La República, 12.09.2005 La idea de grupos separados para aumentar las prestaciones, se basa sobre recientes descubrimientos científicos en el aprendizaje. Experimento en Estados Unidos de Norteamérica: el y ella así aprenden mejor. NUEVA YORK- Hace tres años Jeff Gray, director de la escuela primaria de Foust de Owensboro en Kentucky, se dio cuenta que en su escuela se necesitaba ayuda. Los resultados de los exámenes de Foust eran los peores del país, y los alumnos, en especial los hombres, resultaban los más atrasados. Así Gray participó en un curso para profesores basado en el desarrollo cerebral y reorganizó el mapa curricular de primero y segundo de primaria. El más importante de los cambios consistió en formar los salones en base al sexo. Debido a que los hombres tienen menos serotonina en el cerebro - que los hace más activos - se quitaron de sus salones algunos pupitres y se les dieron breves recesos para hacer movimiento físico. A raíz de que las alumnas tienen una mayor cantidad de oxitoxína - una hormona que facilita la formación de vínculos afectivos - en su salón se formó un área con tapetes y cojines en los cuales se sientan a discutir. Considerando que los hombres tienen un nivel de testosterona más alto y son más competitivos, se les han aplicado exámenes de opción múltiple que tienen que resolver en tiempos determinados, en cambio a las niñas se le ha permitido un tiempo extra. Gray dice que el nuevo mapa curricular le ha dado a la escuela “el mejoramiento que se necesitaba”. Los resultados de los exámenes son altos. Los problemas de disciplina han disminuido. Este año también quinto y sexto grado adoptarán el nuevo método. En los últimos cinco años los investigadores que realizan estudios del cerebro con resonancia magnética o Pet, han encontrado nuevas evidencias sobre como el cerebro masculino y femenino desarrollan la información. Las niñas tienen lóbulos frontales mucho más activos, conexiones mas sólidas entre los hemisferios cerebrales y “centros de lenguaje” que maduran antes. Quien critica un sistema escolar diferente de acuerdo a la diferencia de sexos, refuerza que los mapas curriculares hechos para aprovechar tales diferencias, de hecho refuerzan los estereotipos culturales. Los sostenedores de este nuevo concepto piensan que si en los salones no se tienen en cuenta las diferencias entre hombres y mujeres, los primeros tienen desventajas. La mayor parte de los colegios según Michael Gurian - coautor con Kathy Stevens del libro “El cerebro de los hombres: como evitar que nuestros hijos se atrasen en la escuela y en la vida” - favorecen a las niñas - “debido que los profesores, en la mayoría de los casos mujeres, enseñan como ellas han aprendido. El 70% de los niños con dificultades de aprendizaje son hombres, el 80% de los estudiantes que abandonan las preparatorias son de sexo masculino, y menos del 45% de los inscritos a las universidades son hombres. Para componer la fractura educativa entre los dos sexos, sostiene Gurian, los profesores deben de iluminar mas los salones de los hombres y hablar en voz alta, debido a que las investigaciones han dado como resultado que los hombres no ven ni oyen bien como las mujeres. Debido que los hombres aprenden mas con el sentido de la vista, los profesores deberían ilustrar una historia antes de escribirla. Las ideas de Gurian están dando resultados: las escuelas públicas que ofrecen educación separada en base a la diferencia de sexos son 185 y los profesores que tuvieron entrenamiento en su instituto son más de 15 000. Sin embargo, hay expertos que aseguran que basar los nuevos métodos de enseñanza en base a la investigación cerebral es equivocado: aún siendo verdad que las TAC realizadas en cerebros masculinos y femeninos muestran diferencias - dice David Sadker, docente de métodos educativos en la American University - nadie está seguro de lo que las diferencias signifiquen. Natasha Crasft, maestra de un cuarto grado en la Souther Elementary School, de Somerset, Kentucky, sabe muy bien que el nuevo mapa curricular no puede ser una solución definitiva. “Pero pienso pero que tendré algún instrumento mas con el cual podré trabajar”. Newsweek.