1 El país de los pozos Resumen: Un grupo de actores personifica un conjunto de pozos. Los actores-pozos dialogan, discuten y disputan entre sí tratando de resolver aquello que los molesta. Tema de la obra: La sed que vive en el interior de cada hombre, una sed que no puede ser negada ni puede ser colmada con conocimientos o con otra clase de “rellenos”. Otros temas: La superficialidad. La autosuficiencia y el descubrimiento de la necesidad del otro. Iluminación bíblica: Juan 4, 1-30: El encuentro de Jesús con la samaritana. «Si conocieras el don de Dios y quién es el que te dice: «Dame de beber», tú misma se lo hubieras pedido, y él te habría dado agua viva». (...) «El que beba de esta agua tendrá nuevamente sed, pero el que beba del agua que yo le daré, nunca más volverá a tener sed. El agua que yo le daré se convertirá en él en manantial que brotará hasta la Vida eterna». 1º Reyes 3, 3-14: Salomón hace un pedido a Yahvé. «Concede entonces a tu servidor un corazón comprensivo, para juzgar a tu pueblo, para discernir entre el bien y el mal. De lo contrario, ¿quién sería capaz de juzgar a un pueblo tan grande como el tuyo?». Al Señor le agradó que Salomón le hiciera este pedido, y Dios le dijo: «Porque tú has pedido esto, y no has pedido para ti una larga vida, ni riqueza, ni la vida de tus enemigos, sino que has pedido el discernimiento necesario para juzgar con rectitud, yo voy a obrar conforme a lo que dices: Te doy un corazón sabio y prudente, de manera que no ha habido nadie como tú antes de ti, ni habrá nadie como tú después de ti». Mateo 5, 1-12: Las Bienaventuranzas. «Felices los afligidos, porque serán consolados. Felices los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados». 2 El escenario al abrirse el telón tiene que estar ocupado por quienes a van a interpretar los personajes. Lo único que acompaña es la música que busca lograr un clima de atención por parte de los chicos. Música Luces: amarillas Actriz A: ¿Quién ordenó abrir el telón? Actor B: ¿Porqué no preguntaron si estamos listos? Actor C: Que lo cierren de vuelta Actor D: Si, que cierren la cortina. Actor E: Ya no podemos volver atrás. Actriz A: No Actor B: ¿Cómo que no? Actor C: ¿Que les costara hacer las cosas... bien? ¿eh? Actor D: Sepan todos algo: ¨todavía no empezamos¨. Actor E: Nadie te va a creer. Actriz A: Ustedes interpretarán los personajes. Actor B: ¿Qué dice? Actor C: 3 ¿Está loco? Actor D: Dice que ellos van a interpretar a los personajes. Actor E: ¿Y nosotros qué? Entran dos personas que transforman a los actores en personajes pozos. Actriz A: Nosotros también. Actriz B: ¿No convendría hacer esto con la cortina cerrada? Actor C: Las cortinas no se pueden cerrar. Actor D: ¿Qué?, ¿se trabaron? Actor C: No, no se trabaron. Actriz A: Así tienen que estar. Actor C: Sepan todos algo. Actriz E: Nadie te va a creer. Actriz B: ¿Qué sabés qué va a decir? Actriz E: Iba a decir que todavía no empezamos. Actriz B: ¿Ibas a decir eso? Actor C: Yo quería decir que somos todos pozos. Actor D: Y... ¿nada más? 4 Actriz E: No me parece esencial. Actriz A: ¿Cómo que no te parece esencial? Actriz B: A mí me parece fundamental. Actor C: Entonces es esencial. Actriz E: Un pozo no puede tener nada esencial. Actriz A: Algo tiene que ser esencial es un pozo, para vos no tendrá sentido, pero para el pozo algo tiene que ser esencial. Actriz B: Tu opinión me parece de una profunda superficialidad. Actriz A: Ponéte de acuerdo... es profunda o es superficial. Actor D: Para un pozo todo lo que esté referido al pozo es esencial. Actor C: ¿Todo es esencial? Actriz E: Sí, todo es esencial. Actor C: Ah, si. Entonces si habláramos de las personas, ¿vos dirías que todo lo referido a las personas es esencial? Actor E: Si. Actor C: O sea, para vos, no poder conseguir un video durante una semana, es lo mismo que no poder conseguir un plato de comida durante una semana. Actor B: Para el que piensa que todo es esencial, nada es esencial. 5 Actriz A: Ustedes interpretarán nuestros personajes. Actor B: Y daaale con eso... Actor D: Shhhhh, silencio que empezamos. Música como intermedio breve (10 segundos). Actor E: Somos todos pozos. Actriz A: Grande, suficiente y poderoso. Actor B: Chico, ignorado y desprotegido. Actor C: Feo, deprimido, cabizbajo, triste. Actor D: Bueeeno, hermosamente ganador en todo. Aunque quizá... no, me puse a pensar si en algo no era ganador. Pero, no. En todo sin duda. Actor C (a D): Soberbio. Actor D: ¿Qué fue lo que dijiste? Actor C: No, nada. Actor D: Nada. Así está mejor, es lo mejor que podés hacer. Nada. Te felicito. Actor C: Gracias. Pequeño silencio de cinco segundos. Actor B (haciendo referencia a E) Es indiferente a todos. No necesita. Nadie sabe mucho de él. 6 Actor C: Es más, creo que es ciego. Actor B: Pero no por un problema físico. Actor C: Tampoco por un accidente. Actor B: Dicen que fue por falta de uso. Actor C: No quiere ver. Actriz A: ¿Qué dicen? Actor B: Dicen, que fue por falta de uso. Actriz A: ¿Qué? Actor B: ¡Que -dicen- que fue por falta de uso!! Actriz A: No escucho. Actor C: No quiere escuchar. Se escucha una música durante diez segundos. Intermedio. Actor D: Buen día. Actor B: Amaneció otra vez con sol. Actor D: Qué lindo día hoy, ¿no? Actor C: ¿Te parece? Actor D: 7 Qué pregunta estúpida, ¿cómo ¨si me parece¨? Es así porque yo lo digo. Yo no dudo. Tengo la seguridad total de lo que digo. Actor C: Depende desde donde lo mires. Actor B: ¿Y desde dónde va a ser? Existe una sóla posibilidad. Hay un sólo punto de vista. Actor C: Yo decía, porque hace diez días que no llueve. Actor B: Ah, si. A decir verdad, tengo un poco de sed. Actriz A: Vieron qué lindo día, no sé si ustedes se dieron cuenta, hace diez días que no llueve. Actor B: Hablamos de eso, no escuchaste... Actriz A: Y que no se le ocurra llover, así me mantengo bien ¨seco¨. Actor C: Tengo un problema, no sé cómo agrandarme. Actor D: Ese es asunto de cada uno, no esperes a que te pase la receta. Actor B: El que parece que creció y mucho, es aquel... Actor D: Pero nunca como yo. Nadie va a tener una superficie más grande que la mía. Actor B: Es verdad, tu superficialidad es la envidia de todos nosotros. Actor E: No me incluyas, yo no puedo sentir envidia porque ninguno de ustedes me interesa en lo más mínimo. Estoy satisfecho con lo que tengo, no como ustedes que nunca se ocuparon por cubrirse. Suenan a hueco. Me molestan. Actor C: Yo sueno a hueco, no ves que no tengo nada. ¿A qué querés que suene? 8 Actor E: Lo sabía, tarde o temprano vendrías a pedirme limosna. Actor C: No quiero nada de nadie. Actor B: Un momento. A ver: hablá. Actor E: ¿Qué te pasa? ¿Qué querés que te diga? Vos sí querés de mi limosna. Actor B: También. Actor E: Así me gusta, que seas humilde. Actor B: Nada de eso, digo que también sonás a hueco. Tu superficie es lindísima, pero también sonás a hueco. Actor E: ¿Qué estás diciendo, imbécil? Y, ¿qué hago yo perdiendo el tiempo con un pozo tan pero tan pobrecito? Actriz A: Es verdad. Suena a hueco... Yo, ¿también? Actor D: Todos menos yo, ahora sí que todos pueden sentir envidia. Tómense la libertad de envidiar mi ruidosa superficialidad. Actor C: También es hueca. Actor D: No hay lógica en lo que ustedes dicen. Jamás podría sonar a hueco con todo lo que tengo. Actor E: También te escucho hueco. Actor D: ¿Habrá que invertir en más cosas? Actor B: 9 Jamás podrías, lo tenés casi todo. Actor D: ¿Habrá qie invertir en sabiduría? Actriz A: Te puedo enseñar todo lo que yo sé de informática con tal de que en paga me des alguna videocasetera, algún minicomponente, ¿me entendés? Actor E: ¿Y a mí? Solicito información sobre robótica. Stop. Retribuiré con importantes coberturas para tener un seguro porvenir. Stop. Actor B: ¡Yo! No sé nada de robótica, pero puedo tirarte las cartas, las que vos quieras. Con tal de sentirme menos vacío. Actor E: Trato hecho, compro. Actor C: Tengo mucha sed. Actor D: Todos estamos sedientos, ¿o no te diste cuenta? Imbécil. Actor C: ¿Y a mi, qué recurso me queda por esperar? Actor E: A vos, rezar. Actor C: Está bien pero, ¿qué puedo hacer mientras tanto? Actriz A: Porque tanta limitación junta. Actor B: ¿Qué me falta? Actor C: Quizás ustedes me pueden ayudar, quizás ustedes que tanto tienen y tanto saben me pueden decir... porque tal vez ustedes ven algo en mi que yo no me doy cuenta. Algún recurso. Dependo de ustedes. Ayúdenme. Actor E: No veo nada. 10 Actor C: No querés ver. Actor E: No te puedo ayudar. Actor D: Silencio que no puedo aprender, ¿sigo sonando a hueco? Actriz A: Si, y eso que ya te enseñé todo lo que sé de informática. No sé qué más podés aprender. Actor D: Pronto, no hay tiempo. Actor C: Tengo sed. Actor E: Yo también. Actriz A: Mucha sed. Actor B: Yo también. Actor E: ¿Qué me falta saber? ¿Qué me falta tener? Actor C: Nada, y sin embargo también tenés sed. Como yo. Actriz A: ¿No habrá algo debajo de todo esto? Actor B: ¿Debajo de qué? Actor D: Sólo existe lo que ves. Actor E: Las cartas dicen que voy a ser felíz. Actor C: 11 ¿Y la sed? Actor E: Compro filosofía. Actor D: ¡Yo también compro filosofía!! Actor B: Vendo filosofía. Actor E: ¡A mí!! Actor D: ¡No, a mí!! Actor B: A los dos. Actriz A: Compro poesía. Actor C: Yo sé una muy linda. Actriz A: Compro. Actor E: Me molesta depender de la lluvia. ¿No hay otra forma de conseguir agua? Actor D: ¡Se puede comprar! No, nos va a alcanzar. Actor C: ¿Habrá algo más? Actor B: Sólo existe lo que vemos. Actor D: Ya no doy abasto con mi superficialidad. Actor C: Yo soy muy pobre, tengo muy poco y no soy sabio en nada. Además, mi superficialiad es poca, pero igual me muero de sed. 12 Actor E: Te devuelvo la poesía, no me gusta... Y ahora sueno más hueco. Actriz A: Amor, amor que estoy herido, herido de amor huido. Actor C: Tengo sed. ¿Qué nos está faltando en el fondo? Actor D: ¿Quién habló? Actor C: Yo, perdón, ¿dije algo que les molestó? Actor D: Pregunto. ¿Estamos de acuerdo en que somos lo que vemos? Actriz A- Actor B- Actor E: ¡Si!! Actor D: Entonces, ¿porqué hablar del fondo si no lo vemos? Actor E: Estoy de acuerdo. Actor C: Una cosa es que no nos hayamos ocupado de verlo y otra muy distinta, perdón...es que no esté. Actriz A: ¡Basta!! Actor D: ¿Cuánta más sabiduría? Actor B: ¿Cuántas más cosas? Actor E: No lo sé. Actor D: ¡Todo o nada!! 13 Comienza a sonar música. Empieza D a tratar de alcanzar las cosas de los demás. Esto produce un enfrentamiento entre A, B, D y E. Mientras tanto C está ocupado en sacarse todo lo poco que tiene, pero que también le molesta. Va a ver qué es esto del fondo. Entre A, B, D y E toman sus cosas. Termina la música. Actor C: Quiero sacarme de encima lo que me tapa, lo que no me deja ver. Algo hay por aquí abajo. Algo tiene que haber. El ruido también me tapa y también tengo que deshacerme de él. En este momento empieza a soplar un leve viento. Y a escucharse el sonido de agua. La escucha el público y C. El resto pelea por más. 14 Yo y mi vacío Los pozos de la obra de teatro tienen sed y quieren llenarse. ¿Qué es lo que necesitan? ¿Qué están pidiendo? Piden el reconocimiento de los demás. Piden conocimientos. Piden ayuda. (Otros pozos se sienten autosuficientes y no poden nada. Esa es su sed. Tienen sed de necesitar, aunque no lo sepan.) Como pozos que somos, vamos a observar nuestro hueco. Sentimos a veces adentro nuestro un vacío. Hay algo que nos duele porque nos falta. Es una carencia, un deseo de algo que no tenemos. Este vacío, ¿de qué es? ¿Qué es lo que nos falta? ¿Qué es lo que más necesitamos para nuestra vida? ¿Cuáles son las cosas que habitualmente le pedimos a Dios? Esas cosas (o, mejor dicho, esos vacíos) son los que me acercan a Jesús. Ahora voy a hacer un plano. Un diagrama topográfico de mi pozo. Que sea el dibujo de un recorte, en el que escribo mis ahhelos, de los más profundos a los más superficiales. (Por ejemplo, dibujo un pozo visto desde un corte transversal: Debajo de todo escribo: “Ser aceptado”, “Ser querido”; en la superficie, “poder irme de vacaciones este año”, etc.)