La función de relación de los animales. RECEPTORES Y EFECTORES. 1. LA FUNCIÓN DE RELACIÓN La función de relación consiste en la capacidad de los seres vivos para percibir los cambios que se dan en el medio y reaccionar frente a ellos. El vital para la adaptación de individuo al medio y por tanto para su supervivencia. En este proceso intervienen: - Los órganos de los sentidos. - El sistema nervioso. - El sistema endocrino. - El aparato locomotor. 1.1. Estímulos y respuestas La información que recibimos y que es capaz de hacernos reaccionar se denomina estímulo, y la facultad para percibirlos se llama sensibilidad. El conjunto de respuestas que da un animal a estímulos externos constituye el comportamiento, y existen dos tipos: - Innato o instintivo. Se nace con él. - Aprendido o adquirido. Se aprende con el tiempo. Las respuestas que da un animal a estímulos internos da lugar a la homeostasis (mecanismo que adapta a un cuerpo a los cambios para mantenerlo estable). 1.2. Receptores Los receptores son terminaciones nerviosas especializadas que se encargan de recibir los estímulos. Obtienen la información del entorno y de las condiciones internas del animal. Pueden encontrarse en estructuras más complejas, los órganos de los sentidos. Cada receptor responde a un estímulo, y por ello se caracterizan por su alta especificidad. Tipos de receptores: a) Según la procedencia del estímulo: Exterorreceptores > Captan la información del medio externo. Interorreceptores > Captan la información del interior del organismo. Se pueden clasificar en: - Propiorreceptores. Perciben el movimiento, la posición del cuerpo y la fuerza muscular. Se encuentran en músculos, tendones y articulaciones. - Viscerorreceptores. Informan de la actividad visceral y los cambios en el medio interno del organismo. Transmiten sensaciones como el hambre, sed, dolor interno… Están por todo el organismo. b) Según el estímulo al que son sensibles: Quimiorreceptores > son sensibles a estímulos de naturaleza química que pueden provenir del medio exterior (gusto y olfato) o del medio interno. Termorreceptores > son sensibles a los cambios de temperatura. Se encuentran en la piel. Fotorreceptores > son sensibles a la luz, como los receptores de la visión. Mecanorreceptores > son sensibles a estímulos mecánicos (presión, dolor, sonidos…). Son receptores del tacto y del oído. 1.3. Percepción La percepción es un proceso que interpreta la información recibida en forma de impulsos nerviosos de los receptores. Cuando un animal recibe un estímulo a través de un receptor, este lo transforma en una señal nerviosa que es enviada al centro nervioso, donde se interpreta la información que para elaborar una repuesta adecuada. 1.4. Efectores Los efectores son las estructuras encargadas de llevar a cabo las respuestas ordenadas del cerebro. Existen dos tipos de respuestas: - Respuesta motora. Implica un movimiento y sus órganos efectores son los músculos. - Respuesta secretora. Implica la secreción de alguna sustancia y sus órganos efectores son las glándulas. 2. LOS ÓRGANOS DE LOS SENTIDOS EN INVERTEBRADOS Los órganos de los sentidos son estructuras más o menos sencillas que agrupan los receptores correspondientes a un determinado estímulo. Algunos de ellos tienen estructuras anexas, es decir, estructuras unidas y dependientes entre sí, que cumplen una doble función: por una parte combinan y facilitan la percepción de estímulos; por otra, protegen a los órganos receptores. 2.1. Órganos de la visión 2.1.1. Artrópodos En los artrópodos, el grupo mayoritario de unas 750.000 especies, se distinguen los grupos de arácnidos, insectos, miriápodos y crustáceos. En ellos se distinguen dos tipos de ojos: los ojos simples, también llamados ocelos, y los ojos compuestos. Los ocelos son los órganos fotorreceptores simples (ojos simples), aunque no aparecen en todos los artrópodos, únicamente en algunos en estado adulto en donde aparecen en la parte dorsal de la cabeza. En el caso de los lepidópteros (más conocidos como mariposas), por ejemplo, también tienen una estructura denominada ocelo, que son esas manchas en forma de ojos en las alas y que, a veces, suele estar rodeada de anillos de distintos colores. Sin embargo, no sirve para ver, sino para mantener el equilibrio durante el vuelo. Los ojos compuestos constan de una agrupación variable (de entre 12 a varios miles) llamados omaitidos. Estos están formados por células fotorreceptoras capaces de diferenciar la luz de la oscuridad e, incluso, distinguir algunos colores. En los crustáceos, además, se presentan dos ojos compuestos localizados sobre pedúnculos móviles). 2.1.2. Moluscos: gasterópodos y cefalópodos Los gasterópodos poseen unos ojos que pueden estar situados en el extremo de tentáculos retráctiles. Asimismo, varían entre unos ocelos (ojos simples que detectan la claridad y la oscuridad, sin formar una imagen definida) a complejos ojos con lentes. Por otra parte, los cefalópodos tienen una estructura similar a la de los vertebrados, pues posee cristalino, esclerótica (membrana de color blanco que constituye la capa más externa del globo ocular), humor acuoso, iris, córnea y retina. En la retina, los ojos se disponen en rabdómeros, unas células sensibles a la luz. En algunas especies presentan dos tipos de ojos: uno adaptado a la luz solar y otro a la bioluminiscencia. Estos ojos de cámara están formados por un globo ocular en cuyo fondo se agrupan los fotorreceptores, que son de dos tipos: conos y bastones. 2.1.3. Más invertebrados En el caso de poríferos, no tienen órganos de los sentidos. Los platelmintos tienen dos manchas oculares de color negro situadas en la región cefálica. No se llega a formar imágenes, pero sí sirve para orientarse según la luminosidad que haya. En los cnidarios, la mayor parte son también sensibles a la luz. Sus órganos sensoriales son escasos. En la superficie del cuerpo tienen unas pequeñas prolongaciones que actúan como mecanorreceptores y quimiorreceptores. 2.2. Órganos de la audición Los órganos de la audición son los que agrupan los receptores de ondas sonoras, un tipo de mecanorreceptores. En los invertebrados se encuentran los órganos timpánicos, membrana de tipo tambor (tímpano) donde se reciben las vibraciones de los sonidos. Estos “oídos” pueden estar situados en el tórax (en cigarras, chinches, pulgones, por ejemplo), en el abdomen (en saltamontes, cigarras, mariposas y algunas polillas), o en las patas (en grillos y saltamontes). 2.3. Órganos del equilibrio Agrupan mecanorreceptores llamados estatocistos, que se encargan de mantener en equilibrio el cuerpo. Los estatocistos son estructuras que se componen de una cámara revestida internamente por células receptoras, sensibles y ciliadas, y con un pequeño cuerpo sólido, esférico y llenos de cristales llamado estatolito, que se mueve libremente. Este movimiento se detecta por las células receptoras gracias a la presión ejercida por los cilios externos. El mensaje es transmitido por los nervios hacia los centros nerviosos y, así, el animal está en perfecto equilibrio, lo que le ayuda a moverse y orientarse. En los crustáceos, los estatocistos se localizan en la base de sus antenas. Si en uno de estos animales se remplaza al estatolisto por un trocito de hierro, el imán nace con el dorso hacia abajo. Más ejemplos de su localización pueden ser las medusas (en la umbrela), los moluscos (cerca de los ojos), los artrópodos (en la mayoría en las antenas), etc. 2.4. Órganos del gusto y del olfato Ambos órganos están muy relacionados, pues los receptores de cada órgano son sensibles a las sustancias químicas que se encuentran en el medio. Los receptores del gusto se encuentran, mayoritariamente, cerca de la boca y se relacionan con la función de nutrición. Los receptores olfativos se encuentran dependiendo del invertebrado y se relacionan con la reproducción, la alimentación y la relación, e incluso con la comunicación entre individuos de la misma especie. 2.5. Órganos del tacto Los receptores no se agrupan en órganos concretos y son de varios tipos: térmicos (detectan las variaciones de temperatura), mecánicos (se asocian al dolor), químicos (asociados a neurotransmisores, hormonas y otras moléculas neuroactivas), etc. Corresponden a las neuronas poco diferenciadas distribuidas por todo el cuerpo. Se encuentran, por ejemplo, en los tentáculos de algunos moluscos o en las antenas de los artrópodos. 3. LOS ÓRGANOS DE LOS SENTIDOS EN VERTEBRADOS La estructura de los órganos de los sentidos en vertebrados es más compleja que en los invertebrados. La mayoría de estos órganos se encuentran en la cabeza. 3.1. Órganos de la visión En los vertebrados, el ojo funciona como una cámara: las imágenes son proyectadas en la retina, donde la luz se transforma en impulsos nerviosos (gracias a las células fotorreceptoras) que son enviados al cerebro a través del nervio óptico. Los ojos de lo peces son muy simples y carecen de párpados. Los de los anfibios son parecidos pero con párpados (superior, inferior y membrana nictitante, situada entre los dos primeros y cuya función es proteger la córnea). Los reptiles, al igual que los anfibios, presentan tres párpados (en las serpientes están soldados, por lo que no pueden parpadear). Poseen glándulas lacrimales para mantener el globo ocular húmedo, y su capa esclerótica está endurecida. La vista de las aves está muy desarrollada, y poseen una zona cóncava en la retina, llamada fóvea, en la que se acumulan muchas células fotorreceptoras para obtener mayor agudeza visual. También tienen tres párpados, y sus ojos pueden estar en posición lateral (mayor campo visual) o frontal (aumenta la visión estereoscópica). Los mamíferos tienen los ojos en posición lateral, excepto los primates. Poseen pestañas que impiden la entrada de partículas, y algunos felinos pueden tener membrana nictitante. 3.2. Órganos de la audición El oído se estructura en: oído externo, limitado hasta el tímpano; medio, con la trompa de Eustaquio y tres pequeños huesos; interno, formado por los canales semicirculares (órgano del equilibrio) y el caracol (órgano de la audición). El oído de los peces está formado solo por el oído interno, para captar vibraciones del agua. En los anfibios, el oído consta de una cavidad timpánica cuyo límite con el exterior es el tímpano. Los reptiles tienen un oído medio que amplifica el sonido y un complejo oído interno (conectado con el tímpano por una columnilla). La estructura del oído de las aves es igual que en mamíferos, pero carecen de pabellón auditivo (al igual que los peces, los anfibios y los reptiles). Los mamíferos presentan orejas que ayudan a localizar el sonido. 3.3. Órganos del equilibrio Situado en el oído interno. Tanto en los canales semicirculares como en los dos pequeños órganos sáculo y utrículo se encuentra la endolinfa, líquido que al moverse estimula las células ciladas presentes en estos, informando sobre los movimientos y el equilibrio del cuerpo. 3.4. Órganos del gusto y del olfato Los receptores del gusto y del olfato se complementan entre sí al encontrarse en cavidades interconectadas. En el gusto, los quimiorreceptores se encuentran en los botones gustativos de la lengua, y deben estar húmedos para disolver las sustancias a las que son sensibles. Dentro de los botones gustativos están las papilas gustativas, que detectan los sabores. En los peces, los botones gustativos están en muchas partes del cuerpo (boca, barbas…). En el olfato, los quimiorreceptores se encuentran en las cavidades nasales. El interior de las fosas nasales está cubierto por una mucosa, la pituitaria, que es de dos tipos: roja (filtra, humedece y calienta el aire) y amarilla (agrupa los quimiorreceptores que envían la información al bulbo olfatorio, y este al cerebro). Los peces solo tienen una fosa nasal. 3.5. Órganos del tacto El sentido del tacto consta de varios tipos de receptores (térmicos, mecánicos…) distribuidos por toda la piel, e informan sobre estímulos externos. 3.6. Otros órganos sensoriales - Linea lateral: órgano presente en peces y larvas de anfibios cuya función es detectar vibraciones y movimientos del agua. - Foseta facial: órgano termosensitivo que tienen algunas serpientes. Con él se pueden captar radiaciones infrarrojas para detectar las presas. - Ampollas de Lorenzini: órganos sensoriales capaces de detectar variaciones en el campo magnético. Son característicos de peces condrictios, como los tiburones. Gracias a ellas pueden orientarse por el océano y detectar presas. 4. LA RESPUESTA MOTORA 4.1. El sistema muscular El sistema muscular esta formado por músculos y estos están formados por unas células alargadas llamadas fibras musculares. El citoplasma de las células tiene una gran cantidad de miofilamentos, como actina y miosina, sustancias que dan a los músculos una capacidad contráctil. Los músculos se clasifican en dos tipos: Músculo estriado: los miofilamentos se agrupan en unidades morfológicas y fisiológicas llamadas sarcómeros, en los que la miosina y la actina esta de forma transversal a las fibras musculares para una contracción rápida. o Músculo esquelético: están asociados al sistema esquelético, contracción rápida, voluntaria y poco resistente a la fatiga. o Músculo cardiaco: corresponde al corazón, su contracción rápida, involuntaria y resistente a la fatiga. o Músculo estriado de invertebrados: la organización de los miofilamentos es muy variada y da lugar a distintas estriaciones, o como el músculo esquelético. Músculo liso: al no tener la misma organización que el músculo estriado, no presenta estrías cuando se observa al microscopio. Tienen una contracción lenta, involuntaria y resistente a la fatiga; constituyen la musculatura de los órganos internos. 4.2. El sistema esquelético - Poríferos: tienen la espongina que solo tiene una función de sostén y dar forma. - Cnidarios: tienen una estructura calcárea (excepto las medusas). - Moluscos gasterópodos: concha externa. - Moluscos bivalvos: tienen dos conchas o valvas articuladas por unos músculos aductores posteriores y un músculo aductor inferior. - Moluscos cefalópodos: tienen una pequeña estructura calcárea denominada pluma. - Equinodermos: el esqueleto esta formado por placas calcáreas duras (es interno). - Artrópodos: tiene un exoesqueleto formado por quitina, sustancia dura y ligera. Esta sustancia permite una gran movilidad. - Vertebrados: tienen un esqueleto interno formado por huesos. 4.3. Movimientos Los huesos están unidos por articulaciones y estos se mueven por la contracción de los músculos en las articulaciones. 5. GLÁNDULAS Las glándulas efectúan otro tipo de respuesta ante un estimulo secretando sustancias. Dependiendo de la naturaleza de la sustancia, el lugar donde se vierten hay tres tipos: Glándulas de secreción externa: su excreción es hacia el exterior del cuerpo (lágrimas, sudor, glándulas digestivas del estomago, etc). Glándulas de secreción interna: son las glándulas que producen hormonas (sustancias que regulan muchas funciones corporales). Las hormonas son vertidas en la circulación hasta que llegan al órgano diana, el cual realizará la función que manda la hormona (tiroides). Glándulas de secreción mixta: son glándulas que tienen función externa e interna. Un ejemplo es el páncreas. El jugo pancreático sería externa porque no va a la circulación, sino al intestino, y la insulina sería interna porque va la circulación. 5.1. Feromonas Las feromonas son unas sustancias que segregan los vertebrados e invertebrados. Estas sustancias actúan en los seres de su misma especie, ya sea para atraerlos o para espantarlos. Las feromonas son captadas por quimiorreceptores y pueden encontrarse con otras sustancias de excreción, por el sudor o la orina.