Has escuchado sobre los elementos químicos emocionales

¿Has escuchado sobre los elementos químicos
emocionales?
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¿Porqué es mejor utilizar palabras emocionales en las frases que
escribimos para redactar nuestras metas?
Cuando vayas a escribir tus metas
para el próximo año, te recomiendo
que utilices por lo menos una
palabra que conlleve emoción en
cada frase, una palabra que describa
cómo te vas a sentir cuando lo
logres.
Desde 1972, fue científicamente que el cuerpo humano produce y procesa una multitud de
moléculas que son el equivalente químico de nuestras emociones. Nuestros organismos
producen moléculas que producen emociones de autoestima, felicidad, paz, depresión,
ansiedad, amor, y otras más. La neurocientífica e investigadora Candace B. Pert, declaró
en una publicación hecha en 1997 sobre su libro "Molecules of emotion" que más de 72
elementos químicos emocionales específicos han sido aislados e identificados.
Esto es lo importante sobre las metas: tú puedes directamente aumentar la cantidad de
cualquiera de estos elementos químicos emocionales en tu cuerpo, simplemente al
imaginar aquellos sentimientos que deseas tener en el momento en el que logres tu meta.
Si te quieres sentir con más éxito, más feliz, contento, tranquilo, emocionado,
entusiasmado, puedes crear estas sensaciones con tus pensamientos.
La Doctora Pert describe este proceso como si fueran fábricas: cada uno de nosotros tiene
un juego de fábricas en nuestro cuerpo, donde se producen los diferentes elementos
químicos emocionales. Cuando la necesidad para un elemento químico emocional
específico aumenta, ese taller en particular aumenta su producción para que se surta la
demanda necesaria.
Al escribir palabras emocionales en tus declaraciones de metas, y usando tu imaginación
para sentir aquellas emociones por 17 segundos, mientras visualizas en tu mente haber
conseguido ya tu meta, estás estimulando el aumento en la producción del elemento
químico emocional que requieres en ese momento. Estarás literalmente cambiando tu
psicología para crear un estado de éxito.
Como una sencilla demostración de este proceso, mediante el cual tus pensamientos
producen un cambio en tu organismo, piensa en lo que sucede cuando te ruborizas.
Alguien dice algo y tu reacción a esas palabras es detonar la producción de las moléculas
necesarias para que te ruborices, mismas que empiezan a fluir por tu sistema, y al alcanzar
sus receptores correspondientes causan la expansión de tus capilares creando la
ruborización en la superficie de tu piel. Tú sabes que tus pensamientos controlan esta
respuesta física, porque las personas se ruborizan por diferentes razones. El que las
personas sientan un momento embarazoso y se ruboricen, son respuestas psicológicas
individuales a sus propios pensamientos.
También puede servir como ejemplo que pienses e imagines que te llevas un limón a la
boca y que sientas verdaderamente que lo tienes entre tus labios. Tan sólo el imaginar esto
nos produce que empecemos a salivar con la sensación propia del limón, y todo esto, solo
con nuestra imaginación.
En resumen, es absolutamente recomendable utilizar palabras emocionales en tus
declaraciones de metas, para crear tu estado emocional deseado.
- Hice la traducción (añadiendo algo de mi parte) de un texto de Barbara V. Pratt de
goalgenie.comEs bueno saber esto para utilizarlo cada día de nuestras vidas, porque si tu sientes poca
seguridad cuando vayas a presentarte en una entrevista de trabajo, eso lo vas a proyectar
y la persona que te entreviste lo va a percibir, así que puedes concentrarte un momento
antes de llegar, pensando y sintiéndote completamente seguro y confiado sabiendo que
cuentas con la preparación necesaria que el trabajo requiere. Con esto pondrás a tu
organismo a crear el elemento químico emocional necesario para que sientas confianza en
ti mismo y logres lo que te propones.
Aquí yo le añadiría que la programación neurolinguística nos ha enseñado esto mismo en
el nivel conductual y lo explica así: cuando te sientas tenso, por ejemplo, en algún
momento de tu vida, debes recordar un momento en el que estuviste relajado y tratar de
vivirlo con todas sus sensaciones. De esta manera provocarás que tu organismo cambie de
sentirse tenso a relajado ya que estás reviviendo una experiencia en la que estuviste
tranquilo. Y te dice que actúes "como si" estuvieras relajado todo el tiempo y así podrás
alejar la tensión en ese momento especial. Y puedo agregar, que cuantas más veces hagas
esto, lograrás que tu mente aprenda ese comportamiento y lo tome como algo normal y de
todos los días.
Maca Hernández
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