“Uso de material biológico en defectos de pared abdominal” Charles, F, et al. “Abdominal wall repair using human acellular dermis” J Am Surg 2007; 194:192198. Department of Surgery, Baylor College of Medicine, Houston, TX, USA. La infección previa a cirugía y resección tumoral puede resultar en defectos en la pared abdominal, el cierre primario de estos defectos no es posible por el tamaño del defecto de la fascia. Sin embargo varias técnicas para reparar estos defectos se han descritos, el uso de mallas sintéticas permanentes para lograr un cierre sin tensión son las mas utilizadas para estos defectos. A pesar de la introducción de las mallas ha disminuido la incidencia de hernias en el postoperatorio, en estos pacientes las mallas sintéticas están contraindicadas en pacientes con infección por el riesgo de adquirir una infección crónica de la malla. Los materiales sintéticos también están asociados a formación de fistula, adherencias y fibrosis. Los injertos de tejido biológico derivados ya sea de una fuente animal o humana han sido desarrollados para la reparación quirúrgica de estos defectos de la pared abdominal. La matriz dérmica acelular humana (Alloderm) es un tejido alogenico derivado de células de tejido humano donado; el cual contiene fibras intactas de colágeno y filamentos de elastina, además de glucosaminglicanos, este material además de servir como un material para reparación, a lo largo del tiempo además de inducir regeneración celular con el tiempo se reabsorbe ya cuando el defecto ha sido cubierto. El objetivo de este estudio fue determinar la seguridad y eficacia de este material para la reconstrucción de la pared abdominal. Se recabaron para estudio a todos los pacientes que se sometieron a reconstrucción de pared abdominal con este injerto, para cada paciente se tomaron en cuenta la edad, sexo, escala ASA, tamaño del defecto, complicaciones, cuidado de la herida en el postoperatorio y estadía intrahospitalaria. La técnica fue similar a la descrita para la colocación de una hernia intraperitoneal para la reparación de una hernia ventral abierta, se utilizo Alloderm con un espesor de 1.8 mm, todas las heridas eran desbridadas de todo tejido desvitalizado además de ser irrigadas con solución salina isotónica, si el defecto era superior a las hojas de Alloderm se suturaban una en contigüidad de la otra con polipropileno con un surjete, y se dejaba un margen de seguridad de 3 cm como mínimo mas allá de la fascia. El grupo de estudio fueron 20 pacientes de los cuales tan solo 5 pacientes se les realizo cierre cutáneo y los 15 restantes no se les hizo cierre debido al riesgo de infección, estos pacientes se les manejo con terapia VAC. Los 20 pacientes fueron del sexo masculino con una edad media de 62 años, de los cuales tan solo 2 pacientes padecían más de 2 comorbilidades (DM,HAS, hipercolesterolemia, enfermedad cardiaca, obesidad y tabaquismo), la media de índice de masa corporal fue de 32, la clasificación ASA media fue de 3, el nivel medio de albumina fue de 2.3, la media del tamaño del defecto fue de 209.7cm, la clasificación de las heridas fue de heridas contaminadas en un 60%, heridas limpias contaminadas en un 25%, contaminadas en un 10% y limpias en un 5%. Las complicaciones en el postoperatorio fueron: dehiscencia de la herida (6), infección del injerto (5), sangrado intraabdominal (2), evisceración (1) y muerte (1) la cual fue por FOM. La media de seguimiento de los pacientes fue de 9.4 meses durante los cuales tan solo hubo recurrencia de 6 hernias. Se concluye que la dermis acelular humana (Alloderm) es segura en la reconstrucción de la pared abdominal en heridas quirúrgicas contaminadas. Dr. José Luis Rivera Pedraza R1CG