libro guadiana estado ecologico

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ESTADO ECOLÓGICO DE LAS MASAS
DE AGUA DE LA CONFEDERACIÓN
HIDROGRÁFICA DEL GUADIANA
(2005-2006)
Edita
Confederación Hidrográfica del Guadiana
Imprime
Dep. Legal
V-3712-2009
PRESENTACIÓN
Las Comisarías de Aguas llevan muchos años vigilando la calidad de las aguas de ríos y
embalses, para lo cual han dedicado un volumen creciente de medios técnicos y humanos
tanto en sus propios laboratorios de análisis como en la ampliación y explotación de las redes
de control de calidad físicoquímica. A partir del año 2000 iniciaron o reforzaron sus redes de
control biológico con el fin de poder evaluar el estado ecológico de las masas de agua y cumplir así con las nuevas directrices sobre la gestión y la planificación hidrológica introducidas
por la Directiva Marco del Agua. Ya en 2001, la Comisaría de Aguas del Guadiana abordó el
establecimiento de la nueva red biológica, complementaria del resto de redes existentes de
calidad y determinó unas condiciones de referencia y una tipología fluvial de la cuenca preliminares, así como otros avances en cumplimiento de la nueva Directiva.
Hoy comprobamos que ha sido ardua la puesta en marcha de estas redes biológicas porque
ha forzado a trasladar al mundo de la gestión hidrológica conceptos de la ecología del agua,
que se inscribían hasta ahora en los ámbitos de la investigación y la universidad. En este sentido, la Directiva Marco ha actuado como locomotora de la limnología “aplicada” en sus diferentes y múltiples campos, instada para dotar a la Administración ambiental de un sistema de
protocolos de muestreo y de índices biológicos con suficiente funcionalidad y aplicabilidad.
Además, la Directiva ha servido para reunir en los mismos foros a organismos y estamentos
que se hallaban inconexos: gestores de la calidad de las aguas, de la planificación hidrológica, investigadores de diversos campos de la limnología y empresas del sector, por lo que han
sido necesarios entendimiento y coordinación y que las diferentes cuencas los desarrollaran,
en lo posible, con criterios y procedimientos homogéneos. Esa función de coordinación ha
sido asumida de modo notable por la Dirección General del Agua del Ministerio de Medio
Ambiente y ha permitido dar orden y coherencia al proceso de aplicación de la Directiva. En
este proceso destacan trabajos fundamentales sobre los cuales se basa el resto, como la delimitación y tipificación de masas de agua (ríos, lagos y embalses) para todo el estado español
–uno de los trabajos elaborados por el CEDEX-, los ejercicios de intercalibración con otros
Estados miembros, los primeros esbozos de condiciones de referencia, etcétera.
Este documento no es solo el resultado del trabajo de dos años de campañas de la red biológica en nuestra cuenca sino del esfuerzo mencionado de coordinación y normalización de criterios, métodos y protocolos para implantar las redes de control biológico. Esfuerzo que continúa con el horizonte principal e inmediato de evaluar el estado de las masas de agua, en base
al cual establecer programas de medidas adecuados para alcanzar los objetivos ambientales
en cada una de ellas y obtener para todas el buen estado en el año 2015. Todos estos contenidos formarán parte del Plan Hidrológico de Cuenca de 2009 para el ciclo de seis años. Deseo
y espero que entre todos los implicados consigamos cumplir ese difícil reto de 2015.
Samuel Moraleda Ludeña
Comisario de Aguas de la Confederación Hidrográfica del Guadiana
Este estudio ha sido realizado por la Confederación Hidrográfica del Guadiana con la colaboración y asistencia técnica de
URS y Red Control. Los trabajos se iniciaron gracias al apoyo y autorización del entonces Comisario de Aguas del Guadiana,
D. Timoteo Perea Tribaldos
CONFEDERACIÓN HIDROGRÁFICA DEL GUADIANA
Director del Estudio:
D. Ángel Nieva Pérez
URS
Miguel Alonso García-Amilibia
Carmen Coleto Fiaño
David Sàez Aragay
Ana García Murcia
Eulalia Viñals Kosters
Xavier Julià Pla
Enric Aparicio Manau
Pau Torrents Daganzo
Elisabeth Fernández Morán
Rosa Casanovas Berenguer
Romina Álvarez Troncoso
Claudia Martins
Francesca Casadesús Casanovas
Josefa Nolla Querol
Elvira Romans García
Isabel Miró Mas
Gloria González Peña
Dirección de los trabajos, análisis de zooplancton y redacción
de informes
Coordinación del estudio y trabajo de campo
Coordinación, trabajo de campo y redacción de informes
Base de datos, análisis de fitoplancton y trabajo de campo
Análisis de bentos y trabajo de campo
Trabajo de campo
Trabajo de campo
Trabajo de campo
Trabajo de campo
Trabajo de campo, identificación de macrófitos
Trabajo de campo
Trabajo de campo
Trabajo de campo
Análisis de fitopláncton
Análisis de bentos
Trabajo de gabinete
Supervisión trabajo de gabinete
REDCONTROL
Miguel Angel Martínez Muro
Ana Mª Pujante Mora
Sara Rodríguez García
Luís Ruiz Ramos
Lorena Martínez Roser
Borja Peris Aubary
Ester López Pérez
Miriam Ibañez Solaz
Beatriz Segura Avilés
Dirección de los trabajos
Coordinación del estudio, redacción de informes y redactora del
libro
Análisis de bentos y redacción de informes
Análisis de bentos y redacción de informes
Análisis de bentos
Análisis de bentos
Redacción de informes
Análisis de bentos
Análisis de bentos
COLABORADORES EXTERNOS
José Prenda (Universidad de Huelva)
Virgilio Hermoso (Universidad de Huelva)
Francisco Blanco (Universidad de Huelva)
Sergi Sabater (Universitat de Girona)
Gemma Urrea (Universitat de Girona)
Joan Pino (Universitat Autònoma de Barcelona)
4
Dirección de los trabajos de peces
Trabajo de campo y redacción de informes
Trabajo de campo y redacción de informes
Dirección de los trabajos de fitobentos
Trabajo de campo, análisis de diatomeas y redacción de informes
Análisis de datos de macrófitos
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
1. INTRODUCCIÓN
2. ÁREA DE ESTUDIO
3. RÍOS
3.1. ELEMENTOS BIOLÓGICOS
3.1.1. Macroinvertebrados
3.1.1.1. Procedimiento
3.1.1.2. Resultados
3.1.2. Diatomeas
3.1.2.1. Procedimiento
3.1.2.2. Resultados
3.1.3. Macrófitos
3.1.3.1. Procedimiento
3.1.3.2. Resultados
3.1.4. Peces
3.1.4.1. Procedimiento
3.1.4.2. Resultados
3.2. ELEMENTOS HIDROMORFOLÓGICO
3.2.1. Calidad del hábitat fluvial
3.2.1.1. Procedimiento
3.2.1.2. Resultados
3.2.2. Calidad de la ribera
3.2.2.1. Procedimiento
3.2.2.2. Resultados
3.3. ELEMENTOS FÍSICO-QUÍMICOS
3.3.1. Procedimiento
3.3.2. Resultados
3.4. VALORACIÓN DEL ESTADO ECOLÓGICO
3.4.1. Procedimiento
3.4.2. Resultados
4. EMBALSES
4.1. ELEMENTOS BIOLÓGICOS
4.1.1. Fitoplancton y pigmentos fotosintéticos
4.1.1.1. Procedimiento
4.1.1.2. Resultados
4.1.2. Zooplancton
4.1.2.1. Procedimiento
4.1.2.2. Resultados
4.1.3. Peces
4.1.3.1. Procedimiento
4.2. ELEMENTOS HIDROMORFOLÓGICOS
4.3. ELEMENTOS FÍSICO-QUÍMICOS
4.3.1. Procedimiento
4.3.2. Resultados
4.4. VALORACIÓN DEL POTENCIAL ECOLÓGICO
5
4.4.1. Procedimiento
4.4.2. Resultados
5. HUMEDALES
5.1. ELEMENTOS BIOLÓGICOS
5.1.1. Fitoplancton y pigmentos fotosintéticos
5.1.1.1. Procedimiento
5.5.1.2. Resultados
5.1.2. Macrófitos
5.1.2.1. Procedimiento
5.1.2.2. Resultados
5.1.3. Microinvertebrados bentónicos
5.1.3.1. Procedimiento
5.1.3.2. Resultados
5.1.4. Macroinvertebrados bentónicos
5.1.4.1. Procedimiento
5.1.4.2. Resultados
5.1.5. Peces
5.1.5.1. Procedimiento
5.1.5.2. Resultados
5.2. ELEMENTOS HIDROMORFOLÓGICOS
5.2.1. Procedimiento
5.2.2. Resultados
5.3. ELEMENTOS FÍSICO-QUÍMICOS
5.3.1. Procedimiento
5.3.2. Resultados
5.4. VALORACIÓN DE LA CALIDAD ECOLÓGICA
5.4.1. Procedimiento
5.4.2. Resultados
6. CONCLUSIONES
6.1. RÍOS
6.1.1. Indicadores biológicos
6.1.2. Indicadores hidromorfológicos y físico-químicos
6.1.3. Estado ecológico de los ríos
6.2. EMBALSES
6.2.1. Potencial ecológico de los embalses
6.3. HUMEDALES
6.3.1. Indicadores biológicos y físico-químicos
6.3.2. Indicadores hidromorfológicos
6.3.3. Estado ecológico
7. BIBLIOGRAFÍA
6
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
1. INTRODUCCIÓN
La Directiva Marco del Agua (Directiva
2000/60/CE, de 23 de octubre), establece la
necesidad de llevar a cabo diversas tareas relacionadas con la planificación y gestión de
las masas de agua existentes en el territorio
comunitario. Entre estas tareas está la de realizar un seguimiento del estado de las aguas
superficiales, subterráneas y zonas protegidas (Artículo 8 de la Directiva). Para dar respuesta a esta necesidad la Confederación
Hidrográfica del Guadiana incluye entre sus
redes de control la red biológica, cuyo objetivo fundamental es el seguimiento del estado de las diversas masas de agua superficiales de las cuencas del Guadiana y de los ríos
Tinto, Odiel y Piedras.
Para determinar el estado de las masas de
agua superficiales es necesario el análisis de
los tres tipos de indicadores que señala la Directiva: indicadores biológicos, indicadores
hidromorfológicos e indicadores fisico-químicos. El objetivo es llegar a la clasificación
del estado ecológico de cada masa de agua
en las cinco categorías siguientes: muy bueno, bueno, moderado, deficiente y malo. El
estado ecológico quedará definido por el
menor de los valores de los resultados obtenidos de los indicadores analizados.
El principal objetivo de la red de control biológico de la cuenca del Guadiana es aportar
información que permita conocer la calidad
de los ecosistemas acuáticos de la cuenca y
valorar el estado ecológico de las masas de
agua, de las tres categorías de agua epicontinentales: ríos, masas de agua muy modificadas (embalses) y lagos (humedales).
En este estudio se presentan los resultados
obtenidos durante el diseño de la red biológica realizado entre 2005 y 2006. Durante
este periodo se ha llevado a cabo, en primer
lugar, el diseño de una red de estaciones
que garantice el seguimiento y control bio-
lógico de las masas de agua superficiales de
las cuencas objeto de estudio, y posteriormente la explotación de esta red mediante
los muestreos y análisis de los diferentes indicadores para poder diagnosticar adecuadamente el estado ecológico, o potencial
ecológico para el caso de los embalses, en
que se encuentran esas masas de agua.
2. ÁREA DE ESTUDIO
La cuenca del Guadiana se sitúa en el cuadrante suroccidental de la Península Ibérica.
La superficie total de la cuenca es de 67.133
km2, repartidos entre España (55.514 km2) y
Portugal (11.525 km2). La parte española de la
cuenca limita al norte con la cuenca del Tajo,
al este con las cuencas del Júcar y el Segura,
y al sur con la del Guadalquivir. Cuenta con
33.707 km de red fluvial, de los que alrededor
de 848 corresponden al eje del Guadiana,
con unas aportaciones medias anuales de
6.863 Hm3 (http://www.chguadiana.es/).
La geología dominante en la cuenca es silícea, con algunas zonas calcáreas y carbonatadas ubicadas fundamentalmente en la
cuenca alta del Guadiana y en las cabeceras
de las cuencas de los ríos Matachel, Alcarrache y Ardila. Se trata de una zona poco
poblada, con un total de 1.472.800 habitantes en la parte española de la cuenca según
datos del censo de 2005, y una densidad de
población media de 26,53 hab/km2, que
pasa por ser de las más bajas de España.
Los usos del agua se centran fundamentalmente en el aprovechamiento agrícola. La
extensión de regadíos es significativa en la
cuenca alta, las vegas extremeñas y la llanura
costera de Huelva. Gran parte de estos regadíos, especialmente en la cuenca del Gigüela, se abastecen de agua subterránea, con un
consumo medio anual de 785 Hm3. La
sobreexplotación de los acuíferos manchegos ha provocado un importante descenso
7
de los niveles freáticos y fuertes alteraciones
en la hidrología natural de la cuenca alta del
Guadiana, y se ha convertido en uno de los
principales retos ambientales a superar por
parte de los gestores de la cuenca y de la
población de este territorio. En cuanto a las
aguas superficiales, el consumo por regadío
es de 1.056 Hm3 anuales de media. El suministro de estos volúmenes de agua va ligado
a las infraestructuras hidráulicas de regulación y transporte. Los embalses de la cuenca,
entre los que se encuentran algunos de los
más grandes de España, suman una capacidad total de almacenamiento de 9.114 Hm3
de agua. La distribución del agua embalsada
se realiza a través de una extensa red de
canales que la traslada desde los embalses a
las principales áreas de regadío.
En la provincia de Huelva, al sur de Sierra
Morena, entre las cuencas del Guadiana y del
Guadalquivir se encuentran tres pequeñas
cuencas con salida directa al mar: son las
cuencas de los ríos Tinto, Odiel y Piedras, con
una superficie total de 4.847 km2. Pese a
encontrarse íntegramente en territorio
andaluz, hasta el año 2005 la administración
competente en la gestión de los recursos
hídricos de estas cuencas era la Confederación Hidrográfica del Guadiana, y por ese
motivo son parte integrante del ámbito territorial de este estudio.
Figura 1. Localización de las estaciones de muestreo de la red biológica en los ríos del ámbito de la Confederación
Hidrográfica del Guadiana.
3. RÍOS
Los ríos son, con mucha diferencia, la categoría con un mayor número de masas de agua
y por lo tanto son a su vez los que tienen un
8
número más elevado de estaciones de la red
de control biológico. Durante la realización
de los trabajos entre los años 2005 y 2006 se
muestrearon un total de 276 estaciones diferentes en ríos de las cuencas del Guadiana y
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
del Tinto, el Odiel y el Piedras. En la Figura 1
se localizan los puntos de muestreo ubicados en la red fluvial. En la Tabla 1 (en el
anexo) se dan los datos de dichos puntos.
Siguiendo la tipología definida por el CEDEX
(2005) para los ríos de la Península Ibérica, los
ríos de la cuenca del Guadiana se incluyen
en siete tipos (Tabla 2), cada uno de estos
tipos se distribuye en una o varias zonas (Figura 2) y posee unas características determinadas que pueden influir en los resultados
de los parámetros e índices estudiados. Por
este motivo los resultados se han analizado,
no solo para el conjunto de toda la cuenca y
por campaña, sino también por tipos.
Figura 2. Distribución de los tipos fluviales (CEDEX, 2005) presentes en la CHG y en las cuencas de los ríos Tinto,
Odiel y Piedras.
Tabla 2. Tipos presentes en la CHG y en las cuentas de los ríos Tinto, Odiel y Piedras.
TIPO
1
2
5
6
8
16
17
18
19
DENOMINACIÓN DEL TIPO
Ríos de llanuras silíceas del Tajo y Guadiana
Ríos de la depresión del Guadalquivir
Ríos manchegos
Ríos silíceos del piedemonte de Sierra Morena
Ríos de la baja montaña mediterránea silícea
Ejes mediterráneo-continentales mineralizados
Grandes ejes en ambiente mediterráneo
Ríos costeros mediterráneos
Ríos Tinto y Odiel
9
3.1. ELEMENTOS BIOLÓGICOS
3.1.1. Macroinvertebrados
El muestreo de macroinvertebrados bénticos se realizó en todas las estaciones muestreadas durante las cinco campañas, dos en
2005 y tres en 2006. A lo largo de esas 5 campañas se han realizado un total de 469 muestreos, la mayoría en las campañas de invierno 2005 y primavera 2006.
3.1.1.1. Procedimiento
La recogida de las muestras en campo se
realizó con una red de mano de 250 μm de
luz de malla y una boca de entrada de 30 cm
de diámetro, con un muestreo de 3 minutos
en cada uno de los hábitats presentes en el
tramo a muestrear que se completaba con el
levantamiento de piedras en las que puede
haber organismos adheridos. Una vez obtenida la muestra, decantada el agua y eliminados palos, piedras, hojas o cualquier otro
desecho, se fijó con formol para su conservación hasta el momento de ser procesada en
el laboratorio.
La separación de las muestras en el laboratorio se realizó mediante su lavado en una torre
de tamices de tamaños de luz de malla
decrecientes (2 mm, 1 mm, 0,5 mm) y la recolección de los macroinvertebrados presentes
que se conservaron en etanol al 70% + glicerina (proporción 9:1). En el caso de muestras
de gran tamaño la separación se realizó
mediante submuestreo de 1/8 de la muestra.
La identificación de los macroinvertebrados
se llevó a cabo mediante lupas binoculares,
llegando al nivel taxonómico más bajo posible, para lo que se ha utilizando bibliografía
general y específica para cada grupo.
10
seguido de la familia Simuliidae en tres de las
campañas. También aparecen como los taxones más abundantes la clase Oligochaeta,
la familia Baetidae y la especie Physella acuta.
Destaca la abundancia de la familia Capniidae (Plecopteros) en la campaña de invierno
de 2006. Por último mencionar que la campaña de otoño de 2006 no sigue las mismas
pautas que las demás, siendo el taxón más
numeroso la especie Potamopyrgus antipodarum (Molusco de la familia Hydrobiidae)
seguida de la familia Hydropsychidae (Tricopteros).
A lo largo de las cinco campañas se han
encontrado familias de macroinvertebrados
que, si bien no destacan por su abundancia,
lo hacen por tratarse de especies alóctonas
que han desplazado a la fauna autóctona, tal
es el caso del cangrejo rojo americano, Procambarus clarkii, que ha desplazado al cangrejo autóctono Austropotamobius pallipes
lusitanicus y que actualmente se encuentra
ampliamente distribuido por toda la cuenca,
estando presente en 127 de las 258 estaciones muestreadas.
Otra especie alóctona que destaca por su carácter invasivo es la almeja asiática, Corbicula
fluminea (Figura 3). Su presencia se reduce a
3.1.1.2. Resultados
Figura 3. La almeja asiática (Corbicula fluminea) es una
especie invasora presente en la cuenca del
Guadiana.
La familia Chironomidae es el taxón más
abundante en cuatro de las cinco campañas,
tres estaciones: la F086 (río Guadiana) y la
F139 (río Guadajira), situadas en la zona occi-
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
Figura 4. Los tricópteros de la familia Goeridae son
muy raros en la Península Ibérica.
BMWP que incluye familias que no estaban
presentes en el original y que son frecuentes
en nuestro país. El cálculo de este índice
consiste en la suma de las puntuaciones de
las familias de macroinvertebrados presentes
en cada muestra. Esta puntuación varía del 1
al 10 y se asigna en función de su tolerancia a
la contaminación, de forma que las familias
más exigentes en cuanto a la calidad del
agua tienen valores más altos. La suma de los
valores de todas las familias capturadas da un
dental de la cuenca, y una tercera, la F179
(río Piedras), en la zona sur. La F179 se muestreó en invierno de 2005 y la F136 en invierno y primavera de 2005. En las tres ocasiones
se encontró esta especie. En la F086 la Corbicula fluminea apareció en la campaña de primavera de 2005, pero no se detecto en las
dos campañas posteriores en las que se
muestreó esta estación (invierno y otoño de
2006). El río Guadajira es un afluente que
desemboca en el Guadiana aguas arriba de
la estación F086, por lo que la aparición de
este molusco en ambas estaciones podría
estar relacionada.
La familia Goeridae (Figura 4) ha sido identificada únicamente en dos estaciones en el
transcurso de los trabajos durante los dos
años. En ambas ocasiones se trató de estaciones de cursos altos de los ríos Guadalupejo (F035) y Alcalaboza (F228).
La especie Torleya major (Figura 5) pertenece
a la familia de los Ephemerellidae (Efemerópteros) y, al igual que en el caso anterior, se
trata de un taxón poco frecuente que fue
identificado en 6 estaciones de muestreo en
el transcurso de los trabajos, todas situadas
en tramos de cabecera de los ríos.
La valoración de la calidad de los tramos fluviales se ha llevado a cabo mediante la aplicación del IBMWP (Iberian Biological Monitoring Working Party), una adaptación del
Figura 5. El efemeróptero Torleya major se ha encontrado en 6 estaciones de muestreo.
valor del índice al que se le asigna una clase
de calidad. Los rangos asignados a cada una
de las clases de calidad, según los cortes originales del IBMWP (Alba-Tercedor y Sánchez
Ortega, 1988), se muestran en la Tabla 3.
11
Tabla 3. Clases de estado
ecológico para el índice IBMWP.
CALIDAD
MUY BUENA
BUENA
MODERADA
DEFICIENTE
MALA
IBMWP
≥ 101
61 – 100
36 – 60
16 – 35
≤ 15
CLASE
I
II
III
IV
V
Tabla 4. Número de estaciones por campaña y clase
de calidad según su IBMWP.
CLASE
CALIDAD
I
II
III
IV
V
TOTAL
ESTACIONES
INVIERNO
45
69
36
30
9
2005
PRIMAVERA
19
30
21
17
11
INVIERNO
0
8
13
9
1
2006
PRIMAVERA
4
47
39
19
12
OTOÑO
1
14
9
6
0
189
98
31
121
30
La Tabla 4 recoge, para cada una de las
campañas, el número de estaciones incluidas dentro de cada una de las clases de
calidad de acuerdo con el valor del índice
IBMWP y con los rangos de calidad origina-
les. En la Figura 6 se muestra los porcentajes de cada una de las clases de calidad del
IBMWP obtenidos para cada campaña y
para el valor medio. El 52% de las estaciones tienen una clase de calidad muy buena
(clase I) o buena (clase II), mientras que el
48% restante se reparte entre una calidad
moderada (25% de clase III) y una calidad
mala o muy mala (clase IV y V).
En la Figura 7 se muestra el resultado del
valor medio del índice IBMWP obtenido
en cada estación de muestreo.
3.1.2. Diatomeas
Al igual que los macroinvertebrados las diatomeas se han muestreado en todas las
campañas de muestreo, en un total de 470
estaciones.
3.1.2.1. Procedimiento
La metodología de muestreo en campo se
basa en la recolección de 100 cm2 de al menos
3 piedras situadas en la zona de agua corriente
Figura 6. Porcentajes de las clases de calidad del índice de macroinvertebrados IBMWP obtenidos durante los
años 2005 y 2006.
12
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
Figura 7. Mapa de distribución de las clases de calidad del IBMWP.
e iluminada. El contenido se deposita en un
vial de cristal al que se añaden 5 ml de agua y
se fija con 0,5 ml de formaldehído al 40%.
Las muestras recogidas se transportaron al
laboratorio de la Universitat de Girona para
su tratamiento y estudio. Una vez allí, las
muestras fueron tratadas químicamente
para eliminar la materia orgánica y obtener
los frústulos limpios según la normativa prEN
14407:2004. Las muestras tratadas se montaron en Naphrax (resina sintética con índice
de refracción 1,74) a fin de obtener preparaciones permanentes, y se observaron al
microscopio óptico para su determinación y
recuento. Un mínimo de 400 frústulos y un
máximo de 500 fueron contados para cada
una de las muestras.
Al recuento y cálculo de las abundancias
relativas (porcentaje) de las especies de diatomeas en cada una de las comunidades se
les aplicaron los índices IBD, IPS y CEE. Además se calculó el índice de diversidad de
Shannon (H’). Los cálculos se realizaron
mediante el programa OMNIDIA.
3.1.2.2. Resultados
La especie Achnanthes minutissima (Figura 8)
se relaciona con una buena calidad del agua,
ya que es típica de zonas de cabecera, mientras que Nitzchia palea, Navicula veneta, Navicula acomoda, Amphora veneta, Gomphonema parvulum (Figura 9) se relacionan con
aguas eutróficas con elevada carga de materia orgánica (Sabater, Sabater y Tomas, 1987,
Van Dam et al., 1994, Sabater et al., 2004,
Tison et al., 2005).
Para la valoración de la calidad de los tramos
fluviales según las diatomeas se han determinado tres índices: IPS, IBD y CEE. Los tres
están basados en la diferente tolerancia a la
13
calidad del agua de las especies de diatomeas adaptadas a aguas corrientes.
El rango de valores correspondiente a cada
nivel de calidad es el mismo para los tres
índices (Tabla 5).
El análisis de los resultados del índice IPS en
las diferentes campañas muestra una gran
estabilidad en el porcentaje de estaciones
pertenecientes a cada clase de calidad a lo
largo del tiempo (Tabla 6). No se observan
diferencias muy significativas ni estacionales
ni interanuales.
En la Figura 10 se muestra los porcentajes
de cada una de las clases de calidad del IPS
obtenidos para cada campaña y para el
valor medio. Las estaciones en las dos primeras clases de calidad, que corresponden
a un estado bueno o muy bueno, representan entre un 30% y un 40% del total en
todas las campañas excepto en la de invierno de 2006, aunque el menor número de
estaciones muestreadas en esta campaña
(31) le otorga menos valor representativo.
En el otro extremo, las estaciones que presentan una calidad del agua mala según el
IPS suponen un 10% en las campañas realiTabla 5. Rangos de calidad para los índices de
diatomeas (IPS, IBD y CEE).
CALIDAD
RANGO VALORES
MUY BUENA
BUENA
MODERADA
DEFICIENTE
MALA
> 17
13 – 17
9 – 13
5–9
0–5
CLASE
I
II
III
IV
V
Figura 8. Achnantes minutissima diatomea indicadora
de buena calidad del agua.
Figura 9. Gomhonema parvulum diatomea indicadora
de mala calidad del agua.
zadas en 2005 y alrededor de un 15% en las
de 2006.
En la Figura 11 se puede apreciar gráficamente, la distribución de las estaciones en
las diferentes clases de calidad según el valor
medio obtenido con el índice IPS.
Tabla 6. Distribución en clases de calidad de los resultados del índice IPS en las diferentes campañas realizadas.
2005
CLASE DE
CALIDAD
I
II
III
IV
V
14
INVIERNO
Nº
28
47
47
50
17
%
15
25
25
26
9
PRIMAVERA
Nº
%
8
8
27
28
38
39
15
15
10
10
INVIERNO
Nº
3
4
9
10
5
%
10
13
29
32
16
2006
PRIMAVERA
Nº
%
15
12
29
24
25
21
31
25
22
18
TOTAL
OTOÑO
Nº
3
8
11
7
1
%
10
27
37
23
3
Nº
57
115
130
113
55
%
12
24
28
24
12
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
Figura 10. Porcentajes de las clases de calidad del IPS.
Figura 11. Mapa de distribución de las clases de calidad del IPS.
15
3.1.3. Macrófitos
Se han muestreado 44 subcuencas fluviales,
que suman un total de 199 localidades de
muestreo.
3.1.3.1. Procedimiento
La identificación de las especies de macrófitos presentes en cada estación y la estimación de su abundancia se ha realizado mayoritariamente en campo. De las especies cuya
identificación en campo no ha sido posible,
se ha tomado una muestra para ser identificada posteriormente en el laboratorio. El sistema de conservación de las muestras ha
sido, en función del material recolectado, el
prensado (para briófitos, helechos y fanerógamas) o el líquido de Kew (para carófitos).
Mediante el análisis de los datos de macrófitos se valora el estado de conservación de
los cuerpos de agua de las distintas subcuencas fluviales del Guadiana, tomando
como referencia las plantas y algas macroscópicas más vinculadas al medio acuático.
Se han distinguido cinco casos o formas vitales (tipos biológicos):
• Algas macroscópicas, totalmente acuáticas. Normalmente filamentosas aunque en algunos casos incrustantes.
• Hidrófitos. Plantas acuáticas (briófitos,
pteridófitos y plantas superiores)
sumergidas en el agua, totalmente o
en su mayor parte. En el caso de los
briófitos también se han incluido las
especies anfibias.
• Helófitos. Plantas superiores con la base
en el agua y sus tallos y hojas normalmente fuera de ella.
• Higrófitos. Plantas totalmente terrestres
o eventualmente anfibias, propias en
todo caso de ambientes con abundancia de agua en el substrato.
• Halófitos. Plantas totalmente terrestres
o eventualmente anfibias, propias de
ambientes salinos temporal o permanentemente inundados.
Mediante conocimiento experto y la consulta de bibliografía (Cirujano & Medina 2002),
se han clasificado los diversos organismos
según la calidad o el estado de conservación
en el que viven. Dichas clasificaciones se presentan en las Tablas 7 y 8.
Tabla 7. Categoría de calidad del medio y su descripción para algas e hidrófitos.
16
VALOR
CLASIFICACIÓN
DESCRIPCIÓN
1
Muy baja
2
Baja
3
Media
4
Alta
Calidad del agua en general media-alta. Aguas con poca
materia orgánica. Especies de ecosistemas muy particulares, en general vulnerables
5
Muy alta
Calidad del agua claramente alta. Aguas muy poco mineralizadas y con muy poca materia orgánica. Especies en directivas de conservación
Exóticas
Propias de ambientes con una elevada concentración de
materia orgánica
Calidad del agua media-baja o sin datos específicos
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
Tabla 8. Categoría de calidad del medio y su descripción para helófitos, higrófitos y halófitos.
VALOR
CLASIFICACIÓN
DESCRIPCIÓN
1
Muy baja
2
Baja
3
Media
4
Alta
Especies propias de ambientes bien conservados o de ecosistemas muy particulares, en general vulnerables
5
Muy alta
Especies propias de ambientes bien conservados o incluidas en directivas de conservación
Exóticas
Autóctonas banales y pioneras, capaces de vivir en ambientes alterados o muy alterados
Especies que toleran un grado de alteración medio
3.1.3.2. Resultados
Hay que señalar que los resultados que se
presentan a continuación no reflejan las
cuencas o subcuencas enteras, sino la zona
de la estación de muestreo.
Subcuencas en las que no se han encontrado
taxa: Son las subcuencas de los ríos Albarregas, Gargáligas y los arroyos Higuera y Pintas. No se puede valorar su estado de conservación a partir de su flora acuática o
anfibia.
Cuencas con indicadores de calidad baja o
media-baja: Arroyo Chaparra, Aljucén, arroyo
de la Charca, río Chanza, río Guadajira y el río
Guadámez.
Cuencas con indicadores de calidad media o
heterogénea: La subcuenca del Ardila, arroyo
Pelochejo, arroyo San Juan, arroyo de Horadado, la subcuenca del Azuer, Bañuelos, eje
del Guadiana, subcuenca del Jabalón, subcuenca del Limonetes, subcuenca del Matachel, subcuenca del río Ortigas, río Tirteafuera y Arroyo Tripero.
Cuencas con indicadores de calidad alta: Alcarrache, Alto Guadiana, Arroyo de Valmayor,
Arroyo de Canalijas, Arroyo de Benazaire,
Arroyo Grande, subcuenca del Barcía Longa,
Bullaque, subcuenca del Búrdalo, subcuenca
del Estena, subcuenca del Friegamuñoz,
subcuenca del Gévora, subcuenca del
Gigüela, subcuenca del Arroyo Grande, río
Guadalupejo, subcuenca del Guerrero, Lácara, río Olivenza, subcuenca del Ruecas, Táliga,
cuenca del río Zújar.
3.1.4. Peces
Los peces se han muestreado en 213 estaciones durante la primavera de 2005 y de
2006.
3.1.4.1. Procedimiento
Las comunidades de peces fueron caracterizadas siguiendo la metodología estandarizada propuesta por el grupo de trabajo FAME
(Development, Evaluation & Implementation
of a Standardised Fish-based Assessment
Method for the Ecological Status of European Rivers- A Contribution to the Water Framework Directive). Para ello se muestrearon
tramos de al menos 100 m de longitud siempre que fue posible (Longitud media ± DE,
83,1 ± 29,1 m) con una sola pasada y sin
redes de limitación del tramo. La unidad de
esfuerzo utilizada surgió de la combinación
de la longitud del tramo muestreado y el
tiempo invertido en ello.
3.1.4.2. Resultados
Durante los muestreos de la red fluvial se
registró un total de 26 especies de peces
(Tabla 9). La riqueza media de especies por
17
localidad fue de 2,7 ± 2,3 especies, aunque
un elevado porcentaje de éstas careció por
completo de peces (24,9%). Este hecho
puede estar relacionado tanto con el estado
de degradación de estos tramos de río,
como con la elevada inestabilidad hidrológica de alguno de los medios muestreados. En
el primer caso la degradación del medio
pudo alcanzar cotas tan elevadas como para
impedir la presencia incluso a las especies
más tolerantes, mientras que en el segundo
caso la excesiva temporalidad de la lámina
de agua impidió el desarrollo de comunidades estables de peces.
Tabla 9. Listado de especies de peces capturados durante los muestreos realizados en las primaveras de
2005-06. Se referencia la abundancia (CPUE) y la biomasa (BPUE) medias, así como el número de
apariciones de cada especie en el conjunto de localidades muestreadas (N) (n=213). Las especies nativas
están marcadas en gris. Categorías de amenaza (Doadrio, 2002): VU: Vulnerable, EN: En Peligro.
FAMILIA
ESPECIE
ABUNDANCIA
(individuos/m*h)
(CPUE ± DE)
BIOMASA
(Kg)
(BPUE ± DE)
N
CATEGORÍA
AMENAZA
1
VU
Atherinidae
Atherina boyeri
0,1 ± 0,9
<0,01 ± 0,00
Anguillidae
Angulla anguilla
0,1 ± 1,8
<0,01 ± 0,03
2
VU
Blenidae
Salaria fluviatilis
1,1 ± 8,7
<0,01± 0,02
12
EN
Anaecypris hispanica
1,1 ± 9,4
<0,01 ± 0,01
5
EN
Barbus comizo
2,6 ± 11,2
0,70 ± 3,20
30
VU
Barbus guiraonis
0,7 ± 6,2
0,03 ± 0,23
3
VU
Barbus microcephalus
5,1 ± 21,7
0,32 ± 2,59
32
VU
Barbus sclateri
8,0 ± 47,6
0,22 ± 1,31
15
-
Barbus spp.
0,1 ± 0,7
<0,01 ± 0,02
3
Cyprinidae
Chondrostoma lemmingii
15,7 ± 121,6
0,02 ± 0,12
37
VU
Chondrostoma willkommii
1,3 ± 7,7
0,04 ± 0,23
17
VU
Gobio lozanoi
Squalius alburnoides
1,2 ± 9,5
0,01 ± 0,08
5
VU
60,0 ± 170,3
0,12 ± 0,33
84
VU
Squalius pyrenaicus
6,6 ± 25,7
0,21 ± 2,19
41
VU
Cobitidae
Cobitis paludica
12,6 ± 38,4
0,05 ± 0,35
88
VU
Clupeidae
Alosa alosa
<0,01 ± 0,1
<0,01 ± 0,02
1
VU
Lepomis gibbosus
21,4 ± 71,2
0,19 ± 0,57
65
-
Micropterus salmoides
1,9 ± 10,9
0,05 ± 0,30
24
-
Herichthys facetum
0,2 ± 2,3
<0,01 ± 0,01
2
-
Alburnus alburnus
10,8 ± 156,1
0,01 ± 0,06
5
-
Carassius auratus
0,1 ± 0,6
0,01 ± 0,10
4
-
Cyprinus carpio
0,5 ± 4,4
0,10 ± 0,56
10
-
Rutilus rutilus
3,0 ± 43,6
0,10 ± 1,53
1
-
Centrarchidae
Cichlidae
Cyprinidae
Cyprinodontidae
Gambusia holbrooki
50,5 ± 211,9
0,03 ± 0,17
66
-
Esocidae
Esox lucius
1,1 ± 6,3
0,01 ± 0,07
11
-
Ictaluridae
Ameiurus melas
0,2 ± 1,7
0,01 ± 0,05
9
-
Salmonidae *
Salmo trutta
0,0 ± 0,7
0,01 ± 0,22
1
VU
* Individuos encontrados dentro de un coto de pesca
18
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
De las 26 especies de peces encontradas en
ríos, 15 fueron nativas (57,7%) y 11 exóticas
(43,3%). En el grupo de nativas destacó la
familia Cyprinidae con 11 especies, mientras
que el resto de familias (Cobitidae, Clupeidae,
Blenidae y Atherinidae) sólo estuvieron representadas por una especie. De este conjunto
destacan dos especies por su especial grado
de amenaza: Anaecyrpris hispanica (Figura 12)
y Salaria fluviatilis (Figura 13), presentes en
tan sólo 5 (2,3%) y 12 (5,6%) de las localidades
muestreadas. Asimismo destacan los pobres
registros obtenidos para las dos especies
migradoras, Anguilla anguilla y Alosa alosa,
encontradas en sólo dos y una localidades,
respectivamente. Sin duda, ambas especies
se encuentran en una situación extrema, al
borde mismo de la extinción.
Figura 12. Jarabugo (Anaecypris hispanica). Especie en
peligro de extinción.
Para el desarrollo del índice de calidad basado en las comunidades de peces se optó
por usar la composición específica de ésta
como indicador del Estado Ecológico global.
Siguiendo las metodologías de evaluación
más ampliamente utilizadas en este campo y
según establece la Directiva, se tomó como
un indicador del estado de conservación la
desviación entre la composición específica
observada y la esperada en ausencia de perturbaciones antrópicas. Esta última se obtuvo mediante modelos predictivos siguiendo
la metodología creada por Linke et al. (2005),
aplicada a un subconjunto de localidades de
referencia. En este subconjunto de localidades las relaciones hábitat-biota estuvieron
mínimamente modificadas, de tal forma que
la composición específica de las comunidades ícticas encontradas en ellas estuvieron
en consonancia con las posibilidades que
ofreció el medio, en ausencia de perturbaciones antrópicas. Mediante modelos predictivos se obtuvo la probabilidad de presencia de cada una de las especies por
localidad. Para sustraer del valor del índice el
efecto de la ocurrencia “azarosa” de algunas
de las especies, sólo se consideró dentro del
valor especifico del índice para cada localidad aquellas especies “comunes”, con valores
de probabilidad de ocurrencia superiores a
0,5, es decir aquellas especies que tienen una
frecuencia de aparición en más del 50% de
las localidades estudiadas. De esta forma nos
centramos en aquellas especies que realmente deberían estar en ese sitio. El valor del
Índice final, por tanto, se calculó como sigue:
Índice calidad =
S Observada
Probabilidad esperada
donde,
S Observada, es la riqueza de especies observadas con una p>0,5 para la localidad i.
Figura 13. Blenio de río, Salaria fluviatilis, especie que se
ha encontrado en ríos, embalses y lagunas.
Probabilidad esperada, es la suma de las probabilidades de ocurrencia para aquellas
especies con una p>0,5 en la localidad i.
19
Los valores más elevados del índice corresponderán a aquellas localidades en las que
todas las especies predichas estuvieron presentes o incluso la riqueza observada superó
a la esperada. Este sería el caso de lugares
muy bien conservados, con cuotas de biodiversidad muy altas e interesantes para conservar. En el polo opuesto encontramos aquellas
localidades en las que han desaparecido la
mayoría de las especies nativas o las comunidades se han visto muy simplificadas por
efecto de las perturbaciones antrópicas. A
partir de los valores obtenidos, se establecieron cinco clases de calidad, según refleja la
Tabla 10.
En términos generales podríamos clasificar
a la cuenca del Guadiana en un Estado Ecológico medio dentro de la clase de calidad
Moderada (Valor medio del Índice de Calidad = 0,59 ± 0.86). Si bien este resultado
medio debe ser puntualizado por grandes
subcuencas, ya que como puede observarse en la Figura 14 existe una gran disparidad
en los valores del índice entre ellas. Encontramos subcuencas que en promedio
podríamos clasificarlas en un estado Bueno
o Muy Bueno (Cuencas de los ríos Chanza,
Ardila, Gévora, Matachel, Ruecas y cabecera
de Gigüela), mientras que otras extensas
zonas presentaron un Estado pobre o muy
pobre (Río Zujar, Záncara o eje principal del
Guadiana).
Tabla 10. Clases de calidad para el índice de peces.
CALIDAD
RANGO VALORES
CLASE
MUY BUENA
BUENA
MODERADA
DEFICIENTE
MALA
> 0,92
0,92 – 0,62
0,62 – 0,39
<0,39
0
I
II
III
IV
V
Figura 14. Mapa de distribución de las clases de calidad del índice de peces.
20
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
3.2. ELEMENTOS HIDROMORFOLÓGICOS
3.2.1. Calidad del hábitat fluvial
A lo largo de las cinco campañas de muestreos se evaluó, en cada una de las estaciones, la calidad del hábitat fluvial mediante la
aplicación del índice IHF, desarrollado por el
equipo de investigadores del proyecto GUADALMED (Pardo et al., 2002) para caracterizar
los cauces de los ríos mediterráneos de
acuerdo con la DMA.
3.2.1.1. Procedimiento
El IHF consta de siete bloques en los que se
valora independientemente la presencia de
distintos componentes en el cauce fluvial: 1.
Inclusión rápidos-sediemtación pozas, 2. Frecuencia de rápidos, 3. Composición del substrato, 4. Regímenes de velocidad/profundidad, 5. Porcentaje de sombra en el cauce, 6.
Elementos heterogeneidad, 7. Cobertura de
vegetación acuática. El resultado final indica
el grado de heterogeneidad del hábitat flu-
vial y se obtiene de la suma de las puntuaciones de los siete componentes. La heterogeneidad del medio, y por tanto su calidad,
es mayor cuanto mayor es el valor final del
índice, que oscila entre 0 y 100. Dado que no
hay ningún rango de calidades establecido
se ha tomado el siguiente criterio: se consideraran con una buena calidad del hábitat
fluvial aquellos puntos con un valor del índice IHF superior a 70 y con una mala calidad
del hábitat fluvial aquellos con un valor del
IHF igual o inferior a 50. El índice se calculó in
situ sobre un área de estudio de aproximadamente 100 m.
3.2.1.2. Resultados
En la Figura 15 se muestra la distribución de
las estaciones con mejor y peor calidad del
hábitat según el IHF teniendo en cuenta los
valores medios. En azul se señalan aquellas
estaciones que tienen una alta heterogeneidad del medio, lo cual indica una buena calidad. En rojo se muestran aquellas estaciones
con baja heterogeneidad del medio.
Figura 15. Mapa de distribución de los resultados del IHF.
21
3.2.2. Calidad de la ribera
La evaluación de la calidad del ecosistema
de ribera se realizó, durante las campañas de
primavera, en un total de 226, ya que se
incluyen algunas estaciones no muestreadas
por encontrarse secas en las que se calculó
el QBR.
3.2.2.1. Procedimiento
Se aplicó la metodología del cálculo del índice QBR (Munné, Solá y Prat, 1998). Este siste-
ma de cuantificación de la calidad ribereña
se fundamenta en la valoración de un conjunto de características del ecosistema,
agrupadas en cuatro bloques: 1. Grado de
cobertura riparia, 2. Estructura de la cobertura, 3. Calidad de la cobertura, 4. Naturalidad del canal fluvial. Cada bloque se valora
de 0 a 25 puntos. La puntuación final del
QBR se calcula mediante la suma de los
resultados obtenidos para cada bloque. En
la Tabla 11 se muestran los rangos de calidad del ecosistema ripario en función de la
puntuación final del índice.
Tabla 11. Significado ecológico y rangos de calidad del índice QBR
CALIDAD
PUNTUACIÓN
CALIDAD
Muy buena
Buena
≥ 95
75 – 90
Riberas sin alteraciones, calidad muy buena, estado natural
Ribera ligeramente perturbada, calidad buena
Intermedia
Mala
55 – 70
30 – 50
Inicio de alteración importante, calidad intermedia
Alteración fuerte, calidad mala
Pésima
≤ 25
Degradación extrema, calidad pésima
3.2.2.2. Resultados
En la campaña de primavera de 2005 se
determinó el índice QBR en un total de 107
estaciones de muestreo, y en la de primavera de 2006 en 128 estaciones. Nueve de estas
estaciones fueron muestreadas en ambas
campañas, lo que nos permite comparar los
resultados obtenidos.
En la Tabla 12 se muestra el número de estaciones de cada clase de calidad en función
del índice QBR. La columna de estaciones
totales indica el número y porcentaje de estaciones de cada clase de calidad de las dos
campañas en conjunto, en el caso de las estaciones muestreadas en ambas campañas se
ha considerado el valor medio del QBR para
su inclusión en las diferentes clases.
Tabla 12. Número de estaciones de cada clase de calidad en función del índice QBR.
CALIDAD
MUY BUENA
BUENA
INTERMEDIA
MALA
PÉSIMA
TOTAL ESTACIONES
22
PRIMAVERA 2005
Nº
%
Est.
Est.
9
29
38
20
11
107
8.4
27.1
35.5
18.7
10.3
PRIMAVERA 2006
Nº
%
Est.
Est.
10
34
17
32
35
128
7.8
26.6
13.3
25.0
27.3
ESTACIONES TOTALES
Nº
%
Est.
Est.
19
60
53
51
43
226
8.4
26.7
23.6
22.7
19.1
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
La Figura 16 muestra la distribución de las
estaciones por clase de calidad teniendo en
cuenta los valores medios del QBR. El gráfico
muestra los porcentajes de estaciones de
cada clase de calidad.
Figura 16. Mapa de distribución de los resultados del QBR.
3.3. ELEMENTOS FÍSICO-QUÍMICOS
3.3.1. Procedimiento
En todas las campañas y para cada punto de
muestreo se han medido in situ seis parámetros físico-químicos básicos. La toma de
muestras discretas de agua para su análisis
en laboratorio se ha llevado a cabo en tres
de las campañas, primavera de 2005, primavera de 2006 y otoño de 2006.
En la Tabla 13 se presentan los métodos utilizados para el análisis de los 6 parámetros
analizados in situ. Las determinaciones físico-químicas in situ se han complementado
con la apreciación de la calidad visual de
cada uno de los puntos de muestreo y en
todas las campañas, anotando la turbidez y
el color del agua.
Tabla 13. Parámetros físico-químicos determinados in situ.
PARÁMETRO
UNIDADES
Conductividad
Oxígeno disuelto
pH
Potencial rédox
μS/cm
mg/l y %
unidades de pH
mVA
NORMA DE
REFERENCIA
SM 25140-B/98
SM 4500-O/98
SM 4500-H/98
SM 2580-98
Temperatura
°C
SM 2550-98
Amonio
mg/l
PI-ENAC
MÉTODO ANALÍTICO
Multiline P4, TetraCon 325
Multiline P4, CellOx 325
Multiline P4, SenTix 41-3
Multiline P4, SenTix 41-3
Permisor eléctrico de Multiline P4 (WTW)
Termómetro de mercurio contrastado
Colorimetría (Nessler).
Kit Aquaquant (Merk)
23
Tanto la toma de muestras como su análisis en laboratorio se ha realizado siguiendo los procedimientos internos de Red Control, todos ellos acreditados y validados por ENAC según la
norma UNE-EN-ISO-17025.
Los parámetros analizados junto con el método analítico utilizado se muestran en la Tabla 14.
Tabla 14. Parámetros fisico-químicos determinados en laboratorio. SM: Procedimientos
de Standard Methods, ed. 20 (1998). PI-ENAC: Procedimientos internos de Red Control.
PARÁMETRO
UNIDADES
NORMA DE
REFERENCIA
MÉTODO
PROCEDIMIENTO
Amonio
mg NH4/l
PI-ENAC
Absorción Molecular
PI-RC-6.05
Calcio
mg Ca/l
PI-ENAC
ICP
PI-RC-6.54
PI-RC-6.14
Cloruros
mg Cl-/l
PI-ENAC
Absorción Molecular
Dureza total
mg CaCO3/l
SM 2340-B/98
ICP
PI-RC-6.54
Fosfatos*
mg PO4/l
PI-ENAC
Absorción Molecular
PI-RC-6.25
PI-RC-6.27
Fósforo Total**
mg P/l
PI-ENAC
Absorción Molecular
Magnesio
mg Mg2+/l
SM 2340-B/98
ICP
PI-RC-6.54
Nitratos
mg NO3/l
PI-ENAC
Electroforesis capilar
PI-RC-6.96
Nitritos
mg NO2/l
PI-ENAC
Absorción Molecular
PI-RC-6.35
Potasio
mg K+/l
SM 2340-B/98
ICP
PI-RC-6.54
Sílice*
mg SiO2/l
PI-ENAC
Absorción Molecular
PI-RC-6.45
Sodio
mg Na+/l
SM 2340-B/98
ICP
PI-RC-6.54
PI-RC-6.31
Sólidos en suspensión*
mg/l
PI-ENAC
Gravimetría, Milipore AP40
Sulfatos
mg/l
PI-ENAC
Turbidimetría
PI-RC-6.47
Alcalinidad media
mg CaCO3/l
SM 2320 B-98
Volumetría
PI-RC-6.03
* medido en la campaña de primavera de 2005.
** medido en la campaña de primavera y otoño de 2006
3.3.2. Resultados
Debido a la gran variación de las condiciones hidrológicas a lo largo de los dos años de
la ejecución del proyecto a causa de la
sequía y a que la geología de la cuenca no es
la misma en todos los puntos estudiados, los
resultados muestran una gran variabilidad,
sobre todo en el caso de la conductividad y
el oxígeno.
La conductividad está influenciada por la
geología de la cuenca, con valores que variaron desde los 39 μS/cm de la F031 (río Estena) en primavera de 2006, hasta los 5500
μS/cm de la F072 (río Guadiana). La mayoría
de las estaciones muestran valores bajos de
24
conductividad, lo que en general se asocia a
una buena calidad, aunque no siempre es
así.
El 53% de las estaciones obtuvieron valores
de oxígeno superiores a los 10 mg/l. El 25%
de las estaciones obtuvieron valores de oxígeno entre 8 y 10 mg/l. El 14% de las estaciones obtuvieron valores de oxígeno entre 6 y
8 mg/l. El 8% de las estaciones tuvieron valores de oxígeno inferiores a 6 mg/l, con un
estado ecológico malo o deficiente. En cuanto al pH, en todas las estaciones se mantiene
entre 6 y 9, dentro de lo que se considera un
rango normal de pH adecuado para unas
condiciones buenas de calidad.
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
Entre los parámetros físico-químicos analizados, los que más afectan a la calidad de las
aguas superficiales son el amonio, los nitratos y los fosfatos, los cuales se relacionan con
los niveles de nutrientes del agua.
Teniendo en cuenta el documento “Objetivos
de calidad físico-química de las aguas superficiales continentales” (ACA, 2002), la Asociació
Catalana de l’Aigua ha establecido unos límites de calidad para Amonio, Fosfatos y Nitratos que se presentan en la Tabla 15.
Tabla 15. Clases de calidad de los parámetros
físico-químicos.
CALIDAD
MUY BUENA
BUENA
MODERADA
DEFICIENTE
MALA
NITRATOS FOSFATOS AMONIO
(mg/l)
(mg/l)
(mg/l)
<5
5 - 25
25 – 50
50 – 100
> 100
< 0,1
0,1 – 0,5
0,5 - 1
1–2
>2
< 0,2
0,2 – 0,5
0,5 – 1
1–5
>5
El 78% de las estaciones registraron valores
de amonio inferiores a 0,5 mg/l, lo que en
principio se consideraría como un indicador
de buena calidad del agua, siendo el valor
mímino los 0,01 mg/l que se obtuvieron en
el 9% de las estaciones. Los fosfatos se analizaron en la campaña de primavera de
2005, siendo el valor mínimo los 0,1 mg/l
que se obtuvieron en el 61% de las estaciones y el más elevado los 23,2 mg/l de la
estación F282 (río San Lázaro). Los valores
medios de nitratos oscilan entre 0,17 mg/l
de la F111 (río Esteras) y 55,90 mg/l de la
F021 (río Pinilla). El 79% de las estaciones
tuvieron una concentración de nitratos
inferior a 5 mg/l y el 19% presentaron valores entre 5 y 25 mg/l. En cuanto a las estaciones con concentraciones de nitratos
superiores a los 25 mg/l, constituyen el 2%.
Los valores de nitritos fueron, en general,
inferiores a 1 mg/l a excepción de dos estaciones, la F267 (Arroyo San Juan) con 1,80
mg/l y la F262 (Arroyo del Buey) con 2 mg/l,
ambas con estado ecológico malo. En
cuanto al resto de parámetros, relacionados
con la mineralización, lo más adecuado
para una buena calidad es que tengan valores bajos.
3.4. VALORACIÓN DEL ESTADO
ECOLÓGICO
3.4.1. Procedimiento
La clasificación del estado ecológico estará
representada por el menor de los valores de
los resultados de control biológico y físicoquímico de los correspondientes indicadores de calidad.
Para establecer el estado ecológico se han
utilizado los resultados obtenidos para los
siguientes elementos biológicos: macroinvertebrados, diatomeas y peces. No se han
considerado los macrófitos ya que no ha
habido suficiente información para poder
calcular un índice y establecer las correspondientes clases de calidad. Se ha obtenido el valor medio del conjunto de datos
disponible en cada estación de muestreo y
para cada elemento de calidad biológico,
físico-químico e hidromorfológico. Posteriormente se ha aplicado el esquema propuesto por la guía REFCOND (Figura 17)
según el cual sólo cuando todos los indicadores, biológicos, físico-químicos e hidromorfológicos tengan muy buena calidad se
considerará que el estado ecológico es muy
bueno. Para obtener un estado ecológico
bueno es necesario que los elementos biológicos y físico-químicos presenten al
menos buen estado, no teniéndose en
cuenta los elementos hidromorfológicos. El
estado ecológico moderado, deficiente y
malo se establece en función de los elementos biológicos. Por lo tanto, según este
esquema son los elementos biológicos los
que tienen mayor importancia frente a los
elementos físico-químicos e hidromorfoló-
25
Figura 17. Procedimiento para la clasificación del estado ecológico en ríos.
gicos que tienen la consideración de elementos de soporte de la comunidad biológica.
3.4.2. Resultados
Considerando los índices biológicos tan sólo
se alcanza una calidad muy buena en 5 estaciones (2%) y una calidad buena en 37 (14%).
Llama la atención el elevado número de
estaciones con una calidad mala, un total de
108, resultado condicionado por los malos
resultados del índice de ictiofauna, el cual no
se consideró en tres estaciones (F228, F254 y
F259) en las que el resto de indicadores
daban una calidad buena o muy buena y la
ausencia de peces no era debida a la mala
calidad sino a las características del cauce en
el punto de muestreo. Si a dichas estaciones
con mala calidad añadimos las 54 estaciones
con calidad deficiente, vemos que un 63%
de las estaciones de la Red Fluvial se encuen-
26
tran en una situación alarmante. La clase de
calidad, según los indicadores biológicos, se
muestra en la Figura 18, en la que el gráfico
representa los porcentajes de estaciones
para cada clase de calidad. Como es lógico,
las estaciones con mejor calidad se sitúan en
zonas de cabecera, además hay que tener en
cuenta que dos de las estaciones con calidad
muy buena se sitúan fuera del ámbito de
gestión de la CHG.
Como elemento de calidad hidromorfológico se ha utilizado el índice QBR. Si lo comparamos con los resultados de los indicadores
biológicos vemos que aumenta el número
de estaciones con buena y muy buena calidad, que en conjunto suman el 36%, en
detrimento del número de estaciones con
mala calidad que disminuye a la mitad (45
estaciones). Los porcentajes de estaciones
con una calidad deficiente o mala son similares para ambos tipos de indicadores.
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
Figura 18. Clases de calidad de las estaciones de la Red Fluvial de la CHG establecidas a partir de los
indicadores biológicos para el periodo 2005-2006.
La clase de calidad, según los indicadores
hidromorfológicos, de las estaciones muestreadas en la Cuenca del Guadiana se muestra en la Figura 19, en la que el gráfico representa los porcentajes de estaciones para
cada clase de calidad.
En cuanto a los indicadores físico-químicos,
son indicativos de una mala calidad del agua
a causa de una eutrofización del medio. De
los tres grupos de indicadores, son los
menos restrictivos, lo que queda patente por
el elevado número de estaciones con buena
y muy buena calidad (98 y 86 respectivamente). La clase de calidad, según los indicadores físico-químicos, de las estaciones
muestreadas en la cuenca del Guadiana se
muestra en la Figura 20, en la que el gráfico
representa los porcentajes de estaciones
para cada clase de calidad. En este caso las
estaciones con muy buena calidad no se
limitan a zonas de cabecera, encontrándose
ampliamente distribuidas en la cuenca. Además, el hecho de tener una buena calidad
según los indicadores físico-químicos no
implica necesariamente que el resto de índices alcancen un nivel bueno.
El estado ecológico de las estaciones de la
Red Fluvial muestreadas en la cuenca del
Guadiana se muestra en la Figura 21, en la
que el gráfico representa los porcentajes de
estaciones para cada clase. En términos
generales podemos decir que la situación de
la cuenca en cuanto a calidad es preocupante, ya que en el 63% de las estaciones se ha
obtenido un estado ecológico Deficiente o
Malo, frente al 15% de estaciones con un
estado ecológico Muy Bueno o Bueno. El
resto de estaciones (22%) presenta un estado ecológico Moderado. Indudablemente
estos datos se han visto condicionados por
la sequía extrema padecida durante los dos
años de realización de los trabajos. Es de
27
Figura 19. Clases de calidad de las estaciones de la Red Fluvial de la CHG establecidas a partir de
los indicadores Hidromorfológicos para el periodo 2005-2006.
Figura 20. Clases de calidad de las estaciones de la Red Fluvial de la CHG establecidas a partir de
los indicadores Físico-Químicos para el periodo 2005-2006.
28
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
Figura 21. Estado Ecológico de las estaciones de la Red Fluvial de la CHG en el periodo 2005-2006.
esperar que en próximos muestreos, si las
condiciones hidrológicas son más favorables, esta situación se revierta a un mayor
número de estaciones con estado ecológico Bueno o Muy Bueno. La mejora se deberá, en caso de remitir la sequía, a una mejora en los índices de ictiofauna. Es
importante que en el futuro, se considere la
posibilidad de que los índices de peces tengan en cuenta las variaciones hidrológicas
naturales, que permitan que en épocas de
sequía no se penalice la ausencia de peces,
en lugares que se pueden considerar pristinos o en buen estado.
En la Tabla 16 se muestra el listado de estaciones candidatas a ser estaciones de referencia, ya que han presentado un Estado
Ecológico Muy Bueno o Bueno. En dicha
tabla se indica en que masa de agua se
encuentra ubicada la estación, a que tipo de
río pertenece, si se trata de una estación
situada en un tramo pristino, el tipo de presión a la que se ve sometida y el tipo de
impacto.
29
Tabla 16. Relación de estaciones candidatas a ser consideradas de referencia.
30
ESTADO
TRAMO
ECOLÓGICO POTENCIAL
TIPO DE PRESIÓN
TIPO DE
IMPACTO
ESTACIÓN
MASA
TIPO
F001
13474
5
Bueno
No pristina
Puntual, difusa, extracción de agua,
morfológica y usos del suelo
Probable
F002
13474
5
Bueno
No pristina
Puntual, difusa, extracción de agua,
morfológica y usos del suelo
Probable
F003
13474
5
Bueno
No pristina
Puntual, difusa, extracción de agua,
morfológica y usos del suelo
Probable
F009
13475
5
Bueno
No pristina
Puntual, difusa, morfológica y usos
del suelo
Probable
F028
13450
8
Bueno
Pristina
Puntual, difusa, extracción de agua,
morfológica y usos del suelo
Probable
F031
13441
8
Bueno
Buen estado
Difusa
Probable
F042
13416
1
Bueno
Pristina
Difusa
Sin impacto
F078
20653
17
Bueno
No pristina
Difusa
Sin impacto
F110
13427
8
Bueno
Pristina
Puntual y difusa
Sin impacto
F189
13499
6
Muy bueno
Pristina
Sin presión
Sin impacto
F193
13450
8
Bueno
Pristina
Puntual, difusa, extracción de agua,
morfológica y usos del suelo
Probable
F196
13444
8
Bueno
Pristina
Difusa y usos del suelo
Sin impacto
F198
11999
8
Bueno
F199
12000
1
Bueno
Buen estado
Difusa
Sin impacto
F200
13420
1
Bueno
Buen estado
Difusa
Sin impacto
F207
13447
8
Bueno
Pristina
Difusa
Sin impacto
F210
13429
1
Bueno
Pristina
Puntual, difusa, morfológica y usos del
suelo
Sin impacto
F226
13360
8
Bueno
Buen estado
Puntual, difusa y morfológica
Probable
F228
13357
8
Bueno
Sin datos
Puntual
Probable
F237
13500
6
Bueno
Buen estado
Puntual y difusa
Sin impacto
F238
13498
2
Bueno
Pristina
Morfológica
Sin impacto
F239
11947
6
Muy bueno
Pristina
Difusa
Sin impacto
F251
11989
8
Bueno
Buen estado
Difusa y usos del suelo
Sin impacto
F254
20653
8
Bueno
Buen estado
Difusa y morfológica
Sin impacto
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
A continuación se presenta un breve resumen de los resultados obtenidos para cada
uno de los tipos fluviales, siguiendo la clasificación del CEDEX (2005), presentes en la
Cuenca del Guadiana:
Tipo 2: ríos de la depresión del Guadalquivir
(CEDEX, 2005). Solo se presenta una estación
(F238) el Arroyo Helechoso (Figura 23) con
estado ecológico Bueno, situada en un
tramo de referencia, sin impacto y con presión morfológica. Esta estación ha dejado de
pertenecer al ámbito de gestión de la CHG
por lo que el seguimiento de la calidad en el
futuro deberá de realizarla la nueva demarcación hidrográfica.
Tipo 1: ríos de llanuras silíceas del Tajo y Guadiana (CEDEX, 2005). Siete estaciones en las
que el estado ecológico es Bueno, los resultados indican que 4 estaciones se encuentran en tramos prístinos o en buen estado y
sin impacto. Sin embargo ninguna de estas
estaciones se encuentra sin presiones, si
bien dichas presiones son de origen difuso.
Las estaciones son: F042 (Figura 22), F199,
F200 y F210.
Tipo 5: ríos manchegos (CEDEX, 2005). Las cuatro estaciones que presentan un estado ecológico Bueno dentro de tipo 5 se encuentran
en tramos de no referencia y sometidas a
diversas presiones e impactos. Dichas esta-
Figura 22. Río Gargáligas (F042): estación de tipo 1 con
estado ecológico Bueno.
Figura 23. Arroyo Helechoso (F238): estación del tipo 2
con estado ecológico Bueno.
Figura 24. Río Cigüela (F002): estación de tipo 5 con
estado ecológico Bueno.
Figura 25. Arroyo Tamujoso (F189): estación de tipo 6
con estado ecológico Muy Bueno.
31
ciones son: F001, F002 (Figura 24), F003 y
F009.
Tipo 6: ríos silíceos del piedemonte de Sierra
Morena (CEDEX, 2005). Señalar que para este
tipo solo se dispone de datos de la campaña
de invierno de 2005 ya que por el cambio de
gestión administrativa los ríos pasaron a otra
demarcación hidrográfica. Curiosamente es
en este tipo donde se encuentran dos estaciones en los que el estado ecológico es Muy
bueno y una con estado ecológico Bueno.
La estación situada en el Arroyo de Tamujoso (F189) (Figura 25) es la única estación de
todo el estudio que cumple todos los criterios para ser de referencia: se sitúa en un
32
tramo prístino y no presenta ni presiones ni
impactos. Las otras dos estaciones (F237 y
F239) se presentan en tramos de referencia,
sin impacto pero con presión de origen difuso.
Tipo 8: ríos de la baja montaña mediterránea silícea (CEDEX, 2005). Este es uno de los tipos con
mayor representación en la cuenca y por
tanto con mayor número de estaciones. De
las 23 estaciones en las que el estado ecológico es Bueno, los resultados indican que 11
estaciones se encuentran en tramos de referencia. Cuatro de las 11 estaciones (F110,
F196, F207, F251 y F254) se sitúan en tramos
sin impacto, pero todas ellas tienen algún
Figura 26. Arroyo Fresnedoso (F198): estación de tipo 8
con estado ecológico Bueno.
Figura 27. Río Guadiana (F075): estación de tipo 16 con
estado ecológico Moderado.
Figura 28. Río Guadiana (F078): estación del tipo 17
con estado ecológico Bueno.
Figura 29. Arroyo de Pedraza (F231): estación del tipo
18 con estado ecológico Malo.
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
tipo de presión. La estación F198, el Arroyo
Fresnedoso (Figura 26) no tiene definida
masa de agua pero los valores obtenidos de
los diferentes indicadores muestran un estado ecológico Bueno.
Tipo 16: ejes mediterráneo continentales mineralizados (CEDEX, 2005). Las 6 estaciones de
este tipo han presentado un estado ecológico inferior a Bueno. La estación F075 situada
en el río Guadiana (Figura 27) solo ha presentado calidad buena para el índice IBMWP,
con un estado ecológico final Moderado.
Tipo 17: grandes ejes en ambiente mediterráneo (CEDEX, 2005). De las nueve estaciones
del tipo 17, correspondiente al río Guadiana
(Figura 28) tan solo una (F078) presenta un
estado ecológico Bueno. Se encuentra en un
tramo no prístino, sin impacto y con presión
con origen difuso.
Tipo 18: ríos costeros mediterráneos (CEDEX,
2005). La única estación de este tipo situada
en el Arroyo de Pedraza (Figura 29) (F231) se
muestreó en la campaña de invierno de
2005 y se obtuvo un estado ecológico Malo.
4. EMBALSES
Se estudiaron 38 embalses en la mayoría de
los cuales la gestión depende directamente
de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (Tabla 17) (en el anexo). En la Figura 30 se
localizan los embalses estudiados.
Figura 30. Localización de las estaciones de muestreo de la Red Biológica en los embalses del ámbito de
la Confederación Hidrográfica del Guadiana.
Los embalses con estaciones pertenecientes
a la red de control biológico están clasificados en 7 tipos diferentes según el documento borrador de tipologías del CEDEX (2006).
No obstante, al iniciarse los trabajos en 2005
dichas tipologías todavía no estaban definidas por lo que los embalses fueron asignados a 4 tipos más generales.
33
En la Tabla 18 se muestra para cada embalse
el tipo asignado por el CEDEX y el tipo que
fue considerado para el trabajo actual.
Tabla 18. Tipología a la que pertenece cada embalse de la Red de Control Biológico del Guadiana según
la clasificación del documento borrador del CEDEX (CEDEX, 2006) y del presente trabajo.
TIPO TRABAJO ACTUAL
Silíceos de tramos altos
Silíceos de la Red
Principal
Calcáreos de tramos altos
Calcáreos de la Red
Principal
TIPO CEDEX
EMBALSES
Tipo 2: Monomíctico, silíceo de
zonas húmedas, con temperatura
media anual mayor de 15ºC, pertenecientes a ríos de cabecera y
tramos altos
Cubilar, Cancho del Fresno, Ruecas, Tentudía, Jarrama
Tipo 4: Monomíctico, silíceo de
zonas no húmedas, perteneciente a ríos de cabecera y tramos
altos
Torre de Abraham, Valdecaballeros, Azud del Ruecas, Gargáligas,
Sierra Brava, Cornalbo, Proserpina, El Boquerón, Horno Tejero,
Los Canchales*, Andévalo,
Corumbel Bajo, Piedras*, Los
Machos*
Tipo 5: Monomíctico, silíceo de
zonas no húmedas, perteneciente a ríos de la red principal
Villar del Rey, La Serena, Zújar,
Chanza
Tipo 6: Monomíctico, silíceo de
zonas no húmedas, perteneciente a tramos bajos de los ejes
principales
Cijara, García de Sola, Orellana
Tipo 10: Monomíctico, calcáreo
de zonas no húmedas, pertenecientes a ríos de cabecera y
tramos altos
Gasset, Peñarroya, Puerto de
Vallehermoso, La Cabezuela,
Piedra Aguda*, El Aguijón*
Tipo 11: Monomíctico, calcáreo
de zonas no húmedas, pertenecientes a ríos de la red principal
El Vicario, Vega del Jabalón, Los
Molinos, Alange, Valuengo*
Tipo 12: Monomíctico, calcáreo
de zonas no húmedas, pertenecientes a tramos bajos de los
ejes principales
Montijo
* Embalses reasignados de tipo según los datos de alcalinidad medidos.
Los embalses de Los Canchales, Piedras y
Los Machos pertenecen al tipo 10 según el
documento borrador del CEDEX y sin
embargo han sido asignados en este trabajo
a embalses silíceos de tramos altos. Esto se
debe a que los datos de alcalinidad obtenidos en los muestreos realizados correspondían a rangos de embalses silíceos, contradi-
34
ciendo la alcalinidad estimada en el documento borrador del CEDEX (2006).
Lo mismo sucede con los embalses de Piedra Aguda (tipo 4 CEDEX), El Aguijón (tipo 4
CEDEX) y Valuengo (tipo 5 CEDEX), clasificados como silíceos en el documento borrador del CEDEX y considerados como calcá-
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
reos en este trabajo en base a los resultados
de alcalinidad obtenidos. No obstante, la
tipología que finalmente establezca el
CEDEX se adoptará como documento base
para las distintas Cuencas Hidrográficas.
4.1. ELEMENTOS BIOLÓGICOS
4.1.1. Fitoplancton y pigmentos
fotosintéticos
4.1.1.1. Procedimiento
Las muestras para identificación y recuentos
de fitoplancton y las de pigmentos fotosintéticos se obtuvieron mediante una muestra
integrada de diferentes profundidades que
comprende toda la columna correspondiente a la zona fótica. Esta técnica se considera
la más adecuada por los fitoplanctólogos
expertos consultados, y es la técnica más
habitualmente empleada en la actualidad
para caracterizar los embalses (siguiendo las
indicaciones del Anexo V de la DMA).
El análisis de la muestrea de fitoplancton se
ha realizado mediante el método Utermöhl
(Lund et al, 1958). Para la muestra de fitoplancton cualitativo se utilizó una red de 35
μm de luz de malla, realizando un arrastre en
el seno del agua, de forma horizontal, hasta
conseguir un filtrado visible. Estas muestras
permiten un análisis de abundancias relativas de los diferentes taxones, que complementa el obtenido en las muestras de botella. Para determinar la concentración de
clorofila-a se recogieron las muestras
mediante filtración in situ de volúmenes
conocidos de agua. Los filtros se guardaron
en frío y a oscuras hasta su determinación en
laboratorio. La extracción de los pigmentos
de realizó con acetona y se cuantificaron por
espectrofotometría de absorción molecular
en el laboratorio.
4.1.1.2. Resultados
La correlación entre densidades de células
de fitoplancton y concentración de clorofilaa se representa gráficamente en la Figura 31,
en la que se muestran los coeficientes de
correlación obtenidos con los datos de los
dos muestreos y las ecuaciones que relacionan ambas variables.
Figura 31. Correlación entre densidades de células de fitoplancton y concentración
de clorofila-a en las muestras de invierno de 2005 y verano de 2006 de
las estaciones en embalses de la red de control biológico del Guadiana.
35
En los embalses de la cuenca del Guadiana
se han identificado un total de 265 taxones
entre las muestras de invierno de 2005 y las
de verano de 2006. El grupo mejor representado en ambos muestreos es el de las clorofíceas, con un total de 127 taxones identificados. Las cianobacterias también se hallan
bien representadas con 43 taxones presentes, siendo 31 de ellos cianobacterias potencialmente productoras de cianotoxinas que
se presentan particularmente en las muestras de verano. En cuanto a las diatomeas,
forman el tercer grupo en importancia, con
un total de 31 taxones identificados. Euglenofíceas y Dinoflageladas aparecen especialmente en verano y se han identificado 15
taxones en cada uno de los grupos. Criptofíceas y Xantofíceas son los grupos con menor
relevancia con 11 y 3 taxones respectivamente.
Según la densidad celular del fitoplancton
(células/ml) (Tabla 19), los embalses de la
Cuenca del Guadiana se sitúan en un nivel
trófico de meso-eutrofia en la campaña de
verano de 2006. Del total de 60 puntos de
muestreo, 37 de ellos han dado recuentos
celulares elevados (>9500 cél/ml), que indican eutrofización del embalse, mientras que
23 se mantendrían en niveles correspondientes a oligotrofia (< 5000 cél/ml). En cambio, si
se observan los resultados de los recuentos
celulares de las muestras de invierno 2005, se
aprecia que solamente en 9 de los puntos
muestreados la densidad celular se corresponde con valores meso-eutróficos (entre
5000 y 9500 cél/ml), mientras que los 50 puntos restantes se corresponden bien con niveles de oligotrofia (< 5000 cél/ml).
Los taxones que se presentan con mayor frecuencia en los recuentos son:
• Cianobacterias filamentosas: Pseudanabaena spp., Anabaena spp., Planktothrix
agardhii, Oscillatoria sp., Geitlerinema sp.
y Aphanizomenon spp.
36
• Cianobacterias que forman colonias
esféricas o laminares: Merismopedia
spp., Microcystis spp., Synechocystis
aquatilis, Woronichinia naegeliana y
Aphanocapsa holsatica, todas ellas susceptibles de producción de cianotoxinas.
• Diatomeas: Aulacoseira granulata, Cyclotella spp, Fragilaria crotonensis y Fragilaria spp.
• Criptofíceas: Cryptomonas spp. y Rhodomonas minuta.
• Clorofíceas coloniales: Scenedesmus
spp., Coelastrum spp., Oocystis spp.,
Pediastrum spp., Sphaerocystis schoroeteri y Dicttyosphaerium spp.
4.1.2. Zooplancton
4.1.2.1. Procedimiento
El muestreo de zooplancton en los embalses
se realizó mediante pescas verticales desde
la embarcación con red cónica de plancton,
con una boca circular de 30 cm de diámetro
y 100 μm de luz de malla. Las muestras se
depositaron en envases apropiados, debidamente etiquetadas y fueron fijadas con formaldehído al 4%.
El análisis en el laboratorio se realizó con un
estereomicroscopio de 40 aumentos e iluminación hiposcópica y con un microscopio
con capacidad entre 40 y 1000 aumentos. La
muestra se agitó dentro del vial, se vertió un
volumen conocido en una placa de Petri
analizando posteriormente el contenido
mediante el estereomicroscopio. Se realizaron transectos hasta que se consiguió elaborar un inventario completo y la obtención de
estimas semicuantitativas. Muchas de las especies requieren disección y observación
microscópica de caracteres taxonómicos
para su identificación, utilizando técnicas
muy especializadas, razón por la cual resulta
imprescindible que las determinaciones
vayan a cargo de un experto.
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
4.1.2.2. Resultados
El plancton invernal se encuentra caracterizado por Cyclops vicinus, el cual no aparece
en verano. El plancton estival cuenta con
especies termófilas como Diaphanosoma
mongolianum y D. brachyurum (incluso Ceriodaphnia rigaudi, una especie de ámbito
tropical, en el embalse de Los Molinos de
Matachel). Conochylus unicornis podría considerarse un rotífero típico de verano en
estos embalses.
En el plancton aparecen también especies
típicamente microbentónicas, de las cuales
sólo Chydorus sphaericus puede llegar a
comportarse como un auténtico planctónico y desarrollar poblaciones significativamente importantes como en Cornalbo. El
resto son ocasionales y provienen de los tributarios donde pueden crecer en madrejones, y balsas y remansos fluviales.
• Pleuroxus denticulatus, un cladócero quidórido litoral, conocido únicamente en
la cuenca del Ter, se ha encontrado en
los embalses de Horno Tejero, Villar del
Rey, Orellana, García de Sola, Montijo,
Alange y Azud de Ruecas.
• Sida cristalina aparece en invierno en
Peñarroya como un biotrazador de las
aguas de Ruidera. Esta especie es rarísima en los embalses ibéricos (sólo se
conoce en embalses de la cabecera del
Ebro).
• Se ha encontrado por primera vez un
ejemplar macho de Monospilus dispar,
un cladócero muy raro, del que sólo se
conocían hembras en la península Ibérica (Figura 33).
Desde el punto de vista faunístico vale la
pena destacar la presencia de varios taxones
que revisten particular interés:
• Mesocyclops leuckarti, copépodo planctónico presente sólo en algunos inventarios y en escaso número, es también
primera cita para la península ibérica
(Figura 32).
Figura 33. Monospilus dispar, ejemplar macho de cladócero.
• En el embalse de Horno Tejero ha aparecido una especie de Alona, próxima
morfológicamente a Alona setulosa
(Megard), aún desconocida para la ciencia (Figura 34).
Figura 32. Mesocyclops leuckarti, copépodo planctónico.
Las comunidades de plancton descritas son
características de embalses mesotróficos y
eutróficos de tramos medios y bajos de los
ríos mediterráneos, muy comunes en las
37
masa de agua. En total se muestrearon 59
localidades repartidas entre 32 embalses.
4.1.3. Peces
En cada localidad se empleó una combinación de distintas trampas de captura pasiva,
incluyendo redes de enmalle (trasmallos),
nasas holandesas y trampas para peces
pequeños (minnow traps metálicas y de
plástico) (Figura 35). Esta combinación de
artes de pesca permite la captura de un
amplio espectro de especies y de tallas de
las mismas, con lo que se asegura una
correcta caracterización de la ictiofauna de
embalses. Esta misma metodología se
empleó en el muestreo de lagunas. El
grupo de investigación “Biología de las
Aguas Epicontinentales”, que realizó el trabajo, tiene una amplia experiencia en el
empleo de esta metodología, tanto en
embalses como en estuarios, obteniendo
resultados de máxima calidad.
4.1.3.1. Procedimiento
4.1.3.2. Resultados
Los muestreos de ictiofauna en embalses se
llevaron a cabo en el verano de 2006. En
cada embalse se seleccionaron entre 1 y 4
localidades en función del tamaño de la
En los 32 embalses muestreados (59 localidades de muestreo) se capturó un total de
19 especies, 9 de ellas nativas (47,4%) y 10
exóticas (52,6%). Teniendo en cuenta el con-
Figura 34. Alona sp., ejemplar del género posible
nueva especie para la ciencia.
cuencas ibéricas situadas al sur del Sistema
Central (Tajo, Guadiana, Guadalquivir y
Júcar); el indicador regional, es decir, la especie con mayor significado biogeográfico y
más frecuente en la comunidad, sería el
copépodo Copidodiaptomus numidicus.
Figura 35. Artes de pesca empleadas en el muestreo de ictiofauna en los embalses de la cuenca del Guadiana.
38
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
junto de localidades de muestreo, el número
de especies exóticas rondó en promedio el
70% de las especies capturadas. De todas las
familias presentes destacó la de los ciprínidos, formada por 11 especies (Tabla 20). Le
siguen en número de representantes Ictaluridae y Centrarchidae, con dos especies cada
una de ellas. El resto de familias (Cobitidae,
Blennidae, Esocidae y Poeciliidae) contó con
un único representante específico. Entre las
especies nativas destaca, por su grado de
amenaza, el blenio de río (Salaria fluviatilis).
Esta especie está considerada “En peligro”,
según criterios de la UICN (Doadrio, 2002).
Tabla 20. Lista de especies capturadas en 32 embalses de la cuenca del río Guadiana.
Especies Introducidas
Especies Nativas
ORDEN
Cypriniformes
FAMILIA
Cyprinidae
ESPECIE
NOMBRE COMÚN
Barbus comizo
Barbo comizo
Barbus microcephalus
Barbo cabecicorto
Barbus sclateri
Barbo común
Chondrostoma willkommii
Boga del Guadiana
Squalius alburnoides
Calandino
Squalius pyrenaicus
Cachuelo
Tinca tinca
Tenca
Cobitidae
Cobitis paludica
Colmilleja
Perciformes
Blenniidae
Salaria fluviatilis
Blenio de río
Salmoniformes
Esocidae
Esox lucius
Lucio
Cyprinidae
Alburnus alburnus
Alburno
Carassius auratus
Carpín
Cyprinus carpio
Carpa
Rutilus rutilus
Rutilo
Ameiurus. melas
Pez gato negro
Ictalurus punctatus
Pez gato punteado
Gambusia holbrooki
Gambusia
Lepomis gibbosus
Pez sol
Micropterus salmoides
Blacbás
Cypriniformes
Siluriformes
Ictaluridae
Cyprinodontiformes
Poeciliidae
Perciformes
Centrarchidae
En todos los embalses muestreados se capturaron especies exóticas, sin embargo no
en todos ellos se detectó la presencia de
especies nativas. En concreto, diez embalses
(31,25% del total) carecieron de estas especies. Esto está relacionado con el hecho de
que las especies exóticas proliferan en los
ambientes degradados, como aquellos
generados por los embalses (Clavero et al.,
2004). La degradación del hábitat promovida
por los embalses perjudica a las especies
nativas. Además, no debe olvidarse que las
especies exóticas, muchas de ellas depredadoras voraces como el lucio (Esox lucius)
(Figura 36) o el blacbás (Micropterus salmoides), ejercen un fuerte impacto negativo
sobre las comunidades de peces nativos.
Estos dos factores (degradación ambiental e
impacto promovido por especies alóctonas)
actúan de forma simultánea, convirtiendo a
los embalses en ambientes poco apropiados
para las especies nativas. Esto explica el
39
Figura 36. Ejemplar de lucio (Esox lucius) de 1,5 m, capturado en el embalse Los Canchales en verano de 2006.
hecho de que las poblaciones de especies
autóctonas hayan desaparecido de algunos
de estos embalses muestreados, o bien presenten unas densidades bajísimas indetectables con los métodos de captura empleados.
(2001). Se le ha asignado a cada especie
autóctona un valor según la categoría de
amenaza de la UICN propuesta para la
misma por Doadrio (2002): CR (en peligro crítico) = 4; EN (en peligro) = 3; VU (vulnerable)
= 2; LR (menor riego) = 1. De igual modo se
le ha asignado un valor negativo a cada
especie introducida acorde con su grado
potencial de piscivoría: ciprínidos y especies
de pequeño tamaño = -1; especies depredadoras que no alcanzan 30 cm = -2; especies
depredadoras mayores de 30 cm = -3. Se
asume, por tanto, que el impacto ejercido
por una determinada especie exótica es
mayor cuanto más elevado es su carácter
piscívoro. El valor asignado a cada especie se
multiplica por la abundancia de las mismas
en cada embalse muestreado. De este modo
la expresión del índice de conservación (IC)
en cada embalse queda definida del siguiente modo:
IC= Σ Vi*Ai
donde,
La metodología empleada en los tramos fluviales para evaluar el estado ecológico se
basa en cuantificar la desviación existente
entre la composición específica observada y
la esperada en ausencia de perturbaciones
antrópicas. Sin embargo, esta aproximación
no es la más adecuada para evaluar el estado ecológico de los embalses, ya que las
comunidades de peces existentes en estas
masas de agua altamente modificadas están
principalmente condicionadas por la acción
antrópica (sueltas de especies). Por ello, se ha
optado por una segunda alternativa consistente en aplicar un índice derivado del propuesto por Clavero et al. (2004). Este índice
se ha aplicado también para caracterizar el
estado ecológico de las lagunas, puesto que
las comunidades de peces en estas masas de
agua están condicionadas igualmente por la
acción antrópica.
En el cálculo del índice se ha realizado
siguiendo la metodología de Prenda et al.,
40
• i= 1, ...., 19 especies en embalses
• Vi= valor asignado a la especie i, según
la categoría de conservación propuesta
por Doadrio (2002).
• Ai= abundancia de la especie i en el
embalse considerado.
El valor del índice oscila entre valores negativos (embalses con bajo estado de conservación) y positivos (embalses con mejor estado
de conservación), dependiendo de la composición específica de la comunidad (proporción de especies exóticas, grado de piscivoría de las mismas). (Tabla 21)
La aplicación del índice pone claramente de
manifiesto el extraordinario grado de alteración (degradación) en que se encuentran las
comunidades de peces que habitan en los
embalses de la cuenca del Guadiana. Más
del 80% de los embalses muestreados mostraron valores negativos del índice. Esto
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
informa nuevamente sobre el grado de
invasión que sufren estas masas de agua
por parte de especies alóctonas, muchas de
ellas ictiófagas como el lucio, blacbás, pez
gato negro (Ameiurus melas) y pez gato
punteado (Ictalurus punctatus). Estas especies depredadoras tienen un elevado
potencial de impacto sobre las especies
nativas (Blanco-Garrido, 2006). Las comunidades autóctonas ibéricas han evolucionado en ausencia de peces nativos ictiófagos,
por tanto no han desarrollado los mecanismos necesarios para hacer frente a estas
especies.
Tabla 21. Valor asignado a cada especie para el cálculo del índice de conservación de embalses y humedales.
El valor se asigna en función de las categorías de amenaza de cada especie (sólo las nativas) y el grado
de piscivoría (sólo especies exóticas)
ESPECIE
NOMBRE COMÚN
ACRÓNIMO
VALOR ASIGNADO
Barbus sclateri
Barbo común
BSC
1
Micropertus salmoides
Blacbás
MSA
-3
Barbus comizo
Barbo comizo
BCO
2
Chondrostoma willkommii
Boga del Guadiana
CWI
2
Barbus microcephalus
Barbo cabecicorto
BMI
2
Lepomis gibbosus
Pez sol
Gambusia holbrooki
Gambusia
Salaria fluviatilis
Blenio de río
SFL
3
Cyprinus carpio
Carpa
CCA
-1
Esox lucius
Lucio
ELU
-3
Tinca tinca
Tenca
TTN
1
LGI
-2
GHO
-1
Cobitis paludica
Colmilleja
CPA
2
Carassius auratus
Carpín
CAU
-1
Ameiurus melas
Pez gato negro
AME
-3
Squalius alburnoides
Calandino
SAL
2
Ictalurus punctatus
Pez gato punteado
IPU
-3
Alburnus alburnus
Alburno
AAL
-1
Squalius pyrenaicus
Cachuelo
SPY
2
Rutilus rutilus
Rutilo
RRU
-1
Barbus guiraonis
Barbo mediterráneo
BGU
2
Cuando una masa de agua es invadida por
peces foráneos depredadores, la comunidad
nativa original se ve simplificada enormemente (Blanco-Garrido, 2006). Disminuye
principalmente la proporción de especies
y/o tallas de pequeño tamaño, que son las
más sensibles a las interacciones con las
especies exóticas (depredación directa, competencia, comportamiento agonístico,...),
quedando la comunidad original reducida a
especies y/ o tallas de gran tamaño.
Tan sólo 6 embalses (algo más del 18% del
total) presentaron valores positivos en el
índice (Figura 37). En estos embalses se capturaron especies nativas de pequeño-mediano tamaño como calandinos, cachuelos y
colmillejas. Por otra parte, las especies exóti-
41
Figura 37. Valores de índice de conservación empleado para evaluar el estado ecológico de los
embalses muestreados.
cas fueron relativamente poco abundantes y
en cualquier caso, depredadores ictiófagos
como lucios y peces gato (A. melas e I. punctatus) estuvieron ausentes.
Teniendo en cuenta que las especies exóticas están ampliamente reconocidas como
un factor clave en la degradación de las
masas de agua (Kennard et al., 2005; Prenda
et al., 2006) y a la luz de los resultados obtenidos es posible afirmar que los embalses de
la cuenca se encuentran en un estado de
conservación poco satisfactorio.
4.2. ELEMENTOS HIDROMORFOLÓGICOS
Durante los muestreos realizados en verano
de 2006 la mayoría de los embalses se
encontraban estratificados. A partir del nivel
al que se detectó la termoclina en cada
embalse, de la cota a la que se encontraba el
42
embalse ese día y de la curva característica
de cota-volumen se han podido determinar
para los diferentes embalses los volúmenes
del epilimnion y del hipolimnion, y por consiguiente la relación entre ellos.
Las dimensiones del epilimnion y el hipolimnion tienen influencia sobre el nivel y la dinámica de oxigenación del embalse. Una relación epilimnion/hipolimnion inferior a 1
significa volúmenes del hipolimnion más
grandes y por lo tanto una mayor duración
de la reserva de oxígeno hipolimnética y un
retraso en la aparición de situaciones de
anoxia. Pero a su vez, un volumen del hipolimnion elevado puede suponer, en caso de
alcanzarse condiciones anóxicas, que éstas
afecten al conjunto del embalse en la
siguiente época de mezcla, con los consiguientes problemas de calidad del agua.
Según los datos de la Tabla 22 (en el anexo)
un 60% de los embalses en los que se ha
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
podido determinar la relación epilimnion/hipolimnion presentan un cociente E/H inferior a 1 es decir, un volumen del hipolimnion
superior al del epilimnion. Los embalses en
los que esta relación (cociente E/H) es más
baja són los del Zújar, Orellana y Vega del
Jabalón.
tros que determinan la estructura física de la
masa de agua, las condiciones de oxigenación y el pH.
4.3.1. Procedimiento
En cada estación de muestreo se han tomado muestras discretas de agua para su posterior análisis en laboratorio. En condiciones de
mezcla las muestras para análisis en laboratorio se tomaron en superficie y fondo. En
verano, además de superficie y fondo se
tomaron muestras en la termoclina y en el
hipolimnion cuando se consideró necesario
para tener una mejor caracterización de la
columna de agua. Mediante estos análisis se
han determinado las concentraciones de los
principales nutrientes, la alcalinidad, el calcio
y la sílice en los puntos más significativos de
la columna de agua.
En cada estación de muestreo se han llevado
a cabo perfiles verticales con una sonda multiparamétrica TURO para medir los paráme-
La Tabla 23 presenta los parámetros analizados y los métodos analíticos seguidos en el
laboratorio de Red Control.
El tiempo de residencia y la tasa de renovación no se han podido calcular para todos los
embalses debido a la falta de datos relativos
a las curvas características de cota-volumen y
a salidas totales diarias de muchos de ellos.
4.3. ELEMENTOS FÍSICO-QUÍMICOS
Tabla 23. Parámetros fisicoquímicos determinados en laboratorio. SM: Procedimientos de Standard Methods,
ed.20 (1998). PI-ENAC son procedimientos internos de Red-Control acreditados y validados por ENAC.
PARÁMETRO
Amonio
Calcio
Fosfatos
NORMA DE
REFERENCIA
MÉTODO ANALÍTICO
PROCEDIMIENTO
mg NH4/l
PI-ENAC
Absorción Molecular
PI-RC-6.05
mg Ca/l
PI-ENAC
ICP
PI-RC-6.54
UNIDADES
mg PO4/l
PI-ENAC
Absorción Molecular
PI-RC-6.25
mg P/l
PI-ENAC
Absorción Molecular
PI-RC-6.27
Nitratos
mg NO3/l
PI-ENAC
Electroforesis capilar
PI-RC-6.96
Nitritos
mg NO2/l
PI-ENAC
Absorción Molecular
PI-RC-6.35
Sílice
mg SiO2/l
PI-ENAC
Absorción Molecular
PI-RC-6.45
Fósforo Total
Alcalinidad
mg CaCO3/l
SM 2320 B-98
Volumetría
PI-RC-6.03
Sulfatos
mg SO4/l
PI-ENAC
Turbidimetría
PI-RC-6.47
Cloruros
mg Cl/l
PI-ENAC
Absorción Molecular
PI-RC-6.14
4.3.2. Resultados
En la campaña realizada en invierno de
2005 se encontraron la mayoría de embalses completamente mezclados. Sin embargo en un 40% de las estaciones muestreadas se insinuaba una ligera termoclina
indicadora de un inicio de estratificación.
Esta situación afectaba en general a estaciones situadas en los embalses más meridionales de la cuenca, con temperaturas
atmosféricas medias anuales más elevadas.
En ninguna de las 60 estaciones muestreadas se encontró anoxia.
43
En verano de 2006 todos los embalses estaban estratificados en el momento del muestreo. Solamente en el punto de presa del
embalse de Cornalbo, con sólo 3 metros de
profundidad, y en algunas estaciones situadas en colas de embalse no se encontró una
termoclina bien diferenciada. De las 60 estaciones muestreadas, el 85% presentaba unas
marcadas condiciones de estratificación. En
35 de ellas había además anoxia en el hipolimnion, en la mitad de los casos acompañada de concentraciones significativas de SH2.
Cabe destacar las concentraciones especialmente elevadas de sulfhídrico medidas en el
fondo del punto de presa del embalse de El
Vicario (64 mg SH2/l).
La conductividad es sistemáticamente más
elevada en los muestreos de verano que en
los de invierno, debido a la mayor concentración de iones que suele producirse de forma
natural al disminuir el caudal de los tributarios que alimentan el embalse y aumentar la
evaporación.
La transparencia del agua en los puntos de
presa, valorada a través de la profundidad de
visión del Disco de Secchi, muestra máximos
en invierno en el embalse de la Serena (11,5
m) y mínimos en Los Machos (0,2 m). En
verano el agua es menos transparente y los
máximos de profundidad de visión del Disco
de Secchi, registrados en La Serena y Cijara,
llegan solamente a 7,3 m. Los mínimos en
verano corresponden a los embalses de El
Vicario y Valuengo, ambos con 0,4 m.
Los resultados en invierno de 2005 muestran
unos valores de fosfatos y fósforo total por
debajo de los límites de detección en un
90% de las estaciones muestreadas. En verano de 2006 los niveles de fosfato y fósforo
total son significativamente superiores a los
de invierno de 2005, con concentraciones
por encima de los niveles de detección en 15
estaciones para fosfato y 30 estaciones para
fósforo total.
44
4.4. VALORACIÓN DEL POTENCIAL
ECOLÓGICO
4.4.1. Procedimiento
Según lo establecido en el artículo 4 y en el
anexo V de la Directiva Marco del Agua los
embalses, en tanto que masas de agua fuertemente modificadas, deben alcanzar un
buen potencial ecológico, definido por unas
condiciones que no difieran más que levemente de las correspondientes al tipo de
masa de agua superficial más estrechamente comparable, en este caso los lagos.
En estos momentos no se dispone todavía
de una metodología de referencia para la
determinación del potencial ecológico en
embalses. Los trabajos de intercalibración a
nivel europeo no están ni mucho menos terminados, y desde España se está trabajando
todavía en un documento borrador de la
tipificación de los embalses (CEDEX, 2006).
Aun así ha habido algunos trabajos de valoración del potencial ecológico de los embalses en las cuencas del Tajo (Confederación
Hidrográfica del Tajo, 2002), basados a su vez
en estudios extensivos de embalses españoles (Margalef et. al., 1976, Morguí, 1991, Riera,
1993, Armengol y García, 1997) y también en
los estudios realizados en las cuencas internas de Catalunya (Agència Catalana de l’Aigua, 2003). En base a la metodología de esos
trabajos y a la información disponible a través de los muestreos realizados, se ha establecido un método de valoración del potencial ecológico de cada embalse.
Los indicadores biológicos seleccionados
para la valoración del potencial ecológico
son todos relativos al fitoplancton. Esto es
porque el fitoplancton constituye un buen
descriptor de las condiciones tróficas del
embalse y permite identificar diferentes
situaciones dentro de la evolución trófica de
la masa de agua.
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
Concentración de clorofila: se ha utilizado la
concentración más elevada (entre muestreos de invierno y verano) de los datos correspondientes a la estación de presa de cada embalse.
Grupos funcionales del fitoplancton: de todas
las especies de fitoplancton que aparecen
en las muestras recolectadas en verano de
2006 se han seleccionado las que son significativas de un grupo funcional siguiendo la
clasificación establecida por Reynolds (Reynolds et al., 2002). Mediante esta clasificación, se ha podido determinar del total de
células de fitoplancton obtenidas en la
muestra de cada estación el porcentaje de
células de cada grupo funcional asociable a
cada nivel de eutrofia. Finalmente se ha asignado a cada estación un nivel de eutrofia,
que corresponde al nivel al que se asocian
un mayor porcentaje de las células encontradas.
Densidad de cianobacterias tóxicas: en todas
las estaciones se han calculado las densidades de cianobacterias tóxicas. Para la valora-
ción del potencial ecológico se han tenido
en cuenta las densidades máximas halladas
en cada embalse, correspondieran o no a
estaciones de presa.
En cuanto a los indicadores fÍsico-químicos,
se han tenido en cuenta fundamentalmente
las condiciones de oxigenación.
Concentración de oxígeno en hipolimnion: a
partir del perfil de oxígeno se ha determinado la concentración media de oxígeno en el
hipolimnion de aquellas estaciones en las
que la columna de agua estaba estratificada.
Concentración de SH2 y NH4 en el fondo: en los
casos en que existe anoxia en el fondo se ha
considerado la concentración de sulfhídrico
y amonio.
4.4.2. Resultados
La Figura 38 ofrece una representación gráfica del potencial ecológico de cada embalse y un resumen de los resultados en porcentajes.
Figura 38. Estado Ecológico de los embalses de la red de control biológico de la CHG en el periodo
2005-2006.
45
Según los resultados obtenidos solamente 3
embalses presentan un estado óptimo tanto
de los indicadores biológicos como de los
fisico-químicos. Destaca el embalse de Zújar
(Figura 39). Hay que tener en cuenta que en
dos de estos embalses (Andévalo y Jarrama)
no se realizaron muestreos en verano por lo
que el potencial ecológico se basa estrictamente en datos de invierno. El número de
embalses que alcanza el buen potencial ecológico es algo superior.
En conjunto, los embalses que alcanzan o
superan el buen potencial ecológico, como
el embalse de Peñarroya (Figura 40) y que
por consiguiente cumplen con las exigencias ambientales de la Directiva Marco del
Agua suponen un 24% del total. La mayoría
de los embalses (un 42%) presentan un
potencial ecológico moderado. Con un
potencial ecológico deficiente o malo
encontramos 13 embalses, casi siempre
debido a la calidad biológica.
46
como una categoría diferenciada de masa de
agua, se clasifican dentro de la categoría de
lagos. En la red de control biológico se incluyen los 33 humedales considerados como
masa de agua por la Confederación Hidrográfica del Guadiana, más otros 7 que por su
singularidad e interés ambiental se ha considerado oportuno añadir. De esta forma, hay
un total de 40 estaciones de control en
humedales. El diseño definitivo de la red se
ha visto igualmente afectado por los cambios ocurridos en la gestión de las cuencas
del Tinto, Odiel y Piedras, que han obligado a
sustituir dos humedales incluidos en el diseño inicial por otros dos situados en la cuenca del Guadiana. La lista definitiva de humedales se presenta en la Tabla 24 (en el anexo)
y en la Figura 41.
5.1. ELEMENTOS BIOLÓGICOS
5.1.1. Fitoplancton y pigmentos fotosintéticos
5. HUMEDALES
5.1.1.1. Procedimiento
Los humedales, pese a no poseer en muchos
casos características propias de auténticos
lagos, son los genuínos representantes lacustres de la cuenca del Guadiana y, puesto que
la DMA no los reconoce explícitamente
Las muestras para identificación y recuentos
de fitoplancton y las de pigmentos fotosintéticos se obtuvieron a partir de una sola
muestra tomada en un punto representativo
del humedal. Cuando las condiciones lo
Figura 39. Embalse de Zújar, que presenta un óptimo
potencial ecológico.
Figura 40. Embalse de Peñarroya con potencial ecológico Bueno.
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
Figura 41. Localización de las estaciones de muestreo de la red de control biológico en los humedales del ámbito
de la Confederación Hidrográfica del Guadiana.
requerían, se tomaba una muestra integrada
por submuestras de diferentes lugares.
El análisis de la muestra de fitoplancton se ha
realizado mediante el método Utermöhl
(Lund et al., 1958).
Para la muestra de fitoplancton cualitativo se
utilizó una red de 35 μm de luz de malla, realizando un arrastre en el seno del agua, de
forma horizontal, hasta conseguir un filtrado
visible. Estas muestras permiten un análisis
de abundancias relativas de los diferentes
taxones, que complementa el obtenido en
las muestras de botella.
Para determinar la concentración de clorofila-a se recogieron las muestras mediante filtración in situ de volúmenes conocidos de
agua. Los filtros se guardaron en frío y a
oscuras hasta su determinación en laboratorio. La extracción de los pigmentos se realizó
con acetona y se cuantificaron por espectrofotometría de absorción molecular en el
laboratorio.
5.5.1.2. Resultados
La Tabla 25 muestra las concentraciones de
clorofila-a en las estaciones muestreadas.
47
Tabla 25. Concentración de clorofila-a en las estaciones de humedales de la red de control biológico
del Guadiana.
CLOROFILA (mg-Chl-a/m3)
HUMEDAL
Laguna de Manjavacas
Laguna del Taray (Pedroñeras)
Laguna del Longar (Lillo)
Laguna del Prado (Villacañas)
Laguna Larga
Laguna del Taray (Quero)
Laguna Grande de Villafranca
Laguna Camino de Villafranca
La Veguilla
Laguna de Retamar
Laguna Concejo
Laguna Tomilla
Laguna Tinaja
Laguna San Pedro
Laguna Redondilla
Laguna Lengua
Laguna Salvadora
Laguna de Santos Morcillo
Laguna Batana
Laguna de la Colgada
Laguna del Rey
Laguna de Cueva Morenilla
Laguna de la Coladilla
Tablas de Daimiel
MARZO
2005
OCTUBRE
2005
MARZO
2006
AGOSTO
2006
112,2
1107,7
1206,8
25,6
138,1
84,9
1,9
43,2
1222,8
30,7
5,1
3,0
1,4
0,5
1,3
2,6
1,6
2,3
1,1
1,8
1,8
2,5
2,8
2,4
-
473,17
54,73
2,08
0,68
0,8
1,23
1,09
2,24
1,03
0,63
1,14
0,8
0,6
0,65
5,77
9,86
36,16
93,74
2,01
0,99
1,43
0,86
1,45
1,78
1,16
3,72
1,57
1,89
2,34
29,23
18,63
83,88
Lagunas permanentes y semipermanentes:
Lagunas de Ruidera: destaca la presencia de
Planctonema lauterbornii (Ulotrichaceae)
(Figura 42) en casi todas las lagunas, y en
especial en Lengua donde llega a alcanzar
2.000 cel/ml. Esta especie se ha descrito en
lagos y embalses de la península Ibérica con
alta mineralización del agua y en un periodo
temporal que va desde el final del verano
hasta final de otoño (Ramón y Moyá, 1984).
Destaca en Tomilla la presencia de la cianobacteria Microcystis aeruginosa (Figura 43),
que no se halló en ninguna otra laguna. Esta
especie puede llegar a formar blooms en
condiciones ambientales adecuadas y es
una especie potencialmente productora de
48
Figura 42. Planctonema lauterbornii.
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
Taray de Quero: señalar la presencia en 2006
de especies como Entomoneis alata, que por
su mayor tamaño aporta más biomasa. Entre
las Diatomeas las especies dominantes fueron Nitzschia palea y Entomoneis alata.
Figura 43. Microcystis aeruginosa.
toxinas (Bort et al., 2005). En resumen, podemos decir que todas las lagunas tienen una
composición del fitoplancton muy similar,
con especies características de ambientes
oligotróficos, excepto Cueva Morenilla y
Coladilla que se encuentran físicamente
separadas del resto y en un estado de mesotrofia.
Tablas de Daimiel (Molemocho): en Marzo
de 2005 las especies dominantes fueron
Merismopedia tenuissima, Nitzschia palea y
Scenedesmus quadricauda, especies todas
ellas propias de ambientes con mesotrofiaeutrofia. En Agosto de 2006, el fitoplancton
fue más diverso. Entre las Clorofíceas dominaron géneros como Scenedesmus, Monoraphidium, Didymogenes y Actinastrum, y entre
las diatomeas Nitzschia, Cyclotella y Chaetoceros muelleri, especie ésta última que se
encuentra en aguas continentales salobres
(Ortega-Mayagoitia y Rojo, 2000).
Laguna Grande de Villafranca: destacó en
Agosto de 2006 la presencia de las cianobacterias coloniales Aphanothece clathrata y
Aphanocapsa incerta y las Clorofíceas (cf.
Tetrachlorella incerta) y Cianobacterias.
Taray de Pedroñeras: en marzo de 2005 y
marzo de 2006 el fitoplancton de esta laguna estuvo compuesto casi exclusivamente
por la Clorofícea Chlorella ellipsoidea, aunque
cabe destacar la elevada presencia de Euglenofíceas, grupo que se asocia generalmente
con aguas ricas en materia orgánica. En
Agosto de 2006 esta especie fue sustituida
por otras dos clorofíceas: Pandorina morum y
Tetraedron triangulare, y además fue abundante la Criptofícea Chroomonas sp.
Lagunas temporales: de las lagunas temporales muestreadas en Marzo de 2005,
Camino Villafranca, Retamar, y Prado se
encontraban en estado de mesotrofia, Manjavacas en eutrofia y Laguna Larga, Lillo, y
Veguilla presentaban condiciones de hipereutrofia. En casi todas las lagunas dominaron
Diatomeas y Clorofíceas, excepto en Veguilla
donde sólo se encontraron Clorofíceas y en
Lillo y la Laguna Larga, donde además aparecen elevadas densidades de cianobacterias.
La mayoría de las especies de Diatomeas
presentes pertenecen a los géneros Navicula
y Nitzschia, siendo éste último el más abundante en número de células. Destaca además en la Laguna Larga la especie Caetoceros
muellerii, indicadora de conductividad elevada. Respecto a las Clorofíceas, encontramos
más diferencias entre las lagunas en cuanto
a la composición específica, aunque en la
mayoría se encontraron especies de Clorofíceas Volvocales, como Chlamydomonas spp.
o Carteria sp. y Prasinofíceas como Tetraselmis sp. Todos estos géneros suelen ser abundantes en ecosistemas eutróficos. En Manjavacas destaca la gran abundancia de
Clorofíceas flageladas de pequeño tamaño
pertenecientes al grupo de las Prasinofíceas.
49
5.1.2. Macrófitos
5.1.2.1. Procedimiento
Al igual que en ríos, el muestreo de macrófitos en humedales consistió en identificar en
campo las especies presentes y determinar
su abundancia. De las especies cuya identificación taxonómica generaba dudas, se
tomaba una muestra para su posterior identificación en el laboratorio. Para la recolección de muestras sumergidas en zonas de
cierta profundidad se utilizaban rastrillos
como en los muestreos en embalses. Los
métodos de conservación de las muestras
son los mismos que para ríos y embalses.
5.1.2.2. Resultados
El análisis de los datos se ha realizado de
forma análoga al de las estaciones en ríos. Se
ha establecido una valoración de la calidad
del agua y del estado de conservación de
cada humedal en función de las especies de
hidrófitos, helófitos, higrófitos y halófitos
hallados. Se han prospectado humedales
pertenecientes a tres subcuencas fluviales:
En la subcuenca del Alto Guadiana se han
prospectado 15 localidades, todas ellas pertenecientes al complejo de Lagunas de Ruidera, en las que se ha observado una gran
diversidad de macrófitos (Figura 44), propios
de aguas de buena o muy buena calidad
(Callitriche sp., Potamogeton spp., Sparganium angustifolium, Ranunculus aquatilis,
Chara spp., Nitella hyalina, Myriophyllum sp.),
aunque acompañados en algunos casos de
filamentosas, indicadoras de una cierta alteración natural o antrópica. Los helófitos son
muy diversos, destacando sin embargo la
presencia frecuente de Cladium mariscus,
cuyas comunidades figuran en el Anexo I de
la Directiva Hábitats. No se han encontrado
taxa en bastantes lagunas y humedales.
50
Figura 44. Macrófitos en la Laguna de Santos Morcillo
(Complejo Lagunas de Ruidera).
En la subcuenca del Gigüela se han prospectado 13 localidades, dando como resultado
un número mucho menor de hidrófitos, propios también de aguas de calidad elevada
(Callitriche sp., Chara spp., Riella helicophylla).
La laguna de Yeguas es rica en halófitos, la
mayoría propios de saladares algo alterados
(Frankenia pulverulenta, Salicornia ramosissima, Salsola soda, Suaeda vera) probablemente por el ganado, aunque otros (Sarcocornia
perennis) son propios de sistemas más estables. La laguna del Hito es de aguas salobres
y rica por ello en Ruppia drepanensis y en
carófitas de los géneros Chara y Tolypella,
todas ellas de elevado interés de conservación. En las zonas menos encharcadas de
este humedal aparecen halófitas pioneras
(Frankenia laevis, Puccinellia fasciculata, Salicornia ramosissima), también de elevado
interés.
Pero la joya de la laguna es Limonium soboliferum una plumbaginácea halófila endémica del Hito, que tiene por ello su única
población mundial en esta localidad. Esta
especie está incluida en el Libro Rojo de la
Flora Vascular Amenazada de España. Completan el cortejo algunos helófitos e higrófitos halófilos (Scirpus maritimus, Schoenus
nigricans) relativamente comunes. No se han
encontrado taxa en gran número de lagunas
y humedales de la cuenca.
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
En la subcuenca del Tirteafuera únicamente se
ha muestreado la Laguna de Caracuel, sin
hidrófitos y con helófitos e higrófitos comunes en sus márgenes (Phragmites australis,
ciperáceas).
5.1.3. Microinvertebrados bentónicos
5.1.3.1. Procedimiento
El muestreo de microinvertebrados bentónicos se realizó efectuando transectos con
redes de mano de 100 μm de abertura de
poro. La metodología varió en función de la
comunidad de microinvertebrados muestreada: zooplancton si estaba asociada al
plancton o microbentos se se encontraba en
el bentos.
En las lagunas semipermanentes o temporales las comunidades que se encontraron fueron propias de ambientes bentónicos. El
muestreo se realizó a lo largo de la superficie
de la laguna efectuando pasadas entre la
vegetación (hidrófilos y helófitos) y resuspendiendo el sedimento. A la red de 100 μm
se acopló una de mayor tamaño de diámetro de poro (250 μm) con la finalidad de evitar la colmatación de la muestra con restos
vegetales.
Sin embargo, en las lagunas permanentes, al
encontrarse las dos comunidades anteriormente descritas se realizaron dos submuestreos. La muestra bentónica se realizó con el
mismo procedimiento aplicado en las lagunas semipermanentes y temporales, mientras que la planctónica se efectuó mediante
pescas horizontales desde la embarcación
con red cónica de 30 cm de diámetro y 100
μm de abertura de poro. Las muestras se
depositaron en envases apropiados, debidamente etiquetadas y fueron fijadas con formaldehído al 4%.
El análisis en el laboratorio se realizó con un
estereomicroscopio de 40 aumentos e ilumi-
nación hiposcópica y con un microscopio
con capacidad entre 40 y 1000 aumentos. La
muestra se agitó dentro del vial, se vertió un
volumen conocido en una placa de Petri
analizando posteriormente el contenido
mediante el estereomicroscopio. Se realizaron transectos hasta que se consiguió elaborar un inventario completo y la obtención de
estimas semicuantitativas. Muchas de las
especies requieren disección y observación
microscópica de caracteres taxonómicos,
utilizando técnicas muy especializadas, lo
que obliga a que las determinaciones sean
realizadas por un experto.
5.1.3.2. Resultados
Aunque en ocasiones aparecen mezclados
en las muestras, el conocimiento de la autoecología de las diferentes especies y tipos
biológicos permite diferenciar la fauna que
pertenece al plancton (zooplancton) y la que
pertenece al bentos (microbentos). Esta
fauna está formada básicamente por crustáceos entomostráceos (branquiópodos, copépodos y ostrácodos) y por rotíferos.
El zooplancton y microbentos de los lagos, a
diferencia de lo que ocurre con los embalses,
son, en la mayor parte de los casos, autóctonos y adaptados a las condiciones ecológicas de los diferentes tipos de masas de agua.
En particular, el microbentos es notablemente fiel a los ambientes, de ahí su gran valor
como indicador ecológico.
Comunidad de lagos permanentes cársticos (Lagunas de Ruidera): la comunidad
encontrada indica que las lagunas de Ruidera se mantienen en buen estado y conservan
las características definidas para el tipo de
masa de agua.
Zooplancton: las especies características
durante todo el año son Daphnia longispina,
Ceriodaphnia pulchella, Bosmina longirostris,
Tropocyclops prasinus, Keratella sp. pl., y
51
Asplanchna priodonta. Se trata de especies
indicadoras de aguas permanentes, limpias
(oligotróficas o mesotróficas y con pocos
sólidos inorgánicos en suspensión) y poco o
medianamente mineralizadas para los crustáceos, según los rangos establecidos por
Alonso (1998). En verano aparece Diaphanosoma brachyurum (Figura 45), que es termófila y, por lo tanto, indicadora estival.
Quero, Taray de Las Pedroñeras, Grande de
Villafranca y Tablas de Daimiel) son someros
y poco aptos para el desarrollo de esta
comunidad. Las especies más representativas son Daphnia magna y Megacyclops viridis, propias de aguas con mineralización
algo elevada. Si la mineralización aumenta,
Arctodiaptomus salinus sustituye a M. viridis.
Microbentos: esta comunidad se encuentra
también poco desarrollada debido a la falta
de vegetación y a la alteración hidrológica y
trófica de la mayor parte de los ambientes
estudiados. En aguas de mayor mineralización aparece Alona salina como elemento
característico. El resto de especies son de
carácter banal y, por lo tanto, de escaso
valor indicador.
Figura 45. Diaphanosoma brachyurum.
Microbentos: es muy diverso gracias a la permanencia de las aguas, su buena calidad y la
presencia de vegetación acuática. La fauna
de branquiópodos cuenta con una quincena
de especies; las más características serían
Sida crystallina, Pleuroxus truncatus, Alona
costata, Acroperus neglectus y Monospilus dispar. Dentro de los copépodos, los más característicos son Macrocyclops albidus y Eucyclops macruroides. Los rotíferos encontrados
son eurioicos y poco característicos.
Comunidad de aguas afectadas de grandes variaciones hidrológicas y de calidad
de las aguas aunque no estrictamente
temporales.
Zooplancton: el zooplancton encontrado es
escaso debido a que estos lagos (Taray de
52
Lagos temporales: en estos lagos toda la
comunidad se considera bentónica, ya que
aunque existen especies que en otros lagos
pueden comportarse como planctónicas,
en los lagos temporales éstas se encuentran muy ligadas al sustrato. En aguas poco
o medianamente mineralizadas y de turbidez debida a sólidos inorgánicos en suspensión, representadas únicamente por la
laguna de Caracuel, que se encontró casi
seca durante el muestreo, las pocas especies características que pudieron identificarse fueron Pleuroxus letourneuxi y Metacyclops minutus. Ambas son indicadoras de
aguas temporales y turbias en ambientes
esteparios. En aguas muy mineralizadas
pero no saladas, tal es el caso de la laguna
del Retamar y La Veguilla, las especies
características son Daphnia magna y Arctodiaptomus wierzjeskii. En aguas saladas
como Manjavacas, Prado, Larga de Villacañas y Camino de Villafranca la especie más
característica es Arctodiaptomus salinus, que
puede venir acompañada por Moina salina,
Daphnia mediterranea, Heterocypris barbara
y Brachionus plicatilis. En aguas hipersalinas,
como es el caso de Lillo, sólo vive el ciliado
Fabrea salina.
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
5.1.4. Macroinvertebrados bentónicos
5.1.4.1. Procedimiento
En los humedales se ha analizado el zoobentos litoral que, a diferencia de los embalses,
presenta la máxima riqueza taxonómica
como resultado de una mayor diversificación
del hábitat; influyen en esto las diferentes
granulometrías del sustrato (piedras, gravas,
arenas, limos), diferentes profundidades, los
recubrimientos de vegetación sumergida y
emergida, etc.
El muestreo se realizó con el objetivo de
establecer un estudio cualitativo – semicuantitativo de las comunidades que pueblan el litoral de dichas masas de agua.
Mediante un salabre de 500 mm de luz de
malla se realizaron las batidas por todos los
microhábitats previamente identificados. El
número de batidas se realizó en función de
la diversidad de taxones; cuando en sucesivas batidas no se obtuvo ningún taxón
nuevo se detuvo el muestreo. Las muestras
recolectadas se introdujeron en un recipiente debidamente etiquetado y fueron fijadas
con formaldehído al 4 - 10%.
El análisis de las muestras de macroinvertebrados se realizó mediante una lupa binocular. Si las muestras presentaban mucha
cantidad de materia orgánica, se limpió debidamente intentando al máximo no fraccionar los individuos, evitando así dificultades en
su posterior identificación. Para el nivel de
estudio requerido se han identificado Crustáceos, adultos de Coleópteros y Hemípteros a
nivel de género y larvas de insectos al máximo nivel taxonómico posible. Se contabilizaron todos los individuos presentes en la
muestra obteniéndose abundancias expresadas como individuos/muestra.
5.1.4.2. Resultados
La composición del zoobentos correspondiente a los macroinvertebrados suele estar
dominada por diferentes grupos de insectos,
especialmente odonatos, efemerópteros,
hemípteros, coleópteros, tricópteros y dípteros. También son comunes los crustáceos
(ostrácodos y malacostráceos), oligoquetos,
nemátodos y nemertinos (Prostoma sp.), ácaros y moluscos (gasterópodos y bivalvos).
La composición de las comunidades de
macroinvertebrados, así como el número de
familias presentes, varía significativamente
en función de las características del humedal, estableciéndose dos tipologías principales:
Lagunas permanentes: las masas de agua
incluidas en esta tipología se caracterizan
por no presentar períodos de sequía, encontramos 13 humedales pertenecientes a esta
tipología, todos ellos situados en el complejo de las lagunas de Ruidera. La disponibilidad continua de agua permite el desarrollo a
aquellos taxones cuyo ciclo vital es superior
a un año. Especies de moluscos, efemerópteros, odonatos y tricópteros conforman
comunidades con más riqueza taxonómica
que aquellas que podamos encontrar en las
lagunas semipermanentes o temporales. A
destacar en este grupo de lagunas la mayor
diversificación de los grupos de invertebrados bentónicos, especialmente odonatos y
dípteros quironómidos representados por
géneros de tanipodinos (5 géneros), ortocladinos (9 géneros) y quironominos (16 géneros).
Lagunas semipermanentes y temporales: en los humedales temporales suelen
dominar grupos de ciclos de vida cortos o
elevada movilidad como dípteros quironómidos y otras familias, coleópteros (9 taxones) y heterópteros de adultos alados (3
taxones). Es más difícil que se encuentren
moluscos, odonatos, efemerópteros y tricópteros, cuyas especies tienen periodos de vida
largos, algunas de más de 1 año.
53
5.1.5. Peces
intermedias entre Barbus comizo y Barbus
guiraonis; posiblemente se trata de un híbrido entre estas dos especies (Doadrio, com.
pers.).
5.1.5.1. Procedimiento
Se ha utilizado el mismo procedimiento de
muestreo e identificación utilizado en los
embalses y descrito anteriormente.
5.1.5.2. Resultados
En los cinco humedales muestreados se
identificaron 10 especies en total, seis de
ellas nativas (60%) y cuatro introducidas
(40%). Además, se capturó un individuo del
género Barbus que presentó características
La contribución media de especies exóticas
por laguna superó el 75%, poniendo de
manifiesto el grado de invasión de estos
cuerpos de agua por parte de las especies
alóctonas. Respecto al número de especies
por familia destacó claramente la de los
ciprínidos (un total de seis especies). El resto
de familias (Cobitidae, Blenniidae, Poeciliidae
y Centrarchidae) contó con un solo representante específico (Tabla 26).
Tabla 26. Listado de especies capturadas en los cinco humedales estudiados de la cuenca del río Guadiana.
Nativas
ORDEN
Cyprinidae
Cypriniformes
Perciformes
Exóticas
FAMILIA
ESPECIE
NOMBRE COMÚN
Barbus comizo
Barbo comizo
Barbus guiraonis
Barbo mediterráneo
Barbus microcephalus
Barbo cabecicorto
Barbus sp*
Squalius alburnoides
Calandino
Cobitidae
Cobitis paludica
Colmilleja
Blenniidae
Salaria fluviatilis
Blenio de río
Cyprinus carpio
Carpa
Cypriniformes
Cyprinidae
Rutilus rutilus
Rutilo
Cyprinodontiformes
Poeciliidae
Gambusia holbrooki
Gambusia
Perciformes
Centrarchidae
Lepomis gibbosus
Pez sol
* Corresponde a un individuo con características intermedias entre B. comizo y B. guiraonis.
La evaluación del estado ecológico de los
humedales se llevó a cabo aplicando el índice de conservación propuesto para los
embalses. Todas las lagunas prospectadas
obtuvieron un valor negativo del índice,
poniendo de manifiesto el mal estado ecológico de estas masas de agua. Según el índice
aplicado, la laguna Grande de Villafranca es
la que se encuentra en peor estado de con-
54
servación, debido principalmente a la elevada abundancia de pez sol (la más alta de
todos los humedales muestreados). Las lagunas de San Pedro y Colgada mostraron el
valor más alto del índice (Figura 46). En la
laguna Concejo, aunque se capturaron cuatro especies nativas, se alcanzó un valor relativo intermedio debido a la baja abundancia
de las mismas.
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
Figura 46. Valores del índice de conservación empleado para evaluar el estado ecológico de los humedales muestreados.
5.2. ELEMENTOS HIDROMORFOLÓGICOS
do en las diferentes campañas realizadas, se
muestra gráficamente en la Figura 47.
5.2.1. Procedimiento
El índice ECELS (Agència Catalana de l’Aigua,
2004) valora las condiciones en las que se
encuentra el ecosistema del humedal en su
conjunto, más allá de lo que es estrictamente
la calidad del agua. Está estructurado en 5
bloques y cada uno de ellos analiza un aspecto independiente del estado de conservación
del humedal: Morfología, construcciones,
infraestructuras y usos humanos, aspecto del
agua, vegetación de helófitos o salicornial y
vegetación sumergida y flotante.
El valor del índice se obtiene a través de la
suma de la puntuación de cada bloque, y
oscila entre 0 y 100. El estado de conservación se relaciona con el valor final del índice
según muestra la Tabla 27.
Los resultados muestran que entre los
humedales con agua, en los que se ha evaluado el índice ECELS, solamente un 26%
están en buen estado de conservación,
mientras que el 52% presentan un estado de
conservación moderado.
Tabla 27. Valoración del estado de conservación a partir de la puntuación del índice ECELS.
VALOR
ECELS
ESTADO
CONSERVACIÓN
90-100
Muy bueno
70-89
Bueno
50-69
Moderado
30-49
Deficiente
0-29
Malo
5.2.2. Resultados
5.3. ELEMENTOS FÍSICO-QUÍMICOS
El índice ECELS se ha determinado para
todos los humedales visitados. El estado de
conservación de los humedales, valorado a
partir del promedio del índice ECELS obteni-
5.3.1. Procedimiento
Durante los trabajos de campo en humedales se midieron in situ la conductividad, el pH,
55
Figura 47. Estado de conservación de los humedales de la red de control biológico en los humedales del ámbito
de la Confederación Hidrográfica del Guadiana a partir del índice ECELS.
la concentración de oxígeno disuelto, la
temperatura del agua y la turbidez. En los
humedales con una profundidad superior a
2 m (Lagunas de Ruidera) se realizó un perfil
vertical con una sonda multiparamétrica
TURO para la determinación de todos estos
parámetros. La turbidez del agua, en estos
casos, se midió con la sonda multiparamétrica (valores en NTU) y con el Disco de Secchi.
Las muestras de agua recogidas en cada
humedal se llevaron al laboratorio para su
análisis. Se han determinado concentraciones de nutrientes y de los iones responsables
de la mineralización del agua. Se tomaron en
todos los casos muestras de superfície en
botes de 1 litro, fijadas en campo con cloroformo. Los procedimientos y métodos analíticos utilizados en el laboratorio se presentan
en la Tabla 23.
56
5.3.2. Resultados
En las lagunas de Ruidera los perfiles realizados en octubre de 2005 y marzo de 2006
muestran la columna de agua mezclada.
Los parámetros en estos muestreos son
muy constantes a lo largo del perfil vertical,
como cabe esperar en condiciones de mezcla. En agosto de 2006 muchas de las lagunas se mantienen mezcladas, pero en las
más profundas aparece una termoclina más
o menos marcada. En las lagunas de Ruidera las concentraciones de amonio medidas
son bajas. Los nitratos están siempre por
debajo de los 50 mg/l, con un valor promedio para todas las lagunas y todas las campañas de 29,4 mg/l. Los nitritos presentan
valores muy elevados, con máximos de 0,28
mg/l en la Laguna Concejo en octubre de
2005. En cuanto al fósforo, las concentracio-
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
nes están por debajo de los límites de
detección en todas las lagunas en agosto
de 2006 y en la mayoría de ellas en marzo
de 2006.
Las concentraciones de oxígeno medidas en
superficie están en todos los humedales próximas a los niveles de saturación. En cuanto
a la transparencia del agua, los resultados
son variables. En Manjavacas y en el Taray de
Pedroñeras la profundidad de visión del
Disco de Secchi no alcanzó los 20 cm, mientras que en el extremo opuesto, la laguna
Grande de Villafranca y las Tablas de Daimiel
presentan profundidades de visión del Disco
de Secchi superiores a 100 cm.
5.4. VALORACIÓN DE LA CALIDAD
ECOLÓGICA
5.4.1. Procedimiento
Para valorar la calidad ecológica de los
humedales de la CHG se ha aplicado la
metodología utilizada por la Agencia Catalana del Agua, que a consistido en el cálculo
de dos índices: el índice ECELS, ya explicado
anteriormente y el índice QUAELS.
5.4.2. Resultados
El índice QAELS (Agència Catalana de l’Aigua,
2004) es un indicador de la calidad del agua
de los humedales basado en la sensibilidad a
la contaminación de los microcrustáceos
que en ella habitan y a la diversidad existente de insectos y crustáceos. Este índice, cuyo
diseño inicial fue concebido para su aplicación en humedales someros de Cataluña, se
fundamenta en la abundancia relativa de
ciertos taxones de microcrustáceos con elevado valor como indicadores de calidad. Las
abundancias relativas de cada uno de los
taxones se multiplican por un coeficiente
tanto más alto cuanto mayor es la relación
entre la presencia de ese taxón y los parámetros de buena calidad del agua. Para poder
aplicar el QAELS a los humedales de la cuen-
ca del Guadiana ha sido pues necesaria una
adaptación del índice, consistente en una
revisión tanto de los taxones con valor indicador como de los coeficientes de ponderación que había que utilizar. Al igual que en la
versión original del índice, en su adaptación
para el Guadiana se han diferenciado los
humedales en tres grupos, con unos taxones
indicadores y unos coeficientes de ponderación propios para cada uno de los grupos.
Los grupos utilizados en este trabajo son:
Lagunas de Ruidera, humedales permanentes o semipermanentes fuera del complejo
de Ruidera (Taray de Quero, Taray de las
Pedroñeras, Grande de Villafranca y Tablas de
Daimiel) y humedales temporales.
Para establecer la relación entre el valor del
QAELS y la calidad del agua de un humedal
se han utilizado los mismos rangos propuestos por los autores del índice (Tabla 28):
Tabla 28. Valoración del estado de conservación a partir de la puntuación del índice ECELS.
VALOR
ECELS
QAELS ≥ 8
CALIDAD
AGUA
Muy buena
6 ≤ QAELS < 8
Buena
4 ≤ QAELS < 6
Moderada
2 ≤ QAELS < 4
Deficiente
QAELS < 2
Mala
La calidad del agua de los humedales, valorada a partir del promedio del índice QAELS
obtenido en las diferentes campañas realizadas, se muestra gráficamente en la Figura 48.
La falta de agua ha hecho imposible la valoración del QAELS en casi el 40% de los
humedales. En los que sí se ha podido valorar, se observa que la calidad del agua es en
general buena o muy buena. Solamente tres
humedales obtienen un nivel de calidad inferior al bueno según el índice. Dos de ellos, la
Laguna del Taray en Las Pedroñeras y la Laguna de Longar, presentaban niveles de eutrofia muy elevados en marzo de 2005. En el
Taray, además, los niveles de amonio eran
57
Figura 48. Calidad del agua en los humedales de la red de control biológico valorada a partir del índice QAELS.
también muy elevados. En ambas lagunas
los valores de QAELS lo acusan notablemente. En el caso de la Laguna de Caracuel, con
una mala calidad del agua según el valor de
QAELS, se encontró una comunidad de
microcrustáceos muy empobrecida, posiblemente debido al momento en que se realizó
el muestreo, poco antes de que se secara
completamente.
Cabe destacar que los propios autores del
índice QAELS sostienen que sería aconsejable realizar nuevos trabajos que permitan
ajustar el índice y en especial revisar los límites que separan las categorías de calidad
(Sala, com. pers.). Su impresión es que esta
revisión les llevará a exigir una puntuación
más elevada de QAELS para alcanzar la categoría de máxima calidad. Teniendo en cuenta esta apreciación, es muy probable que las
clases de calidad que se asignan a los humedales en este trabajo sean demasiado optimistas.
58
Es un objetivo de este trabajo el poder establecer una valoración inicial del estado ecológico de los humedales de la red de control
biológico de la cuenca del Guadiana. A la
espera de que el avance de los trabajos de
implantación de la DMA permita contar con
metodologías consolidadas de determinación del estado ecológico en masas de agua
de estas características, se ha optado por utilizar las ya existentes utilizadas en otras demarcaciones hidrográficas. Dado que se cuenta
con los resultados de los índices QAELS y
ECELS, se ha optado por utilizar los protocolos
redactados y aprobados por la Agència Catalana de l’Aigua (Agència Catalana de l’Aigua,
2006) para la evaluación del estado ecológico
de los humedales, que se basan en la combinación de estos dos índices.
En un primer momento estaba previsto utilizar también un índice basado en las poblaciones de peces para afinar los resultados
obtenidos con el QAELS y el ECELS, pero la
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
fase preliminar en que se encuentra el desarrollo del índice de peces hace recomendable dejar para más adelante su aplicación.
De esta forma, el estado ecológico de los
humedales se determina a partir de la
clase de calidad del agua y de su estado de
conservación, valorados mediante los índi-
ces QAELS y ECELS, según muestra la Tabla
29.
Al aplicar esta matriz de combinación a los
resultados de QAELS y ECELS de cada humedal, se obtiene la valoración del estado ecológico de los humedales, que se presentan
en la Tabla 30 y en la Figura 49.
Tabla 29. Matriz de valoración del estado ecológico en humedales a partir de los índices ECELS y QAELS.
Categoría del ECELS
Categoría
del QAELS
I
II
I
II
III
IV
V
MUY BUENO
BUENO
BUENO
MODERADO
DEFICIENTE
BUENO
BUENO
MODERADO
MODERADO
DEFICIENTE
III
BUENO
MODERADO
MODERADO
DEFICIENTE
MALO
IV
V
MODERADO
MODERADO
DEFICIENTE
DEFICIENTE
MALO
DEFICIENTE
DEFICIENTE
MALO
MALO
MALO
Tabla 30. Estado ecológico de los humedades de la red de control biológico valorada a partir de los índices QAELS
y ECELS.
HUMEDAL
Laguna de Manjavacas
Laguna Taray (Pedroñeras)
Laguna del Longar (Lillo)
Laguna del Prado (Villacañas)
Laguna Larga
Laguna del Taray (Quero)
Laguna Grande Villafranca
Laguna Camino Villafranca
La Veguilla
Laguna de Retamar
Laguna Concejo
Laguna Tomilla
Laguna Tinaja
Laguna San Pedro
Laguna Redondilla
Laguna Lengua
Laguna Salvadora
Laguna de Santos Morcillo
Laguna Batana
Laguna de la Colgada
Laguna del Rey
Laguna de Cueva Morenilla
Laguna de la Coladilla
Tablas de Daimiel
Laguna de Caracuel
CALIDAD DEL
AGUA
(QAELS)
MUY BUENA
DEFICIENTE
MALA
BUENA
MUY BUENA
BUENA
MUY BUENA
MUY BUENA
MUY BUENA
BUENA
MUY BUENA
MUY BUENA
BUENA
MUY BUENA
BUENA
MUY BUENA
MUY BUENA
MUY BUENA
BUENA
MUY BUENA
MUY BUENA
MUY BUENA
BUENA
BUENA
MALA
ESTADO DE
CONSERVACIÓN
(ECELS)
ESTADO
ECOLÓGICO
MODERADO
MODERADO
MODERADO
MODERADO
BUENO
MODERADO
MODERADO
BUENO
MODERADO
BUENO
BUENO
BUENO
BUENO
MODERADO
DEFICIENTE
MODERADO
MODERADO
MODERADO
MODERADO
MODERADO
MODERADO
MODERADO
MODERADO
BUENO
BUENO
BUENO
DEFICIENTE
MALO
MODERADO
BUENO
MODERADO
BUENO
BUENO
BUENO
BUENO
BUENO
BUENO
BUENO
BUENO
MODERADO
BUENO
BUENO
BUENO
MODERADO
BUENO
BUENO
BUENO
MODERADO
BUENO
DEFICIENTE
59
Figura 49. Estado ecológico de los humedales de la red de control biológico del ámbito de la
Confederación Hidrográfica del Guadiana.
60
El estado ecológico se ha valorado solamente en los 25 humedales en los que se ha podido realizar al menos un muestreo con agua, y
en consecuencia se dispone de resultados
tanto de QAELS como de ECELS. De entre
esos 25 humedales, casi el 70% presentan un
estado ecológico bueno según la metodología utilizada (Figura 50 a Figura 52). Estos
resultados deben sin embargo tomarse con
cierta prudencia, puesto que son producto
de una serie muy corta de datos, y en un
periodo marcado por unas condiciones climatológicas e hidrológicas muy secas.
Figura 51. Laguna Grande de Villafranca.
Figura 50. Laguna Cueva Morenilla.
Figura 52. Tablas de Daimiel.
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
6. CONCLUSIONES
ciones de sus afluentes, lo que hace que
mejore la calidad. Además refleja el deterioro
de la Red Hidrográfica de la Cuenca Alta.
6.1. RÍOS
La red de control biológico en ríos ha quedado constituida por 264 estaciones. El diseño
de la red se ha ido adaptando a los cambios
de gestión administrativa de las cuencas de
los ríos Tinto, Odiel y Piedras estudiadas y
especialmente a las duras condiciones hidrológicas que se dieron durante los dos años
de realización de los trabajos. Por ello las
estaciones muestreadas no han sido siempre
las mismas, el número de muestreos no ha
sido homogéneo, y los parámetros analizados han variado de una campaña a otra.
6.1.1. Indicadores biológicos
Los resultados obtenidos a nivel del grupo
de macroinvertebrados indican que los taxones más frecuentes y abundantes a lo largo
del periodo de estudio han sido: Clase Oligochaeta, familia Chironomidae, familia Simulidae, familia Baetidae y la especie Physella
acuta. Destaca la presencia del cangrejo rojo
americano (Procambarus clarkii) en más de
un 49% de estaciones y la de la almeja asiática Corbicula fluminea en tres puntos: dos del
ámbito de la CHG y uno en la cuenca del Piedras. Cómo taxones más interesantes señalamos la presencia de la familia Goeridae. La
calidad del agua se ha evaluado con el índice IBMWP y se ha observado que en las 169
estaciones en las que se realizó más de un
muestreo, el 38,5% han mantenido la clase
de calidad, frente al 14,8% que han mejorado
y el 47,4% que han empeorado. Un análisis
de los resultados obtenidos en el río Guadiana indica que el tramo alto del río presenta
clases de calidad más bajas que el tramo
medio y medio-bajo de dicho río. Esto
puede explicarlo el hecho de que el río Guadiana tiene pocas aportaciones de afluentes
en su nacimiento y conforme avanza el perfil aumenta el caudal a partir de las aporta-
El análisis de los resultados del índice IPS en
las diferentes campañas muestra gran estabilidad en el porcentaje de estaciones pertenecientes a cada clase de calidad, no se
observan diferencias significativas ni estacionales ni interanuales. No obstante, la evolución del índice viene marcada por las condiciones hidrológicas. En las 172 estaciones
donde se ha realizado más de un muestreo,
el 34,9% han mantenido la clase de calidad,
frente al 30,3% que han mejorado y el 34,9%
que han empeorado.
Los resultados obtenidos con el grupo de
macrófitos deben de considerarse como una
primera aproximación. Ello se ha debido a
que la mayoría de muestras han sido determinadas a nivel de género o en el caso de las
algas, de familia o de clase. Debido a ello la
valoración de los diferentes taxones como
indicadores de calidad no se ha podido realizar de una manera concreta. No obstante
los resultados de las 199 estaciones muestreadas indican que el estado de conservación
de la masa de agua es mejor que el de la
ribera.
A lo largo del estudio se han identificado un
total de 26 especies de peces, de las cuales
15 fueron nativas y 11 exóticas. Dentro de las
especies nativas destaca la familia Cyprinidae con 11 especies. Señalar dos especies
muy amenazadas: Anaecypris hispanica (5
estaciones) y Salaria fluviatilis (12 estaciones)
y la escasa presencia de Anguilla anguilla (2
estaciones) y Alosa alosa (1 estación). De las
especies exóticas destaca la presencia por
primera vez en la zona de estudio de Rutilus
rutilus. Dentro de la cuenca las especies más
ampliamente distribuídas han sido Cobitis
paludica y Squalius alburnoides, entre las nativas y Gambusia holbrookii y Lepomis gibbosus
entre las exóticas. Se ha observado la cre-
61
ciente importancia de las especies exóticas
en la biodiversidad global de la cuenca del
Guadiana. El desarrollo de un índice de calidad basado en las comunidades de peces ha
permitido clasificar a las subcuencas de los
ríos Chanzas, Ardila, Gévora, Matachel, Ruecas y cabecera de Gigüela en un estado
Bueno o Muy Bueno frente al río Zujar, río
Záncara o el eje principal de Guadiana que
presentaron un estado Pobre o Muy Pobre.
6.1.2. Indicadores hidromorfológicos y
físico-químicos
Los resultados del índice IHF reflejan que el
79,8% de las estaciones obtuvieron valores
medios superiores a 50, sin embargo sólo 18
estaciones superaron el valor de 75. Por otro
lado, el 22% de las estaciones presentan un
valor medio inferior o igual a 50, lo cual
supone una baja diversidad de hábitats. Los
resultados del índice QBR señalan que el
35% de las estaciones presentaron valores
correspondientes a riberas sin alteraciones o
ligeramente perturbadas. El 23,6% presentaron valores intermedios, con riberas con inicio de alteraciones importantes. Finalmente
el 42% de las estaciones presentaron valores
de calidad mala y pésima.
En general se puede decir que, debido a la
gran variación de las condiciones hidrológicas a lo largo de los dos años y a la geología
de la cuenca, los resultados muestran una
gran variabilidad, especialmente en los parámetros conductividad y oxígeno disuelto. En
cuanto a los parámetros más relacionados
con los nutrientes, como son el amonio,
nitratos y fosfatos los resultados obtenidos
reflejan una buena calidad en general: 78%
de las estaciones con valores de amonio
inferiores a 0,5 mg/l, 71% de las estaciones
con concentraciones de fosfatos aceptables
(<0,5 mg/l) y un 79% de las estaciones con
concentración de nitratos inferior a 5 mg/l.
62
6.1.3. Estado ecológico de los ríos
El primer paso ha sido el de intentar establecer los tramos potenciales de referencia utilizando la información disponible del CEDEX y
del análisis IMPRESS realizado en la cuenca
del Guadiana. Los resultados obtenidos indican la dificultad de encontrar tramos de referencia en la cuenca que se hallen libres de
presiones e impactos. Del total de estaciones
estudiadas tan sólo 15 se encuentran en
masas libres de presiones e impactos y de
estas únicamente 6 en tramos considerados
prístinos o en muy buen estado. La determinación del estado ecológico se ha realizado
utilizando los resultados de los siguientes
elementos de calidad: macroinvertebrados,
diatomeas, peces, % de oxígeno disuelto,
amonio, nitratos, fosfatos y QBR. El estado
ecológico final se ha obtenido al combinar
dichos elementos, quedando condicionado
el estado ecológico por el elemento con
peor calidad. Los porcentajes totales del
estado ecológico para los ríos estudiados
han sido: 1% Muy Bueno, 14% Bueno, 22%
Moderado, 21% Deficiente y 42% Malo. Estos
resultados reflejan las condiciones de sequía
que padeció la cuenca del Guadiana durante los años 2005-2006. Hay que tener en
cuenta que los resultados del índice de
Peces han penalizado fuertemente la valoración del estado ecológico. Por tanto el establecimiento de condiciones de referencia
debe de realizarse contrastando estos resultados con estudios posteriores en la cuenca
de años hidrológicos menos extremos que
confirmen y mejoren los datos obtenidos.
6.2. EMBALSES
En este trabajo se ha realizado un esfuerzo
significativo en el diseño y la explotación de
la red de estaciones en embalses, con el
doble objetivo de garantizar un seguimiento
adecuado de estas masas de agua y disponer de la información necesaria para diag-
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
nosticar con fiabilidad el grado de calidad
ecológica en que se encuentran. Aún así, la
gran cantidad de embalses existentes ha
impedido contar con estaciones de control
en todos ellos. Se ha limitado pues el ámbito
del trabajo a los embalses de mayores
dimensiones y a los de titularidad pública, en
especial aquellos cuya gestión depende
directamente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana. Esto no significa, sin
embargo, que no se considere muy recomendable en el futuro extender la actual red
de estaciones para cubrir el máximo número
posible de embalses de la cuenca, aunque es
evidente que los recursos para llevar a cabo
la explotación de la red son limitados, y
habrá que valorar la prioridad de extender el
seguimiento a más embalses frente a otras
estrategias que permitan una mejora del
seguimiento en ésta o en otras categorías de
masas de agua. Los cambios administrativos
en las competencias de gestión del agua y
del dominio público hidráulico en las cuencas de los ríos Tinto, Odiel y Piedras, que
tuvieron lugar durante el periodo de ejecución de este trabajo, han obligado a modificar el diseño de la red de estaciones cuando
se habían realizado ya la mitad de los muestreos programados, con lo que en algunos
embalses no se ha conseguido alcanzar los
objetivos de seguimiento y disponibilidad
de información anteriormente apuntados.
6.2.1. Potencial ecológico de los embalses
De toda la batería de parámetros biológicos,
fisicoquímicos e hidromorfológicos que se
han determinado y analizado en las estaciones de seguimiento, algunos tienen un
mayor potencial indicador de la calidad del
sistema que otros, debido al rango de presiones y fuentes de perturbación al que son
sensibles. En el presente trabajo se presentan los resultados de todos estos parámetros
y se ofrecen distintas valoraciones de la calidad de los embalses en función de los diversos indicadores. A partir de las densidades
celulares del fitoplancton se determina por
ejemplo que en verano de 2006 el 62% de
las estaciones muestreadas presentaban
condiciones eutróficas, mientras que en
invierno de 2005 los rangos hallados correspondían a aguas oligotróficas en el 83% de
las estaciones. El estudio de peces, por su
parte, presenta un índice de valoración del
estado de conservación de los embalses
cuyos resultados finales determinan que en
el 80% de ellos el estado de conservación es
bajo.
Con la intención de integrar la información
de los diferentes parámetros analizados y llevar a cabo una valoración más general y
representativa del estado en el que se
encuentra cada embalse, se ha establecido
una metodología para la determinación del
potencial ecológico. Los resultados obtenidos determinan que solamente un 24% de
los embalses alcanzan el buen potencial
ecológico, un 42% se encuentra en un nivel
moderado y el 34% restante no supera el
potencial deficiente o malo. Estos resultados
se presentan como un ejercicio preliminar
de valoración del potencial ecológico en
embalses, a la espera de contar con series de
datos más extensas y sobre todo con una
batería de indicadores biológicos y físicoquímicos contrastados que permitan una
valoración final más exacta. En este sentido
falta avanzar en la caracterización de estas
masas de agua (se está trabajando actualmente en la clasificación definitiva de las
tipologías de embalses) y en la definición de
una metodología de valoración común para
todas la cuencas, basada en los resultados de
los trabajos de intercalibración a nivel europeo, que establezca los parámetros e indicadores que deben utilizarse y permita comparar resultados entre embalses valorados en
horizontes espaciales y temporales diferentes.
Puesto que los resultados de la valoración
del potencial ecológico estan influidos por
63
las condiciones hidrológicas del embalse,
determinadas por el régimen de precipitaciones anual y por los usos, resulta evidente
que la excepcionalidad del año hidrológico
2005-2006, con unas precipitaciones muy
por debajo de la media anual en toda la
cuenca, puede condicionar esos resultados
significativamente. Así pues, las valoraciones
de potencial ecológico que se presentan en
este trabajo son válidas para un momento
temporal concreto. Será necesario evaluar el
potencial ecológico de estos mismos embalses en años sucesivos para poder valorar el
alcance de la incidencia de las condiciones
hidrológicas del periodo 2005-2006 sobre
los resultados obtenidos en este trabajo.
6.3. HUMEDALES
Los años 2005 y 2006 pasan por ser de los
más secos de las últimas décadas según los
registros de precipitación. Las condiciones
hidrológicas derivadas de esta escasez de
lluvia no han permitido llevar a cabo todos
los muestreos planificados en los humedales
de la red de control biológico y con ello realizar el seguimiento previsto de las masas de
agua de esta categoría.
Las lagunas temporales, que son las que disponen de menos datos históricos y en consecuencia las que requieren de un mayor
esfuerzo de seguimiento y control para la
obtención de datos que permitan valorar
adecuadamente su estado ecológico (como
prevé la Directiva), son justamente las más
sensibles a las condiciones de sequía y por
consiguiente las más afectadas y donde
menos información se ha podido recabar. Por
lo tanto, la valoración del estado ecológico de
las lagunas temporales que se presenta en
este trabajo está fuertemente condicionada
por la falta de información en condiciones
hidrológicas favorables que permita contrastar el estado de las lagunas en diferentes estadios de sus ciclos de inundación y sequía.
64
6.3.1. Indicadores biológicos y físicoquímicos
Las escasas precipitaciones recogidas durante el periodo de estudio han afectado de
diferente manera los resultados obtenidos
en función del tipo de humedal. En las lagunas temporales y semipermanentes la falta
de agua ha impedido encontrar hidrófitos,
con lo que la valoración del nivel de calidad
del humedal a partir de los macrófitos se ha
tenido que basar en las comunidades menos
ligadas al agua, fundamentalmente higrófitos y halófitos. En estos mismos humedales
los resultados del fitoplancton y los pigmentos fotosintéticos, y también los de zoobentos, reflejan el estado de la sucesión ecológica
en el momento en que fueron muestreados,
en condiciones de eminente desaparición de
la lámina de agua. Las características físicoquímicas del agua también vienen determinadas por las condiciones hidrológicas en el
momento del muestreo, aunque en algunos
humedales están todavía más condicionadas por los vertidos de aguas residuales que
reciben. En los humedales permanentes,
pese a la evidente influencia de la situación
general marcada por la escasez de lluvias, las
condiciones ecológicas son más estables y
en consecuencia los resultados son más
representativos. En estos humedales se han
podido realizar todas las baterías de muestreos previstas, tanto para los indicadores biológicos como para los físico-químicos, con lo
que ha sido posible integrar la variabilidad
temporal en el análisis de los resultados.
La calidad general del agua según los resultados del índice QAELS es buena o muy
buena en casi el 90% de los humedales analizados, aunque en algunos de ellos los análisis físico-químicos muestran niveles muy
elevados de nutrientes y las concentraciones
de clorofila medidas son propias de aguas
hipereutróficas. Por lo general estos casos
coinciden con lagunas afectadas por el vertido de aguas residuales. De todas formas, hay
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
que tener en cuenta que en los humedales
los nutrientes son de forma natural muy
abundantes y los procesos de eutrofización
nada tienen que ver con los que se dan en
lagos y embalses.
6.3.2. Indicadores hidromorfológicos
La falta de precipitaciones durante el periodo de estudio no ha impedido constatar el
grado de alteración morfológica de buena
parte de los humedales muestreados, ni
tampoco la severa alteración de su hidrología natural debido a la disminución de los
niveles freáticos por sobreexplotación de
acuíferos y a los vertidos de aguas residuales,
entre otras causas.
Los periodos más o menos prolongados de
ausencia de agua son fenómenos habituales
en humedales temporales y semipermanentes, a los que están perfectamente adaptadas las comunidades biológicas que los
habitan, por lo que en ningún caso son
causa de una pérdida de calidad ecológica.
Pero más allá de la falta de agua, la existencia
de fuentes de presión que alteran significativamente la hidromorfología de muchos de
los humedales de la cuenca son indicadores
muy fiables de que su estado ecológico difícilmente podrá alcanzar los objetivos
ambientales de la Directiva.
6.3.3. Estado ecológico
A modo de conclusión, cabe destacar que
aún teniendo en cuenta todos los problemas
de escasez de agua apuntados y las alteraciones que sufren estas masas de agua, el
70% de los humedales muestreados alcanza
el buen estado ecológico según la metodología empleada para su valoración en este
trabajo. Bien es cierto que los índices utilizados en dicha valoración deberán ser revisados y adaptados en el futuro, para lograr un
mejor ajuste entre la asignación de un nivel
de calidad a partir de las puntuaciones obtenidas y el estado real en que se encuentra el
sistema natural sujeto a evaluación. También
es muy posible que la utilización de nuevos
indicadores en la valoración del estado ecológico, sensibles a presiones e impactos diferentes, pueda llevar a resultados peores a los
que aquí se presentan.
Otra conclusión fundamental del estudio
realizado en los humedales es que aunque
un gran número de ellos no han podido ser
muestreados y valorados, y aunque en
muchos de los que sí se han estudiado hay
que afrontar importantes problemas para
alcanzar los objetivos ambientales de la DMA
debido a las alteraciones morfológicas e
hidrológicas ya comentadas, todos ellos
albergan un interés ecológico extraordinario,
de especial valor por su singularidad y rareza
dentro de la Península Ibérica y más allá, en
el ámbito de Europa Occidental.
Por ello se considera imprescindible perseverar en los esfuerzos para garantizar el control de estas masas de agua, a través de un
estrecho seguimiento que permita aprovechar los momentos hidrológicamente más
favorables para recoger la información necesaria para valorar adecuadamente su estado
de conservación y plantear programas de
medidas eficaces para su recuperación, aunque para ello sea necesario dotarse de estrategias de muestreo y ejercicios de planificación más lentos y complejos que los relativos
al seguimiento y control del resto de masas
de agua superficiales.
65
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67
ANEXO TABLAS
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
Tabla 1. Relación de las estaciones de muestreo ubicadas en los ríos de la CHG y en las cuencas de los ríos Tinto,
Odiel y Piedras.
CÓDIGO
UTM_X
UTM_Y
F001
Gigüela
CAUCE
TORREJONCILLO DEL REY
MUNICIPIO
534500
4429250
HUSO ALTITUD
30
865
F002
Gigüela
ALMENDROS
511750
4409950
30
755
F003
Gigüela
VILLANUEVA DE ALCARDETE
496500
4391300
30
695
F004
Gigüela
VILLAFRANCA DE LOS
CABALLEROS
473100
4370100
30
645
F005
Gigüela
VILLARTA DE SAN JUAN
463200
4344050
30
615
F006
Amarguillo
VILLAFRANCA DE LOS
CABALLEROS
469250
4362800
30
647
F007
Riansares
TARANCÓN
504100
4429800
30
775
F008
Riansares
VILLACAÑAS
478050
4390500
30
675
F009
Záncara
TORREJONCILLO DEL REY
541450
4420700
30
860
F010
Záncara
CARRASCOSA DE HARO
536900
4385500
30
755
F011
Záncara
EL PROVENCIO
536500
4356850
30
695
F012
Záncara
PEDRO MUÑOZ
504700
4355850
30
670
F013
Monreal
MONREAL DEL LLANO
521607
4380600
30
710
F014
Monreal
MOTA DEL CUERVO
518000
4361700
30
671
F015
Rus
HONRUBIA
559050
4381950
30
790
F016
Rus
SAN CLEMENTE
552250
4369700
30
755
F017
Córcoles
EL BONILLO
542700
4322050
30
827
F019
Alarconcillo
OSSA DE MONTIEL
516000
4309600
30
840
F020
Alto Guadiana
ARGAMASILLA DE ALBA
509500
4314300
30
780
F021
Pinilla
VIVEROS
534850
4297500
30
980
F022
Bañuelos
MALAGÓN
424200
4338800
30
635
F023
Bañuelos
FERNANCABALLERO
420350
4328800
30
600
F024
Bullaque
RETUERTA DE BULLAQUE
377500
4369000
30
730
F025
Bullaque
RETUERTA DE BULLAQUE
390700
4354800
30
635
F026
Bullaque
LUCIANA
388300
4315500
30
530
F027
Bullaquejo
PIEDRABUENA
387400
4328600
30
585
F028
Arroyo de los
Pescados
ALCOBA
379136
4352404
30
634
F029
Milagro
RETUERTA DE BULLAQUE
395000
4369500
30
710
F030
Arroyo
Corazoncillo
HELECHOSA DE LOS MONTES
347000
4354400
30
454
F031
Estena
NAVAS DE ESTENA
367637
4373245
30
640
F032
Estena
HELECHOSA DE LOS MONTES
350500
4360750
30
485
F033
Estenilla
ANCHURAS
343500
4368550
30
475
F034
Guadarranque
ALIA
316750
4372100
30
462
F035
Guadalupejo
GUADALUPE
300000
4369000
30
570
F036
Guadalupejo
CASTILBLANCO
313450
4354000
30
375
F037
Ruecas
CAÑAMERO
294900
4362100
30
540
F038
Ruecas
LOGROSÁN
288200
4353850
30
390
71
72
CÓDIGO
F039
CAUCE
Ruecas
MUNICIPIO
LOGROSÁN
UTM_X
282850
UTM_Y
4348200
F040
F041
HUSO ALTITUD
30
350
Ruecas
RENA
257400
4325700
30
258
Alcollarín
CONQUISTA DE LA SIERRA
260700
4356350
30
385
F042
Gargáligas
CASAS DE DON PEDRO
304800
4348650
30
423
F043
Gargáligas
NAVALVILLAR DE PELA
284850
4333700
30
305
F044
Búrdalo
SANTA CRUZ DE LA SIERRA
257500
4356500
30
393
F045
Búrdalo
SANTA AMALIA
754250
4320750
29
252
F046
Aljucén
ARROYOMOLINOS DE
MONTÁNCHEZ
741250
4332700
29
316
F047
Aljucén
ALJUCÉN
731900
4326200
29
252
F048
Aljucén
MÉRIDA
725300
4315250
29
214
F049
Lácara
MÉRIDA
723200
4326250
29
254
F050
Alcazaba
LA NAVA DE SANTIAGO
711700
4327900
29
230
F051
Guerrero
BADAJOZ
692950
4332750
29
245
F052
Guerrero
BADAJOZ
684750
4310100
29
185
F053
Gévora
LA CODOSERA
658757
4342260
29
305
F054
Gévora
ALBURQUERQUE
670000
4339100
29
222
F055
Gévora
BADAJOZ
679500
4315000
29
190
F056
Zapatón
ALBURQUERQUE
688300
4352250
29
270
F057
Zapatón
ALBURQUERQUE
684000
4334400
29
200
F058
Albarragena
SAN VICENTE DE ALCÁNTARA
676300
4354950
29
330
F059
Gavilán
CÁCERES
707000
4349750
29
304
F072
Guadiana
DAIMIEL
434100
4329800
30
295
F073
Guadiana
CIUDAD REAL
411500
4312400
30
584
F074
Guadiana
CORRAL DE CALATRAVA
403300
4305800
30
550
F075
Guadiana
LUCIANA
387900
4315600
30
528
F076
Guadiana
PUEBLA DE DON RODRIGO
360550
4329100
30
455
F077
Guadiana
NAVALPINO
356600
4338800
30
430
F078
Guadiana
HERRERA DEL DUQUE
326500
4359100
30
365
F080
Guadiana
LA CORONADA
274883
4320032
30
280
F081
Guadiana
VILLANUEVA DE LA SERENA
259000
4322100
30
255
F082
Guadiana
MEDELLÍN
241500
4316950
30
236
F083
Guadiana
ZARZA DE ALANGE
736800
4301850
29
170
F086
Guadiana
BADAJOZ
666330
4299800
29
155
F091
Azuer
MONTIEL
499800
4296700
30
815
F092
Azuer
ALHAMBRA
490500
4296850
30
760
F093
Azuer
DAIMIEL
448100
4325400
30
625
F094
Jabalón
MONTIEL
510250
4283750
30
860
F095
Jabalón
ALCUBILLAS
487950
4289000
30
784
F096
Jabalón
TORRENUEVA
467900
4278300
30
718
F097
Jabalón
MORAL DE CALATRAVA
451055
4293280
30
650
F098
Jabalón
ALMAGRO
426500
4297800
30
613
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
CÓDIGO
UTM_X
UTM_Y
F099
Jabalón
CAUCE
CIUDAD REAL
MUNICIPIO
411750
4305100
HUSO ALTITUD
30
575
F100
Rambla de
Mudela
SANTA CRUZ DE MUDELA
454300
4281300
30
683
F101
Tirteafuera
ALMODÓVAR DEL CAMPO
399337
4288800
30
649
F102
Tirteafuera
ABENÓJAR
378300
4305600
30
567
F104
Zújar
FUENTE OBEJUNA
276200
4244700
30
540
F105
Zújar
GRANJA DE TORREHERMOSA
274373
4252969
30
528
F106
Zújar
BELALCÁZAR
311950
4283250
30
377
F107
Zújar
EL VISO
318400
4286200
30
360
F108
Zújar
VILLANUEVA DE LA SERENA
263998
4319360
30
265
F109
Guadalemar
SIRUELA
328900
4323500
30
449
F110
Agudo
AGUDO
349250
4319900
30
575
F111
Esteras
VALDEMANCO DE ESTERAS
341800
4308100
30
432
F112a
Esteras
SACERUELA
357045
4312898
30
553
F112b
Arroyo de
la Fuente
SACERUELA
359700
4312250
30
545
F113
Guadalmez
BRAZATORTAS
372400
4252800
30
575
F114
Guadalmez
ALMODÓVAR DEL CAMPO
338100
4275950
30
395
F115
Guadalmez
GUADALMEZ
328700
4287500
30
340
F116
Valdeazogues
ALMADENEJOS
352850
4289200
30
445
F117
Valdeazogues
CHILLÓN
337300
4288250
30
375
F118
Quejigares
ABENÓJAR
367300
4292250
30
525
F119
Alcudia
ALMODÓVAR DEL CAMPO
356600
4282300
30
459
F120
Guadamora
TORRECAMPO
358100
4258000
30
520
F121
Arroyo de
Sta. María
PEDROCHE
346850
4260750
30
507
F122
Arroyo
Cigüeñuela
DOS TORRES
334505
4261029
30
560
F123a
Guadamatilla
FUENTE LA LANCHA
319768
4256379
30
465
F123b
Guadamatilla
EL VISO
324450
4262550
30
520
F124
Guadalefra
CASTUERA
275950
4295800
30
345
F125
Ortigas
QUINTANA DE LA SERENA
265450
4290300
30
399
F126
Ortigas
MEDELLÍN
244100
4318100
30
250
F127
Guadámez
RETAMAL
255800
4273850
30
414
F128
Guadámez
DON BENITO
240700
4310000
30
245
F129
Matachel
AZUAGA
261400
4249250
30
560
F130
Matachel
VALENCIA DE LAS TORRES
241950
4259700
30
410
F131
Matachel
HORNACHOS
749100
4271500
29
318
F132
San Juan
OLIVA DE MÉRIDA
240100
4287750
30
395
F133
Palomillas
PUEBLA DE LA REINA
755250
4282200
29
360
F134
Retín
VALENCIA DE LAS TORRES
758850
4253700
29
435
F135
Arroyo
Valdemedel
RIBERA DEL FRESNO
738800
4277400
29
375
73
CÓDIGO
74
CAUCE
UTM_X
UTM_Y
VILLAFRANCA DE
LOS BARROS
MUNICIPIO
HUSO ALTITUD
730150
4280500
29
365
225
F136
Arroyo
Bonhabal
F137
Arroyo Tripero
ARROYO DE SAN SERVÁN
721327
4303192
29
F138
Guadajira
SOLANA DE LOS BARROS
714350
4288400
29
230
F139
Guadajira
TALAVERA LA REAL
700600
4303100
29
190
F140
Limonetes
TALAVERA LA REAL
692900
4306000
29
170
F141
Albuera
ALMENDRAL
690050
4280100
29
280
F142
Arroyo
Calamón
BADAJOZ
677300
4293850
29
220
F143
Olivenza
BADAJOZ
684000
4269750
29
403
F144
Olivenza
OLIVENZA
668400
4290100
29
190
F145
Alcarrache
JEREZ DE LOS CABALLEROS
687800
4258950
29
433
F146
Alcarrache
VILLANUEVA DEL FRESNO
663700
4247250
29
183
F148
Zaos
OLIVA DE LA FRONTERA
676250
4239300
29
293
F149
Ardila
FREGENAL DE LA SIERRA
718550
4237200
29
360
F150
Ardila
JEREZ DE LOS CABALLEROS
697050
4239600
29
275
F151
Ardila
JEREZ DE LOS CABALLEROS
685100
4233700
29
211
F153
Bodión
FUENTE DE CANTOS
730750
4233300
29
500
F154
Atarja
CALZADILLA DE LOS BARROS
734300
4245750
29
508
F155
Múrtigas
LA NAVA
698450
4204050
29
420
F156
Múrtigas
ENCINASOLA
682500
4222850
29
260
F157
Sillo
CUMBRES DE ENMEDIO
702700
4219700
29
425
F158
Chanza
AROCHE
681050
4204050
29
278
F159
Chanza
ROSAL DE LA FRONTERA
657200
4202200
29
160
F160
Chanza
SERPA
640100
4180800
29
87
F161
Alcalaboza
ROSAL DE LA FRONTERA
658400
4198300
29
160
F162
Malagón
PAYMOGO
658084
4173706
29
143
F163
Albahacar
PAYMOGO
647693
4176599
29
141
F164
Cobica
PUEBLA DE GUZMÁN
649054
4166873
29
100
F168
Arroyo Candón
NIEBLA
700500
4140700
29
35
F169
Corumbel
PATERNA DEL CAMPO
724900
4150750
29
125
F176
Meca
VILLANUEVA DE CASTILLEJOS
670050
4150900
29
67
F177
Oraque
CALAÑAS
676800
4167150
29
80
F178
Olivargas
ALMONASTER LA REAL
690800
4184500
29
209
F179
Piedras
CARTAYA
655800
4134700
29
70
F183
Guadarramilla
DOS TORRES
331350
4259750
30
556
F184
Gigüela
VILLARRUBIA DE LOS OJOS
448987
4338929
30
610
F185
Zújar
VALSEQUILLO
289818
4266450
30
450
F186
Alto Guadiana
VILLAHERMOSA
516653
4307186
30
860
F187
Guadiana
MÉRIDA
718411
4307337
29
195
F188
Ribera Montes
VILLANUEVA DE CASTILLEJOS
656254
4143030
29
80
F189
Arroyo
Tamujoso
PATERNA DEL CAMPO
718252
4151130
29
105
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
CÓDIGO
UTM_X
UTM_Y
F190
Gigüela
CAUCE
HUETE (VILLAS-VIEJAS)
MUNICIPIO
524098
4417798
HUSO ALTITUD
30
810
F191
Arroyo Cambrón
FUENTE EL FRESNO
430684
4342182
30
728
F192
Bullaque
PORZUNA
393038
4335274
30
575
F193
Arroyo de los Valles RETUERTA DE BULLAQUE
399159
4351419
30
700
F194
Frío
PUEBLA DE DON RODRIGO
371556
4323528
30
549
F195
San Marcos
FONTANAREJO
367085
4339370
30
557
F196
Arroyo del Rubial
HORCAJO DE LOS MONTES
359574
4354906
30
580
F197
Arroyo Fresnedoso
SEVILLEJA DE LA JARA
330696
4370177
30
445
F198
Río Silbadillos
CAÑAMERO
298945
4363455
30
585
F199
Arroyo Valdefuentes VALDECABALLEROS
310223
4351595
30
405
F200
Arroyo Pizarroso
LOGROSÁN
277868
4357948
30
440
F201
Alcollarín
CAMPO-LUGAR
260548
4343465
30
290
F202
Búrdalo
ESCURIAL
247703
4342457
30
320
F203
Arroyo de las
Muelas
MÉRIDA
744490
4322956
29
310
F204
Arroyo Lorianilla
LA ROCA DE LA SIERRA
702434
4330898
29
255
F205
Alcorneo
SAN VICENTE DE ALCÁNTARA
661289
4348490
29
300
F206
Arroyo de
Valdeborrachos
ALBURQUERQUE
666617
4334223
29
258
F207
Arroyo de
Doña Juana
PUEBLA DE DON RODRIGO
354436
4333294
30
468
F208
Arroyo Pelochejo
HERRERA DEL DUQUE
324738
4338889
30
438
F209
Arroyo Patuda
HINOJOSA DEL DUQUE
300500
4264287
30
485
F210
Arroyo San Juan
ALMODÓVAR DEL CAMPO
363634
4264946
30
570
F211
Río de la Cabra
ALMODÓVAR DEL CAMPO
371693
4280404
30
605
F212
Agudo
SIRUELA
324392
4320183
30
395
F213
Arroyo de
Dos Hermanas
CABEZA DE BUEY
306956
4304066
30
388
F214
Arroyo de Almorchón CASTUERA
292608
4296642
30
425
F215
Arroyo Mejorada
CASTUERA
282752
4295373
30
340
F216
Guadámez
DON BENITO
245819
4301821
30
290
F217
Arroyo Conejo
HIGUERA DE LLERENA
247079
4247204
30
520
F218
Guadajira
FUENTE DEL MAESTRE
717786
4267540
29
326
F219
Arroyo del Entrín
BADAJOZ
698794
4294264
29
224
F220
Rivera de Táliga
OLIVENZA
657733
4274222
29
177
F221
Arroyo de
Friegamuñoz
ALCONCHEL
659208
4259144
29
190
F222
Godolin
JEREZ DE LOS CABALLEROS
677486
4246791
29
280
F223
Bodión
VALENCIA DEL VENTOSO
714611
4243733
29
327
F224
Arroyo de Vargas
JEREZ DE LOS CABALLEROS
698419
4254583
29
428
F225
Ardila
CALERA DE LEÓN
732046
4219834
29
580
F226
Arroyo de la
Tremedera
CUMBRES MAYORES
698173
4209279
29
347
75
CÓDIGO
76
UTM_X
UTM_Y
F227
Sillo
CAUCE
ENCINASOLA
MUNICIPIO
688178
4219020
29
258
F228
Alcalaboza
CORTEGANA
688282
4195956
29
520
F229
Barranco de
las Pilas
CABEZAS RUBIAS
669630
4182677
29
240
F230
Arroyo Grande
AYAMONTE
640718
4128533
29
3
F231
Arroyo de Pedraza
AYAMONTE
647062
4125321
29
18
F232
Rivera de
Santa Eulalia
ARACENA
705615
4187269
29
265
F233
Barranco del Fresno EL CERRO DE ANDÉVALO
677802
4178194
29
155
F234
Oraque
ALOSNO
677919
4155758
29
35
F235
Rivera del Villar
ZALAMEA LA REAL
700506
4173765
29
240
F237
Rivera de Cañama
VALVERDE DEL CAMINO
703950
4160050
29
185
F238
Arroyo Helechoso
VILLARRASA
706649
4142874
29
49
F239
Barranco del
Gallego
BERROCAL
718874
4166917
29
186
F240
Guadamatilla
EL VISO
317337
4283415
30
363
F241
Estomiza
HELECHOSA DE LOS MONTES
347144
4362633
30
495
F242
Rambla de Castellar TORRENUEVA
469282
4276965
30
730
F243
Guadiana
ARGAMASILLA DE ALBA
495295
4324912
30
695
F244
Ayo Pellejero
CARRIÓN DE CALATRAVA
431299
4323620
30
615
F245
Becea
MALAGÓN
412001
4336908
30
625
F246
Ayo de los Hilos
TORRE DE JUAN ABAD
478837
4283815
30
815
F247
Ayo Sequillo
CALZADA DE CALATRAVA
430444
4288616
30
609
F248
Río de las Navas
RETUERTA DE BULLAQUE
396029
4363262
30
680
F249
Ayo del Tuno
RETUERTA DE BULLAQUE
389621
4363146
30
693
F250
Valdehornos
NAVALPINO
359185
4343524
30
466
F251
Ayo Encinarejo
HELECHOSA DE LOS MONTES
346583
4352255
30
447
F252
Ayo Benazaire
HERRERA DEL DUQUE
326753
4343426
30
410
F253
Ayo Grande
CASTILBLANCO
320750
4349337
30
418
F254
Ayo de Canalijas
CASTILBLANCO
322954
4353672
30
375
F255
Ayo de Puerto Rey
SEVILLEJA DE LA JARA
328818
4367841
30
449
F256
Arroyo de Valmayor TALARRUBIAS
317976
4333128
30
382
F257
Ayo de la Almagrera TALARRUBIAS
307384
4338358
30
375
F258
Ayo de Horadado
308611
4333217
30
327
F259
Ayo de Piedrabuena LOGROSÁN
291539
4348733
30
420
F260
Río Grande
LOGROSÁN
282229
4355529
30
387
F261
Ayo de Herrera
ZORITA
273672
4351325
30
360
F262
Arroyo del Buey
CABEZA DE BUEY
309615
4289006
30
474
F263
Arroyo del Cebolloso MONTERRUBIO DE LA SERENA
301049
4307820
30
401
F264
Ayo Grande
PUEBLA DE ALCÓCER
300680
4322514
30
352
F265
Ayo del Molar
VILLANUEVA DE LA SERENA
261149
4315971
30
277
TALARRUBIAS
HUSO ALTITUD
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
CÓDIGO
UTM_X
UTM_Y
F266
Ayo del Chaparral
CAUCE
VALDETORRES
MUNICIPIO
754177
4311000
HUSO ALTITUD
29
240
F267
Ayo San Juan
OLIVA DE MÉRIDA
747405
4303147
29
257
F268
Albarregas
TRUJILLANOS
740281
4316963
29
408
F269
Ayo de la Corbacha
AHILLONES
245213
4237916
29
585
F270
Lácara
MONTIJO
714352
4311109
29
205
F271
Ayo de Cabrillas
BADAJOZ
699980
4306701
29
185
F272
Ayo de Palomas
CÁCERES
692187
4345856
29
285
F273
Ayo de la Cabrera
BADAJOZ
684061
4313586
29
185
F274
Ayo de la Charca
OLIVENZA
655567
4287816
29
185
F275
Ayo de la Higuera
OLIVENZA
655670
4284810
29
185
F276
Ayo de las Pintas
OLIVENZA
657957
4278719
29
220
F277
Rivera de Salvatierra SALVATIERRA DE BARROS
700598
4267797
29
400
F278
Ayo de los Cabriles ALCONCHEL
655568
4263113
29
200
F279
Ayo Sta. Catalina
VILLANUEVA DEL FRESNO
649808
4255255
29
175
F280
Ayo de los Cuncos
VILLANUEVA DEL FRESNO
651231
4253214
29
175
F281
Ayo Rubiales
JEREZ DE LOS CABALLEROS
698161
4249795
29
320
F282
San Lázaro
BURGUILLOS DEL CERRO
708253
4247041
29
370
F283
Ayo de la Parrilla
FREGENAL DE LA SIERRA
706531
4234815
29
455
F284
Cañada de la Corte
PAYMOGO
653095
4185485
29
190
F285
Rivera de la Viguera PUEBLA DE GUZMÁN
651072
4160894
29
150
F286
Rivera Grande de
la Golondrina
SANLÚCAR DE GUADIANA
637150
4147189
29
10
F287
Rivera Aguas
de Miel
PAYMOGO
657084
4174852
29
140
F288
Ardila
BARRANCOS
673894
4229787
29
175
F289
Ayo San Gregorio
TOMELLOSO
501980
4345920
30
660
F290
Ayo de los Carneros TALARRUBIAS
314882
4325436
30
385
F291
Ayo de los Hoyos
ALBURQUERQUE
681340
4342949
29
275
F292
Arroyo de
Barcia Longa
AYAMONTE
641506
4138901
29
10
F293
Cubilar
LOGROSÁN
288597
4343870
30
326
F294
Cubilar
LOGROSÁN
289845
4351530
30
399
F295
Ruecas
MADRIGALEJO
271848
4336266
30
286
F296
Gargáligas
VILLANUEVA DE LA SERENA
265757
4325467
30
256
F297
Guadalupejo
ALIA
310233
4365632
30
434
F298
Azuer
SAN CARLOS DEL VALLE
479362
4303190
30
710
F299
Zújar
BELALCÁZAR
299347
4273143
30
411
F300
Guadalefra
CAMPANARIO
277719
4310850
30
280
F301
Ortigas
LA HABA
259029
4304635
30
330
F302
Tortillo
FUENLLANA
499205
4293774
30
825
F303
Ayo de Jarrilla
BELALCÁZAR
309383
4271975
30
476
77
CÓDIGO
78
UTM_X
UTM_Y
F304
Ayo Piedralá
CAUCE
PORZUNA
MUNICIPIO
400035
4345849
HUSO ALTITUD
30
675
F305
Ayo Pizarroso
MADRIGALEJO
270675
4339748
30
295
F306
Guadamatilla
EL VISO
320993
4274680
30
404
F307
Alcazaba
BADAJOZ
696100
4313750
29
215
F308
Ayo Valdecondes
MÉRIDA
728100
4328500
29
287
F309
Zújar
CAMPANARIO
377431
4313137
30
271
F311
Guadalemar
PUEBLA DE DON RODRIGO
339342
4331830
30
529
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
Tabla 17. Embalses muestreados con los datos de volumen, superficie y profundidad máxima de los embalses
pertenecientes a la red de control biológico.
VOLUMEN (Hm3)
SUPERFICIE (ha)
Gasset
41,44
735,88
13,7
Torre de Abraham
183,4
1.790
49,6
EMBALSE
Valdecaballeros
PROFUNDIDAD MÁXIMA (m)
sin dato
sin dato
sin dato
Gargáligas
21,33
373,67
15,15
Cubilar
5,98
143,47
11
Cancho del Fresno
15,21
97
46,5
Ruecas
41,94
372,2
32,75
Azud del Ruecas
0,25
12,5
8,9
Sierra Brava
232,4
1.576
42,07
Cornalbo
10,44
177,44
19,1
Proserpina
5,04
72
10,75
El Boquerón
5,51
99
20
Horno Tejero
24,42
282,86
30
Los Canchales
14,55
400
11,6
Villar del Rey
132,56
1.269
35,5
Peñarroya
47,5
412
32,5
El Vicario
31,76
886
14
Cijara
1.506
6.565
70,8
54,9
García de Sola
554
3.552
Orellana
808
5.191
46
Montijo
10,6
290
8,9
Puerto de Vallehermoso
6,92
129,17
18,05
La Cabezuela
42,84
564,34
27
Vega del jabalón
33,54
629,06
17,29
La Serena
3.219
13.949
70,6
302
1.449
44
Los Molinos de Matachel
33,7
386,65
29,8
Alange
851,7
5.036
50,08
Zújar
Piedra Aguda
16
258
17,3
11,16
155,57
24
Tentudía
5
57,5
34,6
Valuengo
20
150
21,12
El Aguijón
Chanza
sin dato
2.219
sin dato
Andévalo
sin dato
sin dato
sin dato
Jarrama
39,65
324,48
36
18
312,7
25
59,5
655
37,4
12
182
24,6
Corumbel Bajo
Piedras
Los Machos
Fuente: Confederación Hidrográfica del Guadiana.
79
Tabla 19. Densidad de fitoplancton en los embalses estudiados.
EMBALSE
80
ESTACIÓN
DENSIDAD DE FITOPLANCTON (cél/ml)
INVIERNO 2005
VERANO 2006
Gasset
E011
7663
5826
Gasset
E012
6176
7815
Torre de Abraham
E021
2846
12026
Torre de Abraham
E022
2836
5307
Torre de Abraham
E023
-
4368
Gargáligas
E031
4410
6148
Cubilar
E041
110165
6450
Cancho del Fresno
E051
1508
3589
Ruecas
E061
2626
1216
Sierra Brava
E071
2368
5120
Sierra Brava
E072
3274
1527
Cornalbo
E081
1637
6979
Porserpina
E091
1719
36977
El Boquerón
E101
1119
2841
Horno Tejero
E111
1726
1349
Los Canchales
E121
2704
10230
Los Canchales
E122
-
16586
Villar del rey
E131
4555
5768
Villar del rey
E132
2826
6473
Peñarroya
E141
943
6253
Peñarroya
E142
-
4885
El Vicario
E151
14471
83971
El Vicario
E152
59257
207364
Cíjara
E161
1680
1521
Cíjara
E162
580
2184
Cíjara
E163
830
2964
Cíjara
E164
350
1528
Cíjara
E165
-
8873
García de Sola
E171
1159
5428
García de Sola
E172
806
4868
García de Sola
E173
1332
6433
García de Sola
E174
1150
3593
Orellana
E181
647
2091
Orellana
E182
810
2060
Orellana
E183
694
3214
Orellana
E184
303
5106
Montijo
E191
-
28177
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
EMBALSE
ESTACIÓN
DENSIDAD DE FITOPLANCTON (cél/ml)
Puerto de Vallehermoso
E201
INVIERNO 2005
878
VERANO 2006
11306
La Cabezuela
E211
580
1875
Vega del Jabalón
E221
171769
22182
La Serena
E231
1359
4889
La Serena
E232
684
4505
La Serena
E233
14590
36405
La Serena
E234
1382
12221
La Serena
E235
1523
24584
La Serena
E236
-
29986
Zújar
E241
1018
4432
Zújar
E242
2573
2367
Los Molinos
E251
1218
23918
Alange
E261
1538
3670
Alange
E262
1622
5247
Alange
E263
2273
6032
Alange
E264
2372
6204
Tentudia
E271
3127
29915
Chanza
E281
2499
-
Chanza
E282
1750
-
Chanza
E283
1316
-
Andévalo
E291
1913
-
Andévalo
E292
2261
-
Andévalo
E293
2290
-
Jarrama
E301
1413
-
Corumbel Bajo
E311
1995
-
Piedras
E321
19336
-
Piedras
E322
11170
-
Los Machos
E331
777
-
Valdecaballeros
E341
-
37614
Valdecaballeros
E342
-
5184
Piedra Aguda
E351
-
33735
El Aguijón
E361
-
9129
Valuengo
E371
-
91824
Azud de Ruecas
E381
-
3464
81
Tabla 22. Relación entre los volúmenes del epilimnion y del hipolimnion.
EMBALSE
Gasset
82
FECHA
VOLUMEN
EPILMNION
(Hm3)
VOLUMEN
HIPOLIMNION
(Hm3)
VOLUMEN
EPILIMNION /
HIPOLIMNION
20/07/2006
2,9
6,69
0,433
41,19
27,06
1,522
Torre de Abraham
21/07/2006
Valdecaballeros
24/07/2006
Gargáligas
24/07/2006
7,99
8,40
0,951
Cubilar
26/07/2006
2,71
0,73
3,692
Cancho del Fresno
26/07/2006
4,26
7,31
0,583
Ruecas
26/07/2006
9,58
17,06
0,562
Azud del Ruecas
29/07/2006
Sierra Brava
31/07/2006
60,28
0,839
Cornalbo
31/07/2006
Proserpina
31/07/2006
El Boquerón
01/08/2006
Horno Tejero
01/08/2006
sin datos
50,59
no estratificado
2,49
0,73
3,411
sin datos
9,81
6,23
1,573
Los Canchales
02/08/2006
8,75
2,04
4,289
Villar del Rey
01/08/2006
20,06
9,10
2,203
Peñarroya
18/07/2006
22,22
9,87
2,252
El Vicario
20/07/2006
6,79
0,37
18,148
Cijara
22/07/2006
224,59
401,52
0,559
García de Sola
25/07/2006
93,07
238,88
0,390
Orellana
27/07/2006
74,67
473,14
0,158
Montijo
02/08/2006
2,95
8,79
0,336
Puerto de Vallehermoso
19/07/2006
1,56
0,57
2,739
La Cabezuela
19/07/2006
22,78
7,54
3,023
Vega del jabalón
19/07/2006
3,16
13,14
0,241
La Serena
29/07/2006
546,37
924,01
0,591
Zújar
30/07/2006
13,99
262,54
0,053
Los Molinos de Matachel
04/08/2006
10,43
13,08
0,797
Alange
03/08/2006
151,05
231,68
0,652
Piedra Aguda
05/08/2006
El Aguijón
05/08/2006
Tentudía
04/08/2006
Valuengo
04/08/2006
sin datos
sin datos
0,34
0,82
Chanza
sin muestreos de verano
Andévalo
sin muestreos de verano
Jarrama
sin muestreos de verano
Corumbel Bajo
sin muestreos de verano
Piedras
sin muestreos de verano
Los Machos
sin muestreos de verano
0,415
Estado ecológico de las masas de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (2005-2006)
Tabla 24. Humedales pertenecientes a la red de control biológico de la cuenca del Guadiana. Se especifica si son
o no masas de agua según la caracterización realizada por la CHG.
HUMEDAL
PROVINCIA
MUNICIPIO
MASA DE
AGUA
Laguna de El Hito
Cuenca
El Hito, Montalbo
SI
Laguna de Sánchez-Gómez
Cuenca
Mota del Cuervo
SI
SI
Laguna de Manjavacas
Cuenca
Mota del Cuervo
Laguna del Taray
Cuenca
Las Pedroñeras, Las Mesas
SI
Laguna del Longar (Lillo)
Toledo
Lillo
SI
Laguna del Prado
Toledo
Villacañas
NO
Laguna Larga
Toledo
Villacañas
SI
Laguna de Tirez
Toledo
Villacañas
SI
Laguna de Peña Hueca
Toledo
Villacañas
SI
Laguna Grande de Miguel Esteban
Toledo
Miguel Esteban
NO
Laguna del Taray
Toledo
Quero
SI
Laguna Grande
Toledo
Quero
SI
Laguna Grande de Villafranca
Toledo
Villafranca de los Caballeros
SI
Laguna de las Yeguas
Ciudad Real
Alcázar de San Juan
SI
Laguna del Camino de Villafranca
Ciudad Real
Alcázar de San Juan
SI
La Veguilla
Ciudad Real
Alcázar de San Juan
NO *
Laguna de Alcahozo
Ciudad Real
Pedro Muñoz
SI
Laguna de Retamar
Ciudad Real
Pedro Muñoz
SI
Laguna de Salicor
Ciudad Real
Campo de Criptana
SI
Nava Grande
Ciudad Real
Malagón
SI
Laguna Blanca
Ciudad Real
Villahermosa
NO
Laguna de Cueva Morenilla
Ciudad Real
Ruidera
SI
Laguna de la Colgada
Albacete, C. Real
Ossa de Montiel, Ruidera
SI
Laguna Concejo
Albacete
Ossa de Montiel
SI
Laguna San Pedro
Albacete
Ossa de Montiel
SI
Laguna de la Coladilla
Ciudad Real
Ruidera
SI
Laguna Salvadora
Albacete
Ossa de Montiel
SI
Laguna Batana
Albacete
Ossa de Montiel
SI
Laguna de Santos Morcillo
Albacete
Ossa de Montiel
SI
Laguna Lengua
Albacete
Ossa de Montiel
SI
Laguna Redondilla
Albacete
Ossa de Montiel
SI
Laguna Tinaja
Albacete
Ossa de Montiel
SI
Laguna Tomilla
Albacete
Ossa de Montiel
SI
Laguna del Rey
Ciudad Real
Ruidera
SI
NO
Tablas de Daimiel
Ciudad Real
Daimiel, Villarubia de los Ojos
Laguna de Caracuel
Ciudad Real
Corral de Calatrava
SI
Laguna de los Almeros
Ciudad Real
Villamayor de Calatrava
NO
* En el Informe Resumen de los Artículos 5 y 6 de DMA (CHG, 2005) no consta como masa de agua en el apartado de caracterización, sin embargo sí aparece en el registro de masas de agua protegidas.
83
HUMEDAL
84
PROVINCIA
MUNICIPIO
MASA DE
AGUA
Laguna de Cucharas
Ciudad Real
Villamayor de Calatrava
NO
Laguna del Prado
Ciudad Real
Pozuelo de Calatrava
SI
Laguna del Hueco
Badajoz
Azuaga
NO
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