HISTORIAS DETRÁS DE LOS SALMOS Salmo 133 PROPOSITO: Enseñar a mis alumnos la historia detrás del Salmo 133. PUNTO DE CONTACTO: Los judíos hacían tres viajes al año a Jerusalén. Estos eran los acontecimientos más grandes del año. Mientras ellos viajaban, ellos cantaban del Salmo 120 hasta el Salmo 134. El Salmo más hermoso de entre estos, es el Salmo 133. Aquí, ellos cantaron como un grupo. Pregunte a los alumnos que le digan un evento en particular de sus vidas cuando el compañerismo y la unidad se sintieron más dulces, cuando todo mundo se llevó muy bien y la pasaron muy agradable. INTRODUCCIÓN: Notemos dos cosas principales para esta lección: (1) la razón por la que había unidad (2) el gozo de esa unidad. I. LA RAZÓN DE ESA UNIDAD. 1. Todos ellos iban hacia la misma dirección. Como ven, ellos iban marchando hacia Jerusalén. Cuando las personas van en la misma dirección, ahí puede haber unidad. Sin embargo, supongamos, que algunos estuvieran yendo a Belén, algunos otros hacia Nazaret, y algunos otros a Capernaum, y otros a Jerusalén. No podía haber habido unidad. Ellos no podían haber cantado juntos. Esto es a lo que se refirió el profeta Amos 3:3 cuando dijo, “¿Andarán dos juntos, si no estuvieren de acuerdo?” No debería haber unión del pueblo de Dios ha menos que hay un propósito en esa unión. Debemos ir en la misma dirección. Es por eso, cuando una iglesia dirige su vida a ganar almas, puede haber unidad. Todo es construido alrededor del mismo propósito y por la misma causa, de esa manera puede haber unidad. Aquí es un buen lugar para enfatizar a los jóvenes de la importancia de casarse con alguien que está yendo en su misma dirección. Entre más una pareja tiene en común el uno con el otro, es más probable que tengan un matrimonio feliz. Por supuesto, es incorrecto casarse con una persona no salva. No solo eso, pero es sabio, si es posible, casarse con alguien de la misma iglesia y de la misma área, de la misma cultura, con los mismo gustos y atracciones, con el mismo propósito en la vida, etc. 2. Ellos tenían la misma meta. Su meta era llegar a Jerusalén y alabar al Señor, llevar a cabo la festividad, y regocijarse con el pueblo de Dios, sentir la presencia de Dios, y deleitarse en la obra del Señor. Esto es, por supuesto, muy importante para tener unidad. Estos son días donde escuchamos mucho acerca de la unidad. Las iglesias se están uniendo, las denominaciones se están juntando, El consejo de las Iglesias Mundial está floreciendo, y el llamado del día es, “Juntémonos.” Esto puede ser verdad solamente si tenemos la misma meta. Si una persona cree en le nacimiento virginal y la otra no, no puede haber unidad. Si una persona cree que la Biblia es verdadera y la otra no, no puede haber unidad. Dios nos dice en la Biblia que uno no puede arar con un buey y una mula juntos. Dios prohíbe a los judíos sembrar diferentes tipos de semilla en un mismo lugar. Dios quiere que tengamos compañerismo con Su propio pueblo y tener unidad con ellos pero no comprometer nuestras convicciones ni la palabra de Dios o tener una falsa unidad con otros. 3. En el Salmo 133:1, note las palabras, “¡habitar los hermanos juntos en armonía!” Unidad es para los hermanos. En otras palabras, solamente los Hijos de Dios pueden tener una unidad espiritual -2- verdadera. Aquellos que no creen en la nacimiento virginal, aquellos que no han nacido de nuevo no saben nada acerca de esta clase de unidad. Esta es la unidad que los Hijos de Dios deben de tener. II. EL GOZO DE ESA UNIDAD. 1. Es bueno y placentero para el pueblo de Dios tener unidad. Lea el Salmo 133:1. 2. “Es como el buen óleo sobre la cabeza, el cual desciende sobre la barba, la barba de Aarón, y baja hasta el borde de sus vestiduras;” Salmo 133:2. Este óleo era la representación del Espíritu Santo. Es solamente el Espíritu Santo Quien nos puede dar una unidad verdadera. Había una dulce fragancia en este óleo. Aarón era el sumo sacerdote, y era maravilloso cuando este óleo era puesto sobre él. ¡Ah, que olor tan dulce llega a los otros cuando el pueblo de Dios vive junto en armonía! Imagine al sumo sacerdote aquí. El tiene puesto sus vestiduras sacerdotales, él ha sido ungido. El óleo lo cubre todo completamente. ¡Qué maravilloso es! Otros pueden oler el olor dulce y pueden ver como es ungido. El pueblo de Dios también puede oler y ver el ungimiento cuando nos llevamos bien el uno con el otro. Es obvio que fallamos en hacerlo. Puede ser un mal o buen testimonio. 3. Era como el rocío de Hermón. Lea el Salmo 133:3. Hermón era una montaña muy alta y que se podía ver a lo lejos. Se podía ver de muchas millas de distancia. Lo mismo es verdad cuando el pueblo de Dios habitan juntos en unidad- es un testimonio a distancia. La iglesia que aprende a habitar en unidad y armonía es ka iglesia que puede ser vista a una gran distancia y de quien la luz brilla a una larga distancia de nuestro hogar. Es una iglesia modelo. ¡Ah, podría el pueblo de Dios aprender a vivir juntos en unidad para que otros puedan ver desde lo lejos lo que tenemos! Entonces, ellos también, querrán al Cristo Quien nos ha llevado a esa unión. 4. Cuando nosotros habitamos juntos en unidad, contesta una oración que Jesús oró. Jesús oró en Su gran oración intercesora de Juan 17 que Su pueblo fuera uno así como Jesús y el Padre eran uno. ¡Piense en esta unión! Qué contento es el Padre cuando habitamos juntos así como El y el Hijo habitan juntos aún antes de que el mundo fuera creado. Vea Juan 17:21. 5. Hay poder en la unidad. El Señor dijo que uno podría perseguir a miles y dos pondrían diez mil a volar. Maestro, lleve un libro a la clase y pregunte a un miembro que rompa una página. Es fácil romper una página. Ponga todas las páginas juntas y pregúntele que rompa el libro. Esto es imposible. Satanás nos puede volar a uno, pero cuando estamos juntos, ¡hay fortaleza y resistencia CONCLUSIÓN: Un día un pastor se dio cuenta que cierto miembro había estado ausente. El fue a buscarlo a su casa para averiguar porqué había faltado a los servicios. Cuando llegó, la persona estaba calentándose junto a la chimenea. El pastor le preguntó por su ausencia y porqué había pasado tanto tiempo desde que él fue a la iglesia. El miembro de la iglesia contestó, “Pastor, yo no necesito ir a la iglesia. Yo puedo ser tan buen Cristiano en la casa como en la iglesia.” El pastor tomó las tenazas que estaban cerca de la chimenea, tomó un carbón y lo quitó del fuego. Gradualmente el carbón quemaba menos y menos, hasta finalmente el fuego se apagó. El miembro le dijo al pastor, “Pastor, ya veo la lección. Yo estaré ahí el domingo.” Ninguno de nosotros puede vivir la vida como un buen cristiano aparte del pueblo de Dios, como nosotros podemos con el pueblo de Dios. ¡Seamos fieles al compañerismo con el pueblo de Dios y la iglesia de Dios, y habitemos juntos en unidad! PREGUNTAS: 1. ¿Cuántas veces iban los judíos a Jerusalén al año? 2. Ellos podían tener armonía porque estaban marchando en la misma 3. Ellos podían tener armonía porque tenían la misma . . 4. En el Salmo 133:1 ¿Quiénes deben habitar juntos? 5. ¿Deben aquellos que creen en el nacimiento virginal alinearse con aquellos que no creen? 6. ¿Deben aquellos que creen en la Biblia alinearse con aquellos que no creen? 7. ¿Quién era el sumo sacerdote? 8. ¿Qué era vertido sobre su cabeza? 9. ¿Qué clase de olor tenía? 10. ¿A Quién representaba este? 11. ¿Era Hermón una montaña alta o pequeña? 12. ¿Podía ser vista a gran distancia? 13. ¿Cómo esto aplica a nuestra existencia de vivir juntos en armonía? 14. ¿Para qué Jesús oró por Su pueblo? 15. ¿Cómo puede un cristiano ser más fuerte?