TRABAJADOR(A) FORESTAL

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TRABAJADOR Y TRABAJADORA FORESTAL
TRABAJADOR(A) FORESTAL
Son trabajadores(as) forestales los que desarrollan actividades referidas a la producción y
cultivo de madera, que se realizan en viveros, campamentos, bancos y aserraderos móviles; en
la preparación de suelos; la plantación, raleo, corta, extracción de madera y cuidado de
bosques, y en virtud de un contrato de trabajo.
JORNADA DE TRABAJO
La jornada ordinaria máxima legal para el trabajador(a) forestal es de 45 horas semanales.
Aquellos que laboran en aserraderos móviles, que se instalan para faenas temporales en las
inmediaciones de los bosques en explotación, se encuentran afectos, en materia de jornada, a
las normas del trabajador(a) agrícola, es decir, una jornada máxima semanal de 45 horas y al
promedio anual de jornada diaria no superior a 7 horas con 30 minutos.
REMUNERACIÓN
• El empleador(a) no puede pactar una suma inferior al ingreso mínimo mensual.
• La remuneración debe ser pagada en la forma convenida en el contrato: por día, semana,
quincena o mes. Jamás podrá exceder de un mes.
• El empleador(a) no puede descontar del sueldo del trabajador(a) herramientas perdidas o
producción dañada, salvo que exista sentencia judicial que lo autorice.
GRATIFICACIÓN
La gratificación es un beneficio con carácter anual, sin perjuicio de que el empleador(a) pague
sumas por concepto de anticipo de gratificación.
Este puede optar entre dos modalidades de pago, a menos que en el contrato individual o
colectivo se hubiere comprometido a utilizar uno en particular. Ellas son:
• Distribuir el 30% de la utilidad líquida entre todos los trabajadores(as) y de acuerdo a las
remuneraciones devengadas por cada uno de ellos.
• Pagar o abonar al trabajador(a) el 25% de las remuneraciones devengadas durante el año,
cualquiera sea la utilidad líquida que obtenga la empresa.
DEBERES DEL TRABAJADOR(A) FORESTAL
En el caso de trabajadores(as) calificados como agrícolas de temporada, y que se desempeñen
en aserraderos y plantas de explotación de madera y otras afines, el trabajador(a) deberá:
• Efectuar el trabajo personalmente y por el tiempo que dure el contrato.
• Utilizar y mantener adecuadamente los Elementos de Protección Personal (EPP).
• Respetar todas las medidas de prevención de riesgos implementadas para desarrollar su labor
con seguridad, especialmente tratándose de trabajos con motosierra, aserraderos y uso de
plaguicidas.
Si no conoce los riesgos y las medidas de prevención que debe adoptar, tiene que solicitar a su
empleador(a) que lo capacite antes de iniciar cualquier trabajo.
DERECHOS DEL TRABAJADOR(A) FORESTAL
• Exigir la escrituración de su contrato de trabajo.
• Recibir la remuneración por sus servicios en la fecha pactada.
• Disponer de 30 minutos para colación; descanso diario –terminada la jornada y antes del inicio
de la del día siguiente–, y un descanso semanal o bisemanal si así fue acordado por las partes.
• En ningún caso la jornada ordinaria podrá exceder de 10 horas por día.
• Pactar por escrito hasta dos horas extraordinarias diarias, en forma temporal, cuando sea
necesario en la faena y siempre que no perjudique su salud. La vigencia de este pacto no puede
superar los tres meses, renovables de mutuo acuerdo.
• Exigir que el empleador(a) señale los riesgos y las medidas de prevención que se deben
adoptar en el trabajo.
DEBERES DEL EMPLEADOR(A) FORESTAL
• Entregar gratuitamente los Elementos de Protección Personal acordes con los riesgos
existentes en la labor.
En el caso de trabajadores(as) calificados como agrícolas de temporada, y que se desempeñen
en aserraderos y plantas de explotación de madera y otras afines, el trabajador(a) deberá:
• Suministrar condiciones adecuadas e higiénicas de alojamiento, salvo que el trabajador(a)
pueda alojar en su casa o en un lugar cercano y accesible, que le permita desempeñarse sin
mayores dificultades.
• Mantener un lugar adecuado e higiénico para que sus trabajadores(as) mantengan, preparen y
consuman sus alimentos. Si no pueden adquirirlos, por la distancia o dificultades de transporte,
el empleador(a) debe proporcionarlos gratuitamente.
• Suministrar un medio de locomoción gratuito y seguro si entre el lugar de trabajo y el de
alojamiento hay tres o más kilómetros de distancia y no existe locomoción pública. Sólo se debe
transportar pasajeros sentados.
ELEMENTOS DE PROTECCIÓN PERSONAL (EPP)
Son aquellos que permiten prevenir o minimizar los efectos que pueda sufrir un trabajador(a) a
raíz de un accidente del trabajo o enfermedad profesional, transitoria o permanente, provocado
por la ejecución de alguna labor.
El uso de los EPP dependerá del riesgo al que se expone el trabajador(a) en la ejecución de su
labor. Estos son:
Ropa protectora: Contra cortes, frío, calor y agua. Se incluye aquí el pantalón anticorte.
Zapato de seguridad: Con puntera metálica, forro resistente a cortes y adecuado al clima en el
que se desarrolla la labor. Su uso evita accidentes como cortes, resbalones y caídas.
Casco: Debe ser liviano y con dispositivos para montar visera y orejeras antirruidos. Protege
contra caída de ramas, árboles y fuego.
Protector facial y ocular: Debe ir montado en el casco de seguridad. Protege los ojos y cara
contra astillas o aserrín, contra golpes y rasguños de ramas.
Protector auditivo: Pueden ser de orejeras adheridas al casco o tapones. Previene la sordera
provocada por el ruido de la motosierra.
Máscara respiratoria: Protege contra gases, vapores y humos en faenas como fumigaciones,
quemas y otros.
Guantes: El tipo a utilizar dependerá del riesgo de la faena. Protege del roce, quema, aplicación
de plaguicidas, entre otros.
RIESGOS MÁS COMUNES EN LAS FAENAS FORESTALES
Durante la cosecha de madera se registran accidentes graves y mortales por golpes, caídas de
árboles y cortes.
Durante el uso de maquinarias como motosierras, trineumáticos, skidder y en torres de madereo
son altamente riesgosas. También existen enfermedades derivadas de la actividad como
lumbagos, sorderas y otras provocadas por el uso de sustancias químicas.
PLAGUICIDAS
• Los plaguicidas son tóxicos, por lo que deben ser adquiridos en lugares autorizados,
transportados en envases herméticos, separados de los alimentos y de las personas,
almacenados en bodegas especiales en un área restringida y debidamente etiquetados.
• Deben ser aplicados por personal entrenado, equipado con Elementos de Protección Personal
y lejos de los niños y de la vivienda o campamento.
• Los adquirientes o usuarios de plaguicidas deben emplearlos de acuerdo con las normas
técnicas especificadas en las etiquetas, adoptando las medidas de seguridad en ellas indicadas
y respetando los plazos que deben transcurrir entre la última aplicación y la cosecha. Sólo con la
autorización del Servicio Agrícola y Ganadero podrá dársele un uso distinto.
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