Universidad Autónoma Metropolitana Unidad Xochimilco “Abastecimiento de Agua Potable y Tratamiento de Aguas Residuales” Autores: González Molina Federico Axel Martínez Romero Gabriela Elisabeth Suárez Serrano Diana Profesor: Fernando Sancén Contreras Grupo: T -154 México, D.F. Julio 2005 Índice Pág. Índice……………………………………………………………………………………..1 Introducción……………………………………………………………………………...2 Marco Teórico…………………………………………………………………………...3 Problema………………………………………………………………………………..16 Hipótesis………………………………………………………………………………..16 Comprobación de la Hipótesis………………………………………………………….16 Conclusiones……………………………………………………………………………21 Bibliografía……………………………………………………………………………..24 1 Introducción El presente trabajo trata del problema que representa actualmente para el Distrito Federal el abasto de agua potable y tiene la intención de buscar una alternativa viable para solucionarlo. Para comprender este problema se analiza, dentro del Marco teórico, cómo se logra el abastecimiento de este vital elemento en la Ciudad de México. Esto comprende diversos datos, como las fuentes de las que se obtiene dicha agua, la distribución y algunos factores que influyen en el incremento de las dificultades para mantener el abasto adecuado. Con el fin de solucionar dicho problema nos planteamos diferentes hipótesis; la primera de ellas estaba enfocada a la recarga del manto freático utilizando el agua residual tratada. Optamos por no seguir con ésta debido a que, a pesar de que ya existe incluso una ley para regularla, aún esta en etapa de proyecto, por lo que no fue posible obtener cifras exactas que pudieran justificar que se trata de una solución verdadera. En el análisis de la información recabada encontramos que el reuso de las aguas residuales es una opción real que permitiría que el agua potable a la que sustituiría en diversos usos, fuera aprovechada en el consumo humano. Al revisar la información sobre las plantas de tratamiento de aguas residuales del Distrito Federal encontramos graves deficiencias en su funcionamiento, por lo que determinamos que el primer paso sería lograr un desempeño óptimo de dichas plantas. A continuación desarrollaremos con detalle los puntos anteriores y comprobaremos la validez de esta hipótesis. 2 Marco teórico El agua es el componente principal de la materia viva. Constituye del 50% al 90% de la masa de los organismos vivos. El protoplasma, que es la materia básica de las células vivas, consiste en una disolución de grasa, carbohidratos, proteínas, sales y otros compuestos químicos similares en agua. El agua actúa como disolvente transportando, combinando y descomponiendo químicamente esas sustancias. La sangre de los animales y la savia de las plantas contienen una gran cantidad de agua, que sirve para transportar los alimentos y desechar el material de desperdicio. El agua desempeña también un papel importante en la descomposición metabólica de moléculas tan esenciales como las proteínas y los carbohidratos. Este proceso, llamado hidrólisis, se produce continuamente en las células vivas. Toda actividad económica y social de una nación depende de las aguas dulces. En el caso de la Ciudad de México, actualmente se afronta un problema de abasto de agua potable debido a la creciente expansión desordenada e incontrolada. Esto también ha generado la disminución y pérdida de patrimonio natural que la rodeaba, provocando cambios climáticos importantes como la pérdida de humedales que proporcionan un control natural de las inundaciones, almacenamiento de carbono y purificación natural del agua, que conlleva al aumento constante de la temperatura promedio de la ciudad, que se resume en una deuda ecológica de consideraciones importantes para la sustentabilidad de la Ciudad. Es necesario, en primer término describir la situación de la Ciudad respecto al manejo que de este recurso natural se realiza. Posteriormente, se señala cómo se logra este abastecimiento. Por su ubicación geográfica, nuestro país presenta condiciones extremas a lo largo y ancho del territorio; principalmente de escasez y sequía en el norte y de abundancia en el sur. Las partes centrales del país han sido las más demandadas debido a condiciones climatológicas menos severas y a la relativa abundancia de recursos naturales, principalmente suelo y agua, que favorecieron su explotación para el beneficio económico de sus habitantes. Ello ha provocado una excesiva demanda de agua para satisfacer los servicios básicos de agua potable de la creciente población y de sus actividades económicas, ocasionando que la demanda supere la oferta, lo que evidentemente ha conducido a sobreexplotar las fuentes locales, y tener que hacerse llegar agua de otras fuentes cada vez más lejanas. Para analizar el abastecimiento de agua de la Ciudad de México, es necesario recordar que en nuestro país por disposición legal (Artículo 4 de la Ley de Aguas Nacionales) este recurso natural es propiedad de la nación, por lo que la autoridad y administración en materia de aguas nacionales y de sus bienes públicos inherentes corresponde al Ejecutivo Federal, quien la ejerce directamente o a través de la Comisión Nacional del Agua, quién 3 recauda el pago de los derechos por explotación, uso o aprovechamiento de aguas nacionales. Este órgano se ha propuesto lograr que nuestra nación cuente con seguridad en el suministro del agua que requiere para su desarrollo, que la utilice de manera eficiente, reconozca su valor estratégico y económico, proteja los cuerpos de agua y preserve el medio ambiente para las futuras generaciones. Dentro de la estrategia para lograr su objetivo, la Comisión Nacional del Agua, dividió el territorio nacional en: Mesorregiones.- En el Plan Nacional de Desarrollo se han definido cinco mesorregiones definidas por criterios económicos, políticos, sociales y administrativos. Regiones Hidrológicas.- La información hidrológica y de calidad del agua es agrupada por 37 regiones hidrológicas; la regionalización fue elaborada en los años 60 por la entonces Dirección de Hidrología de la Secretaría de Recursos Hidráulicos. Regiones Administrativas.- La planeación hidráulica toma como unidades geográficas trece regiones hidrológico-administrativas definidas por la Comisión Nacional del Agua. Cada región está constituida por una o varias cuencas; de esa manera se garantiza que la cuenca hidrológica se constituya como la base del manejo del agua. Como podemos verificar en el cuadro 1, para estos efectos la Ciudad de México se ubica en: Cuadro 1 Mesorregión Tres Centro Región Hidrológica 12. Lerma Santiago Región Administrativa XIII. Valle de México Fuente: Programa Nacional Hidráulico 2001-2006. Además del Distrito Federal, la Región Administrativa XIII se conforma por parte de los Estados de México (30% del territorio estatal), Hidalgo (39% del territorio estatal) y Tlaxcala (3% de su territorio). Esta región se divide a su vez en dos subregiones: Valle de México y Valle de Tula. En este sentido, el abastecimiento actual de agua potable para los 18 millones de habitantes de la Zona Metropolitana del Valle de México alcanza los 64 m3/segundo de los cuales 35 m3/segundo (54.7%) son canalizados al Distrito Federal y 33 m3/segundo (45.3%) al Estado de México. Asimismo, de los 64 m3/segundo, 43.32 m3/segundo provienen de sus aguas subterráneas, 13.46 m3/segundo del Cutzamala, 5.86 m3/segundo del Lerma y 2.05 m3/segundo de aprovechamientos superficiales. En contraparte, anualmente el acuífero de la subregión del Valle de México percibe una infiltración de 689 millones de m3; sin embargo, por medio de los pozos se extrae un 4 volumen mayor a 1500 millones de m3, lo que significa que anualmente el acuífero pierde un volumen de agua de 895 millones de m3. El déficit acumulado en el Distrito Federal alcanza 3 m3/segundo, mientras que el déficit en el estado de México ya llegó a los 10 m3/segundo. Considerando lo anterior, la Ciudad de México está identificada como una de las zonas que presentan situaciones críticas respecto al abasto del agua, debido a su ubicación a una altitud de 2,200 metros sobre el nivel del mar, con fuentes superficiales prácticamente agotadas, por lo que el reto que vive actualmente el Distrito Federal es el abastecimiento de agua para sus habitantes, ya que se está convirtiendo en un problema complejo de vulnerabilidad del equilibrio ecológico, que en caso de no ser atendido traerá graves consecuencias para sus habitantes, ante el crecimiento y expansión incontrolado de la población y la incesante demanda del líquido. En específico, el acuífero del Valle de México (53%) y los manantiales, ríos y presas de la zona surponiente del Distrito Federal (4%) abastecen cerca del 57% del agua que consume la Zona Metropolitana del Valle de México, mientras que el 43% restante proviene del Valle del Lerma (14%) y del Cutzamala (29%). Para este último el agua es transportada a lo largo de 127 kilómetros, bombeada a una altura de más de mil metros para introducirla al Valle de México, en donde se transporta a través de 13 mil kilómetros de tubería (Esta longitud equivale a más de cuatro viajes de ida y vuelta del Distrito Federal a la ciudad de Mérida, Yucatán, por carretera) y hacia 1 millón 690 mil tomas. Con los datos anteriores podemos observar que el abastecimiento de la Ciudad de México proviene de dos fuentes primordiales: el acuífero de la cuenca de México y de los sistemas del Alto Lerma y del Cutzamala, y de éstos últimos se cumplieron alrededor de 10 años sin recibir nuevos caudales, no obstante el incremento absoluto de la demanda por el crecimiento de la población. Dicho de otra manera: el 67% del agua suministrada se obtiene de fuentes subterráneas a través de la operación de pozos profundos (53% del acuífero del Valle de México y 14 % del Valle de Lerma), mientras que el 33 % del caudal restante se obtiene de fuentes superficiales (4% de manantiales de la zona surponiente del D.F. y 29% del río Cutzamala). Con base en lo anterior, del agua que se obtiene del acuífero del Valle de México, el 96% son aguas subterráneas y el 4% restante proviene de manantiales ubicados en la región poniente y sur de la ciudad, como podemos observar en el cuadro 2. Cuadro 2 Subregión Valle de México Internas Subterránea Superficial 43.32 m3 (96%) 2.05 m3 (4%) Externas Subterránea Superficial Lerma Cutzamala 3 5.86 m 13.46 m3 14% 29% 5 Sumas Subterránea Superficial 49.18 m3 67% 15.51 m3 33% 45.37 m3 19.32 m3 64.69 m3 Fuente: Estudio sobre la recarga del Acuífero. 2000 El Sistema de Aguas de la Ciudad de México informa que, en promedio, los habitantes de la ciudad de México recibimos 35 mil litros de agua por segundo a través de casi 13 mil Km. de tuberías; con este caudal, el 98 % de la población cuenta con el servicio, mientras que el resto es abastecido por pipas e hidrantes públicos. Aproximadamente 68% de este caudal se destina al consumo doméstico, 16% al sector servicios y comercio y 16 % al industrial, por lo que los principales usos en esta región son el agrícola y el público urbano. En cada uno de estos se gasta el 48 % y 36 % de la disponibilidad de este recurso, siendo esta la zona de nuestro país que más agua destina al consumo público urbano. Por lo anterior, si se toma en cuenta que en el año 2000 la población del Distrito Federal alcanzó los 8.6 millones de habitantes, la dotación per cápita diaria es del orden de 352 litros, cifra que incluye el agua que se pierde por diferentes causas, como fugas (cuya perdida estimada es del 32 % en las redes de distribución de agua) y tomas clandestinas en la red. En este sentido, el suministro a partir de fuentes lejanas ha resultado muy costoso debido al requerimiento de energía necesario para conducir el agua a lo largo de 127 Km. y elevarla 1,100 m de altura, ya que esto representa un consumo de 3.4 millones de barriles de petróleo por año y un costo promedio de 3.66 pesos/m3. A esto se suma que el 97 % de la superficie urbanizada del Distrito Federal cuenta con redes de distribución de agua potable, donde existen graves deficiencias en el abasto especialmente de las delegaciones periféricas. Ejemplo de ello, es la situación de tandeo en que se encuentran diversas colonias del oriente y norte, así como diversos poblados rurales del sur de la ciudad. Esta dotación ha sido históricamente inequitativa: al poniente de la ciudad se registran dotaciones de hasta 350 l/hab/día, mientras que en el oriente, en particular en la Sierra de Santa Catarina, Iztapalapa, apenas supera los 150 l/hab/día. De acuerdo con las características y la vocación del territorio y conforme a la Ley de Desarrollo Urbano para el Distrito Federal, el suelo de la ciudad se divide de forma primaria en dos zonificaciones generales: Suelo Urbano y Suelo de Conservación, cuya delimitación ratifica lo definido en la Declaratoria de la Línea Limítrofe entre el Área de Desarrollo Urbano y el Área de Conservación Ecológica publicada en la Gaceta Oficial del Departamento del Distrito Federal el 5 de octubre de 1992. El área definida como Suelo Urbano comprende las demarcaciones territoriales de Gustavo A. Madero, Azcapotzalco, Miguel Hidalgo, Cuauhtémoc, Venustiano Carranza, Benito Juárez, Iztacalco y Coyoacán, así como las porciones ubicadas al sur de esta línea, correspondientes a las delegaciones de Cuajimalpa, Álvaro Obregón, Magdalena Contreras, Tlalpan, Xochimilco, Tláhuac e Iztapalapa. Asimismo, es importante señalar que los datos censales muestran un proceso constante de despoblamiento del área central del Distrito 6 Federal que se ha ido extendiendo paulatinamente a la mitad de las delegaciones, cuya superficie está prácticamente urbanizada, y se ha ido incrementando en las delegaciones que tienen mayor suelo de conservación, el cual se compone de 44 % de bosques, 38 % de áreas agropecuarias y pastizales y un 13 % que se encuentra ocupado por una progresiva urbanización. Es importante resaltar que en el sur y surponiente de la Ciudad de México se localizan las mayores masas forestales de la entidad, contienen una riqueza biológica importante, donde ocurre la mayor infiltración de agua para el acuífero de la Cuenca de México. Hoy en día se estima que el suelo de conservación del Distrito Federal recibe un volumen de lluvia equivalente al 70 % de su consumo; sin embargo, de este total un 1.4 % se aprovecha capturado en manantiales, 19.2 % se queda en los primeros metros de suelo donde atiende las necesidades de los ecosistemas, mientras apenas el 12.5 % del agua que llueve dentro del suelo de conservación se infiltra naturalmente para recargar el acuífero. Otro 60 % se evapotranspira y/o se evapora. Finalmente, se estima que más del 6 % de la lluvia recibida escurre por las cañadas y es captada por el drenaje urbano, que la lleva al drenaje profundo y es desalojada fuera del Valle de México en calidad de aguas negras. Aunque este 6 % pareciera poco, son 107 millones de m3 al año, un volumen equivalente al consumo de 1.6 millones de habitantes (a razón de 180 litros diarios por persona) que debiera captarse y aprovecharse. En el cuadro 3 se muestran los promedios globales, así como los datos estacionales, para los casos de precipitación, evapotranspiración, infiltración natural y escurrimientos que se originan principalmente en suelo de conservación. Cuadro 3. Balance hidrológico en el área del D.F. Promedios global y de seis meses de lluvias y seis de estío. Promedio anual Lluvias Estiaje m/año m3/s m/año m3/s m/año m3/s Precipitación 0.47539 45.356 0.85856 83.051 0.09223 8.921 Evapotranspiración 0.26047 24.851 0.47041 45.504 0.05054 4.888 Infiltración natural 0.05468 5.217 0.09875 9.552 0.0106 1.026 Escurrimiento 0.16024 15.223 0.28940 27.994 0.03108 3.007 Fuente: Balance Geohidrológico y Recarga Artificial en la Zona Metropolitana de la Ciudad de México. Dirección General de Construcción y Operación Hidráulica. Secretaria de Obras y Servicios, 1996. Cabe mencionar que la temporalidad que rige la fase atmosférica no es aplicable a la fase subterránea, por lo tanto, las actividades atmosféricas, tienen poca repercusión estacional en el acuífero. En cuanto a la infiltración, el valor promedio obtenido de 5.217 m3/s contrasta aparentemente con el valor obtenido mediante el cálculo de la compresibilidad del agua de 11.17 m3/s explicado por el flujo subterráneo y por el drenado de arcillas. La diferencia 7 promedio de 5.909 m3/s puede ser explicada de manera genérica por una fracción de pérdidas por fuga del sistema de abastecimiento de agua potable que ingresa al acuífero para dar una entrada neta de 11.176 m3/s. Por lo anterior, la ocupación urbana en suelo de conservación es uno de los principales factores de degradación ambiental para este territorio. Se estima que la tasa de deforestación anual es de 240 ha y la tasa de ocupación urbana ha crecido a un ritmo de más de 300 ha por año, a una tasa promedio de 6.1%, por tal motivo, en el suelo de conservación se perdió el 25% de la cobertura natural de 1993 al 2000. Esta situación pone en riesgo la disponibilidad de agua y amenaza la recarga de los acuíferos, de donde se extrae el 53% del agua que consume la ciudad, ya que se perdió superficie de vital importancia para el mantenimiento del ciclo hidrológico de la Cuenca de México y la regulación del clima; Además del efecto mecánico que ejerce la vegetación natural en la regulación de los escurrimientos superficiales y la protección al suelo de la erosión hídrica y la ocasionada por el viento. . Como resultado de la mayor sequedad del subsuelo, las áreas boscosas son sometidas a procesos de erosión, al tiempo que se debilitan ante la presencia de plagas e incendios forestales, contribuyendo a una mayor deforestación, que incide en el deslave del suelo y el azolve de presas y alcantarillados. De seguir las tendencias de transformación de la cobertura vegetal forestal, en cinco años se perdería una extensión equivalente al Desierto de los Leones. Asimismo, desaparecerían áreas importantes que son refugios de flora y fauna silvestre y que son sitios fundamentales para la captación e infiltración de agua. A largo plazo, se corre el riesgo de un calentamiento gradual en toda la cuenca al reducir la función de amortiguamiento climático de los bosques y una reducción de la humedad relativa a corto plazo, con la subsecuente reducción de las precipitaciones. Lo que traerá como consecuencia un incremento en el déficit del balance recarga-extracción del acuífero. El problema de preservar las zonas de recarga del acuífero, no se reduce a la escasez y al abasto de agua, sino que la sobreexplotación y la consecuente compactación de las capas arcillosas incrementa el riesgo de severos hundimientos que pueden afectar a las construcciones en las delegaciones de la Ciudad. Los procesos de hundimiento diferencial provocan, adicionalmente, el rompimiento de las tuberías y pérdidas por fugas, así como desperfectos en el drenaje que incrementan el riesgo de contaminación de las aguas subterráneas. De continuar las tendencias actuales en el balance deficitario entre la extracción del agua y la recarga del acuífero (10 m3/s), las tasas de deforestación (240 ha/año), las tasas de cambio de suelo de conservación a urbano (300 ha/año), así como el riesgo de hundimiento de las delegaciones centrales, se incrementarán significativamente por la pérdida de presión del acuífero, presentándose fracturas de tuberías y drenajes, alterando el funcionamiento de la red de distribución y contaminando severamente la principal fuente de abasto de agua, sin descartar la posibilidad de serios accidentes geológicos. Por lo anterior, se define que el problema no es solamente de infraestructura, ya que la capacidad del acuífero, la alteración de la dinámica de los escurrimientos superficiales y de los sistemas externos no permite dotar en su totalidad la demanda actual de agua. 8 En conclusión, el suministro de agua potable en cantidad y calidad suficiente, es un tema que preocupa enormemente en todos los niveles del gobierno capitalino. El abasto del vital líquido ha ido en aumento en respuesta al crecimiento de la población y se ha realizado trayendo agua, tanto de fuentes externas, como internas; dentro de estas últimas, figura la explotación del manto acuífero bajo el Distrito Federal, el cual durante 1999 aportó 15.9 m3/s, es decir más del 90 % de abasto de agua por fuentes internas, las cuales se originaron por la constante infiltración de agua durante los siglos pasados, formando un almacenamiento de agua subterránea que constituye la principal fuente de abastecimiento de la Zona Metropolitana de la Ciudad de México y de su área conurbada; mientras que las aguas importadas desde los ríos Lerma y Cutzamala son la segunda fuente de mayor importancia; por último, el aprovechamiento del agua de las lluvias, almacenada en presas, proporciona poco menos de un 10 % del agua necesaria. Recordemos que de acuerdo a las cifras proporcionadas en el informe de actividades 2003 de la Secretaría del Medio Ambiente del Gobierno del Distrito Federal, la Ciudad de México se abastece con 35 m3/s; ello implica traer, extraer y potabilizar mediante delicados procesos químicos el vital líquido; sin embargo, no se puede prever a corto plazo un incremento del caudal de fuentes externas del sistema Lerma-Cutzamala, por los conflictos sociales que puede generar el desabasto a otras cuencas, además de que es incosteable pensar en la cuenca del Balsas u otras fuentes lejanas, por el consumo energético que esto representaría. En resumen, y considerando lo antes expuesto, el abasto de agua en el Distrito Federal tanto de fuentes superficiales como subterráneas arroja los siguientes datos: Fuentes superficiales Específicamente, el caudal que se obtiene de fuentes superficiales proviene: • 29 % del Sistema Cutzamala, • 4 % de manantiales localizados en el sur de la ciudad. Específicamente, el caudal se obtiene de los manantiales ubicados en el suelo de conservación en Álvaro Obregón (Santa Fe, San Bartolo Ameyalco y Santa Rosa Xochiac), Cuajimalpa de Morelos (Cerro Teopazulco), Magdalena Contreras (Sistema de manantiales en el Parque de los Dínamos), Tlalpan (Cerro del Ajusco). Fuentes subterráneas De los 35 m3/s que requiere la Ciudad de México, dos terceras partes provienen de las fuentes subterráneas. • 53 % del acuífero de la zona metropolitana de la Ciudad de México, • 14 % del acuífero del Valle de Lerma Aunado a lo anterior, se presentan los siguientes datos con respecto al abastecimiento por fuentes internas y externas. Durante la década de los 90´s el abasto de agua que viene del exterior y la que procede del interior del D.F. se realizo en proporciones prácticamente iguales. Dentro de las fuentes internas, la mayor parte procede de pozos de extracción del acuífero del D.F. los cuales 9 durante 1999 aportaron el 93.47% de los 16.985 m3/s, datos que podemos observar en el cuadro 4. Cuadro 4 “Evolución del abastecimiento (m3/s) de agua al Distrito Federal” Año Fuentes Fuentes Internas externas 1990 15.860 15.006 1991 16.705 15.913 1992 16.767 16.293 1993 17.203 15.912 1994 18.671 15.951 1995 18.356 14.926 1996 18.706 15.999 1997 19.115 16.510 1998 18.288 15.870 1999 18.324 16.985 Aporte integrado 52.76% 47.24% Total 30.866 32.618 33.060 33.115 34.622 33.282 34.705 35.625 34.158 35.309 100% Fuente: Unidad departamental de Automatización (DGCOH) De acuerdo a la Unidad Departamental de Automatización, perteneciente a la DGCOH “Los ritmos de explotación del acuífero (15.876 m3/s durante 1999) son superiores a las velocidades de recarga (misma que se estima en 11.176 m3/s), lo que significa una sobreexplotación de aproximadamente 4.7 m3/s, fenómeno que ha ocasionado el abatimiento de los niveles estáticos, así como alteraciones en la calidad fisicoquímica del agua freática y muy probablemente el hundimiento del suelo. Este escenario señala que es imprescindible realizar actividades de manejo sustentable del acuífero, siendo la reinyección de agua potabilizada, una de las alternativas a considerar”. Considerando los datos antes expuestos, el abastecimiento de agua en la Ciudad de México puede visualizarse en el cuadro 5. Cuadro 5 Población del Distrito Federal 9 millones de habitantes Abastecimiento de agua a la Ciudad de México Fuentes de abastecimiento 35.2 m3/s 4 • Mantos acuíferos del Valle de México Suministra el 53 % • Sistema Cutzamala Suministra el 29 % 10 • Sistema Lerma Suministra el 14 % • Manantiales del sur-poniente de la Ciudad Suministra el 4 % Déficit de agua potable 3 m3/s Suministro de agua por tandeo 1 millón de habitantes Precipitación pluvial promedio anual 700 mm3 Zona de recarga natural de los mantos acuíferos Área de recarga del Ajusco, de la Sierra de Guadalupe y de la Sierra de Chichinautzin Extracción de agua en esta área de recarga 59.5 del territorio del Distrito Federal 1825 km2 923 millones de m3 Fuente: Plan Maestro de Agua Potable del Distrito Federal 1997-2010. Julio 1997 En cuanto a la recolección y desecho de aguas residuales un solo sistema de recolección o de drenaje funciona tanto para las áreas de servicio del Distrito Federal como para las del Estado de México en la ZMVM (Zona Metropolitana del Valle de México). Cada área de servicio tiene su propia red de drenaje; sin embargo, todos los drenajes descargan eventualmente en los interceptores generales del sistema general de drenaje, el cual conduce las aguas residuales por cuatro salidas artificiales localizadas en el extremo norte de la cuenca. En el Distrito Federal, la red del sistema abarca cerca de 10,000 kilómetros de largo, con 68 estaciones de bombeo, numerosos diques y lagunas para controlar el flujo, 111 kilómetros de canales abiertos, 42 kilómetros de ríos utilizados principalmente para drenaje y 118 kilómetros de túneles. Las descargas de aguas residuales domésticas e industriales, así como el agua de lluvia, se recolectan en una red secundaria consistente en un pequeño sistema de tuberías por vecindario; después, son conducidas a través de la red principal al Sistema General de Drenaje, para ser expulsadas de la cuenca hacia el norte. El Estado de México reporta que el flujo total en tiempo de seca para la ZMVM (flujo que consiste principalmente en aguas residuales municipales sin tratar) se estima en 44.4 m3/s (Comisión Estatal de Aguas y Saneamiento, 1993). En época de lluvias, la región recibe muchas tormentas de gran intensidad y corta duración. Una sola tormenta puede producir hasta 70 milímetros de lluvia (alrededor de 3 pulgadas), lo que representa un 10 por ciento del total de la precipitación anual. Debido al patrón de lluvias y a lo irregular del terreno, el sistema de drenaje general fue diseñado para acarrear 200 m3/s en un período de 45 horas (Departamento del Distrito Federal, 1969). El tratamiento de aguas residuales es un punto importante a considerar como una solución a los problemas que, como hemos visto, implica el abasto de agua potable en la Ciudad de México. Para ello es importante conocer algunos conceptos que analizaremos a continuación. 11 Origen y composición de las aguas residuales El origen, composición y cantidad de los desechos están relacionados con los hábitos de vida vigentes. Cuando un producto de desecho se incorpora al agua, el líquido resultante recibe el nombre de agua residual. Las aguas residuales tienen un origen domestico, industrial, subterráneo y meteorológico, estos suelen llamarse respectivamente, domesticas, industriales, de infiltración y pluviales. La composición de las aguas residuales se analiza con diversas mediciones físicas, químicas y biológicas. Las mediciones mas comunes incluyen: la determinación de contenido en sólidos, la demanda bioquímica de oxígeno (DBO5), la demanda química de oxígeno (DQO) y el pH. En cuanto al tratamiento propiamente dicho, se realiza por diferentes métodos, y se divide en tratamiento primario, secundario y terciario. Veremos en los siguientes renglones a qué se refiere cada uno de ellos. Tratamiento primario: Las aguas residuales que entran en una depuradora contienen materiales que podrían atascar o dañar las bombas y la maquinaria. Estos materiales se eliminan por medio de enrejados o barras verticales, y se queman o se entierran tras ser recogidos manual o mecánicamente. El agua residual pasa a continuación a través de una trituradora, donde las hojas y otros materiales orgánicos son triturados para facilitar su posterior procesamiento y eliminación. Los siguientes procesos son considerados como primarios: Cámara de arena: Se elimina el residuo mineral y se vierte en vertederos sanitarios. La acumulación de estos residuos puede ir de los 0,08 a los 0,23 m3 por cada 3,8 millones de litros de aguas residuales. Sedimentación: puede reducir de un 20 a un 40% la DBO5 y de un 40 a un 60% los sólidos en suspensión. Se eliminan más del 80% de los sólidos en suspensión. Flotación: se fuerza la entrada de aire en el agua residual, a presiones de entre 1,75 y 3,5 Kg. por cm2. La flotación puede eliminar más de un 75% de los sólidos en suspensión. Digestión: es un proceso microbiológico que convierte el lodo, orgánicamente complejo, en metano, dióxido de carbono y un material inofensivo similar al humus. Reduce el contenido en materia orgánica entre un 45 y un 60 por ciento. Desecación: el lodo digerido se extiende sobre lechos de arena para que se seque al aire. La absorción por la arena y la evaporación son los principales procesos responsables de la desecación. 12 Tratamiento secundario: Una vez eliminados de un 40 a un 60% de los sólidos en suspensión y reducida de un 20 a un 40% la DBO5 por medios físicos en el tratamiento primario, el tratamiento secundario reduce la cantidad de materia orgánica en el agua. Por lo general, los procesos microbianos empleados son aeróbicos, es decir, los microorganismos actúan en presencia de oxígeno disuelto. El tratamiento secundario supone, de hecho, emplear y acelerar los procesos naturales de eliminación de los residuos. En presencia de oxígeno, las bacterias aeróbicas convierten la materia orgánica en formas estables, como dióxido de carbono, agua, nitratos y fosfatos, así como otros materiales orgánicos. A continuación describiremos brevemente los procesos del tratamiento secundario. Filtro de goteo: una corriente de aguas residuales se distribuye intermitentemente sobre un lecho o columna de algún medio poroso revestido con una película gelatinosa de microorganismos que actúan como agentes destructores. El proceso de goteo, cuando va precedido de sedimentación, puede reducir cerca de un 85% la DBO5. Fango Activado: se trata de un proceso aeróbico en el que partículas gelatinosas de lodo quedan suspendidas en un tanque de aireación y reciben oxígeno. Las partículas de lodo activado, llamadas floc, están compuestas por millones de bacterias en crecimiento activo aglutinadas por una sustancia gelatinosa. El floc absorbe la materia orgánica y la convierte en productos aeróbicos Estanque de estabilización o laguna: Otra forma de tratamiento biológico es el estanque de estabilización o laguna, que requiere una extensión de terreno considerable y, por tanto, suelen construirse en zonas rurales. Las lagunas opcionales, que funcionan en condiciones mixtas, son las más comunes, con una profundidad de 0,6 a 1,5 m y una extensión superior a una hectárea. En la zona del fondo, donde se descomponen los sólidos, las condiciones son anaerobias; la zona próxima a la superficie es aeróbica, permitiendo la oxidación de la materia orgánica disuelta y coloidal. Puede lograrse una reducción de la DBO5 de un 75 a un 85 por ciento Tratamiento terciario: El tratamiento terciario, o de tercera fase, suele emplearse para eliminar el fósforo, mientras que el tratamiento avanzado podría incluir pasos adicionales para mejorar la calidad del efluente eliminando los contaminantes recalcitrantes. En el tratamiento terciario se emplean métodos biológicos avanzados para la eliminación del nitrógeno, y métodos físicos y químicos, tales como la filtración granular y la adsorción por carbono activado. La manipulación y eliminación de los residuos sólidos representa entre un 25 y un 50% del capital y los costes operativos de una planta depuradora Por lo general, el 90 por ciento de las aguas residuales municipales de la ZMVM permanece sin tratamiento y se desvía al exterior de la Cuenca de México a través del sistema general de drenaje. Las aguas residuales sin tratar se utilizan para irrigar 80,000 13 hectáreas de sembradíos en el Valle del Mezquital, en el Estado de Hidalgo, hacia el norte. La corriente que regresa de la irrigación se drena hacia tributarios del río Panuco, el cual desemboca en el Golfo de México. Aproximadamente el 10 por ciento de las aguas residuales tratadas en la ZMVM se reutiliza a nivel local en distintos proyectos, tales como la recarga de agua subterránea y la irrigación del paisaje urbano en la ciudad. Existen 22 plantas de tratamiento de aguas residuales en el Distrito Federal, las cuales tratan un flujo total de 2945 lps (litros por segundo) (Departamento del Distrito Federal, Sistema de Aguas del Distrito Federal, 2003). El cuadro 6 explica el flujo combinado durante las temporadas de lluvia y de seca, así como las características de las aguas residuales al salir de la cuenca a través del Gran Canal (flujo en tiempo de seca), o el drenaje profundo (flujo en tiempo de lluvia). Los valores que se otorgan a los múltiples contaminantes representan la concentración promedio para 1992. Cuadro 6. Características del flujo de aguas residuales en el Gran Canal al salir de Cuenca de México. Contaminantes Flujo en tiempo de estiaje Flujo en tiempo de lluvia Rango de concentración ligero medio fuerte Sólidos totales 1800 1800 350 720 1200 Sólidos totales disueltos 1611 1445 250 500 850 Sólidos totales suspendidos 179 357 100 220 350 Sólidos asentados mg/l 2 2,33 5 10 20 Nitrato 0,3 0,3 0 0 0 Nitrito 0,06 0,06 0 0 0 Total fósforo 30 30 4 8 15 DBO 240 187 110 220 400 Fuente: Sistema General de Drenaje de la Zona Metropolitana de la Ciudad de México. 1982 14 El cuadro 7 enlista las plantas de tratamiento en operación paras las áreas de servicio del Distrito Federal, indicándose el valor de su capacidad de diseño, la capacidad a la que realmente están operando y el tipo de tratamiento que proporcionan.(Sistema de Aguas de la Ciudad de México, 2003 ). El flujo total de las 22 plantas de tratamiento en el área de servicio del Distrito Federal (cuadro 7) equivale sólo al 41.42 por ciento de la capacidad para la que han sido diseñadas. Cuadro 7. Plantas de tratamiento de aguas residuales en el área de servicio del Distrito Federal Planta Abasolo Acueducto de Guadalupe Bosque de las Lomas Cerro de la Estrella Chapultepec Ciudad Deportiva Coyoacán El Llano El Rosario Iztacalco La Lupita Parres Pemex Picacho Reclusorio Sur San Andrés Mixquic San Juan de Aragón San Lorenzo S.L. Tlaxialtemalco San Miguel Xicalco San Nicolás Tetelco San Pedro Atocpan Tlatelolco Capacidad original LPS 15 80 55 4000 150 230 1200 250 30 13 15 1 25 30 30 500 225 150 7,5 20 60 22 Flujo real LPS 15 72 - 80 15 - 18 estiaje 2000 - 2100 lluvia 1000 - 1500 120 120 206 - 400 220 20 - 25 10 14 1 10 19 20 - 22 154 35 75 5-7 12 30 12 - 18 Tipo de Tratamiento Primario y secundario Primario y secundario Secundario Primario, secundario, terciario Primario, secundario Primario y secundario Primario y secundario Primario, secundario, terciario Primario, secundario, terciario Primario, secundario, terciario Primario y secundario Primario y secundario Primario y secundario Primario y secundario Primario y secundario Primario y secundario Primario y secundario Primario, secundario, terciario Primario y secundario Primario y secundario Secundario Primario y secundario Fuente: Benton y Asociados, S.A. Estudio para diagnosticar el funcionamiento actual en las plantas de tratamiento de agua residual que opera el sistema de aguas de la Ciudad de México. Sistema de Aguas de la Ciudad de México. Gobierno del Distrito Federal. Secretaría del Medio Ambiente. 2003. 15 Problema El incremento de la demanda de agua potable y el hecho de que cada vez sea más difícil obtenerla nos plantea un serio problema de abasto de agua en el Distrito Federal. Esto nos obliga a buscar soluciones viables que puedan ser puestas en marcha a corto plazo, ya que se corre el riesgo de una sobreexplotación del manto acuífero, lo que a futuro representaría el no poder contar con esta fuente. Esto obligaría a obtener agua potable de fuentes externas, lo que a su vez, ocasionaría problemas de abasto a otras zonas del país. Hipótesis Lo anteriormente expuesto nos lleva a buscar la forma en que menos agua alcance para satisfacer la demanda actual de agua potable en la Ciudad de México. Una alternativa viable es el reuso de las aguas residuales, ya que efectivamente el agua tratada puede sustituir el uso de agua potable en el riego de áreas verdes, la industria y servicios, permitiendo que más agua potable sea destinada al consumo humano. Actualmente, a pesar de que ya existen 22 plantas de tratamiento de aguas residuales en el Distrito Federal, éstas sólo trabajan al 41.42% de su capacidad. Esto se debe al deterioro del equipo, problemas mecánicos o eléctricos o, en su caso, la falta de equipo. Por lo tanto la solución a dicho problema sería el mantenimiento de este equipo o en caso de ser necesario, el cambio total del equipo utilizado en el tratamiento. Entre éste, podemos mencionar el equipo de bombeo, sistema de rastras, de dosificación de cloro, sistemas de inyección de aire (sopladores) y de aereación superficial. Comprobación de la hipótesis Para comprobar lo anterior analizaremos las condiciones de las 22 plantas de tratamiento de aguas residuales del Distrito Federal. Los siguientes datos fueron tomados de: Benton y Asociados, S.A., Estudio para diagnosticar el funcionamiento actual en las plantas de tratamiento de agua residual que opera el sistema de aguas de la Ciudad de México. Sistema de Aguas de la Ciudad de México. Gobierno del Distrito Federal. Secretaría del Medio Ambiente. 2003. págs. 447 y 448. Planta 1- Cerro de la Estrella Delegación Iztapalapa Gasto LPS 1500 Observaciones: Los tanques sedimentarios primarios se encuentran de forma precaria, el 30% de su capacidad se encuentra fuera de servicio por problemas en el sistema de rastras, el sistema de aeración se encuentra prácticamente fuera de servicio, de los 36 aereadores superficiales sólo funcionan 5 y de los tres sopladores sólo funciona uno. 16 Planta 2- El Llano Delegación Tláhuac Gasto LPS 220 Observaciones: No se encuentra funcionando el sistema de tratamiento a base de rayos ultravioleta, parte de los servicios de sistema de aeración se encuentra fuera de servicio y también se encuentra fuera de servicio el sistema de absorción con carbón activado. Planta 3- El Rosario Delegación Azcapotzalco Gasto LPS 20-25 Observaciones: En el pretratamiento las compuertas de entrada no cuentan con los equipos necesarios ni los reactivos para llevar a cabo un monitoreo completo de la calidad de agua a través del proceso de tratamiento, en el tanque sedimentador primario se tiene el problema de que el equipo de rastras no llega hasta el fondo del tanque, por lo que se ocasiona la acumulación de lodos. Planta 4- Iztacalco Delegación Iztacalco Gasto LPS 15 Observaciones: En el pretratamiento no se cuenta con un desarenador, no se cuenta con un laboratorio para el monitoreo de las aguas, y no se cuenta con el sistema de tratamiento de lodos. Los equipos en general de la planta se encuentran en condiciones de deterioro. Planta 5- San Luis Tlaxialtemalco Delegación Xochimilco Gasto LPS 75 Observaciones: Se encuentra fuera de operación el tanque de almacenamiento de llegada, al cual se le inyectaba aire; el tanque de sedimentación secundaria presenta cierta desnivelación. Aunque se cuenta con el sistema de tratamiento de lodos, el 50% se vierte en los drenajes, tiene un laboratorio en malas condiciones, con materiales y reactivos caducos e inexistentes. Planta 6- Abasolo Delegación Tlalpan Gasto LPS 15 Observaciones: No cuenta con desarenador, no cuenta con tanque sedimentador primario, el tanque sedimentador secundario presenta una ligera desnivelación debido a los asentamientos, en el sistema de tratamiento de lodos, el tanque digestor no cuenta con sistema de retorno, no cuenta con laboratorio para monitoreo del agua. Planta 7- Acueducto de Guadalupe Delegación Tlalpan Gasto LPS 72-80 Observaciones: La planta no cuenta con sistema de tratamiento de lodos, todos los módulos se encuentran trabajando en perfectas condiciones, esta planta esta concesionada a la empresa “Aguas Industriales de Vallejo, S.A. de C.V.”. 17 Planta 8- Bosque de las Lomas Delegación Miguel Hidalgo Gasto LPS 15-18 Observaciones: Esta planta no cuenta con tanque sedimentador primario, de los tres módulos de aeración solo trabaja uno. Los dos restantes funcionan como contenedores de aguas tratadas, no cuenta con sistema de tratamiento de lodos. Planta 9-Chapultepec Delegación Miguel Hidalgo Gasto LPS 120 Observaciones: Esta constituido por dos unidades de tratamiento, el sistema de medición de oxígeno de la segunda unidad esta fuera de servicio, el sistema de tratamiento de lodos el tanque digestor se encuentra fuera de operación, por lo que los lodos producidos son enviados al drenaje. Planta 10- Ciudad Deportiva Delegación Iztacalco Gasto LPS 120 Observaciones: Se cuenta con las instalaciones de un laboratorio el cual carece de material y equipo, la dosificación de gas cloro en el tratamiento de desinfección, según el responsable de la planta, no se lleva a cabo de forma adecuada. No se cuenta con el sistema de tratamiento de lodos. Planta 11- Coyoacán Delegación Coyoacán Gasto LPS 260-400 Observaciones: Se tienen 3 tanques sedimentadotes primarios (aereación) de los cuales dos están fuera de servicio, los problemas en su cimentación han ocasionado fisuramientos que permiten la fuga de agua, no cuenta con laboratorio para el monitoreo de la calidad del agua, el cual es realizado por un laboratorio externo. No se cuenta con el sistema de tratamiento de lodos. Planta 12- La Lupita Delegación Tlahuac Gasto LPS 14 Observaciones: El tanque sedimentador primario, tanque de aeración y tanque sedimentador secundario presentan fuertes asentamientos. Planta 13- Parres Delegación Tlalpan Gasto LPS 10 Observaciones: Los equipos en general se encuentran en condiciones de operación, sin embargo algunos se presentan deteriorados, en el sistema de tratamiento de lodos el tanque espesador se encuentra fuera de servicio, los lodos son depositados en la periferia de la planta. 18 Planta 14- Pemex Picacho Delegación Tlalpan Gasto LPS 10-12 Observaciones: Los equipos se encuentran trabajando de forma adecuada, el proceso se realiza sin contratiempos. Aunque se tiene sistema de tratamiento de lodos, éstos, una vez terminado su proceso en el lecho de secado, son enviados al sistema de drenaje. Planta 15- Reclusorio Sur Delegación Xochimilco Gasto LPS 19 Observaciones: En el tanque de aereación se sustituyó el sistema de inyección a través de los sopladores por el sistema de aereadores superficiales, no se cuenta con sistema de tratamiento de lodos, no se cuenta con laboratorio para el monitoreo del agua. Planta 16- San Andrés Mixquic Delegación Tláhuac Gasto LPS 20-22 Observaciones: Se cuenta con dos tanques sedimentarios primarios y una torre de mezcla donde se agrega al agua sulfato de aluminio y a los tanques polímeros, para ayudar al proceso de sedimentación. No se cuenta con tanques sedimentarios secundarios, no se cuenta con laboratorios para el monitoreo de la calidad del agua, en el sistema de tratamiento de lodos se cuenta con el tanque espesador y los lodos producidos en este, son tirados al drenaje. Planta 17- San Juan de Aragón Delegación Gustavo A. Madero Gasto LPS 154 Observaciones: Esta constituida por dos unidades de tratamiento y actualmente sólo se encuentra funcionando una. Es necesario que se lleven a cabo trabajos de topografía, ya que es posible que algunos módulos presenten asentamientos, ya que el encargado de la planta indicó que existen filtraciones en la parte inferior del módulo de aeración. No se cuenta con el sistema de tratamiento de lodos, y no se utiliza el depósito de almacenamiento de aguas tratadas. Planta 18- San Lorenzo Delegación Tláhuac Gasto LPS 20-22 Observaciones: En la fase de pretratamiento no se cuenta con un desarenador, las compuertas de entrada no funcionan adecuadamente, Uno de los tres módulos de los reactores biológicos presenta agrietamientos. Aunque se cuenta con el sistema con el sistema de tratamiento de lodos con los tanques digestor y espesador, una vez que el agua y los lodos terminan sus estancias en éstos, los lodos son devueltos al drenaje ya que se encuentra fuera de operación la plancha de secado de lodos. No se cuenta con un generador de energía para emergencias. 19 Planta 19- San Miguel Xicalco Delegación Tlalpan Gasto LPS 7 Observaciones: No cuenta con equipo de medición del caudal, el equipo esta deteriorado y es muy viejo, no se cuenta con desarenador. Se han encontrado lombrices en el tanque aereador primario, cuentan con sistema de tratamiento de lodos pero se regresan al drenaje, al igual que el agua tratada, no tiene equipo de cómputo, no tiene conexión adicional para cargar el líquido tratado en pipas. Planta 20- San Nicolás Tetelco Delegación Tlalpan Gasto LPS 12 Observaciones: No tiene desarenador, no cuenta con equipo de seguridad, no se cuenta con sistema de rastras, solo trabaja un turno en el proceso (7:00 a 3:00). Los lodos son tratados pero se integran al drenaje nuevamente, no cuenta con sistema de lechos de secado, no tiene equipo de cómputo, no tienen generador de energía para emergencias, si se va la luz se tiene que reiniciar el tratamiento. Planta 21- San Pedro Atocpan Delegación Milpa Alta Gasto LPS 30 Observaciones: No tiene desarenador para evitar daños a equipos mecánicos, cuenta con tanque de almacenamiento para lodos pero no está funcionando; por lo tanto los lodos no se tratan y se regresan al drenaje El 30% del agua tratada se usa para riego de áreas verdes de la planta y el 70% se devuelve al drenaje, no cuenta con generador de luz, los vertedores periféricos están desnivelados por los asentamientos diferenciales, no cuentan con equipo de seguridad para emergencias lo cual es importante por que en esta planta se manejan químicos. Planta 22- Tlatelolco Delegación Cuauhtémoc Gasto LPS 12 a 18 Observaciones: Presenta problemas de azolve en la caja de distribución y tuberías, no hay tubería adicional que desaloje el agua de mantenimiento al canal desarenador, el medidor de flujo vertedor no cuenta con graduación. Existe una desnivelación de vertedores periféricos para la colección de agua clarificada debido a asentamientos diferenciales, el motor de sistema de rastreo es muy antiguo, no cuenta con tanque de cloro, el dosificador de cloro esta a gran distancia del módulo por lo que no se usa y el motor está en mantenimiento. La planta tiene generador de luz pero no funciona y no se ha reparado, los lodos no son tratados y son devueltos al drenaje, el laboratorio esta en malas condiciones y falta material para monitorear la calidad del agua. No cuentan con equipo de seguridad para casos de accidente o emergencia, no llega suficiente agua para tratar. 20 Conclusiones Como hemos podido comprobar en los datos anteriores, en las plantas de tratamiento de aguas residuales existe equipo deteriorado, que debe ser reparado, cambiado o en su caso adquirido, debido a que no se cuenta con él. El hecho de realizar este mantenimiento o adquisición permitiría que las plantas trabajaran al menos a un 80 % de su capacidad real, lo que permitiría obtener un volumen de 5686 lps que podrían ser aprovechados en el riego de áreas verdes, la industria, servicios o infiltración. Actualmente la Ciudad de México recibe 35,000 lps de agua potable, y las plantas de tratamiento de aguas residuales tratan sólo 2945 lps. El correcto funcionamiento de las plantas de tratamiento de aguas residuales permitiría que se trataran 7108.5 lps, aún si sólo trabajan a un 80 % de su capacidad real se obtendría el volumen mencionado de 5686 lps de agua tratada. Esto permitiría que esta agua tratada substituyera al agua potable en diversos usos, permitiendo que ésta última se destinara al uso humano. Con ello se reduciría el problema de abasto de agua que actualmente se padece. Aunque aparentemente el ahorro representa un pequeño porcentaje en comparación con el abasto diario de agua potable del Distrito Federal, si consideramos que de éste total, el 14% (4950 lps) es obtenido del Sistema Lerma y lo comparamos con el óptimo uso de las aguas tratadas, que representaría un ahorro del 20.31% del agua potable que recibe al día el Distrito Federal, podemos notar que se trata de una cantidad significativa. En el cuadro 8 podemos verificar que el agua tratada actualmente si tiene un uso real, que es posible utilizarla en diferentes sectores. Es importante comentar que el tipo de empresas en que el agua tratada puede usarse es muy diverso. Por ejemplo, tenemos los casos de las plantas de El Rosario y Ciudad Deportiva, de las que un 10% y un 70% del agua que actualmente tratan respectivamente, es usada por Bimbo y Marinela, empresas del sector alimenticio. Cuadro 8. Uso del agua residual obtenida de las 22 Plantas de tratamiento de aguas residuales en el área de servicio del Distrito Federal. Planta Abasolo Riego 100% Campo deportivo y Víveros 100 % Zona Industrial Vallejo Acueducto de Guadalupe Bosque de las Lomas Industria 100 % Av. Palmas y Reforma 21 Servicio Infiltración Planta Riego Industria Cerro de la Estrella 81% 9.5 % Chapultepec 30% 70% 30 % Áreas verdes 70 % Bimbo, fábricas Zona Oriente y lavado de autos Ciudad Deportiva Coyoacán 87 % Parque Hundido, Parque de los Venados El Llano 100 % Hortalizas cercanas a la planta El Rosario 30 % Parque Tezozomoc, Alameda Norte y 10 % UAM Bimbo, Marinela Iztacalco 100 % Áreas verdes de la unidad habitacional La Lupita 100 % Zona aledaña a la planta Pemex Picacho 95 % Unidad habitacional Pemex Reclusorio Sur 100% 5% Hospital de Pemex 22 Infiltración 7.67 % 1.83 % Camellones y Laguna Sierra de establecimientos Santa Catarina 11 % Comercios 11 % Comercios 100% Planta de agregados pétreos y asfalto Parres Servicio 60 % Lago Tezozomoc Planta San Andrés Mixquic Riego Industria Servicio 100 % A través de canales San Juan de Aragón 20% Áreas verdes y camellones San Lorenzo 100 % Bosque y áreas verdes 60 % Lagos 20% Zoológico (Distribución por pipas) 80% 20 % Canales de drenaje San Miguel Xicalco 80 % Campo deportivo y áreas verdes 20 % Canales de drenaje San Nicolás Tetelco 100% S.L. Tlaxialtemalco 30 % Áreas internas de la San Pedro Atocpan planta Tlatelolco Infiltración 90 % Instalaciones del IPN y campo de Fútbol 70 % Canales de drenaje 9% Enfriamiento de equipo industrial 1% Lavado de autos Fuente: Benton y Asociados, S.A. Estudio para diagnosticar el funcionamiento actual en las plantas de tratamiento de agua residual que opera el sistema de aguas de la Ciudad de México. Sistema de Aguas de la Ciudad de México. Gobierno del Distrito Federal. Secretaría del medio ambiente. 2003. Destaca en esta tabla que tres de las plantas, San Luis Tlaxialtemalco, San Miguel Xicalco y San Pedro Atocpan, indicadas en el cuadro, devuelvan parte del agua tratada al drenaje, lo que significa un grave desperdicio, tanto de recursos como de trabajo, cuando, como hemos visto puede dársele un uso útil. 23 Bibliografía Benton y Asociados, S.A. Estudio para diagnosticar el funcionamiento actual en las plantas de tratamiento de agua residual que opera el sistema de aguas de la Ciudad de México. Sistema de Aguas de la Ciudad de México. Gobierno del Distrito Federal. Secretaría del medio ambiente. 2003. Comisión Nacional del Agua. Estadísticas del Agua en México, 2003. México, 2003 Comisión Nacional del Agua. Programa Nacional Hidráulico 2001-2006. Departamento del Distrito Federal Sistema general de drenaje de la Zona Metropolitana de la Ciudad de México. 1982. D.D.F. y Colegio de México Atlas de la Ciudad de México, fascículo 2. Características fisicogeográficas y primeros pobladores de la Cuenca del Valle de México. 1988. Dirección General de Construcción y Operación Hidráulica. Secretaría de Obras y Servicios. Plan Maestro de Agua Potable del Distrito Federal 1997-2010. Julio 1997. Lesser y Asociados Balance Geohidrológico y Recarga Artificial en la Zona Metropolitana de la Ciudad de México. Dirección General de Construcción y Operación Hidráulica. Secretaría de Obras y Servicios. 1996. . 24