Los 13 boleros

E
n los primeros meses del año 2012 estábamos en nuestra casa, en León,
grabando, muy tranquilamente, el álbum de nuestra “reaparición” en la música después de nueve años.
Solo sabíamos una cosa: lo que estábamos haciendo nos emocionaba como
nunca antes nos había emocionado una grabación.
Y, lo más importante, estábamos haciendo lo que, realmente, queríamos hacer.
Todo lo demás era una incógnita.
Esa incógnita se transformo en felicidad cuando nuestros “boleritos” vieron la luz.
No nos esperábamos una respuesta así, sinceramente. Quizás, en alguna ocasión,
pudimos haberlo soñado; solo eso.
Hoy, estamos muy agradecidos por tanto cariño demostrado hacia nosotros y
hacia esas canciones que son nuestra vida.
Somos conscientes de lo que significa tener la posibilidad de seguir haciendo lo
que más nos gusta y no nos cansaremos de dar las gracias a todos por permitirnos volver a enseñar otra colección de boleros en este segundo volumen.
Y, muy agradecidos a nuestro compañero de viaje de siempre, Warner.
Deseamos que disfrutéis escuchándolos tanto como nosotros disfrutaremos interpretándolos el resto de nuestras vidas.
Nuestro más sincero agradecimiento.
Manuel, Óscar y Raúl Quijano
LOS TRECE BOLEROS
ME DEJASTE SOLO
YO ME ACERCO, TU TE ALEJAS
A PESAR DE TODO
Cuando la soledad es elegida se convierte en un capricho placentero.
Pero, nunca esa soledad es más dañina que cuando se siente en compañía del
amor de tu vida.
Injusticia para los sentimientos.
Y, más dolor, si cabe, queda en la resaca de la pérdida de esa no compañera que te
imposibilita para la felicidad o un nuevo intento de compañía durante largo tiempo de
penitencia. Más penitencia…
En desigualdad siempre se produce un final obvio. Cuando en una “cosa” de dos solo
uno se ocupa de sustentar la relación, ésta se desvanece.
Los continuos intentos de acercamiento, con nulos resultados, desgastan tanto la
ilusión como la paciencia por lo que, ni la ceguera forzada, en ocasiones, sirve para
evitar el desánimo que lleva a lo sabido.
Lo benigno, a veces, del paso del tiempo que consigue atenuar los daños sufridos o
convertirlos en excusas para el perdón.
La importancia de la actitud conciliadora para con el recuerdo y con uno mismo.
O, la sensación de culpa no merecida que justifica las penas sufridas, menos merecidas.
TODO LO QUE SIENTO
Y, SIN EMBARGO
NO ME REPROCHES
Sin querer uno aprende a vivir una vez ha vivido; y, cuando ese aprendizaje se llevaba
a cabo en compañía del amor soñado, en el momento de la pérdida del compañero
de viaje todo son memorias que comienzan cuando comenzaste a vivir una vez
habías vivido.
Amaneces y sigues sufriendo con el recuerdo porque no puedes ni quieres evitarlo.
Porque, “lo que fuiste nunca nadie ha vuelto a ser”.
Conformismo, comodidad, aventura, goce en lo prohibido o, simplemente, hastío.
Aun, con eso, cada uno acepta, transige y calla su secreto y el del otro.
Y, la fidelidad da paso a la dudosa lealtad demostrada en la vuelta a casa de los
desubicados amantes.
Con seguridad, el amor dormido o escondido entre ellos genera la despedida mutua
de sus respectivos pecados para intentar, de nuevo, volver a empezar.
UN POCO DE ALGO
LO MEJOR ES AMAR
La sensación, hecha verdad, de que nunca llegaste a descubrir a quien, finalmente,
tan poco pedías.
La herida en el corazón que produce saberse nadie merecedor de lo que otro merecerá
La pérdida de dignidad de la persona convertida en mendigo de palabras o besos.
Es el remedio frívolo al cotidiano “mal de amores”.
Nunca más consejos se regalan que en el comienzo de la enfermedad del desamor.
Consejos, todos, de sabios en la materia.
Dura, y pocas veces entendida, es la dolorosa situación de encontrarse en la tesitura
de confesar a la pareja el agotamiento, o final, del camino recorrido juntos.
Duro el momento de la confesión y nulo el entendimiento de una tercera persona que
espera des el paso del abandono con celeridad.
Pero, sobre todo, nunca reprochable por la nueva pareja ese desagradable hecho del
“juego a tres bandas” por ella consentido.
Ese reproche, destroza.
ROBARLE TIEMPO AL TIEMPO
A medida que pasan los años se acelera, también, el paso del tiempo.
Velocidad proporcional a la felicidad.
Deseo inherente al género humano el de querer detener ese marcador injusto que te
roba el presente y te obliga a vivir siempre en un ayer de felicidades y en un mañana
intangible que ya es, también, ayer.
SERÁ QUE YA NO NOS AMAMOS
Lo inevitable, demasiadas veces, se deja en el olvido creyendo que el desenlace se
producirá por su propia naturaleza. Pero, esa naturaleza no existe; la realidad es otra y,
como lo inevitable, merece ser considerada para zanjar lo que termina enquistándose
y generando más dolor.
Cuando demasiadas señales aparecen, el aviso es claro.
“Será que ya no nos amamos…”
EL QUE SIEMPRE FUI
La sensatez en el momento justo. La reflexión sobre lo que ha sido un comportamiento “neutro” cuando la promesa fue el regalo de la felicidad;
o, al menos, el intento.
La predisposición al cambio es el principio.
CON EL SUEÑO ENTRE MIS BRAZOS
En apariencia, esta historia es el pensamiento escrito del que sabe lo que quiere,
cómo lo quiere y cuándo.
Del que tiene esa capacidad, más allá de lo humano, de manejar tiempos y sentimientos.
Del que ha sufrido, mucho, y se inventa su nueva personalidad alejada del romanticismo ideal y basada en lo crudo de lo real.
QUIERO QUE ME ENGAÑES
El punto álgido en la madurez o en la locura.
El pragmatismo llevado a la máxima expresión.
Cuando querer sentir es tan importante como no querer saber.
Cuando no importa ni la verdad ni la mentira; importa el hecho.
Es creer en lo que uno quiera creer por puro interés emocional.
MANUEL QUIJANO
REFLEXIONES DE
KENNY O´BRIEN
“Después de más de 40 años trabajando en la música y la televisión pocas
veces he tenido la oportunidad de que un álbum me sorprenda como lo ha
hecho este.
Es una colección de canciones única.
Pero, sobre todo, me llama la atención que, en la actualidad, alguien haya
compuesto un repertorio tan rico y nuevo en el género y aglutinar tan bellas
composiciones en un solo álbum; y, sobre todo, haber sido capaces de darle
una “vuelta de tuerca”!.
En este álbum esto se ha conseguido y mayor, aun, es mi sorpresa y
satisfacción.
Me refiero a que, siendo el mismo ritmo de bolero, se le ha dado un enfoque
más actual, más moderno sin perder las características del mismo.
Incluso, en el tratamiento de las voces.
Estoy convencido de que lo hemos logrado.
Honestamente, este “Orígenes: el bolero-Volumen 2” merece la pena ser
experimentado y estarán de acuerdo conmigo.”
(Kenny O´brien ha trabajado con Barbra Streisand, Celine Dion, Michael Bublé,
Cristina Aguilera, Luis Miguel,…)