Entrevista a Francisco Varela Jueves, 13 de Noviembre de 2003 Este es un extracto de una famosa entrevista, realizada por Warnken, poco antes de que falleciera el connotado neurobiólogo. Tomado de la Revista Intec, de Fundación Chile Francisco Varela cambió el mundo. Con sus teorías cognitivas, cambió, literalmente, la forma de pensar, investigar y vivir. A poco más de un año de su fallecimiento, Intec rememora parte de una de sus últimas entrevistas. Fue una verdadera eminencia. El neurobiólogo chileno Francisco Varela (19462001) se convirtió con el tiempo en uno de los más grandes pensadores de nuestros días. Su contribución a las ciencias cognitivas fue destacada desde sus inicios, cuando junto a Humberto Maturana, creó el concepto de la Autopoyesis. En 1991 en su libro Embodied Mind, el pensador estableció los pilares para una ciencia cognitiva destinada a superar los dilemas que inundan la mirada del mundo occidental al fenómeno de la mente. A partir de ahí, y durante los próximos diez años, Varela enfocó gran parte de su energía en los estudios de la conciencia y en el nuevo campo que él definió como neurofenomenología. Ahora, cuando ha transcurrido un poco más de un año desde su fallecimiento, Intec rememora sus enseñanzas y pensamientos, base del proceso del conocimiento, innovación, cambio, a través de distintos extractos de la última entrevista que concedió al programa "La Belleza de Pensar". El Reduccionismo El pensador se manifestó, durante la conversación con Warnken, como un enemigo del reduccionismo, pues limita la forma de pensar. "El reduccionismo es una camisa de fuerza que equivale a torcerle todas las alas que tiene el pájaro (objeto estudiado, comprendido) y meterlo a otra jaula, distinta, dualista, que calce con esa idea o dogma", dijo Varela. Y si bien en el último tiempo la mirada fenomenológica (valora la experiencia) ha librado una ardua batalla contra el reduccionismo, Varela considera que todavía queda mucho camino por recorrer. "Cuando dicen que la ciencia ha superado esto, no es cierto (...) No demos la pelea por ganada antes de ganarla", sentenció. Varela y la Fenomenología Sin duda que uno de los grandes "temas" propuestos por Varela y al cual le dedicó más tiempo para desarrollar es la fenomenología. Según el recordado neurobiólogo, la experiencia es vital y debe ser considerada en los estudios científicos de hoy. Primero, eso sí, empieza explicando, en detalle, este nuevo concepto. "(La fenomenología) es un fenómeno histórico, caracterizado por ciertos hitos y eventos de la historia en occidente y que, si uno frecuenta otras tradiciones del Este (como la japonesa o budista), la predisposición es otra. La gente parte de otra comprensión de las cosas... por ejemplo, la idea de una teología trascendente es muy extraña. En ese sentido, me hizo reír el comentario del Dalai Lama, quien, mientras conversaba con algunos religiosos cristianos, les dijo: "ustedes tienen la teoría de Dios, ¿verdad?". Es bonito y respetuoso (pues es una teoría y no la experiencia)", aclara Varela. Pero, ese es sólo el comienzo. A lo largo de la conversación, Varela prosigue, destacando la belleza del haiku (poema japonés) como forma ligada a la fenomenología ("el haiku es como pum!, una especie de destello del momento vivido, nos hace despertar al momento vivido propio") y explicando, en forma simple, los orígenes históricos de la fenomenología. En tu libro Cuerpo presente planteas que en Occidente hubo una tradición fenomenológica que no hemos desarrollado suficientemente, y que puede constituir un puente con ese pensamiento oriental que piensa desde la experiencia y no desde una teorización que enjaula el águila. Claro, eso es efectivamente un tema muy interesante. Leyendo y pensando en lo que ha sido esta evolución de esta idea occidental del mundo, me doy cuenta de que hubo en Europa, entre 1900 y 1910, un momento de magia colectiva. En tres lugares del mundo completamente diversos se redescubre el fenómeno de la experiencia de manera muy distinta; y, sin embargo, hoy día recién estamos rescatando lo que fueron esos descubrimientos. Hay un pensador europeo, por ejemplo, que dice en 1905: Volvamos a las cosas mismas. Luego, Cristián Warnken resume todo en una frase: "volvamos a las cosas mismas" No es volver a un empiricismo "naive". Al revés, "las cosas mismas" es el aparecer... aprender a suspender todas esas maneras de leer que ya están, pues son pensamientos habituales que vienen con un condicionamiento cultural. Y aprender. Ese es el método fenomenológico. Poner en paréntesis lo que yo creo que es, para volver a mirar constantemente el fenómeno, y "escucharlo". Entonces, nos puedes explicar la diferencia entre una ciencia circular y una ciencia sin relación con la experiencia. Estoy realizando una experiencia en el laboratorio. Un experimento en el cual el sujeto estudiado debe reconocer una cara. Él tiene que apretar un botón si la reconoce y otro si no consigue. Tomo un paso atrás. ¿Cuál es todo el fenómeno? Parte es que el sujeto tiene una experiencia cada vez que yo le presento una cara. Y esa experiencia no queda resumida al apretar un botón. La ciencia (fenomenología) va a buscar también los resultados, observaciones, etc, sobre la experiencia. La idea es recoger, no dejar debajo de la mesa, otra parte del fenómeno al que el sujeto tiene acceso. (Eso sí), escojo sujetos que sean capaces de tener un entrenamiento para poder describir... Perdiendo la reflexión Las ideas encarnan en un tiempo... antes, en los '60, predominaba la locura. ¿Cuál es el contexto de hoy? En los '60 parecía un fenómeno mundial. Mi lectura de la situación actual está enmarcada por la irrupción de lo que se conoce como el "pensamiento global". Significa que, en definitiva, lo que antes eran, en cada una de las culturas, puntos de referencia que eran relativamente estables, de pronto aparecen en paréntesis, cuestionados (...) Lo que pasa es que generas una pérdida de esa capacidad de reflexión de ese lugar, que tiene un significado metafísico, casi ontológico... Genera una reacción que yo leo como sentimiento de nihilismo, es decir, la pérdida de los valores. "La tarea actual es crear un pensamiento que recobre lo que es la posibilidad de tener un punto de referencia, un lugar de origen no parroquial. Que sea capaz de brindar una visión universal y global, pero que, al mismo tiempo, recupere las raíces de la tierra donde estaba. Esa es una tarea que no sabemos hacer." "El futuro cultural pasa por un reencantamiento de la vida espiritual, como la constante revalorización de lo que uno vive momento a momento. Ahí está la fuente de la vida. No en las empanadas y el vino tinto (...)", remata el intelectual. La empatía Otro de los temas que aborda Varela es la empatía o la capacidad de ponerse en el lugar del otro. Según explica es la empatía y el contacto con el otro lo que permite, entre otras cosas, el desarrollo de la mente, pues no es un proceso individual, lo que sirve para entender desde la navegación en Internet hasta el e-learning o aprendizaje a distancia. "Pensar que la mente es un fenómeno individual: eso es el individualismo, que es tradicional en occidente. La gente no concibe pensar de otra forma. Sin embargo, a medida que avanzamos en las investigaciones, esa idea se cae a pedazos. Mi mente es la otra mente. Lo primero que hace un bebé es fijar los ojos (en los del otro). Después empieza a imitar las modulaciones de voz de la mamá o de quien lo está cuidando. Lo primero que va a hacer es tener un sentimiento, la capacidad de ponerse en el lugar del otro. Para un niño, mover los brazos y verlos mover es una misma cosa", explica Varela. "No puedo tener una sensación de mi cuerpo, a menos que haya enfrente otro cuerpo que se mueve", agrega. Al final, Francisco Varela habla sobre el poder científico que tiene la empatía sobre el cuerpo. Poder que trasciende todo... "El cuerpo con más o menos cariño es modificado genéticamente. Hay genes que se abren y se cierran. Hay un cambio estructural". "Prefiero hablar del poder constitutivo de la empatía (y no de amor). En la educación se desarrolla el pensamiento, la capacidad de razonar, las matemáticas. Pero, en realidad, una de las cosas más fundamentales de la conciencia y mente es tener empatía. ¿Por qué no tenemos en el primero básico, inglés, matemáticas y empatía? La educación emocional es tan importante para el ser humano como el resto de las materias".