TEMPORADA DE PATOS Mexique, 85’, blanc et noir, 2004, tous publics Réalisation : Fernando Eimbcke Acteurs : Danny Perea, Daniel Miranda, Enrique Arreola, Diego Cataño Dimanche matin, sa mère est sortie et Flama et son meilleur ami Moko disputent, pour tuer l’ennui, une partie de jeux video. Mais la matinée avance, et prend un tour imprévu. Ils laissent d'abord entrer Rita, la voisine à peine plus âgée, qui veut faire un gâteau. Ensuite, ils commandent une pizza. Le livreur s'installe, lui aussi, et les voilà à quatre dans l’appartement sans les parents. Dialogues drôles et tristes : le divorce des parents, la solitude, les frustrations…Beauté de l’image en noir et blanc pour un film sans adultes. Documents proposés : une interview du réalisateur et un article sur le film, de Perla Schwartz ; une page de Héroes de Ray Loriga. Fernando Eimbcke : Fernando Eimbcke (1970, Mexico) est diplômé du Centre Universitaire d’Etudes Cinématographiques de l’Université Nationale Autonome à Mexico (1992-1996). Il a réalisé plusieurs courts métrages . Il est également réalisateur de video-clip ; Ce film est son premier long métrage. Filmographie : 1993 : Alcanzar una estrella CM 1994 : Disculpe las molestias CM 1996 : No todo es permanente CM 2002 : La suerte de la fea a la bonita no le importaCM 2003 : No seas malito et The look of love CM 2004 : Temporada de patos LM TEMPORADA DE PATOS ESA NECESIDAD DE MATAR EL TEDIO Por: Perla Schwartz Un domingo cualquiera nos encontramos en una Ciudad de México gris, cubierta por una densa capa de smog, llegamos al populoso Tlatelolco y nos internamos en uno de sus tantos departamentos; ahí se encuentran Moko (Diego Cataño) y Flama (Daniel Miranda), dos adolescentes de aproximadamente 14 años. Sus padres han salido y ellos optan por matar su tedio, jugando video-juegos, comiendo alimentos chatarra, y probándose una vez más a sí mismos que ambos son amigos infalibles. Están seguros que de ese modo podrán superar otro largo domingo. Todo parece ir sin mayores contratiempos, hasta que tienen hambre, piden su pizza favorita y aprece Ulises (Enrique Arreola), el frustrado repartidor. Ellos no le quieren pagar el pedido, argumentando que se ha tardado más del tiempo límite, y le proponen jugar un videojuego; el que gane tendrá la razón. Ulises acepta y se quedará con los chicos. Al poco rato llega Rita (Danny Perea), la joven vecina que quiere hornear un pastel. Este cuarteto en un pequeño departamento vivirán un domingo diferente, un tanto agridulce, pero permeado por una complicidad que resulta totalmente inesperada. Lo mismo se sentirán cautivados por un horrible cuadro que representa un lago de patos, que habrá el circunstancial beso adolescente, los golpes, o las enseñanzas de Ulises, al sumergirse en sus recuerdos, en un mundo que le resulta totalmente doloroso. Temporada de patos, ópera prima de Fernando Eimbcke, filmada en blanco y negro, es una película minimalista que nos demuestra que en México sí es posible rodar cine de arte pero dirigido a las mayorías; no se necesita ser muy intelectual para entender una sencilla trama, cuyo mayor mérito está en presentarnos personajes entrañables. Es un relato que no tiene mayores grandilocuencias, y que en un tono que oscila entre lo lúdico y lo onírico se asoma al mundo de los adolescentes rebeldes que quieren ante todo imponer su ley. Con cierta influencia de Woody Allen, en vista de que el director sabe comprometerse y burlarse de sus personajes, Eimbcke nos entrega una película que transcurre de manera envolvente. Los cuadros están construidos a partir de acciones sutiles que nos permiten conocer a cada uno de los cuatro personajes protagónicos, haciendo de ésta una película emotiva que en ningún momento cae en lo cursi. Tomando en cuenta que se trata de una ópera prima tiene muchos aciertos, entre ellos el haber trabajado con actores noveles, excepto Arreola, quien cuenta con trayectoria en el teatro. Sus mayores méritos son el carecer de escenas de sexo y violencia, el alejarse del trillado tema de la corrupción, así como el relatar la trama en un tono íntimo que permite al espectador tornarse cómplice de quienes buscan escaparse del tedio y de la asfixiante rutina cotidiana. Mención especial merece la artística fotografía de Alexis Zabé y la contagiosa canción-tema a cargo de Natalia Lafourcaude y la Forquetina. Da gusto ver aparecer en el panorama del cine mexicano a un nuevo director, tan creativo como lo es Fernando Eimbcke. Habrá que esperar sus futuras realizaciones. "LOS PERSONAJES SOBREVIVEN UN TEDIO DE DOMINGO": FERNANDO EIMBCKE Por: Perla Schwartz En la actualidad ya no es muy común filmar en blanco y negro, sin embargo hay algunas películas que para acentuar más la historia que narran, así lo requieren tal es el caso de Temporada de patos, ópera prima de Fernando Eimbcke, quien ya había demostrado su talento y creatividad en diversos videoclips de bandas musicales. La cinta ha estado presente en diversos festivales, como Cannes, Pessaro, Toronto y Edimburgo, así como en la Muestra de Guadalajara, donde el pasado mes de marzo de 2004 se hizo acreedora a siete premios Mayahuel, entre ellos a la Mejor Película. "Si usé el blanco y negro -comenta Eimbcke- fue por la necesidad misma de la historia, para no distraer al espectador de la misma. El blanco y negro, creo, le da un sentido más desolado y árido. La historia surgió de una premisa un tanto absurda, sobre el cómo una serie de personajes sobreviven el tedio de un domingo". En efecto, en Temporada de patos conocemos a dos entrañables camaradas: Flama (Daniel Miranda) y Moko (Diego Cataño), dos adolescentes aficionados a los videojuegos, quienes pretenden así ocupar su domingo, hasta que irrumpen dos personajes mas en escena Ulises, un vendedor de pizzas (Enrique Arreola) y una vecina, Rita (Danny Perea), quien quiere hornear un pastel. "Básicamente mi experiencia ha sido en teatro -afirma Enrique Arreola-, en cine tan sólo había tenido una breve participación en La habitación azul, me gustó la experiencia, en ocasiones Fernando me daba indicaciones para templar mi interpretación. Creo que Ulises es el antihéroe de la película, él se atreve a abrir cosas que le duelen y ello permite que los espectadores se puedan identificar con él". Temporada de patos cuenta con una canción-tema interpretada por la talentosa Natalia Lafourcade, Un pato, acompañada por su inseparable grupo La Forquetina. "La película la vimos tres o cuatro veces antes -dice Natalia Lafourcade- para poder crear el cover, a partir de involucrarnos en la historia. La película nos encantó, tiene una historia increíble. En la canción quisimos reflejar la inocencia que se maneja". Temporada de patos, a decir de su director, es una gran apuesta: "Para empezar, está filmada en blanco y negro, casi toda se desarrolla en un departamento de Tlatelolco, puede que le vaya muy bien o muy mal, aún no lo sabemos, pero yo espero que el público se percate de todo el corazón que el equipo le puso para realizarla. Además, no hay sexo ni violencia gratuitos". Diego Cataño es de la idea de que Temporada de patos no lo va a volver más actor, pero si es un medio para esperar nuevos proyectos. Para Danny Perea también fue su primer experiencia cinematográfica tras haber trabajado en comerciales, videos y telenovelas. Incluso así sucede con el productor ejecutivo Jaime Ramos, quien comentó entusiasta: "Yo fui compañero de Fernando y era lógico que le propusiera producir su ópera prima, hicimos un presupuesto minucioso, distribuimos el dinero de la manera más congruente que pudimos. No buscamos competir con filmes extranjeros, pero sí dar a conocer que en México también existe el talento. Me encuentro muy satisfecho del resultado". A Eimbcke le interesa seguir filmando en México porque es su país y él que le dio la oportunidad de iniciar su carrera como cineasta y eso que ha tenido ya ofertas de ir a filmar a Hollywood. Él se confiesa fanático de Woody Allen:"Por ejemplo, Manhattan está filmada en blanco y negro. Ahí me di cuenta que se puede filmar una buena comedia en blanco y negro. Admiro a Woody porque sabe manejar muy bien la comedia y sabe cómo burlarse de sus personajes. En mi caso personal, en momentos castigo a Ulises, el frustrado repartidor de pizzas". En un futuro, Eimbcke quiere seguir combinando el rodaje de películas con la realización de videoclips, ya que dice ser un apasionado de la música. Temporada de patos es una película sin grandilocuencia que deambula entre lo lúdico y lo onírico, es una película que demuestra que en México también se puede filmar cine de arte apto para todo público. Cabe mencionar que Temporada de patos representará a México en los premios Goya en España.