TEMA III: SISTEMA RESPIRATORIO, ESTRUCTURA Y FUNCIÓN Introducción El sistema respiratorio se ocupa de la incorporación de oxígeno en nuestro organismo. ¿Cuál es la función del oxígeno en nuestro cuerpo? El oxígeno es indispensable para vivir, salvo en aquellos organismos denominados anaerobios, como por ejemplo las bacterias, que pueden vivir en ausencia del mismo. La importancia del oxígeno reside en que permite aprovechar la energía contenida en los alimentos que se ingieren. El proceso por el cual el oxígeno se combina con los nutrientes para liberar la energía contenida se denomina respiración celular, y ocurre dentro de cada célula de nuestro organismo. ¿Cómo colabora el sistema respiratorio para que ocurra la respiración celular? Cumpliendo cuatro funciones básicas: 1. Incorporar oxígeno al organismo a través de la inspiración. 2. Transportar el oxígeno hasta la sangre, la cual se ocupa de distribuirlo por todo el organismo para que cada célula pueda respirar. 3. Recibir el dióxido de carbono que cada célula elimina en la sangre como desecho de la respiración celular. 4. Eliminar el dióxido de carbono a través de la expiración. Al igual que el sistema digestivo, el sistema respiratorio está estrechamente vinculado con la sangre para poder completar sus funciones. La sangre puesta en movimiento por el corazón y conducida por los vasos sanguíneos, transporta el oxígeno contenido en el aire que respiramos a través de todo el organismo, permitiendo que cada célula pueda respirar. Órganos del Sistema Respiratorio: Estructura y Función El sistema respiratorio está compuesto por una serie de conductos llamados vías respiratorias, los cuales terminan en los pulmones. Cavidad nasal: permite la entrada de aire hacia las fosas nasales, las cuales están separadas por un tabique óseo y cartilaginoso. En su interior, el aire ingresado se limpia, calienta y humedece antes de seguir su camino hacia la faringe. El interior de la cavidad nasal está recubierto por una película de células que constituyen la mucosa nasal, donde existen glándulas secretoras de moco y receptores del olfato. Faringe: es un conducto muscular corto que forma parte a la vez del sistema respiratorio y digestivo. Trasporta el aire desde la cavidad nasal hacia la laringe. Laringe: es un tubo muscular y cartilaginoso que conduce el aire hacia la tráquea. En su pared interna se encuentran unos repliegues, los cuales constituyen las cuerdas vocales. Tráquea: es un tubo cartilaginoso en sentido vertical que conduce el aire hacia los pulmones. Bronquios: son las dos ramas cartilaginosas en que se divide hacia el final la tráquea para ingresar el aire en cada pulmón. Pulmones: son dos órganos macizos, elásticos y de aspecto esponjoso, alojados en la cavidad torácica. Dentro de ellos, los bronquios se van ramificando en conductos cada vez 1 más finos, hasta formar los bronquiolos. Los bronquiolos conducen el aire hasta unas bolsas diminutas llamadas alvéolos pulmonares, en las cuales se produce el intercambio gaseoso. (Aparato Respiratorio) El Intercambio Gaseoso en los Pulmones: la llegada de Oxígeno a la Sangre Los alvéolos pulmonares son pequeñas dilataciones en forma de bolsitas llenas de aire, que tienen paredes muy finas. Están rodeados por delgados vasos sanguíneos, llamados capilares, y es allí donde se produce el intercambio gaseoso: la sangre toma el oxígeno contenido en los alvéolos para distribuirlo por todo el organismo, y deja en ellos el dióxido de carbono retirado de las células, el cual debe ser eliminado por la expiración. Actividad Responder el siguiente cuestionario: 1. ¿Cuál es la función del sistema respiratorio? 2. ¿Cuál es la función del oxígeno en nuestro cuerpo? 3. Realice un cuadro comparativo que muestre la estructura y función de todos los órganos del sistema respiratorio. 2 TEMA III: SISTEMA DIGESTIVO, ESTRUCTURA Y FUNCIÓN Introducción El sistema digestivo se ocupa de aportar los nutrientes necesarios para que las células del organismo obtengan energía y puedan realizar sus actividades. Los alimentos, tal como ingresan en la boca, no están en condiciones de ser aprovechados por las células. Entonces el sistema digestivo se encarga de incorporar los alimentos y transformarlos en pequeñas partículas que puedan pasar a la sangre y así llegar a cada una de las células del cuerpo. Esta función se lleva a cabo a través de tres acciones que realiza el sistema digestivo: Ingestión: incorporar los alimentos al cuerpo. Digestión: desmenuzar los alimentos y transformarlos para que el organismo pueda aprovechar los nutrientes contenidos en ellos. Egestión: eliminar los desechos indeseables. En síntesis, los alimentos que ingresan al organismo por el sistema digestivo (ingestión) son transformados en sustancias más simples capaces de ser absorbidas por la mucosa intestinal (digestión) y, desde allí, pasan a la sangre para llegar a todas las células. Por último, las sustancias que no son útiles para el organismo (desechos) no son absorbidas y se eliminan a través de la materia fecal (egestión). Órganos del Sistema Digestivo: Estructura y Función El sistema digestivo está compuesto por un largo conducto de configuración irregular llamado tubo digestivo, y un conjunto de glándulas anexadas y comunicadas con él, denominadas glándulas anexas. El tubo digestivo está formado por diferentes órganos, cada uno de los cuales se ocupa de una parte del proceso digestivo, dispuestos uno a continuación de otro y constituyen el recorrido que siguen los alimentos durante su transformación. Las glándulas anexas se encargan de verter en el tracto digestivo diversos jugos que participan en el proceso digestivo. Órganos: Boca: es una cavidad comunicada con el exterior a través de la cual se incorporan y trituran los alimentos. Está compuesta por los labios, dientes, lengua, paladares, etc. La saliva, vertida en la boca por las glándulas salivales, humecta los alimentos y comienza la digestión. Faringe: es un conducto muscular corto que comunica la boca con el esófago, también las fosas nasales con la laringe. Se ocupa de conducir el bolo alimenticio por la boca hacia el esófago. En la faringe se encuentra una membrana llamada epiglotis, la cual dirige los alimentos por el tubo digestivo, evitando que pasen al tracto respiratorio. ¿Cómo? La epiglotis actúa como una válvula: cuando el bolo alimenticio se encuentra en la faringe, la epiglotis se cierra (anulando la comunicación entre faringe y el tracto respiratorio), obligando a los alimentos a pasar hacia el esófago. En cambio, cuando en ella se encuentra el aire inspirado, se abre para que éste pueda pasar a la laringe. De esta manera, la epiglotis regula las funciones de la faringe, dado que es un órgano que pertenece tanto al sistema digestivo como respiratorio. Esófago: es un conducto muscular largo ubicado en la cavidad torácica. Transporta el bolo alimenticio desde la faringe hacia el estómago. 3 Estómago: es un ensanchamiento, en forma de bolsa irregular, del tubo digestivo, en el cual se produce la digestión de los alimentos mediante la acción de los jugos gástricos que produce. Se ubica en el compartimiento superior del abdomen. Su orifico de entrada se llama cardias y el de salida píloro. El cardias y píloro actúan como válvulas que se abren y cierran regulando la velocidad de paso de los alimentos por el tubo digestivo. Intestino delgado: es un conducto muscular muy largo (6~8 metros de longitud), de recorrido tortuoso, y dividido en tres porciones: duodeno, yeyuno e ileon. Mediante la acción de los jugos digestivos que el hígado y páncreas vierten en su primera porción, el intestino delgado completa la digestión de los alimentos. Además a través de sus paredes la mayor parte de los nutrientes pasan a la sangre. Este proceso se denomina absorción. En síntesis, el intestino delgado cumple dos funciones importantes: digestión y absorción de los alimentos. Intestino grueso: también es un conducto muscular muy largo, dividido en tres porciones: ciego, colon y recto. A través de sus paredes se produce la absorción de agua y minerales, y aquellos componentes que no han sido digeridos anteriormente se vuelven sólidos y descienden hasta el ano como materia fecal. Ano: es el orificio de salida de los desechos que el organismo elimina. Glándulas Anexas: Glándulas salivales: son seis órganos macizos ubicadas alrededor de la cavidad bucal, cuya función es producir y secretar la saliva. La saliva lubrica y humecta los alimentos, además comienza su digestión. Hígado: es una glándula maciza muy grande, ubicada en la porción superior derecha del abdomen. Es la glándula más grande del organismo: pesa alrededor de 1,5kg. En él se depositan los nutrientes absorbidos en el intestino delgado, para luego ser distribuidos por todo el organismo a través de la sangre. Asimismo, produce y secreta la bilis, compuesto que facilita la digestión intestinal de las grasas. Páncreas: es una glándula maciza ubicada muy cerca del duodeno, que produce y secreta el jugo pancreático, el cual se utiliza en el intestino delgado para la digestión de nutrientes, principalmente proteínas e hidratos de carbono. 4 (Aparato digestivo) Actividad Responder el siguiente cuestionario: 1. ¿Cuál es la función del sistema digestivo? 2. Realice un cuadro comparativo que muestre la estructura y función de todos los órganos y glándulas anexas del sistema digestivo. 3. Explique la función de la epiglotis. 4. ¿Qué función tienen el cardias y píloro? 5. ¿Qué función tiene la bilis producida por el hígado? 5 TEMA III: SISTEMA CIRCULATORIO, ESTRUCTURA Y FUNCIÓN Introducción El sistema circulatorio, a través de la circulación de la sangre, se ocupa de distribuir por todo el organismo los elementos necesarios para que cada una de las células pueda realizar sus funciones. Por un lado, los nutrientes absorbidos luego de la digestión de los alimentos en el intestino delgado pasan a la sangre, y por otro, el oxígeno que proviene de la respiración pulmonar también es volcado a la sangre para ser distribuido por todo el cuerpo. Componentes del Sistema Circulatorio: Estructura y Función El sistema circulatorio está compuesto por un tejido líquido denominado sangre, la cual es transportada por un sistema interno a modo de tuberías, en el cual los tubos se denominan vasos sanguíneos, y por una bomba que permite la circulación de la sangre, denominada corazón. Este sistema de conducción es el mismo que transporta los desechos que las células eliminan, y que serán expulsados de nuestro organismo a través del sistema respiratorio y urinario principalmente. En síntesis, el sistema circulatorio es un medio de transporte para los nutrientes y desechos del organismo, compuesto por una bomba impulsora (el corazón), un sistema de tuberías (los vasos sanguíneos) y un medio líquido que lleva las sustancias (la sangre). Corazón: es un órgano muscular hueco, constituido por cuatro cámaras (dos aurículas superiores y dos ventrículos inferiores). Su función es actuar como una bomba impulsora de la sangre: sus contracciones rítmicas permiten que la sangre fluya de manera continua a través de los vasos sanguíneos, regulando la velocidad mediante el número de contracciones. Vasos sanguíneos: son tubos huecos, de variable tamaño y calibre, por los que se transporta la sangre desde y hacia el corazón. Existen tres tipos: las arterias, las venas y los capilares sanguíneos. Las arterias transportan desde el corazón hacia el organismo sangre rica en oxígeno. Poseen gruesas paredes musculares que les permite, al contraerse, impulsar la sangre. Las venas transportan desde el cuerpo hacia el corazón sangre pobre de oxígeno y rica en dióxido de carbono. Poseen en su luz válvulas que impulsan la sangre. Los capilares sanguíneos son vasos de paredes muy delgadas, en los cuales se produce el intercambio de sustancias entre la sangre y las células de todo el cuerpo. Los nutrientes son dejados en ellas y sus residuos vueltos a la sangre. Sangre: es un tejido constituido por dos componentes básicos, uno líquido denominado “plasma sanguíneo”, formado por agua y sustancias disueltas; y uno sólido, formado por células sanguíneas. Dentro de estas células se encuentran: glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas. Los glóbulos rojos, eritrocitos o hematíes, están formados por hemoglobina, la cual le brinda a la sangre su característico color rojo y tiene la propiedad de captar el oxígeno para luego transferirlo al resto de las células del cuerpo. Los glóbulos blancos o leucocitos constituyen el sistema de defensa del organismo contra el ataque de agentes patógenos externos. Cuando un microorganismo ingresa al organismo y provoca un proceso infeccioso, los leucocitos aumentan su número considerablemente. Las plaquetas son las encargadas de cerrar las heridas cuando ocurre algún corte. 6 Los Circuitos de la Sangre: Circulación Menor y Mayor Existen dos circuitos en la circulación sanguínea: el circuito menor (o pulmonar) y el circuito mayor (o corporal). Circuito menor: comienza en el corazón con la salida de sangre pobre en oxígeno, la cual se dirige hacia los pulmones para recibirlo. Una vez cargada de oxígeno en los pulmones, la sangre vuelve nuevamente hacia el corazón, finalizando allí el circuito. De esta manera, este circuito permite que la sangre ya utilizada por el organismo pase por los pulmones y pueda reoxigenarse. Circuito mayor: comienza con la salida de sangre oxigenada desde el corazón y hacia todo el organismo, para llevar oxígeno y nutrientes a todas las células y recoger sus desechos. Este recorrido se realiza a través de las arterias. Luego de pasar por todo el cuerpo, la sangre ahora pobre en oxígeno y rica en dióxido de carbono, vuelve al corazón a través de las venas, finalizando allí el circuito. De esta manera, este circuito permite a través de las arterias transportar oxígeno y nutrientes a todas las células del organismo, y recoger de ellas los desechos eliminados. (Circulación Menor y Mayor) 7 Actividad Responder el siguiente cuestionario: 1. ¿Cuál es la función del sistema circulatorio? 2. Realice un cuadro comparativo que muestre la estructura y función de todos los componentes del sistema circulatorio. 3. Explique la función de cada una de las células sanguíneas. 4. Explique los circuitos menor y mayor de la sangre. 8 TEMA III: SISTEMA URINARIO, ESTRUCTURA Y FUNCIÓN Introducción El sistema urinario colabora con la expulsión de los desechos que produce nuestro organismo. Tiene como función la formación y eliminación de la orina, a través de la cual se elimina el exceso de agua ingerida y los residuos. La orina es una solución acuosa que trasporta los desechos producidos por las células de nuestro organismo. Se forma gracias al filtrado de la sangre, el cual ocurre cuando la sangre pasa por los riñones. Órganos del Sistema Urinario: Estructura y Función La orina producida en los riñones es almacenada hasta su salida hacia la vejiga, a la cual llega a través de unos conductos denominados uréteres y de la cual sale al exterior por otro conducto denominado uretra. Riñones: son dos órganos macizos ubicados en la cavidad abdominal, formados por una serie de tubos microscópicos denominados nefronas, las cuales se ocupan del proceso de formación de la orina. Uréteres: son dos tubos huecos que reciben la orina en los riñones y la trasportan hacia la vejiga. Vejiga: es un órgano muscular hueco, semejante a una bolsa, cuya función es almacenar la orina. Cuando está llena, la orina continúa el circuito pasando hacia la uretra. Uretra: es un tubo delgado por el que circula la orina desde la vejiga hacia el exterior. La salida de orina se denomina micción, y ocurre cuando la vejiga está llena. Formación de la Orina La orina se forma gracias al filtrado de la sangre en las nefronas, las cuales están compuestas por dos porciones: en un extremo tienen un ovillo de capilares denominado glomérulo, el cual se continúa con un tubo hueco llamado túbulo renal. El proceso de formación de la orina ocurre en dos etapas o fases: Fase de filtración (o glomerular): en esta fase la sangre que pasa por los capilares del glomérulo es filtrada. A partir de esta filtración, los componentes de la sangre siguen dos caminos diferentes: las células y proteínas grandes continúan su paso en el torrente sanguíneo, en tanto que el plasma pasa al túbulo renal para ser procesado. Fase de reabsorción (o tubular): en esta fase, los componentes útiles al organismo son rescatados. Es decir, aquellas sustancias aprovechables que han ingresado al túbulo renal junto con el plasma sanguíneo son reabsorbidas y devueltas a la circulación sanguínea, quedando de esta manera la orina formada por agua y desechos. 9 Actividad 1. ¿Cuál es la función del sistema urinario? 2. Realice un cuadro comparativo que muestre la estructura y función de todos los órganos del sistema urinario. 3. Explique las fases de formación de la orina. 10