Exigimos liberación inmediata de Miguel Ángel Beltrán Education International Internationale de l'Education Internacional de la Educación Bildungsinternationale Sede 5, Bd du Roi Albert II 1210 Bruselas, Bélgica Tel +32 2 224 06 11 Fax +32 2 224 06 06 [email protected] www.ei-ie.org Presidenta Susan Hopgood Secretario General Fred van Leeuwen Oficina Regional para América Latina www.ei-ie-al.org [email protected] Tel: +506 22 23 78 10 Tel/fax: 22 22 08 18 San José, Costa Rica Desde la Internacional de la Educación, federación sindical mundial que reúne a más de 30 millones de afiliados en todo el mundo, exigimos enérgicamente, respeto y libertad para las personas que luchan en la defensa de la libertad de cátedra, la libertad de investigación, la libertad de consciencia y el análisis crítico político y social. Es por esto que reiteramos nuestro apoyo al compañero Profesor Dr. Miguel Ángel Beltrán Villegas, injustamente condenado a prisión y detenido en una cárcel de máxima seguridad en Bogotá. El pensamiento crítico no es delito en una sociedad democrática. El Profesor Miguel Ángel Beltrán Villegas fue detenido de manera irregular en mayo de 2009, fue absuelto, a pesar de esto fue sometido a una persecución con amenazas reiteradas y acusaciones falsas. Ante esta situación, que exponía la seguridad del profesor y su familia, Miguel Ángel Beltrán salió de Colombia. Su exilio académico le llevo a México donde desarrolló significativos avances de su investigación académica sobre el conflicto armado y social en Colombia, con base en un trabajo de campo adelantado en sus años de detención en la cárcel. Sin embargo, en el 2013 el Procurador General de la Nación colombiana, Alejandro Ordoñez, ordenó destituirlo de su cargo, basándose en aquellas pruebas ya desacreditadas en la instancia judicial. En 2014 la Procuraduría confirmó la destitución de Miguel Ángel Beltrán, y la prohibición de ejercer cualquier cargo público por trece años. Desconcierta el hecho de que esta decisión se basara en afirmar que la tarea de investigación y docencia del Profesor Beltrán constituían formas de instigación al terrorismo, cuando es de conocimiento público que el profesor se ocupa desde hace largos años, de estudiar las causas históricas del conflicto en Colombia, desde una perspectiva sociológica crítica, y que para ello ha hecho un importante trabajo de recolección y análisis de testimonios de sus participantes directos. Reiteramos nuestra denuncia, en tanto interpretamos lo sufrido por el Profesor Beltrán como un grave caso de persecución ideológica que además marca un precedente en cuanto al cercenamiento tanto de la libertad académica como de las libertades civiles. Lamentablemente este no es un caso aislado pues también se han producido situaciones de persecución y amenazas contra otros profesores universitarios que han desarrollado líneas de investigación comprometidas críticamente con el estudio de la realidad colombiana. Esto sumado a que en ese país se cuentan por cientos los sindicalistas y docentes asesinados, da una idea más clara del ambiente hostil que se ha levantado contra de la libertad de pensamiento y de cátedra. El ensañamiento contra Miguel Ángel Beltrán y la reactivación de la persecución administrativa y judicial contra su persona constituye, en las actuales circunstancias, una provocación contra el dificultoso pero imprescindible avance del proceso de paz en Colombia. Desde la Internacional de la Educación para América Latina reiteramos una vez más nuestro rechazo a toda forma de persecución a quienes promueven la libertad. Colombia necesita que los procesos de paz avancen. Los docentes son parte clave de esta etapa. Reclamamos de nuevo claridad absoluta en el proceso del Dr. Miguel Ángel Beltrán, a quien extendemos nuestra completa solidaridad. Las autoridades colombianas deben revisar su caso de forma imparcial. Exigimos las garantías procesales adecuadas para esclarecer esta situación y reintegrar al Profesor Beltrán sus derechos, su libertad y el libre desarrollo de su actividad académica así como la seguridad de él y su familia. Suscribe, Hugo Yasky Presidente del Comité Regional Internacional de la Educación para América Latina