Volumen V No.3 Octubre 2006 Terapia Fotodinámica, ¿Una Muerte Anunciada? Teodoro J. Evans, MD, Lihteh Wu, MD, Ph.D. O que esperar das novas lentes intra-oculares Bruno M Fontes, Marian S Macsai. Alternative Indications For Goniotomy In Pediatric Glaucoma Alejandra A. Valenzuela, MD, Gordon R. Douglas, MD, FRCPS(C). Retained intra-orbital wood stick Chun Cheng Lin Yang, M.D. John McCann, M.D., Ph.D. Richard L. Anderson, M.D., F.A.C.S. Penfigóide Cicatricial-Relato De Dois Casos Daniel de Carvalho Friedman, M.D. João Luiz Pacini Costa, M.D. Rosicler Rocha Aiza Alvarez, M.D. Horácio Friedman, M.D. Fabíola Duque, M.D. Preserva la visión alcanzando las menores presiones-objetivo en más pacientes Investigadores de diversos estudios, (AGIS, Shirakashi, Shields) han comprobado que alcanzar y mantener la PIO entre 14 y 15 mmHg reduce la progresión de pérdida del campo visual1,2,3. Lumigan® alcanza la PIO-objetivo de 14/15 mmHg en un mayor número de pacientes: ® vs. timolol 4 ® vs. dorzolamida/ timolol 5 ® vs. latanoprost 6 Porcentaje de Pacientes que alcanzaron la PIO-Objetivo ≤14 21% 9% 17% 2% 19% 9% Porcentaje de Pacientes que alcanzaron la PIO-Objetivo ≤15 31% 16% 24% 9% 29% 14% Lumigan ® (bimatoprost) Forma farmacéutica y pr esentación. Composición. Cada ml contiene: 0,3 mg de bimatoprost. Vehículo: cloreto de sódio, fosfato de sódio presentación. esentación.Frascos cuenta-gotas conteniendo 5 ml de solución oftalmológica estéril de bimatoprost a 0,03%. USO ADULTO.Composición. hepta-hidratado, ácido cítrico mono-hidratado, ácido clorídrico y/o hidróxido de sódio, cloruro de benzalconio y agua purificada qsp. Indicaciones. LUMIGAN® (bimatoprost) es indicado para la reducción de la presión intra-ocular elevada en pacientes con glaucona o hipertensión ecauciones y Adver tencias. Advertencias. Fueron relatados aumento gradual del crescimiento Contraindicaciones. LUMIGAN® (bimatoprost) está contraindicado en pacientes con hipersensibilidad al bimatoprost o cualquier otro componente de la fórmula del producto. Pr Precauciones Advertencias. ocular.Contraindicaciones. de las pestañas en el largo y espesura, y oscurecimiento de las pestañas (en 22% de los pacientes después 3 meses, y 36% después 6 meses de tratamiento), y, oscurecimiento de los párpados (en 1 a <3% de los pacientes después 3 meses y 3 a 10% de los pacientes después 6 meses de tratamiento). También fue relatado oscurecimiento del íris en 0,2% de los pacientes tratados durante 3 meses y en 1,1% de los pacientes tratados durante 6 meses. Algunas de esas alteraciones pueden ser permanentes. Pacientes que deben recibir el tratamiento ecauciones LUMIGAN® (bimatoprost) no fue estudiado en pacientes con insuficiencia renal o hepática y por lo tanto debe ser utilizado con cautela en tales pacientes.Las lentes de contacto deben Precauciones de apenas uno de los ojos, deben ser informados a respecto de esas reacciones. Pr ser retiradas antes de la instilación de LUMIGAN® (bimatoprost) y pueden ser recolocadas 15 minutos después. Los pacientes deben ser advertidos de que el producto contiene cloruro de benzalconio, que es absorvido por las lentes hidrofílicas.Si más que un medicamento de uso tópico ocular estuviera siendo utilizado, se debe respetar un intervalo de por lo menos 5 minutos entre las aplicaciones.No está previsto que LUMIGAN® (bimatoprost) presente influencia sobre la capacidad del paciente conducir vehículos u operar máquinas, sin embargo, así como para cualquier colírio, puede ocurrir visión borrosa transitoria después de la instilación; en estos casos el paciente debe aguardar que la visión se normalice antes de conducir u operar máquinas. Interacciones medicamentosas. medicamentosas.Considerando que las concentraciones circulantes sistemicas de bimatoprost son extremadamente bajas después múltiplas instilaciones oculares (menos de 0,2 ng/ml), y, que hay varias vías encimáticas envueltas en la biotransformación de bimatoprost, no son previstas interacciones medicamentosas en humanos. eacciones adversas. LUMIGAN® (bimatoprost) es bien tolerado, pudiendo causar eventos adversos oculares leves a moderados y no graves.Eventos adversos ocurriendo en 10-40% de los pacientes que recibieron doses únicas diarias, durante No son conocidas incompatibilidades. RReacciones 3 meses, en orden decreciente de incidencia fueron: hiperenia conjuntival, crecimento de las pestañas y prurito ocular.Eventos adversos ocurriendo en aproximadamente 3 a < 10% de los pacientes, en orden decreciente de incidencia, incluyeron: sequedad ocular, ardor ocular, sensación de cuerpo estraño en el ojo, dolor ocular y distúrbios de la visión.Eventos adversos ocurriendo en 1 a <3% de los pacientes fueron: cefalea, eritema de los párpados, pigmentación de la piel periocular, irritación ocular, secreción ocular, astenopia, conjuntivitis alérgica, lagrimeo, y fotofobia.En menos de 1% de los pacientes fueron relatadas: inflamación intra-ocular, mencionada como iritis y pigmentación del íris, ceratitis puntiforme superficial, alteración de las pruebas de función hepática e infecciones (principalmente resfriados e infecciones de las vías respiratorias).Con tratamientos de 6 meses de duración fueron observados, además de los eventos adversos relatados más arriba, en aproximadamente 1 a <3% de los pacientes, edema conjuntival, blefaritis y astenia. En tratamientos de asociación con betabloqueador, durante 6 meses, además de los eventos de más arriba, fueron observados en aproximadamente 1 a <3% de los pacientes, erosión de la córnea, y empeoramiento de la acuidad visual. En menos de 1% de los pacientes, blefarospasmo, depresión, retracción de los párpados, Posología y Administración. hemorragia retiniana y vértigo.La frecuencia y gravedad de los eventos adversos fueron relacionados a la dosis, y, en general, ocurrieron cuando la dosis recomendada no fue seguida.Posología Administración.Aplicar una gota en el ojo afectado, una vez al día, a la noche. La dosis no debe exceder a una dosis única diaria, pues fue demostrado que la administración más frecuente puede disminuir el efecto hipotensor sobre la hipertensión ocular.LUMIGAN® (bimatoprost) puede ser administrado concomitantemente con otros productos oftálmicos tópicos para reducir la hipertensión intra-ocular, respetándose el intervalo de por lo menos 5 minutos entre la administración de los medicamentos. VENTA BAJO PRESCRIPCIÓN MÉDICA.“ESTE PRODUCTO ES UM MEDICAMENTO NUEVO AUNQUE LAS INVESTIGACIONES HAYAN INDICADO EFICACIA Y SEGURIDAD, CUANDO CORRECTAMENTE INDICADO, PUEDEN SURGIR REACCIONES ADVERSAS NO PREVISTAS, AÚN NO DESCRIPTAS O CONOCIDAS, EN CASO DE SOSPECHA DE REACCIÓN ADVERSA, EL MÉDICO RESPONSABLE DEBE SER NOTIFICADO. 1. The AGIS Investigators: The Advanced Glaucoma Intervetion Study - The Relationship Between Control of Intraocular Pressure and Visual Field Deterioration. Am. J. Ophthalmol, 130 (4): 429-40, 2000. 2. Shirakashi, M. et al: Intraocular Pressure-Dependent Progression of Visual Field Loss in Advanced Primary Open-Angle Glaucoma: A 15-Year Follow-Up. Ophthalmologica, 207: 1-5, 1993. 3. Mao, LK; Stewart, WC; Shields, MB: Correlation Between Intraocular Pressure Control and Progressive Glaucomatous Damage in Primary Open-Angle Glaucoma. Am. J. Ophthalmol, 111: 51-55, 1991. 4. Higginbotham, EJ et al. One-Year Comparison of Bimatoprost with Timolol in Patients with Glaucoma or Ocular Hypertension. Presented at American Academy Ophthalmology, Nov 11-14, 2001. 5. Gandolfi, S et al. Three-Month Comparison of Bimatoprost and Latanoprost in Patients with Glaucoma and Ocular Hypertension. Adv. Ther, 18 (3): 110-121, 2001. 6. Coleman, AL et al: A 3-Month Comparison of Bimatoprost with Timolol/Dorzolamide in Patients with Glaucoma or Ocular Hypertension. Presented at American Acedemy of Ophthalmol, New Orleans, La, 2001. Mejor comodidad posológica: 1 vez al día. No requiere refrigeración. Presentación conteniendo 3 ml. Octubre 2006 Mensaje del Presidente President’s Message La razón del ser y existir de la Asociación Panamericana de Oftalmología The Reason the Pan-American Association of Ophthalmology Exists E P l médico, desde siempre, ha sentido la necesidad de agruparse para compartir y aprender de las experiencias de otros. Esa ha sido, desde hace mucho tiempo, la razón de ser y existir de las sociedades médicas. La oftalmología no es la excepción. Las sociedades oftalmológicas nacionales, son ya, en muchos casos, centenarias y se encuentran bien consolidadas. Las sociedades nacionales comparten las experiencias epidemiológicas y gremiales de los problemas de cada país. Sin embargo, desde hace más de 50 años, la oftalmología de Este de América avizoró la necesidad de agruparse en una sociedad supranacional, continental, que abordara problemas comunes. Nació así la Asociación Panamericana de Oftalmología. En este siglo XXI la APAO cumple con una serie de funciones que inciden en la mejor actuación de los oftalmólogos de este conEnrique Graue tinente. Presidente de la Asociación Panamericana de Oftalmología. Los Congresos. Estos son sin duda el mejor medio de compartir y aprender. Los congresos panamericanos permiten el exponer lo que hace cada país y sus exponentes en las diferentes ramas de la oftalmología. Son la forma más acabada de la internacionalización de la oftalmología panamericana. Su fortaleza ha sido tal, que los congresos han gradualmente mejorado en asistencia y calidad y son una fuente inagotable de intercambio y educación. Hoy por hoy, es casi una regla que en cada uno de los congresos nacionales veamos invitados a profesores latinoamericanos y de habla inglesa. Este intercambio constante nace de esa internacionalización que permiten los congresos, y con ello la mejor integración de la oftalmología continental. Las becas. Los frutos económicos de los congresos y las donaciones altruistas de individuos y casas comerciales, han permitido que la APAO establezca un sistema de becas a jóvenes oftalmólogos en las diferentes áreas del conocimiento. Becas existen para cursos básicos, asistencia a reuniones de investigación (ARVO), estancias en el extranjero (Estados Unidos y Canadá) y becas para asistir a centros latinoamericanos. Las becas no solo fortalecen el conocimiento sino que permiten la apertura a nuevas ideas y sistemas que enriquecen la formación y reproducción de oftalmólogos. Junto con todas estas acciones, otras particulares a problemas definidos tales como calidad de educación, desarrollo de Bancos de Ojos, Investigación, etc. son tratadas en comités específicos. Los problemas gremiales, antes localizados sólo a los límites territoriales, hoy en día, con la globalización, traspasan fronteras y se hacen regionales. La APAO intenta responder a estas nuevas demandas de la oftalmología a través del comité de relaciones profesionales. Nuestra comunicación intercontinental por medio de revistas como Visión Panamérica o por virtud de la nueva alianza con la Academia Americana de Oftalmología con el Academy Express son muestras de este proceso. hysicians have always felt the necessity to congregate to share and learn from the experience of others. This has been, for a long time, the raison d'etre of medical societies. Ophthalmology is no exception. National ophthalmological societies are, in many cases, over one hundred years old and are solid organizations. The national societies share both the epidemiological as well as societal issues in each country. However, more than 50 years ago, ophthalmology in the Western Hemisphere saw the necessity to form a supranational organization to deal with common problems. The Pan-American Association of Ophthalmology (PAAO) was born. In the 21st century, the PAAO serves a series of functions to raise the standard of practice of ophthalmologists in the Western Hemisphere. The Congresses. These are, without a doubt, the best vehicles for sharing and learning. The Pan-American Congresses make it possible for each country to exhibit what they do locally in the different areas of ophthalmology. They are the most complete form of internationalization of Pan-American ophthalmology. The strength of the PAAO has been that the congresses have gradually improved in quality and attendance and are a tremendous source of education and exchange of ideas. At the present, it is almost the norm that we see both Latin American or English-language visiting professors at each of the national congresses. This interchange gives birth to even greater internationalization at meetings and, with this, better integration of Latin America ophthalmology. The Scholarships. Income from the congresses along with donations from individuals and organizations have allowed the PAAO to establish scholarships for young ophthalmologists in the different subspecialties. Scholarships are available for basic sciences courses, travel awards to attend research meetings (ARVO), foreign observership (USA and Canada) and scholarships to attend Latin American learning centers. The scholarships not only improve the knowledge base but they also permit the possibility of entertaining new ideas and systems that enrich the training of young ophthalmologists. Together with all these activities, there are other programs that focus on quality and standards of education, the development of eye banks, research, etc., and these are governed by specific committees. The problems of the national societies which were formerly limited to local areas, now with globalization, are crossing borders and have become regional issues. The PAAO responds to each of these new demands of Ophthalmology via the Professional Relations Committee. Examples of our intercontinental communications include our quarterly newsletter Vision Pan-America and weekly emails via a new program with the American Academy of Ophthalmology Academy Express. Through all these programs, we invite all of you to extend cultural ties and to strengthen our Association. Sincerely, Enrique Graue President, Pan-American Association of Ophthalmology Por todo ello los invitamos a estrechar lazos y fortalecer nuestra asociación. Atentamente. Enrique Graue Presidente, Asociación Panamericana de Oftalmología PAN-AMERICA : 1 : REVIEW Octubre 2006 Terapia Fotodinámica, ¿Una Muerte Anunciada? Teodoro J. Evans, MD, Lihteh Wu, MD, Ph.D. Instituto de Cirugía Ocular San José, Costa Rica a degeneración macular relacionada a la edad (DMRE) es la principal causa de ceguera irreversible en individuos mayores a 50 años en los países desarrollados.1 Su prevalencia ha sido reportada entre 1.2% y 1.7% después de la quinta década de vida,2-4 y se estima un incremento en este porcentaje conforme aumente la longevidad en nuestras poblaciones. La DMRE puede presentarse en una forma exudativa y otra no exudativa, sin embargo el 80% a 90% de los casos de ceguera asociada a la DMRE son causados por las membranas neovasculares coroideas (MNVC).5 Por lo tanto los tratamientos han sido dirigidos hacia las MNVC. Hasta hace poco los resultados visuales obtenidos con los diferentes tratamientos eran más que todo de tipo paliativo. Durante los años de 1980 hasta 1999, la fotocoagulación con láser era el único tratamiento disponible para las MNVC. El Macular Photocoagulation Study demostró que las MNVC clásicas fotocoaguladas con láser presentaban menor porcentaje de pérdida visual severa.6, 7 En 1999 se introdujo la Terapia Fotodinámica (TFD) con drogas fotosensitivas como el verteporfin (Visudyne, Novartis).8 La gran ventaja teórica de estas drogas sobre la fotocoagulación era la ausencia del daño iatrogénico hacia la retina neurosensorial, debido a la selectividad de la droga hacia la neovascularización patológica. Sin embargo en la práctica se demostró que la TFD con verteporfin no era tan selectiva como se pensaba. Tanto el Treatment of AgeRelated Macular Degeneration with Photodynamic Therapy (TAP) Study como el Verteporfin in Photodynamic Therapy (VIP) Study demostró que el efecto más común era la disminución de la pérdida visual. Aún así la gran mayoría de los pacientes seguían perdiendo visión aunque más lentamente que la historia natural de esta enfermedad.9-11 Con los avances en nuestros conocimientos de la biología molecular de las MNVC se identificó al L miento derivado de las plaquetas (platelet derived growth factor o PDGF) juega un papel importante en el reclutamiento de pericitos y la maduración de los vasos. Los neovasos coroideos pueden tornarse refractarios a la deprivación de VEGF con el tiempo y esta dependencia de los vasos al VEGF puede estar relacionada a la presencia de pericitos.15 Por esta razón las lesiones más pequeñas y tempranas parecen tener una mejor respuesta a los anti-VEGF que lesiones más grandes y antiguas. Si entendemos esta composición de las MNVC veremos entonces que no existe una bala mágica que pueda por si sola inhibir todos los elementos de las MNVC. Tratamiento combinado para DMRE l objetivo de una terapia combinada es el de buscar sinergismos. Estos se pueden medir en mejores resultados visuales, menos retratamientos, menor costo o menos complicaciones. Para comprender mejor la utilidad de la terapia combinada tenemos que partir de que las MNVC son entidades biológicas dinámicas que se componen de elementos vasculares y extravasculares. Además los elementos vasculares pueden formar vasos inmaduros o maduros.14 Los vasos más inmaduros parecen depender más del VEGF que los vasos más maduros.15 Parece ser que el factor de creci- E :2: PAN-AMERICA factor de crecimiento endotelial vascular (vascular endothelial growth factor o VEGF) como un factor importante en la patogénesis de las mismas.12 A finales del 2004 se introdujo el primer antiVEGF, pegaptanib sodio (Macugen, Eyetech) en el tratamiento de las MNVC secundarias a la DMRE.13 El pegaptanib sodio es un aptámero que actúa como un anticuerpo inactivando la isoforma VEGF 165. Desafortunadamente los resultados visuales reportados en el estudio VISION seguían siendo de orden paliativo. La gran mayoría de los pacientes seguían perdiendo visión a pesar del tratamiento.13 Más recientemente el panorama ha cambiado con los resultados reportados del ranibizumab en los estudios ANCHOR y MARINA. El ranibizumab es un anticuerpo monoclonal que inactiva todas las isoformas del VEGF. Por primera vez podemos ofrecerle a un número significativo de nuestros pacientes (entre 30% y 40%) una mejoría visual significativa. A pesar de estos avances, existen ciertas interrogantes con respecto al tratamiento anti-VEGF. No sabemos cuando podemos parar el tratamiento ya que el protocolo de los estudios MARINA y ANCHOR contemplaban inyecciones intravítreas mensuales de ranibizumab. Hay evidencia anecdótica que describe el regreso de la MNVC una vez que se suspende el tratamiento. En el estudio VISION con pegaptanib el protocolo era de inyecciones intravítreas cada 6 semanas. En este mismo estudio se observó que si se dejaba de inyectar al paciente, este sufría una pérdida visual.13 Además nos queda el reto de cómo mejorar la visión al restante 60% y 70% de los pacientes que no responden al tratamiento. Consideramos al igual que otros que la terapia combinada de verteporfin con un anti-VEGF podría ser una buena opción ante estos retos.14 La TFD con verteporfin produce un buen efecto trombótico en los vasos maduros. El problema es que la TFD en si causa angiogénesis e inflamación en la zona tratada.16 Por lo tanto no es de extrañarse que la monoterapia con TFD cause una pérdida visual progresiva caracterizada por múltiples recidivas y necesidad de retratamientos.17 En el 2003, Spaide y colaboradores18,19 introdujeron el concepto de terapia combinada al reunir las propiedades angioestáticas, anti-inflamatorias y anti-permeabilizantes de la triamcinolona intravítrea (TIV) con el gran poder vaso-oclusivo de la TFD sobre las MNVC. Este estudio piloto reportó una serie de casos de 26 pacientes a REVIEW Octubre 2006 R E F E R E N C I A S quienes se les realizó TFD seguida inmediatamente por una inyección de 4 mg de TIV para el tratamiento de MNVC secundarias a DMRE de cualquier tipo. Trece de los pacientes habían recibido TFD previamente. El grupo sin TFD previa logró una mejoría visual de 2.4 y 2.5 líneas a los 6 y 12 meses respectivamente. En este grupo un paciente requirió retratamiento a los 6 meses y la taza de retratamientos a los 12 meses fue de 1.24. En el grupo con TFD previa la agudeza visual mejoró en 0.1 líneas a los 6 meses y 0.44 líneas a los 12 meses. La taza de retratamiento en este grupo fue de 0 y 1.2 retratamientos a los 6 y 12 meses respectivamente. Augustin y colaboradores20 utilizaron terapia combinada con 25 mg de TIV para el tratamiento de 184 pacientes con MNVC secundarias a DMRE de cualquier tipo. Ellos reportaron una ganancia visual promedio de 1.22 líneas luego de un seguimiento promedio de 38.8 meses. El 83.69% de sus pacientes sólo requirió de un tratamiento. La TIV no es completamente benigna ya que puede producir una progresión de catarata hasta en un 57% de los ojos fáquicos, requiriendo cirugía hasta en un 29% de los casos21. Jonas publicó que hasta un 41.2% de los pacientes tratados con TIV pueden tener un aumento de la presión intraocular mayor a 21 mm Hg22. La endoftalmitis y el desprendimiento de retina son riesgos agregados a la aplicación de un medicamento intravítreo.15 Con el advenimiento de los tratamientos anti-VEGF es lógico esperar combinaciones que los incluyan. El FOCUS Study es un estudio de fase 1-2 que investiga el uso de TFD con verteporfin y el ranibizumab contra la TFD sola. Al cabo de un año, los pacientes tratados con verteporfin perdieron un promedio de 8.2 letras, mientras que los pacientes que recibieron la combinación de ranibizumab y verteporfin mejoraron 4.9 letras en promedio. El PROTECT Study es otro protocolo similar que estudia la combinación de TFD con ranibizumab comparada a la TFD. Otro estudio de fase II comparó a la TFD con verteporfin combinada al Macugen contra la monoterapia con TFD. Este fue un estudio pequeño que reportó que el 60% de los 10 ojos tratados con la combinación tuvieron una ganancia de más de 3 líneas de visión. En cambio únicamente el 25% de los 8 ojos tratados con monoterapia con Macugen tuvieron esa ganancia visual.23 A mediano y largo plazo, conforme se vayan elucidando más los mecanismos moleculares de la angiogénesis en las MNVC, habrán más fármacos selectivos. Ya se han iniciado estudios con inhibidores de la quinasa de la tirosina, inhibidores de las integrinas, inhibidores al PDGF, inhibidores del citoesqueleto celular como la escualamina, el factor derivado del epitelio pigmentario (pigment derived growth factor o PEDF) e inhibidores a la proteolisis de la membrana basal como el acetato de anecortave. Pero en este momento y a corto plazo considerando lo que tenemos a mano, lo que deberiamos de investigar es la combinación de la TFD con verteporfin con algún anti-VEGF. Al igual que el cancer el tratamiento de las MNVC dependerá de un tratamiento combinado. 1.Bressler NM, Bressler SB, Fine SL. Age-related macular degeneration. Surv Ophthalmol 1988;32(6):375-413. 2.Klein R, Klein BE, Linton KL. Prevalence of age-related maculopathy. The Beaver Dam Eye Study. Ophthalmology 1992;99(6):933-43. 3.Mitchell P, Smith W, Attebo K, Wang JJ. Prevalence of age-related maculopathy in Australia. The Blue Mountains Eye Study. Ophthalmology 1995;102(10):1450-60. 4.Vingerling JR, Hofman A, Grobbee DE, de Jong PT. Age-related macular degeneration and smoking. The Rotterdam Study. Arch Ophthalmol 1996;114(10):1193-6. 5.Ferris FL, 3rd, Fine SL, Hyman L. Age-related macular degeneration and blindness due to neovascular maculopathy. Arch Ophthalmol 1984;102(11):1640-2. 6.Argon laser photocoagulation for neovascular maculopathy. Five-year results from randomized clinical trials. Macular Photocoagulation Study Group. Arch Ophthalmol 1991;109(8):1109-14. 7.Laser photocoagulation of subfoveal neovascular lesions in age-related macular degeneration. Results of a randomized clinical trial. Macular Photocoagulation Study Group. Arch Ophthalmol 1991;109(9):1220-31. 8.Photodynamic therapy of subfoveal choroidal neovascularization in agerelated macular degeneration with verteporfin: one-year results of 2 randomized clinical trials--TAP report. Treatment of age-related macular degeneration with photodynamic therapy (TAP) Study Group. Arch Ophthalmol 1999;117(10):1329-45. 9.Adamis AP, Aiello LP, D'Amato RA. Angiogenesis and ophthalmic disease. Angiogenesis 1999;3(1):9-14. 10.Bressler NM. Photodynamic therapy of subfoveal choroidal neovascularization in age-related macular degeneration with verteporfin: two-year results of 2 randomized clinical trials-tap report 2. Arch Ophthalmol 2001;119(2):198-207. 11.Verteporfin therapy of subfoveal choroidal neovascularization in age-related macular degeneration: two-year results of a randomized clinical trial including lesions with occult with no classic choroidal neovascularization-verteporfin in photodynamic therapy report 2. Am J Ophthalmol 2001;131(5):541-60. 12.Adamis AP, Shima DT. The role of vascular endothelial growth factor in ocular health and disease. Retina 2005;25(2):111-8. 13.Gragoudas ES, Adamis AP, Cunningham ET, Jr., et al. Pegaptanib for neovascular age-related macular degeneration. N Engl J Med 2004;351(27):2805-16. 14.Spaide RF. Rationale for combination therapies for choroidal neovascularization. Am J Ophthalmol 2006;141(1):149-56. 15.Jo N, Mailhos C, Ju M, et al. Inhibition of platelet-derived growth factor B signaling enhances the efficacy of anti-vascular endothelial growth factor therapy in multiple models of ocular neovascularization. Am J Pathol 2006;168(6):2036-53. 16.Schmidt-Erfurth U, Schlotzer-Schrehard U, Cursiefen C, et al. Influence of photodynamic therapy on expression of vascular endothelial growth factor (VEGF), VEGF receptor 3, and pigment epithelium-derived factor. Invest Ophthalmol Vis Sci 2003;44(10):4473-80. 17.Sharma S, Brown GC, Brown MM, et al. The cost-effectiveness of photodynamic therapy for fellow eyes with subfoveal choroidal neovascularization secondary to age-related macular degeneration. Ophthalmology 2001;108(11):2051-9. 18.Spaide RF, Sorenson J, Maranan L. Combined photodynamic therapy with verteporfin and intravitreal triamcinolone acetonide for choroidal neovascularization. Ophthalmology 2003;110(8):1517-25. 19.Spaide RF, Sorenson J, Maranan L. Photodynamic therapy with verteporfin combined with intravitreal injection of triamcinolone acetonide for choroidal neovascularization. Ophthalmology 2005;112(2):301-4. 20.Augustin AJ, Schmidt-Erfurth U. Verteporfin therapy combined with intravitreal triamcinolone in all types of choroidal neovascularization due to age-related macular degeneration. Ophthalmology 2006;113(1):14-22. 21.Zarbin M. Should corticosteroids be considered as part of the standard care with photodynamic therapy? Arch Ophthalmol 2006;124(4):563-71. 22.Jonas JB, Kreissig I, Degenring R. Intravitreal triamcinolone acetonide for treatment of intraocular proliferative, exudative, and neovascular diseases. 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A informação deve ser compartilhada por todos, de forma crítica e responsável. Novas tecnologias médicas devem se mostrar não somente eficazes clinicamente, mas resultarem em benefícios concretos aos pacientes. A presbiopia pós-operatória continua sendo um grande desafio, que começa a ser vencido com novas tecnologias de lentes intra-oculares recentemente colocadas no mercado. No entanto, a enorme variedade de modelos e princípios de ação nos fazem questionar se já dispomos da solução ideal ou se ainda estamos engatinhando nesse sentido. Lentes multifocais, bifocais e acomodativas foram desenvolvidas para proporcionar visão útil para longe e perto, sem necessidade do uso de óculos ou lentes de contato. Diversos estudos1-6 mostram bons resultados com estas lentes, com diferença entre os designs e modelos. Lentes bifocais e multifocais podem causar perda da sensibilidade ao contraste, glare e halos, com conseqüente perda da qualidade de imagem e performance visual. Desta forma, alguns pacientes (por ex: pilotos profissionais) não são bons candidatos ao seu implante. Lentes acomodativas mostram resultados variáveis e até certo ponto inconsistentes em diferentes estudos. Nosso objetivo é proporcionar uma visão geral das lentes intra-oculares recentemente lançadas no mercado brasileiro. Lentes Acomodativas possibilidade de usar uma lente monofocal com habilidade acomodativa resultaria em uma melhor qualidade de imagem com menor potencial de fenômenos ópticos, comparando com lentes multifocais. Lentes com a capacidade de se mover dentro do olho, desta forma aumentando seu poder efetivo, são teoricamente capazes de restabelecer a acomodação em pacientes pseudofácicos. A Crystalens (Eyeonics) é uma lente monofocal de silicone com design específico para promover seu movimento intraocular. Mostra resultados animadores em alguns estudos5, proporcionando excelente visão intermediária e à distância, com visão útil para perto (J3 - correspondente ao tamanho da letra achada em jornais impressos) na maioria dos casos. Os pacientes apresentam menor dependência de óculos nas atividades cotidianas, e não é comum a queixa de distorção óptica de qualquer espécie. Na experiência dos autores, é uma opção excelente para pacientes com necessidade maior de visão à distância e intermediária. Vale lembrar que a visão intermediária é extremamente im- A :4: PAN-AMERICA portante hoje em dia, já que um número crescente de pessoas passa boa parte do tempo em frente ao computador, afetando diretamente seu desempenho profissional. No entanto, a capacidade acomodativa é variável entre pacientes. A fibrose capsular, que limita o movimento desta lente, é variável entre indivíduos e não pode ser prevista no pré-operatório. Além disso, quanto menor o poder dióptrico da mesma menor a amplitude de acomodação potencial, o que limita seu uso em altas miopias. Estudos recentes sugerem que a capacidade em restabelecer visão útil para perto é em grande parte resultado de fatores pseudoacomodativos, como aumento da profundidade de foco e aberrações ópticas induzidas pelo design da lente. A seleção do paciente deve ser feita com extrema cautela. Expectativas devem ser analisadas e discutidas. Astigmatismo corneano e erro biométrico podem limitar o sucesso da cirurgia. Todos os potenciais riscos e benefícios devem ser exaustivamente discutidos. Uma interessante característica desta lente é a progressiva melhora na visão de perto com o tempo. Entender melhor o complexo mecanismo de ação desta lente certamente trará grandes avanços na tecnologia de implantes acomodativos. Lentes Multifocais interesse em lentes multifocais vem crescendo e ganhando popularidade entre os cirurgiões no mundo inteiro, sendo consideradas como primeira opção para implante em facectomia com fins refrativos. Os modelos disponíveis no mercado brasileiro apresentam tecnologia refrativa (Rezoom -AMO) ou difrativa (ReSTOR - Alcon e Tecnis - AMO), ambas com bons resultados e altos índices de satisfação em diversos estudos1, 4, 6. Para melhor resultado, a cirurgia deve ser perfeita, com cuidadosa centralização do implante no saco capsular. O cálculo do poder dióptrico do implante também é de fundamental importância. Os pacientes apresentam definitivamente menor dependência de óculos, porém existe uma maior chance de apresentarem glare e halos, ainda que bem tolerados na maioria dos casos. Em uma das maiores revisões sobre lentes multifocais, O REVIEW Octubre 2006 Leyland & Zinicola4 não conseguiram demonstrar uma maior satisfação dos pacientes com o implante destas lentes, quando comparados com lentes monofocais. Devemos ressaltar que existem diferenças culturais e sociais nos diversos locais em que foram feitos os estudos, e nenhum feito no Brasil com grande número de pacientes. Lentes multifocais apresentam 2 ou mais focos ópticos, ou seja, pelo menos dois poderes dióptricos co-axiais geralmente separados por um intervalo de 4 dioptrias (correspondente a 3 dioptrias no plano do óculos)1. Na retina, os dois poderes dióptricos produzem duas imagens superpostas do mesmo objeto, uma em perfeito foco e outra borrada pela aberração (defocus) de 3 dioptrias. Esta menor qualidade óptica, quando comparada aos implantes monofocais, se manifesta na perda da sensibilidade ao contraste observada nesses pacientes. A lente ReSTOR, produzida na plataforma peça única de acrílico hidrofóbico, utiliza anéis difrativos apodizados nos 3.5 milímetros centrais de sua óptica. Seu desenho inovador, com anéis concêntricos de alturas diferentes, minimiza a ocorrência de halos e glare com estudos mostrando excelente visão para perto, média e longa distância em situações de alta luminosidade. Na experiência dos autores, esta lente apresenta excelentes resultados na visão de perto e longe, com poucas queixas em relação a fenômenos visuais. No entanto, a visão intermediária é insatisfatória para alguns pacientes, necessitando correção para certas tarefas. O perfil do paciente deve ser analisado pelo médico, para evitar insatisfação com o resultado final. Em geral, pacientes míopes são os mais exigentes. A lente Rezoom apresenta anéis concêntricos refrativos, modificados a partir de resultados prévios com a lente Array (AMO) para minimizar a ocorrência de fenômenos visuais. Apresenta excelentes resultados referentes à visão à distância e intermediária. Para perto, porém, a maioria dos pacientes necessita de correção. Existem boas evidências de que o implante de lentes multifocais melhora a visão de perto sem maiores efeitos adversos na acuidade visual à distância. A independência do uso de óculos é consideravelmente maior quando comparado ao implante de lentes monofocais. Cada paciente deve ser capaz de escolher se a melhora da visão não corrigida para perto é razão suficientemente forte para uma provável menor sensibilidade ao contraste e uma possível experiência com halos4. Como explorado nesse texto, existem diferentes performances entre as lentes, não havendo uma que possa ser considerada a melhor para todas as situações. A evolução técnica e tecnológica, em todos os aspectos da cirurgia de catarata, certamente continuará em ritmo acelerado. É dever de todo profissional manter-se informado para oferecer maior qualidade no atendimento médico. O julgamento do uso ou não de determinado produto deve partir do médico, sem a interferência de forças externas ou alheias. A informação e o conhecimento científicos, aliados ao exercício ético da profissão, são os principais aliados dos oftalmologistas. R E F E R E N C I A S 1.Bellucci R. Multifocal intraocular lenses. Curr Opin Ophthalmol 2005;16:33-7. 2.Dick HB. Accommodative intraocular lenses: current status. Curr Opin Ophthalmol 2005;16:8-26. 3.Doane JF. Accommodating intraocular lenses. Curr Opin Ophthalmol 2004;15:16-21. 4.Leyland M, Zinicola E. Multifocal versus monofocal intraocular lenses in cataract surgery: a systematic review. Ophthalmology 2003;110:1789-98. 5.Macsai MS, Padnick-Silver L, Fontes BM. Visual outcomes after accommodating intraocular lens implantation. Journal of Cataract and Refractive Surgery 2006;32. 6.Olson RJ, Werner L, Mamalis N, Cionni R. New intraocular lens technology. Am J Ophthalmol 2005;140:709-16. PAN-AMERICA :5: CLINICAL SCIENCES Octubre 2006 Alternative Indications For Goniotomy In Pediatric Glaucoma Alejandra A. Valenzuela, MD, Gordon R. Douglas, MD, FRCPS(C). Department of Ophthalmology University of British Columbia Vancouver, Canada Proprietary interest statement The authors have no proprietary interests in any of the products mentioned in this paper. ABSTRACT Purpose. To evaluate the safety and efficacy of goniotomy as a first-line surgery in cases of open angle pediatric glaucoma, other than primary congenital, in which medical therapy had failed or had been judged to be not advisable. Methods. A non-comparative retrospective chart review of a series of goniotomies performed in children with refractory secondary glaucoma. Success was defined as an intraocular pressure (IOP) less or equal to 22 mmHg, without need for further surgical intervention with or without additional medical therapy. Results. 12 patients (16 eyes) with underlying diagnoses of Sturge Weber Syndrome, uveitis, infantile and traumatic glaucoma were included. The mean age at the first goniotomy was 5.2-year-old, with a mean follow-up of 35 months. Surgical success was achieved in 9 eyes (56%) with a mean IOP of 16.3+4.61mmHg (reduction of 16 mmHg, p<0.001). Complications included different degrees of hyphema and a small iris prolapse. Discussion. Although traditionally limited to management of congenital glaucoma, goniotomy is a relatively gentle and potentially useful first-line surgical procedure for children with refractory glaucoma different than congenital. :6: PAN-AMERICA Corresponding author Dr. Alejandra A. Valenzuela Butterfield Street Herston Road QLD 4029 Australia Email: [email protected] INTRODUCTION Management options for children with refractory glaucomas are limited due to undesirable secondary effects of topical or systemic medications.1-2 Although modulated trabeculectomies and tube implants can be used, the survival of these are limited by the intense fibroblastic response to surgery.3-7 On the other hand, cycloablative procedures produce significant destruction of the angle and surrounding normal tissues included in the treatment. Therefore, the possibility of conjunctivalsparing angle surgery is therefore attractive in such cases, and less- invasive alternatives such as goniotomy should be considered as initial options.8-12 Goniotomy has been used for many years in primary congenital glaucoma with great success; however, its use in other types of pediatric glaucoma is not as well documented.8-15 We aimed to evaluate the safety and efficacy of goniotomy as a first-line surgery in cases of open angle pediatric glaucoma, other than primary congenital, in which medical therapy had failed or had been judged to be not advisable. Material and Methods A non-comparative retrospective chart review of the intraocular pressure changes presenting in a series of 12 patients that underwent goniotomy as the first surgical procedure to control refractory open angle secondary glaucoma. Maximal medical therapy was adjusted according to each patient considering concurrent systemic illness that may contraindicate their use. Success was defined as an intraocular pressure (IOP) less or equal to 22 mmHg (< 22mmHg), without need for further surgical intervention with or without additional medical therapy. Results A total of 22 goniotomies were performed on 12 patients (16 eyes) whose underlying diagnoses were: Sturge-Weber Syndrome (9 eyes), open angle infantile glaucoma (OAIG, 4 eyes), Juvenile Rheumatoid Arthritis uveitis (2 eyes) and trauma (1 eye) (Table 1). In two cases we decide to performed a goniotomy, in spite the fact the pre-operative intraocular pressure (IOP) was only 22mmHg; the first of these cases, was a child with bilateral inflammatory glaucoma, which responded well to goniotomy in the contralateral eye and required 4 different antiglaucoma medications in order to control the IOP in fellow eye. The second case presented significant increase in the corneal diameter, subtle central corneal haze and an increased disc/cup ratio of 0.6 with thinning in the inferior rim. The mean age at the first surgery was 5.2 years (range 6 months - 11 years) with a mean follow up of 35 months (minimum of 6 months or until surgical failure - maximum 9 years). The mean preoperative IOP was 35.44 + 10.11 mmHg on a mean of 2 anti-glaucoma medications (Table 1). Surgical success (at last follow-up) was achieved in 9 eyes (56%) with a mean postoperative IOP of 16.3 + 4.61 mmHg (reduction of 16 mmHg p<0.001) (Figure 2). In 8 of these 9 cases, this was achieved with a single procedure and half of these eyes required only one glaucoma medication to maintain IOP control (Table 1). Postoperatively, hyphema was presented in 3 eyes. Two of them were transient and recovered within one week. The last case presented a total hyphema that required an urgent trabeculectomy to control the IOP. One patient developed a small iris prolapse CLINICAL SCIENCES Octubre 2006 Eye 1 R 11 JRA 20 10 4 1 1 YES 6 1 L 11 JRA 22 14 4 1 1 YES 11 2 L 3 OAIG 42 22 1 1 1 YES 24 2 R 3 OAIG 38 18 1 0 1 YES 24 3 L 1 OAIG 38 18 0 0 1 YES 108 4 L 0.5 OAIG 22 9 0 0 1 YES 24 5 L 1 SWS 26 17 3 0 1 YES 108 6 L 11 SWS 35 17 1 0 3 YES 36 7 R 6 SWS 28 22 3 1 1 YES 8 Table 1: 7 L 6 SWS 28 32 3 3 2 NO 6 Patients Characteristics 8 R 1 SWS 52 27 3 3 2 NO 64 11 SWS 50 30 2 2 3 NO 48 50 4 3 1 NO 64 L= left eye, R= right eye; SWS= Sturge-Weber Syndrome, JRA= Juvenile Rheumatoid Arthritis uveitis, OAIG= Open Angle Infantile Glaucoma; IOP= Intraocular Pressure; Gonio= Goniotomies; f/u= Follow up IOP Patient Age Diagnosis (years) IOP Medications Number Success f/u Gonio (months) Pre Post Pre Post 9 R 10 L 8 SWS 50 11 L 0.7 SWS 23 29 0 1 1 NO 18 11 R 0.7 SWS 32 40 2 1 2 NO 24 12 R 9 Trauma 41 32 1 1 1 NO 10 55 50 45 40 35 30 25 20 15 10 5 0 pre-op post-op 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Eyes 11 12 13 14 15 16 Figure 2: Effect of Goniotomy in Intraocular Pressure Effect of goniotomy in intraocular pressure (IOP). Pre and post-operative IOP are plotted in a bar graph (y axis) for each eye (x axis). Successful eyes (1-9) had post-operative IOP < 22mmHg; failure cases, eyes 10 to16, ended with IOP > 22mmHg. Patient 13 did not change the IOP with the procedure, and cases 10 -14 and 15 ended with post IOP higher than the pre-operatively values. trough the internal aspect of the wound that did not required further surgical intervention. In the cases that goniotomy failed 6 of the 7 eyes presented Sturge-Weber Syndrome, as the underlying cause of glaucoma and 6 of them required a valve implantation for IOP control. DISCUSSION Goniotomy has traditionally been used for the management of primary congenital glaucoma, even though the mechanism has not been established8. Its application has been extended to the treatment of inflammatory1, aphakic and SturgeWeber glaucoma.8-15 This procedure is similar to classic Barkan goniotomy8 except that the trabecular meshwork is scrape rather than incised from the scleral sulcus with the 25 gauge needle15 creating a direct communication between the Schlemm canal and the anterior chamber, by-passing the presumed trabecular obstruction and increasing the outflow facility10-11. For this technique to succeed requires a functional Schlemm canal, outer collector channels and drainage venous system, therefore poor results might be related to damage of any or all of those structures. The results of this small retrospective study suggest that goniotomy is a reasonable first-line surgical consideration for more than primary infantile glaucoma. This technique is relative gentle and presents a relative low rate of complications. Finally, goniotomy offers the advantage of not damaging conjunctival tissue, safeguarding the outcome of later filtering or valve surgery if this becomes necessary. R E F E R E N C E S 1.Spaeth GL, Bethesda M. Potassium, acetazolamide, and intraocular pressure. Arch Ophthalmol 1967;78(5):578-82. 2.Boger WPI, Walton DS. Timolol in uncontrolled childhood glaucomas. Ophthalmology 1981;88:253-58 3.Muñoz M, Tomey KF, Traverso C et al. Clinical experience with the Molteno implant in advance infantile glaucoma. J Pediatric Ophthalmol Strabismus 1991 Mar-April;28(2):68-72 4.Beck AD, Wilson WR, Lynch MG et al. Noe R. Trabeculectomy with adjunctive Mitomycin-C in pediatric glaucoma. Am J Ophthalmol 1998 Nov;126(5):64857 5.Englert JA, Freedman SF, Cox TA. The Ahmed valve in refractory pediatric glaucoma. Am J Ophthalmol 1990 Jan; 127(1):34-42 6.Topouzis F, Coleman AL, Choplin N et al. Follow-up of the original cohort with the Ahmed glaucoma valve implantation. AM J Ophthalmol 1999 Aug;128(2):198-204. 7.Iwach AG, Hoskins HD Jr, Hetherington J Jr et al. Analysis of surgical and medical management of glaucoma in Sturge-Weber Syndrome. Ophthalmology 1990 Jul;97(7):904-9. 8.Barkan O. Goniotomy for the relief of congenital glaucoma. Br J Ophthalmol. 1948;32:701-28 9.Haas J. Goniotomy in aphakia. The second report on cataract surgery. Proceeding of the Second Biennial Cataract Surgical Congress Miami, FL:Educational Press, 1971. 10.Herscher J, Davis B. Modified goniotomy for inflammatory glaucoma. Histologic evidence for the mechanism of pressure reduction. Arch Ophthalmol 1980 April; 98:684-7 11.Kanski JJ, McAllister JA. Trabeculodialysis for inflammatory glaucoma in children and young adults. Ophthalmology 1985 Jul;92(7):927-30 12.Olsen KE, Huang AS, Wright MM. The efficacy of goniotomy /trabeculectomy in early-onset glaucoma associated with Sturge-Weber Syndrome. JAAPOS 1998 Dec;2(6):365-8 13.Freedman SF, Rodrigues-Rosa RE, Rojas MC et al. Goniotomy for Glaucoma secondary to chronic childhood uveitis. Am J Ophthalmol 2002 May:133(5):617-21 14.Broughton WL, Parks MM. An analysis of treatment of congenital glaucoma by goniotomy. Am J Ophthalmol 1981 May:91(5):556-72 15.Hodapp E, Heuer DK. A simple technique for goniotomy. Am J Ophthalmol 1996 Oct; 102(4):537 PAN-AMERICA :7: CASE REPORTS Octubre 2006 Retained intra-orbital wood stick C h u n C h e n g L i n Y a n g 1 , M.D. John McCann 2, M.D., Ph.D. Richard L. Anderson 2, M.D., F.A.C.S. Institutional Affiliations: 1: Unidad Nacional de Oftalmología, Ophthalmology Department, Hospital Roosevelt de Guatemala, Universidad de San Carlos de Guatemala, Guatemala City, Guatemala 2: Center for Facial Appearances, Salt Lake City, Utah, United States ABSTRACT Purpose. To report an unusual case of a retained intra-orbital wooden foreign body in a 6-year-old child. Methods. Case Report. Results. A fragment of wood stick was removed from the left orbit of a 6year-old with history of proptosis and vision diminishment after probable penetrating eyelid trauma 45 days before the consult. Discussion. Intra-orbital foreign body (IOF) has to be managed with thorough clinical history and ophthalmic examination complemented with broad spectrum systemic antibiotics and adequate imaging studies for a guided surgical intervention. More importantly, organic IOF has to be highly suspected by the clinician when managing pediatric ocular trauma. Corresponding author Chun Cheng Lin, M.D., M.Sc. 8tava Calle 5-64 Zona 11 Guatemala City Guatemala, 01007 Email: [email protected] [email protected] Financial Support: None Propriety interest statement: None of the authors have any financial interest on the subject INTRODUCTION A wide range of unusual orbital foreign bodies have been reported in the literature from developed nations.1,2,3,4,6,7 There are few reports from developing nations regarding this entity. In Guatemala where more than 60% its population is a poorly educated indigenous group which communicates in one of the 24 officially recognized Amerindian language (Indigenous Mayan language), the diagnosis of intra-orbital foreign body (IOF) in pediatric ocular trauma has to be highly suspected by the ophthalmologist when managing such cases. We report a case of a 6 yearold with a retained wooden stick fragment in the orbit for 45 days. The case illustrates the challenge that ophthalmologists from a developing Guatemala face daily and the importance of bearing the high suspicion of organic IOF when managing ocular trauma in the pediatric group. Case Report 6-year-old male patient was referred from a regional hospital to the emergency room of our center with left eye proptosis and decrease in vision of that eye. Patient's mother reported a history of non-witnessed left eye lid trauma of the child when playing with some other two children of the village, 45 days before the consult. The child complained of left ocular pain and visual impairment of that eye. Two weeks before seeking medical help, the mother started noticing left eye proptosis. This final finding and the constant pain of the child forced the mother to seek medical attention at the emergency room of Petén regional hospital in north Guatemala. On examination, the patient was neurologically intact. The visual acuity was A :8: PAN-AMERICA 20/20 OD and no light perception OS. Right globe was with in normal limits. OS presented an infero-temporal displacement of the globe, and full restriction for elevation and depression. The upper lid was mildly edematous, and it presented a lesion resembling a scar, 15mm in extension, near the external one third of the lid. Moderate chemosis was documented and mild diffused corneal staining. Patient also presented severe afferent papillary defect. Indirect funduscopy revealed a pale optic nerve with healthy looking retina. The child was admitted to our service for systemic evaluation by the pediatric department and completion of imagining studies. Intravenous Oxacilline and ceftriaxone were started on the patient. Lateral and anteroposterior projections of cranial X-ray and CT scan were performed. The first study revealed no foreign body. On CT, a radio opaque image resembling an IOF was shown above the superior rectus muscle; however, the image was not conclusive. It only raised a high suspicion of an organic intra-orbital foreign body. The patient underwent surgical exploration. During surgery, a fragment of a wood stick was found in the left orbit and removed. DISCUSSION Intra-orbital foreign bodies (IOFs) are truly a clinical and surgical challenge in our everyday practice. Based on the composition, these can be classified as organic or inorganic.1-4 Depending on the location, the extraocular muscle impairment, and the optic nerve function that IOFs may cause, the inorganic group tends to behave in a benign manner. However, when metals such as iron, copper, and lead are involved, aggressive surgical intervention is required.1-4 CASE REPORTS Octubre 2006 Organic IOFs, especially wood and cotton tend to cause recurrent inflammation and infection of orbital structures. The risks of extrusion and migration of these is higher, and also the high possibility of infection spreading to the central nervous system is latent.1, 2, 6 An important aspect in the management of these cases is the high suspicion of IOFs; therefore, it is critical a detailed clinical history and a meticulous ophthalmologic exam. Special emphasis should be stressed on these key aspects when dealing with pediatric patients, since most of the traumas in this group occur unwitnessed by an adult.6 Imaging studies are requisites to manage patients with intra-orbital foreign body. Plain X-ray is helpful only when the foreign body involved is metal. For organic IOFs, this study is not helpful. CT scan is the gold standard for studying inorganic intra-orbital foreign bodies, and MIR is the optimal choice for viewing organic materials.1,2,3,4,5 Even with MRI, small organic IOFs could be missed; therefore, the clinician has to maintain the high suspicion of IOFs of this category. Besides completing image studies, it is necessary to initiate broad spectrum systemic antibiotic, covering anaerobes, and also antifungal therapy if vegetal intraorbital foreign body is suspected. Antitetanus profilaxis must be considered.2, 6 Surgical intervention is mandatory for inorganic IOFs when these are anterior or when these are metals such as iron, copper, and lead.2,4 Indications for organic IOFs removal are when ocular movement is compromised, or optic nerve is being compressed by the effects of the intra-orbital foreign body, or if the organic intra-orbital foreign body origin is vegetal.2,3,4,6 In summary, the management of IOFs is complex, and has to be in an orderly fashion. It starts with both a thorough clinical history and ophthalmic examination, complemented with broad spectrum systemic antibiotics and adequate imaging studies for a guided surgical intervention. More importantly, organic IOF has to be highly suspected by the clinician when managing ocular trauma, especially in the pediatric group. Although a meticulous clinical history was intended, we faced communication problems with the patient's mother. We were only able to complete a thorough ophthalmic exam complimented with CT scan. The high suspicion of an organic intra-orbital foreign body by the clinician was the key point that led to the guided surgical intervention, as illustrated in our case. Figure 4: Extraction of intra-orbital wooden foreign body, a fragment of wooden stick Figure 1: Lesion resembling scar in upper left lid Figure 5: Wooden intra-orbital foreign body R E F E R E N C E S Figure 2: CT scan, axial projection, showing radio-opaque image highly suggestive of intra-orbital wooden foreign body Figure 3: CT scan, coronal projection, showing radio-opaque image above superior rectus musle, highly suggestive of intra-orbital wooden foreign body 1.Bullock JD, Warwar RE, Bartley GB, et al. Unusual orbital foreign bodies. Ophthalmic Plast Reconstr Surg 1999; 15:44-51. 2.Fulcher TP, McNab AA, Sullivan TJ. Clinical features and management of intraorbital foreign bodies. Ophthalmology 2002; 109:494-500. 3.Finkelstein M, Legmann A, Rubin PAD. Projectile metallic foreign bodies in the orbit: a retrospective study of epidemiologic factors, management, and outcomes. Ophthalmology 1997; 104:96-103. 4.Ho VH, Wilson MW, Fleming JC, et al. Retained intraorbital metallic foreign bodies. Ophthal Plast Reonstr Surg 2004; 20:232-6. 5.Ho VT, McGuckin J, Smergel E. Intraorbital wooden foreign body: CT and MRI appearance. AJNR 1996; 17:134-136. 6.Liu D, Al Shail E. Retained orbital wooden foreign body. Ophthalmology 2002; 109:393-399. 7.Nasr AM, Barret G, Fleming JC. Penetrating orbital injury with organic foreign body. Ophthalmology 1999; 106: 523-532. PAN-AMERICA :9: CASE REPORTS Octubre 2006 Penfigóide Cicatricial-Relato De Dois Casos D a n i e l d e C a r v a l h o F r i e d m a n 1 , M.D. J o ã o L u i z P a c i n i C o s t a 2 , M.D. R o s i c l e r R o c h a A i z a A l v a r e z 3 , M.D. H o r á c i o F r i e d m a n 4 , M.D. F a b í o l a D u q u e 5 , M.D. Trabalho realizado no Instituto de Saúde de Olhos Brasília (ISOB) e na Faculdade de Medicina da Universidade de Brasília (UnB): 1 Residente do 20 ano de Oftalmologia do ISOB 2 Preceptor da residência médica do ISOB 3 Professora adjunta do Serviço de Dermatologia da Faculdade de Medicina da UnB 4 Professor titular do Departamento de Patologia da Faculdade de Medicina da UnB ABSTRACT The authors report two cases of cicatricial pemphigoid and describe the nature of the cutaneous, oral and ocular lesions, emphasizing the devastating effects of the latter. With regard to the diagnosis, they stress the importance of adequate sampling for direct immunofluorescence reactions. The therapeutic approach is discussed focusing the available tools for the ophthalmologist. Keywords. cicatricial pemphigoid; diagnostic criteria; ophtalmologic aspects; histopathology; direct immunofluorescence reactions. : 10 : PAN-AMERICA Correspondência Daniel de Carvalho Friedman SQSW 104 - J - 403 CEP: 70670-410 Brasília, DF - Brasil ; fone/fax: (61) 3442851; e-mail: [email protected] The authors have no financial interest in the material discussed in this paper. INTRODUÇÃO Penfigóide cicatricial (PC) é uma doença bolhosa crônica de causa imunológica, com predileção por mucosas e evoluindo com cicatrizes1,2,3,4,5,6. A denominação penfigóide de membrana mucosa também tem sido proposta5,6. As lesões decorrem da deposição de autoanticorpos na membrana basal localizada sob o epitélio de revestimento, com conseqüente formação de bolha subepitelial, afluxo de células inflamatórias e fibrose cicatricial2,3,4,6. Enquanto o envolvimento oral é observado em praticamente todos os casos, o ocular e o cutâneo apresentam incidências que variam em cerca de 60% a 80% e de 30% a 40%, respectivamente2,4,6. Descrevese cegueira unilateral em até 20% dos casos2. A primeira manifestação ocular é uma irritação conjuntival crônica com formação de papilas. Essa alteração pode ser uni ou bilateral, sendo acompanhada de sintomas inespecíficos como lacrimejamento, sensação de corpo estranho e ardência. Posteriormente, surgem fibrose subepitelial e retração conjuntival com alteração da arquitetura da carúncula e do fórnix superior ou inferior. Este perde profundidade, originando a chamada "contração essencial da conjuntiva", associada a leve tonalidade violácea e fibrose acinzentada. A observação de vesículas na conjuntiva é rara. Geralmente elas se rompem originando úlceras recobertas por pseudomembranas. A doença apresenta curso progressivo porém pode haver períodos de atividade subaguda com hiperemia subconjuntival e edema. As complicações incluem: olho seco, simbléfaro, anquilo- bléfaro, triquíase, entrópio, lagoftalmo e ceratopatia que pode resultar em cegueira7,8. Em 1992, foi proposta a seguinte classificação para o PC, conhecida como classificação de Foster9: Estágio I conjuntivite crônica com fibrose sub-epitelial; Estágio II encurtamento do fundo do saco inferior em qualquer nível, sem simbléfaro; Estágio III presença de simbléfaro, ceratopatia, neovascularização de córnea, triquíase, distiquíase e alteração do filme lacrimal; Estágio IV anquilobléfaro, queratinização da superfície ocular e perda da motilidade ocular extrínseca. Evidentemente, o freqüente e grave comprometimento do globo ocular torna o PC uma doença mucocutânea com importância única4,5,6. O objetivo deste trabalho é relatar dois casos suspeitos de PC confirmados através de imunofluorescência direta e discutir questões relevantes em relação ao diagnóstico e tratamento. Relato de Casos Caso 1. Paciente de 69 anos, sexo feminino, com queixa de úlceras dolorosas orais há 10 meses, em regiões palatina e gengival, acompanhadas de sensação de ardor e hiperemia de conjuntiva. A paciente apresentava diagnóstico prévio de Doença de Behçet e encontrava-se em uso de cloroquina e deflazacort 150mg/dia. Exibia também úlcera de córnea cicatrizada com neovascularização e simbléfaro temporal inferior correspondendo ao estágio III de Foster (Figura 1). As reações de imunofluorescência direta da mucosa perilesional conjuntival demonstraram depósitos de CASE REPORTS Octubre 2006 Figura 1: Figura 2: Caso 1. Observam-se hiperemia conjuntival, úlcera de córnea cicatrizada com neovascularização e simbléfaro temporal inferior. Caso 1. Reação de imunofluorescência direta demonstrando depósito linear de IgG em região subepitelial da conjuntiva. de IgG e IgA em zona de membrana basal sub-epitelial (Figura 2). As reações foram negativas para C'3 e IgM. Foram prescritos inicialmente 100mg/dia de dapsona, 60mg/dia de prednisona e colírio lubrificante. Em oito meses de acompanhamento, houve melhora parcial da sintomatologia e redução progressiva da dose da prednisona, tendo apresentado episódios de recorrência durante o período de desmame do corticóide. Na última consulta, encontrava-se em uso de 100mg/dia de dapsona e 20mg/dia de prednisona, não tendo retornado posteriormente ao ambulatório. Caso 2. Paciente de 73 anos, sexo feminino, apresentava quadro de bolhas em mucosas conjuntival e jugal há um ano, com fibrose sub-epitelial correspondendo ao estágio I de Foster (Figuras 3 e 4). O estudo histopatológico revelou fendas subepiteliais em conjuntiva e em mucosa oral (Figura 5), além de infiltrado inflamatório mononuclear e exocitose de neutrófilos no epitélio (Figura 6). Uma pesquisa de IgG, IgM, IgA e C'3 por imunofluorescência direta de área ulcerada oral foi negativa. Posteriormente, o estudo de área perilesional detectou IgG disposta de modo linear em zona de membrana basal subepitelial (Figura 7). Foram prescritas inicialmente 60mg/dia de prednisona. A dose foi progressivamente reduzida. Atualmente a paciente encontra-se em uso de 20mg em dias alternados e clinicamente estável. Figura 3: Figura 4: Caso 2. Observa-se hiperemia conjuntival com fibrose sub-epitelial. Caso 2. Mucosa oral com áreas de hiperemia e cicatrizes. Figura 5: Caso 2. Formação de fenda subepitelial. PAS X200. PAN-AMERICA : 11 : CASE REPORTS Octubre 2006 Figura 6: Caso 2. Presença de infiltrado inflamatório mononuclear em região subepitelial e exocitose de neutrófilos no epitélio conjuntival. HE X400. Figura 7: Caso 2. Reação de imunofluorescência direta demonstrando depósito linear de IgG em região subepitelial. DISCUSSÃO PC não é doença comum. Sua incidência está entre 1:12000 e 1:20000 da população por ano6. No Brasil é bem mais raro do que pênfigo foliáceo (PF) ou mesmo pênfigo vulgar (PV)10,11. É possível, porém que o número de casos esteja subestimado visto que o diagnóstico definitivo repousa em dados de histopatologia e de imunofluorescência, exames que têm algum grau de limitação de solicitação em nosso meio devido à maior dificuldade de realização de biópsias de mucosa oral e de : 12 : PAN-AMERICA conjuntiva e à falta de serviços que realizem reações de imunofluorescência. Os pacientes são geralmente idosos 2,4. Alguns autores descrevem discreta tendência à predominância de pacientes de sexo feminino4,6. Os dois casos aqui apresentados enquadram-se nesse perfil epidemiológico. Fatores predisponentes, genéticos ou ambientais, não foram definitivamente reconhecidos. Embora os estudos de correlação com HLA tenham resultados variáveis, aparentemente há um risco aumentado em portadores de HLA-DR4 e - DQw3 (HLA-DQB1*0301)5,6. Nossas duas pacientes retratam bem a mais freqüente apresentação clínica, com lesões orais e de conjuntiva. Esta associação de lesões e a evolução com cicatrizes favorecem o diagnóstico de PC. Várias moléstias podem apresentar as mesmas manifestações do PC, tais como, sarcoidose, tracoma, conjuntivite alérgica, queimaduras químicas, síndrome de Stevens-Johnson, traumas, exposição à radiação, administração tópica de pilocarpina, epinefrina, timolol, ecotiofato e idoxuridina e sistêmica de practolol e Dpenicilamina5,12,13. A cicatrização produzida por fármacos pode cessar ao se suspender a droga ou continuar progredindo13. Portanto, para o diagnóstico diferencial, o exame histopatológico e as reações de imunofluorescência direta são fundamentais 2,3,4,5,6. As biópsias dos presentes casos corroboram o diagnóstico de PC visto que o exame histopatológico de lesões de PC revela usualmente bolha subepidérmica em cuja base há infiltrado inflamatório mononuclear acompanhado por polimorfonucleares. Tecido de granulação e fibrose de tipo cicatricial formam-se em seqüência 2,4,6. A maioria dos pacientes apresenta depósitos de IgG e C3 dirigidos contra antígenos de hemidesmossomas localizados na zona de membrana basal. É importante considerar que a análise histopatológica pode ser feita de lesão bolhosa, mas que a imunofluorescência direta deve ser realizada a partir de área perilesional pois na bolha propriamente dita a reação é freqüentemente negativa aparentemente por destruição dos anticorpos por enzimas liberadas pelos polimorfonucleares5. De fato, em nosso caso de número 2, a primeira biópsia, realizada em lesão, foi negativa. Somente na segunda amostra, perilesional, foi possível demonstrar os anticorpos. É importante considerar que a realização de biópsias de outros sítios mucosos como a cavidade oral e da pele aumenta a freqüência de positividade. É ainda interessante que os anticorpos podem ser demonstrados em pele ou mucosa de áreas aparentemente sadias4. Rivas et al. (2004) e Sanz et al. (2001) demonstraram grande redução do número de células caliciformes na citologia de impressão desde os primeiros estágios do PC14,15. A deficiente produção CASE REPORTS Octubre 2006 de muco poderia contribuir para a diminuição da capacidade de lubrificação da secreção lacrimal nos pacientes com PC 6,14,15. Diante de um caso de doença bolhosa recorrente crônica de mucosa, o diagnóstico de PC deve ser suspeitado particularmente se houver seqüela cicatricial. O PC apresenta vários aspectos em comum com o penfigóide bolhoso (PB) o qual também pode apresentar lesões mucosas. No momento, a distinção baseia-se em dados clínicos, o diagnóstico de PB sendo firmado quando o quadro cutâneo predomina, reservando-se ao PC as formas eminentemente mucosas, particularmente quando associadas a cicatrizes4,6. O curso clínico do PC é variável. Pode ser lento, com discreto processo cicatricial e em sítio limitado. Pode por outro lado ser mais extensa e com cicatrizes mais graves. Sem dúvida, a cegueira é uma das seqüelas mais dramáticas2,4,5,6. De fato, no primeiro consenso internacional sobre PC, os participantes definiram como de "alto risco" os pacientes que apresentam doença em qualquer um dos seguintes sítios: ocular, genital, nasofaríngeo, esofágico e laríngeo. O tratamento depende do grau de severidade e dos locais acometidos, sendo comuns as situações em que a cooperação conjunta de profissionais de várias áreas como oftalmologistas, dermatologistas, otorrinolaringologistas e dentistas, dentre outros, se torna necessária em decorrência de enfermidade multisistêmica5,16. A terapia local inclui lágrimas artificiais, AINH, esteróides e ciclosporina tópica. Lentes de contato siliconadas podem ser usadas com cautela para proteção corneana. O tratamento sistêmico está indicado sempre que houver envolvimento ocular. A dapsona (50 a 200mg/dia) por 12 semanas tem sido empregada com relativo sucesso em casos leves a moderados5,17. Em casos resistentes, de doença severa ou de progressão rápida, torna-se necessária a introdução de corticóide sistêmico (1-1,5mg/kg/dia de prednisona) associado a imunossupressores como ciclofosfamida (1-2mg/kg/dia) ou azatioprina (1-2mg/kg/dia)5,16,17. A prednisona deve ser retirada gradualmente após observação de melhora clínica. A ciclofosfamida deve ser prolongada por até 18 meses. A injeção subconjuntival de mitomicina C mostrou-se efetiva na redução da fibrose da mucosa5. A imunoglobulina intravenosa pode ser útil em casos refratários5,16. A meta terapêutica deve ser a remissão do processo autoimune. O emprego de correções cirúrgicas oculares deve ser avaliado cuidadosamente e somente concretizado após a obtenção de remissão completa visto que o procedimento cirúrgico pode desencadear exacerbação da doença4. R E F E R E N C E S 1.Sampaio SAP, Castro RM, Rivitti EA. Dermatologia Básica. São Paulo: Artes Médicas; 1989. 2.Elder DE. Lever's Histopathology of the skin. Philadelphia: Lippincott Williams & Wilkins; 2005. 3.Weedon D. Skin Pathology. Edinburgh: Churchill Livingstone; 2001. 4.Mutasim DF, Pelc NJ, Anhalt GJ. Cicatricial Pemphigoid. 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Información de Presentación: Los manuscritos deben enviarse electrónicamente al jefe de redacción, Mark J. Mannis, MD a [email protected] o puede enviarse vía correo a: Mark J. Mannis, MD, Department of Ophthalmology University of California, Davis 4860 Y Street, Suite 2400 Sacramento, CA 95817 U.S.A. Formato de Presentación: El siguiente formato debe usarse para las referencias: Jones JS, García TL, Perrero M. Retinopatía Diabética en Bolivia. Córnea, 1996; 26 (2): 341 - 343. Smith DJ, Caldera MC, Chang N, Ferrer RJ. Managing Trauma Ocular. Hofstra y Publicadores de Kennimore, Londres, 1989. Se aceptan figuras de color y deben enviarse en PICT o formato JPG. El formato de Powerpoint no es aceptable. Si se envía el trabajo por correo, éste debe ir tanto impreso (a máquina,etc.) y en forma electrónica (CD, etc.). Todas las presentaciones deben ser publicaciones originales que no se hayan publicado en otra parte. Las presentaciones pueden ser escritas en idioma español, inglés o portugués. Todos los trabajos deben tener un resumen en inglés y en español. Los trabajos presentados no deben sobrepasar las 1500 palabras (seis páginas escritas a doble espacio) más las referencias. Las referencias deben ser incluidas como una lista en una página separada al final del manuscrito con referencias citadas codificadas al texto en el orden de aparición. La página del título debe incluir lo siguiente: (1) El nombre completo de cada autor (es decir, nombre, apellido y la inicial media si usa,) y el grado académico más alto; (2) La ciudad, estado, y país en que el trabajo se llevó a cabo; (3) El nombre y dirección del autor para recibir pedidos de separata; (4) Declaración de los autores si existe o no interés financiero en un producto citado o utilizado en el trabajo. Instructions to Authors Visión Pan-América is the official publication of the Pan-American Association of Ophthalmology. The publication is particularly interested in receiving manuscripts that are short state-of-the-art review papers that will be of interest to the practicing PAAO member ophthalmologist. In addition to review articles, the publication is interested in articles on new surgical techniques, medical therapies, and case reports that emphasize clinicopathologic correlations. Submission information: Manuscripts should be submitted electronically to the Editor-inChief, Mark J. Mannis, MD at [email protected] or can be sent via mail to: Mark J. Mannis, MD, Department of Ophthalmology University of California, Davis 4860 Y Street, Suite 2400 Sacramento, CA 95817 U.S.A. All submissions must be provided in electronic form as well as written manuscript form if mailed. All submissions must be original publications that have not been published elsewhere. Submissions can be in Spanish, English, Portuguese or French. All papers should be preceded by an abstract in either English or Spanish. Papers submitted should be no longer than 1500 words (six double -spaced type-written pages) plus references. References should be included as a list on a separate page at the end of the manuscript with cited references keyed to the text in the order of appearance. : 14 : PAN-AMERICA Submission Format: The following format should be used for referenced papers: Jones JS, Garcia TL, Perrero M. Diabetic retinopathy in Bolivia. Cornea, 1996; 26 (2): 341- 343. Smith DJ, Caldera MC, Chang N, Ferrer RJ. Managing Ocular Trauma. Hofstra and Kennimore Publishers, London, 1989. Color figures are encouraged and should be submitted in PICT or JPEG format. Powerpoint format is not acceptable. The title page should include the following: (1) each author's full name (i.e., first name, middle initial if used, and last name) and highest degree; (2) city, state, and country in which work was carried out; (3) name and address of author to receive reprint requests; (4) statement about the authors' proprietary or financial interest in a product or lack thereof. Octubre 2006 PAAO Annual International Reception Monday, November 13, 2006 8:30 pm - 12:00 midnight Marcello Ballroom Venetian Hotel Hors d'Oeuvres Platinum Sponsor Alcon #1417 Gold Sponsors Allergan #2831 IntraLase #1466 Novartis #4624 Pfizer #608 [ Music Dancing Silver Sponsors Iridex #3741 Merck #3627 Bronze Sponsors Bausch & Lomb #831 Marco #1043 Paradigm #2843 Huco Vision #3541 Santen #1261 We would like to thank the following companies for their support of the Pan-American and for this newsletter: AMO. Alcon Laboratories Inc. Allergan Inc. Carl Zeiss Meditec Inc. Merck, Latin America. Novartis Pharmaceuticals Inc. [ Cash Bar Join us as we launch the 27th PAAO CongressCancun, Mexico May 31-June 3, 2007 PAN-AMERICA : 15 : PAAO Active Membership An applicant for Active Membership (Miembro Titular membership) in the PAAO shall be a physician who holds a degree of Doctor of Medicine, Doctor of Osteopathy (or an equivalent medical degree as determined by the Board of Directors), who holds a valid and unrestricted license to practice medicine in the country in which the practice of medicine is regularly conducted, who has completed formal training in ophthalmology (or its equivalent, as determined by the Board of Directors), and who is a member in good standing of the national society affiliated with the Association in the country in which the practice of medicine is regularly conducted. If the candidate has a practice in more than one country, he or she must be a member in good standing of the national society affiliated with the Association in each country in which the practice of medicine is conducted. PAAO Application Form Active ($150) Member-in-Training ($50) Corresponding ($100) PAAO Application Form PAAO Application Form Active ($150) Member-in-Training ($50) Corresponding ($100) Active ($150) Member-in-Training ($50) Corresponding ($100) APPLICANT INFORMATION (Please print clearly) APPLICATION ENDORSEMENT Last Name(s) Suffix(es)(Sr, Jr, etc) Degree(s)(MD, PhD) First Name(s) Middle Name(s) Mailing Address I, Mailing Address (continued) (please print name of endorser in full) certify that I am an Active Member (Miembro Titular) or Life Member of the PAAO; that I know the applicant City State Telephone ZIP Country FAX Email Name as you wish it to appear on your membership certificate MEMBERSHIP BENEFITS Languages: English Spanish Date of Birth: Reduced registration fees at PAAO congresses and regional meetings. Through the Visiting Professors Program selected members travel to National Congresses with their roundtrip coach airfare paid by the PAOF. The Fellowships Committee provides a listing of fellowships, observerships and travel awards. The Research Committee reviews research grant applications. Funding provided by the PAOF. The PAAO's quarterly newsletter Vision Pan-America. An invitation to the PAAO Annual International Reception. This gathering offers the opportunity to meet informally with colleagues and their families. / (please print name of applicant in full) that I am familiar with the applicant's professional competence and conduct; that the applicant has attained a high level of professional competence and conforms to the ethical standards of the PAAO; and that upon request I shall provide all necessary information to verify the truth and accuracy of this certification. 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Please note that a portion of your dues payment is considered a donation to the Pan-American Ophthalmological Foundation I understand and agree that my continued status as an Active Member (Miembro Titular) will be subject to all of the terms and conditions of the Bylaws of the PAAO, and that the Board of Directors of the PAAO may revoke my membership if this application contains or is supported by information that omits or contains a substantial misstatement of any fact required or permitted by this application or the related instructions to be included on or submitted with or in support of this application. Do not write in this space; for accounting purposes only. Payment Received: ID #: Date: Status: By: Source: A membership certificate. A membership card valid for the calendar year and issued upon payment of membership dues Application MUST be endorsed by one (1) Active Member (Miembro Titular) or Life Member. 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