PROBLEMAS AMBIENTALES DE ESPAÑA Introducción España es el país más árido de Europa, su cubierta vegetal es débil, su volumen de precipitaciones es desigual en el espacio y en el tiempo y sus aguas superficiales son escasas. La acción humana puede perjudicar este panorama. Es fácil cuantificar los impactos ambientales; lo importante es valorar cualitativamente su importancia. Contaminación atmosférica Se genera en los centros urbanos, zonas industriales y centrales energéticas. La estabilidad atmosférica (anticiclones térmicos invernales) y las zonas deprimidas favorecen su concentración. Las centrales térmicas favorecen la emisión de óxidos de azufre y nitrógeno, así como emisiones de CO2. Estas últimas, entre 1990 y 2006 han incrementado su emisión en España en más de un 50% (el tope era el 15%). En 2006 alcanzó los 433 millones de toneladas (10 toneladas por habitante y año, algo menos que la media de la UE). La evolución del PIB y la de las emisiones de CO2 corrían paralelas hasta 2006 (año con una inflexión a la baja de estas últimas). Aparte: Sobre el efecto invernadero: lo favorece el CO2, cuyo origen puede ser natural o artificial (en especial la combustión de combustibles fósiles, procedente de vehículos a motor, calefacciones, emisiones de centrales térmicas, etc). El CO2 absorbe los rayos infrarrojos que vuelve a la atmósfera desde el suelo (efecto albedo, que puede variar según la inclinación de los rayos, el color y la textura de las superficies incidentes). A más CO2 atmosférico más absorción de las emisiones albedo. Recursos hídricos y calidad de las aguas La distribución de los recursos hídricos en España es desigual en el espacio y en el tiempo. La capacidad de embalse en España (remanentes hídricos) es de unos 54.000 hm3 (el drenaje anual de los ríos españoles es de 114.000 hm3. Las demandas hídricas: urbanas (agua para boca), industriales (procesamientos y refrigeraciones) y agrarias. Los regadíos representan alrededor del 80% del consumo total. Las aguas subterráneas son también aprovechadas. La sobreexplotación de acuíferos pueden traer consigo graves problemas: disminución de las emanaciones superficiales para alimentar cursos fluviales o humedales (como las Tablas de Daimiel), salinización en zonas litorales (si el acuífero se vacía, entra el agua del mar con su sal). La idea es disminuir los consumos (consumo doméstico responsable, nuevas técnicas de riego, como aspersión y goteo) y aumentar la superficie embalsada (calibrando sus consecuencias ambientales. Aparte: A cada habitante de la cuenca del Ebro o del Duero le corresponden 6.000 m3 al año. A cada habitante de la cuenca del Segura le corresponden menos de 900 m3. Es evidente que en zonas más pobladas toca a menos y que la disponibilidad no depende tanto de las precipitaciones como de las obras de aprovechamiento. La población y la industria provocan la contaminación hídrica debido a los vertidos, que a través del ciclo del agua se dispersan fácilmente. Los agentes contaminantes: metabolismos biológicos y acción humana: vertidos urbanos, actividad industrial, contaminantes agrarios (fertilizantes y pesticidas). 1 El agua es un disolvente universal que favorece las acciones contaminantes; como vehículo de transporte puede evacuar los elementos contaminantes . Para controlar las aguas hay una red de 400 puntos de análisis. Se sabe por ellos que las concentraciones contaminantes aumentan en épocas de sequía y que las estaciones depuradoras reducen los niveles de contaminación aguas abajo. Aparte: La costa es especialmente sensible a este tipo de contaminación: más del 60% de la población y casi el 70% de la actividad industrial se concentran en zonas costeras; a lo que hay que añadir el desarrollo urbanístico y turístico. La Ley de Costas de 1988 intenta gestionar los litorales y preservar su calidad ambiental. Erosión y desertización La desertización es consecuencia de la destrucción de la cubierta vegetal: la cubierta vegetal y los suelos son aspectos mutuamente referidos , de manera que si falla el uno falla el otro. La pérdida de suelo afecta negativamente a la actividad agrícola, que también puede favorecer su conservación. 2/3 de la superficie española presentan riesgos de desertización. Aparte: Desertización y desertificación son dos términos que aluden a la progresiva adquisición de la categoría de desierto de un territorio. Desertización se asocia a causas naturales (riadas que arrastran tierras fértiles, aumento de la sequía, etc) y desertificación se asocia a causas humanas (eliminación de la vegetación natural). La costa mediterránea (Levante y Andalucía) y parte del interior (incluyendo el valle del Ebro), así como Canarias, presentan riesgo de desertización muy elevado. Se considera riesgo elevado si las tasas de impacto (o de pérdida de suelo) superan las 50t/ha/año. Causas: roturación de suelos de escasa densidad, agricultura intensiva, quema de rastrojos, incendios, sobrepastoreo, talas de vegetación autóctona, abandono de tierras de labor, etc. El 18% de la superficie de España presenta problemas de erosión de magnitud. Los acarreos de los cursos fluviales, por ejemplo están llenando los vasos hidráulicos de los embalses, limitando su vida útil y debiendo ampliar su caudal o dragar el vaso con costosas inversiones; ocurre parecido en las desembocaduras de algunos ríos, como el Guadalquivir, en cuya cuenca1 el grosor de la capa de acarreo erosivo de suelo aumenta 0,25 mm al año. Las repoblaciones forestales permitirían disminuir las tasas de acarreos. Degradación de la cubierta vegetal Estrabón y Plinio hablan de la España de hace más de 20 siglos como una superficie boscosa. Ciertamente, el 85% de la superficie de España es potencialmente forestal (se excluyen las áreas cuya temperatura máxima no rebasa los 10º, por encima de 2000 metros, zonas semiáridas con precipitaciones anuales inferiores a los 300 mm, zonas de dunas y zonas salinas). En España la superficie forestal es del 50% y la no forestal del 50%. -Superficie forestal: Abarca toda aquella superficie que contenga especies arbóreas, arbustivas, de matorral y herbáceas que no sean producto de la actividad agrícola. 1 Entiendo que se refiere primeramente al lecho del río; ya que la cuenca sólo recibe sedimentos en los desbordamientos. Por otra parte, los sedimentos arrancados del suelo (mayormente en áreas en pendiente) se depositan en áreas llanas del curso bajo, que pueden ser mayormente aprovechables. El dato, por lo tanto, merece matizarse mucho. 2 -Superficie no forestal: Abarca los espacios agrícolas, los núcleos de población, vías e infraestructuras y terrenos improductivos (rocas, saldares, dunares). En España hay 27,5 millones de has de superficie forestal. De ésta, es superficie arbolada un área de 17,7 millones de has (1/3 del territorio español). En todo caso, la superficie arbolada tiene varias categorías: bosque denso, adehesado, repoblado, latizal (especies arbóreas en el nivel arbustivo, asociadas al turno de cortas). Los bosques y dehesas representan unos 7,5 millones de has. En concreto, podemos decir que sólo tenemos actualmente un 15% de la superficie de España con un bosque bien desarrollado (los 7,5 millones de has citados). Factores de esta escasez: deforestaciones para conseguir tierras agrícolas y astizales, tala para madera, incendios, etc. Residuos urbanos e industriales Los residuos o desechos no son asimilables dentro de los ciclos naturales o lo son a un ritmo inferior a su deposición. El objetivo: Tratarlos y, si es posible, eliminarlos. Residuos urbanos son los generados en los domicilios particulares, comercios, oficinas y servicios. Alcanzó la cifra de casi 25 millones de toneladas en 2007. Cada habitante: 525 kilos al año (algo menos que la media de la UE). Reciclarlos es aconsejable2, pero sólo se recicla el 10% (pudiendo reciclarse más del 60%). Actualmente se elimina el 75% y el 15% se emplea para compostaje (fertilizantes). Los residuos industriales se dividen en inertes (poco contaminantes), orgánicos (procedentes de las industrias de la alimentación, textiles y otras) y tóxicos y peligrosos (procedentes de la industria química y de papel, así como de la industria de transformados metálicos. Cada año se generan en España 1,8 millones de toneladas de residos tóxicos y peligrosos. Su gestión; incineración, tratamiento físico-químico, almacenaje y reutilización (en algunos casos). Medio ambiente urbano Es la manifestación extrema de transformaciones del medio ambiente por el hombre: se modifica el relieve, se altera la vegetación, se destruye el suelo, se modifica el clima (climas urbanos), se altera el ciclo hidrológico. La ciudad emite diversos contaminantes atmosféricos, residuos sólidos y aguas residuales, además de la contaminación acústica. El ecosistema urbano obliga a los seres vivos a adaptarse a él. Problemas ambientales del medio urbano según la Agencia Europea del Medio Ambiente: -Emisiones contaminantes de la atmósfera, debidas a la industria (en especial a las industrias de producción de energía) y al tráfico, que añade contaminación acústica. -Usos del suelo que alteran la escorrentía. -Residuos sólidos urbanos, que aumentan más rápidamente que el reciclaje o los sistemas de eliminación. Espacios protegidos Iniciativas públicas tienen como finalidad salvaguardar ciertos espacios naturales de los procesos de degradación. El marco legal: Ley del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad (2007), que intenta conservar, restaurar y prevenir. La consideración de Espacio Natural Protegido (ENP) deriva del cumplimiento de ciertos requisitos: Que sus ecosistemas sean representativos, singulares o frágiles; posean interés ecológico, científico o paisajístico. 2 Sería interesante estudiar el proceso del reciclado y preguntarse quién se beneficia realmente de la materia prima reutilizada. No es el ciudadano, desde luego, que se limita a cumplir con las consignas. 3 Que exista una importante biodiversidad asociada a los recursos naturales correspondientes (que también habrá que preservar). Categorías: Parques Nacionales y Parques Naturales, Reservas Naturales, Áreas Marinas Protegidas, Monumentos Naturales, Paisajes Protegidos. Las CCAA también han elaborado sus propias leyes al respecto. En total, los ENP suman 4,8 millones de has (el 9,2 de la superficie de España). La UE ha puesto en marcha la Red Natura 2000, para coordinar los sistemas de protección y crear corredores naturales. Aparte: Los Parques Nacionales: Son aquellos espacios naturales que tienen un interés especial para la nación y son representativos de los diversos ecosistemas españoles. En la región eurosibieriana se respeta el bosque atlántico, zonas costeras, áreas lacustres pirenáicas. Ejemplos: Picos de Europa (Asturias, León, Cantabria), Ordesa y Monte Perdido (Huesca) En la región mediterránea se considera el bosque mediterráneo, la estepa, la alta montaña, los humedales, etc. Ejemplos: Doñana (Huelva, Sevilla), Tablas de Daimiel (Ciudad Real). En la región macaronésica se tiene en cuenta la laurisilva, los ámbitos volcánicos, etc. Ejemplos: Garajonay (Gomera), Timanfaya (Lanzarote), Teide (Tenerife). Riesgos naturales -Riesgos geológicos: Terremotos y erupciones volcánicas, ya que España está entre las placas euroasiática y africana. Terremotos en el S y SE peninsular principalmente, aunque también en los Pirineos y Cataluña. El área volcánica se halla en el archipiélago canario, si bien no presenta alta peligrosidad. Más riesgo tienen los hundimientos de suelo en áreas calcáreas, especialmente donde abunda el yeso. -Riesgos climáticos: Granizadas de verano, especialmente severas en Galicia, Cantábrico y Pirineo. Temporales de viento, en especial en el NO, en el Estrecho. En el litoral cantábrico y en el Valle del Ebro (cierzo). Olas de frío (Meseta, Ebro, Sistema Ibérico, Pirineos) y heladas (de alto riesgo en Levante y Murcia). Olas de calor procedente del Sahara. Inundaciones: Por precipitaciones abundantes en poco tiempo (gota fría en el Levante Español, persistencia de lluvias en el Norte); también por deshielo y por rotura de presas (Tous (1982). Evaluación del impacto ambiental Sus siglas: EIA. Se refiere a toda alteración del entorno cuyo origen sea antrópico: Se pueden modificar los sistemas naturales (agua, relieve, flora y fauna) y los sistemas sociales (despoblación, deslocalizaciones, etc). El impacto también puede ser positivo (repoblaciones, etc). Norma vigente hoy: Real Decreto de 11 de Enero de 2008. Por él, los proyectos agrarios, industriales o de infraestructuras han de pasar por una EIA del ministerio de medio ambiente, medio rural y medio marítimo para su posible autorización. El estudio del impacto ambiental se acompaña de información publica (para alegaciones o sugerencias); después se emite la declaración de impacto ambiental, en la que se autoriza o desautoriza el proyecto, con las oportunas modificaciones o medidas correctoras. 4