2º BACHILLERATO FÍSICA TEMA 8 FÍSICA NUCLEAR Y DE PARTÍCULAS 2 2º BACHILLERATO TEMA 8 FÍSICA FÍSICA NUCLEAR Y DE PARTÍCULAS 8.1 Introducción. El descubrimiento de la radiactividad por el físico francés Becquerel, en 1896, puede considerarse como el comienzo de lo que hoy conocemos como física nuclear. Becquerel investigaba la fluorescencia de una sal de uranio. Un día guardó dicha sal junto a una placa fotográfica protegida con un papel negro y días más tarde comprobó que la película fotográfica estaba velada. La única explicación lógica para explicar éste hecho, era que la sal de uranio debía emitir algún tipo de radiación capaz de atravesar el papel negro e impresionar la placa. Más tarde comprobó que otros compuestos de uranio tenían el mismo comportamiento, por tanto, era el uranio el causante de esas radiaciones. Desde entonces, se han descubierto otros elementos radiactivos como el polonio y el radio y a la radiación invisible y penetrante que emiten se le denomina radiactividad. 8.2. Composición del núcleo. Isótopos. En 1911, Rutherford propuso un modelo atómico nuclear, basándose en una experiencia que ya conocemos, que consistía en bombardear una lámina muy fina de oro con radiación , proveniente de un elemento radiactivo. Según el modelo de Rutherford, en el núcleo existen dos tipos de partículas, llamadas nucleones: los protones y los neutrones. El protón tiene la misma carga eléctrica que el electrón, pero positiva, e igual a 1,6.10-19 C y una masa de 1,673.10-27 kg, que es 1836 veces mayor que la masa del electrón. El neutrón no tiene carga eléctrica y su masa es de 1,675.10 -27 Kg, ligeramente mayor que la del protón. El número atómico Z de un átomo viene dado por el número de protones que posee, que coincide con su número de electrones. 3 El número másico A de un átomo viene dado por el número de nucleones que posee. En consecuencia, el número de neutrones N es: N=A-Z Los núcleos que poseen el mismo número atómico Z y el mismo número másico A se denominan núclidos. De esta manera, un núclido se representa por el símbolo del elemento químico y en la parte inferior izquierda su Z y en la parte superior izquierda su A. Por ejemplo, 73 Li es un núcleo de litio formado por 3 protones y cuatro neutrones. Se denominan isótopos los átomos de un mismo elemento que tienen distinto número de neutrones. Es decir, los isótopos tienen el mismo número atómico y distinto número másico. Los tres isótopos del hidrógeno son: 1 1 H protio 2 1 H deuterio 3 1 H tritio Para medir la masa de los átomos se emplea la llamada unidad de masa atómica ( u ) que equivale a la doceava parte de la masa del isótopo de carbono de número másico 12. 1u= 1 12g 1kg 1 átomo . = 1,66 .10-24 g . 3 = 1,66 .10-27 Kg 23 12 6,023.10 átom os 10 g Como vimos en el tema anterior existe una relación entre la masa y la energía: E = m.c2, luego la unidad de masa atómica ( u ) equivale a: E = 1,66 . 10-27 Kg (3. 108 m/s)2 = 1,49 . 10-10 J 1,49 . 10-10 J . 1Mev = 0,931 . 103 Mev = 931 Mev 1,6.1013 J 1 u = 931 Mev 8.3. Estabilidad de los núcleos. Energía de enlace nuclear. 8.3.1. Fuerza nuclear fuerte. 4 En el núcleo de los átomos, los nucleones se agrupan de tal modo que la distancia entre ellos es del orden de 10-15 m. A esta distancia tan pequeña, la fuerza eléctrica de repulsión entre los protones es muy grande. La fuerza gravitatoria atractiva entre los mismos protones es despreciable frente a la fuerza eléctrica, pues es unas 10-36 veces más pequeña. En consecuencia, debe existir una tercera fuerza, muy intensa, de corto alcance y atractiva que supere las fuerzas eléctricas de repulsión y mantenga unido el núcleo. Esta fuerza se denomina fuerza nuclear fuerte. Es una fuerza que sólo se manifiesta en el interior del núcleo y su valor parece ser el mismo entre dos protones, entre dos neutrones o entre un protón y un neutrón. Resumiendo, las características de la fuerza nuclear fuerte son: 1. Es una fuerza atractiva muy intensa. 2. Actúa entre dos nucleones con independencia de su carga. 3. Es una fuerza de corto alcance, sólo se manifiesta en el interior del núcleo. 8.3.2. Defecto de masa y energía de enlace. Al determinar con precisión las masas de los núcleos de los átomos, con el espectrógrafo de masas, se obtuvo un resultado sorprendente. El valor obtenido es siempre inferior a la suma de las masas de los nucleones que forman el núcleo. Es decir, la masa del núcleo es inferior a la suma de las masas de los protones y neutrones que lo forman. Esta diferencia se denomina defecto de masa ( m ) y se calcula mediante la expresión: ∆ m = Z . mp + (A – Z) mn - M Siendo mp la masa del protón, mn la masa del neutrón y M la masa del núcleo. De acuerdo con la fórmula de Einstein, la energía equivalente a este defecto de masa es: E = ∆ m. c2 Esta energía se denomina energía de enlace o energía de ligadura del núcleo y es la energía que se libera al formarse el núcleo a partir de sus nucleones constituyentes. Esta energía coincide con la que se necesita para separar los nucleones de dicho núcleo. 5 Dividiendo la energía de enlace del núcleo ( E ) entre el número de nucleones ( A ) que contiene, se obtiene la energía de enlace por nucleón. Energía de enlace por nucleón = E A Si representamos la energía de enlace por nucleón frente al número másico para los elementos del sistema periódico, tenemos: El núcleo más estable es el del hierro - 56 ( 8,8 Mev/nucleón ) y el menos estable en del deuterio ( 1,2 Mev /nucleón ). Si un núcleo pesado se divide en dos núcleos más ligeros (fisión nuclear), o si dos núcleos ligeros se unen para formas uno más pesado (fusión nuclear), se obtienen núcleos más estables, con mayor energía de enlace por nucleón, y se libera energía. 8.4. Modos de desintegración radiactiva y sus leyes. 6 8.4.1. Leyes de Soddy y Fajans o leyes de los desplazamientos radiactivos. Después de los descubrimientos de los elementos radiactivos, se comprobó que el fenómeno de la radiactividad era debido a cambios producidos en los núcleos de los átomos, ya que las emisiones radiactivas no se veían afectadas por las reacciones químicas o por los cambios de temperatura o presión; también se pudo comprobar que había tres tipos de radiaciones radiactivas: radiación , radiación y radiación . Las radiaciones resultaron ser núcleos de helio, es decir, partículas con dos cargas positivas que están formadas por dos protones y dos neutrones. Son emitidas por los núcleos demasiado grandes. Debido a una masa elevada, a su carga eléctrica y a que son emitidas a velocidades no muy altas, estas partículas tienen un poder de penetración pequeño; no son capaces de atravesar la piel de nuestro cuerpo. Las radiaciones resultaron ser electrones. ¿Cómo es posible que surjan electrones del núcleo de los átomos?. Cuando la relación neutrón/protón es demasiado grande, el núcleo es inestable y se estabiliza convirtiendo un neutrón en un protón, un electrón y un antineutrino: La emisión se debe a la existencia de una nueva fuerza nuclear llamada fuerza nuclear débil. Su alcance es aún más corto que la fuerza nuclear fuerte y su magnitud es, aproximadamente 1013 veces menor. Las partículas se emiten a velocidades próximas a la de la luz, su masa es mucho menor que la de las partículas , por tanto tienen un mayor poder de penetración. Pueden penetrar el cuerpo humano. Las radiaciones resultaron ser ondas electromagnéticas con frecuencias muy altas. Son emitidas como consecuencia de reajustes energéticos en el núcleo. Las radiaciones acompañan generalmente a las radiaciones y y tienen un poder de penetración mucho mayor que estas. Las transformaciones que sufren los núcleos radiactivos cuando emiten alguna radiación, se rigen por las leyes de Soddy y Fajans o leyes del desplazamiento radiactivo, que son las siguientes: 7 1. - Cuando en una transformación radiactiva se emite una partícula , se obtiene un elemento cuyo número atómico es dos unidades menor y su número másico es cuatro unidades menor. A Z X → A 4 Z 2 Y + 4 2 He 2. - Cuando en una transformación radiactiva se emite una partícula , se obtiene un elemento cuyo número atómico es una unidad mayor y no varía su número másico. A Z X→ A Z 1 Y + 0 1 e 8.4.2. Magnitudes características de la desintegración radiactiva. Los átomos de un elemento radiactivo son inestables y están condenados a transmutarse ( transformarse ) en otros elementos al emitir radiaciones o radiaciones . Ahora bien, no es posible predecir cuándo un determinado átomo se desintegrará; de ahí que estos fenómenos hayan de estudiarse bajo un punto de vista estadístico, basando todas las deducciones en el cálculo de probabilidades. Si N0 es el número de núcleos existentes en el inicio; N el número de núcleos que quedan sin desintegrar al cabo de un cierto tiempo t y una constante de proporcionalidad llamada constante de desintegración, se puede demostrar mediante el cálculo de probabilidades que: Ley de emisión radiactiva N = N0 e-λ.t La constante de desintegración , representa la probabilidad de que un determinado núcleo radiactivo se desintegre y tiene un valor característico para cada elemento radiactivo. En el Sistema Internacional de Unidades, su unidad es s-1. Por otro lado, la velocidad de desintegración de un núcleo radiactivo (número de núcleos que se desintegran por unidad de tiempo) llamada actividad ( A ) es directamente proporcional al número de núcleos presentes: Actividad inicial: A0 = λ . N0 8 Actividad al cabo de un cierto tiempo t: A=λ.N La relación entre estas actividades viene dada por: A = A0 . e-λ. t Unidad en el SI : 1 desintegración/s = 1 Becquerel = 1 Bq Se le llama período de semidesintegración ( T ), al tiempo que debe transcurrir para que el número de núcleos presentes en una determinada muestra se reduzca a la mitad. Luego: N0 = N0 . e-λ. T 2 ln (1/2) = - λ .T. lne - 0,693 = - λ .T 0,693 = λ .T 0,693 T= Los períodos de semidesintegración son muy diversos, pueden ir desde billonésimas de segundo a miles de años. Existen tablas de períodos de semidesintegración. Otro concepto que se utiliza es la vida media ( ), que representa el promedio de vida de un núcleo o el tiempo medio que tarda un núcleo al azar en desintegrarse y que equivale a la inversa de : 1 T 0,693 8.5. Reacciones nucleares. Las reacciones nucleares son reacciones en la que intervienen núcleos atómicos. Generalmente, se producen al bombardear un núcleo con otros de menor tamaño o con partículas subatómicas. En estas reacciones nucleares, la suma de los números atómicos y la suma de los números másicos se mantienen constantes. 9 La primera reacción nuclear fue producida por Rutherford, en 1919, al bombardear nitrógeno - 14 con partículas : 14 7 N + 24 He → 17 8 O + 1 1 H Otra forma de representar las reacciones nucleares es: 14 7 N (α , p) 17 8 O A continuación se indican algunos ejemplos de reacciones nucleares: Al + 4 2 Li + 1 1 27 13 7 3 He → H → 1 0 4 2 n + He + 30 15 4 2 P He 8.6. Fisión y fusión nuclear. 8.6.1. Fisión nuclear. Cuando un núcleo pesado se divide en dos núcleos más ligeros, éstos son más estables como ya vivos en la gráfica de energías de enlace por nucleón, Tienen mayores energías de enlace y en el proceso se libera energía. Los núcleos no se dividen fácilmente, pero se puede acelerar su división si los bombardeamos con neutrones ( partículas sin carga eléctrica que penetran hasta el núcleo sin dificultad ). Esto es lo que le ocurre a los núcleos del 235 92 U cuando absorben un neutrón, en primer lugar se convierten en núcleos inestables de 236 92 U , e inmediatamente de dividen en dos fragmentos de números atómicos Z comprendidos entre 34 u 57, y números másicos comprendidos entre 72 y 149, liberándose una gran cantidad de energía y nuevos neutrones. Por ejemplo: 235 92 U + 1 0 n 236 92 U 141 56 Ba + 92 36 Kr + 3 01 n + energía La energía liberada en este caso es de unos 200 Mev por átomo, millones de veces mayor que la energía que se desprende en una reacción química de combustión. En el proceso de fisión del uranio-235 se liberan varios neutrones que hacen posible la fisión de otros núcleos. Éstos liberan neutrones y así 10 sucesivamente, iniciando lo que se denomina una reacción en cadena, capaz de producir una enorme cantidad de energía. 8.6.2. Fusión nuclear. La unión de núcleos ligeros para formar núcleos más pesados se llama fusión nuclear ; es por tanto el proceso inverso al de fisión nuclear. Cuando se unen dos núcleos ligeros, se obtiene un núcleo más estable según la gráfica de energías de enlace por nucleón, con mayor energía de enlace, y se libera energía. Por ejemplo: 2 1 H + 3 1 H → 4 2 He + 1 0 n + energía En esta reacción se libera aproximadamente 17,6 Mev por átomo, si lo comparamos con la energía liberada en el proceso de fisión, tenemos: 235 : 5 = 47 47 . 17,6 Mev = 827 Mev 827 Mev lo que nos indica que se libera mucha más energía en este proceso. Las reacciones de fusión son muy difíciles de conseguir con la tecnología actual, ya que para unir dos núcleos hay que vencer las fuerzas eléctricas de repulsión que existen entre las cargas positivas de los protones. Para conseguirlo, los núcleos deben chocar entre sí a velocidades suficientemente altas para poder vencer las fuerzas de repulsión, lo que requiere temperaturas de millones de grados. Esto sólo se consigue en el interior de las estrellas y mediante la explosión de una bomba atómica. 8.7. Armas y reactores nucleares. 8.7.1. Armas nucleares. Los neutrones que se emiten en la fisión del uranio-235 hacen posible una reacción en cadena. Ahora bien, si los neutrones escapan o son absorbidos por otros materiales, la reacción se detiene. Si por el contrario, más de un neutrón emitido produce a su vez una nueva fisión, el número de éstas crece rápidamente, resultando una reacción incontrolada que produce una gran cantidad de energía; este es el fundamento de la bomba atómica. Para que los neutrones no escapen y puedan ser atrapados por los núcleos de uranio-235, debe de haber una cantidad suficiente de material 11 fisionable. A esta cantidad mínima, necesaria para producir la reacción en cadena, se le denomina masa crítica. El uranio que se encuentra en la naturaleza contiene solamente un 0,7% de uranio-235 y un 99,3% de uranio -238 no fisible. La fabricación de bombas atómicas exige concentrar el uranio-235 hasta un 99%, lo que requiere que el uranio natural sea enriquecido en instalaciones muy costosas. 8.7.2. Reactores nucleares de fisión. Un reactor nuclear es un dispositivo donde se produce una reacción nuclear de fisión controlada. La energía que se obtiene de la reacción se utiliza para producir vapor de agua a presión que hace girar una turbina, que a su vez, hace funcionar un alternador para producir corriente eléctrica. El uranio que se usa en los reactores nucleares es uranio natural o uranio enriquecido que contiene del 3 al 5% de uranio-235. Por eso en un reactor nuclear no pueden producirse explosiones nucleares similares a una bomba atómica. La reacción en cadena se regula mediante las barras de control de cadmio o boro que absorben neutrones. Las barras de control se insertan entre las varillas que contienen el combustible nuclear. Cuando se insertan por completo detienen la reacción en cadena y paran el reactor. La reacción de fisión del uranio-235 se produce con neutrones "lentos". Sin embargo, los producidos en la fisión son neutrones "rápidos" (tienen más energía de la necesaria y no son atrapados por el núcleo). Por ello, es necesario utilizar un moderador ( agua pesada D2O, grafito o berilio) que disminuya su velocidad. 8.7.3. Reactores de fusión nuclear. Como ya hemos comentado anteriormente, para producir una reacción de fusión se necesita una gran cantidad de energía inicial que permita vencer las fuerzas de repulsión eléctricas entre los núcleos. De entre todas las reacciones de fusión, la que parece más fácil de conseguir es la reacción del deuterio y el tritio: 2 1 H + 3 1 H → 4 2 He + 1 0 n + 17,6 Mev Para lograr la fusión es necesario alcanzar temperaturas del orden de 108 ºC y conseguir que alcance una densidad del orden de 10 20 partículas/m3, 12 durante un tiempo de unos segundos. Es evidente, que estas condiciones tan especiales solamente se dan en los núcleos de las estrellas o si se ha realizado previamente una explosión nuclear de fisión. Hoy en día se están siguiendo dos vías de investigación que son : el confinamiento magnético y el confinamiento inercial, pero hasta este momento no se han conseguido resultados satisfactorios. La energía de fusión presenta indudables ventajas frente a la de fisión, ya que: 1. - La materia prima ( deuterio y tritio ) es abundante y barata en nuestro planeta. 2. - Los reactores de fusión presentan menos problemas con los residuos radiactivos y son más seguros. Sin embargo, las dificultades científicas y tecnológicas que hay que resolver son enormes, nadie se atreve a aventurar cuándo se obtendrá energía a gran escala por fusión nuclear controlada. 8.8. Contaminación radiactiva. Los daños biológicos producidos por las radiaciones dependen de su energía y de los iones producidos a su paso. La radiación ultravioleta, los rayos X y las radiaciones radiactivas son las más peligrosas. Las irradiaciones a que están sometidos los seres vivos procede de la radiactividad natural, es decir, la que procede de la propia naturaleza, y la radiación artificial, procedente de las actividades humanas que producen núcleos radiactivos. La radiactividad natural procede de las transformaciones radiactivas de ciertos elementos que componen la corteza terrestre y de las radiaciones que proceden del Sol (radiación cósmica). La radiación artificial procede de explosiones nucleares, reactores nucleares, usos médicos de fuentes radiactivas, etc. Cuando se estudian los materiales radiactivos, la actividad se expresa en desintegraciones por segundo. La unidad de actividad en el SI es el becquere ( Bq ), que corresponde a una desintegración por segundo. Sin embargo, lo que realmente interesa son los efectos biológicos y físicos producidos por las radiaciones, y estos dependen de la dosis de radiación recibidas. La unidad en el SI de dosis de radiación es el sievert ( Sv ). Un sievert equivale a 100 rem, que es una unidad muy utilizada anteriormente. Según la legislación española, los profesionales no deben estar 13 expuestos a dosis superiores a 5 rem, y la población en general a dosis superiores a 0,5 rem. Para detectar las radiaciones se emplean distintos dispositivos como son: los contadores Geiger basados en la propiedad ionizadora de las radiaciones y los contadores de centelleo que transforman los destellos luminosos producidos por las radiaciones en impulsos eléctricos. 8.9. Aplicaciones de los isótopos radiactivos. En los reactores nucleares además de producir energía se producen también isótopos radiactivos. Para ello, algunos de los neutrones producidos en las fisiones se emplean para bombardear los núcleos adecuados. El comportamiento químico de los isótopos radiactivos es idéntico al de los isótopos estables del mismo elemento, pero son detectables localizando la radiación que emiten. Las numerosas aplicaciones de los isótopos radiactivos se deben a esta propiedad y a los efectos que las radiaciones producen en la materia. Entre estas aplicaciones se encuentran: Localización de tumores y tratamiento del cáncer destruyendo las células malignas. Obtención de semillas con mejores cualidades. Conservación de alimentos. Producción de esterilidad en especies nocivas y plagas agrícolas. Medida de espesores de materiales. Radiografías industriales. Fechado radiactivo, para determinar fechas de hechos históricos y geológicos. 8.10. Partículas subatómicas. Se ha descubierto un gran número de partículas bombardeando núcleos atómicos con protones y electrones de alta energía, dotados de velocidades muy grandes mediante aceleradores de partículas, pero estas partículas no han tenido ninguna influencia en la explicación del comportamiento de la materia ordinaria. Toda la materia ordinaria parece estar constituida por electrones, protones y neutrones. Los electrones parecen ser indivisibles, pero los neutrones y protones, que han sido considerados como indivisibles experimentalmente, parecen estar compuestos por unas partículas llamadas quarks. Además, cada partícula tiene su propia antipartícula. El positrón es la antipartícula del electrón, tiene la misma masa, pero su carga eléctrica positiva. 14 El antiprotón, que es la antipartícula del protón, está cargado negativamente. El antineutrón y el neutrón tienen momentos magnéticos opuestos. Existen dos grandes familias de partículas y consecuentemente otras dos grandes familias de antipartículas. a) Los leptones son partículas sujetas a la interacción débil y parecen ser elementales. Existen seis leptones: el electrón, el múon, la partícula tau, el neutrino electrónico, el neutrino muónico y el neutrino tautónico. b) Los hadrones son partículas sujetas a la interacción nuclear fuerte. Se dividen en mesones y bariones. Además del protón y el neutrón, el grupo de los hadrones incluye cientos de partículas inestables que parecen estar constituidas por quarks. Así pues, en la actualidad toda la materia ordinaria parece estar constituida por leptones y quarks. 8.11. La unificación de las interacciones fundamentales. Todas las fuerzas de la naturaleza se reducen a cuatro interacciones fundamentales: la gravitatoria, la electromagnética, la nuclear fuerte y la nuclear débil. La fuerza gravitatoria es la más débil de todas. Su intensidad es aproximadamente 10-39 veces la de la fuerza nuclear fuerte. Es universal y de atracción entre todos los cuerpos con masa. Teóricamente su alcance es ilimitado. Es la responsable de la estructura general del Universo. La fuerza electromagnética es unas cien veces menor que la fuerza nuclear fuerte. Actúa entre partículas cargadas y puede ser atractiva y repulsiva. Es la responsable de que los átomos, moléculas y materia en general permanezcan unidos. La fuerza nuclear fuerte es la más intensa de todas, pero de muy corto alcance. Esta fuerza mantiene unidas las partículas que componen el núcleo del átomo. Esta fuerza no se aprecia fuera del núcleo de los átomos. La fuerza nuclear débil tiene un radio de acción muy corto ( 10 -17m ). Su intensidad es 10-13 veces la de la interacción fuerte. Aparece en la desintegración beta de los núcleos radiactivos y actúa sobre los leptones. Uno de los objetivos de la física es unificar estas fuerzas de modo que todas sean manifestaciones de una sola interacción, de una fuerza única. Maxwell realizó la unificación electromagnética, demostrando que las fuerzas eléctricas y magnéticas tienen su origen en una sola interacción. 15 Weinberg y Salam unificaron la interacción electromagnética y la interacción nuclear débil dando lugar a la interacción electrodébil. Gell-Mann y Zweig unificaron la interacción electrodébil y la interacción nuclear fuerte. Aún así, no se ha conseguido unificar las anteriores interacciones con la interacción gravitatoria. Probablemente en el futuro se encontrará una teoría que unifique las cuatro fuerzas fundamentales y pueda explicar el comportamiento último de la materia de todo el Universo.