Dictamen de la Procuración General:

Anuncio
Dictamen de la Procuración General:
El Tribunal del Trabajo Nº 5
de
Morón
acogió
la
demanda
incoada
por
G.
A.P.
,
por
derecho propio y en representación de sus hijas menores de
edad,
F.
S.
y
M.
A.T.
,
contra
LIBERTY
A.R.T.
S.A.,
condenando a ésta a pagar a los accionantes los montos que
indica en concepto de indemnización por el fallecimiento de
J.
D.
T.
-cónyuge
y
padre
respectivamente
de
los
legitimados activos-, resultante del accidente in itinere
que se juzgó acreditado en el fallo.
El
capital
de
condena
dispuesto por el a quo fue actualizado, desde el 26/III/04
-fecha en que se produjo el deceso del causante- hasta el
efectivo
pago,
mediante
la
utilización
del
índice
de
precios al consumidor suministrado por el INDEC, para cuyo
cometido,
previamente,
se
hizo
lugar
planteo
de
inconstitucionalidad de los arts. 7 y 10 de la ley 23.928
modificada por la ley 25.561 introducido oportunamente por
los accionantes (v. fs. 142/156 vta.).
Contra dicho modo de resolver
se
alzó
la
demandada
vencida
mediante
recurso
extraordinario de inaplicabilidad de ley (v. fs. 166/174
vta.), que recibo en vista en fs. 214.
Sostiene
protesta
que
mediante
la
el
actualización
apelante
del
en
su
capital
de
condena operado en el fallo en embate, conforme los índices
de precios al consumidor suministrados por el INDEC, el
tribunal de grado violó la doctrina legal elaborada por esa
Suprema Corte en torno a los arts. 7 y 10 de la ley 23.928
y 4 de la ley 25.561.
Alega,
asimismo,
que
sin
perjuicio que el a quo dejó establecido que el monto de
condena devengaría un interés conforme la tasa pasiva que
publica
el
Banco
de
la
Provincia
de
Buenos
Aires,
la
sentencia impugnada adiciona a ese interés moratorio la
repotenciación del capital, con ajuste a las pautas dadas
por el mentado índice de precios, en decisión que entiende
violatoria de la doctrina legal elaborada por V.E. en los
precedentes
que
cita,
relativa
a
la
tasa
de
interés
aplicable al capital de condena.
En mi opinión, el recurso es
parcialmente de recibo.
En efecto, le asiste razón al
quejoso en cuanto se agravia de la actualización monetaria
del crédito emergente de la sentencia en embate, pues, aún
frente a los enjundiosos fundamentos dados por el Tribunal
del Trabajo para decretar la inconstitucionalidad de los
arts. 7 y 10 de la ley 23.928 en la especie, lo cierto es
que
dicha
resolución
se
aparta
nítidamente
de
lo
establecido por ese Alto Tribunal sobre el tópico en los
precedentes B. 49.193 bis, sent. del 2/X/02; Ac. 86.304,
sent. del 27/X/04; Ac. 88.502, sent. del 31/VIII/05 y L.
86.189, sent. del 29/VIII/07, entre otras.
En
efecto,
en
el
primero
de
los
precedentes
reseñados -caso "Fabiano"- reiterándolo posteriormente en
los que también fueran citados -casos "Alba", ”Latessa” y
“Correa”-
ese
Tribunal
constitucional
de
las
se
ha
normas
expedido
sobre
implicadas
en
la
validez
el
planteo
impugnatorio deducido por la accionante y favorablemente
resuelto por el a quo, habiendo señalado en conclusiones
que
me
permito
aquí
reproducir,
que
"…La
modificación
introducida por la ley 25.561 a la ley 23.928 mantuvo la
redacción del artículo 7° de ésta, en el que sólo cambió el
término
"australes"
por
"pesos",
estableciendo
que
el
deudor de una obligación de dar una suma determinada de
pesos cumple su obligación dando el día de su vencimiento
la cantidad nominalmente expresada y que en ningún caso se
admitirá actualización monetaria, indexación por precios,
variación de costos o repotenciación de deudas, cualquiera
fuere su causa y, además ratificó la derogación dispuesta
por su artículo 10, con efecto a partir del 1° de abril de
1991,
de
todas
establecen
o
las
normas
autoricen
legales
la
o
reglamentarias
indexación
por
que
precios,
actualización monetaria, variación de costos o cualquier
otra
forma
de
repotenciación
de
las
deudas,
impuestos,
precios o tarifas de los bienes, obras o servicios". Y a
renglón seguido añadió que "…Aún cuando es de público y
notorio que se ha producido una acentuada depreciación de
nuestra moneda, entiende este Tribunal que el acogimiento
de
una
pretensión
como
la
expuesta
por
el
accionante,
además de ser contraria a las normas referenciadas en el
párrafo
anterior
que
justamente
fueron
dictadas
con
la
finalidad de evitar el envilecimiento del signo monetario
no haría más que contribuir a ese proceso…".
Siendo ello así, resulta fácil advertir que al
menos
en
esta
parcela
la
impugnación
extraordinaria
deducida debiera abrirse camino favorable, al violentarse a
través del decisorio impugnado -en la parcela que admite la
actualización monetaria del capital de condena- la doctrina
legal referenciada anteriormente.
Distinta suerte debe correr el restante agravio.
Es
que
no
advierto
configurada
en
el
resolutorio
en
crítica la violación de la doctrina legal atingente a la
tasa de interés aplicable, pues -como el propio apelante
reconoce- el a quo resolvió el tópico con ajuste a la
misma; esto es, adicionando al capital de condena desde la
fecha
de
mora
y
hasta
el
efectivo
pago
los
intereses
calculados a la tasa que aplica el Banco de la Provincia de
Buenos Aires para sus operaciones de depósitos
días (conf. S.C.B.A., causas
a treinta
L.79.649, sent. del 14/IV/04;
Ac.88.502,
7/IX/05,
sent.
entre
del
tantas
31/VIII/05;
L.80.710,
otras),
que
sin
se
sent.
demuestre
del
la
efectiva existencia de agravio al respecto.
Por
las
razones
brevemente
expuestas y con el alcance indicado, aconsejo a V.E. el
acogimiento
parcial
del
recurso
extraordinario
de
inaplicabilidad de ley que dejo examinado.
Así lo dictamino.
La
Plata,
22
de
octubre
de
2007 -Juan Angel De Oliveira
A C U E R D O
En la ciudad de La Plata, a 6 de abril de 2011,
habiéndose establecido, de conformidad con lo dispuesto en
el Acuerdo 2078, que deberá observarse el siguiente orden
de
votación:
doctores
de
Lázzari,
Pettigiani,
Hitters,
Soria, se reúnen los señores jueces de la Suprema Corte de
Justicia
en
acuerdo
ordinario
para
pronunciar
sentencia
definitiva en la causa L. 101.340, "P. , G. A.
contra
Liberty A.R.T. S.A. Accidente".
A N T E C E D E N T E S
El Tribunal del Trabajo nº 5 del Departamento
Judicial Morón hizo lugar a la demanda deducida, imponiendo
las costas del modo que especifica (v. sent., fs. 146/155).
Contra dicho pronunciamiento, la parte demandada
dedujo
recurso
extraordinario
de
inaplicabilidad
de
ley
(fs. 166/174 vta.).
Oído el señor Subprocurador General, dictada la
providencia de autos y hallándose la causa en estado de
pronunciar sentencia, la Suprema Corte decidió plantear y
votar la siguiente
C U E S T I Ó N
¿Es fundado el recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley?
V O T A C I Ó N
A la cuestión planteada, el señor Juez doctor de
Lázzari dijo:
I. El tribunal del trabajo interviniente acogió la
demanda promovida por G. A.P. , por derecho propio y en
representación de sus hijas menores de edad, F. S. y M. A.T. ,
contra Liberty A.R.T. S.A., por la que reclamaba la percepción
-con sustento en la ley 24.557- de las prestaciones derivadas
del fallecimiento de J. D. T. -cónyuge y padre respectivamente
de los legitimados activos- como consecuencia del accidente in
itinere que se juzgó acreditado en el fallo.
El capital de condena dispuesto por el tribunal
de grado ($ 82.729) fue actualizado, desde el 26-III-2004
-fecha en que se produjo el deceso del causante- hasta el
efectivo
pago,
mediante
la
utilización
del
índice
de
precios al consumidor suministrado por el I.N.D.E.C., para
cuyo
cometido,
previamente
se
hizo
lugar
al
planteo
de
inconstitucionalidad de los arts. 7 y 10 de la ley 23.928
modificada por la ley 25.561 introducido oportunamente por
los accionantes (v. fs. 142/156 vta.).
II.
extraordinario
La
de
parte
demandada
inaplicabilidad
interpuso
de
ley,
recurso
denunciando
la
violación de la doctrina legal de esta Corte, que cita.
1.
En
primer
término,
aduce
el
quejoso
en
su
libelo recursivo que, mediante la actualización del capital
de condena (consistente en la suma de $ 82.729, cifra a la
que se arribó a partir de la sumatoria de las prestaciones
dinerarias previstas por los arts. 15 inc. 2 y 4 inc. "c"
-prestación adicional de pago único- de la ley 24.557),
conforme los índices de precios al consumidor suministrados
por el I.N.D.E.C., el tribunal de grado violó la doctrina
legal elaborada por esta Suprema Corte en torno a los arts.
7 y 10 de la ley 23.928 y 4 de la ley 25.561 (v. recurso,
fs. 170/172 vta.).
2. Sostiene, asimismo, que al integrar la condena
con el pago de los intereses adeudados -cuyo cómputo se ha
ordenado con arreglo a la tasa pasiva establecida por el
Banco de la Provincia de Buenos Aires- el cálculo adicional
de
la
actualización
monetaria,
ordenado
del
por
capital
conducto
por
de
la
la
depreciación
declaración
de
inconstitucionalidad de los arts. 7 y 10 de la ley 23.928
(conf.
art.
4,
ley
25.561),
importa
violar
también
la
doctrina legal de esta Corte, en cuanto ha declarado que al
capital histórico sólo corresponde adicionar los intereses
puros
devengados
desde
la
fecha
de
su
exigibilidad
(v.
recurso, fs. 172 vta./174).
III. El recurso debe prosperar.
1.
En
lo
que
interesa,
el
juzgador
de
origen
consideró "... intolerable consentir que con fundamento en
una declaración de emergencia pública en materia social se
introduzcan
restricciones
que
signifiquen
disminuir
o
desnaturalizar el principio protectorio del trabajador, que
ha sido propio del derecho del trabajo desde su nacimiento
y que tiene raigambre constitucional. Dichas barreras no
deben ser rebasadas, porque las ha fijado rígidamente como
infranqueables el constitucionalismo social" (v. sent., fs.
153 vta.).
En tal sentido, manifestó que "... La prohibición
contenida en los arts. 7 y 10 de la ley 23.928 modificada
por la ley 25.561 desnaturaliza el fin tuitivo consagrado
por nuestra Constitución Nacional, torna ilusoria la justa
composición
de
salvaguarda
del
los
derechos
orden
de
público
las
partes,
laboral
invalida
alcanzando
en
la
la
sentencia homologatoria del acuerdo arribado por las partes
en autos y vulnera principios y garantías vertebrados por
la Constitución que deben interpretarse con un enfoque de
dinamismo histórico, que lleva ínsita una pretensión de
futuro
y
de
concluyendo
continuidad..."
que
los
arts.
(v.
7
y
sent.,
fs.
10
la
de
153
ley
vta.),
23.928,
modificados por la ley 25.561, resultan violatorios del
Preámbulo y de los arts. 14 bis, 17, 28 y 75 inc. 19 de la
Constitución nacional (v. sent., fs. 154).
2. He de anticipar que, en mi opinión, acierta el
impugnante en su cuestionamiento en torno de la validez
constitucional
de
los
arts.
7
y
10
de
la
ley
23.928
ordenados por el art. 4 de la ley 25.561.
Sobre
esta
temática
he
tenido
oportunidad
de
expedirme recientemente en la causa L. 92.095, "Moyano"
(sent. del 1-IX-2010), por lo que corresponde reiterar, en
cuanto sea pertinente, los conceptos allí expresados.
En efecto, señalé en aquél precedente que en las
causas "Fernández" (L. 85.591, sent. del 18-VII-2007) y
"Aguirre"
(L.
85.710,
sent.
del
26-IX-2007),
presté
mi
adhesión a los votos de mis colegas doctores Negri (quien,
y en forma parcial, había hecho lo propio respecto del
sufragio del doctor Hitters) y Pettigiani, respectivamente,
pronunciándome
a
favor
de
la
constitucionalidad
de
los
preceptos impugnados, por lo que habré de insistir -en lo
pertinente- con los decisivos fundamentos allí brindados.
De todos modos, he de apuntar que en la causa
"Vera" (L. 89.589, sent. del 19-VII-2006) y posteriormente
en "Correa" (L. 86.189, sent. del 29-VIII-2007), esta Corte
hubo de expedirse sobre el tópico en el mismo sentido.
a. Sentado ello, cabe reiterar conceptos expresados
por el doctor Hitters en la citada causa "Fernández" en el
sentido
de
que:
"la
ley
25.561,
denominada
de
Emergencia
Pública y Reforma del Régimen Cambiario, se sancionó el 6 de
enero de 2002 y se publicó en el número extraordinario del
Boletín Oficial de la Nación el 7 de enero de dicho año. En su
art. 4º estableció la nueva redacción de los arts. 7 y 10 de
la ley 23.928, determinando así -concerniente a la primera de
dichas normas- que el deudor de una obligación de dar una suma
determinada de pesos cumple su obligación dando el día de su
vencimiento la cantidad nominalmente expresada. En ningún caso
se admitirá actualización monetaria, indexación por precios,
variación de costos o repotenciación de deudas, cualquiera
fuere su causa, haya o no mora del deudor, con las salvedades
previstas en la presente ley".
"El
segundo
de
los
artículos
establece
que
se
mantienen derogadas, con efecto a partir del 1º de abril de
1991, todas las normas legales o reglamentarias que establecen
o
autorizan
monetaria,
la
indexación
variación
de
costos
por
o
precios,
cualquier
actualización
otra
forma
de
repotenciación de las deudas, impuestos, precios o tarifas de
los
bienes,
obras
o
servicios.
Dispone
también
que
la
derogación se aplicará aun a los efectos de las relaciones y
situaciones jurídicas existentes, no pudiendo aplicarse ni
esgrimirse ninguna cláusula legal, reglamentaria, contractual
o convencional -inclusive convenios colectivos de trabajo- de
fecha anterior, como causa de ajuste en las sumas de pesos que
corresponda pagar".
"En suma, el art. 4º de la ley 25.561, con las
modificaciones introducidas a dichos preceptos, no hizo más
que ratificar la vigencia del principio nominalista en un
encuadre fisonómico declarado 'absoluto', o 'rígido' plasmado
en 1991 mediante la ley 23.928, una de cuyas manifestaciones
consiste en la prohibición de los mecanismos de actualización
monetaria (v. Lorenzetti, Ricardo L. 'La emergencia económica
y
los
contratos',
pág.
160,
Rubinzal-
Culzoni,
Bs.
As.,
2002)".
También se dijo en la misma causa que: "Ratificando
los
principios
rectores
en
la
materia,
esta
Corte
-en
precedentes similares al de autos- ya había tenido la ocasión
de afirmar que 'la modificación introducida por la ley 25.561
a la ley 23.928 mantuvo la redacción del art. 7º de ésta, en
el
que
sólo
cambió
el
término
'australes'
por
'pesos',
estableciendo que el deudor de una obligación de dar una suma
determinada de pesos cumple su obligación dando el día de su
vencimiento la cantidad nominalmente expresada y que en ningún
caso
se
precios,
admitirá
variación
actualización
de
costos
o
monetaria,
indexación
repotenciación
de
por
deudas,
cualquiera fuere su causa y, además ratificó la derogación
dispuesta por su artículo 10, con efecto a partir del 1º de
abril de 1991, de todas las normas legales o reglamentarias
que
establecen
o
autoricen
la
indexación
por
precios,
actualización monetaria, variación de costos o cualquier otra
forma de repotenciación de las deudas, impuestos, precios o
tarifas de los bienes, obras o servicios'".
"Hubo
público
y
así
notorio
de
que
señalarse
se
ha
que
aun
producido
cuando
una
es
de
acentuada
depreciación de nuestra moneda, entiende este Tribunal que
el
acogimiento
de
una
pretensión
indexatoria
como
la
expuesta por el accionante, además de ser contraria a las
normas referenciadas en el párrafo anterior -que justamente
fueron dictadas con la finalidad de evitar el envilecimiento del signo monetario- no haría más que contribuir a
ese proceso" (conf. causas B. 49.193 bis "Fabiano", sent.
int. del 2-X-2002; Ac. 86.304, "Alba", sent. del 27-X-2004).
b. Para concluir, conviene recordar que el máximo
Tribunal
de
la
Nación,
ya
dentro
del
esquema
económico
vigente desde la sanción de la ley 25.561, ha ratificado
ese entendimiento relativo a que la prohibición genérica de
la "indexación" constituye una medida política económica
cuyo acierto no compete a la Corte evaluar, afirmando a su
vez la finalidad antinflacionaria que la mencionada ley
25.561 y su anterior 23.928 se proponen alcanzar (conf.
causa C.1051.XL., "Chiara Díaz, Carlos Alberto c. Estado
provincial s. Acción de ejecución", sent. del 7 de marzo de
2006;
v.
considerandos
10°
y
11°
de
los
votos
de
los
doctores Petracchi y Maqueda, 8° del voto de los doctores
Zaffaroni y Lorenzetti; 15° del voto del doctor Fayt).
c.
Por
lo
hasta
aquí
expresado,
corresponde
revocar el pronunciamiento de grado en cuanto decretó la
inconstitucionalidad de los arts. 7 y 10 de la ley 23.928 y
dispuso la actualización de los importes de condena. Por lo
tanto,
si
mi
opinión
es
compartida,
en
la
instancia
ordinaria deberá practicarse una nueva liquidación conforme
a lo que aquí se decide.
3. De acuerdo a lo resuelto en el apartado III.2,
en
cuanto
se
declaró
la
procedencia
de
la
crítica
sustentada en la violación de la doctrina legal elaborada
por esta Corte en torno a la constitucionalidad de los
arts. 7 y 10 de la ley 23.928 (conf. art. 4, ley 25.561),
el
análisis
de
la
segunda
argumentación
que
porta
el
recurso -consistente en la alegación de que, conforme ha
declarado
este
Tribunal,
al
capital
histórico
sólo
corresponde adicionar los intereses puros- y que tiende al
mismo resultado, no corresponde sea abordado.
IV. Conforme lo expuesto, propongo hacer lugar
parcialmente al recurso deducido, revocando la sentencia
atacada
en
cuanto
hizo
lugar
a
la
declaración
de
inconstitucionalidad de los arts. 7 y 10 de la ley 23.928.
En
tribunal
consecuencia,
de
origen
para
los
que
autos
deberán
resuelva
lo
volver
al
peticionado
en
forma subsidiaria por la parte actora a fs. 26 y 26 vta. y,
en función de ello, practique nueva liquidación.
En
razón
de
lo
decidido,
las
costas
de
esta
instancia deberán ser soportadas por su orden (arts. 68 y
289, C.P.C.C.).
Con el alcance indicado, voto por la afirmativa.
El señor Juez doctor Pettigiani, por los mismos
fundamentos expuestos por el señor Juez doctor de Lázzari,
votó también por la afirmativa.
A la cuestión planteada, el señor Juez doctor
Hitters dijo:
Como lo ha dejado expuesto el doctor de Lázzari,
a cuyo voto presto expresa adhesión, el pronunciamiento
impugnado ha infringido la doctrina legal de este Tribunal
referida
a
la
validez
supralegal
de
los
preceptos
que
prohíben la indexación de deudas.
Como consecuencia de ello, corresponde rescindir
el pronunciamiento en cuanto declaró la inconstitucionalidad
de
los
arts.
7
y
10
de
la
ley
23.928
y
dispuso
la
actualización del capital de condena.
Vueltos los obrados a la instancia de origen deberá
resolverse
cuenta
el
lo
que
corresponda,
pedimento
que,
teniendo
ordenado
en
especialmente
en
subsidio
la
de
actualización
monetaria
que
aquí
se
deja
sin
efecto,
ha
introducido el accionante a fs. 26 y vta. del libelo que dio
inicio a estas actuaciones.
Con el alcance expuesto, voto por la afirmativa.
A la cuestión planteada, el señor Juez doctor
Soria dijo:
Por compartir sus fundamentos, y remitiéndome por
razones de brevedad a las adicionales reflexiones que hube
de
plasmar
en
la
materia
al
emitir
mi
opinión
en
el
precedente L. 85.591, "Fernández" (sent. de 18-VII-2007),
citado en el presente acuerdo, adhiero al sufragio de mi
distinguido colega doctor de Lázzari.
Con el alcance indicado, voto por la afirmativa.
Con
lo
que
terminó
el
acuerdo,
dictándose
la
siguiente
S E N T E N C I A
Por lo expuesto en el acuerdo que antecede, de
conformidad con lo dictaminado por el señor Subprocurador
General, se hace lugar parcialmete al recurso extraordinario
de inaplicabilidad de ley traído y, en consecuencia, se
revoca
la
sentencia
impugnada
en
cuanto
declaró
la
inconstitucionalidad de los arts. 7 y 10 de la ley 23.928 y
ordenó la actualización del capital de condena.
Vuelvan los autos al tribunal de origen para que
resuelva lo peticionado en forma subsidiaria por la parte
actora a fs. 26 y 26 vta. y, en función de ello practique
nueva liquidación.
En razón de lo decidido, las costas de esta instancia
se imponen en el orden causado (arts. 68 y 289, C.P.C.C.).
Regístrese y notifíquese.
EDUARDO JULIO PETTIGIANI
EDUARDO NESTOR DE LAZZARIDANIEL FERNANDO SORIA
JUAN CARLOS HITTERS
GUILLERMO LUIS COMADIRA
Secretario
Descargar