de aproximadamente 10.000 millones de dólares, pero los costos reales aproximados, son de 130.000 millones de dólares,es decir, que el Estado colombiano tuvo que aportar 120.000 millones de dólares. ¿De dónde salió este capital? De reformas tributarias, nuevos impuestos, invirtiendo en el presupuesto militar y reduciendo la inversión en el sector social, en educación, en cultura; privatizando y creando todas las condiciones para firmar Tratados de libre comercio. Por lo tanto, hay todo eso detrás del aspecto militar del Plan Colombia, del que no habla Pastrana. Él hace unas afirmaciones absolutamente nefastas que reproducen la lógica colonial de los Estados Unidos, que considera a las FARC como un cártel de la droga. Ese es un invento norteamericano, de un embajador de los Estados Unidos en Colombia, Lewis Tamp, que acuñó el nombre de “narcoguerrilla” en 1982. Desde ese entonces el término narcoguerrilla se ha venido utilizando para varias cosas, primero para desprestigiar a la insurgencia, para decir que no tiene proyecto político, que es un cartel más; y para legitimar la lucha contrainsurgente del Estado colombiano y plegarse a los Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico. De allí se desprende que no hay necesidad para ellos de ninguna reforma, ni de ninguna transformación porque para ellos están muy bien, porque estamos hablando de una lucha puramente contra el narcotráfico y no de una lucha contrainsurgente, contra un movimiento que tiene reivindicaciones políticas. Colombia es un país que se precia de ser democrático, pero ni en las peores dictaduras hay registros tan negativos M.H.: ¿Cuáles son los daños causados a la población civil por la aplicación del Plan Colombia? R.V.C.: Los daños han sido terribles. Por eso decía que cuando uno habla de los logros o fracasos de cualquier proyecto social, tiene que fijarse quiénes se benefician y quiénes se perjudican. En términos negativos, podríamos nombrar algunos de los efectos más dañinos para la población, un primer elemento profundamente nefasto es la militarización de la sociedad colombiana. El Ejército colombiano en estos últimos años ha tenido un crecimiento espectacular, hasta llegar a ser uno de los 15 ejércitos más grandes del mundo. 236 M.H.: Con 500.000 efectivos. R.V.C.: Sin contar su influencia indirecta. Incide indirectamente en alrededor de 3 millones de personas, hablando de los familiares de los miembros de las Fuerzas Armadas colombianas. La vida cotidiana, el hecho de negarse a reconocer reivindicaciones sociales, militarizar todos los aspectos de la vida, solucionar todos los conflictos por la vía de la represión. Estamos hablando de la expulsión de entre 6 y 7 millones de campesinos de sus tierras, en un proceso que se inició antes del Plan Colombia pero que se radicalizó durante. Hoy por hoy Colombia está entre los primeros países con el más alto índice de expulsión interna. Estamos hablando del acaparamiento de tierras por parte de nuevos y viejos terratenientes. Los campesinos eran echados por la represión y la paramilitarización y esas tierras quedaron en manos de viejos y nuevos terratenientes. El efecto negativo que ha tenido el uso del glifosato al destruir los cultivos, destruye todo tipo de cultivo y no solo los mal llamados cultivos ilícitos. La represión indiscriminada. Desapariciones y asesinatos de sindicalistas, de defensores de derechos humanos. Es un listado enorme en un país que se precia de ser democrático, pero incluso a veces en las peores dictaduras no hay registros tan negativos como lo que pasa en Colombia. M.H.: ¿Es imaginable un papel diferente de las Fuerzas Armadas colombianas una vez firmados los acuerdos de La Habana? R.V.C.: Este es uno de los elementos centrales de cualquier proceso de desmovilización e incorporación del movimiento insurgente a la vida civil, porque hay que decir que las Fuerzas Armadas colombianas han sido formadas en la Doctrina de la Seguridad Nacional, de la contrainsurgencia y del anticomunismo, mucho antes del comienzo del Plan Colombia. Estamos hablando de unas Fuerzas Armadas que fueron educadas en esa lógica en los últimos 70 años,es decir, que todos los miembros de las Fuerzas Armadas, desde la alta oficialidad hasta los soldados rasos, han sido formados en la doctrina del enemigo interno. El enemigo interno no es solamente el miembro armado de la insurgencia que pertenece a éste o a aquél movimiento guerrillero; enemigo interno es lo que aquí se ha llamado, con un término muy negativo, como “guerrilleros desarmados” que son (o somos) los profesores críticos del sistema, investigadores independientes, profesores de cualquier nivel educativo, dirigentes sindicales, dirigentes campesinos, prácticamente cualquier organización no armada que tenga consideraciones en contra del régimen era o es considerado como guerrillero desarmado, a los que se les aplica el mismo tratamiento que a los guerrilleros armados y el Ejército y las Fuerzas Armadas han sido los sujetos más activos de esa práctica contra la población civil. Si queremos construir otro país es obvio que las Fuerzas Armadas tienen que modificarse en muchísimas cosas, primero tienen que reducir su tamaño, porque actualmente es exagerado y no solo por el número de miembros sino por el gasto económico que significa para el Estado colombiano. En pocos años la carga fiscal de un ejército tan grande, cuyos efectivos se pensionan desde muy jóvenes, desde los 40 años aproximadamente, precisamente por la cuestión de la guerra, va a ser inmanejable. 237 Desde el punto de vista puramente económico eso tiene que modificarse, pero el otro punto tiene que ver con su función, la necesidad de que vuelvan a sus cuarteles para proteger las fronteras del país y abandonen la idea de que el enemigo está aquí, en cualquier ciudadano que habita en las ciudades o los campos colombianos. Eso requiere de una ingeniería cultural e ideológica que va a necesitar mucho tiempo, porque estas Fuerzas Armadas son terriblemente anticomunistas y cuando hablamos de anticomunismo no es que se persiga solamente a quienes se denominan como tales, sino a cualquier persona que piense diferente. Eso requiere una modificación de esa mentalidad castrense y va a necesitar muchas décadas, no será de un momento a otro. Por eso mismo es que gran parte de las Fuerzas Armadas no están de acuerdo conque se firme un acuerdo con el movimiento insurgente, porque pierden muchos de sus privilegios, que son muchísimos, por ejemplo, en el manejo del Plan Colombia, una cantidad de manejos corruptos en donde distintos sectores militares se han quedado con millones de dólares, pero resulta que se les facilita porque son un poder independiente sin ningún nivel de control ni auditoría, entonces pueden hacer lo que quieran con esos dineros sin que tenga consecuencias investigativas o penales. Obviamente, que al cambiar la situación se va a producir un cambio en el seno de esa conducta de las Fuerzas Armadas. ¿Van a poder las FARC hacer política sin armas? M.H.: En este contexto, cómo podríamos interpretar la afirmación del Comandante Timochenko, que yo pondría entre signos de interrogación: ¿Van a poder las FARC hacer política sin armas? R.V.C.: Ese es uno de los grandes interrogantes porque aparte de ese carácter anticomunista de las Fuerzas Armadas, las clases dominantes de Colombia también son profundamente anticomunistas y contrainsurgentes y lo son para mantener sus privilegios y la desigualdad que caracteriza a la sociedad colombiana, que es una de las más desiguales del mundo y lo dicen las Naciones Unidas, no solo las organizaciones de izquierda. Incluso Piketty, el economista francés, lo señaló hace unos 20 días en una conferencia que dictó en una Universidad de Bogotá, que solamente el 1% de la población concentra el 20% del ingreso, y creo que se quedó corto. Pero esto lo dice un economista que no conoce nada de la realidad colombiana, que simplemente consultó datos macroeconómicos, los confrontó con la realidad de otros países del capitalismo mundial y llega a la conclusión de que Colombia es un país terriblemente desigual. Entonces, en realidad la cuestión de la guerra y el asesinato de los oponentes tienen que ver con mantener la desigualdad. Obviamente, los sectores políticos que quieran actuar para 238 contrarrestar esa realidad, van a enfrentarse al hecho o al dilema de si se les va a permitir hacer política en ese sentido, o se los va a matar. Es un dilema que aumenta si uno recuerda algunos hechos históricos de los últimos 60 años en Colombia, donde distintos procesos de amnistía y desmovilización han terminado con el asesinato de guerrilleros. Como sucedió en la década del ´50 y ´60, y como sucedió después de 1984 con la Unión Patriótica. Por lo tanto, es uno de los interrogantes que genera la firma de un posible acuerdo que le ponga fin al conflicto armado. Y hay que agregarle una cuestión fundamental, qué pasa con el paramilitarismo. Si efectivamente el Estado colombiano va a tomar medidas para desmontarlo, porque es como el brazo parainstitucional no reconocido del Estado y las clases dominantes para hacer las labores sucias que a ellos les quedan más difíciles. M.H.:Días pasados, visitó en La Habana a las FARC una delegación del Centro Democrático, partido de Álvaro Uribe. ¿Cuál es la posición de Uribe respecto de este proceso de paz que se está llevando adelante en La Habana? R.V.C.: Yo creo que para poder darle un manejo amplio a esa pregunta tendríamos que situarnos en un contexto un poco más amplio que el actual. Tendríamos que situarnos en el año 2002, cuando Uribe Vélez gana las elecciones bajo un programa absolutamente militarista y represivo. Incluso dijo que iba a exterminar a las FARC en dos meses, luego amplía los plazos en la medida que la misma situación de la guerra demuestra que eso no es posible. Álvaro Uribe representa la línea más militarista, derechista y más plegada al gobierno estadounidense que se ha vivido en la historia de Colombia. Él siempre apostó a la derrota de la insurgencia por la vía militar, pero eso no se logró, a pesar de la terrible inversión económica, compra de armas, modernización de las Fuerzas Armadas y la militarización de la sociedad colombiana. Entonces, aparece como un perdedor de firmarse un acuerdo que le ponga fin al conflicto armado, porque se demuestra en la práctica que lo que pretendía, que era la derrota de la insurgencia, no se pudo lograr. Él es el principal opositor de los diálogos que se llevan a cabo en La Habana, recurriendo a todo tipo de mentiras y embustes, inclusive diciendo estupideces como que Juan Manuel Santos es un representante del castro-chavismo en Colombia. O diciendo que el gobierno de Santos ha hecho una entrega del país en todos los terrenos, cosa que no tiene el más mínimo elemento real. Lo que pasa es que se siente sumamente frustrado y representantedeun sector de las clases dominantes, al cual ni siquiera hoy Estados Unidos respalda. Su momento pasó, ahora estamos hablando de un bloque de poder contrainsurgente remozado con la hegemonía del capital financiero y no de los terratenientes y ganaderos que representaba Uribe, que ven la necesidad de que se termine rápido el conflicto para tener abierto el territorio colombiano para las inversiones de las multinacionales. A ese mismo proyecto apuntan las dos vías, la de Uribe y la de Santos, lo que pasa es que la vía uribista significaría la continuidad de una tierra arrasada en una guerra prolongada que puede durar otras 4 o 5 décadas. Con un agravante que no lee Uribe Vélez, probablemente por su carácter derechista y reaccionario, que en este momento hay una crisis de la economía 239 colombiana que se puede prolongar durante mucho tiempo, que puede significar que necesariamente se tenga que invertir cada vez menos en la guerra. El santismo ha comprendido esa situación y considera que es el mejor momento para ponerle fin al conflicto armado. El uribismo logró mantener la guerra durante 8 años porque estábamos en un ciclo ascendente de la economía colombiana, con el aumento de precios de las materias primas, el aumento de las exportaciones de petróleo, carbón y otros minerales permitieron direccionar dinero hacia el aparato de guerra.Hoy ese contexto económico está cambiando. M.H.: Ha quedado por fuera de los acuerdos de paz, el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el pasado 8 de febrero, el Presidente Santos ordenó intensificar operaciones en su contra, tras un ataque de una brigada militar. Y el día posterior se conoció un mensaje difundido por el Obispo de Cali, Darío de Jesús Monsalve, a través del cual el jefe del ELN ofreció abrir una tregua bilateral para iniciar un diálogo de paz. ¿Qué nos podés comentar al respecto? R.V.C.: Evidentemente si se llega a un acuerdo en el cual solamente firmen las FARC y el Estado colombiano, va a ser muy limitado desde el terreno estrictamente militar, de la guerra propiamente dicha, porque para que la guerra interna termine en Colombia es necesario que todas las partes de la insurgencia participen, incluyendo al ELN. Lo que sucede es que por múltiples razones, el Estado ha demorado el comienzo de diálogos de verdad y ha estado solamente en la agenda exploratoria con un objetivo básico y clásico “divide y vencerás”, se trata de dividir al movimiento insurgente y en la medida que pase más el tiempo las condiciones de negociación del ELN van a ser mas difíciles. En la medida en que se acerque la firma o se firme un acuerdo en La Habana, las negociaciones van a ser más complicadas para el ELN, porque es difícil pensar que el Estado va a abrir una mesa paralela en la cual va a llegar a los mismos acuerdos que con las FARC, es decir, llegar a un acuerdo paralelo de justicia transicional con el ELN que no sea parecido al que firme con las FARC. Es difícil pensar eso. Es difícil pensar que vaya a nombrar una comisión especial para el ELN. El régimen santista siempre fue claro en dialogar en medio de la guerra, lo ha hecho con las FARC y veo muy difícil que acepte la propuesta de una tregua bilateral, porque el incremento de las acciones militares tiene como objetivo debilitar las condiciones de negociación. Entonces el incremento de la fuerza destinada a reprimir al ELN tiene el objetivo de que los términos del diálogo sean más favorables al régimen y al gobierno. Camilo Torres tiene mucho que decirles a los colombianos de hoy, aunque muchos de ellos no lo conozcan ni sepan quién fue M.H.: Se cumplen 50 años de la caída en combate de Camilo Torres Restrepo, el cura que había nacido 37 años antes, un 3 de febrero, en el seno de una familia distinguida de Bogotá. Camilo Torres era sociólogo, sacerdote, político, cursó sus estudios en la Universidad de Lovaina 240 donde tuvo la oportunidad de conocer a los curas obreros franceses que inspiraron el Concilio Vaticano II y la Doctrina Social de la Iglesia. De regreso a Colombia conoce a Rolando Fals Borda y juntos fundan el Departamento de Sociología en la Universidad Nacional. En el Ministerio de Educación impulsa el Movimiento de acción comunal que buscaba promover la autogestión y organización comunitaria y en el INCORA impulsó la reforma agraria. ¿Qué significado tiene en la actualidad, a 50 años de su caída en combate, la figura de Camilo Torres? R.V.C.: Camilo Torres es un personaje que ha trascendido las fronteras colombianas. Se podría decir que es patrimonio del movimiento revolucionario y anticapitalista del mundo. En el momento en que muere en combate, hace 50 años, él se anticipa a muchas cosas de su época, vive en los turbulentos años ´60 que tanto transformaron al mundo y que en Colombia también tienen incidencia. Se anticipa a la Teología de la liberación, al diálogo entre marxistas y cristianos, a empuñar las armas como una decisión ejemplar para demostrar cómo se combatía al capitalismo. Estos son hechos muy importantes, además de toda la agitación social que realiza, porque la decisión que toma de empuñar las armas es casi obligada, es resultado de la persecución a la que se ve sometido cuando se convierte en un agitador muy importante en el año ´65. Moviliza masas en todos los lugares a los que va en Colombia y esto empieza a ser visto con preocupación por las clases dominantes y el Estado que lo empiezan a acosar e incluso a amenazar. Pero también es perseguido por las jerarquías católicas de Colombia que son profundamente retrógradas y en los años ´60 eran uno de los puntales de la dominación. Cuando muere, demuestra en la práctica lo que él llamaba “amor eficaz”, término que inventó para hacer referencia al compromiso verdadero de un cristiano. Camilo decía que un cristiano no era discursivo ni retórico, sino que era real, participando en las luchas de los pobres, construyendo la solución de sus problemas, señalando las causas de las desigualdades. Entonces, Camilo Torres tiene una agenda muy radical para la década de los ´60 que lo lleva a tomar la decisión que tomó. Además, es el primer sacerdote que muere en América Latina empuñando las armas y participando en el movimiento guerrillero. De ahí en adelante Camilo se convierte en un símbolo que guía y alimenta luchas populares en Colombia en distintos órdenes y en un referente para el resto del mundo. Cincuenta años después lo que habría que examinar es el legado y la vigencia del mensaje teórico y práctico de Camilo Torres, cuánto ha cambiado Colombia. Me atrevería a decir que prácticamente nada, hoy la sociedad colombiana en términos estructurales, de desigualdad, injusticia, de polarización entre pobres y ricos, vive en las mismas condiciones que conoció Camilo a mediados de la década del ´60. Tenemos una desigualdad marcada, tenemos el poder de los grandes medios de comunicación que calumniaron y desprestigiaron a Camilo Torres, tenemos las fuerzas represivas del Estado, la organización de grupos paramilitares. Todo eso ya se empezaba a vivir en la época de Camilo Torres. La intolerancia que caracteriza a la sociedad colombiana y a sus clases dominantes, la intolerancia religiosa, todas esas cosas siguen presentes en la sociedad colombiana de hoy, por lo cual podemos decir que el mensaje de Camilo Torres es muy actual, tiene mucho que decirles a los colombianos de hoy, aunque muchos de ellos no lo conozcan ni sepan quién fue Camilo Torres Restrepo. 241 M.H.: Al respecto un tema específico, ¿qué fue el Frente Unido del Pueblo vinculado a la labor política y teórica de Camilo Torres? R.V.C.:El Frente Unido del Pueblo fue una propuesta muy importante y muy original de Camilo Torres. Como dijo usted al principio, Camilo venía de una familia burguesa, estudió en colegios aristocráticos, fue seminarista y luego sacerdote, en una formación ideológica, política y cultural bastante conservadora. Pero Camilo tenía una increíble sensibilidad social y eso lo llevó casi por sus propios medios a relacionarse con otros sectores, y a comprender en la década del ´60 el carácter injusto y antidemocrático del capitalismo existente en Colombia. A raíz de eso se dio cuenta de que era necesario aglutinar a las fuerzas afectadas por ese capitalismo y esa estructura desigual de la sociedad colombiana y eso lo llevó a proponer la creación del Frente Unido del Pueblo. Con una plataforma mínima pero muy importante, donde decía que debían participar todos los sectores sociales para crear un frente de unidad que enfrentara al boque de poder, al Frente Nacional, como se llamaba a la estructura dominante de Colombia de ese momento donde liberales y conservadores se turnaban en el manejo de la política. En 1965 hace la propuesta, funda un periódico que lleva ese nombre “Frente Unido del Pueblo” y publica varios números. Genera una movilización sin precedentes en la sociedad colombiana, que solo se puede comparar con lo sucedido en la década del ´40 con Jorge Eliecer Gaitán. Y esto asusta realmente a las clases dominantes de este país, que un sacerdote pudiera tener ese carisma, llegar tan directamente a importantes sectores de la población. Camilo le habla a todos los sectores sociales, les da un mensaje a los estudiantes, a los comunistas, incluso a las Fuerzas Armadas, a distintos sectores sociales, con la perspectiva de armar un frente unido donde se incorporaran todos los sectores sociales golpeados por el Frente Nacional. Ese proyecto de unidad se dirige principalmente a las izquierdas de esa época y debería ser recogido por las izquierdas de nuestro tiempo, rompiendo con sectarismos para llegar a acuerdos sobre aspectos fundamentales, más allá de diferencias tácticas o coyunturales. Esta es una oportunidad histórica M.H.: El pasado viernes 21 de enero hubo un encuentro aquí en Bogotá de representantes del Polo Democrático, la Unión Patriótica, el Partido Alianza Verde y progresistas, entre otros, que se reunieron con la idea de construir un frente común de cara a la coyuntura y a las próximas elecciones. ¿Qué opinión te merece este encuentro? 242 R.V.C.: Con independencia de las apreciaciones que algún sector político pueda tener sobre la eventual firma de un acuerdo que le ponga fin al conflicto armado entre el Estado y las FARC, hay que decir que esta es una oportunidad histórica, no es algo que se presente todos los días y crea nuevas condiciones de lucha política, potencia la acción política alternativa. Pero para que esa potencia se convierta en realidad, es necesario que los sujetos sociales que representan voces alternativas o disidentes, se organicen y aprovechen esa coyuntura. Me parece una oportunidad para que las izquierdas de Colombia dejen de lado muchas diferencias, que suelen ser puramente electorales y ponerse a pensar en la construcción de un programa más de fondo, más sustancial en estas nuevas condiciones. Uno desearía ser optimista, que las izquierdas históricas existentes aprovecharan esta coyuntura, pero eventos recientes me hacen dudar por las rencillas que se repiten en la mayoría de los casos, son terriblemente limitadas porque son principalmente de tipo electoral. No creo que en una coyuntura como la que se está presentando y las nuevas condiciones que genera, simplemente tengan como objetivo fundamental lo electoral. No digo que lo electoral no pueda ser un instrumento, pero estamos pensando en construir un bloque de poder alternativo que va más allá, que requiere volver a pensar en las reivindicaciones de distintos sectores, volver a pensar en el sindicalismo, en el movimiento campesino, en las luchas de los estudiantes. Que la o las izquierdas tengan mucho que decir frente a eso y participen en esas luchas, porque lo que ha sucedido en Colombia durante los últimos años es una terrible disociación entre lo social y lo político. M.H.: El pasado 2 de febrero se reunieron 46 organizaciones sociales para plantear la iniciativa de un paro nacional, criticando la próxima reforma tributaria y a las privatizaciones, principalmente centrándose en el acueducto de Bogotá, en la situación de la industria petroquímica y en el sector educativo de la capital del país. ¿Es posible que esta iniciativa se concrete en lo inmediato? R.V.C.: Hay condiciones muy favorables para la lucha social en estos momentos en Colombia. Precisamente como decía antes, está cambiando el ritmo de la economía colombiana, en términos macroeconómicos formales, la economía colombiana tuvo muchas divisas provenientes principalmente de su modelo minero exportador. Dado el cambio mundial, por la caída de los precios de esas materias primas, tenemos una situación contraria a lo que hay que agregarle que el gobierno de Santos que tanto habla de paz, en la vida real es una continuación y una radicalización del modelo neoliberal que en Colombia ya lleva un cuarto de siglo. Esto se da en todos los terrenos, por ejemplo, respecto a las privatizaciones, las del gobierno de Santos son la continuación de lo que ha sucedido en estos últimos años, y la privatización de una empresa como Isagén se inició durante el gobierno de Uribe, no se pudo completar y se culmina durante el de Santos. Esto sucede en todos los frentes, la neoliberalización de la educación es otro ejemplo, el gobierno de Santos impulsa proyectos que favorecen la educación privada, por ejemplo, de la educación superior universitaria. Hay un proyecto que se llama “Ser pilo paga” que significa la transferencia de recursos del Estado a las universidades privadas en lugar de darle ese dinero a las públicas. Son millones de pesos que serán transferidos a las universidades privadas del país. 243 Con respecto a las tierras se acaba de firmar un decreto para las llamadas “zonas agroindustriales” para favorecer al capital agrario de las multinacionales y del capital financiero nacional, en contra de los campesinos, pese a que uno de los elementos centrales de cualquier proceso de paz en Colombia es el de la reforma agraria. Están creadas todas las condiciones objetivas para una movilización, pero también se necesita pensar en las condiciones subjetivas, en los niveles de organización y de movilización de los sectores populares. Y si se llegase a cuajar algo en ese sentido, podría pensarse en la posibilidad de un paro, porque todos los elementos están, desde el punto de vista de la situación económica y social. M.H.: Inclusive un dato estadístico señala que la movilización de los trabajadores colombianos en la actualidad es cuatro veces mayor que hace diez años. Al mismo tiempo esto se vincula a que en días recientes hubo una represión contra trabajadores judiciales en el centro de Bogotá y con otras estadísticas que señalan que desde 1997 se han producido casi 14.000 violaciones a la vida, a la libertad, a la integridad contra sindicalistas y de esas violaciones, 3.089 son homicidios. Al menos esto es lo que se señaló en el Encuentro contra la criminalización de la protesta sindical y social que se realizó en noviembre del año pasado aquí en Bogotá. A lo que se agrega una guerra jurídica en el sentido de la declaración de ilegalidad de las huelgas, de las 1.623 protestas registradas desde 2010 el 41,5%, o sea, 675 han sido entorpecidas por medidas judiciales que las han declarado ilegales. Dicho esto, ¿cuál es la situación actual que atraviesa el movimiento sindical y obrero en Colombia? R.V.C.: Ese movimiento es víctima, como ningún otro, de la represión y el asesinato. Nosotros tenemos el dudoso mérito de ser el primer país del mundo en asesinato a dirigentes sindicales. La cifra que usted señala es producto de investigaciones ligadas a los trabajadores, y es una realidad cotidiana que nosotros vivimos. Ser aquí dirigente sindical es un peligro público para la persona que ejerce esa actividad y se ha convertido casi en sentido común el asesinato de dirigentes sindicales. El modo de ver esto es esa contrainsurgencia de la que hablaba al principio de esta entrevista, y es que no se permite ni se tolera ninguna reivindicación social, cualquiera sea la reivindicación y por limitada que fuese, inmediatamente es calificada como producto de acciones terroristas y desestabilizadoras, incluso hay todo un lenguaje codificado que se utiliza para calificar a todo este tipo de protestas. Eso en el gobierno de Santos, a pesar de que tanto se habla de paz, no ha cambiado. Tal vez uno de los momentos represivos que más se dio a conocer a nivel internacional fue lo que sucedió en el año 2013, cuando fue brutalmente reprimido el Paro nacional agrario, que incluso Santos llegó a decir en una afirmación cantinflesca que no había paro mientras el país estaba paralizado casi como en ningún otro momento. Aquí hay una política contrainsurgente, de rechazo a la protesta social, de rechazo a los trabajadores y desde el Estado se da desde varios frentes, por un lado, la represión directa y brutal que siempre deja heridos, muertos y personas detenidas; pero también hay una persecución jurídica que consiste en colocarle trabas legales a la protesta. Prohibir la protesta en los servicios públicos, siendo éstos aquello que se considera vital sin importar la propiedad, entonces un periódico como El Tiempo o un canal de televisión como Caracol, son considerados servicios públicos, por lo tanto, en ellos no podrían haber huelgas, si 244 existieran trabajadores organizados y sindicatos, porque sería calificado por los jueces como una actividad ilegal. Es bueno para que sea estudiado por sindicatos y abogados laborales en otros países, cómo ha evolucionado de manera negativa la legislación laboral en Colombia. Desde 1918 cuando se presentó una primera oleada de huelgas el Estado colombiano emite los primeros decretos en su contra, y ahí ya aparece la idea del servicio público que en ese momento estaba restringido a los lugares donde se estaban dando huelgas, que eran los puertos, los ferrocarriles, las empresas de transportes. Pero desde ese año hasta el día de hoy, esa idea de servicio público se ha ido generalizando y cubre prácticamente todos los sectores de la actividad económica del país. En la realidad es imposible hacer huelga porque todo es considerado servicio público, así sea de propiedad privada, como sucede con empresas petroleras porque el petróleo es considerado un servicio público esencial. Si ese negocio lo usufructúa una multinacional y los trabajadores hacen paro, lo más seguro es que de manera inmediata se declare prohibida por ser servicio público. Otro elemento que conspira contra la organización y que hace más difícil a lucha en Colombia es la paramilitarización, no es solamente la represión por parte del Estado, sino las amenazas, el acecho, el acoso y también las acciones criminales por parte de sectores organizados por las empresas, por los terratenientes y comerciantes para impedir la organización de obreros, campesinos y trabajadores. Es tristemente célebre la intervención de empresas como Coca Cola, Nestlé y otras multinacionales directamente responsables en el asesinato de dirigentes sindicales, ellos han financiado y organizado grupos paramilitares para que maten a los trabajadores. Todo este es un contexto que debe transformarse a la hora de hablar del fin del conflicto armado en Colombia, porque la lucha social debe desenvolverse por muchas causas en donde se rompa con esa lógica represiva del Estado colombiano de prohibir la movilización, aunque formalmente en la ley exista su autorización y se diga que este es un país democrático en el que se respeta la libertad de pensamiento y de organización. M.H.: Al respecto estaba consignando el caso de Húbert de Jesús Ballesteros Gómez, que en agosto de 2013 integraba la comisión de negociación del Paro nacional agrario y popular, la movilización agraria más importante que se ha dado en los últimos 30 años en Colombia y luego fue detenido. R.V.C.: Detenido y está condenado a 15 años de cárcel. Estamos llegando al fin de un ciclo de ficticia prosperidad para la clase media 245 M.H.: Hiciste referencia en dos oportunidades a la situación económica del país. Hay algunos datos preocupantes, la caída del precio del petróleo ha afectado fuertemente la caída del presupuesto fiscal, 5.45 billones de pesos de los cuales el presupuesto en regiones bajará en 3.4 billones, lo que representa un 30.8% del presupuesto asignado. Otro dato es el descenso de las ventas externas durante 2015 que se ha conocido por estos días, casi un 35%. Frente a lo cual el gobierno prepara una reforma tributaria, entre otros aspectos que han trascendido de esta reforma, se habla del aumento del IVA, e inclusive dentro de esta visita que se hizo a Estados Unidos, donde se reunieron los Presidentes Obama y Santos también hubo reuniones con funcionarios económicos por parte de las principales calificadoras de riesgo, que amenazan con bajar la nota crediticia de Colombia en la medida que el gobierno no equilibre las cuentas fiscales. Este fue el mensaje que dejaron claro en Washington, al Ministro de Hacienda Mauricio Cárdenas Santa María, las calificadoras de riesgo. ¿Qué podés agregar a estos elementos que tienen que ver con la situación económica que atraviesa Colombia? R.V.C.: Me parece que esa es una exposición bastante completa de los indicadores. Lo que puedo agregar es que esta situación coyuntural es el resultado de una decisión de mediano y largo plazo que se tomó hace ya 25 a 30 años y que significó desindustrializar al país y optar por convertirlo en un país exportador de materias primas. En términos estructurales de largo plazo, creo que esa es la explicación básica para entender lo que está pasando en el momento actual. Aquí, como ha sucedido en varios países de América Latina, incluso en países con distintos regímenes políticos, se consolidó la venta de materias primas, en nuestro caso principalmente mineras. La balanza comercial de Colombia, encuentra que los productos que más generaban y generan ingresos a la economía son el petróleo y el carbón; el café que durante mucho tiempo fue el principal producto, hoy es el tercero o cuarto en esa balanza comercial. Ese crecimiento que se presentó entre 2001 y 2010 se debió a los altos precios de las materias primas. Cuando caen los precios de las materias primas, inmediatamente se ve el efecto negativo que produce que un país dependa del sector exportador más tradicional, el primario. El ejemplo del petróleo es crucial, hoy se cotiza a menos de 25 dólares el barril de petróleo colombiano, mientras que en un momento llegó a cotizarse a 90 dólares, estamos hablando de una caída catastrófica que se va a intensificar en las próximas semanas. Gran parte de lo que se había presupuestado para los años por venir, estaba relacionado con el sostenimiento de esos ingresos con un precio del petróleo elevado, pero no solamente sucede con el petróleo, también con el precio del carbón, del níquel, que han caído internacionalmente. Colombia es el principal exportador de carbón de Latinoamérica, los principales compradores son Estados Unidos y Canadá. Entonces, esto va a afectar a la economía colombiana, pero hay un factor adicional que en el listado que usted señala no se nombra y es el de la devaluación. Resulta que el peso colombiano estuvo revaluado de manera artificial durante casi el mismo período de aparente prosperidad económica que estábamos señalando. Lo que permitió la revaluación del peso colombiano fue que este país se inundara de mercancías y tecnología producida por el capitalismo mundial, lo que incluso permitió darle cierta base social al modelo neoliberal en las ciudades, porque la clase media empezó a tener acceso al automóvil, que era un bien suntuario en otra época, a todo tipo de artefactos electrónicos. Colombia es un país inundado de celulares, es el país de América Latina en el que más celulares hay. Esa mercadería ingresó al país a un relativo bajo precio, un precio artificial que ahora está 246 desapareciendo, entonces ahora todos esos aparatos, automóviles y todo lo que el país compró en el exterior, que es casi todo, porque aquí se compra casi el 90% de los productos agrícolas que se consumen, ahora está llegando encarecido. Hace un año el precio del dólar era de 2.600 pesos, hoy está a 3.400. Es decir que estamos llegando al fin de un ciclo de ficticia prosperidad para la clase media. Esta clase media, además de no poder comprar más por la suba de precios, está terriblemente endeudada. Este es otro elemento de la coyuntura importante de resaltar, no solo por sus implicaciones económicas, sino porque sabemos que tiene implicaciones políticas, sociales y culturales también. Esa clase media que nunca ha sido fuerte en Colombia, pero que tuvo un momento de despegue en los últimos 12 años, ha llegado a un límite; entonces habrá que ver qué sucede con esos sectores cuando ya no tengan cómo pagar la tarjeta de crédito, la cuota del automóvil, la del departamento o no tengan cómo cambiar de celular, etc. Es un impacto que no se ha estudiado con suficiente énfasis, porque pone en discusión el agotamiento de un modelo que había dado algunas migajas a esa clase media. El ser humano nunca renuncia a la lucha y la esperanza sirve para buscar salidas M.H.: En uno de tus últimos trabajos, de diciembre, publicado en Rebelión.org, te referís a una categoría que entiendo es de tu autoría, que es la de “tecno-fascismo”. R.V.C.: Este término lo he venido usando durante los últimos años en distintas publicaciones, muy preocupado por el impacto que la tecnología tiene en el mundo contemporáneo sobre la gente. Me importa analizar a la tecnología no como una fuerza neutra, como generalmente se suele hacer, sino como un componente más de nuevas formas de dominación. A partir de esa preocupación, me llama la atención que diversas clases sociales se hayan rendido acríticamente a la tecnología, incluyendo a grandes sectores de la izquierda mundial, partiendo de una consideración bastante discutible de las fuerzas productivas, hablando en terminología marxista. Y siendo que las fuerzas productivas nos vayan a conducir finalmente a la liberación y a un desarrollo humano teniendo en cuenta nuevas investigaciones y nuevos productos en el ámbito de la tecnología. Sin embargo, viendo la realidad uno se encuentra con que hay sectores profundamente retrógrados en términos políticos que utilizan las tecnologías más desarrolladas para sus proyectos. Y en ese sentido es que refuerzo la idea del tecno-fascismo, que supone pensar a ese sector no solo como completamente retrógrado, conservador y reaccionario, que lo es, sin estar desligado del uso de las tecnologías más modernas y sofisticadas, incluso como nuevas formas de control. Sería importante volver a estudiar el mismo nazismo, porque cuando se lo estudia hay una tendencia que dice que era lo más opuesto a la ciencia y a la modernidad, pero investigaciones contemporáneas muy serias han demostrado que el nazismo ha sido la variante más radical de 247 la modernización capitalista, incluso en el ámbito tecnológico, a punto de que la tecnología se aplicó a la muerte de millones de personas en los campos de concentración, por ejemplo, el trabajo allí era la muerte industrial, la muerte programada. Los hornos crematorios usados para matar personas estaban programados industrialmente. El mismo fascismo supuso una particular utilización de la tecnología, por eso pensadores como Benjamin y su crítica al fascismo, a la socialdemocracia y a distintos sectores de la izquierda de la época que decían que había que romper con ese culto acrítico a las fuerzas productivas, que había que ver a la tecnología como un elemento contradictorio de lucha y de combate. A mí me llama hoy la atención cómo la tecnología es un dispositivo de control absoluto de la población y vigilancia las 24 horas por medio de distintos mecanismos. Las ciudades están llenas de cámaras de video que registran todos los movimientos de las personas, en el transporte público pasa lo mismo, el teléfono celular es un elemento de control. Así sucesivamente podríamos enumerar muchos ejemplos y por eso digo que la izquierda debe repensar la tecnología. M.H.: ¿Hay lugar para la esperanza? R.V.C.: Digamos que por supuesto, yo creo que el ser humano nunca renuncia a la lucha y creo que eso es lo que nos diferencia de los demás animales, a pesar de tener nuestra parte de animalidad. La búsqueda de nuevos caminos y soluciones a los problemas tiene que seguir siendo parte del horizonte humano. Recuerdo lo que decía Eduardo Galeano cuando le preguntaban para qué servía la utopía y decía que servía para caminar. Me parece que lo mismo podemos decir de la esperanza, el principio del que tanto hablaba el filósofo Ernst Bloch es que la esperanza, a pesar de las condiciones duras en las que nos encontremos, sirve para buscar salidas. Lo que pasa es que a uno le toca el papel más difícil, que es el de mostrar los problemas, esa es una característica fundamental del pensamiento crítico, pero también bosqueja y postula salidas a pesar de las dificultades. M.H.: ¿Algo para agregar? R.V.C.: Simplemente saludar a los medios con los que usted trabaja y a los lectores y oyentes que lo siguen. Porque me parece muy importante la labor que realiza. Si hay algo que necesitamos hoy es abrir nuevos espacios de pensamiento y de crítica ante el monopolio abrumador que tienen los medios de comunicación mundial y a escala nacional. Este también es un problema que estamos afrontando y vamos a afrontar en Colombia en el futuro inmediato, porque uno de los grandes responsables de la guerra y la tragedia que los colombianos hemos vivido en las últimas décadas, son los grandes monopolios de la información. Ellos se oponen al proceso de paz, viven una diabolización permanente de las voces disidentes, que necesitan poder expresarse si queremos construir un país decente, donde podamos hablar y se nos permita pensar distinto. En esa labor los medios de 248 comunicación alternativos son fundamentales, por eso creo que el papel que usted realiza Mario, en Buenos Aires y en Argentina, tiene mucho valor. AGENDA SETTING: Legitimación y gestión. Dos elementos para evaluar la comunicación política por Mario Riorda http://www.voces.com.uy/articulos1/agendasettinglegitimacionygestiondoselementosparaevaluarlacomunicacionpoliticapormari oriorda Hay por lo menos dos tipos de comunicaciones que, en la región (y quizás en buena parte del mundo occidental), aparecen simultáneamente en el marco de la política, especialmente para los gobiernos. Pero no siempre se las visualiza, analiza o implementa unidas. Una más clásica, tradicional, pero que ha tomado formas y dimensiones inusitadas; y otra novedosa, atravesada y conmovida por los desafíos de lo digital. Una visión legitimante de la política El mito de gobierno es la comunicación de tipo simbólica que tiene la función de generar esperanza y que, una vez instalada, puede alimentarse a sí misma siempre y cuando exista coherencia entre la narrativa esbozada y las políticas públicas implementadas. Relato, a secas, es el nombre vulgar con el que se lo conoce. Viene a representar el ejercicio coherente de lo propuesto discursivamente como contrato de gestión en la faz electoral y la actualización de lo mejorable o aggiornable de ese contrato, una vez que se es gobierno. Y no es menor su tarea. Hace varias décadas ya, David Easton pregonaba que lo que permite un sistema político exitoso, es aquello que resulta de dar cumplimiento a dos funciones: la tarea de asignar valores en una sociedad dada; y el intento de conseguir que la mayoría de dicha sociedad acepte esa asignación valorativa la mayor cantidad del tiempo posible. Y encima esos valores que toman forma de relato, se dan entre dos contrastes muy marcados y una serie de grises (o versiones menos espectaculares) entre ambos extremos que representan ideologías y estilos de la representación política. El contraste entre lo refundacional: una relativa independencia para “el pueblo” todos- en desmedro del país para “ellos” -los pocos-. Vigente en algunos países, ha venido cayendo como un efecto dominó en varias elecciones en estos dos años. Frente a la idea restauradora de un país normal, el que crece y le va mejor ocupando un rol en el mundo. Mientras mejor nos vean de afuera, mejor estaremos los de adentro y con más desarrollo. Depende de las inversiones. Daría la sensación que es el modelo en boga en estos días, pero su eficacia no ha podido ser comprobada, ni en los países que hace tiempo están en este modelo, ni en el interrogante que por ahora representa Argentina. El primer modelo incluye, el segundo modelo hace crecer. En el primer modelo la institucionalidad sirve siempre que no frene ni complique el empoderamiento ciudadano. La igualdad es la guía. En el segundo modelo la institucionalidad lo es todo, porque ella es el faro de la libertad. Y en ese marco juegan los ciudadanos también, y en el medio, los medios “median” para un lado y para el otro. Y, aunque no se lo aprecie, los ciudadanos no fluctúan de un día para el otro. Tampoco las ideologías encarnadas en líderes que no aparecen tan claras en una versión dicotómica del siglo XX pero son constitutivas del pensamiento de aquellos. 249 Entre estos dos contrastes sucede la política, y por ende, la política comunicacional de América Latina. Una visión de gestión de la comunicación Pero hay otro abordaje a gran escala desde la comunicación, en donde los gobiernos envejecen. Algunas tendencias -que además mutan aceleradamente y probablemente queden viejas mañana-: respecto al tiempo promedio que un usuario de servicios está dispuesto a esperar para obtener una respuesta en redes sociales, más del 70% afirma que no debiera superar los 15 minutos según muestra en redes. Y sólo el 7% aceptaría entre una hora y 3 horas. Los usuarios de smartphones ya superan holgadamente en 200 veces la cantidad de chequeos que hacen diariamente a su celular. Y encima la población digitalizada, a medida que baja de edad, deja de usar los correos como modo de interacción y son las redes -incluso públicas o grupales- el ámbito de diálogo. ¿Y qué hacen los gobiernos frente a esta realidad? Publicitan. Del mismo modo que lo harían por TV. Y gastan. Mucho. Y hablan. Mucho. Pero dialogan poco, responden poco, gestionan poco -como interacción de políticas o servicios públicos-. Y gran parte de la publicidad tiene que ver con mantener la comunicación legitimante por encima de la gestión de políticas propiamente dichas. Hay una excesiva inversión en pauta publicitaria, en tecnologías, pero a los gobiernos les cuesta entender a las redes como medios de gestión. Les cuesta entender que los ciudadanos acuden a las redes para ser atendidos como si fuera una gran mesa de entrada en un edificio público. Más del 87% de los ciudadanos recurrió a internet para plantear dudas o quejas en algún momento según Lithium. ¿Por qué no lo haría con un gobierno?. Por ende, frente a las redes, el modelo de gestión atrasa, envejece. No obstante, el modelo de representación que los gobiernos proponen no ha cambiado tanto. En las cuentas personales de los gobernantes, el híper-personalismo es extremo, como si fueran nuevos celebrities sin intercambio ni horizontalidad. Y en la cuentas -llamadas institucionales- de gobierno, hay publicidad y en el mejor de los casos información, no interacción. Aparece un ecosistema de nuevas posibilidades y ello exige más convergencia, pero no se destrona el reinado de Twitter, Facebook y You Tube. No se muestran avances hacia instancias de gobierno abierto y transparencia colaborativa. En el estudio Gobernauta del BID, en promedio, los gobiernos sólo dedican el 1% de acciones focalizadas en la agenda de participación, transparencia o gobierno abierto. No se propicia desde ellos nuevas acciones de fiscalización y rendición de cuentas ciudadanas, vale decir, mejorar las chances de ser monitoreado, escrutado. No se avanza hacia acciones de microsegmentación, es decir, cuando cada acto comunicacional es “uno a uno” en la relación gobierno/ciudadano, pero más que ello, cuando cada comunicación es también un servicio. ¿A que equivale esto? A comunicar más que publicitar. No se alientan instancias colaborativas participativas sobre políticas públicas bajo la premisa de escuchar y ser condicionado por esa escucha. Sólo el 2,2% de los tuits de los alcaldes de ciudades de más de un millón de habitantes en América latina están dedicados a algo tan básico como preguntar algo. Vale decir, cuentan con modestos signos de interrogación sobre alguna temática. Síntesis: nuevos rockstars, estéticamente controlados, publicitados las 24 horas y casi nula interacción. De gestión y hacer la vida un poco más fácil a los ciudadanos, ni 250 hablar. La legitimidad, siempre un poco más lejos y todavía permanece en una visión estática y dicotómica donde no tiene por qué haber verdades últimas. La legitimidad y los consensos también se gestionan en el sentido más literal del término, y las redes pueden colaborar en ese cometido. pero mientras se avanza en la gestión, casi a un nivel estratosférico, todo el día todo los días hay una batalla por la significación, por el rumbo de un gobierno, por el modelo que se da en las palabras, que se da en los estilos, que se representa en las ideologías de las políticas, pero donde las redes siguen publicitando, más que hacerle la vida más fácil a los ciudadanos. Todavía el pensamiento político y los gobiernos (de un lado y del otro en las posturas legitimantes), cargan con una herencia del siglo pasado en donde, desde la comunicación, sobra la retórica, pero falta más adaptación para la gestión. George Steiner: "Me asquea la educación de hoy, que es una fábrica de incultos" http://www.lanacion.com.ar/1917059-george-steiner-me-asquea-la-educacion-de-hoy-que-esuna-fabrica-de-incultos A los 88 años, el filósofo y ensayista está preocupado por el futuro pero, a la vez, es optimista; imagina que la poesía leída en papel no morirá nunca y cree que Homero "habría entendido" a Mohammed Ali CAMBRIDGE.- Primero fue un fax. Nadie respondió a la arqueológica intentona. Luego, una carta postal (sí, aquellas reliquias consistentes en un papel escrito y metido en un sobre). "No les contestará, está enfermo", previno alguien que le conoce bien. A los pocos días llegó la respuesta. Carta por avión con el matasellos del Royal Mail y el perfil de la Reina de Inglaterra. En el encabezado ponía: Churchill College. Cambridge. El breve texto decía así: "Querido Señor, el año 88 y una salud incierta. Pero su visita sería un honor. Con mis mejores deseos.George Steiner". Dos meses después, el viejo profesor había dicho "sí", poniendo provisional coto a su proverbial aversión a las entrevistas. El catedrático de literatura comparada, el lector de latín y griego, la eminencia de Princeton, Stanford, Ginebra y Cambridge; el hijo de judíos vieneses que huyeron del nazismo primero a París y luego a Nueva York; el filósofo de las cosas del ayer, del hoy y del mañana; el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades en 2001, el polemista y mitólogo políglota y el autor de libros capitales del pensamiento moderno, la historia y la semiótica como Nostalgia del absoluto o La idea de Europa abría las puertas de su preciosa casita de Barrow Road. Es una mañana de lluvia en la campiña de Cambridge. Zara, la encantadora esposa de George Steiner (París, 1929), trae café y pastas. El profesor y sus 12.000 libros miran de frente al visitante. -Profesor Steiner, la primera pregunta es, ¿cómo está su salud? -Oh, muy mal, por desgracia. Tengo ya 88 años y la cosa no va bien, pero no pasa nada. He tenido y tengo mucha suerte en la vida y ahora la cosa va mal, aunque todavía paso algunos días buenos. -Cuando uno se siente mal... ¿es inevitable sentir nostalgia de los días felices? ¿Huye usted de la nostalgia o puede ser un refugio? 251 -No, lo que uno tiene es la impresión de haber dejado de hacer muchas cosas importantes en la vida. Y de no haber comprendido del todo hasta qué punto la vejez es un problema, ese debilitamiento progresivo. Lo que me perturba más es el miedo a la demencia. A nuestro alrededor el Alzhéimer hace estragos. Así que yo, para luchar contra eso, hago todos los días unos ejercicios de memoria y de atención. -¿Y en qué consisten? -Lo que le voy a contar lo va a divertir. Me levanto, voy a mi estudio de trabajo y elijo un libro, no importa cuál, al azar, y traduzco un pasaje a mis cuatro idiomas. Lo hago sobre todo para mantener la seguridad de que conservo mi carácter políglota, que es para mí lo más importante, lo que define mi trayectoria y mi trabajo. Trato de hacerlo todos los días... y desde luego parece que ayuda. -¿Sigue leyendo a Parménides cada mañana? -Parménides, claro... bueno, u otro filósofo. O un poeta. La poesía me ayuda a concentrarme, porque ayuda a aprender de memoria, y yo siempre, como profesor, he reivindicado el aprendizaje de memoria. Lo adoro. Llevo dentro de mí mucha poesía; es, cómo decirlo, las otras vidas de mi vida. -La poesía vive... o mejor dicho, en este mundo de hoy sobrevive. Algunos la consideran casi sospechosa. -Estoy asqueado por la educación escolar de hoy, que es una fábrica de incultos y que no respeta la memoria. Y que no hace nada para que los niños aprendan las cosas de memoria. El poema que vive en nosotros vive con nosotros, cambia como nosotros, y tiene que ver con una función mucho más profunda que la del cerebro. Representa la sensibilidad, la personalidad. -¿Es optimista con respecto del futuro de la poesía? -Enormemente optimista. Vivimos una gran época de poesía, sobre todo en los jóvenes. Y escuche una cosa: muy lentamente, los medios electrónicos están empezando a retroceder. El libro tradicional vuelve, la gente lo prefiere al Kindle... prefiere agarrar un buen libro de poesía en papel, tocarlo, olerlo, leerlo. Pero hay algo que me preocupa: los jóvenes ya no tienen tiempo... de tener tiempo. Nunca la aceleración casi mecánica de las rutinas vitales ha sido tan fuerte como hoy. Y hay que tener tiempo para buscar tiempo. Y otra cosa: no hay que tener miedo al silencio. El miedo de los niños al silencio me da miedo. Solo el silencio nos enseña a encontrar en nosotros lo esencial. -El ruido y la prisa... ¿No cree que vivimos demasiado deprisa? Como si la vida fuera una carrera de velocidad y no una prueba de fondo? ¿No estamos educando a nuestros hijos demasiado deprisa? -Déjeme ensanchar esta cuestión y decirle algo: estamos matando los sueños de nuestros niños. Cuando yo era niño existía la posibilidad de cometer grandes errores. El ser humano los cometió: fascismo, nazismo, comunismo... pero si uno no puede cometer errores cuando es joven, nunca llegará a ser un ser humano completo y puro. Los errores y las esperanzas rotas nos ayudan a completar el estado adulto. -No se sabe bien por qué el error tiene tan mala prensa, pero el caso es que en estas sociedades exacerbadamente utilitarias y competitivas la tiene. 252 -El error es el punto de partida de la creación. Si tenemos miedo a equivocarnos jamás podremos asumir los grandes retos, los riesgos. ¿Es que el error volverá? Es posible, es posible, hay algunos atisbos. Pero ser joven hoy no es fácil. ¿Qué les estamos dejando? Nada. Incluida Europa, que ya no tiene nada que proponerles. El dinero nunca ha gritado tan alto como ahora. El olor del dinero nos sofoca, y eso no tiene nada que ver con el capitalismo o el marxismo. Cuando yo estudiaba la gente quería ser miembro del Parlamento, funcionario público, profesor... hoy incluso el niño huele el dinero, y el único objetivo ya parece que es ser rico. Y a eso se suma el enorme desdén de los políticos hacia aquellos que no tienen dinero. Para ellos, solo somos unos pobres idiotas. Y eso Karl Marx lo vio con mucha anticipación. En cambio, ni Freud ni el psicoanálisis, con toda su capacidad de análisis de los caracteres patológicos, supieron comprender nada de todo esto. -¿Establece diferencias entre "alta" y "baja" cultura, como han hecho algunos intelectuales, visiblemente incómodos ante formas de cultura popular como los cómics, el arte urbano, el pop o el rock, a los que se llegó a poner la etiqueta de "civilización del espectáculo"? -Yo le digo una cosa: Shakespeare habría adorado la televisión. Habría escrito para la televisión. Y no, no hago esas distinciones. A mí lo que de verdad me entristece es que las pequeñas librerías, los teatros de barrio y las tiendas de discos cierren. Eso sí, los museos están cada día más llenos, la muchedumbre colapsa las grandes exposiciones, las salas de conciertos están llenas... así que atención, porque estos procesos son muy complejos y diversos como para establecer juicios globales. Mohammed Ali era también un fenómeno estético. Era como un dios griego. Homero habría entendido a la perfección a Mohammed Ali. -El creciente desdén político por las humanidades es desolador. Al menos en España. La filosofía, la literatura o la historia son progresivamente ninguneadas en los planes educativos. -En Inglaterra también pasa, aunque quedan algunas excepciones en escuelas privadas para elites. Pero el sentido de la élite es ya inaceptable en la retórica de la democracia. Si usted supiera cómo era la educación en las escuelas inglesas antes de 1914... pero es que entre agosto de 1914 y abril de 1945 unos 72 millones de hombres, mujeres y niños fueron masacrados en Europa y el oeste de Rusia. ¡Es un milagro que todavía exista Europa! Y le diré algo respecto a eso: una civilización que extermina a sus judíos no recuperará nunca lo que fue. -Profesor Steiner, ¿qué es ser judío? -Un judío es un hombre que, cuando lee un libro, lo hace con un lápiz en la mano porque está seguro de que puede escribir otro mejor. -¿Qué momentos o hechos cree que forjaron más su forma de ser? Entiendo que tener que huir del nazismo junto a sus padres y saltar de París a Nueva York es uno de los fundamentales teniendo en cuenta que? -Le diré algo que le impactará: ¡Yo le debo todo a Hitler! Mis escuelas, mis idiomas, mis lecturas, mis viajes... todo. En todos los lugares y situaciones hay cosas que aprender. Ningún lugar es aburrido si me dan una mesa, buen café y unos libros. Eso es una patria. "Nada humano me es ajeno". ¿Por qué Heidegger es tan importante para mí? Porque nos enseña que somos los invitados de la vida. Y tenemos que aprender a ser buenos invitados. Y, como judío, tener siempre la maleta preparada y si hay que partir, partir. Y no quejarse. 253 La confianza en un futuro dominado por miedos inimaginables Diálogo con Marc Augé. El autor de “Los no lugares” es la estrella de La Noche de la Filosofía. Estudia un mundo con síntomas complejos; escribió una fábula sobre el Papa. http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/confianza-futuro-dominado-miedosinimaginables_0_1601839814.html POR MARCH MAZZEI ENVIADA A PARIS Ilusión. Augé subraya que la ilusión de instantaneidad y ubicuidad constituyen problemas porque las relaciones entre unos y otros ocurren en el tiempo y el espacio. Ilusión. Augé subraya que la ilusión de instantaneidad y ubicuidad constituyen problemas porque las relaciones entre unos y otros ocurren en el tiempo y el espacio. Etiquetado como:Especial Filosofía insomne Marc Augé básico No es casual que haya elegido el café Select, uno de los más tradicionales del Montparnasse parisino. Aquí el antropólogo Marc Augé llega directo desde su casa en bus –imprescindible en un día de lluvia. Célebre entre otros hallazgos por el concepto de “no-lugares”, aplicable a supermercados, aeropuertos y otros espacios donde se disuelven las identidades de las personas, sostiene que “en los cafés siempre hay un encuentro posible”. También alrededor de la identidad y el cuerpo tratan las dos conferencias que ofrecerá este sábado durante La Noche de la Filosofía , invitado por el Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos, la Embajada de Francia en la Argentina y el Centro Franco Argentino. Su impresionante trabajo se mantiene vigente desde mediados de los 70, cuando viajó al Africa. Luego, sus investigaciones etnológicas en lugares urbanos específicos (como el subterráneo, los jardines de Luxemburgo, etc.) le dieron relevancia global. Marc Augé hace etnología sobre la actualidad, oscila entre diferentes motivos, en una tensión constante, que hace de su obra un concentrado de impulsos dinámicos que iluminan este tiempo. Sobre ellos ahondó en los últimos libros aquí publicados: ¿Qué pasó con la confianza en el futuro? (Siglo veintiuno editores) y El tiempo sin edad (Adriana Hidalgo). Y la vida cotidiana cruzada con la política, por supuesto, lo siguen conmoviendo, como por ejemplo la consolidación del Frente Nacional (FN) en el horizonte. –¿Cree que la ultraderecha llegará al poder en Francia? –Las elecciones están próximas pero no soy profeta. Lo más probable es que gane la derecha, pero no Marine Le Pen. Estamos en un período interesante y es posible que aparezcan fórmulas nuevas, otras soluciones. Pero creo que el FN no puede ganar, entonces, ¿cuál será la fórmula? –¿Y este panorama se vincula con los problemas que atraviesa el país? –En Europa estamos muy preocupados por la violencia, el terrorismo, pero a nivel más general creo que es por la desigualdad en el mundo, desde el punto de vista económico y a nivel político. Cuando Francis Fukuyama hablaba del fin de la historia decía que todo el mundo estaba de acuerdo en pensar que la solución es el liberalismo económico y la democracia representativa. Pero hay muchas naciones económicamente importantes que no son democráticas. Por otra parte, un mercado liberal no significa que la política lo sea. Bajo la palabra “democracia” no se entiende siempre lo mismo. Es un problema importante pero no sé si soy optimista o pesimista porque los dos aspectos están juntos. –¿Puede ver a las migraciones desde Siria y el terrorismo, como consecuencias directas de estas desigualdades? 254 –Son algunas de las consecuencias. Las migraciones por la fuerza son un problema para las democracias de Europa, porque tienen que organizarlas, pero es un problema más grave para los migrantes. Hay problemas de migración en todos los continentes. Yo estuve en Africa y en América Latina, pero hoy toma un aspecto más trágico en Europa debido a la situación de Medio Oriente. Y hay una sobredeterminación debido al hecho de que a través de las migraciones hay gente que también impone el terrorismo. Es una situación compleja y difícil. –Europa ha sido un territorio de libertades. ¿Está reemplazando el anhelo de libertad por el de seguridad? –Espero que los ideales de libertad sean más fuertes, pero es un período difícil. No sé cómo se va a superar. La historia parece por momentos rápida pero existen otros ritmos. Hay un ritmo más lento, y a largo plazo no soy pesimista, aunque haya problemas. –Su enorme trabajo se caracteriza por objetos de estudio diversos, anclados en lo cotidiano, como los subterráneos, el fútbol, las bicicletas... –Intento hacer pequeños estudios, con ejemplos de la vida actual, siempre tomando en cuenta el contexto, que es lo que vale. Pero hoy cambiamos de contexto y eso es un problema, incluso a nivel local. Porque no hay pequeños problemas, todo es total. Es una cosa interesante para el antropólogo, porque en nuestro trabajo tenemos que tomar en cuenta el contexto local y hoy no existe tal cosa. –¿Cómo es que el mundo se ha globalizado de forma definitiva? –Así es, por ejemplo, debido a las imágenes de la TV o de las computadoras. Incluso en el hecho de que un pequeño grupo de indios en la Amazonia sabe muy bien que pertenece al mundo. Pero para nosotros no es solamente una cosa de conocimiento sino de imagen: cotidianamente tenemos frente a los ojos una visión del mundo entero que nos puede dar miedo. Si se produce una catástrofe en un lugar lejano, lo sabemos. Todas las cosas se convierten en muy cercanas a nosotros. No es bueno ni malo, es así. Lo que es un problema es esta ilusión de instantaneidad y ubicuidad, porque las relaciones entre los unos y los otros ocurren en el tiempo y el espacio, los necesitamos aunque podamos tener millones de relaciones. Los medios de comunicación son medios y no finalidades. Son fantásticos, importantes, pero hay que reflexionar a propósito de ellos. –¿A eso se refiere cuando habla de “los nuevos miedos”? –Claro, los nuevos miedos son los de antes pero presentados de manera nueva. Cuando ponemos la TV y vemos que hubo un terremoto en Japón o una revuelta en Oriente, y es tan cerca... Pero hay miedos nuevos también, debido al aspecto económico financiero que se apoderó del planeta. Hay suicidios en las empresas en Francia. No sé si has oído hablar de esta perspectiva de la asignación universal que se vota en Suiza. Se trata de que cada uno que nace allí tiene una asignación de dinero, por el solo hecho de nacer. La consecuencia es que si tú quieres puedes trabajar, pero no es obligatorio. –Hay trabajos que han sido reemplazados por máquinas. –Porque faltan empleos, es una idea interesante, revolucionaria, fascinante. Y más allá de lo que pase en Suiza ( N. de R.: finalmente se votó en contra ) tiene futuro porque no es de la 255 derecha ni de la izquierda: hay capitalistas y economistas que la apoyan. Seguramente en Suiza sea más fácil de llevar adelante pero hay experiencias en países subdesarrollados también. –Una experiencia que cambia la concepción del trabajo como un derecho o algo constitutivo del ser humano. –Sí, tenemos esa idea cristiana y comunista de que “el hombre tiene que trabajar”. No, no, no. No es que no van a trabajar pero ¡es menos grave si de todas maneras no hay suficientes empleos! Estoy interesado en esa idea. Muchos grupos la impulsan pero en Finlandia ya ha sido experimentada. Una ficción con el Papa Francisco Augé escribió una nouvelle . Allí, un día, milagrosamente, el Papa se asoma al balcón de la plaza de San Pedro del Vaticano y frente a la multitud aturdida, con voz de ultratumba, grita: “¡Dios no murió porque nunca existió!”. La escena aparece en La semana sagrada en la que cambió el mundo , una fábula de 80 páginas –editada por ahora solo en francés–, en la que Augé imagina a la humanidad liberada de sus creencias religiosas. “Hace mucho tiempo que hago ficciones, las llamo etno-ficciones, una mezcla entre ficción y etnografía”, explica. “Y hay dos tipos: una se trata de comenzar un libro con unas páginas de ficción, para hacer entender al lector cuál es el problema, como en Los no lugares . Pero esta es realmente una ficción que propone una pregunta fundamental: de qué Dios hablamos cuando hablamos de Dios. Lo importante es hacer la distinción entre lo que yo digo como analista y todo lo que puedo desear. A través de la literatura hay muchas cosas que se pueden decir”. –¿Qué lo motivó a escribir un libro como El tiempo sin edad? –Hay muchos aspectos pero lo interesante es descubrir qué es la edad. Es algo que no sabemos. La edad es social por una parte, como la edad de la jubilación, pero el tiempo es otra cosa. Es algo que puedo recordar o imaginar. Y puedo disfrutar del tiempo, independientemente de la edad. Cada uno hace su propia experiencia. Esa es la razón por la cual he escrito esto. La idea de felicidad me parece a la vez personal y general, y por ende antropológica. –¿Será una próxima indagación? –Sí, estoy reflexionando sobre la idea de felicidad, la bonheur en francés, que no es solo felicidad. Está vinculada a la noción de fortuna, de suerte. Y tengo una idea de que la felicidad se concibe como una continuidad, mientras que la palabra bonheur sugiere instantes, momentos. –En El tiempo sin edad sostiene que finalmente los recuerdos son una percepción de algo indefinido, sin tanta exactitud... –Cada uno tiene su propia poesía. En la poesía hay poiesis , hacer. Y hablando de la edad podemos hablar del pasado o del futuro, o del deseo. Es el imposible presente. Esa es la materia primera de la poesía. No hay fronteras absolutas. –¿Podría ahondar en “el imposible presente”? –Ahora estamos hablando pero hemos empezado hace más de 40 minutos, que es el pasado. Lo bueno es que hay una sutil conciencia del tiempo. Y diría que los medios nos dan la ilusión porque hay un aspecto mágico en la instantaneidad que es aparentemente más rico pero 256 finalmente ilusorio. El mundo en el que vivimos asimila mensajes que aseguran que nos dan la llave del presente pero solo para deshacerse del pasado, la historia. –Suena desesperanzado, pero escribió un libro titulado ¿Qué pasó con la confianza en el futuro?... –El problema con el futuro es que por un lado tenemos un sentido de que el futuro es ya, pero no lo es. Y podemos imaginar futuros muy diversos. Las utopías del siglo XIX imaginaron un mundo utópico donde había que concebir a la humanidad como tal. Mientras vemos muy bien que no podemos imaginar cuál será el futuro de todas esas fuerzas. Pero yo creo en la ciencia, que va a cambiar completamente el futuro de la humanidad. Sabemos muy bien que dentro de 50 años no habrá más enfermedades y es otra humanidad la que hay que imaginar. Pero, al mismo tiempo, tenemos que pensar el universo. –¿Por qué tanta confianza en la ciencia? –La ciencia es el único dominio donde se puede hablar de progreso, porque produce un guion que no fluye mecánicamente de lo que lo precede. Hace 50 años no podíamos imaginar todo lo que conocemos hoy en día, y no podemos imaginar ahora cuáles serán los conocimientos dentro de 50 años. Puede dar miedo. De vez en cuando hablo de una utopía de la educación, porque creo que es la única impopular que hay que desarrollar. Soy optimista en la medida en que pienso que de todas maneras conoceremos muchas cosas que ignoramos ahora. Estamos condenados a conocer. –En El tiempo... escribe que se puede identificar la edad de una persona por las palabras que utiliza, y pensé en la palabra “porvenir”, que ya nadie usa. –La idea del porvenir no existe más en Francia. Y creo que en todo el planeta. Pero a mí me parece que los países de América latina tienen que tener confianza en el futuro. Por lo que yo he visto en la Argentina, en Chile, etc., pienso que hay una perspectiva fuerte de futuro, y de conocimiento en las universidades, etc. En cambio, creo que en Europa se han estado haciendo ciertas cosas de manera demasiado rápida, sin pensar en el continente. Aunque la Organización Europea para la Investigación Nuclear es una cosa bella donde existe una real colaboración entre la gente. Creo que el ideal de Europa está ahí. FICHA Marc Augé en La Noche de la Filosofía La identidad individual y los derechos humanos. CCK, Sala Argentina, 23.30 hs. El ser humano y su cuerpo. CCK, Sala Argentina, 1.30 hs. la democracia más allá del mito liberal http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!Editorial-la-democracia-más-allá-del-mitoliberal/nnsaa/577178240cf249bc2451f2ee A mediados del siglo pasado, en plena vigencia del relato de la Suiza de América, Mario Benedetti impugnó con “El país de la cola de paja” a la mitología democrática nacional. 257 Visualizó sus dobleces, corrupciones y complicidades, y la llamó ”cascarodemocracia” sostenida por “la solidaridad de los cola de paja”. La generación de izquierdas revolucionarias que surgió en nuestro país algunos años después, sostuvo que capitalismo y (verdadera) democracia eran dos pares irreconciliables, y la democracia era algo a conquistar ya sea contra la pseudodemocracia, o por vía de conquistas progresivas desde las instituciones de la democracia. Lo que pasó luego lo sabemos: las (heroicas) luchas contra la dictadura se articularon como luchas por la democracia, y luego las luchas por la democracia se sintetizaron como luchas por la reinstalación de las instituciones de la democracia liberal. La democracia como conquista se instaló como nuevo sentido dominante en el pensamiento de la izquierda, y progresivamente dicho sentido fue hegemonizado de acuerdo al pensamiento liberal. Desde entonces, el credo del buen demócrata (expresado en la prédica sanguinettista) sustituyó a las cartas de fe democrática de la dictadura, continuando simbólicamente aquel papel policial: demarcar un adentro y un afuera de lo político. Así, en su proceso de ascenso al gobierno, la izquierda progresista fue incorporando el credo democrático liberal hasta asumirlo como propio. La caída del muro de Berlín y la sucesión de derrotas históricas de las izquierdas del siglo XX hicieron lo suyo. El imperialismo norteamericano desplegó su estrategia intervencionista en torno al discurso de “defensa de la democracia”. Y la racionalidad tecnocrática neoliberal redujo a la democracia a una serie de procedimientos administrativos donde el poder está siempre en otra parte, configurando una era que Slavoj Zizek llamó “pospolítica”. Desde entonces, “democracia” ha quedado ideológicamente definida en nuestro país como lo opuesto de “dictadura”, y pragmáticamente reducida a votar cada cinco años en elecciones (la “fiesta de la democracia”) cada vez más concebidas y realizadas como campañas de mercadeo. Así las cosas, reflexionar críticamente en torno a “la democracia uruguaya más allá del mito liberal” puede parecer un anacronismo. Tanto más en plena era progresista de indudable avance en materia de derechos sociales. Sin embargo, en momentos en que en todo el continente las empresas de comunicación de masas tienen cada vez mayor influencia fáctica en decisiones (y cambios) de gobiernos, y en nuestro país se perpetúa un oligopolio mediático. Cuando la impunidad muestra sus ribetes más cínicos en las cómodas prisiones domiciliarias del puñado de militares torturadores procesados, contrastando con el hacinamiento infernal de los presos “comunes”. Cuando se nos presenta a la inclusión financiera como un avance democrático y a la macroeconomía como una externidad inalcanzable para la política. En momentos en que los avances en legislación consagratoria de nuevos derechos se combinan con el avance de la sociedad de control hipervigilante, la política del miedo y la criminalización de la pobreza. En momentos en que la economía (la desigualdad, las clases, la propiedad) aparece como el gran ausente en la reflexión democrática. En momentos como los actuales, entonces, vale la pena volver a impugnar, como Benedetti hace medio siglo, a nuestra “cascarodemocracia”. Mostrar sus sótanos inconfesables, sus impensados y sus impensables. Es que preguntarse por la democracia tiene sentido siempre que se interrogue por los otros de la democracia. Siempre que se convoque a los expulsados y a los convidados de piedra del “gobierno del pueblo”. Siempre que se enuncie (politice) a los impensados y a los impensables del discurso democrático, y se busque con ello la re-politizacion democratizante de la democracia. Se trata de relanzar el problema de la democracia como un problema de izquierda anticapitalista. Sin omitir el registro estratégico del problema: ¿cómo orientar una acción política de izquierda transformadora (en, ante, desde, por fuera de) los escenarios y reglas de juego de la democracia liberal realmente existente? Sobre estos temas convocamos a reflexionar al hemisferio de las izquierdas. 258 La democracia en el pensamiento de las izquierdas en Uruguay: diálogo con Aldo Marchesi* http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!La-democracia-en-el-pensamiento-de-las-izquierdas-enUruguay-diálogo-con-Aldo-Marchesi/nnsaa/577202660cf2f8d6d10dec38 Hemisferio Izquierdo (HI)- ¿Qué lugar ha ocupado la cuestión de la democracia en las izquierdas uruguayas pre-dictadura? Aldo Marchesi (AM)- Durante los años sesenta existieron dos posicionamientos que pueden ser leídos como relativamente contradictorios en las izquierdas uruguayas. Por un lado sectores que gradualmente comenzaron a desarrollar una crítica a la democracia liberal y que se expresaron a través de un discurso revolucionario y por otro, sectores que intentaron rescatar ciertos valores de la democracia liberal frente al creciente autoritarismo civil estatal desarrollado desde mediados de los sesentas. Antes de explicar con mayor profundidad ambos posicionamientos resulta necesario mencionar algunos aspectos contextuales de la región para entender los significados que la democracia liberal adquirió en el contexto de la guerra fría. Desde fines de los cuarentas se desarrolló un liberalismo de la guerra fría que admitía límites al funcionamiento democrático vinculados al riesgo de la amenaza comunista. El riesgo de la amenaza comunista legitimaba la suspensión de aspectos esenciales del funcionamiento democrático. La amenaza comunista podía ser equiparada a lo que hoy es el terrorismo en la visión de organismos internacionales como la OEA. Experiencias políticas tan diversas como la de Guatemala en 1954, y las de República Dominicana y Brasil en 1964 fueron leídas de esa manera por Estados Unidos y sus aliados que promovieron reacciones autoritarias para derrocar gobiernos elegidos democráticamente. La democracia liberal de la guerra fría defendida por Estados Unidos era una democracia restringida a sus amigos en el contexto de la propia guerra fría. Por otro lado a mediados de los sesentas, luego del fracaso de los intentos reformistas promovidos en el contexto de la Alianza para el progreso, comenzó a desarrollarse entre ciertas elites tecnocráticas la idea que el único camino para salir de la crisis que enfrentaban las economías latinoamericanas era el desarrollo de regímenes militares con una pretensión modernizadora. Brasil en 1964 se mostró como un ejemplo de dicho camino. Frente a todo esto Cuba se mostró como una alternativa democrática a la democracia liberal de la guerra fría. El viraje de un discurso democrático liberal a un pensamiento leninista implicó una redefinición de democracia. En la visión de los cubanos lo que se estaba logrando era una democracia más verdadera, con la efectiva participación de los sectores populares a través de diversos mecanismos de democracia directa, pero donde ciertos derechos liberales resultaban suspendidos. En resumen, en la Latinoamérica de los sesentas aunque la palabra democracia era reclamada por todos los actores políticos como parte de su identidad, la realidad de los regímenes políticos existentes parecía muy alejada a cualquier modelo democrático. El Uruguay de fines de los cincuentas y principios de los sesentas que fue halagado por Ernesto Guevara en 1961, era una excepción que gradualmente estaba dejando de serlo. Desde la mitad de los cincuentas el país comenzó a enfrentar un estancamiento y luego una crisis económica estructural que duró dos décadas. La progresiva incapacidad de los partidos para 259 resolver la crisis fue interpretada como una crisis política de legitimación de los partidos políticos tradicionales, que incluso para algunos ensayistas expresaba una crisis moral de la sociedad uruguaya, marcada por años de clientelismo y paternalismo estatal. Desde el Estado las respuestas al crecimiento de la movilización sindical frente a la crisis fueron el incremento de la represión y el control policial. Entre 1960 y 1963 ciertos sectores del gobierno del Partido Nacional así como de la oposición colorada, emprendieron una campaña anticomunista especialmente enfocada en la amenaza que la revolución cubana representaba. Dicha campaña procuró sin éxito la proscripción del Partido Comunista, la reglamentación de la actividad sindical y la ruptura de relaciones con la Unión Soviética y Cuba. Entre 1962 y 1963 apareció una oleada de ataques de grupos de extrema derecha (algunos de ellos violentos) que desarrollaron atentados contra militantes políticos, sociales, exiliados y judíos. En 1963 se propusieron medidas prontas de seguridad para detener la huelga de los trabajadores estatales de la electricidad (UTE). Durante 1965 las presiones ejercidas por sectores conservadores se expresaron en abril y octubre en los decretos de medidas prontas de seguridad que habilitaron el encarcelamiento de cientos de activistas sindicales y en algunos casos el desarrollo de prácticas de tortura sistemática nuevas en el contexto uruguayo. El golpe de los militares brasileros en marzo de 1964 agregó un componente regional al incremento autoritario alentado desde sectores conservadores uruguayos. Ese es el contexto regional y local que habilitó una gradual radicalización de ciertos sectores de la izquierda uruguaya que se fueron inclinando hacia una visión que cuestionaba qué tan democrática era la democracia uruguaya. El encuentro de diversos militantes en el llamado "Coordinador" (la organización que antecedió a la creación del MLN-T) donde participaban socialistas, anarquistas, ex comunistas y otros grupos menores, es un ejemplo del malestar con la democracia liberal que se expresaba en importantes sectores de la izquierda. La experiencia de movilización social de los cañeros de Bella Unión será usada por estos militantes como un ejemplo que evidenciaba que los derechos liberales y sociales de la democracia uruguaya no llegaban a todos, que había otro Uruguay que estaba muy lejano del país modelo defendido por las elites políticas. Por otro lado, la lectura de las sucesivas medidas prontas de seguridad, las medidas de persecución contra la izquierda y los sindicatos y los rumores de golpe de estado a partir de lo ocurrido en Brasil los llevó a predecir un futuro negativo para la democracia uruguaya. En su visión frente al avance de la movilización social e incluso electoral las respuestas de las elites tradicionales en alianza con Estados Unidos culminarían en un régimen autoritario. Dicha lectura del proceso político local irá distanciando a estos sectores de los valores democráticos liberales que serán vistos como una farsa para mantener un orden de cosas que poco tenía que ver con el gobierno del pueblo. Simultáneamente a este proceso también otros sectores de la izquierda y el movimiento social comenzaron a preocuparse con la amenaza autoritaria que asomaba desde Brasil. El Congreso del Pueblo de 1965 advertía que: "el pueblo enfrenta una sistemática represión tendiente a reprimir los derechos individuales, sociales y sindicales". Además de soluciones para la crisis económica el congreso se planteó como objetivo detener cualquier amenaza de golpe antipopular. Estas reacciones políticas y sociales frente al creciente autoritarismo estatal continuaron frente al incremento autoritario del pachequismo. Fue en la crítica a las medidas prontas de seguridad, las torturas, los excesos policiales, las proscripciones y prohibiciones en las que diversos políticos de centro izquierda e izquierda, varios de los cuales venían de los partidos tradicionales, se terminaron encontrando para concretar la creación del Frente Amplio. Fue en ese contexto fuertemente polarizado y confuso de comienzos de los setentas donde el liderazgo de Seregni y la mayoría de los sectores políticos del FA apostaron a una 260 revalorización democrática liberal como camino de solución a la crisis y reconciliación entre los uruguayos. Además de ser una respuesta al autoritarismo civil, el FA se creó en un momento donde la novedad del gobierno de la Unidad Popular en Chile proponía conciliar lo mejor de los dos mundos de la guerra fría: Democracia Liberal y socialismo. Estas dos caras de las izquierdas: la que impulsaba caminos revolucionarios y la que intentaban revalorizar los derechos liberales, se encontraron en el Frente Amplio. Aunque conscientes de su contradicción trabajaron conjuntamente en un contexto de profunda incertidumbre política donde las estrategias de todos los actores tuvieron cierto nivel de ambigüedad. Los tupamaros apostaron a una estrategia revolucionaria pero por momentos se adecuaron a la estrategia del FA. De hecho el MLN-T apoyó la creación del FA, tuvo contactos cercanos con varios de sus fundadores, hizo una tregua electoral, proveyó información para denuncias parlamentarias y judiciales, etc. Por otro lado se podría decir que aquellos que apostaban al mantenimiento de una institucionalidad democrática como el Partido Comunista o el General Seregni, apostaron a la salida militar en febrero de 1973 como un camino para resolver la crisis política de un presidente sobre el que habían denuncias de fraude en las elecciones y que en el año 1972 había desarrollado una política represiva de inusitado alcance en la historia de Uruguay. HI- ¿Qué cambios al respecto pueden observarse en las izquierdas post-dictadura? AM- Las consecuencias de la represión dictatorial tuvieron un impacto importante en la manera que los militantes de izquierda analizaron aspectos vinculados con la violencia estatal. Vania Markarian ha mostrado como la lucha por la defensa de los derechos humanos llevó a que los militantes uruguayos fueran adquiriendo gradualmente una nueva visión acerca del valor de ciertos derechos liberales clásicos en detrimento del lenguaje revolucionario de los sesentas. Esto trajo aparejado una revalorización de la democracia liberal por parte de varios de aquellos que inspirados en la experiencia cubana habían abandonado la dimensión liberal de la democracia. Asimismo comenzaron a surgir otros asuntos vinculados con la tensión entre democracia y autoritarismo. En el contexto de la primavera democrática de los ochentas, donde la democracia y los derechos humanos fueron palabras asociadas a las demandas de los movimientos sociales y donde el autoritarismo dictatorial era el antónimo contra el cual se construían las nuevas ideas políticas, comenzaron a emerger críticas a diversas facetas autoritarias de la propia izquierda. El vanguardismo de los militantes frente a los movimientos sociales, el machismo, las estructuras gerontes de la izquierda fueron asuntos que se empezaron a hablar dentro de las organizaciones políticas de la izquierda y en los movimientos sociales durante ese período. Esta revalorización democrática no implicó abandonar la reflexión acerca de la posibilidad de articular diversas formas de democracia liberal con el socialismo. Los ochentas fueron un momento muy fermental en las posibilidades de radicalizar las nociones vinculadas a la democracia liberal. En este sentido se puede decir que la izquierda a la salida de la dictadura comenzó a proponer una nueva visión de la democracia que tendrá implicancias en el presente. La idea de la democracia participativa que reivindica el involucramiento de actores sociales y locales en los procesos de decisión surgió al calor de los movimientos sociales de esa década. Lo mismo se puede decir acerca de las críticas a la supuesta igualdad legal del liberalismo que ocultaba las diferentes formas de discriminación existente (género, edad, raza) en la política cotidiana. Sin embargo, a principios de los noventas esa voluntad de asumir críticamente la democracia liberal y buscar ampliarla con otras dimensiones emancipadoras pareció ceder a una mera 261 aceptación acrítica. La democracia liberal pasó a ser la única forma de democracia: la democracia sin adjetivos, sin historia, una esencia indiscutible. Dos asuntos tuvieron que ver con esta claudicación. La caída del muro de Berlín terminó de confirmar que las democracias que tenían otros adjetivos no solo tenían muy poco de liberales, sino también de populares ya que las mayorías en Europa oriental no se identificaban con dichos regímenes que habían devenido en estructuras autoritarias y/o totalitarias. Por otra parte la derrota plebiscitaria en torno a la ley de caducidad, además de cerrar la posibilidad de verdad y justica, terminó consolidando una narrativa sobre los sesentas donde una democracia idílica había entrado en crisis por la responsabilidad de la izquierda y el movimiento social. La izquierda no tuvo la suficiente energía para dar la lucha sobre aquel pasado y eso tuvo consecuencias sobre las maneras de concebir la democracia del presente. * Doctor en Historia (New York University), Profesor de la Universidad de la República, director del Centro de Estudios Interdisciplinarios Uruguayos (CEIU). Autor de numerosos trabajos sobre la historia reciente de Uruguay y el Cono Sur. Democracia bajo la lupa violeta: una crítica feminista Maru Casanova* http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!Democracia-bajo-la-lupa-violeta-una-críticafeminista/nnsaa/57731b9f0cf2f8d6d10f008a Cuando nos referimos al término democracia lo primero que pensamos es en su acepción más clásica: la que define como principios rectores la igualdad y posibilidad de ejercicio de derechos, tanto civiles, políticos como sociales. Si partimos de esta concepción y observamos el marco normativo vigente podríamos afirmar que nos encontramos frente a un sistema democrático, en Uruguay las mujeres podemos votar, tener propiedades, ser elegibles, ir a la universidad y desempeñar cargos, entre otras muchas cosas. Implicó un largo camino de lucha el que hoy podamos notar una diferencia entre nosotras y aquellas que no eran consideradas ciudadanas. Sin embargo no podemos reducir nuestro análisis a la igualdad en términos formales. Cuando una profundiza cuales son las posibilidades reales de ejercicio de cada uno de los derechos reseñados se encuentra que la posibilidad no es tal. La mirada feminista diluye necesariamente las fronteras de lo privado y lo público trayendo la histórica (y nunca vieja) consigna de lo personal es político. Así, en el análisis de qué implicancias tiene el ser mujer para el ejercicio de derechos, el trabajo no remunerado ocupa un elemento central. Si bien es un trabajo necesario para el funcionamiento de la sociedad, se encuentra invisibilizado bajo su asignación a las mujeres como cuestión natural. Este panorama no excluye a Uruguay, donde independientemente de la situación laboral, las uruguayas dedican muchas más horas a las tareas de cuidado y el hogar con respecto a sus pares masculinos(1). No es difícil inferir cómo este rol pueda afectar el que las mujeres se encuentren en posiciones de desventaja con respecto a los hombres. En primer lugar por el hecho en sí mismo: debemos dedicarle más horas de nuestra vida a una tarea que se nos fue asignada por el sexo con el que nacimos. Esto es menos tiempo que le podemos dedicar a otras tareas tales como trabajar, militar, estudiar, etc. Luego, por la construcción social y cultural que implica este rol del ser mujer. 262 Al participar políticamente, las mujeres se enfrentan a lo que se conoce como la triple jornada (trabajo remunerado, trabajo no remunerado y militancia), lo que supone un límite para ocupar lugares en los espacios de toma de decisión, ya sea a nivel de partido o de gobierno. Por ejemplo, en estudios sobre trayectorias políticas se desprende que las mujeres en edad reproductiva optan muchas veces por disminuir su actividad política para conciliarlas con el trabajo no remunerado, a diferencia de los hombres que no ven afectadas sus carreras(2). ¿Podemos entonces hablar de que una mujer se encuentra en igualdad de condiciones que un hombre para participar políticamente cuando tiene muchas menos horas para dedicarle? ¿Podemos asegurar que están dadas las condiciones para que las mujeres participen en pie de igualdad en la toma de decisiones? Trasladémonos al plano de las candidaturas para ser parlamentarias: las mujeres que logran ser candidatas no solo vencieron los obstáculos de la triple jornada y la invisibilidad a la interna de los partidos, sino que también desafiaron numerosas pautas culturales que establecen que el ámbito de lo público no es para ellas. Una vez adentro, tienen que hacerle frente a formas masculinas de hacer política y esforzarse más que sus pares varones en su actuación legislativa, ya que sienten una constante necesidad de justificar que pueden desempeñarse como legisladoras al igual que ellos. En el Uruguay de hoy estas mujeres solo representan el 20% del parlamento. Son demasiadas si consideramos que pensarse como política desafía los modelos actuales de liderazgo y una historia narrada sin heroínas. Pero supongamos que contamos con igual número de mujeres y varones en el parlamento, ¿alcanza con esto para que las feministas podamos hablar de democracia? Sin lugar a dudas esto implicaría un avance representativo en términos simbólicos, pero que lo haga en términos sustantivos es cuestión de debate: la participación de más mujeres en ámbitos de decisión no significa necesariamente que más personas representen los intereses y demandas de las mujeres. Sobre este punto basta con recordar todas las parlamentarias que votaron en contra a la ley de interrupción voluntaria del embarazo. Esta discusión es honda y llena de aristas, desde el preguntarse si es posible este tipo de representación hasta si hay algo llamado “los intereses de las mujeres”, cuestionando los enfoques esencialistas. Lo que es posible afirmar es que la representación simbólica es importante por lo que significa en términos de mensaje: hay mujeres que hacen política y tienen el derecho a hacerlo. Esto a su vez construye otros modelos de ser mujer que tiene que ver con el ejercicio de poder y de ocupar el espacio público. En este sentido la democracia en Uruguay se encuentra en un debe. Los porcentajes de mujeres ocupando cargos de decisión son bajos y reflejan las múltiples dificultades que deben atravesar si desean participar e incidir en la toma de decisiones. Por otra parte el discutir sobre democracia desde un enfoque feminista no se reduce a las dificultades para la igualdad de oportunidades. Las feministas buscamos la erradicación del sistema patriarcal, entendiendo al mismo como un sistema de dominación que nos margina y oprime. Es para nosotras por lo tanto, una falacia hablar de democracia cuando existen relaciones de dominación. Esta es la base de la crítica a la teoría clásica sobre democracia, entendida como una teoría de la democracia liberal: con igualdad de derechos y oportunidades entre hombres y mujeres, pobres y ricos, heterosexuales y homosexuales(3) la democracia sería posible. La crítica a la democracia liberal no proviene solo de las feministas y también las hay feministas liberales. El análisis marxista sobre la democracia burguesa señala lo mismo: no se 263 puede pensar en democracia cuando existen relaciones de dominación. En el caso de las relaciones inequitativas de poder entre hombres y mujeres: ¿Cómo podemos las mujeres ejercer nuestros derechos cuando no contamos con autonomía de ningún tipo? ¿Cómo se puede hablar de democracia cuando las mujeres aún somos tuteladas? ¿Cuándo las instituciones del Estado implementan política que responde a una visión patriarcal? Como mujeres nuestra autonomía se ve soslayada a expensas de situaciones de control y tutelaje por parte del sistema que opera en distintos niveles y a través de diversas formas. Pensemos en las situaciones de violencia basada en género a las que estamos expuestas, que parten de una visión en las que somos propiedad (de nuestra pareja o de un desconocido que nos aborda por la calle), en las que somos inferiores al otro (frente al profesional de la salud en consulta y que ejerce violencia obstétrica), por poner algunos ejemplos. De nuestras parejas escuchamos “así no podes salir” y de nuestros médicos “no estás preparada para la ligadura de trompas”. Recordemos las declaraciones que se expresaron en el parlamento a la hora de votar una ley de interrupción voluntaria del embarazo. Uno de los argumentos más escuchados refería a la preocupación de legisladores por la baja tasa de nacimientos y el envejecimiento poblacional de Uruguay. En este marco, legalizar el aborto supondría menos nacimientos y por lo tanto empeoraría este panorama. Bajo el grito de “se precisan niños para amanecer” nuestros úteros son objeto de política poblacional. Somos excluidas de tomar decisiones con respecto a nuestras vidas y nuestros cuerpos, ya sea porque se alude a que no somos capaces de hacerlo, porque somos vistas como objeto o porque somos consideradas inferiores a otros. Se hace imposible hablar de democracia cuando ni siquiera se nos considera a las mujeres como sujetas de derecho. En otro plano, democracia también es participación en términos colectivos. El contar con organizaciones sociales que demanden de acuerdo a sus intereses y que luchen por las transformaciones necesarias es uno de los pilares básicos de la democracia participativa. En este sentido, el movimiento feminista uruguayo se encuentra desde hace unos años en dificultades. La creciente institucionalización de organizaciones y feministas supone un riesgo a la autonomía del movimiento. El intento de reducción del Estado en la gestión de política pública supuso un involucramiento de organizaciones sociales (entre ellas feministas o de mujeres) para su gestión. Asimismo, con la asunción del Frente Amplio al gobierno numerosas feministas ingresaron al Estado. Esto ha generado un debilitamiento en el accionar del movimiento. En primer lugar por contar con menos compañeras con acumulado y capacidades al frente del mismo. En segundo, por la pérdida de autonomía para la reivindicación de demandas. ¿Qué capacidad de demanda hacia el Estado tiene una organización que implementa políticas públicas? ¿No depende su sustento de aquel mismo aparato al cual cuestiona? Lo mismo sucede con las feministas en cargos políticos en el gobierno. Parece difícil marchar exigiendo los cambios y ser responsable a la vez. Existen intentos actuales de lucha feminista que parecen fortalecer un movimiento autónomo. El Primer Encuentro de Feminismos uruguayo autoconvocado en el año 2014 y la posterior formación de la Coordinadora de Feminismos del Uruguay son reflejo de una pujante necesidad desde una pluralidad de organizaciones y feministas independientes de buscar un lugar desde donde hacer política feminista. 264 Volver a ocupar las calles un 8 de marzo, bajo la consigna “Día de Lucha” y movilizarnos multitudinariamente por el “Ni una Menos” son algunas de las acciones que se han llevado a cabo y que buscan ocupar el espacio público con banderas autónomas de reivindicación. Por último, si tratamos el tema de democracia y feminismo no se puede dejar de mencionar la problemática existente entre el respeto a la multiculturalidad y la defensa de los derechos de las mujeres. Queda claro que la democracia implica el respeto por la pluralidad de pensamientos, culturas, religiones y manifestaciones, pero el límite entre esto y la vulneración del ejercicio de los derechos de las mujeres es un tema en debate. Hay puntos en donde no puede existir duda: la mutilación genital femenina es una práctica cultural pero que resulta inconcebible y que debe ser erradicada. Sin embargo existen otras prácticas culturales o religiosas donde la cuestión de si avasalla los derechos de las mujeres o si su rechazo reside en una mirada colonizadora entra en tensión. La utilización de los velos en la religión musulmana es un ejemplo de ello. Son muchas las feministas que afirman que el velo es un símbolo de opresión de las mujeres y que no deberían usarlo. Otras cuestionamos estas miradas de tutelaje de las feministas occidentales afirmando que también puede ser una decisión. En este sentido es necesario recordar las nuevas estrategias impulsadas por algunos Estado-nación: implementar en nombre de los derechos de las mujeres o de la comunidad LGBTI políticas xenofóbicas(4). La prohibición del uso del velo en varios países de Europa (sobre todo Francia) y las propuestas de medidas islamofóbicas como primera respuesta a la tragedia de Orlando son algunos ejemplos. No es necesario ir tan lejos: en Uruguay se hicieron múltiples referencias en medios de comunicación sobre refugiados sirios que golpeaban a sus parejas uruguayas, señalando lo “barbárico” de su cultura. Resulta increíble pensar que con los índices de violencia basada en género y más concretamente con los casos de feminicidios que ocurren en Uruguay podamos atribuir responsabilidades de estas situaciones a una cultura determinada, que de casualidad pertenece a pueblos con inmigrantes en el país. Las feministas tenemos aquí uno de los desafíos más importantes de los próximos tiempos: el no permitir que utilicen nuestras reivindicaciones para justificar las bases de dominación de unos pueblos sobre otros y de unas personas sobre otras. Recordando que el sistema de dominación opera en diversos ejes sociales y que si solo cuestionamos uno de ellos, nos encontramos luchando contra el sistema que afecta a las mujeres blancas, heterosexuales, no pobres de occidente. Para alcanzar la democracia en tanto poder del pueblo, indefectiblemente es necesario combatir cualquier grupo que pretende ejercer el poder sobre otro. En la transición democrática el sentir común del movimiento feminista y de otros movimientos sociales se encontraba representado en la lucha antidictatorial. Hoy el panorama no está tan claro. Si bien algunas identificamos en la figura de un sistema que es capitalista, heteropatriarcal, racista y xenófobo el enemigo a combatir, otras personas y organizaciones mantienen el pensamiento fragmentario de las luchas. El feminismo uruguayo no escapa a este debate, pero ya sea porque no existen las garantías de igualdad en el marco de una democracia liberal o en el plan de desafiar todo el sistema, todos los feminismos cuestionan la afirmación de que vivimos en democracia. Tal como plantea Carole Pateman “para las feministas la democracia no ha existido jamás”(5) y el intento por hacerlo es lo que nos mantiene en lucha. 265 *Maru Casanova es politóloga, feminista e integrante de las organizaciones Mujer y Salud en Uruguay (MYSU) y Colectiva Amatista. (1) Ver Encuestas sobre uso de tiempo del Instituto Nacional de Estadística (INE). (2) Pérez, Verónica (2011): Entre lo público y lo privado. Género y ambición política en el Cono Sur. Tesis deMaestría en Ciencia Política. UDELAR. (3) Utilizo términos dicotómicos para reflejar que no se cuestionan las categorías en sí. (4) Los términos utilizados para describir estas acciones son “purplewashing” y “pinkwashing” respectivamente. (5) Pateman, Carole (1990: 7): Feminismo y democracia. En “Debate feminista”, Vol 1. La riqueza y el poder. ¿Dónde está la oligarquía?* Martín Buxedas** http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!La-riqueza-y-el-poder-¿Dónde-está-laoligarquía/nnsaa/5771ce460cf2bcae6e413173 “Oligarquía a la americana”, es el título de un artículo que sintetiza la visión de Paul Krugman, premio Nobel de Economía, sobre la relación entre quienes concentran la riqueza y el poder político en los Estados Unidos[1]. ¿Existe una “oligarquía a la uruguaya”? Los partidos marxistas y los documentos fundacionales del Frente Amplio (FA) de Uruguay no dejaban lugar a dudas: un pequeño núcleo de familias minuciosamente identificadas, asociadas a inversores extranjeros, controlaba el Estado. Ese control se ejercía por medio de su participación directa en los elencos de gobierno, el financiamiento de las campañas electorales y eficaces influencias desplegadas por las cámaras empresariales. La oligarquía, finalmente, era la responsable de la crisis económica que, indiscutiblemente, atravesaba el país y de los problemas sociales del Uruguay[2]. Con el tiempo, la izquierda, incluyendo al Frente Amplio, dejó de mencionar la concentración de la riqueza y a la oligarquía. Paralelamente, el tema no fue abordado por los investigadores en ciencias sociales, cada vez más abundantes[3]. El silencio ha sido tan grande que seguramente una o más generaciones de adultos ni siquiera sintió hablar del tema que unas décadas atrás convocaba a la izquierda. Hasta podría pensarse que no hay concentración de la riqueza y del poder o, como sostienen algunos estudios, que la izquierda dejó de lado sus antiguas banderas como parte de una estrategia de ablandamiento orientada a conseguir el apoyo de un mayor número de ciudadanos y acercarse así al gobierno por la vía electoral. Y cuánto más una vez que llegó a ese objetivo. Una excepción a la ausencia de estudios sobre la concentración de la riqueza es la obra de Bértola, Stolovich y Rodríguez (1989) en la que se identifican los principales grupos económicos que operaban en el Uruguay hacia 1985[4]. En 2010 un valioso estudio elaborado por un equipo interdisciplinario de investigadores de la Universidad de la República (UDELAR) incluye una revisión de los aspectos conceptuales relacionados con la concentración de la riqueza e identifica los requisitos estadísticos para estudiar la concentración de la riqueza, pero no aporta información original ni alcanzó el objetivo de promover la discusión del tema (V. Amarante y otros, 2010)[5]. 266 En ausencia de referencias recientes, este artículo se limita a contrastar la situación actual con la de 1960 en dos aspectos: el eje latifundio-banca y la participación de los inversores extranjeros en la propiedad de la riqueza. ¿SE ESFUMÓ LA OLIGARQUÍA? Aunque la concentración de la tierra aumentó, no hay vínculos entre los propietarios de la tierra y la banca, y una parte importante de la gran propiedad agraria cambió de dueño. No hay banqueros privados nacionales. En 1960 operaban nueve bancos extranjeros y 68 nacionales; dentro de estos últimos, la mayor parte de los privados estaban controlados por familias con grandes propiedades agropecuarias. Las sucesivas crisis terminaron con todos los bancos privados nacionales, no sin dejar tras de sí un enorme costo al erario público y muy pocos propietarios empobrecidos. Actualmente la actividad bancaria se ha concentrado en dos instituciones estatales y nueve extranjeras. La participación de los propietarios nacionales es baja o simplemente nula en los otros segmentos del sector financiero, como los seguros, las casas financieras y las instituciones que operan en el exterior. Nuevos propietarios y más concentración. En ausencia de información sobre la participación de los mayores propietarios en la propiedad de la tierra es necesario recurrir a estimaciones basadas en otras fuentes. El indicador más importante del proceso de concentración de la tierra es la compra por parte de inversores extranjeros de unos dos millones de hectáreas: un 12% de la superficie total. Se ha estimado que 27 inversores extranjeros concentraban 1,6 millones de hectáreas según un estudio divulgado en 2014[6], unas décadas atrás Trías se alarmaba porque había identificado que los capitales extranjeros explotaban 90.000 hectáreas[7]. Los inversores extranjeros se interesaron por negocios agropecuarios a gran escala, por lo que su primera opción de compra fueron los establecimientos de mayor dimensión, que hasta ese momento eran propiedad de terratenientes nacionales[8]. Para analizar la concentración lo más frecuente es el uso de los censos agropecuarios, una fuente que, como se mencionó, no releva la propiedad. Según los censos agropecuarios el número de explotaciones agropecuarias censadas se ha mantenido estable entre 1961 y 2011. En ese lapso unos 1.200 establecimientos de más de 2.500 hectáreas explotaron el 33% de la superficie[9]. Las inversiones extranjeras se concentraron en las dos ramas cuyo dinamismo impulsaron: la forestal y la agrícola. En cuanto a la actividad forestal, diez empresas forestales extranjeras disponen de un millón de hectáreas, y dos de ellas controlan la mitad de esa superficie. Los inversores extranjeros también fueron los protagonistas del extraordinario crecimiento del cultivo de soja y otros granos. Al mismo tiempo que la actividad se concentraba, la mayor parte de los plantadores nacionales se retiraron de la actividad. La evidencia de ese proceso está bien documentada. Las chacras de más de mil hectáreas cultivadas con soja y otros granos disponían del 20% de la superficie en 2001 y del 66% en 2015. En 2012 cada una de las 15 mayores empresas agrícolas explotaban 25.000 hectáreas en promedio, la mayor parte en 267 régimen de arrendamiento. Simultáneamente, el número de productores se redujo de 7.500 en 2005 a 2.900 en 2015[10]. La tendencia a la concentración de la tierra observada a partir del año 2000 no fue compensada por las importantes medidas que adoptaron los gobiernos del Frente Amplio, entre ellas la distribución de tierras. Entre 2005 y 2014 se incorporaron al régimen de colonización 100.000 hectáreas pero la empresa Union Agricole Group (UAG), un fondo privado de inversiones, controla en 2016, apenas seis años después de su creación, 181.000 hectáreas de las cuales 130.000 son de su propiedad. Un indicio más de los cambios en la propiedad de la tierra es la reducción del número de explotaciones de menor tamaño comenzada en la década del sesenta. Las 86.000 explotaciones con actividad agropecuaria censadas en 1961 se habían reducido a 57.000 en 2000 y a 45.000 en 2011. Otro aspecto a tener en cuenta es la pérdida de importancia del PBI agropecuario en las últimas décadas; es un indicador de la menor participación de las rentas de la tierra y los beneficios sectoriales en el total de ingresos. La participación del sector agropecuario en el PBI descendió de 13% en el trienio 1956-1958 a 8,6% en 2011-2013, al final del boom agropecuario[11]. EL AUGE DE INVERSIÓN EXTRANJERA IMPULSA LA CONCENTRACIÓN DE LA RIQUEZA[12] A partir de mediados de la década anterior un creciente flujo de inversión externa directa (IED) se aplicó a controlar empresas nacionales existentes o a ampliar la capacidad de producción. Por esa vía adquirieron mayor protagonismo los inversores extranjeros, un agente con características propias y vínculos internacionales distintos a los empresarios nacionales. El nuevo siglo trajo novedades importantes en materia de inversión extranjera. Antes del año 2000 la inversión externa dominante era la destinada a obtener ganancias financieras por medio de instrumentos como la compra de valores públicos o las colocaciones en bancos de los que el inversor podía deshacerse rápidamente, tal como lo hicieron en 1982 y 2002, contribuyendo de ese modo a generar, o por lo menos a agudizar, las dos mayores crisis de la economía en cincuenta años. En el nuevo siglo aumentó la inversión externa destinada a controlar empresas que producen bienes o servicios en Uruguay. Entre 2005 y 2013 la inversión externa directa (IED) se multiplicó por ocho, alcanzando al 30% de la inversión privada total, y fue la responsable de gran parte del aumento de la inversión en la economía uruguaya. La extraordinaria afluencia de fondos del exterior condujo a que “el Uruguay presente una de las relaciones entre la inversión externa directa acumulada y el PBI más altas de la región. En el 2014 el stock de IED en Uruguay se estimaba en 22.000 millones de dólares, equivalente al 40% del PIB, proporción superior a la de Argentina (18%), Brasil (34%), Colombia (35%) y Perú (38%)”. Un rasgo importante de la IED es que el 40% de las inversiones se destinaron a controlar empresas propiedad de uruguayos (tierras, fábricas, supermercados y otros)[13]. Corresponde mencionar, de paso, que la adquisición de empresas existentes no debería ser considerada una inversión por cuanto no aumenta o mantiene la capacidad de producción del país que las recibe. 268 La inversión externa se orientó a sectores dinámicos de la economía. En 2013 participaban con el 63% de las exportaciones totales y, dentro de ellas, con más del 75% de las de celulosa y papel, arroz, vehículos y autopartes y cebada malteada, y entre 50% y 75% de soja, carne bovina, madera, trigo, cuero y productos farmacéuticos. En varias cadenas de base agropecuaria los inversores extranjeros integran negocios en la fase comercial e industrial más concentrada, y aun en la agropecuaria, como se observa en las de base forestal y granos. Un indicador de la concentración de la propiedad de la riqueza en Uruguay es la observada en los ingresos originados en ella. Se ha estimado que la parte de la renta captada por el 1% de la población de mayores ingresos en Uruguay (14%) es mayor que en otros 17 países con información, y menor que en cuatro: Estados Unidos, Colombia, Ecuador y Sudáfrica[14]. EL ESTADO Las principales empresas del sector financiero y no financiero se mantuvieron bajo el dominio estatal pero su importancia en la economía no varió sustancialmente en las últimas décadas. El repliegue del Estado uruguayo de las actividades productivas de las tres décadas anteriores a 2005 se concretó por medio de cierres de empresas (pesca, frigorífico, transporte urbano), reducción de actividad (AFE) y tercerizaciones (puerto y otros) y la pérdida de mercado cuando compiten con el sector privado. La reducción de la actividad de las empresas públicas y una política ocupacional más ajustada explican la disminución de sus empleados de 64.400 en 1973 a 24.200 en 2005. A partir de 2005 el gobierno adoptó una política de fortalecimiento de las empresas estatales del sector financiero y de los otros sectores, sin expandir significativamente los mercados en que ellas operan y muy lejos de las nacionalizaciones prometidas por el FA en 1971. En 2015 las empresas estatales representan algo menos del 2% de la ocupación total de mano de obra y probablemente algo menos del 10% del valor agregado neto de la economía. *** En definitiva, el corazón económico de la oligarquía, tal como se lo describía hace cincuenta años, no está presente en el Uruguay actual. Paralelamente se procesó otro cambio trascendente: la concentración de la riqueza impulsada por los inversores extranjeros, protagonistas importantes del boom de la economía en la década que culminó en 2013. La interrogante pendiente de respuesta es: ¿será que “los molinos ya no están pero el viento sigue soplando”? Por ahora al mutis en el partido de gobierno se agrega el de los académicos, quienes no han considerado de interés generar conocimientos sobre las características actuales de la distribución de la riqueza y su relación con el poder. * Fue Profesor de Economía Agraria y Director de la OPYPA (2005-2010) del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. Funcionario de FAO y OIT y consultor en temas agrarios de varias instituciones. 269 ** Publicado originalmente en la Revista Digital Vadenuevo nº 93. Reproducido con autorización del autor. Referencias [1] Joseph Stiglitz, premio Nobel de Economía, sostiene que el principal instrumento de las empresas y personas ricas en Estados Unidos para influir en el poder político es el financiamiento de las cada vez más costosas campañas electorales. [2] La principal referencia sobre el tema es la obra de Vivian Trías, Reforma Agraria en el Uruguay, publicada originalmente en 1961 y reimpresa dentro de la compilación, V. Trías (s.f.), La crisis agraria y el socialismo en Uruguay, Cámara de Representantes, Ed. Banda Oriental. [3] Siguiendo el diagnóstico de la izquierda de la década del sesenta del siglo XX, un documento de 1971 del Frente Amplio señala: “La profunda crisis estructural que el país padece desde hace décadas, su dependencia del extranjero y el predominio de una oligarquía en directa connivencia con el imperialismo, han ido creando, por un lado, hondas tensiones sociales y por otro, un clima de preocupación colectiva sobre el destino mismo de la nacionalidad oriental”. [4] Luis Stolovich, Juan Manuel Rodríguez y Luis Bértola (1987): El poder económico en el Uruguay actual, CUI, Montevideo. [5] V. Amarante y otros (2010) La concentración de la riqueza en Uruguay. Elementos para el debate. Universidad de la República. [6] Oyhantçabal, G, Narbondo, I y Areosa, P. (2014): ¿Acaparamiento de tierras en Uruguay? En: 2º Congreso de Ciencias Sociales Agrarias. Salto, Uruguay, agosto de 2014. [7] Los censos agropecuarios no recogen información sobre la propiedad de la tierra y por lo tanto no permiten conocer el conjunto de explotaciones pertenecientes a un mismo grupo familiar o empresa. Las grandes empresas que se desarrollaron a partir de 2000 son propietarias de varios establecimiento, tal es el caso del fondo de inversiones UAG, que controla 105 establecimientos distribuidos en 17 departamentos del país. Para conocer la concentración de la propiedad sería necesario reunir el conjunto de las empresas controladas por un mismo grupo familiar o empresa, tal como lo hizo Trías para 250 familias. [8] Estimación propia basada en información sobre el valor de las inversiones extranjeras en tierras del Banco Central del Uruguay, las transacciones de compraventa de tierras (DIEAMGAP) y otras fuentes. [9] Las empresas más grandes tienen una participación más alta en la mayor parte de los sectores que la sugerida por esa información. El caso del sector bancario ya fue mencionado, en el industrial, las 50 empresas mayores eran responsables del 45% del PBI. M. Buxedas (1989): Concentración global en la industria: nuevas evidencias y significados, en M. Buxedas y R. Jacob, Industria uruguaya: dos perspectivas, FCU, Montevideo. [10] DIEA-MGAP, Anuario Estadístico Agropecuario, varios números. [11] Aunque la importancia del sector agropecuario disminuyó durante el boom agropecuario 2004 – 2013 el precio de la hectárea de tierra se multiplicó por ocho y el valor comercial del 270 stock de tierras alcanzó a unos 58.000 millones de dólares (unas 19 veces mayor que la inversión en las dos plantas de celulosa). También el valor de la renta de la tierra (el arrendamiento o la renta implícita en el retorno de los propietarios-productores) aumentó. Según una estimación, la renta de la tierra en 2000 alcanzó a 284 millones de dólares y a 1.831 millones en 2013, año en que equivalía al 38% del PBI agropecuario. Gabriel Oyhantçabal y Martín Sanguinetti (2014), El agro en Uruguay: transformaciones recientes, impactos y distribución. [12] La fuente de información de este apartado es Uruguay XXI (2014): Comportamiento Exportador de las Empresas Extranjeras en Uruguay, y Uruguay XXI (2015): Inversión externa directa en Uruguay. [13] En 2014, entre las compras de inversores extranjeros a firmas nacionales se destacan las siguientes; Pagnifique por parte de un grupo chileno; Matadero Carrasco, adquirida por una compañía brasilera; Fármaco Uruguay S.A. y Laboratorio Santa Elena por firmas peruana y francesa respectivamente; y Los Nietitos por una firma chilena. [14] Burdín, G., De Rosa, M., Vigorito, A. (2015) “Sectores de altos ingresos en Uruguay: participación relativa y patrones de movilidad en el período 2009-2012”. Serie Documentos de Trabajo, DT 03/2015. Instituto de Economía, Facultad de Ciencias Económicas y Administración, Universidad de la República, Uruguay. Citado en Buxedas, M. ¿Cuán desiguales son los ingresos en Uruguay?, vadenuevo nº 92. Democracia y justicia social: tenaces desafíos para la izquierda Fernando Lizárraga* http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!Democracia-y-justicia-social-tenaces-desafíos-para-laizquierda/nnsaa/5772fdc10cf249bc245369a4 Es bien sabido que Abraham Lincoln, presidente de Estados Unidos durante la Guerra Civil entre el Norte y el Sur (1861-1865), fue quien con más vehemencia apuntaló los pilares constitutivos del proyecto de la burguesía norteamericana. En su Discurso de Gettysburg, en 1863, Lincoln sostuvo que el ideal de los fundadores de la república se basaba en la promoción de la libertad, en la defensa de la vida, y en la creencia de que todas las personas son creadas iguales. Pero además, en este brevísimo y extraordinario mensaje, definió a la democracia en una frase que ha quedado para la historia: “gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo”. Quizás sea menos conocido el hecho de que Karl Marx, junto a otros líderes de la Primera Internacional, escribió y firmó una enfática declaración de apoyo a Lincoln luego de que éste proclamara la emancipación de los esclavos en todo el territorio de los Estados Unidos, a principios de aquel mismo año, y que utilizó parte de la fórmula democrática para describir al gobierno de los comuneros de París: “gobierno del pueblo y para el pueblo”, sintetizó el creador del materialismo histórico en un pasaje de La Guerra Civil en Francia. El apoyo de Marx al presidente republicano de Estados Unidos era una demostración de su certeza de que no sólo la emancipación de los esclavos sino también la subsecuente liberación de las fuerzas productivas del Norte industrial redundarían en favor de los intereses del proletariado y, en consecuencia, allanarían la senda hacia el socialismo. De hecho, poco después de terminada la guerra civil, hubo un extraordinario crecimiento del movimiento obrero en Estados Unidos, permitido, entre otras cosas, por las propias instituciones de la república liberal norteamericana. Como ha recordado acertadamente Robin Blackburn, Lincoln consideraba que los trabajadores eran más importantes que el capital, y en el contexto 271 favorable de la posguerra –que, cabe decirlo, duró poco– las organizaciones sindicales y políticas norteamericanas fueron pioneras en romper las barreras de color y de género; esto es, de ampliar las bases de la democracia. A esta altura de los acontecimientos, ya ubicados bien adentro del siglo XXI, parece una trivialidad tener que sostener que el socialismo presente y futuro ha(brá) de ser democrático, o no habrá de ser en absoluto. Del mismo modo, cabe afirmar, como cuestión de principio, que el socialismo (presente) debe impugnar al capitalismo como injusto y debe darse, por lo menos como boceto, algún diseño institucional para después de la revolución –o comoquiera que sea el proceso o momento del cambio hacia el post-capitalismo. Y este diseño no puede ser una mera ingeniería institucional, sino que debe fundarse en valores claramente identificados y especificados. La democracia y la justicia social no pueden estar ausentes en este boceto; es decir: es indispensable pensar al socialismo del porvenir como una sociedad que realiza, entre otros, valores tales como la libertad, alguna forma de igualdad, la auto-realización, la fraternidad, etcétera. Como dijera magníficamente Ernesto Che Guevara: “El socialismo económico sin la moral comunista no me interesa. […] Si el comunismo descuida los hechos de conciencia puede ser un método de repartición, pero deja de ser una moral revolucionaria”. Esto significa que no alcanza con las instituciones correctas si las actitudes de las personas no son congruentes con tales instituciones. Existe en nuestros días un dato difícilmente discutible. Las repúblicas democráticas burguesas han demostrado ser mucho más persistentes de lo que se imaginó alguna vez, y han cumplido cabalmente su rol en asegurar la hegemonía de la clase capitalista. En este marco, con esta constatación en mente, es preciso pensar y repensar el lugar de la democracia, la justicia, la libertad, entre otros valores, al interior de la tradición socialista y de las organizaciones anticapitalistas. Hay un año que, para esta reflexión, resulta muy significativo: 1867. Todos sabemos que fue entonces cuando se publicó el primer volumen de El Capital. Pero además fue el año en que, también en Inglaterra, se sancionó la Ley de Reforma que otorgaba el sufragio universal masculino (el cual se extendería a las mujeres recién en 1928). Así, mientras Marx revelaba la anatomía y el metabolismo del capital, la clase obrera inglesa conseguía una conquista particularmente importante, luego de años de luchas a través del movimiento cartista, que Engels y Marx celebraron como primer movimiento auténticamente clasista en tiempos de la gran industria y como antecedente del partido de la clase obrera. “El sufragio universal en Inglaterra será una medida por lejos mucho más socialista que cualquier otra cosa que se haya denominado así en el continente” y “su resultado inevitable, aquí, es la supremacía política de la clase trabajadora”, escribía Marx en una nota para el New York Daily Tribune. Y lo hacía en 1852, mientras en Francia se experimentaban las derrotas de la vía insurreccional iniciada en 1848. Al mismo tiempo, un contemporáneo de Marx, el liberal –y finalmente devenido socialista– John Stuart Mill, elogiaba al gobierno representativo como uno de los hallazgos más notables de la historia. El entusiasmo de Marx y Engels con el cartismo y su lucha por el sufragio universal no tardó en verse ensombrecido, cuando ya en las primeras elecciones posteriores a su implementación, pudo observarse que un gran número de trabajadores habían votado al partido conservador y no a los candidatos de la Liga Reformista. Un corolario inmediato de este fenómeno fue que los fundadores del materialismo histórico –siempre dispuestos a la auto-crítica (una verdadera rareza en nuestros días) – advirtieron la necesidad de un partido de la clase trabajadora, totalmente independiente de los partidos burgueses. Es decir, Marx y Engels vieron tempranamente que las repúblicas democráticas y las monarquías parlamentarias –esto es, los sistemas representativos– brindaban posibilidades para la auto-organización de la clase trabajadora al mismo tiempo que aseguraban firmemente los intereses de las clases dominantes. Por eso, ni Marx ni Engels abandonaron –como quisieron hacernos creer los jefes 272 de la Segunda Internacional– la opción de la vía insurreccional. No hay inconsistencia entre la adhesión de Marx y Engels al sufragio universal en Inglaterra y su elogio de la lucha insurreccional de la comuna, en la siempre convulsionada Francia. El capitalismo, como dice Gerald Cohen, “no es un agente” capaz de adaptarse casi automáticamente ante aquello que parece o puede efectivamente amenazar su existencia. Al interior del sistema sí hay agentes –clases–, que actúan más o menos estratégicamente. Así, la clase política inglesa vio sin demora que debía canalizar la oposición creciente de los cartistas y ceder ante algunas de sus demandas. El sufragio universal significó una ampliación de la competencia electoral, pero en los términos y las condiciones fijadas por la propia burguesía y sus dispositivos estatales. Y precisamente porque nunca hubo, salvo contadísimas excepciones, un fair play en la competencia electoral, las cartas siempre estuvieron marcadas a favor de los partidos del orden. “En el Estado” –escribía el joven Marx en Sobre la Cuestión Judía– “el hombre es considerado como un ser genérico [un ciudadano]; es el miembro imaginario de una imaginaria soberanía”. Esta ciudadanía meramente formal, esta pertenencia al cielo político –a una “imaginaria soberanía”, a una comunidad ficticia–, no anulaba sino que presuponía (y aún presupone) las enormes desigualdades existentes en la sociedad civil. La condición de mayoría de la clase trabajadora no alcanzaba para asegurarle el poder político. Tampoco, cabe decirlo, se verificaba una relación lineal entre el crecimiento cuantitativo de la clase y el crecimiento de su conciencia de clase, lo cual llevó a que muchos abrazaran el desafortunado concepto de falsa conciencia, como si los trabajadores fueran meras víctimas de engaños sistemáticos orquestados por los astutos burgueses. La democracia burguesa, con todo su formalismo, supone competencia electoral y, en este campo, la cancha tiende a estar siempre inclinada. O para decirlo en un lenguaje un poco más prolijo: en ausencia de mínimas garantías de igualdad o equidad social, se obturan irremediablemente las plenas libertades políticas. En este punto podemos observar la inextricable relación entre la justicia social y la democracia, ya que no puede haber una democracia mínimamente aceptable en presencia de enormes desigualdades sociales. Deben darse varias condiciones para una democracia pueda ser reputada como genuina, pero la igualdad económico-social es una condición necesaria. Una buena forma de hacerse una idea sobre esto es recordar aquella famosa frase de Jean-Jacques Rousseau –un burgués partidario de la democracia directa–, quien en El Contrato Social sostenía que, la igualdad no debía entenderse como igual poder e igual riqueza para todos, pero sí, por lo menos, como la situación en la que el poder se ejerce según las leyes y que, en cuanto a la riqueza, “ningún ciudadano [es] lo bastante opulento para poder comprar a otro, y ninguno lo bastante pobre para ser constreñido a venderse”. He aquí una clásica fórmula republicana que entiende a la libertad como no dominación; y para que no haya dominación –en tanto poder arbitrario de unos sobre otros– se precisan leyes y, fundamentalmente, que las desigualdades económicas no obliguen a nadie a venderse. Una vez más: lo que Rousseau tenía en mente es algo que otro pensador burgués, John Rawls, ha denominado “justa igualdad de las libertades políticas”. Para empezar a hablar sin prejuicios sobre este asunto, hay que tener presentes al menos dos consideraciones que Marx hiciera acerca de la democracia y la república burguesa. En primer lugar, que el derecho burgués, especialmente en lo que concierne a la distribución del ingreso y los bienes de consumo, no ha de superarse sino hasta bien entrado el comunismo; esto es, hasta que existan condiciones subjetivas y objetivas que permitan no sólo la superación del derecho burgués sino la extinción del Estado como cuerpo sobreimpuesto a la sociedad civil. En segundo lugar, que para Marx la existencia del Estado político y la ciudadanía –con toda su formalidad, su condición imaginaria, etcétera– ya suponía un importante avance histórico que, a su vez, habría de ser trascendido. Decía Marx en Sobre la Cuestión Judía: “No cabe duda de que la emancipación política representa un gran progreso, y aunque no sea la forma última de 273 la emancipación humana en general, sí es la última de la emancipación humana dentro del orden humano actual”. Los derechos conquistados por la burguesía y el pueblo durante las revoluciones contra el orden feudal, si bien terminaban reducidos a la futilidad en la legislación, mantenían –como los ideales de igualdad y libertad– un gran potencial disruptivo y emancipador. Volvamos por un momento en el pensamiento de John Rawls, el filósofo igualitarista-liberal que ha restituido la discusión sobre la justicia social en la agenda contemporánea. No vamos a exponer aquí los pormenores de su teoría sobre la equidad. Sólo diremos que incluso para un pensador tan profundamente liberal como él, las desigualdades del mundo contemporáneo son del tal gravedad que afectan de manera fatal a las libertades políticas. En su obra más famosa, Teoría de la Justicia, este profesor de Harvard sostiene que para que existan justas libertades políticas es preciso que los ciudadanos alcancen efectivamente ciertas condiciones materiales mínimas. Aunque no logra distanciarse totalmente de la muy burguesa escisión entre el cielo político igualitario y el mundo terrenal no-igualitario, Rawls advierte que por debajo de cierto umbral es imposible hablar seriamente de ciudadanía. Por eso, afirma que “históricamente, uno de los defectos principales del gobierno constitucional ha sido que no ha sabido proteger el justo valor de la libertad política” y que “las diferencias en la distribución de propiedad y riqueza que exceden lo que es compatible con la igualdad política han sido generalmente toleradas por el sistema legal”. Peor aún, con el tiempo, la ecuación inicial se invierte y, de este modo, quienes detentan posiciones de mayor poder político adquieren también mayor poder económico. En consecuencia, añade Rawls, “las desigualdades en el sistema socioeconómico pueden minar cualquier igualdad política que hubiese existido en condiciones históricas más favorables”. En resumidas cuentas, concluye Rawls, cuando no existe financiamiento público de las organizaciones políticas, los partidos dominantes salen a recaudar fondos de los sectores económicos más aventajados “y, cuando esto ocurre, los miembros menos favorecidos de la sociedad, que no pueden ejercer su justo ámbito de influencias a causa de su falta de medios, caen en la apatía y el resentimiento”. Lo notable de Rawls y otros igualitaristas-liberales, en comparación con el común de los liberales y conservadores que abundan en nuestras latitudes, es que no se hacen los distraídos frente a la íntima relación que existe entre las condiciones materiales y la ciudadanía. Por eso mismo, en su libro Liberalismo Político, Rawls sostiene que una plena ciudadanía y un consenso constitucional estable requieren, como mínimo, los siguientes elementos: el financiamiento público de las elecciones, que asegure disponibilidad de información en materia de políticas públicas; una cierta equitativa igualdad de oportunidades, especialmente en educación y capacitación; una distribución digna de la riqueza para que todos los ciudadanos tengan asegurados los medios necesarios para aprovechar inteligente y efectivamente sus libertades básicas; que la sociedad sea empleador de último recurso a través del gobierno local o central, u otras políticas sociales y económicas; y cuidado básico de la salud asegurado para todos. Los pensadores igualitaristas-liberales como Rawls son herederos del ala radical de la burguesía que encabezó las revoluciones modernas. Basta pensar solamente en Thomas Paine, uno de los promotores de la revolución norteamericana, quien ya en 1791 proponía una especie de ingreso básico universal para asegurar la plena ciudadanía. O en el mismísimo Robespierre quien, pese a sus idas y vueltas retóricas, no vacilaba en sostener la necesidad de que el derecho a la existencia digna estuviera públicamente garantizado. Como señala Antoni Domènech, para los jacobinos “la libertad política o republicana era eso, y nada menos que eso: no tener que pedir cotidianamente permiso a nadie para poder subsistir”. Los líderes y pensadores burgueses más honestos han admitido que no puede haber ciudadanía –entendida 274 no sólo como ejercicio electoral sino como autonomía para conducirse en la vida cotidiana– en presencia de profundas desigualdades sociales. Va de suyo que, mientras perdure el capitalismo, la igualdad de condiciones será una simple quimera. Es casi una obviedad afirmar, en una revista como Hemisferio Izquierdo, que la relación de explotación capitalista lesiona irremediablemente cualquier intento de igualar totalmente las condiciones de vida. Mientras haya capitalismo, no podrán realizarse en plenitud los ideales revolucionarios de libertad, igualdad y fraternidad. Escribe Alex Callinicos en su ensayo “Igualdad y capitalismo”: “la aspiración a la igualdad fue uno de los ideales constitutivos de la modernidad capitalista desde el momento en que triunfaron las grandes revoluciones burguesas”, desafiando las jerarquías de la sociedad anterior y desencadenando, de este modo, “una dinámica que continúa hasta el presente, conforme nuevos grupos – trabajadores, esclavos, mujeres, súbditos coloniales, negros, lesbianas y gays, entre muchos otros– han reafirmado sus demandas de igualdad. Sin embargo, aunque el capitalismo es el suelo sobre el que el ideal de la igualdad cobró forma por primera vez, este ideal solamente puede realizarse más allá de sus fronteras”. Con todo, la certeza de que los grandes ideales modernos sólo pueden concretarse más allá del capitalismo, no implica sentarse a esperar a que el sistema caiga como fruta madura al influjo de las inexorables leyes de la historia. La libertad, la igualdad y la fraternidad deben ser, a un mismo tiempo, metas revolucionarias, herramientas de lucha, y rasgos constitutivos de las propias organizaciones socialistas (ya sean partidos, movimientos, sindicatos, etc.). Gerald Cohen, un marxista analítico que devino igualitario radical al calor de las polémicas contemporáneas sobre la justicia social y la igualdad, ha sostenido –con acierto a nuestro juicio– que buena parte de la tradición socialista más ortodoxa se quedó conforme con sus formidables triunfos explicativos y confió en que, tarde o temprano, por un camino u otro, el capitalismo colapsaría y sería reemplazado por un mundo social –el comunismo– que necesariamente sería superior. Esta ortodoxia tiene por lo menos dos problemas: por un lado, la tesis de inevitabilidad del socialismo ya no goza de buena salud y, por otro, omite argumentar sobre la deseabilidad del comunismo. ¿En qué sentido lo que venga después del capitalismo habrá de ser mejor? ¿Por qué debería ser mejor? ¿Sólo porque viene después? Es posible, por caso, imaginar una sociedad sin propiedad privada de los medios de producción pero gobernada por una élite burocrática que rige los destinos de todos y cada uno con mano de hierro; o un sistema que establece una tiranía sobre las necesidades y sobre las opciones personales; o un esquema de planificación centralizada sin control por parte de los productores directos, etc. También es posible imaginar la barbarie. El punto es que, sin emancipación humana, tal como la entendía Marx, no puede haber socialismo. Cuando el autor de El Capital elogiaba a Lincoln, pensaba concretamente que la senda abierta por el presidente norteamericano y la victoria de la Unión inauguraba “una nueva era para la emancipación del trabajo”. Como señala Blackburn, “para Marx, el trabajador asalariado sólo era libre parcialmente ya que debía vender su fuerza de trabajo a otro para poder sobrevivir él y su familia”, pero “dado que no era un esclavo, el trabajador libre podía organizarse y agitar, por ejemplo, por una jornada limitada de trabajo y una educación libre”. Así, apunta Blackburn, bajo el liderazgo de Joseph Weydemeyer –amigo de Marx que luchó durante la Guerra de Secesión en las filas del Norte– un grupo de trabajadores fundó la American Labor Federation, una organización obrera “abierta a todos, ‘sin importar la ocupación, el idioma, el color o el sexo’”. Estas organizaciones obreras fueron, en los hechos y no sólo de palabra, fieles a la concepción marxiana según la cual, como ha señalado el filósofo hispano-mexicano Adolfo Sánchez Vázquez, la “emancipación humana” implica re-unir lo particular con lo universal; equivale a la verdadera democracia”. 275 Al respecto, Sánchez Vázquez enfatiza que en sus escritos juveniles Marx consideraba a las libertades burguesas como meras formalidades, pero más adelante, con la irrupción del proletariado en la escena política, pudo darse cuenta de que tales libertades “–por su origen y naturaleza– responden también […] a los intereses reales del pueblo”, más allá de la obvias limitaciones inherentes al Estado burgués. Por eso, con esta mirada juvenil “un tanto ahistórica”, Marx se negaba a sí mismo “la posibilidad de advertir en sus propios derechos y libertades los valores democráticos (en cuanto que tienen cierto contenido real, popular) arrancados a la burguesía”. Por ello, años más tarde, en sus escritos sobre la Comuna de París y sobre el cartismo –como ya hemos visto– habría de recuperar la noción de representatividad a través del sufragio universal, pero ahora enriquecida por elementos tales como la responsabilidad y revocabilidad, sobre la base de un mundo material donde ha sido abolida la propiedad privada. En suma: el socialismo contemporáneo no puede seguir pensándose como dueño de todas las verdades; ni permanecer ajeno a las discusiones teóricas de los pensadores igualitaristas, liberales, republicanos, comunitaristas, entre otros; ni quedar aislado de los desarrollos institucionales de las repúblicas democráticas burguesas. Como ha dicho con singular agudeza Ariel Petruccelli en su artículo “Dilemas y desafíos del socialismo en nuestro tiempo”: “no parece descabellado prever que en nuestros países y en los países capitalistas centrales la democracia ha llegado para quedarse, y que las izquierdas deberán aprender a combatir dentro y contra ellas. […] La auténtica democracia sigue siendo una aspiración, lo cual – insistimos– no debería impedirnos ver los méritos de las democracias liberales. […]. Así como la monarquía fue compatible con distintos modos de producción (hubo monarquías esclavistas, feudales y capitalistas), bien podría ser que la democracia liberal –garantías individuales, libertad de prensa, representación popular, multipartidismo– sea compatible también con el socialismo, y no meramente la encarnación superestructural del mercado o la frutilla del postre capitalista”. Lejos de ser una mirada desalentadora, la afirmación de que hay que luchar dentro y contra las democracias burguesas, implica a la vez una aguda indicación para la agenda teórica –¡hay que estar atentos y polemizar con lo mejor del pensamiento burgués!– y para la estrategia política. Marx no fue menos marxista por celebrar el triunfo y lamentar la muerte de un presidente tan profundamente burgués como Abraham Lincoln. * Investigador del Conicet y profesor de Teoría Política en la Universidad Nacional del Comahue, Argentina. Autor de El Marxismo y la justicia social: la idea de igualdad en Ernesto Che Guevara (2011) y Marxistas y liberales: la justicia, la igualdad y la fraternidad en la teoría política contemporánea (2016). El culto a Evo llega a sus padres http://internacional.elpais.com/internacional/2016/07/14/america/1468450971_178867.html Una estatua en honor a la familia del presidente de Bolivia se une a los muchos homenajes oficiales que recibe en todo el país El culto a la personalidad de Evo Morales alcanzó a los padres del presidente boliviano, sencillos campesinos que son recordados con una estatua erigida hace poco en la ciudad de Punata, en los valles centrales del país. La escultura de Dionisio y María, progenitores de Morales, se encuentra en un edificio municipal de cuatro millones de dólares que se llama, como decenas de otras infraestructuras públicas, “Evo Morales”. Fueron pagados por el programa Evo Cumple, que es ejecutado por los alcaldes, pero que financia el gobierno nacional. En varias oportunidades este programa, que comenzó con 276 fondos donados por Venezuela, ha sido acusado de tener como principal objetivo el enaltecimiento de la imagen del presidente. El culto a la personalidad de Morales, el primer mandatario indígena y el primer gobernante de Bolivia durante más de 10 años continuos, ha crecido paulatinamente desde su llegada al poder hasta considerarse normal. Un hecho anterior a este de la estatua fue el del Himno Evo Morales, que compusieron las Fuerzas Armadas en honor de su comandante en jefe, que incluye un verso que, dirigiéndose a él, le dice: “Tú tienes la luz”. Además existe un pequeño pueblo que se llama Puerto Evo y en 2013 hubo un serio conflicto en Oruro, una ciudad de medio millón de habitantes, entre los partidarios y los contrarios a que el aeropuerto fuera bautizado con el nombre del presidente. La escultura de Dionisio y María, progenitores de Morales, se encuentra en un edificio municipal El Gobierno señala permanentemente que estos homenajes no son solicitados por Morales, sino que son gestos de cariño de la población y los cargos inferiores de la burocracia estatal. Al mismo tiempo, no desarrolla ninguna política para aplacar los deseos de los partidarios de Morales de congraciarse con él. Al contrario, en este momento el Gobierno está construyendo un museo de casi 4.000 metros cuadrados y un coste de seis millones de dólares en Orinoca, el pueblo de 638 habitantes en el que Dionisio Morales, pastor de llamas, y María Ayma, agricultora, se enamoraron y concibieron a Evo. Se llamará Museo de la Revolución Democrática y Cultural y estará dedicado a la “resistencia indígena”, una historia de vejaciones y luchas que concluye con la llegada de este niño al poder, como ocurre en la película Insurgentesdel realizador Jorge Sanjinés, la que hace tres años fue filmada y estrenada con apoyo oficial. Insurgentes es el más monumental de los varios filmes hechos en homenaje a Morales, que también cuenta con biografías laudatorias y con títulos honoris causade decenas de universidades nacionales y extranjeras. Cuando Evo irrumpió como líder alternativo en medio de la corrupta sociedad neoliberal de los años noventa, actuaba con la tradicional sencillez de un dirigente sindical. Recién electo como presidente en 2005, en una gira promocional por el mundo se presentó ante el Rey Juan Carlos I con un jersey, lo que le granjeó simpatía y algunas críticas. Con el tiempo, sin embargo, este hombre se fue acostumbrando a la celebridad y llegó a extremos como pedir a uno de sus asistentes que le atara las agujetas, algo por lo que ulteriormente pidió disculpas. Su actitud lo distanció de los sectores urbanos, que hicieron que el “no” a la autorización constitucional a su cuarta reelección ganara en el referendo del pasado 21 de febrero. A Evo Morales le han dedicado el nombre de un pueblo, un monumento, un programa social y el himno de las FFAA A pesar de esta derrota, los partidarios de Morales buscan organizar una nueva consulta, pues si el “jefazo” (así lo llaman sus allegados) dejara el poder, acabaría su propia preminencia política. Parte de esta estrategia es mostrar a Evo como ser excepcional, un hombre de esos que, como dijo hace poco Gabriela Montaño, presidenta de la Cámara de Diputados, “nacen cada 150 años”. 277 Entramos en el barrio más peligroso del país más violento, Honduras La Rivera Hernández, en la segunda ciudad de Honduras, vive en guerra constante. Con cinco pandillas enfrentadas y un ritmo de tres cadáveres de media al día, la rutina es un ejercicio de supervivencia http://www.elconfidencial.com/mundo/2016-06-28/paseo-por-el-barrio-mas-peligroso-delpais-mas-violento-honduras_1224379/ ALBERTO G. PALOMO. SAN PEDRO SULA (HONDURAS) El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández Alvarado, convoca una rueda de prensa inaudita. Hace tiempo que no se recordaba un San pedro Sula sin homicidios en 72 horas. En esta ciudad industrial, la segunda de Honduras, resulta atípico amanecer sin sangre en las noticias. Hoy el día luce soleado, como de costumbre en esta tierra tropical. La loma del Merendón, límite occidental, vigila a los 437.000 habitantes de la que acabó 2015 como la segunda ciudad más violenta del mundo, con una tasa de 111 muertes por cada 100.000 personas. En la Rivera Hernández, su barrio más bravo, las calles se muestran desiertas. "Los chicos están tranquilos", suspira Daniel Pacheco. Este líder religioso de 36 años es de los pocos que no tiene problemas en caminar por todos sus rincones. Nos guía entre sus calles de tierra y polvo. En este barrio se refugian cerca de 100.000 vecinos bajo el custodio de 12 patrullas de policía que suelen necesitar refuerzos. Cinco maras (pandillas) se disputan el territorio: las dos principales, Mara Salvatrucha (MS)y Barrio 18, y otras pequeñas como Vatos Locos, Tercereños o Los Holanchanos. No es nuevo en la nación: cuartel del narcotráfico y nido de bandas, todo Honduras es un polvorín en la ya difícil situación centroamericana. Vaso comunicante de un Caribe con corrientes de droga colombianas y del embudo guatemalteco hacia México, este terreno de 112.500 kilómetros cuadrados se encuentra en una encrucijada de violencia. Jóvenes que se matan entre ellos, cárteles que buscan su sendero al mercado norteamericano y civiles condenados al encierro. Pero volvamos a la Rivera Hernández. Una estación de policía nos recibe en la entrada, al lado de lo que se han empeñado en llamar El Parque. Celebran que por las noches haya gente que se atreva a caminar por él. Apostados en varios furgones, con chalecos y escopetas, todos se muestran precavidos: "Ahí dentro es muy peligroso", advierten, como si hablaran de un jaula con bestias. El oficial Corrales, de 27 años y con uno de experiencia en el cargo, recita un proverbio local: "El único delincuente que no delinque es el delincuente muerto". Sonríe. Lleva tres días de reposo en comparación con su ajetreo diario. Presume de su papel: "Elegí esto porque es la mejor manera de servir a mi país", concede, "y estamos logrando acabar con la inseguridad. Hace dos meses que los niños juegan por la noche. Antes era impensable: esto era una ciudad muerta". En una de las casas próximas, la de la familia Fernández, dan un testimonio diferente. El hijo, de 29 años y con tres niños a su vez, cuenta la odisea de llegar al cole. Como en todo el terreno hondureño o salvadoreño, cada calle está controlada por una Mara, y el cruce de alguna de ellas procediendo de otras resulta fatal. "Las balas se oyen como zumbidos. Suena feo, pero se puede decir que nos estamos acostumbrando a ello", narra, enseñando agujeros en la uralita que cubre el patio. Su madre, María, asiente a sus 51 años. "Los niños tiene dificultad de ir a la escuela. Hay que elegir las privadas del barrio, y no hay plata", añade con tristeza. Varios miembros dela mara Barrio 18 posan frente a la virgen de la Guadalupe en una casa del barrio Rivera Hernández (Javier Arcenillas)Varios miembros dela mara Barrio 18 posan frente a la virgen de la Guadalupe en una casa del barrio Rivera Hernández (Javier Arcenillas) Nos adentramos a continuación en una de las zonas controladas por Barrio 18. Cristian, Rango y Fresa, de 22, 16 y 24 años, aguardan en un porche. El líder les ha dejado compartir tabaco y refrescos con nosotros. En camiseta de tirantes y zapatillas de marca se asoman a la explanada que marca la frontera con sus rivales. El viento empieza a cargar de humedad el césped 278 desigual que crece en los descampados. Una gotas se filtran por las costuras de la mesa y convierten el polvo en barro. Hablan poco. Bagatelas. Cada cierto tiempo "les mueven" a otras ciudades. ¿La familia? Olvidada. "La de sangre no existe; nuestra familia ya es la pandilla", esgrimen en medio de una espera densa. Con las armas en reposo. No tienen una estructura estable y luchan sin grandes contingentes. En las denominadas 'clicas' o grupúsculos repartidos por las zonas rurales y urbanas de Honduras, El Salvador y Guatemala. Su origen se remonta a finales del siglo pasado. Tras una historia de guerras civiles, golpes de estado e inestabilidad política, muchos de sus parientes emigraron a Estados Unidos. Allí se juntaron entre ellos y formaron guetos donde la supremacía se batía en pandillas de latinos sin arraigo cultural ni social. Cuando el gobierno decidió deportarles se encontraron en un país desconocido. Sin tejido social y con una pobreza extrema que hoy en día alcanza el 20%. Hicieron lo que habían aprendido en Los Angeles y otras urbes del gigante norteamericano: pelearse entre ellos y coaccionar a los residentes para mantenerse. Es lo que se conoce como 'renteo': cada habitante paga un "impuesto de guerra" a cambio de su seguridad. "Hasta la comida más popular se llama 'baleada", explica Claudio Hernández, pastor de una iglesia evangélica de 39 años. Ahora ejerce de mecánico, pero antes cató las mieles del crimen robando coches. Intentó huir de 'mojado' (emigrantes que viajan ilegalmente a Estados Unidos). Da clases de ebanistería o trabajos manuales. "Muchos 'cipotes' (niños) quieren aprender mecánica, pintura, restauración... lo que les falta son oportunidades", asegura frente a la antigua residencia de un antiguo líder al que asesinaron a quemarropa y que se sujeta entre metralla y dibujo de homenaje. La comunidad se vuelca en una competición de fútbol entre solteros y casados. Cualquier actividad es válida para olvidar el poso de muerte y violencia que les amenaza las 24 horas. En una pared se exhiben murales por la paz. Lo llaman "el pasaje de la bendición". Se ve a unos niños correteando. "Es algo positivo. A mí me encanta. La gente empieza a percibirlo como distinto, y es bueno. Antes esto estaba caliente", comenta Pacheco. Mientras, Marlon Fernando Mercado, de 15 años, vende fruta en un carro. "No me metieron en ninguna banda", responde, "pero uno no puede salir de aquí". Un componente de los Vatos Locos posa con el gesto de la pandilla y una pistola en la calle que dominan de Rivera Hernández (Javier Arcenillas).Un componente de los Vatos Locos posa con el gesto de la pandilla y una pistola en la calle que dominan de Rivera Hernández (Javier Arcenillas). A pocos metros, ya de noche, Daniel Pacheco nos introduce en otra de las pandillas. Son los Vatos Locos. No llegan a 20 miembros. De ahí que su lema sea 'Pocos, pero locos". Han aceptado una cena de tortillas de maíz y cocacola gracias al 'patrón', Estasio de Armendía, antiguo componente de la banda. A sus 50 años y retirado, sigue dando órdenes a los chicos. "Uno lo que quiere es que los muchachos cambien. Y se puede. Es feo ver a un hijo muerto", reflexiona. Con su mirada contesta a las preguntas que le hacen los 'vatos' que no están posteando (vigilando). Casi nadie da información. Solo uno de ellos, de 26 años, se atreve a contar que ha pasado tres años y medio en la cárcel y que intentó salir de Honduras "harto de ser pobre". Los otros deambulan de un lado a otro o fuman hierba. Solo se juntan cuando uno de ellos saca una pistola para mostrarla bajo el parvo brillo de una farola. Posan colocando las manos con el símbolo de la banda. "No tenemos ni miedo ni nada". Es de noche y la salida del barrio cada vez se vuelve más peligrosa. Atravesar el kilómetro y medio hasta el cuartel del principio se transforma en una fuga arriesgada. San Pedro Sula duerme sin sobresaltos. Parece que los buenos augurios del presidente siguen funcionando. Pero sale el sol. Y con él, una llamada de la policía. El oficial Corrales da las coordenadas. Paralelo al campo de fútbol, el cuerpo de un taxista de 45 años luce tronchado en el asiento con dos disparos en pecho y cabeza. Su empresa acababa de resistirse a pagar la 'renta' a las pandillas y él ha sido el primer represaliado. Sus tres hijos -de 3, 15 y 20 años- y el resto de una familia descompuesta lloran desconsolados a su vera. El contador de homicidios en el país inicia de nuevo su tétrico marcador habiendo finalizado con 885 asesinatos. No ha 279 habido más discursos gubernamentales. "Aquí le matan a uno como animal, como si fuera una gallina", solloza la madre del taxista. “El marxismo o la teoría científica no pueden existir sin criticar permanentemente”/ Conferencia de Etienne Balibar Etienne Balibar https://www.topia.com.ar/articulos/marxismo-o-teoria-cientifica-no-pueden-existir-criticarpermanentemente Etienne Balibar, filósofo francés, discípulo de Canguilhem y Althusser, visitó Argentina entre el 21 y el 24 de abril de 2015. Es profesor emérito de Filosofía Política y Moral en la Universidad París X Nanterre, docente de la Universidad de California en Irvine y uno de los más prestigiosos filósofos políticos contemporáneos. Entre sus ensayos traducidos al castellano podemos mencionar: Para leer El Capital (1969, en coautoría con Louis Althusser), La filosofía de Marx (1984), Nosotros, ¿ciudadanos de Europa?: Las fronteras, el Estado, el pueblo (2003), Derecho de ciudad: Cultura y política en democracia (2004), Spinoza y la política (2011), Ciudadano Sujeto, Vol. 1 y 2 (2010-2012) y La propuesta de la igualibertad (2015, en preparación). La visita de Balibar coincidió con el 50º aniversario de la publicación de Para leer El Capital (1965), escrito en colaboración con Louis Althusser. En la oportunidad, recibió el Doctorado Honoris Causa por la Universidad Nacional de San Martín. En el marco del ciclo “¿Qué hacer con Marx?”, dictó la conferencia “Teoría y crítica después del estructuralismo” y participó de un taller coorganizado con la Escuela de Humanidades y el IDAES de la Universidad. Además, invitado por el Programa de Estudios Políticos de la Facultad de Ciencias Sociales, dictó una conferencia en esa casa de estudios. Allí aprovechamos para solicitarle una entrevista para Topía, pero debido a la brevedad de su estadía, nos sugirió grabarla y publicarla con su autorización. Mario Hernandez “El marxismo o la teoría científica no pueden existir sin criticar permanentemente” Amigos, colegas, compañeros y compañeras tengo que hacer dos aclaraciones preliminares, primero agradecer inmensamente la invitación a Buenos Aires y la recepción que me hacen, adonde vuelvo luego de algunos años y, debo decir con emoción, que es un honor y un placer estar aquí esta noche. Lo más importante, no tengo en mi propio lenguaje ni la décima parte del humor y del estilo que tiene mi amigo Emilio de Ipola y, por lo tanto, tampoco lo tengo en español, así que después de una ponencia brillante, humorística e inteligente de Emilio, van a escuchar algo mucho más aburrido. Habría que preguntarse a título de qué estoy aquí hoy, en cierto sentido ustedes tienen por delante a dos personas diversas, hay un joven de 23 años coautor de “Para leer El Capital”, sobreviviente por milagro de aquella época, y debo decir que para mí, la otra persona que está 280 aquí, es un viejo profesor meritorio de varias universidades. Primero, es una sorpresa increíble tener que reconocer que después de la escritura de este libro han pasado 50 años, dos generaciones, y hemos pasado, como bien sabemos, de una época histórica a otra casi completamente diferente. Naturalmente, al joven de quien estaba hablando, yo no lo conozco muy bien, sinceramente, tratando de contestar a preguntas sobre “Para leer El Capital”, el texto que había escrito, no bajo la dictadura de mi maestro, sino en cierta comunión de intenciones y de ideas de las que voy a hablar en unos momentos, ahora casi no lo entiendo. Eso también da una posibilidad de ser un poco más objetivo, es decir, releer todo esto y tratar en modo más o menos incierto o vacilante, de ocupar diversos lugares intelectuales y acaso morales acerca del objeto, no de la reliquia del mismo. Según me decía Natalia al entrar en la sala, aquí todos son althusserianos y si seguimos a Emilio ustedes probablemente no tendrían que existir, porque los althusserianos no existen. Pero, probablemente yo sería el único no althusseriano, de todas formas eso no me priva de la necesidad de enseñar a Althusser. Quisiera tratar de hacer dos cosas, primero quisiera no destruir al mito, deconstruir al objeto del que estaba hablando que ustedes conocen mejor que yo, sino más sencillamente introducir algunos elementos históricos y factuales para mejor comprender el modo de producción de este libro y, como consecuencia, ciertos de sus aspectos extraños, que no se ven inmediatamente. Todos ustedes tienen en sus manos un libro que se llama “Para leer El Capital”, con los dos nombres de sus autores, Louis Althusser y Étienne Balibar, su discípulo. ¿Alguien me lo podría prestar? Este es el objeto material, pero es engañoso y no es puramente una cuestión de narcisismo o coquetería, hay verdaderamente hoy en día después de 50 años, algunos de los enigmas que se ocultan debajo de él. También voy a tratar de decir algunas cosas acerca del contenido y de su valor actual. Primero, ¿qué fue “Para leer El Capital” originalmente? Fue la transcripción de las ponencias presentadas en un seminario organizado en la Escuela Normal Superior que es el corazón más prestigioso, más elitista, del sistema académico francés, en el Departamento de Filosofía, por un grupo de estudiantes dirigidos por su maestro, Louis Althusser, un joven profesor de filosofía. En Francia había una jerarquía muy fuerte en estos establecimientos e institutos académicos en aquellos años, antes del ´68, y de hecho, Althusser no era un profesor de alto nivel, era un ayudante, pero en este lugar elitista y prestigioso. Los que participaron en el seminario, lo hacían en diversos modos, es muy importante recordar que se trataba de un trabajo colectivo y voy a indicar algunas consecuencias de eso. Hubo alumnos de Althusser que jugaron un papel muy importante en la fase de preparación del seminario. Si queremos tomar el proceso de preparación en su conjunto, habría que empezar cuatro años antes del Seminario sobre El Capital, es decir, en 1961, cuando yo, totalmente desconocido en todo el mundo, porque jamás había escrito una línea, fui en cierto modo el espíritu inspirador junto a Jacques-Alain Miller, un poco más tarde el famoso lacaniano y su amigo, Jean-Claude Milner, vinimos a encontrar a nuestro profesor de filosofía, de poco más de 40 años, que nos enseñaba a Platón, Spinoza, Rousseau y otros. Obviamente, tenía un interés especial por la filosofía política clásica. Se sabía que era miembro del Partido Comunista y el mismo año él había publicado un primer artículo, luego inserto en el volumen “Por Marx”, traducido por Marta Harnecker bajo el título “La revolución teórica de Marx” que se llamaba “Sobre el joven Marx”, no voy a contar lo que todos ustedes ya conocen acerca de la importancia que tuvo. 281 Ese artículo había provocado un efecto notable, inclusive cierto escándalo en el espacio intelectual francés porque, por un lado, atacaba cierta controversia del comunismo oficial y desde lo interno del partido y, por otro lado, atacaba al marxismo humanista especialmente a su versión más hegeliana la que precisamente un año antes, el filósofo francés más prestigioso de toda la época, el propio Jean Paul Sartre, había desarrollado en un libro inacabado, casi imposible de leer, porque lo había publicado como lo había escrito, o sea, sin puntuación, sin subtítulos, una frase única de 700 páginas, que se llamaba “La crítica de la razón dialéctica”. Nosotros tratamos de leerlo con enormes dificultades, pero en la Introducción había una fórmula que tuvo una resonancia enorme; todos ustedes la conocen: “El marxismo es el horizonte insuperable de su época”. Luego Sartre decía que había que añadir algunas cosas, porque según él al marxismo le faltaba alguna doctrina del sujeto y de la experiencia humana, una antropología filosófica. Para nosotros esa declaración fue absolutamente indiscutible, las razones que tomamos en cuenta, aún una vez más simplificando, no por razones puramente especulativas o teóricas, sino más bien por razones políticas e históricas. Entramos en una nueva estación revolucionaria Añadamos otra fecha. Sartre publica este libro con esta frase y un año antes triunfa la Revolución Cubana en La Habana que rápidamente se transformó en una revolución socialista. La Revolución Cubana, con otros aspectos de la situación en el momento, tuvo una fuertísima repercusión en la juventud francesa porque estábamos en medio de la guerra de Argelia, por lo tanto, el problema de la lucha antiimperialista y de sus perspectivas, no solamente nacionales sino socialistas, se imponía a nosotros con una fuerza enorme, naturalmente había todo tipo de divergencias y conflictos al interior del movimiento estudiantil de apoyo a la independencia argelina en el que todos nosotros nos inscribimos con entusiasmo. Para resumir, diría que una parte importante de esa generación, no solo jóvenes intelectuales burgueses formando parte de esa elite de la que estaba hablando, se imaginaron, se soñaron como revolucionarios y algunos de ellos lo fueron en diversos modos, pero sí fuimos convencidos de que estábamos entrando en algo que yo llamaría una nueva estación revolucionaria. Quería tomar la palabra que todos ustedes tan bien conocen, la fórmula que uno de nosotros, no directamente althusseriano, pero alumno y amigo de Althusser, Régis Debray, después de haber viajado a Cuba para encontrarse con el Che Guevara, la fórmula que él adoptó, tal vez bajo la influencia de alguno de sus amigos cubanos, no sé si fue sugerida por alguno de ellos de alto nivel, de “la revolución en la revolución” y esa es la idea que nosotros teníamos exactamente. Entramos en una nueva estación revolucionaria y se va a caracterizar por una revolución, es decir, un cambio en las formas, los métodos, no los objetivos pero sí los modos de organización, de hacer y combinar la teoría y la táctica. Eso produjo un efecto no secundario que hay que mencionar, y estoy hablando de los jóvenes, no estoy hablando de Althusser porque él es otro caso que no tenía la misma historia ni era de la misma generación. Los acontecimientos trágicos, antiguos o recientes de la historia del socialismo real, no es que no los consideramos o los ignoramos completamente, pero sí los consideramos como una contradicción secundaria, un aspecto secundario de la contradicción. Tal vez el caso más significativo, pensando en mi experiencia, pienso en conversaciones que tuvimos cuando entré primero a la organización juvenil comunista en 1960 y luego en el partido en 1961, había un 282 acontecimiento reciente que cumple un papel muy importante en las controversias acerca de la naturaleza del comunismo como movimiento histórico y es la revolución húngara del ´56. Recuerdo muy bien discusiones, no con Althusser, otro punto ciego del cual nunca hablamos, sino con otros comunistas que nos convencieron que había habido que elegir entre el socialismo con todos sus errores y desviaciones ante el imperialismo en pleno período de agresividad, el mismo año del golpe de Suez. Le dijimos a Althusser que sus clases sobre Platón eran muy interesantes pero que más nos interesaba Marx Dejando todo esto de lado nos dijimos que estábamos entrando en una nueva estación de la revolución. Pero para estar a la altura de la situación había que conocer el marxismo y en la misma escuela en la que estábamos había un comunista marxista que empezaba a hacerse conocido, Louis Althusser; lo citamos y le dijimos que sus clases sobre Platón eran muy interesantes pero que había algo que nos interesaba más que era Marx, entonces le pedimos que nos hiciera trabajar sobre él. Es importante tener en claro que nosotros lo buscamos, él nos dijo esencialmente dos cosas a lo largo de los 3 o 4 años que siguieron, “primero, ustedes me preguntan acerca del marxismo y el marxismo no existe, existe solo en fragmentos, algunos de ellos como El Capital son fragmentos enormes, pero la idea de marxismo como sistema como ha sido impuesto por el materialismo histórico y dialéctico de Stalin y de otros, no existe”. Tengo que aclarar que él no conocía ciertas corrientes críticas, o no las quería conocer por diversas razones, lo cual hubiera hecho más interesantes las discusiones o hacer estudios comparativos. El segundo aspecto del efecto encantador de Althusser fue decirnos que no podía inventarnos el marxismo, que teníamos que inventarlo juntos, con trabajo colectivo, y así se creó algo que seguramente tiene otros ejemplos equivalentes, es decir, un grupo de compañeros intelectuales compuesto de jóvenes ávidos de lecturas sin experiencia y otro un poco más viejo pero que no se comportaba como maestro. Althusser pertenecía a otra generación y tenía intenciones no diría secretas pero tampoco explícitas y una cierta parte de eso ahora se hace más visible y se puede entender, porque hay documentos que han sido publicados durante este último tiempo que son reveladores. Algunos de ustedes probablemente recuerden que en su escrito autobiográfico, texto muy complejo lleno de relaciones interesantes y de enormes errores voluntarios o involuntarios, algunos debidos al aspecto autodestructor de lo que escribe acerca de su propia experiencia. En ese libro hay un momento en que Althusser vuelve al inicio del trabajo del que estaba hablando, el que pertenece al período que él más tarde definiera como teoricista que incluye naturalmente a “Para leer El Capital” como su elemento central, y dice que para los miembros del movimiento comunista francés, así como para los del movimiento comunista internacional, la teoría de Marx era considerada científica, para el Partido Comunista Francés (PCF) era algo casi sagrado. Entonces, en sus “Memorias”, presenta su empresa como una tentativa de superación interna, de transformación subversiva y escribe que era necesario adoptar el lenguaje, la postura y el punto de vista del discurso científico para atacar a la doctrina del partido desde el interior, adoptando el lenguaje que el partido no podía rechazar. Cuando leí este pasaje en las “Memorias”, y como la editorial me consideraba un buen discípulo de Althusser, me pidieron que escribiera un prefacio para la nueva edición de “La revolución teórica de Marx” y al final del mismo me enojé un poco y dije que no podía aceptar esa presentación manipuladora y 283 desprovista de lo que hicimos en 1965, puedo equivocarme, naturalmente, o haber sido víctima de una manipulación inconscientemente, pero esa presentación desprovista de toda la historia, es una especie de versión melancólica y retrospectiva. El hecho es que en aquel momento los que creían en la verdad y la importancia teórica, desde un punto de vista científico y en la verdad de la teoría de Marx fuimos nosotros, no el PCF, tampoco los burócratas del partido, que no se preocupaban de la teoría en ese sentido. Algunos meses después se publicó un documento interesante que pueden encontrar en internet en francés con fecha del 25 de febrero de 1965, de 40 páginas que tiene la extraña forma y ficticia en cierto sentido de algo como una relación para el Comité Central del partido dirigida a un importante dirigente, el responsable de los intelectuales. Saben ustedes que en los partidos comunistas soviéticos había un responsable cada dos intelectuales. Después de una conversación que ellos tuvieron, Althusser le manda una carta que habla de la relación del partido y los intelectuales en general, del nuevo tipo de intelectuales que existe en la sociedad científica y técnica, y explica que el partido se equivoca completamente si imagina poder influenciar a los intelectuales explicándoles que hay que someterse y considerarse fuerza de apoyo de la clase obrera, la vieja idea de que los intelectuales tienen que insertarse en el movimiento obrero porque ellos tienen sus razones para ser comunistas. Pero para transformar la teoría del partido y su lenguaje, explica Althusser, hace falta un esfuerzo enorme en el campo de la filosofía marxista, el materialismo dialéctico del lenguaje de la época, y para eso el partido francés, escribe tal vez un poco vanidoso, está muy mal preparado porque los intelectuales y filósofos que tiene son nulos, no tienen ningún valor. En un momento le explica a la dirección del partido que está preparando una nueva generación de nuevos jóvenes filósofos marxistas que van a ser mucho mejores que los que tienen ustedes. Fuimos manipulados Después de este acontecimiento, sí hubo una especie de manipulación en cierto sentido, fuimos manipulados, no con intenciones absurdas. La impresión que tengo es que Althusser tenía, y se podría explicar en términos maquiavelianos, que él usó más tarde, según pienso hoy, dos ideas en mente: primero, pensaba que el movimiento comunista internacional, lo que él llamaba con mayúsculas la fusión de la teoría y del movimiento obrero, era una cosa única en la historia, algo radicalmente nuevo y único en la historia, una práctica política que necesariamente contenía e integraba en su propia práctica un momento de teoría y de ciencia en sentido fuerte. En consecuencia, había algo como un punto de honor, para un partido comunista o marxista, estar a la altura de su propia pretensión teórica, algo que naturalmente los partidos comunistas de la época no lograban. Existía también la idea de cambiar el tipo de relación entre la teoría y la dirección política; eso tocaba al corazón del sistema del comunismo oficial como había sido teorizado por Stalin y que daba la regla. Recordemos que Althusser escribió frases llenas de admiración a los dirigentes comunistas y marxistas que en la historia combinaron la capacidad teórica con la capacidad de dirección política, y los nombres que nos vienen a la mente son Lenin y Mao Tse Tung. Otra idea más implícita que me tienta llamar con un término más propio de la historia de la Iglesia y del catolicismo, la idea de la protesta indirecta. Hay que establecer una especie de 284 distancia entre la dirección política y la práctica teórica o el trabajo teórico, para que la organización política no pudiera seguir utilizando a la teoría como servidora de la dirección política, que era exactamente lo que hacían los partidos comunistas y que de hecho siguen haciendo muchas organizaciones políticas. Decidimos una línea, un día es clase contra clase, otro día es frente popular u otra táctica, y eso aumenta el prestigio de la función intelectual. La palabra intelectual orgánico en Gramsci tiene ciertas ambivalencias en este aspecto y nosotros los dirigentes políticos les pedimos a los intelectuales hacer un discurso teórico para explicar por qué nuestra línea política es justa y es la única posible, aún si es distinta a la que tuvimos en otro período. Esto es lo que Althusser quería destruir. Althusser nos dijo que para renovar al marxismo había que hacer un gran “rodeo” por la teoría, y fue a través de muchas cosas, del estructuralismo, de la lectura de Lacan, muy importante para todos nosotros ya que teníamos la idea de que entre marxismo y psicoanálisis, aunque se diferencian, era imprescindible la complementariedad. Hicimos ese rodeo y luego hicimos el seminario. Quisiera insistir en que el libro “Para leer El Capital” fue publicado el mismo año, con dos meses de diferencia, que la colección de los escritos del propio Althusser, “La revolución teórica de Marx” (“Por Marx”), el resultado de esto, que yo considero negativo, fue que ambos libros se consideraron inmediatamente como piedras angulares y fundamentales de una nueva escuela marxista y un nuevo discurso marxista. La gente empezó a leer “Para leer El Capital” en los términos que se encontraban en “Por Marx” y a leer “Por Marx” con ayuda de “Para leer El Capital”. Pero por las razones que indicaba hace un momento, “Por Marx” es un libro únicamente de Althusser, que aunque cambió sus ideas, el libro nunca dejó de ser el producto de su inteligencia. La comparación que yo hago en la historia del marxismo y que también demuestra, según pienso, la relevancia y la importancia del libro en este aspecto, es con la famosa obra de juventud de Lukacs, “Historia y conciencia de clase”. Son libros del mismo tamaño, organizados como una colección de textos, con un gran ensayo central, sobre la dialéctica que es la conciencia de clase y el proletariado en el caso de Luckas. También hay aspectos estéticos y políticos. La comparación es aún más interesante porque los dos tipos son de diversas épocas. Uno es del período inicial del comunismo, el otro, Althusser, aunque no lo sabía, del comienzo del período legal. Las posiciones son muy opuestas, pero a nivel de estructura y estilo la comparación tiene sentido. Mientras, “Para leer El Capital” es una obra, digamos, más híbrida y heterogénea; eso no lo entendimos en la época, pero para mí ahora está claro. En este punto hay que decir, primero, que fuimos nosotros, en cierto sentido, los responsables del llamado “teoricismo”, naturalmente Althusser lo sabía y nos empujó y aconsejó leer a los epistemólogos franceses famosos y otros, Lacan, etc., en ese sentido tiene la responsabilidad inicial, pero nosotros como buenos estudiantes fuimos completamente entusiastas. La autocrítica de Althusser es en verdad una crítica a lo que sus alumnos habían escrito y que no completamente concordaba con su visión. El segundo aspecto, que no es una confesión al estilo católico, un arrepentimiento, pero sí veo al grupo con un sentimiento de terrible vergüenza porque la primera edición de “Para leer El Capital”, la edición completa, está hecha de ensayos de cinco autores. Empieza con la 285 introducción general de Althusser, que naturalmente fue escrita después de la redacción de las ponencias, contiene un ensayo de Jacques Ranciere que se llama “El concepto de crítica en Marx”, sigue un ensayo más breve sin mayor interés porque su mayor contribución al trabajo althusseriano de aquella época fue sobre la producción literaria, sobre teoría de la literatura; luego viene la contribución del mismo Althusser como miembro del seminario, luego viene mi propia contribución y finalmente una contribución de otro miembro de nuestro grupo que no fue ponencia del seminario. Se editaron dos volúmenes en 1965, tres años después, en 1968, tras muchos acontecimientos, el desarrollo del movimiento maoísta, en el que muchos jóvenes althusserianos tuvieron un papel decisivo, el propio Althusser jugando una especie de doble juego muy complicado entre el Partido Comunista de un lado y los maoístas del otro, con la consecuencia de que finalmente terminó cautivo en medio de los tiros de ambos campos, el partido acusándolo de ser maestro de los maoístas y los maoístas acusándolo de ser un revisionista que no quería tomar sus responsabilidades con consecuencias dramáticas para su estado psíquico y mental. En 1968, antes de la movilización estudiantil, Althusser nos dice que el libro había tenido un éxito enorme, pero que para ser aún más útil para militantes de base, había que reducirlo a un tamaño más pequeño y para hacer eso había dos soluciones, o bien elegimos algunos textos y eliminamos los otros, o hacemos una redacción resumida de todos las contribuciones. Nosotros le preguntamos qué prefería hacer él, a lo que nos respondió que prefería la primera solución, inmediatamente le preguntamos qué íbamos a mantener y qué íbamos a eliminar, a lo que respondió que íbamos a mantener el texto de Balibar porque es un texto muy claro que la mayoría de los lectores consideran muy útil en términos de aplicación a las ciencias sociales, la economía, la antropología, y vamos a dejar de lado los demás porque son mucho más complicados, filosóficos y difíciles de comprender para los militantes. Yo como un cretino absoluto no vi la trampa en esa solución, esa versión reducida fue utilizada como base de las traducciones en todo el mundo, así se creó el libro de Althusser y Balibar, en el cual la cara invisible era la declinación de los otros y en particular de Jacques Ranciere. Dejo de lado explicar el conflicto que se produjo algunos años después entre Ranciere y Althusser, más bien consecuencia de la evolución de aquél y segundo, aunque naturalmente él no lo reconoce, pero para mí ahora está claro que estaba muy implicado en el movimiento maoísta de esos años y que Althusser, por el contrario, había abandonado al menos visiblemente toda inclinación en esa dirección y trabajaba críticamente. Voy a dejar el aspecto teórico de lado, solo voy a decir algo. Al hacer estas modificaciones tuve que releer mi propio texto, el de Ranciere y el prefacio que Althusser escribió. El caso no es que uno haya sido más estructuralista que otro, todos lo éramos, como lo sabe muy bien Emilio; este libro cambió mucho mi comprensión de todo ese proceso, para simplificar, la orientación de Ranciere es crítica en un sentido casi kantiano, hace referencias permanentes a Kant, su problema es como el problema de Kant con la dialéctica trascendental, explicar la posibilidad e incluso la necesidad de una ilusión trascendental, la ilusión del sujeto ideológico como consecuencia inevitable del juego de las categorías centrales del pensamiento, que son las categorías de la economía política, una cosa que Marx decía cuando hablaba de las formas del pensamiento objetivas que producen un efecto de ilusión subjetiva, así Ranciere se mantiene a nivel filosófico de una tentativa de tipo crítico. 286 Mientras que yo tomo el punto de vista exactamente opuesto y escribo un texto esencialmente positivista, esa fue la razón por la que, yo no los quiero insultar, pero los llamados militantes, y sobre todo economistas, antropólogos, historiadores marxistas influidos por la revolución teórica anunciada por Althusser encontraron en mi texto un instrumento útil; porque yo decía que la crítica ya estaba acabada, que habíamos entrado en el campo de la ciencia y en él podíamos definir conceptos que no tienen ninguna relación con las ideologías o las ilusiones ideológicas del pasado, sino que explican objetos reales de la historia presente. El problema que como buen militante comunista me interesaba era el problema de la revolución y yo lo reformulé en términos de transición, una cosa que en ese momento jugaba un papel muy importante esencialmente en los países subdesarrollados donde se desarrollaban las luchas antiimperialistas. Todo el mundo estaba interesado en cómo analizar los fenómenos y procesos de transición, pero la transición como yo la describía, en términos positivistas, se presentaba como una combinación contradictoria de dos tipos de estructuras, las capitalistas y las socialistas o tal vez comunistas. Lo extraño en este sentido es que unas existen en la realidad mientras que las otras, naturalmente, son intelectuales. Lo interesante también es que yo tenía una cuestión en común a nivel formal que era el poner las estructuras intermedias impuras, excepto que para Althusser el concepto central era cómo entender la posibilidad de un discurso como la economía política que el propio Marx consideraba semi científico y semi ideológico, una especie de contradicción interna; mientras yo me ocupaba de una “contradicción real” en la historia. En la nueva edición, la que ustedes tienen, tanto en mi texto como en el de Althusser, fueron eliminadas las fórmulas que tenían un sabor demasiado estructuralista. Althusser y yo, pero también otros althusserianos habíamos decidido no solo que el estructuralismo no era útil para refundar el marxismo, sino que además era una ideología peligrosa. De tal manera la genealogía profunda que Emilio discute y explica muy bien en su libro, acerca de la combinación paradójica naturalmente, pero también muy productiva intelectualmente, entre estructuralismo y marxismo, en el sentido intelectual, esa combinación está más o menos acordada y escondida en el texto final. Si ustedes toman los textos de Althusser más el mío, ¿qué tienen en sus manos? Tienen un equivalente, no digo en todos los aspectos del contenido, del libro de Stalin “Materialismo dialéctico y materialismo histórico”; el propio Althusser lo dijo. El texto de Althusser “Materialismo dialéctico” y el texto de Balibar “Materialismo histórico”, uno es la fundación del otro, el segundo es la ilustración de las capacidades científicas del primero. Habría que reflexionar sobre la larga influencia del esquema estaliniano en el pensamiento de Althusser. Tiene razón Emilio cuando lo llama esotérico, más político el lector de Maquiavelo e inventor de esa palabra extraña “materialismo aleatorio”, con carga negativa, no es solamente el materialismo que tiene el azar como su contenido, se puede entender también como un materialismo muy improbable. Lo cierto es que tiene muy poco de materialismo estaliniano y probablemente no tiene nada de marxista, de hecho no tiene nada que ver con él, es una invención filosófica. Quisiera matizar esta presentación muy negativa y muy autocrítica en cierto sentido, porque en los dos textos que Althusser introduce en el Prefacio hay dos cosas que no se deducen de esto. La primera es la idea de la lectura sintomal, que es una primera tentativa de rectificación de las orientaciones opuestas que tuvimos en el texto. Es una idea dialéctica en cierto sentido, hay una interpretación, la interpelación restringida de la idea de lectura sintomal que está de 287 acuerdo con el famoso tema del corte epistemológico, la lectura sintomal fue lo que hizo Marx para criticar la economía política y el método que usó para producir el corte epistemológico. Althusser propuso otra interpelación, la idea del corte epistemológico continuado. Pero no llevó la idea del corte epistemológico hasta las consecuencias que, en cierto sentido, el concepto de lectura sintomal contiene. Si leen el texto van a ver que es la mejor interpretación, es decir, se trata de un proceso infinito, no acabado; lo que quiere decir que el marxismo o la teoría científica no pueden existir sin criticar permanentemente, no solo a una ideología pre existente, sino más bien a la ideología que su propia actividad teórica recrea y reproduce en su relación con los movimientos políticos. Hay que aplicar la lectura sintomal a sí mismo, hay que añadir otro nivel de transferencia y de control. El otro elemento imprescindible, es un elemento que hay que reconstruir tomando algo de “Por Marx” y algo de “Para leer El Capital”, en el párrafo final del Prefacio aparece la formula sencilla que dice que habría que estudiar el efecto de sociedad; fórmula muy extraña porque da la impresión de ser una cosa nueva que el texto no contiene, de hecho lo contiene, el efecto de sociedad no es otra cosa que la sobredeterminación y ésta no es otra cosa que la unidad de contrarios, lo cual es muy difícil de pensar y conceptualizar entre estructuras y coyunturas en la práctica política. El corazón de todo esto, para mí, la parte más bella de “Para leer El Capital” porque es el cristal filosófico, es el capítulo de Althusser que se llama “Esbozo de un concepto de tiempo histórico”, es interesante porque es vecino de un capítulo atroz que se llama “El marxismo no es un historicismo”, el ataque a Lukacs y a Gramsci, que es una ilustración casi perfecta del método estalinista llamado leninista de criticar a las desviaciones de izquierda de Lukacs y a las de derecha de Gramsci, explicando que tienen el mismo contenido, que es la misma incapacidad de comprender la dialéctica. Es horrendo, pero la contrapartida positiva e inacabada es el esbozo de un concepto que yo llamaría no vulgar, no lineal, no evolucionista, no teológico de la historicidad como no contemporaneidad estructural del presente. Es aquí que Althusser puede ser comparado con otras grandes figuras del marxismo del siglo XX que estaba mencionando antes. Esto no es para explicar que uno es mejor o superior, es para decir que estamos aquí en el corazón del problema filosófico y que Althusser verdaderamente lo tocó en esta época. Muchas gracias. Desgrabación: Ana Laura Xiques Revisión y edición: Mario Hernandez Hay un vínculo directo entre el Plan Colombia, EE. UU. y 5.500 jóvenes colombianos asesinados/ Entrevista a Renán Vega Cantor, , Bogotá, Colombia Mario Hernández https://www.topia.com.ar/articulos/hay-un-vinculo-directo-plan-colombia-ee-uu-y-5500jovenes-colombianos-asesinados Renán Vega Cantor es historiador. Profesor titular de la Universidad Pedagógica Nacional de Bogotá, Colombia. Doctor de la Universidad de París VIII. Diplomado de la Universidad de París I, en Historia de América Latina. Autor y compilador de los libros Marx y el siglo XXI (2 volúmenes), Editorial Pensamiento Crítico, Bogotá, 1998-1999; El Caos Planetario, Ediciones Herramienta, 1999; Gente muy Rebelde (4 volúmenes), Editorial Pensamiento Crítico, Bogotá, 288 2002; Neoliberalismo: mito y realidad. Entre sus últimos trabajos podemos mencionar: Los economistas neoliberales, nuevos criminales de guerra: El genocidio económico y social del capitalismo contemporáneo (2010). La República Bolivariana de Venezuela le entregó en 2008 el Premio Libertador por su obra Un mundo incierto, un mundo para aprender y enseñar. Dirige la revista CEPA (Centro Estratégico de Pensamiento Alternativo). M.H.: Un momento muy especial para la vida política colombiana, el pasado jueves 4 de febrero se encontraron en Washington los Presidentes Obama y Santos, encuentro en el que también estuvo presente el ex Presidente Pastrana, en la conmemoración de los 15 años del “Plan Colombia”, realizada en la Casa Blanca. ¿Cuál es tu visión respecto del “Plan Colombia”? Tanto Santos como Obama lo dieron como un plan que tuvo resultados positivos. El ex Presidente Andrés Pastrana también, pero fue crítico de los acuerdos de paz a los que luego haremos referencia. Comencemos con el Plan Colombia. R.V.C.: Cuando se analiza un hecho del presente uno tiene que pensar si se habla de resultados favorables o desfavorables, para quién o para quienes. Por supuesto que para Estados Unidos los resultados del Plan Colombia han sido absolutamente favorables y para las clases dominantes de Colombia y el que nosotros llamamos bloque de poder contrainsurgente también. Pero para el grueso de la población no solo colombiana, sino andino latinoamericana los resultados del Plan son terriblemente negativos. Me atrevería a decir que el Plan Colombia se podría catalogar como plan de muerte, porque en estos 15 años lo que se ha dado es una recolonización de Colombia, se ha convertido en el territorio donde las clases dominantes han feriado todo y se ha iniciado un proceso de convertir a nuestro país en la base más incondicional de los Estados Unidos. Desde ese punto de vista uno se pregunta qué se puede celebrar. ¿Se puede acaso celebrar la muerte? Y no hablo en términos metafóricos, sino en términos reales fundados en hechos que se han dado recientemente. Tal vez en Argentina, como en otros lugares del mundo, se ha escuchado hablar de un término absolutamente banal pero que oculta muchas cosas, que es el de “falsos positivos”. Ese término significa asesinatos de Estado, que se han cometido durante estos 15 años, en una práctica sistemática que se generalizó durante el Plan Colombia, no nacieron con él pero sí durante su vigencia se convirtieron en una práctica organizada y continua que ha tenido como resultado alrededor de 5.500 asesinatos. Durante los gobiernos de Álvaro Uribe Vélez, entre 2002 y 2010, pero principalmente entre el 2002 y el 2008, cuando estalló el escándalo, se recurrió a la práctica de asesinar a jóvenes colombianos que mediantes distintos artificios eran engañados y se los llevaba a distintas zonas a donde ellos vivían, se les vestía con traje camuflado, se los asesinaba y se los presentaba como guerrilleros dados de baja. Esa práctica tiene como resultado la cifra de 5.500 muertos, una cifra que las ONG consideran la más alta de asesinatos políticos en todo el mundo en lo que va del siglo XXI. Son crímenes de Estado que están relacionados con el Plan Colombia. Estamos hablando de que en el gobierno de Uribe Vélez, cuando fue Ministro de Defensa del actual Presidente de la República de Colombia, Juan Manuel Santos, se dieron directivas oficiales, en las que se comienza a poner precio sobre las cabezas de los miembros de la insurgencia, de acuerdo a su importancia dentro de la organización. Por ejemplo, para los mandos superiores, como el Secretariado de las FARC ofrecían 5.000a 10.000 millones de pesos, y de ahí para abajo se empezaba a ofrecer 289 hasta los combatientes rasos. Aparte se daban otro tipo de incentivos, como mandos militares, altos o medios que estuvieran involucrados en el asesinato de insurgentes tenían algunas remuneraciones adicionales como vacaciones, premios económicos o se les ascendía. Eso fue convirtiéndose en un incentivo para matar colombianos. Se trataba además propagandísticamente de decir que el Ejército colombiano estaba matando guerrilleros a diestra y siniestra, cuando en realidadse trataba de jóvenes colombianos humildes que eran engañados y asesinados. Esos son los “falsos positivos”, es interesante de donde surge ese nombre. En el Ejército colombiano se acostumbra que cuando un oficial da una orden y el subalterno le contesta “positivo”, quiere decir que la orden se acató. En este caso quiere decir que la orden de asesinar colombianos se cumplió. Pero en cuanto la prensa del mundo en vez de sacar un titular que diga “Cinco mil colombianos asesinados por el Ejército”, dicen “Cinco mil falsos positivos asesinados” se atenúa el crimen, y eso es lo que ha sucedido. Esto está relacionado con el Plan Colombia porque hay ONG de EE. UU.y Europa que han hecho investigaciones de la responsabilidad de unidades militares colombianas de altos mandos, en la realización de los llamados “falsos positivos” y la relación con los Estados Unidos, es decir que se ha investigado cuál es la formación de esos militares y dónde tomaron sus cursos. En la mayoría de los lugares donde se llevaron a cabo esos falsos positivos, los comandantes de las unidades militares, fundamentalmente con cargos superiores, en un 80/90% habían recibido instrucción de Estados Unidos en la Escuela de Las Américas, por ejemplo. Hay un vínculo directo entre el Plan Colombia, la participación de USA y los asesinatos. Pero este es tan solo un elemento del Plan Colombia que de por sí ya es escandaloso. Otro elemento es que durante el Plan Colombia se acentúa el uso del glifosato como químico para destruir las matas de hoja de coca, pero eso ha llevado a la destrucción de economías campesinas, indígenas, la enfermedad y muerte de muchos colombianos en zonas campesinas. Un país tan dependiente, tan sometido como Afganistán se negó en un momento determinado a usar este tipo de químicos para fumigar los cultivos de amapola, en cambio, en Colombia esa práctica se ha seguido llevando a cabo hasta el día de hoy, aunque hace unos meses se dijo que se iba a suspender. Un tercer elemento en el que se demuestra que este es un plan de muerte, tiene que ver con el asesinato, en un país en el que no existe la pena de muerte, de altos miembros de la insurgencia con la participación directa de tropas de los Estados Unidos. El crimen de guerra del 1° de marzo del 2008 en Sucumbíos, Ecuador, donde fueron asesinadas 26 personas, entre ellos el segundo comandante de las FARC, Raúl Reyes, 4 estudiantes mexicanos y ciudadanos ecuatorianos. Hace unos dos años un periódico de EE. UU.dio a conocer que ese operativo había corrido por cuenta directa de las fuerzas de USA. Entonces, cuando se celebran los 15 años de este Plan, están celebrando la muerte, persecución, el exilio y represión de miles de colombianos. Me parece que es cinismo, más cuando estamos hablando de un Presidente que supuestamente está interesado en lograr la paz. Podemos decir que se trata de la paz de los sepulcros la que está celebrando. Por supuesto, si miramos el Plan Colombia desde una óptica diferente, ha sido nefasto no solo para Colombia sino para los países de la región. Ha significado la militarización creciente de toda la región, la construcción de nuevas bases militares, injerencia de los Estados Unidos, construcción y manejo de radares en zonas estratégicas como el Mar Caribe y la Amazonía; bases militares norteamericanas en territorio colombiano desde donde se puede agredir, controlar y vigilar a todos los territorios de la nación. Esos son algunos de los resultados del Plan Colombia. 290 Hay otro elemento que resulta paradójico. El debate por este Plan comenzó en el Senado de los Estados Unidos entre 1999 y el 2001 en un momento en el que había dialogo entre las FARC y el gobierno de Pastrana. En ese momento se dijo que el Plan no era contrainsurgente, sino que era para combatir el narcotráfico. Cuando se rompieron las conversaciones y luego de los atentados de septiembre de 2001, abiertamente se dijo que era un plan contrainsurgente encubierto como un plan antinarcóticos. En términos de narcóticos el plan es un absoluto fracaso. Colombia no ha dejado de ser proveedor mundial de cocaína, a pesar de que México cumple un papel significativo. No se ha reducido notablemente el número de tierras sembradas, inclusive si se hubiera reducido, la productividad por hectárea es mayor que la que existía hace 15 o 20 años. Por lo tanto, la cantidad de cocaína que sale de Colombia al mercado mundial, incluso ha aumentado. Desde ese punto de vista el Plan ha sido un fracaso, pero obviamente el objetivo del Plan no era ése, siempre fue concebido como plan contrainsurgente. El Estado colombiano tuvo que aportar U$S 120.000 millones para el Plan Colombia M.H.: He recabado algunos datos de distintas publicaciones que indican que de los U$S 9.000 millones que Estados Unidos entregó como parte del Plan Colombia, el 71% fue destinado a las fuerzas armadas y de policía. Antes te comentaba sobre una entrevista que realiza la revista La Semana a Andrés Pastrana, donde reconoce que las FARC ya no son la guerrilla arrolladora de hace unos años, que han sido fuertemente golpeadas por el fortalecimiento de las Fuerzas Armadas debido al Plan Colombia. Según el Pentágono, el Plan Colombia redujo el tamaño de las FAR en 2/3 en 15 años, alejando la guerrilla de los alrededores de las ciudades y carreteras principales. Sin embargo, el ex Presidente Andrés Pastrana, firmante originario del Plan Colombia, refiriéndose a las negociaciones de paz en La Habana, considera que son un triunfo para las FARC. “Lo triste es que una vez en la mesa, la guerrilla logró arrodillar al gobierno por la vía insólita de las concesiones del fuerte al débil. Lo que la guerrilla logró en la mesa es el lavado de su cartel”,dijo Pastrana, y agregó una frase muy fuerte, que me gustaría que pudieras aclararnos: “La guerrilla cambió el Diario del Che por El Padrino”. R.V.C.: Primero tengo que decir que el personaje del cual usted me habla es un personaje absolutamente despreciable, por el nivel de postración frente a los Estados Unidos porque cuando hablamos de este proceso de recolonización, en el cual intervienen las facciones de las clases dominantes y el Estado colombiano, se personifica en individuos. Estamos hablando de un proyecto de clase en el cual hay individuos sobresalientes. Y en ese proceso de entrega, de conversión de Colombia en una nueva colonia de los EE. UU., Pastrana ha cumplido un papel absolutamente nefasto. Cuando se inicia el Plan Colombia hace 15 años, el gobierno de Pastrana estaba sentado en una mesa de negociación con las FARC y en medio de esto, comienza una ingeniería para 291 fortalecer las Fuerzas Armadas, lo cual significa que nunca estuvo interesado en una solución dialogada del conflicto armado. Mientras hablaba de paz con las FARC, estaba reorganizando el Ejército y las Fuerzas Armadas que habían sufrido durísimos golpes militares durante los ´90. Y lo que se puede ver en la perspectiva que dan los años, es que el Estado colombiano y las Fuerzas Armadas se vieron obligadas a sentarse en una mesa a negociar para ganar tiempo para rearmarse, pero no estaban interesados realmente en que se avanzara en el proceso de paz. Mientras se dialogaba, el Estado colombiano firmaba acuerdos con los Estados Unidos, entre esos el Plan Colombia, pero también hubo otros menos conocidos, inclusive acuerdos secretos de intervención directa de los EE. UU. en términos militares. ¿Qué autoridad moral tiene un individuo como éste de dar lecciones si él es un personaje que encarna esa claudicación de las clases dominantes en Colombia, que en lugar de impulsar reformas sustanciales en la estructura social y económica del país, prefiere recurrir a la vía militar pensando que iban a ganar la guerra? Lo que hemos visto durante estos 15 años es que el Estado no pudo ganar la guerra por la vía militar, aunque haya debilitado a las FARC, no las ha podido destruir y por eso tuvieron que volver a sentarse a dialogar. Porque el Estado apostó a la destrucción total de la insurgencia. Hay un costo del Plan Colombia, pero está minimizado, la inversión directa de los Estados Unidos fue una cifra de aproximadamente 10.000 millones de dólares, pero los costos reales aproximados, son de 130.000 millones de dólares,es decir, que el Estado colombiano tuvo que aportar 120.000 millones de dólares. ¿De dónde salió este capital? De reformas tributarias, nuevos impuestos, invirtiendo en el presupuesto militar y reduciendo la inversión en el sector social, en educación, en cultura; privatizando y creando todas las condiciones para firmar Tratados de libre comercio. Por lo tanto, hay todo eso detrás del aspecto militar del Plan Colombia, del que no habla Pastrana. Él hace unas afirmaciones absolutamente nefastas que reproducen la lógica colonial de los Estados Unidos, que considera a las FARC como un cártel de la droga. Ese es un invento norteamericano, de un embajador de los Estados Unidos en Colombia, Lewis Tamp, que acuñó el nombre de “narcoguerrilla” en 1982. Desde ese entonces el término narcoguerrilla se ha venido utilizando para varias cosas, primero para desprestigiar a la insurgencia, para decir que no tiene proyecto político, que es un cartel más; y para legitimar la lucha contrainsurgente del Estado colombiano y plegarse a los Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico. De allí se desprende que no hay necesidad para ellos de ninguna reforma, ni de ninguna transformación porque para ellos están muy bien, porque estamos hablando de una lucha puramente contra el narcotráfico y no de una lucha contrainsurgente, contra un movimiento que tiene reivindicaciones políticas. Colombia es un país que se precia de ser democrático, pero ni en las peores dictaduras hay registros tan negativos 292 M.H.: ¿Cuáles son los daños causados a la población civil por la aplicación del Plan Colombia? R.V.C.: Los daños han sido terribles. Por eso decía que cuando uno habla de los logros o fracasos de cualquier proyecto social, tiene que fijarse quiénes se benefician y quiénes se perjudican. En términos negativos, podríamos nombrar algunos de los efectos más dañinos para la población, un primer elemento profundamente nefasto es la militarización de la sociedad colombiana. El Ejército colombiano en estos últimos años ha tenido un crecimiento espectacular, hasta llegar a ser uno de los 15 ejércitos más grandes del mundo. M.H.: Con 500.000 efectivos. R.V.C.: Sin contar su influencia indirecta. Incide indirectamente en alrededor de 3 millones de personas, hablando de los familiares de los miembros de las Fuerzas Armadas colombianas. La vida cotidiana, el hecho de negarse a reconocer reivindicaciones sociales, militarizar todos los aspectos de la vida, solucionar todos los conflictos por la vía de la represión. Estamos hablando de la expulsión de entre 6 y 7 millones de campesinos de sus tierras, en un proceso que se inició antes del Plan Colombia pero que se radicalizó durante. Hoy por hoy Colombia está entre los primeros países con el más alto índice de expulsión interna. Estamos hablando del acaparamiento de tierras por parte de nuevos y viejos terratenientes. Los campesinos eran echados por la represión y la paramilitarización y esas tierras quedaron en manos de viejos y nuevos terratenientes. El efecto negativo que ha tenido el uso del glifosato al destruir los cultivos, destruye todo tipo de cultivo y no solo los mal llamados cultivos ilícitos. La represión indiscriminada. Desapariciones y asesinatos de sindicalistas, de defensores de derechos humanos. Es un listado enorme en un país que se precia de ser democrático, pero incluso a veces en las peores dictaduras no hay registros tan negativos como lo que pasa en Colombia. M.H.: ¿Es imaginable un papel diferente de las Fuerzas Armadas colombianas una vez firmados los acuerdos de La Habana? R.V.C.: Este es uno de los elementos centrales de cualquier proceso de desmovilización e incorporación del movimiento insurgente a la vida civil, porque hay que decir que las Fuerzas Armadas colombianas han sido formadas en la Doctrina de la Seguridad Nacional, de la contrainsurgencia y del anticomunismo, mucho antes del comienzo del Plan Colombia. Estamos hablando de unas Fuerzas Armadas que fueron educadas en esa lógica en los últimos 70 años,es decir, que todos los miembros de las Fuerzas Armadas, desde la alta oficialidad hasta los soldados rasos, han sido formados en la doctrina del enemigo interno. El enemigo interno no es solamente el miembro armado de la insurgencia que pertenece a éste o a aquél movimiento guerrillero; enemigo interno es lo que aquí se ha llamado, con un término muy negativo, como “guerrilleros desarmados” que son (o somos) los profesores 293 críticos del sistema, investigadores independientes, profesores de cualquier nivel educativo, dirigentes sindicales, dirigentes campesinos, prácticamente cualquier organización no armada que tenga consideraciones en contra del régimen era o es considerado como guerrillero desarmado, a los que se les aplica el mismo tratamiento que a los guerrilleros armados y el Ejército y las Fuerzas Armadas han sido los sujetos más activos de esa práctica contra la población civil. Si queremos construir otro país es obvio que las Fuerzas Armadas tienen que modificarse en muchísimas cosas, primero tienen que reducir su tamaño, porque actualmente es exagerado y no solo por el número de miembros sino por el gasto económico que significa para el Estado colombiano. En pocos años la carga fiscal de un ejército tan grande, cuyos efectivos se pensionan desde muy jóvenes, desde los 40 años aproximadamente, precisamente por la cuestión de la guerra, va a ser inmanejable. Desde el punto de vista puramente económico eso tiene que modificarse, pero el otro punto tiene que ver con su función, la necesidad de que vuelvan a sus cuarteles para proteger las fronteras del país y abandonen la idea de que el enemigo está aquí, en cualquier ciudadano que habita en las ciudades o los campos colombianos. Eso requiere de una ingeniería cultural e ideológica que va a necesitar mucho tiempo, porque estas Fuerzas Armadas son terriblemente anticomunistas y cuando hablamos de anticomunismo no es que se persiga solamente a quienes se denominan como tales, sino a cualquier persona que piense diferente. Eso requiere una modificación de esa mentalidad castrense y va a necesitar muchas décadas, no será de un momento a otro. Por eso mismo es que gran parte de las Fuerzas Armadas no están de acuerdo conque se firme un acuerdo con el movimiento insurgente, porque pierden muchos de sus privilegios, que son muchísimos, por ejemplo, en el manejo del Plan Colombia, una cantidad de manejos corruptos en donde distintos sectores militares se han quedado con millones de dólares, pero resulta que se les facilita porque son un poder independiente sin ningún nivel de control ni auditoría, entonces pueden hacer lo que quieran con esos dineros sin que tenga consecuencias investigativas o penales. Obviamente, que al cambiar la situación se va a producir un cambio en el seno de esa conducta de las Fuerzas Armadas. ¿Van a poder las FARC hacer política sin armas? M.H.: En este contexto, cómo podríamos interpretar la afirmación del Comandante Timochenko, que yo pondría entre signos de interrogación: ¿Van a poder las FARC hacer política sin armas? R.V.C.: Ese es uno de los grandes interrogantes porque aparte de ese carácter anticomunista de las Fuerzas Armadas, las clases dominantes de Colombia también son profundamente anticomunistas y contrainsurgentes y lo son para mantener sus privilegios y la desigualdad que 294 caracteriza a la sociedad colombiana, que es una de las más desiguales del mundo y lo dicen las Naciones Unidas, no solo las organizaciones de izquierda. Incluso Piketty, el economista francés, lo señaló hace unos 20 días en una conferencia que dictó en una Universidad de Bogotá, que solamente el 1% de la población concentra el 20% del ingreso, y creo que se quedó corto. Pero esto lo dice un economista que no conoce nada de la realidad colombiana, que simplemente consultó datos macroeconómicos, los confrontó con la realidad de otros países del capitalismo mundial y llega a la conclusión de que Colombia es un país terriblemente desigual. Entonces, en realidad la cuestión de la guerra y el asesinato de los oponentes tienen que ver con mantener la desigualdad. Obviamente, los sectores políticos que quieran actuar para contrarrestar esa realidad, van a enfrentarse al hecho o al dilema de si se les va a permitir hacer política en ese sentido, o se los va a matar. Es un dilema que aumenta si uno recuerda algunos hechos históricos de los últimos 60 años en Colombia, donde distintos procesos de amnistía y desmovilización han terminado con el asesinato de guerrilleros. Como sucedió en la década del ´50 y ´60, y como sucedió después de 1984 con la Unión Patriótica. Por lo tanto, es uno de los interrogantes que genera la firma de un posible acuerdo que le ponga fin al conflicto armado. Y hay que agregarle una cuestión fundamental, qué pasa con el paramilitarismo. Si efectivamente el Estado colombiano va a tomar medidas para desmontarlo, porque es como el brazo parainstitucional no reconocido del Estado y las clases dominantes para hacer las labores sucias que a ellos les quedan más difíciles. M.H.:Días pasados, visitó en La Habana a las FARC una delegación del Centro Democrático, partido de Álvaro Uribe. ¿Cuál es la posición de Uribe respecto de este proceso de paz que se está llevando adelante en La Habana? R.V.C.: Yo creo que para poder darle un manejo amplio a esa pregunta tendríamos que situarnos en un contexto un poco más amplio que el actual. Tendríamos que situarnos en el año 2002, cuando Uribe Vélez gana las elecciones bajo un programa absolutamente militarista y represivo. Incluso dijo que iba a exterminar a las FARC en dos meses, luego amplía los plazos en la medida que la misma situación de la guerra demuestra que eso no es posible. Álvaro Uribe representa la línea más militarista, derechista y más plegada al gobierno estadounidense que se ha vivido en la historia de Colombia. Él siempre apostó a la derrota de la insurgencia por la vía militar, pero eso no se logró, a pesar de la terrible inversión económica, compra de armas, modernización de las Fuerzas Armadas y la militarización de la sociedad colombiana. Entonces, aparece como un perdedor de firmarse un acuerdo que le ponga fin al conflicto armado, porque se demuestra en la práctica que lo que pretendía, que era la derrota de la insurgencia, no se pudo lograr. Él es el principal opositor de los diálogos que se llevan a cabo en La Habana, recurriendo a todo tipo de mentiras y embustes, inclusive diciendo estupideces como que Juan Manuel Santos es un representante del castro-chavismo en Colombia. O diciendo que el gobierno de Santos ha hecho una entrega del país en todos los terrenos, cosa que no tiene el más mínimo elemento 295 real. Lo que pasa es que se siente sumamente frustrado y representantedeun sector de las clases dominantes, al cual ni siquiera hoy Estados Unidos respalda. Su momento pasó, ahora estamos hablando de un bloque de poder contrainsurgente remozado con la hegemonía del capital financiero y no de los terratenientes y ganaderos que representaba Uribe, que ven la necesidad de que se termine rápido el conflicto para tener abierto el territorio colombiano para las inversiones de las multinacionales. A ese mismo proyecto apuntan las dos vías, la de Uribe y la de Santos, lo que pasa es que la vía uribista significaría la continuidad de una tierra arrasada en una guerra prolongada que puede durar otras 4 o 5 décadas. Con un agravante que no lee Uribe Vélez, probablemente por su carácter derechista y reaccionario, que en este momento hay una crisis de la economía colombiana que se puede prolongar durante mucho tiempo, que puede significar que necesariamente se tenga que invertir cada vez menos en la guerra. El santismo ha comprendido esa situación y considera que es el mejor momento para ponerle fin al conflicto armado. El uribismo logró mantener la guerra durante 8 años porque estábamos en un ciclo ascendente de la economía colombiana, con el aumento de precios de las materias primas, el aumento de las exportaciones de petróleo, carbón y otros minerales permitieron direccionar dinero hacia el aparato de guerra.Hoy ese contexto económico está cambiando. M.H.: Ha quedado por fuera de los acuerdos de paz, el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el pasado 8 de febrero, el Presidente Santos ordenó intensificar operaciones en su contra, tras un ataque de una brigada militar. Y el día posterior se conoció un mensaje difundido por el Obispo de Cali, Darío de Jesús Monsalve, a través del cual el jefe del ELN ofreció abrir una tregua bilateral para iniciar un diálogo de paz. ¿Qué nos podés comentar al respecto? R.V.C.: Evidentemente si se llega a un acuerdo en el cual solamente firmen las FARC y el Estado colombiano, va a ser muy limitado desde el terreno estrictamente militar, de la guerra propiamente dicha, porque para que la guerra interna termine en Colombia es necesario que todas las partes de la insurgencia participen, incluyendo al ELN. Lo que sucede es que por múltiples razones, el Estado ha demorado el comienzo de diálogos de verdad y ha estado solamente en la agenda exploratoria con un objetivo básico y clásico “divide y vencerás”, se trata de dividir al movimiento insurgente y en la medida que pase más el tiempo las condiciones de negociación del ELN van a ser mas difíciles. En la medida en que se acerque la firma o se firme un acuerdo en La Habana, las negociaciones van a ser más complicadas para el ELN, porque es difícil pensar que el Estado va a abrir una mesa paralela en la cual va a llegar a los mismos acuerdos que con las FARC, es decir, llegar a un acuerdo paralelo de justicia transicional con el ELN que no sea parecido al que firme con las FARC. Es difícil pensar eso. Es difícil pensar que vaya a nombrar una comisión especial para el ELN. El régimen santista siempre fue claro en dialogar en medio de la guerra, lo ha hecho con las FARC y veo muy difícil que acepte la propuesta de una tregua bilateral, porque el incremento de las acciones militares tiene como objetivo debilitar las condiciones de negociación. 296 Entonces el incremento de la fuerza destinada a reprimir al ELN tiene el objetivo de que los términos del diálogo sean más favorables al régimen y al gobierno. Camilo Torres tiene mucho que decirles a los colombianos de hoy, aunque muchos de ellos no lo conozcan ni sepan quién fue M.H.: Se cumplen 50 años de la caída en combate de Camilo Torres Restrepo, el cura que había nacido 37 años antes, un 3 de febrero, en el seno de una familia distinguida de Bogotá. Camilo Torres era sociólogo, sacerdote, político, cursó sus estudios en la Universidad de Lovaina donde tuvo la oportunidad de conocer a los curas obreros franceses que inspiraron el Concilio Vaticano II y la Doctrina Social de la Iglesia. De regreso a Colombia conoce a Rolando Fals Borda y juntos fundan el Departamento de Sociología en la Universidad Nacional. En el Ministerio de Educación impulsa el Movimiento de acción comunal que buscaba promover la autogestión y organización comunitaria y en el INCORA impulsó la reforma agraria. ¿Qué significado tiene en la actualidad, a 50 años de su caída en combate, la figura de Camilo Torres? R.V.C.: Camilo Torres es un personaje que ha trascendido las fronteras colombianas. Se podría decir que es patrimonio del movimiento revolucionario y anticapitalista del mundo. En el momento en que muere en combate, hace 50 años, él se anticipa a muchas cosas de su época, vive en los turbulentos años ´60 que tanto transformaron al mundo y que en Colombia también tienen incidencia. Se anticipa a la Teología de la liberación, al diálogo entre marxistas y cristianos, a empuñar las armas como una decisión ejemplar para demostrar cómo se combatía al capitalismo. Estos son hechos muy importantes, además de toda la agitación social que realiza, porque la decisión que toma de empuñar las armas es casi obligada, es resultado de la persecución a la que se ve sometido cuando se convierte en un agitador muy importante en el año ´65. Moviliza masas en todos los lugares a los que va en Colombia y esto empieza a ser visto con preocupación por las clases dominantes y el Estado que lo empiezan a acosar e incluso a amenazar. Pero también es perseguido por las jerarquías católicas de Colombia que son profundamente retrógradas y en los años ´60 eran uno de los puntales de la dominación. Cuando muere, demuestra en la práctica lo que él llamaba “amor eficaz”, término que inventó para hacer referencia al compromiso verdadero de un cristiano. Camilo decía que un cristiano no era discursivo ni retórico, sino que era real, participando en las luchas de los pobres, construyendo la solución de sus problemas, señalando las causas de las desigualdades. Entonces, Camilo Torres tiene una agenda muy radical para la década de los ´60 que lo lleva a tomar la decisión que tomó. Además, es el primer sacerdote que muere en América Latina empuñando las armas y participando en el movimiento guerrillero. De ahí en adelante Camilo se convierte en un símbolo que guía y alimenta luchas populares en Colombia en distintos órdenes y en un referente para el resto del mundo. 297 Cincuenta años después lo que habría que examinar es el legado y la vigencia del mensaje teórico y práctico de Camilo Torres, cuánto ha cambiado Colombia. Me atrevería a decir que prácticamente nada, hoy la sociedad colombiana en términos estructurales, de desigualdad, injusticia, de polarización entre pobres y ricos, vive en las mismas condiciones que conoció Camilo a mediados de la década del ´60. Tenemos una desigualdad marcada, tenemos el poder de los grandes medios de comunicación que calumniaron y desprestigiaron a Camilo Torres, tenemos las fuerzas represivas del Estado, la organización de grupos paramilitares. Todo eso ya se empezaba a vivir en la época de Camilo Torres. La intolerancia que caracteriza a la sociedad colombiana y a sus clases dominantes, la intolerancia religiosa, todas esas cosas siguen presentes en la sociedad colombiana de hoy, por lo cual podemos decir que el mensaje de Camilo Torres es muy actual, tiene mucho que decirles a los colombianos de hoy, aunque muchos de ellos no lo conozcan ni sepan quién fue Camilo Torres Restrepo. M.H.: Al respecto un tema específico, ¿qué fue el Frente Unido del Pueblo vinculado a la labor política y teórica de Camilo Torres? R.V.C.:El Frente Unido del Pueblo fue una propuesta muy importante y muy original de Camilo Torres. Como dijo usted al principio, Camilo venía de una familia burguesa, estudió en colegios aristocráticos, fue seminarista y luego sacerdote, en una formación ideológica, política y cultural bastante conservadora. Pero Camilo tenía una increíble sensibilidad social y eso lo llevó casi por sus propios medios a relacionarse con otros sectores, y a comprender en la década del ´60 el carácter injusto y antidemocrático del capitalismo existente en Colombia. A raíz de eso se dio cuenta de que era necesario aglutinar a las fuerzas afectadas por ese capitalismo y esa estructura desigual de la sociedad colombiana y eso lo llevó a proponer la creación del Frente Unido del Pueblo. Con una plataforma mínima pero muy importante, donde decía que debían participar todos los sectores sociales para crear un frente de unidad que enfrentara al boque de poder, al Frente Nacional, como se llamaba a la estructura dominante de Colombia de ese momento donde liberales y conservadores se turnaban en el manejo de la política. En 1965 hace la propuesta, funda un periódico que lleva ese nombre “Frente Unido del Pueblo” y publica varios números. Genera una movilización sin precedentes en la sociedad colombiana, que solo se puede comparar con lo sucedido en la década del ´40 con Jorge Eliecer Gaitán. Y esto asusta realmente a las clases dominantes de este país, que un sacerdote pudiera tener ese carisma, llegar tan directamente a importantes sectores de la población. Camilo le habla a todos los sectores sociales, les da un mensaje a los estudiantes, a los comunistas, incluso a las Fuerzas Armadas, a distintos sectores sociales, con la perspectiva de armar un frente unido donde se incorporaran todos los sectores sociales golpeados por el Frente Nacional. Ese proyecto de unidad se dirige principalmente a las izquierdas de esa época y debería ser recogido por las izquierdas de nuestro tiempo, rompiendo con sectarismos para llegar a acuerdos sobre aspectos fundamentales, más allá de diferencias tácticas o coyunturales. Esta es una oportunidad histórica 298 M.H.: El pasado viernes 21 de enero hubo un encuentro aquí en Bogotá de representantes del Polo Democrático, la Unión Patriótica, el Partido Alianza Verde y progresistas, entre otros, que se reunieron con la idea de construir un frente común de cara a la coyuntura y a las próximas elecciones. ¿Qué opinión te merece este encuentro? R.V.C.: Con independencia de las apreciaciones que algún sector político pueda tener sobre la eventual firma de un acuerdo que le ponga fin al conflicto armado entre el Estado y las FARC, hay que decir que esta es una oportunidad histórica, no es algo que se presente todos los días y crea nuevas condiciones de lucha política, potencia la acción política alternativa. Pero para que esa potencia se convierta en realidad, es necesario que los sujetos sociales que representan voces alternativas o disidentes, se organicen y aprovechen esa coyuntura. Me parece una oportunidad para que las izquierdas de Colombia dejen de lado muchas diferencias, que suelen ser puramente electorales y ponerse a pensar en la construcción de un programa más de fondo, más sustancial en estas nuevas condiciones. Uno desearía ser optimista, que las izquierdas históricas existentes aprovecharan esta coyuntura, pero eventos recientes me hacen dudar por las rencillas que se repiten en la mayoría de los casos, son terriblemente limitadas porque son principalmente de tipo electoral. No creo que en una coyuntura como la que se está presentando y las nuevas condiciones que genera, simplemente tengan como objetivo fundamental lo electoral. No digo que lo electoral no pueda ser un instrumento, pero estamos pensando en construir un bloque de poder alternativo que va más allá, que requiere volver a pensar en las reivindicaciones de distintos sectores, volver a pensar en el sindicalismo, en el movimiento campesino, en las luchas de los estudiantes. Que la o las izquierdas tengan mucho que decir frente a eso y participen en esas luchas, porque lo que ha sucedido en Colombia durante los últimos años es una terrible disociación entre lo social y lo político. M.H.: El pasado 2 de febrero se reunieron 46 organizaciones sociales para plantear la iniciativa de un paro nacional, criticando la próxima reforma tributaria y a las privatizaciones, principalmente centrándose en el acueducto de Bogotá, en la situación de la industria petroquímica y en el sector educativo de la capital del país. ¿Es posible que esta iniciativa se concrete en lo inmediato? R.V.C.: Hay condiciones muy favorables para la lucha social en estos momentos en Colombia. Precisamente como decía antes, está cambiando el ritmo de la economía colombiana, en términos macroeconómicos formales, la economía colombiana tuvo muchas divisas provenientes principalmente de su modelo minero exportador. Dado el cambio mundial, por la caída de los precios de esas materias primas, tenemos una situación contraria a lo que hay que agregarle que el gobierno de Santos que tanto habla de paz, en la vida real es una continuación y una radicalización del modelo neoliberal que en Colombia ya lleva un cuarto de siglo. Esto se da en todos los terrenos, por ejemplo, respecto a las privatizaciones, las del gobierno de Santos son la continuación de lo que ha sucedido en estos últimos años, y la privatización de una empresa como Isagén se inició durante el gobierno de Uribe, no se pudo completar y se culmina durante el de Santos. 299 Esto sucede en todos los frentes, la neoliberalización de la educación es otro ejemplo, el gobierno de Santos impulsa proyectos que favorecen la educación privada, por ejemplo, de la educación superior universitaria. Hay un proyecto que se llama “Ser pilo paga” que significa la transferencia de recursos del Estado a las universidades privadas en lugar de darle ese dinero a las públicas. Son millones de pesos que serán transferidos a las universidades privadas del país. Con respecto a las tierras se acaba de firmar un decreto para las llamadas “zonas agroindustriales” para favorecer al capital agrario de las multinacionales y del capital financiero nacional, en contra de los campesinos, pese a que uno de los elementos centrales de cualquier proceso de paz en Colombia es el de la reforma agraria. Están creadas todas las condiciones objetivas para una movilización, pero también se necesita pensar en las condiciones subjetivas, en los niveles de organización y de movilización de los sectores populares. Y si se llegase a cuajar algo en ese sentido, podría pensarse en la posibilidad de un paro, porque todos los elementos están, desde el punto de vista de la situación económica y social. M.H.: Inclusive un dato estadístico señala que la movilización de los trabajadores colombianos en la actualidad es cuatro veces mayor que hace diez años. Al mismo tiempo esto se vincula a que en días recientes hubo una represión contra trabajadores judiciales en el centro de Bogotá y con otras estadísticas que señalan que desde 1997 se han producido casi 14.000 violaciones a la vida, a la libertad, a la integridad contra sindicalistas y de esas violaciones, 3.089 son homicidios. Al menos esto es lo que se señaló en el Encuentro contra la criminalización de la protesta sindical y social que se realizó en noviembre del año pasado aquí en Bogotá. A lo que se agrega una guerra jurídica en el sentido de la declaración de ilegalidad de las huelgas, de las 1.623 protestas registradas desde 2010 el 41,5%, o sea, 675 han sido entorpecidas por medidas judiciales que las han declarado ilegales. Dicho esto, ¿cuál es la situación actual que atraviesa el movimiento sindical y obrero en Colombia? R.V.C.: Ese movimiento es víctima, como ningún otro, de la represión y el asesinato. Nosotros tenemos el dudoso mérito de ser el primer país del mundo en asesinato a dirigentes sindicales. La cifra que usted señala es producto de investigaciones ligadas a los trabajadores, y es una realidad cotidiana que nosotros vivimos. Ser aquí dirigente sindical es un peligro público para la persona que ejerce esa actividad y se ha convertido casi en sentido común el asesinato de dirigentes sindicales. El modo de ver esto es esa contrainsurgencia de la que hablaba al principio de esta entrevista, y es que no se permite ni se tolera ninguna reivindicación social, cualquiera sea la reivindicación y por limitada que fuese, inmediatamente es calificada como producto de acciones terroristas y desestabilizadoras, incluso hay todo un lenguaje codificado que se utiliza para calificar a todo este tipo de protestas. Eso en el gobierno de Santos, a pesar de que tanto se habla de paz, no ha cambiado. Tal vez uno de los momentos represivos que más se dio a conocer a nivel internacional fue lo que sucedió en el año 2013, cuando fue brutalmente reprimido el Paro nacional agrario, que incluso Santos llegó a decir en una afirmación cantinflesca que no había paro mientras el país estaba paralizado casi como en ningún otro momento. Aquí hay una política contrainsurgente, de rechazo a la protesta social, de rechazo a los trabajadores y desde el Estado se da desde varios frentes, por un lado, la represión directa y brutal que siempre deja heridos, muertos y 300 personas detenidas; pero también hay una persecución jurídica que consiste en colocarle trabas legales a la protesta. Prohibir la protesta en los servicios públicos, siendo éstos aquello que se considera vital sin importar la propiedad, entonces un periódico como El Tiempo o un canal de televisión como Caracol, son considerados servicios públicos, por lo tanto, en ellos no podrían haber huelgas, si existieran trabajadores organizados y sindicatos, porque sería calificado por los jueces como una actividad ilegal. Es bueno para que sea estudiado por sindicatos y abogados laborales en otros países, cómo ha evolucionado de manera negativa la legislación laboral en Colombia. Desde 1918 cuando se presentó una primera oleada de huelgas el Estado colombiano emite los primeros decretos en su contra, y ahí ya aparece la idea del servicio público que en ese momento estaba restringido a los lugares donde se estaban dando huelgas, que eran los puertos, los ferrocarriles, las empresas de transportes. Pero desde ese año hasta el día de hoy, esa idea de servicio público se ha ido generalizando y cubre prácticamente todos los sectores de la actividad económica del país. En la realidad es imposible hacer huelga porque todo es considerado servicio público, así sea de propiedad privada, como sucede con empresas petroleras porque el petróleo es considerado un servicio público esencial. Si ese negocio lo usufructúa una multinacional y los trabajadores hacen paro, lo más seguro es que de manera inmediata se declare prohibida por ser servicio público. Otro elemento que conspira contra la organización y que hace más difícil a lucha en Colombia es la paramilitarización, no es solamente la represión por parte del Estado, sino las amenazas, el acecho, el acoso y también las acciones criminales por parte de sectores organizados por las empresas, por los terratenientes y comerciantes para impedir la organización de obreros, campesinos y trabajadores. Es tristemente célebre la intervención de empresas como Coca Cola, Nestlé y otras multinacionales directamente responsables en el asesinato de dirigentes sindicales, ellos han financiado y organizado grupos paramilitares para que maten a los trabajadores. Todo este es un contexto que debe transformarse a la hora de hablar del fin del conflicto armado en Colombia, porque la lucha social debe desenvolverse por muchas causas en donde se rompa con esa lógica represiva del Estado colombiano de prohibir la movilización, aunque formalmente en la ley exista su autorización y se diga que este es un país democrático en el que se respeta la libertad de pensamiento y de organización. M.H.: Al respecto estaba consignando el caso de Húbert de Jesús Ballesteros Gómez, que en agosto de 2013 integraba la comisión de negociación del Paro nacional agrario y popular, la movilización agraria más importante que se ha dado en los últimos 30 años en Colombia y luego fue detenido. R.V.C.: Detenido y está condenado a 15 años de cárcel. Estamos llegando al fin de un ciclo de ficticia prosperidad para la clase media M.H.: Hiciste referencia en dos oportunidades a la situación económica del país. Hay algunos datos preocupantes, la caída del precio del petróleo ha afectado fuertemente la caída del 301 presupuesto fiscal, 5.45 billones de pesos de los cuales el presupuesto en regiones bajará en 3.4 billones, lo que representa un 30.8% del presupuesto asignado. Otro dato es el descenso de las ventas externas durante 2015 que se ha conocido por estos días, casi un 35%. Frente a lo cual el gobierno prepara una reforma tributaria, entre otros aspectos que han trascendido de esta reforma, se habla del aumento del IVA, e inclusive dentro de esta visita que se hizo a Estados Unidos, donde se reunieron los Presidentes Obama y Santos también hubo reuniones con funcionarios económicos por parte de las principales calificadoras de riesgo, que amenazan con bajar la nota crediticia de Colombia en la medida que el gobierno no equilibre las cuentas fiscales. Este fue el mensaje que dejaron claro en Washington, al Ministro de Hacienda Mauricio Cárdenas Santa María, las calificadoras de riesgo. ¿Qué podés agregar a estos elementos que tienen que ver con la situación económica que atraviesa Colombia? R.V.C.: Me parece que esa es una exposición bastante completa de los indicadores. Lo que puedo agregar es que esta situación coyuntural es el resultado de una decisión de mediano y largo plazo que se tomó hace ya 25 a 30 años y que significó desindustrializar al país y optar por convertirlo en un país exportador de materias primas. En términos estructurales de largo plazo, creo que esa es la explicación básica para entender lo que está pasando en el momento actual. Aquí, como ha sucedido en varios países de América Latina, incluso en países con distintos regímenes políticos, se consolidó la venta de materias primas, en nuestro caso principalmente mineras. La balanza comercial de Colombia, encuentra que los productos que más generaban y generan ingresos a la economía son el petróleo y el carbón; el café que durante mucho tiempo fue el principal producto, hoy es el tercero o cuarto en esa balanza comercial. Ese crecimiento que se presentó entre 2001 y 2010 se debió a los altos precios de las materias primas. Cuando caen los precios de las materias primas, inmediatamente se ve el efecto negativo que produce que un país dependa del sector exportador más tradicional, el primario. El ejemplo del petróleo es crucial, hoy se cotiza a menos de 25 dólares el barril de petróleo colombiano, mientras que en un momento llegó a cotizarse a 90 dólares, estamos hablando de una caída catastrófica que se va a intensificar en las próximas semanas. Gran parte de lo que se había presupuestado para los años por venir, estaba relacionado con el sostenimiento de esos ingresos con un precio del petróleo elevado, pero no solamente sucede con el petróleo, también con el precio del carbón, del níquel, que han caído internacionalmente. Colombia es el principal exportador de carbón de Latinoamérica, los principales compradores son Estados Unidos y Canadá. Entonces, esto va a afectar a la economía colombiana, pero hay un factor adicional que en el listado que usted señala no se nombra y es el de la devaluación. Resulta que el peso colombiano estuvo revaluado de manera artificial durante casi el mismo período de aparente prosperidad económica que estábamos señalando. Lo que permitió la revaluación del peso colombiano fue que este país se inundara de mercancías y tecnología producida por el capitalismo mundial, lo que incluso permitió darle cierta base social al modelo neoliberal en las ciudades, porque la clase media empezó a tener acceso al automóvil, que era un bien suntuario en otra época, a todo tipo de artefactos electrónicos. Colombia es un país inundado de celulares, es el país de América Latina en el que más celulares hay. Esa mercadería ingresó al país a un relativo bajo precio, un precio artificial que ahora está desapareciendo, entonces ahora todos esos aparatos, automóviles y todo lo que el país 302 compró en el exterior, que es casi todo, porque aquí se compra casi el 90% de los productos agrícolas que se consumen, ahora está llegando encarecido. Hace un año el precio del dólar era de 2.600 pesos, hoy está a 3.400. Es decir que estamos llegando al fin de un ciclo de ficticia prosperidad para la clase media. Esta clase media, además de no poder comprar más por la suba de precios, está terriblemente endeudada. Este es otro elemento de la coyuntura importante de resaltar, no solo por sus implicaciones económicas, sino porque sabemos que tiene implicaciones políticas, sociales y culturales también. Esa clase media que nunca ha sido fuerte en Colombia, pero que tuvo un momento de despegue en los últimos 12 años, ha llegado a un límite; entonces habrá que ver qué sucede con esos sectores cuando ya no tengan cómo pagar la tarjeta de crédito, la cuota del automóvil, la del departamento o no tengan cómo cambiar de celular, etc. Es un impacto que no se ha estudiado con suficiente énfasis, porque pone en discusión el agotamiento de un modelo que había dado algunas migajas a esa clase media. El ser humano nunca renuncia a la lucha y la esperanza sirve para buscar salidas M.H.: En uno de tus últimos trabajos, de diciembre, publicado en Rebelión.org, te referís a una categoría que entiendo es de tu autoría, que es la de “tecno-fascismo”. R.V.C.: Este término lo he venido usando durante los últimos años en distintas publicaciones, muy preocupado por el impacto que la tecnología tiene en el mundo contemporáneo sobre la gente. Me importa analizar a la tecnología no como una fuerza neutra, como generalmente se suele hacer, sino como un componente más de nuevas formas de dominación. A partir de esa preocupación, me llama la atención que diversas clases sociales se hayan rendido acríticamente a la tecnología, incluyendo a grandes sectores de la izquierda mundial, partiendo de una consideración bastante discutible de las fuerzas productivas, hablando en terminología marxista. Y siendo que las fuerzas productivas nos vayan a conducir finalmente a la liberación y a un desarrollo humano teniendo en cuenta nuevas investigaciones y nuevos productos en el ámbito de la tecnología. Sin embargo, viendo la realidad uno se encuentra con que hay sectores profundamente retrógrados en términos políticos que utilizan las tecnologías más desarrolladas para sus proyectos. Y en ese sentido es que refuerzo la idea del tecno-fascismo, que supone pensar a ese sector no solo como completamente retrógrado, conservador y reaccionario, que lo es, sin estar desligado del uso de las tecnologías más modernas y sofisticadas, incluso como nuevas formas de control. Sería importante volver a estudiar el mismo nazismo, porque cuando se lo estudia hay una tendencia que dice que era lo más opuesto a la ciencia y a la modernidad, pero investigaciones contemporáneas muy serias han demostrado que el nazismo ha sido la variante más radical de la modernización capitalista, incluso en el ámbito tecnológico, a punto de que la tecnología se aplicó a la muerte de millones de personas en los campos de concentración, por ejemplo, el trabajo allí era la muerte industrial, la muerte programada. Los hornos crematorios usados para matar personas estaban programados industrialmente. El mismo fascismo supuso una 303 particular utilización de la tecnología, por eso pensadores como Benjamin y su crítica al fascismo, a la socialdemocracia y a distintos sectores de la izquierda de la época que decían que había que romper con ese culto acrítico a las fuerzas productivas, que había que ver a la tecnología como un elemento contradictorio de lucha y de combate. A mí me llama hoy la atención cómo la tecnología es un dispositivo de control absoluto de la población y vigilancia las 24 horas por medio de distintos mecanismos. Las ciudades están llenas de cámaras de video que registran todos los movimientos de las personas, en el transporte público pasa lo mismo, el teléfono celular es un elemento de control. Así sucesivamente podríamos enumerar muchos ejemplos y por eso digo que la izquierda debe repensar la tecnología. M.H.: ¿Hay lugar para la esperanza? R.V.C.: Digamos que por supuesto, yo creo que el ser humano nunca renuncia a la lucha y creo que eso es lo que nos diferencia de los demás animales, a pesar de tener nuestra parte de animalidad. La búsqueda de nuevos caminos y soluciones a los problemas tiene que seguir siendo parte del horizonte humano. Recuerdo lo que decía Eduardo Galeano cuando le preguntaban para qué servía la utopía y decía que servía para caminar. Me parece que lo mismo podemos decir de la esperanza, el principio del que tanto hablaba el filósofo Ernst Bloch es que la esperanza, a pesar de las condiciones duras en las que nos encontremos, sirve para buscar salidas. Lo que pasa es que a uno le toca el papel más difícil, que es el de mostrar los problemas, esa es una característica fundamental del pensamiento crítico, pero también bosqueja y postula salidas a pesar de las dificultades. M.H.: ¿Algo para agregar? R.V.C.: Simplemente saludar a los medios con los que usted trabaja y a los lectores y oyentes que lo siguen. Porque me parece muy importante la labor que realiza. Si hay algo que necesitamos hoy es abrir nuevos espacios de pensamiento y de crítica ante el monopolio abrumador que tienen los medios de comunicación mundial y a escala nacional. Este también es un problema que estamos afrontando y vamos a afrontar en Colombia en el futuro inmediato, porque uno de los grandes responsables de la guerra y la tragedia que los colombianos hemos vivido en las últimas décadas, son los grandes monopolios de la información. Ellos se oponen al proceso de paz, viven una diabolización permanente de las voces disidentes, que necesitan poder expresarse si queremos construir un país decente, donde podamos hablar y se nos permita pensar distinto. En esa labor los medios de comunicación alternativos son fundamentales, por eso creo que el papel que usted realiza Mario, en Buenos Aires y en Argentina, tiene mucho valor. 304 AGENDA SETTING: Legitimación y gestión. Dos elementos para evaluar la comunicación política por Mario Riorda http://www.voces.com.uy/articulos1/agendasettinglegitimacionygestiondoselementosparaevaluarlacomunicacionpoliticapormari oriorda Hay por lo menos dos tipos de comunicaciones que, en la región (y quizás en buena parte del mundo occidental), aparecen simultáneamente en el marco de la política, especialmente para los gobiernos. Pero no siempre se las visualiza, analiza o implementa unidas. Una más clásica, tradicional, pero que ha tomado formas y dimensiones inusitadas; y otra novedosa, atravesada y conmovida por los desafíos de lo digital. Una visión legitimante de la política El mito de gobierno es la comunicación de tipo simbólica que tiene la función de generar esperanza y que, una vez instalada, puede alimentarse a sí misma siempre y cuando exista coherencia entre la narrativa esbozada y las políticas públicas implementadas. Relato, a secas, es el nombre vulgar con el que se lo conoce. Viene a representar el ejercicio coherente de lo propuesto discursivamente como contrato de gestión en la faz electoral y la actualización de lo mejorable o aggiornable de ese contrato, una vez que se es gobierno. Y no es menor su tarea. Hace varias décadas ya, David Easton pregonaba que lo que permite un sistema político exitoso, es aquello que resulta de dar cumplimiento a dos funciones: la tarea de asignar valores en una sociedad dada; y el intento de conseguir que la mayoría de dicha sociedad acepte esa asignación valorativa la mayor cantidad del tiempo posible. Y encima esos valores que toman forma de relato, se dan entre dos contrastes muy marcados y una serie de grises (o versiones menos espectaculares) entre ambos extremos que representan ideologías y estilos de la representación política. El contraste entre lo refundacional: una relativa independencia para “el pueblo” todos- en desmedro del país para “ellos” -los pocos-. Vigente en algunos países, ha venido cayendo como un efecto dominó en varias elecciones en estos dos años. Frente a la idea restauradora de un país normal, el que crece y le va mejor ocupando un rol en el mundo. Mientras mejor nos vean de afuera, mejor estaremos los de adentro y con más desarrollo. Depende de las inversiones. Daría la sensación que es el modelo en boga en estos días, pero su eficacia no ha podido ser comprobada, ni en los países que hace tiempo están en este modelo, ni en el interrogante que por ahora representa Argentina. El primer modelo incluye, el segundo modelo hace crecer. En el primer modelo la institucionalidad sirve siempre que no frene ni complique el empoderamiento ciudadano. La igualdad es la guía. En el segundo modelo la institucionalidad lo es todo, porque ella es el faro de la libertad. Y en ese marco juegan los ciudadanos también, y en el medio, los medios “median” para un lado y para el otro. Y, aunque no se lo aprecie, los ciudadanos no fluctúan de un día para el otro. Tampoco las ideologías encarnadas en líderes que no aparecen tan claras en una versión dicotómica del siglo XX pero son constitutivas del pensamiento de aquellos. Entre estos dos contrastes sucede la política, y por ende, la política comunicacional de América Latina. Una visión de gestión de la comunicación 305 Pero hay otro abordaje a gran escala desde la comunicación, en donde los gobiernos envejecen. Algunas tendencias -que además mutan aceleradamente y probablemente queden viejas mañana-: respecto al tiempo promedio que un usuario de servicios está dispuesto a esperar para obtener una respuesta en redes sociales, más del 70% afirma que no debiera superar los 15 minutos según muestra en redes. Y sólo el 7% aceptaría entre una hora y 3 horas. Los usuarios de smartphones ya superan holgadamente en 200 veces la cantidad de chequeos que hacen diariamente a su celular. Y encima la población digitalizada, a medida que baja de edad, deja de usar los correos como modo de interacción y son las redes -incluso públicas o grupales- el ámbito de diálogo. ¿Y qué hacen los gobiernos frente a esta realidad? Publicitan. Del mismo modo que lo harían por TV. Y gastan. Mucho. Y hablan. Mucho. Pero dialogan poco, responden poco, gestionan poco -como interacción de políticas o servicios públicos-. Y gran parte de la publicidad tiene que ver con mantener la comunicación legitimante por encima de la gestión de políticas propiamente dichas. Hay una excesiva inversión en pauta publicitaria, en tecnologías, pero a los gobiernos les cuesta entender a las redes como medios de gestión. Les cuesta entender que los ciudadanos acuden a las redes para ser atendidos como si fuera una gran mesa de entrada en un edificio público. Más del 87% de los ciudadanos recurrió a internet para plantear dudas o quejas en algún momento según Lithium. ¿Por qué no lo haría con un gobierno?. Por ende, frente a las redes, el modelo de gestión atrasa, envejece. No obstante, el modelo de representación que los gobiernos proponen no ha cambiado tanto. En las cuentas personales de los gobernantes, el híper-personalismo es extremo, como si fueran nuevos celebrities sin intercambio ni horizontalidad. Y en la cuentas -llamadas institucionales- de gobierno, hay publicidad y en el mejor de los casos información, no interacción. Aparece un ecosistema de nuevas posibilidades y ello exige más convergencia, pero no se destrona el reinado de Twitter, Facebook y You Tube. No se muestran avances hacia instancias de gobierno abierto y transparencia colaborativa. En el estudio Gobernauta del BID, en promedio, los gobiernos sólo dedican el 1% de acciones focalizadas en la agenda de participación, transparencia o gobierno abierto. No se propicia desde ellos nuevas acciones de fiscalización y rendición de cuentas ciudadanas, vale decir, mejorar las chances de ser monitoreado, escrutado. No se avanza hacia acciones de microsegmentación, es decir, cuando cada acto comunicacional es “uno a uno” en la relación gobierno/ciudadano, pero más que ello, cuando cada comunicación es también un servicio. ¿A que equivale esto? A comunicar más que publicitar. No se alientan instancias colaborativas participativas sobre políticas públicas bajo la premisa de escuchar y ser condicionado por esa escucha. Sólo el 2,2% de los tuits de los alcaldes de ciudades de más de un millón de habitantes en América latina están dedicados a algo tan básico como preguntar algo. Vale decir, cuentan con modestos signos de interrogación sobre alguna temática. Síntesis: nuevos rockstars, estéticamente controlados, publicitados las 24 horas y casi nula interacción. De gestión y hacer la vida un poco más fácil a los ciudadanos, ni hablar. La legitimidad, siempre un poco más lejos y todavía permanece en una visión estática y dicotómica donde no tiene por qué haber verdades últimas. La legitimidad y los consensos también se gestionan en el sentido más literal del término, y las redes pueden colaborar en ese cometido. pero mientras se avanza en la gestión, casi a un 306 nivel estratosférico, todo el día todo los días hay una batalla por la significación, por el rumbo de un gobierno, por el modelo que se da en las palabras, que se da en los estilos, que se representa en las ideologías de las políticas, pero donde las redes siguen publicitando, más que hacerle la vida más fácil a los ciudadanos. Todavía el pensamiento político y los gobiernos (de un lado y del otro en las posturas legitimantes), cargan con una herencia del siglo pasado en donde, desde la comunicación, sobra la retórica, pero falta más adaptación para la gestión. 307