El bosque de los des...(Resúmenes)

Anuncio
Los alumnos de 4º a 6º de primaria de Sorzano hemos leído en clase este libro y al
acabar cada alumno ha hecho resúmenes de unos 4 capítulos y una entrevista a los
personajes del libro. La lectura de este libro así como los de todos los libros que hemos leído
en el taller de lectura de este curso está relacionado con el misterio.
Aquí podéis encontrar nuestros trabajos sobre este misterioso libro.
POR: BORJA CASTROVIEJO (4º SORZANO)
Ilse era una niña que cada semana llevaba comida para el
ermitaño Liberio que vivía en una cueva. Un día se desvió de su
camino y se metió en el bosque. Vio un jardín en el que había
unos rosales que olían muy bien, se pinchó el dedo y le salió una
gota de sangre.
Entonces apareció una vieja, le agarró de la mano diciéndole
que entraran en la cabaña para curarla. Ilse intentó escapar pero la
vieja le dijo que venía un pájaro, movió las manos cerca de la cara
de la niña e Ilse sintió un escozor en la piel, quiso gritar pero no
pudo.
POR: IVO AZEVEDO (5º SORZANO)
Berta y Hugo, los padres de Ilse, estaban preocupados porque
su hija no volvía. Pero la vieron venir sin la cesta de mimbre y su
madre fue rápidamente a abrazarla.
Ilse tenía una herida en la frente y su madre le preguntó que
qué le había pasado y aunque Ilse no sabía, de repente lo recordó
y le dijo que había sido un pájaro muy grande. Su madre le
preguntó que donde estaba la cesta e Ilse le respondió que se le
había caído por el camino.
La madre de Ilse al pasar por la habitación oyó que Ilse decía
muchas cosas raras, su madre no le saco nada raro.
Berta se estaba preocupando porque Ilse estaba muy rara. El
padre de Ilse intentaba tranquilizar a Berta y para que no estuviera
preocupada, su padre dijo que iría con ella a casa del ermitaño y a
ver donde le pasó lo del pájaro.
POR: JOSÉ DA COSTA (6º SORZANO)
Todos los martes el rey Enrique recibía visitas de los que tuviesen
alguna queja, demanda o petición. A veces Jacobo, que era la
mano derecha del rey, le ayudaba.
Ese día el primero que fue era un agricultor que se quejaba de que
su vecino abría el agua por la noche para que a sus campos les
llegara más cantidad de agua. El caso fue puesto en manos del
intendente real de aguas.
El segundo que fue era un arriero que decía que tenía un problema
con los habitantes del valle del Mediodía, que no le dejaban pasar
con sus asnos, caballos y mulas. La queja del arriero fue tenida en
cuenta.
El tercero pedía amparo porque tenía edad avanzada y por tener
enfermedades.
El cuarto venía diciendo que su hijo, que tenía diez años, estuvo
tres días y tres noches en el bosque de los Desaparecidos y que no
volvió hasta el cuarto día. Tenía una mancha muy rara en la frente y
por mucho que insistieran no les contaba nada de lo que había
ocurrido. Era la primera vez que a su hijo le había pasado eso.
No eran solo niños a los que les pasaba eso, también eran mujeres
y hombres. Un carbonero que iba por el bosque de repente oyó
doce campanadas, a un fraile le sorprendió la noche en el bosque y
unos seres invisibles le persiguieron y se burlaron de él. Algunas
personas decían haber visto unas mujeres con cara de brujas que
se movían por el fondo del bosque y ya casi nadie se atrevía a ir al
bosque. Uno dijo que los malos tiempos han vuelo y que le iba a
pedir al rey que los salvase.
POR: YOUSRA BENTOUMIA (4º SORZANO)
Una mañana el rey escuchó que había problemas en las
tierras del este. Así que decidió mandar a alguien para que
descubriese qué estaba pasando allí. Entonces pensó que era
mejor que fuera Leonardo, un joven leñador que conocía todos los
bosques del reino.
Leonardo lo aceptó encantado porque conocía muchos
árboles y quería conocer otros cuantos más. Al día siguiente,
Leonardo preguntó que cómo nació el bosque y el rey le contó a
Leonardo que hacía trescientos años un brujo lo hizo aparecer con
sus poderes.
Leonardo
se preparó, y el rey le informó de que le
acompañarían doce soldados, pero Leonardo se negó a que fueran
con él y emprendió su camino sin ninguna protección.
POR: BORJA CASTROVIEJO (4º SORZANO)
Lucrecia, la cuidadora de animales y Bernardo, el barquero,
se despidieron de Leonardo y le ofrecieron ir en carruaje o en
barca pero él no quiso. Lucrecia y Bernardo se despidieron de
Leonardo.
Cuando Leonardo se fue Lucrecia y Bernardo fueron a donde
el rey para pedirle si podían seguirle con la barca por el río para
protegerle. El rey lo aceptó. Ellos decidieron acompañarle sin que
se enterase.
POR: IVO AZEVEDO (5º SORZANO)
Liberio estaba preocupado porque durante varios días le entraban
intrusos y le dejaban todo revuelto y tirado.
Ilse fue con su madre a la cueva del ermitaño. Berta le contó
lo que le había pasado a Ilse la última vez que volvía de la cueva. El
ermitaño les dijo que se iba a ver un familiar muy enfermo para que
Ilse no fuese ni corriese peligro.
Cuando Ilse se fue a ver un águila Liberio le dijo a Berta que
Ilse no fuese más a su cabaña hasta que él apareciese en la granja,
ya que quería investigar qué estaba pasando.
Ilse nunca mentía a sus padres, pero ahora sí, estaba rara, el
arañazo no se le curaba, les contestaba mal a sus padres, no
respondía a algunas preguntas pero si las contestaba eran
mentiras.
POR: JOSÉ DA COSTA (6º SORZANO)
Leonardo llevaba una bolsa con repuestos. Le dejaban
dormir en la paja o en el pienso de las granjas, le daban un cuenco
de sopa de cebada con caldo de buey y tocino frito. Él le daba las
gracias como si fuera un mendigo. Hacía calor aunque se
sospechaba una tormenta. Entró en una arboleda para disfrutar un
poco de la sombra y encontrar alguna fuente donde poder beber
agua.
Mientras Leonardo disfrutaba de aquel pequeño descanso,
tres mezquinos y astutos leñadores llamados Focio, Caterio y
Zenón se juntaron en una sucia posada para preparar una trampa
para Leonardo.
El plan era fastidiar la misión matarlo y llevar las ropas al rey
diciendo que hemos matado a las hechiceras.
POR: YOUSRA BENTOUMIA (4º SORZANO)
Leonardo estaba muy cerca del bosque de los desaparecidos, pero
el tiempo empeoró y empezó a llover. Andaba muy cuidadoso para
no aplastar a ningún insecto. A la entrada del bosque el viento
arrancó un árbol, había una tormenta tremenda. Entonces escuchó
doce fuertes y raras campanadas.
Leonardo entró en el fondo del bosque pero tenía un poco de
miedo, sentía que alguien le perseguía. Mientras tanto Lucrecia y
Bernardo, dos súbditos mandados por el rey para que le ayudaran
en su misión, aparcaron su barca, luego entraron en el bosque y le
siguieron paso a paso. Pero una mujer de muchos años de edad
desató la cuerda y la barca se arrastró rió abajo. La mujer empezó a
reírse por su victoria.
POR: YOUSRA BENTOUMIA (4º SORZANO)
Los leñadores no tardaron en encontrar los disfraces de las
hechiceras, los hallaron en un armario de una abandonada granja.
Eran ropas de una mujer manchadas, rotas y además negras.
Cuando empezaron a afeitarse lo hicieron mal, con insultos, con
heridas hasta con gritos.
Focio, Caterio y Zenón se dirigieron al bosque de los
desaparecidos pero Caterio y Zenón tenían mucho miedo, además
tenían vergüenza de decirle a Focio que tenían miedo. Él hacía de
jefe.
Cuando Focio les dijo que Leonardo se negó a ser acompañado por
doce soldados de escolta los dos leñadores se quedaron
alucinados, y le insultaron diciendo que era tonto por no querer la
protección. Focio les dijo que iba a ser un susto de lujo, que
Leonardo no andaba muy lejos y que además era más valiente que
ellos.
Cuando Caterio y Zenón le preguntaron a Focio si tenía miedo
respondió que no sabia porque sus ganas de fastidiar a Leonardo y
la buena que iban a llevar cuando lo lograsen y se hiciesen
ministros reales no le dejaban pensar en nada más.
POR: IVO AZEVEDO (5º SORZANO)
Liberio fue al bosque para ver qué estaba pasando, de
repente escuchó un ruido y se camufló, era Ilse, que iba sola y
parecía medio dormida.
El le preguntó que por qué iba tan sola pero Ilse no le
respondió. Además no reconocía a Liberio y parecía estar
hechizada.
Ilse siguió andando y Liberio la siguió. La niña entró en la cabaña y
como parecía abandonada Liberio supuso que Ilse saldría pronto
pero no lo hizo.Liberio entró y se cayó por una trampa.
Leonardo sintió que alguien le seguía. Llegó a un claro del
bosque, se acercó a unos rosales negros y quedó sorprendido con
su extraño color. Él pensaba que estaba siendo poseído por un
hechizo o que era una pesadilla. Mientras alguien deseaba que se
acercara a oler los rosales pero Leonardo no se acercó. Entonces le
llamó la atención un pozo y quiso ver lo profundo que era. La mujer
escondida deseó en ese momento que se acercase más aún.
Focio, Caterio Y Cenón se disfrazaron de brujas y entraron en
el bosque. Focio explico el plan de nuevo, intentaban asustar a
Leonardo para fastidiarle la misión. En un instante se movió una
figura en la espesura, Focio pensó que se trataba de Leonardo y la
siguieron. Al llegar descubrieron que era una vieja hechicera que
entraba en una cabaña. y decidieron intentar capturar a la bruja en
vez de asustar a Leonardo.
Vieron unos raros rosales y Caterio se pinchó. Focio le llamó y
los tres leñadores entraron en la cabaña y antes de enterarse
estaban encarcelados en unos pasadizos, secretos y terrestres.
POR: JOSÉ DA COSTA (6º SORZANO)
Cuando Leonardo tenía medio cuerpo inclinado en el pozo
sintió un movimiento, se giró y vio a una mujer vieja y fea que dio un
paso atrás y lo miró. Pensó que era una de las brujas pero no lo
era. Leonardo se fijó en las uñas de la mano de una hechicera.
Entonces la bruja le engañó diciendo que venia un pájaro y que se
agachara, pero no era el pájaro si no que eran sus manos
moviéndose a gran velocidad. Leonardo la esquivó cogió una de
sus manos y vio que tenía un líquido amarillo que olía mal, al ver
que no tenía escapatoria la bruja se quedó más tranquila y empezó
a llorar. Entonces la hechicera le pidió perdón, Leonardo la soltó y
entonces ella le pidió ayuda para que las salvase de la bruja
Oscuridad y volver a ser unas simples herbolarias.
Leonardo les había dicho que había personas prisioneras bajo
tierra. También les dijo que había una cabaña con una trampa y una
escalera de caracol. Cuando Leonardo, Lucrecia, Bernardo y
Calidonia entraron en la cabaña se encontraron a Maxidora.
Calidonia les indicó el camino para no caer en la trampa y poder
bajar por la escalera de caracol. De repente oyeron unas voces, era
Liberio que estaba atado pero ellos lo salvaron.
Liberio los llevó a una cueva cerca de allí que era donde estaba
Ilse. La niña se asustó un poco cuando vio que ellos entraron en la
cueva pero cuando vio que eran ellos y la soltaron, se quedó más
tranquila.
En una gruta estaban los leñadores Focio, Caterio y Cenón. Cuando
vieron que venía Leonardo se sintieron un poco humillados y
cuando los soltaron la libertad no les sabía tan buena.
Oscuridad intentó que los cuatro se cayeran por un precipicio pero
al final sin darse cuenta se cayó ella.
POR: IVO AZEVEDO (5º SORZANO)
Tras el fin de Oscuridad Liberio, Leonardo y Lucrecia llevaron
a Ilse a casa con sus padres.
Cuando Hugo y Berta decidieron salir en busca de Ilse la
vieron venir con tres personas y una de ellas era Liberio el
silencioso. Se pusieron muy contentos.
Liberio les contó que la culpable era Oscuridad pero que
había muerto y que las otras dos brujas estaban bajo la vigilancia
del exbarquero Bernardo, ministro de la Corona. Liberio des contó
que las dos personas que le acompañaban eran Lucrecia y
Bernardo, también eran ministros del Rey.
Lucrecia dijo que los temores causados por el bosque de los
Desaparecidos habían terminado. Todos se pusieron a aplaudir.
POR: JOSÉ DA COSTA (6º SORZANO)
Más tarde se hizo una audiencia en el palacio para juzgar los
hechos ocurridos en el bosque de los desaparecidos.
Jacobo les contó lo que habían hecho Calidonia y Maxidora,
cómo empezó la historia del bosque de los desaparecidos, cómo la
continuó la bruja Oscuridad y todas las entradas subterráneas que
había para acceder a los túneles donde estaban los desaparecidos.
También que si entrabas por el pozo te caías y te quedabas
inconsciente.
Después hablaron Calidonia y Maxidora diciendo que todos
las rechazaban e insultaban por feas y que se unieron a Oscuridad
porque les dijo que con ella todos las respetarían y temerían. Les
convenció y engañó. Calidonia y Maxidora se querían marchar pero
Oscuridad les obligaba a tomar unas pócimas que las dejaba sin
voluntad, también les obligaba a que se dejasen las uñas largas
para meterse una pomada que dejaba a la gente dormida y no les
enseñaba a hacer esa pomada y tampoco les daba las semillas de
las rosas negras y azules.
Por suerte vino el caballero Leonardo y sus amigos a
salvarlas.
Calidonia y Maxidora pidieron perdón por todos los daños
que les hicieron. Entonces Ilse pidió que Calidonia y Maxidora no
tuvieran un castigo muy duro porque no lo querían hacer, fue la
bruja Oscuridad la que las obligó a hacer el mal y además les había
curado las heridas. Casi todos pidieron compasión para ellas.
El Rey dijo que Maxidora y Calidonia se tenían que dedicar a
la herboristería y cuidar todas las heridas de la gente ellas se
emocionaron y todos celebraron la generosa decisión.
POR: YOUSRA BENTOUMIA (4º SORZANO)
El rey les dio a Calidonia y maxidora libertad, las dos
herbolarias empezaron a trabajar para hacer medicinas para curar a
la gente. Además el rey les ofreció parte de su jardín, una
habitación para cada una de ellas y hasta les ofrecieron ropa de
jardinería limpia y elegante.
Desde ese día la gente les respeta, no les insulta y les tratan
muy bien. La campana que sonaba en el bosque fue trasladada al
templo, el pozo y la cabaña fueron cerrados para que nadie entrase
en ellas, Liberio volvió a su cueva e Ilse le llevaba la cesta con la
comida. ¡Ah! Y de castigo los leñadores hicieron el payaso con los
disfraces y las barbas colgando, estaban ridículos y todo el mundo
se rió de ellos. El rey le regaló una barca a Bernardo. La gente
creía que Leonardo y sus amigos tenían una buena estrella.
Y colorín colorado este cuento se ha acabado y Calidonia y
Maxidora libres quedaron.
LA RIOJA , 29 de marzo de 2012
Voy a hacer una entrevista a Focio, un personaje del libro “El
bosque de los desaparecidos” .
PERIODISTA : ¿por qué te cae tan mal Leonardo?
FOCIO: Porque el rey le ha hecho ministro y a mi no.
P: ¿ qué le vais a hacer a Leonardo?
F: Nos vamos a vestir de hechiceras y darle un susto para que se
vaya.
P: y luego ¿qué haréis tu y tus amigos?
F: llevaremos las ropas de las hechiceras y el Rey nos dará una
recompensa.
Pero al final Leonardo los salvo a ello
POR: BORJA CASTROVIEJO (4º SORZANO)
LA RIOJA 28 de marzo de 2.012
Aquí atamos con un personaje de un libro titulado “El bosque
de los desaparecidos” y se llama Oscuridad.
Periodista: ¿Porque te llamas Oscuridad?
Oscuridad: porque me gusta mucho la oscuridad.
P: y… ¿porque le gusta mucho la oscuridad?
O: porque me puedo camuflar muy bien.
P: ¿Por qué se cayó por el túnel?
O: porque me equivoqué.
P: ¿porque les encerró el la cueva?
O: porque me caían todos mal.
Aquí nos quedamos con Liberio el silencioso entrevistándole.
POR: IVO AZEVEDO PINTO
HISTORIA lunes 2 de abril de 2012
ENTREVISTA A ILSE
Aquí estamos en bosque de los desaparecidos con Ilse, una
niña que cayó bajo el hechizo de Oscuridad.
Periodista. ¿Cómo te sentías bajo el efecto del hechizo?
Ilse. Sentía que algo me controlaba, cuando quería hablar o hacer
alguna cosa una fuerza me lo impedía.
p. ¿Se puede saber que le ha pasado a la bruja Oscuridad?
I. Pues se ha destruido ella misma en la oscuridad eterna.
P. ¿Y que crees que era el pájaro con lo que las brujas engañaban
a los andantes?
I. Creo que es la sombra de las manos de las brujas al moverse.
P. ¿Ya les has contado todo a tus padres?
I. Sí, se lo he contado todo cuando me he acordado.
Pues muchas gracias por tu información y aquí nos quedamos a
contemplar nuestro terrorífico.
POR: YOUSRA BENTOUMIA (4º SORZANO)
Aquí estamos con un ermitaño llamado Liberio.
Periodista. ¿Dónde vive usted?
Liberio. Yo vivo en una cueva.
P. ¿Quién le trae la comida?
L. Me la trae Ilse, una chica.
P.Y si no se la trae Ilse ¿quién se la trae?
L. Nadie, me quedo sin comer.
P. ¿En que trabaja?
L. Yo no trabajo.
P. ¿Le piensan poner un castigo muy duro a la bruja Oscuridad?
L. Eso lo decidirá el juez.
P. ¿Y a Calidonia y Maxidora?
L. Alguno le pondremos, pero no será tan duro como el de
Oscuridad.
Bueno aquí nos quedamos con Liberio.
POR: JOSÉ DA COSTA (6º SORZANO)
Descargar