PEDAGOGÍA: TRAYECTOS Y CONEXIONES1 (Versión preliminar) Dewey repite con frecuencia que la <personalidad y el carácter importan mas que el tema de estudios>. La finalidad, no es el conocimiento, la información, sino la autorrealización. Poseer todo el mundo de conocimientos y perder su 2 propio yo es un destino horrible en educación como en religión Los especialistas y los técnicos en pedagogía nos cuentan, hoy, como este campo de saber está en transformación. En medio de una serie de reformas que datan de los años setenta, de los ochenta y de la década del noventa, se producen los ajustes, las modificaciones, los cambios actuales tendientes a revaluar, reordenar y redefinir finalidades en las prácticas pedagógicas, educativas e institucionales, con el propósito de ampliar la cobertura, mejorar la calidad, hacer eficientes el sistema educativo colombiano y actuar según criterios de pertinencia. Pero estas reformas , no pueden considerarse como una reforma más y mucho menos una reforma de carácter interno. Puesto que, el mundo, la relación con otros y la relación con el saber y con el conocimiento están siendo afectadas, en su conformación, incluidas la dimensiones de tiempo y espacio por efecto de la velocidad; dimensión nueva capaz de determinar el modo de ser de las culturas, de las sociedades y de las economías. Un país como el nuestro, se ha demorado, más o menos, entre veinte y veinticinco años, instalando la actual política que reforma institucionalmente el sector educativo en sus niveles, instancias, organización, administración, currículo y finalidades. Los niveles se convierten en ciclos y articulación; las instancias de dirección y docencia cambian por la idea de un gobierno escolar; los colegios se reorganizan y adquieren la forma de instituciones educativas; la administración y la gerencia reemplaza la dirección rectoral y académica; el currículo determinado por los programas escolares se modifica por un currículo único que se concibe a si 1 Escrito por Martha Soledad Montero González. Investigadora y directora del Grupo de Investigación de Historia de la educación y de la pedagogía. Maestría en Educación. Universidad Santo Tomas. Sede Bogotá. Docente e investigadora Facultad de Filosofía y Humanidades Universidad de la Salle. Líder GroupLac: Estudios en Educación, pedagogía y nuevas tecnologías. Reconocido Categoría D. Colciencias 2008/2009. Doctorando en Ciencias de la Educación. Rudecolombia. Uptc. Sede Tunja. 2 Jhon Dewey. El niño y el programa escolar. 1989. Ediciones de la lectura. Madrid. Prólogo de Domingo Barnés Salinas. Ciencia y Educación. Sección Contemporánea. Obras de Dewey. Volúmen I. Página 46. 1 mismo como una línea tendiente al futuro, que marca y traza un conjunto de orientaciones y finalidades formativas, dejando su diseño, planeación y gestión a los establecimientos educativos, según un criterio de autonomía, en el sentido de la formación de unas competencias básicas, ciudadanas y laborales, y las finalidades tratan de la competitividad, del mejoramiento de la calidad, de la gestión, del talento, del capital humano y su desarrollo, de la internacionalización y de la pertinencia. Puestas las cosas de esta manera, la reforma educativa sabe, que, no es suficiente el montaje de aparatos de telecomunicaciones, observatorios y laboratorios, sistemas de información sofisticados, actualización y modernización de la capacidad instalada, capacitación y aplicación de instrumentos de monitoreo y seguimiento, establecimientos de sistemas de acreditación y de certificación, cálculos presupuestales y rentabilidad del sistema; sino se piensa, la razón de existencia de la educación, de las escuelas, de los contenidos que se enseñan, de las metodologías de aprendizaje, de los recursos pedagógicos, de la noción de didáctica, de pedagogía y de saber, de la función del conocimiento, del papel de los maestros, de la relación con los libros, de los resultados, del rendimiento y de los desempeños de los niños y de los jóvenes. Sin desconocer los criterios de flexibilidad, movilidad, promoción, permanencia y continuidad de los procesos educativos dentro y fuera de la escuela y de la universidad; el Estado colombiano, se pregunta por el tipo de educación y el tipo de saberes, que, debe aprender el niño en su funcionalidad y en su quehacer en nuestra contemporaneidad y propone unos lineamientos estructurales sobre los saberes básicos, llamados en la ley y sus reglamentos: áreas de conocimiento vueltas asignaturas cuando se trata de administrar tiempos y espacios curriculares, por ejemplo en el horario escolar y universitario. Según, se trate de un tipo de población escolar o de otro, acuña y cambia enunciados y crea condiciones materiales para la reconfiguración de distintas prácticas pedagógicas. Educación inicial por educación preescolar, educación 2 básica primaria por educación básica, educación vocacional por educación media clásica o técnica, educación inclusiva por educación especial. Y, en todas esta decisiones, los efectos de velocidad de las comunicaciones, de la información, de las conexiones, la aceleración de los ritmos y de las intensidades, cuentan; así como las determinaciones del mercado y los efectos del fenómeno de la globalización, la reconformación geopolítica del mundo, cuentan; los descubrimientos científicos como el genoma, la cibernética, la robótica, las prótesis cuentan; el conocimiento, el saber y la información cuentan; desplazando el tiempo de las materias primas y los medios de producción. La escuela disciplinaria del siglo XIX da lugar a la escuela del control y de la televigilancia del siglo XXI. Y, a pesar de estos cambios y transformaciones sociales y culturales; en este mundo específico de la educación, al parecer, ciertas finalidades no se transforman; por el contrario se mantienen. Ciertos discursos se fortalecen y permanecen sus influencias, ciertos tonos de la pedagogía persisten y no parece, necesario, ir más allá de los métodos, de los recursos, de los desempeños de los niños, del rol facilitador del maestro, de la formación de unas competencias, de la preparación artificial de unos ambientes de aprendizaje, de la inversión de papeles en los procesos de enseñanza /aprendizaje. De la preocupación por la formación del niño en tanto ciudadano, trabajador y sujeto. Es como si el tiempo en su movimiento pasara y no pasara por el mundo de la educación. Como si los cambios exteriores se ciñeran mas a los objetos físicos, materiales, prácticos; a los procedimientos, al desarrollo de actividades a la consecución de resultados, a la aplicación de pruebas, a prácticas de comparación entre exitosos y fracasados, que estrictamente hablando, de la preocupación por quien es el niño y el joven de hoy, cual es la concepción de pedagogía que circula en los discursos sobre la educación, cuáles son los procesos de subjetivación y cómo dar cuenta de ellos. Es en esta dirección, que el presente articulo, se pregunta por: i. algunas de las influencias pedagógicas que determinaron y aún determinan las prácticas 3 escolares en Colombia, sobre todo, las que provienen de finales del siglo XIX y siglo XX y sus efectos en la relación de los niños con el saber. Ii. El privilegio que se da a los métodos, al aprendizaje y a la acción iii. Las finalidades pedagógicas en la escuela de hoy. Aquí, se sostiene que, la conformación y formalización de las prácticas pedagógicas en sus trayectos y conexiones, no han abandonado durante este transcurso de tiempo y aún hoy, la concepción técnico/pedagógica de los procesos de enseñanza y aprendizaje. Para ello, se acude a los desarrollos pedagógicos de algunos de los principales pensadores de la pedagogía como Jhon Dewey y María Montessori que permiten, para estos efectos, mostrar como: se toma distancia de algo que se considera educación tradicional, se pone en práctica modelos, concepciones, nociones y técnicas que valoran la acción, la actividad, el desarrollo y la inteligencia y se mantiene el lugar privilegiado del uso de los recursos, de los métodos y del aprendizaje como estrategias de formación de desempeños escolares en los procesos pedagógicos; tomando a Rousseau como referente de un pensamiento pedagógico que toma distancia de estos elementos educativos. Es este el avance, que, se presenta de la investigación en desarrollo de la línea: Historia de la educación y de la pedagogía, en la cual se circunscriben un grupo de estudiantes de la Maestría en Educación, quienes se hallan en este momento estudiando, en rigor, los grandes pensadores de la pedagogía y sus efectos sobre las prácticas pedagógicas de formación, de la escuela y de los procesos de subjetivación en la educación contemporánea. 1. del colegio a la institución educativa. Aquí, no se trata de oponer un tipo de escuela frente a otra, una nueva institución frente a una vieja; tampoco se trata de designar, cual es mejor o peor, una en comparación con la otra. De lo que se trata, es de señalar, cómo cada época construye y hace realidad su propia idea de escuela y como en el transcurso de unos tiempos , a veces largos, a veces cortos, se va transformando en otra, en la medida que se transforma el mundo en el que se vive. Situación, por la que, al parecer, esta pasando la escuela y la universidad a la que asistimos hoy. 4 Para el caso, y solo para presentar uno, se hace referencia al colegio, según lo muestra, Philippe Ariès, en su libro: El niño y la vida familiar en el antiguo régimen3, cuando habla de la reforma de la universidad de Paris, realizada por Enrique IV y sus funcionarios en 1598, influenciando los procesos de enseñanza, más o menos hasta la mitad del siglo XVIII. (Ariès. Pag. 214) cuando crea un conjunto de mecanismos importantes utilizados para una nueva organización escolar y universitaria. Transformación de la enseñanza tradicional medieval por la de los colegios. Es decir, Ariès, nos muestra en su investigación, cuales son los procesos, los factores, los elementos que cambian y cuales son, en su desarrollo, los que se van imponiendo, substituyendo e instalándose en las prácticas escolares, dando lugar a un nuevo modo de ser de la enseñanza, del aprendizaje y de la escuela. Desaparece la libertad de enseñanza del maestro cuando decide dónde, cómo y qué enseñar, la libertad del estudiante cuando elige vivir sin medidas de control cuando esta fuera del tiempo programado para estudiar las clases con su maestro. Lecciones que el maestro, casi siempre, imparte en habitaciones o salas alquiladas, donde lee a sus alumnos los autores señalados por la tradición y dónde el legislador, desempeña una tarea, que se limita a imponer relaciones de respeto a “los programas tradicionales y la rectitud de los exámenes” (Ariès. Pag. 215). Este tipo de experiencia y de modo de vivir la enseñanza empieza a producir resistencia, dando lugar, poco a poco a la aparición de los colegios, considerados instituciones nuevas, los cuales se organizaron, cuando se construyeron casas (colegios) dentro de las universidades dirigidas a los pobres que deseaban educarse; oferta que se hace extensiva a los hijos de las familias de la época, que valoraban y tenían en gran aprecio la enseñanza y el alojamiento; puesto que contar con este evitaba el libertinaje y la mezcla de edades (siglo XIII/XIV) y se 3 Philippe Ariès. El niño y la vida familiar en el antiguo régimen. (1989). Taurus Ediciones. España. 5 regían por un conjunto de reglas de disciplina que conducían la reclusión de los estudiantes. Los colegios tienen como origen los hospitales propios del siglo XIII, en los que se asilaban a los alumnos pobres. Se pasa así, del asilo al colegio, gracias a la nueva institución de becarios, quienes se sostenían de donaciones. Todavía no se distinguían lo suficientes de las escuelas medievales para conformar los colegios del antiguo régimen. Estas instituciones se llegaron a conocer como colegios de “ciclo completo”, porque fueron concebidos para dar lecciones de los profesores , gracias al nuevo principio de gradación y a la enseñanza de la gramática dirigida a principiantes y que conduciría al estudiante a la filosofía; de un conocimiento elemental (gramática) precisa Ariès, y luego de su instrucción se autoriza la continuación de la formación del estudiante. De esta práctica, surge la “escuela de principiantes” “ La escuela latina de gramática” , enseñanza que se daba en escuelas privadas bajo la tutela de un maestro autorizado por la universidad o por un canónigo para que realizara lo que se conocía como el Donato o curso inicial. Escuela que entra dentro de la organización de la universidad como pedagogías sin dotación, conformadas por un maestro, sus asistentes y sus alumnos externos, sin existencia estatutaria. En este momento las escuelas medievales, ya se habían transformado en lo que se reconocía como instituciones de becarios. (Ariès. Pag. 220). *** Continuará. Este documento de trabajo está próximo a publicarse. 6